Los editores de línea originalmente se usaban para escribir programas de software y permitían a los programadores desarrollar y corregir programas. Ahora, los procesadores de texto son aplicaciones útiles para crear y modificar documentos de forma más potente y versátil que las máquinas de escribir antiguas. Los procesadores de texto contienen comandos para formato, tamaño de texto, inserción de imágenes, uso de tablas e iconos, vista previa e impresión, y guardado de documentos.