El primer documento presenta un programa de 1919 de los Fasci di Combattimento que reivindica derechos laborales como la jornada de 8 horas y el salario mínimo. El segundo documento es el programa de 1921 del Partido Nacional Fascista que limita los poderes parlamentarios y prohíbe la huelga en servicios públicos, reconociendo la propiedad privada como derecho y deber.