Este documento es un sermón sobre la importancia de predicar la Palabra de Dios de manera clara y aplicable para desarrollar iglesias doctrinalmente sanas. El predicador enfatiza la necesidad de predicar la Biblia correctamente, hacerla comprensible y aplicable, e instar a la congregación a tiempo y fuera de tiempo. También destaca la responsabilidad de los ministros de cumplir fielmente con el ministerio que Dios les ha encomendado de predicar y enseñar las Escrituras.