Las anfetaminas son drogas sintéticas que estimulan el sistema nervioso central de forma similar a la cocaína, el mate o el café. Se absorben rápidamente en el intestino delgado y llegan al cerebro, donde aumentan la presión sanguínea y la alerta pero también pueden causar daños a la salud como psicosis, depresión e hipertensión arterial. Aunque se usan para mejorar el rendimiento, su consumo requiere precaución para evitar riesgos a la salud y no conducir bajo sus efectos.