La fibra es un componente no digerible de los alimentos de origen vegetal, que se clasifica en soluble e insoluble y tiene múltiples beneficios para la salud, incluyendo la mejora de la digestión y la regulación de los niveles de colesterol y glucosa. Existen diferentes tipos de fibras, como pectinas y gomas, que desempeñan funciones específicas en la dieta, además de ser utilizadas como aditivos alimentarios. El consumo adecuado de fibra se asocia con la prevención de diversas condiciones de salud, como el cáncer de colon y la obesidad.