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Manual deCirugía
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Dr. Joaquín Ramírez Sneberger
Autor, editor general y coordinador general
Cirugía General
Universidad de Los Andes
Dra. Krystel Werner Feris
Autora, coordinadora y editora de ilustraciones
Cirugía General
Universidad de Los Andes
Dr. Felipe Court Acevedo
Editor de contenido
Cirugía Digestiva
Cirugía General Pontificia Universidad Católica de Chile.
Jefe Departamento de Cirugía Universidad de Los Andes
Docente de Cirugía Universidad de Los Andes
Dr. Rolando Sepúlveda Dellepiane
Editor de contenido
Cirugía Digestiva
Cirugía General Pontificia Universidad Católica de Chile.
Jefe Departamento de Cirugía Hospital Militar de Santiago
Jefe Programa de Cirugía Universidad de Los Andes
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Manual deCirugía
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Manual de Cirugía
Universidad de los Andes, 2016, Santiago de Chile.
Autores
Dr. Joaquín Ramírez Sneberger
Dra. Krystel Werner Feris
Dr. Jorge Gajardo Jofré
Dr. Diego Rodríguez Verdugo
Dr. Mathias Brain Sánchez
Dr. Juan Pablo Quinteros Pomar
Dr. Manuel Calcagno Lüer
Dr. Bruno Villalobos Coz
Dr. Pablo Arellano Graell
Dr. Raimundo Vergara Goldveig
Dr. Andrés Stevenson Silva
Dr. Diego Marín Garay
Dr. Andrés Sepúlveda Nakamura
Coautores
Nicolás Besser Pimentel
María Jose Arteaga Valencia
Valeria Bawarshi Yanine
Carla Morelli Lobos
María Francisca Wuth Izquierdo
Macarena Jofré Arellano
Carolina Hernández Álamos
María del Pilar Diaz Corvillón
Marie Dominique Hierard Fernández
Constanza Bachelet Ramos
Javiera Ready Dallago
Diego Paredes Jalil
Diego Montoya Moya
María José Pizarro Aranda
Ilustradores
Krystel Werner Feris
José Manuel Zúñiga García
Constanza Menéndez Olave
Marie Dominique Hierard Fernández
Gabriela del Pilar Echeverría Bauer
Camila Corcione Correa
Javiera Ready Dallago
Editores de capítulo
Dr. Felipe Court Acevedo
Dr. Rolando Sepúlveda Dellepiane
Dr. Fabio Valdés Gutiérrez
Dr. Jaime González Fuentealba
Dr. Nicolás Devaud Jaureguiberry
Dra. Montserrat Fontbona Torres
Dr. Pablo Mena Sellán
Dr. Roberto Humeres Apra
Dr. Marcial Peralta Mora
Dr. Felipe Fuenzalida Schwerter
Dr. Ignacio González Muñoz
Dra. Paulina Balbontín Meneses
Dr. Juan Javier González Moscoso
Dra. Andrea Matamala Valenzuela
Dr. José Miguel Zúñiga Avendaño
Dr. José Gellona Vial
Dr. Joaquín Irarrázaval Espinosa
Dr. Matías Ubilla Silva
Dr. Eitan Schwartz Yuhaniak
Dr. Fernando Muñoz Flores
Dra. Macarena Fernández Albornoz
Corrección de estilo
Nieves Plaza Palma
Diseño Editorial
Ivette Vergara d’Alençon
Catalina Oyarzún Pavez
Agradecimientos
Dr. Marcelo Castro Salas, jefe del departamento de Diagnóstico
por Imágenes del Hospital Militar de Santiago, por proporcionar las
imágenes de radiología.
Dra. Monserrat Fontbona, jefe del departamento de Cirugía Plástica
del Hospital Militar de Santiago, por proporcionar las imágenes de
los capítulos de cirugía plástica
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Prólogo
La enfermedad acompaña al hombre desde que este existe, limitando las posibilidades de
desarrollo de la persona, pudiéndole provocar incluso la muerte. Por ello, la salud como bien
es una aspiración primordial del ser humano. En este ámbito, la medicina a lo largo de la
historia ha intentado, con mayor o menor éxito, devolver al paciente la salud perdida. En la
actualidad, podríamos decir que vivimos una etapa del conocimiento y del accionar médico
exitosa, pero también exitista, haciendo pensar a muchos que la medicina todo lo puede; sin
embargo, quienes ejercemos la profesión médica comprendimos, ya desde alumnos y con
cierta desilusión, que esto no es así, ya que tenemos todavía por delante un largo camino
que recorrer de la mano del progreso del conocimiento.
La cirugía, como rama de la medicina, se inicia bastante temprano y es así que se conocen
trepanaciones efectuadas ya en la prehistoria. No obstante, avanza penosamente por
muchos siglos antes de convertirse en una especialidad médica segura y eficaz. Para
ello fue necesario tener un conocimiento anatómico completo, un control eficiente de las
hemorragias, el dominio de las transfusiones, el descubrimiento de la anestesia y el control
de las infecciones. A partir de ese momento, el desarrollo fue rápido y hoy nos asombramos
con la cirugía mínimamente invasiva, laparoscópica, endovascular y robótica.
Este compendio de cirugía representa el estado actual del conocimiento y manejo de las
patologías de resolución quirúrgica que debe conocer un alumno de pregrado. Es el producto
del trabajo mancomunado de alumnos, residentes y profesores del Departamento de Cirugía
de la Universidad de los Andes y del Hospital Militar de Santiago. Este origen hace que sea
de fácil lectura y comprensión para los alumnos, pues en gran parte está escrito por pares.
En este contexto, considero de gran mérito este trabajo, ya que refleja el grado de madurez
docente alcanzado por los integrantes del Departamento de Cirugía y su deseo de servir a
los alumnos del presente y del futuro. Constituye, además, un proceso docente interesante,
significativo y funcional.
Prof. Dr. Rogelio Altuzarra Hernáez
Decano
Facultad de Medicina
Universidad de los Andes
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Índice
Generalidades 13
1.1 Hidratación Parenteral 15
1.2 Nutrición y Regímenes 23
1.3 Cicatrización 29
1.4 Heridas 37
1.5 Curación de Heridas y Apósitos 43
1.6 Suturas 47
1.7 Abordajes Quirúrgicos 59
1.8 Drenajes Quirúrgicos 71
1.9 Ostomías 75
1.10 Fiebre en el Posoperatorio 85
Cirugía de Tórax 91
2.1 Anatomía Aparato Respiratorio 93
2.2 Nódulo Pulmonar Solitario 98
2.3 Síndrome de Ocupación Pleural 103
2.4 Cáncer Pulmonar 115
Cirugía de Esófago 125
3.1 Anatomía del Esófago 127
3.2 Divertículos Esofágicos 131
3.3 Trastornos motores del Esófago 137
3.4 Enfermedad por reflujo Gastroesofágico 141
3.5 Perforación Esofágica 147
3.6 Cáncer de Esófago 149
Cirugía Gástrica 163
4.1 Anatomía Gástrica 165
4.2 GIST 175
4.3 Cáncer Gástrico 177
4.4 Cirugía Bariátrica 191
4.5 Hemorragia Digestiva alta no variceal 197
Patología Quirúrgica del Intestino Delgado 207
5.1 Anatomía del Intestino Delgado 209
5.2 Divertículo de Meckel 213
5.3 Tumores de Intestino Delgado 219
5.4 Obstrucción Intestinal 227
10
Índice
Cirugía Hepatobiliar 237
6.1 Anatomía Normal de la Vía biliar y Vesícula biliar 239
6.2 Patología Biliar Benigna 249
6.3 Cáncer de Vesícula Biliar 277
6.4 Colangiocarcinoma 285
6.5 Nódulo Hepático 295
6.6 Carcinoma Hepatocelular 307
6.7 Pancreatitis Aguda 319
6.8 Tumor Periampular 333
Coloproctología 341
7.1 Anatomía Intestino Grueso 343
7.2 Apendicitis Aguda 351
7.3 Hemorragia Digestiva Baja 359
7.4 Enfermedad Diverticular 365
7.5 Patología Anorectal Benigna 373
7.6 Cáncer Colorectal 385
Hernias 401
8.1 Hernias de la Pared Abdominal 403
Cirugía Vascular 417
9.1 Enfermedad Cerebrovascular 419
9.2 Patología Aórtica 425
9.3 Isquemia Mesentérica 439
11
9.4 Enfermedad Arterial Oclusiva de
Extremidades Inferiores
445
9.5 Pié Diabético 453
9.6 Patología Venosa 457
9.7 Trombosis Venosa Profunda
y Enfermedad Tromboembólica
463
Cirugía Plástica 471
10.1 Quemaduras 473
10.2 Ulceras por Presión 483
10.3 Injertos y Colgajos 491
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Generalidades
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1.1 Hidrataciónparenteral
Stevenson A, Bawarshi V, Court F.
Homeostasis de líquidos corporales
Para un manejo adecuado del balance hidroelectrolítico es
necesario comprender la homeostasis del organismo. Esta
corresponde a la mantención de volumen y composición
relativamente constante en los distintos compartimentos
corporales.
El agua es un componente esencial para los seres humanos,
corresponde al 50 a 60% de su peso total. El tejido muscular
y los órganos sólidos tienen más agua que el tejido óseo y
adiposo. Por este motivo el porcentaje de agua varíasegún
la edad, el sexo y la cantidad de grasa corporal de cada
persona. En un recién nacido aproximadamente el 80%
de su peso es agua y va disminuyendo con la edad. En los
hombres se estima que en promedio corresponde a un 60%
y en las mujeres 50%, diferencia que se debe principalmente
al mayor porcentaje que tienen las mujeres de tejido adiposo
y menor masa muscular.1
El agua se distribuye en dos grandes compartimentos:
intracelular y extracelular. En el siguiente esquema se
muestra su distribución en relación al peso corporal (PC) y
sus principales electrolitos.
La principal diferencia entre el líquido intravascular (plasma)
y el intersticial es que el contenido de proteínas es levemente
mayor en el plasma determinado por la baja permeabilidad
de los capilares a las proteínas.
El movimiento del agua de un compartimiento a otro está
determinado por la osmosis. La concentración de solutos en
los distintos compartimentos permite el paso del agua de uno
a otro con el fin de igualar las concentraciones osmóticas.
La osmolaridad depende de las concentraciones de sodio,
glucosa y urea principalmente, y se puede obtener su valor
de la siguiente manera:
Osmolaridad sérica: 2 [Na+] + [glucosa] / 18 + BUN / 2.8
Agua Total
60% del PC
Extracelular 20% PC
Cationes: Na+
Intersticial 15% PC
Intravascular 5% PC
Intracelular 40% PC
Cationes: K+ y Mg+
Aniones: PO4-3 y proteínas
Tabla 1: distribución de agua corporal y electrolitos
1 F.Charles Brunicardi, Seymour I. Schwartz. Principios de
cirugía, volumen 1. 8va edición. México: McGraw-Hill
Interamericana, 2006
16
Las concentraciones normales de los principales electrolitos
en el plasma son:
Electrolito Concentración
Na+ 135-145 mEq/L
K+ 3,5-4,5 mEq/L
Ca +2 4,25-5,25 mEq/L
Cl- 95-106 mEq/L
HCO3- 27 mEq/L
Tabla 2: Concentración plasmática de los electrolitos.
La concentración de agua en nuestro organismo depende
del equilibrio entre los ingresos y las pérdidas. El 75% de
los ingresos es por ingesta de agua y el porcentaje restante
se obtiene de alimentos sólidos, sumando entre ambos en
un adulto normal aproximadamente 2 L. Las pérdidas diarias
ocurren alrededor de 1 L a través de la orina, 250 ml en las
heces y 600 ml como pérdidas insensibles que corresponden
a la piel y los pulmones. Estas pueden variar de acuerdo
con la condición clínica del paciente, aumentando en caso
de fiebre, hiperventilación, quemaduras, taquicardia y/o tras
situaciones donde exista un aumento del metabolismo.
Tipos de Fluidos
La administración de fluidos es un pilar fundamental en
pacientes quirúrgicos, ya que previo o con posterioridad al
acto quirúrgico debe permanecer un período variable en
régimen cero, es decir, sin ingesta oral. El médico tratante
deberá encargarse del aporte de volumen, electrolitos y
calorías necesarias durante este tiempo.
Enlaprácticaclínicaseutilizan3tipos defluidos:cristaloides,
coloides y derivados sanguíneos. Para su uso adecuado es
necesario conocer las propiedades y composiciones de cada
uno de ellos.
Los cristaloides, también llamados soluciones básicas,
contienen solamente agua, electrolitos y glucosa en distintas
proporciones. Pueden difundir por la membrana capilar.
Permiten expandir el volumen intravascular, mantener el
equilibrio hidroelectrolítico y aportar calorías si contiene
glucosa. Son bien tolerados, de bajo costo y de gran
disponibilidad. Según la concentración de electrolitos pueden
ser hipotónicos, isotónicos o hipertónicos respecto al plasma.
Los cristaloides nos permiten corregir las pérdidas de fluidos
corporales, reponiendo agua, electrolitos y el estado ácido-
base.Paraestoesmuyimportanteconocercómosecomportan
estas soluciones una vez administradas.
Las soluciones isotónicas más utilizadas son el suero fisiológico
0,9% y el Ringer lactato. Se debe administrar un volumen de
4 veces el déficit de volumen intravascular. Se distribuyen
17
En la tabla 2 se observa la composición electrolítica y la
osmolaridad de los principales fluidos cristaloides de uso
clínico.
Composición de soluciones cristaloides (mEq/L)
Solución Na+ Cl- K+ Ca+2 Lactato pH Tonicidad Osmolaridad
(mOsm/L)
S. Glucosada 5% 0 0 0 0 0 5,0 Hipotónico 253
S. Salina 0,9% 154 154 0 0 0 5,7 Isotónico 308
Ringer Lactato 129 111 5,4 1,8 28 6,7 Isotónico 273
Tabla 3: Líquidos y electrólitos: equilibrio y distribución.
rápidamente en el LEC (intravascular e intersticio), y luego
de una 1 hora de administración solo un 20% permanece en
el intravascular. Los principales efectos adversos son edema,
acidosis hiperclorémica y edema pulmonar. Las soluciones
que contienen glucosa, si bien en su formulación pueden
aparecer como isotónicas, se comportan como hipotónicas,
la glucosa se consume muy rápidamente quedando luego
como agua libre, de tal forma que no son una buena solución
para manejo de pérdidas de volumen.
Existen situaciones en que debemos realizar aportes de
volumen parenteral que son muy distintos unos de otros,
debiendo elegir adecuadamente la solución por usar. Por
ejemplo, un paciente sano que ingresa en ayunas a una
cirugía electiva, como una colecistectomía, es muy distinto a
un paciente que debe ser sometido a una cirugía de urgencia
por una obstrucción intestinal. En el primero, la situación es
de estabilidad hemodinámica, ácido-base y electrolítica, de
tal forma que el anestesista generalmente elige una solución
lo más completa y parecida al plasma,
Ringer Lactato, para mantenerlo durante la anestesia y
cirugía. En cambio, en una obstrucción intestinal existen
vómitos y un tercer espacio dentro del lumen intestinal donde
hay atrapamiento de una cantidad desconocida de agua y
electrolitos que pueden haber provocado un desbalance ácido-
base,alteraciónelectrolíticaehipovolemiaqueseránecesario
corregir previo a la intervención. En este caso es aconsejable
iniciar la reposición de fluidos con suero fisiológico enbolos
de infusión endovenosa rápida de 250 o 500 ml, según sea
el tipo de paciente.
Si es una persona joven, previamente sana, será capaz de
manejar sin problemas 1 L de esta solución administrada
rápidamente al intravascular, pero si se trata de una
persona de edad avanzada con alguna comorbilidad, como
insuficiencia cardíaca, insuficiencia renal o daño hepático
crónico, hay que tener mucho cuidado, se debe saber que
el suero fisiológico aporta en forma inmediata 9 g de sodio,
produciendo edema pulmonar, ascitis o edema tisular, según
sea el caso, complicando el proceso de reanimación. La
mejor forma de evaluar la cantidad de líquido necesario de
administrar es monitorizando la diuresis. Cuando el paciente
comienza a orinar se ha logrado una adecuada perfusión
tisular.Enambospacientes seránecesariocontarconniveles
plasmáticos de electrolitos y de función renal.
Dentro de las situaciones de necesidad de administración
de soluciones parenterales está el posoperatorio, en este
caso será necesario discriminar nuevamente. Basándonos
en el ejemplo anterior, el paciente operado de la vesícula
tendrá un posoperatorio muy distinto al otro paciente. Su
período de ayuna habitualmente no es mayor a 6 u 8 horas,
pudiendo durante este corto tiempo dejarlo con un suero
glucosalino, aportando agua y sodio, necesario para mantener
la volemia (80 ml/hora en adulto) y glucosa para romper
el ayuno evitando la acidosis propia de esta condición. Al
contrario, el paciente de la obstrucción intestinal va a tener
un período de ayunas prolongado, el íleo posoperatorio
habitualmente es más largo, esto nos obliga a calcular un
aporte para las próximas 24 horas. En este caso hay que
considerar el volumen por administrar y los electrolitos de
acuerdo con las pérdidas ordinarias diarias de los pacientes.
18
Esto equivale a un volumen diario de entre 2 y 2,5 L de agua
en un adulto (25-30 ml/kg/día), lo que corresponde a las
pérdidas de orina, heces e insensibles. Las pérdidas de sodio
(8g/día) y potasio (4g/día). Junto con lo anterior es necesario
el aporte de glucosa, por esto la solución recomendada en
este caso es el suero glucosado al 5%. De manera que la
indicación de hidratación debiera ser la siguiente:
1. Régimen cero.
2. SG5% 80 ml/hora, agregar 4 g de NaCl y 2 g de K Cl cada 1 L de solución.
Lo más importante ocurre en la indicación del día siguiente de este paciente, ya que es muy posible que existan pérdidas
extraordinarias, es decir, pérdida de volúmenes que habitualmente no ocurren, como volumen de salida por la SNG, drenajes,
vómitos, etc. Para hacer una buena estimación del volumen por indicar, es necesario realizar un balance hídrico estricto:
Líquidos administrados Líquidos perdidos
- Suero glucosado5%
- Otros sueros
- Agua demedicamentos
- Otros
- Diuresis
- Deposiciones
- SNG
- Drenajes
- Ostomías
- Vómitos
- Otros
Tabla 4: Balance hídrico.
La suma entre lo administrado y las pérdidas debieran quedar
enequilibrio,denoserasí,sedebeconsignarcomounbalance
hídrico positivo o negativo y anotar el valor en cc. En el caso
anterioresmuyimportanteconsiderarelvolumendeladiuresis
del paciente para saber si es necesario incrementar el aporte
de volumen. Cuando existe un bajo volumen de orina en 24
horas (oliguria), es decir, menos de 30/ml hora en un paciente
adulto, es necesario aportar un volumen extra.
Para lo anterior, se mantiene el volumen de SG5% en 80ml/
hora y el volumen faltante se agrega en solución electrolítica
como Ringer lactato o suero fisiológico, según el resultado
de los electrolitos plasmáticos del mismo día, teniendo en
consideración el aporte de sodio y potasio de cada solución
y las necesidades del paciente. Es importante considerar que
el suero glucosado al 5% aporta solo 5 g de glucosa en 100
ml, de forma que los 2 L/ día que estamos administrando al
paciente son 100 g de glucosa ycorresponden a 400 calorías/
día aproximadamente, siendo absolutamente insuficiente
como nutrición. Esta condición no se debe mantener por
más de 5 días, ya que atenta contra la buena evolución al
provocar un catabolismo de las proteínas musculares del
paciente como fuente calórica, haciendo necesario pasar a
una nutrición parenteral central.
Si con anterioridad sabemos que el período de régimen cero
serámayoraestetiempo(porejemplo,unaGastrectomíatotalo
Pancreatoduodenectomía),sedebeplanificarconanticipación
un apoyo nutricional parenteral para el posoperatorio inmediato,
sinesperarquesecumplanlos5díasconnutricióninsuficiente.
Hay también situaciones distintas a las anteriores, como es el
caso de un paciente politraumatizado grave en un accidente.
Esteindividuo,habitualmenteconunavolemianormalhastael
momentodeltrauma,sufreenformabruscapérdidade sangre
y su manejo es totalmente distinto. Primero corresponde la
administración rápida de volumen endovenoso sobre la base
decristaloides,depreferenciasuerofisiológicooRingerlactato
19
indistintamente, dependiendo de la cantidad, velocidad y
edad del paciente, es preferible evitar el suero fisiológico por
la gran cantidad de sodio, el riesgo de Edema Pulmonar y
de Acidosis Hiperclorémica. Es importante entender que en
traumaloque seperdió es “sangre” ysielshock es importante
(tipo III o IV) se debe reponer sangre y no exagerar el aporte
de cristaloides.
Otroscuadrosfrecuentesdetratarenlosserviciosdeurgencia
son las deshidrataciones agudas por gastroenteritis agudas,
endondelosvómitosyladiarreapuedenllegaracomprometer
en forma importante al paciente. En estas condiciones es
útil, dependiendo de la deshidratación inicial, comenzar la
hidratación con un bolo 500 ml de Ringer o suero fisiológico
y luego continuar con suero glucosalino, pues el aporte de
calorías de esta última solución entrega una sensación de
bienestar importante al paciente, ya que, al igual que en
ejemplos anteriores, rompe con el ayuno y la formación de
cuerpos cetónicos.
Loscoloidescontienenpartículasdesuspensióndealtopeso
molecular que no atraviesan las membranas capilares. Con
esto aumenta el tiempo de permanencia en el intravascular
y disminuye la producción de edema. Actúan aumentando
la presión oncótica, retienen agua en el intravascular
produciendo expansión del volumen plasmático. Los efectos
hemodinámicos son más duraderos y rápidos que los de los
cristaloides, necesitándose administrar menor volumen para
expandir el intravascular.Su costoes mayor a loscristaloides.
Existen coloides de origen natural y artificial.
Su uso está reservado para situaciones donde existen
alteraciones en la permeabilidad y hay salida de proteínas
al intersticial, como en respuestas inflamatorias sistémicas
o shock séptico.
20
Los coloides principales se resumen en la siguiente tabla:
Origen
Natural
Artificial
Tipos Características
Albúmina
Dextrano
Es responsable del 80% de la presión oncótica del plasma. Un 30 - 40% se distribuye
en el espacio intravascular y el resto en el intersticio. El 90% de lo que se administra
permanece en el plasma por 2 horas y luego se equilibra en el espacio intra y
extravascular por los siguiente 7 a 10 días. Se encuentra disponible al 5 y 25% en
soluciones salinas. El aporte al 25% determina un aumento del intravascular de 5
veces el volumen incorporado. El principal limitante de su uso es el elevado costo.
Corresponden a polisacáridos de origen bacteriano producidos por el Leuconostoc
mesenteroides. Se definen según su peso molecular en dextrano 40 o 70. El 70% del
dextrano40esexcretadoatravésdelaorinaantesdelas24horas.Lasmoléculasmás
grandes son excretadas luego de ser almacenadas en el sistema retículo endotelial.
Ambos pueden producir alteraciones en la coagulación e insuficiencia renal aguda
(principalmente el dextrano 40).
Hidroxietilstarch
(HES)
Se sintetizan a partir de la hidrolisis de la amilopectina. Su permanencia en el
intravascular depende del peso molecular del HES que se utilice, su efectopuede
durar de 3 a 24 horas.
Gelatinas
Derivado del colágeno, tiene un peso molecular más bajo que las anteriores y una
persistencia vascular de 2 a 3 horas.
Tabla 5: Tipos de coloides.
Los hemoderivados que se utilizan son:
Glóbulos rojos: se recomienda transfundir glóbulos rojos en
pacientes con hemoglobina menor a 6 g/dl. Si los valores son
entre 6 y 10 g/dl se debe evaluar el riesgo del paciente de
oxigenacióninadecuada(cirugíasconestimacioneselevadas
de pérdidas hemáticas, pacientes cardiópatas o sintomáticos).
Plasma fresco congelado: las indicaciones para su
administración son reemplazo de déficit de factores de
coagulación,reversióndeefectoscumarínicos,correccióndel
déficit de vitamina K, transfusión masiva con protrombina o
TTPA y déficit de antitrombina III.
Plaquetas: el uso de plaquetas varía en pacientes con
recuentos entre 50.000 y 100.000 según el riesgo de
sangramiento del procedimiento quirúrgico.
21
Secreción Volumen
en 24h
Na (meq/L) K (meq/L) Cl (meq/L) HCO3
(meq/L)
Estómago 1.000-2.000 60-90 10-30 100-130 0
I. delgado 2.000-3.000 120-140 5-10 90-120 30-40
Colon 300 60 30 40 0
Páncreas 600-800 135-145 5-10 70-90 95-115
Bilis 300-800 135-145 5-10 90-110 30-40
Tabla 6: Pérdidas por sondas y ostomías.
Conclusión
La información más importante para evaluar el estado del
volumen intravascular corresponde al escenario clínico y, por
lo tanto, el déficit de fluidos debe tomar siempre en cuenta
la historia del paciente, sus antecedentes médicos y un muy
buen examen físico.
El objetivo de una adecuada fluidoterapia debe enfocarse en
mantener un flujo sanguíneo con buena perfusión a todos los
órganos, de modo de favorecer una reparación de los tejidos
afectados y no producir daño colateral a otros. El mantener
una hidratación basal o ser más agresivos en su manejo,
dependerá de la patología concomitante, el estado actual del
paciente y el procedimiento al cual será sometido.
22
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23
1.2 Nutrición y Regímenes
Vergara R, Hernández C, Matamala A.
Introducción
La evaluación y manejo nutricional debe formar parte
del tratamiento integral del paciente. La prevalencia de
malnutrición en el paciente hospitalizado alcanza hasta un
50% dependiendo de las series .1
ingreso, el período de ayuno condicionado por la técnica
quirúrgica (especialmente en cirugía digestiva) y las posibles
complicaciones posoperatorias que producen una persistencia
del estado catabólico.
Los pacientes quirúrgicos son especialmente propensos a
presentar alteraciones debido a la patología que motiva su
Evaluación Nutricional
La evaluación del estado nutricional es una valoración
utilizada para establecer la gravedad de las deficiencias o
excesosnutricionalesyparaayudarapredecirlanecesidadde
nutrientes. Debe ser realizada en todo paciente, y contempla
una evaluación clínica (Evaluación Subjetiva del Estado
Nutricional, ESEN) y una evaluación objetiva por antropometría
y laboratorio.
LaESENconsisteenunaanamnesis yexamenfísicodirigidos
a los siguientes puntos:
Anamnesis: Busca obtener información para determinar la
pérdida de peso, enfermedades crónicas o hábitos dietéticos
queinfluyenenlacantidadycalidaddelconsumodealimentos
1. Baja de peso.
2. Cambios en la dieta.
3. Síntomas gastrointestinales.
4. Capacidad funcional.
Examen físico:
1. Determinar el Índice de Masa Corporal (IMC), se calcula
al dividir el peso actual (en Kg) por la talla (en m2), siendo
el rango normal entre 18,5 y 24,9
2. Estimar el tejido adiposo subcutáneo en pliegue tricipital.
3. Estimar las masas musculares en deltoides y cuádriceps
femorales.
4. Evaluar si hay edema o ascitis.
5. Determinar si hay signos carenciales en piel y mucosas.
Diagnóstico nutricional
Mediante la ESEN el paciente puede ser clasificado en:
1. Obeso.
2. Bien nutrido.
3. Riesgo de desnutrición.
4. Desnutrido.
1 Bruun LI, Bosaeus I. Prevalence ofmalnutrition in surgical patients:
evaluation of nutritional support and documentation. Clin Nutr 1999;
18(3): 141-7.
24
La evaluación objetiva, que demanda mayores recursos,
debe reservarse a los pacientes en categorías de riesgo
de desnutrición y los desnutridos. Esta comprende una
determinación antropométrica (masa grasa por pliegues
cutáneos), masa muscular (circunferencias musculares)
y función (por dinamometría de la mano) y exámenes de
laboratorio relacionados con proteínas viscerales (albúmina,
prealbúmina y recuento de linfocitos).
Manejo Nutricional
La evaluación nutricional nos permite detectar pacientes
desnutridos o en riesgos de desnutrición. En estos pacientes
es necesario desarrollar un plan de manejo nutricional:
1. Determinar los requerimientos.
2. Determinar la vía de administración y tipo.
3. Determinar el momento.
Balance nitrogenado:
Se refiere al balance de proteínas, ya que la mayor parte del
nitrógeno corporal está en los aminoácidos que componen
las proteínas. El BN en un día se puede medir evaluando la
ingesta de proteínas (6,25 g de proteínas equivale a 1 g de N)
y las pérdidas urinarias como N ureico (NUU) o N total (NTU):
BN = N aportado - N eliminado
N Aportado: gramos de proteínas/6.25
N Eliminado: (Urea orina x 0.46 x vol. orina 24h) + 4g
1. BN negativo: < 0 g/día
2. BN neutro: 0 g/día
3. BN positivo: > 0 g/día (ideal entre +2 y +4)
Recomendaciones
Distribución de calorías
Es crucial determinar las necesidades nutricionales de
los pacientes debido a que la provisión de una cantidad
inadecuada o excesiva de calorías puede influir de forma
adversa en el organismo.
• CALORÍAS
Fundamentalmente, hay dos métodos de cálculo de los
requerimientos energéticos de un paciente:
1. Cálculo mediante calorimetría indirecta. Se basa en la
medidadelconsumode oxígeno(VO2) yla producción de
anhídridocarbónico(VCO2),realizadaconuncalorímetro.
2. Cuando no se puede realizar calorimetría indirecta, se
puede utilizar fórmulas para evaluar los requerimientos.
En la práctica, la estimación del aporte calórico que debe
recibir un paciente se realiza sobre la base de su IMC:
• Normal o bajo: 25-30 cal/kg
• Sobrepeso: 20 cal/kg
• PROTEÍNAS
La recomendación inicial es entregar un aporte de 1 a 1.5 g/
kg al día, aumentando la cantidad en pacientesdesnutridos
o hipercatabólicos. En estos pacientes, los cálculos de
requerimientos exigen el uso del balance nitrogenado.
B. Vía de Administración.
Las técnicas de nutrición tanto enteral como parenteral
tienen como objetivo prevenir la desnutrición de los pacientes
críticamente enfermos y recuperar a los desnutridos cuando
ello no se puede lograr a través de una alimentación oral
espontánea o suplementada.
En el momento de la hospitalización de todo paciente y
cada dos semanas mientras dure el ingreso, deberíamos
plantearnos si este se encuentra en riesgo nutricional:
1. Pérdida reciente de peso superior al 5 % del habitual.
2. Albúmina sérica inferior a 3 g/dl.
3. Paciente con patología de riesgo nutricional: neoplasias,
fístulas, sepsis, cirugía mayor, hepatopatía, etc.
La vía de administración dependerá de la función del aparato
digestivo.Sielpacienteescapazdeingeriralimentosporboca,
pero no alcanza el 100% de sus requerimientos entonces se
debe optimizar con suplementos orales.
Si esto no es suficiente, se debe indicar nutrición enteral por
sonda, ya sea en estómago, duodeno o yeyuno.
La nutrición parenteral puede indicarse como suplemento o
como nutrición completa, ya sea por vía periférica ocentral.
La vía periférica se utiliza en pacientes que no requieren
grandes volúmenes ni demandas nutricionales y en quienes
el apoyo nutricional no será por más de 7-10 días.
• Proteínas 10 - 20 %
• Carbohidratos 50 - 70 %
• Lípidos 20 - 30 %
A. Evaluación de las Necesidades
Calóricas.
25
N. Enteral
Oral 2/3 requerimientos
Si
B.1 Nutrición Enteral
Es una técnica de soporte nutricional mediante la cual se
aportan nutrientes de forma directa al aparato digestivo,
por vía oral o en los diversos tramos del tubo digestivo con
sondas específicas.
• INDICACIONES NUTRICIÓN ENTERAL
Pacientes con un aparato digestivo funcionante en que la
ingesta de nutrientes es inadecuada:
1. En pacientes con adecuado estado nutricional y estrés
metabólico leve mantenido durante un periodo igual o
superior a 7 días
2. En pacientes con buen estado nutricional y con estrés
metabólico moderado grave mantenido durante un periodo
de 3 - 5 días.
3. En pacientes con desnutrición.
• VÍAS DE ADMINISTRACIÓN
1. Vía oral.
2. Por sonda
• Nasogástrica: se puede entregar un aportecontinuo
o en bolos; existe una mejor tolerancia al volumen
entregado.
• Nasoyeyunal: solo se puede entregar unaporte
continuo. Presenta menor riesgo de neumonía
aspirativa, aunque un mayor riesgo de diarrea.
3. Por ostomías.
• Gastrostomía: En pacientes con intubación por más de
6 semanas.
• Yeyunostomía: En general, en el posoperatorio de
cirugías abdominales complejas.
• CONTRAINDICACIONES NUTRICIÓN ENTERAL
Contraindicaciones absolutas:
• Peritonitis difusa.
• Obstrucción completa del intestino delgado o grueso.
• Perforación intestinal.
• Vómitos intratables.
• Hemorragia digestiva aguda grave activa.
• Inestabilidad hemodinámica grave.
• Malabsorción grave, cuando se presenta con
incapacidad para absorber nutrientes en eltubo
digestivo.
Contraindicaciones relativas:
• Diarrea grave que se acompaña dealteraciones
metabólicas (>1.500 ml al día).
• Fístulas entero cutáneas de alto débito (> 500 ml/día).
• Enteritis grave por radiación o infección.
No
Intestino Funcionante
Complemento oral Nasoenteral Enterostomia N.P.Periferica N.P.Total
> 7 días
< 7 días
> 4 sem
< 4 sem
Nutrición Perenteral
26
• TIPOS DE REGÍMENES
En general, se inicia con 10 a 20 ml/h en forma continua,
se evalúa tolerancia y se progresa día a día. En pacientes
estables o que puedan recibir alimentos durante el día, la
nutrición enteral puede indicarse durante la noche.
Fórmulas isotónicas con residuo bajo: Casi todas
proporcionan una densidad calórica de 1 kcal/ml. Estas
composiciones de osmolaridad baja proporcionan
carbohidratos, proteínas, electrolitos, agua, grasa yvitaminas
liposolubles (algunos no incluyen vitamina K) basales, y su
característica es que tienen una relación entre calorías no
proteínicas y nitrógeno de 150:1. No contienen volumen por
fibra y, por consiguiente, dejan un residuo mínimo. Ejemplo:
Osmolite.
Fórmulas isotónicas con fibra: estas fórmulas contienen
fibra, soluble e insoluble, que se elabora a menudo a partir
de soya. Las soluciones con fibra regulan el tránsito intesti-
nal y disminuyen la incidencia de diarrea y constipación en
comparación con las solucio-nes sin fibra. La fibra estimula
la actividad de la lipasa pancreática y las bacterias intesti-
nales la degradan en ácidos grasos de cadena corta, un
combustible importante para las células del colon. No hay
contraindicaciones para el uso de fórmulas que contienen
fibra en pacientes graves. Ejemplo: Jevity Plus.
Fórmulas que mejoran la inmunidad: Son fórmulas
fortificadas con nutrientes especiales para mejorar varios
aspectos de la función inmunitaria o de los órganos sólidos.
Entre los aditivos se encuentran: glutamina, arginina,
aminoácidos de cadena ramificada, ácidos grasos omega 3,
nucleótidos y beta caroteno.
Fórmulas densas en calorías: La principal diferencia de
estas fórmulas es un valor calórico mayor para el mismo
volumen. Estas soluciones tienen una osmolalidad más alta
quelas fórmulas estándar ysonadecuadas paraalimentación
intragástrica. Suele aportar 1,5 a 2 kcal/ml.
Fórmulasconaltocontenidodeproteínas:Serecomiendan
en pacientes graves o traumatizados cuya necesidad de
proteínas es elevada. Ejemplo: Fresubin HP.
Fórmulas elementales: Contienen nutrientes predigeridos y
proporcionan proteínas en forma de péptidos pequeños. La
principal ventaja de esta fórmula es la facilidad de absorción.
Se recomienda en pacientes con malabsorción, deterioro
intestinal, pancreatitis y pacientes con ayuno prolongado.
Ejemplo: Perative.
Fórmulas para insuficiencia renal: Contiene un volumen
más bajo de líquidos ylas concentraciones de potasio, fósforo
y magnesio necesarias para cumplir con las necesidades
calóricas diarias. No contiene oligoelementos ni vitaminas.
Ejemplo: Suplena.
Fórmulas para insuficiencia pulmonar: Se suele incrementar
el contenido de grasas al 50% de las calorías totales, con una
reducción de carbohidratos. El objetivo es reducir la producción
deCO2yaliviarlacargaventilatoriadelospulmones.Ejemplo:
Pulmocare.
Fórmulas para insuficiencia hepática: En esta fórmula casi
50% de las proteínas son aminoácidos de cadena ramificada.
El objetivo de esta fórmula es reducir las concentraciones de
aminoácidos aromáticos e incrementar las de aminoácidos
de cadena ramificada. Hay controversia respecto al uso de
esta fórmula, pues no se han demostrado beneficios claros.
Ejemplo: Hepatic Aid.
• COMPLICACIONES NUTRICIÓN ENTERAL
Las complicaciones pueden ser:
1. Mecánicas:Incluyelesionesporpresión,obstrucción(una
de las más frecuentes), salida accidental o desplazamiento
de la sonda, fuga del contenido por ostoma.
2. Infecciosas: Infección de la herida o del estoma, otitis,
sinusitis, broncoaspiración y peritonitis, que sucede con
frecuencia en la recolocación errónea de la sonda.
3. Gastrointestinales: Son las complicaciones más
frecuentes. La mayoría de estas complicaciones no
son graves, pero implican con frecuencia la interrupción
del aporte nutricional.
• Náuseas, vómitos y regurgitación.
• Aumento del residuo gástrico, es decir, presencia de
un volumen superior a 500 ml en cada valoración del
contenidogástrico;suprincipalcausaeslagastroparesia.
• Distensión abdominal: Refleja un aporte de nutrición
superioralacapacidaddeabsorcióndelaparatodigestivo.
• Estreñimiento: Este se disminuye al mínimo posible con
dietas con fibras, procinéticos y enemas.
• Diarrea: La responsabilidad de la nutrición enteral en esta
complicación debe ser un diagnóstico de exclusión. Se
produce como consecuencia de un desequilibrio entre
los mecanismos de secreción y reabsorción hídrica en
el tubo digestivo.
4. Metabólicas.
• Alteraciones electrolíticas: La más frecuente es la
hipokalemia.
• Alteraciones hídricas: Pueden ser por exceso o por déficit.
• Alteración del metabolismo glucídico: En el paciente
diabético inestable por una enfermedad intercurrente o
enpacientesconelevadoestrésmetabólico yciertogrado
de resistencia periférica a la insulina, que tienen una
inadecuada metabolización de los hidratos de carbono
con intensa hiperglucemia. Se recomienda administrar
fórmulas con carbohidratos modificados, así como
mantener glicemias entre 120 y 150 mg/dl.
27
• Síndrome de realimentación: Síndrome que engloba
una serie de alteraciones metabólicas que ocurren como
resultado de iniciar la nutrición en forma abrupta, sin
haber corregido alteraciones hidroelectrolíticas, o bien,
por una nutrición enteral o paraenteral excesiva. Se
produce un estímulo de secreción de insulina ante un
elevado aporte de hidratos de carbono que provoca
desviación intracelular de electrolitos, en general en
pacientes gravemente desnutridos (fósforo, magnesio y
potasio). Los pacientes pueden desarrollar desórdenes
hidroelectrolíticos, especialmente hipofosfatemia, junto
con complicaciones neurológicas, pulmonares, cardíacas,
neuromusculares y hematológicas.
B.2 Nutrición Parenteral
La nutrición parenteral consiste en administrar en forma
continua una solución que contiene carbohidratos, proteínas,
grasas y otros nutrientes necesarios a través de un catéter
permanente insertado en un acceso venoso (central o
periférico).Suindicacióntienecabidaúnicamenteenaquellas
situaciones en las que el aparato gastrointestinal no funciona
o no puede ser utilizado.
• INDICACIONES
Las principales situaciones para iniciar nutrición parenteral
se encuentran en pacientes graves que sufren desnutrición,
sepsisountraumatismoquirúrgicooaccidental,cuandonoes
posibleutilizareltubodigestivoparaalimentarlosenunperiodo
superior a 7-10 días, o 5-7 días si se parte de una situación
de desnutrición. En algunos casos, se puede utilizar nutrición
intravenosa para complementar un ingreso oral inadecuado.
Igual que en la nutrición enteral, los objetivos fundamentales
son proporcionar suficientes calorías y sustrato nitrogenado
para promover la reparación de los tejidos y conservar la
integridad o el crecimiento de la masa tisular magra.
La nutrición parenteral no está exenta de riesgos (tanto
mediatos como diferidos), precisa una correcta prescripción
de nutrientes y una evaluación clínica periódica.
Indicado en:
• Pacientes adultos con síndrome de intestino corto
secundario a resección masiva de intestino delgado.
• Fistulas enteroentéricas, enterocólicas, entrovesicales o
enterocutáneas de alto débito (> 500 ml al día).
• Enfermos quirúrgicos con íleo paralíticoprolongado.
• Enfermosconafecciónmalignaenquienesladesnutrición
puedeponerenpeligroeléxitodeunaopciónterapéutica.
• Fracaso en el aporte de calorías mediantealimentación
enteral.
• Pacientes graves, hipermetabólicos por más de 5 días o
cuando no es factible la nutrición enteral.
• CONTRAINDICACIONES NUTRICIÓN
PARENTERAL
1. Falta de un objetivo específico en el tratamiento del
paciente.
2. Periodos de inestabilidad hemodinámica o alteración
metabólica grave que requieren corrección o control
antes de intentar la alimentación intravenosa.
3. Posibilidad de alimentación por el tubo digestivo.
4. Pacientes con buen estado nutricional.
5. Pacientes con descerebración irreversible.
• CLASIFICACIÓN DE NUTRICIÓN PARENTERAL
Según su objetivo terapéutico nutricional:
• Total. Es total si se cubre de forma completa los
requerimientos del paciente. Requiere el acceso a una
vena de diámetro grande (central).
• Parcial. Aquella que no alcanza todos los
requerimientos del paciente. Puede ser administrado
a través de venas periféricas. Se considera su uso
si no se dispone de vías grandes o si es utilizada
en combinación con nutrición enteral. Se utiliza en
periodos cortos que no superan las 2 semanas.
Según vía de administración:
• Periférica. Se utiliza un acceso venoso periférico
subcutáneo.Indicadocuandoseprevéelusodenutrición
parenteralporunperiodoinferiora2semanas.Lafórmula
debe tener una osmolaridad menor a 700 mOsm/l.
• Central. Se utiliza un acceso venoso central. La fórmula
suele ser una mezcla hiperosmolar (1.300 – 1.800
mOsm/l).
• TIPOS
1. Receta magistral: individual preparada en central de
mezclas.
2. BolsasdeNPTlistasparausar:Sonmezclascomerciales
que contienen macronutrientes, la mayoría 3 en 1, con
o sin electrólitos y sin vitaminas ni oligoelementos.
En el mercado existe una gran variedad en cuanto a
aportes, contenido de calorías y proteínas, osmolaridad
y volumen, que debe ser ajustado a los requerimientos
de cada paciente. Ejemplos: SMOF, Lipofundin.
28
• COMPLICACIONES DE LA NUTRICIÓN PARENTERAL
1. Infecciosas: se asocian al catéter. La primera medida
para tratar estas complicaciones infecciosas es su
prevención. En un paciente con fiebre que recibe
nutrición parenteral, deben realizarse hemocultivos y
descartarse otros posibles focos. Ante sospecha que
el origen sea infección relacionada con el acceso
venoso, hay que retirar la nutrición parenteral y el
acceso e iniciar el tratamiento antibiótico específico.
2. No infecciosas:
• Mecánicas: neumotórax, canalización arterial, mal
posición,perforacióndeunvasootaponamientocardiaco.
• Trombosis venosa.
• Oclusión del catéter por precipitados lipídicos.
• Oclusión del catéter por precipitados cálcicos.
3. Complicaciones metabólicas: hiperglicemia, déficit de
electrolitos, alteraciones equilibrio ácido-base, síndrome
de realimentación, enfermedad hepatobiliar yenfermedad
metabólica ósea.
4. Atrofia intestinal: la falta de estimulación intestinal se
acompaña de atrofia de la mucosa del intestino, menor
altura de las vellosidades, crecimiento bacteriano excesivo,
reducción del tamaño del tejido linfoide, baja producción de
IgA y deterioro de la inmunidad intestinal.
Bibliografía
1. Schwartz, s.l., Principios de cirugía, 8.a edición en español, editorial McGraw-Hill Interamericana, 2005.
2. Harris ja, benedict fg. A biometric study of the basal metabolism in man. In: washington cío, ed. Publication N.° 279. Washington,
dc: 1919.
3. Aomar abdel-lah mohamed, j. A. (s.f.). Guía de actuación: soporte nutricional en el paciente quirúrgico. Asociación Española de
Cirujanos. Recuperado el 5 de junio de 2015, de http://www.aecirujanos.es/publicados_por_la_aec/guia_actuacion_soporte_
nutricional/guia_actuacion_soporte_nutricional.pdf
4. L. Ricardo Gálvez; Sandra Hirsch; Guías chilenas de soporte nutricional en las unidades de paciente crítico (cuidados intensivos e
intermedios): Consenso sociedad chilena medicina intensiva / Asociación Chilena de Nutrición, Obesidad y Metabolismo, Revista
chilena de medicina intensiva. 2011; vol 26(4): 223-233.
29
1.3 Cicatrización
Quinteros JP, Arteaga MJ, Fontbona M.
Fases de Cicatrización
Es importante recordar que las fases se sobreponen entre
sí, mientras una está terminando, la otra está comenzando.
Elementos celulares involucrados:
• Plaquetas: liberaran sustancias con propiedades
quimiotácticas para la llegada de polimorfo nucleares
neutrófilos.
• Macrófagos: los monocitos circundantes son atraídos y
transformadosamacrófagos,estosremuevenlosdetritus
tisulares para que continúen las siguientes fases de la
cicatrización. Además, producen citoquinas que activan
y atraen a otras células.
• Célulasendoteliales:sonestimuladasporlosmacrófagos,
para que comiencen a migrar y epitelizar la solución de
continuidad.
• Neutrófilos: junto con las plaquetas producen lipoxinas
que tienen como efecto modular y detener la respuesta
inflamatoria. Aquí se produce el punto de chequeo y
control de la respuesta inflamatoria, punto que marca el
fin de la fase inflamatoria, y es fundamental para seguir
con las otras fases de la cicatrización.
• Fibroblastos: aumentan su número y actividad; comienzan
la síntesis de colágeno, que es fundamental en la fase
de fibroplastía/proliferativa. El fibroblasto activado se
transforma en miofibroblasto en la etapa proliferativa,
contribuyendo a la contracción de la herida.
• Linfocito: migran alterritorio injuriado alrededor del quinto
día, alcanzan su máximo al séptimo. Tienen un rol de
modulación de los procesos de cicatrización.
Moléculas involucradas
• Eicosandoides: metabolitos de ácido araquidónico, son
muyactivos. Se incluyen prostaglandinas, prostaciclinas,
tromboxanos, leucotrienos, lipoxinas. En una injuria se
libera fosfolipasa, que hidroliza el ácido araquidónico de
las membranas celulares y da origen a estas moléculas.
• Citoquinas: péptidos con potente acción reguladora
sobre el metabolismo, síntesis proteica y diferenciación
celular. Se subdividen en: quemoquinas, linfoquinas,
monoquinas, interleuquinas, factores de estimulación
colónica e interferones.
• Factores de crecimiento: proteínas que participan en la
cicatrización estimulando la síntesis proteica, síntesis de
MEC y su recambio. Modulan la apoptosis. Se agrupan
en cinco familias: Derivados de plaquetas (PDGF y
VEGF), epidérmicos (EGF), fibroblásticos (FGF yKHF),
de transformación (TGF) e insulínicos (IGF).
• Óxido nítrico: sus efectos sobre la cicatrización
incluyen: acción bactericida, estímulo de angiogénesis,
vasodilatación, inhibición de la agregación plaquetaria y
aumento de la permeabilidad vascular. Estas acciones
son especialmente relevantes durante la primera etapa.
Su producción en el tejido inflamado comienza durante
las primeras 24 horas, alcanzando su máxima expresión
entre los días 1 y 5. Se produce por activación de la iNOS
(óxido nítricosintetasa inducible) sobrerregulada en injuria
tisular.Los epitelios, además, tienen eNOS (constitutiva).
30
Mirastschijski U, Jokuszies A & Vogt PM. Skin wound healing: Repair biology, wound, and scar treatment. In: Neligan P. Plastic surgery.
Seattle: Elsevier; 2013, pp. 268
Fase inflamatoria
Transcurre entre los días 0 y 4, es cuando se desencadena
la cascada de la coagulación. Se produce vasoconstricción
y activación plaquetaria. Aquí es donde se inicia la liberación
demediadores comocitoquinas yfactores decrecimientoque
dan origen a la respuesta inflamatoria. Todo esto transcurre
siguiendo un patrón genéticamente establecido.
Dentro de la primera hora se desencadena la respuesta
inflamatoria, se liberan mediado-res con efectos de quimiotaxis
y aumenta la permeabilidad capilar para facilitar la llegada
de las células. Participan tanto células como moléculas con
funciones específicas.
Fase proliferativa
Sedesarrollaentrelosdías2y21.Enestaetapasedesarrollan
los procesos de epitelización de la herida, angiogénesis,
formacióndematrizextracelular(MEC)provisionalyproducción
de colágeno. La célula más relevante es el fibroblasto.
Epitelización:hayunadisminucióndelaiNOS,loquepermite
una proliferación de queratinocitos, lo que posibilita una
epitelización completa a las 48 horas.
Angiogénesis: el VEGF (factor de crecimiento endotelial
vascular) aumenta la producción de óxido nítrico mediante
la sobreexpresión de la eNOS. Además, los queratinocitos,
estimulados previamentepor laiNOSproducenmás VEFG,lo
queocasionauncírculodondeaumentanestosmediadores.El
aumentodeVEGFllevaaldesarrollodevasosdeneoformación.
Lanueva irrigacióndeláreadecicatrizaciónpermitelallegada
de nutrientes y sustratos para complementar el proceso.
Formación de MEC previsional: gran parte de los procesos
de cicatrización se llevan a cabo en la MEC, por lo que este
proceso es fundamental. Inicialmente, la MEC provisional
está compuesta principalmente por fibrina y fibronectina,
de los restos del coágulo, la respuesta hemostática y los
macrófagos. Los fibroblastos, estimulados en la etapa
inflamatoria, comienzan a producir nuevas moléculas, como
glicosaminoglicanos, proteoglicanos yotras. Posteriormente,
aparece el colágeno III. La proporción de este colágeno está
aumentada en esta etapa (30% vs 10%), por lo que es menos
resistente, más flexible y permite el paso más fácil de células.
Luegoestosenormaliza,ylamaduracióndelcolágenopermite
una mayor estabilidad de las células.
Se produce la transformación del fibroblasto a miofibroblasto.
Ladesaparicióndelascontraccionesmecánicasenunamatriz
más organizada lleva a la apoptosis de los fibroblastos,
disminución de la síntesis de colágeno y una cicatrización
normal. La persistencia de cargas mecánicas sobre la
herida lleva a un aumento en la cantidad de colágeno y una
cicatrización anormal (hipertrófica o queloide).
Fase de remodelación
Comienza el día 21. Esta fase es clínicamente relevante
durante el primer año posquirúrgico, pero puede ser un
proceso indefinido. Aquí se produce un aumento de la fuerza
tensil,hastaenun80%delaresistenciaoriginal.Lascicatrices
nunca tienen un 100% de resistencia. A la primera semana
se alcanza un 3%, 30% a las tres semanas y, finalmente, un
80% a los tres meses.
31
Proliferación
Remodelación
32
Cicatrización Patológica
No todas las heridas logran cicatrizar a pesar de las
intervenciones posibles. Esta alteración del proceso de
cicatrización se puede producir por dos mecanismos: la falta
de cicatrización o el exceso de esta.
Cicatrización patológica por falta de cicatrización
Son conocidas como heridas crónicas, son lesiones abiertas
que fallan en epitelizar y cerrar en un tiempo razonable. No
se produce tejido de granulación robusto. Hay varios factores
que contribuyen a evitar la cicatrización en estas lesiones,
pero no hay una clara teoría que explique la etiopatogénesis
de este fenómeno en cada herida por separado. Dentro de
estos factores se encuentran:
• Venosas:elaumentodelapresiónvenosaproduceedema
localizado y extravasación de plasma. Esto dificulta la
difusión de oxígeno y nutrientes; además, produce la
activación de leucocitos en capilares obstruidos, lo que
finalmente lleva a la liberación de radicales libres por
hipoxia y se produce necrosis. Sin tratamiento adecuado,
es posible que estas heridas aumenten su tamaño.
• Arterial: las heridas requieren un adecuado nivel de
oxígeno para cicatrizar. Las lesiones isquémicas tienen
una pobre cicatrización y mayor riesgo de infecciones.
En estas heridas existe riesgo de infección
necrotizante. Una herida que no cicatriza en una
extremidad es indicación para revascularización.
• Diabetes: hay varios factores que evitan la correcta
cicatrización en pacientes diabéticos. Entre ellos, la
neuropatía diabética, insuficiencia arterial y diversas
alteraciones moleculares se ven implicadas en la
alteración de este proceso. Se produce una inflamación
sostenida, con aumento de citoquinas inflamatorias y
disminución de los linfocitos T. La glicosilación de proteínas
comprometefibroblastosycélulasvasculares,loquelleva
a la apoptosis y la no formación de tejido de granulación.
Los fibroblastos y queratinocitos tienen una reducción de
su proliferación y producción de colágeno. El correcto
manejo de la glicemia puede revertir estas alteraciones.
• Radiación: la radiación produce alteraciones del ADN
de los fibroblastos, queratinocitos y células endoteliales,
el cual impide que se dividan de manera adecuada. El
tejido irradiado tiene algún grado de daño residual, lo que
produce atrofia, fibrosis y poca reparación de los tejidos.
• Infección: las bacterias alteran la cicatrización a través de
diversosmecanismos.Anivellocalelinfiltradoinflamatorio
de la cicatrización1
. Son signos de infección: fiebre,
eritema, edema y drenaje de contenido purulento.
• Malnutrición: la cicatrización es un proceso anabólico
que genera un aumento en el consumo de calorías, el
que debe ser calculado de forma independiente a cada
paciente. Los pacientes con malnutrición tienen alterada
la cicatrización porque se necesitan proteínas, vitaminas
y minerales para que este proceso sea efectivo. Estos
nutrientes están involucrados en la síntesis de colágeno,
reepitelización y promueven la respuesta inflamatoria
en etapas tempranas de la cicatrización. El déficit de
proteínas aumenta el riesgo de dehiscencia.
• Obesidad: interfierecon lacicatrización independiente de
ladiabetes.Lapocaperfusiónyeltejidoadiposonecrótico
contribuyen a la mala cicatrización en pacientes obesos
diabéticosynodiabéticos.Además,enlospacientesobesos
diabéticos el riesgo aumenta con mal control glicémico.
• Esteroides: el uso de corticoides sistémicos y tópicos
altera el proceso de cicatrización, especialmente
durante el inicio de este. Estos reducen la inflamación,
la síntesis de colágeno y la contracción. Los mecanismos
exactos del uso de corticoides no están definidos.
• Quimioterapia: produce alteraciones en la división
celular, generalmente retrasándola, lo que hace que
el proceso de curación sea más lento.
• Tabaco: el consumo de tabaco tiene un efecto difuso y
multifactorial en el organismo. Produce hipoxia, isquemia
tisular y alteraciones inmunes que alteran el proceso de
cicatrización2
. Algunos de estos efectos son reversibles
si el paciente deja de fumar. Se recomienda un cese del
cigarro entre 3 a 8 semanas preoperatorias y 4 en el
posoperatorio.
Cicatrización patológica por exceso
Las heridas sin alteraciones del proceso de cicatrización
tienen señales de detener el proceso cuando la epitelización
es completa y el defecto de la piel está cerrado. Cuando
las señales están ausentes o son inefectivas el proceso de
reparación puede continuar y lle-ar a exceso de tejido de
cicatrización. Las alteraciones moleculares involucradas aún
están en estudio. Hay dos tipos de lesiones características
de esta alteración:
1 Mirastschijski U, Jokuszies A & Vogt PM. Skin wound
healing. In PC Neligan editor. Plastic surgery. Seattle: Elsevier;
2013. pp.267-296
disminuye la proliferación de fibroblastos y, por tanto,
la producción y depósito de MEC. También factores
asociados a la sepsis podrían alterar este proceso.
Una contaminación bacteriana de 10
5
bacterias por
gramo de tejido se asocia a infección clínica y retraso
2 Pluvy I, Garrido I, Pauchot J, Saboye J, Chavoin JP,Tropet
Y, et al. Smoking and plastic surgery, part I. Pathophysiological
aspects: Update and proposed recommendations. Annales de
Chirurgie Plastique Esthétique. 2015 Feb;60(1):e3–13.
33
• Cicatrizhipertrófica:soncicatricesquenohancrecidomás
allá del tamaño original de los bordes de la herida,pero
se ha solevantado. Generalmente, se deben a exceso
de fuerza tensil a través de la herida y son comunes en
superficies articulares de las extremidades. Pueden ser
autolimitadas y regresar con el tiempo (Imagen Nº1).
• Queloide: son cicatrices que crecen más allá de los
bordes originales de la herida, lo que lo distingue de
la cicatriz hipertrófica. No son comunes, pero son más
prevalentes en personas de piel oscura. Generalmente,
se producen en ubicaciones de alta tensión. Los
queloides crecen lentamente como tumor benigno
(Imagen Nº2).
Imagen Nº1 Imagen Nº2
34
35
Cierre de la Herida
Es posible intervenir el cierre natural de las heridas a través de varios mecanismos. Hay tres categorías de cicatrización
de las heridas:
Cierre primario o por primera intención
Laherida porincisiónlimpiaescerradadentrodelasprimerashorasdesdesuformación.Elcierredeestaesporaproximación.
Hay una pérdida mínima de tejido y no hay infección bacteriana. Esta herida sigue las tres etapas clásicas de cicatrización.
Cierre de primera intención
Cierre secundario o por segunda intención
Se utiliza para heridas con pérdida de sustancia y con bordes de lesión anfractuosos, o queda material extraño o tejido
desvitalizado entre los bordes. En estas lesiones el cierre por primera intención no es posible. Se deja abierta para que
cierre de forma espontánea. Se mantiene la fase inflamatoria hasta que cierre completa. Principalmente, están involucrados
los procesos de contracción y la epitelización.
Cierre por segunda intención
36
Cierre terciario o por tercera intención
La herida es cerrada días después del traumatismo. Se utiliza en heridas en que ha pasado el riesgo de infección por
contaminación. Los procesos de cicatrización no se ven alterados, por lo tanto, la fuerza tensil de la cicatriz es la misma
que con cierre por primera intención.
Cierre por tercera intención
Bibliografía
1. Mirastschijski U, Jokuszies A & Vogt PM. Skin wound healing. In PC Neligan editor. Plastic sur-gery. Seattle: Elsevier; 2013, pp.
267-296.
2. Pluvy I, Garrido I, Pauchot J, Saboye J, Chavoin JP, Tropet Y, et al. Smoking and plastic sur-gery, part I. Pathophysiological
aspects: Update and proposed recommendations. Annales de Chirurgie Plastique Esthétique. 2015 Feb; 60(1):e3–13.
3. Andrades P,Sepúlveda S. Cicatrización normal. En Andrades P,Sepúlveda S. Cirugía Plástica Esencial. Santiago, Chile: Hospital
Clínico de la Universidad de Chile, 2005, pp.19–30.
4. Guntner G. Wound Healing: Normal and abnormal. En Thorne C, editor en jefe. Grabb and Smiths’s Plastic Surgery séptima
edición. Estados Unidos de America: Lippincott Williams & Wilkins; 2014, pp.127-170.
37
1.4 Heridas
Quinteros JP, Arteaga MJ, Fontbona M.
Definición
Pérdidadecontinuidaddelostejidossuperficialesy/oprofundos,
producto de un agente traumático externo o interno .1
Clasificación
Según mecanismo de producción (Artigas)2
1. Abrasivas: lesiones erosivas por fricción de la piel sobre
superficie dura e irregular. Tienen diversos grados de
profundidad.
2. Netas: bordes regulares, simétricos con las del lado
opuesto. Coinciden al afrontarse.
3. En bisel: herida de corte oblicuo con bordes de distinto
espesor, que no coinciden.
4. Con pérdida de tejidos: se perdió una porción de tejido
secundario a agente traumático.
5. A colgajo: compromete piel, aponeurosis y/o
músculos. Piel queda plegada sobre sí misma
en forma distal o adherida por pedículo estrecho.
6. Mutilantes: agente traumático destrozó todas las
estructuras del segmento produciendo pérdida parcial o
total de un miembro. Generalmente por maquinaria pesada.
7. Complejas: hay lesión de tendones, nervios, vasos
sanguíneos importantes y huesos.
8. Por armas de fuego: por proyectiles de baja y alta
velocidad.
1 Calderón W. Heridas y Suturas. W. Calderón y A. Yuri (ed).
Cirugía Plástica. Santiago. Sociedad de Cirujanos de Chile 2001;
135-45.
2 Artigas R. Clasificación y manejo de las heridas. Parke
Davis Chile, Santiago 1979.
38
Según grado de contaminación
Tipodeherida Descripción Riesgo de infección Ejemplos:
Clase I (limpia) Herida operatoria donde no
se encuentra inflamación.
Herida no traumática. No se
ingresa a tractos respiratorio,
gastrointestinal, genital ni
urinario.
Menor al 2%. En caso de
uso de prótesis menor al
1%.
Mastectomía, disección de nodo
axilar,laparotomíaolaparoscopía
exploradora, reparación de hernia,
tiroidectomía, paratiroidectomía.
Clase II (limpia-
contaminada)
Herida operatoria donde se
ingresa a tractos respiratorio,
gastrointestintestinal, genital
o urinario en condiciones
controladas. Herida no
traumática.Sin infección.
Quiebre mínimo de la técnica
quirúrgica.
5-15%
Colecistectomía con inflamación
crónica, colectomía, bypass gástrico
enYderoux,reseccióntransuretral
prostática, pancreatoduodectomía
(Whipple), histerectomía vaginal.
Clase III
(contaminada)
Heridas traumáticas, con
quiebre mayor de la técnica
quirúrgica estéril o derrame
de contenido gastrointestinal
ogenitourinario.Operacióncon
inflamación aguda nopurulenta.
Mayor al 15%.
Colecistectomíaoapendicetomía
por inflamación aguda, derrame
de bilis durante colecistectomía,
masaje cardiaco abierto, resección
intestinal por necrosis o infarto.
Clase VI (sucia) Heridas traumáticas sucias,
con tratamiento tardío,
cont am inación f ecal,
cuerpo extraño o con tejido
desvitalizado retenido. Heridas
con infección clínica o víscera
perforada.
Mayor al 30%.
Drenaje de absceso perirrectal,
reparación de perforación
intestinal, peritoni tis,
apendicetomía con perforación
o pus, perforación de úlcera
gástrica, fractura expuesta,
extracción dental con absceso.
Según tiempo de evolución: agudas (siguen en forma ordenada
los procesos de cicatrización clásicos) y crónicas (no los
siguen).
Según compromiso de tejidos: simples (comprometen solo
la piel) y complejas (comprometen piel y músculos, huesos,
tendones, nervios, etc.).
Enfrentamiento Clínico
Al momento de enfrentarse a un paciente con una herida,
el médico debe realizar una evaluación sistémica buscando
antecedentes importantes del paciente y factores que
pueden alterar el proceso de cicatrización.En la anamnesis
es importante establecer:
• Mecanismo de lesión.
• Grado de contaminación de la herida.
• Tiempo desde la lesión: las heridas con 6 o más horas
de evolución se consideran contaminadas.
En el examen físico se realizará la evaluación de la herida:
• Describiendo sus dimensiones, localización y extensión (si
está asociado o no a compromiso vascular,neurológico
u óseo).
• Identificando contaminación, presencia de exudado y
cuerpos extraños.
Es importante reforzar que el profesional de salud debe
evaluar los factores que produje-ron la herida y aquellos que
la perpetuán como, por ejemplo: la infección, presencia de
39
tejido necrótico e insuficiencia vascular porque pueden ser
modificables.
Una vez realizada la evaluación de la lesión se debe elegir la
modalidaddecierre(vercapítulodecicatrización), incluyendo
o no el uso de suturas y curaciones.
La elección del apósito por utilizar estará determinada por
el objetivo que se espera lograr con el manejo de la herida.
Dentro de estos objetivos se encuentran: proteger el tejido de
granulación,tratarlainfecciónsihubiese,desbridarocontrolar
exudado. Según la evolución de la herida y cumplimiento de
los objetivos, se definirá la frecuencia de la curación.
Durante el seguimiento se pueden realizar modificaciones
al manejo, según se estime conveniente: agregar o quitar
antibióticos, espaciar o intensificar frecuencia de curaciones
y cambio de apósitos.
Profilaxis Antitetánica
Elmanejodeheridasproducidasporuninstrumentopunzante,
laceraciones contaminadas con tierra o deposiciones y
quemaduras con extenso daño de tejidos, que pudieran
contener esporas tetánicas requiere:
1. Anamnesis sobre antecedentes de esquema de
vacunación completo:
• Tres dosis de DPT en el menor de un año.
• Dos refuerzos de vacunas, a los 18 meses y el segundo
refuerzo a los 4 años.
• Dosis de toxoide diftérico en el escolar (segundo básico).
2. Evaluación del estado de la herida.
• Herida limpia: heridas con menos de seis horas de
evolución, no penetrante, con un insignificante daño
tisular. Son erosiones y quemaduras superficiales no
contaminadas.
• Heridas sucia: heridas cuya evolución es mayor a 6
horas, penetrantes, con compromiso extenso de tejidos,
independientedel agentecausal,localización y tipo de herida.
3. Aseo local prolijo y desbridamiento quirúrgicoinmediato:
• Remoción de cuerpos extraños, tejidosdesvitalizados
o necróticos.
4. Uso de inmunoglobulina antitetánica 250 UI por una vez.
• Enelcasodeheridas anfractuosas (sucias,penetrantes y
condestruccióndetejido)oinfectadasconmásde24horas
desde la producción de la herida, y en personas obesas,
se recomienda administrar 500 UI de inmunoglobulina
antitetánica por una vez.
40
5. Uso de toxoide diftérico tetánico, según esquema.
Antecedente de vacunación
con toxide o booster Herida limpia Herida sucia
Desconocido o menos de 3 dosis. Toxoide diftérico tetánico Toxoide diftérico tetánico +
inmunoglobulina antitétanica.
3 o más dosis de vacunación y booster
< 5 años. No No
3 o más dosis de vacunación y booster
5- 10 años.
No Toxoide diftérico tetánico
3 o más dosis de vacunación y booster
> 10 años.
Toxoide diftérico tetánico. Toxoide diftérico tetánico.
6. La vacunación se realiza en los adultos con 2 dosis
de toxoide diftérico tetánico separadas por 4-6 semanas y,
posteriormente, un refuerzo de toxoide diftérico tetánico a
los 6-12 meses.
Mordeduras
Dentrodelasheridas,lasmordedurasmerecenunadescripción
aparte por su complejidad y manejo.
1. Mordeduras de perro:
• 80% de las heridas por mordeduras corresponden a
caninos.
• Víctimas son niños de entre 5 y 9 años.
• Sitios más afectados son los miembros, seguidos por las
lesiones maxilofaciales.
• Son heridas complejas que además de las lesiones por
laceración y avulsión y penetrantes, se asocian a atrición
con pérdida de tejido.
• Riesgo de infección: 4% al 25% de las
heridas por mordeduras de perro se infectan.
2. Mordeduras de gato:
• Más frecuentes en personas adultas.
• El sitio más frecuentemente afectado son los miembros
superiores (2/3).
• 85% de las lesiones son penetrantes. Las heridas por
punción tienen más riesgo de infección.
• Riesgo de infección: 30% a 50% de las heridas por
mordedura de gato se infectan.
3. Mordeduras por seres humanos:
• Son la tercera causa más frecuente de mordedura por
mamíferos.
• Tienen las tasas más altas de infección y complicaciones.
• Las mordeduras oclusivas se pueden encontrar en
cualquierpartedelaanatomía,perolamayoríaseobserva
en las manos y brazos en los hombres; en las mujeres
tambiénpuedenversemordedurasenmamasygenitales.
41
Bacteriología
Las lesiones por mordedura tienden a ser polimicrobianas.
Es raro encontrar solo un agente en los cultivos. Se llega a
una mediana de cinco gérmenes bacterianos aislados por
herida. Aproximadamente, el 50% de las infecciones debido
a mordeduras de perro y el 63% de las producidas por gatos
comprenden bacterias aeróbicas y anaeróbicas.
• Género Pasteurella (P. multocida y P. Canis): se
encuentran en el 50% a 75% de las heridas provocadas
por gatos yen el20%a50% delas producidas porperros.
• Bacterias aeróbicas: estreptococos, estafilococos,
Moraxella spp., Corynebacterium spp. y Neisseria
spp. Staphylococcus aureus y Streptococcus mitis.
• Bacterias anaerobias: presentes en el 56% de mordeduras
de las lesiones causadas por perros y gatos; los
más comúnmente encontrados son Fusobacterium,
Bacteroides, Porphyromonas y Prevotella spp.
Los patógenos comúnmente involucrados en las
infecciones causadas por mordeduras de seres humanos
son: Staphylococcus aureus, Streptococcus epidermidis,
Streptococcus viridans, Eikenella corrodens, Haemophilus
influenzae y bacterias anaeróbicas productoras de
betalactamasas. Estas mordeduras pueden complicarse
con celulitis, artritis séptica, osteomielitis y sepsis.
Manejo
1. Historia clínica: similar al manejo general de heridas.
2. Examen físico: además de lo descrito inicialmente, es
necesaria la cuidadosa exploración de la herida para
excluirelcompromisodeestructurasanatómicasprofundas
como las articulaciones. Es necesario complementar el
examen físico con radiografías en caso de mordeduras
en manos o cercanas a una articulación o hueso.
3. Irrigaciónabundanteconsoluciónsalinanormalosolución
deRingerlactatobajoaltapresiónconunaagujadecalibre
18 o 19 o la punta de un catéter y una jeringa grande.
El tejido desvitalizado o necrótico debe ser desbridado.
4. Cierre de la herida: como principio, las heridas por
mordeduras se dejan a cierre por segunda intención
una vez completada la irrigación y desbridamiento. Sin
embargo, en cara es necesaria la sutura de las lesiones.
5. Terapiaantibiótica:ladecisióndecomenzareltratamiento
antibióticoesclaraenaquelloscasosconmanifestaciones
de infección. Sin embargo, hay controversias en cuanto
a la administración de profilaxis antibiótica. En casos
de heridas de perros cuando a la herida se asocia
lesiones penetrantes o se intentara cierre (cara), el
riesgo de infección es mayor y se debe dejar esquema
antibiótico. Del mismo modo, todas las mordeduras
por humanos deben recibir antibioticoterapia, tanto por
los agentes como por el tiempo de retraso en consulta
en estos casos, que aumenta el riesgo de infección.
El agente más apropiado para el manejo es uno que
cubra anaerobios y aerobios, por ejemplo, Amoxicilina +
Ácido Clavulánico por al menos 7 días de tratamiento.
6. Vacunación antirrábica: cuando el animal que produjo
la mordedura está vacunado, está indicada solo la
observación de este. Si el animal no está vacunado o la
mordedura fue en la región de cabeza o cuello, se debe
vacunar. La vacuna se coloca vía subcutánea según
calendario los días 0-3-7-14-28.
Infecciones Cutáneas Asociadas
Las infecciones de piel y partes blandas involucran a la piel,
tejido subcutáneo y la fascia. Se presentan en un espectro
amplio de cuadros clínicos que van desde la celulitis hasta
la fascitis necrotizante.
• Infeccionescutáneasnocomplicadas:seincluyelacelulitis,
foliculitis, furunculosis, abscesos y heridas infectadas.
El manejo consiste en aseo, drenaje y desbridación
de tejido, según sea el caso y tratamiento antibiótico.
• Infecciones cutáneas complicadas no necrotizantes:
a diferencia de las infecciones no complicadas, estas
son más profundas haciendo necesario siempre manejo
quirúrgico. Ejemplos de estas lesiones son las quemaduras
infectadas, úlceras infectadas, infecciones en pacientes
diabéticos, abscesos complicados e infecciones profundas.
• Fascitis necrotizante: es una respuesta inflamatoria a
infecciónquesedesarrollademanerarápida yprogresiva
en la fascia. Esta respuesta inflamatoria a nivel de la
fascia genera trombosis de los vasos dérmicos, lo que
causa necrosis del tejido subcutáneo que se encuentra
sobre la infección. Se clasifican en 2 tipos según la
bacteriologíadelosmismos.Lafasceitis necrotizantetipo
I ocurre por infección polimicrobiana teniendo componente
aeróbico yanaeróbicoenel 75% de loscasos. Las fascitis
necrotizantes tipo II ocurren por infección por Strepto
grupo A (en ocaciones asociado a S. Aureus). En el
manejo lo principal es identificar los cuadros de fasceitis
necrotizante.Ensegundolugar,realizarmanejoquirúrgico
precoz,drenartodoslosabscesos ydesbridarlasúlceras.
El desbridamiento puede ser mecánico, químico, autolítico
(ver apósitos ycuración avanzada), junto con la remoción
quirúrgica del tejido necrótico.
42
Bibliografía
1. Calderón W, Heridas y suturas. En: Calderón W. Libro de Cirugía plástica. Ed. Soc. Cír. de Chile, agosto 2001.
2. Artigas R. Clasificación y manejo de las heridas. Parke Davis Chile, Santiago 1979.
3. Vacunación Antirrábica en Humanos. Departamento de vacunas e inmunizaciones, Ministerio de Salud. Chile 2014.
4. Aziz H, Rhee P,Pandit V, Tang A, Gries L, Joseph B. The current concepts in management of animal (dog, cat, snake, scorpion)
and human bite wounds: Journal of Trauma and Acute Care Surgery. 2015 Mar;78(3):641–8.
5. Tabaka ME, Quinn JV, Kohn MA, Polevoi SK. Predictors of infection from dog bite wounds: which patients may benefit from
prophylactic antibiotics? Emerg med J 2015; 0: 1-4.
6. May AK. Skin and soft tissue infections. Surg Clin North Am. Apr 2009; 89(2):403-20, viii.
7. Napolitano LM. Severe soft tissue infections. Infect Dis Clin North Am. Sep 2009; 23(3):571-91.
8. Stevens DL, Bisno AL, Chambers HF, Everett ED, Dellinger P,Goldstein EJ. Practice guidelines for the diagnosis and management
of skin and soft-tissue infections. Clin Infect Dis. Nov 15 2005;41(10):1373-406.
43
1.5 Curación de heridas y apósitos
Quinteros JP, Arteaga MJ, Fontbona M.
Introducción
El manejo de las heridas requiere que el profesional de la
salud conozca la fisiología y fisiopatología de la cicatrización
de heridas que describimos previamente; de esta forma, se
puede realizar un manejo con base científica.
La curación se puede definir como el conjunto de técnicas
que favorecen la aparición de cicatrización en una herida,
hasta lograr su cierre. La curación puede tener como objetivo,
utilizada sola o con otra modalidad de tratamiento, el cierre
completo de la herida. En segunda instancia, las curaciones
permiten la preparación de la herida para cirugía, teniendo
un rol como terapia adyuvante.
Tipos de Curaciones
De acuerdo con el tipo de apósitos y el abordaje diagnóstico
y terapéutico que se hace a las heridas, podemos identificar
dos tipos de curaciones: tradicional y avanzada.
La curación tradicional (CT) es aquella se realiza en ambiente
seco,usamaterialesdebajacapacidaddeabsorciónyconalta
capacidaddedesecación. Estosmateriales sonpasivos, enel
sentido de que no interfieren con el proceso de cicatrización
y, peor aún, lo lentifican y complican. Varios estudios han
demostrado que estosmateriales disminuyen lacicatrización,
aumentan los costos, aumentan la incidencia de infección y
producen más dolor. Se caracterizan por ser de frecuencia
diaria, usar tópicos (antisépticos, antimicrobianos) y ser
dolorosas, ya que en cada evento de curación se produce
remoción cruenta de tejido sano.
La curación avanzada se basa en mantener un ambiente
húmedo fisiológico, en lo posible no usan tópicos, utiliza
apósitos de alta tecnología para estimular el microambiente
de la herida y de esta forma favorecer la cicatrización. Su
frecuencia va a depender de las condiciones locales de la
herida.
La curación avanzada de heridas, al ser más espaciada y
utilizar apósitos de alta tecnología y fáciles de aplicar, ha
demostradosermáscómodaparaelpacienteyelprestadorde
salud.Constituyeunaformadetratamientoavaladaporbuena
evidencia. Y adicionalmente, otros estudios han demostrado su
mayorcosto-efectividadenrelaciónconlacuracióntradicional,
por tanto, mayor capacidad de ahorro.
Actualmente, la forma ideal de manejar heridas crónicas es
por medio de la curación avanzada. En el manejo de heridas
agudas, se intenta un cierre primario, ya sea con suturas u
otros medios de afrontamiento (steri strip, histoacryl). En
estos casos se utilizan apósitos tradicionales (parte de la CT)
comoproteccióndelasuturaantelacontaminaciónambiental.
Cuando las heridas no permiten cierre primario, por ejemplo,
heridas abrasivas, actualmente se utilizan los principios de
la curación avanzada para su manejo. Se utilizan apósitos
tradicionales y activos avanzados de bajos costo, intentando
dejar una interfaz que evite la adhesión del apósito tradicional
a la herida.
44
Apósitos
Son el conjunto de materiales de los que disponemos para
favorecer el proceso de cicatrización. Existen varios tipos y
clasificaciones, pero para fines prácticos los diferenciaremos
según su localización y modo de acción.
Segúnsulocalizaciónseclasificanenprimariosysecundarios.
El apósito primario es aquel que está en contacto directo
con la herida y el secundario, aquel que protege y sostiene
al apósito primario.
Según su modo de acción, los apósitos se clasifican en
pasivos y activos.
Apósitos pasivos
Son aquellos apósitos que no interactúan con la herida,
tienen poca capacidad de absorción y alta capacidad de
desecación, y favorecen la infección de no ser cambiados de
forma periódica. Son los utilizados en la CT, constituidos de
materialdeorigennaturalquedestruyeeltejidodegranulación.
El más representativo de este grupo es la gasa tejida o
prensada. Dentro de los apósitos pasivos se encuentran:
Gasa
• Tejida: hecha de material natural (algodón) de alta
adherencia,malaabsorciónyaltoenresiduos.Esútilpara
rellenar cavidades. Su duración máxima es de 24 horas.
• Prensada: conformada por material sintético (celulosa
más poliéster), menor adherencia y mejor absorción que
lagasatejida.Esútilparaprotegereltejidodegranulación.
Su duración máxima es de 48 horas.
Apósito tradicional
Algodón envuelto en gasa (tejida o prensada). Posee alta
adherenciayabsorciónheterogénea.Eselapósitosecundario
por excelencia.
Espumas
Moltopren o poliuretano. Posee alta adherencia, es útil en
lesiones exudativas abundantes, pero por un tiempo menor
a 48 horas. Siempre requiere de un apósito secundario.
Apósitos activos
Son los utilizados en la curación avanzada y son activos
porque interactúan con la herida favoreciendo su proceso de
cicatrización. Dentro de este grupo encontramos los siguientes:
Tull o mallas de contacto
Son gasas tejidas o prensadas de malla ancha embebidas en
petrolato. No se adhiere, protege el tejido de granulación y es
adaptable. Se debe curar cada 48 horas si es de gasa tejida
y cada 72 horas si es de gasa prensada, porque se evapora
el petrolato y solo queda el efecto de la gasa.
Ejemplos de este tipo de apósito son: Jelonet®, Parafinet®
de gasa tejida y Adaptic® de gasa prensada.
Apósitos transparentes
Son apósitos poliméricos, transparentes, permeables al
vapor de agua, al oxígeno y al dióxido de carbono, pero
impermeable al agua y las bacterias. Los hay adhesivos y no
adhesivos. Protegen el tejido de granulación y desbridan el
tejido necrótico. Deben ser usados con extrema precaución
en heridas infectadas y no deberían usarse en lesiones con
exudado abundante, ya que son muy oclusivos. Por ser
transparentes, permiten visualizar fácilmente la herida,pero
no tienen capacidad de absorción.
Ejemplosdeestetipodeapósitosson:Bioclusive®(Johnson&
Johnson Medical, Arlington, TX), Op-Site® (Smith & Nephew,
Largo, FL), Tegaderm® (3M, Healthcare, St. Paul, MN, New
York, NY) y Mefilm® (Molnlycke Health Care, Gotenberg,
Sweden).
Espumas hidrofílicas
Están compuestas por hojas de poliuretano polimerizadas,
no adherentes y permeables a gases, con gran capacidad
de absorción por lo que manejan bien el exudado moderado
y abundante. Tienen la propiedad de expandirse y de
acomodarse a la morfología de diferentes tipos de heridas,
loquelashacemuydinámicas.Puedenserusadas enheridas
infectadas .
Como ejemplos están: Lyofoam® (Convatec, Princeton, NJ),
Allevyn® (Smith & Nephew, Largo, FL), Curafoam® (Kendall
Company, Mansfield, MA), Biopatch® (Johnson & Johnson
Medical, Arlington, TX), Polymem® rosado y negro (Ferris
Co.) y PermaFoam® (Hatmann-Uci Pharma).
Hidrogeles
Son polímeros de almidón, como el óxido de polietileno o los
polímeros de carboximetilcelulosa, más 80% de agua. Están
disponibles como gel o láminas; son útiles para desbridamiento
autolítico, heridas infectadas ypara favorecer la epitelización.
No absorben exudado. Se recomienda apósito transparente
como apósito secundario y curar cada 48 horas, en caso de
infección realizar curaciones cada 24 horas.
Algunos ejemplos son: Vigilon® (Bard, Murria Hill, NJ), Nu-
gel® (Johnson & Johnson Medical, Arlington, TX) y Tegagel®
(3M, Healthcare, St. Paul, MN, New York, NY).
45
Hidrocoloides
Están hechos de carboximetilcelulosa, gelatina y pectinas.
Se encuentran disponibles como pastas, polvos o láminas
adhesivas. Al contacto con la herida, el apósito se gelifica,
lo que favorece el ambiente húmedo en la herida y permite
la absorción del exudado; son impermeables al agua y a las
bacterias, aunque permiten la salida del vapor de agua desde
la herida al medio exterior. No deben ser usados en infección
por ser muy oclusivos. Producen una interfase gelatinosa
con la herida, que es de mal olor y no debe ser confundida
con infección.
Ejemplos de este tipo de apósitos son: Duoderm® (Convatec,
Princeton, NJ), Nu Derm® (Johnson & Johnson Medical,
Arlington, NJ), Comfeel® (Coloplast, Holtedam, Dinamarca)
y Cutinova® (Smith & Nephew, Largo, FL), entre otros.
Alginatos
Están compuestos por fibras polisacáridas derivadas de las
algas marinas cafés, con gran capacidad de absorción (hasta
20 veces su peso en agua). Están indicadas en heridas
con exudado abundante, con o sin infección, y también
poseen efecto hemostático por contener calcio. No deben
ser usados en heridas con poco exudado debido al alto riesgo
de desecarlas.
Algunos ejemplos son: Algiderm (Bard, Murria Hill, NJ),
Algosteril (Johnson & Johnson Medical, Arlington, TX), Nu
Derm Alginato (Johnson & Johnson Medical, Arlington, NJ);
Kaltostat (Convatec, Princeton, NJ) y Curasorb (Kendall
Company, Mansfield, MA).
Apósitos mixtos
Los apósitos mixtos son coberturas con diferentes niveles de
permeabilidad que combinan las características de distintos
tipos de apósitos. En este grupo se describen los siguientes
apósitos:
Antimicrobianos
Están diseñados para control de infección y carga bacteriana.
Son apósitos quese presentancomotelasdecarbónactivado
impregnadas en sales de plata, dentro de una funda de nailon
poroso, como elActisorb Plus® (Johnson & Johnson Medical,
Arlington, TX), o como películas no adherentes con plata,
como Atrauman Ag® (Hartmann-UciPharma Col.), o como
apósitos de carboximetilcelulosa con plata, comoAquacellAg
( Convatec, Princeton, NJ). Se utiliza la plata porque posee
ciertas características especiales que la hacen muy útil en el
manejo de heridas infectadas, algunas de estas son: acción
bactericida de amplio espectro, viricida, fungicida, propiedades
antiinflamatorias y neutraliza el mal olor.
Hidropolímeros
Son polímeros que poseen gran capacidad de absorción,
están hechos de moléculas de poliuretano que se expanden
al atrapar el exudado y de una cubierta impermeable de
polivinilo, que forma una barrera protectora. Son ideales para
el manejo ambulatorio de heridas grandes y muy exudativas.
Ejemplos de estos apósitos son: Tiell® y Tiell Plus® (Johnson
& Johnson Medical, Arlington, TX).
Apósitos de control de metaloproteinasas
Las metaloproteinasas son enzimas involucradas en
muchos procesos patológicos. Estas enzimas se encuentran
anormalmenteelevadasenlospacientesconheridascrónicas
y estancan el proceso de cicatrización, manteniendo las
heridas perpetuamente inflamadas. Existen apósitos para
disminuir estas enzimas y estimular el proceso de cicatrización.
Como ejemplo está el Promogram® (Johnson & Johnson
Medical), compuesto de colágeno y celulosa oxidada que,
al contacto con el exudado de la herida, se convierte en gel;
las metaloproteinasas son inhibidas, se adhieren al apósito
y permiten que los factores de crecimiento actúen.
Terapias Complementarias
Además de los apósitos descritos, actualmente se dispone
de terapias que cumplen con un nivel de evidencia aceptable
para recomendar su uso en la práctica clínica, dentro de las
cuales encontramos terapia con uso de factores de crecimiento
y curación a presión negativa, siendo esta última una de las
más importantes en nuestro medio.
Curación a Presión Negativa
El primer artículo que describió el uso de dispositivo de
presión negativa para el manejo de heridas en pacientes se
publicó hace 13 años. Su mecanismo de acción se basa en
el uso de presión negativa o subatmosférica para el manejo
de heridas complejas, que estimula la aparición del tejido de
granulación y controla el exudado. La presión negativa sobre
las heridas produce aumento de la mitosis y angiogénesis,
lo que permite la contracción de la herida y la aparición de
tejido de granulación.
El sistema VAC (Vacuum-assisted closure) consta de un
conjunto de espumas de poliuretano con características
especiales yun sistema dereservorio que va conectado a una
máquina de succión que regula las presiones. Dentro de sus
indicaciones destacan: heridas agudas, crónicas, traumáticas,
46
dehiscentes, quemaduras de espesor parcial (en general
no), colgajos, úlceras e injertos. Su uso está contraindicado
en: heridas con exposición de vasos sanguíneos, neoplasia
expuesta, osteomielitis, sobre tejido necrótico y en fístulas
no exploradas.
Bibliografía
1. Andrade P,Sepúlveda S, González J. Curación avanzada de heridas. Revista Chilena de Cirugía. 2004; 56: 396-403
2. MINSAL: Programa de Salud del Adulto. Serie de Guías Clínicas. Manejo y tratamiento de las Heridas y Ulceras. Guía 4, 2000.
3. George Y,Herman U. Antibacterial properties of silver. Am J Infect Dis. 1998; 20; 195-200.
4. L. C. Argenta and M. J. Morykwas, “Vacuum-assisted closure: a new method for wound control and treatment: clinical experience,”
Annals of Plastic Surgery, vol. 38, N.° 6, pp. 563–577, 1997.
5. Vranck M, Slama N, Preuss S. Wet wound healing. Plast Reconstruct Surg. 2002; 110: 1680.
6. Thorne C. Techniques and principles in plastic surgery. En Thorne C, editor en jefe. Grabb and Smiths’s Plastic Surgery séptima
edición. Estados Unidos de America: Lippincott Williams & Wilkins; 2014, pp. 61-126.
47
1.6 Suturas
Quinteros JP, Arteaga MJ, Fontbona M.
Introducción
Dentro de las alternativas que existen para facilitar el cierre
de las heridas está la utilización de materiales de sutura.
Podemos definir sutura como cualquier material que utilicemos
para favorecer la cicatrización de una herida mediante la
aproximación de los bordes de la misma, manteniéndolos
unidos y disminuyendo la tensión entre estos.
Es asíque del puntode vista teórico elmaterialidealdesutura
debería contar con las siguientes características:
• Estéril.
• Elevada resistencia a la tracción.
• Flexible.
• Pequeño calibre y monofilamento.
• Atraumático.
• Inerte (no debe generar respuesta alérgica ni ser
tóxico).
• Mantener su fuerza tensil el tiempo suficiente para que
el tejido cicatrice.
• Absorbible por el organismo.
• Seguridad en los nudos.
• Que entregue resultados predecibles.
La fuerza tensil consiste en la capacidad de la sutura para
mantener los tejidos unidos, es una medida decreciente y se
expresa en porcentaje de fuerza y en días. La absorción de
una sutura consiste en el tiempo (días) en que desaparece
completamente el material de sutura, este proceso se basa
en dos fenómenos, hidrólisis o proteólisis.
Las propiedades de cicatrización varían entre dos tejidos y
es necesario conocerlas para estimar el tipo de sutura que
debemos utilizar:
Tejido Tiempo de cicatrización (días)
Piel 5-7
Mucosa 5-7
Tejido subcutáneo 7-14
Peritoneo 7-14
Fascia 14-28
48
Factores que alteran la cicatrización:
Factores del Paciente Factores de la cirugía
Edad y peso Tipo de Tejido
Estado nutricional Longitud y dirección de la incisión
Deshidratación Técnica de disección
Irrigación de tejidos Manipulación de tejidos y hemostasia
Respuesta inmunológica del paciente Respuesta tisular del tejido
Enfermedades crónicas Técnica de sutura
Neoplasias Tensión de la herida
Clasificación de materiales de sutura
• Según su origen: naturales y sintéticos
• Según su permanencia en los tejidos: absorbibles y no
absorbibles.
• Según la forma en que está constituida la sutura:
monofilamento y multifilamento.
Materiales de sutura naturales absorbibles:
La principal fuente de estos materiales es la serosa intestinal
de bovino. El nombre comercial más utilizado y el mejor
exponente es el catgut.Al poseer proteínas exógenas genera
gran respuesta inflamatoria. El catgut simple mantiene su
fuerza tensil de 7-14 días y se reabsorbe en un periodo de
70 días. La adición de partículas de cromo prolonga la fuerza
tensil (hasta 28 días), sin embargo, la respuesta inflamatoria
del organismo tiende a generar tejido granulatorio en relación
con la sutura.
Materiales de sutura naturales no absorbibles:
Entran en esta categoría el algodón, lino, seda y acero. Tanto
el lino como el algodón ya no son utilizados y son parte de la
historia, esto principalmente por la gran reacción inflamatoria
y granulatoria que generaban en los tejidos. La seda es la
única que aún permanece en uso, no genera tanta respuesta
inflamatoria como el lino o algodón, pero también tiene el
riesgo de desarrollar granulomas. Estas fibras vegetales se
componen de suturas multifilamento, lo cual facilita que las
bacterias se alojen entre los filamentos. El acero por origen
también es natural, pero a diferencia de las fibras vegetales,
este es inerte y posee inmensa fuerza tensil, su uso está
limitado a la ortopedia y el cierre de esternotomías (es decir,
en la manipulación de tejido óseo).
Materiales de sutura sintéticos absorbibles:
Dentro de los multifilamentos el ejemplo más común es el
ácido poliglactínico (Vicryl®). Este tipo de sutura se acerca a
las características de la sutura ideal, posee gran fuerza tensil
(que se mantiene hasta por 30 días), no genera granulomas
y tiene mínima reacción inflamatoria. Sin embargo, el hecho
de ser multifilamento genera un efecto de “sierra” al momento
del pasar por los tejidos. Tiene absorción completa de 90 a
120 días. Dentro de los monofilamentos existen diferentes
productos como la polideoxanona (PDS®), el poligliconato
(Maxon®) y la poliglecaprona (Monocryl). Estos materiales
puedenmantenersuresistenciatensil cercanaa30%pasado
los 30 días. Los monofilamentos tienen mayor suavidad en
su paso por tejidos, pero son más complejos de manejar,
pues el material presenta memoria (excepto elMonocryl®).
Materiales de sutura sintéticos no absorbibles:
Tienen una altísima resistencia tensil, suavidad en su manejo
y mínima reacción inflamatoria tisular asociada. Los poliéster
(Ethibond®) son multifilamentos por lo que tienen la desventaja
de poseer capilaridad y ser colonizados. El polipropileno
posee gran resistencia y mínima reacción tisular, incluso
en presencia de infección. Por último, están las poliamidas
(Nylon®), que poseen gran capacidad de memoria, pero son
inertes y tienen mínima reacción tisular.
49
CARACTERÍSTICAS MULTIFILAMENTO MONOFILAMENTO
Naturales absorbibles Catgut -
Naturales no absorbibles Lino, algodón, seda Acero
Sintéticos absorbibles
Ac. poliglactinico,
Ac. Poliglicólico.
Polideoxanona, poligliconato,
poliglecaprona.
Sintéticos no absorbibles Poliester Polipropileno, poliamidas.
Nomeclatura de medidas de sutura
y agujas
Los materiales de suturas tienen diferentes tamaños
según el tejido o uso que se les quiera dar. El sistema de
nomenclatura va desde el 7 hasta el 11-0, siendo el 7 el
más grueso descendiendo hasta el 0, y luego los números
van incrementando nuevamente, pero aso-ciados a un cero
(mientrasmayorelnúmerodecerosmásdelgadaeslasutura).
Como referencia un cabello humano tiene un diámetro de
0.1mm y equivale a una sutura 7-0.
Agujas: en la actualidad las agujas vienen con la sutura
incorporada, de esta forma sus partes son la cabeza
(donde se une la sutura), el cuerpo y la punta. La punta, en
líneas generales, se puede clasificar según su forma en el
corte trasversal, pudiendo ser traumáticas o atraumáticas.
Existen otras variedades que son subclasificaciones de esta
separación. El cuerpo posee un radio, diámetro y longitud,
haciendo el símil con partes de una circunferencia. De esta
forma existen curvaturas de ¼, 3/8, ½, y 5/8 de un círculo.
Uso del material de sutura
Son múltiples los factores por considerar en la selección del
material de sutura, tanto de la cirugía como del paciente.
Hay dos factores que deben ser considerados dentro de la
toma de decisión:
Factor cirujano: siendo este el operador y el ejecutor de una
sutura es importante que el cirujano tenga un conocimiento
de los tiempos de cicatrización de los tejidos y de las pro-
piedades de las suturas antes de tomar la decisión. De esta
forma, se generan preferen-cias personales que van de la
mano con la experiencia quirúrgica.
Factor económico: distintos centros de salud tienen diferentes
presupuestosyaccesoamaterialesdesutura,locualreducirá
o ampliará la gama de opciones que el cirujano tenga a su
disposición al momento de realizar una sutura.
Es asícomo,porejemplo,paraunmismotipodeherida enpiel
podemos considerar una sutura reabsorbible monofilamento,
pero también podemos usar un material no reabsorbi-ble
monofilamento, teniendo en consideración el retiro posterior
delmaterial.Porestasra-zonesesquenoexistenindicaciones
absolutas para una sutura y un tejido en particular. Lo que si
existen son lineamientos generales que se pueden tener en
consideración cuando se elija el material de sutura.
50
TEJIDO CARACTERÍSTICAS MATERIAL DE SUTURA
Epidermis Delgada, densa, firme,
depende del cierre de la
dermis.
Monofilamento absorbible o
no absorbible.
Dermis Vascularizada, tejido denso,
lenta recuperación de fuerza
tensil.
Monofilamento absorbible
o multifilamento absorbible
incoloro
Tejido subcutáneo Friable, pobremente irrigado.
Cierre de fascia superficial
(scarpa).
Multifilamento absorbible.
Fascia muscular Denso, fibroso conformando
láminas de tejido. Fuerza tensil
40% (mes) 65%(3 meses) 80% (9
meses).
Monofilamento absorbible grueso,
multifilamento absorbible. Mo-
nofilamento no absorbible.
Puntos de Sutura
Punto simple
Con las pinzas de disección se eleva uno de los bordes de la
herida, mientras que con el portaagujas se introduce la aguja
desde el exterior hacia el interior (de dermis a hipoder-mis).
Se tira del extremo del hilo con la aguja hasta dejar un cabo
distal corto. En el otro borde se realiza la misma operación,
pero pasando el hilo desde el interior al exterior. Los puntos
deben ponerse a unos 4 o 5 milímetros del borde de la herida
y se deben espaciar entre ellos unos 6 a 8 milímetros.
Punto Simple
51
Punto intradérmico
Se trata de unir la piel (dermis), sin sacar el hilo al exterior. Desde la profundidad de la herida, se introduce la aguja para
que salga por la dermis, debajo de la superficie cutánea. Se vuelve a introducir por el otro labio de la herida, pero en esta
ocasión desde arriba hacia abajo. Si utilizamos hilo reabsorbible, se anuda dejando los nudos por debajo de la hipodermis.
Cuando utilizamos hilo no absorbible (monofilamento 2-0 o 3-0), los extremos que-dan por fuera de la piel. Cuando se vaya
a retirar la sutura, se corta uno de los cabos a nivel de la piel y se saca tirando del otro extremo.
Punto Intradérmico
Punto Donati
Se pasa la aguja por la herida, de un extremo al otro a unos 0,5 cm del borde. A otros 0,5 cm del punto de salida, se vuelve
a introducir la aguja para pasar de nuevo a través de to-da la herida hasta el punto origen, pero de forma más profunda. Se
mantiene la misma dirección en los cuatro puntos.
Punto Donati
52
Sutura de esquina
Se introduce la aguja a través de la dermis por el lado contrario al colgajo, a unos 0,5 cm de la esquina de la herida. La
aguja se lleva a la punta del colgajo por la hipodermis y se atraviesa la herida hasta salir por la dermis del lado opuesto al
punto de entrada. Así, los dos cabos salen al exterior de la herida por la zona opuesta al colgajo, y es aquí donde se realiza
el nudo. En el resto de la herida se usan los puntos discontinuos habituales.
Punto deEsquina
53
Nudo Quirúrgico Cuadrado
Nudo quirúrgico simple con las manos
Primera alternativa (anudando con mano derecha):
1. Se sostiene el hilo corto entre el pulgar y el dedo medio quedando el hilo sobre la cara lateral del índice (mano derecha).
2. Colocar el hilo largo (mano izquierda) en la cara medial del hilo que se sostiene con la mano derecha.
54
3. Flectar el índice derecho enganchando el hilo largo por palmar. Extensión parcial del índice derecho para que su cara
medial encuentre el hilo corto. Extensión completa del índice derecho, liberando el hilo corto para sujetarlo entre el dedo
índice y medio.
4. Ajustar el nudo traccionado los hilos y conduciendo el nudo con el índice.
55
Segunda alternativa (anudando con mano derecha):
1. Palma derecha hacia arriba, sosteniendo el hilo corto entre el índice y el pulgar.
2. Posicionar el hilo largo sobre la cara lateral del dedo medio derecho cruzando el hilo largo por sobre el corto a nivel de
los dedos anular y meñique. Flexionar el dedo medio derecho para enganchar el hilo largo.
56
3. Continuar la flexión del dedo medio derecho para enganchar el hilo corto con el dorso del dedo. Extensión del dedo medio
derecho asegurando el hilo corto entre el dedo medio y anular derecho. Se suelta el hilo corto desde el pulgar e índice.
4. Tracción de los hilos.
57
Nudo quirúrgico simple con portabisturí
Al hacer un nudo con el porta, se pasa el punto dejando el
cabo distal corto. Soltamos la aguja y cogemos el extremo
del hilo con la aguja, con la mano izquierda (primera imagen).
Colocamos el porta encima del hilo (extremo con aguja) y
rodeamos el porta con el hilo dos veces. Se toma el cabo
distal del hilo con la punta del porta y pasamos el extremo
del hilo a través del lazo para hacer la primera lazada. Se
aprieta la lazada cruzando las manos (segunda imagen). A
continuación, se repite otra lazada (rodeando el porta con el
hilo en dirección opuesta al nudo previo) con el porta sobre
el mismo extremo, pero se aprieta sin cruzar las manos y así
sucesivamente. Por lo general son 3 veces en total que se
realiza la maniobra.
58
Bibliografía
1. Rappaport J. Materiales de sutura. En Burdiles P.Fundamentos del cuidado quirúrgico. Santiago, Chile: Mediterráneo; 2011, pp.
176-190.
2. Buck D. Wound Care. En Thorne C, editor en jefe. Grabb and Smiths’s Plastic Surgery. Séptima edicion. Estados Unidos de
América: Lippincott Williams & Wilkins; 2014, pp. 171-222.
3. Trott A. Instruments and suture materials. En Trott A. Wounds and Lascerations Emergenct Care and Closure. Tercera edición
Editrial Estados Unidos de América: Elservier Mosby; 2005, pp. 93-106.
4. Catálogo de suturas reabsorbibles de la empresa Ethicon de Johnson & Johnson disponible en: http://www.ecatalog.ethicon.com/
sutures-absorbable.
5. Catálogo de suturas no absorbibles de la empresa Ethicon de Johnson & Johnson disponible en: http://www.ecatalog.ethicon.
com/sutures-non-absorbable.
6. Trott A. Basic laceration repair: Principles and Techniques. En Trott A. Wounds and Lascerations Emergenct Care and Closure.
Tercera edición Editrial Estados Unidos de América: Elservier Mosby; 2005, pp. 119-134.
7. Giddings F. One-Handed Square Knot. En Giddings F. Surgical Knots and Suturing Techniques. Segunda edición. Fort Collins
Colorado: Giddings Studio Publishing; 2002, pp. 7-12.
59
1.7 AbordajesQuirúrgicos
Werner K, Arteaga MJ, Devaud N.
La elección de la vía de abordaje en cualquier cirugía es
fundamental para la adecuada exposición del campo quirúrgico
que permita asegurar el control total del procedimiento
realizado logrando el éxito de la cirugía y un posoperatorio
favorable.
Elabordajedebeconsiderarlapatología,latécnicaquirúrgica,
la exposición y comodidad del cirujano.
Abordajes Torácicos
ANATOMÍA DE LA PARED TORÁCICA
La pared torácica está formada por la parrilla costal, los
músculos intercostales, fascias, tejido subcutáneo y piel.
Posee una forma abovedada que proporciona rigidez y
protección a los órganos intratorácicos.
La caja torácica incluye 12 pares de costillas y cartílagos
asociados, 12 vértebras torácicas y el esternón. Los espacios
intercostales son aquellos que separan las costillas entre sí y
se denominan según la costilla que forma el borde superior
del espacio. Estos están ocupados por músculos y el paquete
vasculonervioso dispuesto adyacente al borde inferior de las
costillas.
Losmúsculosdelaparedtorácicason:pectoralmayor,pectoral
menor, serratos, elevadores de las costillas, intercostales,
subcostales y transverso del tórax.
En cuanto a la inervación, la pared torácica posee 12 nervios
espinalestorácicosquesedividenenramosanterioryposterior.
Los anteriores de T1-T11 forman los nervios intercostales y
el ramo de T12 el nervio subcostal. Los ramos posteriores
van al dorso.
Porúltimo,lairrigaciónarterialdelaparedtorácicaprovienede
laaortatorácicamediantelasarteriasintercostalesposteriores
y subcostal, de la subclavia por medio de la torácica interna
(mamaria interna) y de la arteria axilar a través de la torácica
superior y lateral.
TORACOTOMÍAS
Las toracotomías son incisiones utilizadas para acceder
a los órganos torácicos. Una incisión adecuada provee
exposición satisfactoria, mientras que minimiza el daño de
costillas, cartílago, músculos y nervios intercostales. Las
toracotomías son procedimientos dolorosos, por lo que es
necesario considerar analgesia perioperatoria 8,10,11.
El dolor posoperatorio, además del acto quirúrgico asociadoa
la toracotomía, produce un fenómeno restrictivo respiratorio,
locualpuedeconduciracomplicacionesgravesycondicionar,
por tanto, la recuperación del paciente. Es por ello que en
la planificación de una cirugía a través de una toracotomía
debe incluirse pruebas respiratorias funcionales como la
espirometría.
60
• Incisión anterior: Provee acceso ilimitado para el hilio
ipislateral (10). Se usa ocasionalmente para acceder
al pericardio, biopsia pulmonar de lobos inferiores. El
paciente se pone en posición supina con elevación en
el lado que será intervenido. Se realiza una incisión
inframamaria desde el borde del esternón hasta la
línea axilar anterior para ingresar al tórax por el cuarto
o quinto espacio intercostal. El pectoral mayor es
dividido hacia superior de la incisión para prevenir
solapamiento de las suturas. Es necesario tomar en
cuenta la cercanía de la arteria mamaria interna con
el esternón, para evitar sangrado. El pulmón ipsilateral
debe ser desinflado antes de ingresar al tórax 9,10,11.
• Incisión posterolateral: Es utilizada en cirugía de
pulmón y mediastino, en el lado izquierdo es usada
para procedimientos de aorta descendiente y en el lado
derecho ofrece acceso a tráquea intratorácica y esófago
alto y medio. La incisión es de gran tamaño, comenzando
por posterior en el borde inferior de la escápula hasta
el surco mamario por anterior. Es necesario movilizar
el latissmus dorsi hacia inferior para una recuperación
funcional máxima. La división intercostal es amplia desde
anterior a posterior. Es posible dejar el serrato anterior
intacto,alretraerlohaciaarribayadelante.Paraaumentar
la exposición, es posible retraer un segmento corto de
costilla.
Complicaciones:ademásdeneumotórax,lascomplicacionesproducidasporlastoracotomíasincluyen:infección,hemorragia
y falla respiratoria. El dolor posoperatorio es común y puede ser intenso, llegando a requerir opioides, y puede interferir con
la recuperación de la función respiratoria9.
61
Abordajes Abdominales
ANATOMÍA DE LA PARED ABDOMINAL
Límites
• Superior: proceso xifoides y reborde costal de la 7.a a
10.a costillas.
• Inferior: borde superior de huesos pélvicos.
Estructuras de la pared
• Piel.
• Tejido subcutáneo (fascia de Scarpa).
• Músculos.
• Aponeurosis.
• Fascia transversa.
• Tejido preperitoneal.
• Peritoneo.
Músculos
• Recto abdominal.
• Oblicuo externo.
• Oblicuo interno.
• Transverso abdominal.
• Piramidal*.
62
Anatomía de la pared abdominal
63
Inervación: Tanto la piel como los músculos de la pared
abdominal anterior están inervados por los nervios
toracoabdominalesdeT7-T12yL1.DeT7aT11corresponden
a nervios intercostales, T12 corresponde al nervio subcostal,
y L1 se expresa mediante los nervios iliohipogástrico y nervio
ilioinguinal.
Irrigación:
• Superficial: Arteria musculofrénica por superior;
arteria epigástrica superficial y arteria circunfleja
ilíaca superficial por inferior.
• Profunda: Arteria epigástrica superior, arterias
intercostales 10 y 11 por lateral, y arterias epigástrica
inferior y circunfleja ilíaca profunda por inferior.
Reparos por considerar:
• Línea alba: Es la fusión medial de la vaina superficial
y profunda del musculo recto abdominal. Esta vaina se
compone de las aponeurosis de los músculos oblicuo
externo, oblicuo interno y transverso abdominal. Va
desde el proceso xifoides hasta la sínfisis púbica.
• Línea semilunar: Límite músculo aponeurótico del
músculo transverso. Posee una forma curva cóncava
hacia adentro.
Inervación: Tanto la piel como los músculos de la pared
abdominal anterior están inervados por los nervios
toracoabdominalesdeT7-T12yL1.DeT7aT11corresponden
Es posible extender la incisión hasta el proceso xifoides
y el pubis para aumentar la exposición de la cavidad
abdominal. La correcta ubicación de esta incisión permite
su uso para cualquier cirugía intraabdominal. Una de
sus ventajas frente a la incisión de línea media es la
menor incidencia de hernias o dehiscencia. Sus mayores
desventajas son que requiere mayor tiempo para su
realización y presenta mayor riesgo de daño de nervios
y vasos sanguíneos.
• Pararecto(incisióndeBattle):Serealizaunaincisiónen
el borde lateral del recto, el cual es retraído lateralmente.
Estaincisiónesdeusoinfrecuenteparaapendicectomíay
drenajesdeabscesos pélvicos. Su usoes limitado porque
causa denervación del recto, resultando en parálisis y,
finalmente, en atrofia muscular. La extensión de esta
incisiónnodebesermásdedosdermatomosparaprevenir
debilidad de la pared abdominal.
LAPAROTOMÍAS
Verticales:
• Línea media: Provee un acceso rápido y simple a la
cavidad abdominal, incluido el retroperitoneo. En esta
ubicación solo hay ramas terminales de vasos y nervios,
por lo cual se minimiza el riesgo de hemorragia yde lesión
nerviosa5. Se realiza una incisión en la línea media,
que anatómicamente corresponde a la línea alba, a la
altura requerida según el sitio que se quiera intervenir.
Se debe atravesar piel, tejido subcutáneo, línea alba,
grasa periperitoneal y peritoneo. A nivel supraumbilical
da acceso a hiato esofágico, esófago abdominal, nervio
vago, estómago, duodeno, vesícula biliar, páncreas y
bazo. A nivel infraumbilical provee buena exposición
para colon sigmoides, recto y órganos pélvicos. Una de
sus mayores ventajas es que se puede extender tanto
hacia arriba como hacia abajo para mayor exposición.
• Paramediana: Es una incisión vertical a 2,5-4 cm de la
línea media. Se debe atravesar piel, grasa subcutánea,
lámina anterior de la vaina de los rectos, luego se
divulsiona el recto lateral y, finalmente, se atraviesa la
lámina posterior de la vaina de los rectos y el peritoneo.
Laparotomías verticales
64
Transversas:
Son incisiones en sentido transverso al abdomen y se
clasifican según su ubicación respecto al ombligo: supra o
infraumbilical. La incisión atraviesa piel, tejido subcutáneo,
capa muscular (que es variable según el sitio operatorio),
grasa periperitoneal y peritoneo. Su tamaño y ubicación
dependendelprocedimientoporrealizar.Tienencomoventaja
la posibilidad de extenderse o agregarse una incisión vertical
para mejor exposición de la cavidad.
• Pfannenstiel: Generalmente, se usa para procedimientos
ginecológicos y en hombres para procedimientos
urológicos. Se realiza una incisión transversa que
comienza en las crestas interespinosas, con su centro
a 5 cm de la sínfisis del pubis. Se atraviesa piel, tejido
subcutáneo, lámina anterior de vaina de los rectos, se
divulsiona el recto abdominal hacia lateral y el peritoneo
es abierto verticalmente en la línea media, siempre res-
petando la vejiga. La exposición es limitada a la pelvis,
por lo que no debe usarse esta incisión cuando podría
ser necesario un procedimiento fuera de ella.
• Rockey-Davis: Usada principalmente para
apendicectomías o cecostomías con un resultado más
estético que la incisión de Mc. Burney. Se toma como
referencia el punto de Mc Burney, unión entre 1/3 lateral
y 2/3 mediales de una línea trazada entre el ombligo y
la cresta ilíaca superior. Se escinde de forma transversa
la piel, tejido subcutáneo y la aponeurosis del músculo
oblicuoexterno.Losmúsculosoblicuointernoytransverso
son separados en dirección de sus fibras. Finalmente, se
abrelafasciatransversayelperitoneosegúnlaexposición
necesaria para realizar el procedimiento.
Laparotomías transversas
65
Oblicuas:
• Mc Burney’s: Es una incisión oblicua localizada en el
punto de Mc Burney. Se atraviesa piel, tejido subcutáneo,
luego se separan las fibras de los músculos oblicuo
externo,oblicuo interno ytransverso abdominal. Lafascia
transversayelperitoneosonescindidosenformaparalela
a la incisión. Este abordaje entrega excelente exposición
del cuadrante inferior ipsilateral, por lo cual es ideal
para apendicectomías. También es posible utilizarla para
drenaje de abscesos pélvicos. Es discutido su resultado
estético en comparación con la incisión de RockeyDavis.
• Subcostal unilateral (Koscher): Su mayor uso es para
cirugía vesicular, hepática y biliar en el lado derecho y
para esplenectomías en el lado izquierdo. La incisión
comienza 2,5-5 cm por debajo del proceso xifoideo y
se extiende hacia lateral aproximadamente 2,5 cm bajo
el reborde costal. La incisión no debe ser muy cerca
del reborde costal para poder reparar hernias que
podrían formarse. Se atraviesa la lámina anterior de
la vaina de los rectos y se divide el recto abdominal.
Los otros músculos son separados lateralmente. Se
atraviesa la fascia transversa y, finalmente, el peritoneo.
• Subcostal bilateral (Chevron): Permite excelente
exposición del hemiabdomen superior, por lo que es
práctica para gastrectomías totales, exposición de
ambas glándulas adrenales, resecciones hepáticas
mayores, cirugías pancreáticas y trasplante hepático.
Laparotomías Oblicuas
66
Abordajes Laparoscópico
El abordaje laparoscópico es un acceso mínimamente invasivo
alacavidadabdominalqueutilizaunlaparoscopio ypequeñas
incisiones. Sus principales beneficios son el menor tiempo
de recuperación y, por lo tanto, menor estadía hospitalaria,
menordolorposoperatorioymejoresresultadosestéticos.Por
otra parte, sus limitaciones se fundamentan principalmente
en el alto costo y disponibilidad de los equipos.
Para su realización se necesitan equipos e instrumentos
específicos y un adecuado entrenamiento del cirujano para
que su uso sea óptimo, adecuado y eficaz.
Pasos para cirugía laparoscópica
• Preparación del paciente: ayuno preoperatorio,
preparación intestinal de ser necesaria, vejiga vacía,
tomando la precaución de que el paciente orine antes
del pabellón o mediante una sonda Foley y una sonda
nasogástrica para evitar la distensión gástrica. Por
último, es fundamental un correcto posicionamiento del
paciente y de los equipos para llevar a cabo la cirugía.
• Distención del abdomen: el objetivo es crear una
cavidad real en el espacio virtual del abdomen. Esto se
logra mediante la insuflación controlada de la cavidad
abdominal con anhídrido carbónico que separa la pared
abdominal y colapsa el intestino. Para esto se utiliza
un neumoinsuflador electrónico que inyecta CO2 a una
presiónyflujopredeterminado,elcualmantienelapresión
intraabdominal (PIA) constante compensando las fugas
de CO2. Estos insufladores poseen sensores de PIA que
detienen automáticamente el flujo cuando se alcanza
la PIA establecida (PIA normal de 5 a 7 mm de Hg;
Objetivo de insuflación con CO2 de 12 a 15 mm de Hg).
Los principales riesgos de la insuflación de la cavidad
abdominal son: aumento de la presión de vía aérea,
disminución de la tensión arterial de oxígeno con
aumentodelCO2arterial,disminución delretorno venoso
(especialmente cuando se excede la presión de la vena
cava inferior = 12 mm de Hg), arritmias por hipercapnia,
embolia gaseosa y bradicardia por distensión del peritoneo.
En cuanto a la elección del gas por inyectar, se
prefiere el CO2 por sobre el O2 o N2O por ser 200
veces más difusible, poseer una rápida eliminación
a través de los pulmones y no ser combustible.
Generalmente, para la insuflación se utiliza la aguja de
Veressqueconsisteenunaagujabiseladayfilosade2mm
dediámetroqueposeeunsistemaretráctilqueretraelapunta
al ejercer presión sobre la pared abdominal. Esto permite
disminuir el riesgo de perforación incidental con la aguja.
• Acceso a la cavidad abdominal: puede ser abierto
o cerrado, este último corresponde a la insuflación
de CO2 con aguja de Veress y luego introducir el
trocar a ciegas. El acceso abierto consiste en la
entrada directa del trocar a la cavidad sin crear
neumoperitoneo.LatécnicamásutilizadaesladeHasson.
• Visualizacióndelacavidad:serequieredeunafuenteluz
(halógenaoxenón),unafibraópticaqueesunconductorde
luzformadoporun hazdefibras de vidrio,un laparoscopio
(variedad de ángulos: 0°, 30°, 45°), una cámara de video
y un monitor. Todos estos elementos permiten transmitir
la imagen al cirujano, el cual debe asegurarse de realizar
un balance de blancos antes de comenzar la cirugía.
• Procedimiento quirúrgico: existen diversos tipos de
instrumental laparocópico dependiendo de la cirugía que
se realiza. Los más utilizados son: pinzas (Maryland,
de agarre etc.), tijeras, ganchos de disección o Hook,
clipadoras, cánula de aspiración-irrigación, porta agujas.
67
Usos comunes de cirugía laparoscópica
• Colecistectomía (técnica americana): El primer trocar,
usualmente de 10 mm se coloca a través del ombligo,
aunqueestopuedevariarenpacientesobesosmórbidoso
con cirugías abdominales previas.Através de este trocar
se inserta un laparoscopio de 10 mm. Se puede utilizar
un laparoscopio con un ángulo de 30º para mejorar la
visión de la vía biliar. El segundo trocar, de 10 mm, se
inserta en el epigastrio sobre la línea media, angulado
hacia la vesícula.Estetrocar debecaerenellímiteinferior
del hígado. El tercer trocar, de 5 mm, generalmente es
colocado2-3cmdebajodelrebordecostalenlalíneamedio
clavicular. El cuarto trocar, de 5 mm, tiene una posición
variable, pero generalmente es colocado en la línea axilar
anterior centímetros por debajo del fondo de la vesícula.
Colecistectomía LaparoscópicaAmericana
• Colecistectomía (técnica francesa): Esta técnica tiene
algunas características que la diferencian de la técnica
americana.Laposicióndelpacienteesen“dobleacceso”,
el paciente en decúbito dorsal, con las extremidades
inferiores en abducción. Esto tiene como finalidad que la
posicióndelcirujanoseaentrelasextremidadesinferiores
del paciente. El primertrocar,10mm,seubicaenposición
umbilical, por donde se introduce el laparoscopio. El
segundo trocar, 5 mm, se ubica en flanco derecho, por
fuera de la vaina de los rectos a nivel de la línea umbilical.
El tercer trocar, 5 mm, se ubica en epigastrio a 1-2 cm
del reborde costal, a la derecha de la línea media. El
cuarto trocar, 10 mm, se ubica en flaco izquierdo, por
fuera de la vaina de los rectos a nivel de la línea umbilical.
Colecistectomía Laparoscópica Técnica Francesa
68
• Apendicectomía: Se inserta un trocar de 10 mm a nivel
umbilical y luego otros 2 trocares de 5 mm, uno en la
región suprapúbica y otro en fosa ilíaca izquierda lateral
a la vaina de los rectos. La ubicación de estos últimos
puedevariarsegúnlapreferenciadelcirujano.Laposición
ideal del paciente es en Trendelenburg y lateralizado a
la izquierda.
Apendicectomía Laparoscópica
69
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70
71
1.8 Drenajes Quirúrgicos
Marín D, Pizarro MJ, Court F.
Introducción
El drenaje es un dispositivo mediante el cual se busca dar
salida y evitar el acúmulo de secreciones desde una cavidad
natural o creada posterior a una intervención quirúrgica.
Su finalidad es servir como testigo de una posible filtración
o simplemente vaciar el contenido y evitar su acumulación y
posible complicación como un hematoma, seroma, absce-so,
bilioma, urinoma, etc.
El uso de drenajes está aprobado en múltiples condiciones
médicas y es controversial en otras. Nadie discute la real
necesidaddedrenarun neumotórax,hemotóraxounempiema
pleural, pero hoy en día dejar drenaje en una colecistectomía
resulta muy controvertido, pese a haber sido durante muchos
años un procedimiento habitual.
El drenaje si bien puede evitar posibles infecciones, también
puede ser la puerta de entrada a estas, de tal forma que
resulta muy importante el criterio y la experiencia del cirujano
en su uso.
Una vez producida una infección, el drenaje es la mejor
opción de manejo de una colección séptica. Así es como se
ha desarrollado la radiología intervencionista, método que
buscaevitarlareintervencióndeunpacienteconunacolección
séptica mediante colocación de un drenaje guiado bajo visión
de TAC, evitando así el daño de estructuras vecinas. Cuando
el drenaje se realiza mediante cirugía tradicional existen altas
probabilidades de daño no deseado de estructuras vecinas a
la zona de lacolección, provocando filtración de anastomosis,
sangramiento y fistulas por lesión de órganos en un terreno
muy inflamado.
