El documento resume las conclusiones de dos desayunos de trabajo sobre comunidades de práctica celebrados en noviembre de 2012. Participaron 21 personas de 15 empresas de diferentes sectores. Se discutió que las comunidades son útiles para equipos comerciales dispersos geográficamente y para compartir buenas prácticas. Se aprendió que se deben crear entornos seguros donde los participantes se sientan libres y se respete su libertad. Las comunidades deben construirse de abajo hacia arriba con la implicación de los participantes. En el