Un estudio de 240 adolescentes encontró que aquellos que dormían menos de ocho horas consumían un 2.2% más de calorías, lo que puede ocasionar cambios crónicos en la dieta y aumentar la obesidad. Investigadores estadounidenses estudiaron la relación entre la falta de sueño y la dieta en adolescentes, descubriendo que dormir poco lleva a un mayor consumo de calorías.