Losdrenajesdebencumplir ciertascondicionesqueloshacen
seguros:
• Blando y de superficie suave, de forma que se deslice
sin dificultad evitando el daño en estructuras vecinas al
momento de ser retirado.
• Buena permeabilidad, para que no se obstruyan.
• Inerte, para que no irrite mientras esté presente dentro
del cuerpo.
• Idealmente radiopaco, para ser controlado mediante
imágenes.
Indicaciones de uso de Drenaje
• Evacuar colecciones de líquidos, gas u otro material
en el interior de una cavidad o espacio del cuerpo.
• Prevenir la potencial acumulación de líquido o gas
u otro material en una cavidad o espacio del cuerpo.
• Actuar como testigo en la aparición de una posible fistula
ygeneraruntrayectocontroladohaciaelexteriorevitando
la acumulación de secreciones en la cavidad o espacio
delcuerpodondeestaseproduce(anastomosis).Muchas
veces, esto permite el manejo de la fístula y evita una
reintervención quirúrgica.
72
Clasificación
Se pueden clasificar de muchas formas, sin embargo, el
que se usa con mayor frecuencia es el sistema de drenajes
abiertos o cerrados.
Lo anterior se refiere a si el circuito queda en caída libre
a un sistema recolector simple o a un dispositivo cerrado
generalmente a presión negativa.
La importancia de esta clasificación está en la posibilidad
que el drenaje no solo sirva como una puerta de salida, sino
que se transforme en una puerta de entrada de infecciones
vía ascendente retrógrada con gérmenes intrahospitalarios.
Esto cobra especial importancia en cirugías limpias que
han usado un sistema de drenaje (derrame pleural, cirugías
plásticas, hernias, etc.).
Existen muy variados tipos de drenajes y depende del uso,
lugar y forma de instalar (percutánea o abierta), lo que
finalmente va hacer elegir el drenaje que se va a usar.
• Penrose:esuntubodelátexosilicona,blandodeparedes
colapsables. Es muy utilizado. Su capacidad de drenar
dependerá del área de superficie en contacto, adaptándose
en función de la herida, ya que el principal mecanismo
de drenaje es la capilaridad. Se usa generalmente en
colecciones infectadas. Es un drenaje abierto que drena
a la superficie sin un colector. De muy difícil manejo
porque ensucia mucho y requiere de curaciones
frecuentes cuando existe un volumen importante de
secreciones. No recomendable en heridas limpias.
• Tubular: tubo de diámetro variable, confeccionado de
caucho, latex o silicona. Hoy casi se usa exclusivamente
de silicona por la mayor frecuencia de alergia al látex. Es
una estructura tubular semirrígida que permite atravesar
planos profundos hasta peritoneo sin colapsar. Drena por
caída libre y permite el uso de colector. Se debe fijar a la
pielconsutura.UnavariedaddeesteeseldrenajeBlake®,
tubo de silicona más flexible con varios canales que
permiteeldrenajeporcapilaridad yconexióna unsistema
de presión negativa, lo que lo transforma en un circuito
cerrado. Se usa principalmente en cirugía abdominal.
• Sonda T o de Kher: es un tubo de silicona o goma
en forma de T. Se utiliza en cirugía de vías biliares.
Sus dos extremos cortos se ubican en la vía biliar,
mientras el extremo largo queda hacia el exterior.
Actúa a caída libre a un colector, es un drenaje abierto.
• Pig-Tail: drenaje tubular delgado, con sus dos
extremos enroscados (de ahí proviene su nombre),
con multiperforaciones que se ubican a nivel de la
pelvis renal y el otro en vejiga, permitiendo drenar
una vía urinaria obstruida por un cálculo, estenosis,
tumor, compresión extrínseca o proteger una
anastomosis reciente. Ambas puntas enroscadas
también impiden su retiro accidental. Este drenaje
queda dentro del cuerpo, no está conectado al exterior.
• Drenaje percutáneo: muy semejante al anterior. Es un
tubo de diámetro variable (se miden en French), pero
con un solo extremo tipo “pigtail” que es el que queda
hacia el interior. Lo colocan de manera percutánea los
radiólogos intervencionistas bajo visión tomográfica.
Se usan para drenaje de colecciones intracavitarias,
evitando con ello recurrir a una intervención quirúrgica
mayor. Drenan a un sistema colector a caída libre
inicialmente cerrado, pero en forma habitual se debe
permeabilizar para evitar su obstrucción, convirtiéndolo
en un sistema abierto. Este tipo de drenaje hoy es muy
utilizado y ha evitado muchas reintervenciones quirúrgicas
disminuyendo la morbimortalidad asociada a esas cirugías.
• Drenaje de Jackson-Pratt®: es drenaje plano,
suave y con lumen multiperforado conectado a una
silicona por donde se exterioriza a un bulbo colpsable
que permite generar presión negativa de manera
constante y actúa, a la vez, como sistema colector.
• Redón: tubo de polietileno rígido, no colapsable,
multiperforado y cobertura interna anticoagulable.
Habitualmente conectado a un sistema colector que
es, a la vez, su reservorio, de estructura colapsable,
permitiendo un vacío con presión negativa permanente
mediante un mecanismo de resorte (Hemovac®,
Hemosuc®). Se utiliza en profilaxis de hematoma
y seroma en cavidades amplias con gran disección.
• Tubo pleural: drenaje tubular rígido, con un extremo
multiperforado de diámetro variable, dependiendo si es
un adulto o niño. Se utiliza en cualquier tipo de ocupación
pleural o cirugía torácica. Se conecta a una trampa de
agua y red central de aspiración ajustando presión de
aspirado en cmH2O. El más usado actualmente es el
Aquaseal®.
• Irrigación/aspiración: variante de los drenajes
anteriores que permiten infundir fluidos para lavar el
sitio de la colección y, simultáneamente, aspirar el
lavado. Utilizados principalmente cuando se requiere
remover detritus o evitar obstrucción del drenaje.
• Babcok, sistema de drenaje aspirativo que se
construye usando dos drenajes tubulares de distinto
diámetro. El menor va dentro del mayor, ambos con
multiperforaciones en el extremo que queda dentro del
paciente. Es principalmente aspirativo, pero también
permite irrigar. Se usa para mantener la cavidad interna
seca de las secreciones y evitar que estas hagan daño
a las estructuras internas por su poder lítico (fístulas de
líquido con contenido gástrico, pancreático o biliar).
73
Manejo de Drenajes Quirúrgicos
• Su manejo es de responsabilidad del cirujano.
• Las indicaciones variarán según el modelo utilizado.
• Debe medirse el débito y evaluar las características
del contenido que sale por el drenaje,
especificando si ha existido algún cambio en este.
• Evaluar la indemnidad de sitio de salida y del circuito.
• Ver si hay dolor referido por paciente.
• Cuando existe más de un drenaje debe existir
una correcta identificación y numeración de
estos, conociendo su ubicación precisa.
• Cuando el volumen diario de un drenaje es elevado,
es de vital importancia asegurar su reposición por
vía oral o endovenosa según corresponda,
evitando desbalances hidroelectrolíticos.
• La permanencia de cada drenaje dependerá del tipo de
cirugía, razón de instalación, características del líquido
drenado y de la evolución del paciente. Solo al cirujano
le corresponde tomar la decisión del retiro del drenaje.
• Los criterios que toman en cuenta para decidir el
momento de retiro del drenaje son:
• A) Calidad del exudado: observar si es seroso,
serohemático, hemático franco, bilioso, bilipus,
purulento, fecaloídeo.
• B) Débito: hay que considerar la cantidad de exudado
que se drena, su descenso progresivo o aumento.
• C) Ubicación: dependiendo de la cavidad en la quese
encuentre.
Estos criterios deben considerarse en conjunto, en general
los drenajes se retiran cuando el exudado es seroso o
serohemático y el débito es el mínimo fisiológico, sin
embargo, todos estos factores varían dependiendo de la
cavidad que está siendo drenada.
Complicaciones y Riesgos de los
Drenajes
Se debe destacar que los drenajes no sustituyen una técnica
quirúrgicaadecuada,tampococompensanlastransgresiones
de los principios básicos (asepsia, hemostasia). Como
todo procedimiento quirúrgico existen ciertos riesgos y
complicaciones asociados, por lo que estos deben ser retirados
al tiempo adecuado sin prolongar su uso innecesariamente,
reevaluando a diario su utilidad.
• Falla del drenaje: puede ocurrir por mala selección del
drenaje,malposicionamientoomalmanejoposoperatorio
de este.
• Infección retrógrada: debido a que el drenaje constituye
una comunicación entre una cavidad corporal ‘‘estéril’’ y
el medio exterior.
• Dolor: principalmente en drenajes rígidos y ubicaciones
específicas.
• Reacción a cuerpo extraño.
• Compresión o lesión (perforación o erosión) de estructuras
vecinas.
• Sangrado de la incisión (puede ser hacia dentro o fuera
de la cavidad).
• Obstrucción del sistema de drenaje.
• Desplazamiento por mala fijación.
• Hernias o eventraciones por el orificio de salida.
Habitualmentesecundario a incisiones muyampliaspara
exteriorizar el drenaje.
• Fístulas.
• Necrosis cutánea local. Por isquemia o acción del
contenido drenado.
• Pérdida del drenaje dentro de la cavidad al momento del
retiro (ruptura) o desplazamiento por mala fijación.
• Trombosis venosa profunda o trombo embolismo pulmonar
secundario a inmovilización y reposo prolongado que
genera un drenaje complejo.
74
Bibliografía
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75
1.9 Ostomías
Vergara R, Bachelet C, Gellona J.
Definición
Una ostomía es la derivación quirúrgica de un órgano al
exterior por un punto diferente al orificio natural, pudiendo
comprometer el aparato digestivo, respiratorio y/o urinario,
recibiendo distintos nombres según la porción comprometida
(ileostomía, colostomía, nefrostomía, gastrostomía, etc.). Se
suelen realizar con la finalidad de suplir las vías naturales de
excreción o de alimentación cuando estas se ven interrumpidas
por distintas razones y según el tiempo de permanencia de
la ostomía serán clasificadas como temporales o definitivas.
Gastrostomía
Está indicada en pacientes que son incapaces de alimentarse
por vía oral, ya sea por una pérdida de la capacidad de
deglución o por un trastorno de esta. Se realiza una
comunicación del lumen gástrico con el exterior a través de
una sonda. Este procedimiento puede ser realizado de forma
abierta, laparoscópica o endoscópica.
Gastrostomía percutánea endoscópica
• Se puede realizar bajo anestesia general, sedación o
anestesia local.
• En primer lugar, se realiza una endoscopía digestiva alta
para asegurar que no existan obstáculos anatómicos
al procedimiento. Con el endoscopio en el estómago
se presiona la pared gástrica para quedar en contacto
con la pared abdominal y mediante la transiluminación
el ayudante localiza el sitio de la gastrostomía.
• Una vez identificado el sitio de punción, se trabaja bajo
técnica estéril. Se lava la zona y se inyecta Lidocaína en
el plano superficial y profundo. Se realiza una pequeña
incisión de 1 cm y se introduce un trocar por el cual se
pasa una guía metálica que se toma con el endoscopio.
• Luego,seretiraelendoscopioconlaguíayatravésdeesta
se enhebra la sonda de gastrostomía, la que se desplaza
al polo abdominal para luego atravesar hacia el exterior.
• Finalmente,se infla el balón que actúacomoanillo interno
y se instala un anillo de seguridad externo que se fija a
la piel.
Gastrostomía
76
Cuidados
Los principales objetivos son: asegurar que el anillo externo
esté bien instalado para evitar compresión del tejido entre
el anillo interno y externo, mantener limpio el sitio de la
gastrostomíaypermeabilizarlasondaparaevitarobstrucción.
• Correcta instalación: el anillo externo debe quedar
posicionado de tal forma que permita un movimiento
de introducción/retiro de 1 o 2 cm. Si el tejido entre
ambos anillos se comprime puede generar necrosis
por compresión o rotura del tracto de la gastrostomía.
• Cuidado de la herida: habitualmente, se realiza aseo
de la herida con suero fisiológico y luego se cubre con
gasaslimpias.Evitarmanipulaciónconstantedelaherida.
• Obstrucción: generalmente, se produce secundario a
medicamentos o nutrición que se pasan por la sonda.
Todos los medicamentos deben ser administrados en su
forma líquida o disueltos en agua y pasar 20 cc de agua
luego de estos. Si se genera una obstrucción el primer
paso es permeabilizar la sonda con una jeringa de 60 ml
utilizando agua tibia.
• La nutrición enteral se inicia al día siguiente,
mientras que agua y medicamentos se pueden
administrar luego de 4 horas del procedimiento.
Ileostomía
Ubicación ideal de las ostomías
Eslaexteriorizacióndelaporcióndistaldelíleonhacialapared
abdominal. Su principal dificultad radica en que el contenido
intestinal es más irritante y rico en enzimas proteolíticas por
lo que puede dañar la piel alrededor del ostoma. Por esta
razón, la ileostomía fue viable cuando Brooke en los años
50 describió la técnica para lograr una ileostomía protruida,
donde el contacto entre el contenido y la piel fuese mínimo.
El sitio de elección suele ser el cuadrante inferior derecho del
abdomen por debajo del ombligo a través del músculo recto
abdominal, si trazamos una línea imaginaria entre laespina
ilíaca y el ombligo, el sitio de elección es en la unión del
tercio medial con los dos tercios laterales. En este punto se
encuentra lejano al ombligo, cicatrices, estructuras óseas, línea
del cinturón y a través del músculo que le otorga estabilidad
y soporte. En obesos, este punto debe subirse en el plano
vertical unos 2 cm.
Indicaciones
• Protección de anastomosis a distal.
• Manejo de filtraciones de anastomosis.
• Cáncer.
• Perforación intestinal.
• Obstrucción intestinal.
• Enfermedad inflamatoria intestinal (colitis ulcerosa,
enfermedad de Crohn).
• Traumatismos.
• Pos proctocolectomía.
77
Técnica y tipos de ileostomía
• En toda ostomía, independiente de su técnica, se deben
cumplir los siguientes principios: el asa debe llegar sin
tensión ni rotación, la apertura de piel y aponeurosis
deben ser concordantes para no generar un ángulo que
pueda causar obstrucción, retracción o isquemia. En
el caso de las ileostomías, el diámetro de la apertura
de la aponeurosis debe permitir el paso de 2 dedos
algo apretados. La sección del íleon dependerá del tipo
de ostomía. Si realizaremos una ileostomía terminal lo
ideal es que sea 2-3 cm proximal a la válvula íleocecal.
Por otro lado, si pensamos en una ileostomía en asa la
sección es generalmente 10-15 cm proximal a la válvula.
En primer lugar, se abre la piel y la fascia anterior del
recto abdominal con una incisión vertical o en cruz de
unos 2-3 cm.
Terminal
• Se toma el extremo proximal del íleon a través de
la incisión realizada y se exterioriza 6 cm
aproximadamente. Es importante asegurar que el
asa permanece sin tensión y con buena irrigación.
• Luego,seseccionalalínea decorchetes osuturamanual,
se colocan suturas a las 3, 6 ,9 y 12 horas del reloj y se
evierte el intestino para asegurarlo a la pared abdominal.
La ostomía debe quedar 2-3 cm protruida sobre el
plano para evitar con-tacto del contenido con la piel.
• Finalmente, se corrobora inspeccionando digitalmente
el ostoma.
Confección Ileostomía. Exterización de asa de intestino delgado
Confección Ileostomíaterminal
78
En asa
• Cumple con la función de derivar contenido intestinal
para proteger anastomosis.
• Enprimerlugar,sepasaunasondacomoguíaporelmeso
delintestino yseexteriorizaelasamediantelaincisión.Se
puedeutilizarunavarillaparamantenerelasaexteriorizada,
la cual queda en forma de loop a través de la varilla.
• Luego, se realiza una incisión circunferencial en la
porción distal del asa y se evierte la mucosa. De
esta forma, se queda una ostomía proximal y una
distal no funcionante como se ve en la imagen.
• Se asegura con puntos a la pared abdominal y se instala
la bolsa recolectora.
Confección ileostomía enasa
79
Colostomía
Una colostomía consiste en la exteriorización de un tramo del
colon a la piel de la pared abdominal, con el fin de suplir la
vía normal de eliminación o descomprimir el intestino grueso.
Indicaciones
• Cáncer de colon/recto/ano.
• Diverticulitis.
• Perforación del colon.
• Obstrucción del colon.
• Enfermedad de Crohn.
• Colitis ulcerosa.
• Traumatismos del colon.
• Defectos congénitos.
Tipos de colostomía
Es importante definir sobre la base de la patología de base
el segmento anatómico y si la colostomía será permanente
o temporal.
Terminal
• La creación del sitio de colostomía en la pared abdominal
se realiza en forma similar al de la ileostomía terminal.
• En general, se realizan en el cuadrante inferior
izquierdo a través del músculo recto abdominal. En
esta ubicación, las deposiciones no son irritantes por
lo que no es estrictamente necesario evertir la mucosa,
aunque algunos cirujanos lo consideran recomendable.
• El asa colon debe ser liberada de su base por lo que al
exteriorizar el colón, debemos asegurar que esté libre
de tensión.
• Luego, de exteriorizarla se sutura a la pared abdominal.
Confección colostomía.
Exteriorización de colon
80
En asa
Tiene la característica de que no se interrumpe totalmente la
continuidaddelintestinoysesuelehacercuandolacolostomía
es temporal Se puede usar para manejo de obstrucción distal,
proteger anastomosis difíciles de realizar, en traumatismos
de recto para proteger su reparación, para desviar el tránsito
intestinal en heridas perineales complejas o en infecciones
graves.
• Solo es posible realizarla en segmentos móviles del
colon, es decir, en colon transverso y sigmoides.
• La cirugía es prácticamente igual a la ileostomía en
asa, se extrae un asa de colon a la superficie de la
piel a través de una apertura en la pared abdominal.
A diferencia de la ileostomía, esto puede ser en el lado
izquierdo y una vez exteriorizado no es necesario evertir.
• La exteriorización que se asegura con un vástago
de vidrio o plástico en el mesocolon se mantiene
por 7-10 días. De esta forma, se evita que la
serosa del colon se adhiera a la pared abdominal.
• Tiene la ventaja de que es de fácil cierre, requiriendo solo
de cirugía local y no de una laparotomía como en el caso
de la colostomía terminal.
Complicaciones de las Ostomías
Las complicaciones pueden deberse a diferentes factores,
donde los más fáciles de prevenir son los relacionados con la
técnicaquirúrgicapropiamentetal.Es porestarazónque para
prevenir la mayoría de las complicaciones de las ostomías
es muy importante utilizar una técnica quirúrgica correcta.
Tempranas
Se considera que las complicaciones son precoces cuando
aparecen en los 30 días in-mediatamente posteriores a la
cirugía.
• Isquemia y necrosis: suele ocurrir por un deterioro de
la perfusión de la ostomía, como consecuencia de la
tensión en la que se encuentra el asa o por la sección
arterial durante la disección del intestino o una sutura
inadvertida de algún vaso al fijar el asa. Los pacientes
obesos o cirugías de urgencia tienen mayor riesgo de
presentarlo. Se identifica porque hay un cambio progresivo
del color de la ostomía, pasando del rosa al gris verdoso
o al negro y, además de esto, sus bordes no sangran. Si
la isquemia no sobrepasa la fascia se puede observar,
pero si la necrosis va más allá de la fascia hay que
revisarporelriesgodeperforaciónyperitonitisfecaloidea.
Confección colostomía terminal
81
Confección colostomía en asa
Confección colostomía en asa
• Hemorragia: es poco frecuente y aparece en las primeras
horas dentro del posoperatorio. La mayoría de las veces
esuncuadroautolimitadoquenorequieredetratamiento.
• Dehiscencia o separación mucocutánea: es la falla en la
unión del intestino y la piel, puede afectar a una pequeña
parte o a toda la circunferencia de la ostomía. En general,
se produce por una apertura muy amplia de la piel para el
íleonexteriorizado,loquegeneramuchatensiónenlaunión.
• Retracción: hundimiento del intestino hacia el interior
del abdomen (estoma < 0.5 cm de la piel). Se puede
producir como consecuencia de una tensión excesiva
del intestino, por la necrosis isquémica de la ostomía o
por el incremento del espesor de la pared abdominal en
pacientes obesos.
Tardías
• Obstrucciónintestinodelgado:seproduceporadherencias,
impactación fecal, recidiva de la enfermedad de Crohn
o por una hernia interna. Los pacientes presentan
dolor abdominal, náuseas y vómitos, y cese del débito.
• Estenosis: cierre o disminución importante del diámetro de
laostomíaproducidaporunareaccióncicatricial.Sueleser
secundaria a isquemia, nuevos brotes de la enfermedad
de base (como una recidiva de la enfermedad de Crohn),
infecciones,etc.Clínicamente,lapodemosdetectarporque
82
hay una dificultad en la evacuación de las deposiciones.
• Prolapso: protrusión de un asa intestinal sobre el plano
cutáneo del abdomen a través del orificio de la ostomía.
La mayoríade las veceshayqueconsiderarunareparación
quirúrgica. Esta complicación es más frecuente en colostomías
en asa y terminales, siendo más raro en ileostomías.
• Hernia paraostómica: en la mayoría de los pacientes se
observaalgúngradodeherniaparaostómicay,engeneral,
tienen poca tendencia a complicarse, pero cuando son
hernias grandes son molestas porque los pacientes no
logran adecuar bien la bolsa de colostomía, razón por
la que en algunos casos es necesario considerar una
reparación quirúrgica. También, son más frecuentes en
colostomías.
Otras
• Deshidratación: los pacientes con ostomías pueden
sufrir de diarrea y posterior deshidratación, pero esto
dependerá de diversos factores como el tipo de ostomía,
la cantidad de intestino resecado y de si hay alguna
Sistema de Bolsa Recolectora
patologíadebase.Seobservageneralmenteenancianos.
El tratamiento consiste en reponer fluidos y electrolitos.
Esta complicación es casi exclusiva de las ileostomías.
• Dermatitis
o Química: se debe principalmente al contacto de la
piel periostómica con el contenido intestinal y se manifiesta
en forma inicial como un eritema. Siempre está asociada a
mal posicionamiento y/o retracción del ostoma, y requiere
de manejo local con agentes protectores, placas convexas
o incluso la reparación quirúrgica.
o Alérgica: ocurre tras el contacto con el dispositivo
de la ostomía, cada vez es menos frecuente gracias a los
avances en la composición de los aparatos.
o Traumática: puede ocurrir al retirar la bolsa de forma
brusca, cambiar muy seguido el dispositivo o por el roce
o presión del dispositivo cuando está mal adaptado. Se
manifiesta clínicamente por un eritema asociado a erosiones
y úlceras.
Un buen sistema recolector deberá:
• Ser seguro y tener un buen sellado contra fugas.
• A prueba de olores.
• Proteger la piel alrededor del estoma.
• Fácil de poner y quitar.
Existen varios tipos de bolsas de ostomía, pero todas cuentan
conunsistemaderecolecciónydrenadodedesechos,además
de una parte adhesiva que protege la piel. Hay 2 sistemas
disponibles:
• De una pieza que se colocan en la piel.
• De dos piezas que consisten en un adhesivo y una bolsa
que se puede retirar y volver a colocar.
83
Bibliografía
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3. Edith Lenneberg, ET Alan Mendelssohn, MD Linda Gross, Guía de Colostomía 2004 United Ostomy Association, Inc. 1962-2005
84
85
1.10 Fiebre enel Posoperatorio
Calcagno M, Díaz M, Valdés F.
Definición
La fiebre en el posoperatorio corresponde a la elevación de
la temperatura normal de un paciente, sobre 38 °C o 100.4
°F posterior a un procedimiento quirúrgico1
.
Epidemiología
Corresponde a uno de los diagnósticos más comunes en el
periodo posoperatorio, con una incidencia de 12-91%2
.
Dentro de las primeras 24 horas luego de un procedimiento,
27-58% de los pacientes presentara fiebre. Con mayor
frecuencia se da en personas sometidas a cirugía mayor
(intratoráxica, intraabdominal, vascular), trauma, invasión
con catéteres, ventilación mecánica, o bien, pacientes con
comorbilidades como diabetes, inmunosupresión, etc.
Según el tiempo de presentación se puede sospechar la
etiología. Es así como la fiebre dentro de las primeras 48
horasposoperatorias,engeneral,serádeorigennoinfeccioso.
Algunos plantean que en las primeras 24 horas existe un 80%
de probabilidad que sea de causa no infecciosa3
. Posterior a
48 horas desde el acto quirúrgico, la mayoría de los cuadros
febriles se producen por infección y desde el quinto día, en
más del 90%, se confirma la causa infecciosa.
De las fiebres de etiología infecciosa destacan la infección
de herida operatoria, infección del tracto urinario (ITU),
neumonía (intrahospitalaria o asociada a ventilación mecánica)
y relacionada con catéter venoso central.
Fisiopatología
En todo proceso quirúrgico existen cambios inflamatorios
secundarios a este, con la consecuente liberación de citoquinas
pirógenas: IL-1, IL-6, INF-Y. También puede haber liberación
de estas citoquinas en relación con factores exógenos
como patógenos. Las citoquinas pirógenas actúan a nivel
hipotalámico produciendo la liberación de prostaglandina E2
que media la respuesta febril, aumentando el set point del
centrotermorreguladoryesto,finalmente,llevaalaproducción
de calor para que el cuerpo alcance la nueva temperatura4
.
La magnitud del acto quirúrgico influiría en la cantidad de IL-6
liberada, por tanto, mientras más traumática sea la cirugía,
mayor liberación de IL-6 y mayor probabilidad de fiebre en el
posoperatorio5
.
Clasificación y Etiología
Inmediata (0-48 horas)
Es en un porcentaje mayoritario de etiología no infecciosa
(80%)6
. Puede ser por el acto quirúrgico
per se, comorbilidades, drogas, entre otros. Algunos autores
mencionan las atelectasias como la causa más frecuente
dentro de las no infecciosas. Es importante recordar que
pese a que son más comunes en las primeras 48 horas, estas
causas también pueden estar presentes con posterioridad a
este límite de tiempo.
Con respecto al procedimiento o cirugía, el trauma tisular
producirá liberación de citoquinas y se dará origen a la fiebre.
De estas, 8% se resuelve espontáneamente en las primeras
24 horas7
.
Dentro de las comorbilidades que pueden dar cuenta de
fiebre posoperatoria inmediata está el hipertiroidismo. Estos
pacientes van a presentar síntomas de tirotoxicosis como
fiebre40-42°C,agitación,sudoración,temblores,taquicardia,
psicosis y en los casos graves arritmias y coma.
Para diagnosticar esta condición es necesario pedir exámenes
de pruebas tiroideas que mostrarán TSH suprimida, T4L
y T3 elevadas.El tratamiento en estos pacientes es con
betabloqueo, drogas antitiroideas como el propiltiouracilo
(PTU), soluciones yodadas y corticoides endovenosos.
También, los pacientes gotosos pueden presentar
reagudización de sus cuadros con sintomatología como
podagra en el 50% de los casos, sin embargo, puede verse
afectada cualquier articulación. Se debe buscar de preferencia,
además de la primera articulación metatarsofalángica, en el
dorso del pie, rodilla, tobillo y hombro. Estas reagudizaciones
característicamente se acompañan de fiebre y en los exámenes
1 Cohn SL. Perioperative medicine. Springer; 2011.
2 Cohn SL. Perioperative medicine. Springer; 2011.
3 Garibaldi RA, Brodine S, Matsumiya S, et al. Evidence
for the non-infectious etiology of early postoperative fever. Infect
Control 1985; 6: 273–7.
4 Garibaldi RA, Brodine S, Matsumiya S, et al. Evidence
for the non-infectious etiology of early postoperative fever. Infect
Control 1985; 6: 273–7.
5 Frank SM, Kluger MJ, Kunkel SL. Elevated thermostatic
setpoint in postoperative patients. Anesthesiology 2000; 93: 1426–
31.
6 House J, Alexandraki I. Postoperative fever. BMJ Best
Practice 2012.
7 Rudra A, Acharjee. Postoperative fever. Indian J Crit Care
Med 2006; 10: 264-71.
86
de laboratorio se puede observar elevación de los niveles de
ácido úrico, elevación discreta de parámetros inflamatorios
y en casos que se tenga duda realizar análisis de líquido
sinovial donde se podrán observar los cristales de ácido úrico.
Otradelascausasdefiebreinmediataeslareacciónadversa
a drogas. Estas se pueden producir por cinco mecanismos:
acción farmacológica directa, reacción de hipersensibilidad,
alteraciones de la termorregulación, relacionada con la
administración per se (flebitis) o reacción idiosincrática. En
el caso de reacción por hipersensibilidad, mecanismo más
frecuente involucrado, la reacción se produce en el momento
en que la droga es administrada. Por otro lado, entre los
medicamentos que alteran la termoregulación, la hormona
tiroidea exógena aumenta el metabolismo, los antihistamínicos
y anticolinérgicos disminuyen la sudoración y la epinefrina,
cocaína o anfetaminas aumentan la generación de calor. De
lasreaccionesidiosincráticassedebenconsiderarelsíndrome
neuroléptico maligno (hipertermia e hipertonía que se asocia
con compromiso de conciencia o catatonía) producido en
algunos pacientes ante la administración de neurolépticos y
la hipertermia maligna.
Esta última condición es de herencia autosómica dominante
por lo que se debe sospechar en pacientes con antecedentes
familiares.Tieneunamortalidadmenoral10%ysecaracteriza
por hipercapnia, rigidez muscular, taquipnea, taquicardia,
fiebre e hipercalemia luego de la inducción anestésica con
halogenados o con administración de succinilcolina8
.
Se debe suspender el desencadenante, limpiar la máquina
de anestesia, hiperventilar con oxígeno al 100%, administrar
dantroleno, bajar la temperatura, corregir la acidosis,
hipercalemia, hipercalcemia, mioglobinuria y asegurar diuresis
mayor a 2ml/kg/h. Lo más frecuente es que la cirugía se
suspenda y no alcance a realizarse, ya que se produce
inmediatamente después de la inducción anestésica.
Las transfusiones también pueden producir fiebre, esta se
puede presentar desde la administración o incluso horas
después. En caso de que los pacientes hayan recibido
hemoderivados con anterioridad, o bien, estén cursando un
embarazo, puede presentarse de manera más tardía, puesto
que ya estarían sensibilizados.
Existe una causa infecciosa que se manifiesta generalmente
antes de las 48 horas y que no puede dejar de diagnosticarse
por su alta morbimortalidad.
El síndrome de shock tóxico se produce en el contexto de una
infección necrotizante de tejido blando (fasceitisnecrotizante
o gangrena de Fournier cuando afecta periné, genitales
o región perianal), más frecuentemente por Streptococo
beta hemolítico grupo A (S. pyogenes) o Clostridium spp.
Lo más común es que se produzca por inoculación directa
y se presenta inicialmente como celulitis asociado a dolor
desproporcionado, que evoluciona como una lesión violácea,
bulas hemorrágicas, crépitos y, finalmente, necrosis. El
manejo inicial es de soporte, asociado a antibioticoterapia
de amplio espectro, descompresión (ya que se produce
un síndrome compartimental) y desbridamiento quirúrgico
amplio con toma de cultivos. Muchas veces es necesaria la
reexploración y aseo quirúrgico.
En pacientes con antecedente de abuso de alcohol, se ha
descrito la presencia de fiebre a las 48 horas posterior al
cese del consumo como manifestación de la abstinencia. Se
puede asociar a temblor fino o incluso delirium tremens y su
tratamiento es principalmente con benzodiazepinas.
Finalmente, causas cardiovasculares como infarto agudo
al miocardio (IAM) o embolismos, ya sea a pulmón como el
tromboembolismo pulmonar (TEP) o a cerebro en el caso de
los accidentes cerebrovasculares (ACV) pueden presentarse
con fiebre.
Aguda (48 horas-7días)
Posterior a las 48 horas, las causas infecciosas superan las
no infecciosas.
La ITU generalmente se presenta entre el 3.er y 5.° día. Es
la infección asociada a atención en salud más frecuente y el
80-90% de estas se presenta en pacientes con sonda foley.
El riesgo de infección está relacionado directamente con la
duración del cateterismo, aumentando significativamente
después de los dos días con sonda. Asimismo, la ITU se
da con mayor frecuencia en pacientes sometidos a cirugía
genitourinaria, siendo el patógeno más frecuente la E. Coli
y en paciente crítico se debe considerar la posibilidad de
candiduria(10%) ylainfecciónporbacteriasmultirresistentes.
Para el diagnóstico es necesaria la toma de orina completa y
urocultivo, debiéndose tomar la muestra desde el puerto del
catéter posterior a su limpieza con alcohol al 70-90%9
y debe
ser enviada rápidamente al laboratorio; no se debe tomar de
la bolsa recolectora. Además, la presencia de piuria no es
un factor confiable para el diagnóstico en paciente de UTI o
UCI con catéter. El manejo es con antibióticos.
La neumonía también es causa frecuente de fiebre en el
posoperatorio, principalmente por la exposición a ventilación
mecánica en los casos de pacientes que están en UCI o
incluso por el solo hecho de someterse a ventilación durante
elactoquirúrgico. Porello,pacientesoperadosbajoanestesia
general tienen mayor riesgo de presentar neumonía, al igual
que aquellos ventilados por tiempo más prolongado.
Un factor de riesgo importante por considerar es el dolor
posoperatorio. Si hay mal manejo del dolor posoperatorio, el
paciente limita su movilidad para evitarlo, tiene un esfuerzo
inspiratorio disminuido y una tos poco efectiva por lo que
aumenta el riesgo de neumonía. La neumonía asociada
a ventilación puede dividirse en temprana, que es aquella
8 Larach MG et al. Clinical Presentation, treatment, and
complications of malignant hyperthermia in North America from
1987 to 2006. Anesth Analg 2010.
9 Sabiston Textbook of Surgery. Surgical infections and
antibiotic use. Chapter 12. 19th Edition.
87
que se presenta en los cinco primeros días posintubación y
generalmente se produce por aspiración del contenido gástrico
y es por organismo sensibles (S. aureus, S. pneumoniae,
Haemophilus); y tardía, que se presenta después de los cinco
días y se asocia a organismos multirresistentes (SAMR, P.
Aeruginosa, acinetobacter spp.).
Actualmenteparaeldiagnósticoesnecesarialaclínica,asociada
a la identificación del agente causal, el cual puede obtenerse
poruncultivodeexpectoración(técnicanoinvasiva,tomadopor
aspiración endotraqueal, diagnóstico con 10^5UFC/ml) o por
lavado broncoalveolar por fibrobroncoscopía (método invasivo,
Gold standard, diagnóstico con 10^4UFC/ml). El tratamiento
es con antibióticos, sin embargo, se pueden tomar algunas
conductas para su prevención, como: minimizar el tiempo de
intubación endotraqueal y ventilación o en caso de requerir
ventilación mecánica que esta sea no invasiva con presión
positiva, evitar aspiración manteniendo cuff endotraqueal
con presión de más de 20cmH20, aspirar continuamente
las secreciones, mantener posición semisentado y con
alimentación enteral pospilórica disminuyendo el riesgo de
reflujo y aspiración, usar inhibidores de la bomba de protones
(IBP) o incluso, como des-criben algunos, descontaminar la
cavidad orofaríngea con clorhexidina tópica.
Lospacientesquesesometenacirugíapuedenrequerirvíaso
catéteres para su cuidado. Sean estos periféricos o centrales,
pueden generar una bacteremia o infección relacionada
conelsitiodeinserción.Losmecanismosdecontaminación
puedenser pormigración desdelapielen ellugar de inserción
hacia el lumen, superficie o punta del caté-ter, especialmente
si no se respeta la técnica aséptica, por contaminación directa
por manos y/o fluidos contaminados y vía hematógena por
infección desde otro foco. Se ha observado mayor riesgo de
infecciónsielabordajeesvíafemoraladiferenciadelsubclavio
y los microorgansimos más frecuentes son los stafilococos
coagulasa negativo.
Si existe alta sospecha de ser el foco y causa de fiebre, basta
con retirarlo e iniciar antibioticoterapia, completando
por lo menos diez días en casos de ser efectivamente el
foco. Se debe sospechar en caso de hemocultivos positivos
para stafilococos o cándida y si se trata de una bacteremia
persistenteporstafilococoaureusofungemiasedeberealizar
un ecocardiograma para descartar una endocarditis.
Las infecciones del sitio quirúrgico se presentan entreel
5.° y 10.° día posoperatorio por lo general y se caracterizan
por dolor, eritema de la zona y secreción purulenta. Estas
infecciones pueden ser superficiales (piel, subcutáneo) o
profundas (fascia, músculo) y se producen por inoculación
directa del microorganismo durante la cirugía. Más del 50%
son producto de cocáceas gram (+), siendo el S. aureus el
más frecuente y cerca del 30% corresponden a gram (-) como
la E.coli o Pseudomona aeruginosa. Es posible sospechar la
bacteria involucrada según el tipo o región anatómica donde
se ubica la herida.
Por ejemplo, en las heridas limpias se identifica con mayor
frecuencia el S. aureus, en las limpias contaminadas los gram
(-) y anaerobios, y en la axila, periné o ingle se encuentran
gram(-).Eltratamientoincluyeapertura,drenajeyexploración
de la herida, aseo con suero fisiológico, colocación de gasa
estéril con suero fisiológico y cierre por segunda intención,
dependiendo si es superficial o profunda y antibióticos
en casos de celulitis importante asociada o presencia de
síntomas sistémicos. Lo más importante por considerar es
la profilaxis antibiótica en caso de ser necesaria y demás
cuidados perioperatorios, como el adecuado control glicémico,
suspender tabaquismo, procurar una estadía hospitalaria
el menor tiempo posible, baño preoperatorio, adecuada
preparación de la piel y técnica aséptica, tratar infecciones
preexistentes, etc.
Según la cirugía a la cual es sometido el paciente, también es
posiblesospecharlacausadelafiebre.Encirugíaabdominal,
la fiebre puede ser producto de abscesos intraabdominales,
filtración de anastomosis, abscesos o infecciones de la
pared abdominal, pancreatitis, colecistitis aguda, entre otras,
manifestándoseconalgunossíntomasasociadoscomodolor,
singulto, omalgia, distensión abdominal, etc. El manejo
puede ir desde la antibioticoterapia hasta la reoperación. En
caso de cirugía urológica, considerar prostatitis o abscesos
perinefríticos. En neurocirugía, meningitis. Endometritis,
ITU, fasceitis necrotizante o tromboflebitis pélvica en cirugía
gineco-obstétrica.
La cirugía cardíaca implica gran trauma a tejidos por lo que
la fiebre es esperable, sin embargo, si se prolonga se debe
sospechar infección de esternotomía (1-5%) o neumonía
(5%)10
. En cirugía vascular, especialmente si se utiliza algún
injertooprótesis,estapuedeinfectarse,yaseaporinoculación
directa o hematógena y presentar fiebre asociado a dolor y
falta de cicatrización. En cuanto a la cirugía traumatológica,
esta eleva las posibilidades de tener infección posoperatoria
y fiebre cuando hay presencia de material protésico. Es
importante destacar que en toda cirugía se sigue una técnica
estéril, por tanto, cualquier disrupción de esta técnica eleva
el riesgo de infección y fiebre.
Una de las causas no infecciosas que produce fiebre
aguda es la insuficiencia suprarrenal aguda. Esta
implica morbimortalidad importante si no se diagnostica o
trata precozmente. Por ello, debe sospecharse ante todo
paciente usuario de corticoides que los suspende previo a la
cirugía y que posterior a esta o frente a una sepsis empieza
con síntomas inespecíficos y en el laboratorio presenta
hipoglicemia, hiponatremia, hipercalemia, acidosis metabólica,
linfocitosis y eosinofilia. El tratamiento se basa en el soporte
agresivo (ABC), corrección de hipoglicemia y alteraciones
hidroelectrolíticasasociadoahidrocortisonayfludrocortisona.
En todo paciente que será sometido a un acto quirúrgico es
necesariovalorarelriesgodeenfermedadtromboembólica,
10 Sabiston Textbook of Surgery. Surgical infections and
antibiotic use. Chapter 12. 19th Edition.
88
ya que entre las causas no infecciosas de fiebre están la
trombosisvenosaprofunda (TVP),cuya incidencia alcanza
cifras de hasta 30-50% en posoperados sin profilaxis.
Las TVP con mayor frecuencia se producen en extremidades
inferiores y la tasa de embolización (tromboembolismo
pulmonar–TEP)dependesiestassondistalesalatrifurcación
poplítea (0%), iliofemorales (30-50%) o iliofemoro-poplíteas
(90%). Lo más importante es sospecharlas, confirmar el
diagnóstico con ecografía doppler color (sensibilidad de
90%)11
e iniciar el tratamiento anticoagulante con heparinas
y, posteriormente, anticoagulantes orales para evitar el
síndrome posflebítico yelTEP,considerado la principal causa
de muerte prevenible en posoperados. Entre las medidas
de tromboprofilaxis existen medidas generales como el
trendelemburg ligero, deambulación precoz, corrección de
hipovolemia y bajo débito, medidas mecánicas como el uso
de medias elásticas, compresión neumática intermitente y
finalmente, y más importantes, las medidas farmacológicas
como las heparinas no fraccionadas (HNF) y de bajo peso
molecular (HBPM).
Subaguda (7-28 días)
A la semana posterior al acto quirúrgico, además de las
causas ya descritas, entre las infecciosas también se puede
presentar la diarrea por Clostridium difficile. Esta en forma
habitual se caracteriza por deposiciones líquidas muy
abundantes generalmente en pacientes con antecedente
de haber recibido antibioticoterapia (Clindamicina el más
relacionado) y se adquiere por transmisión fecal oral de
superficiescontaminadasy/omanosdelpersonaldesalud.De
los pacientes hospitalizados, 20 a 50% están colonizados12
,
sin embargo, no todos van a presentar fiebre y diarrea. Ante
la sospecha, se debe solicitar una muestra para toxina de
clostridium. En caso de salir negativa y persistir sospecha
elevada, se puede solicitar una PCR para clostridium (Gold
standard).
Eltratamientoesconantibióticosysedefineelesquemasegún
lagravedaddelcuadro. Encasoleve-moderado,metronidazol
oralpor 10días;encasosevero,vancomicinaoralpor14 días;
severo y complicado, metronidazol más vancomicina oral por
14 días. Las imágenes son de gran utilidad para evaluar la
dilatación yeventualcompromisocolónico,considerando que
el megacolon tóxico es la complicación más temida, ya que
incluso puede llevar a la colectomía total.
Otrascausasquesepresentanenesteperíodosoninfecciones
por cuerpo extraño, abscesos, sinusitis por el uso prolongado
de sondas nasoenterales y osteomielitis. Siempre considerar
la posibilidad de TVP/TEP, especialmente si hubo reposo
prolongado posterior a la cirugía.
11 Goodacre S. In the Clinic: Deep venous thrombosis. Ann
Intern Med 2008; 149:5.
12 Meyer L y cols. Infección por Clostridium Difficile:
epidemiología, diagnóstico y estrategias terapéuticas. Rev. Med.
Clínica Las Condes 2014.
Tardía (>28 días)
La fiebre tardía es la menos frecuente. Es posible que se dé
en presencia de infecciones virales en relación con productos
sanguíneos (citomegalovirus, hepatitis, VIH), infecciones del
sitio quirúrgico o endocarditis.
Manejo
Al enfrentarse a un paciente con fiebre en el posoperatorio,
dentro de la anamnésis es fundamental evaluar tres puntos.
En primer lugar, evaluar características de la fiebre como el
momento de inicio y su comportamiento en el tiempo. Luego,
considerar comorbilidades del paciente como inmunosupresión,
malnutrición, cáncer, hipertiroidismo, uso de drogas o abuso
de alcohol, gota, insuficiencia adrenal, diabetes y no olvidar
tomar en cuenta si el paciente está invadido con drenajes,
catéteres o sondas. En tercer lugar y no menos importante es
considerar ciertos puntos con respecto a la cirugía. Evaluar
qué procedimiento se realizó, si fue de urgencia o electiva,
hallazgos intraoperatorios o complicaciones, duración o si
fue necesario alguna transfusión.
Junto con los antecedentes evaluados, es fundamental
preguntar por los síntomas asociados para poder empezar
a orientar la sospecha diagnóstica.
Al examen físico siempre considerar signos vitales y estado
general. Raramente, un paciente con fiebre y buen estado
general tiene alguna causa de origen infeccioso.
No hay exámenes específicos indicados en la evaluación
del paciente con fiebre posoperatoria, pero ciertamente
el hemograma, PCR y los cultivos (orina, expectoración,
sangre,decatéter,líquidoeninfeccionesdeheridaoperatoria,
colecciones, etc.) son de gran utilidad.
Asimismo, las imágenes son un apoyo esencial en el proceso
diagnóstico. En caso de sospechar foco pulmonar se puede
solicitar una radiografía de tórax. El estudio con ultra-sonido
es útil si se sospechan colecciones, hematomas o seromas,
TVP o si se requiere evaluar la vesícula biliar. Si no hay
un foco claro, o bien, sospechamos una patología que la
radiografía o ecografía no pueden mostrar, se puede recurrir
a la tomografía computarizada (TC), ya que no solo es capaz
de mostrar abscesos o colecciones intraabdominales, sino
que también permite evaluar la anatomía tanto toráxica, en
busca de TEP, como abdominal y pélvica. Además, la TC
permite la valoración de la técnica quirúrgica en cuanto a las
anastomosis y los drenajes.
Finalmente,elmanejodelafiebreenelposoperatoriodepende
en gran parte de la causa que la esté produciendo.
Como medidas generales, la fiebre inmediata suele no
requerir de tratamiento agresivo, salvo en pacientes con
inmunocompromiso conocido, infecciones comprobadas o
eventos catastróficos. El uso de antipiréticos es aceptado, ya
89
que minimiza el estrés fisiológico y la demanda metabólica
de la fiebre.
Siempre se debe considerar el retiro de fármacos que puedan
provocar cuadros febriles y evaluar la necesidad diaria de
catéter, sonda o drenaje procurando que su utilización no
sobrepase las 48 horas. El resto del manejo va a depender
de la causa específica.
El uso de antibióticos empíricos en los cuadros febriles
posoperatorios no está indicado en todos los casos. Su
uso se recomienda solo en pacientes con alta sospecha de
infección, pacientes inmunocomprometidos, pacientes con
falla orgánica, pacientes con inestabilidad hemodinámica
y pacientes en unidades de cuidado intensivo. Idealmente,
se debe tratar para cubrir los posibles agentes etiológicos y
ajustar la terapia según el resultado de los cultivos.
En resumen, la fiebre en el posoperatorio es una condición
común. Su abordaje debe basarse en la temporalidad de la
fiebre e individualizado según el contexto y condición del
paciente. La fiebre no es sinónimo de infección por lo que el
uso de antibióticos debe ser juicioso. Entre las condiciones
que no se pueden dejar de diagnosticar, ya que implican
elevada mortalidad están la hipertermia maligna, la TVP/TEP
y las infecciones necrotizantes. Por último, la mnemoténica
de las 5 “W”s permite recordar las causas más frecuentes de
fiebre: Wind (neumonia), water (ITU, bacteremia), walk (TVP/
TEP),wound(infeccióndeheridaoperatoria),wonderfuldrugs
(transfusiones, antibióticos, antiepilépticos, etc.).
90
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91
Cirugía deTórax
92
93
2.1 AnatomíaAparatoRespiratorio
Brain M, Montoya D, Mena P.
Introducción
En este capítulo hablaremos, brevemente a modo de
recordatorio, acerca de la anatomía del aparato respiratorio,
con especial énfasis en la anatomía pulmonar.
El aparato respiratorio está formado por la vía aérea superior
y la vía aérea inferior, incluidos los pulmones.
Cada parte que compone el aparato respiratorio tiene una
función importante para asegurar el intercambio de gases,
que es el proceso mediante el cual el oxígeno entra al torrente
circulatorio y se elimina el dióxido de carbono.
Vía Aérea Superior
Cavidad oral y cavidad nasal
El aire entra por la cavidad nasal que lo calienta, humedece
y filtra para eliminar las impurezas.
Faringe
Vadesdelaparteposteriordelpaladarblandohastaelextremo
superior del esófago. La faringe está constituida por un tejido
muscular con un revestimiento de mucosa.
Se divide en tres partes:
- Nasofaringe (porción superior).
- Orofaringe (porción media).
- Hipofaringe (región distal de la faringe).
Laringe
Continuación de la faringe hacia la tráquea. Contiene las
cuerdas vocales y los músculos que las mueven envueltos
por una cubierta cartilaginosa.
Directamenteporencimadelalaringeseencuentralaepíglotis
que es una estructura en forma de hoja. La epiglotis actúa
como una puerta, dirigiendo el aire hacia la tráquea y los
sólidos y líquidos hacia el esófago, rompiendo su paso al
pulmón.
Vía Aérea Inferior
Constituida por la tráquea, los bronquios y los pulmones.
Tráquea
Órgano de estructura cartilaginosa y membranosa que va
desde la laringe, para luego bifurcarse en dos bronquios.
Bronquios
Conductos tubulares fibrocartilaginosos y que entran en el
parénquima pulmonar, conduciendo el aire desde latráquea
a los bronquiolos y, finalmente, a los alvéolos.
Al disminuir de diámetro pierden los cartílagos, adelgazando
las capas muscular y elástica.
Se dividen en dos, derecho e izquierdo, el derecho cuenta
con tres ramas y el izquierdo con dos.
Bronquiolos
Sonlaspequeñasvíasaéreasenquesedividenlosbronquios,
llegando a los alvéolos pulmonares.
No poseen cartílagos, la pared es únicamente musculatura lisa.
Alvéolos pulmonares
Son los divertículos terminales del árbol bronquial, en ellos
ocurre el intercambio gaseoso entre el aire inspirado y la
sangre.
Pulmones
Los pulmones son los órganos en los cuales la sangre recibe
oxígeno desde el aire y, a su vez, la sangre se desprende de
dióxido de carbono.
Los pulmones están situados dentro del tórax, protegidos por
las costillas y a ambos lados del corazón. Están separados el
uno del otro por el mediastino. Están cubiertos por una doble
membrana lubricada (serosa) llamada pleura.
La pleura es una membrana de tejido conjuntivo, elástica
que evita que los pulmones rocen directamente con la pared
interna de la caja torácica. Posee dos capas, la pleura parietal
o externa que recubre y se adhiere al diafragma y a la parte
interior de la caja torácica, y la pleura visceral que recubre el
exterior de los pulmones, introduciéndose en sus lóbulos a
través de las cisuras. Entre ambas capas existe una pequeña
cantidad (unos 15 cm³) de líquido lubricante denominado
líquido pleural.
94
El peso de los pulmones depende del sexo y del hemitórax
que ocupen: el pulmón derecho pesa en promedio 600 g y
el izquierdo alcanza en promedio 500 g. Estas cifras son
un poco inferiores en el caso de la mujer (debido al menor
tamaño de la caja torácica) y algo superiores en el varón.
El pulmón derecho está dividido por dos cisuras (horizontal
y oblicua) en 3 partes, llamadas lóbulos (superior, medio e
inferior). El pulmón izquierdo tiene dos lóbulos (superior e
inferior) separados por una cisura (oblicua).
Se describen en ambos pulmones un vértice o ápex
(correspondiente a su parte más superior, que sobrepasa la
altura de las clavículas), y una base (inferior) que se apoya en
el músculo diafragma. La cisura mayor de ambos pulmones
va desde el 4.º espacio intercostal posterior hasta el tercio
anterior del hemidiafragma correspondiente. En el pulmón
derechoseparaloslóbulossuperior ymediodel lóbuloinferior,
mientras que en el pulmón izquierdo separa los dos únicos
lóbulos: superior e inferior. La cisura menor separa los lóbulos
superior y medio del pulmón derecho y va desde la pared
anterior del tórax hasta la cisura mayor. Puede estar ausente
o incompleta en hasta un 25 % de las personas. En cada
lóbulo se distinguen diferentes segmentos, bien diferenciados,
correspondiéndole a cada uno un bronquio segmentario (3.ª
generación bronquial). Existen varias clasificaciones para
nombrar a los diferentes segmentos, siendo una de las más
aceptadas la de Boyden. Los bronquios segmentarios se
subdividen en bronquios propiamente dichos y bronquiolos
(generaciones 12-16).Estos últimos carecendecartílago yse
ramifican en bronquiolos terminales y bronquiolos respiratorios
(generaciones 17 a 19) que desembocan en los alvéolos: las
unidades funcionantes de intercambio gaseoso delpulmón.
Las arterias pulmonares originadas en el tronco pulmonar
llevansangredesoxigenadaalospulmonesdesdeelcorazóny
unavezoxigenadaes transportadahacialaaurículaizquierda
a través de las venas pulmonares.
El sistema arterial que irriga a los pulmones (arterias
pulmonares y sus ramificaciones) sigue un trayecto paralelo
al de las vías respiratorias, mientras que el sistema venoso
es más variable y puede disponerse en diferentes trayectos.
En el pulmón derecho la vena pulmonar superior drena los
lóbulos superior y medio, y la vena pulmonar inferior drena
al lóbulo inferior. En el pulmón izquierdo cada vena pulmonar
drena al lóbulo de su mismo nombre.
La inervación de la pleura visceral y otras estructuras está
dadaporfibrasaferentes yeferentesvisceralesquesevanpor
el plexo pulmonar anterior y posterior, y que van en relación
con la tráquea.
95
Segmentación pulmonar
96
Inferior
97
Árbol bronquial
Bibliografía
1. Rouvière, H. y Delmas, A. Anatomía humana. Barcelona: Masson, 9.ª ed., 1996.
2. Latarjet. Ruiz Liard. Anatomía humana. Buenos Aires: Panamericana, 4.ª ed.,2008.
98
2.2 NóduloPulmonarSolitario
Gajardo J, Mena P.
Generalidades Diagnóstico
Elnódulopulmonarsolitario(NPS)sedefineradiológicamente
como una opacidad intraparenquimatosa esférica, menor o
igual a 3 cm de diámetro y carente de características que
permitan sospechar otra patología como derrame pleural,
atelectasia o linfadenopatía. Generalmente es un hallazgo
incidental observado en la tomografía computarizada o
radiografía solicitadas durante el estudio de otra enfermedad12
.
Las lesiones focales mayores de 3 cm de diámetro se
denominan “masas” pulmonares y son consideradas carcinoma
broncogénico hasta que se demuestre lo contrario. Las lesiones
subcentimétricas, especialmente aquellas con diámetro menor
o igual a 8 mm, presentan un riesgo significativamente menor
de corresponder a una lesión maligna.
Su prevalencia se estima en 1-2 casos por cada 1.000
radiografías en la población general y en 20 a 50% de los
TC de Tórax en pacientes fumadores 3
.
Los factores de riesgo de malignidad incluyen la mayor edad,
tabaquismo, antecedente de cáncer previo, mayor tamaño,
bordes irregulares/espiculados y su localización en un lóbulo
superior.
La importancia de su evaluación radica en que aproximadamente
el 50% de los NPS son lesiones malignas (tumores primarios
del pulmón o localizaciones secundarias).45
1 Patel VK, Naik SK, Naidich DP, Travis WD, Weingar-
ten JA, Lazzaro R, et al. A practical algorithmic approach to the
diagnosis and management of solitary pulmonary nodules. Part
1: Radiologic characteristics and imag-ing modalities. Chest.
2013;143:825–39.
2 Hansell DM, Bankier AA, MacMahon H, et al.Fleisch-
ner Society: glossary of terms for thoracic imaging. Radiology
2008;246(3):697–722.
3 MacMahon H, Austin JH, Gamsu G, Herold CJ, JettJR,
Naidich DP, et al. Guidelines for management of small pulmonary
nodules detected on CT scans: a statement from the Fleischner
Society. Radiology. 2005;237:395–400.
4 Midthun DE, Swensen SJ, Jett JR. Approach to the
solitary pulmonary nodule. Mayo Clinic proceedings 1993; 68:
378-385.
5 McWilliams A, Tammemagi MC, Mayo JR, Roberts H,Liu
G, Soghrati K, et al. Probability of cancer in pulmo-nary nodules
detected on first screening CT. N Engl J Med. 2013; 369:910–9.
El diagnóstico del NPS es habitualmente incidental durante
el estudio radiológico por otra afección. Una vez identificado
un NPS, el desafío está en determinar la naturaleza de la
lesión y la necesidad de realizar estudios adicionales. Una
evaluación apropiada comienza por la cuidadosa indagación
delosantecedentesdelpaciente ylaidentificacióndefactores
de riesgo.
EDAD
Elcáncer pulmonar es raro antes delos40 años,sin embargo,
la probabilidad de malignidad aumenta proporcionalmente
con la edad a partir de este punto, observándose un 63% de
incidencia de lesiones malignas sobre los 50 años deedad.
TABAQUISMO
El tabaquismo ha sido ampliamente designado como el factor
de riesgo más importante para el desarrollo de cáncer de
pulmón. En este contexto, es importante determinar el nivel
de consumo (mayor o menor de 15 cigarrillos al día), el estado
de fumador actual y el tiempo de abandono. En relación con
este último punto, ha sido ampliamente
demostradoque elriesgo de malignidadcomienzaa disminuir
a partir del quinto año de abandono
del hábito tabáquico, alcanzando una reducción de hasta
un 90% a los 15 años de suspensión. No obstante, el riesgo
siempre será mayor que el de una persona que nunca ha
fumado.6
EXPOSICIÓN AMBIENTAL
La exposición al Radón es la segunda causa más importante
de cáncer pulmonar en EE.UU. De forma similar, se han
identificado otros factores de riesgo ambientales como la
exposición al Asbesto y a sustratos de minería como Nickel,
Cadmio y Silicio.
ESTUDIOS IMAGENOLÓGICOS
Radiografía de tórax
Laradiografíadetóraxesineficientecomométododescreening
para detectar cáncer de pulmón en etapas tempranas, sin
embargo, tiene utilidad en la evaluación del crecimiento del
6 Toomes H, Delphendahl A, Manke HG, Vogt-Moykopf I.
The coin lesion of the lung. A review of 955 resected coin lesions.
Cáncer 1983; 51: 534-537.
99
nódulo pulmonar solitario. Si la apariencia de un nódulo a
la radiografía no ha aumentado su tamaño en 2 años, la
probabilidad de que se trate de un nódulo benigno es mayor
al 90%. De esta forma, siempre se debe intentar conseguir
radiografías antiguas si es que existen.
Tomografía computada de tórax
El advenimiento del TC ha significado un incremento en el
número de nódulos detectados. Hasta un 83% de nódulos
malignos en etapa I detectados por TC, no eran visibles en
la radiografía 7
.
CARACTERÍSTICAS RADIOLÓGICAS
Sugerentes de lesión benigna
• Márgenes lisos.
• Calcificaciones tipo “popcorn”, concéntricas o difusas.
• Cavitación con pared fina.
Sugerentes de lesión maligna
• Márgenes espiculados.
• Signo de la corona radiada (trazos lineales finos quese
extienden 4 – 5 mm de forma radial).
• Calcificaciones reticulares o puntiformes.
• Cavitación con pared gruesa.
PET-CT
En los casos en que los NPS son mayores de 8 mm y no
es posible adquirir radiografías o TC previas para comparar,
un PET puede proporcionar la información necesaria para
decidir si observar la lesión o proceder a realizar un estudio
anatomopatológico.
Probabilidad Clínica de Cáncer de
Pulmón
Si bien las características clínicas y radiológicas no permiten
distinguir de manera fiable entre una lesión benigna y una
maligna,sonimportantesparadeterminarlaprobabilidadclínica
demalignidadantesdesolicitarnuevosestudiosodeproceder
a obtención de muestras para estudioanatomopatológico.
El modelo más extensamente validado fue desarrollado
por investigadores de la Clínica Mayo. En este estudio se
determinaron los siguientes predictores independientes de
malignidad89
.
• Mayor edad (OR 1.04 por cada año).
• Historia actual o previa de tabaquismo (OR 2.2).
• Antecedente de cáncer extratorácico > 5 años previo a
la detección del nódulo (OR 3.8).
• Diámetro del nódulo (OR 1.14 por cada milímetro).
• Espículas (OR 2.8).
• Localización en lóbulo superior (OR 2.2).
7 Henschke CI, Naidich DP, Yankelevitz DF, et al. Early
lung cancer action project: initial findings on repeatscreenings.
Cancer 2001; 92:153-9
8 Herder GJ, et al. Clinical prediction model tocharacterize
pulmonary nodules: validation and added value of PET-CT. Chest
2005; 128(4):2490-2496.
9 Swensen SJ, et al. The probability of malignancy in
solitary pulmonary nodules. Application to small radiolo-gically
indeterminate nodules. Arch Intern Med. 1997; 157(8):849-855.
100
Criterio Riesgo deMalignidad
Bajo Intermedio Alto
Tamaño < 1.5 cm 1.5 -2.2 cm > 2.2 cm
Calcificación Patrón benigno Intermedio
Sin calcificación o patrón
maligno.
Márgenes Regulares Patrón Mixto
Irregulares y/o
espiculados
Tabaquismo Nunca fumador o
abandono hace > 12 – 15
años
Abandono hace 7 – 12
años.
Fumador activo
PET-FDG Baja actividad al
PET-FDG
Actividad baja a moderada. Nódulo intensamente
hipermetabólico.
Biopsia no quirúrgica
(broncoscopía o TTNA)
Diagnóstico benigno
No diagnóstico
Sospechoso de
malignidad
Vigilancia con TC
Resolución completa
o casi completa,
disminución progresiva
del tamaño o sin
crecimiento en 2 años.
No diagnóstico
Evidencia de c
recimiento
101
Manejo
El manejo del nódulo pulmonar es de resorte del especialista (cirujano de tórax o bronco-pulmonar), por tanto, los pacientes
deben ser derivados a estos servicios una vez hecho el diagnóstico.
En general, el manejo es el siguiente:
Según las características del nódulo se pueden dividir en sólidos y no sólidos/vidrio esmerilado, lo que ayudará a tomar
conducta sobre su seguimiento.
Nódulos sólidos
- <6mm TAC con baja dosis de radiación (TACBD) anual por 2 años.
- 6-8mm TACBD en 3 meses.
• Nódulo estable: TACBD en 6 meses y luego anual por 2 años.
• Nódulo crece de tamaño —> biopsia.
- >8mm —> considerar realizar un PET/CT.
• Bajo riesgo de cáncer: TACBD en 3 meses.
• Nódulo estable repetir TACBD a los 6 meses y anual por 2 años.
• Nódulo crece —> biopsia.
• Alto riesgo de cáncer: biopsia o excisión quirúrgica.
Nódulos no sólidos o en vidrio esmerilado
• < 5mm TACBD en 12 meses.
• Nódulo estable o involuciona —> TACBD anual por 2 años.
• Nódulo crece o se convierte en nódulo sólido —> TACBD en 3-6 meses o excisión quirúrgica según riesgo.
• >5-10mm TACBD en 6 meses.
• Nódulo estable o involuciona —> TACBD anual por 2 años.
• Nódulo crece o se convierte en nódulo sólido —> excisión quirúrgica.
• >10mm TACBD en 3-6 meses.
• Nódulo estable o involuciona —> evaluar riesgo: TACBD en 6-12 meses, biopsia o excisiónquirúrgica
• Nódulo crece o se convierte en nódulo sólido —> excisión quirúrgica.
102
Bibliografía
1. Patel VK, Naik SK, Naidich DP, Travis WD, Weingarten JA, Lazzaro R, et al. A practical algorithmic approach to the diagnosis and
management of solitary pulmonary nodules. Part 1: Radiologic characteristics and imaging modalities. Chest. 2013; 143: 825–39.
2. Hansell DM, Bankier AA, MacMahon H, et al. Fleischner Society: glossary of terms for thoracic imaging. Radiology 2008;
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3. MacMahon H, Austin JH, Gamsu G, Herold CJ, Jett JR, Naidich DP, et al. Guidelines for management of small pulmonary nodules
detected on CT scans: a statement from the Fleischner Society. Radiology. 2005; 237: 395–400.
4. Midthun DE, Swensen SJ, Jett JR.Approach to the solitary pulmonary nodule. Mayo Clinic proceedings 1993; 68: 378-385.
5. McWilliams A, Tammemagi MC, Mayo JR, Roberts H, Liu G, Soghrati K, et al. Probability of cancer in pulmonary nodules detected
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1983; 51: 534-537.
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92:153-9.
8. Herder GJ, et al. Clinical prediction model to characterize pulmonary nodules: validation and added value of PET-CT. Chest 2005;
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9. Swensen SJ, et al. The probability of malignancy in solitary pulmonary nodules. Application to small radiologically indeterminate
nodules. Arch Intern Med. 1997; 157(8):849-855.
10. National Comprehensive Cancer Network. Lung Cancer Screening. NCCN clinical practice guidelines in Oncology. 2016.
Disponible en: https://www.nccn.org/professionals/physician_gls/pdf/lung_screening.pdf
103
2.3 Síndrome deOcupación Pleural
Arellano P, Peralta M.
Introducción
El espacio pleural, comprendido entre la pleura parietal y visceral, está ocupado por una escasa cantidad de líquido pleural
que facilita el deslizamiento de ambas capas. Existen diversas patologías que pueden llevar a la ocupación anormal de
este espacio por líquidos y/o aire. Según la fisiopatología, se puede constituir un derrame pleural, neumotórax, hemotórax,
empiema, quilotórax o combinaciones de estos.
Fisiología del Espacio Pleural
En condiciones normales existe un espacio cerrado, de 10-20 micras, en cuyo interior se encuentra 0,1-0,2 ml/kg de líquido
pleural que lubrica y mantiene independientes ambas capas pleurales. Este se produce como ultrafiltrado capilar sistémico
debido a una pequeña gradiente de presión y, a su vez, se reabsorbe a través de la pleura y estomas linfáticos presentes
en pleura parietal y diafragma.
Composición normal del líquido
104
ETIOLOGÍA
Diferentes causas pueden dar origen a un derrame pleural y
se categorizan en las siguientes:
Infecciosas
Bacterias, tuberculosis, parásitos, micosis, virus.
Enfermedad cardiovascular
ICC, TEP, pericarditis constrictiva, obstrucción vena cava
superior, trombosis vena esplénica.
Enfermedad neoplásica
Carcinoma broncogénico, metástasis, mesotelioma, sarcomas,
mieloma y síndrome linfoproliferativos.
Disminución de la presión oncótica
DHC, síndrome nefrótico, otras causas de hipoalbuminemia.
Enfermedades inmunológicas
Artritis reumatoide, LES, lupus inducido por drogas, espondilitis
anquilosante,síndromeSjogren, vasculitis de Churg Strauss.
Derrame Pleural
El derrame pleural se produce cuando existe un desbalance
entre los mecanismos de producción y los de reabsorción del
líquido pleural. De esta manera pueden ocurrir los siguientes
sucesos:
• Incremento de la presión hidrostática capilar (Ej.:
insuficiencia cardiaca).
• Disminución de la presión oncótica capilar(Ej.:
derrames en pacientes cirrósticos).
• Disminución de la presión del espacio pleural (Ej.:
atelectasias).
• Incremento de la permeabilidad vascular (Ej.: exudados).
• Compromiso del drenaje linfático. (Ej.: derrames tumorales)
• Movimiento de fluidos del espacio peritoneal (Ej.: ascitis).
• Trauma.
Farmacológico
Nitrofurantoina, Metrotexate, Ciclofosfamida, Fenitoína,
Amiodarona, Carbamazepina, Dantroleno, Ergotamina,
Propiltiuracilo.
Patología Infradiafragmática
Ruptura esofágica, hernia estrangulada, cirugía abdominal
, peritonitis , EII, absceso hepático, patología pancreática,
obstrucción de vía biliar, ascitis, trasplante hepático.
Otros
Uremia, mixedema, amiloidosis.
MANIFESTACIONES CLÍNICAS
Lasmanifestacionesclínicasdelderramepleuralsonvariadas
y dependen principalmente de la condición del enfermo y
la etiología del derrame. Es así, entonces, que es de vital
importancia establecer la historia clínica, antecedentes
médicos, reserva funcional y función pulmonar del paciente.
Se estima que un 75% de los derrames son sintomáticos.
Los síntomas con mayor frecuencia descritos por el paciente
son:
Volumen 0,1-0,2 mL/kg
Proteínas totales 1-2 g/dL
Albúmina 60-75%
Globulinas 20-35%
Proteínas totales
/plasma 0,2
LDH pleura/plasma <0,5
Glucosa Similar a plasmática
Células 1.400-4.500 células/ul
105
• Disnea.
• Tos.
• Dolor Torácico, tipo puntada de costado.
• Fiebre según la etiología
Examen físico
El examen físico debe ser orientado a la búsqueda de:
• Expansión asimétrica de la caja torácica.
• Ausencia de vibraciones vocales.
• Matidez a la percusión del hemitorax afectado.
• Ausencia de murmullo pulmonar.
• Soplo pleurítico.
ESTUDIOS RADIOLÓGICOS
COMPLEMENTARIOS
El apoyo de la imagenología es de fundamental importancia
para la confirmación del diagnóstico sindromático y en
ocasiones etiológico.
Radiografía de tórax
Es una herramienta de bajo costo, ampliamente disponible a
nivel nacional, debe ser la primera aproximación diagnóstica,
frente a un cuadro clínico sugerente. Debe incluir las
proyecciones posterior anterior (PA) y lateral, con lo que se
evalúa mejor la extensión del derrame.
106
Imagen Nº1
Radiografía de tórax AP en paciente de sexo femenino. Ambos
recesos costo frénicos se observan libres y no hay evidencia de
derrame ni condensación.
Imagen Nº2
Mismo paciente. Radiografía lateral. Receso costo frénico posterior
libre. Radiografía dentro de límites normales.
107
La evidencia de derrame en la radiografía dependerá del
volumen de este:
• 50-150 ml Velamiento de receso costodiafragmático
posterior (radiografía lateral).
• >150-200 ml Velamiento de receso costo
diafragmático lateral (radiografíaposterior-anterior).
• >500 ml Velamiento de todo el receso costo
diafragmático y formación de la curva deDamoisseau.
Se considera derrame masivo al que ocupa al menos 2/3 del
hemitorax en radiografía PA.
Se debe tener especial consideración en determinar si el
derrame es libre o loculado.
Libre: sigue la curva de Damoiseau.
Loculado: no sigue la curva, no es móvil, por tanto, no
cambia en relación con los cambios de posición (presencia
de tabiques), puede ser anterior, posterior, etc.
Imagen Nº3
Radiografía de tórax AP: Se evidencia velamiento de ambos rece-
sos costo frénicos, de predominio derecho, compatible con derrame
bilateral.
Imagen Nº4
Mismo paciente. Radiografía lateral. Esta velado el receso
costodiafragmático posterior.
Ecografía
Es más sensible que la radiografía para detectar derrames
pleurales pequeños (50-100 ml) y/o loculados. Además, se
utiliza para guiar procedimientos diagnósticos/terapéuticos
como la toracocentesis, disminuyendo los riesgos asociados
a la punción.
Tiene un beneficio aún mayor en el estudio de derrames
en pacientes críticos, de difícil movilización, en quienes no
podremos obtener radiografías de pie con las proyecciones
adecuadas, solo portátiles.
Tomografía axial computada TAC
Tiene alta sensibilidad y especificidad (95%) para la
confirmación de derrame pleural y sus características.
Además, permite diagnosticar tumores en caso de derrames
paraneoplásicos.
Útil para caracterizar:
- Loculaciones.
- Colecciones.
- Grosor pleural y masas.
- Monitorización de drenaje.
108
TORACOCENTESIS
Una vez establecido el diagnóstico clínico y comprobado este
mediante algún examen radiológico, se debe complementar
el estudio con una toracocentesis de manera de analizar el
líquido pleural y poder orientar a su etiología. Todo derrame
debe ser puncionado a excepción de los derrames secundarios
a insuficiencia cardiaca descompensada.
El procedimiento comienza con la preparación delmaterial:
El procedimiento se realiza bajo técnica aséptica, se debe
utilizargorro,mascarilla,delantal,guantesestérilesymedidas
de protección biológica.
Posteriormente, se debe reunir los materiales necesarios:
antiséptico (Clohexidina), campo estéril de procedimiento,
gasas y apósitos, jeringa de 10 ml, dos jeringas de 20ml,
1 aguja 25G (anestesia local subcutánea), 2 agujas 22G
(anestesia intramuscular y punción), Lidocaína al 2%, tubos
para muestra y cultivos.
Posición:
Se solicita al paciente que se siente en el borde de la cama
y se apoye con los brazos cruzados sobre una mesa o con
la asistencia de un auxiliar de enfermería.
Monitorización:
Siempre monitorizar al paciente durante el procedimiento, ya
que puede presentar una reacción vagal, la que se expresara
con bradicardia e hipotensión, pudiendo llegar en casos
extremos al paro cardiorrespiratorio. Por tanto, controlar la
presión arterial y frecuencia cardiaca. Además, el paciente
debe tener una vía venosa permeable en la eventualidad de
necesitar la infusión de fármacos de emergencia.
En caso de presentar una reacción vagal se debe suspender
el procedimiento, poner al paciente en decúbito supino y
administrar0,5mgdeatropinaEV, seguidadebolode20mlde
suerofisiológico.Sielpacientecaeenparocardiorrespiratorio,
se deben iniciar maniobras de reanimación.
Punción:
Se identifica el sitio de punción que, por lo general, 5cm
lateral a la columna y entre el 5.°-7.° espacio intercostal. La
punción deber ser 2 espacios intercosales bajo el nivel del
derrame observado en la radiografía y nunca debe ser bajo
el 9.° espacio intercostal.
Realizarasepsiadelsitiodepunción,instalarcamposestériles
e infiltrar con anestesia local realizando una pápula en piel
con la aguja 25G. Luego, reemplazar la aguja por la de 22G
y puncionar en 90° en relación con el arco costal. Avanzar la
aguja aspirando para descartar punción de vasos e infiltrando
anestésico.Unavezcontactadalaagujaconlacostilla,rodear
por borde superior; de esta forma, el clínico asegura evitar la
punción del paquete vasculo-nervioso que se dispone por el
borde inferior de la costilla. Continuar avanzando y aspirando
hasta obtener líquido del derrame, en ese momento se retira
y se aplica anestesia a la pleura parietal.
Cambiar jeringa a una de 20ml o 60ml con aguja de 22G y
puncionar nuevamente aspirando hasta obtener muestra del
derrame. Enviar líquido a estudio.
ESTUDIO DE LÍQUIDO PLEURAL
Que se debe solicitar:
1. LDH.
2. Citoquímico:
-Proteínas.
-Glucosa.
-Recuento diferencial de células
(mononucleares-polimorfonucleares).
3. pH de líquido pleural.
4. ADA.
5. Colesterol.
6. Amilasa.
7. Gram.
8. Cultivo de Koch.
9. Cultivo corriente, anaerobios, hongos
10. Células neoplásicas.
Aspecto macroscópico de líquido
- Hemático: Pleurocrito/hematocrito
> 0.5 = sugiere hemotórax sangrado activo.
- Turbio: Quilotórax.
- Pútrido: Empiema.
- Viscoso: Mesotelioma.
- Chocolate: Amebiasis.
109
ABORDAJE SINDROMÁTICO
Al tener el resultado del estudio del líquido del derrame
podremos dividirlos en transudados o exudados y sobre esta
base enfocar el estudio.
Paraesto,debemosutilizarloscriteriosdeLight,queestablecen
un exudado si cumplen con las siguientes características, de
no ser así se clasifica como transudado:
- Concentración de proteínas
pleurales /séricas mayor a 0,5.
- LDH pleural / LDH sérica mayor a 0,6.
- LDH pleural mayor a los 2/3 limite
normal de LDH sérica.
El hallazgodetransudado nos orienta aInsuficienciacardiaca
congestiva, cirrosis hepática, síndrome nefrótico, diálisis
peritoneal, TEP (dentro de las causas más frecuentes).
El hallazgo de exudado nos orienta a causas infecciosas
(empiema /TBC), neoplásicas, digestivas (pancreatitis),
hemotorax, quilotorax, TEP.
Las dos causas más frecuentes querequieren de intervención
quirúrgica son derrames neoplásicos e infecciosos (empiema).
EXUDADOS
Al tener criterios de Light compatible con exudado, se debe
intentar precisar la causa con el resto de los elementos de
estudio del líquido.
Células
- Polimorfonuclear:
• Infeccioso:
o Neumonía.
o Empiema.
o Abscesos.
o TBC en fase inicial.
- Mononuclear:
• TBC.
• Neoplásico.
• Reumatológico (AR y LES).
- pH:
• pH <7.0: Empiema, indicación de
tubo pleural.
• pH <7.20: Empiema, ruptura esofágica,
AR, TB, neoplasias.
Trasudado pleural
Trasudado pleural
110
EMPIEMA
El empiema pleural es una infección bacteriana del espacio
pleural que se manifiesta como la salida de pus o por la
presencia de bacterias en el cultivo o Gram. No es requisito
un cultivo positivo para el diagnóstico de empiemapleural.
La formación de un empiema pleural es un proceso continuo
que comienza como un exudado simple, el cual evoluciona a
Empiema pleural
111
una etapa fibrinopurulenta y culmina en un derrame organizado
ytabicado. En este proceso sepueden reconocer tres etapas:
1. Fase exudativa: corresponde a la primera semana de
formación donde ocurre una alteración de la permeabilidad
delamembranapleural,lacualgeneraunexudadoclaroy
fluido. Generalmente, se resuelve con tratamiento antibiótico.
2. Fasefibrinopurulenta:ocurreenlasegundasemanayse
reconoce por la presencia de bacterias, desechos celulares
y el líquido adquiere un aspecto turbio purulento.Existe
formación de tabiques y loculaciones por las membranas
fibrinopurulentas.Losparámetrosbioquímicossealteran.
3. Fase organizativa: se desarrolla en la tercera semana
del derrame. Ocurre una proliferación y migración de
fibroblastos junto con depósitos de colágeno, que forman
un “peel” pleural, el cual atrapa el pulmón subyacente.
El pulmón incarcerado se vuelve no funcional y requiere
de cirugía para su reexpansión.
Las manifestaciones clínicas varían según la etapa evolutiva
del proceso pulmonar, del agente infeccioso y las condiciones
inmunológicas del paciente e involucra un amplio espectro
desde un cuadro febril hasta shock séptico.
El tratamiento de los derrames paraneumónicos y de los
empiemas se basa en terapia antibiótica adecuada ydrenaje.
1. Antibióticos: el tratamiento empírico debe ser de
amplio espectro y debe cubrir aerobios y anaerobios. Los
agentes más frecuentes son Streptococcus pneumoniae y
Staphylococcusaureus.Untratamientoadecuadoconsisteen
una cefalosporina de tercera generación, como Ceftriaxona
asociado a un antianaeróbico como Clindamicina. Se debe
partir el tratamiento endovenoso y, según evolución clínica,
realizar eltraslapeaoral.En cuantoaladuracióndelaterapia,
noexisteunesquemaespecífico,sinoquesedeterminasegún
cada paciente. Por lo general, se utiliza entre 2 a 6 semanas
2. Pleurostomía: hay ciertos hallazgos que nos pueden
sugerir la necesidad de drenaje, como:
a. Fiebre y leucocitosis a pesar de
tratamiento antibiótico adecuado.
b. Características del líquido pleural (viscosidad).
c. Infección por anaerobios o agentes virulentos.
d. Derrame que ocupa más de un 40%
del hemitórax.
e. Comorbilidades del paciente.
Lapleurostomíaesunprocedimientoquirúrgicoqueserealiza
bajo técnica aséptica, en el cual se instala un tubo pleural de
Imagen Nº5
TAC de tórax con contraste en fase arterial. Se observa
derrame pleural izquierdo loculado. Con aumento de la
captación de medio de contraste de la pared de la
colección.
Imagen Nº6
Mismo paciente, corte coronal.
112
28 a 36 Fr que comunica la cavidad pleural con el exterior.
El tubo se conecta a una trampa de agua para evacuar el
contenido. Se espera que a las 48 horas exista una mejoría
clínica y radiológica del empiema, de lo contrario se debe
reevaluar la sensibilidad bacteriana y ajustar los antibióticos
y/o solicitar imágenes para evaluar lóculos no resueltos.
3. Firbrinolíticos: son agentes que, porun lado, disminuyen
laviscosidaddellíquidopleuraly,porotro,frenanlaprogresión
fibrinopurulenta que impide la reexpansión pulmonar. Están
indicados en las fases tempranas del empiema. Los más
usados son la estreptoquinasa o la uroquinasa.
4. Videotoracoscopía: es una técnica quirúrgica muy útil
en las primeras etapas de los derrames paraneumónicos
y empiema. Está especialmente indicada en la etapa
fibrinopurulenta, ya que permite la destrucción de los lóculos
y la evacuación del líquido denso que no se puede eliminar
por pleurostomía. No está indicado en la fase organizativa.
Se prefiere por sobre la toracotomía tradicional por el menor
dolor posoperatorio y menor invasividad.
5. Decorticación por toracotomía: está indicado en los
empiemas en fase fibrinopurulenta y de organización. Los
objetivos de la decorticación son: eliminar el “peel” pleural,
reexpansión del pulmón colapsado y liberación completa de
la lámina fibrinosa que permite recuperar la función pulmonar
basal. Esta técnica permite la re-solución del 90 – 95% de
los empiemas.
Neumotórax
Se define como la presencia de aire en la cavidad pleural
con el consiguiente colapso pulmonar. El aire puede provenir
del: parénquima pulmonar, árbol traqueobronquial, esófago,
órganos intraabdominales y del exterior a través de la pared
torácica.
El neumotórax desencadena un mecanismo fisiopatológico
que comienza con una compresión del pulmón secundario a
la presión positiva intrapleural, comprometiendo el intercambio
gaseoso y desviando el mediastino hacia el lado contrario.
Clínicamente se puede manifestar como una insuficiencia
respiratoria y shock hemodinámico en casos severos.
CLASIFICACIÓN
Los neumotórax se clasifican según su mecanismo en:
espontáneos, traumáticos o iatrogénicos.
Neumotórax espontáneo: se clasifican en primarios y
secundarios.
• Neumotórax primario: son producidos por la ruptura de
bulasoblebsdeunpulmónsinotrapatologíadebase.Los
blebssonpequeñascolecciones deaire,menoresa2cm,
queseubicanenlapleuravisceral.Porotrolado,lasbulas
correspondenaespaciosdeaireproducidospordestrucción
delparénquimapulmonar.Estetipodeneumotóraxocurre
principalmente en pacientes jóvenes (25 – 40 años)
de sexo masculino, altos y delgados. Se manifiestan
generalmente en reposo y tienen una alta recurrencia.
• Neumotórax secundario: ocurren en pacientes con
enfermedad pulmonar de base como EPOC. Son más
frecuentes en pacientes entre 60 – 65 años y sus
manifestaciones clínicas son más severas, llevando a la
insuficiencia respiratoria precozmente.
Neumotórax Iatrogénico: secundario a procedimientos
diagnósticos o terapéuticos como instalación de catéteres
venosos centrales.
Neumotóraxtraumático: ocurrecuandohayunasoluciónde
continuidad en la pared torácica. Puede ser abierto, cerrado
o iatrogénico.
Situaciones especiales:
• Neumotórax hipertensivo: se desarrolla cuando
ocurre una pérdida de aire en un mecanismo de
válvula unidireccional, ya sea desde el pulmón o a
través de la pared torácica. La causa más frecuente
es secundario a ventilación mecánica invasiva.
Clínicamente, se manifiesta con una significativa
inestabilidad hemodinámica, hipoxia y shock. Su manejo
consiste en un drenaje de urgencia con un catéter a
nivel del 2do espacio intercostal, linea media clavicular.
• Neumotórax abierto: grandes defectos de la pared
torácica(mayor a 2/3 deldiámetro dela tráquea) permiten
la entrada de aire a la cavidad pleural desde elexterior.
MANIFESTACIONES CLÍNICAS
Los síntomas más frecuentes son el dolor torácico y la disnea.
El dolor es habitualmente de comienzo brusco, aumenta con
las maniobras de valsalva y se ubica en la región anterior o
lateral del tórax. La disnea va a depender de la magnitud de
la insuficiencia respiratoria. Otros síntomas son: tos seca o
fiebre.
Al examen físico se puede encontrar:
• Disminución o ausencia de las vibraciones vocales.
• Hipersonoridad o timpanismo.
• Disminución o ausencia de murmullo pulmonar.
• Asimetría torácica.
113
El neumotórax a tensión se manifiesta clínicamente con dolor
torácico, disnea, palidez, sudoración, cianosis, taquicardia
e hipotensión. En el cuello puede observarse ingurgitación
yugular y desviación contralateral de la tráquea y laringe. El
hemitórax afectado se observa hiperinsuflado. El diagnóstico
es clínico y no requiere de confirmación radiológica para su
manejo.
ESTUDIOS RADIOLÓGICOS
Radiografíadetórax:laradiografíasimpledepieessuficiente
para realizar el diagnóstico. Los hallazgos imagenológicos son:
hiperclaridad, ausencia de trama vascular y visualización del
contorno pulmonar. Se clasifica según su cuantía en:
• Mínimo < 10%
• Leve < 20%
• Moderado 20 – 40%
• Severo > 40%
Tomografía axial computada TAC: es más sensible que la
radiografía para el diagnóstico de neumotórax. Su principal
utilidad radica en evaluar las enfermedades pulmonares de
base.
TRATAMIENTO
Eltratamientoeseldrenajepleuralconreexpansiónpulmonar.
La técnica utilizada para conseguir este objetivo varía según
la cuantía del neumotórax.
Neumotórax mínimo o leve: observación por 24 horas,
oxígeno suplementario según necesidad y control radiográfico.
Losneumotóraxprimariossereabsorbenespontáneamentea
una velocidad de 1.25 % al día, mientras que los secundarios
no se reabsorben. Es por esto que requieren de un drenaje
pleural y oxigenoterapia.
Neumotórax > 20%: requiere de drenaje pleural conectado a
una trampa de agua. Otras alternativas son: videotoracoscopía
y toracotomía.
• Indicacionesquirúrgicasdelosneumotóraxespontáneos:
o Segundo episodio ipsilateral.
o Primer episodio contralateral.
o Neumotórax bilateral simultáneo.
o Expansión incompleta.
o Bulas visible en TAC.
o Enfermedad pulmonar de base que
requiere tratamiento quirúrgico.
o Profesiones de riesgo: piloto de avión, buzo.
Neumotórax a tensión: una vez diagnosticado requiere
descomprensión inmediata, insertando una aguja gruesa en
el segundo espacio intercostal, en la línea media clavicular
del hemitórax afectado, de esta manera se descomprime
el neumotórax y se convierte a uno simple. El tratamiento
definitivo consiste en un tubo pleural.
Neumotórax abierto: el tratamiento inicial se logra cerrando
rápidamente el defecto con un apósito oclusivo estéril. El
apósito debe cubrir la totalidad de la herida de la pared
torácica y debe fijarse solo en tres bordes para permitir un
mecanismo de escape unidireccional. Durante la espiración,
el lado abierto del apósito permite la salida de aire desde el
espacio pleural. Por último, se debe insertar un tubo pleural
alejado del sitio de herida lo antes posible.
3. Hemotórax
Se define como hemotórax la presencia de sangre en el
espacio pleural. Se considera como hemotórax masivo a la
presencia de más de 1500 cc o un tercio de la volemia en el
espacio pleural. Las causas más comunes son las heridas
penetrantes con lesión de vasos sistémicos o hiliares, luego
los traumas cerrados. El diagnóstico es clínico y su mane-jo
inicial consiste en la restitución de volumen sanguíneo y la
descompresión torácica. Si se evacúan más de 1500 cc de
sangre de forma inmediata o el drenaje pleural da un volumen
continuo de sangre de 200 ml/h por 2 a 4 horas, puede
requerir una toracotomía de urgencia. Otras indicaciones son
la inestabilidad del paciente y requerimientos transfusionales
altos.
114
Bibliografía
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4. Light R. Pleural Diseases. DM. May 1992.
115
2.4 Cáncer Pulmonar
Brain M, Pizarro MJ, González J.
Introducción
El cáncer de pulmón es el cáncer más frecuente a nivel
mundial. Durante el año 2012 hubo 1,8 millones de nuevos
casos y fue responsable de 1,6 millones de muertes1
. Es
la primera causa de muerte por cáncer en hombres a nivel
mundial, y la segunda más frecuente en mujeres, después
del cáncer de mama234
.
Epidemiología
El tabaquismo es el principal factor de riesgo del cáncer de
pulmón2. La incidencia varía según el país, así como también
del sexo y raza. Éste tipo de cáncer es 50% más frecuente en
Afroamericanos5
y la tasa de incidencia es mayor en países
más desarrollados como Europa y Norte América6
. Estas
diferencias, son un reflejo de la prevalencia del tabaquismo7
.Actualmente, las muertes por cáncer de pulmón en hombres
hanidodisminuyendo,mientrasqueenmujeressehanlogrado
mantener estables debido a la disminución del tabaquismo8
.
Elcáncerdepulmónseclasificaprincipalmenteendosgrandes
grupos: carcinoma pulmonar de células pequeñas (CPCP) y
carcinoma pulmonar de células no pequeñas (CPCNP).
El CPCNP corresponde al 75 - 80% del cáncer de pulmón9
.
Este tipo de cáncer se asocia a no fumadores y a mujeres.
1 Brambilla E, Travis WD. Lung cancer. In: World Cancer
Report, Stewart BW, Wild CP (Eds), World Health Organization,
Lyon 2014.
2 Brambilla E, Travis WD. Lung cancer. In: World Cancer
Report, Stewart BW, Wild CP (Eds), World Health Organization,
Lyon 2014.
3 Humphrey LL, Deffebach M, Pappas M, et al. Screening
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review to update the US Preventive services task force recom-
mendation. Ann Intern Med 2013; 159:411.
4 GLOBALCAN 2012: Estimated Cancer Incidence, Mor-
tality and Prevalence Worldwide in 2012, IARC, WHO.
5 Ries, LAG, Miller, BA, Hankey, BF, et al. Cancer statis-
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6 Parkin, DM, Pisani, P,Lopez AD, et al. At least one in
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1995. Int J Cancer, 1994;59,494-504.
7 Mannino DM, Stoller JK. Cigarette smoking and other
risk factors for lung cancer. Up-ToDate. Jul. 2014.
8 Baldini EH, Barnes PJ. Women and lung cancer. UpTo-
Date. Oct. 2014.
9 Diagnosis and Management of Lung Cancer, 3rd ed.
American College of Chest Physi-cians Evidence-Based Clinical
Practice Guidelines. May 2013.
EladenocarcinomaeseltipomásfrecuentedeCPCNP,siendo
casi un 50% del total de los casos de cáncer pulmonar10
.
Otros tipos incluyen al cáncer de células escamosas (25-
30% del total de cáncer de pulmón)11
, el adenocarcinoma
escamoso (0,4-4%)12
, los tumores carcinoides (1-2%)1314
,
y el carcinoma sarcomatoide (<1%)15
. El cáncer de células
grandes comprende un 10-12% de los CPCNP16
.
Por otro lado, el cáncer de células pequeñas aparece casi
exclusivamente en fumadores crónicos severos. La incidencia
de cáncer de células pequeñas ha disminuido de un 17% en
1986 a un 13% en el 2002. Esta disminución se acompaña de
un incremento en el porcentaje de nuevos casos en mujeres
(28% en 1973 versus un 50% en 2002). Estos cambios
epidemiológicos se podríandebera diferencias en los patrones
tabáquicos y a variaciones que se han hecho en los criterios
histopatológicos para el CPCP, lo que podría haber llevado
en algunos casos, a que el tumor haya sido clasificado como
Carcinoma Neuroendocrino de Células Grandes en vez de
CPCP17
.
10 Janssen-Heijnen ML, Coebergh JW, Klinkhamer PJ,
Schipper RM, Splinter TA, Mooi WJ. Is there a common etiology
for the rising incidence of and decreasing survival with adeno-
carcinoma of the lung? Epidemiology 2001. PubMed 2001; Mar
12(2):256.
11 Squamous cell lung carcinoma. College of American
Pathologists. May 2013.
12 Travis WD, Brambilla E, Noguchi M, Nicholson AG,
Geisinger KR, Yatabe Y,Beer DG. International association for the
study of lung cancer/american thoracic society/european respi-
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adenocarcinoma. J Thorac Oncol. 2011 Feb; 6(2):244-85.
13 Modlin IM, Lye KD, Kidd M. A 5-decade analysis of
13,715 carcinoid tumors. Cancer 2003. PubMed 2003; 97:934.
14 Hemminki K, Li X. Incidence trends and risk factors of
carcinoid tumors: a nationwide epidemiologic study from Sweden.
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15 Yendamuri S, Caty L, Pine M, Adem S, Bogner P,Miller
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carcinoma of the lung: a Surveillance, Epidemiology, and End Re-
sults Database analysis. Surgery 2012. PubMed2012;152(3):397.
16 Popper HH. “Large cell carcinoma of the lung – a vani-
shing entity?”. Memo - Magazine of European Medical Oncology.
2011; 4: 4–9.
17 Govindan R, Page N, Morgensztern D, Read W, Tierney
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gy of small-cell lung cancer in the United States over the last 30
years: analysis of the surveillance, epidemiologic, and endresults
database. J Clin Oncol. 2006; 24(28):4539.
116
(periférico)
Cáncer pulmonar tipo escamoso (central)
Cáncer pulmonar tipo adenocarcinoma
Cáncer pulmonar de células grandes con
metástasis tempranas
Cáncer pulmonar de células grandes con
metástasis tempranas
117
Tumor de Pancoast
118
Situación en Chile
EnChilesonmuchosloscánceresasociadosalhábitotabáquico,
destacando entre ellos los de pulmón, laringe, cavidad oral,
esófago, páncreas y vejiga, entre otros. Su participación es
tan importante que determina, en la mortalidad por cáncer
pulmonar, un riesgo atribuible de 90% en los hombres y 79%
en las mujeres. Respecto a la incidencia, el cáncer de pulmón
tendría el quinto lugar en hombres y séptimo en mujeres18
.
Latasademortalidadporcáncerdetráquea,bronquioypulmón
ocupa el tercer lugar a nivel nacional siendo 21,3 por 100.000
habitantes18. Por otro lado, la tasa de mortalidad por cáncer de
pulmón cambia de acuerdo al segmento etario que se analice,
el año 2004 se vio que entre los 45 y 64 años murieron 645
personas, lo que da una tasa de 22,9 por 100.000 habitantes,
siendo el 6% de las causas de mortalidad general; mientras
que entre los 65 y 79 años murieron 1.098 personas con una
tasa de 108,7 por 100.000 habitantes, lo que constituye el 8%
de las causas de mortalidad en esegrupo19
.
Es importante destacar que en el caso del cáncer de tráquea,
bronquio y pulmón, Chile tiene una incidencia menor respecto
a Europa y Sudamérica; pero mayor a Ecuador y Costa Rica18.
Clínica
Las manifestaciones clínicas pueden ser variadas, éstas
dependerán de muchos factores, tales como el momento del
diagnóstico, edad del paciente, estadio del tumor, tumor único
o múltiple, entre otros19.
Signos y síntomas
La mayoría de los pacientes que presentan signos y síntomas
clínicos debido a cáncer de pulmón, tienen una enfermedad
avanzada20
. Las manifestaciones más comunes son21,22,23,24
:
• Tos:50–70%.Elcáncerpulmonarpuedeiniciaruncuadrode
tos,ocambiaruncuadrodetoscrónica.Latospuedeserseca
o puede producir esputo, el cual puede contener sangre25
.
18 Ministerio de Salud de Chile. Unidad de Tabaco de la
División de Regulación y Rectoría. Programa de Salud Cardiovas-
cular: la cesación del consumo de tabaco. 2011.
19 Dr. Undurraga A. Cáncer Pulmonar. Departamento de
Medicina, Unidad de Enfermedades Respiratorias. Clínica Las
Condes. 2007.
20 Mountain CF. Revisions in the International System for
Staging Lung Cancer. Chest 1997; 111:1710.
• Hemoptisis: 25 – 50%. De todos los casos de
hemoptisis, cerca de un 20% el responsable es el
cáncer de pulmón26
.
• Disnea: 25%
• Dolor Torácico: 20%. Puede ser sordo, agudoo
punzante23.
Otros síntomas intratorácicos incluyen, sibilancias
respiratorias, ronquera, compromiso pleural, síndrome
de vena cava superior, síndrome de Pancoast.
También se pueden encontrar manifestaciones
extratorácicas, las cuales hacen pensar en metástasis
a distancia o síndromes paraneoplásicos, por lo que
habría que buscar signos y síntomas o anormalidades
de laboratorio de algunos órganos como hígado,
hueso, glándula suprarrenal y cerebro27 28
.
Los fenómenos paraneoplásicos son un grupo heterogéneo
de desórdenes asociados a cáncer con compromiso
sistémico y causado por mecanismos como metástasis,
déficitnutricionalesymetabólicos,infecciones,coagulopatías
o efectos secundarios del tratamiento del cáncer29
. Dentro
de éstos se incluyen hipercalcemia, SSIADH, desórdenes
neurológicos, manifestaciones hematológicas, dermatomiositis
y polimiositis, osteoartropatía hipertrófica y síndrome de
Cushing
1
.
El cáncer de pulmón siempre debe ser sospechado en un
pacientefumadoroantiguofumadorquesepresentacontoso
hemoptisis.Ambos,el cáncerde pulmóndecélulas pequeñas
(CPCP) y el de células no pequeñas (CPCNP), se pueden
presentar con síntomas similares, pocos y pequeños detalles
clínicos los diferencian entre sí. Manifestaciones que guían
a pensar en CPCP son síntomas rápidamente progresivos,
la presencia de síndromes paraneoplásicos (ej. SSIADH),
grandes metástasis mediastínicas multiestacionales, síndrome
de vena cava superior y metástasis óseas y cerebrales. Por
otro lado, el síndrome de Pancoast y la hipercalcemia son
más frecuentes en pacientes con CPCNP2.
21 Feinstein AR, Wells CK. A clinical-severity staging sys-
tem for patients with lung cancer. Medicine (Baltimore) 1990; 69:1.
22 Chute CG, Greenberg ER, Baron J, et al. Presenting
conditions of 1539 population-based lung cancer patients bycell
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syndrome in thoracic malig-nancies. Respir Care 2011; 56:653.
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2013.
28 Midthun DE. Overview of the risk factors, pathology, and
clinical manifestations of lung cancer. UpToDate. Jan 2014.
29 Thomas KW. Overview of the initial evaluation, diagno-
sis, and staging of patients with suspected lung cancer. UpToDa-
te. Aug. 2014.
119
Diagnóstico
Es importante destacar que las manifestaciones clínicas son
más bien tardías y cuando el cáncer ya se encuentra más
avanzado. Una diferencia por ejemplo entre el carcinoma
neuroendocrino de células grandes y el cáncer de células
pequeñas es que, se pueden manifestar en estadios
tempranos (I – II) en un 25 y un 5% respectivamente30
.
Una vez que tenemos la sospecha de cáncer pulmonar,
debemosiniciarelestudionecesarioparallegaraldiagnóstico
y luego que éste sea demoestrado, se debe etapiificar la
extensión de la enfermedad en cuanto al tamaño tumoral,
compromiso de adenopatías y presencia de metástasis a
distancia.
Radiografía de tórax: con sus proyecciones postero-anterior
y lateral. Se considera como el estudio inicial de cualquier
pacientequeconsulteporsintomatologíarespiratoria.Anteun
hallazgo patológico sugerente de neoplasia, se debe solicitar
un estudio que permite caracterizar de mejor forma la lesión,
como por ejemplo una tomografía computada de tórax (TAC).
TAC de tórax: Es el estudio indicado luego de una imagen
sospechosa en la radiografía o pacientes con alta sospecha
de neoplasia. Por su mejor resolución, permite el estudio
anatómico, diagnosticar masas pulmonares y sus relaciones
con estructuras vecinas, demostrar adenopatías sospechosas
de compromiso tumoral y hacer la etapificación del cáncer.
Ademásdeeso,sepuedeasociaraunapuncióntranstorácica
para la toma de biopsia de lesiones pulmonares.
Imagen 2
Mismo paciente. TAC de tórax con ventana pulmonar, donde se
evidencia la misma masa en relación al hilio pulmonar derecho.
30 Dalmau J, Rosenfeld MR. Paraneoplastic syndromes
affecting peripheral nerve and muscle. UpToDate. Oct 2014.
Imagen 1
Radiografía de tórax portátil donde se evidencia masa pulmonar
derecha, compatible con cáncer de pulmón.
Fibrobroncoscopía: Su utilidadradicaen elestudioanatómico
del árbol bronquial para evaluar compromiso luminal bronquial.
Además permite la toma de biopsias en tumores próximos
a un bronquio.
Mediastinoscopía: Corresponde a un método invasivo por
el cual a través de una pequeña incisión supraesterna se
identifican los linfonodos mediastínicos con el objetivo de tomar
biopsias de ellos y lograr una etapificación de la enfermedad.
EBUS:Correspondealestudiosonográficoendobronquialpor
elcualesposibletomarmuestrashistológicas deadenopatías
cuando se sospecha infiltración tumoral en ellas.
Tomografía de emisión de positrones (PET): Estudio que
determinalapresenciadeneoplasiasatravésdelmetabolismo
activo de la masa tumoral, lo que se logra identificando sitios
de captación de glucosa marcada con radiofármacos. Es
especialmente útil para determinar enfermedad a distancia.
En el caso de cancer pulmonar corresponde, hoy en día, en
un estudio de primera línea.
En conclusión, ante un paciente sintomático, el estudio
se iniciará con una radiografía de tórax, ante la sospecha
de neoplasia se completará el estudio con TAC de tórax
y la obtención de una muestra histológica para confirmar
el diagnóstico. Finalmente se procederá a etapificar la
diseminación de la enfermedad con un PET más TAC de
cerebro y cintigrama óseo. En el caso de no contar con PET,
éste podrá ser reemplazado por unTACde abdomen y pelvis.
120
TNM
Tx
Tumor primario que no puede ser evaluado, o se demuestra en citología de esputo o
lavado bronquial con imágenes y endoscopía negativas.
TO Sin evidencia de tumor primario.
Tis Carcinoma in situ.
T1
Tumor < 3 cm en su díametro mayor, rodeado por tejido pulmonar o pleural visceral, sin
evidencia de invasión proximal al bronquio principal en la fibrobroncoscopía.
T1a Tumor <2 cm en su diámetro mayor.
T1b Tumor >2 cm, pero <3 cm en su diámetro mayor.
T2 Tumor > 3 cm, pero < 7 cm en su diámetro mayor, o tumor con cualquiera de las
siguientes características: afecta al bronquio principal, se encuentra a 2 cm o más de la
carina; invade la pleura visceral; está asociado con atelectasia o neumoitis obstructiva
que se extiende hasta la región hiliar, pero no afecta al pulmón entero.
T2a Tumor > 3 cm, pero < 5 cm en su diámetro mayor.
T2b Tumor > 5 cm, pero < 7 cm en su diámetro mayor.
T3
Tumor > 7 cm o de cualquier tamaño que invade directamente una de las siguientes
estructuras: pared torácica (incluyendo los tumores del sulcus superior), diafragma,
nervio frénico, pleura mediastínica, pericardio parietal; o tumor que se encuentre a
menos de 2 cm de la carina, pero sin invadirla; o asociado a atelectasia o neumonitis
obstructiva del pulmón entero; o existencia nódulo(s) en el mismo lóbulo.
T4
Tumor de cualquier tamaño que invade cualquiera de las estructuras: mediastino,
corazón,grandesvasos,tráquea,nerviorecurrentelaríngeo,esófago,cuerpovertebral,
carina; o existencia de nódulo(s) en un lóbulo diferente del pulmón homolateral.
Tabla 1. Estadificación del cáncer de pulmón, 7a edición del TNM (2010). Tumor Primario (T).
(Tomado de Christian González. Actualización de la estadificación del cáncer de pulmón.
Rev. argent. radiol. vol.76 no.4)
121
TNM
Nx Ganglios linfáticos regionales no pueden ser evaluados.
NO Sin ganglios linfáticos regionales comprometidos.
N1 Metástasis ganglionares peribronquiales homolaterales y/o hiliares homolaterales,
incluyendo la afectación por extensión directa de los ganglios
intrapulmonares.
N2 Metástasis ganglionares mediastínicas homolaterales y/o subcarinales.
N3 Metástasis ganglionares mediastínicas contralaterales, hiliares contralaterales,
escalénicas ipsilaterales y contralaterales o supraclaviculares.
Tabla 2. Estadificación del cáncer de pulmón, 7a edición del TNM (2010). Ganglios linfáticos regionales (N).
(Tomado de Christian González. Actualización de la estadificación del cáncer de pulmón. Rev. argent. radiol.
vol.76 no.4)
TNM
Mx Las metástasis a distancia no pueden ser evaluadas.
MO Ausencia de metástasis de distancia.
M1 Existencia de metástasis a distancia.
M1a Existencia de nódulo(s) en un lóbulo del pulmón contralateral; tumor con nódulos
pleurales; o derrame pleural o pericárdico maligno.
M1b
Existencia de metástasis a distancia (extratorácicas).
Tabla 3: Estadificación del cáncer de pulmón, 7a edición del TNM (2010). Metástasis a distancia (M). (Tomado
de
Christian González. Actualización de la estadificación del cáncer de pulmón. Rev. argent. radiol. vol.76 no.4)
122
Estadio y tasa de supervivencia
a 5años
T N M
Carcinoma oculto Tx N0 M0
Estadio 0 Tis N0 M0
Estadio IA (50% a 73%) T1a,b N0 M0
Estadio IB (43% a 58%) T2a N0 M0
Estadio IIA (36% a 46%) T1a,b
T2a
T2b
N1
N1
N0
M0
M0
M0
Estadio IIB (25% a 36%) T2b
T3
N1
N0
M0
M0
Estadio IIIA (19% a 24%) T1, T2
T3
T4
N2
N1,N2
N0,N1
M0
M0
M0
Estadio IIIB (7% a 9%)
T4
Cualquier T
N2
N3
M0
M0
Estadio IV (2% a 13%) Cualquier T Cualquier N M1a,b
Tabla 8: Estadificación del cáncer de pulmón, 7a edición (2010). Agrupación por estadios y su supervivencia a 5 años.
(Tomado de Christian González. Actualización de la estadificación del cáncer de pulmón. Rev. argent. radiol. vol.76 no.4)
Antesdeplantearuntratamientoquirúrgicoenunpacientecon
cáncer de pulmón, se debe estudiar su capacidad pulmonar
basal de manera de establecer si el paciente es operable,
es decir si tolerará la resección pulmonar o tiene alto riesgo
de insuficiencia respiratoria post operatoria.
Para esto, a todo paciente candidato a cirugía, se le exige
un estudio básico con espirometría y test de difusión de CO
(DLCO).
Espirometría:
• VEF1 > 2 litros o >80% tolerará una neumonectomía
• VEF1 > 1,5 litros tolerará una lobectomía
DLCO:
• >80% sin contraindicación de cirugía
• 50-60% contraindicado la neumonectomía
De modo general si la espirometría o el DLCO estan < 80%
se debe complementar el estudio preoperatorio con un test
cardiopulmonar y cintigrama V/Q, de manera de establecer
mas precisamente cual es el volumen pulmonar mínimo
que puede tolerar el paciente en caso de resección sin caer
en insuficiencia respiratoria y la necesidad de uso de O2
domiciliario.
123
Cáncer de pulmón de células no pequeñas
Etapa I
La resección recomendada es la lobectomía asociado a
linfadenectomía. La segmentectomía se reserva sólo para el
tratamiento de los cánceres en etapa I menores a 2 cms. y
para pacientes con comorbilidades en las que la extirpación
dellóbulocompletotendríariesgodeinsuficienciarespiratoria.
Etapa II
Tiene indicación de lobectomía con linfadenectomía. En
ocasiones, es necesario resecar el pulmón completamente
(neumonectomía).
La quimioterapia adyuvante está indicada luego de la cirugía.
Etapa III
Se debe ofrecer terapia neoadyuvante con quimio y
radioterapia, luego se debe re evaluar la extensión de la
enfermedad para decidir una conducta quirúrgica curativa.
Etapa IV
Laenfermedad estáfuera del alcanceterapéutico yelobjetivo
debe ser otorgar la mejor calidad de vida posible al paciente:
manejodeldolor,mejorarlamecánicaventilatoria,entreotros.
Cáncer de células pequeñas
Es un cáncer de muy mal pronóstico, incluso en etapas
tempranas.
Su tratamiento se basa en la utilización de quimioterapia,
dejando a la cirugía en un segundo plano sólo para algunos
casos específicos.
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125
Cirugía deesófago
126
127
3.1 Anatomía delesófago
Gajardo J, Sepúlveda A, Hernández C, Sepúlveda R.
Introducción
El esófago es un conducto muscular hueco, atraviesa el
mediastino posterior para comunicar la hipofaringe con el
estómago. Su función es transportar alimentos y líquidos.
Anatomía Sitios de constricción esofágica (en 3 punto)
El esófago es un conducto muscular, revestido por mucosa,
que transcurre por el cuello, tórax y abdomen. Se localiza
en el mediastino posterior. Se distinguen cuatro segmentos
esofágicos: faríngeo, cervical, torácico y abdominal. El esófago
comienza en la base de la faringe, en C6, y termina en el
abdomen, en donde se une al cardias gástrico en T11. En
un primer momento de sus 25-30 cm de recorrido, el esófago
cervical es una estructura situada en la línea media que se
desvía ligeramente a la izquierda de la tráquea a su paso por
el cuello hacia el tórax. Sigue su recorrido y a la altura dela
carina se desvía hacia la derecha para adaptarse alcayado
aórtico. Después, serpentea por detrás del bronquio principal
izquierdo y permanece ligeramente desviado a la izquierda al
atravesar el diafragma por el hiato esofágico en la vértebra
T11, anterior a la aorta.
En el cuello y la parte superior del tórax, el esófago se localiza
entre la columna vertebral, posteriormente, y la tráquea,
anteriormente.Alaalturadelacarina,elcorazónyelpericardio
se sitúan directamente por delante del esófago torácico.
Inmediatamente antes de penetrar en el abdomen, la aorta
torácicaempujaanteriormentealesófagoyambasestructuras
atraviesan juntas el diafragma para acceder al abdomen,
separadas entre sí por el ligamento arqueado medio. Constricción diafragmática
128
Irrigación deesófago
Elesófagotienedoszonasdepresiónclaramentediferenciadas,
que marcan su inicio y final: el esfínter esofágico superior
(EES) y el esfínter esofágico inferior (EEI).
Su irrigación, podemos dividirla en 3 segmentos: a nivel
cervical dado por las arterias tiroideas inferiores y la arteria
tiroidea superior. A nivel torácico emergen 4 a 6 ramas de la
aorta y ramas de las arterias bronquiales. A nivel abdominal
se irriga por la arteria gástrica izquierda y la arteria frénica
izquierda.
129
El drenaje linfático es un sistema complejo constando de
porción submucosa y muscular. A nivel cervical drena a
linfonodos paratraqueales y cervicales profundos; en el tórax
a linfonodos mediastínicos y ducto torácico; y en el abdominal
hacia los nódulos gástricos izquierdos y celiácos.
Su inervación es dado por fibras simpáticas (adrenérgicas)
inhibitorias y fibras prasimpáticas (colinérgicas) excitatorias.
El nervio laríngeo superior da la inervación motora de los
músculos constrictor faríngeoinferior ycricotiroídeo. Elnervio
laríngeo recurrente inerva al músculo estriado y forma los
plexos deAuerbach ydeMeissner que permiten la peristalsis.
Drenaje venoso del esófago
130
Capas histológicas del esófago
Fisiología
Laprincipalfuncióndelesófagoesladeglución.Lacontracción
faríngea empuja al bolo alimenticio dentro del esófago y
relaja el EES e inicia la peristalsis, generando una serie de
contracciones musculares, coordinadas para hacer pasar
los alimentos.
Onda peristáltica primaria: la deglución voluntaria produce la
relajación simultáneadel EES yEEI. Posteriormente,seinicia
desde el EES en el esófago una onda peristáltica involuntaria
a velocidad de 2 a 4 cm/s (más lenta en la mitad superior
de la musculatura estriada y más rápida en la mitad inferior
de musculatura lisa), que lleva el bolo alimentario hacia el
estómago, en un período que dura de 6 a 9 segundos. Al
alcanzar el EEI la onda primaria se enlentece. Estas ondas
de contracción producen una presión más alta en el esófago
distal que en el proximal.
Onda peristáltica secundaria: onda peristáltica local
generada por distensión en cualquier punto del esófago.
Ayuda a limpiar el esófago de restos de alimento. Durante el
ayuno su frecuencia es irregular.
Onda terciaria: contracciones estacionarias no propulsivas.
Sonondasnopatológicas ydeocurrenciacomúnenpersonas
normales. Su origen es espontáneo, de baja amplitud y no
son iniciadas por la deglución. Durante el ayuno su frecuencia
es irregular.
Bibliografía
1. Moore K, Dalley A, Agur A. Moore Anatomía Con orientación clínica. 7a edición. Barcelona, España: Editorial Wolters Kluwer; 2013.
Capa
muscular
131
3.2 Divertículos esofágicos
Gajardo J, Sepúlveda A, Hernández C, Sepúlveda R.
Introducción
Son evaginaciones o salientes anormales de la pared del
esófago de aspecto sacular, que comunican con la luz a
través de una abertura de tamaño variable y que en algunas
ocasiones pueden provocar dificultad para la deglución.
Las tres zonas en las que aparecen con mayor frecuencia son
la faringoesofágica (divertículo de Zenker), la parabronquial
(mesoesofágica o divertículo de tracción) y la epifrénica
(supradiafragmática). La mayoría de los divertículos se
originan debido a una alteración motora primaria o a una
anomalía del EES o del EEI.
Los divertículos verdaderos abarcan todas las capas de
la pared esofágica (mucosa, submucosa y muscularis).
Generalmente ocurren por un proceso de tracción, producido
por la adherencia de ganglios linfáticos mediastínicos
inflamatorios extraesofágicos que al cicatrizar y contraerse
traccionan al esófago durante este proceso. Con el paso
del tiempo, la pared esofágica se hernia formando una
evaginación, que da lugar a un divertículo.
Divertículos esofágicos
132
Losdivertículosfalsosopseudodivertículosestánconstituidos
únicamentepormucosaysubmucosa.Estossuelenocurrirpor
pulsión, debido a una presión intraluminal elevada generada
poralgún trastorno de lamotilidad.Estas fuerzas hacenquela
mucosa yla submucosa se herniena través de lamusculatura
esofágica. Los divertículos de Zenker y los epifrénicos por
pulsión entran dentro de la categoría de los divertículos falsos
por pulsión.
Divertículo faringoesofágico/ zenker
Es el tipo de divertículo más frecuente en la actualidad, con
una prevalencia estimada de 0,1-0,11%1. Suele aparecer en
pacientes mayores de 60 años, por lo que se ha postulado
su relación con una disminución de la elasticidad y el tono
muscular con el paso de los años. Se localiza en el llamado
triángulo de Killian, entre las fibras oblicuas del músculo
tirofaríngeoylasfibrashorizontalesdelmúsculocricofaringeo.
Realmente es un pseudodivertículo formado por mucosa y
submucosa que emerge de la porción posterior del músculo
constrictor faríngeo.
Cadavezquelapresiónintraesofágicaaumenta,comosucede
al deglutir, el divertículo es sometido a distensión y puedeir
creciendo. Paulatinamente, el saco va creciendo y puede
llegar a tener grandes proporciones. Los grandes divertículos
completamente desarrollados, tienen un orificio de entrada y
un cuello estrecho; al llenarse de saliva o material deglutido
penden del cuello comprimiendo el esófago desde fuera.
La síntomas se inician una vez que el divertículo aumenta de
tamaño. La clínica clásica considera la disfagia progresiva,
regurgitación, tos crónica, halitosis y sensación de masa en la
garganta. En personas mayores son especialmente frecuentes
la halitosis, los cambios de voz, el dolor retroesternal y las
infecciones respiratorias.
Algunasdesuscomplicacionessonlaneumoníaporaspiración,
malnutrición, úlcera péptica, hemorragia digestiva alta, parálisis
de cuerdas vocales. Otra complicación menos frecuente es el
desarrollo de malignidad debido a la inflamación e irritación
crónica, con una incidencia de 0,5% y debe sospecharse ante
un empeoramiento de los síntomas.
El diagnóstico se confirma mediante una radiografía de
esófago con estudio baritado, en la cual se puede visualizar
el divertículo lleno de bario y reposando posteriormente junto
al esófago.
No es necesario recurrir a la manometría esofágica ni a la
endoscopía, la cual está desaconsejada debido al alto riesgo
de perforación.
Eltratamientopuedeserendoscópicooquirúrgico.Enlatécnica
endoscópicaseseccionaelseptoqueseparaeldivertículodel
esófago con un instrumento con electrocoagulación o con la
ayuda de una engrapadora mecánica. La técnica quirúrgica
clásica se realiza a través de una cervicotomía izquierda, con
unamiotomíaenlosmúsculostirofaríngeoycricofaríngeomás
una resección del divertículo. En divertículos menores a 2 cm
la miotomía es suficiente, mientras que en divertículos más
grandes (> 5 cm) está indicada además la diverticulectomía.
Independientedelatécnicautilizada,lospacientesresponden
muy bien y los resultados son excelentes.
Divertículo mesoesofágico
Es un divertículo verdadero generado por tracción de
estructuras del mediastino en el tercio medio del esófago.
Puede ser congénito, debido a un trastorno primario de
la motilidad, o adquirido. La tuberculosis solía ser la
principal causa de divertículos mesoesofágicos al generar
inflamación de los ganglios linfáticos mediastínicos infectados.
Recientemente han aumentado los casos por la histoplasmosis
y la consiguiente mediastinistis fibrosante.
Lamayoríadeloscasossonasintomáticos.Sesuelendetectar
de manera casual en estudios de alguna otra patología. En el
caso de presentar síntomas, pueden producir disfagia, dolor
torácico y regurgitación, síntomas que suelen ser indicativos
de una dismotilidad primaria subyacente. En ocasiones, la
hemoptisis puede ser uno de los primeros síntomas. Su
presencia indica una erosión infecciosa de los ganglios
linfáticos.
Para el diagnóstico se recurre a la esofagografía con bario,
que informa la existencia y localización del divertículo. El
estudio con tomografia computada permite identificar una
posible linfoadenopatía mediastínica.
133
Imagen 1
Esofagografía con bario con proyección póstero - anterior. Se eviden-
cia medio de contraste dentro del divertículo esofágico.
Imagen 2
Esofagografía con bario con proyección lateral. Resto de medio de
contraste al interior del divertículo, mientras que el resto sigue su
curso en el esófago.
134
Esimportanterealizarunaendoscopíaparadescartarposibles
anomalías de la mucosa (comocáncer) que pueden ocultarse
y pasar inadvertidas.
Todos los pacientes, sintomáticos o no, deben someterse a
un estudio manométrico para identificar un posible trastorno
motor primario. El tratamiento dependerá de los resultados
de la manometría.
Para tratar un divertículo mesoesofágico es esencial
determinarsuetiología.Pacientesasintomáticosconganglios
mediastínicos inflamados por tuberculosis o histoplasmosis,
deben ser tratados con antituberculina o antifúngicos.
Si el divertículo mide menos de 2 cm, puede bastar con
observación. Si el paciente progresa y desarrolla síntomas o
si el divertículo mide más de 2 cm, está indicada la resección
quirúrgica.
Divertículos epifrénicos
Esunpseudodivertículodeltercioinferiordelesófago,ubicado
a menos de 10 cm de la unión gastroesofágica. Se deben
en la mayoría de los casos a un aumento del grosor de la
musculatura esofágica distal o de la presión intraluminal. Son
divertículos por pulsión, o falsos, que se asocian a menudo a
un trastorno de la motilidad esofágica, tales como espasmo
esofágico difuso o acalasia.
Suelen ser asintomáticos, pero también pueden presentar
disfagia o dolor torácico, orientando una dismotilidad. Otros
síntomas como la regurgitación, el dolor epigástrico, la
anorexia, la pérdida de peso, tos crónica y la halitosis, son
indicativos de una alteración avanzada de la motilidad que
ha dado lugar a la formación de un divertículo epifrénico de
tamaño considerable.
Lamejorherramientaparaeldiagnósticoesunaesofagografía
de bario, ya que permite determinar claramente el tamaño y
la proximidad del divertículo al diafragma. Además, se puede
complementar con manometría para evaluar la motilidad
general del cuerpo esofágico y de endoscopía para evaluar
posibles lesiones de la mucosa, como esofagitis, esófago de
Barret y cáncer.
