El autor agradece a Dios por todo lo que ha recibido durante el año, incluyendo la salud, el bienestar, las alegrías, las satisfacciones, la enfermedad y los sufrimientos. También da gracias por la esperanza, las manos que lo levantaron, los consejos, las palabras de aliento, las sonrisas y los brazos que lo recibieron. Sobre todo, agradece por la fe que tiene en Dios, ya que a veces es difícil creer pero sigue teniendo fe a pesar de no siempre saber cómo actuar.