Un violinista de renombre mundial, Joshua Bell, tocó incógnito en una estación de metro en Washington D.C. durante 45 minutos interpretando obras complejas de Bach. A pesar de su talento, la mayoría de las personas que pasaron por la estación no se detuvieron a escuchar y sólo 27 personas donaron un total de $32. Más tarde se reveló que el violinista era Joshua Bell, valorado en $3.5 millones, lo que demuestra que a menudo no apreciamos la belleza cuando está fuera de contexto.