Los egipcios creían en dioses con partes de animales que no podían explicar los eventos naturales. La historia de Isis y Osiris era muy importante de conocer: Osiris e Isis gobernaron Egipto hasta que Seth envidioso encerró a Osiris en un ataúd y lo arrojó al río. Isis buscó los pedazos de Osiris y lo reconstruyó, pero solo pudo devolverle la vida eterna en el inframundo, donde Osiris reina como rey de los muertos.