El tratamiento es similar al del divertículo mesoesofágico.
No es necesario resecar divertículos menores a 2 cm. Existe
cuestionamiento respecto a si el tratamiento debe ser dado
a pacientes asintomáticos, pero la mayoría se inclina por
cirugía exclusivamente en los casos con síntomas severos
o divertículos de gran tamaño.
135
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136
137
3.3 Trastornos motores del esófago
Introducción
Gajardo J, Sepúlveda A,
Hernández C, Sepúlveda R.
Podemos clasificar los trastornos motores del esófago en
primarios ysecundarios.Dentrodelos trastornos primarios se
encuentran la acalasia, el espasmo esofágico difuso, el esfínter
esofágico inferior hipertensivo, el esófago en cascanueces
y los trastornos inespecíficos. Los trastornos secundarios
derivan habitualmente de una enfermedad sistémica que
compromete además al esófago. En esta oportunidad, solo
abordaremos los trastornos primarios.
Acalasia
Enfermedad de etiología desconocida, tiene una incidencia
de 1-100.000 habitantes/año. La edad de presentación
es entre los 25 a 60 años, sin diferencia entre sexos.
Fisiopatológicamenteesgeneradaporlapérdidadelascélulas
ganglionares del plexo mientérico (Auerbach) esofágico. Se
observa una agangliosis virtual. Con compromiso tanto de
células excitatorias como inhibitorias, estas últimas efectúan
la relajación del esfínter esofágico inferior para la deglución,
así como la propagación secuencial de la peristalsis. Su
ausencia conduce a una falta de relajación del EEI para la
deglución, así como falta de peristalsis esofágica.
Acalasia
138
Ante la sospecha de acalasia deberían solicitar-
se los siguientes exámenes:
1. Manometría esofágica: con el objetivo de evaluar
el peristaltismo del esófago. Podemos observarla
relajación incompleta o aumento del tono delEEI,
aumento de la presión del cuerpo esofágico y falta de
peristalsis durante la deglución.
2. Radiografia de esófago: se realiza mediante el uso de
medio de contraste baritado por vía oral. Permite la
evaluación anatómica y funcional del esófago, donde
podremosencontrardistintosgradosdedilataciónanivel
del cuerpo del esófago y una estrechezcerca de la unión
gastroesofágica (signo pico de pájaro o cola de ratón).
3. Endoscopía digestiva alta: evidencia dilatación
esofágica, restos alimentarios y dificultad para el
paso por el EEI. Útil para descartar otras causasde
estenosis a nivel del EEI (neoplasias).
Imagen 1
Esofagograma donde se evidencia dilatación proximal del esófago
y una estrechez a nivel del esfínter esofágico inferior compatible
con acalasia.
139
Existe una serie de opciones terapeúticas. Todasellas buscan
aliviarlasintomatologíacausadaporelEEIhipertónico,siendo
tratamientos paliativos, ya que ninguna de ellas corrige la
falta de motilidad del cuerpo esofágico. Dentro de ellas se
encuentran:
• Inyección de toxina botulínica: (Botox®) vía
endoscópica al EEI. Solución transitoria (dura 6-8
meses aproximadamente) y su valor es elevado. Se
inyecta endoscópicamente en el EEI por ubicación visual
aproximada de 1 cm sobre la línea Z en los 4 cuadrantes.
Tienebuenresultadosintomáticoacortoplazo.Conelpaso
deltiemposuefectovadisminuyendoenpotenciayduración.
• Cirugía: Esofagomiotomía de Heller. Procedimiento
quirúrgico en que se debilita el EEI cortando sus fibras
musculares exponiendo la mucosa. Tiene buen resultado
a corto y a largo plazo
• Dilatación endoscópica: Procedimiento en el
que se infla un balón con la finalidad de romper
las fibras musculares. Es un tratamiento diseñado
para debilitar el EEI mediante el desgarro muscular.
Dentro de sus complicaciones se encuentran la
perforación esofágica y reflujo gastroesofágico.
• POEM: Procedimiento endoscópico que consiste en una
incisión de la mucosa del esófago para luego realizar una
miotomíadelasfibras ciruculares. Dentro desus ventajas
encomparaciónconlacirugía,esunprocedimientomenos
invasivo y con menor riesgo de reflujo gastroesofágico.
Espasmo esofágico difuso (EED)
Es un trastorno de hipermotilidad severa, de causa
desconocida, que afecta los dos tercios inferiores del
esófago. Se aprecia una hipertrofia de la capa muscular y a
la microscopia electrónica se detecta una degeneración de
fibras vagales aferentes similar a la acalasia, pero sin afectar
losplexosmientéricos.Estaalteraciónproducecontracciones
repetitivas, simultáneas y de gran amplitud.
Se caracteriza por presentarse clínicamente con:
1. Dolor retroesternal al comer o ante un cambio
postural (pudiendo imitar al dolor anginoso).
2. Disfagia baja, intermitente, episódica, severa (ante
líquidos y sólidos), que empeora con el estrés y con
algunos alimentos (helados y bebidas calientes).
3. Regurgitación. El 50% de los casos se acompaña de
hernia hiatal sintomática, con pirosis, reflujo e hipo. Es
un diagnóstico diferencial con dolor de origen cardiaco.
La radiografía es anormal en el 50% de los casos, con ondas
persitálticas terciarias, tomando aspecto de “tirabuzón” o
“esófago en rosario”. Hay pseudodiverticulosis en etapas
tardías. Es frecuente la asociación con divertículo epifrénico,
hernia hiatal y hernia diafragmática.
La manometría es fundamental para el diagnóstico. En el
estudio se puede apreciar ondas peristálticas primarias
solo en la mitad proximal, contracciones espontáneas,
simultáneas, de gran amplitud (>120mmHg) o de larga
duración (>2.5 seg), peristalsis normal, ondas terciarias en
el cuerpo del esófago no relacionadas con deglución y una
presión de reposo del EEI habitualmente normal, con una
relajación normal a la deglución.
La endoscopía es útil para descartar un tumor, hernia hiatal
o reflujo gastroesofágico.
Tratamiento:
1. Médico:sintomático.Seaconsejaevaluaciónpsiquiátrica
(para tratar condiciones estresantes, habitualmente
presentes). Cuando hay RGE asociado, el manejo del
reflujoproducealgúnaliviosintomático.Nitritosdeacción
prolongada pueden ayudar (Nifedipino e Hidralazina).
2. Dilatación esofágica: efectividad hasta 70- 80%
en disfagia severa. Su uso se prefiere en
ancianos o pacientes debilitados. Cuando existe
estenosis, dilatación de hasta 60 Fr.
3. Cirugía: es controversial. Está indicado ante falla a
tratamiento médico o endoscópico, o presencia de un
divertículo por pulsión en el esófago torácico. Consiste
en una esofagomiotomía larga extendida (hasta el
arco aórtico) por vía torácica izquierda, exponiendo la
mucosa en un tercio de la circunferencia esofágica y
una cardiomiotomía. En caso de hernia hiatal o RGE
agregar Fundoplicatura Nissen corta (0,5 cm). Solo es
exitosa en el 80% de los casos (menor que en acalasia).
Esófago en cascanueces (nutcracker)
Dado por contracciones peristálticas de alta amplitud o
hipertensivas, con dolor torácico o disfagia. Su etiología es
desconocida. Tiene un componente psicológico importante
(psicosomático, ansiedad). Es un trastorno de hipermotilidad
muyfrecuenteyelmásdoloroso.Hasidoreportadoquepuede
evolucionar hacia espasmo difuso y/o acalasia.
Se presenta como un dolor torácico similar a dolor anginoso,
por lo tanto, primero debe descartarse esa posibilidad.
Además, se asocia a disfagia.
La manometría es el gold standard. Se diagnostica cuando la
manometría esofágica distal muestra una presión peristáltica
dos desviaciones estándar arriba de lo normal (180-400mmHg;
siendo lo normal entre 50-120mmHg).
Para su manejo se utilizan bloqueadores de calcio (Diltiazem
y Nifedipino) y nitratos, que disminuyen la amplitud de la
presión peristáltica y alivian el dolor torácico. Sin embargo,
140
los resultados son similares al uso de placebo. Una buena
relación médico-paciente es el tratamiento más efectivo. Se
recomienda evitar la cafeína y los alimentos fríos y calientes.
La realización de dilatación esofágica no ha demostrado
resultados significativos.
Bibliografía
1. Longo DL, Fauci AS, Kasper DL, Hauser SL, Jameson JL, Loscalzo J, editores. Harrison. Principios de medicina interna. Vol. 2.
18.a ed. México: McGraw-Hill; 2012.
2. Sabiston, D. and Townsend, C. (2013). Sabiston Tratado de cirugía. Barcelona: Elsevier España.
3. Castell DO. Esophageal motility disorders. En: UpToDate, Post TW (Ed), UpToDate, Waltham, MA. (Consultado el 17 de enero de
2015).
4. Henríquez D Ana, Csendes J Attila, Rencoret P Guillermo, Braghetto M Ítalo. Prevalencia de los diferentes trastornos motores
primarios del esófago: Estudio prospectivo de 5.440 casos. Rev. méd. Chile 1270-1275.
5. Mejía M Ricardo, León F Felipe, Donoso D Andrés, Pimentel M Fernando, Ibáñez A Luis, Sharp P Allan. Desarrollo de una nueva
técnica endoscópica para el tratamiento de la acalasia: Poem (per-oral endoscopic myotomy). Rev. Chil. Cir. 2014 Abr; 66(2):
181-187.
141
3.4 Enfermedad por reflujo
Gastroesofágico
Sepúlveda A, Sepúlveda R
Definición
La Asociación Americana de Gastroenterología define a
la enfermedad por reflujo gastroesofágico (ERGE) como
la presencia de síntomas molestos para el paciente o
complicaciones como resultado del paso del contenido gástrico
al esófago1
.
Epidemiología
La enfermedad por reflujo se da en el 10-30% de la población
occidental. Es menos prevalente en países asiáticos, donde
su incidencia es aproximadamente un 5%2
. A nivel nacional
se ha estimado una incidencia de 29,9% (mujeres 33.1%,
hombres 26,5%)3
.
Fisiopatología
ElmecanismoprincipaleslarelajaciónanormaldelEEI,loque
permiteelpasodelcontenidogástricoalesófago.Larelajación
anormal del EEI se debe a distintas causas, como alimentos
(grasa, chocolate, alcohol), fármacos (antocolinérgicos,
benzodiacepinas, dopamina, bloqueadores de los canales
de calcio), obesidad, embarazo y tabaco. También se ha
asociado a la presencia de hernia hiatal.
En relación con la gastrectomía en manga, debemos tener
especial cuidado. Esta técnica de cirugía bariátrica puede
ocasionar empeoramiento de los síntomas en personas
portadoras de ERGE, es por eso que se debe ser cuidadoso
y estricto con las indicaciones de cirugía bariátrica.
Factores de riesgo
Dentro de los factores de riesgo se encuentran el antecedente
familiar de ERGE, edad avanzada, hernia hiatal y obesidad.
Otros factores de riesgo menos importantes son el uso de
fármacos que reducen el tono del EII (nitratos, bloqueadores
de los canales de calcio, anticolinérgicos), estrés, tabaco,
alcohol y dieta (chocolates, comidas grasas, leche, bebidas
carbonatadas).
Clínica
Los síntomas principales son la pirosis y la regurgitación.
Existen otros síntomas considerados como atípicos o de
alarma, dentro de los cuales son el dolor torácico o abdominal,
tos, difagia, baja de peso yronquera. Los síntomas principales
son la pirosis y la regurgitación. Existen otros síntomas
considerados como atípicos o de alarma, dentro de los cuales
son el dolor torácico o abdominal, tos, difagia, baja de peso
y ronquera.
El Consenso de Montreal clasifica la ERGE en síndromes
esofágicos y extraesogágicos:
Síndromes Esofágicos
Sintomáticos
• Reflujo típico
• Dolor torácico
Lesión esofágica
• Esofagitis
• Estenosis
• Esófago deBarrett
• Adenocarcinoma deesófago
1 Philip O. Katz, Lauren B. Gerson and Marcelo F. Vela.
Diagnosis and Management of Gastroesophageal Reflux Disease.
Am J Gastroenterol 2013; 108:308–328.
2 Vakil N, van Zanten SV, Kahrilas P, et al. The Montreal
definition and classification of gastroesophageal reflux disease: a
global evidence-based consensus. Am J
Gastroenterol. 2006; 101:1900-1920.
3 Encuesta nacional de salud, Chile 2003. Ministerio de
salud de Chile 2004.
142
Síndromes Extraesofágicos
Asociaciones establecidas
• Tos
• Laringitis
• Asma
• Erosión dental
Asociaciones propuestas
• Faringitis
• Sinusitis
• Fibrosis pulmonaridiopática
• Otitis mediarecurrente
Diagnóstico
El diagnóstico de ERGE es clínico. Solo ante la presencia de
síntomas atípicos se recomienda la realización de exámenes
complementarios.
Endoscopía: indicadafrenteasíntomas atípicos odealarma.
Puede ser normal en ERGE. Algunos hallazgos pueden ser
la presencia de esofagitis, esófago de Barrett y hernia hiatal.
pH metría esofágica 24 horas: indicado en pacientes con
persistenciadesíntomasapesardetratamientofarmacológico
y endoscopía sin alteraciones. Registra pH < 4. Informa el
númerototaldeepisodiosdereflujo,surelaciónconeldecúbito
y de pie y la duración de la presencia del reflujo ácido. Su
limitación es que no informa sobre el reflujo alcalino.
Impedanciometría: Gold standard. Informa la presencia
de reflujo ácido o alcalino. La asociación Americana de
Gastroenterología recomienda la realización de este examen
con la suspensión del tratamiento farmacológico 7 días previos,
amenosqueseestébuscandolapresenciadereflujonoácido.
143
Complicaciones ERGE
Esofagitis por ERGE: lesiones de la mucosa gástrica
producidas por el contenido gástrico refluido. La clasificación
de Los Ángeles la cataloga según el grado de compromiso
de la mucosa:
EstenosisporERGE:ocurrecomoresultadodelareparación
de las lesiones del reflujo, con la producción de depósito de
colágenoyfibrosisdelaparedesofágica.Ocurregeneralmente
en el esófago distal. Se manifiesta por una disfagia lógica,
primero a sólidos.
Esofagitis: Clasificación de los Ángeles
Grupo A
Lesión de la mucosa, <5mm de longitud, que no se extiende entre las
crestas de dos pliegues mucosos longitudinales.
Grupo B
Lesión de la mucosa, >5mm de longitud que no se extiende entre las cres-
tas de dos pliegues mucosas longitudinales.
Grupo C
Lesión de la mucosa que se extiende entre las crestas de dos pliegues
mucosas, < 75% de la circunferencia.
Grupo D
Lesión de la mucosa que afecta > 75% de la circunferencia.
Esófago de Barrett: hay un cambio de la mucosa esofágica de epitelio escamoso
a epitelio columnar con células caliciformes (metaplasia intestinal). Su incidencia ha
ido en aumento y se ha relacionado con el adenocarcinoma de esófago.
144
Tratamiento
Cambios de estilo de vida: baja de peso, elevación de la
cabeza de la cama al dormir, evitar comidas nocturnas, evitar
alimentos que aumenten los síntomas.
Farmacológico: actualmente los más usados y estudiados
que alivian los síntomas son los inhibidores de la bomba de
protones (IBP, Omeprazol 20-40 mg/día), que han sido más
eficaces que los bloqueadores H2 (ranitidina, famotidina).
Logran alivio de los síntomas en el 70-80% de los pacientes.
Duración inicial del tratamiento es de 8 semanas.
Cirugía: la indicación de cirugía se considera para pacientes
jóvenes con buena respuesta al tratamiento médico que no
desean tratamiento farmacológico prolongado, alteración de
su calidad de vida, asociado a hernia hiatal y en pacientes
resistentes al tratamiento con IBP. Antes de la cirugía debe
realizarse una manometría para descartar alteraciones de la
motilidad esofágica, ya que si presentasen dicha enfermedad
la cirugía estaría contraindicada, porque no proporcionaría
alivio de la ERGE. La técnica más utilizada en la actualidad
es la fundoplicatura de Nissen, en la cual se busca aumentar
el tono del EEI rodeando el esófago abdominal con fondo
gástrico, además del cierre del hiato esofágico del diafragma.
Consigue una tasa de alivio de los síntomas entre un 80-90%.
Paso de fondo gástrico
Cierre de los pilares del diafragma
Cierre fundoplicatura de Nissen
145
Bibliografía
1. Philip O. Katz, Lauren B. Gerson and Marcelo F. Vela. Diagnosis and Management of Gastroesophageal Reflux Disease. Am J
Gastroenterol 2013; 108:308–328.
2. Vakil N, van Zanten SV, Kahrilas P,et al. The Montreal definition and classification of gastroesophageal reflux disease: a global
evidence-based consensus. Am J Gastroenterol. 2006; 101:1900-1920.
3. Encuesta nacional de salud, Chile 2003. Ministerio de salud de Chile 2004.
146
147
3.5 Perforación esofágica
Sepúlveda A,Hernández C, Sepúlveda R.
Introducción Epidemiología
La perforación esofágica es una patología poco prevalente
que está asociada a una alta morbimortalidad, siendo los
factores que influyen la etiología, la localización de la lesión
y la alta sospecha diagnóstica con inicio de terapia en forma
precoz.Unretrasoeneltratamientoaumentalacontaminación
e inflamación, siendo la complicación más temida la sepsis
pormediastinitis. Es una emergencia quirúrgica. Su detección
y tratamiento antes de 24 horas resultan en 80-90% de
sobrevida. Posterior a las 24 horas, la sobrevida baja a menos
de un 50%.
Dentro de su etiología podemos encontrar: instrumental,
espontánea, quirúrgica, traumática y cuerpo extraño. Por
instrumental se entiende procesos endoscópicos diagnósticos y
terapeúticos(porejemplo,dilataciónendoscópica),eslacausa
más frecuente. La perforación espontánea habitualmente
tiene como causa vómitos profusos o forzados que producen
una rotura del esófago a nivel de la unión gastroesofágica
(síndrome de Boerhaave).
Clínica
Los síntomas dependen del nivel de la perforación: dolor
cervical, subesternal o epigástrico. También, puede
acompañarse de vómitos, hematemesis, disfagia y enfisema
subcutáneo. Los signos de perforación cambian con el
paso del tiempo. En un primer momento, el paciente puede
manifestar taquipnea, taquicardia y fiebre sin otro signo claro
de perforación. Al aumentar la contaminación mediastínica y
pleural, lospacientes desarrollaninestabilidadhemodinámica
y shock.
Diagnóstico
Lasimágenesapoyanlasospechadiagnóstica.Enlaradiografía
de tórax puede observarse un hidroneumotórax. Además,
se puede realizar esofagografía con contraste hidrosoluble
(no bario) para demostrar la perforación. El TAC de tórax y
abdomen con medio contraste IV y oral es útil para determinar
la presencia o ausencia de perforación, si está contenida o no
(loquedeterminaeltratamiento) ylapresenciadecolecciones
a nivel cervical, abdominal o derrame pleural.
Tratamiento
Perforación esofágica
Todo paciente con perforación esofágica debe recibir
hidratación parenteral y antibióticos de amplio espectro. La
cirugíanoestáindicadaentodoslospacientesconperforación
esofágica y el tratamiento dependerá de diversas variables:
tiempo de evolución de la perforación, etiología, estabilidad
hemodinámica del paciente, presencia de colecciones,
patología esofágica subyacente (como carcinoma) y
localización de la perforación.
En los pacientes clínicamente estables y sin signos de sepsis
progresiva se puede adoptar una actitud conservadoraante
unaperforacióncontenida.Sehanpropuestotrescriteriospara
148
optarpor unmanejoconservador:1)perforacióncontenidaen
laesofagografía,2)síntomasleves y3)sepsisclínicamínima.
En un paciente inestable con una perforación libre está
indicada la intervención quirúrgica con desbridamiento del
tejido desvitalizado, exclusión o resección del esófago,
creación de una esofagostomía, drenaje amplio, colocación
de una gastrostomía y yeyunostomía de alimentación.
Lo más importante es el grado de inflamación alrededor de la
perforación, esta se relaciona con el tiempo de evolución. En
perforación de menos de 24 horas la inflamación es mínima
y se recomienda la reparación quirúrgica primaria (sutura del
esófago). Con el tiempo aumenta la inflamación y el tejido se
vuelve friable dificultando la reparación.
Enfermedadesesofágicasdebasequeafectaneltratamiento:
1) carcinoma resecable, 2) megaesófago por acalasia
avanzada, 3) estenosis péptica grave y 4) ingestión caústica.
No se recomienda la reparación primaria, ya que se asocian
a estrechamiento distal y obstrucción. En estos casos, se
recomiendareseccióndelesófagoyreconstruccióninmediata
o diferida. En caso de una neoplasia irresecable se procede
con un stent esofágico.
Perforación posterior a fondoplicatura de Nissen:
ocurregeneralmentealtercerocuartodíadelafundoplicatura.
El paciente puede presentar dolor, fiebre, taquicardia y
evidenciarse una perforación a los estudios imagenológicos.
Las opciones del tratamiento son reoperar al paciente,
desmantelar la fundoplicatura y suturar la perforación; o bien,
instalación de stents endoscópicos temporales.
Síndrome de Boerhaave:
El profesor Hermann Boerhaave describió por primera vez
este síndrome, en el cual la emesis recurrente altera el reflejo
normal del vómito (que permite la relajación del esfínter),
dandolugaraunaumentodelapresiónesofágicaintratorácica
y a la perforación. La perforación ocurre en el esófago
intraabdominal, produce una peritonitis y su tratamiento es
siempre quirúrgico.
Bibliografía
1. Cameron J., Cameron A., Current Surgical Therapy. 11th Ed Elsevier 2014. Chapter The Esophagus, Esophageal Perforation pg
64-68.
2. Braghetto M, I., Rodríguez N, A., Csendes J, A. and Korn B, O. (2005). Perforación esofágica: Experiencia clínica y actualización del
tema. Rev. méd. Chile, 133(10).
149
3.6 Cáncer de esófago
Brain M, Pizarro MJ, Sepulveda R.
Introducción
El cáncer de esófago (CE) se mantiene como un desafío
para el cirujano. La tasa de mortalidad se mantiene elevada
y el tratamiento quirúrgico, cuando es posible de realizar,
posee aún alta morbimortalidad. Se incluye dentro del CE
a todo aquel tumor que compromete este órgano desde su
inicio en la hipofaringe hasta la unión gastroesofágica.
Los tumores de la unión fueron clasificados por Siewert: el
tipo I corresponde a tumores cuyo centro se ubica entre 1 a 5
centímetros delcardias; Siewert II son aquellos tumores que
abarcan desde 1cm por sobre la unión hasta 2 cm bajo ella.
Y los tipo III se ubican entre 2 a 5 cm bajo la región cardial.
Siewert I y II son tratados como CE1
.
Se distinguen dos tipos histológicos principales: escamoso y
adenocarcinoma y existen marcadas diferencias geográficas
en cuanto a la incidencia de cada variedad y a la prevalencia
global del CE. En Asia se encuentran las mayores tasas,
específicamente en un área denominada como “el cinturón
Clasificación deSiewert
1. Weitz JC. Diagnóstico y tratamiento de las enfermedades di-
gestivas. Sociedad chilena de gastroenterología. Santiago 2013.
150
asiático del cáncer esofágico” que abarca los países de Irán
con una tasa de 240 enfermos cada 100.000 habitantes,
Turkmenistán, Uzbekistán, Afganistán, Mongolia y China, luego
en África también se describen países con mayor afección
como Sudáfrica, Kenia y Zimbawe. Dentro de Europa, la zona
de Normandía presenta la mayoría de casos. Dentro de los
EE. UU. el estado de Carolina del Norte presenta la tasa
más alta del país alcanzando los 15 por 100.000 habitantes.
Clásicamente, el tipo histológico más frecuente era el
carcinoma escamoso, sin embargo, esto se mantiene así
solo en países orientales o con mayor pobreza.
En occidente y países más industrializados la tendencia
varió y el tipo adenocarcinoma ya alcanza al menos el 50%
o más, esto se ha explicado por el aumento de diagnóstico
de esófago de Barret, entre otros factores2
.
La edad de presentación promedio es entre los 55 y 70 años.
Loshombressonafectados conmayorfrecuenciaenrazónde
3:1, esta diferencia se acentúa en caso de adenocarcinoma2
.
Existen múltiples factores de riesgo para el CE (Tabla 1),
algunos predisponen para el tipo escamoso: consumo de
tabaco,alcohol; yenfermedadescomoacalasia,mientrasque
otros aumentan el riesgo de adenocarcinoma: principalmente
el reflujo gastroesofágico (RGE) y el consecuente esófago
de Barret.
Cancer de esófago macroscópico
En los últimos treinta años su incidencia ha crecido,
principalmente por el mayor número de adenocarcinomas
diagnosticados, variedad tumoral que se relaciona con el
reflujo gastroesofágico (RGE), patología cada vez más
frecuente. Globalmente, se ubica como el octavo cáncer
más prevalente precedido por el cáncer pulmonar, mamario,
colorrectal, de próstata, útero, estómago y orofaríngeo. En
EE. UU. representa el 2% de todos los tumores y hasta el
7% de los tumores gastrointestinales2
. En Chile constituye el
5.° lugar de las neoplasias en el hombre y el 7.° en la mujer,
con una tasa de mortalidad global de 3,8 por cada 100.000
habitantes, la cual descendió desde el año 2005 a la fecha.
La zona más afectada es la IV Región
1
.
Se distinguen dos tipos histológicos principales: escamoso y
adenocarcinoma y existen marcadas diferencias geográficas
en cuanto a la incidencia de cada variedad y a la prevalencia
global del CE. En Asia se encuentran las mayores tasas,
específicamente en un área denominada como “el cinturón
2. Seineldin S, Seineldin C. Cáncer de Esófago. Enciclopediaciru-
gía digestiva. Sociedad Argentina de Cirugía Digestiva. 2009; I-184,
pág. 1-19.
El esófago de Barret corresponde a una metaplasia con
reemplazo de epitelio esofágico normal por epitelio columnar
concélulascaliciformesproductorasdemucina.Esunalesión
premaligna que aumenta el riesgo de cáncer 50-100 veces
siguiendo la transformación maligna desde displasia de bajo
grado hasta cáncer invasor. El tratamiento de esta condición
con inhibidores de la bomba de protones no regresa la
metaplasia, solo mejora la sintomatología del RGE. La cirugía
antirreflujo como la Fundoplicatura si mejora el Barret (50%
de pacientes en segmentos cortos), pero no hademostrado
disminuir incidencia de cáncer. En pacientes portadores de
esta condición se debe realizar un control con endoscopía
digestiva cada 2-3 años. En pacientes con Barret y cuya
biopsia demuestre displasia de bajo grado, la endoscopía
digestiva debe ser anual y en pacientes con displasia de alto
gradosedebeofreceruntratamientoendoscópicooquirúrgico
de la lesión para evitar el avance a adenocarcinoma. Luego,
el control con endoscopía digestiva se debe realizar cada
3-6 meses.
Laprevalenciadecánceren acalasiaes deaproximadamente
3-6%, este porcentaje aumenta cuanto mayor sea el tiempo
de evolución de la enfermedad. Está descrito que un buen
tratamiento de acalasia reduce el riesgo de CE, sin embargo,
estospacientesdebenmantenerunseguimientoendoscópico
seriado.
151
La terapia de elección es la resección mucosa endoscópica
o mucosectomía. La ventaja de este procedimiento es la
obtención de tejido para su estudio patológico. Alcanza una
remisión local del 95%. La complicación más frecuente es el
sangrado. Perforación esofágica ocurre en menos del 1%.
El tratamiento Gold estándar es la esofagectomía. Dado la
relación de la displasia de alto grado con cáncer, muchos
especialistas larecomiendan.Enmanosdeexpertos,alcanza
tasas de sobrevida a 5 años de 90%, sin embargo, se han
descrito rangos de mortalidad intraoperatoria entre 3 a 12%
y morbilidades hasta en la mitad de los operados.
Clínica
Tabla 1. Factores de riesgo del CE.
Displasia de alto grado y Cáncer
superficial
Displasiadealtogradoescaracterizadaporcambioscelulares
malignosconfinadosalepitelioyquenopenetranlamembrana
basal. Etapa previa a cáncer. Puede coexistir con cáncer
invasor, por lo que debería considerarse como precursor y
marcador de cáncer. Al momento del diagnóstico 40-60% de
pacientes ya tendrán un cáncer invasor.
Progresión acáncer en 16-59%en5 a 8 años deseguimiento.
El mejor método de detección es la EDA con biopsia por
protocolo de Seattle (biopsias de 4 cuadrantes cada 1 cm).
Lasopcionesincluyenunmanejoexpectanteconseguimiento
endoscópicocada3-6meses,sinembargo,estaestrategiano
ha demostrado disminución de mortalidad ni costo-efectividad.
Otra alternativa es la ablación endoscópica por terapia
fotodinámica o radiofrecuencia. La primera tiene un porcentaje
de éxito entre 50-77% de los casos con reepitelización
escamosa en la mitad de los pacientes. Su principal
complicación es la estenosis que ocurre en un tercio de
casos. La progresión a cáncer posterior a esta terapia es de
5a 13%.La ablación porradiofrecuencia reporta erradicación
completa de la metaplasia en 70% de pacientes. No se
evidenció estenosis residuales.
La sintomatología del cáncer incipiente es inespecífica.
Pacientes pueden referir molestia retroesternal o ser
asintomáticos. La clínica habitual y sospechosa de neoplasia
se constituye cuando el tumor es avanzado y habitualmente
tiene compromiso transmural. Lo característico es la disfagia
lógica y la baja de peso. Síntomas menos frecuentes son
el dolor, anemia, tos, que indica compromiso de vía aérea
o fístula; y disfonía por infiltración o compresión de nervios
laríngeos recurrentes.
Ladisfagiaacontececuandoalmenos2/3delacircunferencia
esofágica se encuentra comprometida por tumor. Es
permanenteylógica,esdecir,comienzaconalimentossólidos
yprogresahastamanifestarsetambiénconalimentoslíquidos.
Además, es de fácil localización por el paciente.
La regurgitación se presenta cuando la disfagia es severa
y es mayor cuanto más proximal sea la estenosis. Tos
persistente y cuadros infecciosos respiratorios se deben a
la retención de saliva y alimentos, los cuales pasan al árbol
bronquialafectandoconmayorfrecuenciaalpulmónderecho.
El desarrollo de una fístula traqueo-esofágica también se
manifestará por patologías respiratorias.
Alcontrariodelpacienteportadordecáncergástrico,elapetito
se encuentra conservado, sin embargo, el paso de alimento
hacia distal es difícil por lo que el paciente disminuye su
ingesta con la consecuente disminución de peso.
La parálisis del nervio laríngeo recurrente se expresará como
una voz bitonal y su causa yace en la compresión nerviosa
por adenopatías metastásicas o menos frecuente por el
tumor primario.
Factores de riesgo para cáncer de esófago
Cáncer Escamoso
• Tabaco
• Alcohol
• Nitrosaminas
• Deficiencias vitamínicas(A.C)
• Lesión porcáusticos
• Lesión térmicas
• Condiciones predisponentes
Acalasia
Tylosis
Sd. Plummer Vinson
Papiloma Humano
Enfermedad celíaca
• Adenocarcinoma
Reflujo gastroesofágico
Obesidad
Edad sobre los años
Sexo masculino
Etnia caucásica
152
ESOFÁGICOS EXTRAESOFÁGICOS
• Disfagia
• Regurgitación
• Dolor en la ingestión
• Tos crónica
• Hematemesis
• Anorexia
• Dolor permanente
• Pérdida depeso
• Parálisis recurrencial
• Tos con la deglución
• Hemoptisis
Tabla 2. Clínica del CE.
Diagnóstico
El estudio se inicia con radiografía esófago-estómago-duodeno
contrastada con bario. Este examen es de bajo valor y fácil
de realizar. Entrega información anatómica y funcional con
respectoalamotilidadesofágica,lapresenciadehernia hiatal
o reflujo, y puede también evaluar el grado de obstrucción así
como detectar anomalías esofágicas sospechosas de tumor
manifestadas por zonas de estenosis o irregularidades de
la mucosa. En la actualidad ha perdido terreno desplazado
por la endoscopía y la tomografía computada. Su utilidad
permanece vigente en el estudio de fístulas
El diagnóstico se establece con biopsia por medio de
endoscopía digestiva alta. Cánceres precoces se visualizan
como placas superficiales, nódulos o úlceras, mientras que
tumores avanzados toman la forma de masas ulceradas o
estenosantes. Mientras más muestras se tomen, mayor es
la sensibilidad para detectar carcinoma alcanzando el 98%
con siete muestras. Otros estudios por realizar son:
Endosonografía (EUS): es el mejor examen para el estudio
local.Tieneunaprecisiónglobalde80-90%paralaprofundidad
tumoral (T) y el estado nodal regional (N). Es muy importante
para la decisión terapéutica, ya que si la endosonografía
demuestra solo compromiso mucoso (T1a) bastaría con
resecciónendoscópicadelalesión.Además,sepuederealizar
biopsia por punción de linfonodos guiados con endosonografía
mejorando la etapificación del paciente. Su desventaja es
el aún elevado costo y baja disponibilidad en nuestro país.
El CE escamoso frecuentemente presenta metástasis
supradiafragmáticas, mientras que el adenocarcinoma en
órganos abdominales; 25% en hígado, 20% páncreas, luego
pulmón, huesos y cerebro.
Tomografía computada axial (TAC): es el examen inicial de la
etapificación, y junto con la EDA, es el más utilizado dada su
disponibilidad,sinembargo,tienevalorlimitadoparaelestudio
loco regional. Puede demostrar la presencia de grandes
adenopatías, pero no siempre logra predecir con exactitud
la profundidad tumoral (T). Es útil para descartar metástasis
a distancia, sin embargo, su sensibilidad baja cuando estas
son pequeñas como en carcinomatosis peritoneal.
Tomografía de positrones (PET): junto con el TAC,tiene como
objetivodescartarlapresenciademetástasisadistancia.Tiene
gran sensibilidad y especificidad en metástasis, 88% y93%
respectivamente, mayor que TAC, no obstante, no es buen
examen para el estudio loco regional, probablemente por la
grancaptacióndeltumorprimarioloquedificultalaevaluación
nodal cercana. Su desventaja es el aún elevado costo y baja
disponibilidad en nuestro país, por lo mismo se utiliza cuando
existe alta sospecha de metástasis, las cuales no fueron
demostradas por TAC. También, se usa para reetapificar
pacientes que fueron sometidos a neoadyuvancia y ahora
esperan por cirugía. Estudios revelan que el PET modifica
conducta en hasta el 20% de los pacientes.
153
Etapificación
El objetivo de la etapificación es identificar a los pacientes
que se beneficiarán de los distintos tipos de tratamientos.
Actualmente, se utiliza la 7.a versión del sistema TNM de la
American Joint Comitee of Cancer, la cual incluye tumores de
la unión gastroesofágica y aquellos tumores que comprometen
los primeros 5 cm del estómago. Esta versión presenta un
estadio distinto para los cánceres de tipo escamoso y los
adenocarcinoma, atendiendo a su distinta naturaleza y
comportamiento.
En resumen, la etapificación del cáncer de esófago es
imprecisa. No existe un solo examen ideal, sino que se deben
utilizar los distintos recursos disponibles, anteriormente
descritos, para obtener la mayor información y clasificar
al paciente con el fin de ofrecer un tratamiento y plantear
un pronóstico.
A continuación, se presenta la última versión de la etapaficiación del CE según AJCC
TX No se puede evaluar el tumor primario.
T0 No hay prueba de tumor primario.
Tis Displasia de grado alto.
T1 El tumor invade la lámina propia, la mucosa muscularis o submucosa.
T1a El tumor invade la lámina propia o la mucosa muscularis.
T1b El tumor invade la submucosa.
T2 El tumor invade la muscularis propia.
T3 El tumos invade la adverticia.
T4 El tumor invade las estructuras adyacentes.
T4a Tumor resecable invade la pleura, pericardio o diafragma.
T4b Tumor irresecable invade otras estructuras adyacentes, como la aorta, cuerpo vertebral, tráquea, etc.
154
NX No se pueden evaluar los ganglios linfáticos regionales.
N0 No hay metástasis a ganglios linfáticos regionales.
N1 Metástasis en 1-2 ganglios linfáticos regionales.
N2 Metástasis en 3-6 ganglios linfáticos regionales.
N3 Metástasis en > 7 ganglios linfáticos regionales.
M0 No hay metástasis a distancia.
M1 Hay metástasis a distancia.
Tabla 3. Clasificación TNM del CE según 7.a versión de AJCC.
155
CARCINOMA DE CÉLULAS ESCAMOSAS
ESTADIO T N M
0
Tis (HGD) N0 M0
IA T1 N0 M0
IB T1 N0 M0
T2-3 N0 M0
IIA T2-3 N0 M0
T2-3 N0 M0
IIB T2-3 N0 M0
T2-1 N1 M0
IIA T2-1 N2 M0
T3 N1 M0
T4a N0 M0
IIIB T3 N2 M0
IIIC T4a N1-2 M0
T4b Cualquiera M0
Cualquiera N3 M0
IV Cualquiera Cualquiera M1
Tabla 4. Estadios del CE escamoso según 7.a versión de AJCC.
156
ADENOCARCINOMA
ESTADIO T N M
0 Tis (HGD) N0 M0
IA T1 N0 M0
IB T1 N0 M0
T2 N0 M0
IIA T2 N0 M0
T3 N0 M0
IIB T1-2 N1 M0
T1-2 N2 M0
IIA T3 N1 M0
T4a N0 M0
T3 N2 M0
IIIB T4a N1-2 M0
IIIC
T4b Cualquiera M0
Cualquiera N3 M0
IV Cualquiera Cualquiera M1
Figura 5. Estadios del CE Adenocarcinoma según 7.a versión de AJCC.
157
Tratamiento
Las opciones terapéuticas de un tumor resecable incluyen:
quimiorradiación pre o pos operatoria y cirugía.
Estudios y metaanálisis han demostrado el beneficio del
tratamiento trimodal para aumentar la sobrevida,
principalmente el estudio holandés CROSS. Este tratamiento
incluye quimioterapia y radioterapia concurrente neoadyuvante
y luego cirugía. No se ha demostrado beneficio en indicar
solo quimiorradiación sin cirugía.
La radioterapia por si sola tiene potencial curativo en cáncer
escamoso,sinembargo,losensayosdemuestranqueagregar
cirugíamejoraelcontrollocaldela enfermedaddisminuyendo
la recidiva.
La adyuvancia, (quimio o radio posoperatoria), debe ser
consideradacuandoseinformanadenopatíascomprometidas
en la pieza quirúrgica. Existe un estudio randomizado3
que
comparó quimioterapia adyuvante versus cirugía sola en
pacientes con cáncer escamoso, demostrando un aumento
en la sobrevida y en el tiempo libre de enfermedad en el
primer grupo 1.
Otro estudio4
demostró beneficio de la quimiorradiación
posoperatoria en pacientes portadores de adenocarcinoma
delaunióngastroesofágica,porloqueestaalternativatambién
es válida.
Para definir el mejor tratamiento para cada paciente es
importante aproximarse, a prori, al compromiso ganglionar
que probablemente posee el paciente, con el fin de ofrecer
un tratamiento óptimo, sin dejar enfermedad no tratada, la
cual puede llevar a recidiva y disminución de la sobrevida.
El cáncer que alcanza mucosa y submucosa (T1) presenta
< 5% de linfonodos tumorales, por lo que se puede plantear
en ellos resecciones endoscópicas. Pero en tumores más
avanzados, esta opción terapéutica está descartada, ya que
el compromiso ganglionar es mayor: en T2 el 25-50% de
ganglios es positivos, en T3 el 75-80% y en T4 >80%.
A continuación, se presentan las alternativas de tratamiento
según etapa tumoral:
Etapa I
En esta etapa, el cáncer ha crecido hacia algunas de las
capas más profundas de la pared del esófago (después de
la capa más interna de células), pero no ha alcanzado los
ganglios linfáticos ni otros órganos.
Cánceres T1: algunos cánceres en etapas I muy iniciales que
afectan solo un área pequeña de la mucosa y no han crecido
hacia la submucosa (tumores T1a) se pueden tratar con
resección mucosa endoscópica (EMR), usualmente seguida
de algunos tipos de procedimientos endoscópicos para destruir
cualquier área anormal remanente en el revestimiento del
esófago.
Sinembargo,lamayoríadelospacientesconcánceresT1que
gozan de buena salud se someten a esofagectomía. Puede
que se recomiende quimioterapia y radioterapia después de
la cirugía según estado nodal.
Cánceres T2: para pacientes con cánceres que han invadido
la muscularis propia, el tratamiento se inicia con con
quimiorradiación neoadyuvante y luego cirugía. Si elcáncer
se encuentra en la unión gastroesofágica o en esófago distal,
se puede administrar quimioterapia.
Si el cáncer se encuentra en el esófago cervical se pudiera
recomendar quimiorradiación como tratamiento principal único
en lugar de cirugía. Las personas con cánceres en etapa I
que no se pueden someter a cirugía debido a morbilidades, o
que no quieren someterse a cirugía, podrían ser tratadas con
resección mucosa endoscópica (EMR) y ablación endoscópica,
quimioterapia, radioterapia, o ambas juntas(quimiorradiación).
Etapas II y III
La etapa II incluye cánceres que han crecido hacia la capa
muscular principal del esófago o hacia el tejido conectivo en
el exterior del esófago. Esta etapa también incluye algunos
cánceres que se han propagado a 1 o 2 ganglios linfáticos
cercanos.
Los cánceres en etapa III incluyen algunos cánceres que
han crecido a través de la pared del esófago hasta la capa
exterior,asícomocánceres quehancrecidohacialosórganos
o los tejidos adyacentes. También, incluye la mayoría de los
cánceres que se han propagado a los ganglios linfáticos
cercanos.
Para las personas que están lo suficientemente saludables,
el tratamiento para estos cánceres frecuentemente consiste
enquimiorradiaciónseguidadeesofagectomía.Lospacientes
con adenocarcinoma en la unión gastroesofágica pueden
ser sometidos a neodayuvancia con quimioterapia, sin
radiación, seguida de cirugía. En cáncer de esófago cervical,
la quimiorradiación sin cirugía se mantiene con opción válida.
Los pacientes que no se pueden someter a cirugía debido a
que presentan otros problemas de salud graves usualmente
pueden ser tratados con quimiorradiación.
3. Ando N, Iizuka T, Ide H, et al. Surgery plus chemotherapy
compared with surgery alone for localized squamous cell carcinoma
of the thoracic esophagus: aJapan Clinical OncologyGroup Study—
JCOG9204. J Clin Oncol 2003;21(24):4592-6.
4. MacdonaldJS,SmalleySR,BenedettiJ,etal.Chemoradiotherapy
after surgery compared with surgery alone for adenocarcinoma
of the stomach or gastroesophageal junction. N Engl J Med
2001;345(10):725-30.
158
Etapa IV
El cáncer de esófago en etapa IV se ha propagado a ganglios
linfáticos distantes o a otros órganos distantes.
En general, estos cánceres son muy difíciles de eliminar
completamente. Por lo tanto, la cirugía para tratar de curar
este cáncer, por lo general, no es una buena opción. El
tratamiento se usa principalmente para ayudar a mantener
el cáncer bajo control por el mayor tiempo posible y aliviar
cualquier síntoma que esté causando.
Se puede administrar quimioterapia (posiblemente junto
con el medicamento dirigido trastuzumab si el cáncer es
HER2 positivo) para tratar de ayudar a los pacientes a
sentirse mejor y a vivir por más tiempo, aunque el beneficio
de administrar quimio no está claro. La radioterapia u otros
tratamientos se pueden usar para ayudar con el dolor o la
dificultad al tragar. Para los cánceres que se originan en la
unión gastroesofágica, el tratamiento con el medicamento
dirigido ramucirumab (Cyramza) podría ser una opción si
la quimioterapia regular no está surtiendo efecto. Algunas
personas prefieren no someterse a tratamientos que pueden
causar efectos secundarios graves y optan por solo recibir
tratamientos que les ayudarán a estar más cómodas y a
mejorar la calidad de sus vidas.
Cirugía
Tressonlostiposdecirugíasmásfrecuentementeutilizadosen
el tratamiento del CE: la técnica de Ivor Lewis que considera
una toracotomía derecha más laparotomía; la técnica de
resección transhiatal que utiliza solo laparatomía con disección
digital del esófago torácico; y, finalmente, la técnica del triple
abordaje que incluye disecciones cervicales, torácicas y
abdominales. Para elegir qué cirugía realizar se debe tener
en cuenta la ubicación del tumor,el drenaje linfático y distintas
consideraciones anatómicas.
Esófago cervical: invasión local es frecuente. La cirugía
muchas veces incluye resección de laringe, faringe y esófago
junto con tiroides y disección cervical. Quimiorradiación
presenta sobrevida equivalente con una potencial menor
morbilidad que la cirugía.
Tercio superior esófago torácico: presenta dificultad anatómica
por relación con tráquea y grandes vasos. Vía de elección
es por triple abordaje o esofagectomía transhiatal con
anastomosis cervical para obtener márgenes adecuados.
Tercio medio de esófago torácico: vías de elección son Ivor
Lewis, triple abordaje o transhiatal con anastomosis torácica
alta o cervical.
Tercio inferior de esófago torácico: se puede realizar
esofagectomía de Ivor Lewis, triple abordaje, transhiatal o
por medio de toracotomía izquierda, no existe ventaja de una
técnicasobreotra enestaárea.Seutilizaunconductogástrico
para la construcción de anastomosis. Si las circunstancias lo
requieren, se puede utilizar colgajo de colon o yeyuno para
la reconstitución de tránsito.
Unióngastroesofágica:tumorestipoSiewert1y2sontratados
con esofagectomía. En cáncer tipo Siewert 3 se recomienda
gastrectomía total con esófagoyeyuno anastomosis en y de
Roux.
159
Diagnóstico
La mayoría de los pacientes se presentará conenfermedad
irresecable o inoperable debido a invasión local, metástasis
o comorbilidades. Para ellos existen múltiples medidas que
aumentarán su calidad de vida: quimiorradiación, cirugía y
tratamiento endoluminal. El objetivo principal es mantener el
paso adecuado de bolo alimenticio ysaliva así como controlar
el dolor y sangrado del paciente.
Mantener el lumen desobstruido se logra mediante prótesis
esofágica o dilataciones endoscópicas. Las complicaciones
son raras, pero incluyen perforación, formación de fístulas
y sangrado. En caso de fístulas previamente existentes, la
prótesis es el tratamiento de elección. Cirugía es otra opción
para paliar la obstrucción tumoral y tratar fístulas traqueo-
esofágicas.. El by-pass retroesternal consiste en excluir el
esófago torácico y construir un conducto gástrico, el cual se
une a esófago cervical por posterior al esternón. Aunque es
una cirugía algo menor a la esofagectomía, también posee
alta mortalidad (25%) y morbilidad (30-60%).
El control del dolor se logra a través de analgésicos orales
y radioterapia en caso de metástasis óseas; asimismo, la
radiación es útil para el manejo de hemorragias.
Quimioterapia es útil si existen metástasis a distancia y
ha demostrado alivio de disfagia y en combinación con
radioterapia puede prolongar la vida en algunospacientes.
Posoperatorio
Pacientes realizan su posoperatorio en unidad de paciente
crítico en régimen cero por boca hasta el séptimo día cuando
se realiza un esofagograma con contraste que descarte
filtracióndeanastomosis.Luego,seiniciarégimenconlíquidos
claros. Suplemento nutricional vía enteral por sonda se inicia
de forma precoz una vez resuelto el íleo posoperatorio.
Pronóstico
Lamortalidaddelacirugíaa 30díasrondael5%,mientrasque
su morbilidad es alta alcanzando entre 30 y60% en diferentes
series ysecaracterizaporalteracionesrespiratorias,filtración
de anastomosis y problemas cardíacos. Complicaciones
tardíasincluyenlaestenosisdelasanastomosisen30-50%de
los pacientes, reflujo sintomático y mal vaciamiento gástrico.
160
Mortalidad
Filtración
Neumonía
Parálisis cordal
Necrosi
s
gástrica
Quilotórax
Michigan
( n= 2007)
VA
(n=1777)
Sloan-Kettering
(n=510)
Duke
(n=379)
HCO3
(meq/L)
3% 9,8% 4% 5,8% 4,5%
12% NE 4% 14% 12%
2% 21,4% 21% 16% 10%
4,5% NE 4% NE NE
2% NE NE NE 2%
1% 0,02% NE NE 3%
La sobrevida global del cáncer de esófago a 5 años es entre
5-16%, este porcentaje ha aumentado progresivamente con
los años, debido principalmente al desarrollo quirúrgico y
al mejor cuidado posoperatorio en la unidad de cuidados
intensivos, sin embargo, aún es baja por el diagnóstico tardío
de la enfermedad y varía según la etapa de pesquisa del
tumor. En estadios precoces I-IIA con linfonodos negativos
la sobrevida a 5 años es de 34-62%, si existen adenopatías
malignas, disminuye a 17-25%.
El cáncer de esófago posee la tendencia a diseminarse por
vía linfática submucosa por lo que se sugiere un margende
sección de al menos 5 cm de borde libre de tumor, aun así a
recurrencia locoregional varía entre 5 a 45%. El tratamiento
en estos casos consiste en quimiorradiación.
Los factores pronósticos asociados a sobrevida en cáncer
esofágico son la resección completa del tumor (cirugía
R0), el estado nodal y el número de ganglios infiltrados,
complicaciones quirúrgicas y el volumen quirúrgico del centro
hospitalario.
Otros cánceres del esófago
Existen otros tipos histológicos de cáncer esofágico que
representanmenosdel10%,loscalessedetallanbrevemente
a continuación.
Tumor carcinoide
Originado en células de la lámina basal. Con potencial
metastásico frecuentemente a hígado. Se acompaña del
síndrome carcinoide caracterizado por episodios de flushing
y diarrea.
Melanoma
Se origina en melanoblastos ectópicos en la mucosa. Es
importante el hallazgo de melanocitos en la pieza quirúrgica
paraconfirmarquecorrespondeatumorprimario.Presentaun
crecimiento amplio lateral y su profundidad es muchas veces
subestimada. Tiene tendencia a metastizar en la submucosa
gastrointestinal formando pólipos.
Sarcoma
Se presenta como una masa polipoide de lento crecimiento o
como una úlcera con focos de hemorragia y necrosis.
161
Bibliografía
1. Seineldin S, Seineldin C. Cáncer de Esófago. Enciclopedia cirugía digestiva. Sociedad Argentina de Cirugía Digestiva. 2009; I-184,
pág. 1-19.
2. Schuchert M, Luketich J, Landreneau R. Management of Esophageal Cancer. Curr Probl Surg 2010;47:845-946.
3. American Cancer Society. Cáncer de esófago. 2014. Disponible en: http://www.cancer.org/espanol/cancer/cancerdeesofago/guiadetallada/
cancer-de-esofago-treating-by-stage
162
163
Cirugía gástrica
164
165
4.1 Anatomía gástrica
Gajardo J, Sepúlveda A, Hierard M, Sepúlveda R.
Embriología
El estómago se forma desde la quinta semana de gestación a
partir de una dilatación del intestino anterior, para luego rotar,
descender y, finalmente, dilatarse. Se divide en 3 regiones:
fondo, cuerpo y antro. La región más proximal (fondo) limita
conelcardias.Distalmenteseencuentra elpíloro,esfinterque
lo conecta con el duodeno. El estómago se encuentra fijo de
ambos extremos:unióngastroesofágica ypíloro,permitiendo
alguna movilidad en su porción media.
166
167
Irrigación y drenaje venoso
Dada principalmente por el tronco celíaco y sus ramas: arteria gástrica izquierda, arteria hepática común y arteria esplénica.
La arteria gástrica izquierda es la de mayor calibre y la mayoría de las veces proviene directamente del tronco celíaco,
aunque ocasionalmente se origina de una arteria hepática izquierda. La arteria hepática común da origen a la arteria
gastroduodenal, la cual se ramifica en la arteria gástrica derecha (anastomosándose con la arteria gástrica izquierda) y la
arteria gastroepiploica derecha que discurre por la curvatura mayor. La arteria esplénica origina las ramas gastroepiploica
izquierda y gástricas cortas.
En cuanto al drenaje venoso, las venas gástricas derecha e izquierda drenan a la vena porta; mientras que la vena
gastroepiploica derecha drena a la vena mesentérica superior y la vena gastroepiploica izquierda drena a la vena esplénica.
Irrigación delestómago
168
Drenaje venoso del estómago
Venas gástricas cortas
169
Drenaje venoso del estómago- Formación vena porta
170
Drenaje linfático Diafragma
Es de gran importancia por ser una de las principales vías de
diseminación del cáncer gástrico. Los linfáticos se organizan
en 16 grupos ganglionares que se ubican desde la raíz
del mesenterio hasta el diafragma y transitan paralelo a
la vasculatura del estómago. Con el fin de sistematizar su
estudio, los linfáticos del estómago se clasifican en 3 grandes
grupos o compartimentos:
• Compartimento I: incluye los linfáticos cardiales
derecho e izquierdo, curvatura menor y mayor, suprae
infrapilóricos (grupos 1 al 6).
• Compartimento II: linfáticos en relación con las arterias
regionales (arteria gástrica izquierda, hepática común,
tronco celíaco y arteria esplénica), hilio esplénico
y ligamento hepatoduodenal (grupos 7 al 12).
• Compartimento III: linfáticos retropancreáticos, arterias
mesentérica superior y cólica media, y paraaórticos
(grupos 13 al 16).
171
Inervación
Compuesta por el sistema parasimpático (nervio vago) y
simpático (plexo celíaco). A nivel de la unión gastroesofágica
el nervio vago se divide en 2 troncos: n. vago izquierdo
(anterior) y el n. vago derecho (posterior). El nervio vago
izquierdo da una rama hepática y otra hacia la curvatura
menor. El nervio vago derecho da una rama hacia el
plexo celíaco. La mayoría de las fibras vagales son
aferentes. La inervación simpática va desde D5-D10.
Inervación gástrica
172
Histología
La pared del estómago tiene cuatro capas: mucosa,
submucosa, muscular propia y serosa. La mucosa es la
capa interna, formada por células epiteliales de tipo columnar,
láminapropiaymusculardelamucosa(importanteparadefinir
cáncer gástrico invasivo de no invasivo). La submucosa se
extiende desde la mucosa hasta la capa muscular externa y
es rica en tejido colágeno, vasos y, además, contiene al plexo
nervioso autonómico de Meissner. La muscular está formada
por 3 capas de músculo liso y en la capa más externa se
encuentra el plexo mientérico de Auerbach. La serosa está
formada por el peritoneo que recubre el estómago.
173
Bibliografía
1. Moore KL, Dalley AF,Agur MR, 5th eds. Anatomía con orientación clínica. Editorial Panamericana.
2. David M. Mahvi, Seth B. Krantz. Capítulo 49 Estómago. En Townsend: Sabiston Tratado de Cirugía, 19.a ed. Townsed CM,
Beauchamp RD, Evers BM, Mattox KL. Elsevier Saunders 2013.
3. Daniel T.Dempsey. Capítulo 26 Estómago. En Schwartz Principios de Cirugía 9.a ed. Brunicardi FC, Andersen DK, Billiar TR, Dunn
DL, Hunter JG, Matthews JB, Pollock RE. McGrawHill.
4. Cameron JL, Cameron AM. Stomach. Current Surgical Therapy 11th ed. Elsevier Saunders.
5. Mahadevan V. Anatomy of the stomach. Surgery2014.
174
175
4.2 GIST
Ramírez J, Devaud N.
Introducción
Los tumores del estroma gastrointestinales o GIST por sus
siglas en inglés, son tumores poco frecuentes que afectan
el tubo digestivo, dando cuenta solo del 0,2% de todos los
tumores1
. Estas neoplasias son no epiteliales, su origen
está en tejido mesenquimático. Se cree que provienen de
las células de Cajal, del plexo mientérico, que actúan como
marcapasos intestinal.
Su característica principal es que > del 95%2
presentan
CD117 positivo. Este antígeno es parte del receptor tirosine
quinasa KIT transmembrana.
Clasificación
Los GIST pueden diferenciarse en 3 tipos por
sus características a la inmunohistoquímica:
• Epiteloides.
• Neurogénicos.
• Mixto.
Según ubicación los GIST pueden ser:
• Gástricos 60-70%.
• Intestino delgado 20-30%.
• Esófago, colon y recto 10%.
Clínica
LosGISTsepuedenclasificarentresformasdepresentación:
1. Hallazgo incidental: es la forma de presentación más
habitual y comprende aquellas lesiones de bajo riesgo por
su tamaño pequeño (<5cm) y bajo potencial de malignidad.
Estas lesiones habitualmente se diagnostican durante un
procedimiento endoscópico de rutina donde no hay una
sospecha clínica previa. En aquellas lesiones < 2cm es
planteable la sola observación de estas.
sangrado del tumor.
• Hemorragia digestiva.
• Disfagia: habitualmente presente en GIST de ubicación
esofágica.
• Obstrucciónintestinal:enGISTintestinaldegrantamaño
que puede condicionar una intususepción.
La perforación de víscera hueca secundaria a la presencia
de un GIST es inhabitual.
3. Enfermedad metastásica: esta forma de presentación
traduce la forma más agresiva de esta enfermedad y los
síntomasasociadosestádeterminadossegúnlalocalización
de estas metástasis. La localización más frecuente de la
enfermedad metastásica está en el hígado.
Diagnóstico
1. La endoscopía digestiva permite visualizar la lesión
que se presenta como un tumor submucoso que
puede tener o no ulceración. La endoscopía permite
la primera aproximación diagnóstica de este tumor,
identificando su localización y permitiendo la realización
de una biopsia. Sin embargo, dado su ubicación en la
submucosa, el rendimiento de la biopsia endoscópcia
es baja. En tumores pequeños, la endoscopía permite
realizar diagnóstico mediante la resección total de la
lesión mediante la disección submucosa.
2. Endosonografía: esta consiste en la visualizción
por ultrasonido de la lesión, logrando definir el
compromiso en profundidad del tumor respecto a
las distintas capas del tracto digestivo. Es
especialmente útil en lesiones ubicadas en el esófago.
3. El TAC con contraste de abdomen y pelvis es útil para
caracterizar las lesiones sospechosas de GIST y su
posible compromiso metastásico. La RNM, a su vez,
puede ser utilizada en tumores de recto o para el estudio
de metástasis hepáticas.
2. Enfermedad sintomática: esta forma de presentación
comprende aquellas lesiones más agresivas, ya sea por su
mayor tamaño y/o agresividad biológica.
La presentación clínica será variable según su ubicaciónen
eltractodigestivo. Entrelos síntomas losmásfrecuentes son:
• Dolor abdominal: Traduce generalmente a necrosis o
1. Ford S, Gronchi A. Indications for surgery in advanced/metas-
tatic GIST. European Journal of Cancer 63 (2016) 154e167.
2, Lasota J, Wozniak A, Sarlomo-Rikala M, et al: Mutations in
exons 9 and 13 of KIT gene are rare events in gastrointestinal
stromal tumors. A study of 200 cases. Am J Pathol 2000; 157: pp.
1091-1095.
176
Factores Pronóstico
Existen ciertos factores que pueden ser tomados en cuenta
para estimar si un GIST tendrá comportamiento maligno, es
decir, si recurrirá o dará metástasis.
- > 5 cm de tamaño.
- > 5 mitosis por 50 campos de alto poder
- Ubicación extragástrica
Tratamiento
El tratamiento para estos tumores contempla la cirugía con
o sin tratamiento adyuvante dependiendo del potencial
maligno del tumor. Los GIST > 2cm deben ser considerados
de comportamiento maligno por lo que deben resecarse,
mientras que los que miden entre 1-2cm debe discutirse
caso a caso.
El objetivo de la cirugía es la resección completa de la lesión
con márgenes negativos.
Una vez resecado el tumor, a los pacientes con alto riesgo de
recurrencia se les puede indicar Imatinib (inhibidor de tirosin
kinasa) como terapia adyuvante. Para esto se utilizan diferentes
criterios de estratificación que consideran principalmente el
tamaño, mitosis y ubicación del tumor.
Pacientes con tumores muy grandes o con enfermedad
metastásica resecable pueden recibir Imatinib como terpia
neoadyuvante.
En casos de enfermedad metastásica está indicado el uso de
Imatinib por un período habitualmente de 6 meses, mientras
que otros agentes de quimioterapia y la radioterapia no han
presentado efectos favorables como para ser indicados en
este contexto.
Bibliografía
1. Demetri G, Benjamin R, Blanke C, Blay J, Casali P,Choi H et al.NCCN Task Force Report: Management of Patients with
Gastrointestinal Stromal Tumor (GIST)—Update of the NCCN Clinical Practice Guidelines. Journal of the National Comprehensive
Cancer Network. Volume 5. Supplement 2. July2007.
2. Raut C, Pawlik T.Gastrointestinal Stromal Tumors. In: Cameron J, Cameron A. Current Surgical Therapy. Philadelphia: Elsevier;
2014. p. 96-103.
3. Feldman M. Gastrointestinal Stromal Tumors (GISTs). In: Feldman M. Sleisenger and Fordtran’s Gastrointestinal and Liver Disease,
Tenth Edition. Philadelphia: Elsevier; 2016. p. 487-500.
4. Nilsson B, Bumming P,Meis-Kindblom J, Oden A, Dortok A, Gustavsson B, et al. Gastrointestinal Stromal Tumors: The Incidence,
Prevalence, Clinical Course, and Prognostication in the Preimatinib Mesylate Era APopulation-Based Study in Western Sweden.
CANCER February 15, 2005 / Volume 103 / Number4.
177
4.3 Cáncer gástrico
Gajardo J, Hierard MD, Devaud N
Introducción Factores de Riesgo
Desde que fuese descrito por primera vez en el año 3000
A.d.C., el cáncer gástrico ha sido reconocido como una de las
enfermedades malignas más frecuentes ycon mayor impacto
en nuestra sociedad. Fue considerada la primera causa de
muerte por cáncer hasta que en 1980 fue superada por el
cáncer de pulmón 1
. Con el paso de los años, su incidencia
ha disminuido en parte gracias a la mejora en técnicas de
conservación de los alimentos y al diagnóstico precoz de
entidades precursoras como la infección por Helicobacter
pylori y úlceras pépticas 2
.
Epidemiología
El cáncer gástrico es el quinto tipo de cáncer mas frecuente a
nivel mundial, y ocupa la tercera causa de muerte por cáncer
en ambos sexos3
. Es especialmente prevalente en Sudamérica
y Asia, siendo Japón el principal exponente de este último.
Chile forma parte de los países con más alta incidencia de
estaenfermedadjuntoaJapón,Korea,CostaRicaySingapur.
En nuestro país ocupa el primer lugar como causa de
muerte por tumores malignos en la población masculina,
con una tasa de mortalidad de 20/100.000 habitantes4
.
Afecta preferentemente al sexo masculino en una relación
de 2,6:1, siendo de mayor frecuencia entre la sexta y séptima
década de vida. Solo un 10% se presenta en etapas precoces
debido principalmente a la clínica inespecífica, lo que lleva a
una consulta tardía. En países como Japón, en que se han
instaurado programas de tamizaje, el diagnóstico de cáncer
gástrico en etapas precoces puede alcanzar el 60%5
.
1. Parkin DM. Epidemiology of cáncer: global patterns and trends.
Toxicol Lett 1998;102-103:227.
2. Pisani P.Estimates of the worldwide mortality from eighteen major
cancers in 1985. Implications for prevention and projections of future
burden. Int J Cancer. 1993;55(6):891.
3. GLOBOCAN 2012.
4. Guía GES Cáncer Gástrico 2010.
5. Noguchi Y. Is gastric carcinoma different between Japan and the
United States?. Cancer 2000;89(11):2237.
6.Yang P.Overweight, obesity and gastric cáncer risk: resultas from
a meta-analysis of cohort studies. Eur J Cancer. 2009;45(16):2867.
7. Ladeiras-Lopes R. Smoking and gastric cáncer: systematic
review and meta-analysis of cohort studies.
Factores de riesgo ambientales
Helicobacter pylori (HP): La asociación entre la infección
por HP y el desarrollo de cáncer gástrico ha sido ampliamente
demostrada en la literatura. El mecanismo principal es la
inflamacióncrónica,quellevaagastritis,metaplasiaintestinal,
displasia y finalmente adenocarcinoma de tipo intestinal. La
infección por esta bacteria es altamente prevalente en Chile,
se estima que un 75% de la población es HP (+).
Dieta: El consumo de alimentos ahumados y salados
(particularmente aquellos que contienen elevados niveles
de nitrato) y el bajo consumo de vegetales, se encuentran
relacionados con un riesgo aumentado de desarrollo de
cáncer gástrico. El mecanismo es la conversión de nitratos
en compuestos N-nitroso carcinogénicos.
Obesidad:Elexcesodepesoseasociaaunriesgoaumentado
de desarrollar cáncer gástrico, y la fuerza de esta relación
aumenta a medida que aumenta el índice de masa corporal.
Tabaquismo: El riesgo en personas fumadoras es
aproximadamente 1.5 veces mayor que aquellas no fumadoras.
Este riesgo disminuye tras 10 años de suspender el hábito
tabáquico7
.
Nivel Socioecomómico: En poblaciones con bajo nivel
socioeconómico se ha observado un riesgo 2 veces mayor
de desarrollar cáncer gástrico distal.
Factores de riesgo asociados al huesped.
Grupo A Sanguíneo. Además de ser un factor de riesgo
independientededesarrollarcáncergástrico,sehaobservado
una mayor incidencia de anemia perniciosa en pacientes con
Grupo A.
Predisposición Familiar. El cáncer gástrico difuso hereditario
es una forma heredada de esta enfermedad. Es el resultado
de una mutación genética en la molécula de adhesión E-
Cadherina. Las personas portadoras de esta mutación,
tienen un riesgo de 80% de desarrollar cáncer gástrico8
.
Anemia Perniciosa. Los pacientes con anemia perniciosa se
caracterizan por presentar aclorhidria. Esta condición ocurre
como consecuencia de la destrucción autoinmune de las
células parietales gástricas. La mucosa se vuelve atrófica y
178
desarrolla metaplasia antral e intestinal.
Pólipos Gástricos. Los pólipos adenomatosos conllevan
riesgo de displasia hacia carcinoma, y este riesgo aumenta
a medida que aumenta el tamaño del pólipo9
.
Clasificación
Histológica: Sobre el 90% de las neoplasias gástricas
corresponden al tipo adenocarcinoma que es de origen
epitelial. Los tumores carcinoides del estómago y los tumores
no epiteliales del estómago comprenden menos del 10%
restante.
Durante los últimos 50 años, la clasificación histológica más
utilizada ha sido la de Lauren, que reconoce el tipo Intestinal
y el tipo Difuso para los adenocarcinomas, siendo el tipo
intestinal el más frecuente.
En Chile sin embargo, se ha observado un cambio en la
epidemiología de esta enfermedad. Existe hoy progresivamente,
una mayor incidencia del tipo difuso mal diferenciado, de
localización proximal, en comparación al tipo intestinal (bien
o moderadamente diferenciado) que era el tipo histológico
prevalente hace sólo 15 años.
Estos dos tipos presentan diferencias no solo histológicas
sino que también clínicas, como se muestra en la Tabla 2.
CáncerIncipiente:Cáncergástricoquecomprometehastala
submucosa sin sobrepasarla, independiente de su compromiso
ganglionar. EnestoscasosseutilizalaclasificaciónJaponesa
que los divide en tipos del I al III según su patrón de invasión.
Cáncer Avanzado: Cáncer Gástrico que compromete la
muscular propia. Se utiliza la clasificación macroscópica
de Bormann según sus características morfológicas a la
endoscopía. En estos casos, el riesgo de metástasis ganglionar
alcanza un 40%.
Tabla 2
8. Van der Post RS. Hereditary diffuse gastric cáncer. J Med
Genet 2015;52(6):361-374.
9. Sabiston Textbook of Surgery. Stomach. Gastric Cáncer.
Risk Factors..
Intestinal Difuso
Causa ambiental Causa familiar o genética
Se desarrolla en el contexto
de gastritis atrófica o
metaplasia intestinal
Se asocia a tipo
sanguíneo A (+)
Más común en hombres
Incidencia similar entre
hombre y mujeres
Incidencia aumenta con la edad
Presentación en
edades más
tempranas
Tiende a formar glándulas
Pobremente
diferenciado
Metástasis hematógena Metástasis linfática y
transmural
Pronóstico mas favorable Pronóstico menos
favorable
179
Clasificación macroscópica del cáncer gástrico incipiente
Tipo II: Aplanado
o superficial
180
Clasificación macroscópica de Borrmann
181
Aspecto macroscópico cáncer gástrico avanzado Linitis plástica
Clínica Historia natural del cáncer gástrico
Signos y síntomas. Son inespecíficos, por lo cual rara vez
son motivo de consulta médica, contribuyendo al diagnóstico
tardío de la enfermedad.
• Dolor epigástrico (constante, no irradiado, no cede con
la alimentación).
• Saciedad precoz
• Pérdida de peso
• En etapas avanzadas también se puede encontrar
síntomas de obstrucción o disfagia, anemia (por
hemorragia digestiva con melena o hematemesis) y
síndrome pilórico.
Examen físico: Se debe centrar en la identificación de
elementos que sugieran enfermedad avanzada.
• Estado nutricional
• Adenopatía de Virchow: adenopatía supraclavicular
• Adenopatía de Hermana María José: adenopatía
periumbilical
• Masa abdominal
• Derrame pleural y derrame pulmonar (metástasis
pulmonares)
• Ascitis (compromiso hepático)
Ladiseminacióndelaenfermedadpuedeserlocal,invadiendo
la serosa y órganos vecinos, o a distancia por vía linfática,
sanguínea y peritoneal.
Vía linfática: Existe una relación entre la profundidad de
invasión y riesgo de compromiso ganglionar. En cáncer
incipienteelriesgoessignificativamentemenorqueencáncer
avanzado (5% y 40% respectivamente).
La progresión ganglionar de la enfermedad puede ser local
o perigástrica (definida como la primera barrera ganglionar,
grupos I-VI); luego a los grupos ganglionares relacionados a
las arterias que nacen del tronco celíaco (grupos VII, VIII, IX,
X, XI y XII) conocidos como la segunda barrera ganglionar; y
por último la diseminación ganglionar a distancia hasta llegar
a la carcinomatosis peritoneal.
Vía hematógena: El lugar más frecuente de metástasispor
esta vía es el hígado (40%). Le siguen pulmón, glándulas
suprarrenales y médula ósea.
Vía peritoneal: Ocurre por el desprendimiento de células
neoplásicas desde la serosa gástrica comprometida. Un
ejemplo de esta vía de diseminación es el Tumor de
Krukenberg, que corresponde a la metástasis al ovario.
182
Diagnóstico
Exámenes generales: Carecen de especificidad y no son
útiles para el diagnóstico de cáncer gástrico, pero permiten la
evaluacióngeneraldelpaciente.Encáncergástricoavanzado
es posible observar anemia ferropriva, hipoproteinemia, sangre
oculta en deposiciones y melena e incluso alteraciones en la
analítica hepática por metástasis.
Endoscopía digestiva alta: Es el Gold standard. Permite la
visión directa de la lesión y la toma de biopsias para confirmar
o descartar el diagnóstico. Tiene una sensibilidad superior al
98% cuando se toman más de 7 muestras. La muestra para
biopsia debe ser tomada del borde de la lesión, incluyendo
tejidonormal.Sesugieretomarcomomínimo10-12muestras.
Etapificación
Actualmente se utiliza el método de etapificación AJCC TNM
7ª Ed, 2010 y tiene principalmente dos objetivos: determinar
la extensión de la enfermedad y obtener información acerca
del pronóstico de ésta.
Los principales métodos de etapificación son la tomografía
computarizada, PET/CT y laparoscopía diagnóstica. La
endosonografía no es parte de la etapifiación rutinaria en el
estudio de cáncer gástrico, pero sí se utiliza en algunos casos
de enfermedad incipiente
1.Tomografía Computarizada: Es el Gold Standard para
completar la etapificación del cáncer gástrico. Permite
identificar invasión a órganos vecinos, la presencia de
carcinomatosis peritoneal, el compromiso ganglionar y la
presencia de metástasis a distancia. Es imprescindible para
definir un correcto estadío TNM, sin embargo menos del 50%
de la carcinomatosis peritoneal es visible al TAC.
2. Tomografía por Emisión de Positrones: No es
rutinariamente utilizado ya que sólo el 50% de los tumores
gástricos son visibles al PET. Su principal utilidad es la
identificación de metástasis ganglionar a distancia y la
evaluación de resultados post quimioterapaneoadyuvante.
3.Laparoscopía Diagnóstica: Se recomienda su utilización
en enfermedad avanzada con sospecha de carcinomatosis
peritoneal.
4.Endosonografía: En lesiones tempranas candidatas a un
tratamiento endoscópico, es necesario precisar con exactitud
la profundidad de la lesión. La endosonografía tiene una
elevada sensibilidad (>90%) para distinguir entre T1 y T211
.
10. Graham DY. Prospective evaluation of biopsy number in the
diagnosis of esophageal and gastric carcinoma. Gastroenterology
1982;82(2):228.
11. Yanai H. Delineation of the gastric muscularis mucosae and
assessment of depth of invasión of early gastric cáncer. Gastrointest
Endosc 1993;39(4):505.
183
Tumor primario
Tx Tumor primario no puede ser identificado
T0 No hay evidencia de tumor primario
Tis
Carcinoma in situ; tumor intraepitelial sin invasión de la lamina propia.
T1
- T1a
- T1b
Tumor invade la lamina propia, muscular de la mucosa o submucosa
- Tumor invade lamina propia o muscular de la mucosa
- Tumor invade submucosa
T2 Tumor invade muscular propia
T3 Tumor penetra subserosa sin invasión de peritoneo visceral o estructuras
adyacentes
T4
- T4a
- T4b
Tumor invade la serosa (peritoneo visceral) o estructuras adyacentes
- Tumor invade serosa (peritoneo visceral)
- Tumor invade estructuras adyacentes
Linfonodos
regionales
Nx Linfonodos regionales no pueden ser identificado
N0 No hay metástasis a linfonodos regionales
N1 Metástasis en 1-2 linfonodos regionales
N2 Metástasis en 3-6 linfonodos regionales
N3
- N3a
- N3b
Metástasis en 7 o mas linfonodos regionales
- Metástasis en 7-15 linfonodos regionales
- Metástasis en 16 o mas linfonodos regionales
Metástasis a
distancia
M0 Sin metástasis a distancia
M1 Presencia de metástasis a distancia
184
Estadio anatómico
0 Tis N0 M0
IA T1 N0 M0
IB
T2
T1
N0
N1
N1
M0
M0
IIA
T3
T2
T1
N0
N1
N2
M0
M0
M0
IIB
T4a
T3
T2
T1
N0
N1
N2
N3
M0
M0
M0
M0
IIIA
T4a
T3
T2
N1
N2
N3
M0
M0
M0
IIIB
T4b
T4b
T4a
T3
N0
N1
N2
N3
M0
M0
M0
M0
IIIC
T4b
T4b
T4a
N2
N3
N3
M0
M0
M0
IV Cualquier T Cualquier N M1
185
Clasificación TNM Cáncer gástrico
Tratamiento
CIRUGÍA
La cirugía es el único tratamiento potencialmente curativo
en cáncer gástrico. La resección completa con márgenes
macrocópicos adecuados (mayor o igual a 4 cm) es
ampliamente considerada como estándar. No obstante, el
tipo de resección (subtotal versus total) y la extensión de la
linfadenectomía continúa siendo un tema controversial.
Reconstrucción gastrectomíasubtotal
tipo BillrothI
186
Reconstrucción gastrectomía subtotal tipo
Billroth II
Reconstrucción gastrectomía total
tipo Y de roux
187
PRINCIPIOS QUIRÚRGICOS
Luego de un adecuado estudio de diseminación, el objetivo
primordial de la cirugía es lograr una resección completa con
márgenes negativos (resección R0).
Para tumores T1b – T3, se prefiere una resección gástrica
adecuada (subtotal o total) con márgenes microscópicos
negativos (R0). Los tumores T4 requieren resección en bloc
con las estructuras involucradas. Finalmente lo tumores
incipientes(Tis,T1ayT1b),puedensercandidatosaresección
endoscópica según criterios actualmente bien definidos.
La esplenectomía profiláctica debe ser evitada, habiendo
quedado demostrado que su realización de rutina se asocia
a mayor morbimortalidad, sin diferencias significativas en la
sobrevida12
.
Los carcinomas gástricos son considerados irresecables si
existe evidencia de compromiso peritoneal o metástasis a
distancia
LINFADENECTOMÍA
La gastrectomía total con criterio oncológico debe incluir una
linfadenectomía adecuada. La extensión de este procedimiento
es aún controversial, pudiendo clasificarse como D0, D1, D2
y D3 según cuáles sean los grupos ganglionares removidos
en la gastrectomía.
La gastrectomía total con linfadenectomía D2, es el tratamiento
estándar para el cáncer gástrico, debiéndose resecar al
menos 15 ganglios para realizar una correcta etapificación.
LosbeneficiosdelalinfadenectomíaD2hansidoampliamente
respaldados en diversos estudios en términos de una mejor
sobrevidaa5y10añosalsercomparadoconlalinfadenectomía
D1,sindemostrarunamorbilidadsignificativamentemayor1314
.
Disección ganglionarD1
12. Yu W. Randomized clinical trial of splenectomy versus splenic
preservation in patients with proximal gastric cáncer. Br J Sur
2006;93:559-563.
13. Songun I. Surgical treatment of gastric cancer: 15-year follow-
up results of the randomised nationwide Dutch D1D2 trial. Lancet
Oncol 2010;11:439-449.
14. Jatzko GR. A 10-year experience with Japanese-type radical
lymph node dissection for gastric cancer outside of Japan. Cancer
1995;76:1302-1312.
188
RESECCIONES ENDOSCOPICAS
La resección endoscópica mucosa y la disección submucosa
endoscópicahancobradoimportanciaenelmanejodelcáncer
gástrico temprano, sobre todo en países con programas
de tamizaje en que se diagnostican un mayor número de
pacientes con cáncer gástrico en etapas tempranas.
La selección acuciosa de pacientes candidatos a este tipo
de tratamiento es de vital importancia ya que la probabilidad
de metástasis ganglionar se encuentra influenciada por las
características del tumor.
De esta forma, la resección endoscópica se considera un
tratamiento adecuado en pacientes con tumores incipientes
con las siguientes características15
:
1. Lesión única
2. Bien o moderadamente diferenciado
3. No ulcerado
4. ≤ 2 cms
TERAPIA ADYUVANTE Y NEOADYUVANTE
la sobrevida a 5 años en el grupo sometido a quimioterapia
perioperatoria.
El radioquimioteapia post operatoria también ha demostrado
beneficios en el control local y la progresión de la enfermedad
como lo demostró el estudio INT 0116. Si bien este estudio
fue discutido por la disección ganglionar subóptima de los
pacientes incluidos, los resultados logrados permiten por
lo menos sugerir un beneficio de esta terapia adyuvante en
enfermedad avanzada cuando no se logra un tratamiento
neoayuvante con quimioterapia.
Por otro lado, en el año 2007, Sakuramoto et al17
publicó los
resultados de un estudio Japonés que comparó la cirugía
exclusiva versus la cirugía más quimioterapia adyuvante en
cáncer gástrico avanzado. La sobrevida a 3 años fue superior
en el grupo sometido a quimioterapia adyuvante.
El cáncer gástrico es un cáncer biológicamente agresivo, con
altas tasas de recurrencia. Luego de una Gastrectomía Total
R0 se han descrito recurrencias de un 30% (principalmente
dentro de los 2 primeros años)16
.
En este contexto, la quimioterapia neoadyuvante y la
quimioterapia adyuvante han cobrado interés desde que en
2006 se publicaran los resultados del estudio MAGIC. Este
estudio comparó la cirugía exclusiva versus quimioterapia
perioperatoria en cáncer gástrico estadios I y II. Seobservó
una mejora significativa en el tiempo libre de enfermedad yen
15. Ono H. Endoscopic mucosal resection for treatment of early
gastric cancer. Gut 2001;48:225-229.
16. Yoo CH. Recurrence following curative resection for gastric
carcinoma. Br J Surg 2000;87:236-242.
Disección D2
189
PRONÓSTICO
En USA la tasa de mortalidad para cáncer gástrico es de
3.7/100.000 habitantes. La sobrevida general a 5 años es de
un25%,siendounpocomasaltaenpacientesquesesometen
a cirugía curativa. Alrededor de un 64% de los pacientes se
presenta en etapa de irresecabilidad.
Recurrencia:postgastrectomíavadesde40-80%,ocurriendo
en su gran mayoría durante los primeros 3 años.
Seguimiento: gran parte de las recurrencias ocurren durante
los primeros tres años, por lo que se recomienda mantener
controles cada 3-4 meses por un año y luego cada 6 meses.
17. Sakuramoto S. Adyuvant chemotherapy in gastric cancer with
S-1, an oral fluoropyrimidine. NEJM 2007;357(18):1810-1820.
190
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Gac Med Bilbao 2004; 101: 49 - 52[18].
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6. Watson L, Broderick C, Armon MP.Thrombolysis for treatment of acute deep vein thrombosis. La Biblioteca Cochrane PlusThe
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and Federation of Cardiology Task Force. JAMA. 1992; 268: 1727 - 1733.
191
4.4 Cirugíabariátrica
Ramírez J, Sepúlveda R.
Introducción
La obesidad es un problema de salud pública a nivel nacional
e internacional y las comorbilidades que conlleva disminuyen
los años de vida saludable de los pacientes, además de
aumentar la mortalidad.
Definimos como obesidad a personas con un índice de masa
corporal (IMC) > 30 kg/m2. Aún cuando no es el método mas
preciso, su facilidad de calcular y su bajo costo, hacen que
el IMC sea la herramienta mas utilizada para la evaluación
del estado nutricional.
La cirugía bariátrica emerge como un tratamiento efectivo
para los pacientes obesos mórbidos, logrando muchas veces
no solo la baja de peso, si no que además la mejoría de las
patologías que son parte del síndrome metabólico. Estas
técnicas han evolucionado constantemente, logrando disminuir
los riesgos inherentes al acto quirúrgico, convirtiéndolas en la
terapia estándar en aquellas personas con obesidad mórbida
que no han logrado bajar de peso con métodos tradicionales.
Obesidad
El IMC se calcula a partir de la siguiente fórmula:
IMC = Peso (kg) / Estatura2(m2)
IMC Categoría
<18,5-24,9 Normal
25-29,9 Sobrepeso
30-34,9 Obesidad I
35-39,9 Obesidad II
40-49,9 Obesidad III
>50 Obesidad IV
Dentro de las patologías que se asocian a la obesidad están:
• Enfermedad coronaria
• Diabetes Mellitus II
• Cáncer
• Hipertensión
• Dislipidemia
• NASH
• SAHOS
• infertilidad
Existe una relación entre el aumento del IMC y el incremento
en la mortalidad, observándose que pacientes con IMC >35kg/
m2 tienen una mortalidad 2,5 veces la normal y pacientes
con IMC >40 kg/m2 , 10 veces mayor.
192
Cirugía
Laindicacióndecirugíabariátricaselimitaapacientesobesos
con:
• IMC > 40 kg/m2
• IMCentre35-39,9kg/m2conenfermedadesrelacionadas
a la obesidad como: enfermedades articulares, SAHOS
severo y diabetes, entre otras.
La cirugía bariatrica tiene como objetivos los siguientes:
• Pérdida del exceso de peso y mantención de ésta perdida
en el tiempo
• Mejorar las comorbilidades
• Mejorar la sobrevida
• Mejorar la calidad de vida
Clasificación de las técnicas quirúrgicas:
• Restrictivas (banda gástrica ajustable y gastrectomía
vertical en manga)
• Malabsortivas (Derivación biliopancreática y By-pass
yeyunoileal)
• Mixtas (By-pass en Y de Roux y By-pass gástrico
simplificado
Banda gástrica ajustable laparoscópica:
La banda gástrica ajustable se coloca por laparoscopía. Es
una técnica restrictiva que crea un pouch gástrico de 20-30cc,
provocando saciedad precoz en el usuario. Se puede ajustar
la presión que ejerce la banda sobre el estómago a través de
un reservorio subcutáneo al que se le inyecta suero fisiológico
en forma progresiva.
Gastrectomía vertical en manga (manga gástrica)
Actualmente se realiza por laparoscopía. Es una técnica
restrictiva efectiva, en la que se reseca una porción de la
curvatura mayor,dejandoun reservorio gástricode60-120ml.
193
Bandagástrica
194
By-pass gástrico en Y de Roux.
Es la técnica “gold estándar” en cirugía bariátrica, con
los mejores resultados. Preferentemente se realiza por
laparoscopía. Es una técnica mixta, en que se crea un
pouch gástrico de 15-30ml (restrictivo) asociado a una
gastroyeyuno anastomosis con una reconstrucción en Y de
Roux (malabsortivo).
Fisiología en la obesidad
Existen numerosos péptidos que se liberan durante la digestión
que están involucrados en el apetito y el control glicémico.
Los niveles sanguíneos de estos se verían modificados
con la cirugía bariátrica, lo que explica la mejoría en las
comorbilidades relacionadas con la obesidad.
Hormonas intestino anterior
Grelina: Péptido liberado por la células oxínticas gástricas,
tienen función orexígena. Los niveles sanguíneos son
inversamente proporcionales al
Hormonas intestino posterior
Glucagon-like peptide-1 (GLP-1): Secretado por las células
L del intestino. Su secreción es estimulada por la ingesta de
peso, además aumentan en ayuno y disminuyen al comer.
Porúltimo,estimulanlaliberacióndehormonadelcrecimiento
e inhiben la secreción de insulina.
Péptido inhibador gástrico (GIP): Liberado por células K en el
duodeno y yeyuno proximal. Estimula su liberación la ingesta
de hidratos de carbono o grasas. Regula el metabolismo de
adipocitos, lipolisis, síntesis de ácidos grasos, tiene efecto
incretina (insulina-símil) y estimula la proliferación de células B.
Bypass gástrico
195
alimentos. Suprime secreción ácida gástrica, diminuye ingesta,
inhibe vaciamiento gástrico, aumenta metabolismo y tiene
acción incretina. El bypass gástrico aumenta susniveles.
Péptido YY
Secretado por células L en íleon terminal, colon y recto.
Retrasa vaciamiento gástrico, disminuye ingesta. Todos los
Bypass aumentan los niveles.
Resultados
Para evaluar el desempeño de las diferentes técnicas de cirugía
bariátrica, se calcula el exceso de peso perdido expresado
en porcentaje. Para su cálculo, se utiliza la siguiente fórmula:
(Peso inicial peso actual/peso inicial peso ideal) x 100
Se considera como una cirugía bariátrica efectiva a aquella
que logra una baja en el exceso de peso de >50%. Si bien
todas las técnicas obtienen baja de peso, las mas efectivas
son el bypass gástrico seguido de la gastrectomía en manga
Resultado a corto plazo 1,2
Procedimiento Pérdida de exceso de peso en porcentaje
By passgástrico 60 -85%
Gastrectomía enmanga 55 -80%
Banda gástricaajustable 45 -55%
Resolución de comorbilidades en pacientes sometidos a cirugía bariátrica al plazo de 1 año:3
Procedimiento Pérdida de exceso de peso en porcentaje
By passgástrico 60 -85%
Gastrectomía enmanga 55 -80%
Banda gástricaajustable 45 -55%
1. Buchwald H, Avidor Y, Braunwald E, et al. Bariatric surgery: a
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197
4.5 Hemorragia digestivaalta novariceal
Ramírez J, Bawarshi V, Balbontín P
Introducción
La hemorragia digestiva se refiere a la pérdida de sangre
originada en cualquier parte del tubo digestivo. Se clasifican
segúnsu lugardeorigenen hemorragiadigestiva alta,aquella
que ocurre proximal al ligamento de Treitz (transición de
duodeno a yeyuno) o baja, la que ocurre distal a éste.
A su vez la hemorragia digestiva alta (HDA) se puede
clasificar según su etiología en dos grandes grupos: variceal
(relacionada con hipertensión portal) y no variceal.
Epidemiologia
La HDA de origen no variceal da cuenta de un 80 % de los
casos, de estas un 80%1
se detiene de forma espontánea y
su mortalidad varía entre 1-14%. Por otro lado la hemorragia
de origen variceal, que corresponden a un 20% de los casos,
tienden a persistir y recidivar, y su mortalidad es de un 30%2
.
Etiología
Existe una amplia variedad de causas de HDA no variceal,
las etiologías más frecuentes se muestran en la tabla 1.
Otras etiologías menos frecuentes son hemobilia, hemosuccus
pancreaticus y fistula aortoentérica. En un 8% de los casos
no se encuentra el origen de la hemorragia3
.
Tabla 1: Etiologías de HDA no variceal según frecuencias4
.
1. Courtney T, Beauchamp D, Evers M, Mattox K. Sabiston:
tratado de cirugía.19 ed. España: Elservier; 2013
2. Weitz C, Berger Z, Sabah S, Silva H. Diagnóstico y
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3. David Q.-H. Wang; Nezam H. Afdhal, Sleisenger and
Fordtran’s Gastrointestinal and Liver Disease, Ninth Edition (2010).
4. Enestvedt B, Gralnek I, Mattek n, Lieberman d, Eisen
G. An evaluation of endoscopic indications and findings related to
nonvariceal upper-GI hemorrhage in a large multicenter consortium.
Gastrointestinal Endoscopy Volume 67, No. 3 : 2008
Ulcera péptica 32,7%
Erosiones 18,8 %
Mallory – Weiss 4%
Malformaciones
arteriovenosas
2,7%
Tumores 1,2%
Sin causa/EDA normal 17,2%
198
Descripción
Úlcera péptica: Es una lesión crateriforme en la mucosa del
tracto gastrointestinal (estómago y duodeno). Su patogenia
tiene relación con un desequilibrio entre los factores
protectoresyagresoresdelamucosa.Losprincipalesfactores
agresores son la presencia de Helicobacter pylori y el uso de
antiinflamatorios no esteroidales.
La hemorragia se produce por la erosión del ácido en la
mucosa. Las hemorragias importantes ocurren en contexto
de afectación de la arteria gástrica izquierda o de la arteria
gastroduodenal.
Esofagitis: La inflamación del esófago puede producir
hemorragia. La esofagitis puede ser causada por el contacto
concontenidoácido,comoocurreenlaenfermedadporreflujo
gastroesofágico; en este caso, el tratamiento consiste en
suprimirlaacidezgástrica.Tambiénpuedehaberotrascausas
deesofagitiscomoinfecciones,fármacosyradiaciones.Enlos
pacientes con etiología infecciosa el tratamiento es dirigido
al agente causal.
Mallory – WWeiss: Es una hemorragia digestiva alta que
se produce luego de una contracción abdominal mientras el
cardias permanececontraído,comoenepisodios de vómitos,
generando desgarros en la mucosa y submucosa cercanas
a la unión gastroesofágica.
En el 90% de los casos no es necesario tratamiento y la lesión
cicatriza en menos de 72 horas. En los casos de hemorragia
continua se puede realizar tratamiento endoscópico con
inyección local o electro-coagulación
LesióndeDieulafoy:Esunamalformaciónvascularprovocada
por una protrusión de una arteria de gran calibre (1-3 mm)
de la submucosa a la mucosa, produciendo hemorragia al
erosionarse la mucosa y pudiendo generar, incluso hemorragia
masiva. Se puede ubicar en cualquier lugar del aparato
digestivo, pero generalmente se encuentra en la curvatura
menor del estómago a 6 cm de la unióngastroesofágica.
Se utiliza la endoscopía para ubicar la lesión, aunque puede
ser difícil de identificar por la intermitencia de la hemorragia.
También, se utiliza ultrasonido Doppler endoscópico para
ubicar las lesiones que no se visualizan con endoscopio.
Telangectasia hereditaria o enfermedad de Osler-
Weber-Rendu: Enfermedad caracterizada por telangectasias
en la piel y mucosas y malformaciones arteriovenosas
viscerales. Cuando se afecta el tracto digestivo se observan
lesiones en la boca y faringe.
Gastritis por estrés: Son causadas por el ácido y la pepsina
encasodeisquemiaporhipoperfusión.Seobservanerosiones
superficiales en la mucosa de todo el estómago. Es habitual
que sangren abundantemente y con frecuencia.Actualmente
ha disminuido su frecuencia por los mejores tratamientos en
shock y sepsis. Los factores de riesgo para la gastritis por
estrés son las coagulopatías yel uso de ventilación mecánica
por más 48 horas. En estos pacientes se recomienda el uso
profiláctico de antiácidos.
Hemosuccus pancreaticus: Corresponde a la hemorragia del
conducto pancreático, causada generalmente por la erosión
de un pseudoquiste hacia la arteria esplénica. La angiografía
es diagnostica y se puede hacer una embolización.
199
Clínica
Motivo de consulta
La forma de presentación en un paciente con hemorragia
digestiva es variable.
Melena: es la forma de presentación más frecuente.
Corresponde a deposiciones negras, oleosas y de mal olor
por la degradación de la hemoglobina a hematina y la acción
de la flora bacteriana entérica.
Hematemesis: vómitos con presencia de sangre.
Hematoquezia: es una deposición con sangre pura.
Generalmente corresponde a hemorragias bajas, pero se debe
considerar que el 15% de las hematoquezias son causadas
por HDA (pacientes con tránsito acelerado).
Otras manifestaciones menos frecuentes que hacen sospechar
una hemorragia digestiva son anemia, sangre oculta en
deposiciones y sincope.
Anamnesis
Obtener un historia detalla que incluya antecedentes
médicos (enfermedad hepática, uso de anticoagulantes o
antiplaquetarios) y las características de la hemorragia (color,
duración, cuantía, número de episodios).
Es importante conocer las principales causas de HDA ysus
factoresderiesgoparadirigirlaanamnesis.Deestamanerase
debe indagar sobre episodios de vómitos, hemorragias previas,
baja de peso, uso de anti inflamatorios no esteroidasles,
entre otros.
Examen físico
Los pacientes con hemorragia pueden haber perdido una
gran cantidad de volumen previo a la consulta al servicio
de urgencia, aún cuando ya en éste no presenten nuevos
episodios. Es por esto que se debe buscar signos de
hipovolemia.Sedebeobjetivar lossignos vitalesenbúsqueda
de hipotensión y taquicardia y examinar al paciente por
frialdad de extremidades, estado mental (agitado, confuso,
letárgico,etc.), llene capilar y palidez de mucosas
Como la hemorragia digestiva alta de origen varicial, es
una causa importante, al examen físico se debe buscar
estigmas de daño hepático crónico como hepatomegalia,
ictericia, circulación colateral, eritema palma, telangectasia
y parotidomegalia.
La inspección de la zona anal y tacto rectal son importantes
para evaluar y confirmar presencia de melena.
Laboratorio
Los exámenes de laboratorio que se deben solicitar son:
• Hemograma
Hematocrito: se debe tener presente que cuando la hemorragia
es reciente se pierde plasma y elementos figurados en igual
proporción, por tanto el hematocrito se mantiene normal.
Es útil solicitarlo para tener un basal y evaluar respuesta a
tratamiento.
Hemoglobina: su disminución indica anemia. Evaluar el
volumen corpuscular medio y la ferritina para determinar si
es por déficit de hierro y la cronicidad.
• Grupo sanguíneo ABO y factor Rh: en caso de ser
necesaria una transfusión.
• Pruebas de coagulación.
Protrombina: Útil para cuantificar el grado de anticoagulación
de pacientes usuarios de anticoagulantes orales o con daño
hepático crónico.
• Perfil hepático : Evaluar daño hepático crónico.
• Perfil bioquímico.
Creatinina yBUN: Pacientes que pierden grandes volúmenes
pueden presentar una insuficiencia renal aguda por causa
prerrenal.
Tratamiento
Aproximación al paciente
El manejo de todo paciente que se presenta con hemorragia
digestiva debe comenzar con el ABC (airway, breathing and
circulation) del trauma:
1. Valoración inicial y estratificación de riesgo
Primero se debe evaluar si la vía aérea se encuentra
permeable o si el paciente tiene riesgo de aspiración
por su estado mental y la presencia de hematemesis,
en estos casos se debe intubar y asegurar la vía aéra.
Posteriormenteseevalúaelestadohemodinámicoqueestará
determinado por el volumen perdido. Se debe considerar
la presión sistólica y diastólica, la frecuencia cardiaca, la
frecuencia respiratoria yelestadomentaldelpaciente. Según
esta evaluación se deben iniciar las medidas de resucitación
necesariascomofluidosintravenosos,transfusióndeglóbulos
rojos (cuyo objetivo es mantener la hemoglobina ≥ 7 g/dl).
A continuación se debe realizar la estratificación de riesgo
para determinar aquellos pacientes con alto o bajo riesgo de
200
mortalidad y según estas categorías tomar decisiones que
incluyen en cuanto tiempo realizar la endoscopía, evaluar el
alta y el nivel de cuidado necesario.
Para la estratificación se utiliza el score pre endoscópico
de Rockall y el score de Blatchford. El primero utiliza solo
parámetros del paciente (edad y comorbilidades) y clínicos
que se relacionan con la severidad de la hemorragia. Se
utiliza para predecir el riesgo de mortalidad. En cambio el
segundo, además de utilizar parámetros clínicos también
incluye datos de laboratorio. Se utiliza para predecir la
necesidad de intervención y la mortalidad.
2. Terapia medica pre endoscópica
Procinéticos: una infusión intravenosa de eritromicina (250
mg 30 min antes de la endoscopía) se debe considerar para
mejorar el rendimiento de la endoscopía.
Inhibidores de la bomba de protones (bolo de 80 mg): se
consideran para disminuir la proporción de pacientes con
estigmas de alto riesgo de hemorragia en la endoscopía
(hemorragia activa, vaso visible y coágulo adherente) y la
necesidad de terapia endoscópica.Además enpacientes con
ulcera péptica disminuyen las tasas de resangrado.
3. Endoscopia diagnóstica.
Los pacientes con HDA deben realizarse endoscopía
temprana (< 24 horas). En pacientes hemodinámicamente
estables y sin comorbilidades, la endoscopía se debe realizar
tempranamente para dar de alta precozmente.
Enpacientesconaltoriesgosedebeconsiderarlaendoscopía
antes de 12 horas para mejorar los resultados clínicos.
5. The American Journal of Gastroenterology. Management of
patients with ulcer bleeding. Febrero 2012; 107:345–360.
201
Escala de Rockall
VARIABLES
PUNTOS
0 1 2 3
Edad < 60 años 60 – 79 años ≥ 80 años
Shock Sin shock
Presión sistólica ≥
100 mmHg
Pulso < 100 lpm
Taquicardia
Presión sistólica ≥
100 mmHg
Pulso > 100 lpm
Hipotensión
Presión sistólica <
100 mmHg
Comorbilidad Sin comorbilidad Insuficiencia
cardiaca, cardiopatía
isquémica, otras
Insuficiencia renal,
insuficiencia
hepática, neoplasia
Diagnostico Mallory-Weiss
Sin lesiones
Sin signos de
hemorragia reciente
Todos los otros
diagnósticos
Neoplasia
esofagogastroduodenal
Signos de
hemorragia
reciente
Sin estigmas
Hematina
Sangre fresca en
estómago, vaso
visible no sangrante,
hemorragia activa,
coagulo
Tabla 2: Puntaje máximo pre endoscópico: 7. Puntaje máximo post endoscópico: 11. Categorías de riesgos: alto (≥ 5) intermedio
(3-4), y bajo (0-2)6
.
6. Rockall TA, Logan RFA, Devlin HB et al. Risk assessment after
acute upper gastrointestinal hemorrhage. Gut 1996; 38: 316 – 21.
202
Escala de Blatchford
Parámetro Puntos
Urea (mmol/l)
≥ 25 6
10 – 25 4
8 – 10 3
6,5 – 8 2
< 6,5 0
Hemoglobina (mg/l)
< 10 en varones y mujeres 6
10 – 12 en varones 3
10 – 12 en mujeres 1
≥ 12 en varones y mujeres 0
Presión arterial sistólica
(mmHg)
< 90 3
90 – 99 2
100 – 109 1
≥ 110 0
Otros parámetros
Insuficiencia cardiaca 2
Insuficiencia hepática 2
Presentación con sincope 2
Presentación con melena 1
Pulso ≥ 100 lat/min 1
Tabla 3: Puntuación total: Mínima: 0 Máxima: 23
El alta desde urgencia para estudio ambulatorio se debe considerar en pacientes con score de Blatchford 0 porque tiene
< 1% de probabilidad de requerir alguna intervención.
203
Escala de Forrest para HDA por úlcera
Esta escala permite estratificar a los pacientes según lo que
se evidencia en la EDA y así estimar los riesgo que estos
conllevan y la posibilidad de resangrado.
Clasificación Hallazgo
endoscópico
Prevalencia Recidiva Cirugía Mortalidad
Activa Ia
Hemorragia en
jet
12% 55% 35% 11%
Ib
Hemorragia en
napa
Reciente IIa Vaso visible no
sangrante
8% 43% 34% 11%
IIb Coagulo
adherido
8% 22% 10% 7%
IIc Restos de
hematina
16% 10% 6% 3%
No sangrado III Base de fibrina 55% 5% 0,5% 2%
Tabla 3: clasificación de Forrest. Prevalencia en EEUU, probabilidad de recidiva, de necesidad de cirugía y mortalidad según la
clasificación.5
204
4. Terapia endoscópica:
La terapia endoscópica se debe utilizar en pacientes con
hemorragia activa (clasificación Ia y Ib de Forrest) y con vaso
visible no sangrante (IIa). En pacientes con coágulo adherido
(IIb) se debe irrigar el coágulo, si este se desprende, se
reevalúa y reclasifica, decidiendo que terapia le corresponde,
si el coágulo es adherente y resiste la irrigación, se debe
considerar administrar tratamiento. En casos con restos de
hematina o base de fibrina no tienen indicación de terapia
endoscópica.
La terapia endoscópica incluye:
• Inyección de un agente para provocarvasoconstricción,
esclerosis y hemostasia localmente. Se utiliza epinefrina,
alcohol, etanolamina, trombina, fribrina, entre otros.
• Agentes térmicos: electrocoagulación mono o
bipolar, coagulación con argón plasma y laser.
• Medios mecánicos: hemoclips, sutura, ligadura de
bandas o endoloop.
Generalmente se utilizan 2 métodos combinados. En pacientes
con hemorragia activa se recomienda terapia térmica o
inyección de epinefrina más una segunda modalidad.
5. Terapia médica después de la endoscopía
En pacientes que fueron tratados endoscópicamente por una
ulcera activa, un vaso visible no sangrante o por un coágulo
adherido se recomienda terapia con IBP intravenosos con
un bolo de 80 mg seguido de infusión continua de 8mg/h por
72 horas.
En pacientes con clasificación Forrest IIc y III se recomienda
el uso estándar de terapia con IBP.
6. Repetición de endoscopía
Se recomienda una segunda endoscopía en pacientes con
evidencia clínica de recurrencia de hemorragia. Si recidiva
nuevamente después de la segunda endoscopía se emplea
cirugía o radiología intervencional con embolización arterial
transcateter.
7. Hospitalización:
Los pacientes con clasificación Forrest desde Ia a IIb se
deberían hospitalizar por al menos 3 días. En pacientes con
clasificación IIc y III pueden ser dado de alta luego de la
endoscopía si están hemodinámicamente estable con dieta
regular.
Clasificación
Ulcera péptica: Es una lesión crateriforme en la mucosa del
tracto gastrointestinal (estómago y duodeno). Su patogenia
tiene relación con un desequilibrio entre los factores
protectoresyagresoresdelamucosa.Losprincipalesfactores
agresores son la presencia de Helicobacter pylori y el uso de
antiinflamatorios no esteroidales.
La ulcera péptica es la causa más frecuente de hemorragia
digestiva alta. Aproximadamente un 10-15% de las úlceras
se complican con hemorragia. La hemorragia se produce
por la erosión del ácido en la mucosa. Las hemorragias
importantes ocurren en contexto de afectación de la arteria
gástrica izquierda o de la arteria gastroduodenal.
El manejo endoscópico logra controlar un 90% de las
hemorragiasporúlcera.El10%restanterequerirátratamiento
quirúrgico para una hemostasia eficaz.
Las indicaciones para cirugía en una hemorragiadigestiva
son: 5
• Inestabilidad hemodinámica a pesar de reanimación
vigorosa (transfusión > 6 unidades)
• Imposibilidad de detener la hemorragia con técnicas
endoscópicas
• Repetición de hemorragia con las técnicas endoscópicas
• Shock asociado a hemorragias recurrentes
• Hemorragia lenta y continua con necesidad de
transfusión de más de 3 unidades/dia
La prioridad en el tratamiento quirúrgico es el control de la
hemorragia.
El tratamiento médico consiste en la erradicación de
Helicobacter pylori y el uso de IBP. Y en paciente usuarios
de AINES o aspirina se debe interrumpir el tratamiento o
reemplazarloporAINESselectivodelainhibicióndelaCOX-2.
Mallory – Weiss: Es una hemorragia digestiva alta que se
produce luego de una contracción abdominal mientras el
cardias permanececontraído,comoenepisodios devómitos,
generando desgarros en la mucosa y submucosa cercanos
a la unión gastroesofágica.
En el 90% de los casos no es necesario tratamiento y la lesión
cicatriza en menos de 72 horas. En los casos de hemorragia
continua se puede realizar tratamiento endoscópico con
inyección local o electrocoagulación.
Gastritis por estrés: son causadas por el ácido y la pepsina
en caso de isquemia por hipoperfusión. Se observan erosiones
superficiales en la mucosa de todo el estómago. Es habitual
que sangren abundantemente y con frecuencia.Actualmente
ha disminuido su frecuencia por los mejores tratamientos en
shock y sepsis. Los factores de riesgo para la gastritis por
205
estrés son las coagulopatías yel uso de ventilación mecánica
por más 48 hras, en estos pacientes se recomienda el uso
profiláctico de antiácidos.
Esofagitis: La inflamación del esófago puede producir
hemorragia. La esofagitis puede ser causada por el contacto
concontenidoacidocomoocurreenlaenfermedadporreflujo
gastroesofágico, en este caso el tratamiento consiste en
suprimirlaacidezgástrica.Tambiénpuedehaberotrascausas
de esofagitis como infecciones, fármacos y radiaciones. En
lospacientesconetiologíainfecciosaeltratamientoesdirigido
al agente causal.
Lesión de Dieulafoy: Es una malformación vascular producida
por una protrusión de una arteria de gran calibre (1-3mm)
de la submucosa a la mucosa, produciendo hemorragia al
erosionarselamucosaypudiendogenerarinclusohemorragia
masiva. Se pueden ubicar en cualquier lugar del aparato
digestivo pero generalmente se encuentran en la curvatura
menor del estómago a 6 cm de la unióngastroesofágica.
Se utiliza la endoscopía para ubicar la lesión aunque puede
ser difícil de identificar por la intermitencia de la hemorragia.
También se utiliza ultrasonido Doppler endoscópico para
ubicar las lesiones que no se visualizan con endoscopio.
El tratamiento inicial de hemostasia es con técnica térmica
o esclerosante con endoscopio, que logra el objetivo en
el 90% de los casos. Si no es suficiente puede utilizarse la
embolización angiográfica. En un 4- 16% de los casos se
necesita cirugía que consiste en suturar la lesión luego de
una previa señalización endoscópica.
Telangectasia hereditaria o enfermedad de Osler-Weber-
Rendu: enfermedad caracterizada por telangectasias en la
piel y mucosas y malformaciones arteriovenosas viscerales.
Cuando se afecta el tracto digestivo se observan lesiones en
la boca y faringe.
Hemosuccus pancreaticus: corresponde a la hemorragia del
conducto pancreático, causada generalmente por la erosión
de un pseudoquiste hacia la arteria esplénica. La angiografía
es diagnostica y se puede hacer una embolización.
206
Bibliografía
1. David Q.-H. Wang; Nezam H. Afdhal, Sleisenger and Fordtran’s Gastrointestinal and Liver Disease, Ninth Edition (2010).
.
2. Courtney T, Beauchamp D, Evers M, Mattox K. Sabiston: tratado de cirugía.19 ed. España: Elservier; 2013.
3. Weitz C, Berger Z, Sabah S, Silva H. Diagnóstico y Tratamiento de las Enfermedades digestivas. Chile: De iku; 2013.
4. Rockall TA, Logan RF, Devlin HB, Northfield TC. Incidence of and mortality from acute upper gastrointestinal haemorrhage in the
United Kingdom. Steering Committee and members of the National Audit ofAcute Upper Gastrointestinal Haemorrhage. Br Med J
1995;311:222-6.
5. The American Journal of Gastroenterology. Management of patients with ulcer bleeding guideline. Febrero 2012; 107:345–360;
6. American society for gastrointestinal endoscopy. The role of endoscopy in the management of acute non-variceal upper GI bleeding
guideline. Volume 75, No. 6 : 2012.
7. Marta Gallach, Xavier Calvet, Angel Lanas, Faust Feu, Julio Ponce, Javier p. Gisbert. Guía práctica para el manejo de la hemorragia
digestiva alta no varicosa. Emergencias 2013; 25:472-481.
8. J. L. Martínez Porras, J. L. Calleja Panero. Hemorragia digestiva alta: etiología y procedimientos diagnósticos. Madrid. Emergencias
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9. Galindo F; Hemorragia digestiva. Cirugía Digestiva, Argentina. 2009; I-126, pág. 1-19.
207
Patología quirúrgica
del intestino delgado
208
209
5.1 Anatomía del intestino delgado
Ramírez J, Morelli C, Valdés F
Introducción
El intestino delgado, compuesto por duodeno, yeyuno e
ileon, es el principal lugar para la absorción de nutrientes.
Se extiende desde el píloro hasta la unión ileocólica, con una
longitud aproximada de 6-8 metros. El calibre del intestino
delgado disminuye de manera progresiva desde proximal a
distal.
Duodeno
Su nombre proviene del latín duodenum digitorum, que significa
12 dedos de longitud. Es la primera porción del intestino
delgado, mide 25 centímetros de largo y es el segmento más
ancho y fijo de este. Su inicio es en el bulbo duodenal y se
extiende hasta el ángulo duodenoyeyunal que por exterior se
corresponde con la inserción del ligamento de Treitz. Esta
dividido en 4 porciones:
Primera porción (Superior): Mide aproximadamente 5 cms.
Es la porción mas móvil y se conoce como bulbo duodenal.
Segunda porción (Descendente): Mide 10 cms. Se encuentra
por posterior al mesocolon transverso y anterior al riñón
derecho. Se dirije hacia inferior y se curva alrededor de la
cabeza del páncreas. La vía biliar y el conducto pancreático
se unen a su cara postero-medial, formando la ampolla
hepatoduodenal. En un 5-10% de las personas existe un
conducto pancreático accesorio que se une 2cm proximal a
la ampolla y recibe el nombre de conducto de pancreático
accesorio o de Santorini. Esta porción es completamente
retroperitoneal.
Tercera porción (Horizontal o Inferior) : Mide 8 cms de
longitud. Se ubica inferior al mesocolon transverso. Se dirige
transversalmente hacia la izquierda, pasando por sobre la
Vena Cava Inferior (VCI) yAorta. Superior a ella se encuentra
la cabeza del páncreas y su proceso unciforme.
Cuarta porción (Ascendente): Mide 5 cms, asciende hasta
el borde superior de la vertebra L2. Termina en el ángulo
duodenoyeyunal para continuarse posteriormente con el
yeyuno.
del colédoco y da lugar a una importante transición en la
vascularización del tracto digestivo, siendo este punto la
zona de unión entre el intestino anterior y medio durante la
embriogénesis.
El drenaje venoso del duodeno siguen el trayecto de las
arterias y drenan en la Vena Porta, algunas directamente y
otras através delasVenasMesentéricaSuperior yEsplénica.
Los vasos linfáticos del duodeno siguen a las arterias.
Los linfáticos anteriores drenan en los linfonodos
pancreatoduodenales, localizados en el trayecto de las arterias
pancreatoduodenales superior e inferior y en los linfonodos
pilóricos que siguen el curso de la arteria gastroduodenal.
Los vasos linfáticos posteriores pasan por posterior a la
cabezadel páncreas ydrenanen los linfonodos mesentéricos
superiores. Los vasos linfáticos eferentes de los linfonodos
periduodenales, drenan en los infonodos celíacos.
La inervación del duodeno proviene del nervio vago y de los
nervios esplácnicos torácicos mayor y menor por vía de los
plexos celíaco y mesentérico superior, desde los que son
conducidos al duodeno siguiendo plexos periarteriales que
se extienden hacia las arterias pancreatoduodenales.
Irrigación, drenaje linfático e inervación del duodeno.
La irrigación arterial del duodeno proviene de las arterias
gástrica derecha, supraduodenal, gastroepiploica derecha
y pancreatoduodenal superior e inferior. Las arterias
pancreatoduodenales se sitúan en la curva entre el duodeno
y la cabeza del páncreas para irrigar ambas estructuras.
La anastomosis entre ellas tiene lugar a nivel de la entrada
210
Yeyuno e Ileon
La segunda porción del intestino delgado recibe el nombre de
yeyuno y comienza en el ángulo duodenoyeyunal, donde el
tracto digestivo reanuda su trayecto intraperitoneal. El ileon,
quecorrespondealaterceraporcióndelintestino,nopresenta
una división precisa con el yeyuno y se extiende hasta la
unión Ileocólica. En cuanto a las dimensiones, yeyuno e ileon
miden 6 a 7 metros de longitud, la mayor parte del yeyuno se
sitúa en el cuadrante superior izquierdo del compartimento
inframesocólico,mientrasquelagranpartedelileonselocaliza
en el cuadrante inferior derecho. El ileon terminal se apoya
usualmente en la pelvis, desde la que asciende para finalizar
en la cara medial del ciego. Pese a que no existe una clara
frontera entre el yeyuno y el Íleon, poseen características
diferenciales de importancia quirúrgica.
El yeyuno es de mayor calibre, siendo aproximadamente de
2-4 centímetros, su pared es más gruesa, los vasos rectos
que lo nutren son más largos y las arcadas son escasas y de
gran tamaño. Mientras que el ileon posee un calibre de 2-3
centímetros, su pared es mas delgada los vasos rectos son
cortos y las arcadas múltiples y cortas.
El mesenterio une al yeyuno y al ileon a la pared abdominal
posterior, se dispone de manera de abanico y es por donde
transcurren los vasos arteriales que irrigan al intestino delgado.
Laraízdelmesenteriosigueuntrayectooblicuodearribahacia
abajo y de izquierda a derecha, midiendo aproximadamente
15cm.
Diferencias topográficas e irrigación de yeyuno e ileon
211
Irrigación, drenaje linfático e inervación del yeyuno e íleon
La arteria mesentérica superior (AMS) irriga yeyuno e ileon.
Esta arteria habitualmente se origina en la aorta abdominal 1
cm por inferior del tronco celiaco y pasa sobre la 3era porción
de duodeno.
Discurreentre lasdos capas del mesenterio, emitiendoramas
que forman a su vez asas que se anastomosan entre si; éstas
son conocidas como las arcadas arteriales que emiten a su
vez los vasos rectos que llegan hasta el intestino.
Lavenamesentéricasuperior(VMS)eslaencargadadedrenar
yeyuno e ileon. Se sitúa anterior y a la derecha de la AMS en
la raíz del mesenterio. La VMS se une a la vena esplénica,
posterior al cuello del páncreas, para formar la vena porta.
Losvasoslinfáticosdrenandesdelasvellosidadesintestinales
y cúmulos linfáticos submucosos a los linfonodos en el
mesenterio y posteriormente a los periaorticos.
Irrigación de yeyuno e ileon
212
Bibliografía
1. McMinn RMH: Last’s Anatomy: Regional and Applied, 9th ed. Singapore: Churchill Livingstone, 1994, p 337.
2. Bass L, Wershil B. Anatomy, Histology, Embryology, and Developmental Anomalies of the Small and Large Intestine. In: Feldman M.
Sleisenger and Fordtran’s Gastrointestinal and Liver Disease, Tenth Edition. Philadelphia: Saunders; 2016. p. 1649-1678.
3. Mezoff E, Shroyer N. Anatomy and Physiology of the Small and Large Intestines. In: Robert W.Pediatric Gastrointestinal and Liver
Disease, Fifth Edition. Philadelphia: Elsevier; 2016.p.345-359.
Drenaje venoso de yeyuno e ileon
213
5.2 Divertículo de Meckel
Rodríguez D, Jofré M, Court F.
Introducción
El divertículo de Meckel es la anomalía congénita más
frecuente del intestino delgado, correspondiendo a una falla
en la atrofia normal del conducto onfalomesentérico que
ocurre en el desarrollo embriológico entre el quinto y noveno
mesdegestación1
.Loshallazgosembriológicos yanatómicos
fueron descritos por primera vez en 1809 por Johann Meckel,
anatomista y embriólogo alemán. Se considera el único
divertículo verdadero del intestino delgado, ya que contiene
todas sus capas (mucosa, submucosa y muscular propia).
La incidencia es del 1% y existe un riesgo entre 4-6% de
presentarsíntomasalo largodelavida.EnChile,la incidencia
es de un 0.8 a un 4%2
. En la literatura existe debate al de-
terminar si hay o no diferencia de género, pero el sexo
masculino presenta el doble de riesgo de presentar síntomas
que su contraparte femenina3
. El riesgo de mortalidad en
pacientes sintomáticos es de aproximadamente 6%, y aumenta
enpacientesadultosmayoresquepresentancomplicaciones4
5
.
Divertículo deMeckel
1 Yahchouchy EK, Marano AF, Etienne JC, et al: Meckel’s
diverticulum. J Am Coll Surg 192:658, 2001.
2 Godoy J, Varela P, Latorre J, Henríquez A. Divertículo de
Meckel. Rev. Chil. Pediatr. 68:7-10, 1997.
3 Park JJ, Wolff BG, Tollefson MK, et al: Meckel diverticulum:
The Mayo Clinic experience with 1476 patients (1950-2002). Ann
Surg 241: 529, 2005
4 Dumper J, Mackenzie S, Mitchell P, et al: Complications of
Meckel’s diverticula in adults. Can J Surg 49:353, 2006.
5 Cullen JJ, Kelly KA, Moir CR, et al: Surgical management
of Meckel’s diverticulum. An epidemiologic, population-based study.
Ann Surg 220:564, 1994; discussion 568-569.
214
Patogenia
Embriológicamente, el conducto onfalomesentérico aparece
en la tercera semana de gestación y presenta una función
nutricia al conectar el saco vitelino primitivo al intestino medio
en el feto en desarrollo.
Dicho conducto sufre una obliteración completa entre el
quinto y noveno mes de gestación, para luego convertirse
en una delgada banda fibrosa que se desintegra a la décima
semana de gestación.
Todas las anomalías del conducto onfalomesentérico fueron
descritas por Johann Meckel. Estas anomalías incluyen la
fístulaonfalomesentérica,quesepresentaclínicamentecon
contenido intestinal emergiendo desde el ombligo, dado que
el conducto permanece completamente intacto sin atrofia en
ninguno de sus extremos, permitiendo el paso de contenido
entérico al exterior; el quiste del conducto vitelino, que
es un cordón congénito entre el íleon y el ombligo producto
de una falla de atrofia del lado umbilical del conducto; las
bandas fibrosas congénitas (o bridas congénitas) producto
de la falta de desintegración de la banda fibrosa del conducto
onfalomesentérico atrófico; y, finalmente, el divertículo de
Meckel, donde existe una falla en la atrofia del lado ileal del
conducto onfalomesentérico, la cual representa el 90% de
las anomalías congénitas del intestino delga-do. Se asocia
a veces con otras anomalías de carácter congénito, como
malformaciones cardiovasculares, del sistema nervioso,
paladar hendido, páncreas anular, malformaciones esofágicas
y anorrectales.
215
El divertículo de Meckel casi siempre se ubica en el borde
antimesentéricodelíleo,típicamentedentro delosprimeros
100 cm desde la válvula ileocecal. La distancia a la válvula
ileocecal incrementa según aumenta el grupo etario.
