El documento analiza la situación económica de Argentina en 2015 y predice una estanflación caracterizada por una contracción de la oferta agregada y una inflación cercana al 30%. Las políticas fiscales y monetarias expansivas mantendrán problemas como la inestabilidad cambiaria y financiera, lo que forzará controles que reducirán aún más la actividad económica. Todos los sectores como construcción, comercio, industria e intermediación financiera mostrarán caídas, afectando el empleo y la demanda.