La Comisión Interamericana de Derechos Humanos presentó el caso de Jineth Bedoya Lima ante la Corte Interamericana, denunciando violaciones de derechos humanos tras su secuestro, tortura y violación sexual en 2000, vinculadas a su labor periodística. La Comisión determinó que el estado colombiano no tomó medidas adecuadas para protegerla, lo que constituyó una violación de sus derechos a la vida, integridad y libertad de expresión, y concluyó que la falta de investigación efectiva socavó su integridad y la de su familia. Se solicita a la Corte que declare al estado colombiano responsable y que se realicen reparaciones adecuadas, resaltando la urgencia de mejorar la protección para las mujeres periodistas en riesgo.