Dos hombres enfermos compartían una habitación de hospital. Uno podía sentarse junto a la única ventana para ayudar a drenar sus pulmones. El otro tenía que permanecer acostado. Cada tarde, el hombre de la ventana describía el exterior al otro, quien disfrutaba imaginando la escena. Después de semanas, el hombre de la ventana falleció. El otro pidió cambiarse a esa cama y descubrió que la ventana daba a una pared. La enfermera reveló que el difunto era ciego y solo quería anim