La publicidad es una herramienta para informar a los consumidores sobre productos y servicios e influir en su comportamiento. Los objetivos de la publicidad son informar al consumidor e inclinar su balanza motivacional hacia el producto. El primer contacto del cliente con un producto es a través de la publicidad, por lo que los anuncios deben ser creativos para convencer al cliente y darle una razón para comprar más allá de solo mostrar la marca. La mejor publicidad son los clientes satisfechos que recomiendan la empresa a otras personas.