El documento describe los orígenes de la computación desde 3500 A.C. cuando se inventó el ábaco en Babilonia, hasta 1937 cuando se describió la máquina de Turing. A lo largo de los siglos, se inventaron diversos dispositivos para realizar cálculos como las varillas de numeración de Napier en 1617, la primera calculadora mecánica de Schickard en 1624, y la máquina analítica de Babbage en 1830, sentando las bases de la informática moderna.