El documento habla sobre la formación simbólica en el hombre y el desarrollo de la competencia académica. Explica que el ser humano pasa de un estado inicial de indiferenciación a desarrollar funciones simbólicas a través del juego y la interacción con otros. También describe cómo el niño aprende mediante centros de interés ligados a sus actividades y cómo se puede medir el desarrollo de la competencia académica considerando factores como la fantasía personal y la historia del individuo.