Platero era el burro amigo del poeta Juan Ramón Jiménez. Pasaban todo el tiempo juntos en el pueblo de Moguer, Huelva, donde vivían. Platero acompañaba a los niños y a Juan Ramón, y era querido por todos los vecinos como el médico Darbón. Un día Platero enfermó y murió, dejando triste a Juan Ramón, pero el recuerdo de Platero permanecería vivo para siempre.