Dado que las células del divertículo de Meckel provienen de
tejido embriológico, mantienen su pluripotencialidad y como
resultado de esto, el 50 a 60% de los divertículos contienen
tejido heterotópico en donde el 75% son células de mucosa
gástricayel15%contienetejidopancreático.Delospacientes
sintomáticos, un 75% tiene mucosa gástrica, lo que sugiere
que este tejido es responsable de la mayoría de los síntomas
de un divertículo de Meckel. Se han encontrado también otros
tipos histológicos raros que incluyen mucosa colónica, lipomas,
leiomiomas, neurofibromas, angioma y sus contrapartes
malignas (adenocarcinoma de mucosa gástrica ectópica,
carcinoide y sarcomas). Estos últimos son excepcionales,
sin embargo, son de importancia oncológica porque pueden
servir como punto de pivote para intususcepciones, por lo
que son factores de riesgo para dicha patología56
.
Formación de divertículo
de Meckel (8 semanas)
216
Diagnóstico y Forma de Presentación
Tanto el divertículo de Meckel como sus complicaciones
pueden ser diagnósticos difíciles, particularmente en los
pacientes adultos.
Las formas de presentación que producen síntomas son;
hemorragia digestiva, diverticulitis de Meckel, obstrucción
intestinal (vólvulo o intususcepción), perforación y anomalías
o tumores umbilicales6 7
.
En pacientes con dolor en el cuadrante inferior derecho
del abdomen que ingresan a pabellón con diagnóstico de
apendicitis aguda y el hallazgo intraoperatorio revela un
apéndice sano, se debiera considerar siempre y descartar
una diverticulitis de Meckel revisando los últimos 100 cm
del íleon distal.
Divertículo de Meckel incidental durante una laparotomía
exploradora por obstrucción intestinal secundaria a bridas.
Imagen: Dr. Diego Rodríguez Verdugo.
6 Cameron JL: Diverticulosis of the Small Bowel. En Current
surgical therapy, 9 ed, Phila-delphia, 2008, Elsevier Mosby.
7 Townsend CM: Diverticular disease. En Sabiston textbook
of surgery: The biological basis of modern surgical practice, 18 ed,
Philadelphia, 2008, Saunders/Elsevier.
La diverticulitis de Meckel se encuentra entre un 10 a 25%
de los casos sintomáticos, se observa en su mayoría en
pacientes adultos mayores y no hay forma de diferenciarla
clínicamente de una apendicitis aguda. Se describe en su
etiopatogenialaformacióndeenterolitosdentrodeldivertículo,
con la subsecuente obstrucción luminal que conlleva a necrosis
y gangrena, similar al origen de la apendicitis aguda. Tal cual
como en la apendicitis aguda, una diverticulitis de Meckel no
tratada puede derivar en una perforación, lo que conlleva a
la formación de abscesos y/o peritonitis. La incidencia de
diverticulitis de Meckel perforada es de aproximadamente
un 7%.
La hemorragia digestiva baja en un 50% de los pacientes
sintomáticos menores de edad se presenta con hematoquezia,
en los adultos usualmente se presenta como melena. El sitio
usual de sangrado se ha descrito en la anatomía patológica
como una úlcera ileal adyacente o frente al divertículo de
Meckelquecontienemucosagástricaheterotópicaproductora
de ácido.
La obstrucción intestinal secundaria a un Meckel es la
forma de presentación más frecuente en los adultos (vólvulo
intestinodeintestinodelgadoporbridacongénita) sedescribe
en un 40% de los casos.
La intususcepción resulta de la invaginación de un
divertículo de base ancha, que actúa como un punto de pivote
interiorizándose de forma progresiva en el lumen intestinal
con cada movimiento peristáltico, resultando eventualmente
en una obstrucción completa. Puede ser un compromiso
íleoilealoíleocólico.Laintususcepciónsemanifiestacomouna
obstrucciónagudaenadultos,convómitosprecoces,urgencia
defecatoria. En niños se presenta como la clásica diarrea “en
jalea de grosella” (“currantjelly stools”). La obstrucción también
se asocia a incarceración de un divertículo en una hernia
inguinal denominada “hernia de Littré” y a un divertículo de
Meckel que contienen tumores en su histología. Los tumores
ocurren entre un 0.5 a un 3.2% de los Meckel sintomáticos;
de estos, el 33% son carcinoides1.
Menos del 10% de los casos de divertículo de Meckel
complicadosediagnosticaenelpreoperatorio.Laimagenología
estándar, que incluye la ecografía abdominal y la tomografía
axialcomputarizada(TAC)deabdomenypelvissondeescaso
valor.Cuando se sospecha el diagnóstico en el preoperatorio,
se utiliza un radiotrazador Tc-99m (tecnecio pertecnectato) que
aumenta la sensibilidad del TAC, ya que se une a la mucosa
gástrica, normal yectópica. Es útil solo cuando existe mucosa
gástrica en el divertículo.
Esbastanteprecisoenpacientespediátricoscuandoelmotivo
de consulta fue hemorragia digestiva, permite localizar el
sitio de sangrado en un 90% de los pacientes. En adultos,
que son menos propensos a sufrir sangrado digestivo por
217
esta causa, la precisión disminuye a un 50%. La sensibilidad
para la TAC con Tc-99m para el hallazgo de un divertículo
de Meckel con mucosa gástrica en su histología es del 85%,
con una especificidad del 95%. La precisión y sensibilidad
puedenmejorarsealagregarestimulaciónconpentagas-trina
o con cimetidina1 6.
La TAC con contraste endovenoso es útil en complicaciones
como la diverticulitis, obs-trucción intestinal, enterolitos o
perforaciones.
La enteroclisis tiene una precisión del 75% en adultos, pero
requiere un alto índice de sospecha. Para este estudio, se
inyecta gran cantidad de contraste a través de una sonda
nasoyeyunal permitiendo opacificar el divertículo de Meckel,
que se ve como un saco de fondo ciego o como un defecto de
llenado. Cuando el divertículo representa un punto de pivote
para una intususcepción, se observará un defecto de llenado
pequeño y polipoideo, que generalmente se introduce dentro
del lumen intestinal6.
La arteriografía se puede utilizar en casos de hemorragia
digestivacon unsangradoma-yora0.5ml/minuto. El hallazgo
másútilendichoestudioesunaramadelaarteriame-sentérica
superior en el cuadrante inferior derecho que contiene un
pequeñoclusterdevasos tortuosos querepresentan laarteria
onfalomesentérica anómala dando irrigación al lecho capilar
del divertículo6
.
A pesar de todos los métodos previamente descritos, la
mayoría de los divertículos de Meckel complicados se
identifican en el tiempo de la exploración abdominal en
pabellón. Una laparoscopía diagnóstica puede reemplazar
el estudio radiológico
1
.
Manejo
asegurarse de esto, la muestra resecada debiera ser abierta
previo al cierre abdominal. Tal cual como cualquier cirugía
intestinal, el grado de resección depende de la condición del
tejido adyacente o del principio oncológico en caso que se
sospechedepatologíatumoral.UndivertículodeMeckelcorto
(diámetro < 1.6 cm) puede contener mucosa heterotópica en
su base, por lo que una resección segmentaria debiera ser
considerada por sobre una diverticulectomía simple9
, al igual
que las perforaciones que pueden requerir,incluso una mayor
extensión resectiva. Un Meckel ancho en niños debiera ser
tratado con una resección extensa, por el riesgo aumentado
de estenosis y constricciones. Una apendicectomía profiláctica
debiera agregarse para evitar futuros dilemas del punto de
vista diagnóstico, aunque es motivo de controversia actual7.
La resección de un divertículo de Meckel incidental durante
una laparotomía o laparoscopía es motivo de controversia,
conmúltiples estudios en la literatura. Parte de la controversia
es que en estudios y revisiones antiguas, retrospectivas,
se describían altas tasas de morbilidad y mortalidad con la
reseccióndiverticular10 11
;estosestudioshansidorefutadosen
lasrevisionescontemporáneas.Enlaactualidad,descartando
cualquier contraindicación mayor, la resección de un divertículo
de Meckel incidental se recomienda en la mayoría de los
pacientes dado su riesgo de 6.4% de complicaciones durante
la vida y la incidencia acumulada de morbilidad y mortalidad
precoz de un 12% y tardía del 7% después de la resección
de un Meckel sintomático versus el 2% de complicaciones
posterior a una diverticulectomía incidental5.
Deformaglobal,lascaracterísticasdeundivertículodeMeckel
con mayor riesgo de complicaciones son pacientes menores
a 50 años, de sexo masculino, un divertículo mayor a 2 cm
de tamaño, y la presencia de tejido ectópico o características
anormales alrededor de este. Estas características
corresponden a las indicaciones establecidas de resección
en Meckel asintomáticos3 12
.
La resección quirúrgica de un divertículo de Meckel
sintomático es el tratamiento estándar. Se recomienda que
la técnica de la diverticulectomía se adecúe al motivo de
consulta y a la morfología diverticular. La diverticulectomía
o resección segmentaria por vía laparoscópica se puede
realizar sin aumentar el riesgo de la cirugía con profesionales
experimentados en la técnica8
. Una diverticulectomía simple,
que incluye la resección del divertículo y sus bandas que lo
adhierenalasparedesabdominalesoalmesenteriointestinal,
es suficiente en casos de diverticulitis o de obstrucción.
En los casos donde existen bridas congénitas asociadas,
estas también deben ser resecadas.
Un Meckel manifestándose como una hemorragia digestiva
debe ser tratado con una resección segmentaria con
anastomosis primaria para remover cualquier ulceración ileal
adyacente que pudiera ser responsable del sangrado. Para
8 Rivas H, Cacchione RN, Allen JW: Laparoscopic
Management of Meckel’s Diverticulum in Adults. Surg Endosc
17:620, 2003.
9 Varcoe RL, Wong SW, Taylor CF, et al: Diverticulectomy is
inadequatetreatmentforshortMeckel’sdiverticulumwithheterotopic
mucosa. Austr N Z J Surg 74:869, 2004.
10 Soltero MJ, Bill AH: The natural history of Meckel’s
diverticulum and its relation to inci-dental removal. A study of 202
cases of diseased Meckel’s diverticulum found in King County,
Washington, over a fifteen year period. Am J Surg 132:168, 1976.
11 Leijonmarck CE, Bonman-Sandelin K, Frisell J, et al.
Meckel’s diverticulum in the adult. Br J Surg 73:146, 1986.
12 Groebli Y, Bertin D, Morel P: Meckel’s diverticulum in
adults: Retrospective analysis of 119 cases and historical review.
Eur J Surg 167:518, 2001.
218
Bibliografía
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9. Rivas H, Cacchione RN, Allen JW: Laparoscopic Management of Meckel’s Diver-ticulum in Adults. Surg Endosc 17:620, 2003.
10. Varcoe RL, Wong SW, Taylor CF, et al: Diverticulectomy is inadequate treatment for short Meckel’s diverticulum with heterotopic
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12. Leijonmarck CE, Bonman-Sandelin K, Frisell J, et al. Meckel’s diverticulum in the adult. Br J Surg 73:146, 1986.
13. Groebli Y,Bertin D, Morel P: Meckel’s diverticulum in adults: Retrospective analy-sis of 119 cases and historical review. Eur J Surg
167:518, 2001.
219
5.3 TumoresdeIntestinoDelgado
Ramírez J, Court F.
Introducción
Los tumores de intestino delgado son muy infrecuentes y la
clínica con la que se presentan es bastante variable haciendo
difícil su diagnóstico.
Tumores benignos
Clasificación
• Lesiones de glándulas de Brunner.
• Pólipos:
• Adenomas.
• Hamartomas (síndrome de Peutz-Jeghers).
Tumores malignos
• Tumores carcinoides.
• Adenocarcinoma.
• Metástasis.
Tumores linfoproliferativos
• Linfomas de células B.
• Linfomas de células T.
Tumores estromales
• GIST.
• Lipomas/Liposarcomas.
• Tumores de células neurales.
• Leiomiomas/Leiomiosarcomas.
• Tumores vasculares.
Clínica
Los síntomas y signos de un tumor de intestino delgado
van a depender del tipo de tumor que lo afecte. Las formas
más frecuentes de presentación son el dolor abdominal y la
obstrucción intestinal. Tambiénse puede presentar como una
masa palpable, anemia y perforación intestinal. La pérdida
de peso, náuseas, vómitos e ictericia pueden ser síntomas
aislados de presentación.
Intusucepcion
(visión exterior)
220
Estudio
Al tener la sospecha diagnóstica, se debe complementar
con algún estudio de imagen para confirmar la presencia
del tumor. La enteroclisis, la tomografía computarizada (TC)
y la endoscopía digestiva alta son exámenes que pueden
demostrarlo, dependiendo del tamaño y la ubicación de este.
Noobstanteloanterior,elestudioacabadodelintestinodelgado
se logra con la cápsula endoscópica y/o la enteroscopía de
doble balón.
Tumores Neuroendocrinos
Representan a los tumores malignos más frecuentes del
intestino delgado, dando cuenta de aproximadamente un
37% de todos los tumores. La mayoría se ubica en el íleon
distal.Serelacionanaotroscánceres yasíndromesfamiliares
como la Neoplasia Endocrina Múltiple tipo I (NEM) y la
neurofibromatosis tipo 1.
Al momento del diagnóstico un 50% tiene enfermedad no
localizada. El tamaño es importante y se relaciona con la
probabilidad de presentar metástasis. Los tumores menores
a 1 cm tienen muy baja probabilidad de presentar metástasis,
mientras que los tumores mayores a 2 cm un 80% tienen
metástasis.
Los tumores neuroendocrinos tienen capacidad de producir
y secretar sustancias del tipo polipéptidos, aminas y
prostaglandinas. Cuando presentan síntomas atribuibles a
la secreción hormonal se les denomina funcional, en cambio,
a los que no lo hacen se les señala como no funcionales.
Los que se ubican en yeyuno o íleon producen serotonina,
mientras que los que se localizan en duodeno generalmente
producen gastrina y somatostatina.
Se clasifican en bien diferenciados y mal diferenciados.
El principal exponente de los tumores neuroendocrinos de
intestino corresponde al Carcinoide
Intusucepcion (visióninterior)
221
Carcinoide
Clínica
El síntoma más frecuente es el dolor abdominal inespecífico,
por tanto, pueden pasar años antes de hacer el diagnóstico.
El síndrome carcinoide se presenta entre 18-35% de los
pacientes con tumores carcinoides de intestino delgado y
se caracteriza por dolor abdominal, diarrea, flushing, bronco
constricción y enfermedad cardiaca por carcinoide.
Clasificación
Diagnóstico
La medición de ácido 5 hidroxindolacético (5-HIAA) en orina
de 24 horas y de cromogranina A en sangre son métodos
de screening.
Para localizar la lesión se usa el TAC de abdomen y pelvis, la
RNMylacintigrafíadereceptoresdesomatostatina(octeotride
scan). La endoscopía es capaz de identificar lesiones en
duodeno y yeyuno proximal, mientras que la colonoscopía
puede hacerlo en lesiones en íleon distal.
Adencarcinoma
Tumor
Primario (T) Metástasis (M)
Tx
Tumor primario no puede ser
caracterizado.
M0 Sin evidencia de metástasis.
T0 Sin evidencia de tumor
primario.
M1 Con metástasis a distancia.
T1 Tumor invade lámina propia o
submucosa o tamaño <1cm.
Estadio
T2 Tumor invade muscular
propia o >1cm.
Etapa 0Tis N0 MO
T3 Tumor invade a través de
la muscular propia a la
subserosa sin penetrar la
serosa o invade páncreas o
retroperitoneo (en tumores
periampulares).
Etapa I T1 N0 M0
T4 Tumor invadeperitoneo
visceral u otros órganos.
Etapa IIa T2 N0 M0
Linfonodos
regionales
(N)
Etapa IIb T3 N0 M0
Nx Linfonodos no pueden ser
estudiados.
EtapaIIIa T4 N0 M0
N0 Sin metástasis a linfonodos
regionales.
Etapa IIIb CualquierT N1 M0
N1 Metástasis a linfonodos
regionales.
Etapa IV Cualquier T CualquierN M1
222
Tratamiento
La cirugía es el único tratamiento curativo.
Lesiones menores a 1 cm se pueden resecar por vía
endoscópica.
Lesiones de 1-2 cm se pueden resecar quirúrgicamente en
forma local.
Lesiones mayores a 2 cm se deben resecar y asociar una
lifadenectomía por el riesgo de compromiso linfático. Durante
la cirugía se debe explorar el resto de la cavidadabdominal
en búsqueda de posibles metástasis inadvertidas.
El tratamiento farmacológico con preparados de somatostatina
ayuda para el control de los síntomas, pero no ha demostrado
acción antitumoral.
La quimioterapia tiene un rol limitado en esta enfermedad.
Adenocarcinoma
Clínica
Como en todos los tumores de intestino delgado, la clínica
es inespecífica, lo que retra-sa el diagnóstico. Dentro de los
síntomas se describe dolor abdominal, anemia, náuseas y
vómitos, ictericia (tumores en duodeno) y hemorragia digestiva.
Diagnóstico
Según ubicación se dividen en duodenales y distales (yeyuno
e íleon).
Los tumores duodenales se diagnostican mediante endoscopía
digestiva alta con biop-sia. Se puede asociar a endosonografía.
Debe solicitarse una TAC de tórax, abdomen y pelvis con
contraste para el estudio de metástasis. Para los tumores
distales al ángulo de Treitz, el diagnóstico se puede alcanzar
mediante el uso de la cápsula endoscópica y la enteroscopía
con doble balón. El estudio de diseminación se hace igual
que en los anteriores.
Tiene una incidencia parecida a los carcinoides, entre 25-40%.
El segmento más afectado es el duodeno y disminuye a lo
largodelintestinodelgado.Seoriginadeadenomasolesiones
displásicas. Es así como la Poliposis Adenomatosa Familiar
(FAP sigla en inglés), es un factor de riesgo importante en
el desarrollo de estos tumores.
Adenocarcinoma de
intestino delgado
223
Clasificación
Adencarcinoma
Tumor
Primario (T)
Metástasis (M)
Tx Tumor primario no puede ser
caracterizado.
M0 Sin evidencia de metástasis.
T0 Sin evidencia de tumor primario. M1 Con metástasis a distancia.
Tis Carcinoma in situ
Estadio
T1a Tumor invade lámina propia.
Etapa 0 Tis N0 MO
T1b Tumor invade la submucosa. Etapa I T1 N0 M0
T2 Tumor invade la muscular propia.
T2 N0 M0
T3 Tumor invade a través de la
muscularpropiahastalasubserosa
o mesenterio/retroperitoneo
<2cm.
Etapa IIa T3 N0 M0
T4 Tumor invade peritoneo visceral u
otros órganos o mesenterio/retro-
peritoneo >2cm.
Etapa IIb T4 N0 M0
224
Linfonodos
regionales
(N)
Etapa IIIa Cualquier T N1 M0
Nx
Linfonodos no pueden ser
estudiados.
Etapa IIIb Cualquier T N2 M0
N0
Sin metástasis a linfonodos
regionales.
Etapa IV Cualquier T Cualquier N M1
N1 Metástasis a 1-3 linfonodos
regionales.
N2
Metástasis a > 4 linfonodos
regionales.
Tratamiento
Para los tumores en la 1.a y 2.a porción del duodeno, la
cirugía indicada es la pancrea-toduodenectomía (operación
de Whipple).
Paratumoresdeyeyunoeíleon,lareseccióndelsegmentocon
márgenesnegativosdebeiracompañadadelinfadenectomía.
El margen libre que se debe respetar es de 5 cm. En caso de
que el tumor se ubique en el íleon distal puede ser necesario
realizar una hemicolectomía derecha para alcanzar los
márgenes libres.
Linfomas
Los linfomas extranodales más frecuentes son los
gastrointestinales.
En su mayoría son linfomas no Hodgkin y de células B
(excepto el linfoma de células T asociado a enteropatía).
El estómago es el principal órgano afectado, lo siguen el
intestino delgado y, posteriormente, la región ileocecal.
Clínica
Síntomas inespecíficos, siendo los más frecuentes el dolor
abdominal y la pérdida de peso. También se asocia a
hemorragia digestiva, fatigabilidad y sudoración nocturna.
Diagnóstico
El diagnóstico de un linfoma primario de intestino delgado
requiere:
• Ausencia de linfoadenopatías periféricas o mediastínicas.
• Recuento de glóbulos blancos normales.
• Tumor afecte principalmente intestino delgado.
• Sin evidencia de compromiso hepático ni esplénico.
Se puede sospechar con estudios de imagen, como un TAC
de abdomen y pelvis con contraste que muestre presencia
de tumores a nivel de intestino, pero el diagnóstico siempre
requiere de biopsia.
225
Linfoma de intestino delgado
La endoscopía digestiva alta con biopsia es suficiente en los
tumores proximales al ángulo de Treitz.
Enpacientesquenoselograobtenerunabiopsiaendoscópica
o que la sospecha a pesar de biopsias negativas sigue siendo
importante, se puede recurrir a la laparotomía o laparoscopía
con resección del segmento comprometido para enviar la
pieza a ana-tomía patológica.
Clasificación
Tumores de células B
• Linfoma de tejido linfoide asociado a mucosa (MALT).
• Linfoma difuso de células B grandes.
• Linfoma de células del manto.
• Linfoma Burkitt o Burkittlike.
Tumores de células T
• Linfoma de células T asociado a enteropatía.
Tratamiento
En el caso de los linfomas MALT, el tratamiento contra el H.
Pylori puede provocar la regresión de la enfermedad.
Para los otros, en general, se requiere de combinación de
quimioterapia más radioterapia.
226
Bibliografía
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2016.
227
5.4 ObstrucciónIntestinal
Gajardo J, Ready J, González I, Court F.
Introducción
La detención del tránsito intestinal o íleo es una condición
clínica frecuente en el quehacer médico y representa un 15%
de las consultas a urgencia por dolor abdominal1
. Se debe
aprender a determinar si la detención del tránsito es debido
a un factor obstructivo que denominaremos “íleo mecánico”
o a una detención del peristaltismo intestinal que llamaremos
“íleo paralítico”. La importancia en esta distinción es que
obedecen a causas muy distintas y su tratamiento difiere
completamente.
El íleo mecánico sigue siendo hoyen día un desafío en cuanto
a diagnóstico y tratamiento, ya que se puede presentar como
un cuadro agudo que obligue a una intervención quirúrgica
de urgencia o como una condición menos dramática que
permita una observación del paciente y un manejo inicial de
tipo médico.
Íleo Mecánico
Llamaremos obstrucción intestinal alta cuando ocurre proximal
a la válvula oleocecal y baja cuando es distal a este. Esta
clasificación, que es más bien clínica, es muy útil porque
nos orienta inmediatamente a posibles causas involucradas
y forma de manejo del paciente.
Una segunda forma de clasificar la obstrucción intestinal es
de acuerdo con los hallazgos patológicos, es decir, qué fue lo
que produjo la detención del tránsito intestinal. Se distinguen
causas “intraluminales y extraluminales”, dependiendo si el
factor obstructivo bloquea internamente el lumen del intestino
o lo hace a través de una compresión externa.
Etiología
Íleo mecánico de causa extraluminal
• Bridas y adherencias, importa mucho el antecedente
de cirugías previas dentro de la historia del paciente.
Representan la principal causa de obstrucción intestinal,
dando cuenta de 58% de las obstrucciones intestinales
altasenseriesnacionales2
.Sonbandasfibróticasformadas
apartir deunareacción cicatricial del peritoneo, que unen
1 Jackson P.,Raiji M.Evaluationandmanagmentofintestinal
obstruction. Am Fam Physi-cian. 2011 Jan 15;83(2):159-165.
2 Csendes A., Pereira P., Zamorano M., Arratia I., González
J., Carrie F. Tratamiento mé-dico o quirúrgico de la obstrucción
intestinal alta. Rev. Chil. Cir. 2016; 68(3): 227-232.
superficies de tejido que normalmente están separadas
dentro de la cavidad abdominal. Las asas intestinales
se mueven y como están adheridas a un punto por la
adherencia,estaactuarácomounejehaciendoqueelasa
rote sobre él, produciéndose una obstrucción mecánica.
Son más frecuentes tras cirugías de abdomen bajo y
pélvicas. Se estima que hasta un 90% de los pacientes
desarrollaránadherenciasluegodeunalaparotomía3
.Asu
vez, el riesgo de una recurrencia tras una adherenciolisis
es de 11- 21%, ya que esta implica manipulación de asas
einflamación,generandomásadherenciasenelproceso.
• Vólvulo,consisteenelgirosobresupropioejedeunasade
intestino,causandoobstrucción yelcompromisovascular
del segmento. Los sitios más frecuentes donde puede
ocurrir un vólvulo son 4 5
, 60 - 70% colon sigmoides, 20
- 30% ciego, 3% colon transverso y 2% ángulo esplénico.
3 Menzies D, and Ellis H: Intestinal obstruction from
adhesions—How big is the problem? Ann R Coll Surg Engl 1990;
72: pp. 60-63.
4 Mulas C., Bruna M., García-Armengol J., Roig J. Manejo
del vólvulo de colon. Experiencia en 75 pacientes. Rev. esp. enferm.
dig. vol.102 N.° 4, Madrid, abr. 2010.
5 Ballantyne GH, Brandner MD, Beart RW Jr, Ilstrup DM .
Volvulus of the colon. Incidence and mortality. Ann Surg. 1985; 202
(1):83.
Obstrucción intestinal
por bridas
228
Formación Vólvulosigmoide
229
Intusucepcion (visióninterior)
Intusucepcion (visiónexterior)
230
• Hernias, pueden ser de ubicación a nivel inguinal,
umbilical, crural o en relación con una cicatriz de una
cirugía previa, llamada hernia incisional. En este tipo
de causas el examen físico debe ser realizado en forma
muy completa y tener especial cuidado en pacientes
obesos al examinar la región inguinal y crural, las cuales
quedan muchas veces cubiertas por grandes pliegues de
pared que pueden ocultar la presencia de una hernia y
el paciente no referir dolor en la zona afectada, sino que
en todo el abdomen.
• Hernias internas, hoy más frecuentes por el aumento
de pacientes sometidos a cirugía bariátrica de By Pass,
quedando espacios en la brecha mesentérica una vez
que el paciente baja de peso y que permiten el paso de
intestino a través de ella.
• Neoplasias extraintestinales, tumores peritoneales
o retroperitoneales que comprimen y obstruyen
el intestino. Por ejemplo, linfomas, sarcomas, etc.
• Carcinomatosis peritoneal, la diseminación peritoneal de
cualquier tumor puede provocar implantes que obstruyen
el intestino a cualquier nivel o simultáneamente en varios
puntos.
• Procesos infecciosos intestinales: TBC yactinomicosis.
• Isquemia, secuelas de procesos isquémicos anteriores
pueden generar estenosis, por ejemplo, trombosis o embolias
venosas y arteriales, hematomas por traumatismos, etc.
• Secuelasderadioterapiayquimioterapiapuedenproducir
estenosis llevando a una obstrucción completa en los
distintos niveles del intestino.
• Enfermedad de Crohn, la obstrucción intestinal es una
de las principales indicaciones de cirugía en enfermedad
de Crohn. En esta patología se genera una inflamación
aguda con edema de la pared del intestino, íleon terminal
en la mayoría de los casos, pudiendo darse en otros
segmentos del intestino delgado y también grueso. Esta
inflamación y edema pueden ocasionar una obstrucción
que se puede manejar de manera conservadora, pero
a veces requerir de cirugía. En pacientes con cuadros
inflamatorios recurrentes, se puede generar estenosis
que puede crear una obstrucción intestinal.
Íleo mecánico de causas intraluminal
• Neoplasias del lumen intestinal en sus distintos
segmentos, proveniente de la mucosa o del estroma.
Aproximadamente un 10 - 29% de los pacientes concáncer
colorrectal se presentan con obstrucción intestinal6
; de estos,
la mayoría es distal al ángulo esplénico, ya que en este lugar
el diámetro del colon es menor y las de-posiciones son más
sólidas.
• ÍIeo biliar, es la obstrucción intestinal secundaria a
un cálculo proveniente de la vesícula. Es una complicación
de la colelitiasis. Por lo general se ve en pacientes mayores
y se debe a la presencia de una fístula biliodigestiva
(colecistoduodenal) que permitió el paso del cálculo desde
la vesícula al intestino. Se estima que el cálculo debe medir
al menos 2,5 cm para provocar una obstrucción. Los sitios
de obstrucción son: 70% en el íleon (válvula ileocecal), 25%
en el yeyuno o íleon proximal y 5% en el duodeno (síndrome
de Bouveret)7
.
• Cuerpos extraños.
• Bezoares.
• Intususcepción.
Fisiopatología
Cuando ocurre una obstrucción mecánica del intestino,
inicialmente se produce un aumento del peristaltismo
intentando restablecer el tránsito. Al no ceder la obstrucción,
el contenido intestinal se acumula hacia proximal provocando
que las asas se fatiguen, disminuye el peristaltismo y se
produce una dilatación y edema de la pared.
Se crea así un tercer espacio que llevará a la deshidratación
y pérdida de electrolitos que, sumado a los vómitos profusos,
tiene consecuencias metabólicas que son la hipocloremia,
hipokalemia e inicialmente una alcalosis metabólica.
La acumulación de líquido y distensión intestinal hacen
que aumente la presión ejercida sobre la pared del lumen
del intestino, causando el colapso de vasos capilares que
producen isquemia, hipoxia y acidosis. Si no se resuelve la
obstrucción se llegará a la necrosis y perforación del asa
comprometida.
Clínica
El cuadro clínico del íleo mecánico se manifiesta inicialmente
por dolor abdominal agudo intenso de carácter cólico que no
cede con medidas habituales, como es el uso de analgésicos
y antiespasmódicos, obligando a consultar de urgencia.
Habitualmente,seasociaavómitosenformaprecozyposterior
compromiso del estado general por la deshidratación que
genera la creación de un tercer espacio en el lumen intestinal
por el líquido acumulado y las pérdidas por los vómitos.
Lasnáuseasyvómitosenlasobstruccionesaltastiendenaser
de alta frecuencia y de características variables según el nivel
de obstrucción. En obstrucciones más distales, tienden a ser
6 Tuca A., Guell E., Martínez-Losada E., Codorniu N.
Malignant bowel obstruction in ad-vanced cancer patients:
epidemiology, management, and factors influencing spontane-ous
resolution. Cancer Manag Res. 2012; 4: 159–169.
7 Rivoira G., Barotto M., Parodi M., Napolitano D., Viscido
G., Doniquian M., Picón H., Pa-lencia R. Íleo biliar en paciente
colecistectomizado. Caso clínico. Rev. Chilena de Cirugía. Vol.
60 - N.° 3, junio 2008; pp. 236 - 240.
231
Examen Físico
Los hallazgos del examen físico del paciente con una
obstrucción intestinal van variando de acuerdo con el momento
en que consulta. También influyen la altura de la obstrucción
intestinal, la causa que la produjo y la edad de lapersona.
En el examen físico general es necesario darse cuenta del
estado de hidratación, hay que examinar bien lasmucosas,
piel y lengua. Esta última se presenta habitualmente secay
blanquecina, lo que denominamos saburral. Entre más tardía
es la consulta, mayor es la deshidratación.
Es frecuente que exista taquicardia compensadora por el
estado de deshidratación e hipovolemia. La hipotensión o
shock es una condición tardía y de mal pronóstico.
Lapresenciadefiebredebesiemprealertardelaexistenciade
una complicación grave, perforación y peritonitis secundaria.
más tardíos ycaracterísticamentederetenciónofecaloídeos.
La incapacidad de eliminar gases y deposiciones, que es el
síntoma cardinal de una obstrucción intestinal, no siempre
es fácil de interpretar. La ausencia de deposiciones, incluso
por varios días, puede ser “normal” en algunos pacientes.
Además, en etapas iniciales puede presentar diarrea, pues
elimina el contenido intestinal distal a la obstrucción. La falta
de eliminación de gases puede resultar muy representativa
del grado de obstrucción, cuando el paciente refiere
categóricamente que no puede eliminar gases, estamos
frente a una obstrucción intestinal completa.
La distensión abdominal ocurre a medida que el intestino
proximal a la obstrucción se dilata en forma progresiva.
Por lo mismo, se observa un mayor nivel de dilatación en
obstrucciones distales y puede ser menos evidente en
obstrucciones intestinales altas.
Los síntomas adjuntos como la sed, oliguria o anuria sugieren
deshidratación que puede estar acompañada de variable
grado de compromiso de conciencia que es manifestación
de trastornos hidroelectrolíticos y ácido-base.
El dolor abdominal persistente y de mayor intensidad,
asociado o no a la presencia de fiebre, es sugerente que
estamos frente a un sufrimiento isquémico de asas o
perforación intestinal y peritonitis. Esto es muy importante
determinar en la evaluación inicial, no se puede perder tiempo
con un paciente en estas condiciones.
También puede existir taquipnea compensatoria cuando la
hipovolemiaesimportanteyhadadolugaraldesarrollodeuna
acidosis metabólica producto de un metabolismo anaeróbico
y producción de ácido láctico.
Todo lo anterior va a influir en el estado de conciencia del
paciente, por lo que en condiciones avanzadas y con gran
deshidratación el paciente presentará grados variables de
compromiso de conciencia.
En el examen físico segmentario uno de los elementos
importantes e iniciales por inspeccionar es la presencia de
cicatrices o hernia en la pared abdominal.
Derutinasedebeinspeccionarypalparlasregionesinguinales
y crurales, aunque a simple vista no se aprecie la existencia
de una hernia, puede que solo se detecte en la palpación,
especialmente en pacientes con sobrepeso.
La presencia de distensión abdominal es muy llamativa en
las obstrucciones más distales. Cuando la obstrucción es
proximal puede ser casi inaparente, especial-mente si el
paciente es obeso.
Las características de los ruidos intestinales o hidroaéreos
varían de acuerdo con el momento de evolución de la
obstrucción. En las etapas iniciales se auscultará un aumento
de la frecuencia de los ruidos producto del peristaltismo
exacerbado tratando de vencer la obstrucción. Posteriormente,
los ruidos van adquiriendo un tono metálico producto de
la distensión del asa y la presencia de gas en su interior.
Finalmente en la etapa más avanzada y de agotamiento, los
ruidos mantienen el tono timpánico, pero disminuye en forma
considerable la frecuencia. La ausencia total de ruidos debe
hacer sospechar la posibilidad de un íleo paralítico o de una
complicación como una perforación con peritonitis, por este
motivo es importante evaluar conjuntamente la resistencia de
la pared abdominal y la presencia o no de signos de irritación
Obstrucción intestinal con dilatación proximal
232
peritoneal, Blumberg.
Unsignopropiodeuníleoeslapresenciade“bazuqueo”,ruido
semejante al que produce mover un recipiente con agua en
su interior y que se obtiene al auscultar al paciente mientras
usted moviliza lateralmente el abdomen hacia ambos lados.
Serecomiendasiemprerealizaruntactorectal,especialmente
sisesospecha una obstrucción intestinalbaja.Estamaniobra
puede entregar muchos antecedentes, como la detección de
una masa tumoral o fecaloma y la presencia de sangre en
el lumen.
Estudio Clínico
Laboratorio
Los exámenes de laboratorio muchas veces van a expresar el
nivel de deshidratación que tiene el paciente al momento de
consultar, por esto es muy importante considerar este factor
al momento de interpretarlos.
FISIOPATOLOGÍA Y CLÍNICA
Deshidratación ehipovolemia
Trastornos electrolíticos
Estrangulación, obstrucción en asa cerrada
Aumento de la presión intraluminal
Bazuqueo
Distensión abdominal
Vómitos
Características según nivel de la obstrucción
*Profusos y tempranos en obstrucciones altas
*Fecaloídeos y tardíos en obstrucciones distales
ACUMULACIÓN INTRALUMINAL DE LÍQUIDO Y ELECTROLITOS
Dilatación prograsiva de asas Vólvulos, hernias, colon derecho
Isquemia de la mucosa ---> Transmural
Signos de irritación
peritoneal Peritonitis
Abolición de RHA
Fiebres
Dolor persistente, de
mayor intensidad
233
Hemograma: el hematocrito suele estar elevado por
hemoconcentración y no refleja el nivel real. El recuento de
leucocitos puede tener el mismo efecto de hemoconcentración,
pero hay que tener mucho cuidado en su interpretación, ya
que una elevación puede estar expresando una complicación
infecciosaproductodeunaperforaciónonecrosisdelintestino.
Esnecesarioevaluarconjuntamenteconlafórmuladiferencial
y ver si hay una desviación a izquierda y elevación de otro
marcador como la PCR.
Creatina / BUN: es mandatorio evaluar la función renal, ya
que es frecuente que se vea comprometida secundaria a la
hipovolemia por la deshidratación y exista una insuficiencia
renal aguda prerrenal.Además, el uso de medio de contraste
paraestudioconimágenesobligaaresguardarlafunciónrenal.
Acido láctico en sangre: examen cada vez más usado para
detectar presencia de una acidosis láctica frecuente de ver
en cuadros infecciosos e inflamatorios abdominales.
Electrolitos plasmáticos: los vómitos, el tercer espacio y
la deshidratación provocan trastornos hidroelectrolíticos
importantes por pérdida o movilización de estos hacia o
desde el intracelular.
Gases venosos:nos indican elestadoácidobasedelpaciente
y complementan la información obtenida por los exámenes
anteriores.
PCR, procalcitonia, o cualquier otro marcador inflamatorio
ayuda en el diagnóstico y seguimiento del proceso.
Imágenes
Generalmente confirman la sospecha diagnóstica y ayudan a
definir el sitio de obstrucción pudiendo en ocasiones revelar la
etiología. También permiten diferenciar entre una obstrucción
parcial y una completa.
Radiografía simple de abdomen: continúa siendo utilizada
comolaprimeraaproximacióndiagnósticaenunaobstrucción
intestinal. Presenta una sensibilidad del 60%, siendo la
presencia de intestino delgado dilatado el mejor signo de
la presencia de un íleo. La radiografía simple de pie va a
mostrar niveles hidroaéreos, muchos piensan que es el signo
claro de una obstrucción, pero se puede dar también en otras
patologías, por lo que es un hallazgo poco específico. Lo más
importante es la “dilatación de asa”, por eso se recomienda
que la radiografía de abdomen simple se tome en decúbito
supino. En obstrucciones parciales veremos aire presente
en el colon y en las totales desaparece el aire del colon. Si
la obstrucción es muy temprana pudiese encontrarse aire en
colon o recto, aun cuando la obstrucción sea completa. Se
insistequelomásimportanteenobstruccionescompletasson
las asas intestinales dilatadas. En algunos casos una placa
radiográfica puede revelar la causa de la obstrucción. En el
Íleo biliar se podrá divisar en la radiografía neumobilia (aire
en la vía biliar), un cálculo radio opaco en asas intestinales
y signos de obstrucción intestinal. En el vólvulo se podrá
observar el signo radiológico del “grano de café”, que no es
más que el colon sigmoides distendido por una obstrucción
en asa cerrada.
TAC de abdomen - pelvis: muy sensible al momento de
identificar una obstrucción completa y nos ayuda a identificar
el sitio de obstrucción, segmento del intestino donde se nota
unatransiciónentreasadilatadayasacolapsada,produciendo
lo que se denomina zona con cambio de calibre. También es
útil para detectar cambios isquémicos y necrosis irreversible,
aparece pneumatosis intestinal y gas en vena porta. El uso
de contraste oral cuando se puede utilizar tiene un valor
diagnóstico y terapéutico, sobre todo en obstrucciones
parciales. El contraste endovenoso debe ser realizado con
protección renal y previa evaluación de su función.
Los estudios conbariohoyprácticamente noseusan.Pueden
demostrar con precisión el sitio de obstrucción, como también
la etiología de esta. El mayor impedimento de su uso es que
limitaposteriormentealTAC,elbariodentrodellumenprovoca
mucha interferencia.
Enteroclisis: TAC de abdomen con uso de abundante
agua en muy breve tiempo en el lumen intestinal mediante
administración por sonda o por vía oral. Estudio de elección
en pacientes que el diagnóstico de obstrucción intestinal es
clínicamente incierto, parcial o intermitentes y recurrentes.
Ultrasonografía:puedetenerutilidadenpacientesembarazadas
para evitar irradiación fetal. Es de difícil interpretación y
operador dependiente.
Tratamiento
Existen dos fases del manejo del paciente con un íleo
mecánico. En un primer momento lo más importante es el
proceso de reanimación, es decir, recuperarlo del estado
de deshidratación, compensar las pérdidas, corregir la
hipovolemia y alteraciones electrolíticas.
Esta reanimación se inicia en el mismo servicio de urgencia,
con aporte generoso de soluciones cristaloides, inicialmente
con suero fisiológico, teniendo mucho cuidado en la
sobrehidratación. Esto exige monitorización permanente
para ver los efectos de nuestro aporte, especialmente en
pacientes mayores con daño vascular o renal. Lo ideal es
poder tener dentro del monitoreo una medición de la diuresis,
siendo necesario en muchas ocasiones tener que invadir al
paciente colocando una sonda vesical. La diuresis es el mejor
índice de reperfusión tisular y nos permite evaluar si el aporte
ha sido suficiente.
La utilización de monitoreo más invasivo con un catéter de
presión Venoso Central o Swan Ganz se debe reservar para
hacerlo en una unidad de Cuidados Intensivos o Intermedios,
no se justifica realizarlo en Urgencia.
234
Durante la rehidratación es conveniente controlar función
renal, electrolitos plasmáticos y gases venosos. Otro buen
indicador de una perfusión adecuada es la corrección de una
acidosisquehubieseestadopresentealmomentodelingreso.
La persistencia de una acidosis es un indicador de reposición
insuficiente de fluidos o de una complicación mayor derivada
de la obstrucción (ej: Perforación, peritonitis, sepsis.
El segundo momento del manejo de un íleo mecánico es
decidir si el paciente será tratado inicialmente en forma
conservadora o debe ir a pabellón. Cuando la causa de la
obstrucción es una hernia que se encuentra complicada por
unestrangulamiento,nohaydudaquelaindicaciónquirúrgica
es inmediata y no se debe postergar. El buen examen físico
y la historia nos van ayudar a tomar esta decisión. Un dolor
permanente e intenso debe hacer sospechar compromiso
isquémico del asa comprometida y no se debe postergar la
cirugía. La presencia de signos de irritación peritoneal es
indicación de cirugía inmediata.
El problema comienza ocacionalmente, cuando existe una
obstrucción intestinal completa no complicada y el paciente
tiene antecedentes de cuadros similares previos que se
resolvieronconmanejomédicoconservador. Estospacientes
muchas veces se benefician con el reposo digestivo, régimen
cero, hidratación parenteral y descompresión del intestino
mediante uso de sonda nasogástrica. Estas simples medidas
permiten que cedan los vómitos y las náuseas. También cede
el dolor y disminuye el riesgo de aspiración.
Cuandolaobstrucciónintestinalesincompleta,serecomienda
ser prudente e intentar un manejo médico como el descrito
recientemente.
Obstrucción intestinal completa
235
También es importante poder conocer la causa de la
obstrucción intestinal porque hay patologías que, aunque
no se presenten con complicaciones, su resolución definitiva
es la cirugía. Es así el caso de los tumores que comprometen
el lumen intestinal, bezoares, hernias, cuerpos extraños,
íleo biliar e intususcepción. Aunque hoy en día las técnicas
endoscópicas han permitido el manejo de estas situaciones
en forma transitoria como en la devolvulación endoscópica
que resulta exitosa en un 75 - 95% de los casos8
. La tasa de
recurrencia del vólvulo es elevada, por tanto, posterior a la
urgencia se debe considerar la solución quirúrgica definitiva.
Otro factor que siempre se debe considerar es la experiencia
del equipo quirúrgico en el manejo definitivo de la causa
del íleo. Por ejemplo, si la obstrucción es secundaria a un
cáncer colorrectal, hoy se preconiza un manejo definitivo por
médicos especialistas, evitando operaciones de Hartmann o
colostomías donde nunca se reconstituye el tránsito intestinal
empeorando la calidad de vida del paciente. Cuando el tumor
es obstructivo, si técnicamente es posible, se puede instalar
un stent metálico por colonoscopía; de esta manera, se
soluciona la obstrucción, permite el estudio con colonoscopía
delsegmentoproximalparadescartarlesionesconcomitantes
y realizar el tratamiento definitivo en un mejor escenario.
Son muchas las consideraciones que hay que tener presente
cuando la cirugía no aparece como mandatoria de realizar
por las evidencias clínicas, exámenes e imágenes, quedando
la decisión a base de la experiencia y criterio del cirujano. Es
importante considerar la edad, comorbilidades y el estado
nutricional del paciente, ya que son elementos que permiten
dar un pronóstico que puede influir en nuestra decisión de
postergar la cirugía y realizar, en cambio, un manejo médico
puede resultar lo más prudente y mejor para el paciente en
ese momento.
Una vez tomada la decisión de operar a un paciente, el
cirujano se obliga a una reanimación intensiva y eficiente
con compensación de comorbilidades lo mejor posible, para
no someter al paciente a riesgos anestésicos y quirúrgicos
injustificados por un mal manejo preoperatorio.
Hay oportunidades en que pese a que la cirugía aparece
como una solución al problema del paciente, es necesario
considerar la etiología o enfermedad de base que hace que el
cirujano prefiera ser conservador y tratar en forma médica, ya
que en el largo plazo se pueden producir consecuencias tales
como un síndrome de intestino corto con malabsorción, por
las múltiples resecciones intestinales sucesivas, como ocurre
en las estenosis porenfermedad de Crohno enteritis actínica.
Si se ha decidido un manejo conservador, se requiere
constante monitorización y vigilancia activa del paciente para
asegurar que el curso clínico sea satisfactorio o pesquisar
cambios negativos oportunamente.
Elfracasodeunaconductaconservadoraimplicalaresolución
8 Hodin R. Sigmoid volvulus. Up to Date. Nov 2016.
quirúrgica, por lo que es importante definir en forma prudente
los tiempos para cambiar de conducta.
Cerca del 50% de los pacientes con obstrucción intestinal
puedensermanejadossincirugíaylamismaproporciónsufrirá
nuevos episodios de obstrucción intestinal, independiente de
si el tratamiento haya sido o no quirúrgico.
Cuando se opta por la intervención quirúrgica es necesario
considerar todos los escenarios posibles. Puede ser una
intervención muy sencilla y rápida con muy bajo riesgo, como
la liberación de una brida única, como también una extensa y
dificultosa cirugía por hallazgo de un abdomen prácticamente
sellado por adherencias y riesgo de múltiples enterotomías
o de resecciones intestinales y anastomosis técnicamente
complejas. Es clave para un buen resultado la experiencia
del equipo quirúrgico y solicitar ayuda cuando se carezca
de ella. Es fundamental contar con apoyo intraoperatorio
del equipo anestésico, de enfermería, banco de sangre y
laboratorio. Una vez terminada la cirugía el posoperatorio
es igualmente importante, requiriendo muchas veces en los
casos más complejos la disponibilidad de cupo en una UPC.
El uso de analgesia debe ser racional. Con las medidas de
descompresión del intestino con SNG, el dolor, vómitos y
riesgo de aspiración debieran disminuir en forma considerable,
pero generalmente se administra un analgésico de primera
línea como el metamizol o paracetamol endovenoso. Se trata
de evitar losAINES por daño renal y los opiáceos que afectan
el peristaltismo y contribuyen al íleo. Lo importante es no
abusar de la analgesia y esconder una posible complicación
y retardar la cirugía.
Íleo Paralítico
El íleo paralítico o parálisis intestinal se debe a una detención
del peristaltismo provocado por una serie de estímulos físicos
(cirugía), farmacológicos (anticolinérgicos) y trastornos
hidroelectrolíticos (hipokalemia).
En este capítulo no se revisará este tema, solo se mencionará
dentro del diagnóstico diferencial inicial con el propósito de
identificar qué se debe descartar frente a un íleo mecánico.
236
Bibliografía
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237
CirugíaHepatobiliar
238
239
6.1 Anatomía normal dela vía
biliar yvesícula biliar Rodríguez D, Jofré M, Valdés F.
Vía Biliar Intrahepática
La anatomía de la vía biliar se divide en varios segmentos;
la vía biliar intrahepática, la extrahepática, la vesícula biliar,
el conducto cístico, y el esfínter hepatopancreático o esfínter
de Oddi. La anatomía de los conductos intrahepáticos se
asocia de manera íntima con la anatomía hepática. La
anatomía lobar y segmentaria del hígado son determinadas
por las ramificaciones secuenciales de la vena porta, de la
arteria hepática y del árbol biliar, mientras estas entran en el
parénquima a través del puerta hepática. Las 3 estructuras
siguen cursos paralelos y se bifurcan justo antes de entrar al
hígado. Dicha bifurcación divide el hígado en lobos derecho
e izquierdo. De acuerdo con la clasificación de Couinaud,
el lobo caudado corresponde al segmento I, los segmentos
II al IV van a la izquierda y los segmentos V al VIII van a la
derecha (Figura 1).
Segmentación hepática
240
El drenaje biliar del hígado derecho es a través del conducto
hepático derecho y el del izquierdo a través del conducto
hepáticoizquierdo.Elconductohepáticoderechodrenadesde
el segmento V hasta el VIII; el izquierdo desde el II al IV. El
drenaje biliar del lobo caudado (segmento I) es variable, pero
en la mayoría de los casos es a través de ambos conductos
hepáticos1 2 3
.
Vía biliar extrahepática
El colédoco contiene una mucosa columnar rodeada por
tejido conectivo. La superficie es relativamente plana, con
núcleos basales y pocos o ningún nucléolo. La lámina propia
consiste de colágeno, fibras elásticas y vasos sanguíneos.
Las fibras musculares son escasas y discontinuas, las cuales
generalmentesonlongitudinales.Aniveldelcolédocodistalse
desarrollaunacapamuscularmásprominente,especialmente
en la porción intrapancreática, la cual se vuelve evidente a
nivel del esfínter hepatopacreático4
.
Ambos conductos hepáticos convergen en un conducto
hepático común, inmediatamente distal a la puerta hepática.
El conducto cístico se une a este 2 a 3 cm distal a esta unión,
formando el conducto colédoco.
El colédoco tiene una longitud de 8-9 cm; su diámetro normal
varía entre 4 a 9 mm; se considera que está dilatado si su
diámetroexcede los10 mm.Se divide en 3 porciones; el tercio
superior (porción supraduodenal), el tercio medio (porción
retroduodenal) y el tercio inferior (porción intrapancreática).
La porción supraduodenal cursa hacia distal, en el borde libre
del omento menor, anterior a la vena porta y a la derecha
de la arteria hepática propia. La porción retroduodenal
transcurre posterior a la primera porción del duodeno,
lateral a la vena porta y anterior a la vena cava inferior.
La porción intrapancreática cruza el aspecto posterior del
páncreas para entrar en la 2.a porción del duodeno, donde
se une generalmente al conducto pancreático. La porción
intraduodenalointramuraldelcolédocopasadeformaoblicua
através de la pared duodenal para entrar a este porlaampolla
hepatopancreática o ampolla de Vater (Figura 2).
El conducto colédoco y el conducto pancreático tienen distintas
formas de relacionarse entre sí; (1) unión previo a la pared
duodenal para formar un conducto común largo; (2) unión
en la pared duodenal para formar un conducto común corto;
o (3) sin relación entre ellos, entrando a la pared duodenal
por orificios separados. La porción retropancreática del
colédoco y la porción terminal del conducto pancreático son
envueltas y reguladas por un esfínter complejo, el esfínter
hepatopancreático. Anatomía región
periampular
1 Moorman DA: The surgical significance of six anomalies
of the biliary duct system. Surg Gynecol Obstet 131:665, 1970.
2 Healey JE, Schroy PC: Anatomy of the biliary ducts within
the human liver:Analysis of the prevailing pattern of branch-ings and
the major variations of the biliary ducts. Arch Surg 66:599, 1953.
3 Johnson EV, Anson BJ: Variations in the formation and
vascular relationships of the bile ducts. Surg Gynecol Obstet 94:669,
1952.
4 Frierson H Jr: The gross anatomy and histology of the
gallbladder, extrahepatic bile ducts, vaterian system, and minor
papilla. Am J Surg Pathol 13:146, 1989.
241
Vesícula biliar y Conducto Cístico
La vesícula es un órgano piriforme que se asienta sobre la
superficie inferior hepática, en la unión de los lobos hepáticos
izquierdo y derecho, entre los segmentos IV y V de Couinaud
(Figura 3)4. Mide 7 a 10 cm de largo y 2.5 a 3.5 cm de
ancho. El volumen varía considerablemente, siendo mayor
durante el ayuno y menor después de comer. Una vesícula
moderadamente distendida tiene una capacidad de 50-60
cc de bilis, pero puede ser mucho mayor en ciertos estados
patológicos. Se divide en 3 áreas: el fondo, el cuerpo y el
cuello. El cuello tiene una dirección cefálica y dorsal para
unirse al conducto cístico.
La vesícula biliar consiste de cuatro capas, de interno a
externo: túnica mucosa (epitelio más lámina propia), túnica
muscular (musculatura lisa discontinua), tela subserosa (tejido
conectivo)ylatúnicaserosa.Lavesículanopresentamuscular
de la mucosa o submucosa.
La mayoría de las células de la mucosa son columnares y
su principal función es la absorción, aunque también son
capaces de secreción activa. Dichas células se alinean en
una fila única, con un citoplasma ligeramente eosinofílico,
vacuolas apicales y núcleos basales o centrales5
.
Relaciones anatómicas de la vesícula
5 Swartz-Basile DA, Lu D, Basile DP, et al: Leptin regulates
gallbladder genes related to absorption and secretion. Am J Physiol
293:84, 2007.
242
Laláminapropiacontienefibrasnerviosas,vasossanguíneos,
linfáticos, fibras elásticas, tejido conectivo y ocasionalmente
mastocitos y macrófagos. La capa muscular contiene fibras
lisas circulares, longitudinales y oblicuas, pero esto no es
constante en toda la extensión de la pared. Se pueden
encontrar linfáticosentreloshacesmusculares.Lasubserosa
se compone de fibroblastos, fibras elásticas y de colágeno,
vasos sanguíneos, nervios, linfáticos y adipocitos.
Los senos de Rokitansky-Aschoff son invaginaciones del
epitelio dentro de la lámina propia, músculo y tejido conectivo
subseroso. Están presentes en un 40% de las vesículas
normales y en hasta el 95% de las vesículas inflamadas.
Los conductos de Luschka son pequeños conductos biliares
accesorios que se encuentran alrededor de la capa muscular
delacara hepática de lavesícula,estos comunicanlavía biliar
intrahepática directamente con la vesícula, saltándose la vía
biliar. Se encuentran en un 10% de las vesículas normales,
y no tienen relación con los senos de Rokitansky-Aschoff ni
con los estados inflamatorios vesiculares.
El conducto cístico está unido al cuello vesicular y se une al
conducto hepático común para formar el colédoco (Figura 2).
Su largo varía entre 2 a 4 cm. Usualmente, tiene un curso
caudalenelligamentohepatoduodenalparaunirsealaporción
supraduodenal del conducto hepático en un ángulo agudo1.
Ocasionalmente,puedeunirseal conducto hepático derecho,
o extenderse más hacia caudal, para unirse a la porción
retroduodenal del conducto. El conducto cístico contiene un
número variable de pliegues mucosos, denominados “válvulas
de Heister” o pliegues espirales, que, a pesar de este nombre,
no cumplen un rol valvular.
En 1891, Calot describió una región anatómica triangular
formadaporelconductohepáticocomúnamedial,elconducto
cístico a lateral y la arteria cística por superior6
. El triángulo
cístico(consideradopormuchoscomoel“verdadero”triángulo
deCalot)presentalosmismoslímiteslaterales,peroelsuperior
corresponde al margen inferior del lóbulo derecho hepático
7 8
(Figura 4). El triángulo de Calot debe ser correctamente
visualizado durante una colecistectomía, dado que hay
numerosas estructuras importantes que pasan a través de
esta área. En la mayoría de los casos, la arteria cística surge
como una rama de la arteria hepática derecha en el triángulo
cístico.Conductoshepáticosaberrantesoaccesoriospueden
pasar a través del triángulo cístico antes de unirse al conducto
cístico o al conducto hepático común8.
Esfínter Hepatopancreático (de Oddi)
El sistema esfinteriano del conducto biliar distal y pancreático
es referido tradicionalmente como el “esfínter de Oddi”.
El término es impreciso, dado que este es subdividido en
varias secciones y contiene tanto fibras circulares como
longitudinales.
El mecanismo esfinteriano funciona independiente de la
musculatura duodenal que lo rodea y tiene musculaturas
separadas para el conducto biliar distal, el pancreático y la
ampolla. En más del 90% de la población, el conducto común
(donde el conducto biliar y pancreático se unen) mide menos
de 1 cm de longitud y transcurre dentro de la ampolla. Enla
rara situación donde el conducto mide más de 1 cm, o cuando
el conducto pancreático y biliar entran de forma separada al
duodeno, existe mayor probabilidad de desarrollar patologías
en dicha zona9
.
Irrigación
La irrigación del conducto hepático derecho, izquierdo y la
porción superior del conducto hepático común deriva de la
arteria cística y de la arteria hepática derecha e izquierda. El
colédoco supraduodenal es irrigado por ramas de la hepática
derecha,lacística,lapancreatoduodenalposterosuperiorylas
arteriasretroduodenales.Elsoportearterialaxialdelconducto
supraduodenal hasidoenfatizadoporTerblanceycols (Figura
5)10
. Las arterias más importantes transcurren en forma
paralela al conducto, a las horas 3’ y 9’. Aproximadamente, el
60% de la irrigación a los conductos supraduodenales proviene
inferiormente, a través de las arterias pancreatoduodenales y
lasretroduodenales,mientrasqueel38%vienesuperiormente
a través de la hepática derecha y la arteria cística. Cualquier
dañoenestesoportevascularaxialpuederesultarenestenosis
ductalesisquémicas.
Solo un 2% de la irrigación es segmentaria (no axial).Estas
pequeñas arterias segmentarias vienen directamente de la
arteria hepática propia, mientras esta asciende por el ligamento
hepatoduodenal, adyacente al colédoco. La irrigación del
conducto hepático retroduodenal e intrapancreático viene
de las arterias retroduodenales ypancreaticoduodenales.
6 Rock J, Swan KG, Diego J: Calot’s triangle revisited. Surg
Gynecol Obstet 153:410, 1981.
7 Skandalakis JE, Gray SW, Rowe JS Jr: Biliary tract. In
Skandalakis JE, Gray SW, editors: Anatomical complications in
general surgery. New York, 1983, McGraw-Hill, p. 31.
8 Specht MJ: Calot’s triangle [letter]. JAMA 200:1186, 1967.
9 Boyden EA: The anatomy of the choledochoduodenal
junction in man. Surg Gynecol Obstet 104:646, 1957.
10 Terblanche J, Allison HF, Northover JMA: An ischemic
basis for biliary strictures. Surgery 94:52, 1983.
243
Triángulo deCalot
La arteria cística usualmente es una rama única proveniente
de la arteria hepática derecha, dentro del triángulo cístico
(Figura 6) 11 12
. De forma infrecuente, dicha arteria puede
provenir de la hepática izquierda, de la hepática común, de la
gastroduodenal o incluso de la arteria mesentérica superior13
.
Cuando la arteria cística proviene de la hepática derecha,
generalmente sigue un curso paralelo, adyacente y medial al
conducto cístico, sin embargo, pocas veces esta relación es
constante.Silaarteriaderivadelahepáticaderechaproximal,
o de la arteria hepática común, generalmente está cerca del
conducto hepático, el cual puede lesionarse cuando la arteria
es ligada durante una colecistectomía.
11 Benson E, Page RE:Apractical reappraisal of the anatomy
of the extrahepatic bile ducts and arteries. Br J Surg 63:853,1976.
12 Michels NA:The hepatic, cystic, and retroduodenal arteries
and their relations to the biliary ducts with samples of the entire
celiacal blood supply. Ann Surg 133:503, 1951.
13 Michels NA:The hepatic, cystic, and retroduodenal arteries
and their relations to the biliary ducts with samples of the entire
celiacal blood supply. Ann Surg 133:503, 1951.
244
Irrigación víabiliar
Variaciones anatómicas en la irrigación vesicular
245
Variaciones anatómicas en la irrigación vesicular
Variaciones anatómicas en
la irrigaciónvesicular
246
Mientras cruza el triángulo de Calot, la arteria cística
generalmenteproveedeirrigaciónalconductocísticoconuna
omás ramas.Cercadela vesícula,estaarteria usualmentese
divide en una rama superficial y una profunda. La superficial
sigue un curso a través de la cara anterior de la vesícula,
mientras que la profunda pasa entre la vesícula y el hígado
en la fosa cística.
La arteria hepática derecha pasa posterior al conducto
hepático común mientras asciende hacia el hígado en un
85% de los individuos y anterior a este en el 15% restante. En
aproximadamente un 15% de los individuos existe una arteria
hepática derecha reemplazada o aberrante que se origina de
la arteria mesentérica superior, que pasa a través del aspecto
medial del triángulo cístico, posterior al conducto cístico.
Eldrenajevenosodelosconductoshepáticosydelasuperficie
hepática de la vesícula es por me-dio de pequeños vasos
que vacían en ramas de las venas hepáticas a través del
hígado. Un pequeño tronco venoso que asciende paralelo
a la vena porta recibe el drenaje venoso de la vesícula y
el colédoco antes de entrar al hígado, separado de la vena
porta. El drenaje venoso de la porción inferior del colédoco
es realizado directamente por la vena porta3.
Lasfibrasaferentesvisceralesdelhígado,vesículayconducto
biliar viajan con las fibras simpáticas aferentes a través de
los nervios esplácnicos torácicos para entrar a las raíces
dorsales desde el 5.° al 9.° segmentos torácicos. Las fibras
sensitivas desde el nervio frénico derecho también inerva la
vesícula. Esta inervación puede explicar la omalgia derecha
referida en pacientes con patología de la vesículabiliar14.
Drenaje Linfático
Los vasos linfáticos de los conductos hepáticos y el colédoco
proximal drenan en los linfonodos hepáticos, los cuales son
una cadena de linfonodos que sigue el curso de la arteria
hepática, los cuales drenan a los linfonodos celíacos. Los
linfonodos del conducto hepático distal drenan tanto a los
linfonodos hepáticos como a los pancreáticos superiores.
Los vasos linfáticos de la vesícula y el conducto cístico
drenan principalmente en los linfonodos hepáticos a través
del linfonodo cístico; un linfonodo constante localizado en
la unión del conducto cístico y el conducto hepático común.
Los vasos linfáticos de la superficie hepática de la vesícula
se pueden comunicar también con linfáticos intrahepáticos14
.
Inervación
Lavesículabiliar yelárbolbiliarrecibeninervaciónsimpática y
parasimpática,derivadasdelplexocelíacoycursasiguiendola
arteria hepática (Figura 6). El tronco vagal izquierdo (anterior)
da ramas hepáticas y gástricas. La rama hepática, transcurre
por el omento menor y provee fibras a la vesícula biliar, al
conducto biliar y al hígado. Las fibras simpáticas originadas
desde el 5.° al 9.° segmentos torácicos pasan a través de los
nervios esplácnicos hacia los ganglios celíacos. Las fibras
simpáticas posganglionares viajan junto a la arteria hepática
para inervar la vesícula biliar, el conducto biliar y el hígado.
14 Couinaud C: The biliary tract and the anatomy of biliary
exposure. In Blumgart LH, editor: Surgery of the liver and biliary
tract. Edinburgh, 1988, Churchill Livingstone, p. 16.
247
Bibliografía
1. Frierson H Jr: The gross anatomy and histology of the gallbladder, extrahepatic bile ducts, vate-rian system, and minor papilla. Am
J Surg Pathol 13:146, 1989.
2. Skandalakis JE, Gray SW, Rowe JS Jr: Biliary tract. In Skandalakis JE, Gray SW, editors: Anatomi-cal complications in general
surgery. New York, 1983, McGraw-Hill, p. 31.
3. Couinaud C: The biliary tract and the anatomy of biliary exposure. In Blumgart LH, editor: Sur-gery of the liver and biliary tract.
Edinburgh, 1988, Churchill Livingstone, p. 16.
248
249
6.2 Patología Biliar Benigna
Ramírez J, Besser N, Bawarshi V, Court F.
Lapatologíabiliarbenignaenglobaunaseriedeenfermedades
en las que cálculos biliares juegan un rol central. Las
enfermedades del tracto biliar representan un 4% de los
egresos hospitalarios del país, siendo la primera causa no
obstétrica de hospitalización en Chile1,2
.
Fisiología de la secreción biliar
Dentro de las múltiples tareas del hígado se encuentra la
secreción de bilis que ejerce 2 funciones importantes:
1. Digestión y absorción de lípidos a través de la
emulsificación de grasas, facilitando la absorción intestinal
de los productos finales de la digestión de estos.
2. Servir como medio de excreción para el exceso
de colesterol y de distintos desechos metabólicos
como la bilirrubina, producto final de la degradación de
hemoglobina.
La bilis está compuesta por agua, electrolitos, sales
biliares, colesterol, fosfolípidos (lecitina), pigmentos biliares
(bilirrubina conjugada) y otras proteínas (como albúminas e
inmunoglobulinas).
La secreción diaria de bilis oscila entre los 600 y 1.000 ml/
día. Si bien su producción es un proceso continuo, esta no es
liberada inmediatamente al tracto digestivo, ya que mientras
el esfínter de Oddi esté cerrado, retornará a la vesícula biliar
dondeseráalmacenadahastaqueseanecesitada.Lavesícula
tiene una capacidad máxima de solo 30-60ml en condiciones
normales, pero puede almacenar el equivalente a 12 horas de
secreción biliar (450ml) mediante la concentración de bilis por
medio de la absorción de agua y electrolitos a través de sus
paredes. De esta forma, la bilis se concentra casi 5 veces,
pudiendo llegar en ocasiones a concentraciones de 20 veces
sus valores iniciales3.
1 Egresos hospitalarios de ambos sexos, según edad y
causas. Chile, 2011. Departamento de Estadísti-ca e Información
de Salud 2011. Disponible en: http://intradeis.minsal.cl/
egresoshospitalarios/menu_publica_nueva/menu_publica_nueva.
htm
2 Pérez-Ayuso R, Hernández V, González B, Carvacho C,
Navarrete C, Álvarez M et al . Historia natural de la colelitiasis:
Incidencia de colecistectomía en un área urbana y una rural
mapuche en la última dé-cada. Rev. méd. Chile v.130 n.7 Santiago
jul. 2002.
Elvaciamientodelavesículaseproduceprincipalmenteporel
estímulo hormonal de la colecistocinina (CCK), liberada cuando
los alimentos grasos entran al duodeno, aproximadamente
30 min después de la ingesta de estos. La CCK, aparte de
estimular la secreción enzimática en el páncreas, produce la
contracción de la vesícula biliar a la vez que relaja el esfínter
de Oddi. En menor medida, las fibras colinérgicas, tanto
vagales como del sistema nervioso entérico, estimulan el
vaciamiento vesicular.
La secretina, que estimula la secreción pancreática y de
bicarbonato, estimula también la producción de bilis, pero
no actuando sobre los hepatocitos, sino sobre las paredes
ductales de las vías biliares. De esta forma, las células
epiteliales de los conductillos y conductos biliares secretan
una solución acuosa rica en bicarbonato, que puede llegar
a duplicar la cantidad total de bilis que se une a la secreción
pancreáticaparaneutralizaralácidoclorhídricodelestómago.
Aproximadamente, un 95% de las sales biliares son
reabsorbidas en el intestino delgado, especialmente en el
íleon distal. Casi la totalidad de estas sales biliares son
captadas por los hepatocitos durante el primer paso hepático
y vueltas a excretarse a la bilis, en lo que se conoce como
circulación enterohepática.
Patología biliar litiásica
La presencia de cálculos en la vesícula biliar, o colelitiasis,
y sus complicaciones (colecistitis aguda, coledocolitiasis,
colangitis y otras), son de altísimafrecuencia en nuestro país,
especialmente en mujeres adultas y en la etnia mapuche.
Chile es el país que presenta las tasas más altas de litiasis
vesicularanivelmundial,solosuperadoporlaetniaamericana
de los indios Pima. En nuestro país, la colelitiasis tiene una
prevalenciade36,7%enmujeresy13,1%enhombres4
.Estas
cifras aumentan con la edad llegando a 60% en mujeres y
50% en hombres a partir de los 50 años.
Es una patología de gran importancia en nuestro país, no
solo por su alta incidencia, sino también porque es el principal
factor de riesgo para desarrollar cáncer de la vesícula biliar.
3 Funcionessecretorasdeltubodigestivo.En:HallJ.Tratado
de Fisiología Médica Guyton y Hall. Barce-lona, España; Elsevier,
12.a edición, 2011, pp. 783-787.
4 Ministerio De Salud, Guía clínica colecistectomía
preventiva en adultos de 35 a 49 años, 2010.
250
Mujer
Hombre
Laenfermedadlitiásicabiliar puedepermanecer asintomática
o presentar complicaciones y hacerse sintomática en un
55%de los casos5,6
.
65.6
40
30
20
10
0
Wang D, Afdhal N. Gallstone Disease. En: Feldan M, Friedman
L, Brandt L. Sleisenger and Fordtran’s Gastrointestinal and Liver
Disease, Ninth Edition. Philadelphia Saunders 2010. Pag 1090.
Factores de Riesgo
La enfermedad litiásica es multifactorial. Los principales
factores involucrados en su desarrollo son los siguientes:
- Edad.
- Sexo femenino.
- Obesidad.
- Uso de anticonceptivos orales.
- Hipertrigliceridemia.
- Baja de peso rápida.
- Diabetes Mellitus.
- Genética (antepasados amerindios).
Fisiopatología de los cálculos biliares
Existen 3 tipos de cálculos: de colesterol, pigmentarios y
piedras raras.Aproximadamente,75%7
de los cálculos son de
colesterol, pudiendo ser puros (la mayoría) o mixtos (10%).
5-25% son pigmentarios, compuestos principalmente por
bilirrubinato de calcio, dividiéndose en cálculos pigmentarios
negros (20%) y cafés (5%). Un 0,5% de los cálculos son de
piedras raras, compuestos por carbonato de calcio y ácidos
grasos con calcio.
5 Covarrubias F., Carmen; Del Pino M., Guido; Ferreiro P.,
Osvaldo; Nervi O., Flavio. Epidemiología e historia natural de la
litiasis biliar: implicancias para el manejo clínico de la enfermedad.
Rev. méd. Chi-le;120(4):432-8, abr.1992.
6 Csendes A., Csendes P., Burdiles P., Seguimiento alargo
plazo de pacientes con colecistolitiasis asin-tomática y sintomática,
no operados. Rev. méd. Chile 1996; 124: 1219 – 1224.
7 Wang D, Afdhal N. Gallstone Disease. En: Feldman M.
Sleisenger and Fordtran’s Gastrointestinal and Liver Disease.
Philadelphia, US; Elsevier, 9.a edición, 2010, pp. 1085-1099.
Predominio
%
251
Los cálculos intrahepáticos son predominantemente
pigmentarios cafés, los vesiculares son en general de colesterol
y en menor medida pigmentarios negros, y los cálculos en vía
biliar tienden a ser cálculos de colesterol mixtos8
.
i. Cálculos de colesterol
En pocas palabras, la formación de cálculos de colesterol se
debe a la sobresaturación de colesterol en la bilis, por exceso
en su producción y/o por la falta de sales biliares en esta.
Como el colesterol es hidrofóbico, es insoluble en la bilis por
sí solo y requiere de la presencia de moléculas anfipáticas
como las sales biliares y los fosfolípidos para mantenerse
soluble. Al unirse el colesterol a estas moléculas, forma
agregados macromoleculares de pequeño tamaño como las
micelas o de mayor tamaño como las vesículas. Tanto las
pequeñasmicelas,comolasvesículas,contienenfosfolípidos
y colesterol en su estructura, pero las micelas, a diferencia
de las vesículas, presentan también sales biliares.
Estas vesículas, que en un inicio tienen un estructura
unilamelar, pueden fusionarse entre sí, formando grandes
vesículasmultilamelaresquetienencomocaracterísticaelser
inestables, a partir de las cuales se puede iniciar la nucleación
de cristales de colesterol.
La bilis puede contener grandes concentraciones de colesterol,
sin que este precipite, siempre y cuando haya suficiente
cantidad de sales biliares que permitan la formación de
micelas. Situaciones como, porejemplo, el ayuno disminuyen
lasecrecióndesalesbiliares,portanto,favorecenlaformación
de vesículas y, eventualmente, cálculos.
Esdecir,lacausadelasobresaturacióndecolesterolquelleva
a la formación de cálculos biliares es la pérdida del equilibrio
entre las concentraciones de colesterol y sales biliares, que
favorece la formación de vesículas (ricas en colesterol) por
sobre micelas (ricas en sales biliares).
Se ha propuesto también la inflamación crónica del epitelio de
la mucosa vesicular como factor importante en la litogénesis,
posiblemente relacionado con hallazgos de bilis colonizada
por Helicobacter spp (no de la especie Helicobacter pylori),
en pacientes con colelitiasis9
. El mecanismo postulado sería
el de una alteración selectiva de la absorción de fosfolípidos y
colesterol, donde se absorberíacomparativamente más agua
y sales biliares. De esta forma, aumentaría la saturación de
colesterol y se favorecería la nucleación de cristales.
Ya formados los cristales de colesterol, son necesarios otros
factores como la estasia vesicular, y la presencia de calcio y
mucina en la bilis, para el crecimiento y agregación de estos
cristales, que lleva finalmente a la formación de cálculos
biliares.
8 Wang D, Afdhal N. Gallstone Disease. En: Feldman M.
Sleisenger and Fordtran’s Gastrointestinal and Liver Disease.
Philadelphia, US; Elsevier, 9.a edición, 2010, pp. 1085-1099.
9 Fox JG, Dewhirst FE, Shen Z, et al. Hepatic Helicobacter
species identified in bile and gallbladder tissue from Chileans with
chronic cholecystitis. Gastroenterology 1998; 114:755-63.
La mucina es secretada como gel protector por las células
epiteliales de la mucosa de la vesícula. Su rol en la formación
de cálculos sería el de actuar como matriz de depósito de los
cristales de colesterol para permitir su crecimiento a cálculos
biliares maduros.
ii. Cálculos pigmentarios
La patogenia de los cálculos pigmentarios, muy infrecuentes,
es muy diferente a la de los cálculos de colesterol, siendo
la alteración en el metabolismo de la bilirrubina el proceso
clave en su formación.
La bilis productora de cálculos pigmentarios contiene exceso
de pigmentos biliares, de bilirrubina no conjugada, que al
ser menos soluble que la conjugada, precipita en forma de
bilirrubinato de calcio, que en una matriz de mucina comienza
la formación de cálculos.
Los cálculos pigmentarios negros se forman, casi en su
totalidad, por polímeros de bilirrubinato de calcio. No se
asocia a vesículas infectadas ni a estasia biliar y se ha visto
que ocurre en condiciones de hipersecreción de bilirrubina
no conjugada como en anemia hemolítica crónica ycirrosis.
Porotraparte,loscálculospigmentarioscafés,másfrecuentes
en Asia, están formados principalmente por monómero de
bilirrubinato de calcio que, por incorporar colesterol y otros
lípidos a su estructura, adquieren un color más claro. La
formación de estos cálculos requiere dos condiciones:
1) estasis biliar e 2) infección biliar, especialmente por
Escherichiacolifavorecidaporlainfestación dela víabiliarpor
parásitos. Estas enterobacterias contienen β-glucoronidasa,
quees capazde desconjugarlabilirrubina y,portanto, hacerla
precipitar.
Cuadro clínico
Lacolelitiasisesunapatologíaevolutivaquepuedepermanecer
asintomática, hacerse sintomática, o presentar alguna
complicación como colecistitis, coledocolitiasis o colangitis.
Los principales síntomas en este abanico de entidades son
el cólico biliar, fiebre e ictericia que, a pesar de poder estar
presentes en cualquiera de los cuadros mencionados, son
orientadores de distintas patologías, dependiendo de cómo
se combinan.
252
Imagen 1
Ecografía abdominal. Vesícula biliar de paredes finas. Se obser-
van dos imágenes hiperecogénicas con sombra acústica compati-
ble con colelitiasis.
i. Colelitiasis asintomática
Es la presencia de cálculos dentro de la vesícula biliar,
en ausencia de manifestación clínica. Son pacientes
diagnosticados incidentalmente por imágenes. La mayoría
de los pacientes con colelitiasis incidental permanecen
asintomáticos, pero 20-30% de ellos desarrollan síntomas
durante los próximos 20 años10
, yde 0,1 a 0,3% al año tendrán
complicaciones agudas11
.
Estudiosenotrospaísesnoaconsejanlacolecistectomíaante
lamerapresenciadecálculosenlavesículabiliarsielpaciente
se encuentra asintomático, pero en Chile la conversión
de colelitiasis asintomática a sintomáticos o complicados
es de un 5% anual. Esto sumado a la alta prevalencia de
cáncer vesicular determina que en todo paciente portador de
colelitiasis se realice colecistectomía profiláctica
4
.
Imagen 1
Ecografía abdominal. Vesícula biliar de paredes finas. Se observan dos imágenes hiperecogénicas con sombra acústica compatible
con colelitiasis.
10 Courtney T, Beauchamp D, Evers M, Mattox K. Sabiston:
Tratado de cirugía.19.a ed. España: Elservier; 2013.
11 Weitz C, Berger Z, Sabah S, Silva H. Diagnóstico y
tratamiento de las enfermedades digestivas. Chile: De iku;2013.
253
ii. Colelitiasis sintomática (cólico biliar simple):
Ocurre por la obstrucción transitoria del cístico. El cólico biliar
simple se describe como dolor en el epigastrio o hipocondrio
derecho que puede irradiarse al dorso, que dura desde 30
min hasta 4 horas, de intensidad variable y puede asociarse
a diaforesis, náuseas y vómitos. Puede aparecer 1 a 3 horas
luego de comer y ocurrir en la noche.
Cólico biliar
254
iii. Colelitiasis sintomática complicada (cólico
biliarcomplicado)
i. Colecistitis aguda
Es la principal complicación de la enfermedad litiásica
biliar. Corresponde a la inflamación de la vesícula biliar,
generalmente por una obstrucción del tracto de salida a nivel
del bacinete o conducto cístico, que genera inflamación y
edema de las paredes, aumentando la presión en su interior.
Este aumento de presión puede llevar a compresión de la
vasculatura de la vesícula, provocando isquemia, necrosis
y eventualmente perforación de la vesícula. Si bien es una
patología primariamente inflamatoria por la obstrucción
del cístico, en un 50% de los casos se produce infección
secundaria por bacterias gram negativas (E. coli, Klebsiella,
Enterobacter) y anaerobios.
Colecistitis aguda
Su principal síntoma es la persistencia o aumento del dolor
en el hipocondrio derecho por más de 6 horas y que solo cede
parcial y transitoriamente a la analgesia. En muchos casos
hayhistoria de cólicos biliares simples previos, acompañados
de náuseas y vómitos.
Al examen físico, la presencia de fiebre moderada es común,
pero no así de fiebre alta, a menos que se complique con
gangrena o se perfore. Es posible ver ictericia, pero su
presencia orienta más a una coledocolitiasis. Clásicamente
se describe el llamado signo de Murphy, como el cese de la
inspiración del paciente producto del dolor que se produce al
palpar la vesícula inflamada en el hipocondrio derecho. Una
variante de este signo de mayor especificidad, el “Murphy
ecográfico”, corresponde al cese de la inspiración al ser
comprimidala vesículaporeltransductor mientras seobserva
bajoecografía.Estesignopuededarnegativoporlapresencia
de ascitis, analgesia, incapacidad de respuesta al dolor o por
necrosis de la pared de la vesícula.
Los exámenes de laboratorio muestran aumento de los
parámetros inflamatorios como la PCR, VHS y leucocitosis.
También es posible encontrar pequeñas alteraciones del
perfil hepático con niveles de bilirrubina de 2-4 mg/dl y leves
alteraciones en las amilasas y lipasas, sin la presencia de
pancreatitis.
Colecistitis aguda
255
Vesícula enporcelana
Vesícula enporcelana
Vesícula escleroatrófica
256
La confirmación diagnóstica se realiza mediante ecografía,
por la presencia de colelitiasis con cálculo impactado en el
bacinete, Murphy ecográfico, engrosamiento parietal mayor
a 3mm y aumento del tamaño de la vesícula mayor a 10cm
en el eje longitudinal y 5 cm en el eje transversal. También se
puedeobservarlíquidoperivesicularen20%delascolecistitis,
siendo marcador de una inflamación más avanzada. Es
importante destacar que la colecistitis aguda aumenta el
riesgo de presentar una coledocolitiasis concomitante, por
tanto, es necesario sospecharla y descartarla.
El manejo de la colecistitis parte por un correcto manejo
hidroelectrolítico. El uso tratamiento antibiótico no se
recomienda a menos que se presente alguna complicación
como una colecistitis enfisematosa o perforación. El
tratamiento definitivo consiste en una colecistectomía, de
preferencia mediante vía laparosópica.
Variantes
Vesícula en porcelana
Consiste en la calcificación intramural de la pared de la
vesícula. Su etiología es desconocida, aunque algunos autores
la consideran una manifestación de la colecistitis crónica. Se
observa con mayor frecuencia en mujeres en la sexta década
de vida. Se recomienda realizar colecistectomía profiláctica
para prevenir el desarrollo de carcinoma que ocurre en más
del 20% de los casos8.
Vesícula escleroatrófica
Vesículasconprocesosinflamatorioscrónicos.Sonpequeñas
y de paredes fibrosas.
ii. Coledocolitiasis
Corresponde a la presencia de cálculos en el colédoco o
conducto biliar común. Su prevalencia en pacientes con
colelitiasis es de un 15%. Por otro lado, de los pacientes que
tienen coledocolitiasis un 95 % tiene colelitiasis8.
Los cálculos se clasifican según su origen en primario y
secundario. Los de origen primario se forman de novo en
el conducto biliar, son generalmente cálculos pigmentarios
marrones, se asocian a estasis biliar e infección bacteriana
del conducto y son más frecuentes en la poblaciónasiática.
Los cálculos de origen secundario son los más frecuentes y
corresponden a aquellos que migran de la vesícula biliar al
colédoco y son de colesterol.
La obstrucción del conducto biliar producida por el cálculo
produce un aumento de presión, lo que provoca la dilatación
del conducto que puede ser detectada por ecografía y TAC
abdominalenel75%deloscasos.Enalgunoscasos noexiste
dilatación del conducto en presencia de coledocolitiasis por
que la obstrucción es intermitente o de bajo grado.
Coledocolitiasis
257
La presentación clínica varía desde asintomático, cólico
coledoceano (dolor epigástrico), ictericia hasta complicaciones
conriesgovitalcomocolangitisopancreatitisbiliar.Lavelocidad
de obstrucción del conducto y la contaminación bacteriana
de la bilis son los factores principales que determinan los
síntomas.
Laobstrucciónagudacausadolorcólicoeictericia.Encambio,
laobstruccióngradualsemanifiesta inicialmentecomoprurito
o ictericia sola.
El examen físico es generalmente normal si la obstrucción
es intermitente.
En las pruebas de laboratorio, el perfil hepático puede estar
alterado presentando un patrón colestásico con aumento
de la bilirrubina de predominio directa, fosfatasas alcalinas
y GGT. El aumento de bilirrubina sérica es proporcional al
tiempo de la obstrucción, siendo generalmente de 2-5 mg/dL.
Elmétododiagnósticoqueseutilizayeltratamientosedeciden
sobre la base de la probabilidad de presentar coledocolitiasis
según distintos predictores resumidos en la tabla 112
y2.
La ecografía y las pruebas de perfil hepático deben realizarse
siempre como parte del diagnóstico.
Muy fuerte
Cálculo en el colédoco evidenciado por ecografía
Colangitis
Bilirrubina mayor 4 mg/dl
Fuerte
Dilatación del conducto biliar común mayor de 6 mm
con la vesícula in situ y 10mm en pacientes colecistectomizados
Nivel de bilirrubina 1,8-4 mg/dl
Moderado
Elevación de la fosfatasa alcalina y/o GGT sin alteración de la bilirrubina.
Clínica de pancreatitis biliar
Tabla 1: Predictores del riesgo de coledocolitiasis en pacientes sintomáticos.
12 Lizarazo Rodríguez J. Reflexiones acerca de
las indicaciones de CPRE en pacientes con sospecha de
coledocolitiasis. Rev. Col. Gastroenterol 2011; 26 (4): 239-242.
258
Riesgo
Predictores Diagnóstico y tratamiento
Riesgo alto
Un factor predictor muy fuerte
Ambos predictores fuertes
Colecistectomía laparoscópica con ren-
dez-vous. (Colecistectomía laparoscópi-
ca con ERCP simultánea en el mismo acto
quirúrgico)
ERCP preoperatorio + colecistectomía
laparoscópica
Riesgo intermedio Factores moderados o uno fuerte
Colangioresonancia o
Colecistectomía laparoscópica con
colangiografía intraoperatoria y eventual
rendez-vous
Riesgo bajo Ningún factor predictor
Colecistectomía laparoscópica. Si los ha-
llazgos intraoperatorio lo ameritan puede
realizarse una colangiografía intraopera-
toria.
Tabla 2: Determinación del riesgo según predictores.
259
Rendez-vous ERCP
260
Rendez-vous ERCP. Extracción de cálculo
261
SondaT(Kehr)
SondaT(Kehr)
262
Imagen 2
Colangioresonancia con reconstrucción 3D. Se observa imagen hipointensa dentro del colédoco
compatible con coledocolitiasis
En caso de coledocolitiasis residual, es decir, una coledocolitiasis que se diagnostica dentro de los 2 primeros años luego
de una colecistectomía, se puede realizar un ERCP con papilotomía y extracción del cálculo con canastillo de Dormia o una
coledocostomía por cirugía abierta y sonda T.
iii. Colangitis aguda
Es una de las complicaciones más graves de la coledocolitiasis. Corresponde a la infección bacteriana de la vía biliar, a
causa de una obstrucción de esta. La principal causa de esta obstrucción es la coledocolitiasis, pero también puede deberse
a otras etiologías, como obstrucciones benignas de la vía biliar o una neoplasia. Los agentes bacterianos causales más
frecuentes son la E. colli, Klebsiella, Enterobacter y Pseudomonas.
263
Colangitisaguda
264
La presentación clásica de fiebre, ictericia y dolor en el
cuadrante superior derecho del abdomen es conocida como
latríadadeCharcot.Latríadacompletasepresentaenmenos
del 50% de los casos en que la ictericia es la manifestación
menos constante. En casos más graves se agregan shock y
alteración del estado mental a los 3 componentes de la tríada
de Charcot para conformar la pentada de Reynolds.
En los exámenes de laboratorio se observan parámetros
inflamatorioselevadosademásdealteracionesenlaspruebas
hepáticas con patrón colestásico.
El estudio diagnóstico es similar al de la coledocolitiasis,
agregándose la tomografía computada y la resonancia
magnética, si es que la etiología es neoplásica.
El tratamiento tiene 2 objetivos principales; controlar la
infección y solucionar la obstrucción de la vía biliar. Para
lo primero, el control de la infección, es primordial el inicio
precoz de terapia antibiótica dirigida a gram negativos y
anaerobios,comolacombinacióndeunacefalosporina(como
la ceftriaxona o la cefotaxima) junto a metronidazol. Ante el
riesgo de shock, es importantísimo mantener también una
buena hidratación, pudiendo requerirse el uso de drogas
vasoactivas. Para lo segundo,la obstrucción de la vía biliar,se
debe realizar drenaje precoz de la vía biliar, preferentemente
por vía endoscópica. Si no es posible retirar el cálculo, se
puede utilizar una prótesis biliar, que mantiene la vía biliar
sin colapsar. De no ser posible la descompresión de la vía
biliar mediante endoscopía o laparoscopía, se debe realizar
la instalación de una sonda T por vía clásica para permitir el
drenaje de la bilis. Debido a la labilidad de estos pacientes, el
tratamiento quirúrgico definitivo se difiere hasta que el cuadro
infecciosoestábajocontrolyelpacienteseencuentraestable,
momento en que se realiza una colecistectomía en los casos
en que la colangitis fue secundaria a coledocolitiasis para
eliminar la fuente de los cálculos.
En las colangitis secundarias a neoplasia, frecuentemente la
obstrucción es en varios segmentos de la vía biliar, por lo que
su drenaje puede ser más difícil. Además, en estos casos,
muchas veces se asocian abscesos hepáticos que deben
ser drenados de preferencia por vía percutánea guiado bajo
ecografía.
iv. Complicaciones poco comunes
1. Colecistitis enfisematosa
Es un cuadro provocado por bacterias productoras de gas,
en que la clínica es similar a la colecistitis aguda, pero que
en imágenes por ecografía, tomografía o incluso radiografía
se ve gas en las paredes o lumen de la vesícula biliar.
Ante el riesgo inminente de perforación, la terapia precoz
con antibióticos es mandatoria y la colecistectomía es de
emergencia.
En general, se observa en pacientes de sexo masculino,
mayores de edad y diabéticos en que el desencadenante de
la colecistitis no es la enfermedad litiásica, sino una isquemia
provocada por ateroesclerosis de la arteria cística.
2. Colecistitis gangrenosa
Cuadroenquedebidoalincrementodelapresiónintraluminal,
se comprime la vasculatura de la vesícula, se produce
isquemia de la pared y, finalmente, necrosis.
Clínicamente se ve la desaparición del signo de Murphy en el
66% de los casos por denervación parietal y en la ecografía
y tomografía computada es posible observar irregularidad de
la pared, membranas intraluminales y abscesos.
Al igual que en la colecistitis enfisematosa, el uso de
antibióticos y colecistectomía precoz son mandatorios.
Colecistitis agudanecrótica
265
3. Hidrops vesicular
Es la distensión de la vesícula por acumulación de fluido
mucosoensuinterior,sinpigmentosbiliares(sereabsorbenlos
componentes habituales de la bilis), ocurre por la obstrucción
del conducto cístico.
Alexamenfísicoseevidenciaunamasaindoloraenelcuadrante
superior derecho. Su tratamiento es la colecistectomía
laparoscópica.
4. Empiema vesicular
“Es una colecistitis supurativa con formación de abscesos
intraluminales”, es decir, la presencia de pus en el lumen
vesicular. Se desarrolla por una infección secundaria a
obstruccióncontinuadelconductocístico.Aproximadamente,
el 6% de la colecistitis no tratada evoluciona a empiema
vesicular.
El tratamiento consiste en antibióticos y colecistectomía.
5. Perforación vesicular.
Ocurre en 5-10% de los casos y se asocia con una mortalidad
de alrededor de un 20%.
Generalmente al perforarse la pared, las estructuras vecinas,
como el colon y el omento mayor, forman un plastrón que
contienelabilis ypuscontenidaensuinterior.Deestaformaes
posibleobservarunabscesoperivesicularsilogracontenerse
el derrame del contenido vesicular, o peritonitis biliar si el
contenidosederramaalacavidadperitoneal,provocandouna
respuesta inflamatoria extensacon sintomatología peritoneal
irritativa.
6. Síndrome de Mirizzi
Corresponde a una obstrucción de la vía biliar intrahepática
por un cálculo en la vesícula que se impacta en el conducto
cístico y genera una compresión extrínseca del conducto
hepático común.
Enlasimágenesseveladilatacióndelavíabiliarintrahepática
hasta un cálculo de gran tamaño en el cuello de la vesícula
o en el cístico, con una vía biliar extrahepática normal por
debajo de la obstrucción.
Puede asociarse a fístulas colecistobiliares o colecistodigestivas
y es relativamente frecuente que no sean detectadas previo
a la cirugía, aumentando los riesgos de esta, por lo que
se prefiere la vía abierta por sobre la laparoscópica o la
endocopía.
266
7. Fístulas biliodigestivas
Las fístulas biliodigestivas son causadas por la erosión
producida por el cálculo en la pared de la vesícula con
su consecuente ruptura y comunicación con una víscera
adyacente12
. Se observan en el 0,3 a 0,5 % de los pacientes
con colelitiasis .
Fístula colecistoduodenal en formación
Fístula colecistoduodenal
13 Rojas J. Cabané P.Hernández J. Síndrome de
Bouveret: caso clínico y revisión de la literatura. Rev. Chilena
de Cirugía. 2005; 57 (6): 508-510.
267
El sitio más común de fistulización es el duodeno (60%),
seguido por el colon (17%), estómago (5%) y el yeyuno.
En la mayoría de los casos el cálculo pasa a través del
intestino sin ocasionar ningún síntoma. En el 6% de los casos
se produce obstrucción intestinal.
El íleo biliar es consecuencia de la obstrucción mecánica de
un cálculo en el intestino delgado. Corresponde al 1 a 4 %
de todas las obstrucciones mecánicas. El lugar más común
de obstrucción es el área ileocecal.
El diagnóstico se puede realizar por radiografía simple de
abdomen, encontrándose la tríada de Rigler (obstrucción
intestinal, aerobilia y cálculo biliar ectópico).
Íleo biliar. Fístula colecistoentérica
268
Íleo biliar. Impactación en válvula Ileo-cecal
269
El síndrome de Bouveret se caracteriza por la obstrucción
del vaciamiento gástrico por un cálculo de gran tamaño
impactado en el duodeno. La manifestación principal es el
síndrome de retención gástrica, caracterizado por vómitos
biliosos y dolor abdominal.
Sd. Bouveret
Sd. Bouveret
270
Factores de Riesgo
i. Ecografía
El ultrasonido es la técnica de elección para la evaluación
inicial de la vesícula y vía biliar. Su principal utilidad radica en
la detección de cálculos en la vesícula (es el Gold Standard
para la colelitiasis), engrosamiento de la pared vesicular
en una colecistitis y en la dilatación de la vía biliar ante
coledocolitiasis.
El aspecto clásico de la colelitiasis es el de imágenes
hiperecogénicas móviles con sombra acústica posterior.
Ante una colecistitis, la inflamación y edema de las paredes
de la vesícula se traduce como un engrosamiento de esta
por sobre los 3mm. Además es posible observar un aumento
de tamaño de la vesícula por sobre los 10cm de diámetro
longitudinal y 5cm del transversal.
El diámetro normal de la vía biliar extrahepática es de 4mm
y se considera francamente dilatado a partir de los 6mm.
Como la vía biliar se dilata con la edad y tras la extracción
de la vesícula biliar, en pacientes colecistectomizados se
tolera hasta 8-10mm antes de considerarlo como dilatación
de la vía biliar.
Imagen 3
Ecografía de abdomen. Vesicula biliar distendida, de paredes engrosadas (0,65cm). se evidencia ademas
edema perivsicular compatible con colecistitis aguda.
271
ii. Tomografía computada
Es el examen de elección para la etapificación de la patología
neoplásica biliar. En la patología benigna, en cambio, su uso
se reserva para el estudio de complicaciones de la colecistitis
comolacolecistitisenfisematosa,gangrenosaylaperforación
de esta.
Aparte del aumento de tamaño de la vesícula y del
engrosamiento de sus paredes, observados en la ecografía,
es posible detectar aumento de la densidad de la grasa peri-
vesicular como signo de inflamación.
iii. Colangiopancreatografía por resonancia magnética
(CPRM o colangioresonancia)
Laobservaciónmedianteresonanciamagnéticaensecuencia
T2, en que los líquidos estáticos se ven hiperintensos
comparados con otras estructuras, tiene su principal utilidad
en la detección decoledocolitiasis. Los cálculos en la vía biliar
presentan la apariencia de vacíos de señal, rodeadas por la
bilis de apariencia hiperintensa, que pueden ser confundidos
con coágulos o pólipos.
El rendimiento de esta técnica ha mostrado ser comparable
al del ERCP, por lo que ante el riesgo que conlleva esta
última, se prefiere el uso de la CPRM para el diagnóstico de
cálculos en la vía biliar.
Imagen 4
ColangioRNM se observa una imagen hipointensa endoluminal en el colédoco, asociado a una dilatación de
este.
272
iv. Colangiopancreatografía retrógrada endoscópica
(CPRE o ERCP)
Consiste en la adquisición de una imagen radiográfica tras la
inyección de método de contraste por vía retrógrada desde
la papila duodenal mediante vía endoscópica.
A pesar de su excelente sensibilidad y especificidad para
la detección de coledocolitiasis presenta una tasa de
complicaciones (como pancreatitis) de 1-7% y mortalidad
de 0,2-1%, por lo que su uso se reserva para procedimientos
terapéuticos al extraer los cálculos por vía endoscópica.
Imágen 5
ERCP imagen radiopaca en colédoco distal compatible con coledocolitiasis.
273
v. Colangiografía posoperatoria
Se utiliza en la cirugía por laparotomía en que tras insertar la sonda T en
el colédoco y antes de dar por concluida la cirugía, se inyecta contraste
por medio de la sonda para ver que efectivamente se eliminaron todos los
cálculos de la vía biliar.
Imágen 6
Se observa el paso de medio de contraste a través de la sonda T, contrastando la vía biliar.
274
Cuadro resumen
Cuadro Fisiopatología Síntomas Signos Laboratorio Diagnóstico
Cólico biliar
simple
Obstrucción
intermitente
Dolor en
hipocondrio
- Normal Ecografía
(Colelitiasis) de la vesícula derecho de <6hrs
de duración
Colecistitis Impactación de Dolor en Fiebre Parámetros Ecografía
cálculo en el cístico hipocondrio moderada inflamatorios
con inflamación de derecho de >6hrs Signo de
la vesícula de duración Murphy Pequeñas
alteraciones del
perfil hepático
Coledocolitiasis Cálculo
obstruyendo lavía
- Ictericia Elevación dela
bilirrubina de
CPRM / ERCP
biliar predominio directo
Elevación de
fosfatasas alcalinas
Colangitis Infección
bacteriana tras
obstrucción dela
Tríada de Charcot
Péntada de
Reynolds
Ictericia
Fiebre
Parámetros
inflamatorios
CPRM / ERCP
vía biliar Dolor asociado a Elevación de la
escalofríos bilirrubina
Elevación de
transaminasas y
fosfatasas alcalinas
Patologia biliar no litiásica
Colecistitis aguda alitiásica
Corresponde a la inflamación de la vesícula biliar en ausencia
de cálculos. Se caracteriza por ectasia e isquemia vesicular
con respuesta inflamatoria de la pared.
Los factores de riesgo para desarrollarla son edad avanzada,
enfermedadescríticas,quemaduras,trauma,usoprolongado
de nutrición parenteral, diabetes e inmunosupresión.
El curso de la enfermedad es generalmente más fulminante
queeldelacolecistitislitiásicaypuedeprogresarrápidamente
a gangrena y perforación de la vesícula.
La presentación clínica incluye fiebre, anorexia y dolor en
el cuadrante superior derecho. En exámenes de laboratorio
presenta hiperamilasemia y leucocitosis.
Lamortalidadesdeun10-50%,principalmenteporqueocurre
en pacientes críticos y la enfermedad progresa rápido, por
lo que se debe tener una alta sospecha en estos pacientes.
El diagnóstico se realiza con ecografía, TAC abdominal o
cintigrama biliar. La ecografía muestra engrosamiento de la
pared vesicular (> 4 mm) en ausencia de hipoalbuminemia o
ascitis, signo de Murphy ecográfico y colecciones alrededor
de los conductos cístico y colédoco. El TAC, además, puede
mostrar edema subserosos, gas intramural y descartar otras
patologías abdominales.
El tratamiento médico incluye restauración de laestabilidad
hemodinámica y uso de antibiótico con cobertura a gram
negativos y anaerobios si se sospecha infección del tracto
biliar. El tratamiento definitivo es la colecistectomía, ya sea
275
por vía laparoscópica o por laparotomía, dependiendo del
riesgo quirúrgico del paciente y la experiencia del cirujano.
Enlos pacientes quenopuedensertratados quirúrgicamente
se realiza drenaje percutáneo de la vesícula.
Colesterolosis
La colesterolosis es una anomalía del epitelio de la vesícula
que se caracteriza por la acumulación excesiva de ésteres
de colesterol y triglicéridos en los macrófagos de la mucosa.
Generalmente, se diagnostica en forma incidental pos
colecistectomía. Afecta en especial a mujeres sobre 60 años
de edad.
El patrón de disposición de los lípidos en la vesícula es
generalmente difuso (80%), también pueden encontrarse en
forma polipoide o focos de colesterol.
Los depósitos submucosos determinan un patrón reticular
amarillo fino sobre una mucosa color rojizo por la inflamación,
esta apariencia se conoce como vesícula de fresa.
La colesterolosis generalmente es asintomática, en algunas
ocasionessepresentacondolorvagoenelcuadrantesuperior
derecho o en el epigastrio.
Para el diagnóstico se utiliza la ecografía donde la forma
difusa es difícilmente detectable, a diferencia del patrón
polipoide en que se observa una imagen hiperecogénica sin
sombra acústica.
El tratamiento generalmente no es un problema porque
se encuentran luego de la colecistectomía, en caso de
diagnosticarse previamente se recomienda colecistectomía
en presencia de cólico biliar o pancreatitis.
Pólipos
Se refiere a cualquier proyección de la mucosa hacia el lumen.
Su prevalenciatantopatológicacomoradiológicaes de1a 4%.
Se clasifican en neoplásico (95%) y no neoplásicos. Dentro
de los pólipos no neoplásicos se encuentran los pólipos de
colesterol, los adenomiomas y los pólipos inflamatorios. Y en
losneoplásicossedistinguenlosadenomasylosmisceláneos.
Los pólipos de colesterol son los más comunes de los pólipos
benignos. Representan una variante de la colesterolosis.
Pueden ser únicos o múltiples, son generalmente pequeños
y están adheridos a la mucosa por un pedúnculo frágil. Se
pueden desprender y producir complicaciones similares a las
de un cálculo pequeño.
La adenomiomatosis vesicular es una anormalidad de la pared
de la vesícula que se caracteriza por excesiva proliferación
del epitelio con invaginación hacia la capa muscular o más
profunda. La adenomiomatosis puede ser difusa (localizarse
en toda la vesícula), segmentaria o focal. Es una patología
benigna.
Pólipo vesicular
Los pólipos inflamatorios son lesiones pequeñas y sésiles
conformadas por tejidos de granulación y fibroso, infiltrado
con linfocito y células plasmáticas. Puede ser solitario (50%
de los casos) o múltiple.
Los adenomas son masas pedunculadas de 5 a 20 mm de
diámetro.Son generalmenteúnicos,peropuedenser múltiples
en un tercio de los casos. Se clasifican histológicamente en
papilares y no papilares. El riesgo de malignidad se relaciona
con el tamaño.
Los fibromas, leiomiomas y lipomas considerados dentro de
los misceláneos son extremadamente raros.
Lospóliposdela vesículasonlamayoríade lasveceshallazgos
incidentales, detectándose luego de una colecistectomía por
otra causa o en imágenes.
Independiente de la etiología del pólipo, puede asociarse a
cólicobiliar.Por otraparte,si el pólipose desprendede la pared
puede producir colecistitis, ictericia obstructiva ypancreatitis.
El riesgo de malignidad está directamente relacionado con
el tamaño del pólipo. En los que miden más de 2cm son casi
siempremalignos.Losquemidende1a2cmsonpotencialmente
malignos. Por otro lado, la edad sobre 50-60 años también se
asocia a mayor riesgo de malignidad del pólipo.
Para el diagnostico se utiliza una combinación de variables
de la ecografía, el TAC y la endosonografía que pueden
otorgar información importante, pero ninguna técnica sirve
para determinar con certeza el tipo de pólipo, la histología ni
la presencia de cáncer.
En Chile se tiene una conducta más agresiva que en otros
países, se realiza seguimiento ecográfico hasta los 6mm y si
aumentan en número o crecen se indica colecistectomía antes
de alcanzar los 10mm, que es el punto de corte tradicional de
colecistectomía profiláctica ante un pólipo vesicular.
276
Benignos
Bibliografía
1. David Q.-H. Wang; Nezam H. Afdhal, Sleisenger and Fordtran’s Gastrointestinal and Liver Disease, Ninth Edition(2010).
2. MINISTERIO DE SALUD, Guía Clínica Colecistectomía Preventiva en Adultos de 35 a 49 años, 2010
3. Courtney T, Beauchamp D, Evers M, Mattox K. Sabiston: tratado de cirugía.19 ed. España: Elservier; 2013
Pólipos de la vesícula
Adenoma 4% Misceláneo 1%
No Neoplasícos
Neoplásicos Misceláneo
20%
Adenocarcinoma
80%
Malignos
Pólipo de
colesterol 60%
Adenomioma
25%
Pólipo
inflamatorio 10%
277
6.3 Cáncer de Vesícular Biliar
Rodriguez D, Morelli C, Bachelet C, Court F.
Introducción
El cáncer de vesícula es relativamente poco frecuente, pero
con muy mal pronóstico de sobrevida.
La introducción de la laparoscopía ha incrementado su
diagnóstico incidental en estadios tempranos, sin embargo,
cuando se presentan síntomas como ictericia y dolor, el
pronóstico continúa siendo reservado1,2,3,4
Incidencia y Epidemiología
• Las neoplasias del tracto biliar incluyen el cáncerde
vía biliar intrahepática, extrahepática y de vesícula
biliar, siendo este último el más frecuente .
• Se estima que alrededor de 10.310 nuevos casos de
cáncer de vesícula y de vía biliar extrahepatica fueron
diagnosticados el año 2013, posicionándose en el
sexto lugar de las neoplasias gastrointestinales más
frecuentes5
.
• Existen variaciones regionales en cuanto a la
incidencia de esta patología. El norte y centro de
Europa, la India, Japón y nuestro país concentran la
mayor incidencia de esta enfermedad.
• La incidencia de cáncer de vesícula en Chile es de
más de 25 por 100.000 mujeres y de 9 por 100.000
hombres, concentrándose las mayores tasas en la VIII,
5
IX y X región .
• La tasa de mortalidad en Chile debido a cáncer de
vesícula es de 11,3/100.000 habitantes5.
1 Shih SP, Schulick RD, Cameron JL, et al.
Gallbladder Cancer: the role of laparoscopy and radical
resection. Ann Surg 2007; 245:893-901.
2 Hueman MT, Vollmer CM, Pawlik TM. Evolving
treatment strategies for gallbladder cancer. Ann SurgOncol
2009; 16:2101-15.
3 Pawlik TM, Gleisner AL, Vigano L, et al.Incidence
of finding residual disease for incidental gallbladder
carcinoma: Implications for re-resection. J Gastrointest
Surg 2007; 11:1478-86.
4 Hawkins WG, DeMatteo RP, Jarnagin WR, et al.
Jaundice predicts advanced disease and early mortality
in patients with gallbladder cancer. Ann Surg Oncol 2004;
11:310-5.
5 Wernberg J, Lucarelli D. Gallbladder Cancer. Surg
Clin N Am 94 (2014) 343-360.
• Constituye la segunda causa de muerte por cáncer en
la mujer con una tasa de mortalidad de 15/100.000 y la
cuarta causa de muerte por cáncer en el hombre con
una tasa de mortalidad de 7,4/100.0005.
• Se han encontrado discrepancias raciales en la
aparición de esta enfermedad: indios americanos,
nativos deAlaska, raza negra e hispanos son los más
afectados
5
.
• Como la mayoría de las neoplasias, su frecuencia
incrementaconlaedad,siendo65años la edadpromedio
al diagnóstico.
278
Factores de Riesgo
Lamayoríadelasneoplasiasdevesículasonadenocarcinomas
derivados de su mucosa. Se cree que la inflamación crónica
de la mucosa puede desencadenar la progresión de displasia
a carcinoma en personas predispuestas. La mayoría de los
factores de riesgo asociados a esta enfermedad tienen relación
con procesos inflamatorios6
.
1. Colelitiasis
• Algunos de los factores de riesgo para desarrollar
cálculos biliares incluyen la edad, el sexo, la raza,
la paridad y la rápida pérdida de peso.
• Existe una clara asociación entre litiasis biliar ycáncer
vesicular, siendo este el principal factor de riesgo.
• La probabilidad de desarrollar cáncer de vesícula es
proporcional al tamaño del cálculo. Aquellos que miden
más de 3 cm se asocian a un riesgo 10 veces mayor en
comparación con los menores de 1 cm. De todas formas,
debemos tener en consideración que solo un 0.3-3% de
los pacientes desarrollarán esta neoplasia.
2. Pólipos1, 2
• Lesiones vesiculares polipoides que midan > 10 mm
o aquellas que presenten un rápido crecimiento,
clásicamente se han asociado al desarrollo de cáncer
de vesícula por lo que se recomienda su resección.
3. Infecciones9,10
• Las infecciones bacterianas inducen inflamación crónica,
por lo que también han sido consideradas un factor de
riesgo para esta enfermedad. Cánceres hepatobiliares
se han relacionado con infecciones bacterianas
específicas. La más frecuente: Salmonella typhi.
6 Albores Saavedra J, Alcantra Vazqahuez A, Cruz –
Ortiz H, et al. The precursor lesions of invasive gallbladder
carcinoma. Hyperplasia, atypical hiperplasia and carcinoma
in situ. Cancer 1980; 45:919-27.
7 Everhart JE, Khare M, Hill M, et al. Prevalence
and ethnic differences in gallbladder disease in theUnited
States. Gastroenterology 1999; 117:632-9.
8. Hsing AW, Gao YT, Han TQ, et al. Gallstones and
10
4. Alteraciones anatómicas
• La unión anómala del sistema ductal pancreático-biliar
también ha sido implicada como un potencial factor de
riesgoparaelcáncerdevesícula.Estaalteraciónpermitirá
el reflujo de líquido pancreático hacia el conducto biliar
común y viceversa. El reflujo crónico puede conducir a
8.6inflamaciónymetaplasia,resultandoenunmecanismo
potencial para la patogénesis del adenocarcinoma.
5. Vesícula en porcelana 11
• Corresponde a la extensa calcificación de la pared de
la vesícula con un riesgo 14 veces mayor de desarrollar
cáncer.
6. Genética2
• Incluso sin el factor de riesgo litogénico típico (obesidad),
grupos étnicos específicos, con linaje materno amerindio
en la población chilena, tienen una mayor prevalencia de
formación de cálculos biliares, que se cree que estaría
asociado con polimorfismos de ADN mitocondrial.
7. Sexo12
• Mundialmente, la incidencia de cáncer de vesícula es
el doble en mujeres que en hombres. En Chile la razón
hombre: mujer es de 1:3.
8. Otros13
• Se ha demostrado la existencia de riesgos ambientales
con ocupaciones específicas (refinerías de petróleo,
fábricas de papel, industrias de zapatos, etc.).
• Obesidad, alcohol, tabaco, drogas, ingesta
de carbohidratos, exposición a químicos,
posmenopausia y desórdenes autoinmunes.
the risk of biliary tract cancer; a population-based studyin
China. Br J Cancer 2007; 97:1577-82.
9. Pilgrim CH, Groeschl RT, Christians KK, et al.
Modern perspectives on factors predisposing to the
development of gallbladder cancer. HPB (Oxford)2013
15:839-44.
10. Pilgrim CH, Groeschl RT, Christians KK, et al.
Modern perspectives on factors predisposing to the
development of gallbladder cancer. HPB (Oxford)2013
15:839-44.
11 Stephen AE, Berger DL. Carcinoma in theporcelain
gallbladder: a relationship revisited. Surgery 2001;
129:699-703.
12. Adsay NV. Neoplasic precursors of the gallbladder
and extra-hepatic bilary system. Gastroenterol Clin North
Am 2007; 36: 889-900
13. Malker HS, McLaughlin JK, Malker BK, et al. Biliary
tract cancer and occupation in Sweden. Br J Ind Med 1986;
43:257-62.
4,1,8,9
279
Clínica Tipos Histológicos
El90%deloscánceres de vesículabiliar se origina enel fondo
o cuerpo, determinando que la mayoría de los pacientes
en etapas tempranas sean asintomáticos. La ubicación del
tumor 13 en el bacinete puede producir un cólico biliar o una
colecistitis aguda, facilitando la presentación en estadios
más precoces.
Elsíntomamásfrecuenteesdolorenhipocondrioderecho,que
se acompaña de anorexia, náuseas y vómitos. Sin embargo,
dada la poca especificidad del cuadro, no suele sospecharse
en el preoperatorio. Otros síntomas habituales son dolor
epigástrico crónico,saciedadprecoz ysensación de plenitud.
En estadios avanzados, suelen aparecer síntomas que
nos orientan a malignidad, como el compromiso del estado
general y la pérdida de peso. También, se puede presentar
como ictericia obstructiva, donde nuestro índice de sospecha
debe ser muy alto en presencia de un síndrome de Mirizzi.
Raramente, se evidencia hepatomegalia, masa abdominal
palpable, metástasis extraabdominales y ascitis.
• Adenocarcinoma (80%):
- Bien diferenciado.
- Papilar.
- Tipo intestinal.
• Indiferenciado o escamoso (20%).
Estadio
Actualmente, The American Joint Committee On Cancer
(AJCC) utiliza el sistema de etapificación TNM, donde T
describe el crecimiento del tumor dentro de la vesícula u
órganos adyacentes, N informa la diseminación linfática y M
indica la presencia de metástasis.
Diagnóstico
La sospecha y el diagnóstico precoz son fundamentales.
Actualmente, la pesquisa de tumores en estadios tempranos,
asociados a un buen pronóstico, solo es posible mediante el
estudio de la pieza quirúrgica en pacientes intervenidos por
patología benigna.
Desgraciadamente,lasimágenesnosondeltodoútiles,yaque
suelen detectar el cáncer vesicular en estadios avanzados,
donde los hallazgos imagenológicos revelan una lesión
irregular en el espacio subhepático, una masa heterogénea
en la luz de la vesícula y una pared engrosada en forma
asimétrica.
El TAC y la RNM son útiles en la etapificación y ayudan
en la planificación del tratamiento del cáncer de vesícula,
ya que permiten clasificar al paciente según su potencial
resecabilidad. En aquellos que se presentan con ictericia, el
estudio debe complementarse con una colangiorresonancia
para localizar la obstrucción, evaluando la extensión tumoral
a hígado y/o via biliar (en estos casos, solo un 7% será
resecable).
Resulta importante considerar que el tiempo entre displasia
y cáncer avanzado es de aproximadamente 15 años,
dependiendo de la raza y sexo del individuo.
Capas histológicas de la vesícula
280
Cáncer devesícula
Tumor Primario (T) Metástasis (M)
Tx Tumorprimario no puede ser
caracterizado.
M0 Sin evidencia de metastasis.
T0 Sin evidencia de tumor
primario.
M1 Con metástasis a distancia.
Tis Tumor in situ Estadio
T1 Tumorinvade lámina propia o
capa muscular
Etapa 0 Tis N0 MO
T1a Tumor invade lámina propia Etapa I T1 N0 MO
T1b Tumor invade capa muscular Etapa II T2 N0 MO
T2 Tumor invadetejidoconectivo,
sinextensiónaserosanihígado
Etapa IIIa T3 N0 MO
T3 Tumorinvadeserosa, hígadou
órganos adyacentes (estómago,
duodeno, colon, páncreas,
omento, víabiliar)
Etapa IIIb T1-T3 N1 MO
T4 Tumor invade vena porta,
arteriahepáticaodosórganos
extrahepáticos
Etapa IVa T4 N0-N1 MO
Linfonodos regionales (N) Etapa IVb CualquierT
CualquierT
N2
Cualquier N
M0
M1
Nx Linfonodos no pueden ser estudiados.
N0 Sin metástasis a linfonodos regionales.
N1 Metástasis a linfonodos a lo largo del conducto cístico, hepático común, arteria hepática
y/o venaporta.
N2 Metástasis a linfonodos periaórticos, peri cava, mesentéricos superiores y/o tronco celiaco
281
Diagnóstico Incidental del Cáncer
Vesicular
Se define como el cáncer de vesícula biliar que pasa
inadvertido previo a la cirugía y es descubierto en el momento
de la colecistectomía o en la recepción de la biopsia. La
frecuencia de este evento oscila entre un 0,2% al 2,0% de
las colecistectomías electivas.
Eladvenimientodelalaparoscopíayelincrementodelnúmero
de colecistectomías realizadas han producido un aumento en
el número de carcinomas incidentales y aunque el pronóstico
en este grupo de pacientes es muy variable y se basa en el
estadio, ha mejorado su sobrevida en comparación con los
que desarrollan neoplasias no incidentales.
Tratamiento
El tratamiento del cáncer de vesícula va a depender
fundamentalmente del nivel de invasión de la pared.
I. Invasióndelamucosa:norequierenotrotratamiento
ademásdelacolecistectomía,asumiendoqueestaesrealizada
con márgenes negativos y no necesita de una reintervención
quirúrgica a diferencia de las otras. Si consideramos que la
mayoría de estos pacientes fueron diagnosticados después del
estudio histopatológico de la pieza quirúrgica, el tratamiento
ya ha sido efectuado al momento del diagnóstico.
Cáncer de vesícula T1 Cáncer de vesícula avanzado (vesícula abierta)
282
II. Invasión de la túnica muscular: aún no existe
consenso respecto al manejo de estos pacientes, debido
fundamentalmente a las diferencias en la sobrevida y los
riesgos de recurrencia. En estos casos, hay estudios que
plantean que bastaría con una colecistectomía simple,
mientras que otros sugieren la colecistectomía ampliada
o radical (colecistectomía + resección de los segmentos
hepáticos IVb y V + linfadenectomía hasta el ligamento
hepatoduodenal), siendo esta última la más aceptada.
III. Invasión delatúnicasubserosa: enestesubgrupo,
la resección del lecho hepático y la linfadenectomía del
pedículo(encasos deestadioN0 yN1) contribuiríanaextirpar
elposibletejidoresidualneoplásicoo,ensudefecto,ayudarían
como medio de etapificación. La resección debe permitir una
cirugía R0.
IV. Compromiso del tejido adiposo vesicular:
corresponde al espacio que se ubica entre el hígado y
la vesícula, área que además posee vasos sanguíneos,
posiblemente responsables del peor pronóstico de estos
tumores.
V. Invasión de la serosa: se asocian a un pobre
pronóstico, ya que la mayoría posee compromiso de los
ganglios linfáticos, incluso a distancia. Sin embargo, el
compromiso seroso no impide que estos pacientes puedan
ser sometidos a cirugía radical e incluso se ha planteado el
uso de radioterapia posterior a la intervención.
Esposibleencontrarseconenfermedadresidualometástasis
en aquellos pacientes que se les ha detectado un cáncer
vesicular de manera incidental y que se someten a una
nuevaresecciónquirúrgica.Lalocalizacióndeltumorprimario
se correlaciona con el riesgo de encontrar enfermedad
residual, donde los pacientes con T1, T2 y T3 tienen un
riesgo de 37.5%, 56.7% y 77.3%, respectivamente.
Colecistectomía radical
• Manejo del lecho hepático: el cáncer de vesícula tiene
la potencialidad de diseminarse de manera directa hacia
el hígado, aunque también puede diseminarse a través
del peritoneo, sistema linfático o vía hematógena. La
resección hepática tiene como objetivo lograr un R0 y se
havistoquenohayunimpactoenlasobrevidaenaquellas
personas que se someten a extensivas resecciones
de varios segmentos en comparación con los que se
someten a una resección en cuña, ya que finalmente la
probabilidad de encontrar enfermedad metastásica en el
hígado dependerá de la localización del tumor primario
(0% en T1, 10.4% en T2 y 36.4% en T3).
Resección en cuña de lecho vesicular
283
• Linfadenectomía:estárecomendadaenlosestadiosT1by
enaquellostumoresquesonresecablesyquetienenunN0
oN1,yaqueaquellaspersonasconunN2sonconsideradas
en etapa IVB y no tienen indicación de resección
ganglionar. La probabilidad de encontrar metástasis en
gangliosregionalessecorrelacionaconlalocalizacióndel
tumorprimario(12.5%enT1,31.2%enT2y45.5%enT3).
• Manejodelconductocísticoydelavíabiliarextrahepática:
algunos cirujanos realizan la resección de la vía biliar
extrahepática como parte de la colecistectomía radical,
otros lo justifican como una manera de hacer más fácil la
linfadenectomía (aunque hay estudios que muestran que
no trae beneficios), mientras que otros solo la realizan
cuando se ve comprometido el conducto cístico, ya que
se ha visto que en estos casos hay más probabilidad de
encontrar enfermedad residual en el resto de la vía biliar
(4.3% vs 42.1%). Las guías NCCN no recomiendan de
manera rutinaria la resección de la vía biliar cuando el
margen del conducto cístico es negativo.
OTRAS TERAPIAS
1. No existen recomendaciones que apoyen el usode
terapias neoadyuvantes.
2. El uso de terapias adyuvantes, que por general consiste
en la combinación de quimioterapia y radioterapia,
suele ser recomendado, sin embargo, no existen
estudios que prueben que tenga realmente beneficios.
3. Terapias paliativas:
• Stent biliar: malla que se posiciona en la vía biliar
para permeabilizar el conducto y con esto aliviar el
prurito, muchas veces invalidante para el paciente.
• Terapia del dolor: permite otorgar al paciente una mejor
calidad de vida el tiempo restante.
