El documento describe el estilo artístico del manierismo, surgido en Italia entre los siglos XVI, caracterizado por formas complejas, un rechazo a la armonía y un uso excesivo de elementos verticales. Se destacan arquitectos como Andrea Palladio y Giulio Romano, cuyas obras reflejan innovaciones que llevaron al desarrollo del barroco. Ejemplos de edificaciones manieristas incluyen la Iglesia del Gesù y el Palacio Pitti.