La organización administrativa de la colonia española en América estaba dirigida por el rey de España a través de virreyes, gobernadores y otras autoridades. La economía colonial dependía inicialmente del monopolio comercial español y luego evolucionó con reformas borbonicas. La sociedad colonial se dividía en grupos basados en la raza y el estatus, con los españoles en la elite y el resto sirviendo como fuerza de trabajo.