La pobreza y la cultura influyen en la transmisión del SIDA en las mujeres mexicanas. La falta de educación sexual, la pobreza que orilla a algunas mujeres a la prostitución, y la cultura machista que promueve las relaciones sexuales sin protección, contribuyen a una mayor propagación del virus. Dos casos ilustran cómo estos factores culturales y económicos pusieron en riesgo a dos mujeres que contrajeron SIDA.