El documento describe los diversos usos de la tecnología del ADN recombinante, incluyendo la producción de insulina y hormona de crecimiento humanas para tratar la diabetes y otros trastornos, el desarrollo de terapias génicas para enfermedades genéticas, y aplicaciones en agricultura como hacer plantas resistentes a herbicidas e insectos. También menciona el uso de esta tecnología para crear bioplásticos renovables y bacterias para limpiar derrames de petróleo.