Pronóstico
En 1978, Piehler y Crichlow reportan un 4,1% de sobrevida a
5 años para todos los pacientes y una sobrevida de 16,5% a 5
añosparaaquellossometidosaresecciónquirúrgicaagresiva.
De esta forma, la sobrevida de los pacientes con cáncer de
vesícula biliar dependerá del estadio de la enfermedad al
momento de la presentación y de si se realiza o no resección
quirúrgica.
1. T1a: excelente sobrevida, cercana al 92% a 5 años.
2. T1b: sobrevida a 5 años de un 89%. La resección
completa de este tipo de lesiones con márgenes
negativos otorga un pronóstico excelente.
3. T2: sobrevida a 5 años va de un 20% a un 60%,
dependiendo del compromiso ganglionar y de si se
realiza o no una resección radical.
4. T3: sobrevida a 5 años es inferior a un 20%.
5. T4: sobrevida media de 6 meses.
1
284
Bibliografía
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8. Patrick G., Jackson, Steven R.T. Evans. Sistema biliar. En: Courtney M. Townsend, Jr., MD; R. Daniel Beauchamp, MD; B. Mark
Evers, MD; Kenneth L. Mattox, MD. Sabiston tratado de cirugía. 19 ed. España. Elsevier; 2013. p. 1476 – 1514.
285
6.4 Colangiocarcinoma
Rodríguez D, Diaz M, Bachelet C, Court F.
Generalidades
El colangiocarcinoma es un tumor maligno originado del epitelio
de los conductos biliares tanto intra como extrahepáticos. Es
una entidad patológica infrecuente, representando menos
del 2% de todos los tumores malignos , sin embargo, es un
tumor agresivo y al momento del diagnóstico suele tener mal
pronóstico.
Parasuevaluaciónytratamientoserequiriódividirelconducto
biliar en tercios; de esta forma existen, de proximal a distal,
los tumores intrahepáticos (15%), perihiliares (60%) y
extrahepático distal (25%)1
.
Los tumores perihiliares fueron descritos por Klatskin en
1965 y desde ese entonces se les conoce como “Tumor de
Klatskin”. Porotro lado, este tipo detumores sehasubdividido
en 4 en función de su extensión, siguiendo la clasificación
de Bismuth-Corlette.
Las zonas en blanco indican la extensión del tumor (modificado de Groen PC, Gores GJ, LaRusso NF, et al. N Engl J Med
1999;341:1368).
1 Burgos L. Colangiocarcinoma. Actualización,diagnóstico
y terapia. Rev. Méd. Chile. 2008; 136: 240-8.
286
Clasificación de Bismuth-Corlette:
Tipo I: tumores distales a la confluencia de los conductos
hepáticos derecho e izquierdo.
Tipo II: tumores que comprometen la confluencia.
Tipo III: tumores que invaden la confluencia y el conducto
hepático derecho (IIIa) o izquierdo (IIIb).
Tipo IV: tumores multicéntricos o que comprometen ambos
conductos hepáticos.
Epidemiología
La incidencia del colangiocarcinoma varía entre el 0,01 y
0,2%1
, siendo mayor en países del sudeste asiático, como
Tailandia, debido a la alta prevalencia de parásitos en la vía
biliar que presenta esta población.
La edad de presentación más frecuente es entre los 50 y los
70 años, sin embargo, en personas con factores de riesgo
se ha presentado hasta con 20 años de anticipación. Existe
una leve preferencia por el sexo masculino sobre el femenino
(1,3:1).
Más de dos tercios de los colangiocarcinomas corresponden
a tumores de Klatskin2
.
Factores de riesgo
La mayoría de los colangiocarcinomas corresponden a
adenocarcinomas. Existen distintas entidades que generan
inflamación crónica del árbol biliar y proliferación celular
compensatoria que llevaría a la transformación maligna del
epitelio biliar normal, entre ellas se encuentran:
1. Colangitis esclerosante primaria (CEP)
Es una enfermedad inflamatoria fibrosante crónica de la vía
biliar, con una incidencia anual de colangiocarcinoma en
estos pacientes del 0,6 a 1,5%, la cual aumenta a un 30%
en autopsias3
. Estas personas suelen desarrollar tumores
de la vía biliar en edades más tempranas, alrededor de los
30 y 50 años, y el hecho de fumar y el consumo excesivo de
alcohol parecen ser factores de riesgo adicional. Su causa es
desconocida, pero la evidencia apunta a factores genéticos y
autoinmunitarios. Tanto así, que existe una fuerte asociación
con enfermedades inflamatorias intestinales, donde un 90%
delospacientesconCEPpresentacolitisulcerosayenmenor
1 Manzanera M, Jiménez C, Moreno E, et al. Tratamiento
del colangiocarcinoma hiliar. Cir Esp. 2001; 69: 159-168.
2 Patrick G., Jackson, Steven R.T. Evans. Sistema biliar.
En: Courtney M. Townsend, Jr., MD; R. Daniel Beau-champ, MD;
B. Mark Evers, MD; Kenneth L. Mattox, MD. Sabiston tratado de
cantidad enfermedad de Crohn4
.
2. Quistes de la vía biliar
La dilatación quística de la vía biliar es una anomalía poco
frecuente, donde la mayoría se diagnostica en la primera
década de la vida. Los pacientes con enfermedad de Caroli
(dilataciones quísticas delavíabiliarintrahepática)tienenuna
incidencia de colangiocarcinoma de un 7%, mientras que los
pacientes con quistes coledocianos tienen una incidencia de
entre 2,5 y 2,8%2. Se piensa que estas dilataciones ocurren
tras una unión anómala de los ductos biliar y pancreático, tras
lo cual habría un reflujo de secreción pancreática exocrina
hacia el colédoco que predispondría la transformación
maligna de este. Por otra parte, la presencia de los quistes
favorecería la ectasia biliar en el mismo y la formación de
litiasis en su interior, con consecuente inflamación crónica y
sobreinfecciónbacteriana,factores quetambiénfavorecerían
la transformación maligna del epitelio.
3. Infección parasitaria
La infestación crónica con parásitos endémicos del sudeste
asiático(Clonorquissinesis,Ophisthorchisviverrini)seasocia
principalmente con el desarrollo de colangiocarcinoma de la
víabiliarintrahepática.Lainfecciónsueleocurrirtraslaingesta
de pescado crudo o mal cocinado, después de lo cual la forma
adulta del parásito obstruye el flujo biliar y causa una serie
de alteraciones entre las que se encuentran la hiperplasia
adenomatosa, la fibrosis periductal, la displasia epitelial y el
colangiocarcinoma.
4. Litiasis intrahepática (“hepatolitiasis” o “colangitis
piógena recurrente”)
La presencia de cálculos exclusivamente en la vía biliar
intrahepáticaes extremadamenteraraenoccidente,mientras
que en ciertas áreas del sudeste asiático se trata de una
enfermedad endémica, asociándose a colangiocarcinoma
en el 5% de los casos2. Su etiología no es bien conocida,
pero se cree que podría estar relacionado con la presencia
de lesiones congénitas de la vía biliar, con la dieta o con la
inflamación crónica producida por bacterias o parásitos.
5. Enfermedad hepática crónica
a) Enfermedad vírica crónica: se ha visto que existe una
gran asociación entre el virus de la hepatitis C (VHC) y
el colangiocarcinoma, sobre todo en aquellos pacientes
infectados que han desarrollado cirrosis, aunque el riesgo sigue
siendo mucho menor que para el carcinoma hepatocelular.
Por otro lado, también se ha sugerido una relación con el
virus de la hepatitis B (VHB), aunque los datos no son tan
fuertes como para el VHC.
cirugía. 19.a ed. España. Else-vier; 2013. p. 1508.
3 Bergquist A, Ekbom A, Olsson R, et al. Hepatic and
extrahepatic malignancies in primary sclerosing cholangi-tis.J
Hepatol 2002; 36:321.
4 Tung BY, Brentnall T, Kowdley KV, et al. Diagnosis and
prevalence of ulcerative colitis in patients with prima-ry sclerosing
cholangitis (abstract). Hepatology 1996; 24:169A.
287
Quiste decolédoco
b) Cirrosis: la cirrosis de etiología no viral también se
ha relacionado con un mayor riesgo de desarrollar un
colangiocarcinoma de vía biliar intrahepático.
6. Desórdenes genéticos
a) Síndrome de Lynch (cáncer colorrectal hereditario no
asociado a pólipos): esta es una enfermedad autosómica
dominante que se asocia con un gran riesgo de cáncer
colorrec-tal y de otros tipos de cáncer extracolónicos, dentro
de las cuales se encuentran las neoplasiashepatobiliares.
b) Papilomatosis biliar: lesión rara de la vía biliar y
debiese ser considerada una condición premaligna en
vista de que en alrededor de un 83% de estas lesiones
ocurre una trasnformación maligna5
, razón por la cual se
debe llevar a cabo una resección de ellas en el momento que
sesospechan.
7. Tóxicos de origen industrial como nitrosaminas y
asbesto.
8. Exposición al agente de contraste radiológico Thorotrast
Este medio de contraste fue retirado en la década de los ’60
cuando se evidenció que tenía propiedades cancerígenas,
las cuales solían desarrollarse entre 30 y 35 años des-pués
de llevada a cabo la exposición.
5 Taguchi J, Yasunaga M, Kojiro M, et al. Intrahepatic and
extrahepatic biliary papillomatosis. Arch Pathol Lab Med 1993;
117:944.
Diagnóstico
Clínica
La presentación del colangiocarcinoma dependerá de su
localización, sin embargo, los síntomas más frecuentes derivan
de la obstrucción biliar donde el signo más importante es la
ictericia, estando presente en más del 90% de los casos1 y
esta se caracteriza por ser silenciosa (asintomática). En el
caso de los colangiocarcinomas hiliares y extrahepáticos, la
ictericia suele aparecer en etapas más tempranas, lo que
favorece su detección en etapas iniciales. Otros síntomas
y signos que se pueden encontrar en estos pacientes son
coluria, prurito, dolor abdominal inespecífico principalmente en
la zona del epigastrio y cuadrante superior derecho, baja de
peso y anorexia. La aparición de colangitis por sobreinfección
de la bilis se evidencia en solo un tercio de los pacientes.
El signo de Courvoisier Terrier se ve en las personas con
colangiocarcinoma distal y se caracteriza por la presencia
de ictericia y una vesícula distendida indolora a la palpación.
A pesar de tener conocimiento de cuáles son los síntomas,
estossoninespecíficosdecualquierobstruccióndelavíabiliar,
por lo que es importante apoyarse con pruebas de laboratorio
e imágenes con el fin de detectar el tumor en etapas precoces
y obtener así un mejor pronóstico.
288
Fisiopatología Courvoisier-Terrier
Courvoisier-Terrier
289
Laboratorio
Las pruebas de función hepática muestran un patrón
colestásico, con aumento de la bili-rrubina total (BT), de la
fosfatasa alcalina (FA), de la gamma-glutamil-transpeptidasa
(GGT)yenmenorcantidaddelastransaminasas.Enloscasos
más avanzados puede existir disminución del hematocrito,
alteraciones en el tiempo de protrombina y en el nivel de
albúmina.
No existe ningún marcador tumoral lo suficientemente sensible
ni específico para la detección del colangiocarcinoma, ya
que todos pueden elevarse en otras entidades malignas o
benignas. La mayor utilidad de estos estaría en la evaluación
de posibles recidivas. El CA 19-9 tiene una sensibilidad que
va del 59 al 90% y una especificidad que varía entre el 54 y
98%, y está elevado en el 85% de los colangiocarcinomas.
Asimismo, el marcador CEA está elevado solo en el 30%, y
en niveles >5.2 ng/mL tiene una sensibilidad del 68% y una
especificidad del 82%1 6 7 8
.
No obstante, se ha observado que el uso combinado del CA
19-9conelCEAesútileneldiagnóstico decolangiocarcinoma
en personas con CEP, donde valores sobre 400 en la
siguiente fórmula han demostrado tener una alta sensibilidad
y especificidad:
CA 19-9 + [CEA x 40]
Imagenología
La primera aproximación imagenológica suele ser la ecografía,
permitiendo ver si existe dilatación de la vía biliar. Se puede
complementar con una ecodoppler para evaluar los flujos
sanguíneos y visualizar si existe compromiso portal. Sin
embargo, no suele ser muy relevante al momento de tomar
decisiones frente a un paciente con colangiocarcinoma.
La tomografía computarizada (TC), en cambio, es más eficaz
en la determinación del tu-mor, ya que muestra la relación
de este con estructuras vasculares y nos ayuda a evidenciar
la presencia de metástasis. Con esta información es posible
evaluar la resecabilidad del tumor.
La colangiorresonancia es hoy en día la técnica no invasiva
de elección para el estudio de la vía biliar, ya que proporciona
información tanto de la anatomía biliar como de la extensión
locorregional.Además,tienelaventajadequenorequiereuna
6 Kim HJ, Kim MH, Myung SJ, et al. A new strategy for the
application of CA19-9 in the differentiation of pan-creaticobiliary
cancer: analysis using a receiver operating characteristic curve.
Am J Gastroenterol 1999; 94:1941.
7 Shen WF, Zhong W, Xu F, et al. Clinicopathological
and prognostic analysis of 429 patients with intrahepatic
cholangiocarcinoma. World J Gastroenterol 2009; 15:5976.
8 Malaguarnera G, Paladina I, Giordano M, et al. Serum
markers of intrahepatic cholangiocarcinoma. Dis Markers 2013;
34:219
punción de la vía biliar ni la introducción de un endoscopio,
con lo que disminuye el riesgo de una sepsis por colangitis,
colecistitis, hemobilia y pancreatitis.
Por otra parte, la vía biliar se puede estudiar por técnicas
invasivas como la colangiografía transparietohepática (CTPH),
donde se aborda la vía biliar mediante una punción hepática
percutánea bajo control ecográfico y la endoscópica (CPRE),
en la que se introduce un endoscopio de visión lateral, las
cualestienenlaventajaquepermitenlaobtencióndemuestras
para estudio. Por lo general, estos métodos se utilizan como
instrumentos terapéuticos para desobstruir la vía biliar más
que como diagnósticos.
En Chile hay una gran incidencia de cáncer de vesícula y
hay casos que este se encuentra avanzado y puede invadir
la vía biliar, manifestándose como un tumor de Klatskin. Es-to
es lo que se conoce como un “pseudo-Klatskin” o “Klatskin
chileno”, por lo que es importante realizar un buen estudio
imagenológico y siempre tenerlo en cuenta dentro de los
diagnósticos diferenciales.
290
Estadio y Pronóstico
Los tumores de la vía biliar se clasifican en estadios de acuerdo con la clasificación TNM de la Sociedad Americana Contra
el Cáncer (AJCC). Con el objetivo de poder predecir en forma más exacta la resecabilidad y el pronóstico de cada tumor,
se han creado tres subdivisiones de etapificación sobre la base de su ubicación en la vía biliar.
Colangiocarcinoma Intrahepático
Tumor Primario (T) Metástasis (M)
Tx Tumorprimario no puede ser
caracterizado.
M0 Sin evidencia de metastasis.
T0 Sin evidencia de tumor primario. M1 Con metástasis a distancia.
Tis Tumor in situ (carcinoma intraductal). Estadio
T1 Tumor solitario sin invasión vascular. Etapa 0 Tis N0 MO
T2a Tumor solitario con invasión vascular. Etapa I T1 N0 MO
T2b Tumores múltiples sin/con invasión
vascular.
Etapa II T2 N0 MO
T3 Tumor perfora peritoneo visceral. Etapa III T3 N0 MO
T4 Tumor con invasión periductal. Etapa IVa T4
CualquierT
N0
N1
M0
M0
Linfonodos regionales (N) Etapa IVb CualquierT CualquierN M1
Nx Linfonodos no pueden ser estudiados.
N0 Sin metástasis a linfonodos regionales.
N1 Metástasis a linfonodos.
291
Colangiocarcinoma perihiliar
Tumor Primario (T) Metástasis (M)
Tx Tumorprimario no puede ser
caracterizado.
M0 Sin evidencia de metastasis.
T0 Sin evidencia de tumor primario. M1 Con metástasis a distancia.
Tis Tumor in situ. Estadio
T1 Tumor confinado al conducto biliar
con extensión a la capa muscular o
tejido fibroso.
Etapa 0 Tis N0 MO
T2a Tumor invade pared del conducto
biliar con extensión a tejido adiposo.
Etapa I T1 N0 MO
T2b Tumorinvade parénquima hepático
adyacente
Etapa II T2a-b N0 MO
T3 Tumorinvade rama unilateral de vena
porta o arteria hepática.
Etapa IIIa T3 N0 MO
T4 Tumor invade vena porta principal o
sus ramas bilateralmente o la arteria
hepática común o ramas biliares de
segundo orden bilateral o rama de
segundo orden unilateral con vena porta
contralateral o arteria hepática
Etapa IIIb T1-T3 N1 MO
Linfonodos regionales (N)
Etapa IVa T4 N0-N1 M0
Nx Linfonodos no pueden ser
estudiados.
Etapa IVb CualquierT
CualquierT
N2
Cualquier N
M0
M1
N0 Sin metástasis a linfonodos.
N1 Metástasis a linfonodos a lo largo del conducto cístico, hepático común, arteria hepática y/o
vena porta.
N2 Metástasis a linfonodos periaórticos, peri cava, mesentéricos superiores y/o tronco celiaco.
292
Colangiocarcinoma distal
Tumor Primario (T) Metástasis (M)
Tx Tumorprimario no puede ser
caracterizado.
M0 Sin evidencia de metastasis.
T0 Sin evidencia de tumor primario. M1 Con metástasis a distancia.
Tis Tumor in situ. Estadio
T1 Tumor confinado al conducto biliar. Etapa 0 Tis N0 MO
T2 Tumor atraviesa conducto biliar. Etapa Ia T1 N0 MO
T3 Tumor invade vesícula, páncreas,
duodeno u otro órgano adyacente sin
involucrar el tronco celiaco o arteria
mesentérica superior.
Etapa Ib T2 N0 MO
T4 Tumor invade tronco celiaco o arteria
mesentérica superior.
Etapa IIa T3 N0 MO
Linfonodos regionales (N) Etapa IIb T1
T2
T3
N1
N1
N1
M0
M0
M0
Nx Linfonodos no pueden ser estudiados. Etapa III T4 Cualquier N M0
N0 Sin metástasis a linfonodos. Etapa IV Cualquier T Cualquier N M1
N1 Metástasis a linfonodos.
En la medida en que aumenta el estadio del cáncer, el
pronóstico empeora precipitadamente.
Los dos factores que finalmente tienen mayor influencia
sobre el pronóstico, luego de la resección del tumor, son la
resección completa (RO) hasta obtener márgenes negativos
y la ausencia de metástasis en ganglios linfáticos. La
irresecabilidad quirúrgica es más frecuente en los tumores
de Klatskin que en los tumores más distales, lo que empeora
aún más el pronóstico.
293
Tratamiento
El único tratamiento potencialmente curativo es la resección
quirúrgica completa del tumor con márgenes negativos (R0),
sin embargo, esto solo puede ser aplicado en la minoría de
los pacientes, ya que por lo general el tumor es irresecable
al momento del diagnóstico.
Para evaluar quiénes pueden ser sometidos a cirugía existen
cuatrocriteriosprequirúrgicosdeirresecabilidad:laafectación
de los ganglios retroperitoneales o paracelíacos, la invasión
de la arteria hepática principal o de la vena porta (a no ser
que esta pueda ser resecada y reconstituida), la afectación
de órganos vecinos y la diseminación a distancia de la
enfermedad.
Encasodequeexistalasospechaclínicadecolangiocarcinoma
en una persona que no tenga contraindicaciones para la
resección quirúrgica, es aconsejable proceder con una
exploración. En estos casos, entre el 7 y el 13% de los
pacientes sometidos a resección evidenciarán una enfermedad
benigna, mientras que, por otro lado, más del 50% de los
pacientessometidosalaexploraciónvanamostrarelementos
3
que impidan la resección de la neoplasia maligna .
Colangiocarcinoma proximal
El tratamiento de elección del colangiocarcinoma intrahepático
es la resección hepática junto con la resección de ganglios
regionales. Con estatécnica seha demostrado una sobrevida
del 79% a 5 años en aquellas personas sin compromiso
ganglionar y con 1 cm de margen de sección libre de cáncer1.
En los colangiocarcinomas hiliares, la cirugía debe hacerse
en función de la extensión del tumor con el fin de obtener un
margen de resección libre de enfermedad:
- Tipos I y II: resección de la vía biliar extrahepática,
colecistectomía, linfadenectomía y anastomosis
hepáticoyeyunal en Y de Roux.
- Tipo III: resección de la vía biliar extrahepática,
colecistectomía, linfadenectomía, lobectomía hepática derecha
o izquierda y anastomosis hepáticoyeyunal en Y deRoux.
- Tipo IV: resección de la vía biliar, vesícula biliar,
linfadenectomía, lobectomía he-pática extendida y anastomosis
hepáticoyeyunal en Y de Roux.
En aquellos pacientes que no pueden ser sometidos a cirugía
se puede instalar un stent biliar (por vía endoscópica como
primera opción o por vía percutánea como alternativa) en el
conducto hepático izquierdo y otro stent biliar en el hepático
derecho, con el cual puede no bajar mucho la ictericia, pero
si disminuye el prurito.
Colangiocarcinoma distal
El colangiocarcinoma distal se trata mediante una
pancreatoduodenectomía, también conocida como
procedimiento de Whipple, la cual debería realizarse en un
centrodereferenciaparaminimizarlamorbilidadperioperatoria.
Los tumores distales son los que tienen la mayor tasa de
resectabilidad,mientrasqueloshiliaressonlosquepresentan
menor posibilidad de llegar a cirugía.
Otras terapias
En vista de que el pronóstico de estos pacientes suele ser
de tan solo meses, cobra importancia el manejo de los
síntomas para la mejoría de la calidad de vida. El principal
problema en estas personas es la obstrucción biliar y para
evitar las complicaciones de esta se puede recurrir a la
descompresiónbiliarendoscópicaconusodeprótesisbiliares
(stents) o descompresión quirúrgica mediante una derivación
biliodigestiva a través de la cual se deriva el flujo biliar.
En este ámbito, no todos los pacientes que se someten a
cirugía obtienen márgenes libres de tumor y en estos casos la
recurrencia local posoperatoria es bastante frecuente, razón
por la que algunos centros utilizan radio o quimioterapia
adyuvante, sin embargo, estas no han mostrado una utilidad
significativa en mejorar la expectativa y la calidad de vida.
Trasplante hepático
El trasplante hepático ha surgido como otra opción para tratar
a los pacientes con colangiocarcinoma intrahepático e hiliar
que son considerados irresecables, pero no disemina-dos,
aunque aún no hay estudios suficientes que demuestren su
eficacia.
294
Bibliografía
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9.- Malaguarnera G, Paladina I, Giordano M, et al. Serum markers of intrahepatic cholangiocarcinoma. Dis Markers 2013; 34:219.
295
6.5 Nódulo Hepático
Villalobos B, Humeres R.
Generalidades
Definición
Denominaremosnódulohepáticoaaquellalesiónencualquier
porción del parénquima hepático, evidenciada generalmente
de manera incidental en un estudio imaginológicosolicitado
por otra causa. Son en su mayoría asintomáticos yel principal
desafío en su enfrentamiento es determinar cuál de ellos
pudiera ser maligno.
Epidemiología
Los nódulos hepáticos son en su mayoría benignos y de
prevalencia mayor en mujeres. Los nódulos malignos son
más frecuentes en hombres. En general, la prevalencia se
encuentra en aumento. Esto dado principalmente por la
mejoría en técnicas de imaginología, que permiten evidenciar
lesiones con mejor resolución. Actualmente, se estima que
el 20%1
de la población general tiene un nódulo hepático.
Clasificación
Existen muchas formas de clasificar los nódulos hepáticos:
benignos o malignos, primarios o secundarios, sólidos o
quísticos, únicos o múltiples, según su origen histológico,
etc. (TABLA 1)
TABLA 1
Clasificación de las principales lesiones en hígado.
BENIGNO MALIGNO
SÓLIDO
Hemangioma
Hiperplasia nodular focal
Adenoma hepático
Hiperplasia nodular
regenerativa
Metástasis
Hepatocarcinoma
Colangiocarcinoma
Carcinoma fibrolamelar
QUÍSTICO
Quiste simple
Cistoadenoma hepático
Quiste hidatídico
Enfermedad deCaroli
Cistoadenocarcinoma
1 Crovari F, Manzor M. Manual de patología quirúrgica. 1.a
ed. Santiago, Chile: Ediciones UC, Facultad de Medicina Pontifi-cia
Universidad Católica de Chile; 2014.
296
Algunos puntos clave:
“La lesión hepática más frecuente es el quiste simple”.
“Eltumorbenignomásfrecuenteeselhemangiomahepático”.
“El tumor maligno más frecuente en el hígado son las
metástasis”.
“El tumor maligno primario más frecuente es el
hepatocarcinoma”.
Diagnóstico
Clínica
Como ya se mencionó, la mayoría de los nódulos hepáticos
son asintomáticos. Sin embargo, pueden aparecer síntomas
y signos dependiendo del tipo de lesión y de alguna eventual
complicación de la misma.
En caso de existir síntomas, el más frecuente es el dolor.
Se puede presentar en el con-texto de efecto de masa en
lesiones muy grandes, por distensión de la cápsula hepática
en lesiones superficiales o por complicación intralesional
(sangrado, ruptura o infarto de la lesión).
Considerando el efecto de masa y eventual malignidad
puedepresentarseademás:ictericia,coluria,acolia,náuseas,
baja de peso, fatiga, signos y síntomas de daño hepático
crónico, anemia crónica, etc. Si se presenta ruptura hacia la
cavidad peritoneal, pueden existir, incluso signos de irritación
peritoneal.
Por todo lo anterior, es indispensable una historia clínica
completa; una anamnesis detallada y un examen físico
acucioso.
Laboratorio
El laboratorio de un paciente con un nódulo hepático puede
ser normal, presentar mínimas alteraciones o demostrar
francamente un paciente con signos de daño hepático,
desnutrido o anémico crónico a causa de una lesión maligna.
El estudio de laboratorio debe incluir hemograma, perfil
bioquímico, función renal y pruebas de coagulación.
Según los hallazgos imaginológicos y frente a la sospecha
de una neoplasia maligna, nunca se debe olvidar solicitar
marcadores tumorales (CA 19-9, AlfaFeto proteína y CEA) y
estudio de virus hepatotropos.
Imaginología
Corresponde a la principal herramienta diagnóstica en el
enfrentamiento de un pacienteconunnódulo hepático. Como
veremos,existencaracterísticasimaginológicasquepermiten
determinar en la mayoría de los casos a qué tipo de lesión nos
estamos enfrentando. Por esto y por los riesgos inherentes
al procedimiento, no se suele usar la biopsia por punción
del nódulo hepático como herramienta diagnóstica, salvo en
casos muy seleccionados.
Para establecer el diagnóstico imaginológico del nódulo
hepático, disponemos principalmente de 3 recursos:
1. Ecografía abdominal
Es el primer examen de imagen por solicitar en unpaciente
en que se sospecha un nódulo hepático. Es generalmente
el examen donde se encuentra incidentalmente la lesión en
pacientes en estudio por otra causa (por ejemplo, estudio de
colelitiasis o dolor abdominal inespecífico).
Es un examen de bajo costo, que no usa radiación y
está ampliamente disponible. Permite diferenciar
lesiones quísticas de sólidas y lograr caracterizarlas bien.
Sin embargo, es operador dependiente y no permite
determinar si lesiones sólidas son benignas o malignas.
2. Tomografía computada de abdomen y pelvis con contraste
(trifásico) (TC A-P)
Es el primer examen de imagen por solicitar cuando ya se
tiene el diagnóstico de nódulo hepático hecho por ecografía
y se necesita caracterizar la lesión.
Es un examen de mayor costo que la ecografía, de menos
disponibilidad (aunque cada vez está más disponible) y
además usa radiación. Junto con permitir ver si la lesión es
sólida o quística, tiene la importantísima ventaja de permitir
diferenciar lesiones sólidas malignas de benignas, facilitando
además caracterizar las diferentes lesiones benignas de
acuerdo con su secuencia de captación del contraste en
cada una de las fases.
3. Resonancia magnética de hígado (RM)
Corresponde al mejor examen para caracterizar una lesión
hepática. Permite diferenciar sólido de quístico, benigno de
maligno y diferenciar los distintos tipos de lesiones. También
usa contraste, logrando mejor resolución de imagen que con
el TC A-P con contraste trifásico. No utiliza radiación, pero
es de mucho mayor costo.
297
Diagnóstico Diferencial
A continuación expondremos de manera breve las
características, hallazgos imaginológicos y tratamiento de
las lesiones más frecuentes de encontrar, tanto benignas
como malignas:
Lesiones benignas (TABLA 2)
1. Quísticas
A. Quiste simple
Corresponde a la lesión más frecuente encontrada en
el parénquima hepático, con una prevalencia de 5%2
en
pacientes adultos. Más frecuente en mujeres de 50-70 3
años, generalmente asintomáticos (porque la mayoría son
pequeños). El diagnóstico se hace solo con la ecografía,
encontrando una lesión hipoecogénica, de paredes delgadas
y bien definidas (FIGURA 1) y no es necesario solicitar otro
examen de imagen. Si se evidencia tabiques o componente
sólidoquístico,sedebesospecharuncistoadenoma,teniendo
laobligacióndeestudiarlocomotal.Elquistesimpleraramente
se complica (ruptura, hemorragia, infección) y no malignizan.
Elmanejoeslaobservación.Tienenindicaciónquirúrgicaen3
circunstancias: cuando son muysintomáticos (dolor); cuando
secomplican: ruptura yhemorragia, absceso, efectode masa
por gran tamaño; cuando se sospecha un cistoadenoma.
B. Cistoadenoma hepático
Neoplasia quística benigna de baja incidencia, sin embargo,
es la más frecuente en el hígado. En general, asintomático,
detamañoentre 10-204
cm ysinrelación conanticon-ceptivos
orales. Su tendencia natural es a crecer en forma lenta,
eventualmente un 15%5
evoluciona a neoplasia maligna
(cistoadenocarcinoma). La ecografía evidencia una lesión
quística hipoecogénica, multiloculada, con tabiques. Se debe
caracterizar mejor con una TC o RM para la obtención de
histología mediante punción. (Figura 2)
Figura 1
Imagen ecográfica de un quiste simple hepático.
2 Cameron JL, Cameron AM. Current Surgical Therapy. 11th
ed. Philadelphia, PA: Elsevier Saunders; 2013.
3 Shaked O, Reddy K. Aproach to a liver mass. Clinics in
liver disease (2009) 13:193-210.
4 Towsend CM, Beauchamp RD, Evers BM, Mattox KL.
Sabiston Textbook of Surgery, 19th ed. Philadelphia, PA Elsevier
Saunders; 2012.
5 Di Bisceglie AM. Malignant neoplasms of the liver. In:
Chiff’s Diseases of the Liver, 8th ed., Philadephia, PA: Lippincott-
Raven; 1999.
298
El manejo es la resección quirúrgica, basándose en el 15% de malignización.
Figura 2
A. Ecografía abdomen.
Imagen ecográfica donde se observa lesión hipoecogénica, con múltiples tabiques, compatible con cistoadenoma (a).
B.Resonancia de abdomen en T2.
Imagen de RM de hígado, ponderada en T2, donde se evidencia lesión hiperintensa(b).
299
2. Sólidas
A. Hemangioma
Tumorbenignomásfrecuenteenelhígado.Correspondeauna
malformación vascular hepática. Más frecuentes en mujeres,
generalmente únicos, menores de 5 cm y asintomáticos. Los
mayores de 5 cm se denominan hemangiomas gigantes6
.
Hemangioma hepático
6 Towsend CM, Beauchamp RD, Evers BM, Mattox KL.
Sabiston Textbook of Surgery, 19th ed. Philadelphia, PA Elsevier
Saunders; 2012.
300
Los hemangiomas más grandes pueden presentar dolor, por
efecto de masa y por trombosis intralesional. Está descrita
además la coagulación intravascular diseminada a causa
de un hemangioma de gran tamaño, llamada síndrome de
Kassabach-Merrit. No malignizan, no suelen crecer ni tienen
ruptura espontánea.
La ecografía evidencia una lesión hipocogénica bien
circunscrita. La TC presenta un patrón característico y único,
captando contraste en fases tardías (“Realce de imagen en
bola de algodón”), pasando de ser una imagen hipodensa a
ser una imagen hiperdensa (captación centrípeta) (FIGURA 3).
Norequiere estudiohistológico,dadoelaltoriesgoderuptura.
TCdeabdomenconcontrastedondeseobservalaevolutividad
en la captación de contraste en un hemangioma hepático en
fase arterial (a), portal (b) y tardía (c).
Elmanejodeloshemangiomaseslaobservaciónyseguimiento
imagenológico.Puedentenerindicaciónquirúrgicasisonmuy
sintomáticos, si presentan ruptura con hemoperitoneo o si se
asocian a síndrome Kassabach Merrit.
Figura 3
A .TAC abdomen y pelvis fase arterial.
B. TAC abdomen y pelvis fase portal.
C. TAC abdomen y pelvis tardía.
301
B. Hiperplasia nodular focal
Segundo tumor benigno hepático más frecuente, luego del
hemangioma. Su origen radica en una respuesta hiperplásica
hepatocelular (contiene hepatocitos y canalículos biliares)
debido a una anomalía arterial en el parénquima hepático que
genera una hiperperfusión local. Es más prevalente en mujeres
jóvenes (incluso más que el hemangioma) y es generalmente
asintomático. Son generalmente únicos, menores de 5 cm7
;
no malignizan y raramente se complican (dolor, necrosis,
sangrado). Su aparición se asocia al uso de anticonceptivos
orales combinados (AOC).
A. Ecografía abdominal.
Imagen ecográfica de una HNF donde se observa una imagen
bien delimitada, hipoecogénica.
Hiperplasia nodularfocal
A la ecografía se evidencia una lesión hipo o isoecogénica,
bien delimitada. Su caracterización es mucho mejor con la
TC,evidenciandounalesiónhipodensainicialmentequecapta
contraste en fase arterial de manera homogénea (FIGURA
4), pero que “se lava” rápidamente, quedando isodensa en
fases tardías. Destaca la presencia de una cicatriz central
estrellada, la que en un 15% puede no estar8
.
B. TAC abdomen y pelvis.
TC de abdomen donde se evidencia lesión hiperdensa con cap-
tación homogénea de contraste en fase arterial. Nótese la cicatriz
central hipodensa en esta fase.
Elmanejoeslaobservación.Puedetenerindicaciónquirúrgica
si es sintomático, si presentan complicaciones o frente a la
duda diagnóstica y sospecha de malignidad.
7 Towsend CM, Beauchamp RD, Evers BM, Mattox KL.
Sabiston Textbook of Surgery, 19th ed. Philadelphia, PA Elsevier
Saunders; 2012.
8 Towsend CM, Beauchamp RD, Evers BM, Mattox KL.
Sabiston Textbook of Surgery, 19th ed. Philadelphia, PA Elsevier
Saunders; 2012.
302
C Adenoma hepático
Tercer tumor benigno más frecuente en hígado. Son frecuentes
en mujeres jóvenes entre 20-40 años9
y son generalmente
asintomáticos. Sonlesiones sólidas,enformahabitual únicas
(12-30%sonmúltiples10
),muyvascularizadasydecrecimiento
rápido.Suapariciónycrecimientotieneestrechadependencia
hormonal; existe una clara asociación al uso de AOC.
El adenoma hepático presenta 2 inconvenientes, principalmente
relacionados con el tamaño de la lesión: presenta entre un
20-40% de sangrado espontáneo y, además, entre un 5-11%
de todos los adenomas hepáticos evoluciona a una neoplasia
maligna11
, principalmente si son mayores de 5 cm12
. Debido
a esto, no se utiliza como herramienta diagnóstica la biopsia
para obtención de histología.
A la ecografía se presentan como lesiones hiperecogénicas,
bien delimitada.Ala TC se evidencia una lesión sólida, hipo o
isodensa, con cápsula, bien vascularizada, que presenta un
refuerzohomogéneoenfasearterial(FIGURA5)y,finalmente,
se ve isodensa en fases tardías. Puede ser difícil diferenciarla
de hepatocarcinomas.
El manejo de estas lesiones puede ser la observación y
control radiológico. Tienen indicación quirúrgica basándose
en el riesgo de malignización a hepatocarcinoma(principal-
mente en adenomas de más de 5 cm) y cuando presentan
complicaciones (principalmente sangrado). Algunos autores
plantean como indicación para resección quirúrgica las
lesiones de cualquier tamaño presentes en hombres, dado
que el riesgo de transformación a hepatocarcinoma podría
alcanzar el 47%13
.
9 Towsend CM, Beauchamp RD, Evers BM, Mattox KL.
Sabiston Textbook of Surgery, 19th ed. Philadelphia, PA Elsevier
Saunders; 2012.
10 Towsend CM, Beauchamp RD, Evers BM, Mattox KL.
Sabiston Textbook of Surgery, 19th ed. Philadelphia, PA Elsevier
Saunders; 2012.
11 Crovari F, Manzor M. Manual de patología quirúrgica. 1.a
ed. Santiago, Chile: Ediciones UC, Facultad de Medicina Ponti-ficia
Universidad Católica de Chile; 2014.
12 Cameron JL, Cameron AM. Current Surgical Therapy. 11th
ed. Philadelphia, PA: Elsevier Saunders; 2013.
13 Cameron JL, Cameron AM. Current Surgical Therapy. 11th
ed. Philadelphia, PA: Elsevier Saunders; 2013.
A. RNM abdomen con contraste en T1 fase arterial.
RNM abdomen con contraste en T1 fase arterial se observa imagen
hiperintensa en el parénquima hepático compatible con adenoma.
B. RNM abdomen con contraste en T1 fase portal.
Misma lesión en fase portal.
303
C. RNM abdomen en T2.
RNM de abdomen en T2 .
304
Tabla 214
Principales características de lesiones benignas hepáticas
más frecuentes.
Hemangioma HNF Adenoma Quiste simple Cistoadenoma
Edad aparición 30-50 años 20-40 años Todas las
edades
50-70 años 40-60 años
Sexo (M:H) 2-6:1 8:1 M>>>H 1,5-6:1 4:1
Dependencia
estrogénica
Posiblemente Posiblemente hiperecogénica Anecogénica Anecogénica
con tabiques
TC
Hiperdenso,
captación
centrípeta
Hiperdensa
con cicatriz
central
Hiperdensa Isodenso
al agua
Isodenso
al agua
RM
T1: hipointenso
T2:hiperintenso
T1: isointenso,
hipointenso
leve / T2:
isointenso,
hiperintenso
leve
Variable T1: hipointenso
T2:hiperintenso
T1: hipointenso
T2: hiperintenso
Lesiones malignas
1. Metástasis
Las metástasis son la lesión maligna más frecuente de
encontrar como nódulo hepático (50% aprox.)15
.Generalmente
son múltiples. El origen del tumor primario más frecuente
es el colon, siendo característicamente hipointensas al TC
A-P con contraste. Otros sitios primarios incluyen el recto,
mama y riñón.
El tratamiento de las metástasis hepáticas es en general la
resección, siempre y cuando exista una reserva funcional
y anatómica del hígado que permita la cirugía resectiva.
Actualmente, en el caso de las metástasis de colon, la
tendencia es resecar las metástasis hepáticas primero y
luego controlar el tumor primario en el colon mismo. Esto
permitiría mejor pronóstico en pacientes con cáncer de colon
14 Adaptada de Shaked O, Reddy K. Aproach to a liver mass.
Clinics in liver disease (2009) 13:193-210.
15 Crovari F, Manzor M. Manual de patología quirúrgica. 1.a
ed. Santiago, Chile: Ediciones UC, Facultad de Medicina Ponti-ficia
Universidad Católica de Chile; 2014.
metastásico, llegando, incluso hasta el 40% de sobrevida a
5 años.
2. Lesiones primarias malignas
Hepatocarcinoma y colangiocarcinoma intrahepático.
Conclusión
Elenfrentamientodeunnódulohepáticoesunatareadifícil.Se
debe tener claro conocimiento del contexto clínico en el cual
se presentan cada una de las lesiones, tanto benignas como
malignas, a modo de lograr una pesquisa eficaz de aquellos
pacientes con lesiones malignas potencialmente tratables,
permitiendo el mejor manejo de las lesiones benignas, con
menor morbilidad y complicaciones asociadas.
Para esto, el médico general deberá derivar criteriosamente
aun equipo de cirugía hepatobiliar lospacientes pesquisados
con lesiones, tanto benignas como malignas, para permitir
un seguimiento adecuado o manejo del paciente y su lesión
por un equipo competente.
305
Metástasis hepáticaúnica
Metástasis múltiple hepática
306
Bibliografía
1. Shaked O, Reddy K. Aproach to a liver mass. Clinics in liver disease (2009) 13:193-210.
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4. Di Bisceglie AM. Malignant neoplasms of the liver. In: Chiff’s Diseases of the Liver, 8th ed., Philadephia, PA: Lippincott-Raven;
1999.
307
6.6 CarcinomaHepatocelular
Calcagno M, Diaz M, Humeres R.
Introducción
El Carcinoma Hepatocelular (CHC) ó Hepatocarcinoma es
el tumor maligno primario del hígado más frecuente y por lo
general se presenta en un hígado con daño hepático crónico
(DHC) ó cirrótico. Lo más frecuente es que se diagnostique
tardíamente, teniendo una mediana de sobrevida entre 6 a
20 meses1
. A pesar de que la cirugía es el único tratamiento
curativo, existen otras opciones para el manejo que se
describirán en este capítulo. Lamentablemente la mayoría
de los pacientes no son candidatos a cirugía y las opciones
terapéuticas se determinarán finalmente en relación a la
extensión de la enfermedad y severidad de la insuficiencia
hepática subyacente.
Epidemiología
Dentrodelostumoreshepáticosmalignos,losmásfrecuentes
son las metástasis (50%, principalmente por cáncer colorectal),
el colangiocarcinoma intrahepático y el CHC. Éste último
es la neoplasia maligna hepática primaria más frecuente
(más del 90%), al igual que el tumor intraabdominal más
diagnosticado. Es el sexto cáncer más prevalente a nivel
mundial y corresponde a la tercera causa de mortalidad por
cáncer2
. En el 2008 se diagnosticaron más de 700.000 CHC,
con una incidencia de 16 casos por 100.000 habitantes.
Este tumor es la principal causa de muerte en pacientes con
cirrosis3
. Esta alta incidencia se explica por su asociación
al DHC, hepatitis B y C, esteatohepatitis no alcohólica y el
consumo de alcohol.
El CHC es más frecuente en hombres que en mujeres y esta
diferencia es más notoria en países de alta incidencia donde
los hombres tienen de un 2.1 a un 5.7 más probabilidad de
tener este cáncer4
.
Factores de Riesgo
El principal factor de riesgo para el CHC es la cirrosis hepática
cualquiera sea su origen; un tercio de los pacientes cirróticos
desarrollará este tumor. Otros factores de riesgo para el
CHC son la infección crónica por virus hepatitis B (VHB),
infeccióncrónicaporvirushepatitisC(VHC),hemocromatosis,
esteatohepatitis no alcohólica, sexo masculino y edad
avanzada.
Globalmente la infección crónica por VHB causa más del 50%
de los CHC y se ha visto que la carga viral y duración de la
infecciónaumentansuincidencia. Algunosestudiosmuestran
que el VHB puede ser causa de CHC incluso en ausencia
de cirrosis. Por esta razón en presencia de VHB y VHC se
recomienda hacer screening. En Norte América, Europa
y Japón, el VHC y el abuso de alcohol son los factores de
riesgo más importantes. El riesgo anual de presentar CHC
en pacientes con DHC es 1-8% (2% en aquellos infectados
por VHB y 3-8% por VHC)5
.
La diabetes es un factor de riesgo independiente para CHC y
las tasas de mortalidad por cáncer son cinco veces mayores
en hombres con índice de masa corporal (IMC) mayor a40.
El tabaco aumenta el riesgo y el café lo disminuiría.
Finalmente, pacientes que presentan coinfección de hepatitis
(VHC ó VHB) con VIH presentan mayor riesgo de desarrollar
CHC y progresión más rápida a cirrosis.
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308
Cirrosis hepática
Hepatocarcinoma tipomasivo
309
Hepatocarcinoma tiponodular
Hepatocarcinoma tipodifuso
310
Clínica Imagenología
El CHC no posee clínica patognomónica, sin embargo es
importante sospecharlo en pacientes con DHC o cirrosis
hepática que presenten una descompensación o trombosis
venosa portal.
Si un paciente con DHC compensado desarrolla ascitis,
encefalopatía hepática,ictericia,osangrado variceal,sedebe
descartar la presencia de CHC. Éstos síntomas se relacionan
con la extensión del tumor a la vena hepática o a la porta o
bienalaproduccióndeshuntsarteriovenososintrahepáticos6
.
Algunos pacientes pueden presentar dolor abdominal leve
o moderado específicamente en el hemiabdomen superior,
pérdida de peso no intencional, saciedad precoz o una masa
palpableenelhemiabdomensuperior.Estossíntomasindican
enfermedad avanzada7
.
Presentaciones poco comunes son ictericia obstructiva por
invasióndelárbolbiliar,diarrea,dolor óseoodisneaproducida
pormetástasis,hemoperitoneoproducidoporroturadeltumor,
fiebre, síndrome paraneoplásico, o absceso hepático.
Al momento del diagnóstico, las metástasis están presentes
en 5-15% de los casos8
y son más comunes en pacientes con
estadios avanzados (> 5cm, invasión vascular)9
.
Toda lesión hepática en paciente con DHC o cirrosis, se
considera un CHC hasta que se demuestre lo contrario.
En la TC por lo general se identifican lesiones multifocales,
con realce en la fase arterial ya que son hipervascularizados
y lavado en la fase venosa. También es posible encontrar
trombosis de la porta por invasión tumoral.
Laboratorio
Los antecedentes clínicos juegan el rol más importante en
el proceso diagnóstico, sin embargo en cuanto al estudio
de laboratorio existe la alfa feto proteína (AFP) que es un
marcador tumoral que se eleva habitualmente en la presencia
de CHC. Al igual que otros marcadores tumorales, ésta tiene
limitada sensibilidad y especificidad puesto que también se
eleva en cáncer gástrico, tumores gonadales, embarazo y
DHC en ausencia de CHC. Vale destacar que que no todos
los CHC son productores de AFP, en especial los tumores
pequeños y la variedad fibrolamelar, por lo que siempre se
debe contar con estudio imagenológico.
6 Sugano S, Miyoshi K, Suzuki T, et al. Intrahepatic
arteriovenous shunting due to hepatocellular carcinoma and
cirrhosis, and its change by transcatheter arterial embolization. Am
J Gastroenterol 1994; 89:184.
7 Felay J, Shin HR, Bray F, Forman D, Mathers C, Parkin
DM. Estimates worldwide burden of cancer in 2008: GLOBOCAN
2008. Int J Cancer 2010; 127:2893-917
8 Uka K, Aikata H, Takaki S, et al. Clinical features
and prognosis of patients with extrahepatic metastases from
hepatocellular carcinoma. World J Gastroenterol 2007; 13:414.
9 Yuki K, Hirohashi S, Sakamoto M, et al. Growth and spread
of hepatocellular carcinoma. A review of 240 consecutive autopsy
cases. Cancer 1990; 66:2174.
311
A izquierda: TAC en fase arterial muestra lesión con hipercaptaciónde contraste. A derecha: muestra lavado en fase venenosa.
Si se quiere mejorar la sensibilidad diagnóstica, la resonancia magnética permite delimitar el tejido cirrótio del tumor. Hay
un incremento significativo de la señal post-gadolinio (fase arterial) con rápido lavado, persistiendo un halo fino hiperintenso
con aspeco de pseudocápsula. En T1 la lesión se ve hipointensa y en T2 hiperintensa.
A izquierda: RNM en fase arterial muestra lesión con hipercaptación de contraste. A derecha: Muestra lavado en fase portal.
La ecografía abdominal tendría un rol en el tamizaje y vigilancia, en lesiones pequeñas menores a 1cm. Ésta se recomienda
cada seis meses yno cada tres puesto que aumentaría la detección de nódulos pequeños sin tener un efecto en la sobrevida.
En caso de tener el diagnóstico de CHC hecho, el PET TC ha demostrado ser el estudio con mayor sensibilidad para la
detección de metástasis distantes al tumor primario.
312
Diagnóstico
Considerando los antecedentes, clínica, laboratorio e
imágenes,se recomienda entonces hacer screening de masa
hepática en pacientes con cirrosis ó en portadores de VHB sin
cirrosiscomosemuestraenelsiguientealgoritmodiagnóstico.
Algoritmo adaptado y modificado de “Hepatocellular carcinoma”
Lancet 2012; 379.
Clásicamente el diagnóstico de certeza lo realiza la histología
obtenida con biopsia, sin embargo actualmente se puede
prescindir de ella en pacientes con DHC ó cirrosis con
imágenescompatiblesconCHC,independientedelosniveles
deAFP. VaEl valor predictivo positivo en este contexto clínico
con un estudio contrastado característico es mayor al 95%10
.
La biopsia hepática no es un procedimiento exento de riesgo
por lo que se debe reservar para casos en que exista duda
diagnóstica y se trate de lesiones mayores a 1 cm.
10 Colli A, Fraquelli M, Casazza G, et al. Accuracy of
ultrasonography, spiral CT, magnetic resonance, and alpha-
fetoprotein in diagnosing hepatocellular carcinoma: a systematic
review. Am J Gastroenterol 2006; 101:513.
< 1cm
Masa en ECO de
Control enpaciente
con cirrosis o VHB
> 1cm
( + ) ( -
)
Tratar comoCHC Biopsia
Aumento de
Tamaño
Estable en
18-24 meses
Repetir ECO
en 3 meses
Conducta
según
tamaño
Seguimiento
Hipervascularización arterialy
lavado en fase venenosa.
TAC multicorte/ RNM
313
Etapificación
En el caso de CHC, la clasificación TNM no es muy útil puesto
que requiere de cirugía para determinar exáctamente el T y
además no incluye la función hepática. Por ello se utiliza la
“Barcelona Clinic Liver Cancer (BCLC) Strategy”, sistema
que estratifica el CHC según “outcome” y simultáneamente
lo vincula con el tratamiento indicado.
Carcinoma hepatocelular
Etapamuytemprana
(0)
Lesión única <2 cm
Child A,
Performance status
(PS) 0
Etapa temprana
(A)
Lesión única ó 3
lesiones < 3 cm
Child A-B
PS 0
Etapa intermedia (B)
Lesión multinodular
grande
Child A-B
PS 0
Etapaavanzada(C)
Compromiso portal
y/o
extrahepático
Child A-B
PS 1-2
Etapa terminal (D)
Child C
Performance
status
(PS) 3-4
Candidato atrasplante
hepático
Única 3 lesiones < 3 cm
No Si
Presión portal
bilirrubina
Normal Elevada
Enfermedad
asociada
No Si
Resección Quimioembolización Sorafenib Soporte
Algoritmo adaptado y modificado de “Hepatocellular carcinoma” Lancet 2012; 379.
Ablación
Ablació
n
Trasplant
e
314
Agroso modo, si el paciente presenta un hígado sano o Child
A, lesión única, sin hipertensión portal (HTP) ysin metástasis,
éste es candidato a resección. Si presenta múltiples lesiones
ó Child B/C, se prefiere el trasplante hepático. Si la opción
recomendada por el sistema BCLC (ablación, resección,
trasplante, quimioembolización, sorafenib) no es posible por
algunacondicióndelpaciente,sedebeconsiderarlasiguiente
opción en la escala de opciones terapéuticas.
Tratamiento
EltratamientodelCHCdebeserporunequipomultidisciplinario.
La resección, trasplante y ablación ofrecen una alta tasa de
respuesta y potencial cura. Por otro lado, el único tratamiento
no curativo que mejora la sobrevida es la quimioembolización
arterial y el sorafenib; la embolización arterial sin quimio-
radioterapia y la radioembolización tienen actividad antitumoral
pero no mejoran la sobrevida.
RESECCIÓN:
TRASPLANTE:
Hepatectomía
La resección es la opción terapéutica de elección en
pacientes sin cirrosis, ni hipertensión portal (definida como
gradiente de presión de vena hepática mayor a 10mmHg
ó várices ó esplenomegalia con < 100 000 plaquetas), ni
hiperbilirrubinemia.
Estos pacientes son los mejores candidatos y tienen una
sobrevida a 5 años de 70% versus 50%11
. El tamaño no es un
factortanclarodecorte,apesardeconsiderarseenlamayoría
de algoritmos de manejo, sin embargo el riesgo de invasión
vascular y diseminación aumentan con el mayor tamaño.
De hecho, la invasión microvascular, la mala diferenciación
histológica, la multifocalidad y la presencia de lesiones satélites
son predictores de recurrencia (promedio de 70% a 5 años)12
.
11 Ishizawa T, Hasegawa K, Aoki T, et al. Neither multiple
tumors nor portal hypertension are surgical contraindications for
hepatocellular carcinoma. Gastroenterology 2008; 134: 1908-16.
12 Llovet JM, Schwartz M, Mazzaferro V. Resection and liver
transplantation for hepatocellular carcinoma. Semin Liver Dis 2005;
25: 181-200.
Eltrasplantehepáticocuraeltumorylacirrosisysuefectividad
no se ve afectada por la disfunción hepática. Existen algunos
criterios para definir los mejores candidatos a esta opción
terapéutica. Los criterios de Milán incluyen a pacientes con
un solo tumor/lesión menor o igual a 5cm ó tres tumores
menores o iguales a 3cm, sin compromiso extrahepático ni
vascular. LoscirteriosdeSanFranciscoconsideranunalesión
de hasta 6.5cm ó tres lesiones de hasta 4.5cm la mayor, cuya
sumatoria no debe ser mayor a 8cm.
En casos de que la espera para el trasplante sea mayor a seis
meses, se pueden considerar algunos métodos para retrasar
la progresión como la ablación o la quimioembolización, sin
embargo no se ha demostrado efectividad significativa.
ABLACIÓN:
Laablaciónserecomienda enetapas tempranas. Ésta induce
la necrosis del tumor al inyectar químicos (etanol, ácido acético)
ó al modificar la temperatura (por radiofreciencia, microhondas,
láserocrioablación)yensumayoríaserealizavíapercutánea.
De primera línea se utiliza la ablación por radiofrecuencia
ya que al igual que con etanol se ha visto que en tumores
menoresde2cm alcanzan hastael 100%de necrosis tumoral.
A pesar de ello, en tumores de dicha dimensión la resección
y ablación han demostrado resultados smiliares. Por lo
tanto lo que se recomienda es que si el trasplante no es una
opción, se debe utilizar la ablación. En caso de que ésta
esté contraindicada o sea fallida, se recomienda entonces
la resección. Por otro lado, si el trasplante es una opción
terapéutica, la resección debe ser la primera línea ya que el
análisis del tumor resecado permitirá distinguir entre CHC
con bajo riesgo de recurrencia que no tendría necesidad de
trasplante versus un CHC con invasión vascular o lesiones
satélites que tendría indicación de transplante.
No se recomienda la ablación en tumores mayores de 5cm
315
y hay que tener precaución con aquellos subcapsulares,
cercanos a grandes vasos ó al árbol biliar ó intestino.
TRATAMIENTO TUMORAL TRANSCATÉTER
(QUIMIOEMBOLIZACIÓN):
Consiste en la entrega intravascular selectiva de drogas
a vasos arteriales nutricios del tumor. La técnica combina
la inyección de quimioterápicos y la obstrucción del flujo.
Los mejores candidatos a esta ocpión terapéutica son los
pacientes Child A con CHC multifocal asintomáticos o CHC
grandesnocandidatosaresección. Lapresenciadetrombosis
portal es predictor de mala tolerancia y mal resultado a la
quimiembolización.
SORAFENIB:
El Sorafenib es un inhibidor multiquinasa que tiene un efecto
antiproliferativoyantiangiogénico. Eselúnicoquehaprobado
beneficio en la sobrevida de pacientes con CHC. Se puede
administrar vía oral y disminuiría la progresión en 5.5meses
en comparación a 2.8meses con placebo13
.
Pronóstico
Al momento del diagnóstico, sólo un 10-20% de los tumores
son resecables.
La sobrevida depende si reciben tratamiento o no. En el
caso de CHC no tratados, la sobrevida global a 5 años es
del 5%. En cambio en aquellos con resección exitosa tienen
sobrevida de 75-85% a 5 años14
.
La recurrencia (antes de los dos años desde la resección;
después de los dos años se debe considerar un nuevo
primario) a 5 años es de un 70% en pacientes sometidos a
resección, y 25% en pacientes con trasplante15
.
13 Llovet J, Ricci S, Mazzaferro V, et al. Sorafenib in
advanced hepatocellular carcinoma. N Engl J Med 2008; 359: 378-
90
14 Llovet JM, Schwartz M, Mazzaferro V. Resection and liver
transplantation for hepatocellular carcinoma. Semin Liver Dis 2005;
25: 181-200.
15 Forner A, Llovet JM, Bruix J. Hepatocellular carcinoma.
Lancet 2012; 379:1245-55
316
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20. Uka K, Aikata H, Takaki S, et al. Clinical features and prognosis of patients with extrahepatic metastases from hepatocellular
carcinoma. World J Gastroenterol 2007; 13:414.
317
21. Yuki K, Hirohashi S, Sakamoto M, et al. Growth and spread of hepatocellular carcinoma. A review of 240 consecutive autopsy
cases. Cancer 1990; 66:2174.
22. Colli A, Fraquelli M, Casazza G, et al. Accuracy of ultrasonography, spiral CT, magnetic resonance, and alpha-fetoprotein in
diagnosing hepatocellular carcinoma: a systematic review. Am J Gastroenterol 2006; 101:513.
23. Ishizawa T, Hasegawa K, Aoki T, et al. Neither multiple tumors nor portal hypertension are surgical contraindications for
hepatocellular carcinoma. Gastroenterology 2008; 134: 1908-16.
318
319
6.7 Pancreatitis Aguda
Ramírez J, Besser N, Fuenzalida F.
Generalidades
La pancreatitis aguda (PA) corresponde a una enfermedad
caracterizada por la inflamación aguda del páncreas debido
a la activación intrapancreática de enzimas secretadas
normalmente por este, como la tripsina. En un 80% de los
casos, la evolución de esta patología es leve y autolimitada,
pudiendo ser tratada de forma médica, mientras que el 20%
restanteesseveragenerandoaltastasasdemorbimortalidad1
.
La incidencia de la PA en Chile no ha sido determinada aún
con exactitud, pero a nivel internacional se habla de cifras
de alrededor de 4,9 a 35 casos cada 100.000 habitantes2.
Es probable que en Chile por tener una mayor prevalencia de
litiasis biliar, la causa principal de pancreatitis aguda tenga
una incidencia cercana al extremo superior del rango recién
mencionado o incluso mayor.
Si bien la mortalidad ha ido disminuyendo gracias a los
avances en las herramientas diagnósticas y terapéuticas, en
cuadros graves el pronóstico puede ser bastante sombrío. La
mortalidad general por PAes de alrededor de un 5%, pero si el
cuadroevolucionaconpancreatitisnecrotizante,lamortalidad
se eleva a un 17% o incluso 30% si la necrosis seinfecta2
.
Las causas de PA son muchas y muy variadas, como se
observa en la Tabla N.º 1.
Tabla N.º 1: etiología de la pancreatitis aguda.
Etiología (%) Otras causas (3,1%)
Posquirúrgica
Litiasis biliar (44,5).
Consumo de alcohol (16,4)
Idiopática (15,6).
Hipertrigliceridemia (14,1).
ERCP (6,3).
Fármaco
Infecciosa
Traumática
Metabólica
Obstructiva
Vascular
Autoinmune
Genética
1 Frossard JL, Steer M, Pastor C. Acutepancreatitis.
Lancet 2008; 371: 143–52.
2 Cavallini, G et al.Prospective multicentre survey on acute
pancreatitis in Italy(ProInf-AISP):results on 1005 patients. Digestive
and Liver Disease , Volume 36 , Issue 3 , 205 – 2011.
320
Fisiopatología
Elpáncreasesunaglándulamixtaquecumpleconunafunción
endocrina, secretando principalmente insulina y glucagón
desde los islotes de Langerhans al torrente sanguíneo y otra
exocrina. Como glándula exocrina, los acinos pancreáticos
tienen a cargo la producción de jugo pancreático, rico en
bicarbonato que se vierte al duodeno través del conducto
pancreático para neutralizar el pH del quimo proveniente
del estómago. También, contiene una gran variedad de
enzimas proteolíticas junto con lipasa y amilasa. Las enzimas
proteolíticas son secretadas en su forma inactiva y se activan
una vez que llegan al lumen intestinal. La principal enzima
proteolítica, el tripsinógeno, es activada por la enterocinasa,
secretadaporlamucosaintestinal.Latripsina,(formaactivada
del tripsinógeno), cataliza la activación de más tripsinógeno,
además de activar a las demás enzimas proteolíticas.
Páncreas
Enterocitos
Enteroquinasa
delorganismoalaslesionespancreáticas,atravésdetodauna
cascada de citoquinas que se manifiesta como un Síndrome
de Respuesta Inflamatoria Sistémica (SIRS). El mayor riesgo
en esta etapa es que este SIRS sea persistente, llevando a
falla orgánica de uno o más sistemas.
La fase tardía de la PA aparece por persistencia de signos
inflamatorios sistémicos o la aparición de complicaciones
locales, entonces, por definición corresponde a una etapa
de una PA moderada o severa.
Es decir, la severidad de la PAen los inicios de la enfermedad
estádada,principalmente,porlaaparición decomplicaciones
sistémicas y con posterioridad cobran más importancia el
desarrollo de complicaciones locales (a pesar de que la falla
orgánicasiguesiendoelprincipaldeterminantedeseveridad)5
.
Diagnóstico
Para el diagnóstico de pancreatitis aguda se necesita el
cumplimiento de 2 de los siguientes 3 criterios6
:
• Clínica: Dolor abdominal concordante con pancreatitis
aguda. De inicio agudo, permanente, ubicado en epigastrio
Tripsinógeno
Tripsinógeno
Tripsina
Tripsina
con irradiación frecuente hacia dorso.
Quimotripsinógeno
Proelastasa
Procarboxipéptidas AB
Profosfolipasa A2
Procolipasa
Quimotripsina
Carboxipéptidasa AB
Fosfolipasa A2
Colipasa
• Laboratorio: Elevación de la lipasa (o amilasa) por sobre
3 veces el valor normal del laboratorio.
• Imagenología: Imagen concordante con pancreatitis en
el TAC de abdomen y pelvis. Menos frecuente es el
De lo anterior se desprende la importancia de mantener
desactivadalatripsinaalinteriordelpáncreas,paraevitartoda
lacascadadeactivacióndeenzimasproteolíticasquellevarán
a la autodigestión del páncreas por su propia secreción. Para
esto, junto con la secreción de las enzimas proteolíticas, se
secreta la antitripsina, que impide la activación de la tripsina
tanto al interior de las células acinares, como en los acinos
y conductos pancreáticos3
.
Sibiensiguesiendotemadediscusión,lateoríamásaceptada
enlapatogeniadelaPAes laactivacióndelatripsinaalinterior
de las células acinares. Esta activación intrapancreática de la
tripsina lleva a la autodigestión del tejido pancreático con la
consecuente cascada de inflamación local. Posteriormente,
según la magnitud del daño acinar y del grado de inflamación
alcanzado, pueden aparecer las complicaciones locales (ver
tabla N.º 3) y las sistémicas por liberación de mediadores de
la inflamación al torrente sanguíneo4
.
En la historia natural de la enfermedad, se puede distinguir
una fase temprana y otra tardía. La fase temprana, de hasta 2
semanas de duración, es aquella que resulta de la respuesta
3 Hall J. Tratado de fisiología médica Guyton y Hall. 12.a
edición. Barcelona, España: Elsevier; 2011.
4 Frossard JL, Steer M, Pastor C. Acute pancreatitis. Lancet
2008; 371: 143–52.
diagnóstico con imágenes de RNM o ecografía abdominal.
El inicio del cuadro está definido por el comienzo del dolor y
no por el ingreso al hospital, por lo que es importante dejarlo
definido en la historia clínica.
Otras manifestaciones al examen físico, asociadas con
pancreatitis severas, incluyen los clásicos signos deCullen,
Grey-Turner y Mayo-Robson.
El signo de Cullen corresponde a la apari-ción de equímosis
periumbilical por extensión de exudados pancreáticos hacia
el ligamento falciforme. El signo de Grey-Turner es similar al
anterior, pero la extensión del exudado es hacia el ligamento
gastrohepático, por lo que la aparición de equímosis es en
el flanco.
5 Banks P,Bollen T,Dervenis C, Gooszen H, Johnson C, Sarr
M, Tsiotos G, Swaroop S. Classification of acute pancreatitis—2012:
revision of theAtlanta classification and definitions by international
consen-sus. Gut 2013;62:102–111.
6 Banks P,Bollen T,Dervenis C, Gooszen H, Johnson C, Sarr
M, Tsiotos G, Swaroop S. Classification of acute pancreatitis—2012:
revision of theAtlanta classification and definitions by international
consen-sus. Gut 2013;62:102–111.
321
ElsignodeMayo-Robson,porotraparte,correspondealdolor
a la palpación en el ángulo costolumbar izquierdo7
.
Las imágenes como TAC de abdomen y pelvis deben ser
reservadasparacuadrosdealtasospechaclínicaconenzimas
pancreáticas normales o pacientes con pancreatitis aguda
grave, luego de 48-72 horas de iniciado el cuadro8
.
Clasificación
Las principales formas de clasificación de la PA se muestran
en la tabla N.º 2. Una correcta identificación y categorización
de la PA son fundamentales para establecer el pronóstico y
manejo del cuadro en curso.
Etiología Tipo Severidad
Litiásica
Edematosa intersticial
Necrotizante
Necrótica infectada
Leve
Moderada
Severa
Alcohólica
Secundaria a hipertrigli-
ceridemia
Pos-ERCP
Idiopática
Otros (ver tabla N.º 1)
Tabla N.º 2: clasificación de la pancreatitis aguda.
Tipos de pancreatitis aguda
1. Pancreatitis edematosa intersticial
Correspondeaunaumentodetamañodifuso(uocasionalmente
localizado)delpáncreasdebidoaedema.Ensugranmayoría,
evoluciona como una pancreatitis leve, con resolución de
los síntomas durante la primera semana. En la TC se ve un
realce homogéneo del parénquima pancreático al contraste,
con algunos cambios inflamatorios del tejido peripancreático,
pudiendo haber también un poco de líquido a su alrededor.
Pancreatitis difusa
7 Farouk M, Maja C. Cullen’s and Turner’s Signs. N Engl J
Med 2005; 353:1386. September 29, 2005.
8 Tenner S, Baillie J, DeWitt J and Swaroop S. American
College of Gastroenterology Guideline: Man-agement of Acute
Pancreatitis. Am J Gastroenterol advance online publication, 30
July 2013.
322
2. Pancreatitis necrotizante
Hay necrosis del parénquima pancreático o tejido
peripancreático. Ocurre en 5-10% de los pacientes con PA y
generalmente involucra tanto al parénquima como al tejido
peripancreático, siendo menos comunes el compromiso de
estos por separado.
Al TC se observa como áreas hipocaptantes de contraste. Un
TC demasiado precoz puede subestimar la extensión de la
necrosis, ya que las alteraciones en la perfusión pancreática
y los signos de necrosis evolucionan durante varios días, por
lo que no se recomienda su realización signos de necrosis
evolucionan durante varios días, por lo que no se recomienda
su realización antes de 48-72 horas de iniciado elcuadro9
.
3. Pancreatitis necrótica infectada
Ocurre infección del tejido necrótico, aumentando la morbilidad
y mortalidad del cuadro10
. El tiempo de evolución se relaciona
con el riesgo de infección, siendo más frecuentes las
infecciones pasada la primera semana11
. La importancia del
diagnóstico de necrosis infectada radica en la necesidad de
administrar antibióticos y ocasionalmente de intervenir en
forma activa.
En la TC se puede sospechar infección ante la aparición de
gas extraluminal en el tejido pancreático o peripancreático.
También,se puede realizar una punción guiada por imágenes
para realizar un Gram y cultivo a la muestra aspirada y así
confirmar la sospecha de infección.
Gravedad
Una vez hecho el diagnóstico de pancreatitis aguda, se
debe establecer la gravedad de esta para estimar el
riesgo y la necesidad de hospitalización en unidades de
cuidados avanzados. Para esto, se han establecido diversas
clasificaciones, dentro de las más utilizadas seencuentran.
APACHE II
Utilizado ampliamente en nuestro medio, permite la evaluación
diaria del paciente. Su complejidad radica en el número de
exámenes que se deben realizar para poder calcularlo. Un
puntaje >8 define a un pancreatitis aguda como grave.
9 J. L. del Cura, S. Pedraza, A. Gayete.Radiología
esencial, 1.a edición (2010).
10 Petrov MS, Shanbhag S, Chakraborty M, et al. Organ
failure and infection of pancreatic necrosis as determinants of
mortality in patients with acute pancreatitis. Gastroenterology
2010;139:813–20.
11 Besselink MG, van Santvoort HC, Boermeester MA, et al.
Timing and impact of infections in acute pan-creatitis. Br J Surg
2009;96:267–73.
323
Imagen 1: TAC abdomen y pelvis con contraste. (a) corte axial (b) corte coronal. Se observa un páncreas aumentado de
tamaño con compromiso inflamatorio de la grasa peripancreática. El páncreas capta medio de contraste homogeneamente.
Compatible con pancreatitis edematosa.
Imagen 2: TAC abdomen y pelvis corte axial. Se observa páncreas aumentado de tamaño con áreas no captadoras de
contraste, compatibles con necrosis pancreática.
324
Apache II
APS 4 3 2 1 0 1 2 3 4
Tº rectal >40,9 39-40,9 38,5-38,9 36-38,4 34-35,9 32-33,9 30-31,9 <30
PAM >159 130-159 110-129 70-109 50-69 <50
Frecuencia
cardiaca
>179 140-179 110-129 70-109 55-69 40-54 <40
Frecuencia
respiratoria
>49 35-49 25-34 12-24 10-11 6-9 <6
Si FiO2 >
0,5
>499 350-499 200-349 <200
Si FiO2 <
0,5
>70 61-70 56-60 <56
pH arterial > 7,69 7,60-7,69 7,50-7,59 7,33-7,49 7,25-7,32 7,15-7,24 <7,15
Na plasm.
(mmol/l)
>179 160-179 155-159 150-154 130-149 120-129 111-119 <111
325
K plasm.
(mmol/l)
>6,9 6,0-6,9 5,5-5,9 3,5-5,4 3,0-3,4 2,5-2,9 <2,5
Creatinina
(mg/dl)
>3,4 2-3,4 1,5-1,9 0,6-1,4 <0,6
Hcto (%) >59,9 50-59,9 46-49,9 30-45,9 20-29,9 <20
Leucocitos
(x1,000)
>39,9 20-39,9 15-19,9 3-14,9 1-2,9 <1
SUMA DE PUNTOS APS
Total APS
15- GCS
Edad Puntuación
< 44 0
45-54 2
55-64 3 Enfermedad Crónica Puntos
APS
Puntos
GCS
Puntos
edad
Puntos
Enfermedad
65-74 5 Posoperatorio
programado
2
> 75 6 Posoperatorio urgente
o médico
5 Total
Puntos
326
Score de Marshall
Lafallaorgánicapersistente,es decir,aquellaquepermanece
después de las 48 horas de iniciado elcuadro, es elfactor más
importante para determinar la gravedad de un paciente. Para
esto se utiliza el score de Marshall, en que con un puntaje >
2 define falla orgánica.
Sistema
Puntaje
0 1 2 3 4
Respiratorio
(PaO2/FiO2)
>400 301-400 201-300 101-200 <101
Renal
(creatinina)
<134 134-169 170-310 311-439 >439
Cardiovascular
(presión
sistólica)
>90 <90
(responde a
fluidos)
<90 (no
responde a
fluidos)
<90 conpH
<7,3
<90 conpH
<7,2
Puntaje > 2 en cualquier sistema se define como falla orgánica
Severidaddelapancreatitisaguda(revisióndelaclasificación
de Atlanta 2012)12
1. Pancreatitis aguda leve
Es la forma más frecuente. No presenta falla orgánica ni
complicaciones locales o sistémicas. Normalmente, se
resuelve en la primera semana.
2. Pancreatitis aguda moderada
Cursa con falla orgánica transitoria (<48 horas), complicaciones
localesosistémicas(exacerbacióndeenfermedadpreexistente
como enfermedad coronaria, pulmonar, etc.).
3. Pancreatitis aguda severa
Se define por la presencia de falla orgánica persistente (>48
horas).
12 Banks P,BollenT,Dervenis C,Gooszen H,Johnson C,Sarr
M, Tsiotos G, Swaroop S. Classification of acute pancreatitis—2012:
revision of the Atlanta classification and definitions by international
consensus. Gut 2013;62:102–111.
Complicaciones locales de la pancreatitis aguda
Deben sospecharse cuando el dolor abdominal persiste, si
apareceunasegundaelevacióndelasenzimaspancreáticas,
disfunción orgánica progresiva o la aparición de síntomas
que orienten a sepsis (como fiebre y leucocitosis). Ante
la sospecha de una complicación local, se debe evaluar
con TC para determinar si es de localización pancreática o
peripancreática, si corresponde a sólido, líquido o gas, de
haber pared, el grosor de esta y la calidad de la perfusión
del parénquima.
Las complicaciones locales de la PA son lesiones evolutivas
que, generalmente después de las 4 semanas, desarrollan
pared.EnlaTablaN.º3semuestranlasdistintascomplicaciones
locales de la PA.
1. < 4 semanas de evolución: colecciones sin pared
○ Colección líquida peripancreáticaaguda
Es una o varias colecciones líquidas alrededor del páncreas
(con indemnidad de este), de densidad homogénea, confinada
a los planos normales de fascia que rodean al páncreas, que
ocurre en el contexto de una PA edematosa intersticial.
○ Colección necrótica aguda
La colección necrótica aguda, a diferencia de la líquida, es
heterogénea con cantidades variables de líquido y necrosis
que afectan al tejido pancreático o peripancreático. Aparece
327
en el contexto de una PAnecrotizante y en un principio puede
verse como una colección homogénea si el TC se realiza
antes de que los cambios necróticos se hayanestablecido.
2. > 4 semanas de evolución: colecciones con pared
○ Pseudoquiste
Correspondeaunacolecciónlíquidahomogénea,conmínima
necrosis(oausenciadeesta),queseencuentracompletamente
encapsulada por una pared bien definida, normalmente fuera
del páncreas. Se le conoce como pseudoquiste, puesto que
esta pared no es epitelio (como en los quistes verdaderos),
sino que es una pared de tejido reactivo inflamatorio.
Son extremadamente poco frecuentes y se forman a partir de
una colección líquida peripancreática aguda que persiste tras
4 semanas o cuando tras remover una colección necrótica
persiste una filtración de jugo pancreático hacia la cavidad
de la necrosectomía.
Colección Sin pared (<4 semanas) Encapsulada (>4 semanas)
Líquida Colección líquida pancreática
aguda.
Pseudoquiste
Líquida y sólida (necrosis). Colección necróticaaguda. Necrosis encapsulada (WON;
walled-off necrosis).
Tabla N.º 3: complicaciones locales de la pancreatitis aguda.
328
Pseudoquiste pancreático
329
Imagen 3
TAC abdomen y pelvis. Se evidencia colección pancreática con
paredes bien definidas, compatibles con pseudoquiste pancreático.
○ Necrosis encapsulada
Es una colección heterogénea de líquido y necrosis, con
gradosdiversosdeloculaciones.Tieneunaparedquelorodea
completamenteypuedesertantointracomoextrapancreático.
Unanecrosis encapsuladapuedeser únicaomúltiple ypuede
formarse, incluso en lugares alejados del páncreas. Al igual
quelacolecciónnecróticaaguda,presentariesgodeinfección.
Otrosnombresquesehanusadoparadescribirestacolección
sonnecrosispancreáticaorganizada,pseudoquisteasociado
a necrosis, secuestro pancreático, necroma o necrosis
pancreática subaguda.
3. Necrosis infectada
Su aparición es de gran importancia, ya que es la principal
causa de mortalidad y morbilidad en la PA. El riesgo de
infección de una colección necrótica está directamente
relacionadoalaextensióndeesta,siendodeaproximadamente
20% si compromete menos de ⅓ del páncreas y llegando a
casi 50% si afecta a más de ⅔ de este. El origen de es-ta
infección es principalmente la traslocación bacteriana de la
flora gastrointestinal, por lo que los gérmenes más comunes
son los gram negativos (E. coli, Klebsiella y Pseudomonas) y
Enterococcus. Otra vía descrita para la llegada de patógenos
es la invasión del paciente (sondas, catéteres infectados,
etc.), por lo que otros microorganismos (Staphilococcus y
Streptococcus) también son posibles agentes causales.
Clínicamente, se puede sospechar por fiebre prolongada,
leucocitosisodeterioroclínicoprogresivo.EnTC,lapresencia
de gas en la colección es patognomónica y confirma el
diagnóstico. Como lo anterior es un hallazgo raro, ante la
sospecha de infección de una colección necrótica se debe
realizar una aspiración por aguja fina para aislar el germen
causal.
Tratamiento
El tratamiento de la PAse puede dividir en 2 componentes: 1)
elmanejodela pancreatitis propiamentetal y2) el tratamiento
etiológico (principalmente para la pancreatitis litiásica). El
mane-jodelapancreatitis es esencialmente médico,amenos
que se presente alguna complicación. Ante la sospecha de
PA, lo primero es siempre hospitalizar al paciente para un
correcto monitoreo de su condición. En las formas leves de
la enfermedad, el tratamiento es principalmente de soporte,
consistiendo en aporte de fluidos, cese de la alimentación
vía oral, manejo del dolor, oxigenoterapia y antieméticos.
En casos moderados y severos, se deberá hospitalizar en
una unidad de paciente crítico, así como también a aquellos
pacientes con comorbilidades graves13
.
Nutrición
PacientesconPAleve,generalmentenonecesitanningúntipo
de soporte nutricional y pueden mantenerse únicamente con
hidratación endovenosa, ya que en general pueden retomar
la vía oral de alimentación durante la primera semana. Las
condiciones de realimentación en estos pacientes son la
ausencia de íleo, náuseas, vómitos, dolor y la mejoría de los
parámetros inflamatorios. Lo anterior ocurre generalmente a
las24-48horasdeiniciadoelcuadro,traslocualserealimenta
evitando comidas ricas en grasas o proteínas, para evitar la
estimulación del páncreas14
.
13 Frossard JL, Steer M, Pastor C. Acute pancreatitis. Lancet
2008; 371: 143–52.
14 Working Group IAP/APA Acute Pancreatitis Guidelines.
IAP/APA evidence-based guidelines for the management of acute
pancreatitis. Pancreatology. 2013 Jul-Aug;13(4 Suppl 2):e1-15. doi:
10.1016/j.pan.2013.07.063.
330
En los casos moderados y severos, la realimentación vía
oral no logra ser tolerada durante la primera semana, por lo
que normalmente se requiere el uso de nutrición enteral o
incluso parenteral. La vía de nutrición aún sigue siendo objeto
de debate, dado que se ha visto que la nutrición parenteral
se asocia a atrofia de la mucosa intestinal, aumento en la
translocación bacteriana desde los intestinos y aumento en la
respuesta proinflamatoria. Si bien el uso de nutrición enteral
(nasoyeyunal) no ha demostrado reducir sustancialmente la
mortalidad, si ha probado reducir el número de infecciones,
intervenciones quirúrgicas y días de hospitalización15
.
Si bien al parecer no habría diferencias significativas entre la
nutrición nasogástrica y nasoyeyunal, aún se necesitan más
estudios que evidencien la seguridad de la primera, por lo
que la recomendación general es utilizar una sonda que se
ubique posterior al ángulo de Treitz16
.
Necrosis
Ante la aparición de necrosis, no se recomienda la cirugía, ya
que de ser una necrosis estéril, el desbridamiento o drenaje
aumenta el riesgo de infección de los tejidos. En estos casos
en que hay ausencia de infección, la mortalidad es baja y,
por tanto, el enfoque debe ser conservador, pudiendo eso
sí, llegar a ser necesaria una intervención quirúrgica para el
manejo de complicaciones tardías.
Profilaxis antibiótica
El uso de profilaxis antibiótica en contexto necrosis pancreática
ha sido tema de gran debate. En la revisión Cochrane
2014 “Antibiotic therapy for prophylaxis against infection
of pancreatic necrosis in acute pancreatitis” de Villatorio E.
se establece que no existe una diferencia estadísticamente
significativa en el uso de profilaxis al comparar mortalidad,
infección de necrosis ni necesidad de cirugía. Si existe una
menor tasa de infecciones extrapancreáticas en pacientecon
uso de profilaxis. En centros donde se utiliza profilaxis, esta
seindicacuandolanecrosiscompromete>30%delpáncreas.
Antibióticos con buena concentración plasmática:
• Imipenem/Meropenem.
• Cefalosporinas.
• Metronidazol.
• Clindamicina.
• Fluoroquinolonas.
Necrosis infectada
Ante necrosis infectada se debe iniciar terapia ATB vía
EV. Se recomienda el uso de carbapenémicos (imipenem
o meropenem endovenoso por 14 días) por su cobertura
y penetración al tejido pancreático. Otras alternativas
son quinolonas, metronidazol, cefalosporinas de tercera
generación y piperaciclina.
Paraeltratamientodefinitivosecuentacondiversasopciones,
desdeelenfoquetradicionalmediantenecrosectomíaabierta,
hasta técnicas mínimamente invasivas como el drenaje
percutáneo.
La necrosectomía clásica es altamente invasiva y se hace
mediante una incisión subcostal bilateral 2 a través de
la cual se realiza el desbridamiento del tejido necrótico.
Una necrosectomía abierta se asocia a altas tasas de
complicaciones y una mortalidad de alrededor de un 30%,
además de tener el riesgo de insuficiencia pancreática a
largo plazo17
.
Un enfoque mínimamente invasivo (drenaje percutáneo,
drenaje endoscópico transgástrico y necrosectomía
retroperitoneal mínimamente invasiva), ha demostrado
reducir la tasa de complicaciones y mortalidad, así como
tambiénlascomplicacionesalargoplazocomolainsuficiencia
pancreática.
Este enfoque mínimamente invasivo tiene como finalidad
controlar elfocoinfeccioso,másquelacompletaremocióndel
tejido necrótico, por lo que la primera conducta consiste en el
drenaje percutáneo o endoscópico de la colección necrótica
infectada para mitigar la sepsis y así posponer o incluso
obviar la necrosectomía. Si tras el drenaje no se logra mejoría
en el estado del paciente, se procede a la necrosectomía
retroperitoneal mínimamente invasiva. Mediante esta
estrategia se logra reducir el trauma quirúrgico que significa
una laparotomía, disminuyendo el daño tisular, la respuesta
sistémica proinflamatoria y las posteriores complicaciones,
llevando a una mejor evolución del paciente18
.
15 Marik PE, Zaloga GP. Meta-analysis of parenteral nutrition
versus enteral nutrition in patients with acute pancreatitis. BMJ
2004;328: 1407–12.
16 Singh N, Sharma B, Sharma M, Sachdev V, Bhardwaj P,
Mani K, Joshi YK, Saraya A. Evaluation of early enteral feeding
through nasogastric and nasojejunal tube in severe acute
pancreatitis: a noninfe-riority randomized controlled trial. Pancreas.
2012 Jan;41(1):153-9.
17 Besselink MG, Verwer TJ, Schoenmaeckers EJ, et al:
Timing of surgical intervention in necrotizing pancreatitis. Arch Surg
142:1194–1201, 2007.
18 Van Santvoort HC, Besselink MG, Bakker OJ, et al. A
step-up approach or open necrosectomy for necrotizing pancreatitis
(PANTER trial). N Engl J Med 2010;362:1491–502.
331
ERCP en pancreatitis aguda litiásica
El uso de ERCP más papilotomía como método de
descompresión de la vía biliar en contexto de pancreatitis
aguda litiásica ha demostrado beneficios estadísticamente
significativos solo en la disminución de la morbilidad en
cuadros de pancreatitis agudas graves de <72 horas de
evolución.
No se ha demostrado beneficios sobre la mortalidad ni en
pancreatitis aguda leve-moderada19
.
19 Ayub K, Slavin J, Imada R. Endoscopic Retrograde
Cholangiopancreatography in Gallstone-Associated acute
Pancreatitis. Cochrane Database of Systematic Reviews. Issue 11,
2014.
332
Bibliografía
1. Frossard JL, Steer M, Pastor C. Acute pancreatitis. Lancet 2008; 371: 143–52.
2. Hall J. Tratado de fisiología médica Guyton y Hall. 12.a edición. Elsevier, 2012.
3. Courtney T, Beauchamp D, Evers M, Mattox K. Sabiston: tratado de cirugía.19.a ed. Elservi-er; 2013.
4. Banks P,Bollen T, Dervenis C, Gooszen H, Johnson C, Sarr M, Tsiotos G, Swaroop S. Classification of acute pancreatitis—2012:
revision of the Atlanta classification and defini-tions by international consensus. Gut 2013; 62:102–111.
5. Tenner S, Baillie J, DeWitt J and Swaroop S. American College of Gastroenterology Guide-line: Management of Acute Pancreatitis.
Am J Gastroenterol advance online publication, 30 July 2013.
6. J. L. del Cura, S. Pedraza, A. Gayete. Radiología esencial, 1.a edición (2010).
333
6.8 TumorPeriampular
Quinteros JP, Arteaga MJ, González J.
Definición
Lostumoresperiampularessontumoresqueestánenrelación
con la ampolla de Vater. Estos pueden ser de: cabeza del
páncreas, vía biliar distal, duodeno y ampolla de Vater.
También existen otros tumores menos comunes: como
tumores neuroendocrinos, cistoadenocarcinoma pancreático,
carcinomas escamoso y acinar, tumores gastrointestinales
estromales (GITS) sarcomas, linfomas y metástasis. Aun
cuando su origen es diverso, estos se agrupan debido a su
relación y cercanía anatómica, clínica común y tratamiento
quirúrgico, que es la pancreatoduodenectomía cuando esta
es posible. Su diagnóstico precoz es difícil debido a la escasa
sintomatología que presentan hasta etapas avanzadas de la
enfermedad.
334
Epidemiología
Lostumoresperiampulares sondebajafrecuenciaennuestro
país con una tasa de mortalidad entre 4-6/100.000 durante
los últimos 10 años1
. En Estados Unidos, este tipo de cáncer
ha ido en aumento y en la actualidad tiene una incidencia de
aproximadamente 60.000 casos nuevos cada año. Representa
el 2% de las neoplasias.
Es discretamente más frecuente en hombres que en mujeres.
En general, se presenta entre la sexta y séptima etapa de
la vida2
.
Su localización más frecuente es en la cabeza del páncreas
(85%), lo que explica el mal pronóstico de esta neoplasia en
la mayoría de los casos.
1 Norero E., Viñuela E., Báez S., Martínez C., Reyes J., Kusanovic
R., et al. Resultados actuales de la pancreatoduodenectomía para
el tratamiento de los tumores periampulares y análisis de factores
pronósticos de sobrevida. Revista médica de Chile. 2011;139
(8):1015–24.
2 Deichler F., Fuentes M.,Cárcamo C., et al.Tumores
periampulares:Hallazgos y resultados en 21 casos consecutivos
resecados. Cuad.cir(Valdivia). 2006;20(1):21-7.
Tumorperiampular
335
Clasificación Clínica
Adenocarcinoma ductal de páncreas
• Causa más frecuente de tumor periampular.
• 4.a causa de muerte en EE.UU. y 8.a en el mundo por
cáncer.
• 9.a causa de muerte a nivel nacional.
• Más frecuente en hombres que mujeres (3:1)
• Sobrevida a 5 años de menos del 5%.
• Factores de riesgo: tabaco, obesidad, pancreatitis crónica,
DM , raza negra, síndromes genéticos asociados a
neoplasias.
Adenocarcinoma ductal biliar distal (Colangiocarcinoma)
• Segunda causa más frecuente de tumor periampular.
• Incidencia: 1-2/100.000 en EE.UU.
• Peak de incidencia en la 7.a década.
• Factores de riesgo: colangitis esclerosante, quistes
coledocianos, litiasis intrahepática y fasciolasis
hepática.
• Sobrevida a 5 años 20-40% con tratamiento quirúrgico.
Adenocarcinoma de la ampolla de Vater
• Tercera causa más común de tumor periampular.
• Incidencia: menos de 1/100.000 en EE.UU., con un
peak en la 7.a década.
• Se descubren cuando aún son pequeñas debido a que
causan ictericia precoz.
• Tiene menos agresividad biológica que el
adenocarcinoma de páncreas y el colangiocarcinoma.
• Sobrevida a 5 años 35-55% con tratamiento quirúrgico.
Adenocarcinoma duodenal
• Representa solo el 5% de los tumores periampulares.
• Igual prevalencia en hombres y mujeres.
• Peak incidencia en la 7.a década.
• Tienen crecimiento intraluminal, lo que significa que
pueden tener gran tamaño al momento deldiagnóstico.
• Tienen el comportamiento biológico más favorable
de los tumores periampulares, con una sobrevida a 5
años de 40-60% con tratamiento quirúrgico.
La sospecha precoz es necesaria para realizar un
diagnósticooportuno,porquelospacientespresentanescasa
sintomatología hasta etapas avanzadas de la enfermedad.
Debería sospecharse en: pacientes con diabetes de inicio
atípico, o que se hagan insulinorrequirientes, o que requieran
mayor dosis de insulina, en pacientes de difícil manejo
metabólico; también en pacientes con pancreatitis de causa
no precisada, en todos ellos se sugiere estudio con TAC o
RMN.
Síntomas:
• Ictericia: es el síntoma cardinal de esta patología, con
un patrón obstructivo, silente y progresivo.
- Prurito: secundario al depósito de sales biliares en la piel.
- Coluria.
- Acolia.
- Escleras ictéricas.
• Síndrome consuntivo:
o Anorexia.
o Baja de peso.
• Dolor: aunque no es común, varios pacientes refieren
algún tipo de molestia. Es epigástrico, constante y
generalmente se irradia al dorso. Puede haber dolor
lumbar severo en caso de infiltración al plexo celíaco,
lo que constituye un síntoma ominoso (mal pronóstico).
• Insuficiencia pancreática:
o Disconfort abdominal, dispepsia y esteatorrea.
o Diabetes de comienzo reciente.
• Hemorragia digestiva en pacientes con adenocarcinoma
ampular o duodenal ulcerados.
Signos
• Signos de metástasis:
-Ganglio de Virchow: supraclavicular izquierdo.
-Nódulo de la hermana María José: periumbilical
(carcinomatosis).
-Ganglios pélvicos palpables.
336
• Manifestaciones de obstrucción biliar distal:
-Hepatomegalia.
-Signo de Courvoisier terrier: ictericia con vesícula (masa)
palpable e indolora.
• Ascitis: signo de diseminación peritoneal (ascitis
carcinomatosa).
Laboratorio
Hemograma
• Anemia.
Pruebas hepáticas alteradas: patrón obstructivo.
• Hiperbilirrubinemia de predominio directo.
• Elevación de fosfatasas alcalinas sobre transaminasas.
• Elevación de GGT.
Tiempo de protrombina prolongado.
Perfil bioquímico:
• Hipoalbuminemia:esimportantetenerencuentaelestado
nutricional del paciente previo a intervención quirúrgica
(aumento de la morbimortalidad).
Marcadores tumorales:
• CA19-9: está elevado frecuentemente, pero tiene
sensibilidad (79%) y especificidad (82%) limitada, sin
embargo, sigue siendo el marcador más confiable para
evaluaciónpre,posoperatoriayparaelseguimiento,pues
su elevación puede significar recidiva tumoral:
• CEA.
• α feto proteína.
Imágenes
Son fundamentales en el estudio de los tumores periampulares
para conocer la extensión de la enfermedad, etapificación
(uTNM) y objetivar la posibilidad de resección del tumor
(resecabilidad) .
Ecotomografía abdominal (US): es la primera aproximación a
un paciente con sospecha de cáncer periampular, dado que
el síntoma cardinal es la ictericia. Esta técnica imagenológica
permite descartar otras patologías que causan ictericia tal
como la colelitiasis, sospechar coledocolitiasis por dilatación
de la vía biliar.
Tomografíacomputada (TC): tiene una sensibilidad del 91% y
especificidadde85%,porloqueesunaexcelenteherramienta
tantoparaeldiagnósticocomoparalaetapificacióndetumores
periampulares. Permite conocer la relación del tumor con
la arteria mesentérica superior (AMS), la confluencia de la
vena mesentérica superior (VMS) con la vena porta, (eje
esplenoportal) y tronco celíaco, así como mostrar metástasis
extrapancreáticas. Se prefiere el uso del protocolo pancreático
para la realización del examen. La TC permite clasificar a los
pacientes en categorías para llevar a cabo el tratamiento:
resecable, borderline, localmente avanzado ymetastásico.
RNM: tiene una sensibilidad de 84% y una especificidad del
78%, por lo que su uso no es mejor que la TC. Se recomienda
para pacientes con sensibilidad al contraste endovenoso o
con problemas renales y también cuando en la TC hay dudas
diagnósticas.
Endosnografía: es un método operador dependiente, por
lo que su sensibilidad puede variar entre 69-94%. Se ha
reportado que tienen superioridad para lesiones de menos
de 2 cm, por lo que es útil cuando hay sospecha de tumor
periampular, pero no se observa lesión con otros métodos
imagenológicos o hay duda. También se ha observado que
tiene superioridad sobre la TC para detectar invasión venosa,
peronoasíarterial.Otradesusventajas es quepermitetomar
biopsia con aguja fina, lo que podría ser útil en pacientes con
tumores noresecables al momento de planear quimioterapia.
Es el mejor método para evaluar el T (tamaño e infiltración
del tumor) y el N local, la desventaja es que en nuestro medio
es caro y se realiza en pocos lugares.
Tomografía con emisión de positrones (PET): técnica de
imagenología funcional (PET) y anatómica (CT) que se basa
en la acelerada captación de glucosa por parte de las células
neoplásicas. Se utiliza un radioisótopo (18-flourodeoxiglucosa),
que se acumula en las células tumorales. Permite evaluar
el tumor y metástasis a distancia. Su uso es limitado aún
debido a que pueden producirse posibles confusiones con
procesos inflamatorios e infecciosos, además es costoso,por
lo que se recomienda su uso cuando hay duda diagnóstica
en imágenes habituales.
Colangiopancreatografía endoscópica retrógrada (CPER):
antiguamente era común su uso para el diagnóstico de los
tumores periampulares, pero con el avance de las técnicas
imagenológicas su uso actualmente no tiene respaldo. El uso
de CPER queda reservado para procedimientos donde tiene
utilidad terapéutica: colangitis, instalación de endoprótesis,
hiperbilissobre25y/oalteraciónseveradelafunciónhepática.
337
Tratamiento
El único tratamiento que ofrece potencial curativo para
los tumores periampulares es la pancratoduodenectomía
(operacióndeWhipple).Tieneunamortalidaddel2%encentro
conaltoflujodepacientes,lacualaumentaencentrosdepoca
experiencia. También es necesario tener en consideración
su alta morbilidad, entre 30-50%. Por esto es necesario
evaluar y etapificar correctamente a los pacientes, dado que
la pancreatoduodenectomía solo se debería llevar a cabo
en pacientes donde se tiene altas expectativas de remover
por completo el tumor. Es necesario considerar que del total
de pacientes diagnosticados con cáncer de páncreas, solo
el 20-30% es candidato a tratamiento quirúrgico con una
sobrevida global de 20% a 5 años.
Criterios de irresecabilidad:
• Compromiso de más de 180º de tronco celíaco, arteria
hepática común o arteria mesentérica superior.
• Aumentodetamaño de linfonodos fuera de losmárgenes
de resección.
• Ascitis.
• Metástasis a distancia (recomedable con biopsia).
Criterios de tumor Borderline:
• Compromiso de menos de 180º de tronco celíaco, arteria
hepática común o arteria mesentérica superior.
• Segmento venoso corto comprometido.
• Lesiones hepáticas de menos de1mm.
• Pacientes con comorbilidades.
Técnica quirúrgica: consiste en una resección en bloque de
la cabeza del páncreas, parte distal del colédoco,duodeno,
yeyuno y antro gástrico. La resección del antro gástrico no
siempre es realizada, depende del grado de compromiso
del tumor y la preferencia del cirujano. La reconstrucción
incluye anastomosis pancreatogástrica o pancreatoyeyunal,
anastomosis colédocoyeyunal (biliodigestiva) y anastomosis
gatroyeyunal o duodenoyeyunal.
338
Hallazgos operatorios:
HALLAZGOS QUE CONTRADICEN RESECCIÓN
Metástasis hepáticas (cualquier tamaño) se sugiere biopsia.
Compromiso de linfonodo celíaco.
Implantes peritoneales.
Compromiso de linfonodo hepático hiliar.
HALLAZGOS QUE NO CONTRAINDICAN RESECCIÓN
Invasión a duodeno o estómago distal.
Compromiso de linfonodos peripancreaticos.
Compromiso de linfonodos alrededor de la vena hepática resecables.
Resultados: en los pacientes con tumor pancreático, la
sobrevida con tratamiento quirúrgico es del 17% a 5 años
y de 9% a 10 años. En los otros tumores, la sobrevida es
mayor siendo el adenocarcinoma el tumor con la mejor
sobrevida a 5 años. Aun así, se sabe que el 80% de los
tumores recurre poscirugía, por lo que se debe plantear el
tratamiento adyuvante.
Terapia adyuvante: tomando en cuenta los estudios realizados,
se ha demostrado los beneficios del uso de terapia adyuvante
para mejorar la sobrevida del cáncer pancreático. Todavía
existecontroversiasobreelrégimenmás adecuadodequimio
o quimiorradioterapia. El régimen común de quimioterapia
es gemcitabina con erlotinib. Al agregar radioterapia se usa
capecitabina o 5-Fluoracino en infusión.
Complicaciones
Las complicaciones más frecuentes son:
• Retencióngástrica(15-40%):sedefinecomolaincapacidad
de volver a régimen normal al final de la primera semana
posoperatoria. Se clasifica según la tolerancia asólidos
durantelosdías7,14o21posoperatoriooelusodesonda
nasogástrica posoperatoria. Es necesario diferenciar
la retención gástrica de otras causas de obstrucción
mecánica.
• Fístula pancreática (10-20%): se define como presencia
de amilasa en cantidades 3 veces superior a la sérica en
los drenajes posoperatorios el tercer díaposoperatorio.
• Absceso intraabdominal (8-10%).
• Hemorragiaposoperatoria(1-8%):estaseclasificasegún
inicio (antes o después de 24 horas posoperatorio),
ubicación (intra o extraluminal), y severidad (alta o baja).
Otras complicaciones: infección de la herida, hemoperitoneo,
neumonía, sepsis CVC, evisceración, pancreatitis
posoperatoria, fístula biliar, absceso hepático, fístula quilosa.
339
Bibliografía
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340
341
Coloproctología
342
343
7.1 AnatomíaIntestinoGrueso
Ramírez J, Valdés F.
El intestino grueso está compuesto por el apéndice, ciego,
colon,rectoyconductoanal.Essitiodeintercambiodelíquidos,
electrolitos y ácidos grasos de cadena corta, determinando
así la solidez de las deposiciones y sirviendo como lugar de
almacenamiento de estas.
Segmentos delColon
344
Apéndice
Elapéndiceesundivertículoquenacedelacaraposterolareal
del ciego, mide aproximadamente 6-10 cm y tiene un
componentelinfoideporloqueactualmentesereconocecomo
un órgano inmunológico secretor de IgA (principalmente). La
hiperplasia de este último es uno de los factores que puede
obstruir el lumen del apéndice y provocar una apendicitis
aguda.
Su irrigación proviene de la arteria apendicular, rama de la
arteria ileocólica, que discurre a través del mesoapéndice.
El drenaje venoso se realiza por la vena ileocólica, tributaria
de la vena mesentérica inferior. El mesoapendicular, por su
parte, nace del meso del íleon terminal.
Ciego
El ciego es la porción de intestino grueso que se relaciona
con el íleon distal. Este último se abre al ciego por su cara
medial posterior, formando una invaginación con forma de
papila, llamada válvula ileocecal, cuya función es limitar el
contenido intestinal que ingresa al colon y evitar el reflujo.
En su cara posterolateral del extremo distal nace el apéndice
vermiforme. Por lo general, el ciego puede movilizarse, pero
no posee meso propio. Su irrigación proviene de la arteria
ileocólica, rama terminal de la arteria mesentéricasuperior.
arteria cólica izquierda y el colon sigmoides por la arteria
sigmoidea, que son ramas de la arteria mesentérica inferior.
Entre estas arterias existen anastomosis, con lo que se forma
la arteria marginal que discurre paralela al colon.
El drenaje venoso, por su parte, se realiza por las venas
ileocólicas y la vena cólica derecha, ramas de la vena
mesentérica inferior, para el colon ascendente. La vena
intermedia drena el colon transverso y drena también a la
vena mesentérica inferior. Por último, el drenaje venoso del
colon descendente y sigmoides se realiza mediante la vena
mesentérica inferior.
Colon
El colon se divide en colon ascendente, colon transverso,
colondescendente ysigmoides,conuna longitudaproximada
de 1 metro.
El colon ascendente y descendente se encuentran
retroperitoneales, mientras que el transverso y elsigmoides
son órganos peritoneales, adheridos a la pared posterior
por su meso. Existen dos flexuras: la flexura hepática, que
separa colon ascendente de transverso y flexura esplénica,
que separa colon transverso y descendente.
El colon posee tenias, que corresponden a fibras
musculares longitudinales engrosadas de 6 mm de ancho
aproximadamente. Cada tenia posee un nombre respecto
a sus relaciones, así la tenia mesocólica corresponde a la
que se relaciona con el mesocolon, tenia omental la que lo
hace con el omento mayor y la tenia libre, aquella que es
fácilmente reconocible, puesto que no se relaciona con otras
estructuras. Las tenias comienzan en la base del apéndice,
dondelacapamuscularlongitudinalseseparaparaformarlas,
hasta la unión rectosigmoidea donde las tenias se vuelven a
fusionar y conforman la capa muscular longitudinal.
La irrigación del colon proviene de la arteria cólica derecha,
que irriga el colon ascendente y la arteria cólica media, el
colon transverso, ambas son ramas de la arteria mesentérica
superior. Mientras que el colon descendente se irriga por la
345
Irrigación arterialcolon
346
Drenaje venoso del colon
Histología Colon
347
Recto
Existen controversias sobre el inicio del recto, siendo
considerado el punto de proyección del promontorio sacro y
la convergencia de las tenias como este y su límite distal la
línea dentada. La longitud del recto varía entre 12-15 cm, no
tiene tenias ni apéndices epiploicos.
La cara posterior del recto es considerada casi en su totalidad
comoextraperitoneal,mientrasqueporanterior,el1/3proximal
delrectoesperitonealhastaqueelperitoneosereflejadejando
así a los 2/3 distales como órgano infraperitoneal.
Elrectosiguelacurvaturadelsacroy,almomentodeatravesar
el diafragma pelviano, cambia su ángulopostero-inferiormente
paraformarelánguloanorrectal,queespartefundamentaldel
mecanismo esfinteriano. El recto posee 3 pliegues transversos,
uno superior y uno inferior al lado derecho y otro intermedio
al lado izquierdo.
Lairrigacióndelrectoes pormediodelaarteriarectalsuperior,
rama terminal de la arteria mesentérica inferior, las arterias
rectales medias que son ramas de las arterias iliacas internas
y de las arterias rectales inferiores, ramas de las arterias
pudendasinternas.Eldrenajevenosoesporlasvenasrectales
superiores que drenan al sistema porta y las venas rectales
medias e inferiores que drenan a la circulación sistémica.
Anatomía recto
348
Conducto Anal
El conducto anal comienza a continuación del recto y su
límite es la línea dentada, donde ocurre un cambio de epitelio
columnar a escamoso, aproximadamente 2-3 cm del vértice
anal.Elepitelioescamosotieneinervaciónsensitivasomática,
mientras que el columnar mucoso tiene inervación sensitiva
visceral.
Es en esta porción donde se encuentran el esfínter anal
externo e interno del ano y los músculos del piso pélvico,
cuya coordinación permite el control de la defecación. En
la porción distal del ano, las fibras musculares circulares se
engrosan y forman el esfínter anal interno, terminando justo
cefálico al esfínter anal externo. El esfínter anal interno se
encuentra con una contracción tónica sin control voluntario.
Elesfínteranalexternoestácompuestoporfibrasmusculares
estriadas que se encuentran contraídas con un tono basal y
además pueden contraerse voluntariamente. Su inervación
proviene de la rama rectal inferior del nervio pudendo y de
la rama perineal del 4.o nervio sacro.
Irrigación y drenaje venoso del recto
349
Bibliografía
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350
351
7.2 Apendicitis Aguda
Werner K, Muñoz F.
Definición
La apendicitis aguda es una inflamación del apéndice cecal
secundaria a la obstrucción de su lumen. Este proceso
inflamatorio puede culminar en graves complicaciones como
perforación, absceso, peritonitis y sepsis.
Gangrena apendicular
Anatomía
El apéndice cecal o vermiforme es una prolongación del
ciego, en forma de divertículo, que contiene principalmente
contenido linfático. Se encuentra normalmente ubicado en la
convergencia de las 3 tenias del colon, a 2 cm de la válvula
ileocecal. Mide entre 6 y 10 cm de largo y de 3 a 5 mm de
diámetro.Estácompuestopormucosa,submucosa,unacapa
muscular y una serosa, constituyendo un divertículo verdadero.
Anatómicamente tiene una capa muscular circular y otra
longitudinal al igual que el ciego, con abundantes folículos
linfoidesqueseagrupanenlasubmucosa.Estossonalrededor
de 200, los que disminuyen con la edad, encontrándose un
máximo entre los 12 y 20 años y ausentes a los 60años.
Posee un mesoapéndice independiente que se ubica
posterior al ileon terminal. El mesoaéndice contiene la
arteria apendicular, rama de la arteria ileocólica y las venas
apendicularesquedrenanalasvenasileocólicaymesentérica
superior respectivamente, además contiene vasos linfáticos
y linfonodos.
Se describe que su base se encuentra en la unión de las
tenias en el ciego, en un punto anatómico llamado punto de
Mc Burney, que consiste en la unión del 1/3 lateral con los 2/3
mediales de la línea que une la espina ilíaca anterosuperior
con el ombligo. Por el contrario, su extremo distal tiene
múltiples posiciones.
Apendicitis aguda
352
Localizaciones del apéndice: (imagen N.° 1 con posiciones
del apéndice)
• Retrocecal (65.3%): descansa posterior al ciego y puede
ser parcial o totalmente extra-peritoneal.
• Pélvico (31%): el extremo distal del apéndice descansa
hacia o en la pelvis.
• Subcecal (2.3%): descansa inferior al ciego.
• Preilieal(1%):poranterioralciego,sobreelileonterminal.
• Paracólico (0.4%): se ubica en el espacio paracólico
derecho, lateral al ciego.
• Postileal (0.4%): se ubica posterior al ileon terminal.
Epidemiología
La apendicitis aguda es una enfermedad que se presenta
habitualmente en la segunda y tercera década de vida. Es
poco frecuente antes de los 5 y después de los 50 años de
edad, a los 70 años el riesgo de apendicitis es < 1%. Su
incidencia general es de 10 por cada 10.000 pacientes, la
cual se ha mantenido estable en los últimos años.
Es más frecuente en mujeres con una relación de 1.3:1,
diferencia que aumenta en el período de pubertad.
Existe una mayor incidencia de apendicitis en países
industrializados debido al bajo consumo de fibra y exceso
de azúcares refinados de las dietas occidentales.
Posiciones delapéndice
353
Fisiopatología
La apendicitis aguda ocurre por la obstrucción proximal del
lumen apendicular. Los fecalitos son su principal causa,
presentes en hasta un 50% de las apendicitis agudas y
cercano al 90% de las apendicitis gangrenosas, otra causa
frecuente de apendicitis es la hiperplasia linfoide, siendo esta
más frecuente en niños. Otras causas menos frecuentes
pueden ser tumores, impactación de bario por estudios
contrastados, parásitos, cuerpos extraños, etc.
Una vez obstruida la luz del lumen, se produce una
acumulación de secreciones normales del apéndice y un
sobrecrecimiento bacteriano con aumento de la presión
intraluminal. Esta presión provoca distensión del apéndice,
la que estimula las fibras viscerales aferentes provocando
un dolor inespecífico difuso a nivel periumbilical que puede
asociarse a náuseas y vómitos (dolor visceral). Cuando la
presión intraluminal excede la presión venosa, ocurre una
trombosisdelas venasapendiculares, obstruyendoelretorno
venoso y produciendo congestión y aumento del volumen
apendicular, con la congestión vascular la mucosa se vuelve
hipóxica y ulcerada, favoreciendo la invasión bacteriana.
El proceso inflamatorio al progresar invade la serosa y el
peritoneo parietal, provocando el dolor específico en la fosa
ilíaca derecha (dolor parietal).
A medida que el proceso inflamatorio progresa, disminuye
el flujo arterial culminando en infarto, necrosis y perforación
del apéndice.
Los microorganismos involucrados en la apendicitis aguda
son: Escherichia coli, Bacteroides fragilis, Streptococcus
viridans, Enterococcus sp, Pesudomonas sp. entre otros.
Clínica
Como en todas las patologías, la historia, cronología de los
síntomas y la evaluación del paciente son los datos más
importantes para el diagnóstico de esta enfermedad.
Síntomas
Dolor abdominal: es el síntoma cardinal de la apendicitis.
Comienza como un dolor tipo visceral y de una intensidad
moderada, de localización referida como epigástrica o
periumbilical, que migra a fosa ilíaca derecha al cabo de 4 a
12 horas del inicio del cuadro. Esta cronología se encuentra
aproximadamente en el 60% de los pacientes.
Existencondicionesespecialesenqueeldolorsemanifiestaen
otras localizaciones, como es el caso del apéndice retrocecal,
el cual dará molestias en el dorso o flanco derecho. Si el
apéndice se encuentra en posición pelviana, el dolor será
hipogástrico y puede acompañarse de molestias urinarias o
defecatorias. En las mujeres embarazadas, dependiendo de
las semanas de gestación, el dolor se manifiesta en flanco
e hipocondrio derecho por el desplazamiento del apéndice
hacia superior por el útero grávido.
Anorexia: presente en casi la totalidad de las apendicitis
agudas y comienza posterior al inicio del dolor abdominal.
Vómitos y nauseas: presentes en el 50-60% de los casos,
pero son poco frecuentes y de escasa cuantía. Al igual que
la anorexia se manifiestan después del inicio del dolor.
Constipación y diarrea: ambos síntomas pueden estar
presentes en una apendicitis aguda.
Signos
Fiebre moderada: entre un grado y un grado y medio por
sobre su basal.
Taquicardia: en relación con la hipertermia.
Dolor a la palpación: según la localización del apéndice,
generalmente presente al palpar el punto de Mc Burney.
Se puede encontrar al examen físico signos indirectos de
apendicitis comodolorenFIDdurantemaniobras de valsalva,
defensa muscular y rigidez abdominal.
Signo de Blumberg: dolor a la descompresión en fosa ilíaca
derecha. Indica irritación peritoneal.
SignodeRovsing:aparicióndedolorenelpuntodeMcBurney
mientras se palpa o se percute la fosa ilíaca izquierda. Indica
irritación peritoneal.
Signo de Dunphy: dolor en la FID al hacer toser al paciente.
Indica irritación peritoneal.
Signo del Psoas: elevación de la extremidad inferior derecha
contra resistencia. Es positivo cuando aparece o aumenta el
dolor en FID eindicaque el apéndicese encuentra retrocecal.
Signodelobturador:dolorenelhipogastrioalrotarinternamente
el muslo derecho. Indica apéndice en posición pélvica.
Cuando el apéndice se encuentra retrocecal, los signos son
más leves, lo que puede dificultar el diagnósticotemprano.
Existe una relación directa entre la intensidad de los síntomas
y signos con el tiempo de evolución del cuadro.
354
Laboratorio
La mayoría de los pacientes tiene una leucocitosis moderada
condesviaciónizquierda,conrecuentosentre10.000y18.000
células por mm3, este hallazgo apoya el diagnóstico, pero no
lo descarta si está ausente.
Otro examen que ha demostrado utilidad es la elevación de
la proteína C reactiva (PCR), la cual se altera precozmente
(menos de 12 horas) en rangos moderados. Si se obtiene
una PCR en rangos altos, se debe sospechar una apendicitis
complicada con absceso, gangrena o peritonitis.
Siempre se debe solicitar subunidad beta en mujeres en edad
fértil con dolor abdominal para descartar embarazo y orina
completa ante sospecha de infección urinaria o cólico renal.
Imágenes
El diagnóstico de apendicitis aguda es clínico, sin embargo,
muchas veces es recomendable apoyarse con imágenes
para definir la conducta por seguir, pero si se tiene la
certeza diagnóstica, no se debe retrasar la apendicectomía
con exámenes complementarios. De preferencia se deben
estudiar con imágenes a pacientes de difícil evaluación,como
mujeres en edad fértil y grupos etarios extremos, además se
recomienda estudiar previamente con imágenes a aquellos
pacientes cuyo cuadro tiene 5 o más días de evolución, esto
es por la eventual presencia de complicaciones, tales como
abscesos apendiculares, peritonitis o plastrón apendicular.
Existen varias imágenes que permiten evaluar el apéndice
cecal, sin embargo, las dos más útiles son la ecotomografía
abdominal y la tomografía axial computarizada (TAC).
Ecotomografía abdominal: en este examen el apéndice se
describe como una estructura con un lumen anecogénico
rodeado de una pared hiperecogénica adyacente el ciego.
Tiene una sensibilidad del 76 – 96% y una especificidad de
47 -94%; este rango se explica por las diferentes técnicas
de compresión e interpretación de las imágenes, siendo este
examen operador dependiente. El beneficio de este examen es
quenoutilizaradiaciónparaserrealizadoporloquepodríaser
de elección en pacientes jóvenes, principalmente en mujeres
en edad fértil. Los criterios diagnósticos de apendicitis por
ecotomografía son:
• Diámetro transverso del apéndice de 6 a 7 mm (S100%;
E64%).
• Apéndice no compresible.
• Estructura con lumen anecogénico con pared gruesa
hipercogénica.
• Presencia de un apendicolito en extremo proximal y/o
ausencia de gas en el lumen del apéndice.
• Vascularización acentuada en la pared apendicular al
doppler color.
• Cambios inflamatorios en la grasa periapendicular.
TAC: el TAC de abdomen y pelvis con contraste endovenoso
tiene una sensibilidad alta que fluctúa entre 87 al 100% y una
especificidad de 95 a 99%. La desventaja es la utilización
de altas dosis de radiación para ser realizado por lo que
debería evitarse en pacientes en edad fértil y en mujeres
embarazadasº. Los hallazgos sugerentes de apendicitis son:
• Apéndice alargado de > de 6 mm de diámetro (S93%;
E92%).
• Pared apendicular engrosada.
• Cambios inflamatorios en la grasa periapendicular.
• Hipercaptación de contraste en la pared a pendicular.
• Presencia de gas extraluminal.
• Presencia de uno o más apendicolitos.
355
Imagen 1
TAC abdomen y pelvis con contraste. Corte coronal. Se evidencia
apéndice cecal aumentado de tamaño compatible con apendicitis
aguda.
Tratamiento
El tratamiento de elección de la apendicitis aguda es la
apendicectomía,conaseoquirúrgicoydrenajedecolecciones
que puedan presentarse, la cual se puede realizar por técnica
abierta o laparoscópica.
El manejo preoperatorio incluye hidratación y antibioterapia
que cubran a los microorganismos más frecuentes ya
señalados con anterioridad. El esquema inicial generalmente
es una Cefalosporina de tercera generación asociado a un
antianaerobio (ejemplo: Ceftriaxona 2 gramos e.v. cada 24
horas asociado a Metronidazol 500 mg e.v. cada 8 horas).
La duración de la antibioterapia dependerá de los hallazgos
intraoperatorios, esta se puede extender desde una dosis única
a un tratamiento por 7 - 10 días en caso de complicaciones,
tales como abscesos, perforación apendicular o peritonitis
localizada o difusa.
Vías de Abordaje
transverso hasta llegar a la fascia transversal, la cual se abre
accediendo al peritoneo. La apertura del peritoneo debe ser
cuidadosa, evitando lesionar algún asa intestinal adyacente.
Una vez ingresado a la cavidad abdominal, se realiza una
exploración visual o digital para identificar la posición del
apéndice. Mediante disección roma se libera el apéndice de
posibles adherencias. Posteriormente, se liga y secciona el
mesoapéndice, lo que permite traccionar el apéndice para
ligarlo y seccionarlo a nivel de su base. Por último, se realiza
aseodelacavidadabdominalconabundantesuerofisiológico
y se cierra la incisión mediante cierre por planos.
Apendicectomía laparoscópica
La apendicectomía laparoscópica se realiza con el paciente
en decúbito dorsal. Se instalan 3 trócares, uno umbilical de
5 o 10 mm y otros 2 accesorios de 5 o 10 mm cuya posición
puede variar según la preferencia del cirujano (ejemplo:
suprapúbico, FII, FID, línea media, etc.) Posteriormente, se
explora la cavidad abdominal identificando el apéndice y
descartando cualquier otra patología. Se diseca y coagula
el mesoapéndice. Luego, se realiza ligadura y sección de
la base apendicular. Se extrae el apéndice en bolsa por el
trócar de 10 mm y se realiza aseo de la cavidad peritoneal
con suero fisiológico. Por último, se extraen los trócares bajo
visión directa.
Es importante destacar que la técnica laparoscópica se
prefiere en pacientes obesos, pacientes con diagnóstico
incierto de apendicitis y en peritonitis difusa, esto porque
permiteelaseoylaexploracióndetodalacavidadabdominal.
La elección de la técnica quirúrgica recae en el cirujano
tratante, quien debe considerar su experiencia, los recursos
de cada centro y las ventajas y desventajas de cada
técnica. Habitualmente, la apendicectomía laparoscópica,
comparándola con la técnica abierta, posee mayores costos
económicos y mayor tiempo quirúrgico, además se ha
asociado a mayor posibilidad de colecciones intraabdominales
posoperatorios, su principal beneficio es el menor dolor
posoperatorio, menor estadía hospitalaria y menor tasa de
infecciones de herida operatoria, la cual es la complicación
más frecuente de la apendicectomía. Además, la posibilidad
deexplorar latotalidaddelacavidadabdominalpermitepoder
realizar diagnósticos diferenciales en caso de apendicectomía
en blanco.
Apendicectomía abierta
Existen múltiples tipos de incisiones para abordar el apéndice
cecal, la más empleada es la incisión de Mc. Burney. Para
realizar esta incisión se traza una línea imaginaria que une
el ombligo con la espina ilíaca anterosuperior, esta línea se
divide en 3 partes iguales y en la unión del tercio externo con
los dos internos (punto de Mc. Burney), se traza una incisión
oblicuaorientadahaciaelpubis.Luego,serealizaaperturapor
planos y divulsión de los músculos oblicuos externo, interno y
356
Apendicectomía laparoscópica
Apendicectomía laparoscópica
357
Complicaciones Tumores Apendiculares
Peritonitis: se origina por la perforación del apéndice
gangrenoso secundario al proceso inflamatorio. La peritonitis
puede ser localizada o difusa. Se maneja mediante
apendicectomía asociada a aseo quirúrgico de la cavidad
abdominal.Segúnloshallazgos,sedeterminalanecesidadde
dejar un drenaje. Se debe mantener con cobertura antibiótica
por un período variable de entre 7 a 10 días según respuesta
clínica.
Absceso apendicular: corresponde a una colección
purulentacircunscrita ycontenida por el epiplón ylas vísceras
adyacentes. Se manifiesta como una apendicitis asociada
a una masa palpable en FID. El manejo primario es el
drenaje del absceso, el que puede ser percutáneo bajo TAC
o ecotomografía o abierto en caso de ser necesario. Debe
estar asociado a tratamiento antibiótico por lo menos durante
21 días (ajustado según cultivos).
Plastrón apendicular: se caracteriza por una masa sensible
en fosa ilíaca derecha acompañado de fiebre y malestar
general, se presenta en cuadros de apendicitis de varios
días de evolución, habitualmente más de 5. Este proceso se
produce por una inflamación del apéndice que es rodeado
por epiplón y asas intestinales que lo cubren e impiden que
la ruptura del apéndice termine en una peritonitis. Se maneja
mediante tratamiento antibiótico prolongado, mínimo 21 días.
