El documento critica las acciones del gobierno de Calderón contra el Sindicato Mexicano de Electricistas (SME). Argumenta que el SME ha sido históricamente independiente y ha luchado por los derechos de los trabajadores, mientras que el gobierno busca debilitarlo y privatizar la industria eléctrica. También hace un llamado a la unidad y acción para oponerse a las agresiones contra el SME y sus trabajadores.