El documento argumenta que la noción de "buen lector" como una élite minoritaria es falsa. En su lugar, propone construir una mayoría sólida de lectores de calidad mediante la prevención del abandono de la lectura, el enriquecimiento del corpus de obras disponibles, el fortalecimiento de los criterios de selección y el aumento de las posibilidades de compartir lecturas entre los estudiantes.