Malala Yousafzai nació en 1997 en Pakistán y se convirtió en una activista por los derechos de las niñas a la educación. En 2012, los talibanes le dispararon en la cabeza por su defensa de la educación femenina, pero sobrevivió y continuó su lucha. Recibió el Premio Nacional por la Paz en 2011 de Pakistán y fue trasladada a Inglaterra para recuperarse del ataque. Ahora es una defensora mundial de los derechos de las niñas a la educación.