La sociedad actual se caracteriza por ser globalizada, con una economía y problemas interconectados a nivel mundial. Las tecnologías de la información y la comunicación han generado un exceso de información disponible para todos y nuevos sectores laborales, pero también plantean desafíos como la falta de tiempo para la reflexión crítica. Esta sociedad requiere aprender a aprender de forma continua y adaptarse rápidamente al cambio constante.