Moisés guió la salida de los israelitas de Egipto después de que Dios se le apareciera en una zarza ardiente. Moisés y su hermano Aarón le pidieron al Faraón que dejara ir a los israelitas, pero el Faraón se negó y envió diez plagas a Egipto. Finalmente, la décima plaga, la muerte de los primogénitos, convenció al Faraón de dejar ir a los israelitas, aunque luego los persiguió hasta el Mar Rojo. Dios dividió las