El poema expresa los sentimientos del autor hacia una mujer, sugiriendo que los ojos pueden besar al igual que los labios. En pocas palabras y a través del uso de metáforas naturales, el poema describe cómo la mirada puede transmitir amor de forma igual de íntima que un beso. Se trata de un serventesio de cuatro versos encadenados siguiendo un esquema métrico de 11+11+11+11 sílabas.