El documento argumenta que el buen trato es un valor fundamental en la escuela y en todas las relaciones humanas. Define el buen trato como dar a otros un trato adecuado basado en su condición de persona, que promueva el descubrimiento de sí mismos y la construcción de su propio proyecto de vida de forma permanente. Concluye que todas las formas de relación que atenten contra esto constituyen maltrato.