La mayoría de los autores recomienda la apendicectomía
diferida aproximadamente 3 meses posterior al cuadro,
siempre con un TAC de abdomen y pelvis de control previo
a la cirugía, esto porque < del 1% de las apendicitisagudas
pueden ser secundarias a alguna obstrucción tumoral del
apéndice y también a que se ha evidenciado que existe la
posibilidad de volver a desarrollar nuevamente un cuadro
apendicular en pacientes que han presentado episodios
previos.
Pileflebitis: corresponde a la trombosis séptica de la vena
porta y sus ramas debido a un foco infeccioso en su área
de drenaje que posteriormente puede evolucionar con
abscesoshepáticos.Laapendicitisagudahasidoconsiderada
clásicamente como su etiología más frecuente, pero
actualmente se considera a la diverticulitis como la principal
causa. Clínicamente, se manifiesta con ictericia, fiebre alta
y calofríos. El tratamiento se basa en la antibioterapia de
amplio espectro, tratamiento quirúrgico del foco infeccioso
abdominal y terapia anticoagulante y trombolítica.
Los tumores del apéndice son poco frecuentes y suelen
descubrirse incidentalmente durante una apendicectomía.
Los tipos de tumores apendiculares son:
• Primarios:
Benignos: mucocele y pólipos
o Malignos:
• Carcinoide
• Adenocarcinoide o carcinoide mucoso
• Cistoadenocarcinoma mucinos
• Adenocarcinoma
• Otros: estromales, mesenquimales, linfomas, etcétera
• Secundarios: Implantes peritoneales de tumores de
ovario, colon, melanoma.
Mucocele o cistoadenoma mucinoso: Ocurren como
resultado de la obstrucción del lumen apendicular con
distensióndelapéndiceporacumulacióndematerialmucoide.
Pueden ocurrir cambios histológicos que van desde epitelio
benigno a adenocarcinoma mucinoso y el riesgo de cáncer
depende del tamaño, es decir, a mayor tamaño del mucocele,
mayor probabilidad de neoplasia maligna. El tratamiento va
depender deltamaño,delcompromiso delabase apendicular
y los ganglios del mesoapéndice.
• Mucocele < 2 cm, sin afectación de su base: sólo
requieren apendicectomía
• Mucocele >2 cm, con base comprometida o ganglios
sospechosos: Hemicolectomía derecha.
Durante la cirugía se debe procurar no romper el mucocele,
ya que aumentan las probabilidades de diseminación de
células epiteliales del líquido mucoide por toda la cavidad
abdominal. Este cuadro se conoce como pseudomixoma
peritoneal o carcinomatosis mucinosa. Por lo general son
neoplasiaspocoagresivas,debidoaquegeneralmentenodan
metástasis ganglionares o hepáticas, sin embargo, si tienen
recidiva locorregional. El tratamiento de este cuadro consiste
en la apendicectomía inicial y luego, en un segundo tiempo,
citorreducción y quimioterapia intraperitoneal hipertérmica.
Carcinoide: Son tumores neuroendocrinos constituidos
habitualmente por células enterocromafines. Se presentan
en hombre entre 40-50 años y por lo general están
localizados al diagnóstico. Su comportamiento es benigno
en la mayoría de los casos. El tratamiento va depender del
tamaño, del compromiso de la base apendicular e invasión
del mesoapéndice.
358
• Carcinoides < 1 cm, localizados en el extremo del
apéndice: apendicectomía
• Carcinoides>1cm,concompromisodelabaseoinvasión
de mesoapéndice: hemicolectomía derecha.
Existe una variante de los carcinoides, denominada
adenocarcinoide o carcinoide mucinoso, que comparte
característicastantodelcarcinoidecomodeladenocarcinoma
y presenta un comportamiento más agresivo. Su tratamiento
consiste en una hemicolectomía derecha + ooforectomía (si
es postmenopáusica) +/- quimioterapia adyuvante.
Adenocarcinoma: Están presentes en menos del 1% de las
apendicectomías. Es más frecuente el de tipo mucinoso. Su
tratamiento consiste en la hemicolectomía derecha siempre
que el tumor invada más allá de la mucosa.
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359
7.3 HemorragiaDigestivaBaja
Villalobos B, Zúñiga JM, Fernández M.
Definición
La hemorragia digestiva baja (HDB) corresponde al sangrado
digestivo distal al ángulo de Treitz (unión duodeno-yeyunal),
evidenciable como salida hemática por el ano o acompañada
de deposiciones (rectorragia, hematoquecia). En este concepto
amplioseincluyeelsangradoproducidoporpatologíaperianal
(hemorroides, fisura, etc.), sin embargo, este capítulo se
enfoca principalmente en las causas de origen intestinal
(intestino delgado y colorrectal).
Epidemiología
Alrededor del 20% de las hemorragias digestivas (HD)
corresponde a HDB y de ellas el 95%1
es de origen colónico.
La HDB tiene una incidencia anual reportada en EE.UU. de
20,5 a 27 por 100.000 aproximadamente, siendo levemente
mayor en hombres. En general, presenta una mortalidad menor
quelashemorragiasdigestivasaltas(HDA),alcanzandocifras
de 2-4%2
, sin diferencias por género.
También es importante mencionar que en un 5-20% de los
casos no será posible determinar la causa del sangrado.
Factores de Riesgo
Dentro de los principales factores de riesgo, que deben ser
evaluados dentro de la anamnesis de todo paciente con
HDB, se encuentran: fármacos (AINEs, Aspirina, tratamiento
anticoagulante), historia previa de diverticulosis, historia
personal o familiar de cáncer de colon, historia de irradiación
pélvica por neoplasias, coagulopatías primarias y adquiridas
(por ejemplo, en la cirrosis hepática), historia de enfermedad
inflamatoriaintestinal(EII),procedimiento colorrectalreciente
(por ejemplo, polipectomía colonoscópica).
1 Towsend CM, Beauchamp RD, Evers BM, Mattox KL.
Sabiston Textbook of Surgery, 19th ed. Philadelphia, PA Elsevier
Saunders; 2012.
2 Crovari F., Manzor M. Manual de Patología quirúrgica. 1.a
ed. Santiago, Chile: Ediciones UC, Facultad de Medicina Pontificia
Universidad Católica de Chile; 2014.
360
Etiología
Es de gran utilidad clínica ordenar las causas de HDB de
acuerdo con el grupo etario (tabla1).
Tabla 1. CAUSAS HEMORRAGIA DIGESTIVA BAJA
ADULTO JOVEN MENOR 60 AÑOS MAYOR 60 AÑOS
Divertículo Meckel Divertículos Angiodisplasia
Infecciosas Neoplasias Divertículos
Enf. inflamatoria intestinal Enf. inflamatoria intestinal Neoplasia
Intususcepción Angiodisplasia Colitis isquémica
Causa proctológica Causa proctológica Causa proctológica
En general, la causa más frecuente de HDB en pacientes
de menos de 60 años es de origen hemorroidal o causa
proctológica, sin embargo, rara vez producen un sangrado
masivo que determina compromiso hemodinámico.
La causa más frecuente de HDB en pacientes sobre los 60
años es de origen diverticular, la cual si puede llegar a un
cuadro de shock hemodinámico dado el origen arterial del
sangrado. Solo un 3-5% de los portadores de divertículos
presentan sangrado y en el 80% de los casos el sangrado
se detiene espontáneamente. En general, el sangrado se
origina en divertículos del colon derecho.
Consideración especial debe tener la angiodisplasia, la cual a
veces es subdiagnosticada en las colonoscopias, sin embargo,
en algunas series publicadas de pacientes mayores alcanza
la primera causa de HDB3
. Estas se presentan generalmente
en el grupo de mayores de 60 años como un sangrado
intermitente o anemia crónica. Rara vez produce hemorragia
digestiva masiva y se ubican habitualmente en el ciego y
colon ascendente.
La mayoría se detiene en forma espontánea.
Finalmente,ynoporellomenosimportante,hayqueconsiderar
a la colitis isquémica como probable causa de HDB en todo
paciente añoso, con antecedentes de cardiopatía, diálisis o
paciente grave hospitalizado en unidades de paciente crítico,
ya que en todas estas condiciones se puede presentar bajo
débito del territorio esplácnico, provocando isquemia de
la mucosa del colon y luego sangrado. Generalmente, el
sangrado no es mayor, responden a soporte médico y se
debe estar atento a futuras estenosis de la zonaisquémica.
Diagnóstico
Clínica
El enfrentamiento clásico de un paciente con HDB ocurrirá, la
mayoría de las veces, en el servicio de urgencia. Se deberá
seguir de manera ORDENADA Y SECUENCIAL una historia
clínica lo más completa posible. Esta historia debe incluir:
1. Anamnesis remota: búsqueda de comorbilidades, de
factores de riesgo descritos previamente y de episodios
previos de HDB.
2. Anamnesis próxima:
- Búsqueda de síntomas clásicos de HDB: hematoquecia
(sangre fresca u oscura acompañada de deposiciones) y
rectorragia (sangre fresca sin deposiciones). Tiempo desde
su aparición, cuantía aproximada, asociación o no a fiebre,
diarrea, dolor abdominal o dolor defecatorio.
Considerar siempre:
* Que un 15% de pacientes con hematoquecia pueden ser de
origen digestivo alto4
. Interrogar por sintomatología digestiva
alta (reflujo, acidez, endoscopias previas, tratamiento con
omeprazol).
* Que,sibienesraro,pacientesconHDBpuedenpresentarse
como melena (sangrado de origen en intestino delgado).
- Búsqueda de síntomas de síndrome anémico (es diferente
3 Liao Z, Gao R, Xu C, Li Z. Indications and detection,
completion, and retention rates of small-bowel capsule endoscopy:
a systematic review. Gastrointest Endosc. 2010; 71: 280-286.
4 Farrell JJ, Friedman LS. Review article: the management
of lower gastrointestinal bleeding. Aliment Pharmacol Ther. 2005;
21:1281-98.
361
el enfrentamiento de un paciente con primer episodio de
sangrado versus un paciente con sangrado de larga data):
fatiga, decaimiento, compromiso del estado general.
- Búsqueda de síntomas de cáncer colorrectal: fatiga, anorexia,
baja de peso, cambio hábito intestinal.
3. Examen físico:
Los hallazgos dependerán de la cuantía del sangrado.
- Primero, siempre, ver los signos vitales: pueden estar
normalesopuedetenersignosinicialesdeshock:taquicardia,
hipotensión.
Con solo los signos vitales, se puede estimar la cuantía del
sangrado5
:
* Taquicardia: pérdida del 15% de la volemia aprox.
* Hipotensión ortostática: 15-40% de la volemia aprox.
* Hipotensiónendecúbito:másdel40%delavolemiaperdida.
- Aspecto del paciente: facie pálida, perfusión periférica,
somnoliento, no responde con claridad las preguntas.
- Examen secuencial de la cabeza a los pies: mucosas
pálidas, yugulares planas, abdomen en busca de masa
abdominal, frente a sangrado activo podemos encontrar
ruidos hidroaéreos aumentados, extremidades frías, pulsos
distales no palpables.
- Nunca olvidar TACTO RECTAL para ir en busca dirigida de
cáncer de recto e inspección anal buscando patología orificial
(hemorroides sangrante, fisura anal, cáncer anal).
En suma, tanto la anamnesis como el examen físico nos
entregaran una estimación de la causa del sangrado (de
acuerdo con grupo etario), magnitud del sangrado y del
estado del paciente.
Así, constantemente seguiremos evaluando signos vitales,
estado de conciencia, diuresis y coloración de piel y mucosas
para determinar si nuestro paciente va respondiendo al
tratamiento inicial.
Laboratorio
Se deben solicitar con criterio y considerando la gravedad
del paciente.
1. Hemograma: permite evaluar la repercusión del
sangrado, anemia aguda o crónica, plaquetopenia.
5 Cappell MS, Friedel D. Initial management of acute upper
gastrointestinalbleeding:frominitialevaluationuptogastrointestinal
endoscopy. Med Clin North Am. 2008; 92:491.
2. Pruebas de coagulación (fundamental en
paciente con tratamiento anticoagulante).
3. Grupo sanguíneo ABO y RH: solicitar siempre por
eventual necesidad de transfusión.
4. Otros exámenes de acuerdo con comorbilidades o
sospecha de alguna patología en particular.
Estudio
Unconceptofundamentalparaelcirujanoesenfocarsuestudio
principalmente en determinar la ubicación del sangrado más
que la causa del sangrado. Esto, dado que ante la necesidad
de realizar un procedimiento o una cirugía de urgencia es vital
conocer la ubicación yasí evitar una eventual colectomía total
de urgencia dado su alta mortalidad.
- Endoscópico
-Endoscopia digestiva alta: siempre considerarla ante la
sospecha de que el sangrado pudiera ser alto.
- Colonoscopía: permite determinar el origen del sangrado
y realizar un tratamiento a la vez. En general, de elección
en paciente hemodinámicamente estable. Las opciones
terapéuticas son: inyectoterapia, termocoagulación o el uso
de clips.
Imágenes
- Angiografía: procedimiento de radiología intervencional
diagnóstico y terapéutico. Utiliza medio de contraste y
radiación. Permite captar flujos de sangrado desde 1ml/
min; permite embolizar el vaso sangrante mediante Coils
o inyección de biopolímeros. Efectividad de un 70-90%6
.
Es una buena opción en paciente con sangrado activo y
hemodinámicamente inestable. Complicaciones asociadas
al procedimiento: arritmias, isquemia intestinal.
- AngioTAC de abdomen y pelvis: examen de imagen solo
diagnóstico. Corresponde a un TAC de abdomen y pelvis
con contraste, pero incluye dentro de la técnica de toma
del examen una fase arterial. Permite contrastar el sistema
vascular del abdomen, facilitando la evidencia de sangrado
activo. Ampliamente disponible. Se debe mantener precaución
con función renal y alergia a medio de contraste.
- Cintigrafía de glóbulos rojos: examende mayor sensibilidad.
Permite captar flujos de sangrado desde 0,1-0,5 cc/min, solo
diagnóstico, no terapéutico.
6 Crovari F, Manzor M. Manual de Patología quirúrgica. 1.a
ed. Santiago, Chile: Ediciones UC, Facultad de Medicina Pontificia
Universidad Católica de Chile; 2014.
362
Tratamiento
(Enfrentamiento práctico en contexto de atención en servicio
de urgencia o paciente hospitalizado).
El tratamiento de un paciente con HDB dependerá de si a su
ingreso se encuentra estable o inestable hemodinámicamente.
1. En paciente hemodinámicamente estable, sin sangrado
activo, con sangrado autolimitado de escasa cuantía: historia
clínica ordenada y secuencial. Examen físico, exámenes de
laboratorio básico. Si la caída de hematocrito es significativa,
probablemente el mejor examen de estudio en este contexto
seráunacolonoscopíadentrode24-48horasconpreparación
de colon adecuada (sin urgencia, pero hospitalizado).
En pacientes jóvenes, sin grandes comorbilidades, que no
impresiona sangrado de gran cuantía y sin compromiso
hemodinámico se puede plantear estudio ambulatorio.
Importante tener claro que NO TODO PACIENTE CON HDB
SE HOSPITALIZA.
2. Paciente con sangrado activo, taquicárdico,
hemodinámicamente inestable: En este contexto, el orden
secuencialdelahistoriaclínicadebepostergarse,dandopaso
primero al manejo y reanimación inicial. En la práctica, esta
decisión puede tomarse, incluso antes de saludar al paciente,
solo con verlo entrar al box de atención (en caso de paciente
con compromiso hemodinámico o cuantía importante del
sangrado: pálido, somnoliento, taquicárdico). En el manejo
de este tipo de pacientes cobra prioridad la reanimación:
-Instalación de 2 VÍAS PERIFÉRICAS GRUESAS (al menos
16 G) y clasificar, hemograma.
-Administración cuantiosa de cristaloides en bolo (suero
fisiológico 1000 cc a pasar rápido, lo cual se puede volver
a repetir).
-Instalación SNG para descartar hemorragia digestiva alta.
-Evaluación de necesidad de transfusión de unidades de
glóbulos rojos, dependiendo de la cuantía de la anemia
(recordar que 1 unidad de glóbulos rojos aumenta en 1 mg/
dl la hemoglobina y en 2 a 3 puntos el hematocrito).
-Evaluar necesidad de Angiografía o AngioTAC de urgencia.
-Enestecontexto,elpacientetieneindicacióndehospitalización
en una Unidad de Paciente Crítico (UPC).
Cirugía en paciente con HDB:
En la gran mayoría de los casos (90%) se podrá controlar
el sangrado con soporte básico y medidas mínimamente
invasivas, sin embargo, existen algunas situaciones en que
todos los recursos previamente expuestos no son suficientes
y se requiere una cirugía de urgencia que permita detener el
sangrado y salvar la vida del paciente.
Indicaciones de cirugía de urgencia:
1. Lesión identificada con sangrado activo, que no cede
utilizando otros métodos.
2. Hipotensiónpersistentepeseasoportemédico(transfusión
de más de 5-6 unidades GR en 24 horas para mantener
hemodinámicamente estable al paciente).
3. Último recurso en paciente con sangrado activo en donde
no se logra identificar la lesión.
El procedimiento por realizar corresponde a una COLECTOMÍA
total o parcial. Esto dependerá de la causa del sangrado y de
si se logra o no identificar el sitio del sangrado.
Elhaberidentificadolalesiónenelpreoperatoriopermitiráuna
cirugíamásconservadora(colectomíaparcial),disminuyendo
asílatasaderesangrado ylamortalidadasociada alacirugía.
De lo contrario, si no se identifica el sitio de sangrado en
el estudio preoperatorio, se deberá hacer una colectomía
total, la cual tiene una mortalidad de 40-50% y riesgo de
resangrado de 10%.
Conclusiones
• LaHDBesuncuadrofrecuenteenlosserviciosdeurgencia
con el cual el médico general debe estar familiarizado.
• El diagnóstico y evaluación de su gravedad es
principalmente clínico (anamnesis, examen físico y
laboratorio básico).
• Su manejo debe ser estructurado y de acuerdo con las
herramientas diagnósticas y terapéuticas disponibles en
cada centro.
• La cirugía de urgencia en HDB es muy infrecuente, pero
debe ser indicada oportunamente.
363
Bibliografía
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Universidad Católica de Chile; 2014.
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364
365
7.4 EnfermedadDiverticular
Introducción
Ramírez J, Ready J, Irarrázabal J.
La presencia de divertículos en el colon es un patología
común y aumenta en prevalencia en poblaciones de mayor
edad. Es así como 50% de los pacientes de 50 años tienen
divertículos, aumentando a un 67% en pacientes de 89 años.
De éstos 3/4 permanecerán asintomáticos durante su vida, el
resto presentará síntomas de diferente magnitud1
.
Los divertículos en colon, en la mayoría de los casos,
corresponden a pseudodivertículos o divertículos falsos ya
que son producto de la herniación de la mucosa y submucosa
a través de la capa muscular de la pared colónica.
1 Stollman N, Raskin JB. Diverticular disease of the colon.
Lancet 2004;363:631-9.
Anatomía divertículo
366
Su formación estaría determinada por un mecanismo de
pulsión, es decir, aumento de presión intraluminal del colon.
Se ubican entre las tenias, en áreas de debilidad de la pared
intestinal,zonasporlascualeslosvasossanguíneospenetran
la capa muscular (vasa recta). Los divertículos verdaderos,
por otro lado, son aquellos que incluyen todas las capas
del colon, son menos frecuentes y, por lo general, tienen un
origen congénito.
Para el estudio y manejo de esta patología es necesario
tener claro los conceptos que se relacionan con ella, así nos
referiremos entonces a:
• Diverticulosis: Presencia de divertículosasintomáticos.
• Diverticulitis: Presencia de divertículos sintomáticos, ya
sea con manifestación aguda (infección, sangrado) y/o
crónicas (estenosis, dolor crónico, fístulas).
1. Simple o no complicada: diverticulitis con inflamación de
la pared, de la grasa pericolónica y/o flegmón asociado, pero
sin complicaciones agregadas. Por lo general, responden a
manejo médico ambulatorio con antibióticos.
2. Complicada: diverticulitis asociado a abscesos, fístulas,
hemorragia, obstrucción y/o perforación. La clasificaciónde
Hinchey se utiliza para clasificar la diverticulitiscomplicada.
Fisiopatología de la diverticulosis
El origen de la diverticulosis está asociado a un aumento de
la presión intraluminal del intestino y a un debilitamiento de
la pared. Además, existe una notoria hipertrofia de la capa
muscular circular.
Frente a una dieta alta en fibra, la presión que tiene que
ejercer el colon para que el peristaltismo sea eficiente en
eliminar las deposiciones almacenadas es baja (similar a
la atmosférica), ya que habrá alto contenido de estas en su
lumen. Por el contrario, frente a una dieta baja en fibras, la
presión que tendrá que ejercer será considerablemente mayor,
debido al menor contenido intestinal y la consistencia dura
que tendrá por la ausencia de fibras.
El colon sigmoides es el segmento con el menor diámetro
del intestino grueso y, por consiguiente, donde se generala
mayor presión. Es por esta razón que la diverticulosis afecta
más a esta porción que al resto del colon, estando confinada
en un 50% de los individuos. La siguiente área mayormente
comprometida es el colon descendente, dando cuenta de
40% de los casos y en un 5 a 10% está comprometido todo
el colon.
Clínica
La diverticulitis puede ser simple o complicada (Absceso,
fístula o perforación libre), siendo la primera un 75% de
los casos y la segunda el 25% restante, respectivamente2
.
Generalmente, una diverticulitis simple se correlaciona con
síntomas leves y una complicada, con síntomas moderados
a severos y elevación de parámetros inflamatorios.
Anamnesis
La presentación clásica es el dolor en el cuadrante abdominal
inferior izquierdo, descrito como tipo cólico, que puede
irradiarse a hipogastrio, ingle izquierda y dorso. Se le ha
descrito como “apendicitis del lado izquierdo”.
Cambios en el hábito intestinal son frecuentes (generalmente
constipación), tanto en diverticulitis simples como complicadas.
Síntomasenunacuadroseverodediverticulitis(sospechamos
de una diverticulitis complicada):
• Dolor localizado/difuso severo en cuadrante inferior
izquierdo.
• Fiebre, escalofríos.
• Anorexia, náuseas y vómitos.
• Urgencia miccional (flemón vesical-irritación vesical
2 Dr. T. Murphy Prof. R.H. Hunt Prof. M. Fried Dr. J.H.
Krabshuis. Diverticular disease. Practice Guideline .World
Gastroenterology Organization. 2007
367
directa desde el proceso inflamatorio pericólico, por su
cercanía con el sigmoides). Otros síntomas de irritación
vesical pueden estar presentes, tales como disuria.
• Neumaturia: signo inequívoco de fístulización entre un
absceso y la vejiga.
Examen físico
Lo más común de encontrar al examen físico, es sensibilidad
en el cuadrante abdominal inferior izquierdo.
También se puede encontrar:
• Defensa muscular voluntaria en musculatura
abdominal izquierda.
• Masa sensible la palpación de abdomen inferior
izquierdo, esto puede representar un flegmón o
absceso.
• En casos de macro perforación (con derrame de
contenido intestinal dentro del peritoneo),podemos
encontrar dos escenarios:
• Absceso pélvico o de abdomen inferior: dolorlocal
y signos de irritación peritoneal localizados
• Perforación libre: dolor abdominal y signos de
irritación peritoneal generalizados.(Peritonitis)
• Altactorectaly/ovaginalpuederevelarunamasasensible
yfluctuante, típica de un absceso pélvico peridiverticular.
Laboratorio
Dentro de los exámenes de laboratorio se debe solicitar los
parámetros inflamatorios. Al hemograma podrá observarse
unaleucocitosis yelevacióndelaproteínaCreactiva.Además
se debe complementar con exámenes básicos como función
renal y pruebas de coagulación.
Imagenología
Un diagnóstico basado únicamente en criterio clínico, estará
incorrecto en un 33% de los casos3
.
Rx torácica/ abdominal:
Generalmente no muestra hallazgos específicos para
diverticulitis. Un neumoperitoneo puede verse en 11 % de
los pacientes con diverticulitis aguda.
Solo un 30 - 50% de las radiografías de abdomen realizadas
en pacientes con diverticulitis mostrarán anormalidades.
Los hallazgos más comúnmente encontrados son:
• Dilatación del intestino delgado o grueso.
• Obstrucción intestinal.
• Densidades de tejido blando sugestivas de absceso.2
Tomografía computarizada (TC) de abdomen y pelvis
Es el examen imagenológico de elección. Revela de manera
fiable la ubicación del proceso inflamatorio, la extensión, la
presencia de abscesos y la participación de otros órganos,
revelando también complicaciones secundarias como
obstrucción ureteral o fístula vesical.
La diverticulitis es considerada como un proceso
predominantemente extraluminal. La TC ofrece el beneficio
de evaluar tanto el intestino como el mesenterio, con una
sensibilidad del 69 - 98 % y una especificidad del 75 - 100 %.
Los hallazgos principales son:
• Engrosamiento de la pared intestinal.
• Cambios inflamatorios peri-sigmoídeos: grasa mesentérica
inflamada.
• Absceso asociado.
• Gas extraluminal.
• Líquido libre.
• Divertículos visibles.
Procedimientos endoscópicos
El uso de cualquier tipo de endoscopía en diverticulitis aguda
estácontraindicado,yaqueseinsuflaelcolon,locualaumenta
lapresiónintracolónicaypuedellevaraperforaciónintestinalo
alaumentodelasalidadecontenidointestinalporeldivertículo
ya perforado.
3 Young-Fadok TM, Roberts PL, Spencer MP, Wolff BG.
Colonic diverticular disease. Curr Prob Surg 2000;37:457–514.
368
Clasificaciones de severidad
La clasificación clínica de la gravedad de la diverticulitis
complicada puede ayudar a guiar la toma de decisiones
terapéuticas.
La clasificación de Hinchey es la que se describe con mayor
frecuencia.
Grado deHinchey Descripción
I
nflamación pericólica
(localizada)+absceso
pericolónico
II
Absceso
retroperitoneal o
pélvico
III
Peritonitis purulenta
difusa
IV
Peritonitis fecaloidea
difusa
369
Clasificación deHinchey
370
Tratamiento
Manejo médico
Pacientes con diverticulitis no complicada con dolor moderado,
quenopresentensíntomassistémicos,puedensermanejados
demaneraambulatoriaconesquemasantibióticos durante10
a 14 días, es importante cubrir Escherichia coli y Bacterioides
Fragilis. El paciente debería presentar alivio del cuadro
pasadas 48 horas desde el inicio de la terapia antibiótica. Si
esto no ocurre, debe consultar nuevamente, ya que podría
evolucionar a una diverticulitis complicada.
Posterior almanejodelcuadrodiverticular, aproximadamente
4 a 6 semanas después de terminado el tratamiento, debe
solicitarse una colonoscopía para evaluar la extensión dela
enfermedad diverticular, posibles complicaciones (estenosis,
deformidad) y diagnóstico diferencial de cáncer.
Pacientes con diverticulitis aguda complicada o síntomas/
signos severos deben hospitalizarse. Estos pacientes deben
ser manejados con reposo intestinal hasta el cese del dolor
y disminución de parámetros inflamatorios, hidratación con
fluidos y antibióticos vía endovenosa.
Pronóstico: Del 15 al 30% de los pacientes admitidos para
el manejo intrahospitalario de la diverticulitis requerirán de
cirugía durante la hospitalización, con unriesgo demortalidad
asociado de un 18%.
Manejo quirurgico de la diverticulosis complicada
Una intervención quirúrgica será necesaria frente a las
siguientes complicaciónes:
-Perforación libre con peritonitis genralizada (siendo poco
común, pero asociada al mayor riesgo de mortalidad, 35%.)
-Obstrucción
- Absceso mayor a 4 cm de diámetro no accesible vía
drenaje percutáneo.
- Fístula (ocurre en 2% de los pacientes con diverticulitis
aguda, siendo la más común la colo-vesical, 65%).
-Deterioro clínico o falla del tratamiento conservador.
La cirugía consiste en resecar el segmento colónico
involucrado.Enformahabitualeselcolonsigmoides.Segúnel
compromiso inflamatorio, se podrá realizar una sigmoidectomía
con anastomosis primaria, o bien, un procedimiento de
Hartmann,enelcualsecierraelrectoysedejaunacolostomía
terminal, con una restauración de la continuidad intestinal en
un segundo tiempo.
Indicación de cirugía electiva
- Dos o más episodios de diverticulitis suficientemente
severa como para establecer una causa de hospitalización.
Aproximadamente entre un 22% y un 30% los pacientes que
han presentado un episodio de diverticulitis, presentarán un
segundo episodio.dentro de los primeros 18 meses.
- Todos los pacientes que presenten un primer episodio de
diverticulitis aguda complicada.
- Cualquier episodio de diverticulitis asociado a síntomas
obstructivos.
- Incapacidad de diferenciar entre diverticulitis y cáncer de
colon.
El objetivo de la cirugía electiva es resecar los segmentos
de colon con divertículos en su superficie. Por lo general, es
colon sigmoides, sumándose también, en algunos casos, el
colon descendente y transverso, en este orden de frecuencia.
La cirugía se puede llevar a cabo vía laparoscópica o abierta
y se indica de 6 a 8 semanas desde el último episodio de
diverticulitis aguda o inflamación.
Tratamiento de un absceso
- Abscesos pericólicos pequeños (menores a 4 cm),
responderán en su mayoría (90%) a tratamiento antibiótico
y manejo conservador.
- El drenaje percutáneo está indicado en abscesos mayores
a 4 cm y en aquellos con mala respuesta al tratamiento. Este
se puede hacer con la ayuda de imágenes (TAC o ecografía).
- Colecciones multiloculares, abscesos asociados a fístulas
entéricas o que contengan material sólido - semisólido,
OperacióndeHartmann
371
no deben drenarse con drenaje percutáneo y deben ser
manejados quirúrgicamente.
Otras complicaciones
Fístulas
Las fístulas por enfermedad diverticular se presentan
generalmente en pacientes añosos y son usualmente colo-
vesicales. La presencia de neumaturia debe hacernos
sospechar de una fístula. El diagnóstico se establece vía
imágenes, siendo comúnmente identificados por una TC
abdominal. Se resuelven quirúrgicamente.
Sangrado diverticular
La enfermedad diverticular sigue siendo la causa más
frecuente de hemorragia intestinal baja masiva (30 - 50% de
loscasos). Sin embargo,elcáncercolorrectal es lacausa más
común de sangrado intestinal bajo, descartando en este tema
la patología proctológica (hemorroidal). Se estima que 15%
de los pacientes con diverticulosis sangrará alguna vez en su
vida. El sangrado es usualmente abrupto, no produce dolor y
es de gran volumen, siendo un 33% masivo, requiriendo de
transfusión de emergencia. Generalmente, el sangrado cesa
en forma espontánea en un 85% de las ocasiones.
El sangrado diverticular ocurre debido a que al formarse los
divertículosenáreasendondepenetranlosvasossanguíneos
de la pared colónica, estos quedan separados del lumen
intestinal por una fina capa de mucosa. La mucosa puede
ser dañada por contenido intestinal, interrumpiéndose su
continuidad, produciéndose sangrado intraluminal.
La localización del sangrado no es establecida hasta en un
30 - 40% de los casos.
Métodos imagenológicos tales como angiografía selectiva
o escaneo radioisotópico pueden detectar correctamente el
sitio de sangrado en un 24 - 91% de los casos.
Lacolonoscopíaserecomiendaparaestablecereldiagnóstico
en sangramiento autolimitado, y en casos de sangramiento
moderado que ha cesado, es seguro llevarla a cabo después
de 12 – 24 horas transcurrido el episodio. Casos menos
severo, la colonoscopía es razonable como procedimiento
ambulatorio.
ENFERMEDAD
DIVERTICULAR
DIVERTICULOSIS
INFLAMACIÓN/INFECCIÓN
(DIVERTICULITIS AGUDA)
SANGRADO
(HDB)
- FISTULAS
- DOLOR CRÓNICO
- DEFORMIDAD
- ESTENOSIS
ABCESOS -< 4 CM
ABCESOS - > 4
CM
PERITONITIS
-PURULENTA
-FECALOIDEA
MANIFESTACIONE
S CRÓNICAS
MANIFESTACIONE
S AGUDAS
DIVERTICULITIS AGUDA
COMPLICADA
DIVERTICULITIS AGUDA
SIMPLE
372
Bibliografía
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Clinical Practice Guideline Task Force of the American Society of Colon and Rectal Surgeons. 2014; 57 (3).
373
7.5 PatologíaAnorectalBenigna
Calcagno M, Zúñiga JM.
Introducción Absceso y Fístula Anorrectal
Un motivo de consulta habitual en el servicio de urgencia y
consulta ambulatoria es el dolor anal, rectorragia, secreción
anal y sensación de masa anal. A continuación, se describen
las patologías que con mayor frecuencia producen estos
síntomas, las que generalmente pueden ser diagnosticadas
y resueltas con una buena historia clínica y examen físico sin
requerir mayor estudio.
Absceso anal:
A nivel del canal anal, en el espacio interesfintérico, se
encuentran las glándulas anales que drenan a través de
ductos a nivel de la línea pectínea en las criptas anales.
La obstrucción de estos ductos y glándulas facilitaría el
sobrecrecimiento bacteriano y la formación de abscesos
anales (teoría criptoglandular).
La mayoría de los abscesos es de ubicación perianal, pero
tambiénsepuedenencontrarotraslocalizacionesquepueden
hacer más difícil el diagnóstico como la interesfinteriana y
supraelevador
374
Los síntomas que motivan la consulta del paciente son
habitualmente dolor anal, fiebre y puede haber secreción
anal.Eldoloranal,engeneral,esconstanteypuedeempeorar
con la defecación.
Los abscesos anales son mucho más frecuentes en hombres
y se han identificado como posibles factores de riesgo la
diabetes e inmunosupresión.
El paciente debe ser examinado en posición “fetal” decúbito
lateral izquierda. Hallazgos frecuentes son aumento de
volumen perianal, con eritema y sensibilidad. El tacto rectal
puede ser muy doloroso y solo se recomienda en la medida
que el paciente lo tolere. En los abscesos interesfintéricos no
se encuentra aumento de volumen perianal, generalmente
el paciente no tolera tacto rectal y el diagnóstico solo se
consigue con una revisión bajo anestesia en pabellón o con
resonancia magnética de pelvis.
En pacientes con gran dolor, inflamación, mal olor y eritema
extenso de la zona se debe considerar la posibilidad de estar
frente a una “gangrena de Fournier”, lo que consiste enuna
fasceitisnecrotizantedelperiné,conorigenenzonaanorrectal
o vías urinarias, que tiene un comportamiento muy agresivo
y puede llevar a sepsis grave.
Ante el diagnóstico de absceso anal la conducta debe
ser drenaje en pabellón bajo anestesia. Esto permite una
exploración adecuada de la zona anorrectal, drenaje amplio del
abscesoydescartarabscesosenherradura.Generalmente,el
drenaje causa alivio del dolor inmediato y frente a un paciente
que persiste con dolor anal y fiebre en el posoperatorio se
debe considerar la posibilidad de que el absceso ha sido
drenado en forma parcial.
En cuanto al uso de antibióticos en el posoperatorio, este se
reserva solo para pacientes diabéticos, inmunosuprimidos
o con celulitis importante de la zona. Debe estar dirigido a
cubrir gram negativos y anaerobios.
Fistula anorrectal:
Un 40-50% de los pacientes con absceso anal desarrollarán
una fistula anorrectal “clínica” en el mediano-largo plazo.
Una fístula consiste en una comunicación anormal entre dos
superficies epitelizadas, en este caso piel perianal y mucosa
canal anal. Esta se manifiesta con secreción anal (mancha
ropa interior), generalmente no duele y en ocasiones puede
abscedarse y dar origen a nuevo episodio de absceso anal.
Así, se entiende al absceso y fistula anorrectal como las
diferentes etapas de un proceso fisiopatológico común. El
absceso representa el evento agudo y la fistula la etapa
crónica.
En el examen físico se puede encontrar un orificio fistuloso
externo en la piel perianal que se identifica como un nódulo,
en ocasiones con tejido granulatorio o salida de secreción
turbia. Cuando el trayecto fistuloso es superficial este se logra
palpar al tacto rectal.
Lasfístulasanorrectalesseclasificansegúnlaclasificaciónde
Parks, en interesfintéricas, transesfintéricas, supraesfintéricas
y extraesfintéricas.
Las interesfintericas y transesfintericas bajas se tratan
generalmente con una esfinterotomía. Para las fistulas más
complejas, es decir, que comprometen mayor porcentaje
del esfínter externo, se describen múltiples técnicas (setón
cortante, tapón de fibrina, colgajos, LIFT), sin embargo,
ninguna técnica ha logrado demostrar clara superioridad.
El principal riesgo en la cirugía de la fistula anorrectal es la
incontinencia anal, por lo tanto, el tratamiento ideal de la esta
fístula debe poder lograr controlar la infección y síntomas
derivados del trayecto fistuloso sin comprometer la continencia
anal.
Enfermedad Pilonidal
Esta consiste en una infección subcutánea en la zona
sacrocoxigea, unos 5 cm cefálico al ano, la cual contiene
vellos.Loquehabitualmenteseencuentraesunsenopilonidal
en línea media interglutea o paramediana asociado a “fositas”
pilonidales en línea interglutea (figura 3). Su presentación
puede ser con infección aguda, con un seno pilonidal
asintomático o con un seno crónico.
Si bien no hay claridad si esta es una patología congénita o
adquirida, se presenta con mayor frecuencia en pacientes
hombres, adultos jóvenes, con abundante vello, pertenecientes
375
Fístula interesfinteriana
Fístula transesfinteriana
376
Fístula supraesfinteriana
Fístula perianalextraesfinteriana
377
Quiste pilonidal granuloma sifilítico, osteomielitis del sacro y alteraciones de
la columna (espina bífida, meningocele).
Fisura Anal
La fisura anal se define como la pérdida de sustancia o
herida en el epitelio escamoso, distal a la línea pectínea en
el canal anal.
Epidemiología
La verdadera incidencia de la fisura anal no es bien conocida,
puestoquemuchospacientesnoconsultan,acudenadistintos
especialistas o se autodiagnostican. A pesar de ello, es una
de las consultas más frecuentes en coloproctología por dolor
anorrectal(proctalgia)ysepresentaprincipalmenteenadultos
jóvenes, sin diferencia entre hombres y mujeres.
al ejército y conductores de vehículos, lo que hace sospechar
principalmente etiología adquirida.
En la presentación aguda los pacientes consultan por dolor
en zona sacrocoxigea y secreción cuando hay drenaje
espontáneo de pus. En la inspección se identifica eritema
y aumento del volumen doloroso en zona sacrocoxigea. Es
importante examinar la zona perianal para descartar absceso
o fistula anal que sea foco primario. Frente al episodio agudo,
estegeneralmenteseresuelvecondrenajeenboxdeurgencia
y tratamiento antibiótico por 7 días. Es razonable dar un
plazo de un mes, esperando que se resuelva la infección e
inflamación de la zona para decidir si corresponde realizar
una cirugía electiva para hacer resección completa del seno.
Cuando hay un seno pilonidal asintomático generalmente la
consulta es por la palpación de aumento de volumen en zona
interglutea. Si el seno no muestra signos de infección, es
pequeño y no produce mayor molestia, se puede recomendar
la observación ysolo si aparecen síntomas se opta por cirugía
electiva.
Frente a pacientes con seno pilonidal crónico, con secreción
recurrente, fístula asociada, dolor y episodios reiterados de
infección aguda es recomendable una cirugía electiva.
Encuantoaltratamientoelectivodelaenfermedadpilonidal,se
describenmúltiplestécnicas quirúrgicasquebuscancontrolar
la infección y evitar la recurrencia. Estas técnicas se pueden
separar en técnicas abiertas y cerradas.
Antes de programar una cirugía electiva es importante tener
presentelosdiagnósticosdiferenciales quepuedendistraeral
cirujano.Estosson:hidrasadenitis,absceso-fistulaanorrectal,
Su ubicación más frecuente es en la línea media posterior
(75%), y en segundo lugar en la línea media anterior (25%).
En un 3% se presenta en ambas posiciones de manera
simultánea. Con menor frecuencia se localizan en posiciones
atípicas; en estos pacientes se debe descartar la enfermedad
de Crohn, tuberculosis, sífilis VIH/SIDA, carcinoma anal o
trauma.
Fisiopatología
Se considera que el trauma o lesión mecánica del anodermo
por el paso de deposiciones, duras o blandas, es un
factor predisponente para desarrollar fisura anal, pero no
necesariamente causal. Solo un tercio de pacientes con
constipación o diarrea va a desarrollar fisuras.
Loquesisehademostradoenestospacienteseslahipertonía
esfinteriana (presión de reposo del esfínter anal interno
aumentada) y el menor flujo sanguíneo, principalmente a
nivel de la línea media posterior.
Ambas teorías, hipertónica e isquémica, se relacionan
inversamente: al relajar o disminuir el tono del EAI aumenta
el flujo sanguíneo y se corrige la fisura.
Si bien lo anterior se da en la mayoría de las fisuras, no hay
que olvidar que pueden desarrollarse también en pacientes
contononormaldelesfíntero,inclusohipotónico. Estasfisuras
son atípicas y, por lo general, no responden al tratamiento
quirúrgico estándar.
Clasificación
Dependiendo del tiempo de evolución y los hallazgos al
examen físico, la fisura anal puede clasificarse en:
- Aguda: solución de continuidad o herida en anodermo,
eritematosa, que comúnmente se resuelve en un plazo de
4 a 6 semanas.
378
- Crónica: los síntomas duran más de 8 a 12 semanas y
al examen físico se evidencia edema, fibrosis, plicomas
centinelas y una papila hipertrófica proximal a la fisura en el
canal anal (los dos últimos como manifestación inflamatoria
crónica). Por lo general, también se visualizan fibras del EAI
en el fondo de la lesión.
Clínica
El síntoma característico es el dolor anal intenso durante y
particularmente después de la defecación. Los pacientes
describen el dolor como “paso de navajas o vidrio” por el
ano. En la fisura aguda el dolor puede ser de corta duración,
mientras que en la crónica puede durar horas o, incluso
todo el día. Al dolor puede agregarse rectorragia escasa
que el paciente percibe en el papel higiénico. Muchos
espontáneamente refieren miedo a defecar. El trauma por las
deposiciones produce la fisura, que lleva al espasmo reflejo
del EAI, aumentando su presión de reposo, disminuyendo el
flujo, perdurando la herida, dolor e isquemia, lo que produce
un círculo vicioso.
Para el examen físico basta con separar suavemente los
glúteos y traccionar el margen anal con cuidado, ya que el
paciente se encuentra con dolor. Si se visualiza la fisura no
se debe realizar tacto rectal. Con una buena inspección se
puede diferenciar una fisura aguda de una crónica.
Diagnóstico
El diagnóstico de la fisura anal es clínico, con la anamnesis
y examen físico.
Sin embargo, en paciente con dolor intenso y gran espasmo
del esfínter, puede ser necesario una revisión bajo anestesia
en pabellón para poder confirmar el diagnóstico.
Tratamiento
El tratamiento de la fisura tiene como objetivo aliviar el dolor,
ablandando las heces con ingesta de fibra, laxantes (vaselina
o lactulosa) y abundantes líquidos, baños de asiento tibios
y analgésicos, asociados o no a tratamientos específicos
dirigidos a disminuir la presión de reposo del EAI. Estas
medidas generales deben aplicarse a todos los pacientes con
fisuraanal,agudaocrónica,lograndocuraraproximadamente
entre un 44 y 50% de los casos.
Dentro de los medicamentos dirigidos a relajar el EAI y
disminuir su presión de reposo existen:
- Nitratos:
La liberación de óxido nítrico produce relajo del EAI. La
eficaciadeestosmedicamentosesmarginalmentesuperioral
placebo y en forma muy clara inferior a la esfinterotomía. Se
halimitadosuuso,yaquealcompararseconlosbloqueadores
de canales de calcio o toxina botulínica presentan mayores
efectos adversos, principalmente cefalea.
- Bloqueadores de canales de calcio:
Se ha descrito el uso de diltiazem y nifedipino oral y tópico.
Este último en su presentación tópica al 0.2% es considerado
actualmentecomoeldeprimeralínea,yaquelogralacuración
de fisuras agudas en el 70 a 85% de los pacientes.
- Toxina botulínica:
Genera una parálisis muscular reversible que dura entre tres a
Fisuraanal
379
seismeses.Latoxinaseinyectaenelespaciointeresfinteriano
a cada lado de la línea media anterior. Presenta una tasa
de curación entre un 60 a 80% por lo que es una excelente
opción como manejo de segunda línea.
- Otros:
Existen otros tratamientos como los antagonistas adrenérgicos,
agonistas colinérgicos (betanecol) o inhbidores de la
fosfodiesterasa (Sildenafil).
Sin embargo, faltan estudios de calidad sobre su utilización.
El tratamiento médico es efectivo para la fisura anal aguda,
mientras que el tratamiento quirúrgico está reservado para
la fisura anal crónica y/o para aquella que no responde a
tratamiento de primera o segunda línea.
Frente a la no respuesta del tratamiento médico anterior, la
esfinterotomía lateral interna (ELI) es la técnica quirúrgica de
elección. La esfinterotomía puede ser abierta o cerrada,sin
diferencia significativa entre una técnica y otra. La tasa de
curación es de un 95 a 98% y la complicación más temida
es principalmente la incontinencia (0-10%).
Entre los factores de riesgo para incontinencia pos ELI, se
deben considerar: sexo femenino, mayor a 50 años, más de
dos partos, fisura en posparto inmediato, cirugía anorrectal
previa, traumatismo, urgencia defecatoria e hipotonía
esfinteriana. En presencia de estos factores de riesgo, se
debe insistir en el tratamiento médico.
Juegan un rol fundamental en el desarrollo de sintomatología
hemorroidal todas aquellas condiciones que impiden el
adecuado drenaje venoso (congestión venosa yconsiguiente
hipertrofia hemorroidal) o que promueven el prolapso.
Epidemiología
Al igual que el resto de patología perianal, la prevalencia real
de enfermedad hemorroidal es desconocida, aunque se estima
entreun4 y5%.Noexistediferenciaentrehombres ymujeres,
siendo una pequeña proporción los que requerirán cirugía.
Fisiopatología
La constipación (dieta baja en fibra), tos crónica (EPOC),
embarazo, masa intraabdominal o pélvica, ascitis, pujo
prolongado por malos hábitos defecatorios, la bipedestación
(efecto gravitacional), etc., son condiciones que aumentan la
presiónintraabdominaleimpidenelretornovenosoadecuado.
Esto asociado a la debilidad de los tejidos de soporte de las
hemorroides favorece, además, el prolapso hemorroidal,
el cual perpetúa la congestión venosa, especialmente si
sobrepasa el esfínter.
Aunque puede parecer paradójico, la diarrea también puede
agravar o desencadenar una crisis hemorroidal, pues si bien
disminuyeelesfuerzodefecatorio,elaumentodelafrecuencia
es condicionante.
Enfermedad Hemorroidal
La enfermedad hemorroidal se refiere a los síntomas
producidos por las hemorroides. Estas últimas son
almohadillas vasculares que forman parte de la anatomía
normal de los humanos. Según su ubicación en relación
con la línea pectínea pueden ser clasificadas como internas
o externas.
Las hemorroides internas son estructuras vasculoelásticas
en el espacio submucoso que almohadillan el canal anal y se
encuentran proximal a la línea pectínea. Están compuestas por
vasossanguíneos,tejidoconectivo,músculoliso(músculode
Trietz) y tejido elástico. Fisiológicamente existen tres plexos
hemorroidales:lateralizquierdoyanterioryposteriorderecho,
cubiertos por epitelio columnar con inervación visceral (no
duelen).
El complejo esfinteriano no logra cerrar completamente el
canal anal, por lo tanto, la ingurgitación de las hemorroides
contribuye alacontinencia finaalproporcionar estecierreque
falta. Aportan, además, al 20% de la presión de reposo del
esfínter anal y lo protegen del trauma por las deposiciones.
Las hemorroides externas se encuentran distal a la línea
380
381
Hemorroides internos
Clínica
Enelcasodelas hemorroides internas,elsíntomamásfrecuente
es la rectorragia y en segundo lugar el prolapso.
Elsangradoes intermitente,rojofresco,indoloroy enrelacióncon
ladefecación,generalmentealfinal,posterioralpasodelbolofecal.
El prolapso puede ser interno y el paciente refiere sensación de
plenitud rectal, evacuación incompleta o urgencia defecatoria; o
externo, y aqueja sensación de masa o de estar sentado sobre
algúncuerpoextraño,descargamucosaydificultadparamantener
la higieneperianal.
Algunos refieren prurito, ardor o sensación de incomodidad
generalizada.
En caso de existir prolapso, siempre preguntar si se logra reducir
de manera espontánea o con ayuda manual. Esto, junto con el
examen físico, permite clasificar las hemorroides internas, según
Banow, de la siguientemanera:
Grado I: protruyen dentro del canal anal sin prolapsar.
Grado II: protruyen a través del ano con defecación, pero se
reducen espontáneamente.
GradoIII:protruyenatravésdelanoyrequierenreducciónmanual.
Grado IV: prolapsan y no se reducen.
Esta clasificación permite a su vez orientar el tratamiento.
Por otro lado, en las hemorroides externas la rectorragia
es poco frecuente. Por lo general, el paciente nota tejido
perianalredundante,refiere prurito o dificultad paramantener
higiene posdefecación. En caso de presentar dolor, se debe
sospechar una trombosis hemorroidal. Es un dolor intenso,
agudo, localizado, que aumenta con la defecación, asociado
a aumento de volumen duro, sensible al tacto, violáceo o
azulino, cubierto por piel edematosa.Aveces, pueden drenar
espontáneamente y presentar sangrado.
Al examen físico general se debe evaluar la presencia de
signos que contribuyan a la fisiopatología de laenfermedad
hemorroidal (EPOC, embarazo, obesidad, ascitis, etc.). Al
examen físico específico, inspeccionar el anodermo, periné
y región sacrococcigea. Será posible identificar hemorroides
externas, plicomas, hemorroides internas prolapsadas,
lesiones en piel, fisuras, fístulas, abscesos, etc. Siempre
hay que pedir al paciente que puje para ver si con el esfuerzo
se produce prolapso. La palpación digital de la zona permite
evaluar sensibilidad, masas, trombos o induraciones. El tacto
rectal, en caso de palpar alguna masa, obliga a descartar
un tumor.
Finalmente, como parte del examen físico, idealmente debe
realizarse una anoscopía.
382
Diagnóstico
Eldiagnósticodelaenfermedadhemorroidalesclínico.Sibien
conunahistoriayexamenfísicocompatibleeldiagnósticoestá
hecho, es necesario tener en cuenta algunos factores como
edad, historia familiar o personal de cáncer, características
delsangrado, bajadepeso, cambiodehábito intestinal. Estos
síntomas ysignos deben hacer sospechar cáncer colorrectal,
sobretodo en mayores de 50 años y solicitar colonoscopia,
independientedequeelpacientetambiéntengahemorroides.
Tratamiento
En caso de producir síntomas, el objetivo del tratamiento es
el control y/o eliminación de estos a través de un manejo
médico, procedimientos menores o cirugía.
El manejo médico va dirigido principalmente a ablandar las
deposiciones y a aliviar los síntomas. Para ello, se modifican
ladietayalgunoshábitos.Serecomiendaconsumirabundante
fibra (20-35g/día) y líquidos (al menos 2 a 3 litros de agua al
día). Además, se pueden utilizar laxantes como la lactulosa,
vaselina, etc. Asimismo, evitar el pujo excesivo, valsalva,
tiempo prolongado en el baño (más de 5 minutos) y el uso
excesivo de papel higiénico.
El alivio sintomático puede lograrse muchas veces con baños
de asiento que consisten en sumergir la región perianal en
agua tibia por 10 a 15 minutos (más que eso produce mayor
edema). Igualmente, facilitan la reducción manual de las
hemorroides prolapsadas. No existen medicamentos orales
ni tópicos que se utilicen en la práctica clínica y que tengan
un beneficio demostrado.
Entre los procedimientos menores (aplicables en la
consulta), la ligadura con banda elástica es el más usado.
Está indicado en hemorroides grados I, II y algunos grado
III. Consiste en ubicar a unos 2 cm proximales a la línea
dentada una ligadura que va a producir una isquemia del
tejido ligado y una consecuente fibrosis que va a disminuir
el prolapso y sangrado. Una contraindicación relativa para
este procedimiento es la anticoagulación, ya que al quinto
o séptimo día del procedimiento, se desprende la ligadura.
Entre las complicaciones se describe el dolor, sangrado,
trombosis y retención de orina.
Otros procedimientos menores también utilizados en
hemorroides grado I y II, aunque rara vez en la práctica
clínica debido a su mayor costo, son la coagulación infrarroja
y la escleroterapia. La única ventaja de este último es que
es una opción segura en pacientes anticoagulados o con
coagulopatías.
La complicación más grave a todos estos procedimientos es
la sepsis perianal. Debe sospecharse en pacientes con fiebre
y retención urinaria después del procedimiento.
Lacirugíasereservaparalaenfermedadhemorroidalquenoha
presentado respuesta a tratamiento médico o a procedimientos
menores, para aquellos que no toleran procedimientos en
la consulta, hemorroides internas y externas con prolapso
significativo (grado II, III y IV), pacientes con otra patología
anorrectalconcomitanteocoagulópatasenqueseanecesario
cohibir el sangrado.
De todos los pacientes con enfermedad hemorroidal, solo un
5 a 10% finalmente requerirá cirugía.
El gold estándar es la hemorroidectomía clásica, existen dos
técnicas: abierta (Milligan y Morgan, Reino Unido) y cerrada
(Ferguson, EE.UU.).
La hemorroidectomía consiste en la extirpación de los
componentes internos y externos, ligando los pedículos y
cerrando el defecto en la mucosa. En la técnica abierta, el
defecto se espera que cierre por segunda intención en 4 a
8 semanas; en la cerrada, se sutura de manera primaria la
piel. En ambas técnicas el dolor posoperatorio es el principal
problema. La tasa de recidiva global es aproximadamente
un 5% y no habría diferencias estadísticamente significativas
entre una y otra. Las complicaciones son el sangrado (5%),
retención de orina (0.2-36%), incontinencia fecal (2-12%),
estenosis anal (0-6%), infección (0.2-6%) e impactación
fecal (0.4%).
Existe una técnica denominada hemorroidopexia grapada
cuya principal ventaja teórica sobre la hemorroidectomía
clásica es el menor dolor posoperatorio y la reinserción
laboral más rápida. Esta técnica, también conocida como
PPH (Procedure for Prolapse and Hemorroids), consiste en
remover un rodete cilíndrico de mucosa y submucosa rectal,
incluyendo tejido hemorroidal proximal a la línea dentada,
creando una anastomosis circunferencial con stappler. La
principal desventaja es su mayor recurrencia.
En el caso de la trombosis hemorroidal externa, el tiempo de
evolucióndesdeel iniciodel dolores fundamentalparadecidir
el manejo. Si bien la mayoría resuelve espontáneamente con
medidas médicas como el uso de AINES, baños de asiento,
fibra y laxantes, en aquellos pacientes que consultan en las
primeras 48 horas por dolor intenso, podría realizarse una
trombectomía (anestesia local, incisión elíptica en relación
con hemorroide trombosado y drenaje).
383
Fluxión hemorroidal
384
Bibliografía
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385
7.6 CancerColorectal
Ramírez J, Gajardo J, Hierard MD, Gellona J.
Epidemiologìa
El cáncer colorrectal es una enfermedad cada vez más
frecuente en países desarrollados y en vías de desarrollo.
Entre sus características destacan un mejor pronóstico que
otros tumores digestivos, una secuencia carcinogénica
conocida, un tratamiento efectivo y la posibilidad de realizar
diagnóstico precoz y prevención.
Esta enfermedad es especialmente prevalente en países
desarrollados. En Chile ocupa el cuarto lugar como causa
de muerte por tumores malignos y la tasa de mortalidad ha
ido en aumento desde 1990, siendo en la actualidad de 8
por 100.000 habitantes para el cáncer de colon y de 2,5 por
100.00 habitantes para el cáncer de recto1
,2
.
A nivel mundial es el tercer cáncer más común en hombres y
el segundo en mujeres. En Estados Unidos se ha observado
unadisminuciónenlaincidenciaylamortalidadprincipalmente
debido a políticas de detección precoz y mejora en los
tratamientos.
El cáncer de recto, específicamente, da cuenta de 25 - 30%
de todos los cánceres colorrectales3
. La mayor incidencia se
da en la quinta década de vida.
Localización del cáncer colorectal
1 Tasa de mortalidad por tumores malignos según sexo,
Chile 2000-2010. DEIS, Minsal 2010.
2 Donoso A., Villarroel L., Pinedo G. Aumento de la
mortalidad por cáncer de colon en Chile, 1990 - 2003. Rev. Méd.
Chile 2006; 134: 152 - 158.
3 Tjandra JJ, Kilkenny JW, Buie D, Hyman N, Simmang C,
Anthony T et al. Practice parameters for the Management of Rectal
Cancer. Dis Colon Rectum. 2005; 48: 411 - 23.
386
Fisiopatología
El tipo histológico más habitual en el cáncer colorrectal es
el adenocarcinoma, alcanzando un 98% de los casos. El
resto, mucho menos frecuente, se divide en carcinoides,
tumores del estroma gastrointestinal (GIST), linfomas, tumores
neuroendocrinos e indiferenciados.
Se ha observado que al menos un 95% de los cánceres de
colon se desarrolla a partir de pólipos adenomatosos. Los
principales factores que determinan el riesgo de malignidad
de un pólipo son el tamaño, tipo histológico y forma.
El tamaño del pólipo se relaciona con el riesgo de tener
cáncer. En general, se sabe que pólipos de menos de 0,5
cm no tienen riesgo de tener cáncer invasor, sin embargo,
al aumentar el tamaño del pólipo, aumenta fuertemente la
probabilidaddeteneruncáncerinvasor,sobretodolospólipos
mayores a 1 cm.
Conrespectoalahistología,cuantomayorseaelcomponente
velloso del pólipo mayor el riesgo de malignización, como se
observa a continuación:
• Tubulares: 5-6%
• Túbulo vellosos: 10%
• Vellosos: 20%
Laformadelospólipospuedesersésiles(basedeigualancho
que cabeza) o pediculados (base angosta, cabeza ancha).
También se pueden considerar las lesiones de extensión
lateral, las cuales se presentan como lesiones planas.
En general, la recomendación frente al hallazgo de un pólipo
es la extirpación mediante cualquiera de sus métodos, por el
potencial riesgo de progresión a un cáncer invasor.
Genética del cáncer de colon
Existen diferentes vías genéticas mediante las cuales se
puede desarrollar el cáncer de colon. Si bien, el fenotipo final
se puede traslapar, la base genética es diferente.
• Vía del APC (secuencia adenoma-carcinoma): comose
mencionó, la mayoría de los cánceres provienen de pólipos
ylamutaciónmásfrecuenteesladelAPC.Primariamente,
se altera el gen APC que inicia el proceso carcinogénico.
Luego,sevanagregandootrasmutacionesqueleconfieren
elpotencialinvasoraladenoma,formándoseasíelcáncer.
• Vía de inestabilidad microsatelital (MSI): Se entiende
como microsatelites a áreas del DNA que no codifican
para genes individuales. Los MMR (mismatch repair
genes) tienen la función de detección y reparación del
DNA. Al existir mutaciones del gen MMR se acumulan
errores en la replicación microsatelital, lo que se
conoce como inestabilidad microsatelital (MSI), siendo
una causa para el desarrollo de células neoplásicas.
Aproximadamente, 15% de los cánceres colorrectales
son por MSI. Al compararse con cánceres por
mutación del APC, los que son por MSI tienen mejor
pronóstico, pero menor respuesta a quimioterapia.
• Vía serrada: esta vía implica pólipos hiperplásicos (se les
consideraba sin potencial maligno), mixtos, adenomas
serrados clásicos y serrados sésiles. Las alteraciones
que llevarían a cáncer por esta vía estarían relacionadas
con el gen BRAF, entre otros que aún están en estudio.
387
APC K-RAS DCC p53
Otros Cambios
Factores de Riesgo
Factores de riesgo personales
• Edad > 60 años.
• Antecedentes de cáncer colorrectal previo.
• Presencia de pólipos adenomatosos.
• Enfermedad inflamatoria intestinal.
• Obesidad.
• Tabaquismo y consumo de alcohol.
• Dieta: consumo de grasas y carnes rojas.
• Radiación pelviana.
Factores de riesgo hereditarios
• Antecedentes familiares de cáncer colorrectal.
• Poliposis adenomatosa familiar.
• Cáncer colorrectal hereditario no poliposo.
Cancer Colorrectal Esporádico
Laformamásfrecuentedecáncercolorrectaleslaesporádica,
es decir, sin un factor heredable familiar. Aproximadamente,
un 85% de estos cánceres tiene una base en mutaciones
en el gen APC, mientras que un 15% tiene inestabilidad
microsatelital.
Clínica
• Los síntomas son inespecíficos y se debe tener un alto
índice de sospecha para el diagnóstico precoz. Por
lo general, la aparición de síntomas se relaciona con
enfermedad avanzada.
• Sintomatología general:
de anemia ferropriva debería llevar a un estudio de
hemorragia GI4
.
• Obstrucción por masa abdominal.
• Dolor.
• Baja de peso.
• Perforación.
• Enfermedad metastásica.
• Cáncer de colon derecho: en las últimas cuatro décadas
ha habido un aumento de incidencia de cáncer de colon
derecho. Generalmente, se manifiesta mediante anemia
ferropriva por un sangrado oculto en las deposiciones.
• Cáncer de colon izquierdo: a diferencia del lado derecho,
presenta síntomas gastrointestinales como alteración
del tránsito intestinal, dolor abdominal y sangrado rectal
visible.
• Importante: todo diagnóstico de colon irritable en
pacientes mayores de 40 años debe ir de la mano con
una colonoscopía que descarte la presencia de cáncer.
• Cáncerderecto:enestadiosiniciales,elcáncerderectose
puedepresentarcomorectorragiay/ocambiosenelhábito
intestinal. Al examen físico, el tacto rectal podrá dejar en
evidencia masas rectales bajas. En pacientes mayores
de 50 años no se debe atribuir el sangrado a enfermedad
hemorroidaluotrapatologíaproctológicasinantesrealizarla
colonoscopia de rigor para descartar lesionesneoplásicas.
• Se debe recalcar que la mayoría de los cánceres de colon
son asintomáticos y que su detección precoz es la única
manera de disminuir la mortalidad por esta enfermedad,
porloqueesmuyimportante,dadalaconocidaprogresión
de adenoma a carcinoma, el tamizaje en pacientes
asintomáticos.
• Cambios de hábitos intestinales.
• Sangrado.
• Anemia por déficit de fierro: cualquier diagnóstico
4 Courtney M. Townsend JR., Beauchamp D. Colon and
Rectum. En Sabiston Textbook of Surgery, p. 1350. Canadá:
Elsevier. 2012.
Metástasis
Carcinoma
Adenoma
tardío
Adenoma
intermedio
Adenoma
temprano
Displasia
Epitelio
colónico
normal
388
Tamizaje Diagnóstico
Sesabequelapoblaciónobjetivodetamizajesonlosmayores
de 50 años sin factores de riesgo conocidos,asintomáticos,
en quienes se recomienda realizar una colonoscopía cada
10 años buscando adenomas de colon5
. Otras opciones de
tamizaje son: test de hemorragia oculta en deposiciones (de
ser positiva se indica colonoscopía), sigmoidoscopía flexible,
enema de bario con doble contraste y colonografía con TAC.
Manejo de pólipos
No es infrecuente el diagnóstico de pólipos en colonoscopías
de control o de tamizaje. Como se sabe, estos pólipos son
las lesiones precursoras del cáncer colorrectal, por tanto,
podemos dividir según la cantidad y tamaño de estos a los
pacientes en diferentes estratos de riesgo que determinarán
su seguimiento posterior.
Bajo riesgo:
1 - 2 pólipos <1 cm de diámetro —> control con colonoscopía
cada 3 a 5 años.
Riesgo intermedio:
3 - 4 adenomas o 1 de >1 cm diámetro —> control con
colonoscopía cada 3 años.
Alto riesgo:
>5 adenomas o 3 + 1 de esos >1 cm
diámetro —> control con colonoscopía al año
Los pólipos resecados con cáncer intramucoso, a veces
denominadoporalgunospatólogoscomocarcinomainsitu,no
tienen riesgo de metástasis linfática, por lo que se consideran
tratados si los márgenes son negativos.
Los que presentan cáncer que invade hasta la submucosa
(pT1, en una polipectomía) resecados completamente y con
histología favorable podrían observarse también, aceptando
el riesgo que conlleva de compromiso linfonodal, que es de
un 10% aproximadamente.
La cirugía se recomienda para especímenes:
• Histología desfavorable (grado 3 - 4, invasión
angiolinfática).
• No evaluables (fragmentados).
• Márgenes positivos (<1mm del borde).
• Pólipo nivel IV de Haggit.
• Invasión de sm2 y sm3 o mayor a 1000 micras (la
submucosa se puede dividir en tercios en sm1, sm2 y
sm3).
Una vez que se tiene la sospecha de un cáncer colorrectal
por la clínica y examen físico del paciente es necesario
complementar el estudio para confirmar el diagnóstico.
La colonoscopía es el examen de elección para el diagnóstico
de cáncer de colon, puesto que permite visualizar la lesión,
ubicarsuposiciónenelcolon,descartarpresenciadelesiones
tumorales sincrónicas (3 a 5% de los casos) u otros pólipos
(25 a 30% de los casos), tomar biopsias y, eventualmente,
marcarla si fuese necesario.
Una vez que tenemos el diagnóstico histológico de cáncer
colorrectal se debe realizar el estudio de etapificación para
descartar diseminación de esta enfermedad. Para esto,
se utiliza el TAC de tórax, abdomen y pelvis con contraste
endovenoso.
En el caso específico del cáncer de recto adicionamos,
además, al estudio una resonancia de pelvis, de manera
de determinar mejor la extensión local. También se puede
asociar el estudio con una endosonografía rectal en lesiones
tempranas.
El antígeno Carcinoembrionario (CEA) es un marcador del
cáncerdecolon,sinembargo,sedebeconsiderarquenotodos
los cánceres lo producen, por lo tanto, no sirve como método
de tamizaje en forma aislada, siempre debe acompañarse de
algún otro examen. Su mayor utilidad es en posoperatorio,
donde los niveles elevados pueden indicar enfermedad
residual, o bien, de haberse normalizados sus valores y
presentar una nueva alza, recidiva de la enfermedad.
5 Dr. Juan Carlos Weitz Vatture, Dr. Zoltán Berger Fleiszig.
(2013). Cáncer de Colon y recto . En Diagnóstico y tratamiento de
enfer-medades digestivas (p. 262). Las Condes, Santiago: Iku.
389
Clasificación de Haggitt para pólipos pediculados:
Nivel 0 Carcinoma in situ (mucosa).
Nivel 1 Invade la submucosa, limitado en la cabeza.
Nivel 2 Invade la submucosa hasta el cuello del pólipo.
Nivel 3 Invade submucosa hasta el tallo.
Nivel 4 Invasión de la submucosa debajo del tallo, sin comprometer la muscular
propia.
390
Cáncer de Colon
Etapificación
La clasificación más ampliamente utilizada es la desarrollada
por la AJCC (American Joint Committee on Cancer) conocida
como la TNM. En el cáncer de colon sería la siguiente6
:
Tumor primario
TX Tumor primario no puede ser establecido
T0 Sin evidencia de tumor primario
Tis Carcinoma in situ intraepitelial (o invasión de la
lamina propia)
T1 Tumor invade la submucosa
T2 Tumor invade la muscular propia
T3 Tumor invade tejidos pericolonicos
T4
T4a
T4b
tumor penetra la superficie visceral del peritoneo
Tumor invade directamente o se encuentra
adherido a otras estructuras
Ganglios linfáticos regionales
NX Invasión no se puede determinar
N0 Sin metástasis linfática
N1
N1a
N1b
Metástasis en 1 a 3 ganglios linfáticos regionales
metástasis en 1 ganglio linfático regional
metástasis en 2-3 ganglios linfáticos regionales
N2
N2a
N2b
Metástasis en 4 o mas ganglios linfáticos
regionales
metástasis en 4-6 ganglios linfáticos regionales
metástasis en 7 o mas ganglios linfáticos
regionales
Metástasis distales
M0 Sin metástasis distales
M1
M1a
M1b
Con metástasis distales
Metástasis confinada a un órgano o sitio
Metástasis en mas de un órgano o sitio del
peritoneo
6 American Joint Committee on Cáncer: Colon and Rectum. En
AJCC Cáncer Staging Manual. 6th ed. New York, NY; Springer-
Verlag, 2002, paginas 113 – 124.
391
Tratamiento
Los pilares fundamentales del tratamiento del cáncer de
colon son la cirugía y la quimioterapia. La cirugía es el
tratamiento de elección en el cáncer de colon. Es la única
terapia potencialmente curativa. La quimioterapia adyuvante
está indicada en algunos tumores etapa II con ciertos factores
de riesgo y en todos los etapa III y IV.
Cáncer de colon, conceptos generales:
• Resección en bloque del segmento comprometido.
• Mantener un margen de 5 cm de tejido sano al menos, lo
que puede llegar, incluso a 10 cm si la cirugía lo permite.
• La resección debe incluir tanto la arteria nutrientecomo
eldrenajelinfáticocorrespondiente alsegmentoextraído.
Linfadenectomía: la resección debe incluir al menos 12
ganglios linfáticos.
Drenaje linfático de colon y relación con arterias
392
Cirugía según localización del tumor:
• Los cánceres localizados en ciego, colon ascendente
y flexura hepática se someten a una hemicolectomía
derecha. Para esto, se liga la arteria ileocólica y la cólica
derecha, cuando existe. La sección del íleon es a 10 - 15
cm proximal de la válvula ileocecal, mientras que el colon
transverso se secciona proximal a la rama derecha de la
cólica media. Posteriormente, se realiza una ileotransverso
anastomosis.
Hemicolectomía derecha
393
• Tumoresubicadosencolontransversopuedensometerse
aunahemicolectomíaderechaextendida,enque,además
delosvasos ligados en lahemicolectomía,se liga la rama
izquierda de la cólica media.
Hemicolectomía derechaextendida
394
• Para las lesiones ubicadas en la flexura esplénica o
colon descendente, el manejo quirúrgico puede ser una
hemicolectomíaderechaextendidaounahemicolectomía
izquierda. En esta última, se liga la arteria mesentérica
inferior en su origen y se secciona el colon transverso a
proximal y sigmoides distal/recto superior a distal.
• Los tumores de sigmoides se pueden manejar con una
sigmoidectomía, en que se liga la arteria mesentérica
inferior en su origen. A proximal se secciona el colon
descendente y a distal la sección a nivel del promontorio.
Hemicolectomía izquierda
395
La cirugía laparoscópica en cáncer de colon ha demostrado
los beneficios de menor dolor posoperatorio y reinserción
laboral más rápida. Además dos estudios randomizados, el
primero llamado COLOR un estudio europeo y su equivalente
norteamericano llamado COST, concluyeron que la cirugía
laparoscópica es una opción viable ycon resultados idénticos
a los de una laparotomía, siempre y cuando sean realizados
porcirujanosentrenadosenlatécnica.Portanto,sisecumplen
estos criterios se debe optar por la técnica laparoscópica.
Actualmente, no está en duda los beneficios de la cirugía
laparoscópica en cáncer de colon y debe ser considerado
el estándar.
Casos especiales:
• En casos en que exista elevado riesgo de dehiscencia
de la anastomosis como, por ejemplo, obstrucción,
perforación con peritonitis y/o desnutrición, se puede
optar por una resección del segmento comprometido,
dejando una ostomía para el segmento proximal. Este es
el caso de la cirugía de Hartmann, en que pacientes que
se presenten con un cáncer de sigmoides con factores
de riesgo de dehiscencia, se realiza una sigmoidectomía,
dejando ostomizado el colon descendente. El recto se
cierra y queda dentro de la cavidad abdominal. Una vez
corregidos los factores de riesgo, se puede someter a
una nueva cirugía para reconstitución de tránsito.
OperacióndeHartmann
396
Cancer de Recto
Etapificación
La clasificación TNM del cáncer de recto es la siguiente:
Tumor primario (T)
TX Tumor primario no identificado
T0 Tumor no se puede evaluar
Tis Carcinoma in situ: Intraepitelial o invasión de lámina propia
T1 Invade la submucosa
T2 Invade la muscular propia
T3 Invade a través de la muscular propia al tejido pericolorectal
T4a Penetra a la superficie del peritoneo visceral
t4B Invade directamente o se adhiere a la superficie de otros órganos
Linfonodos regionales (N)
NX Linfonodos no pueden evaluar
N0 Linfonodos sin metástasis
N1 Metástasis en 1-3 LN
N1a Metástasis en 1 LN
N1b Metástasis en 1-3 LN
N1c Tumor se deposita en subserosa, mesenterio o tejido no peritonizado pericólico o peri-
rectal sin metástasis a LN
N2 Metástasis en 4 o más LN
N2a Metástasis en 4-6 LN
N2b Metástasis en 7 o más LN
Metástasis a distancia (M)
M0 Sin metástasis a distancia
M1 Metástasis a distancia
M1a Metástasis a un órgano/sitio (Hígado, pulmón, ovario o LN no
regional
M1b Metástasis en más de 1 órgano/sitio o peritoneo
397
Estadio
Estadio T N M Dukes MAC
0 Tis N0 M0 - -
I T1
T2
N0
N0
M0
M0
A
A
A
B1
IIA T3 N0 M0 B B2
IIB T4a N0 M0 B B2
IIC T4b N0 M0 B B3
IIIA T1-T2
T1
N1/N1c
N2a
M0
M0
C
C
C1
C1
IIIB T3-T4a
T2-T3
T1-T2
N1/N1c
N2a
N2b
M0
M0
M0
C
C
C
C2
C1/C2
C1
IIIC T4a
T3-T4a
T4b
N2a
N2b
N1-N2
M0
M0
M0
C
C
C
C2
C2
C3
IVA Any T Any N M1a
IVB Any T Any N M1b
Tratamiento
Los pilares fundamentales del tratamiento del cáncer de recto
son la neoadyuvancia con radioterapia y quimioterapia, la
cirugía y la quimioterapia adyuvante.
Neoadyuvancia
Elconceptodeneoadyuvanciatieneporobjetomejorarelcontrol
local de la enfermedad en tumores de recto medio o inferior
con etapificación preoperatoria T3 - T4 o con adenopatías
(N+). Se utilizan dos esquemas, uno que utiliza una dosis
de 50.4 Gy en cinco semanas con quimioterapia basada en
5-FUo capecitabinacomoagenteradiosensibilizador. Luego
se esperan ocho a doce semanas y se realiza la cirugía. El
otro esquema aprobado se realiza con 25 Gy en cinco días y
posteriormente la cirugía a los siete días. Ambos esquemas
tienenporobjetivodisminuirlarecidivalocal,estasedisminuye
de un 25% a 5-10%.
Cirugía
Existen diversas técnicas quirúrgicas que se pueden utilizar
para la resección de un cáncer de recto y para esto se debe
elegir la más adecuada para cada paciente.
Cirugía radical con preservación de esfínter
Utilizada en pacientes con cáncer de recto invasivo con
pronóstico de la función esfinteriana adecuado (tumor no
compromete el esfínter y pacientes que tienen función
esfinteriana previo a cirugía).
• Resecciónanteriorbajaconescisiónmesorrectaltotal:es
eltratamientoóptimoparacánceresderectomedioydistal
sin compromiso de esfínter. Lo que se busca conseguir
con esta cirugía es lograr resecar el tumor con margen
398
distal y circunferencial adecuado, incluir linfonodos para
estatificar adecuadamente y preservar las estructuras
nerviosas. Se reseca el colon sigmoides y recto hasta
que el margen distal está libre de tumor y se realiza una
anastomosis de colon descendente con el recto o ano,
según cuan distal sea el cáncer. En general, como es
una anastomosis baja y en tejido irradiado se deja una
ileostomía de protección para evitar las consecuencias
de la filtración. La ileostomía se cierra a los tres meses.
Cirugía radical sin preservación de esfínter
Está indicada cuando el tumor de recto invade el aparato
esfinteriano o en casos en que la función previa no es
adecuada. También se utiliza en casos de recurrencia
poscirugía con preservación de esfínter.
• Resección abdominoperineal u operación de MIles:
Consiste en la resección de la región rectosigmoidea,
el recto, el ano, el mesenterio y mesorrecto para
posteriormente realizar una colostomía terminal.
Resección transanal
Utilizado para pacientes con T1N0, tumores de < 3 cm a < 8
cm del margen anal y bien diferenciados.
• Técnica: en posición de litotomía o navaja sevillana, se
infiltra con anestésico local el plano interesfinteriano. Se
expone la lesión y se realiza la resección llegando hasta
el plano de la grasa perirrectal para obtener un margen
profundo de >3 mm. El problema de este método es
la imposibilidad de estudio de los linfonodos y siendo
posible las metástasis a estos en estadios tempranos
la selección adecuada de los pacientes es imperativa.
La recidiva local o linfonodal en estos casos es entre un
10 a 13% por lo que NO se debe considerar el estándar
y está reservado para casos seleccionados.
• Otras técnicas: resección transesfiteriana, transacra.
Quimioterapia:
Laquimioterapiatienelasmismasindicacionesqueencáncer
de colon y se utilizan los mismos esquemas terapéuticos.
Enfermedad Metastásica
Aproximadamente entre un 50 - 60% de los pacientes
diagnosticadosconcáncercolorrectaldesarrollanmetástasis.
Elprincipalsitioafectadoeselhígado,losiguenlospulmones,
huesos y cerebro.
Lasobrevidaacincoañosdepacientessometidosaresección
deltumorprimarioydelasmetástasishepáticasalcanzahasta
un 38%. Este procedimiento se puede realizar en una etapa
(evitando así una segunda laparotomía) o en dos.
Los pacientes candidatos a estetratamientosonaquellos que
tienenunbuenperformancestatus,tumoresresecables yque
el volumen hepático residual posterior a la resección de las
metástasis (sin importar el número de ellas) sea de >25%.
Además deben recibir quimioterapia con esquema FOLFOX
neoadyuvante y adyuvante.
Seguimiento
Se ha detectado que un 85% de las recurrencias ocurren
dentro de los primeros dos años posresección quirúrgica,
por lo tanto, el seguimiento debe ser especialmente acucioso
durante este período.
• La recomendación es realizar una colonoscopía
al año de la cirugía y posteriormente según los hallazgos
encontrados. La medición del CEA debe realizarse cada
tres meses durante un período de dos años, luego cada
seis meses hasta los cinco años. TAC de abdomen y pelvis
bianual en búsqueda de metástasis.
Pronostico
La sobrevida del cáncer colorrectal por etapas es:
Etapa I: 93%
Etapa II: 72-85%
Etapa III: 44-83%
Etapa IV: 8- 40%
Cancer Colorrectal Hereditario
Nos referiremos brevemente al cáncer hereditario que, como
ya se mencionó, constituye el 15% de todos los cánceres
de colon. Sin embargo, solo un bajo porcentaje de estos se
consideran “sindromáticos”, aproximadamente un 3 a 5 %
de todos los cánceres corresponde a Síndrome de Lynch o
cáncer colorrectal hereditario no polipósico (HNPCC) y un
1% corresponde a la poliposis adenomatosa familiar(FAP).
Poliposis adenomatosa familiar de colon (FAP): enfermedad
de herencia autosómica dominante. Presenta mutación
germinal en el gen APC. Se relaciona con otros cánceres
como tumores periampulares y tumores del sistema nervioso
central. Los pacientes presentan desde cientos a miles de
pólipos colorrectales y tienen un riesgo de malignidad de un
100%.Esporestarazónqueestáindicadalaproctocolectomía
profiláctica.
399
HNPCC o síndrome de Lynch: enfermedad de herencia
autosómicadominante.Elriesgodemalignizaciónalolargode
la vida es de un 70 - 80% y se asocia a la aparición de cáncer
endometrial en las mujeres en un 30 - 60% de los casos7
.La
recomendación es iniciar colonoscopías anuales o cada tres
años a partir de los 20 - 25 años. El análisis genético debe ir
orientado a la búsqueda mutaciones germinales en los genes
involucrados en la inestabilidad microsatelital.
Bibliografía
1. National Comprehensive Cancer Network (NCCN). Rectal Cancer. NCCN Clinical Practice Guidelines in Oncology. Version.2106
2. National Comprehensive Cancer Network (NCCN). Colon Cancer. NCCN Clinical Practice Guidelines in Oncology. Version.2106
3. Robin K.S. Phillips, Sue Clark. Colorectal Surgery. 5th Edition. Elsevier. 2014
7 Courtney M. Townsend JR., Beauchamp D. Colon
and Rectum . En Sabiston Textbook of Surgery, p.1346.
Canadá: Elsevier.
400
401
Hernias
402
403
8.1 Hernias de la Pared Abdominal
Rodríguez D, Morelli C, Díaz M,
Sepúlveda R.
Introducción
Corresponden a la protrusión anómala de vísceras o epiplón
a través de un defecto congénito o adquirido localizado en
la pared abdominal o en los orificios anatómicos existentes.
Han acompañado al hombre desde sus inicios. Es, además,
un defecto que se ve, se evidencia a la palpación, y se
reconoce hoy tal y como se hizo en la antigüedad. En el
siglo XXI continúa diagnosticándose mayoritariamente con
las manos del cirujano.
Toda hernia se compone de:
• Anillo herniario: corresponde al defecto anatómico por
el cual protruye la hernia.
• Saco herniario: evaginación de peritoneo queemerge
a través del anillo herniario.
• Contenido: constituido por vísceras, epiplón o grasa.
Componentes de una hernia
404
Clasificación
Lasherniassepuedenclasificarsegúnlocalización,etiología,
reductibilidad y compromiso vascular1
.
1. Según su localización en la pared abdominal en:
a) Hernias de la región inguinal: hernia inguinal directa e
indirecta, femoral o crural.
b) Hernias de la región anteromedial (ventrales): hernia
umbilical, línea blanca, línea semilunar de Spiegel.
c) Herniasdelaregiónposterolateral(lumbares):herniasde
Grynfelt (triángulo lumbar superior) y de Petit (triángulo
lumbar inferior).
d) Hernia incisional o eventración: se desarrollan en zonas
de incisiones quirúrgicas.
e) Hernias pélvicas: agujero obturador, periné, ciática.
Hernias paredanterior
1 Acevedo A. Clasificación de las hernias de la región
inguinal. En: Acevedo A, Hernias Inguinofemorales. Anatomía y
técnica quirúrgica. Santiago, Chile: Ed. Mediterráneo 2012, pp.
109-115.
Hernias posteriores
405
2. Según su etiología en:
a) Congénitas:eldefectoestápresentedesdeelnacimiento.
b) Adquiridas: el defecto se desarrolla por debilidad de las
capas musculoaponeuróticas de la pared abdominal.
3. Según reductibilidad:
a) Reductible: es posible reintroducir el saco herniario con
su contenido al abdomen con maniobras de taxis.
b) Irreductible: no es posible su reducción.
4. Según ubicación con respecto a la pared misma en:
a) Externas: el saco protruye completamente a través de la
pared del abdomen.
b) Internas: están dentro de la cavidad abdominal (ejemplo:
Hernia diafragmática, hiatal).
Hernia extrangulada
5. Según estado vascular en:
a) Atascada: cuando la hernia se hace irreductible en forma
aguda, al principio el compromiso de la irrigación es
venoso e incluso reversible.
b) Estrangulada: si se mantiene el atascamiento, con el
paso de las horas se compromete la irrigación arterial
de la víscera protruida.
Por otra parte, existen hernias con algunas características
especiales:
• Hernia de Richter: atascamiento delborde
antimesentérico del intestino herniado.
• Hernia de Littré: el contenido del saco herniario esun
divertículo de Meckel.
• Hernia deslizada: el saco herniario está formado
por peritoneo fusionado con la pared de una víscera
(intestino grueso o vejiga).
• Hernia epigástrica: en línea media supraumbilical en
los sitios de emergencia de los vasos perforantes dela
pared abdominal.
• Hernias pélvicas: obturatriz, ciático, periné.
• Hernia paraostómica: se desarrollan adyacentes auna
ostomía.
• Hernia de Spiegel: se localiza en el tercio inferior de los
rectos abdominales (línea de Spiegel).
Epidemiología2
El 10% de la población general presenta una hernia de la
pared abdominal durante su vida, constituyendo un problema
relevante de salud pública. Corresponde a la segunda cirugía
electiva más frecuente en nuestro país, donde se realizan
aproximadamente 30.000 hernioplastías por año. Es la
enfermedad quirúrgica más frecuenteenhombres.Encuanto
a la incidencia, el 75% de las hernias corresponden a hernias
inguinales (2/3 son del tipo inguinal indirecta y 1/3 directa).
La hernia incisional representa el 15%, la femoral el 7%,
umbilical 3%, epigastrica 2% y otras un 2%.
La hernia inguinal indirecta es la hernia más común,
independientemente del sexo y es más frecuente al lado
derecho. La incidencia de hernia inguinal en el hombre es
25 veces mayor que en la mujer.
2 Ministerio de Salud, Chile. Guía Clínica Herniasde
pared abdominal. Santiago: Minsal, 2008.
406
La hernia femoral es más frecuente en la mujer, con una
relación es 10:1 mujer/hombre.
La evolución natural de una hernia es siempre hacia su
progresivo aumento de tamaño e irreductibilidad con el
transcurso del tiempo, haciendo más difícil su reparación
Clínica
La presentación de las hernias de la pared abdominal varía
en cuanto a su localización. Hernias pequeñas pueden ser
asintomáticas, o bien, presentar molestias o dolor al protruir
por el defecto en la pared. En general, presentan un aumento
de volumen que el paciente nota sobre todo al realizar
maniobras de Valsalva. En el caso de las hernias incisionales
este aumento de volumen se encuentra en relación con la
incisión de alguna cirugía.
Las hernias abdominales que son grandes y provienen de
defectosenlapareddegranvolumensehanasociadotambién
a dorsalgia crónica, compromiso o dificultad respiratoria y
problemas psicológicos por alteración de la imagen corporal.
El examen físico de estos pacientes debe realizarse con el
paciente de pie y acostado. En general, se podrá palpar la
masa, evaluar su reductibilidad, y definir el defecto. De existir
una hernia en el examen abdominal, deben descartarse
hernias coexistentes con una exploración exhaustiva.
Diagnóstico
Para el diagnóstico de las hernias abdominales basta con el
examen físico en la mayoría de los pacientes. Sin embargo,
existen algunos casos de hernias pequeñas no palpables
en las cuales son de utilidad el ultrasonido y/o la tomografía
computarizada (TC). Las hernias epigástrica, de Spiegel,
inguinal, femoral, incisional y umbilical se pueden observar
con ultrasonido. En cambio, si estamos frente a la sospecha
deunahernialumbar,obturatriz,perinealociáticaespreferible
pedir una TC. La TC también es de gran utilidad en pacientes
obesos en quienes el examen físico es difícil. La ventajade
losmétodos de imágenes parael diagnóstico es quepermiten
identificar hernias pequeñas y además el contenido del saco
herniario.
Hernias Inguinales
Las hernias inguinales se clasifican en directas o indirectas,
según su relación con los vasos epigastricos inferiores. El
saco de la hernia directa se origina medial a estos vasos y la
hernia indirecta surge lateral a ellos através del anillo inguinal
profundo en dirección al anillo superficial y al escroto. Con
en pantalón es cuando coexisten un componente directo e
indirecto.
Anatomía de la región inguinal3
Un adecuado conocimiento de la anatomía inguinal es
fundamental para una correcta reparación herniaria por
cirugía. Inmediatamente bajo la piel, encontramos el tejido
subcutáneo, luego la Fascia de Camper y bajo ella, la Fascia
de Scarpa, que se continúa con la fascia del muslo en la
regiónfemoral,dondeadquiereelnombredeFasciadeColles.
El músculo oblicuo externo (MOE) es el más superficial
de la pared abdominal lateral y se origina en las últimas 7-8
costillas, dirigiendo sus haces hacia medial y caudal. Las
fibras más cefálicas del músculo se insertan mediante su
aponeurosis en la hoja anterior de la vaina del músculo recto,
mientras que las fibras aponeuróticas más caudales lo hacen
en el borde externo de la cresta ilíaca, en la espina ilíaca
anterosuperior (EIAS) y en el tubérculo púbico, formando el
ligamento inguinal. Las fibras aponeuróticas que se insertan
en el tubérculo pubiano se separan al aproximarse a este,
constituyendo el anillo inguinal superficial, por donde dejan
el canal inguinal el cordón espermático en el hombre y el
ligamento redondo en la mujer. A nivel del anillo inguinal, el
MOE acompaña al cordón espermático en su descenso hacia
el escroto, constituyendo su capa más externa, que lleva el
nombre de fascia espermática externa.
El músculo oblicuo interno (MOI) se origina en los dos
tercios anteriores de la cresta ilíaca, en la EIAS y en el
ligamento iliopectíneo. Sus haces musculares se orientan
haciacefálico,anterior ymedial.Losmáscefálicosseinsertan
en el borde libre de las costillas y sus cartílagos, mientras
que la porción medial se hacen aponeuróticos, dividiéndose
en dos láminas que rodean al músculo recto. Por encima de
la línea semicircular, la lámina anterior se une con las fibras
aponeuróticasdelMOEconlasqueconstituyenlahojaanterior
de la vaina del músculo recto abdominal. La lámina posterior
seuneconlaaponeurosisdeinsercióndelmúsculotransverso
para formar la hoja posterior de dicha vaina.
Bajolalínea semicircular,laaponeurosis del MOIseincorpora
completamente a la aponeurosis del MOE y el músculo
transverso (MT), pasando por anterior al músculo recto
anterior. En su parte más caudal, el MOI es empujado por la
formación del proceso vaginal y por el descenso del testículo
hacia el escroto, dando origen al músculo cremáster.
El músculo transverso del abdomen (MT) es el más
profundo de los músculos del abdomen. Se origina en la
cara interna de los últimos 6 cartílagos costales, que se
interdigitanconla insercióndeldiafragma.En laregión medial
sus fibras acompañan al MOI hasta insertarse en la vaina
del recto. Las fibras más caudales, junto con el MOI, forman
el progresivo aumento de volumen es difícil distinguir una
hernia indirecta de otra directa, pero en términos prácticos
esta distinción no tiene mayor importancia porque la técnica
quirúrgica utilizada en su reparación es la misma. Una hernia
3 Acevedo A. Anatomía de la región inguinofemoral. En:
Acevedo A. Clasificación de las hernias de la región inguinal.
En: Acevedo A, Hernias Inguinofemorales Anatomía y técnica
quirúrgica. Santiago, Chile: Ed. Mediterráneo 2012, pp. 25-51.
407
un tendón que fortalece la pared posterior del canal inguinal
(arco aponeurótico del transverso).
Se denomina fascia transversalis (FT) a la capa de tejido
conectivo interior del abdomen (fascia endoluminal), que
conecta músculos y aponeurosis de la pared abdominal y
contribuye a conformar la pared posterior del canal inguinal.
En la región inguinal, esta fascia posee zonas másgruesas
que son el tracto iliopubiano, la vaina femoral ylos ligamentos
de Henle y de Hesselbach.
El ligamento pectíneo o de Cooper es un cordón de tejido
conectivodensoquecubrelacrestapectíneaentreeltubérculo
pubiano y la eminencia iliopectínea. Constituye el piso de la
fosa oval y recibe este nombre porque es el sitio de origen
del músculo pectíneo.
El conducto o canal inguinal es una abertura o grieta sin
paredes propias que traduce el complejo pasaje del cordón
espermático a través de la pared abdominal para alcanzar
el escroto. Tiene una longitud de 4 cm y se extiende entre el
anillo inguinal profundo o interno y el superficial oexterno.
Con fines didácticos se le describen 4 paredes, donde la
pared anterior es la aponeurosis del MOE, mientras que la
posteriorlaconstituyenlafasciatransversalisylaaponeurosis
del MT. El techo o pared superior está formado por el tendón
conjunto, fusión de las fibras más caudales del MOI Y MTA y
el piso o pared inferior por el ligamento inguinal.
El conducto inguinal contiene al cordón espermático en
el hombre (compuesto por el conducto deferente, vasos
gonadales, plexo pampiniforme, fascia espermática y
cremastérica) cubierto por el músculo cremáster por lados
ventral, media y lateral; y en mujeres al ligamento redondo.
Además, contiene vasos linfáticos y los nervios ilioinguinal,
iliohipogastrico y rama genital del genitofemoral.
Anatomía conductoinguinal
408
Conducto inguinal
El anillo inguinal profundo está ubicado en la pared
posterior del conducto inguinal inmediatamente lateral a los
vasos epigástricos inferiores, se localiza en el punto medio
y superiormente al ligamento inguinal, y representa el lugar
donde el cordón espermático abandona el abdomen para
dirigirse a la bolsa escrotal. Por esta zona protruyen las
hernias inguinales indirectas.
El anillo inguinal superficial se forma hacia medial sobre
el tubérculo pubiano, donde las fibras del MOE se separan
para formar un surco de forma triangular que dará paso al
cordón espermático hacia el escroto.
El triángulo deHesselbach está delimitado lateralmentepor
los vasos epigástricos inferiores, medialmente por el borde
lateral del músculo recto del abdomen, inferiormente por el
ligamento inguinal y corresponde al lugar por donde protuyen
las hernias inguinales directas.
El orificio o canal femoral es una prolongación de la FT
que comunica la pelvis con el muslo y da paso a los vasos
ilíacos, los que al cruzarlo pasan a llamarse vasos femorales,
y a los linfáticos provenientes de la extremidad inferior. De
forma triangular, su límite anterosuperior está formado por
los ligamentos inguinal y lacunar, su límite posteroinferior
por el ligamento pectíneo (ligamento de Cooper) y su límite
lateral por la vena femoral.
Etiopatogenia4 5 6
Lascausasporlasqueseproducenlasherniasinguinofemorales
pueden atribuirse a factores congénitos u adquiridos, pero en
la mayoría existe una debilidad musculoaponeurótica de la
pared más una condición de mayor presiónintraabdominal.
1. Persistencia del conducto peritoneovaginal: la
persistencia del conducto peritoneo vaginal, que
permite en la vida intrauterina la bajada de los
testículos desde el abdomen hacia la bolsa
escrotal es la causa de la hernia inguinal en niños.
2. Anatomía de la región inguinal: la pared posterior del
conductoinguinaleseláreamásdébildelaparedabdominal
por menor resistencia de la musculatura de la zona.
3. Aumentodelapresiónintraabdominal:condicionescomo
constipacióncrónica,prostatismo,toscrónica,embarazo,
trabajo pesado de levantar cargas y obesidad producen
undebilitamientodelamusculaturaporrelajacióncrónica.
4 Broggi M, Salva J. Fisiopatología de la región inguinal.
En: Hernia inguinocrural. Barcelona: JIMS, 1982; 75-78.
5 Conner WT, Peacock EE. Some studies on the etiology of
inguinal hernia. Am J Surg 1973; 126:732-35.
6 Bórquez P.Estudio inmunohistoquímico del colágeno tipo I
y tipo III en piel de pacientes con hernia inguinal primaria. Rev Chil
Cir 2005; 57(6): 489-94.
409
Anatomía región inguino-crural (visión por interior)
4. Mala síntesis de colágeno: pacientes con patología
herniaria tienen una disminución de la relación entre
las fibras de colágeno tipo I y III con un concomitante
y significativo aumento del colágeno tipo III. El tabaco
produce un efecto deletéreo sobre las fibras y células
de los tejidos conectivos del organismo. Senilidad,
desnutriciónysedentarismoproducendéficitenlasíntesis
de colágeno. Además, existen diversas condiciones
genéticas asociadas con la aparición de una hernia
inguinal, tales como la enfermedad de Ehler Danlos, el
riñón poliquístico (autosómico dominante) y el síndrome de
hiperlaxitud ligamentosa, debido a síntesis y/o formación
inadecuada de las fibras de colágeno, con tasas de
incidencia de hernias entre 33 a 43%.
Manifestaciones clínicas y diagnóstico
Habitualmente, se presentan como un abultamiento o aumento
de volumen reductible en la zona inguinal que protruye con
Valsalva, que se reduce al cesar este o en forma espontánea,
sin síntomas de relevancia o puede acompañarse de una
molestia vaga o de parestesias por la compresión de los
nervios inguinales por la hernia. Rara vez se presenta con
dolor quecoincideconlosepisodiosdeprotrusión, yquecede
rápidamente una vez reducido el contenido protruido. Si el
pacienterefieredolorimportanteenlazonahayquesospechar
atascamientooestrangulación;sinoexisteevidenciafísicade
herniahayquesospecharotrascausasdedolor.Enocasiones
son asintomáticas y descubiertas de manera incidental durante
un examen físico de rutina, o bien, por el mismopaciente.
La simple inspección de la zona es suficiente para sospechar
el diagnóstico. La exploración visual y palpación de la zona
inguinal debe realizarse de pie y en decúbito, observando
abultamientos o masas. Las hernias inguinales se palpan
comounaumentodevolumenporsobreelligamentoinguinal,
mientras que las hernias crurales se palpan bajo el ligamento
inguinal.
Paraidentificar laherniaencasos dudosos (pacientes obesos
o hernias pequeñas) es útil solicitar al paciente que efectúe
una maniobra de Valsalva (toser, pujar) y que el examinador
introduzca la yema de un dedo en el conducto inguinal,
invaginando la piel del escroto, para sentir la protrusión del
contenido, maniobra que además permite diferenciar entre
hernia directa o indirecta.
En la mayoría de los casos, la hernia inguinal se reconoce
fácilmente y basta con una adecuada anamnesis y examen
físico para llegar al diagnóstico. Cuando no se comprueba al
examen físico el aumento de volumen inguinal descrito por el
paciente, puede pedírsele que camine durante unos minutos
y volver a examinarlo, repetir la exploración en otro control,
410
o bien, solicitar algún estudio imagenológico.
La ecografía de partes blandas tiene varias ventajas como
bajocosto,disponibilidad,rapidez,noirradia;peroesoperador
dependiente. Una hernia se reconoce ecográficamente por
el defecto fascial y por la protrusión anormal del contenido
herniario con el esfuerzo y su posterior reducción con la
compresión del transductor. Debe solicitarse solo cuando
exista duda diagnóstica respecto de alguna masa localizada
en la zona inguinal o en pacientes con hernias de difícil
palpación. Cabe recalcar que el diagnóstico es netamente
clínico, por lo que el diagnóstico ecográfico de pequeñas
hernias no palpables no son indicación quirúrgica, por ser
defectos clínicamente irrelevantes. En cuanto a la tomografía
axialcomputada yresonancianuclearmagnética,suprincipal
utilidad es en sospecha de hernias complicadas, dado que
permite evaluar signos precoces de compromiso vascular
visceral, obstrucción intestinal, perforaciones intestinales, etc.
También sirve en el diagnóstico de hernias poco comunes
como la de Spiegel o la obturatriz.
Diagnóstico diferencial
Hay que diferenciar las hernias inguinofemorales con cualquier
tumoraciónquepudieraaparecerendicharegión,porejemplo,
adenopatías de las enfermedades linfoideas (ejemplo, linfoma
de Hodgkin), metástasis de tumores, infecciones en los
miembros y enfermedades de transmisión sexual. Puede
haber manifestaciones en forma de flegmón o abscesos de
estas enfermedades, o de los músculos adyacentes, que
pueden confundir el diagnóstico de hernia.
Tambiénexistenlipomasquepuedencreceryhacersospechar
hernias inexistentes. Para diferenciar una hernia de un
hidrocele, se debe realizar la prueba de la transiluminación,
aplicando un foco de luz directo sobre la tumoración que en
un principio simulaba una hernia.
Otros diagnósticos diferenciales son los varicoceles,
aneurismas y pseudoaneurismas de la arteria femoral
(especialmente si existe antecedente de acceso vascular
por la arteria femoral para procedimientos endovasculares).
Clasificación
Existen muchas clasificaciones de las hernias inguinales,
siendo la más utilizada la de Nyhus. Sin embargo, la mayoría
de los cirujanos prefiere describir las hernias según tipo,
localización y estado clínico.
Complicaciones
Las hernias presentan complicaciones primarias y secundarias.
Entre las primeras se describen:
• Irreductibiidad:noesposiblereintroducirelsacoherniario
y su contenido a la cavidad abdominal.
• Atascamientooincarceración:laherniasehaceirreductible
en forma aguda y el paciente consulta por dolor. Puede
llevar a obstrucción intestinal. Existe compromiso vascular
delavísceraprotruidaconsistenteenedemaycongestión
por dificultad del retorno venoso, que es aún reversible.
• Estrangulación: con el paso del tiempo (6 a 8 horas)
aparece intenso dolor por compromiso isquémico (arterial)
de la víscera herniada, con traslocación bacteriana y
posibilidad de infarto y perforación intestinal, peritonitis,
sepsis y shock.
• Pérdida del derecho a domicilio: no existe la suficiente
capacitancia en la cavidad abdominal para permitir
reintroducir el contenido herniado, por lo que unintento
forzado de reducción produce un aumento brusco de
la presión intraabominal y puede generar un síndrome
compartimental.
Soncomplicacionessecundariasdelasherniaslaobstrucción
intestinal, perforación, peritonitis, sepsis, shock.
Tratamiento de la hernia inguinal
En general, toda hernia inguinal debe ser operada en cuanto
se diagnostica debido a que su evolución natural es siempre
hacia su progresivo aumento de tamaño e irreductibilidad con
el transcurso del tiempo, lo que hace más difícil la reparación
quirúrgica. Además, existe el riesgo de complicaciones
potencialmenteletales,comolaestrangulación.Laexcepción
son las hernias con anillo muy amplio en pacientes con alto
riesgoquirúrgico,situaciónenqueantiguamenteseutilizaban
los bragueros como tratamiento conservador, aunque en la
actualidad su uso es excepcional.
Cuando la hernia es pequeña y asintomática se puede
observar durante un tiempo (“watchful waiting”), aunque el
tratamiento definitivo siempre será la cirugía.
En relación con el momento de la operación, cuando la
hernia es fácilmente reductible al examen y sin signos de
complicación debe realizarse una reparación quirúrgica
electiva. Cuando la hernia está atascada, caracterizada
porque el paciente refiere dolor e irreductibilidad súbitos y
es muy sensible a la palpación, puede intentarse maniobras
de taxis o reducción manual de la hernia, administrando
analgesia i.v.,posicióndeTrendelemburg yaplicandopresión
constante desde la parte más distal de ella. Si la reducción
es exitosa, se aconseja operar en forma electiva lo antes
posible. Debe desistirse de la reducción después de uno o
dos intentos frustros y proceder a operar de urgencia para
evitar la estrangulación.
Cuando existe sospecha de estrangulación (hernia con más
de 6 a 8 horas de atascamiento y/o sospecha de obstrucción
intestinal o peritonitis), no se debe intentar reducirla, pues
la reintroducción de un intestino isquémico o necrótico a la
cavidad abdominalpuede producir unaperforaciónintestinal,
411
peritonitis y sepsis. En estas circunstancias se debe operar
de urgencia.
Tratamiento quirúrgico
Existen distintas modalidades de reparación quirúrgica de
la hernia inguinal, considerando la vía de abordaje utilizada
(vías anterior o abierta o clásica, posterior, laparoscópica);
y el uso o no de material protésico. El abordaje quirúrgico
más común en la hernia inguinal es la reparación por vía
anterior abierta con una malla protésica, existiendo varias
técnicas. La utilización de una malla de material protésico
(hernioplastía) permite una reparación libre de tensión, lo que
disminuye la posibilidad de recidiva. La reparación herniaria
sin protesis (herniorrafía), poco usada actualmente debido
a su mayor porcentaje de recidiva, está indicada en casos
con contaminación del sitio quirúrgico (hernia estrangulada,
resección intestinal simultánea) en que está contraindicado
la colocación de malla.
Las técnicas de reparación herniaria más utilizadas son:
1. Herniorrafías inguinales clásicas por vía anterior (sin
uso de prótesis).
• Operación de Bassini: Eduardo Bassini (1884-1929) sentó
las bases de la cirugía herniaria moderna por medio de
la reparación de la pared posterior del conducto inguinal.
Consiste en la sutura del arco del transverso y el tendón
conjunto al ligamento inguinal. Presenta una tasa de
recidiva alta (promedio a 5 años de un 5 a10%), debido
a la tensión generada en los tejidos.
• Operación de McVay o reparación del ligamento de
Cooper: utilizada primero por Lotheissen (Austria, 1897),
pero popularizada por Chester McVay (1924). Une la
aponeurosis del músculo transverso al ligamento de
Cooper yalligamentoinguinal.Produceunagrantensión,
por lo que incluye una incisión de relajación en la vaina
del recto anterior.
• Operación de Shouldice: desarrollada por el Dr.
Shouldice en 1950 en Toronto, Canadá. Se abre la fascia
transversalis y repara la pared posterior del conducto
inguinal con 4 planos de suturas continuas imbricando
los planos profundos y superficiales que incluyen la
fasciatransversalis ylosplanosaponeuróticos.LaClínica
Shouldice reporta una baja tasa de recidiva con esta
técnica (1 a 2%).
2. Herniorrafía inguinal clásica por vía posterior (sin
uso de prótesis).
• Operación de Nyhus: Lloyd Nyhus (1959) publicó su
técnica basada en el acceso a la región inguinal por vía
preperitoneal. Por esta vía se pueden tratar tanto hernias
inguinales como crurales.
3. Hernioplastía inguinal por vía anterior con uso de
prótesis.
• Técnica de Lichtenstein: se utiliza una malla protésica
que se sutura al ligamento inguinal y al tendón conjunto;
cortando la malla en un borde lateral para permitir el paso
del cordón inguinal y creando un nuevo anillo inguinal
profundo. Sus ventajas son el menor dolor posoperatorio
y baja recidiva (promedio menor al 2%).
• Técnica de Gilbert: Arthur Gilbert en 1992 inventó un
dispositivo de dos mallas unidas por un cilindro (Prolene
Hernia System), donde uno de los extremos se introduce
por el anillo inguinal profundo y el otro extremo cubre
el conducto, lo que permite una reparación en 2 planos
(preperitoneal y anterior). No requiere suturas, se fija
gracias a la presión intraabdominal. Se reporta un bajo
índice de recidiva (menor a 2%7
), pero tiene mayor costo.
• Técnica de Rutkow-Robbins: introduce un tapón cónico
de malla en el anillo inguinal profundo que se sutura o
no a los tejidos vecinos8
.
4. Hernioplastía inguinal por vía posterior con uso de
prótesis.
• Técnica de Stoppa-Rives: En 1969, Stoppa describió
una reparación usando una malla protésica de gran
tamaño colocada en el espacio preperitoneal. Denominó
su técnica “reforzamiento protésico gigante del saco
visceral”. Indicada en grandes hernias (inguinoescrotales),
enherniasbilaterales yenrecidivadas.Noprecisasuturar
la prótesis, que se mantiene en posición gracias a la
presión intraabdominal.
5. Hernioplastía inguinal laparoscópica9
.
Por vía laparoscópica se accede al espacio preperitoneal
de la región inguinal, colocando una malla que refuerza la
paredposteriordelconductoinguinal.Permitelavisualización
y reparación simultánea de defectos herniarios bilaterales,
tanto inguinales como crurales, por el mismo acceso. En la
actualidad se utilizan 2 tipos de técnica laparoscópica:
7 Gilbert A. An anatomic and functional classification for the
diagnosis and treatment of inguinal hernia. Am J Surg, 1989;157-
331.
8 Rutkow IM. Aspectos epidemiológicos, económicos y
sociológicos de la cirugía de la hernia en Estados Unidos en el
decenio de 1990. Clín Quir Nort (ed. española). Vol. 6/98; 889-899.
9 Takata MC, Duh QY. Laparoscopic inguinal hernia repair.
Surg Clin North Am, 2008; 88: 157-178.
412
• Técnica transabdominal preperitoneal (TAPP): descrita
por Schulz y Arregui en 1992. Se accede al interior
de la cavidad abdominal con laparoscopía, se abre
el peritoneo inguinal horizontalmente por encima
del defecto herniario, reduciendo el saco herniario y,
posteriormente, colocando una malla en el espacio
preperitoneal reparando el defecto. Tiene buenos
resultados, con índices de recidiva menores al 3%, pero
el principal argumento en su contra es el riesgo potencial
de lesiones intraabdominales vasculares o viscerales.
• Técnica totalmente extraperitoneal (TEPP): se accede
disecando el espacio preperitoneal infraumbilical con
un dispositivo inflable introducido a través de la pared
abdominal,perosinpenetraralinteriordelabdomen,loque
evita el riesgo de lesiones viscerales intraabdominales.
Presentamayordificultadtécnicaportenermenorespacio
para la disección.
Las ventajas de la técnica laparoscópica son menor dolor
posoperatorio, recuperaciónmás rápida, menor dolor crónico
posoperatorio, mejor visualización anatómica y permite la
reparación simultánea por el mismo acceso de defectos
herniarios bilaterales, tanto inguinales como crurales. Sus
desventajas son requerir anestesia general, mayor tiempo
operatorio, mayor costo y una tasa de recidiva ligeramente
mayor a la vía anterior con malla.
La hernioplastía laparoscópica debe ser considerada como
alternativa útil en el tratamiento de hernias bilaterales o
recidivadas, mientras que en una hernia inguinal primaria
unilateral es preferible una técnica abierta con prótesis.
Tratamiento quirúrgico de la hernia femoral
La hernia femoral se produce a través del conducto femoral y
produce un aumento de volumen bajo el ligamento inguinal.
Representa el 10% de toda la cirugía herniaria y debido a su
alta posibilidad de incarceración debe operarse siempre. El
50% de hombres con hernia femoral presentan una hernia
inguinal directa concomitante, versus solo el 2% de las
mujeres,loquedebeconsiderarseenlatécnicadereparación.
Las alternativas son:
1. Reparación clásica sin prótesis.
• Acceso femoral: cierre del orificio femoral con puntos
entre el ligamento inguinal y el ligamento de Cooper.
• Acceso inguinal: reparación con el ligamento de Cooper,
se utiliza cuando coexisten una hernia crural con una
inguinal (el 50% de hombres con hernia femoral presenta
una hernia inguinal directa concomitante versus solo el
2% de las mujeres).
• Acceso preperitoneal: en casos de estrangulaciónpermite
examinar la viabilidad de las vísceras herniadas y su
eventualreparación,ademásderepararelorificiofemoral.
2. Reparación con prótesis.
• Colocaciónporvíafemoralopreperitoenaldeuntapónde
malla enrollado en modo de cigarro, obliterando el canal
femoral, suturado en los puntos cardinales.
• Colocación de prótesis por vía inguinal (Lichtenstein).
• Laparoscópica TAPP o TEP: técnica similar a la descrita
en la reparación de la hernia inguinal.
Complicaciones de la cirugía herniaria inguinal 10
Al igual que en cualquier procedimiento, la hernioplastía
presenta riesgo de complicaciones.
a) Infección: la infección de la herida operatoria se describe
entre un 1 a 2% de la cirugía herniaria electiva. En caso
de infección, estas pueden ser tratadas con pautas
adecuadas de antibióticos. En caso de compromiso de
la malla protésica, puede requerir su extirpación para el
manejo definitivo.
b) Complicaciones hemorrágicas: las equimosis y
hematomas no son infrecuentes, describiéndose hasta
en un 12% de los pacientes. Las causas más frecuentes
de hematomas pequeños suelen ser vasos superficiales,
con lesiones de la arteria epigástrica superficial o la
circunfleja ilíaca. También se han descrito en lesiones
de los vasos espermáticos externos. Las lesiones de los
vasosfemoralesengeneral danhematomasimportantes,
expansivos, que deben ser reparadas en pabellón. El
tratamiento inicial debe ser expectante. En caso de
progresar (hematomas expansivos), debe resolverse
de manera quirúrgica.
c) Atrofia testicular/orquitis isquémica/esterilidad: son las
lesiones viscerales más frecuentes de la cirugía herniaria
inguinal. Se describe en un 0.3%, subiendo hasta un
0.46% en hernias recidivadas. La causa fundamental
de la orquitis isquémica es la trombosis de las venas
testiculares del cordón espermático, por disección
excesiva de este durante la cirugía. Se manifiesta como
inflamación testicular, dolor y fiebre en el posoperatorio
inmediato, con evolución lenta, precisando tratamiento
con antiinflamatorios. En su evolución puede causar
atrofia testicular, con eventual esterilidad en caso de ser
orquitis bilaterales.
d) Dolor posoperatorio: muy variable, se ha reportado
entre un 0 al 10% en los centros especializados. De vital
importancia, dado que muchos pacientes se presentan
10 Álvarez Caperochipi J, Porrero Carro JL, Dávila Dorta D.
Guía clínica de la AEC: Cirugía de la pared abdominal. Madrid: Ed.
Arán, 2002.
413
sindoloralmomentodeldiagnóstico.Segúntemporalidad
se dividen en agudos y crónicos (3 meses el punto de
corte). Se divide en dolor somático (daño en músculos o
ligamentos), visceral (daño a las estructuras viscerales
dentro del cordón), o neuropático (daño o atrapamiento
de nervios) 11
.
e) Lesionesintestinalesyvesicales:laslesionesintestinales
son extraordinarias, principalmente se encuentran en
las reparaciones laparoscópicas. Las lesiones vesicales
pueden suceder por la presencia de hernias deslizadas,
comotambiénporlareparaciónlaparoscópica.Estaúltima
requiere reparación inmediata en dos planos, además de
una sonda vesical posoperatoria.
f) Lesióndelconductodeferente:susecciónes infrecuente.
En caso de evidenciarse en el acto quirúrgico, se
puede reparar con técnicas microquirúrgicas. Puede
comprometer su función por fibrosis posquirúrgica, lo
que puede causar diseyaculación. Se acompaña de
dolor inguinal con la eyaculación, por distensión brusca
del deferente.
g) Desplazamiento, adherencias y rechazo: el rechazo a la
prótesissueletenerrelaciónconcontaminaciónoinfección.
El desplazamiento es excepcional y suele deberse a una
mala técnica de fijación. Se han descrito adherencias
viscerales que han cursado con obstrucción intestinal y
fístulas intestinales a largo plazo. Su tratamiento exige
el retiro de la prótesis, y reparar el defecto causado12
.
Hernia Incisional
Lasherniasincisionalescorrespondenalaprotrusiónanormal
de vísceras o epiplón a través de un defecto adquirido, pos
quirúrgico, de la pared abdominal. Representan el 15-20%
de las hernias de la pared abdominal13
. Son dos veces más
frecuentes en mujeres que hombres.
Se estima que las hernias incisionales se desarrollarán en
10-15% de los pacientes que fueron sometidos a cirugía
previa14
. Y en cuanto a los pacientes que desarrollaron una
infeccióndeheridaoperatoriaestenúmeroaumentaal23%15
.
11 Bay Nielsen M, Perkins FM, Kehlet H. Pain and functional
impairment 1 year after inguinal herniorrhaphy: a nationwide
questionnaire study. Ann Surg, 2001; 1: 1-7.
12 Neumayer L. Is the presence of an inguinalhernia
enough to justify repair? Ann Surg, 2006;244:174-175.
13 Carlson MA, Ludwig KA, and Condon RE: Ventral hernia
and other complications of 1000 midline incisions. South Med J
1995; 88: pp. 450-453.
14 Mudge M, Hughes LE. Incisional hernia: a 10 year
prospective study of incidence and attitudes. Br J Surg 1985; 72:70.
15 Bucknall TE, Cox PJ, Ellis H. Burst abdomen and incisional
hernia: a prospective study of 1129 major laparotomies. Br Med J
(Clin Res Ed) 1982; 284:931.
Seconocencondicionesqueaumentanelriesgodedesarrollar
una hernia incisional, puesto que toda condición que inhiba
el proceso de cicatrización normal va a tener más riesgo
herniario. Entre estas condiciones encontramos infecciones,
obesidad, tabaquismo, uso de inmunosupresores, tensión
excesiva sobre la herida, malnutrición, suturas dehiscentes,
enfermedades del tejido conectivo.
Las hernias incisionales han sido descritas en relación
con incisiones paramedianas, subcostales, McBurney,
Pfannenstiel,eincisionesenelflanco.Lasentradasencirugía
laparoscópica también puedenser unsitio de herniación.Asu
vez, hay estudios que comprueban que una incisión vertical
tiene mayor riesgo de generar hernias incisionales versus
una incisión transversal16
.
La mayoría de las hernias incisionales se observan en el
periodo posoperatorio temprano, sin embargo, se pueden
presentar hasta 10 años pos cirugía o más.
Clínica
La presentación de las hernias incisionales es variable. Hernias
pequeñas pueden ser asintomáticas, o bien, presentar dolor
al protruir por el defecto en la pared. En general, hay aumento
de volumen en relación con la cicatriz de alguna cirugía que
el paciente nota aún más al realizar maniobras de Valsalva.
Soloel10-15% de lashernias incisionales sepresentancomo
hernia atascada causando obstrucción intestinal17
.
El examen físico de estos pacientes debe realizarse con el
paciente de pie y acostado. En general, se podrá palpar la
masa, evaluar su reductibilidad y definir el defecto. De existir
una hernia en el examen abdominal idealmente se procederá
a realizar un examen abdominal y lumbar exhaustivo para
identificar hernias coexistentes.
Diagnóstico
Para el diagnóstico de hernia incisional basta con el examen
físico en la mayoría de los pacientes; sin embargo, existen
algunos casos de pacientes con hernias pequeñas que no
suelen ser palpables, en estas es de utilidad el ultrasonido
y/o la tomografía computarizada. La TC también es de gran
utilidad en los pacientes obesos en quienes el examen físico
es muy dificultoso.
La gran ventaja de los métodos de imágenes para el
diagnóstico es que permiten identificar la hernia y, además,
el contenido del saco herniario.
16 Fassiadis N, Roidl M, Hennig M, et al. Randomized
clinical trial of vertical or transverse laparotomy for abdominal aortic
aneurysm repair. Br J Surg 2005; 92:1208.
17 Courtney CA, Lee AC, Wilson C, O’Dwyer PJ. Ventral
hernia repair: a study of current practice. Hernia 2003; 7:44.
414
Diagnóstico Diferencial
En general, se pueden confundir más las hernias por otras
patologías cuando estas se encuentran en el contexto de
una complicación aguda, frente a esto se debe tener en
cuenta como diagnóstico diferencial hematomas de la pared
abdominal y el tumor desmoides u otro tipo de sarcomas.
La diastasis de los rectos no se debe confundir con hernias
de la pared abdominal. Esta es una condición adquirida
donde la separación entre los rectos es mayor a 2 mm, pero
no existe defecto de la fascia.
Tratamiento
El tratamiento de las hernias incisionales es en su mayoría
quirúrgico. La reparación herniaria puede realizarse solo
con suturas (rafia), o bien, con una malla protésica (plastía).
Herniorrafia: se realiza la incisión por la cicatriz anterior,
disecando el saco herniario hasta identificar la fascia que lo
rodea. Se desbrida y los bordes de la fascia son suturados
para invaginar el contenido. Es importante que al cerrar la
fascia en lo posible se realice una sutura libre de tensión
para no generar mayor recidiva y complicaciones como dolor
crónico posoperatorio. Esta técnica está indicada en hernias
de pequeño tamaño (menos de 2-3 cm de diámetro).
Hernioplastía: la reparación herniaria con malla logra
disminuir al mínimo la tensión sobre la pared abdominal y, en
general,se prefiere sobre la herniorrafía, ya quetienen menor
recidiva. La malla se puede poner sobre la fascia o bajo ella.
La vía de abordaje puede ser abierta o laparoscópica. El uso
de malla está especialmente indicado en hernias de mayor
tamaño. La vía laparoscópica tiene menor riesgo de infección
del sitio operatorio, hay menor dolor posoperatario y requiere
menor tiempo de recuperación. Para los pacientes obesos la
operación vía laparoscopía es la mejor opción disponible en
este momento, ya que reduce significativamente la tasa de
infección asociada a la cirugía de reparación.
Otras Hernias de la Pared Abdominal
Epigástrica
Son defectos de la línea media abdominal situados entre
el proceso xifoides y el ombligo. Hasta el 20% de este
tipo de hernias es múltiple. Es raro que se compliquen con
atascamientooestrangulación.Sucontenidoesenlamayoría
omento y solo en muy pocos casos intestino delgado. Estas
hernias se reparan en pacientes sintomáticos con cirugías
pequeñas de preferencia por vía abierta. Se incinde la piel
dondeestálaherniacon unaincisiónpequeña, loscontenidos
de la hernia pueden ser reducidos o resecados y se cierra el
defecto con puntos separados. La recurrencia de este tipo
de hernias es infrecuente.
