La clase invertida es un innovador método educativo donde los estudiantes aprenden contenidos en casa a través de videotutoriales y realizan actividades en clase, facilitando un aprendizaje más personalizado. Esta metodología, introducida por Jonathan Bergman y Aaron Sams en 2007, busca mejorar la motivación y el interés de los estudiantes, aunque presenta desafíos como el acceso a la tecnología en el hogar. Diversas instituciones ya han adoptado esta técnica con el objetivo de promover un aprendizaje colaborativo y responsable.