El anime se originó en Japón como una abreviación de la palabra inglesa "animation". Los diseños de personajes en el anime se caracterizan por ojos grandes y expresivos, cabello estilizado y variado, y proporciones corporales estilizadas. Los primeros animes incluyeron obras pioneras como Astro Boy de Osamu Tezuka en la década de 1960, seguido por series populares que exploraron géneros como carreras de coches, robots y novelas a lo largo de las décadas de 1960 a 1980.