Lumbar
Son hernias que se desarrollan en la región lumbar (desde
la 12.ª costilla hasta la cresta iliaca). En general, se dan en
dos localizaciones:
1. Triángulo de Grynfelt: es el triángulo lumbar superior,
espacio limitado por la 12.ª costilla y borde inferior del
serrato posterior inferior, borde externo del músculo
cuadrado lumbar y borde posterior del oblicuo interno.
2. Triángulo de Petit: es el triángulo lumbar inferior, tiene
como límites por anterior el músculo oblicuo mayor,por
posterior el músculo dorsal ancho y por inferior el borde
de la cresta ilíaca.
Estetipo de hernias pueden sercongénitas oadquiridas, pero
en su mayoría son adquiridas con el antecedente de cirugía
previa, especialmente nefrectomía.
La reparación de este tipo de hernias puede ser por vía
laparoscópica o vía abierta, sin importar cuál sea la vía
es de suma importancia en la reparación usar malla, esta
puede ser colocada en el plano profundo a la pared muscular
si se realiza el procedimiento vía abierta, o bien, puesta
adyacentealdefectosiserealizareparaciónlaparoscópica.La
complicación más notoria del posoperatorio es dolor crónico,
este se relaciona con la dificultad de la técnica de fijación de
malla debido al margen costal.
Obturatriz
Son un tipo poco frecuente de hernias de la pared abdominal,
en que el contenido herniario protruye por el agujero
obturador. En general, son anteriores y mediales al paquete
vasculonervioso obturatriz. Toda condición que aumente la
presión intraabdominal aumenta el riesgo de generar estas
hernias. Se observan comúnmente al lado derecho, pero
pueden ser bilaterales y se ha observado mayor incidencia
en mujeres que han pasado por grandes bajas de peso. Estas
hernias se reparan vía abierta o laparoscópica con malla.
Paraestomales
Son hernias adyacentes a una ostomía, por lo que su
localización puede ser diversa. Su corrección depende de
la afección y si influye o no en la funcionalidad de la ostomía
realizada.
Perineales
Protrusión herniaria a través del piso pélvico. En general,
estas hernias ocurren pos cirugía y en mujeres mayores
multíparas. Son clasificadas en anterior y posterior según su
relación con el musculo perineal transverso.
415
Ciáticas
Herniaciones por el foramen ciático mayor o por el foramen
ciáticomenor.Sonherniasextremadamenterarasqueocurren
en contexto de cirugía pélvica. En ellas, el contenido del
saco herniario no solo puede tener intestino y omento, sino
que también involucrar órganos reproductores y del sistema
urinario. Se pueden presentar con obstrucción intestinal,
sépsis urinaria o sépsis glútea. Estas hernias se reparan con
la reducción del contenido y el cierre del defecto con o sin
malla, ya sea por vía laparoscópica o vía transglútea.
Spiegel
Hernias de la línea semilunar. En general, se diagnostican
como hallazgo de la TC o en una laparoscopia, esto se da
porque la mayoría de estas hernias son interparietales. Este
tipo de hernia se diagnostica muybien con ultrasonido. Hasta
el 20% de estas hernias se presenta como hernia atascada,
es por esto que se recomienda al diagnóstico la reparación
de la hernia de manera electiva. La cirugía se realiza por vía
abierta,realizándoseunaincisiónensentidotransversaljusto
superior a la masa palpable, se deben reducir los contenidos
del saco herniario y este se puede sacar o invertir.
Umbilical
En los adultos lo más común es que las hernias umbilicales
estén dadas por aumento de la presión intraabdominal. Se
dan con mayor frecuencia en hombres 3:1. En general, el
contenido es omento. Al diagnóstico de una hernia umbilical
no es necesaria la reparación inmediata, sino que pueden ser
observadas, sin embargo, si estas son sintomáticas deben
ser reparadas. Para la reparación vía abierta se accede por
encima del defecto con una incisión vertical, se llega al saco
herniario pudiendo invertirlo o resecarlo y se cierra la fascia
si el defecto es pequeño solo con suturas, o bien, con una
malla si el defecto es grande.
416
Bibliografía
1. Acevedo A, Hernias Inguinofemorales. Anatomía y técnica quirúrgica. Santiago, Chile: Ed. Mediterráneo 2012.
2. Ministerio de Salud, Chile. Guía Clínica Hernias de pared abdominal. Santiago: Minsal, 2008.
3. Towfigh S, Neumayer L. Inguinal Hernia. In: Cameron J, Cameron A. Current Surgical Therapy 11th Edition. Philadelphia: Elsevier;
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Philadelphia: Elsevier; 2017.
5. Carbonell Tatay F. Hernia Inguinocrural. Valencia: Ed. Vimar, 2001.
417
Cirugía Vascular
418
419
9.1 Enfermedad Cerebrovascular
Ramírez J, Wuth MF, Ubilla M.
Introducción
La ateroesclerosis, como proceso patológico sistémico,
puede afectar a nivel de la arteria carótida común, bifurcación
carotídea, carótida interna y/o arterias vertebrales generando
una estenosis y, por tanto, alteración del flujo sanguíneo
arterial hacia el cerebro. Esto es lo llamamos enfermedad
carotídea, que posee tasas de incidencia no despreciables,
en especial en poblaciones de adultos mayores. Estudios
epidemiológicos han estimado prevalencias de estenosis
carotídea en un 3.8% de los hombres y 2.7% de las mujeres,
en pacientes de 25-84 años1
.
La importancia de esta patología radica en que es la causa
preveniblemásfrecuentedeaccidentescerebrovasculares2
y,
por consiguiente, su intervención disminuye la morbimortalidad
de estos pacientes.
Etiología
• Aterosclerosis (la más frecuente).
• Displasia fibromuscular.
• Disección carotídea.
• Arteritis de Takayasu.
• Aneurismas.
• Necrosis posradiación.
• Vasoespasmo.
Enfermedad Carotídea Ateroesclerótica
Patogenia
La región más afectada de la carótida por enfermedad
ateroesclerótica es la bifurcación, específicamente el bulbo
carotídeo.Aquí, el diámetro del vaso es dos veces mayor que
en la carótida interna distal al bulbo, produciendo fenómenos
hemodinámicos que no se ven en otras arterias del cuerpo,
favoreciendo la formación de placas de ateroma. El flujo en
la carótida común es laminar, al dividirse en la bifurcación
permanece laminar y de alta velocidad. Se ha observado en
estudios de flujo con burbujas de hidrógeno que en la pared
externa del bulbo existe un área de bajo flujo no laminar
y estasis, lo que aumentaría el tiempo de interacción de
partículas con la pared del vaso, explicando así la mayor
prevalencia de placas iniciales a este nivel.
Factores de Riesgo
Son los factores de riesgo cardiovascular y ayudan a enfocar
un examen físico y anamnesis dirigida en búsqueda de
síntomas y signos de enfermedad carotídea. Se han descrito
como factores independientes:
• Edad
• Tabaco
• EAO
• HTA
• Enfermedad coronaria
• DM
• DLP
• Aneurisma aórtico
Diagnóstico
Clínica
El cuadro clínico de presentación es variable y depende
del grado de estenosis y la posibilidad de generar émbolos
que se crean a partir de la placa de ateroma. Los pacientes
con enfermedad carotídea se dividen en dos grandes
grupos, asintomáticos y sintomáticos, ya que existe mayor
morbimortalidad en estos últimos, lo que influye en el
tratamiento.
Pacientes asintomáticos
• Existe un grupo de pacientes que no presentarán
síntomas, lo que no quiere decir que estén exentos de
riesgo para presentar un accidente cerebrovascular. En
casos en que la estenosis provoca una alteración al flujo
significativa, definida como un lumen residual a nivel del
origen de la arteria carótida interna <1.5mm3
, se puede
pesquisar en el examen físico, como un soplo sistólico
en la región carotídea.
1 Mathiesen EB, et al: Prevalence of and risk factors
associated with carotid artery steno-sis: the Tromsø Study.
Cerebrovasc Dis 2001; 12: pp. 44-51
2 Mathiesen EB, et al: Prevalence of and risk factors
associated with carotid artery steno-sis: the Tromsø Study.
Cerebrovasc Dis 2001; 12: pp. 44-51
3 Can U, Furie K, Suwanwela N, Southern J, Macdonald
N, Ogilvy C et al. Transcranial Doppler Ultrasound Criteria for
Hemodynamically Significant Internal Carotid Artery Ste-nosis
Based on Residual Lumen Diameter Calculated From En Bloc
Endarterectomy Specimens. Stroke. 1997;28:1966-1971
420
Pacientes sintomáticos
• Accidente isquémico transitorio (TIA): pérdida de alguna
función cerebral específica, de forma transitoria, con una
duración de menos de 24 horas, generalmente entre 2
a 15 minutos. Sin déficit posterior al evento. Según su
manifestación indicará la región del cerebro que dejó de
ser perfundida, localizando el sitio de isquemia.
• Amaurosisfugax:pérdidadelavisiónunilateraltransitoria.
Es causada por un émbolo en la arteria oftálmica. El
paciente puede presentar pérdida completa o parcial del
campo visual. La duración es de minutos, sin embargo,
puede haber secuelas.
• Accidente cerebrovascular (ACV): déficit neurológico de
más de 24 horas de duración. Este tema es muy amplio
y debe estudiarse dirigidamente.
Imágenes
Ecografía Doppler carótido-vertebral: es el test más útil,
permite medir la severidad de la estenosis según la velocidad
de flujo. Así, a mayor grado de estenosis, mayor velocidad
de flujo para mantener la perfusión a distal.
AngioTAC/angioRNM: también pueden identificar el grado
de la lesión. Estos estudios sirven además para evaluar
otras lesiones en otras arterias, por ejemplo, Aorta o vasos
intracraneales. Cuando el tratamiento sea quirúrgico, es
necesario complementar con alguna de estas imágenes para
confirmar los hallazgos en la ecografía Doppler.
Arteriografía: es el gold standard, pero es un estudio invasivo
no exento de complicaciones, por lo que se realiza en casos
seleccionados. Por lo general, se utilizará cuando los hallazgos
de los otros estudios sean discordantes con la clínica o para
haceruntratamientoendovascularcuandosehadescartadola
opción quirúrgica tradicional. Sirve para diagnosticar patología
no ateroesclerótica, como una displasia fibromuscular.
Clasificación
La estenosis carotídea se puede clasificar según el grado de
obstrucción al flujo en:
• Severa: 70-99%
• Moderada: 50-69%
• Leve : menos de 50%
Tratamiento
Pacientes asintomáticos
El riesgo anual de ACV en pacientes asintomáticos con
estenosis de > 50% en estudios antiguos era de 2%
aproximadamente, con el desarrollo de una mejor terapia
médica, en la actualidad se estima de 0,35%4
.
Manejo médico intensivo
El manejo médico, como tratamiento único, está indicado
en pacientes asintomáticos con estenosis <80% o aquellos
que no cumplan criterios para revascularización. Consiste
principalmente en el control de los factores de riesgo. Así, el
manejo farmacológico con-siste en antiagregantes plaquetarios
(AAS, clopidogrel), estatinas y el manejo de la hipertensión y
diabetes. Además, se debe complementar con cambios de
estilo de vida como la suspensión del tabaco.
Manejo quirúrgico
La revascularización carotídea con endarterectomía (más
terapia médica intensiva) está indicada en los pacientes
asintomáticos que reúnen las siguientes características:
• Estenosis carotidea > 80% o > 70% en centros en que
la morbimortalidad perioperatoria es <3%.
• Estenosis moderada de alto riesgo: placas “blandas” o
“hipoecogénicas” o ulceradas, evidencias de embolias
silentes o infartos sin secuelas clínicas previos en el
territorio de la arteria afectada y reserva cerebrovascular
reducida (medida por Doppler transcranial).
• Progresión de la estenosis.
• Médicamente estables.
• Expectativa de vida > a 5 años.
Pacientes sintomáticos
Manejo médico intensivo
Consiste en el mismo manejo médico que para pacientes
asintomáticos. Se debe iniciar en todos los pacientes y será
utilizado como tratamiento único en aquellos casos en que
no está indicada la cirugía.
Manejo quirúrgico
En pacientes con estenosis >70% sintomáticos se ha visto
una incidencia de ACV de 26% en los sometidos a manejo
médico y de 9% en los tratados con cirugía a los dos años
de seguimiento5
. Es por esta razón que se recomienda la
4 Marquardt L, Geraghty OC, Mehta Z,Rothwell PM. Lowrisk
of ipsilateral stroke in pa-tients with asymptomatic carotid stenosis
on best medical treatment: a prospective, popu-lation-based study.
Stroke. 2010;41(1):e11.
5 North American Symptomatic Carotid Endarterectomy
421
endarterectomía en pacientes sintomáticos con:
• Estenosis > 70%
• Expectativa de vida > 5 años
• Comorbilidades compensadas que justifiquen el riesgo
quirúrgico.
• Lesión en lugar accesible por abordaje quirúrgico.
• Centro con riesgo quirúrgico < 6%
Tratamiento endovascular
La instalación de stents carotídeos ha demostrado similares
resultados que la endarterec-tomia, pero una mayor
morbimortalidad.
Las indicaciones para el uso de stents carotídeos son las
siguientes:
• Estenosis >70%
• Lesiones no abordables por endarterectomía.
• Endarterectomía ipsilateral previa.
• Comorbilidades descompensadas que aumentan el riesgo
anestésico.
Enfermedad Carotídea No Ateroesclerótica
Displasia Fibromuscular
Enfermedadarterialsistémicanoateroescleróticadeetiología
desconocida. Existe un aumento del colágeno y condroitín
sulfato en la arteria que puede producir estenosis, oclusión,
aneurisma o disección de estas. Se han propuesto distintos
factores que podrían contribuir al desarrollo de displasia
fibromuscular (DFM), entre los que destacan: isquemia,
hormonal,deficienciade antitripsina, genéticos einfecciosos/
inmunológicos.Lasarteriasmásafectadassonlaarteriarenal,
la carótida interna y las arterias vertebrales. Se observa una
mayor prevalencia en mujeres adultas.
Clasificación histológica
• Fibrodisplasia medial: la más frecuente, encontrándose
en un 80% de los pacientes. En la angiografía se
observa una imagen en rosario característico debido a
laszonasdeestenosisseguidasdezonasaneurismáticas
consecutivas.
• Fibrodisplasiaintimal:seproduceeldepósitodecolagéno
en la capa íntima, generando estenosis focales en forma
de anillo o estenosis tubulares. Afecta más a pacientes
jóvenes.
• Fibrodisplasia perimedial: depósito de colágeno entre
media y adventicia. La imagenología es similar a la
fibrodisplasia medial.
• Fibrodisplasia adventicial: poco frecuente. Produce
estenosis focales.
La presentación clínica y el estudio son similares a la de la
enfermedad carotídea ateroesclerótica, pudiendo ser desde
asintomática (mayoría de los casos) a presentarse con un
ACV. Siempre se debe sospechar en pacientes con DFM de
las arterias renales.
El tratamiento de los pacientes asintomáticos es médico y
consiste principalmente en antiplaquetarios. Se deben seguir
demaneranoinvasivacada seis meses, yaseacon ecografía
Doppler,angioTACoRNM.Lospacientessintomáticospueden
ser con dilatación rígida abierta, dilatación con balón con
técnica abierta o percutánea.
Disección Carotídea
La disección arterial se produce cuando existe una lesión
de la íntima, permitiendo así la entrada de sangre a la pared
del vaso, resultando en un hematoma intramural, que puede
extenderse hacia distal por la presión arterial. El lumen falso
quese creapuedeaumentardetamaño ypresiónintraluminal
hastallegaraobstruirellumenverdadero(pseudocoartación),
ocluyendo el vaso y provocando síntomas, o bien, ser fuente
de émbolos hacia el territorio cerebral. Si se estabiliza y no
progresa, la lesión en el segmento afectado puede llevar a
cambios aneurismáticos.
La disección carotídea puede ser espontánea o traumática
y son responsables del 2% de los ACV, sin embargo, en
pacientes jóvenes se describe hasta el 20%6
.
Las espontáneas pueden estar en contexto de DFM o ser
criptogénicas. La mayoría de estas disecciones ocurre superior
al bulbo carotídeo. En las lesiones por trauma se han descrito
tres mecanismos principales por los que se puede producir
una disección carotídea: (1) hiperextensión extrema y la
rotación de cabeza y cuello, (2) un golpe directo en el vaso
y (3) laceración por fracturas óseas adyacentes7
.
Dentro de la clínica de este cuadro, se describe una triada
clásica que se encuentra en un tercio de los pacientes,
caracterizada por: dolor cervical o cefalea frontotemporal
ipsilateral, síndrome de Horner (Ptosis ymiosis ipsilateral, no
6 Rabih A. Chaer and Peter A. Schneiderend ngIf: XocsCtrl.
authors.length Rutherford’s Vascular Surgery, Chapter 102, 1568-
1582.e2. 2014.
Trial Collaborators. TIBeneficial effect of carotid endarterectomy
in symptomatic patients with high-grade carotid stenosis. N Engl J
Med. 1991;325(7):445.
7 Crissey MM, et al: Delayed presentation of carotid intimal tear
following blunt craniocervi-cal trauma. Surgery 1974; 75: pp. 543-
549.
422
incluye anhidrosis, ya que afecta solo las fibras parasimpáticas)
e isquemia cerebral o retinal.
Diagnóstico
Ante la sospecha clínica, el paciente debe ser estudiado con
una imagen.
La ecografía Doppler carotídea es un examen útil para
demostrar una alteración en el flujo, pero no entrega una
información valiosa sobre el sitio de disección. Es por esta
razón que siempre se debe disponer de una angioTAC o
angioRNM.
La angiografía se considera como gold standard, pero es un
exameninvasivo.Laimagendedoblelumenespatognomónico
de disección.
Tratamiento médico
Se basa principalmente en antiplaquetarios (aspirina y
clopidogrel). No existe evidencia suficiente para recomendar
la anticoagulación, pero debido a que se cree que los ACV
ocurren derivados de émbolos provenientes del sitio de
disección,lamayoríadelospacientessonanticoaguladoscon
heparina seguido de anticoagulantes orales por 3 a 6 meses8
.
Tratamiento Quirúrgico
Está indicado en caso de síntomas neurológicos fluctuantes
o que progresan a pesar del tratamiento médico, compromiso
del flujo cerebral, aneurisma en expansión o contraindicación
deanticoagulación(ejemplo:hematomasubdural).Serealiza
reparación de la di-sección por técnica abierta.
8 Norris JW:Extracranial arterial dissection: anticoagulation
is the treatment of choice. Stroke 2005; 36: pp. 2041-2042.
423
Bibliografía
1. Mackey W and Teso D.Carotid Artery Disease.In: Hallett J, Mills J, Earnshaw J, Ree-kers J and Rooke T. Comprehensive Vascular
and Endovascular Surgery. Philadelphia: Mosby; 2009. pp 595-605.
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424
425
9.2 Patología Aórtica
Calcagno M, Schwartz E.
Introducción
La patología aórtica aguda es una situación clínica crítica,
cuyo pronóstico depende de un diagnóstico certero y rápido,
así como del inicio temprano de su tratamiento.
La aorta es un conducto que transporta durante la vida de una
persona una media de 200 millones de litros de sangre1
. Esta
nace en el anillo valvular aórtico y termina a nivel abdominal
con la bifurcación de las arterias ilíacas comunes.
Sedivideporeldiafragmaenaortatorácicayaortaabdominal.
A nivel torácico se reconoce la raíz aórtica, que incluye los
senos de valsalva; la aorta ascendente, que va desde la unión
sinotubular hasta el nacimiento del tronco braquiocefálico; el
arco aórtico, que es la porción transversa de la cual emergen
los troncos supraaórticos (braquiocefálico, carótida común
izquierda y subclavia); y la aorta descendente, que inicia
distal a la arteria subclavia izquierda hasta el diafragma. A
nivel abdominal se puede dividir en aorta supra e infrarrenal.
1 Erbel R, et al. Guía ESC 2014 sobre diagnóstico y
tratamiento de la patología de la aorta. Rev. Esp. Cardiol. 2015; 68
(3).
426
Histológicamente,la pared aórticasecomponede tres capas:
una túnica íntima interna, delimitada por el endotelio; una
túnica media gruesa, caracterizada por células musculares
lisas y hojas concéntricas de fibras elásticas y de colágeno; y
una túnica adventicia, que contiene colágeno, vasa vasorum
y nervios perivasculares.
La aorta, además de transportar sangre, tiene un rol
fundamental en el control de la resistencia vascular sistémica
y lafrecuencia cardíaca, mediante receptores que responden
a la presión, que están localizados en la aorta ascendente
y el arco aórtico.
Aneurisma Aórtico
Un aneurisma se define como una dilatación permanente,
localizada, de una arteria (incluyendo las tres túnicas), teniendo
al menos un aumento del 50% de su diámetro, comparado
con el diámetro normal del vaso en cuestión2
. Un falso
aneurisma o pseudoaneurisma se forma por la interrupción
de la continuidad de la pared arterial, en donde está ausente
una, dos o las tres capas. La sangre que escapa del vaso
genera un hematoma presurizado, que posteriormente se
organiza creando una pseudocápsula fibrosa, siendo más
propensos a la rotura que los aneurismas.
En un adulto sano, el diámetro de la aorta ascendente es de
33 +/- 5 mm en su origen. La aorta descendente mide 24 +/- 3
mm y la aorta abdominal infrarrenal mide 18.7 +/- 3 mm3
. Los
diámetrosestáninfluidos variablementepordiversosfactores
como la edad, sexo (mayores en hombres), tamaño corporal
(estatura,peso,áreadesuperficie) ypresiónarterial. Elíndice
de expansión aórtico está en torno a los 0.9 mm en hombres
y 0.7 mm en mujeres por cada década4
. Dado entonces que
para pacientes mayores de 50 años, el diámetro normal de
la aorta infrarrenal se estima entre 10 y 20 mm, un diámetro
de 3 o más centímetros se considera un aneurisma de la
aorta abdominal (AAA).
Los aneurismas aórticos pueden clasificarse de varias
maneras. Según su morfología, en fusiformes (dilatación
simétrica) o saculares (fig. 1). Según su etiología, en de-
generativos (más frecuentes), inflamatorios, congénitos,
infecciosos (aneurismas micóticos – por Salmonella sp.,
Staphylococcus, Streptococcus) o mecánicos/postraumáticos
(generalmente pseudoaneurismas). Y según su localización,
en aneurismas torácicos (más frecuente en la porción
ascendente), tóracoabdominales y abdominales. Estos
últimos son los más frecuentes (80%), precisamente los
infrarrenales (95%).
Epidemiología
Laincidenciarealdelosaneurismasaórticosesdesconocida,
ya que en el 70% de los casos son asintomáticos. En EE.UU.
es la decimoquinta causa global de muerte y la décima en
hombres mayores de 55 años. Más de 5.000 personas
mueren por aneurisma aórtico roto cada año. La prevalencia
de AAT es de 16 por 100.000 habitantes y de AAA de 117 por
100.000 habitantes. Su prevalencia es mayor en la población
masculina con una relación hombre/mujer de 4:1 en AAT y
8:1 en AAA, y a medida que envejece la población, siendo
de 1 - 5% en la población general, 5 - 9% en mayores de 65
años y mayor al 10% en mayores de 70 años5
.
Fig. 1: Clasificación de aneurisma según su forma.
Tipos deaneurismas
2 Takayama T, Yamanouchi D. Aneurysmal Disease. The
abdominal aorta. Surg Clin N Am 2013; 93: 877-891.
3 Crovari F, Manzor M. Manual de Patología quirúrgica:
enfermedad de la aorta. Ediciones Univer-sidad Católica de Chile.
2014: 483-502.
4 Erbel R, et al. Guía ESC 2014 sobre diagnóstico y
tratamiento de la patología de la aorta. Rev. Esp. Cardiol. 2015;
68(3).
5 Ardila F y cols. Recomendaciones para el diagnóstico y
tratamiento en angiología y cirugía vas-cular. Capítulo:Aneurismas
de la aorta abdominal. Sociedad Andaluza de Angiología y Cirugía
vascular.
427
En Chile, la frecuencia de AAA alcanza el 7,6% en hombres
y 1% en mujeres mayores de 60 años. Aproximadamente
un 19% presenta antecedentes familiares de AAA6
. La
presentación simultánea en otros territorios es habitual, con
afectación torácica (12%), ilíaca (25%) y periférica (3,5%). La
afectación aneurismática femoropoplítea puede acompañarse
de un AAA en un70%.
Factores de Riesgo
Los principales factores de riesgo asociados al desarrollo
de aneurismas son el tabaquismo e hipertensión arterial
(HTA) asociado a mayor edad. Otros factores de riesgo
conocidos son el sexo masculino, raza blanca, enfermedad
pulmonar obstructiva crónica (EPOC), dislipidemia, cardiopatía
coronaria, enfermedad arterial periférica y antecedentes
familiares. Pacientes con diabetes mellitus presentan menos
aneurismas.
Historia Natural
La tasa de expansión media de los aneurismas de la aorta
torácica es de 0.1 cm/año y de la aorta abdominal de 0.4
cm/año. Todo aneurisma se romperá si el paciente vive lo
suficiente. Dicho esto, en principio se intenta prevenir la
mortalidaddebidoalaroturaaneurismática,lacualseproduce
en función de varios factores, siendo el más importante el
diámetro (no tamaño, el largo no afecta). De esta manera,
cuando el aneurisma infrarrenal es menor a 4 cm, el riesgo
de rotura anual es muy bajo; entre 4 y 5 cm, el riesgo es
menor a 5% y sobre 5 cm, es de un 10%. Si en el momento
del diagnóstico ya está por encima de los 5 cm, la media de
crecimiento es superior a 5 mm al año, de manera que en
los dos años siguientes, evoluciona hacia la rotura en el 20%
de los pacientes7
.
En el caso de los aneurismas de aorta torácica (AAT), si
estos miden entre 4 y 5.9 cm tienen un riesgo de rotura de
16%, y si el diámetro es mayor de 6 cm, el riesgo es de 31%8
.
Precisamente cuando el aneurisma es mayor a 6 cm en la
aorta ascendente y mayor a 7 cm en la aorta descendente, el
porcentaje de complicaciones aumenta considerablemente9
.
6 Crovari F, Manzor M. Manual de Patología quirúrgica:
enfermedad de la aorta. Ediciones Univer-sidad Católica de Chile.
2014: 483-502.
7 Crovari F, Manzor M. Manual de Patología quirúrgica:
enfermedad de la aorta. Ediciones Univer-sidad Católica de Chile.
2014: 483-502.
8 Hoel A. Aneurysmal Disease: Thoracic Aorta. Surg Clin
N Am 2013; 93: 893-910.
9 Coady M, et al. What is the appropriate size criterion for
resection of thoracic aortic aneurysms? J Thorac Cardiovasc Surg.
1997; 113: 476-91.
Otros factores predisponentes para la rotura son el tabaquismo
activo, el género femenino, hipertensión arterial, el ritmo de
crecimiento (mayor a 0.5 cm/año), la morfología (sacular),
patología del tejido conectivo (síndrome de Marfán, Ehlers-
Danlos, Loeys-Dietz) y la historia familiar de rotura.
Clínica
La mayoría de los aneurismas aórticos, ya sean torácicos
(AAT), tóraco-abdominales (AATAb) o abdominales (AAA), son
diagnosticados de manera incidental en estudios solicitados
por otros motivos o en el examen físico como hallazgo.
Aneurisma De Aorta Torácica Y Tóracoabdominal
En casos asintomáticos, el AAT puede sospecharse en
la radiografía de tórax por ensanchamiento mediastínico,
crecimiento del botón aórtico, desplazamiento de la tráquea o
de la ventana aortopulmonar hacia la derecha. El diagnóstico
se confirma con la tomografía axial computada (TAC).
En casos sintomáticos, la principal manifestación de rotura
o de que esta es inminente, es el dolor torácico agudo,
lancinante,retroesternaloreferidoaregióninterescapular.La
presencia de dolor abdominal concomitante, puede ser en el
contexto de un AATAb. En aneurismas rotos no contenidos,
hay inestabilidad hemodinámica y colapso circulatorio. La
falla respiratoria aguda asociada se puede presentar con
la rotura libre a hemitórax izquierdo. Raramente, la erosión
hacia mediastino puede resultar en hemoptisis, por fístula
aortobronquial,oenhematemesis,porfístulaaortoesofágica.
Menos frecuentes son los AAT o AATAb que producen síntomas
subagudos o crónicos (más de 14 días). Generalmente,
se manifiestan por el efecto compresivo de la aorta sobre
algunas estructuras, como el esófago (disfagia, baja de peso,
odinofagia), duodeno (saciedad precoz), tráquea (disnea) y
nervios laríngeos recurrentes (aspiración, disfonía). Cuando
la región afectada es la raíz aórtica o la aorta ascendente, el
paciente puede presentar un soplo de insuficiencia aórtica o
signos de insuficiencia cardíaca.
Aneurisma De Aorta Abdominal
Loscasosasintomáticossesuelendiagnosticarenelcontexto
de estudio de patología urológica o digestiva, ya sea con
ecografía o TAC, o en el examen físico donde se palpa una
masa abdominal pulsátil, sobre el ombligo, algo lateralizada
a la izquierda.
Los casos sintomáticos se pueden manifestar con dolor
abdominal o lumbar por compresión de estructuras vecinas,
incluso por erosión de los cuerpos vertebrales. Rara vez se
produce ateroembolismo e isquemia aguda de miembros
inferiores debido al desprendimiento de un trombo mural o
de restos de colesterol (síndrome del dedo azul).
Laroturaeslaprimeramanifestaciónenun20-25%delosAAA
ysepresentanconlatríadaclásicadedolorintensoabdominal
428
o lumbar, masa abdominal pulsátil y shock hipovolémico.
Lo más frecuente es que ocurra hacia retroperitoneo donde
muchas veces se logra contener. Sin embargo, si la rotura
es libre a cavidad abdominal, la supervivencia es casi nula.
Otra posibilidad de rotura es a la vena ilíaca derecha o vena
cava inferior, desarrollando una fístula arteriovenosa de alto
flujo (3 - 4%), o rotura a duodeno desarrollando una fístula
aortoduodenal primaria que se manifiesta con hemorragia
digestiva alta, masa pulsátil y compromiso hemodinámico10
.
Imagenología y Diagnóstico
Los AAT se pueden sospechar en una radiografía de tórax, al
encontrarensanchamientodelmediastinoodelbotónaórtico,
desplazamiento de la tráquea u opacificación de la ventana
aortopulmonar. A veces, se puede apreciar una fina línea
calcificada en el reborde del AAA, que nos haga sospechar
su existencia.
El uso de ultrasonido juega un rol importante en patología
aórtica. En los AAT el ecocardiograma transesofágico (ETE),
si bien no está indicado como estudio diagnóstico en la
evaluación preoperatoria, proporciona información valiosa
de la morfología aórtica, lo que permite evaluar el arco
aórtico y aorta descendente proximal, ver trombos, placas de
ateroma complicadas e incluso disecciones no diagnosticadas
previamente. En el intraoperatorio es fundamental, puesto
que permite monitorizar la función cardíaca directamente,
verificarlaposicióndelacánulavenosaenlaaurículaderecha
y permite localizar el lumen verdadero de la aorta en casos
de disección.
En los AAA, la ecografía abdominal tiene una sensibilidady
especificidad mayor al 90%. Esta ofrece información sobre
el diámetro máximo y su longitud, aunque no acerca de su
relaciónconarterias viscerales.Estálimitadaporlapresencia
de gas, obesidad ypor la destreza del operador.Sin embargo,
sigue siendo el examen más costo-efectivo en la pesquisa
o sospecha inicial del AAA. Según el “American College Of
Cardiology” (ACC) y la “American Heart Association” (AHA)
del año 2005, se deben someter a tamizaje con examen físico
y ecografía abdominal: 1) hombres mayores de 60 años que
tienen familiares de primer grado con antecedente de AAA y
2) hombres entre 65 y 75 años que son tabáquicos.
La TAC con medio de contraste endovenoso o AngioTAC
es el gold standard para el diagnóstico y planificación
terapéutica. Genera imágenes de alta resolución en cortes
axiales y reconstrucciones en planos coronales, sagitales
y tridimensionales de excelente calidad. Permite describir
detalles de la lesión como su ubicación, longitud del cuello
proximal ydistal,surelación anatómicaconramas viscerales,
lapermeabilidaddearteriaslumbareseinclusodelaexistencia
concomitante de aneurismas ilíacos, todas observaciones
importantes a considerar al elegir la técnica de reparación. La
10 AssarA. Review. Ruptured abdominal aortic aneurysm: a
surgical emergency with many clinical presentations. Postgraduate
Medical Journal 2009; 85: 268-273.
desventaja de la TACsigue siendo la exposición a radiación y
lasposiblescomplicaciones porelmediodecontraste(alergia
o anafilaxia y falla renal).
Por último, la angiografía o aortografía considerada la prueba
de referencia en el pasado, no ofrece ventajas sobre la TAC
contemporánea. Si bien permite la obtención óptima de
imágenes del lumen aórtico, la longitud de las lesiones, las
colaterales o variantes anatómicas o aneurismas asociados,
su utilidad se ve limitada, ya que no da información sobre
la pared arterial y trombo mural ni calcificaciones. Además,
implica una alta dosis de radiación, carga de contraste y es un
procedimiento invasivo, no exento demorbilidad. Por lo tanto,
solo se usa en el intraoperatorio del EVAR (Endovascular
Aneurysm Repair).
Tratamiento
Médico
Además de las características del aneurisma,sedebe valorar
cada caso individualmente, considerando factores como la
edadyexpectativadevidadelpaciente,patologíasasociadas,
la experiencia del cirujano y la tecnología disponible.
Si bien el tratamiento quirúrgico es el definitivo, el manejo
médico permite retrasar la expansión de los aneurismas.
Este manejo se puede considerar en casos asintomáticos
o en que el diámetro no haya alcanzado el criterio para ser
operado (se detallará más adelante).
Se deben modificar los factores de riesgo y esto incluye el
cese del tabaquismo, control estricto de la presión arterial y
optimización del perfil lipídico. Las estatinas, con su efecto
pleiotrópico disminuyen la inflamación y estabilizan la pared
arterial. Los betabloqueadores disminuyen el estrés sobre
la pared, controlando la frecuencia cardíaca y la presión
arterial. El objetivo es lograr una frecuencia cardíaca menor
a 60 latidos por minuto. En caso de estar contraindicados,
se pueden utilizar los bloqueadores de canales de calcio. Si
luego de controlada la frecuencia cardíaca, la presión arterial
sistólica se mantiene sobre 120 mmHg, se debe agregar un
inhibidor de la enzima convertidora de angiotensina (IECA)
y/u otro vasodilatador.
También se deben evitar maniobras que aumenten la presión
intratorácica e intraabdominal, por lo que es necesario un
control correcto del EPOC, evitar la constipación y no realizar
esfuerzos físicos. El uso de aspirina disminuye el riesgo
cardiovascular asociado.
Existen algunos medicamentos como la Doxiciclina, que
aún están en estudio y que disminuirían la expresión de
metaloproteinasasenlaparedaórtica,inhibiendosuexpansión.
Seguimiento:
429
LospacientesconAATsinindicacióndetratamientoquirúrgico
o endovascular, deben controlarse de manera seriada con
TAC, con el fin de evaluar el crecimiento. Si existe patología
valvular asociada, es recomendado apoyar el estudio con
ecocardiografía. Este control se realizará a los 6 meses de
hecho el diagnóstico; si el diámetro no ha variado, puede
controlarse cada 12 meses. En caso contrario, se sugiere
control cada 3 o 6 meses. Si el crecimiento es mayor a 0.5
cm en 6 meses, debe intervenirse11
.
Para los AAA, el seguimiento debe ser con TAC o ecografía
cada6meses oanualmente,según el diámetro:<4cm control
anual; entre 4 y 5 cm, semestral.
Preoperatorio
Los pacientes afectados por aneurismas son un grupo
complejo, por lo general de edad avanzada y con múltiples
comorbilidades asociadas, por lo que demandan mayor
agudeza en la evaluación y selección preoperatoria si se
quieren obtener buenos resultados quirúrgicos.
Una vez analizadas en detalle las imágenes y establecida la
indicación quirúrgica, se debe evaluar el estado funcional del
paciente y determinar si es un candidato quirúrgico aceptable
o no.
La evaluación cardíaca incluye el estado funcional cardíaco
y coronario. Todo paciente debe tener por lo menos un
electrocardiograma de doce derivaciones en reposo y un
ecocardiograma transtorácico. Este último proporciona
información sobre la competencia valvular (para AAT o AATAb),
morfología yfunción del ventrículo izquierdo. La incidenciade
enfermedadcoronariaenpacientesconaneurismasestábien
documentada en la literatura: aproximadamente solo un 6%
tendría coronarias normales, un 30% cardiopatía coronaria
severa corregible y un 5%, severa inoperable12
.
Porellosejustificalarealizacióndecoronariografía,inclusive
en pacientes asintomáticos cardíacos.
Granproporcióndeestospacientessonohansidofumadores
y,porlotanto,laasociaciónentreneumopatíacrónicaycirugía
representaunaltoriesgodefallarespiratoriaycomplicaciones
pulmonares. Esto corre principalmente para cirugía abierta, por
lo que se debe evaluar la función pulmonar con espirometría,
gases arteriales y eventualmente capacidad de difusión de
Co2 (DLCO).
Por último, la evaluación de la función renal también debe
realizarse, ya que la insuficiencia renal posoperatoria es uno
delosfactoresasociadosamayormortalidadenlospacientes
intervenidos por aneurismas.
11 Hiratzka L, Bakris G, Beckman J et al. 2010. ACCF/
AHA/AATS/ACR/ASA/SCA/SCAI/SIR/STS/SVM guidelines for
the diagnosis and manage-ment of patients with Thoracic Aortic
Disease. Circulation 2010; 121: 266-369.
Quirúrgico
Aneurisma Torácico13
Las indicaciones de tratamiento quirúrgico para los AAT son:
• diámetro ≥ 55 mm en aorta ascendente independiente
de la etiología.
• diámetro > 45 mm – 50 mm en aorta ascendente en
pacientes con enfermedades del tejido conectivo o
factoresderiesgocomoantecedentefamiliardedisección
o válvula aórtica bicúspide.
• diámetro ≥ 55 mm en arco aórtico.
• diámetro ≥ 60 mm en aorta descendente.
• crecimiento > 5 mm en 6 meses o 10 mm en 12 meses.
• disección aórtica tipo A.
• insuficiencia aórtica severa.
• Sintomáticos.
En los pacientes con aneurisma de aorta ascendente,
se realiza cirugía convencional con el reemplazo aórtico
por una prótesis de Dacrón. En el caso de pacientes con
enfermedad del tejido conectivo o compromiso valvular, se
realiza un reemplazo del segmento dilatado, de la válvula y
reimplantación de las coronarias.
Para los aneurismas del arco aórtico existen tres opciones
terapéuticas:cirugíaconvencional,tratamientoendovascular
(“thoracic endovascular aortic repair” o TEVAR) y
procedimientos híbridos. En la cirugía abierta se reseca
el segmento aneurismático, incluyendo el origen de los
troncos supraaórticos y se reemplaza por una prótesis de
Dacrón trifurcada, que se anastomosa a cada una de las
ramas, bajo circulación extracorpórea hipotérmica. En la
segunda, mediante un catéter, se accede a la aorta torácica
a través de la arteria femoral donde se libera e implanta una
endoprótesisfenestradayconramasaccesorias.Laterceraes
una combinación de ambas técnicas donde se realiza un “by-
pass” extraanatómico o derivación de los troncos supraaórticos
a lo que posteriormente se agrega una endoprotesis.
En el caso de los aneurismas de la aorta descendente,
se recomienda el tratamiento endovascular bajo anestesia
general para un mejor control de la hemodinamia.
Complicaciones:
La cirugía abierta es muy invasiva. Los centros de alto
volumen y experiencia muestran las menores tasas de
mortalidad (6.6%) y de isquemia medular (4%). En otras
series, la mortalidad puede llegar hasta un 19%, la paraplegia
hasta un 14%, eventos cardíacos incluyendo infarto agudo
al miocardio (IAM) 20%, complicaciones pulmonares 20 a
12 Hertzer Nr, Beven E, Young J et al. Coronary artery
disease in peripheral vascular patients. A classification of 1000
coronary angiograms and results of surgical management. Ann
Surg 1984; 199-223.
13 Vega J, González D, Yankovic W y cols. Aneurismas de
la aorta torácica. Historia natural, diag-nóstico y tratamiento. Rev.
Chil. Cardiol. 2014; 33: 127-135.
430
50% y falla renal 13 a 20%14
. El riesgo de daño neurológico
es mayor en la reparación del arco aórtico que de la porción
ascendente (2 - 5%).
El TEVAR tiene ventajas sobre la cirugía abierta al evitar
grandesabordajestorácicos,menorpérdidadesangre,menor
riesgodeisquemiamedular(yaqueseevitaelclampeoaórtico
y la ligadura de las arterias intercostales), menor ventilación
mecánica invasiva y recuperación más rápida.
Aneurisma Tóracoabdominal
LasindicacionesdetratamientoquirúrgidoparaAATAbson15
:
• diámetro ≥ 60 mm
• crecimiento > 5 mm en 6 meses o >1 cm en 1 año
• sintomáticos
•
Clasificación de los aneurismas
Los AATAb se categorizan a base de su extensión en 5 tipos,
lo que tiene implicancias estratégicas para su reparación. La
clasificación de Crawford, modificada por Safi, incluye:
Tipo I: sobre el 6.° espacio intercostal, generalmente cerca
de la arteria subclavia izquierda, y se extiende hasta tronco
celíacoyarteriamesentéricasuperior.Sibienpuedeinvolucrar
las arterias renales, no se extiende a la aortainfrarrenal.
Tipo II: sobre el 6.° espacio intercostal, puede incluir la Ao
ascendente, y se extiende hasta aorta infrarrenal, incluso
hasta la bifurcación.
Tipo III: bajo el 6.° espacio intercostal con extensión a aorta
abdominal.
Tipo IV: desde el diafragma hasta la bifurcación aórtica.
TipoV:bajoel6.°espaciointercostalyseextiendeasegmento
visceral de la aorta abdominal.
En el caso de losAATAb,el punto de corte para la intervención
es mayor (≥ 6 cm), dados los mayores riesgos perioperatorios
involucrados, asociados a la mayor extensión del aneurisma.
La cirugía convencional incluye una tóraco-freno-laparotomía,
con reemplazo de la porción aneurismática con prótesis
y reimplante de todas las ramas viscerales permeables y,
eventualmente, de las arterias intercostales.
El desarrollo de tecnología ha permitido que también
puedan efectuarse tratamientos endovasculares, con menor
morbimortalidad, o híbridos.
14 Hoel A. Aneurysmal Disease: Thoracic Aorta. Surg Clin
N Am 2013; 93: 893 - 910.
15 Erbel R, et al. Guía ESC 2014 sobre diagnóstico y
tratamiento de la patología de la aorta. Rev. Esp. Cardiol. 2015;
68 (3).
431
Complicaciones:
Mientras más extenso es el trayecto aórtico por reemplazar,
mayoreslaposibilidaddeisquemiamedular.Porello,estaesla
complicaciónmástemidaenlareparacióndelosAATAb.Entre
las medidas perioperatorias para disminuir esta complicación
están el drenaje de líquido cerebro espinal (LCE), mediante
la inserción de un catéter intratecal a nivel de L3-L4. Con
esta medida se mantiene una presión intracraneana (PIC)
baja permitiendo optimizar la perfusión de la médula. Otras
alternativasdescritassonelusodebarbitúricos (ej.Tiopental)
o antagonistas opiáceos (ej. Naloxona) que disminuirían el
metabolismo cerebral y la PIC16
. La falla renal y la isquemia
intestinal son también potenciales complicaciones.
Aneurisma Aorta Abdominal
Las indicaciones de tratamiento quirúrgido para AAA son17
:
• diámetro ≥ 50 mm
• crecimiento > 5 mm en 6 meses o > 1 cm en 1 año.
• sintomáticos
Los AAA pueden repararse por vía abierta o endovascular
(EVAR). Al igual que en el segmento torácico, la cirugía
convencional consiste en reemplazar el segmento
aneurismático con una prótesis, en este caso a través de
una laparotomía media o abordaje retroperitoneal.
De los pacientes con AAA, el 70% es candidato para EVAR,
pero deben cumplir con algunos criterios anatómicos
específicos18
:
• Diámetro del cuello aórtico: < 32 mm. Debe además
tener forma cónica (menor diámetro proximal que
distal). Si bien no es contraindicación, la aorta
proximal no debe tener trombo ni estar calcificada.
• Largo del cuello (distancia desde la arteria renal
más inferior hasta el origen del aneurisma): 20 mm
(solo existe un dispositivo diseñado para 15 mm).
• Ángulo: < 60º
• Diámetro mínimo de arteria ilíaca externa o común para
permitir el paso del sistema de instalación.
Reparación endovascular de los aneurismas
16 Khan S, Stansby G. Cerebrospinal fluid drainage for
thoracic and thoracoabdominal aortic aneu-rysm surgery. Cochrane
Database Syst Rev 2012.
17 Erbel R, et al. Guía ESC 2014 sobre diagnóstico y
tratamiento de la patología de la aorta. Rev. Esp. Cardiol. 2015;
68 (3).
18 Chaer R. Endovascular repair of abdominal aortic
aneurysm. UpToDate 2015.
432
Reparación abierta de los aneurismas
En casos de cuellos cortos o anatomía compleja del aneurisma,
se han desarrollado distintos tipos de prótesis, muchas de
ellas aún en desarrollo: fenestradas/ramificadas (fig. a),
chimenea (fig. b), EVAS (Endovascular Aneurysm Sealing
System) (fig. c).
Complicaciones
Con los avances en tecnología y perfeccionamiento de
la técnica abierta, se han podido disminuir las tasas de
complicaciones. Estas son la falla renal aguda, embolización
distal, infección de herida, isquemia intestinal, formación
de falso aneurisma, fístula aorto-duodenal, infección de la
prótesis o sangrado.
Si bien el manejo endovascular tiene menor morbimortalidad
perioperatoria, esta también puede presentar complicaciones.
Se describen complicaciones sistémicas (IAM, nefropatía
inducida por medio de contraste, isquemia intestinal) y
relacionadas con la endoprótesis como lesión vascular
(ej.: ilíaca, femoral), hematoma, pseudoaneurisma femoral,
crecimiento del aneurisma (falla del tratamiento), trombosis
intraprótesis, migración, fractura y “endoleaks”.
Los “endoleaks” o flujo persistente fuera de la prótesis y
dentro del saco aneurismático, se producen hasta en 20 -
25%19
. Estos se clasifican en 5 tipos. Los tipo 1 consisten en
la fuga por el sello inadecuado en el cuello proximal o distal;
los tipo 2 (más frecuentes 10 - 25%), se producen por flujo
retrógrado por ramas viscerales permeables; los tipo 3, por
separación de los componentes de la prótesis o defectos de
fábrica; los tipo 4, la fuga se produce a través de los poros de
19 Chaer R. Endovascular repair of abdominal aortic aneu-
rysm. UpToDate 2015.
la prótesis; y los tipo 5, existe una expansión continua del
saco aneurismático sin fuga demostrable por imágenes.
Esta última es controvertida. Los “endoleaks” tipo 1 y 3
generalmente se diagnostican en el intraoperatorio y requieren
de manejo inmediato. En caso de presentación tardía, son
secundarios a migración de la prótesis. Los tipo 2 y 4 porlo
que general se observan.
Adiferencia con el tratamiento abierto, los pacientes tratados
por EVAR se deben controlar de por vida. Al primer mes
posoperado, se debe controlar con AngioTAC, luego a los 6
mesesyposteriormenteanual.SienelcontroldelañoelEVAR
no demuestra alteraciones, se recomienda el seguimiento
con ecografía doppler.
Pronóstico
Existen tres grandes estudios en materia de tratamiento
endovascular. El EVAR1 compara la cirugía abierta versus el
tratamiento endovascular en AAA > 5.5 cm demostrándose
que la mortalidad a 30 días en el grupo EVAR es de 1.4% vs
4.2% en cirugía abierta. Sin embargo, a largo plazo no habría
diferencia y,porelcontrario, elEVARpresentaríamayor costo
y más complicaciones y reintervenciones.
El estudio EVAR 2 compara el EVAR versus el tratamiento
médico. La mortalidad relacionada a AAA fue mayor en el
grupo médico, pero la mortalidad general fue similar. En
conclusión,elEVARseasocióamenormortalidadrelacionada
con el aneurisma.
El estudio DREAM, similar al EVAR 1, compara la cirugía
abierta con el EVAR en AAA > 5 cm. A 6 años plazo se
433
evidenció que la sobrevida es igual y durante este período
de seguimiento el grupo sometido a EVAR requirió mayor
número de reintervenciones. Además, a pesar de disminuir
lamortalidadacortoplazo,nohabríadiferenciaallargoplazo.
En resumen, la desventaja del EVAR es el control de por vida
y las tasas de reintervención alrededor del 20 a 25%. No está
claroelcosto ylasobrevidaamediano ylargoplazoessimilar.
Síndrome Aórtico Agudo
El síndrome aórtico agudo (SAA) se refiere a la presentación
clínica común de diferentes condiciones que afectan la
aorta torácica, caracterizadas por dolor torácico intenso y
que pueden derivar en una emergencia quirúrgica. Estas
condiciones incluyen: disección aórtica (DA), hematoma
intramural (HIM) y úlcera penetrante ateroesclerótica (UPA).
Disección Aórtica
La disección aórtica (DA) aguda es la causa más frecuente
(60%) de SAA y es la condición más grave que puede afectar
a la aorta, con una incidencia mayor a la rotura de AAA.
A pesar de los avances, tanto en el manejo médico como
quirúrgico,lamortalidadglobalsegúnelInternationalRegistry
ofAcuteAortic Disecction (IRAD) es muy alta, siendo esta sin
tratamiento, de un 22.7% a las 6 horas, 50% a las 24 horas
y 68% a la semana20
.
En disecciones de aorta ascendente la mortalidad es
secundariaacomplicacionesporlaroturaaórticaalpericardio,
regurgitación aórtica aguda y por compromiso de los ostium
coronarios. En disecciones de aorta descendente lamuerte
se asocia al compromiso isquémico visceral.
Lo más importante es realizar un diagnóstico y tratamiento
tempranos, especialmente en el caso de las DA tipo A, ya
que la mortalidad de aquellos pacientes que llegan con vida
a la urgencia aumenta a razón de 1 - 2% por cada hora que
pasa desde el inicio de la sintomatología.
20 Cronenwett J, Wayne K. Rutherford’s Vascular Surgery.
Aortic Disecction. 8th Ed. Philadephia, PA: Saunders Elsevie; 2014
(22) 2169 - 2188.
Epidemiología
La incidencia estimada de DA es de 3 casos por 100.000
habitantesalaño,conunamayorprevalenciaenhombresque
en mujeres con una proporción de 4:1. El 60% de disecciones
son tipoAcon un peak entre los 50 y 60 años; las tipo B tienen
peak entre los 60 y 70 años21
.
Fisiopatología
La DA consiste en la separación de las capas de la pared
arterial secundario a una fisura o desgarro de la túnica íntima,
que permite el paso de sangre desde el lumen aórtico a
la túnica media, extendiéndose hacia distal creando un
lumen paralelo (lumen falso). (fig. 1) Todo esto secundario
a una pérdida de resistencia de la capa media (cambios
degenerativos, necrosis quística de la media, etc.) y aumento
de la tensión de la pared (HTA).
El flap o desgarro intimal se origina en la aorta ascendente en
un 65%, descendente en 25% y en el arco y aorta abdominal
en 10%22
.
21 Januzzi JL, et al: Characterizing the young patient with
aortic dissection: results from the International Registry of Aortic
Dissection (IRAD). J Am Coll Cardiol 43:665–669,2004.
22 Hagan PG, et al: The International Registry of Acute
Aortic Dissection (IRAD): new insights into an old disease. JAMA
434
Factores de Riesgo
Entre los factores de riesgo más importantes para la DA
están la hipertensión arterial y el tabaquismo. Otros factores
de riesgo son la edad (con peak entre 60 a 65 años), sexo
masculino, factores genéticos como el síndrome de Turner,
hipoplasiadelarcoaórtico,síndromedeMarfán,Ehler-Danlos
y condiciones anatómicas como aorta bicúspide con o sin
dilatación de la raíz o coartación aórtica.
Una condición que hay que tomar en cuenta son las mujeres
que durante el embarazo desarrollan preeclampsia o
eclampsia, ya que tienen mayor riesgo de desarrollar una
DA en el perioperatorio.
El consumo de cocaína también se asocia a mayor riesgo de
DA. El mecanismo por el que se produce es por la liberación
de catecolaminas que causan la triada de hipertensión,
vasoconstricción y aumento importante del gasto cardíaco,
lo que resulta en un aumento dramático y agudo de la fuerza
de contracción sobre la pared aórtica.
Por último, se ha demostrado una asociación entre la DA y
el ritmo circadiano, en que la mayoría de estas se produce
en las mañanas, lo que estaría relacionado con el ritmo
circadiano de la presión arterial, que también presenta un
aumento en las mañanas.
Clasificación
Las DApuedenclasificarsedeacuerdoconeltiempodesdeel
iniciodelossíntomas (agudavs crónicasiendolas2semanas
el punto de corte) o según el lugar donde se produce el
desgarro intimal.
Históricamente existe la clasificación DeBakey que se define
a base de la ubicación del desgarro y la extensión de la
disección:
Tipo I: la disección se origina en la aorta ascendente y se
extiende por el arco aórtico hasta la aorta descendente y/o
aorta abdominal.
Tipo II: la disección se origina en la aorta ascendente y está
limitada a este territorio.
Tipo IIIa: la disección se origina distal a la arteria subclavia y
compromete solo la aorta descendente torácica.
Tipo IIIb: compromete la aorta descendente torácica y
abdominal.
La clasificación de Stanford que es más funcional y la
actualmente aceptada, se basa solo en el lugar de origen de
la disección, de manera que las tipo A se originan en la aorta
ascendente (y, por tanto, incluye DeBakey I y II), mientras
que las Stanford B se originan en la aorta descendente distal
al origen de la arteria subclavia izquierda (DeBakey tipo IIIa
y IIIb).
Clínica
El síntoma cardinal es el dolor, de inicio agudo, alcanzando
intensidad máxima, tóracico (disecciónAo ascendente) o con
irradiación a región interescapular o dorso lumbar (disección Ao
descendente), de tipo punzante o desgarrante. En pacientes
con dolor abdominal intenso se debe sospechar compromiso
vascular mesentérico y en casos de oligoanuria sospechar
isquemiarenal.Enun5a10%,lospacientespuedenpresentar
síncope, siendo por lo general un indicador de taponamiento
cardíaco o compromiso de tronco braquiocefálico, por lo que
es más frecuente en casos de disección tipo A (19 vs 3%,
P < 0.001). También se pueden manifestar con síntomas
neurológicos en un 2 a 10% de los casos, por isquemia
espinalsecundariaalainterrupcióndelosvasos intercostales
en disecciones tipo B23
. Rara vez se puede producir una
compresión directa sobre algún nervio periférico resultando
en voz ronca (laríngeo recurrente), síndrome de Horner
(ganglio simpático).
En el examen físico los hallazgos dependerán del tipo de
disección aórtica. Por ejemplo en disección tipoA, el paciente
puedepresentaralgúndéficitneurológicoosoplodiastólicode
regurgitación aórtica o signos de taponamiento cardíaco. En
caso de disección tipo B, se presenta con cifras tensionales
elevadas secundario a la pseudocoartación de la aorta
descendente u oclusión de arterias renales, claudicación
o diferencia en la amplitud de pulso entre extremidades
superiores e inferiores o incluso un abdomen agudo.
Diagnóstico
Si bien la sospecha diagnóstica se logra con una adecuada
anamnesis, las imágenes son fundamentales, ya que
permiten definir si se trata de una DA tipo A o B y de esta
manera definir una conducta rápidamente. Dentro de los
diagnósticosdiferencialesdedolortorácicosedebedescartar
el infarto agudo al miocardio con un electrocardiograma y
enzimas cardíacas. La radiografía de tórax está ampliamente
disponible, es rápida y también puede ser útil para orientar
el diagnóstico diferencial ante un dolor torácico.
El gold standard es el angioTAC, método ampliamente
disponible, rápido, no invasivo, con sensibilidad y especificidad
que alcanza el 95% y 100%, respectivamente. Permite
23 Nallamothu BK, et al: Syncope in acute aortic dissection:
diagnostic, prognostic, and clinical implications. Am J Med 113:468–
471, 2002.
435
identificarelflapdeíntimaqueseparaellumenfalsodellumen
verdadero, sitios de reentrada, extensión de la disección y
compromiso visceral. La desventaja es que la sensibilidad
al evaluar la aorta ascendente disminuye bajo el 80%, sin
embargo, el ecocardiograma transesofágico (ETE) permite
complementar el estudio, teniendo mayor utilidad, incluso en
el intraoperatorio de las DA tipoA.
Tratamiento
Todoslospacientescondisecciónaórticadebenmanejarseen
el período agudo en una UCI o unidad coronaria y la primera
medida terapéutica va dirigida a disminuir la presión arterial
sistémica y la fuerza de eyección del ventrículo izquierdo
(dP/dT) con el objetivo de estabilizar la extensión de la
disección, reducir la movilidad del flap intimal y disminuir
el riesgo de rotura. Para ello se utilizan beta bloqueadores
endovenosos, salvo en pacientes hipotensos. En estos últimos
sedebe descartar rápidamente la presencia detaponamiento
cardíaco en quienes la pericardiocentésis evacuadora está
contraindicada, ya que acelera el sangrado y shock por lo
que deben someterse a cirugía a la brevedad.
Por lo tanto, el manejo estándar es el uso de betabloqueo
combinado con vasodilatadores para lograr una presión
arterial sistólica que fluctúe entre los 100 y 120 mmHg y
la frecuencia cardíaca entre 60 y 80 latidos por minuto. El
betabloqueador recomendado es labetalol endovenoso. En
pacientes con riesgo de broncoespasmo o EPOC se pueden
utilizarbetabloqueadoresmáscardioselectivoscomoatenolol
o metoprolol o incluso bloqueadores de canales de calcio
como verapamilo o diltiazem. El vasodilatador utilizado es el
nitroprusiato de sodio o la nitroglicerina y no se debe utilizar
antes del betabloqueo para evitar taquicardia refleja.
Además, dentro del manejo médico está el manejo del dolor
con opioides. La morfina disminuye la descarga simpática
de catecolaminas generada por el dolor, lo que perpetúa la
hipertensión y la taquicardia.
EnelcasodelasDAtipoAquesonunaemergenciaquirúrgica,
los pacientes deben ser sometidos a tratamiento lo antes
posible, con el objetivo de corregir la regurgitación aórtica,
prevenir la rotura o aparición de derrame pericárdico con
consiguiente taponamiento cardíaco ymuerte. El tratamiento
consiste en resecar la aorta ascendente y el arco aórtico (este
últimosoloencasodeestarcomprometido)yreemplazarlopor
una prótesis aórtica, bajo circulación extracorpórea. Según el
compromiso anatómico a veces, incluso es necesario reparar
o reemplazar la válvula aórtica y reconstruir los ostium de
las coronarias.
Para las disecciones tipo B, el tratamiento quirúrgico está
indicado solo en caso de complicaciones, considerándose
el tratamiento médico como el gold standard, ya que el 14 a
67% de los pacientes que se operan fallece o sufre un daño
medular irreversible24
.
Las complicaciones pueden relacionarse con la amenaza de
rotura o rotura franca que se manifiestan por dolor intratable
persistente o recurrente, compromiso hemodinámico por
hemorragiaoaparicióndederramepleuraldenso(hemotórax),
dilatación o progresión de la disección; o pueden ser de tipo
isquémico (mala perfusión). En estos casos la intervención
consiste en el tratamiento endovascular desplegando una
prótesis en el lumen verdadero para impedir la comunicación
entre este y el falso lumen.
Pronóstico
La disección aórtica tipo A tiene una mortalidad espontánea
de un 1 a 2% por hora durante el primer día y mayor al 50%
durante el primer mes. La mortalidad intrahospitalaria luego
de cirugía es de un 24 a 27% y la sobrevida a 3 años es de
90.5%.
LadisecciónaórticatipoBnocomplicadatieneunamortalidad
al mes de un 10%. Con el tratamiento endovascular, la
mortalidad ha disminuido a menos del 10% y el riesgo de
paraplejia a menos de 3%, con una sobrevida a 3 años de
76.2%25
.
Seguimiento
La dilatación aneurismática de la pared del falso lumen es
la principal complicación tardía de la disección aórtica. Entre
los factores predisponentes está el mal control de la presión
arterial, diámetro aórtico máximo mayor o igual a 4 cm en la
fase aguda y la persistencia del falso lumen.
El estado de la aorta debe evaluarse con TAC al mes del
diagnóstico, a los tres, seis y doce meses yluego anualmente
para detectar principalmente el aumento del diámetro,
aneurismas o complicaciones en relación con la prótesis o
anastomosis.
Asimismo, el paciente debe ser advertido y educado sobre
su condición, debiendo mantener un adecuado manejo de la
presiónarterialyevitarfactoresderiesgocomoeltabaquismo.
El hematoma intramural (HIM) representa aproximadamente
24 Nienaber C, Zannetti S, Barbieri B et al. Investigation of
stent grafts in patients with type B aortic dissection: design of the
INSTEAD trial: a prospective multicenter, Eu-ropean randomized
trial. Am Heart J 2005; 149: 592-9.
25 Vega J, Zamorano J, Pereira N, Galleguillos A. Síndrome
aórtico agudo. Revisión de la literatura y actualización del tema.
Rev. Med. Chile. 2014; 142: 344-352.
436
HematomaIntramuralyÚlceraPenetrante
Ateroesclerótica
el 15% de los SAA. Corresponde a la acumulación de sangre
en la capa media, con ausencia de desgarro intimal y es
secundaria a sangrado de los vasa vasorum (fig.).Estepuede
generar un pseudoaneurisma, rotura y DA y, por lo general,
afecta la aorta descendente.
La úlcera penetrante ateroesclerótica (UPA) es la causadel
5% de los SAA. Resulta de la ulceración de una placa de
ateroma en la aorta que se va profundizando hasta atravesar
la lámina elástica interna y llegar a la túnica media (fig.). Se
cree que puede evolucionar a un HIM o complicarse con una
disección o rotura aórtica.Al igual que el HIM, la UPAtambién
afecta con mayor frecuencia a la aorta descendente (>90%).
Tanto el manejo del HIM como de la UPAdebe basarse en los
mismos conceptos que la DA, según esté afectada la aorta
ascendente o descendente (tipo A o tipoB).
437
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438
439
9.3 IsquemiaMesentérica
Quinteros JP, Schwartz E.
La isquemia mesentérica se produce cuando el flujo sanguíneo
esplácnico es insuficiente para suplir las demandas de las
vísceras. Este flujo insuficiente se puede producir tanto de
manera crónica como aguda. En los cuadros agudos la
isquemia es inicialmente reversible, sin embargo, de persistir
en el tiempo evoluciona a la necrosis de las vísceras. Esta
entidad es de muy baja frecuencia, considerando que
corresponde aproximadamente al 0.1% de los ingresos
hospitalarios. La isquemia mesentérica es un cuadro que
todomédicodebeconocer,puestieneunamortalidadentreun
50% a 90%. Es fundamental tener un alto nivel de sospecha
para un diagnóstico y tratamiento precoz.
Circulación Esplácnica
Durante la cuarta semana de desarrollo se genera el
plegamiento del embrión, quedando el saco vitelino incluido
con revestimiento de endodermo, esto genera el intestino
primitivo que dará origen a tres estructuras, el intestino
anterior, medio y posterior. Cada uno de estos intestinos es
invadidoporunejedemesodermoquegenerasuvasculatura,
es así como encontramos tres troncos arteriales principales
para la irrigación del intestino.
El intestino anterior, comprendido entre el esófago distal
hasta la ampolla de Vater, está irrigado por el tronco celíaco
que permite la irrigación del hígado, estómago, parte del
páncreas, el bazo y el duodeno. Esto lo hace mediante sus
tres ramas principales, las arterias hepática común, gástrica
izquierda y esplénica.
El intestino medio comprende desde la ampolla de Vater
hasta la flexura esplénica del colon, está irrigado por la arteria
mesentéricasuperior.Estaarteria,ramadelaaortaabdominal,
entrega ramas pancreatoduoenales anteriores y posteriores,
arterias cólica derecha, ileocólicas y ramas yeyunoileales .
El intestino posterior comprende desde el ángulo esplénico
del colon hasta el recto y depende del tercer tronco arterial
esplácnico que es la arteria mesentérica inferior.
Colaterales fisiológicas
• Entre el tronco celíaco y la arteria mesentérica
superior a nivel de las arterias pancreatoduodenales.
• Entre la arteria mesentérica superior e inferior a través
de colaterales mesentéricas que conectan las ramas
mesentéricas superiores con las ramas sigmoideas.
• Colaterales de la circulación parietal de la cavidad
abdominopélvica, dependiente de ramas de las
arterias ilíacas internas y el sistema esplácnico a
través de colaterales entre vasos rectales.
Colaterales especiales
Se ha descrito que existen vasos colaterales específicos que
comunican los tres sistemas. (Figura 3)
1. Arco de Büler: remanente embriológico
que conecta el tronco celíaco con la AMS.
2. Arteria marginal de Drummond: círculo arterial por borde
mesentéricodelcolon.Conectalasarteriascólicaderechay
mediaconlaarteriacólicaizquierdaylasarteriassigmoideas.
3. Arco anastomótico de Riolano: inconstante que conecta
la arteria mesentérica superior con la arteria mesentérica
inferior. La presentación más frecuente es la unión entre
la arteria cólica media con la arteria cólica izquierda.
Fisiología de la Circulación Esplácnica
El flujo intestinal es variable según las necesidades
fisiológicas del individuo. Es así como frente a estímulos
como la alimentación se genera respuesta parasimpática
aumentandoelflujoesplácnico,mientrasquefrentealejercicio
se manifiesta una respuesta simpática que reduce el flujo
esplácnico. Pero no son solo los estímulos fisiológicos los
que alteran la circulación esplácnica, las noxas como la
isquemia, hipovolemia, sepsis también generan impacto
sobre la circulación esplácnica. A modo de ejemplo, frente a
isquemia el flujo esplácnico puede reducirse hasta en un 75%
por 12 horas. Estas variaciones son compensadas mediante
la apertura y cierre de colaterales.
440
Isquemia Mesentérica Aguda (IMA)
Etiología
• Embolia arterial (50%)
• Trombosis arterial (20%)
• Patología no oclusiva (20%)
• Trombosis venosa (10%)
Embolia arterial
La principal fuente es cardiaca: fibrilación auricular, los
trombos ventriculares y las valvulopatías son los principales
factores de riesgo. Los émbolos se enclavan en la circulación
esplácnica principalmente en la arteria mesentérica superior.
Los dos sitios en que con mayor frecuencia se alojan émbolos
arteriales dentro de la arteria mesentérica superior son la raíz
de la arteria mesentérica superior y distal a la emergencia
de la arteria cólica media (se asocia a vaso espasmo distal).
De forma concomitante se pueden presentar embolias
simultáneas en otros territorios. Durante la exploración
quirúrgica de isquemia mesentérica secundaria a embolia
es característico ver que la primera asa de yeyuno no se ve
comprometida. Los ateroembolismos (émbolos compuestos
por cristales de colesterol) ocurren cuando se fragmenta la
placa de ateroma y es liberado al torrente sanguíneo restos
de la misma placa, son de baja frecuencia en relación con los
tromboembolismos. Es importante que se descarte isquemia
mesentérica secundaria a embolia en pacientes que han
sufrido infarto agudo al miocardio (IAM) y posteriormente
evolucionan con dolor abdominal.
Trombosis arterial
Cuando se presenta trombosis arterial las lesiones agudas se
producen sobre una lesión ostial crónica (ateroesclerosis).
Los desencadenantes de la lesión aguda son principalmente
el infarto agudo al miocardio, cuadros virales y pacientes
posquirúrgicos. El mecanismo consiste en una oclusión crónica
la cual se ve descompensada de forma aguda por fenómenos
que generan disminución de flujo, hipotensión y en caso que
se produce accidente de placa.
Patología no oclusiva
Laisquemiamesentéricanooclusiva(IMNO)esresponsabledel
20 - 30% de los episodios de IMA y surge como consecuencia
del vaso espasmo originado por sustancias vasoactivas
liberadas en respuesta a una situación de bajo gasto (shock,
arritmias, insuficiencia cardiaca). Es importante conocer que
esta complicación puede no ser inmediata y aparecer horas o
incluso días después de haber desaparecido el factor causal.
Etiología de isquemia mesentérica no oclusiva (vasoconstricción
prolongada):
• Shock/FOM/fármacos(principalmentedrogasvasoactivas).
• Insuficiencia cardiaca / shock cardiogénico.
• Shock séptico.
• Exposición prolongada a alfa agonistas.
• Cocaína.
• Intoxicación con ergotamínicos.
• Intoxicación con digoxina.
•
Trombosis venosa mesentérica
En los casos de trombosis venosa, el compromiso debe ser
extenso en el eje porto esplénico para generar sufrimiento
intestinal.Elinfartointestinalagudoesexcepcional,engeneral
es un cuadro más de evolución subaguda/crónica. La evolución
fisiopatológica de la trombosis consiste en una disminución
del retorno venoso, el cual genera edema intestinal. El edema
repercute en la microcirculación intestinal, esto se traduce en
una distención de las asas inicial que en forma progresiva
llevará al infarto intestinal.
Son múltiples las causas de trombosis venosa y estas deben
ser evaluadas en los antecedentes del paciente.
• Posquirúrgico (ejemplo: cirugía bariátrica).
• Neoplasias.
• Hipercoagulabilidad.
• Trauma abdominal.
• Pancreatitis.
• Deshidratación severa.
• Policitemia Vera.
• Infecciones (Pileflebitis).
Clínica
La presentación de la isquemia mesentérica depende del
tiempo de instalación y la presencia o no de colaterales.
Cuando las colaterales son insuficientes el cuadro es de
dolor peri o supra umbilical de inicio brusco, asociado a
sudoración, náuseas, vómitos e incluso diarrea sanguinolenta.
Al examen físico general el aspecto general del paciente es
de un paciente grave (tóxico). Al examen abdominal este
está distendido, muy doloroso, se pueden pesquisar ruidos
hidroaéreos aumentados en intensidad y si el sufrimiento
intestinal es avanzado se pueden pesquisar signos de irritación
peritoneal y ausencia de ruidos. Es clave en la sospecha
clínica cuando el dolor abdominal que presenta el paciente
es intenso y desproporcional a los hallazgos en el examen
abdominal.
Dentro del estudio de laboratorio, en fase inicial destaca la
elevación de parámetros inflamatorios (leucocitosis y elevación
de PCR). En fases tardías con necrosis instalada, se verá
leucocitosis con desviación izquierda, coagulopatía, acidosis
metabólica(conlactatoelevado),yalteracióndeperfilhepático
debido a la lisis celular.
441
Diagnóstico
Tomografía computada de abdomen y pelvis trifásica
(Angio TC):
• Debe tener fase angiográfica, visceral y portal.
• Permiterealizareldiagnósticodiferencialdelasdiferentes
etiologías de isquemia mesentérica.
• Permite identificar signos radiológicos de sufrimiento e
infartointestinal(neumatosisintestinalygasintravascular,
peritonitis y ascitis).
• Es posible identificar hasta el 80% de las oclusiones
arteriales proximales (embólicas o trombóticas, sin
embargo, no es tan útil en oclusiones distales.
• En el caso de la trombosis venosa mesentérica es el
examen de elección.
• En casos de isquemia no oclusiva no permite ver el
espasmo arterial, sin embargo, permite realizar el
diagnóstico diferencial y descartar sufrimiento intestinal.
Angiografía
• Menos disponible en comparación al Angio TC.
• Es invasivo, pero es el Gold estándar para identificar
oclusiones arteriales y la isquemia no oclusiva.
• Su principal ventaja es que tiene rol diagnóstico y
terapéutico.
Endoscopía
• El estudio endoscópico alto y bajo es fundamental
sobre todo ante sospecha de isquemia mesentérica en
paciente crítico (y que no es posible realizar estudios
imagenológicos).
• Pese a que no abarca la totalidad del tracto gastrointestinal,
signos de colitis isquémica o cambios isquémicos en
mucosa gástrica son sugerentes de cuadros de isquemia
mesentérica.
Tratamiento
El principal objetivo consiste en restablecer el flujo intestinal
lo antes posible. En primer lugar, contamos con medidas
de soporte para corregir la alteración de base y disminuir la
injuria intestinal.
Las medidas generales son las siguientes:
1. Reanimación: monitoreo hemodinámico, corrección de
acidosis metabólica, apoyo con drogas vasoactivas
(idealmentedobutamina,dopaminaendosisbajaomilrinona).
2. Anticoagulación.
3. Tratamiento antibiótico de amplio espectro.
4. Instalación de sonda nasogástrica.
El tratamiento quirúrgico debe ser precoz en casos de
sospechadeinfartooperforaciónintestinal(clínica,imágenes,
laboratorio), consiste en la resección del segmento involucrado.
El segundo pilar del tratamiento quirúrgico es lograr restablecer
el flujo intestinal.
Tratamiento específico según la etiología
1. Embolia arterial: el manejo quirúrgico comprende laparotomía
exploradora para evaluar el intestino, resecar segmentos
necróticos yrevascularización (embolectomíao bypass).
2. Trombosis arterial: el manejo no quirúrgico consiste en
evaluación clínica estricta asociada a anticoagulación y
terapiaantiagreganteplaquetaria,peroesnecesarioqueno
existansignosdesufrimientointestinal.Elmanejoquirúrgico
consiste en la revascularización mediante trombectomía
(eventualmente requiriendo realización de bypass) y la
resección de segmentos intestinales comprometidos.
3. Trombosisvenosa:aligualqueenotroscasosdetrombosis
venosa el objetivo es iniciar tratamiento anticoagulante
a base de heparina. La cirugía en este caso también
tiene como objetivo solo resecar segmentos necróticos,
luego iniciar la anticoagulación. Manejar estos casos
únicamente con anticoagulación solo se puede cuando
existe un buen flujo arterial, y no tenemos sospecha
de sufrimiento intestinal (clínico o imagenológico).
4. Isquemia no oclusiva: el tratamiento gira en torno
a eliminar el factor desencadenante optimizando la
patología de base. En conjunto debe mantenerse soporte
hemodinámico, incluyendo el uso de drogas vasoactivas
que no tengan efecto vasoconstrictor. La cirugía solo se
reserva para manejo de infarto intestinal.
Isquemia Mesentérica Crónica
La isquemia crónica está principalmente relacionada con
enfermedad ateroesclerótica progresiva. Mas del 70% de
los pacientes son de sexo femenino y uno de los principales
factores de riesgo es el tabaquismo. Siendo la enfermedad
ateroesclerótica una enfermedad sistémica es frecuente que
los pacientes que presentan isquemia mesentérica crónica,
de forma concomitante presenten compromiso vascular en
otros territorios (vascular periférica, cerebrovascular, coronario
y renovascular). Es importante recalcar que para que se
manifieste la isquemia mesentérica debe existir un compromiso
completo de al menos dos de los tres territorios vasculares
esplácnicosyqueelremanentepresenteungradodeisquemia
crítica.
Cuadro clínico: Dolor abdominal, principalmente posprandial,
asociadoanáuseas,vómitosypérdidadepeso.Eldolorocurre
442
alrededor de la primera ahora después de la alimentación y
lospacientesrefierenquelamanejanrestringiendoalimentos.
La baja de peso es fundamental en el cuadro clínico, los
dolores posprandiales generan una “fobia” alimentaria por
lo se asocian a baja de peso y desnutrición.
Diagnósticos diferenciales: patología biliar benigna, enfermedad
por úlcera péptica, enfermedad por reflujo gastroesofágico,
gastroparesia y síndrome de intestino irritable. Siempre se
debe tener las neoplasias (sobre todo del tracto gastrointesinal)
como diagnótico diferencial.
Exámenes de laboratorio: solo son de utilidad los marcadores
de estado nutricional como la albumina.
Estudioimagenológico:elestudiodeeleccióneslatomografía
computada de abdomen y pelvis trifásico (fase angiográfica,
visceral y portal).
Tratamiento: manejo de factores de riesgo (suspensión de
tabaco, antiagregación plaquetaria, uso de estatinas) y la
revascularización (por vía endovascular o abierta).
443
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444
445
9.4 Enfermedad Arterial Oclusiva de
ExtremidadesInferiores Ramírez J, Wuth MF, Ubilla M.
Introducción Diagnóstico
La aterosclerosis es un proceso que tiene repercusiones a
nivel sistémico. Esta patología corresponde a la oclusión o
estenosis de los vasos arteriales secundario a la acumulación
delípidosaniveldelsubendotelio.Cuandoesteprocesoocurre
en lugares ajenos a las arterias coronarias, se denomina
enfermedad arterial periférica.
La enfermedad arterial periférica comprende un rango de
síndromes arteriales no coronarios, en los que la disminución
del flujo sanguíneo de las arterias que irrigan distintos
órganos,generasíntomascaracterísticos.Así,elcompromiso
de las carótidas se puede expresar como un accidente
cerebrovascular, en las extremidades como claudicación
intermitente o isquemia crítica y en el territorio mesentérico
como angina/isquemia mesentérica.
Epidemiología
No existen cifras nacionales sobre la prevalencia de la
enfermedad arterial oclusiva. A nivel mundial se estima una
prevalencia general entre 3-10%, aumentando a 15-20% en
poblaciones > 70 años 1
.
Factores de Riesgo
• Tabaquismo
• Diabetes Mellitus
• Dislipidemia
• Hipertensión
• Insuficiencia renal
• Hiperhomocisteinemia
Enfermedad Arterial Oclusiva de Extre-
midades Inferiores
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Peripheral Arterial Disease (TASC II). J Vasc Surg. 2007;45 Suppl
S:S5.
Clínica
El cuadro clínico de la enfermedad oclusiva de extremidades
inferiores (EAO EEII) es variable, pudiendo ser desde
asintomático hasta la isquemia crítica.
La principal molestia es la fatiga o dolor de la extremidad
inferior afectada al caminar,la que se soluciona con el reposo,
síntoma conocido como claudicación intermitente. Por lo
general, estose va haciendo progresivo, presentándose cada
vez a menor distancia recorrida. Según el nivel de la lesión,
se afectará a distintos grupos musculares, así oclusiones a
nivel de la aorta infrarrenal o las arterias ilíacas provocan
dolor de los glúteos y muslos. En hombres, una oclusión a
este nivel se puede presentar además con disfunción eréctil
productodelaisquemia,constituyendoelsíndromedeLeriche
que incluye disminución o ausencia de pulsos femorales,
claudicación glútea y disfunción eréctil. Una oclusión a nivel
de la arteria femoral superficial se presenta con dolor en las
pantorrillas. Si la obstrucción del flujo es a nivel de la arteria
poplitea o tibial posterior es probable que se presente como
isquemia crítica, por falta de colaterales.
Su forma de presentación más extrema es la isquemia crítica,
en que la irrigación se ve comprometida a tal nivel que no es
capaz de suplir los requerimientos metabólicos basales de la
extremidad. Se define como la presencia de dolor isquémico
en reposo, úlceras o gangrena atribuible a EAO de más de
dos semanas de evolución.
Examen físico
A la inspección, es importante descartar la presencia de
úlceras arteriales. Estas habitualmente se encuentran en
la punta de los dedos de los pies, la zona interdigital, y la
cara lateral del tobillo y se asocian a dolor. Otros aspectos
importantes a la inspección es el aspecto de la piel, pacientes
con EAO pueden presentar cambios tróficos de la piel y en
casos extremos, gangrena.
Los pulsos femorales, poplíteos, tibiales posteriores y pedios
deben ser registrados según su intensidad:
0: No palpable
1: Pulso débil
2: Pulso débil no puede obliterarse
3: Pulso fácil de palpar
4: Pulso fuerte e intenso
446
Índice tobillo-brazo (ITB): se define como la relación entre la
presiónsistólicadeltobillodivididoporlapresiónsistólicamás
alta de los dos brazos. El valor normal es de 1,0 a 1,4. Un
ITB <0.90 es sensible para EAO. Por otra parte, un ITB > 1,4
es indicativo de una arteria no compresible por calcificación
y, por tanto, estos valores no son interpretables, aunque sí
se asocia a mayor riesgo cardiovascular.
Exámenes de laboratorio
Pacientes que se presenten con EAO deben ser estudiados
conexámenes de laboratoriobásico en búsquedadefactores
deriesgoparaeldesarrollodeestaenfermedadycondiciones
asociadas que pudieran empeorar la clínica del paciente.
Hemograma: es importante descartar la presencia de anemia
que podría hacer los síntomas más pronunciados. La elevación
de las plaquetas podría aumentar el riesgo de trombosis. El
recuento de leucocitos en contexto de úlceras podría ayudar
al diagnóstico o descarte de infección concomitante.
Creatinina/BUN:lospacientesconEAOporsuenfermedad,la
edad en que generalmente se presenta y las comorbilidades
con las que se relaciona están en riesgo de presentar
enfermedad renal crónica, por consiguiente, la función renal
debe ser evaluada.
Glicemia: descartar diabetes o evaluar su manejo.
Perfil lipídico: la dislipidemia es uno de los factores de riesgo
para el desarrollo de EAO. Valores de colesterol total > 200
mg/dl, HDL < 40mg/dl en hombres y <50 mg/dl en mujeres
y LDL >130mg/dl se relacionan con mayor incidencia de
eventos cardiovasculares.
Pruebas de coagulación: TTPK e INR.
LospacientesconEAOtienenriesgodepresentarenfermedad
cardiovascular y cerebrovascular, por tanto, es importante
estratificar según el riesgo y complementar con los estudios
necesarios previo a una eventual cirugía.
Laboratorio vascular no invasivo
- Medicióndeíndicetobillo-brazo:es unprocedimientosimple
yreproducible.Correspondealamedicióndelapresiónarterial
sistólica en las arterias braquiales y arteria tibial posterior,
luego de que el paciente ha estado en reposo en posición
supina por 10 minutos. Se calcula dividiendo la máxima
presión de tobillo por la máxima presión braquial.
- Presiónarterialsistólicasegmentaria:setomanmedicionesa
nivel del muslo superior, muslo inferior, pierna, tobillo y pedio
de ambas extremidades. Estos valores además se dividen
por la presión sistólica más alta de ambos brazos. Así, la
reducción > 20 mmHg entre dos segmentos consecutivos
indica estenosis a ese nivel. Los valores normales del índice
muslosuperior/brazoes>1,delocontrariosedebesospechar
una estenosis a nivel de la aorta, arteria ilíaca, femoral común
o femoral superficial proximal. Las presiones pueden verse
falsamente elevadas ante la calcificación de las arterias.
- Pletismografía: mide los cambios de volumen a lo largo de
diferentes puntos de la extremidad. Cobra importancia en
pacientes que secundario a procesos de calcinosis de las
arterias, la medición de presión arterial se haceinexacta.
- Velocidad de ondas de Doppler: es la medición de la
velocidad del flujo arterial en distintos segmentos de las
EE.II. Normalmente la onda es trifásica, haciéndose bifásica
ante enfermedad oclusiva, llegando hasta monofásica en
enfermedad avanzada
Imágenes
- Ecografía Doppler: corresponde a una ecografía en laque
se objetiva la presencia de flujos en los vasos sanguíneos.
Se miden velocidad de flujo y áreas, como el lumen arterial.
Mediante fórmulas definidas se puede calcular el porcentaje de
estenosis. Este método es operador dependiente, por lo que
en manos entrenadas es un excelente examen diagnóstico.
- AngioTAC: TAC de EE.II. con contraste que permite el
estudio acabado de las arterias. Además, la reconstrucción
3D permite visualizar no solo el lumen, sino también las
paredes de los vasos, calcificaciones, sitios de estenosis y
relación con estructuras vecinas. No es invasivo, pero puede
presentar las complicaciones propias del uso de medio de
contraste y expone a radiación.
- Resonancia magnética o angioresonancia: no utiliza
radiación y también provee un estudio anatómico de los
vasos sanguíneos. Utiliza gadolinio como medio de contraste
y, por consiguiente, se debe tener cuidado en administrarlo
a pacientes con una VFG <30ml/min/1,732, ya que en ellos
se ha descrito un riesgo en desarrollar fibrosis nefrogénica
sistémica.
-Angiografía: es el gold standard. Consiste en la administración
de medio de contraste arterial para el estudio anatómico
del árbol vascular arterial de las EE.II. Permite evaluar la
localización y extensión de la lesión. Es un método invasivo y
conlleva ciertos riesgos que, aunque bajos en incidencia, son
graves como,porejemplo:reacciónalérgicaalcontraste,falla
renal,pseudoaneurismasyembolias,entreotros.Lasmejores
imágenes se obtienen con la técnica de sustracción digital.
447
Clasificación
Para estratificar la severidad de la oclusión arterial, se han
diseñadodosmétodosdeclasificación:FontaineyRutherford.
Etapas de Fontaine
Etapa Clínica
I Asintomático
IIa
Claudicación
no invalidante
IIIb
Claudicación
invalidante
III Dolor enreposo
IV Ulceración o gangrena
Categoría Clínica
0 Asintomático
1
Claudicación
leve
2
Claudicación
moderada
3 Claudicación
severa
4 Dolor enreposo
5
Pérdida menor de
tejido
6 Ulceración o gangrena
448
Isquemia crítica
La isquemia crítica se define como la presencia de dolor en
reposo o la presencia de gangrena o úlceras isquémicas
de más de 2 semanas de evolución en un paciente con
enfermedad arterial oclusiva.
El dolor en reposo representa riesgo de pérdida de la
extremidad. Tasas históricas de amputación y mortalidad varían
entre un 10 a 25 % de los casos, lo que hace indispensable
un diagnóstico y tratamiento oportuno2
.
Tratamiento
Eltratamientodebesermultidisciplinario,incluyendomedidas
de reducción de riesgo cardiovascular, control de síntomas,
manejo de complicaciones y de aumento del flujo sanguíneo
en la extremidad afectada.
1. Reducción de riesgo cardiovascular: es necesario
controlar y disminuir los factores de riesgo asociados
a aterosclerosis. Se deben tratar las comorbilidades
como dislipidemia, hipertensión y Diabetes Mellitus. Es
fundamental el cese de consumo de tabaco. Inicio de
fármacos antiplaquetarios como aspirina y clopidrogel.
2. Ejercicio: la realización de actividad física favorece
la revascularización mediante mecanismos de
angiogénesis de la extremidad. Idealmente, el paciente
debería someterse a un programa de ejercicio
supervisado que consistiera en 3 sesiones semanales
de 30 a 45 minutos, por un mínimo de 12 semanas.
3. Medidas farmacológicas (manejo de síntomas): en
la actualidad existen dos fármacos con los que se
ha demostrado un manejo eficaz de la claudicación
intermitente.
• Cilostazol: inhibidor de la fosfodiesterasa III, aumenta los
niveles deAMP cíclico con lo que se genera dilatación del
músculo liso y disminución de la agregación plaquetaria.
Pacientes con claudicación que utilizan cilostazol
aumentan su distancia caminada máxima.
• Pentoxifilina: derivado de las metilxantinas. Aumenta la
elasticidad de los glóbulos rojos con lo que mejoraría la
perfusión.
4. Revascularización: la intervención quirúrgica, ya sea con
cirugía abierta o procedimientos endovasculares, debe
ser considerada en los casos de:
• Ineficaciadetratamientomédicoencasosdeclaudicación
invalidante.
2 Christopher J. Kwolek and Fahad Shuja Rutherford’s
Vascular Surgery, Chapter 162, 2528-
• Discapacidad severa o deterioro importante de la calidad
de vida.
• Ausencia de comorbilidades que limiten capacidad
funcional del paciente a pesar de que se resuelva la
claudicación como angina o EPOC.
• Expectativa de vida aceptable.
• Morfología de la lesión vascular susceptible de ser
reparada.
• Isquemia crítica.
En el año 2007 se actualizó y se publicó la guía TASC II que
clasificalaenfermedadoclusiva,separándolaenenfermedad
aortoilíacayfemoropoplitea.Deestamanerasepuedeayudar
a la selección del tratamiento por efectuar.
Tipo de Lesión Tratamiento
Tasc A Endovascular
Tasc B
Endovascular
Tasc C
Se prefiere la
cirugía abierta.
Tasc D Cirugía abierta.
Lacirugíaabiertaincluyevariadastécnicas.Sepuederealizar
endarterectomía o bypass mediante la colocación de injertos
venosos autólogos (habitualmente vena safena mayor) o
de prótesis sintéticas (Dacron o PTFE). Esto lo definirá el
cirujano especialista.
El manejo endovascular incluye la angioplastía con balón
(simple o medicado) y la instalación de endoprótesis o stents.
Isquemia Aguda
La isquemia aguda de una extremidad se refiere a la
disminuciónrápidaorepentinadelaperfusióndelaextremidad
449
que amenaza la viabilidad de esta hasta dos semanas de
evolución3
.
A pesar de avances en el manejo y tratamiento, se han
reportado entre un 10 a 30% de amputaciones debidas a
esta patología en los primeros 30 días desde su diagnóstico3.
Etiología
Las causas principales en orden de frecuencia son:
• Trombosis: derivada del proceso de aterosclerosis,
por lo que su incidencia se ha mantenido, al igual que
todas las patologías derivadas de los factores de riesgo
cardiovascular.
• Embolia: principalmente de origen cardiaco, ya sea por
enfermedades valvulares, arritmias como fibrilación
auricular u otra. Esta etiología ha mostrado disminución
con el tiempo, probablemente debido al control actual de
la enfermedad reumática.
• Lesión iatrogénica: posterior a reconstrucción, injerto o
punción arterial (arteriografía).
• Trauma: lesiones musculoesqueléticas o por armas.
Diagnóstico
La presentación clínica es variable, depende principalmente
de la severidad de la isquemia y de su etiología. La embolia o
traumavaaprovocarunarápidainstalacióndelossíntomas,en
horas, a diferencia de la trombosis, donde existe enfermedad
vascular periférica previa, dada por la placa de ateroma,
por lo que deberían existir colaterales que compensen
parcialmente la disminución del flujo, manifestándose el
dolor progresivamente en días.
Anamnesis: se debe especificar el dolor, forma de inicio,
localización e intensidad. Además, se debe buscar la
presencia de alteraciones motoras y/o sensitivas en la
extremidad afectada. Siempre preguntar por factores de
riesgo cardiovascular y enfermedad arterial previa, dolor
previo, intervenciones quirúrgicas o procedimientos en la
extremidad, también por patologías como FA, trombofilias,
valvulopatías, etc.
Al examen físico se describen las clásicas “6 Ps”.
• Pain (dolor).
• Palidez.
• Pulso ausente o disminuido: idealmente evaluado con
ecografía Doppler.
• Parestesia: el adormecimiento de la extremidad se
observa en el 50% de los casos.
• Paresia: signo de mal pronóstico.
• Poiquilotermia: la zona afectada se enfría.
3 Norgren L, Hiatt WR, Dormandy JA, Nehler MR, Harris KA,
Fowkes FG, TASC II Working Group. Inter-Society Consensus for
the Management of Peripheral Arterial Disease (TASC II). J Vasc
Surg. 2007;45 Suppl S:S5.
Estecuadroclínicoclásiconoseencuentraentodosloscasos,
como se señaló anteriormente, depende de la velocidad de
instalación de la obstrucción, formación de colaterales y de
la etiología.
El objetivo principal de la anamnesis y el examen físico es
conocer la severidad de la obstrucción.
Diagnóstico
Lo principal en la isquemia aguda es definir la severidad,
si la extremidad es viable o si se encuentra en riesgo vital.
Se debe agregar dentro de la evaluación inicial en estos
pacientes el uso de un ecógrafo Doppler para evaluar la
presencia o ausencia de pulsos venosos y arteriales.
450
Clasificación
Hallazgos Doppler
Categorías Descripción Pérdida sensorial. Debilidad muscular Arterial Venoso
I. Viable Sinamenaza
inminente.
No No Audible Audible
II.Amenazada
a. Marginal
Salvable si
es tratada
prontamente.
Mínima (dedos)
o ausente.
No Inaudible Audible
b. Inmediata Salvable si
es tratada
inmediata-
mente.
Más que solo los
dedos, dolor en
reposo.
Leve amoderada. Inaudible Audible
III.
Irreversible
Pérdida de tejido
o daño nervioso
permanente.
Extensa o con
anestesia.
Severa o
parálisis.
Inaudible Inaudible
Categoría I: la extremidad es viable. Por lo que existe
tiempo para planificar y realizar un tratamiento de menor
morbimortalidad. Habitualmente hay tiempo para hacer
estudios como la angiografía.
CategoríaII: esimportantedistinguir entreIIa yIIb.Lamayoría
de los pacientes se encuentra en esta categoría, se debe
actuar rápido para evitar la mayor pérdida de tejido. Requiere
intervención quirúrgica y reperfusión precoz.
Categoría III: la extremidad presenta necrosis, con daño
irreversible del tejido, por lo que la reperfusión puede traer
complicaciones graves como el síndrome de reperfusión. El
tratamiento principal es la amputación. El principal desafío
consiste en definir el nivel de la amputación.
Imágenes
Luego de la clasificación, se define si hay tiempo para
realizar un diagnóstico más específico sobre la localización
de la obstrucción, lo que es ideal en el caso de que el
paciente requiera intervención quirúrgica, lo cual se plantea
principalmente en categorías I y IIa.
Los estudios son los mismos que los para EAO. La ecografía
Doppler es considerada casi de regla para la evaluación
inicial. Luego, si existe tiempo disponible, la angiografía es
el examen que permite el diagnóstico específico e incluso el
tratamiento endovascular. La Angio-TC y la angiografía por
RNM tienen alta sensibilidad y especificidad para describir
anatómicamente la lesión, pero son menos precisas que la
angiografía y, en general, no se utilizan en este contexto.
Tratamiento
Dentro de las primeras medidas generales, se debe poner
al paciente en posición arterial (Fowler: decúbito supino con
EE.II. bajo el nivel del tronco) y administrar analgesia.
Anticoagulación: en todas las categorías debe ser el primer
paso de tratamiento, el tiempo es crucial. El objetivo de esto
será estabilizar la lesión y evitar la extensión del trombo,
dando tiempo para que la fibrinólisis actúe disolviéndolo. Se
indica heparina no fraccionada en bolo con dosis de 80 UI/
Kg y luego infusión continua 18 UI/kg/hr hasta doblar el TTPa
(dosis anticoagulante).
Trombolisis farmacológica: es un tratamiento menos invasivo
y,por lo tanto, con menor riesgo. Es una opción cuando existe
tiempo para permitir que el medicamento disuelva el trombo
sin poner en riesgo la extremidad en casos seleccionados.
Se considera un tratamiento seguro y eficaz en categorías
I y IIa. Esta terapia se puede asociar posteriormente con
trombectomía percutánea o cirugía, obteniendo mejores
451
resultados que los que no recibieron trombolisis. Su principal
riesgo son las hemorragias, especialmente el accidente
cerebrovascular hemorrágico, que es particularmente riesgoso
enpacientesañososconhipertensiónarterialmalcontrolada.
Trombectomía endovascular: es un manejo más rápido,
necesario en pacientes con mayor severidad de isquemia.
Puede ser por aspiración o mecánica, la técnica es definida
por el especialista. Se considera principalmente en categoría
IIa y IIb y en centros con Servicio de Cirugía Vascular. Se
puede considerar una angiografía intraoperatoria previa.
Cirugía:parapacientes encategoríaI,IIa yIIb,especialmente
estos últimos que requieren inmediata reperfusión. Se realiza
laextraccióndirectadelémbolootrombodelaarteria.Muchas
veces se realiza una angiografía intraoperatoria para evaluar
presencia de otras lesiones y tratarlas en el mismo pabellón.
Amputación: en el caso de extremidades no viables donde la
reperfusión podría provocar la muerte del paciente.
452
Biliografía
1. Chaikof E and Cambria R.Atlas of Vascular Surgery and Endovascular Therapy: Anatomy and Technique. Philadelphia: Saunders;
2014.
2. Cronenwett J and Johnston K. Rutherford’s Vascular Surgery. 8th edition. Philadelphia: Saunders; 2014.
3. Hallett J, Mills J, Earnshaw J, Reekers J and Rooke T. Comprehensive Vascular and Endovascular Surgery. 2nd edition.
Philadelphia: Mosby; 2009.
4. Charlie C. Cheng, Faisal Cheema, Grant Fankhauser and Michael B. Silva. Sabiston Textbook of Surgery, Chapter 62, 1754-1807
2017?
5. Jonothan J. Earnshaw Rutherford’s Vascular Surgery, Chapter 161, 2518-2527.e1 2014.
6. Michael S. Conte MD, Society for Vascular Surgery practice guidelines for atherosclerotic occlusive disease of the lower
extremities: Management of asymptomatic disease and claudication. Journal of Vascular Surgery, 2015-03-01, Volume 61, Issue 3,
Pages 2S-41S.e1, Copyright © 2015 Society for Vascular Surgery.
7. Dawber T.R, Kannel W.B., Revetoskie N., Stokes J., Kagan A., and Gordon T. Some Factors Associated with Development of
Coronary Heart Disease: Six Years Follow-up Experience in the Framingham Study. Am J Public Health Nations Health 1959;
49:pp. 1349-1356.
8. Inter-Society Consensus for the Management of Peripheral Arterial Disease (TASC II) L. Norgren,a W.R. Hiatt,b J.A. Dormandy,
M.R. Nehler, K.A. Harris, and F.G.R. Fowkes on behalf of the TASC II Working Group, Örebro, Sweden and Denver, Colorado.
2007.
9. Jonothan J. Earnshaw. Rutherford’s Vascular Surgery, Chapter 161, 2518-2527.e1.
10. Management of acute lower limb ischaemia .Robert J. Hinchliffe and Johannes Lammer. Vascular and Endovascular Surgery: A
Companion to Specialist Surgical Practice, 8, 122-139.
453
9.5 Pie Diabético
Brain M, Paredes D, Montoya D, Court F.
Introducción
La diabetes mellitus corresponde a una patología de
tipo metabólico que se caracteriza principalmente por la
hiperglicemia crónica. Se habla de diabetes mellitus 1 cuando
estahiperglicemiaessecundariaaladestruccióndelascélulas
beta de los Islotes de Langerhans en el páncreas debido a
una reacción autoinmune, resultando en una disminución
progresiva de los niveles de hormona insulina sintetizados.
En cambio, la diabetes mellitus tipo 2 es secundaria a un
procesoderesistenciaalahormonainsulinaenlosreceptores
periféricos. Es importante tener en cuenta que los elevados
niveles de glicemia plasmática desencadenan alteraciones a
nivelmicroangiopáticoymacroangiopático.Agrandesrasgos,
las manifestaciones microangiopáticas son principalmente la
retinopatía, la nefropatía y la neuropatía; mientras que a nivel
macrovascular se asocia a enfermedad coronaria, enfermedad
cerebrovascular y enfermedad vascular periférica.
Definición
“Se denomina pie diabético a la infección, ulceración
o destrucción de tejidos profundos del pie asociado con
neuropatía o enfermedad arterial periférica en las extremidades
inferiores de personas diabéticas”1
.
Epidemiología
LaprevalenciadediabetesmellitusenChileseestimaentreun
4.2% y 7.5% según las encuestas realizadas a nivel nacional
los años 2003 y 2006 por el Ministerio de Salud y la ADICH,
respectivamente2
. Se estima que la prevalencia de esta
patología va a elevarse con el transcurso de los años debido
a los malos hábitos de vida actual.
En Chile hay escasa información sobre las complicaciones de
ladiabetes,porloquelaprevalenciaexactadelpiediabéticoes
desconocida. Eso sí cabe destacar que la Encuesta Nacional
de Salud 2009-2010 estableció que 6.7% de los diabéticos
tuvo que consultar a un profesional de la salud durante el
1 Equipo de Cirugía Vascular y Endovascular, Servicio de
Cirugía, Complejo Asistencial Barros Luco, Escuela de Posgrado,
Universidad de Chile. ¿Por qué debemos preocuparnos del pie
diabético? Importancia del pie diabético. Rev. Med. Chile 2013; 141:
1464-1469.
2 Ministerio de Salud. Guía Clínica diabetes mellitus tipo 2.
Santiago: Minsal, 2010.
año por pie diabético3
. Es un tema relevante en salud pública
debido a que es la primera causa de amputaciones de origen
no traumático.
Factores de riesgo
Se debe distinguir entre factores sistémicos y aquellos que
son locales.
1. Factores sistémicos:
• Mal control metabólico.
• Duración de la diabetes.
• Enfermedad vascular periférica.
• Ceguera o pérdida de agudeza visual.
• Enfermedad renal crónica.
• Edad avanzada.
2. Factores locales:
• Neuropatía periférica.
• Deformidad estructural del pie.
• Trauma.
• Uso de calzado inadecuado.
• Presencia de callosidades.
• Historia de ulceración o amputación previa.
• Presiones elevadas de forma prolongada.
• Movilidad articular disminuida.
Etiología
Respecto al proceso fisiopatológico mediante el cual se
produce el pie diabético, es importante considerar tres factores:
neuropatía, isquemia y la respuesta inflamatoria.
El compromiso nervioso involucra la inervación motora,
sensitiva y autónoma. Desde el punto de vista motor, se
produce atrofia muscular con el desarrollo de alteraciones
anatómicas a nivel de la planta del pie. Esto lleva a un
aumento sostenido de la presión en ciertos puntos de la
planta, induciendo la formación de callos. Desde el punto de
vistasensorial,seproduceunadisminucióndelasensibilidad,
con la consiguiente disminución de mecanismos de protección.
Asimismo, la inervación autonómica inadecuada lleva al
desarrollo de anhidrosis y sequedad cutánea, aumentando el
riesgodedesarrollodeúlceras.Elconjuntodeestoselementos
lleva al desarrollo de la neuropatía de Charcot.
3 Minsal.EncuestaNacionaldeSaludENSChile2009-2010;
2011.
454
Desde el punto de vista vascular, se producen alteraciones
tanto a nivel microscópico como macroscópico. Esto resulta
enunadisminucióndelflujosanguíneoenloslechoscapilares.
Por lo mismo, se genera una isquemia en la región del pie,
lo cual ante una infección establece una pobre respuesta
inmunológica.
La respuesta inflamatoria en el paciente diabético es
inadecuada, ya que se ven alteradas la función de fagocitosis
y de respuesta inmune frente a microorganismos.
El desarrollo de la úlcera en el pie diabético, asociado a los
factores mencionados anteriormente, predispone al desarrollo
de infecciones. Asimismo, la pobre respuesta inmunológica
lleva a la perpetuación de la infección.
Diagnóstico
El diagnóstico en el pie diabético se realiza en función de la
clínica, laboratorio y hallazgos radiológicos.
Clínica
Se debe indagar en la historia clínica el tiempo transcurrido
desde el diagnóstico de la diabetes, historia de heridas o
amputaciones previas, síntomas tanto isquémicos como
neuropáticos y comorbilidades.
Respecto a los síntomas neuropáticos estos dependen de
las fibras nerviosas afectadas. Ante compromiso sensitivo
se pueden presentar síntomas como dolor, parestesias y
disminución de la sensibilidad. Asimismo, ante daño motor,
se suelen producir calambres, disminución de fuerza en la
extremidad y atrofia muscular. Por último, el compromiso
autonómico produce trastornos a nivel de la inervación
simpática, con disminución de la sudoración local.
Por otro lado, la sintomatología secundaria a la isquemia
esta dada principalmente por la claudicación intermitente y
síntomas de enfermedad arterial oclusiva de extremidades
inferiores.
Examen Físico
Manifestaciones dermatológicas: eritema, calor local,
ulceraciones, cambios tróficos, hiperqueratosis.
Musculoesquelético: inflamación, deformidad articular,
alteraciones de movilidad articular, luxaciones.
Neurológico: alteraciones en sensibilidad y fuerza motora.
Es de vital importancia determinar el grado de neuropatía.
Vascular: disminución de los pulsos, desaparición de pulsos
y gangrena.
Laboratorio
Se debe realizar un estudio de laboratorio clínico básico con
el fin de determinar el grado de control metabólico como
posibles signos de infección.
Se debe solicitar:
- Hemograma con fórmula diferencial en búsqueda de infección
como leucocitosis, desviación a izquierda.
- Perfil bioquímico.
- Glicemia.
Imagenología
Se debe solicitar la realización de radiografías simples, TACo
RMN, dependiendo de la disponibilidad de recursos y grado
de afectación de la extremidad.
La RNM hoy aparece como el estudio de imagen que muestra
más precozmente el compromiso óseo.
Dentrodeloshallazgosradiológicosporanalizarseencuentran:
alteraciones en densidad ósea, compromiso articular, signos
de osteomielitis, deformidad, luxación, fracturas, edema de
tejidos blandos.
Clasificación
1. Clasificación fisiopatológica:
Hay que tener presente si predominan manifestaciones
isquémicas, neuropáticas o ambas. Lo más común es el pie
diabético mixto, isquemia + neuropatía.
2. Clasificación de Wagner:
Se realiza una estratificación en seis niveles de acuerdo con
el grado de compromiso de la extremidad:
Tipo 0: ausencia de lesiones
Tipo I: lesión superficial
Tipo II: lesión profunda que afecta músculos y tendones
Tipo III: osteomielitis
Tipo IV: necrosis focalizada
Tipo V: necrosis generalizada
3. Clasificación de la Sociedad Chilena de Infectología:
Nos permite establecer un cierto pronóstico.
455
Sin amenaza de amputación Con amenaza de amputación Con riesgo vital
Úlcera superficial Úlcera profunda
Celulitis de menos de 2 cm. Celulitis de más de 2 - 3 cm.
Sin compromiso articular, óseo,
fasceitis oabscesos.
Compromiso de estructuras
profundas.
Sin isquemia significativa. Con isquemia o gangrena.
Sin toxicidad sistémica. Toxicidad sistémica o descontrol
metabólico.
Sepsis o shock.
Wagner I. Wagner 2, 3, 4, 5. Generalmente requiere ampu-
tación.
Tratamiento
Los objetivos del tratamiento son:
1. Control metabólico:
Se debe velar por normalizar los niveles de glicemia del
paciente diabético, siendo importante la consulta a medicina
interna o diabetología.
2. Manejo de la infección:
La infección es una complicación frecuente en la evolución
del pie diabético. De acuerdo con la gravedad de la lesión es
la microbiología presente en la herida. A grandes rasgos, en
lesiones superficiales suelen existir bacterias gram positivas
(S. Aureus y Streptococos), mientras que en infecciones de
mayor profundidad suele encontrarse bacterias gram negativas
y anaerobios.
La Sociedad Chilena de Infectología recomienda:
- Infecciones leves sin amenaza de amputación ni riesgo
vital: el manejo puede ser ambulatorio con antibióticos orales.
Monoterapia con cefalosporinas de primera generación,
clindamicina, ampicilinasulbactam, amoxicilina-ácido
clavulánico o ciprofloxacino.
- Infecciones con amenaza de amputación: el tratamiento
antibacterianodebeserdeamplioespectroparacubrirmúltiples
agentes etiológicos. Usualmente, requieren hospitalización,
asociado a desbridamiento quirúrgico y en casos de riesgo
vital, manejo en Unidad de Paciente Crítico. Los esquemas
recomendados son clindamicina-cefalosporinas de tercera
generación, clindamicina-quinolonas, imipenem-cilastatina.
Laduracióndeltratamiento debemantenersepor10a 14días
eninfecciones levesmoderadas,mientras queeninfecciones
severas se recomiendan esquemas de 21 días.
3. Curaciones: el personal de enfermería debe ser un aliado
en el manejo del pie diabético, recomendándose curaciones
frecuentes asociada a observación estricta de las lesiones.
Asimismo, el cirujano debe realizar la desbridación de todo
el tejido necrótico.
4. Revascularización: en el caso del paciente con pie
diabético isquémico se debe realizar una evaluación por
cirujano vascular, con el fin de determinar la necesidad de
456
procedimientosderevascularización.Esteesunpuntocrucial,
ya que permite en muchos casos salvar la extremidad.
5. Prevención: tiene un rol primordial en lo que es la atención
primaria. Es fundamental que el equipo de salud identifique al
paciente de riesgo y educarlo con el fin de evitar la aparición
de lesiones. En general, se debe tener precauciones con
los pies como secarlos bien luego del baño, mantenerlos
limpiosynoandardescalzo.Asimismo,esrelevanteelmanejo
podológico de las uñas, con el fin de evitar la aparición de
heridas.Loscalcetinesporutilizardebenserdecoloresclaros,
de algodón idealmente y deben ser cambiados a diario. Por
último, los zapatos deben ser usados siempre con calcetines,
escogiéndose modelos de horma ancha y redonda.
Complicaciones
La principal complicación del pie diabético es la amputación.
En términos epidemiológicos, el pie diabético es la causa del
70% de las amputaciones realizadas actualmente. Esto lleva
a una disminución abrupta en la calidad de vida junto con un
aumento de la mortalidad del paciente diabético.
Biliografía
1. Equipo de Cirugía Vascular y Endovascular, Servicio de Cirugía, Complejo Asistencial Barros Luco, Escuela de Posgrado,
Universidad de Chile. ¿Por qué debemos preocuparnos del pie diabético? Importancia del pie diabético. Rev. Med. Chile 2013;
141: 1464-1469.
2. Ministerio de Salud. Guía Clínica diabetes mellitus tipo 2. Santiago: Minsal, 2010.
3. Beltrán C., Fernández A., Giglio S., Biagini L., Morales R., Pérez J., Aburto I. Tratamiento de la infección en el pie diabético. Rev.
Chil. Infectol. V. 18, N.° 3, Santiago 2001.
457
9.6 PatologíaVenosa
Brain M, Montoya D, Pizarro MJ, Court F.
Este capítulo trata acerca de dos entidades patológicas
originadas por el mal funcionamiento venoso: patología
variceal y úlceras venosas.
Várices
Corresponden a la dilatación progresiva y permanente de
las venas, ya sea aquellas subcutáneas o submucosas, las
cuales se producen principalmente por un fenómeno cuyo
principal elemento corresponde al aumento de la presión
venosa, en conjunto con un daño en el mecanismo antirreflujo
de las válvulas.
Las várices en realidad representan la insuficiencia venosa
crónica con la consiguiente hipertensión venosa. Esta conduce
a un amplio espectro de manifestaciones clínicas, desde
síntomas hasta hallazgos como venas varicosas, venas
reticulares, telangiectasias, edema, cambios tróficos de la
piel como hiperpigmentación y úlceras.
Epidemiología
Las consultas por várices de las extremidades inferiores son
muy frecuentes tanto en la medicina pública como privada,
dadas sus repercusiones estéticas como por los síntomas
asociados y sus complicaciones1
,2
. No hay estudios nacionales
al respecto, pero en estudios internacionales las várices
están presentes en un 10 - 30% de la población general, con
aumento de las tasas en adultos mayores 3
,4
.
Esta diferencia de porcentaje se puede explicar por las
variadas definiciones que existen para várice. Algunos estudios
la consideran toda vena o vénula dilatada, lo cual incluye a
las telangiectasias, aumentando así su frecuencia, mientras
que otros solo consideran las várices tronculares.
En la mayoría de las publicaciones sobre el tema se acepta
la definición que considera como várice a toda vena dilatada,
elongada, tortuosa y con insuficiencia valvular, sin considerar
su tamaño.
Las várices son más comunes en las mujeres que en los
1 Bases de la medicina clínica. Facultad de Medicina,
Universidad de Chile.
2 Manual de Patología quirúrgica. Fernando Crovari Eulufi,
Manuel Manzor Véliz. Pontificia Universidad Católica de Chile,
2014, capítulo 47: Enfermedades venosas; pp. 553 - 558.
3 Callam MJ. Epidemiology of varicose veins. Br J Surg
1994; pp. 81-167.
hombres5
. La prevalencia aproximada es de 15% en los
hombres y 25 - 30% en las mujeres en la población mayor de
18 años. Durante el embarazo es frecuente que las mujeres
embarazadas padezcan várices debido a cambios hormonales
y a la presión adicional que el feto ejerce sobre la región
inferior del abdomen. Otro factor importante es que estas
pueden ser causadas por un sobrepeso considerable o por
permanecer de pie durante períodos prolongados2.
Una de las implicancias de esta patología es el gran impacto
socioeconómicodelascomplicaciones,yaqueconstituyeuno
de los factores de ausentismo laboral más común2.
Fisiopatología
Su fisiopatología se puede explicar principalmente por la
anatomía y trayecto del sistema venoso en las extremidades.
Cabe recordar que la red venosa se compone de un sistema
o red superficial que corresponde aproximadamente al 10%
del retorno venoso que está compuesto por la venas safena
interna y safena externa y sus tributarias, y una red profunda
que drena el 90% restante y que está ubicada bajo la fascia,
conformada por venas profundas que acompañan arterias
que llevan el nombre de estas. También existe un sistema
de comunicación, compuesto por venas que perforan la
fascia, conformado por venas comunicantes y perforantes,
donde el flujo va de lo más superficial a lo más profundo. El
sistema superficial drena principalmente a la piel, mientras
que el sistema profundo está encargado del drenaje muscular
y de planos profundos. Estas venas presentan válvulas
en su interior, las cuales están encargadas de prevenir el
flujo sanguíneo retrógrado favoreciendo el retorno venoso.
Cuando hay disfunción valvular, se puede desencadenar un
reflujo llevando al aumento de presión hasta el nivel de la
microcirculación dérmica, con extravasación de moléculas y
eritrocitosqueactúanestimulandounarespuestainflamatoria,
liberación de citoquinas y factores de crecimiento, produciendo
posteriormenteloscambiosdérmicosenestadiosavanzados.
La formación de várices afecta el sistema superficial que
compromete el territorio de la vena safena interna y externa.
Este se debe a varios elementos comunes como: 1) aumento
presión hidrostática, dada por la posición de pie (esta presión
puede verse disminuida durante el ejercicio donde el retorno
venoso es facilitado por la contracción y compresión de
los músculos actuando como una especie de bomba). 2)
Aumento de volumen en territorio venoso. Esto puede verse
acompañado a la falla de mecanismo antirreflujo dado por
las válvulas, obstrucción o suma de ambos elementos. Estos
4 Evans CJ, Fowkes FG, Ruckley CV, Lee AJ. Prevalence
of varicose veins and chronic venous insufficiency in men and
women in the general population: Edinburgh Vein Study. J Epidemiol
Community Health 1999; pp. 53 - 149.
5 Anwar MA, Georgiadis KA, Shalhoub J, et al. A reviewof
familial, genetic, and congenital aspects of primary varicose vein
disease. Circ Cardiovasc Genet 2012; pp. 5 - 460.
458
elementos llevan a una dilatación progresiva y aumento
en la tensión. Cabe destacar que también puede haber
enfermedades que afecten la pared venosa favoreciendo la
dilatación de la pared.
Existen múltiples factores de riesgo para el desarrollo de
várices, entre ellos:
• Sexo femenino: 4:1
• Genética: ambos padres con várices predisponen hasta
un 90% el desarrollo de estas.
• Raza: raza blanca. Poco común en asiáticos y negros.
• Constipación.
• Sobrepeso.
• Edad: mayor frecuencia entre los 30 a 60 años.
• Antecedente de trombosis venosa.
• Actividad laboral: personas que trabajan de pie tiene
más riesgo.
• Embarazo: debido a cambios hormonales, aumento
presión intraabdominal y volemia.
Drenaje venosoprofundo
459
Clínica
Los síntomas más frecuentes son: sensación de pesadez en las
piernas, cansancio, calambres de predominio nocturno, prurito,
calor local, edema, alteraciones tróficas (hiperpigmentación,
eccema, dermatitis), ulceraciones (más frecuentemente en
región medial de pierna), lipodermatoesclerosis, parestesias
y dolor vespertino que alivia en trendelenburg. En muchos
casos pueden ser asintomáticas.
Otras manifestaciones son las trombosis, varicoflebitis,
sangrado.
Estudio
Es importante realizar un examen físico buscando descartar
enfermedades concomitantes, ya sea alteraciones arteriales,
linfáticas o secuelas de cirugías previas.
El principal método diagnóstico es mediante ecografía con
doppler venoso decúbito y de pie, donde se observarán las
característicasdelflujovenosoprofundo(velocidad,diámetro,
válvulas, características de flujo, trombos, etc.).
Pletismosgrafía venosa: permite observar los cambios de
volumen posturales y los relacionados con función muscular.
Escaso uso actual.
Venografía por punción: reservada para procedimientos
invasivos como angioplastía venosa.
Existen algunas maniobras semiológicas que pueden ayudar
en el diagnóstico como la prueba de Trendelemburg, prueba
de Perthes, prueba de Shwartz y prueba de Pratt.
Prueba de Trendelenburg: determina la función valvular. El
paciente en decúbito supino, levanta la extremidad en ángulo
recto;posteriormente,sedrenalasangrevenosapormediode
unmasajeseguidodeunvendajecomoespeciedetorniquete.
Se pone de pie al paciente y se observa la velocidad con que
las venas se llenan de sangre.
Prueba de Perthes: se observa el llenado de venas
superficiales posterior a vendar la pantorrilla del paciente.
Permite diagnosticar alteraciones en flujo sanguíneo en
sistema venoso profundo.
Maniobra de Schwartz: busca determinar la existencia de
reflujo, percutiendo en la parte más alta de la safena y
percibiendo el impulso de la onda transmitida más abajo. Si
las válvulas son insuficientes, se trasmitirá el impulso hacia la
periferia (signo de la oleada). Si las válvulas son continentes,
el impulso de la onda refleja será frenado por las válvulas y
la sensación de oleada será menor o estará ausente.
Prueba de Pratt: busca determinar la presencia de venas
comunicantes insuficientes a través de una doble ligadura,
separadas 10 cm entre cada una. Se hace caminar al
paciente y se observa si hay llene venoso. Esto se traduce
en insuficiencia de venas comunicantes.
Clasificación
Primarias: (80%) corresponden a una falla del mecanismo del
sistema venoso superficial dentro del cual tenemos las fallas
valvulares del cayado safeno femoral afectando válvulas, la
vena safena , colaterales y comunicantes.
Secundarias: (20%) ocurren por sobrecarga del sistema
superficial, ya sea debido a fallas valvulares, insuficiencia u
obstrucción del sistema venoso profundo.
Diagnóstico diferencial
Es importante descartar otras causas de edema como
insuficiencia cardiaca, hepática o renal.
Fístulas arteriovenosas: existe una comunicación anormal
llevando a un aumento de flujo venoso y, por consiguiente,
a una insuficiencia valvular y formación de várices.
Lesiones traumáticas: lesiones que afecten elementos
arteriales y venosos.
Otrascausasdelesionescutáneascomomixedemas,úlceras
producto de vasculitis o tumores de piel, etc.
Tratamiento
Farmacológico
Soporte elástico: medias de compresión graduada. Si bien
estas no producen desaparición de las várices ni corrigen la
dilatación, ayudan aprevenir la progresión yaliviansíntomas.
Flebotónicos flavonoides: Diosmina micronizada, debosilato
de calcio.
Fármacos hemorreológicos: Pentoxifilina, aspirina.
Escleroterapia: indicada en telangiectasias y paquetes
varicosos de menor tamaño.
Cirugía
Indicado en: estética, sintomatología persistente a pesar de
tratamiento médico. Patología venosa con trastornos tróficos
o complicaciones derivadas como úlceras venosas,trombosis.
Lacirugíatradicionalconsisteen la safenectomíadel territorio
afectado, además de la extirpación de los paquetes varicosos
colaterales.Hoyendíaesmuyfrecuenteobservarcirugíascon
técnicasendovascularesablativasconláseroradiofrecuencia
de la vena safena comprometida.
460
Complicaciones
• Trombisis.
• Sangrado.
• Úlcera varicosa: tiende a ser indolora, borde neto, en
región de maléolo medial.
• Trombo embolismo pulmonar.
Resultados
Larecurrenciavaadependedelapresiónvenosa,compromiso
deotrosterritoriosvenosos,malatécnicaquirúrgica,variantes
anatómicas del territorio venoso, falla en tratamiento elástico
posoperatorio,correccióndefactoresderiesgo,usodemedias
elásticas en aquellos pacientes con factores de riesgo.
Úlceras Venosas
Las úlceras en extremidades inferiores son causa común de
consulta médica. La gran mayoría de las úlceras vasculares
son de carácter crónicas y recurrentes causando gran
morbilidad al paciente, incluyendo incapacidad laboral. El
mal cuidado de estas puede llevar a la amputación de la
extremidad.
