Enatex, una empresa textil estatal en Bolivia, fue creada para rescatar la industria textil pero fracasó debido a la falta de competitividad, gestión inadecuada y cierre de mercados importantes. A pesar de sus expectativas iniciales, sus pasivos crecieron significativamente y terminó cerrando en 2015 con pérdidas millonarias y un patrimonio negativo. El cierre de Enatex dejó a cerca de 1,000 trabajadores sin empleo y evidenció la incapacidad del estado para sostener la producción textil en el país.