El documento habla sobre la importancia de educar y comunicar desde una perspectiva de género. Explica que los medios de comunicación son agentes socializadores influyentes y que es necesario analizar críticamente sus mensajes. También menciona que la violencia simbólica a través de los medios puede perpetuar estereotipos de género y que es importante capacitar a docentes para abordar este tema en las aulas.