El talento humano se puede definir como una manifestación de inteligencia emocional y aptitudes sobresalientes para realizar una tarea de forma exitosa. Es el recurso más importante de cualquier organización porque (a) desarrolla y participa en la dirección, (b) vela por concretar la misión y visión, y (c) genera ideas de innovación para el crecimiento. Gerenciar el talento humano no es fácil y las empresas necesitan constantemente renovar las actitudes de empleados y directivos a través de programas de formación para competir.