Las redes sociales permiten a las personas conectarse y compartir información con muchos otros de forma sencilla. Esto facilita la comunicación global, el acceso a diversas perspectivas y el intercambio de conocimientos. Sin embargo, también conllevan riesgos como la exposición a contenidos inadecuados y la generación de adicciones y dependencias que pueden afectar el rendimiento laboral y académico.