El documento describe cómo Dios ve a los niños. Según la Biblia, Dios ve a los niños como (1) seres espirituales que necesitan redención, (2) su herencia, y (3) modelos de humildad y aceptación. El documento también proporciona consejos para los maestros sobre cómo deben ver y tratar a los niños de acuerdo con la visión de Dios.