Este documento resume una reforma de un piso de oficinas en Castellón que convirtió el espacio en una vivienda de 148 metros cuadrados. La reforma se centró en eliminar tabiques para crear un amplio espacio iluminado naturalmente por grandes ventanales. El diseño utiliza colores claros como el blanco y tonos tenues, creando una sensación cálida y funcional mediante el uso minimalista de la decoración y los muebles.