El documento habla sobre la importancia del ayuno durante la Cuaresma. Señala que el ayuno cristiano implica privarnos no solo de alimentos sino también de vicios, y practicar la misericordia compartiendo con los necesitados. El verdadero ayuno consiste en compartir el pan con el hambriento y ayudar a los pobres, para que Dios escuche nuestras oraciones.