Una persona grosera humilla a otra en su aniversario al regalarle una bandeja llena de basura, pero el agasajado responde con dignidad, lavando la bandeja y devolviéndola adornada con flores. El mensaje resalta la importancia de mantener la serenidad y no caer en el resentimiento, enfatizando que cada uno da lo que posee. La reflexión final insta a cuidar de las emociones y a compartir amor y paz.