El documento habla sobre la importancia de los niños y su educación según los principios bíblicos. Dios enseñó a Israel que los niños eran una bendición y debían ser instruidos en su Palabra desde pequeños. Jesús también fue un niño y creció lleno de sabiduría. Curó a niños enfermos basado en la fe de sus padres. Los cristianos deben ser como niños en su dependencia, inocencia y confianza, y proteger a los niños de la iglesia.