El documento describe la evolución del uso de Internet a nivel mundial a principios del siglo XXI. Señala que mientras el acceso a Internet se ha extendido rápidamente en algunas regiones como América Latina, persiste una brecha digital significativa entre y dentro de los países. A medida que más personas se conectan a la red, las desigualdades sociales y de acceso a la información podrían profundizarse si no se abordan activamente.