Isaías fue uno de los cuatro profetas mayores del Antiguo Testamento que escribieron muchas profecías con detalles. Isaías predijo la destrucción de Israel y Judea, la esclavitud y liberación, y la reconstrucción de Jerusalén y el templo. También predijo con claridad el nacimiento, predicación, milagros y pasión del Mesías, como si estuviera describiendo hechos ya cumplidos y no profecías. Por reprochar los vicios de los reyes, Isaías fue martirizado brutalmente.