Epidemiología
Laprevalenciaesdesconocida,perosehavistounaasociación
con el aumento de la obesidad debido a la asociación que
existe entre sus comorbilidades. Algunas series internacionales
estiman su prevalencia en el 1 % de la población.
Fisiopatología
Úlceras en extremidades inferiores pueden ser de carácter
multifactorial, pudiendo coexistir enfermedad arterial y
venosa. En el caso de las úlceras arteriales, la hipertensión
y ateroesclerosis juegan un rol fundamental, mientras que las
úlceras venosas se deben principalmente a la hipertensión
venosasecundaria,a la insuficiencia venosacrónicacausada
por disfunción válvula. La estasia venosa provoca liberación
de factores de crecimiento, radicales libres y activación
leucocitaria cuyo resultado final es hipoxia y daño endotelial,
provocando cambios tróficos en la piel y úlceras.
El diagnóstico diferencial incluye patologías como vasculitis
o neoplasias como carcinomas escamosos, melanomas,
keratoacatnomas, angiosarcomas, entre otras.
Clínica
Se presentan frecuentemente en maleólo interno y se
acompañan de cambios tróficos de la piel y dermatitis. El
dolor tiende a ser leve y este se alivia al elevar la extremidad
(tabla 1).
Estudio
Elestudiotienecomoobjetivoconfirmarlainsuficienciavenosa
con ecografía doppler.
Tratamiento
El pilar del tratamiento médico es la compresión mecánica
con medias compresivas especializadas o con triple vendaje;
además,elpaciente debeacudir acuraciones seriadas. Otras
indicaciones incluyen:
- Elevar la extremidad.
- Aspirina.
- Agentes hemorreológicos (pentoxifilina).
Actualmente, no hay pruebas disponibles para apoyar el
uso habitual de antibióticos sistémicos para promover la
cicatrización de las úlceras venosas de la pierna. En cuanto
a las preparaciones tópicas, existen algunas pruebas para
apoyar el uso de yodo de cadexómero.
Eltratamientoquirúrgicosereservaparaaquellasheridasque
no responden a tratamiento médico, asociadas a infección
o necrosis.
461
Característica Úlcera venosa Úlcera arterial
Aspecto
Bordesdelimitados.Excavada.Fondo
granulomatoso.
Bordeplano.Blanquecina
Fondo atrófico.
Ubicación Cara interna. Maleólo interno. Cara externa, en
prominencias óseas.
Clínica Dolor moderado que cede con elevación
de extremidad.
Dolor importanteque
aumenta en decúbito.
Pulsos Distales Presentes Disminuidos oAusentes
Tabla 1. Características clínicas de úlceras vasculares.
462
Biliografía
1. Bases de la medicina clínica. Facultad de Medicina, Universidad de Chile.
2. Manual de Patología quirúrgica. Fernando Crovari Eulufi, Manuel Manzor Véliz. Pontificia Universidad Católica de Chile, 2014,
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4. Evans CJ, Fowkes FG, Ruckley CV, Lee AJ. Prevalence of varicose veins and chronic venous insufficiency in men and women in
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8. Tretbar LL. Deep veins. Dermatol Surg 1995; pp. 21:47.
9. Pathophysiology of chronic venous disease.
10. Overview and management of lower extremity chronic venous disease.
11. Ohura N, Yamamoto K, Ichioka S, et al. Global analysis of shear stressresponsive genes in vascular endothelial cells. J Atheroscler
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12. Stücker M, Schöbe MC, Hoffmann K, SchultzEhrenburg U. Cutaneous microcirculation in skin lesions associated with chronic
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13. Christopoulos DC, Belcaro G, Nicolaides AN. The hemodynamic effect of venous hypertension in the microcirculation of the lower
limb. J Cardiovasc Surg (Torino) 1995; 36:403.
14. Patient information: Varicose veins and other vein disease in the legs (The Basics).
15. Patient information: Chronic venous disease (Beyond theBasics).
16. Clinical manifestations of lower extremity chronic venous disease.
17. O’Meara S, Al-Kurdi D, Ologun Y, Ovington LG, Martyn-St James M, Richardson R. Antibióticos y antisépticos para ayudar a la
cicatrización de las úlceras venosas de la pierna. La Biblioteca Cochrane PlusThe Cochrane Library.
463
9.7 TrombosisVenosa Profunda Y
Enfermedad Tromboembólica
Brain M, Montoya D, Ubilla M.
Introducción
Trombosis venosa se refiere al cuadro caracterizado por la
obstrucción del flujo venoso causado por la presencia de
un trombo, cuyo origen reside en múltiples etiologías tanto
congénitas como adquiridas.
Se clasifica en superficial y profunda según los territorios
afectados, siendo esta última la de mayor importancia clínica
dada su potencial complicación: la embolia pulmonar.
La enfermedad tromboembólica (ETE) es una entidad clínica
que se puede manifestar de dos formas, como trombosis
venosa profunda (TVP) o como embolismo pulmonar (TEP).
La clínica es variable y poco específica, motivo por el cual
se han creados escalas de puntaje, las que asociadas a
modernas técnicas de imágenes han facilitado el correcto
diagnóstico. El pilar del tratamiento es la anticoagulación y
su duración dependerá de la localización del trombo y del
tiempo de resolución.
En este capítulo trataremos la TVP, sus causas,diagnóstico
y tratamiento al igual que el estudio y manejo del TEP.
Epidemiología
La ETE supone el ingreso hospitalario de 300.000 a 600.000
pacientes al año en Estados Unidos y causa la muerte de al
menos 50.000 de ellas1
.
Estudios norteamericanos demuestran una incidencia
anual de 122 en 100.000 personas; 56/100.000 para TVP
y 66/100.000 para TEP, con un pequeño mayor riesgo en
hombres. Representa la tercera enfermedad cardiovascular
másfrecuentedespués delinfartoalmiocardio ydelaccidente
vascular encefálico.
Corresponde a la primera causa de muerte evitable
intrahospitalaria, atribuyéndose el 10% de las muertes
nosocomiales2
. Además, en cirugía es una complicación
frecuente, se estima que puede ocurrir hasta en el 80% de
pacientes quirúrgicos de alto riesgo, con una frecuencia
variable de TEP que puede oscilar entre el 0,01% y el 5%3
.
Fisiopatología
La ETE se produce por una sumatoria de diferentes factores
de riesgo4
, los cuales generan la aparición de al menos un
componente de la tríada de Virchow (Fig. 1), la que explica
los cambios necesarios para la formación de un trombo. Esta
tríadaestácompuestapor:estasis venosa,dañodelendotelio
vascular e hipercoagulabilidad. Recordemos que estas
condiciones pueden ser tanto congénitas como adquiridas y
estas últimas pueden ser transitorias o permanentes.
Figura 1. Tríada de Virchow.
1 M.P. Vela. Tratamiento ambulatorio de la trombosis venosa
profunda de miembros inferiores con Heparina de bajo peso
molecular. Gac Med Bilbao 2004; 101: 49-52 [18].
2 American College of Chest Physicians Guidelines 2008.
3 Espinoza Ricardo. Complicaciones en cirugía general. 1ª
edición 2011. Ed. Mediterráneo.
4 Crovari F., Manzor M. Manual de Patología quirúrgica.
PUC. Capítulos 46 - 47, pp. 531 - 558.
Aumento de la
Coagulación
Daño
Endotelial
Estasis
Venosa
464
A cada factor de riesgo se le ha atribuido una probabilidad de condicionar la aparición de ETE y, por lo tanto, deben ser
estudiados en todos los sujetos que serán intervenidos quirúrgicamente para poder prevenir la complicación tromboembólica
en ellos (tabla 1).
Riesgo mayor OR >10
Fractura cadera/pierna
Prótesis cadera/rodilla
Cirugía mayor
Traumatismo mayor
Lesión medular
Riesgo medio OR 2-9 Cirugía artroscópica de rodilla
Catéter venoso central
Quimioterapia
Insuficiencia cardiaca congestiva
Terapia de reemplazo hormonal
Cáncer
ACV con secuela neurológica (parálisis)
TVP/TEP previo
Trombofilia
Riesgo menor OR < 2 Reposo en cama > 3 días
Inmovilidad por estar sentado (viajes)
Edad avanzada
Obesidad
Venasvaricosas
Embarazo, puerperio
Tabla 1. Factores de riesgo de TVP.5
Clínica
Afecta en general a extremidades inferiores, siendo clínicamente
importante diferenciar su ubicación entre supra o infrapoplítea,
dado que hasta el 50% de las TVP que afectan a las venas ilíaca
y femoral provocarán un TEP, mientras que el riesgo de TEP en la
enfermedad distal es mucho menor, solo el 20% al 30% de las TVP
bajo la rodilla avanzarán a territoriosproximales3.
La TVP puede presentarse asintomática hasta en la mitad de los
pacientes. La sintomatología es inespecífica e incluye: dolor en la
extremidad, edema, eritema o cianosis. Existen dos formas graves
de presentación: Flegmasia alba dolens y Flegmasia cerúlea dolens.
En la primera ocurre una oclusión masiva del sistema venoso
profundo proximal de las EEII y se manifestará con edema, dolor,
frialdad, palidez y con disminución de pulso arterial. La flegmasía
cerúlea ocurre tras una progresión de la oclusión venosa hacia el
sistema venoso superficial, interfiriendo la perfusión arterial de la
extremidad, provocando isquemia y gangrena distal. Los síntomas
tienden a ser más severos mientras más proximal sea la oclusión
venosa.
En el examen físico siempre se deben comparar los hallazgos de una
extremidad con la contralateral. Aquella región afectada por TVP se
presentará con aumento de volumen, edematosa, con aumento de la
temperatura local y con cambios en la coloración cutánea. Además,
se podrá identificar el signo de Homans (dolor a la dorsiflexión del
pie).
Dada la clínica inespecífica, se han creado puntajes diagnósticos
con el fin de mejorar el rendimiento de pruebas diagnósticas al
seleccionar población con probabilidad pretest mayor, el más
utilizado en la práctica clínica es el Score de Wells para TVP (tabla 2).
5 Anderson FA, Spencer FA. Risk Factors for Venous
Thromboembolism. Circulation. 2003;107:I-9-I-16.
465
Score de Wells modificado para TVP Puntos
Aumento de volumen de toda una extremidad +1
Extremidad sintomática >3cm de diámetro que la contralateral +1
Edema confinado a la extremidad sintomática +1
Inmovilización por parálisis, paresia o uso reciente de yeso en extremidades
inferiores
+1
Reposo en cama >3 días o cirugía mayor <12 semanas bajo anestesia general o
regional
+1
Cáncer activo (en tratamiento actual o dentro de 6 meses) +1
Dilatación de venas superficiales contralaterales no varicosas +1
Dolor a la palpación de las masas musculares (Signo de Homans) +1
Antecedentes de TVP previa +1
Diagnóstico alternativo tanto o más probable que TVP -2
< 0 Riesgo bajo (5% TVP)
1-2 Riesgo intermedio (17% TVP)
>3 Riesgo alto (53% TVP)
Tabla 2. Score de Wells para TVP.
466
La sospecha de TEP surge en un paciente con factores de
riesgo para TVP asociados a sintomatología respiratoria
inespecífica como disnea, dolor torácico, tos, ortopnea y
hemoptisis.
Al examen físico es habitual encontrar taquicardia, taquipnea
e hipoxemia y en algunas ocasiones fiebre.
Al igual que para el diagnóstico de la TVP, se han creado
puntajes para determinar la probabilidad pretest de presentar
la enfermedad y así guiar el estudio (tabla 3).
Score de Wells modificado para TEP Puntos
TEP o TVP previo +1.5
FC > 100 lpm +1.5
Cirugía reciente o inmovilización +1.5
Clínica de TVP +3
TEP es el diagnóstico más probable +3
Hemoptisis +1
Cáncer activo +1
< 2 Riesgo bajo (TEP 1.3%)
2-6 Riesgo intermedio(16.2%)
>6 Riesgo alto(37.5%)
Tabla 3. Score de Wells para TEP.
467
Tipos de TEP
El TEP representa un espectro de síndromes clínicos con
implicancias pronósticas muy distintas. En este sentido,
podemos agrupar a los pacientes en 3 grupos:
1. TEP con presión arterial normal y funcionamiento
correcto de corazón derecho.
2. TEP submasivo: pacientes normotenso, pero con
disfunción ventricular derecha.
3. TEP masivo: definidos por la presencia decompromiso
hemodinámico.
Diagnóstico
Dímero-D
Útil para iniciar el estudio en casos donde la probabilidad
de ETE es baja, ya que un resultado normal descarta la
enfermedad.Correspondeaunproductodeladegradaciónde
lafibrina,porloquesusnivelesséricosaumentanenpresencia
de trombosis. La trombosis venosa superficial, la celulitis
y el hematoma intramuscular también lo elevan, haciendo
necesario ampliar los estudios. Se considera anormal con
valores>500ng/mL.Notieneutilidadenpacientesquirúrgicos
operados recientemente.
Imagenología
La ecografía Doppler color es el estudio de elección debido
a su alta sensibilidad (100%), especificidad (62 a 83%) y
reproducibilidad. En casos donde se sospecha TEP se debe
solicitarAngioTAC pulmonar. En pacientes sin claros factores
de riesgo para TVP y en enfermedades trombóticas extensas
se recomienda estudio con TAC de abdomen y pelvis para
descartar neoplasia.
La angiografía convencional se reserva para casos de
TEP masivos que son candidatos a trombolisis química o
trombectomía.
Tratamiento
Cuando se diagnostica una trombosis venosa profunda,
cualquiera que sea su localización, debe tratarse primero con
heparina, ya sea no fraccionada o de bajo peso molecular y
luegopuedeprolongarseestetratamiento,obien,administrarse
anticoagulantes orales por un período variable.
Hospitalización
El tratamiento en el hogar del individuo es una opción de
acuerdo con un metaanálisis publicado por la Colaboración
Cochrane6
. Habitualmente, se prefiere hospitalizar las TVP
en localización suprapoplítea.
Anticoagulación
El uso de anticoagulantes es el tratamiento rutinario de la
trombosis venosa profunda y TEP no masivo. Por lo general,
se inicia con un curso breve, menor de una semana, de
heparina mientras se comienza al mismo tiempo un curso de
3 a 6 meses con anticoagulantes orales. Se prefiere el uso
de una heparina de bajo peso molecular (HBPM), excepto en
pacientes con contraindicación para la HBPM, por ejemplo,
pacientes con insuficiencia renal o inminente necesidad de
un procedimiento invasivo. En aquellos pacientes que han
tenido TVP recurrentes (dos o más), la anticoagulación es,
por lo general, una terapia indicada a lo largo de la vida y
en aquellos que presentan TEP la anticoagulación debe ser
prolongada.
HBPM
• Enoxaparina: 1mg/Kg cada 12 horas subcutánea.
• Dalteparina: 100 UI/Kg cada 12 horas subcutánea.
• No requieren control con laboratorio.
HNF
• Bolo inicial de 5.000 UI endovenosa.
• Se continúa con BIC 10-18 UI/kg/hora con controles de
TTPA cada 6 horas. o 25.000 UI en 250cc de SF
• Objetivo: lograr duplicar o triplicar TTPA basal (hasta 80
segundos).
Anticoagulantes orales
• Antagonistas de la vitamina K: Acenocumarol, Warfarina
• Inhibidor de factor Xa: Rivaroxaban, Apixaban
• Inhibidor de la trombina: Dabigatrán
Trombolisis
La trombolisis es un procedimiento realizado por vía venosa
periférica que está indicado en TEP submasivos o masivos.
En la TVP generalmente se reserva para casos de trombosis
extensa o flegmasia. Existen diferentes mecanismos de
trombolisis.
• Trombolisis sistémica: elección en TEP masivo.
• Trombolisis in situ: en caso de falla de trombolisis
sistémica.
• Trombectomía percutánea o quirúrgica: en TEP masivo
con contraindicación de trombolisis sistémica, cuando
falla trombolisis.
6 Othieno R, Abu Affan M, Okpo ELa Biblioteca Cochrane
PlusThe Cochrane Library. Tratamiento domiciliario versus
hospitalario para la trombosis venosa profunda.
468
Medias de compresión elástica graduada.
Se deben indicar desde el diagnóstico.
Un metaanálisis de ensayos controlados aleatorios de
la Colaboración Cochrane mostró menor incidencia de
síndrome posflebítico en pacientes que usaban las medias
de compresión.
Filtro de la vena cava inferior
Su objetivo es impedir la embolia pulmonar proveniente de un
trombo de extremidades inferiores. Se indica en presencia de
pacientes con una contraindicación absoluta al tratamiento
anticoagulante, por ejemplo, pacientes con hemorragia
intracraneal, traumatismo reciente, gran cirugía reciente.
Prevención
Todo paciente hospitalizado se debe categorizar en cuanto
a su riesgo de sufrir ETE. Según el resultado de esta
clasificación se ofrecerán distintas medidas para prevenir
la complicación tromboembólica. Primero, se debe evitar la
inmovilidad sostenida, luego se agregan medidas mecánicas
como las medias de compresión y/o compresión neumática
intermitente.Enpacientesconmayorriesgosedebeinstaurar
la medida farmacológica, la cual consiste principalmente en
heparina en dosis profiláctica.Serecomienda laprofilaxis con
HBPM. Se puede utilizar enoxaparina o dalteparina.
469
Biliografía
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Gac Med Bilbao 2004; 101: 49 - 52 [18].
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470
471
Cirugía Plástica
472
473
10.1 Quemaduras
Ramírez J, Besser N, Fontbona M.
Introducción
Las quemaduras son lesiones producidas en los tejidos vivos
debidoalaaccióndediversosagentesfísicos(llamas,líquidos
u objetos calientes, radiación, corriente eléctrica o frío),
químicos (cáusticos) y biológicos, que provocan alteraciones
que van desde un simple eritema hasta la destrucción total
de las estructuras1
.
En Chile se hospitalizan anualmente más de 6.000 pacientes
debidoaquemaduras,presentandounatasademortalidadde
4,5por100.000habitantes2
.Laprincipalcausadequemaduras
en mayores de 5 años es, en primer lugar, por fuego y, en
segundo, por líquidos calientes (escaldadura)3
. En pacientes
menores de 5 años de edad, la quemadura por líquidos
calientes es lo más frecuente.
El manejo de estos pacientes, más aún en el contexto de gran
quemado, es multidisciplinario, incluyendo cirujanos plásticos,
intensivistas, enfermeras especializadas, kinesiólogos,
nutricionistas y terapeutas ocupacionales. Todos estos
recursos se reúnen en centros de derivación para quemados.
Clasificación
1. Quemaduras térmicas
Son las más frecuentes (90% de los casos) y se dividen, a
su vez, en 3 subgrupos.
a. Quemaduras por contacto:
Más frecuentes en mujeres. Con un sólido caliente (limitadas,
pero profundas) o con un líquido caliente (extensas, pero
menos profundas).
b. Quemaduras por llama:
Másfrecuentesenhombres.Suextensiónesvariable,peroson
casi siempre profundas y se asocian a lesiones pulmonares
por aspiración de sustancias derivadas de la combustión.
1 Ministerio de Salud. Guía Clínica gran quemado.Minsal,
2007.
2 Albornoz C, Villegas J, Peña V. y Whittle S. Epidemiología
del paciente gran quemado adulto en Chile: experiencia del Servicio
de Quemados del Hospital de la Asistencia Pública de Santiago.
Rev. méd. Chile [online]. 2013, vol.141, N.° 2.
3 American Burn Association: National Burn
Repository: Report of data from 1999–2008,2009(http://
w w w . am er i b u r n. or g/ 2 0 0 9 N B RA n n u a l R e p o r t .
pdf?PHPSESSID=12571a86a2cf103467eced2e6e290504). 7a-e
c. Quemaduras por radiación:
Quemaduras solares por exposición a radiación ultravioleta
o quemaduras por exposición a radiación ionizante.
2. Quemaduras químicas
a. Quemaduras por ácidos:
Generalmente, limitadas y de profundidad media.
b. Quemaduras por álcalis:
Más profundas y evolutivas.
3. Quemaduras eléctricas
a. Quemaduras por flash eléctrico:
No hay paso de corriente a través del organismo y el daño
ocurre por una elevación brusca de la temperatura, pero
de muy corta duración, provocando una lesión superficial.
Se puede asociar a quemaduras térmicas, si se produce la
combustión de la vestimenta del individuo.
b. Quemaduras con paso de corriente a través del
cuerpo:
Son lesiones muy profundas, pudiendo dañarse músculos,
huesos, tendones, nervios y vasos. La extensión del
compromiso cutáneo no se relaciona con la magnitud del
daño interno, por lo que se consideran quemaduras muy
graves por el curso imprevisible que pueden tener.
Fisiopatología
El fuego, las quemaduras por líquidos calientes y el contacto
con superficies calientes o frías producen daño mediante
la transferencia de energía, lo que provoca necrosis de
coagulación. Las quemaduras por químicos y electricidad
generan un daño directo sobre la célula causando necrosis
de coagulación y de liquefacción.
Una vez que ocurre el daño, se pueden identificar tres zonas:
1. Zona de necrosis: células que ya no se encuentran vitales.
2. Zona de estasis: existe un daño de los vasos sanguíneos,
pero las células aún se encuentran vitales. Si reciben
el manejo adecuado, estas células pueden sobrevivir,
de no ser así sufrirán necrosis de coagulación.
474
3. Zona de hiperemia en respuesta a la inflamación.
Una quemadura provoca aumento de la permeabilidad
de la piel, que debido a los trastornos hidroelectrolíticos
asociados, si no es tratada a tiempo, puede llevar a una
falla orgánica múltiple, shock e incluso la muerte.
Diagnóstico
Al momento de evaluar un paciente quemado se debe
considerar:
1. Profundidad.
2. Extensión.
3. Localización.
4. Tipo.
5. Edad.
6. Gravedad.
Profundidad
Existendosclasificacionesparaevaluarlaprofundidaddeuna
quemadura.LaprimeraeslaclasificacióndeConverse-Smith,
la más utilizada a nivel mundial. La segunda, la clasificación
de Benaim, se usa a nivel regional (Hispanoamérica).
Epidermis
Zona de
Coagulación
Zona de
Estasis
Dermis Zona de
Hiperemia
475
Converse-Smith
Grado Compromiso Características
Primer Epidermis Eritema,dolor, sin
flictena.
Segundo superficial Dermis superficial. Flictena, edema,
dolor.
Segundo profundo Dermis profunda. Flictena, edema,
dolor.
Tercer Todaslacapas de
la piel.
Escara, analgesia.
Benaim
Tipo Características Evolución
A Eritematosa o
flictenular.
Curación 10-15 días,
sin secuelas.
AB-A (superficial) Compromiso plexo
vascular superficial.
Curación 3 semanas.
AB-B (profunda) Requiere injerto.
B Compromiso plexo
vascular profundo.
Requiere injerto o
colgajo.
476
Las quemaduras de tercer grado presentan analgesia por
destruccióndelasterminacionesnerviosas.Estaausenciade
dolor no es absoluta, puesto que en la zona circundante a la
lesión sigue habiendo dolor, pero a causa de la inflamación,
no del daño directo por la quemadura, por lo que no es de
tipo urente.
Si el daño se limita a la epidermis, la piel reepitelizará, pero
si hay compromiso de la membrana basal, la reparación del
tejido será mediante cicatrización con fibrosis.
Por lo anterior, si una quemadura presenta pelo firmemente
insertado, significa que aún hay membrana basal en el bulbo
del folículo piloso y, por tanto, que aún se puede regenerar
la epidermis.
Una buena prueba para determinar la profundidad de la
lesión es traccionar el folículo piloso, el cual se desprende
con facilidad en aquellas quemaduras que comprometen la
dermis profunda.
Imagen 1: Quemadura de 1er grado facial.
477
Imagen 2:
a.- Quemadura en mano de 2do grado con áreas de quemadura superficial y otras profunda.
b.- Quemadura en extremidad inferior de 2do grado.
Imagen 3: Quemadura en 3er grado en tórax y extremidad superior derecha. Nótese la escara de
coloración blanca nacarado
478
Menor de 1 año 1 año 5años
10 años 15 años y más
Extensión
Regla de los 9 (>15 años)
Ampliamente utilizada, pero se debe tomar en cuenta que en
pacientes pediátricos las proporciones cambian.
Regla de la mano
Se puede utilizar también la mano del paciente (no del
examinador) para calcular la superficie corporal quemada.
La mano del paciente, incluidos los dedos, equivale al 1%
de la superficie corporal.
Localización
Existen regiones anatómicas que toman mayor importancia
al estar involucradas en una quemadura.
● Cara.
● Cuello.
● Manos y pies.
● Pliegues articulares.
● Genitales y periné.
● Mamas.
Tipos
● Fuego.
● Escaldadura (líquidos calientes).
● Contacto con superficies calientes o frías.
● Químicos.
● Electricidad.
Edad
Los extremos de la vida son los que están a mayor riesgo al
momento de sufrir una quemadura:
● Pacientes < 2 años.
● Pacientes > 60 años.
Gravedad
El índice de gravedad por aplicar depende de la edad:
9
9 9
36
18 18
11
9 9
34
18 18
15
9 9
32
17 17
17
9
32
9
16 16
19
9 9
32
15 15
479
Edad Clasificación Descripción
Adultos Garcés
Edad
+% Quemadura Tipo A x1
+% Quemadura Tipo AB x2
+% Quemadura Tipo B x3
2 a 20 años Garcés modificado por
Artigas
40 - Edad
+% Quemadura Tipo A x1
+% Quemadura Tipo AB x2
+% Quemadura Tipo B x3
< 2años Garcés modificado por
Artigas y consensoMinsal
1999
40 - Edad
+% Quemadura Tipo A x1
+% Quemadura Tipo AB x2
+% Quemadura Tipo B x3
+Constante 20
* Adaptado de Guía Clínica gran quemado. Minsal, 2007.
Enlascategoríasgraves ysiguientes debeincluirse,además,
a todos los pacientes con:
• > 65 años con 10% o más de quemadura AB o B.
• Quemadura respiratoria.
• Quemadura de alta tensión.
• Politraumatismo.
• Quemados con patologías graves asociadas.
• Con quemaduras intermedias o profundas complejas, de
cabeza, manos, pies o región perineal.
Síndrome de Inhalación
En los últimos años se ha logrado disminuir el riesgo de
muerteasociadoaunaquemadura,mientrasquelamortalidad
derivada de las lesiones pulmonares provocadas por aspiración
dehumoyotrassustancias encombustiónhaidoenaumento.
Esta mortalidad se debe al desarrollo de infecciones más que
a una insuficiencia respiratoria primaria.
El cuadro puede cursar con compromiso de conciencia, daño
de mucosas, edema pulmonar y SDRA.
La causa de muerte varía dependiendo de la fase del cuadro.
En una primera fase aguda es la intoxicación por monóxido
de carbono la causa más frecuente, mientras que en fa-ses
tardías del cuadro es una neumonía asociada la quemayor
mortalidad produce.
Índice Pronóstico
21 - 40 Leve: Sin riesgo vital
41 - 70 Moderado: Sin
riesgo vital, salvo
complicaciones
71 - 100 Grave: Mortalidad
< 30%
101 - 150 Crítico: Mortalidad
30 -50%
> 150 Sobrevida
excepcional:
Mortalidad >50%
480
Tratamiento
Evaluación inicial: lo primero por considerar en el manejo
de los pacientes quemados es que deben manejarse como
pacientes de trauma, con la finalidad de mantener una
perfusión adecuada y evitar el shock por pérdida de fluidos.
De esta manera, la evaluación inicial consiste en:
A: Vía aérea (Airway).
B: Ventilación (Breathing).
C: Circulación (Circulation).
D: Déficit neurológico (Disability).
E: Exposición (Exposure).
Vía aérea
Siempre sospechar compromiso de vía aérea si hay:
• Quemadura con fuego o exposición a gases en espacios
cerrados.
• Humo en el lugar del accidente.
• Compromiso de conciencia.
• Quemadura de cara, cuello y tronco superior.
• Vibrisas quemadas.
• Esputo carbonáceo.
• Estridor, taquipnea o disnea.
• Broncorrea.
En estos casos en que se sospecha compromiso de la vía
aérea, se debe intubar inmediatamente para protegerla.
Ventilación
Siempre administrar oxígeno al 100% a todo paciente con
sospecha de compromiso de vía aérea.
Cuando el paciente haya resultado lesionado en áreas
cerradas, sospechar intoxicación por monóxido de carbono
CO.Enestossedebesolicitarlamedicióndenivelesdecarbo-
xihemoglobina. Con niveles bajo 20%, rara vez presentan
síntomas.
Circulación
Es difícil determinar la presión arterial en estos pacientes ysu
déficit de volumen, es por esta razón que la monitorización de
la diuresis es una herramienta muy útil y se debe instalar una
sonda urinaria. La meta es un gasto urinario de0,5cc/Kg/h.
Se debe obtener accesos venosos e iniciar infusión con
cristaloides, de preferencia Ringer Lactato. Existen varias
fórmulas para administrar el volumen. Una de las más
utilizadas es la fórmula de Parkland:
2-4ml x Kg de peso x SCQ (quemaduras de 2.o y 3.er grado).
Elvolumencalculadosedebeadministrardurantelasprimeras
24 horas (la mitad en las primeras 8 horas después de la
quemadura,laotraenlassiguientes16horas).Estasfórmulas
sonutilizadasparaeliniciodelaportedevolumenenpacientes
quemados,perodebenserajustadasalgastourinarioobjetivo.
Déficit neurológico
Evaluar con escala de Glasgow. Si presenta compromiso de
conciencia, sospechar intoxicación por monóxido de carbono
y medir COHb.
Exposición
Exponer completamente al paciente. Examinar por delante
y por atrás. Calcular la extensión de las quemaduras y la
profundidad de estas.
Criterios de ingreso a UPC (Guía Clínica gran quemado.
Minsal, 2007):
• Índice gravedad > 70 o quemaduras AB o B > 20%de
SC.
• Paciente > 65 años con 10% o más de quemaduras
AB o B.
• Paciente con injuria inhalatoria.
• Quemaduras por electricidad de alta tensión.
• Quemado politraumatizado o con traumatismo
encéfalocraneano.
• Falla en la reanimación.
• Inestabilidad hemodinámica y/o respiratoria.
• Patologías graves asociadas (por ejemplo,
insuficiencia renal, patologías cardíacas y respiratorias,
deficiencias inmunológicas, diabetes).
Analgesia:
Se debe manejar tanto el dolor de base, provocado por la
quemadura, como el dolor aso-ciado a procedimientos.
Para el dolor de base se utilizan esquemas combinados de
paracetamol + opioide (morfina o fentanil). Durante la fase de
resucitación sepuedeagregarbenzodiacepinas (midazolam)
y una vez estabilizado se puede sumar un AINE para reducir
las dosis y eventuales efectos adversos del opiáceo.
El manejo del dolor asociado a procedimientos debe ser
agresivo, utilizando al menos opioides endovenosos,
pudiéndose llegar a requerir sedación o anestesia general
1
.
Tromboprofilaxis:
Pacientes quemados presentan un riesgo aumentado de
complicaciones tromboembólicas, por lo que debe iniciarse
profilaxis con heparinas de bajo peso molecular (enoxaparina).
Sonda nasogástrica:
Indicada en casos de vómitos o si las quemaduras
comprometen sobre 20% de la superficie corporal en que
481
se asume íleo paralítico.
Profilaxis antitetánica:
Se recomienda el uso de profilaxis dependiendo de la herida
y el estado de vacunación del paciente. Todo paciente con
quemaduras de > 10% de la superficie corporal debería
recibirla4
.
Tratamiento local de la quemadura:
1. Limpieza y desbridamiento:
Tras estabilizar al paciente se debe realizar aseo quirúrgico,
con desbridación de tejido desvitalizado y eliminación de
cuerpos extraños y otros contaminantes.
Usar abundante suero fisiológico a presión.
2. Manejo de ampollas:
Vaadependerdesilaampollaseencuentrarotaointacta.Una
ampolla rota debe ser desbridada, mientras que el manejo de
una ampolla intacta aún es tema de debate. En la práctica lo
que se recomienda es dejar intactas las ampollas peque-ñas
(<1cm) y desbridar las de mayor tamaño (flictenas).
3. Cobertura:
Brinda una gran cantidad de beneficios; protege contra traumas
e infecciones, alivia el dolor y promueve la regeneración del
tejido. Hay diversas alternativas y se separan en transitorias
y permanentes. Entre estas se encuentran los heteroinjertos,
coberturas sintéticas, injertos, colgajos.
Tratamiento de la escara:
● Escarotomía: las escaras en las quemaduras grado
3 asociado al edema de los tejidos pueden comprometer
el drenaje venoso e incluso la irrigación arterial cuando se
producen en forma de manguito (o circunferencial). En estos
casos, es necesario realizar una escarotomía, que consiste
en incidir la escara en toda su extensión. Debe realizarse
dentro de las primeras 72 horas.
Fasciotomía:
• Si el aumento de presión es dentro de un compartimiento
muscular,estopuedegenerarunsíndromecompartimental.
4 Jeschke M, Williams F, Gauglitz G, Herndon D. BURNS
(in: English). Townsend C, Beauchamp D, Evers D, and Mattox K.
Sabiston Textbook of Surgery 19th edition, Chapter 21, 521-547.
Fasciotomía de la mano
Fasciotomía de la mano
482
Enestoscasosesnecesariounafasciotomíaparareducir
la presión y mejorar la perfusión del tejido muscular.
Quemaduras por congelamiento
Existen dos tipos de lesiones por congelamiento:
A. Frostnip: congelación leve reversible.
B. Frostbite: lacongelacióndelostejidos llevaaundaño
microvascular y anoxia. Además, existe un daño agregado
al momento de la reperfusión.
Quemaduras eléctricas
El tejido nervioso y vascular son los que menos resisten
el daño eléctrico, mientras que el tejido óseo es el más
resistente. Por lo anterior, al haber compromiso óseo por la
quemadura en una extremidad se debe evaluar la necesidad
de amputación.
Resistencia de tejidos:
Menor
El objetivo es recalentar la región corporal afectada. Primero,
se debe remover la ropa húmeda y cubrir al paciente en
mantas. Si el paciente está consciente y puede ingerir,
administrar líquidos calientes por vía oral. Una vez en el
centro hospitalario y con analgesia adecuada recalentar al
paciente, sumergiendo la zona afectada en agua a 40 ºC.
Generalmente, a los 30 minutos se logra el recalentamiento
observándose la piel eritematosa. No se recomienda el calor
seco ni frotar las zonas afectadas.
Mayor
• Nervios
• Vasos sanguíneos
• Músculos
• Piel
• Tendones
• Celular
• Hueso
Quemaduras químicas
El manejo inicial de estas quemaduras consiste en eliminar
rápido el agente causal. Si el químico es un polvo, debe
cepillarse primero y, posteriormente, irrigar la zona afectada.
Para el resto de los químicos, se realiza un aseo por arrastre
con agua por lo menos por 30 minutos.
En este tipo de quemaduras es de gran importancia optimizar
la hidratación debido a que la rabdomiolisis, derivada de la
destrucción de tejido muscular, puede provocar necrosis
tubular generando una insuficiencia renal aguda.
La delimitación en profundidad de las quemaduras eléctricas
puede demorar hasta 21 días, por lo cual la reconstrucción
se difiere hasta evidenciar esta delimitación.
Biliografía
1. Courtney T, Beauchamp D, Evers M, Mattox K. Sabiston: tratado de cirugía.19.a ed. España: Elservier; 2013.
2. Ministerio de Salud. Guía Clínica gran quemado. Minsal, 2007.
3. Sciaraffia C, Andrades Py Wisnia P. Quemaduras. En: Cirugía plástica esencial. Santiago: Universidad de Chile; 2005, pp. 87-108.
483
10.2 ÚlcerasporPresión
Ramírez J, Besser N, Fontbona M.
Generalidades
Definición
Una úlcera por presión (UPP) es una lesión localizada en
la piel y los tejidos subyacentes, que ocurre generalmente
en relación con una prominencia ósea como resultado de
presión e isquemia mantenida sobre esta, asociada o no a
cizallamiento o fricción.
Epidemiología
Las UPP ocurren usualmente en pacientes con movilidad
reducida, ya sea confinados a camas o sillas de ruedas. En
Chile, la prevalencia de UPP en pacientes hospitalizados
con factores de riesgo se estima en 28%1
. Dentro de las
subpoblaciones de riesgo, los pacientes parapléjicos tienen
una incidencia de 23% y pacientes con fracturas femorales
hasta 66%2
.
Factores de riesgo
• Inmovilidad.
• Malnutrición.
• Perfusión reducida (hipovolemia, hipotensión,
vasoconstricción periférica, enfermedad arterial periférica).
• Déficit sensitivo.
• Alteración cognitiva.
• Incontinencia urinaria o fecal.
• Otros(edadavanzada,razanegraohispánica,bajopeso,
DM, edema).
Fisiopatología
El desarrollo de una UPP es de naturaleza multifactorial
que requiere no solo la presión sobre la piel, sino también la
interacción de esta con otros factores como el cizallamiento,
la humedad, el roce y otros factores propios del paciente.
El apoyo mantenido sobre un punto localizado puede elevar
la presión del tejido por sobre la presión de perfusión capilar
(32mmHg) y llevar a hipoxia (y, eventualmente, necrosis),
acumulación de desechos metabólicos y generación de
1 Zuñiga G., Carlo; Lobos M., Adriana; Bustos V., Rodrigo;
Pizarro C., Andrés; Sandoval R., Diego; Vásquez E., Nicolás.
Incidencia de úlceras por presión en población hospitalizada con
factores de riesgo. Bol. Hosp. Viña del Mar;62(1/2):2-7, ene. 2006.
tab.
2 Prado A, Andrades P, Benítez S. Úlceras por presión. En:
Cirugía plástica esencial. Santiago: Universidad de Chile; 2005, p.
112.
radicales libres con daño por reperfusión. El tejido más
susceptible al daño provocado por presión es el muscular,
seguido por el subcutáneo y luego la dermis. Por lo anterior,
es posible tener extensas zonas de tejido profundo dañado
con ausencia o poca evidencia de daño en la superficie.
El daño por cizallamiento ocurre cuando el paciente se
encuentraubicadosobresuperficiesinclinadas,detalmanera
quelostejidos profundosejercenunafuerzahaciaabajoporla
gravedad, mientras que los superficiales (epidermis y dermis)
se mantienen fijos por materiales externos (por ejemplo, la
cama), de tal forma que los vasos se elongan y angulan,
empeorando el daño causado por la presión mantenida.
La humedad local (por deposiciones, orina, transpiración u
otra causa), favorece la maceración de la piel y, por tanto,
también la ulceración superficial de esta.
Elroceesprovocadoalarrastraralpacienteporunasuperficie
o viceversa, provocando daño por abrasión que, al igual que
la humedad, favorece la ulceración superficial.
Fisiopatología UPP
484
Diagnóstico
Clasificación (National Pressure Advisory Panel, 1989)
Profundidad de úlcera Clínica
Estadio I No hayúlcera. Eritema no blanqueable a la compresión.
Estadio II Epidermis ydermis. Úlcera superficial rodeada de eritema.
Estadio III Hasta tejidosubcutáneo. Úlcera con forma de cráter y tejido
adiposo visible.
Estadio IV Músculo, tendón,hueso. Úlcera con forma de cráter y exposición
de tejidos profundos afectados.
No etapificable Desconocida. Úlcera con costra que impide evaluar
profundidad.
Sospechadedaño
tisular profundo
Desconocida. Equimosis con dolor, cambios en
consistencia o temperatura local.
Tabla 1. Clasificación de úlceras por presión.
Clasificación UPP
485
Estadio I: Eritema no blanqueable
Esuneritemaquenodesaparecealcomprimirlapielafectada.
En personas de tez oscura, puede manifestarse como una
zonadelevedecoloraciónquenoseblanqueaalcomprimirse.
Ocurre en piel intacta y puede acompañarse de dolor y
aumento de calor local. Representa a individuos en riesgo
de lesiones mayores.
Estadio II: Úlcera de espesor parcial
Pérdida cutánea limitada a la epidermis o dermis, que se
presenta como una úlcera superficial rodeada de eritema. Se
puede manifestar también con indemnidad de la epidermis,
como una ampolla rellena de líquido seroso.
Estadio III: Pérdida total del grosor de la piel
La úlcera adquiere forma de cráter y el daño se extiende
más allá de la dermis, con compromiso de la grasa del tejido
subcutáneo, pero sin exposición músculo, tendón ni hueso.
El daño puede abarcar más allá de la lesión superficial a lo
largo de túneles excavados a través de tejido profundo.
Estadio IV: Pérdida total del espesor de los tejidos
No solo hay daño de la dermis y tejido subcutáneo, sino
tambiéndetejidomuscularytendíneopudiendohaber,incluso
exposición de tejido óseo. Es probable que el fondo de la
úlcera contenga tejido necrótico y, generalmente, el daño se
extiende más allá de la lesión superficial.
486
No etapificable
Debido a la descamación de tejido o a la presencia de una
escara en la herida, no es posible evaluar la profundidad de
esta y,por tanto, su estadio hasta que se remueva este tejido.
Sospecha de daño tisular profundo
Por las características clínicas de la superficie cutánea se
sospecha que el daño abarca capas más profundas, pero
que no son posibles de evaluar directamente. Esta sospecha
se plantea ante equimosis localizada o decoloración en piel
intacta.
El área cutánea puede presentar dolor, consistencia firmeo
reblandecidaoaumentoodisminucióndetemperatura.Puede
evolucionar con una pequeña ampolla, ser cubierta por una
escara o con exposición de las distintas capas comprometidas3
.
Prevención
La clave en el manejo de esta patología es la prevención.
Para esto, debemos:
1. Identificar pacientes en riesgo de desarrollar UPP.
2. Evitar la presión excesiva.
3. Evitar lesionar la piel.
4. Optimizar el estado nutricional del paciente.
5. Deambulación precoz.
6. Eliminación de espasmos flexores.
Elriesgodedesarrollarunaúlceraporpresióndepuededeterminar
mediante diferentes índices oescalas, losmás utilizados son:
Índice de Norton
Estado General Estado Mental Actividad Movilidad Incontinencia
4. Bueno 4. Alerta 4. Caminando 4. Total 4. Ninguna
3. Débil 3. Apático 3. Con ayuda 3. Disminuida 3. Ocasional
2. Malo 2. Confuso 2. Sentado 2. Muy limitada 2. Urinaria
1. Muymalo 1. Estuporoso 1. Encama 1. Inmóvil 1. Doble
incontinencia
1. Índice < 14 : riesgo evidente de formación de úlceras.
Índice < 12 : muy alto riesgo.
3 National Pressure Ulcer Advisory Panel, European
Pressure Ulcer Advisory Panel and Pan Pacific Pressure Injury
Alliance. Prevention and Treatment of Pressure Ulcers: Quick
Reference Guide. Emily Haesler (Ed.). Cambridge Media: Perth,
Australia; 2014.
487
1 2 3 4
Percepción
sensorial
Limitado
completamente Muy limitado
Limitado
levemente
Sin
impedimento
Humedad de la
piel
Constantemente
húmeda
Muy húmeda Ocasionalmente
húmeda
Raramente
húmeda
Actividad Confinado a la
cama.
Confinado a
silla.
Ocasionalmente
camina.
Camina
frecuentemente.
Movilidad Completamente
inmóvil.
Muy limitada. Levemente
limitada.
Sinlimitaciones.
Nutrición Completamente
inadecuada.
Probablemente
inadecuada.
Adecuada. Excelente.
Fricción y roce Presente. Potencialmente
presente.
Ausente.
Índice < 16 = alto riesgo.
Tratamiento Manejo médico
Previo al inicio de cualquier terapia, se debe mejorar el estado
basal del paciente ycontrolar los factores sistémicos ylocales
que afectan la curación de la úlcera:
• Mantener una albúmina > 3 g/dl
• Hemoglobina > 12
• Tratar cualquier infección concomitante.
• Controlarlosespasmosmusculares.Requiereevaluación
por neurología o neurocirugía.
• Controlar la presión ejercida sobre la úlcera.
• Descartar la presencia de osteomielitis y/o fístulas.
Una vez que un paciente desarrolla una úlcera por presión,
esta debe clasificarse según su profundidad. Por lo general,
las úlceras grado I y II son de tratamiento médico, mientras
que las III y IV requieren de una intervención quirúrgica.
Se deben tomar cultivos de la úlcera. Si existe evidencia de
infección local, está indicado el uso de antibióticos tópicos. El
usodeantibióticosporvíaoraloendovenosaestánreservados
para los casos en que existe una repercusión sistémica.
Sedebehaceraseoporarrastredelaúlceraydesbridamiento,
ya sea quirúrgico o a través de las mismas curaciones.
488
Manejo quirúrgico
Indicaciones de cirugía:
Absolutas Relativas
Hemorragia Disminuir tiempo de mejoría.
Sepsis Lesionado medular y secuela de deformidad esquelética.
Osteomelitis Dolor crónico.
Fístula articular Recurrentes.
Fístulas entero vesicales Falla de tratamiento conservador.
Malignización Ancianos.
Al realizar un tratamiento quirúrgico de la úlcera por presión,
se debe extirpar por completo la úlcera con su bursa, remover
las prominencias óseas y el tejido óseo infectado y obliterar
los espacios muertos.
Para la cobertura de la herida remanente, se debe utilizar
colgajos cuya elección va a depender de la ubicación de la
úlcera.
Úlceras isquiáticas: colgajo de elección: miocutáneo de
glúteo máximo.
Úlceras sacras
Colgajo de elección: colgajo miocutáneo de glúteo máximo.
Úlceras trocantéreas
Colgajodeelección:rotacióndecolgajomiocutáneodetensor
de la fascia lata.
*Los colgajos no deben apoyarse por 21 días para evitar
complicaciones.
Complicaciones
Agudas
• Hematomas.
• Infección: celulitis, artritis, osteomielitis, sepsis.
• Dehiscencia.
• Seroma.
Crónicas
• Recurrencia.
• Osteomielitis crónica.
• Carcinoma escamoso: úlcera de Marjolin, carcinoma
de células escamosas, de comportamiento agresivo y
ulceroso,queseproduceenzonasdeinflamacióncrónica.
489
Biliografía
1. Prado A, Andrades P., Benítez S. Úlceras por presión. En: Cirugía plástica esencial. Santiago: Universidad de Chile; 2005, p. 112-
125.
2. Mayo clinic. Bedsores (pressure sores). Artículo digital. Publicado 13 diciembre 2014. Citado 7 de junio 2015. Disponible en http://
www.mayoclinic.org/diseases-conditions/bedsores/basics/definition/con-20030848
3. National Pressure Ulcer Advisory Panel, European Pressure Ulcer Advisory Panel and Pan Pacific Pressure Injury Alliance.
Prevention and Treatment of Pressure Ulcers: Quick Reference Guide. Emily Haesler (Ed.). Cambridge Media: Osborne Park,
Western Australia; 2014.
4. Zuñiga G., Carlo; Lobos M., Adriana; Bustos V., Rodrigo; Pizarro C., Andrés; Sandoval R., Diego; Vásquez E., Nicolás. Incidencia
de úlceras por presión en población hospitalizada con factores de riesgo / Incidence of pressure ulcers in admitted patients with
risks factors. Bol. Hosp. Viña del Mar; 62(1/2):2-7, ene. 2006
491
10.3 InjertosyColgajos Ramírez J, Besser N, Fontbona M.
Generalidades
Tanto los injertos como los colgajos consisten en transferencias
de tejido de un lugar a otro, generalmente con el objetivo de
dar cobertura a heridas de gran extensión.
Los injertos son segmentos de piel (epidermis y porciones
variables de dermis), que pierden su relación con el sitio de
origen quedando sin irrigación propia, la cual depende de la
formación de nuevos vasos entre este y la zona receptora
para, posteriormente, integrarse a los tejidos circundantes
(concepto conocido como prendimiento).
Los colgajos, en cambio, son transferencias de piel y tejidos
subyacentes, incluyendo un pedículo vascular propio, por lo
que no pierden su relación con el sitio de origen, manteniendo
vasos unidos a esta, a excepción del colgajo libre, en el cual
se deben unir los vasos del colgajo a los vasos de la zona
donde este será colocado.
Injertos
Los injertos, tras contactar la zona receptora, se nutren
en las primeras 24-48 horas mediante difusión, en que el
primero absorbe el transudado de la segunda en un proceso
conocido como imbibición plasmática. Posteriormente, los
vasos del injerto se alinean con los de la zona receptora
formando lo que se conoce como “kissing capillares” en la
fase llamada inoculación. Por último, se encuentra la etapa
de revascularización en que podrían estar involucrados 3
procesos: anastomosis de vasos preexistentes, formación
de vasos de neoformación y combinación de vasos nuevos
y antiguos.
De lo anterior se desprende que para que un injerto tenga
resultados exitosos, el lugar que recibirá al injerto debe tener
un lecho vascular saludable.
Dentro de los tejidos con un lecho vascular adecuado para la
recepción de un injerto, se encuentran heridas con tejido de
granulaciónvital,pericondrio,paratenon,periostioysuperficie
ósea fenestrada (en la cual se haya logrado previamente
crecimiento de tejido de granulación).
Por otra parte, tejidos con un mal lecho vascular y, por tanto,
inadecuados para recibir un injerto incluyen superficies
expuestas de cartílago, tendón y hueso, además de zonas
de fibrosis crónicas. También es importante que la herida
se encuentre libre de infección (carga bacteriana <105
microorganismos/gramo de tejido) y cuerpos extraños, que
podrían actuar como una barrera entre el injerto y su zona
receptora.
Tipos de injertos
Origen Grosor de piel
• Autoinjerto /Isoinjerto
• Aloinjerto /
Homoinjerto
• Xenoinjerto /
Heteroinjerto
• Parcial
• Total
Tabla 1 Tipos de injertos cutáneos.
Según su origen, si el injerto proviene del mismopaciente
se denomina autoinjerto o isoinjerto. Si, en cambio, el
injerto proviene de un donante cadáver, se denomina
aloinjerto u homoinjerto. En el caso de que el donante
sea un animal de otra especie, se denomina xenoinjerto o
heteroinjerto.
Según el grosor de la piel que compone al injerto se clasifican
en totales y parciales:
- Injertos de piel parcial (IPP).
Los injertos de grosor parcial de piel están formados por
epidermis y parte de la dermis, de tal forma que el injerto
prende rápidamente y la zona donante se reepiteliza en
menos tiempo.
Su obtención se realiza mediante un dermátomo y en caso
de ser necesario aumentar el área de cobertura, se puede
hacer un injerto en malla, en que el segmento de piel extraído
es expandido en hasta 6 veces su tamaño.
Las zonas dadoras de IPP son: glúteos, muslos, cara interna
de brazo, dorso, abdomen, cara anterior de tórax y cuero
cabelludo. Siempre queda una alteración de la pigmentación
en la zona dadora al epidermizar esta.
492
Las desventajas de los IPP incluyen retracción con el tiempo,
pigmentación anormal y poca duración en caso de ser
sometido a trauma.
- Injertos de piel total (IPT).
Losinjertosdegrosortotaldepielestánformadosporepidermis
ytodoelgrosordeladermis,incluyendoglándulassudoríparas,
glándulassebáceasyfolículospilosos.Seobtienenmedian-te
bisturí y necesariamente son de extensiones limitadas para
permitir el cierre del sitio do-nante. Para evitar extraer más
tejido del necesario, es posible realizar una “plantilla” con la
for-ma y tamaño de la herida para obtener un injerto con las
características exactas que se necesi-tan.
Las zonas dadoras de IPT son: retroauricular, párpados,
supraclavicular, preauricular, pliegue de codo, muñeca,
inguinal, hipotenar, subglúteo.
Si bien tienen una mayor durabilidad y mejores efectos
estéticos, los IPT tienen un prendimiento más dificultoso y
lento, permiten coberturas más pequeñas dado que la zona
dadora también es pequeña y debe suturarse para lograr
su cierre.
De modo general, se prefiere utilizar IPT en regiones en que
la estética y la funcionalidad son importantes (cara, manos,
zonas con mayor movilidad); en cambio, los injertos de grosor
parcial se prefieren en aquellos casos en que la herida es
de gran extensión.
Evolución
Tras 10-14 días, el injerto se encuentra adherido de forma
segura, gracias al reemplazo de la fibrina (producida
inicialmente) por fibroblastos. La reinervación comienza a
las 4-5 semanas y finaliza, en general, a los 12-24 meses.
Inicialmente se recupera la nociocepción, seguido de la
sensibilidad superficial y la temperatura, sin embargo, en la
mayoríadeloscasosquedanzonasdeanestesiaenelinjerto.
Durante el prendimiento de un injerto ocurren dos procesos:
- Contracción primaria: al momento de la toma del
injerto, este se encoge. Esto es más pronunciado para los
IPT que los IPP.
- Contracciónsecundaria:unavezqueelinjertoprende
en la zona receptora, la cicatrización produce una segunda
contracción (conocida como retracción), que es mayor para
los IPP que para los IPT.
La primera curación luego de un injerto debe hacerse a los
5 días, ya que cualquier movimiento puede ocasionar una
alteración en el proceso de prendimiento, lo que puede llevar
a la pérdida de este.
La causa más común de fracaso de un injerto es la formación
dehematomasbajoeste,enquelasangreactúacomobarrera
impidiendo una correcta neovascularización. Otras causas
de fracaso son el desplazamiento del injerto, infección,
mala calidad del lecho vascular o del injerto mismo, tensión
excesiva.
493
Imagen 1: Trauma de extremidad inferior con pérdida extensa de piel
y tejido subcutáneo. La herida se prepara y se objetiva a través de
cultivos la ausencia de infección.
Imagen 2: Imagen intraoperatoria del mismo paciente. Injerto de piel
parcial mallado. Se logra cobertura total de la lesión.
494
Imagen 3: Injerto descubierto en el posoperatorio. Se
observa prendimiento completo del injerto.
Imagen 4: Injerto a 1 mes desde la cirugía
495
Colgajos
Loscolgajossoneltransportedetejidodesdeunazonadadora
a una receptora manteniendo la relación vascular con el sitio
dador. La excepción a esta definición es el colgajo libre, en el
cual el pedículo vascular se secciona para ser anastomosado
a otro en el sitio receptor.
Irrigación de la piel
La sangre llega a los plexos dérmicos a través de arterias
sementarais (SA), que son ramas de la aorta. Estas, a su
vez, se dividen en arterias perforantes que llegan a planos
superficiales, ya sea de forma directa (vasos cutáneos
directos DC y vasos septocutáneos SC) o indirecta (vasos
musculocutáneos).
Angiosomas: son bloques de tejido tridimensional que se
encuentran irrigados por una arteria segmentaria y drenados
por la vena acompañante. Cada angiosoma estáconectado
al adyacente a través de vasos anastomósticos.
Los colgajos están indicados en las siguientes situaciones:
• Cobertura de zonas mal vascularizadas.
• Coberturadeestructurasvitalescomovasossanguíneos.
• Reconstruccióndelespesortotaldeestructurasdelacara.
• Relleno de cavidades.
• Cubrir prominencias óseas y zonas apoyo.
• Control de la infección (colgajo muscular).
Los colgajos se clasifican sobre la base de 3 características
básicas: composición, forma de movilización e irrigación
sanguínea.
Composición
Se refiere a los tejidos que conforman el colgajo:
• Colgajo cutáneo: piel
• Colgajo fasciocutáneo: piel y fascia
• Colgajo musculocutáneo: piel y músculo
• Colgajo osteomiocutáneo: piel, músculo y hueso
Forma de movilización
- Locales:
• Avance (YV, VY, mono o bipediculado).
• Pivote (rotación, transposición, interpolación).
- Distantes:
• Directos.
• Indirectos.
• Libres.
Irrigación
En cuanto a la irrigación, esta puede ser aleatoria, en que la
irrigación proviene de múltiples y pequeñas arterias del plexo
subdérmico, o axial, en que el aporte sanguíneo proviene de
una arteria o un grupo reconocible de estas. En el caso de
las axiales, los territorios irrigados por arterias individuales
se conocen como angiosomas, siendo fundamental el
conocimiento de la anatomía regional para la correcta
movilización de estos.
Colgajos cutáneos
Generalmente,soncolgajoslocalesenquelazonadadoraestá
contigua al defecto. Se utilizan cuando la piel que rodea a la
herida no tiene la suficiente elasticidad para cubrir el defecto.
De-ben confeccionarse de tal forma que concuerden tanto
en forma como en grosor con la herida por cubrir, evitando
generar una distorsión de la anatomía local.
Se clasifican en:
Colgajos de avance: el colgajo se mueve sobre el defecto
directamente.
• VY
• Zetoplastía/Plastía en Z
• Monopediculado
• Bipediculado
Colgajos en pivote.
• Rotación: semicirculares que se rotan alrededor de un
punto fijo.
• Transposición: rectangulares que se giran lateralmente
para alcanzar el defecto. (Colgajo de Limberg y colgajo
de Dufourmantel).
• Interpolación: son colgajos que se movilizan por debajo
de un puente cutáneo.
Colgajos musculares y musculocutáneos
Usar músculos como colgajos es una buena opción gracias a
que presentan irrigación independiente a través del pedículo
vascular y pueden ir acompañados de nervios. Comparado
con los pedículos cutáneos, los pedículos musculares son
más maleables y permiten cubrir mejor aquellas heridas de
contornos irregulares y profundas.
Segúnsuformadeirrigaciónprincipal,loscolgajosmusculares
se según la clasificación de Mathes y Nahai en:
• Tipo I: Pedículo único. Ejemplo: tensor de fascia lata,
gastrocnemio, recto femoral.
• Tipo II: Un pedículo dominante , 2 pedículos menores .
Ejemplo: gracilis, bíceps femoral, semitendinoso.
• Tipo III: Doble pedículo dominante. Ejemplo: recto
abdominal, glúteo mayor.
• Tipo IV: Pedículos segmentarios (con más de una fuente,
496
no relacionadas entre sí, que irrigan distintos segmentos
del músculo). Ejemplo: extensor largo de los dedos,
sartorio, tibial anterior.
• Tipo V: Pedículo dominante, varios pedículossegmentarios
secundarios. Ejemplo: latissimus dorsi, pectoral.
En general, se prefiere el uso de colgajos con pedículo
dominante reconocible (tipo I, III y V) por sobre aquellos con
pedículos menores o segmentarios (tipo II y IV).
Es importante tener en consideración la posible pérdida de
función de la porción del aparato locomotor de la cual se
extrae el músculo. Para prevenir lo anterior existen distintos
métodos de preservación de función como la división del
músculo en segmentos.
Colgajos musculocutáneos
Los colgajos musculocutáneos son colgajos musculares
junto a la piel y tejido subcutáneo que los recubren. La piel
sobre el músculo extraído recibe su irrigación de arterias
perforantes que se originan de arterias en el músculo y que
atraviesan la fascia.
Este tipo de colgajos se utilizan en aquellos defectos de
gran profundidad o extensión, como es el caso de las
reconstrucciones mamarias, en que se utiliza el músculo
recto del abdomen junto a la piel por debajo del ombligo para
reconstruir la mama.
Colgajos fasciocutáneos
Los colgajos fasciocutáneos utilizan pedículos que se
encuentran en las fascias que separan distintos músculos.
Están compuestos por piel, tejido subcutáneo y la fascia
subyacente. Su ventaja principal frente a los colgajos
musculocutáneos es que son más delgados, por lo que es
posible usarlos con mejores resultados estéticos en defectos
de gran extensión y poca profundidad en que un colgajo
cutáneo es insuficiente.
Colgajos osteocutáneos
Son colgajos con componente óseo, que se utilizan para
reemplazar pérdidas de segmentos óseos en cráneo, cuello
y huesos largos.
Complicaciones
Compromiso vascular:
Es la causa más común de fracaso de un colgajo. Puede
deberse a falla en el diseño del colgajo, en que el pedículo
utilizado no es suficiente con los tejidos blandos movilizados
o también a torsión del pedículo vascular, sobre todo al
movilizar el colgajo, o bien, por trombosis de los vasos tras
realizarse la anastomosis vascular. Puede requerirse una
nueva intervención quirúrgica para intentar permeabilizar los
vasos en el caso de un colgajo micro-quirúrgico o extirpar
el tejido necrótico que se produzca por falla en lairrigación.
- Otras:
• Hematoma.
• Seroma.
• Dehiscencias.
• Infección de herida operatoria.
• Complicaciones derivadas del defecto dejado en el sitio
donante (herniación, pérdida de función, etc.).
497
Biliografía
1. Sepúlveda S., Andrades P.Colgajos. En: Cirugía plástica esencial. Santiago: Universidad de Chile; 2005, pp. 61-82.
2. Andrades P., Sepúlveda S., Wisnia P.Injertos. En: Cirugía plástica esencial. Santiago: Uni-versidad de Chile; 2005, pp. 46-63.
3. Courtney T., Beauchamp D., Evers M., Mattox K. Sabiston: tratado de cirugía.19 ed. España: Elservier; 2013.
4. Morris S., Taylor G. Vascular territories. Gurtner G. Plastic Surgery Volumen 1: Principles. 3.a edición. EE.UU.: Elsevier, 2013, pp.
479-511.
498

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  • 1. 1
  • 3. 3 Dr. Joaquín Ramírez Sneberger Autor, editor general y coordinador general Cirugía General Universidad de Los Andes Dra. Krystel Werner Feris Autora, coordinadora y editora de ilustraciones Cirugía General Universidad de Los Andes Dr. Felipe Court Acevedo Editor de contenido Cirugía Digestiva Cirugía General Pontificia Universidad Católica de Chile. Jefe Departamento de Cirugía Universidad de Los Andes Docente de Cirugía Universidad de Los Andes Dr. Rolando Sepúlveda Dellepiane Editor de contenido Cirugía Digestiva Cirugía General Pontificia Universidad Católica de Chile. Jefe Departamento de Cirugía Hospital Militar de Santiago Jefe Programa de Cirugía Universidad de Los Andes
  • 5. 5 Manual de Cirugía Universidad de los Andes, 2016, Santiago de Chile. Autores Dr. Joaquín Ramírez Sneberger Dra. Krystel Werner Feris Dr. Jorge Gajardo Jofré Dr. Diego Rodríguez Verdugo Dr. Mathias Brain Sánchez Dr. Juan Pablo Quinteros Pomar Dr. Manuel Calcagno Lüer Dr. Bruno Villalobos Coz Dr. Pablo Arellano Graell Dr. Raimundo Vergara Goldveig Dr. Andrés Stevenson Silva Dr. Diego Marín Garay Dr. Andrés Sepúlveda Nakamura Coautores Nicolás Besser Pimentel María Jose Arteaga Valencia Valeria Bawarshi Yanine Carla Morelli Lobos María Francisca Wuth Izquierdo Macarena Jofré Arellano Carolina Hernández Álamos María del Pilar Diaz Corvillón Marie Dominique Hierard Fernández Constanza Bachelet Ramos Javiera Ready Dallago Diego Paredes Jalil Diego Montoya Moya María José Pizarro Aranda Ilustradores Krystel Werner Feris José Manuel Zúñiga García Constanza Menéndez Olave Marie Dominique Hierard Fernández Gabriela del Pilar Echeverría Bauer Camila Corcione Correa Javiera Ready Dallago Editores de capítulo Dr. Felipe Court Acevedo Dr. Rolando Sepúlveda Dellepiane Dr. Fabio Valdés Gutiérrez Dr. Jaime González Fuentealba Dr. Nicolás Devaud Jaureguiberry Dra. Montserrat Fontbona Torres Dr. Pablo Mena Sellán Dr. Roberto Humeres Apra Dr. Marcial Peralta Mora Dr. Felipe Fuenzalida Schwerter Dr. Ignacio González Muñoz Dra. Paulina Balbontín Meneses Dr. Juan Javier González Moscoso Dra. Andrea Matamala Valenzuela Dr. José Miguel Zúñiga Avendaño Dr. José Gellona Vial Dr. Joaquín Irarrázaval Espinosa Dr. Matías Ubilla Silva Dr. Eitan Schwartz Yuhaniak Dr. Fernando Muñoz Flores Dra. Macarena Fernández Albornoz Corrección de estilo Nieves Plaza Palma Diseño Editorial Ivette Vergara d’Alençon Catalina Oyarzún Pavez Agradecimientos Dr. Marcelo Castro Salas, jefe del departamento de Diagnóstico por Imágenes del Hospital Militar de Santiago, por proporcionar las imágenes de radiología. Dra. Monserrat Fontbona, jefe del departamento de Cirugía Plástica del Hospital Militar de Santiago, por proporcionar las imágenes de los capítulos de cirugía plástica
  • 6. 6 Prólogo La enfermedad acompaña al hombre desde que este existe, limitando las posibilidades de desarrollo de la persona, pudiéndole provocar incluso la muerte. Por ello, la salud como bien es una aspiración primordial del ser humano. En este ámbito, la medicina a lo largo de la historia ha intentado, con mayor o menor éxito, devolver al paciente la salud perdida. En la actualidad, podríamos decir que vivimos una etapa del conocimiento y del accionar médico exitosa, pero también exitista, haciendo pensar a muchos que la medicina todo lo puede; sin embargo, quienes ejercemos la profesión médica comprendimos, ya desde alumnos y con cierta desilusión, que esto no es así, ya que tenemos todavía por delante un largo camino que recorrer de la mano del progreso del conocimiento. La cirugía, como rama de la medicina, se inicia bastante temprano y es así que se conocen trepanaciones efectuadas ya en la prehistoria. No obstante, avanza penosamente por muchos siglos antes de convertirse en una especialidad médica segura y eficaz. Para ello fue necesario tener un conocimiento anatómico completo, un control eficiente de las hemorragias, el dominio de las transfusiones, el descubrimiento de la anestesia y el control de las infecciones. A partir de ese momento, el desarrollo fue rápido y hoy nos asombramos con la cirugía mínimamente invasiva, laparoscópica, endovascular y robótica. Este compendio de cirugía representa el estado actual del conocimiento y manejo de las patologías de resolución quirúrgica que debe conocer un alumno de pregrado. Es el producto del trabajo mancomunado de alumnos, residentes y profesores del Departamento de Cirugía de la Universidad de los Andes y del Hospital Militar de Santiago. Este origen hace que sea de fácil lectura y comprensión para los alumnos, pues en gran parte está escrito por pares. En este contexto, considero de gran mérito este trabajo, ya que refleja el grado de madurez docente alcanzado por los integrantes del Departamento de Cirugía y su deseo de servir a los alumnos del presente y del futuro. Constituye, además, un proceso docente interesante, significativo y funcional. Prof. Dr. Rogelio Altuzarra Hernáez Decano Facultad de Medicina Universidad de los Andes
  • 8. 9 Índice Generalidades 13 1.1 Hidratación Parenteral 15 1.2 Nutrición y Regímenes 23 1.3 Cicatrización 29 1.4 Heridas 37 1.5 Curación de Heridas y Apósitos 43 1.6 Suturas 47 1.7 Abordajes Quirúrgicos 59 1.8 Drenajes Quirúrgicos 71 1.9 Ostomías 75 1.10 Fiebre en el Posoperatorio 85 Cirugía de Tórax 91 2.1 Anatomía Aparato Respiratorio 93 2.2 Nódulo Pulmonar Solitario 98 2.3 Síndrome de Ocupación Pleural 103 2.4 Cáncer Pulmonar 115 Cirugía de Esófago 125 3.1 Anatomía del Esófago 127 3.2 Divertículos Esofágicos 131 3.3 Trastornos motores del Esófago 137 3.4 Enfermedad por reflujo Gastroesofágico 141 3.5 Perforación Esofágica 147 3.6 Cáncer de Esófago 149 Cirugía Gástrica 163 4.1 Anatomía Gástrica 165 4.2 GIST 175 4.3 Cáncer Gástrico 177 4.4 Cirugía Bariátrica 191 4.5 Hemorragia Digestiva alta no variceal 197 Patología Quirúrgica del Intestino Delgado 207 5.1 Anatomía del Intestino Delgado 209 5.2 Divertículo de Meckel 213 5.3 Tumores de Intestino Delgado 219 5.4 Obstrucción Intestinal 227
  • 9. 10 Índice Cirugía Hepatobiliar 237 6.1 Anatomía Normal de la Vía biliar y Vesícula biliar 239 6.2 Patología Biliar Benigna 249 6.3 Cáncer de Vesícula Biliar 277 6.4 Colangiocarcinoma 285 6.5 Nódulo Hepático 295 6.6 Carcinoma Hepatocelular 307 6.7 Pancreatitis Aguda 319 6.8 Tumor Periampular 333 Coloproctología 341 7.1 Anatomía Intestino Grueso 343 7.2 Apendicitis Aguda 351 7.3 Hemorragia Digestiva Baja 359 7.4 Enfermedad Diverticular 365 7.5 Patología Anorectal Benigna 373 7.6 Cáncer Colorectal 385 Hernias 401 8.1 Hernias de la Pared Abdominal 403 Cirugía Vascular 417 9.1 Enfermedad Cerebrovascular 419 9.2 Patología Aórtica 425 9.3 Isquemia Mesentérica 439
  • 10. 11 9.4 Enfermedad Arterial Oclusiva de Extremidades Inferiores 445 9.5 Pié Diabético 453 9.6 Patología Venosa 457 9.7 Trombosis Venosa Profunda y Enfermedad Tromboembólica 463 Cirugía Plástica 471 10.1 Quemaduras 473 10.2 Ulceras por Presión 483 10.3 Injertos y Colgajos 491
  • 14. 15 1.1 Hidrataciónparenteral Stevenson A, Bawarshi V, Court F. Homeostasis de líquidos corporales Para un manejo adecuado del balance hidroelectrolítico es necesario comprender la homeostasis del organismo. Esta corresponde a la mantención de volumen y composición relativamente constante en los distintos compartimentos corporales. El agua es un componente esencial para los seres humanos, corresponde al 50 a 60% de su peso total. El tejido muscular y los órganos sólidos tienen más agua que el tejido óseo y adiposo. Por este motivo el porcentaje de agua varíasegún la edad, el sexo y la cantidad de grasa corporal de cada persona. En un recién nacido aproximadamente el 80% de su peso es agua y va disminuyendo con la edad. En los hombres se estima que en promedio corresponde a un 60% y en las mujeres 50%, diferencia que se debe principalmente al mayor porcentaje que tienen las mujeres de tejido adiposo y menor masa muscular.1 El agua se distribuye en dos grandes compartimentos: intracelular y extracelular. En el siguiente esquema se muestra su distribución en relación al peso corporal (PC) y sus principales electrolitos. La principal diferencia entre el líquido intravascular (plasma) y el intersticial es que el contenido de proteínas es levemente mayor en el plasma determinado por la baja permeabilidad de los capilares a las proteínas. El movimiento del agua de un compartimiento a otro está determinado por la osmosis. La concentración de solutos en los distintos compartimentos permite el paso del agua de uno a otro con el fin de igualar las concentraciones osmóticas. La osmolaridad depende de las concentraciones de sodio, glucosa y urea principalmente, y se puede obtener su valor de la siguiente manera: Osmolaridad sérica: 2 [Na+] + [glucosa] / 18 + BUN / 2.8 Agua Total 60% del PC Extracelular 20% PC Cationes: Na+ Intersticial 15% PC Intravascular 5% PC Intracelular 40% PC Cationes: K+ y Mg+ Aniones: PO4-3 y proteínas Tabla 1: distribución de agua corporal y electrolitos 1 F.Charles Brunicardi, Seymour I. Schwartz. Principios de cirugía, volumen 1. 8va edición. México: McGraw-Hill Interamericana, 2006
  • 15. 16 Las concentraciones normales de los principales electrolitos en el plasma son: Electrolito Concentración Na+ 135-145 mEq/L K+ 3,5-4,5 mEq/L Ca +2 4,25-5,25 mEq/L Cl- 95-106 mEq/L HCO3- 27 mEq/L Tabla 2: Concentración plasmática de los electrolitos. La concentración de agua en nuestro organismo depende del equilibrio entre los ingresos y las pérdidas. El 75% de los ingresos es por ingesta de agua y el porcentaje restante se obtiene de alimentos sólidos, sumando entre ambos en un adulto normal aproximadamente 2 L. Las pérdidas diarias ocurren alrededor de 1 L a través de la orina, 250 ml en las heces y 600 ml como pérdidas insensibles que corresponden a la piel y los pulmones. Estas pueden variar de acuerdo con la condición clínica del paciente, aumentando en caso de fiebre, hiperventilación, quemaduras, taquicardia y/o tras situaciones donde exista un aumento del metabolismo. Tipos de Fluidos La administración de fluidos es un pilar fundamental en pacientes quirúrgicos, ya que previo o con posterioridad al acto quirúrgico debe permanecer un período variable en régimen cero, es decir, sin ingesta oral. El médico tratante deberá encargarse del aporte de volumen, electrolitos y calorías necesarias durante este tiempo. Enlaprácticaclínicaseutilizan3tipos defluidos:cristaloides, coloides y derivados sanguíneos. Para su uso adecuado es necesario conocer las propiedades y composiciones de cada uno de ellos. Los cristaloides, también llamados soluciones básicas, contienen solamente agua, electrolitos y glucosa en distintas proporciones. Pueden difundir por la membrana capilar. Permiten expandir el volumen intravascular, mantener el equilibrio hidroelectrolítico y aportar calorías si contiene glucosa. Son bien tolerados, de bajo costo y de gran disponibilidad. Según la concentración de electrolitos pueden ser hipotónicos, isotónicos o hipertónicos respecto al plasma. Los cristaloides nos permiten corregir las pérdidas de fluidos corporales, reponiendo agua, electrolitos y el estado ácido- base.Paraestoesmuyimportanteconocercómosecomportan estas soluciones una vez administradas. Las soluciones isotónicas más utilizadas son el suero fisiológico 0,9% y el Ringer lactato. Se debe administrar un volumen de 4 veces el déficit de volumen intravascular. Se distribuyen
  • 16. 17 En la tabla 2 se observa la composición electrolítica y la osmolaridad de los principales fluidos cristaloides de uso clínico. Composición de soluciones cristaloides (mEq/L) Solución Na+ Cl- K+ Ca+2 Lactato pH Tonicidad Osmolaridad (mOsm/L) S. Glucosada 5% 0 0 0 0 0 5,0 Hipotónico 253 S. Salina 0,9% 154 154 0 0 0 5,7 Isotónico 308 Ringer Lactato 129 111 5,4 1,8 28 6,7 Isotónico 273 Tabla 3: Líquidos y electrólitos: equilibrio y distribución. rápidamente en el LEC (intravascular e intersticio), y luego de una 1 hora de administración solo un 20% permanece en el intravascular. Los principales efectos adversos son edema, acidosis hiperclorémica y edema pulmonar. Las soluciones que contienen glucosa, si bien en su formulación pueden aparecer como isotónicas, se comportan como hipotónicas, la glucosa se consume muy rápidamente quedando luego como agua libre, de tal forma que no son una buena solución para manejo de pérdidas de volumen. Existen situaciones en que debemos realizar aportes de volumen parenteral que son muy distintos unos de otros, debiendo elegir adecuadamente la solución por usar. Por ejemplo, un paciente sano que ingresa en ayunas a una cirugía electiva, como una colecistectomía, es muy distinto a un paciente que debe ser sometido a una cirugía de urgencia por una obstrucción intestinal. En el primero, la situación es de estabilidad hemodinámica, ácido-base y electrolítica, de tal forma que el anestesista generalmente elige una solución lo más completa y parecida al plasma, Ringer Lactato, para mantenerlo durante la anestesia y cirugía. En cambio, en una obstrucción intestinal existen vómitos y un tercer espacio dentro del lumen intestinal donde hay atrapamiento de una cantidad desconocida de agua y electrolitos que pueden haber provocado un desbalance ácido- base,alteraciónelectrolíticaehipovolemiaqueseránecesario corregir previo a la intervención. En este caso es aconsejable iniciar la reposición de fluidos con suero fisiológico enbolos de infusión endovenosa rápida de 250 o 500 ml, según sea el tipo de paciente. Si es una persona joven, previamente sana, será capaz de manejar sin problemas 1 L de esta solución administrada rápidamente al intravascular, pero si se trata de una persona de edad avanzada con alguna comorbilidad, como insuficiencia cardíaca, insuficiencia renal o daño hepático crónico, hay que tener mucho cuidado, se debe saber que el suero fisiológico aporta en forma inmediata 9 g de sodio, produciendo edema pulmonar, ascitis o edema tisular, según sea el caso, complicando el proceso de reanimación. La mejor forma de evaluar la cantidad de líquido necesario de administrar es monitorizando la diuresis. Cuando el paciente comienza a orinar se ha logrado una adecuada perfusión tisular.Enambospacientes seránecesariocontarconniveles plasmáticos de electrolitos y de función renal. Dentro de las situaciones de necesidad de administración de soluciones parenterales está el posoperatorio, en este caso será necesario discriminar nuevamente. Basándonos en el ejemplo anterior, el paciente operado de la vesícula tendrá un posoperatorio muy distinto al otro paciente. Su período de ayuna habitualmente no es mayor a 6 u 8 horas, pudiendo durante este corto tiempo dejarlo con un suero glucosalino, aportando agua y sodio, necesario para mantener la volemia (80 ml/hora en adulto) y glucosa para romper el ayuno evitando la acidosis propia de esta condición. Al contrario, el paciente de la obstrucción intestinal va a tener un período de ayunas prolongado, el íleo posoperatorio habitualmente es más largo, esto nos obliga a calcular un aporte para las próximas 24 horas. En este caso hay que considerar el volumen por administrar y los electrolitos de acuerdo con las pérdidas ordinarias diarias de los pacientes.
  • 17. 18 Esto equivale a un volumen diario de entre 2 y 2,5 L de agua en un adulto (25-30 ml/kg/día), lo que corresponde a las pérdidas de orina, heces e insensibles. Las pérdidas de sodio (8g/día) y potasio (4g/día). Junto con lo anterior es necesario el aporte de glucosa, por esto la solución recomendada en este caso es el suero glucosado al 5%. De manera que la indicación de hidratación debiera ser la siguiente: 1. Régimen cero. 2. SG5% 80 ml/hora, agregar 4 g de NaCl y 2 g de K Cl cada 1 L de solución. Lo más importante ocurre en la indicación del día siguiente de este paciente, ya que es muy posible que existan pérdidas extraordinarias, es decir, pérdida de volúmenes que habitualmente no ocurren, como volumen de salida por la SNG, drenajes, vómitos, etc. Para hacer una buena estimación del volumen por indicar, es necesario realizar un balance hídrico estricto: Líquidos administrados Líquidos perdidos - Suero glucosado5% - Otros sueros - Agua demedicamentos - Otros - Diuresis - Deposiciones - SNG - Drenajes - Ostomías - Vómitos - Otros Tabla 4: Balance hídrico. La suma entre lo administrado y las pérdidas debieran quedar enequilibrio,denoserasí,sedebeconsignarcomounbalance hídrico positivo o negativo y anotar el valor en cc. En el caso anterioresmuyimportanteconsiderarelvolumendeladiuresis del paciente para saber si es necesario incrementar el aporte de volumen. Cuando existe un bajo volumen de orina en 24 horas (oliguria), es decir, menos de 30/ml hora en un paciente adulto, es necesario aportar un volumen extra. Para lo anterior, se mantiene el volumen de SG5% en 80ml/ hora y el volumen faltante se agrega en solución electrolítica como Ringer lactato o suero fisiológico, según el resultado de los electrolitos plasmáticos del mismo día, teniendo en consideración el aporte de sodio y potasio de cada solución y las necesidades del paciente. Es importante considerar que el suero glucosado al 5% aporta solo 5 g de glucosa en 100 ml, de forma que los 2 L/ día que estamos administrando al paciente son 100 g de glucosa ycorresponden a 400 calorías/ día aproximadamente, siendo absolutamente insuficiente como nutrición. Esta condición no se debe mantener por más de 5 días, ya que atenta contra la buena evolución al provocar un catabolismo de las proteínas musculares del paciente como fuente calórica, haciendo necesario pasar a una nutrición parenteral central. Si con anterioridad sabemos que el período de régimen cero serámayoraestetiempo(porejemplo,unaGastrectomíatotalo Pancreatoduodenectomía),sedebeplanificarconanticipación un apoyo nutricional parenteral para el posoperatorio inmediato, sinesperarquesecumplanlos5díasconnutricióninsuficiente. Hay también situaciones distintas a las anteriores, como es el caso de un paciente politraumatizado grave en un accidente. Esteindividuo,habitualmenteconunavolemianormalhastael momentodeltrauma,sufreenformabruscapérdidade sangre y su manejo es totalmente distinto. Primero corresponde la administración rápida de volumen endovenoso sobre la base decristaloides,depreferenciasuerofisiológicooRingerlactato
  • 18. 19 indistintamente, dependiendo de la cantidad, velocidad y edad del paciente, es preferible evitar el suero fisiológico por la gran cantidad de sodio, el riesgo de Edema Pulmonar y de Acidosis Hiperclorémica. Es importante entender que en traumaloque seperdió es “sangre” ysielshock es importante (tipo III o IV) se debe reponer sangre y no exagerar el aporte de cristaloides. Otroscuadrosfrecuentesdetratarenlosserviciosdeurgencia son las deshidrataciones agudas por gastroenteritis agudas, endondelosvómitosyladiarreapuedenllegaracomprometer en forma importante al paciente. En estas condiciones es útil, dependiendo de la deshidratación inicial, comenzar la hidratación con un bolo 500 ml de Ringer o suero fisiológico y luego continuar con suero glucosalino, pues el aporte de calorías de esta última solución entrega una sensación de bienestar importante al paciente, ya que, al igual que en ejemplos anteriores, rompe con el ayuno y la formación de cuerpos cetónicos. Loscoloidescontienenpartículasdesuspensióndealtopeso molecular que no atraviesan las membranas capilares. Con esto aumenta el tiempo de permanencia en el intravascular y disminuye la producción de edema. Actúan aumentando la presión oncótica, retienen agua en el intravascular produciendo expansión del volumen plasmático. Los efectos hemodinámicos son más duraderos y rápidos que los de los cristaloides, necesitándose administrar menor volumen para expandir el intravascular.Su costoes mayor a loscristaloides. Existen coloides de origen natural y artificial. Su uso está reservado para situaciones donde existen alteraciones en la permeabilidad y hay salida de proteínas al intersticial, como en respuestas inflamatorias sistémicas o shock séptico.
  • 19. 20 Los coloides principales se resumen en la siguiente tabla: Origen Natural Artificial Tipos Características Albúmina Dextrano Es responsable del 80% de la presión oncótica del plasma. Un 30 - 40% se distribuye en el espacio intravascular y el resto en el intersticio. El 90% de lo que se administra permanece en el plasma por 2 horas y luego se equilibra en el espacio intra y extravascular por los siguiente 7 a 10 días. Se encuentra disponible al 5 y 25% en soluciones salinas. El aporte al 25% determina un aumento del intravascular de 5 veces el volumen incorporado. El principal limitante de su uso es el elevado costo. Corresponden a polisacáridos de origen bacteriano producidos por el Leuconostoc mesenteroides. Se definen según su peso molecular en dextrano 40 o 70. El 70% del dextrano40esexcretadoatravésdelaorinaantesdelas24horas.Lasmoléculasmás grandes son excretadas luego de ser almacenadas en el sistema retículo endotelial. Ambos pueden producir alteraciones en la coagulación e insuficiencia renal aguda (principalmente el dextrano 40). Hidroxietilstarch (HES) Se sintetizan a partir de la hidrolisis de la amilopectina. Su permanencia en el intravascular depende del peso molecular del HES que se utilice, su efectopuede durar de 3 a 24 horas. Gelatinas Derivado del colágeno, tiene un peso molecular más bajo que las anteriores y una persistencia vascular de 2 a 3 horas. Tabla 5: Tipos de coloides. Los hemoderivados que se utilizan son: Glóbulos rojos: se recomienda transfundir glóbulos rojos en pacientes con hemoglobina menor a 6 g/dl. Si los valores son entre 6 y 10 g/dl se debe evaluar el riesgo del paciente de oxigenacióninadecuada(cirugíasconestimacioneselevadas de pérdidas hemáticas, pacientes cardiópatas o sintomáticos). Plasma fresco congelado: las indicaciones para su administración son reemplazo de déficit de factores de coagulación,reversióndeefectoscumarínicos,correccióndel déficit de vitamina K, transfusión masiva con protrombina o TTPA y déficit de antitrombina III. Plaquetas: el uso de plaquetas varía en pacientes con recuentos entre 50.000 y 100.000 según el riesgo de sangramiento del procedimiento quirúrgico.
  • 20. 21 Secreción Volumen en 24h Na (meq/L) K (meq/L) Cl (meq/L) HCO3 (meq/L) Estómago 1.000-2.000 60-90 10-30 100-130 0 I. delgado 2.000-3.000 120-140 5-10 90-120 30-40 Colon 300 60 30 40 0 Páncreas 600-800 135-145 5-10 70-90 95-115 Bilis 300-800 135-145 5-10 90-110 30-40 Tabla 6: Pérdidas por sondas y ostomías. Conclusión La información más importante para evaluar el estado del volumen intravascular corresponde al escenario clínico y, por lo tanto, el déficit de fluidos debe tomar siempre en cuenta la historia del paciente, sus antecedentes médicos y un muy buen examen físico. El objetivo de una adecuada fluidoterapia debe enfocarse en mantener un flujo sanguíneo con buena perfusión a todos los órganos, de modo de favorecer una reparación de los tejidos afectados y no producir daño colateral a otros. El mantener una hidratación basal o ser más agresivos en su manejo, dependerá de la patología concomitante, el estado actual del paciente y el procedimiento al cual será sometido.
  • 21. 22 Bibliografía 1. Arthur C. Guyton, John E. Hall. Tratado de fisiología médica. 11.a edición. Elsevier, 2006. 2. Brandstrup B. Dry or wet-which is the best for your patient? SAJAA 2008; 14(1): 32-6. 3. Casanova R, García Peña J, Lomillos Rafols V, De Luis Cabezón N, Aguilera Celorrio L. Fluidoterapia perioperatoria. Rev. Esp. Anestesiol. Reanim. 2010; 57: 575-85. 4. Chappell D, Jacob M, Hofmann-Kiefer K, Conzen P, Rehmet M. A Rational Approach to Perioperative Fluid Management. Anesthesiology 2008; 109: 723-40. 5. Concha Mario, de la Cuadra Juan Carlos. Manual de anestesiología. Ediciones Universidad Católica de Chile.2006. 6. F. Charles Brunicardi, Seymour I. Schwartz. Principios de cirugía. Volumen 1. 8.a edición. México: McGraw-Hill Interamericana, 2006. 7. Goldstein S, Joseph B, Chi A. Fluids and Electrolytes. Current Surgical Therapy. Eleventh Edi-tion. Elsevier Inc. 2014, p.1153-59. 8. Grocott MP, Mythen MG, Gan TJ. Perioperative fluid management and clinical outcomes in adults. Anesth Analg 2005; 100: 1093-106. 9. Holte K. Pathophysiology and clinical implications of perioperative fluid management in elective surgery. Dan Med Bull 2010; 57(7) B4156. 10. McKechnie SR, Walsh TS. Metabolic response to injury, fluid and electrolyte balance and shock. Principles and Practice of Surgery. Sixth Edition. Elsevier Inc. 2012. 1, p. 3-26. 11. Ortiz Aparicio, Freddy Miguel; Hasbún Velasco, José Pablo y Granado Rocha, Daniela Laura. Evidencia actual sobre el uso de soluciones coloides versus cristaloides durante la reanimación del paciente con shock. Gac Med Bol [online]. 2012. Vol. 35, N.° 2, pp. 96-99. ISSN. 12. Pearse RM, Ackland GL. Perioperative fluid therapy. BMJ 2012; 344: e2865. 13. Practice Guidelines for Preoperative Fasting and the Use of Pharmacologic Agents to Reduce the Risk of Pulmonary Aspiration: Application to Healthy Patients Undergoing Elective Procedures. Anesthesiology 2011; 114: 495-511. 14. Quick CR, Reed JB, Harper SJ, Saeb-Parsy K, Deakin PJ. Managing physiological change in the surgical patient. Essential Surgery: Problems, Diagnosis and Management, Fifth Edition. Elsevier Inc. 2014. 2, pp. 19-33. 15. Raghunathan K, Singh M, Lobo DN. Fluid Management in Abdominal Surgery. What, When, and When Not to Administer. Anesthesiology Clin 2015; 33: 51-64. 16. Rhee P.Shock, Electrolytes, and Fluid. Sabiston Textbook of Surgery, Nineteenth Edition. Elsevier Inc. 2012, pp. 66-119. 17. Smeltzer S.C. and Bare B.G. Líquidos y electrólitos: equilibrio y distribución. En: Smeltzer S.C.y Bare B.G. Enfermería médico quirúrgica de Brunner y Suddarth. Vol. I y II. México: McGraw-Hill Interamericana. 10.ª edición. 2005, pp. 282-332. 18. Van Regenmortel N, Jorens PG, Malbrain LN. Fluid management before, during and after elective Surgery. Curr Opin Crit Care 2014, 20: 390-5.
  • 22. 23 1.2 Nutrición y Regímenes Vergara R, Hernández C, Matamala A. Introducción La evaluación y manejo nutricional debe formar parte del tratamiento integral del paciente. La prevalencia de malnutrición en el paciente hospitalizado alcanza hasta un 50% dependiendo de las series .1 ingreso, el período de ayuno condicionado por la técnica quirúrgica (especialmente en cirugía digestiva) y las posibles complicaciones posoperatorias que producen una persistencia del estado catabólico. Los pacientes quirúrgicos son especialmente propensos a presentar alteraciones debido a la patología que motiva su Evaluación Nutricional La evaluación del estado nutricional es una valoración utilizada para establecer la gravedad de las deficiencias o excesosnutricionalesyparaayudarapredecirlanecesidadde nutrientes. Debe ser realizada en todo paciente, y contempla una evaluación clínica (Evaluación Subjetiva del Estado Nutricional, ESEN) y una evaluación objetiva por antropometría y laboratorio. LaESENconsisteenunaanamnesis yexamenfísicodirigidos a los siguientes puntos: Anamnesis: Busca obtener información para determinar la pérdida de peso, enfermedades crónicas o hábitos dietéticos queinfluyenenlacantidadycalidaddelconsumodealimentos 1. Baja de peso. 2. Cambios en la dieta. 3. Síntomas gastrointestinales. 4. Capacidad funcional. Examen físico: 1. Determinar el Índice de Masa Corporal (IMC), se calcula al dividir el peso actual (en Kg) por la talla (en m2), siendo el rango normal entre 18,5 y 24,9 2. Estimar el tejido adiposo subcutáneo en pliegue tricipital. 3. Estimar las masas musculares en deltoides y cuádriceps femorales. 4. Evaluar si hay edema o ascitis. 5. Determinar si hay signos carenciales en piel y mucosas. Diagnóstico nutricional Mediante la ESEN el paciente puede ser clasificado en: 1. Obeso. 2. Bien nutrido. 3. Riesgo de desnutrición. 4. Desnutrido. 1 Bruun LI, Bosaeus I. Prevalence ofmalnutrition in surgical patients: evaluation of nutritional support and documentation. Clin Nutr 1999; 18(3): 141-7.
  • 23. 24 La evaluación objetiva, que demanda mayores recursos, debe reservarse a los pacientes en categorías de riesgo de desnutrición y los desnutridos. Esta comprende una determinación antropométrica (masa grasa por pliegues cutáneos), masa muscular (circunferencias musculares) y función (por dinamometría de la mano) y exámenes de laboratorio relacionados con proteínas viscerales (albúmina, prealbúmina y recuento de linfocitos). Manejo Nutricional La evaluación nutricional nos permite detectar pacientes desnutridos o en riesgos de desnutrición. En estos pacientes es necesario desarrollar un plan de manejo nutricional: 1. Determinar los requerimientos. 2. Determinar la vía de administración y tipo. 3. Determinar el momento. Balance nitrogenado: Se refiere al balance de proteínas, ya que la mayor parte del nitrógeno corporal está en los aminoácidos que componen las proteínas. El BN en un día se puede medir evaluando la ingesta de proteínas (6,25 g de proteínas equivale a 1 g de N) y las pérdidas urinarias como N ureico (NUU) o N total (NTU): BN = N aportado - N eliminado N Aportado: gramos de proteínas/6.25 N Eliminado: (Urea orina x 0.46 x vol. orina 24h) + 4g 1. BN negativo: < 0 g/día 2. BN neutro: 0 g/día 3. BN positivo: > 0 g/día (ideal entre +2 y +4) Recomendaciones Distribución de calorías Es crucial determinar las necesidades nutricionales de los pacientes debido a que la provisión de una cantidad inadecuada o excesiva de calorías puede influir de forma adversa en el organismo. • CALORÍAS Fundamentalmente, hay dos métodos de cálculo de los requerimientos energéticos de un paciente: 1. Cálculo mediante calorimetría indirecta. Se basa en la medidadelconsumode oxígeno(VO2) yla producción de anhídridocarbónico(VCO2),realizadaconuncalorímetro. 2. Cuando no se puede realizar calorimetría indirecta, se puede utilizar fórmulas para evaluar los requerimientos. En la práctica, la estimación del aporte calórico que debe recibir un paciente se realiza sobre la base de su IMC: • Normal o bajo: 25-30 cal/kg • Sobrepeso: 20 cal/kg • PROTEÍNAS La recomendación inicial es entregar un aporte de 1 a 1.5 g/ kg al día, aumentando la cantidad en pacientesdesnutridos o hipercatabólicos. En estos pacientes, los cálculos de requerimientos exigen el uso del balance nitrogenado. B. Vía de Administración. Las técnicas de nutrición tanto enteral como parenteral tienen como objetivo prevenir la desnutrición de los pacientes críticamente enfermos y recuperar a los desnutridos cuando ello no se puede lograr a través de una alimentación oral espontánea o suplementada. En el momento de la hospitalización de todo paciente y cada dos semanas mientras dure el ingreso, deberíamos plantearnos si este se encuentra en riesgo nutricional: 1. Pérdida reciente de peso superior al 5 % del habitual. 2. Albúmina sérica inferior a 3 g/dl. 3. Paciente con patología de riesgo nutricional: neoplasias, fístulas, sepsis, cirugía mayor, hepatopatía, etc. La vía de administración dependerá de la función del aparato digestivo.Sielpacienteescapazdeingeriralimentosporboca, pero no alcanza el 100% de sus requerimientos entonces se debe optimizar con suplementos orales. Si esto no es suficiente, se debe indicar nutrición enteral por sonda, ya sea en estómago, duodeno o yeyuno. La nutrición parenteral puede indicarse como suplemento o como nutrición completa, ya sea por vía periférica ocentral. La vía periférica se utiliza en pacientes que no requieren grandes volúmenes ni demandas nutricionales y en quienes el apoyo nutricional no será por más de 7-10 días. • Proteínas 10 - 20 % • Carbohidratos 50 - 70 % • Lípidos 20 - 30 % A. Evaluación de las Necesidades Calóricas.
  • 24. 25 N. Enteral Oral 2/3 requerimientos Si B.1 Nutrición Enteral Es una técnica de soporte nutricional mediante la cual se aportan nutrientes de forma directa al aparato digestivo, por vía oral o en los diversos tramos del tubo digestivo con sondas específicas. • INDICACIONES NUTRICIÓN ENTERAL Pacientes con un aparato digestivo funcionante en que la ingesta de nutrientes es inadecuada: 1. En pacientes con adecuado estado nutricional y estrés metabólico leve mantenido durante un periodo igual o superior a 7 días 2. En pacientes con buen estado nutricional y con estrés metabólico moderado grave mantenido durante un periodo de 3 - 5 días. 3. En pacientes con desnutrición. • VÍAS DE ADMINISTRACIÓN 1. Vía oral. 2. Por sonda • Nasogástrica: se puede entregar un aportecontinuo o en bolos; existe una mejor tolerancia al volumen entregado. • Nasoyeyunal: solo se puede entregar unaporte continuo. Presenta menor riesgo de neumonía aspirativa, aunque un mayor riesgo de diarrea. 3. Por ostomías. • Gastrostomía: En pacientes con intubación por más de 6 semanas. • Yeyunostomía: En general, en el posoperatorio de cirugías abdominales complejas. • CONTRAINDICACIONES NUTRICIÓN ENTERAL Contraindicaciones absolutas: • Peritonitis difusa. • Obstrucción completa del intestino delgado o grueso. • Perforación intestinal. • Vómitos intratables. • Hemorragia digestiva aguda grave activa. • Inestabilidad hemodinámica grave. • Malabsorción grave, cuando se presenta con incapacidad para absorber nutrientes en eltubo digestivo. Contraindicaciones relativas: • Diarrea grave que se acompaña dealteraciones metabólicas (>1.500 ml al día). • Fístulas entero cutáneas de alto débito (> 500 ml/día). • Enteritis grave por radiación o infección. No Intestino Funcionante Complemento oral Nasoenteral Enterostomia N.P.Periferica N.P.Total > 7 días < 7 días > 4 sem < 4 sem Nutrición Perenteral
  • 25. 26 • TIPOS DE REGÍMENES En general, se inicia con 10 a 20 ml/h en forma continua, se evalúa tolerancia y se progresa día a día. En pacientes estables o que puedan recibir alimentos durante el día, la nutrición enteral puede indicarse durante la noche. Fórmulas isotónicas con residuo bajo: Casi todas proporcionan una densidad calórica de 1 kcal/ml. Estas composiciones de osmolaridad baja proporcionan carbohidratos, proteínas, electrolitos, agua, grasa yvitaminas liposolubles (algunos no incluyen vitamina K) basales, y su característica es que tienen una relación entre calorías no proteínicas y nitrógeno de 150:1. No contienen volumen por fibra y, por consiguiente, dejan un residuo mínimo. Ejemplo: Osmolite. Fórmulas isotónicas con fibra: estas fórmulas contienen fibra, soluble e insoluble, que se elabora a menudo a partir de soya. Las soluciones con fibra regulan el tránsito intesti- nal y disminuyen la incidencia de diarrea y constipación en comparación con las solucio-nes sin fibra. La fibra estimula la actividad de la lipasa pancreática y las bacterias intesti- nales la degradan en ácidos grasos de cadena corta, un combustible importante para las células del colon. No hay contraindicaciones para el uso de fórmulas que contienen fibra en pacientes graves. Ejemplo: Jevity Plus. Fórmulas que mejoran la inmunidad: Son fórmulas fortificadas con nutrientes especiales para mejorar varios aspectos de la función inmunitaria o de los órganos sólidos. Entre los aditivos se encuentran: glutamina, arginina, aminoácidos de cadena ramificada, ácidos grasos omega 3, nucleótidos y beta caroteno. Fórmulas densas en calorías: La principal diferencia de estas fórmulas es un valor calórico mayor para el mismo volumen. Estas soluciones tienen una osmolalidad más alta quelas fórmulas estándar ysonadecuadas paraalimentación intragástrica. Suele aportar 1,5 a 2 kcal/ml. Fórmulasconaltocontenidodeproteínas:Serecomiendan en pacientes graves o traumatizados cuya necesidad de proteínas es elevada. Ejemplo: Fresubin HP. Fórmulas elementales: Contienen nutrientes predigeridos y proporcionan proteínas en forma de péptidos pequeños. La principal ventaja de esta fórmula es la facilidad de absorción. Se recomienda en pacientes con malabsorción, deterioro intestinal, pancreatitis y pacientes con ayuno prolongado. Ejemplo: Perative. Fórmulas para insuficiencia renal: Contiene un volumen más bajo de líquidos ylas concentraciones de potasio, fósforo y magnesio necesarias para cumplir con las necesidades calóricas diarias. No contiene oligoelementos ni vitaminas. Ejemplo: Suplena. Fórmulas para insuficiencia pulmonar: Se suele incrementar el contenido de grasas al 50% de las calorías totales, con una reducción de carbohidratos. El objetivo es reducir la producción deCO2yaliviarlacargaventilatoriadelospulmones.Ejemplo: Pulmocare. Fórmulas para insuficiencia hepática: En esta fórmula casi 50% de las proteínas son aminoácidos de cadena ramificada. El objetivo de esta fórmula es reducir las concentraciones de aminoácidos aromáticos e incrementar las de aminoácidos de cadena ramificada. Hay controversia respecto al uso de esta fórmula, pues no se han demostrado beneficios claros. Ejemplo: Hepatic Aid. • COMPLICACIONES NUTRICIÓN ENTERAL Las complicaciones pueden ser: 1. Mecánicas:Incluyelesionesporpresión,obstrucción(una de las más frecuentes), salida accidental o desplazamiento de la sonda, fuga del contenido por ostoma. 2. Infecciosas: Infección de la herida o del estoma, otitis, sinusitis, broncoaspiración y peritonitis, que sucede con frecuencia en la recolocación errónea de la sonda. 3. Gastrointestinales: Son las complicaciones más frecuentes. La mayoría de estas complicaciones no son graves, pero implican con frecuencia la interrupción del aporte nutricional. • Náuseas, vómitos y regurgitación. • Aumento del residuo gástrico, es decir, presencia de un volumen superior a 500 ml en cada valoración del contenidogástrico;suprincipalcausaeslagastroparesia. • Distensión abdominal: Refleja un aporte de nutrición superioralacapacidaddeabsorcióndelaparatodigestivo. • Estreñimiento: Este se disminuye al mínimo posible con dietas con fibras, procinéticos y enemas. • Diarrea: La responsabilidad de la nutrición enteral en esta complicación debe ser un diagnóstico de exclusión. Se produce como consecuencia de un desequilibrio entre los mecanismos de secreción y reabsorción hídrica en el tubo digestivo. 4. Metabólicas. • Alteraciones electrolíticas: La más frecuente es la hipokalemia. • Alteraciones hídricas: Pueden ser por exceso o por déficit. • Alteración del metabolismo glucídico: En el paciente diabético inestable por una enfermedad intercurrente o enpacientesconelevadoestrésmetabólico yciertogrado de resistencia periférica a la insulina, que tienen una inadecuada metabolización de los hidratos de carbono con intensa hiperglucemia. Se recomienda administrar fórmulas con carbohidratos modificados, así como mantener glicemias entre 120 y 150 mg/dl.
  • 26. 27 • Síndrome de realimentación: Síndrome que engloba una serie de alteraciones metabólicas que ocurren como resultado de iniciar la nutrición en forma abrupta, sin haber corregido alteraciones hidroelectrolíticas, o bien, por una nutrición enteral o paraenteral excesiva. Se produce un estímulo de secreción de insulina ante un elevado aporte de hidratos de carbono que provoca desviación intracelular de electrolitos, en general en pacientes gravemente desnutridos (fósforo, magnesio y potasio). Los pacientes pueden desarrollar desórdenes hidroelectrolíticos, especialmente hipofosfatemia, junto con complicaciones neurológicas, pulmonares, cardíacas, neuromusculares y hematológicas. B.2 Nutrición Parenteral La nutrición parenteral consiste en administrar en forma continua una solución que contiene carbohidratos, proteínas, grasas y otros nutrientes necesarios a través de un catéter permanente insertado en un acceso venoso (central o periférico).Suindicacióntienecabidaúnicamenteenaquellas situaciones en las que el aparato gastrointestinal no funciona o no puede ser utilizado. • INDICACIONES Las principales situaciones para iniciar nutrición parenteral se encuentran en pacientes graves que sufren desnutrición, sepsisountraumatismoquirúrgicooaccidental,cuandonoes posibleutilizareltubodigestivoparaalimentarlosenunperiodo superior a 7-10 días, o 5-7 días si se parte de una situación de desnutrición. En algunos casos, se puede utilizar nutrición intravenosa para complementar un ingreso oral inadecuado. Igual que en la nutrición enteral, los objetivos fundamentales son proporcionar suficientes calorías y sustrato nitrogenado para promover la reparación de los tejidos y conservar la integridad o el crecimiento de la masa tisular magra. La nutrición parenteral no está exenta de riesgos (tanto mediatos como diferidos), precisa una correcta prescripción de nutrientes y una evaluación clínica periódica. Indicado en: • Pacientes adultos con síndrome de intestino corto secundario a resección masiva de intestino delgado. • Fistulas enteroentéricas, enterocólicas, entrovesicales o enterocutáneas de alto débito (> 500 ml al día). • Enfermos quirúrgicos con íleo paralíticoprolongado. • Enfermosconafecciónmalignaenquienesladesnutrición puedeponerenpeligroeléxitodeunaopciónterapéutica. • Fracaso en el aporte de calorías mediantealimentación enteral. • Pacientes graves, hipermetabólicos por más de 5 días o cuando no es factible la nutrición enteral. • CONTRAINDICACIONES NUTRICIÓN PARENTERAL 1. Falta de un objetivo específico en el tratamiento del paciente. 2. Periodos de inestabilidad hemodinámica o alteración metabólica grave que requieren corrección o control antes de intentar la alimentación intravenosa. 3. Posibilidad de alimentación por el tubo digestivo. 4. Pacientes con buen estado nutricional. 5. Pacientes con descerebración irreversible. • CLASIFICACIÓN DE NUTRICIÓN PARENTERAL Según su objetivo terapéutico nutricional: • Total. Es total si se cubre de forma completa los requerimientos del paciente. Requiere el acceso a una vena de diámetro grande (central). • Parcial. Aquella que no alcanza todos los requerimientos del paciente. Puede ser administrado a través de venas periféricas. Se considera su uso si no se dispone de vías grandes o si es utilizada en combinación con nutrición enteral. Se utiliza en periodos cortos que no superan las 2 semanas. Según vía de administración: • Periférica. Se utiliza un acceso venoso periférico subcutáneo.Indicadocuandoseprevéelusodenutrición parenteralporunperiodoinferiora2semanas.Lafórmula debe tener una osmolaridad menor a 700 mOsm/l. • Central. Se utiliza un acceso venoso central. La fórmula suele ser una mezcla hiperosmolar (1.300 – 1.800 mOsm/l). • TIPOS 1. Receta magistral: individual preparada en central de mezclas. 2. BolsasdeNPTlistasparausar:Sonmezclascomerciales que contienen macronutrientes, la mayoría 3 en 1, con o sin electrólitos y sin vitaminas ni oligoelementos. En el mercado existe una gran variedad en cuanto a aportes, contenido de calorías y proteínas, osmolaridad y volumen, que debe ser ajustado a los requerimientos de cada paciente. Ejemplos: SMOF, Lipofundin.
  • 27. 28 • COMPLICACIONES DE LA NUTRICIÓN PARENTERAL 1. Infecciosas: se asocian al catéter. La primera medida para tratar estas complicaciones infecciosas es su prevención. En un paciente con fiebre que recibe nutrición parenteral, deben realizarse hemocultivos y descartarse otros posibles focos. Ante sospecha que el origen sea infección relacionada con el acceso venoso, hay que retirar la nutrición parenteral y el acceso e iniciar el tratamiento antibiótico específico. 2. No infecciosas: • Mecánicas: neumotórax, canalización arterial, mal posición,perforacióndeunvasootaponamientocardiaco. • Trombosis venosa. • Oclusión del catéter por precipitados lipídicos. • Oclusión del catéter por precipitados cálcicos. 3. Complicaciones metabólicas: hiperglicemia, déficit de electrolitos, alteraciones equilibrio ácido-base, síndrome de realimentación, enfermedad hepatobiliar yenfermedad metabólica ósea. 4. Atrofia intestinal: la falta de estimulación intestinal se acompaña de atrofia de la mucosa del intestino, menor altura de las vellosidades, crecimiento bacteriano excesivo, reducción del tamaño del tejido linfoide, baja producción de IgA y deterioro de la inmunidad intestinal. Bibliografía 1. Schwartz, s.l., Principios de cirugía, 8.a edición en español, editorial McGraw-Hill Interamericana, 2005. 2. Harris ja, benedict fg. A biometric study of the basal metabolism in man. In: washington cío, ed. Publication N.° 279. Washington, dc: 1919. 3. Aomar abdel-lah mohamed, j. A. (s.f.). Guía de actuación: soporte nutricional en el paciente quirúrgico. Asociación Española de Cirujanos. Recuperado el 5 de junio de 2015, de http://www.aecirujanos.es/publicados_por_la_aec/guia_actuacion_soporte_ nutricional/guia_actuacion_soporte_nutricional.pdf 4. L. Ricardo Gálvez; Sandra Hirsch; Guías chilenas de soporte nutricional en las unidades de paciente crítico (cuidados intensivos e intermedios): Consenso sociedad chilena medicina intensiva / Asociación Chilena de Nutrición, Obesidad y Metabolismo, Revista chilena de medicina intensiva. 2011; vol 26(4): 223-233.
  • 28. 29 1.3 Cicatrización Quinteros JP, Arteaga MJ, Fontbona M. Fases de Cicatrización Es importante recordar que las fases se sobreponen entre sí, mientras una está terminando, la otra está comenzando. Elementos celulares involucrados: • Plaquetas: liberaran sustancias con propiedades quimiotácticas para la llegada de polimorfo nucleares neutrófilos. • Macrófagos: los monocitos circundantes son atraídos y transformadosamacrófagos,estosremuevenlosdetritus tisulares para que continúen las siguientes fases de la cicatrización. Además, producen citoquinas que activan y atraen a otras células. • Célulasendoteliales:sonestimuladasporlosmacrófagos, para que comiencen a migrar y epitelizar la solución de continuidad. • Neutrófilos: junto con las plaquetas producen lipoxinas que tienen como efecto modular y detener la respuesta inflamatoria. Aquí se produce el punto de chequeo y control de la respuesta inflamatoria, punto que marca el fin de la fase inflamatoria, y es fundamental para seguir con las otras fases de la cicatrización. • Fibroblastos: aumentan su número y actividad; comienzan la síntesis de colágeno, que es fundamental en la fase de fibroplastía/proliferativa. El fibroblasto activado se transforma en miofibroblasto en la etapa proliferativa, contribuyendo a la contracción de la herida. • Linfocito: migran alterritorio injuriado alrededor del quinto día, alcanzan su máximo al séptimo. Tienen un rol de modulación de los procesos de cicatrización. Moléculas involucradas • Eicosandoides: metabolitos de ácido araquidónico, son muyactivos. Se incluyen prostaglandinas, prostaciclinas, tromboxanos, leucotrienos, lipoxinas. En una injuria se libera fosfolipasa, que hidroliza el ácido araquidónico de las membranas celulares y da origen a estas moléculas. • Citoquinas: péptidos con potente acción reguladora sobre el metabolismo, síntesis proteica y diferenciación celular. Se subdividen en: quemoquinas, linfoquinas, monoquinas, interleuquinas, factores de estimulación colónica e interferones. • Factores de crecimiento: proteínas que participan en la cicatrización estimulando la síntesis proteica, síntesis de MEC y su recambio. Modulan la apoptosis. Se agrupan en cinco familias: Derivados de plaquetas (PDGF y VEGF), epidérmicos (EGF), fibroblásticos (FGF yKHF), de transformación (TGF) e insulínicos (IGF). • Óxido nítrico: sus efectos sobre la cicatrización incluyen: acción bactericida, estímulo de angiogénesis, vasodilatación, inhibición de la agregación plaquetaria y aumento de la permeabilidad vascular. Estas acciones son especialmente relevantes durante la primera etapa. Su producción en el tejido inflamado comienza durante las primeras 24 horas, alcanzando su máxima expresión entre los días 1 y 5. Se produce por activación de la iNOS (óxido nítricosintetasa inducible) sobrerregulada en injuria tisular.Los epitelios, además, tienen eNOS (constitutiva).
  • 29. 30 Mirastschijski U, Jokuszies A & Vogt PM. Skin wound healing: Repair biology, wound, and scar treatment. In: Neligan P. Plastic surgery. Seattle: Elsevier; 2013, pp. 268 Fase inflamatoria Transcurre entre los días 0 y 4, es cuando se desencadena la cascada de la coagulación. Se produce vasoconstricción y activación plaquetaria. Aquí es donde se inicia la liberación demediadores comocitoquinas yfactores decrecimientoque dan origen a la respuesta inflamatoria. Todo esto transcurre siguiendo un patrón genéticamente establecido. Dentro de la primera hora se desencadena la respuesta inflamatoria, se liberan mediado-res con efectos de quimiotaxis y aumenta la permeabilidad capilar para facilitar la llegada de las células. Participan tanto células como moléculas con funciones específicas. Fase proliferativa Sedesarrollaentrelosdías2y21.Enestaetapasedesarrollan los procesos de epitelización de la herida, angiogénesis, formacióndematrizextracelular(MEC)provisionalyproducción de colágeno. La célula más relevante es el fibroblasto. Epitelización:hayunadisminucióndelaiNOS,loquepermite una proliferación de queratinocitos, lo que posibilita una epitelización completa a las 48 horas. Angiogénesis: el VEGF (factor de crecimiento endotelial vascular) aumenta la producción de óxido nítrico mediante la sobreexpresión de la eNOS. Además, los queratinocitos, estimulados previamentepor laiNOSproducenmás VEFG,lo queocasionauncírculodondeaumentanestosmediadores.El aumentodeVEGFllevaaldesarrollodevasosdeneoformación. Lanueva irrigacióndeláreadecicatrizaciónpermitelallegada de nutrientes y sustratos para complementar el proceso. Formación de MEC previsional: gran parte de los procesos de cicatrización se llevan a cabo en la MEC, por lo que este proceso es fundamental. Inicialmente, la MEC provisional está compuesta principalmente por fibrina y fibronectina, de los restos del coágulo, la respuesta hemostática y los macrófagos. Los fibroblastos, estimulados en la etapa inflamatoria, comienzan a producir nuevas moléculas, como glicosaminoglicanos, proteoglicanos yotras. Posteriormente, aparece el colágeno III. La proporción de este colágeno está aumentada en esta etapa (30% vs 10%), por lo que es menos resistente, más flexible y permite el paso más fácil de células. Luegoestosenormaliza,ylamaduracióndelcolágenopermite una mayor estabilidad de las células. Se produce la transformación del fibroblasto a miofibroblasto. Ladesaparicióndelascontraccionesmecánicasenunamatriz más organizada lleva a la apoptosis de los fibroblastos, disminución de la síntesis de colágeno y una cicatrización normal. La persistencia de cargas mecánicas sobre la herida lleva a un aumento en la cantidad de colágeno y una cicatrización anormal (hipertrófica o queloide). Fase de remodelación Comienza el día 21. Esta fase es clínicamente relevante durante el primer año posquirúrgico, pero puede ser un proceso indefinido. Aquí se produce un aumento de la fuerza tensil,hastaenun80%delaresistenciaoriginal.Lascicatrices nunca tienen un 100% de resistencia. A la primera semana se alcanza un 3%, 30% a las tres semanas y, finalmente, un 80% a los tres meses.
  • 31. 32 Cicatrización Patológica No todas las heridas logran cicatrizar a pesar de las intervenciones posibles. Esta alteración del proceso de cicatrización se puede producir por dos mecanismos: la falta de cicatrización o el exceso de esta. Cicatrización patológica por falta de cicatrización Son conocidas como heridas crónicas, son lesiones abiertas que fallan en epitelizar y cerrar en un tiempo razonable. No se produce tejido de granulación robusto. Hay varios factores que contribuyen a evitar la cicatrización en estas lesiones, pero no hay una clara teoría que explique la etiopatogénesis de este fenómeno en cada herida por separado. Dentro de estos factores se encuentran: • Venosas:elaumentodelapresiónvenosaproduceedema localizado y extravasación de plasma. Esto dificulta la difusión de oxígeno y nutrientes; además, produce la activación de leucocitos en capilares obstruidos, lo que finalmente lleva a la liberación de radicales libres por hipoxia y se produce necrosis. Sin tratamiento adecuado, es posible que estas heridas aumenten su tamaño. • Arterial: las heridas requieren un adecuado nivel de oxígeno para cicatrizar. Las lesiones isquémicas tienen una pobre cicatrización y mayor riesgo de infecciones. En estas heridas existe riesgo de infección necrotizante. Una herida que no cicatriza en una extremidad es indicación para revascularización. • Diabetes: hay varios factores que evitan la correcta cicatrización en pacientes diabéticos. Entre ellos, la neuropatía diabética, insuficiencia arterial y diversas alteraciones moleculares se ven implicadas en la alteración de este proceso. Se produce una inflamación sostenida, con aumento de citoquinas inflamatorias y disminución de los linfocitos T. La glicosilación de proteínas comprometefibroblastosycélulasvasculares,loquelleva a la apoptosis y la no formación de tejido de granulación. Los fibroblastos y queratinocitos tienen una reducción de su proliferación y producción de colágeno. El correcto manejo de la glicemia puede revertir estas alteraciones. • Radiación: la radiación produce alteraciones del ADN de los fibroblastos, queratinocitos y células endoteliales, el cual impide que se dividan de manera adecuada. El tejido irradiado tiene algún grado de daño residual, lo que produce atrofia, fibrosis y poca reparación de los tejidos. • Infección: las bacterias alteran la cicatrización a través de diversosmecanismos.Anivellocalelinfiltradoinflamatorio de la cicatrización1 . Son signos de infección: fiebre, eritema, edema y drenaje de contenido purulento. • Malnutrición: la cicatrización es un proceso anabólico que genera un aumento en el consumo de calorías, el que debe ser calculado de forma independiente a cada paciente. Los pacientes con malnutrición tienen alterada la cicatrización porque se necesitan proteínas, vitaminas y minerales para que este proceso sea efectivo. Estos nutrientes están involucrados en la síntesis de colágeno, reepitelización y promueven la respuesta inflamatoria en etapas tempranas de la cicatrización. El déficit de proteínas aumenta el riesgo de dehiscencia. • Obesidad: interfierecon lacicatrización independiente de ladiabetes.Lapocaperfusiónyeltejidoadiposonecrótico contribuyen a la mala cicatrización en pacientes obesos diabéticosynodiabéticos.Además,enlospacientesobesos diabéticos el riesgo aumenta con mal control glicémico. • Esteroides: el uso de corticoides sistémicos y tópicos altera el proceso de cicatrización, especialmente durante el inicio de este. Estos reducen la inflamación, la síntesis de colágeno y la contracción. Los mecanismos exactos del uso de corticoides no están definidos. • Quimioterapia: produce alteraciones en la división celular, generalmente retrasándola, lo que hace que el proceso de curación sea más lento. • Tabaco: el consumo de tabaco tiene un efecto difuso y multifactorial en el organismo. Produce hipoxia, isquemia tisular y alteraciones inmunes que alteran el proceso de cicatrización2 . Algunos de estos efectos son reversibles si el paciente deja de fumar. Se recomienda un cese del cigarro entre 3 a 8 semanas preoperatorias y 4 en el posoperatorio. Cicatrización patológica por exceso Las heridas sin alteraciones del proceso de cicatrización tienen señales de detener el proceso cuando la epitelización es completa y el defecto de la piel está cerrado. Cuando las señales están ausentes o son inefectivas el proceso de reparación puede continuar y lle-ar a exceso de tejido de cicatrización. Las alteraciones moleculares involucradas aún están en estudio. Hay dos tipos de lesiones características de esta alteración: 1 Mirastschijski U, Jokuszies A & Vogt PM. Skin wound healing. In PC Neligan editor. Plastic surgery. Seattle: Elsevier; 2013. pp.267-296 disminuye la proliferación de fibroblastos y, por tanto, la producción y depósito de MEC. También factores asociados a la sepsis podrían alterar este proceso. Una contaminación bacteriana de 10 5 bacterias por gramo de tejido se asocia a infección clínica y retraso 2 Pluvy I, Garrido I, Pauchot J, Saboye J, Chavoin JP,Tropet Y, et al. Smoking and plastic surgery, part I. Pathophysiological aspects: Update and proposed recommendations. Annales de Chirurgie Plastique Esthétique. 2015 Feb;60(1):e3–13.
  • 32. 33 • Cicatrizhipertrófica:soncicatricesquenohancrecidomás allá del tamaño original de los bordes de la herida,pero se ha solevantado. Generalmente, se deben a exceso de fuerza tensil a través de la herida y son comunes en superficies articulares de las extremidades. Pueden ser autolimitadas y regresar con el tiempo (Imagen Nº1). • Queloide: son cicatrices que crecen más allá de los bordes originales de la herida, lo que lo distingue de la cicatriz hipertrófica. No son comunes, pero son más prevalentes en personas de piel oscura. Generalmente, se producen en ubicaciones de alta tensión. Los queloides crecen lentamente como tumor benigno (Imagen Nº2). Imagen Nº1 Imagen Nº2
  • 33. 34
  • 34. 35 Cierre de la Herida Es posible intervenir el cierre natural de las heridas a través de varios mecanismos. Hay tres categorías de cicatrización de las heridas: Cierre primario o por primera intención Laherida porincisiónlimpiaescerradadentrodelasprimerashorasdesdesuformación.Elcierredeestaesporaproximación. Hay una pérdida mínima de tejido y no hay infección bacteriana. Esta herida sigue las tres etapas clásicas de cicatrización. Cierre de primera intención Cierre secundario o por segunda intención Se utiliza para heridas con pérdida de sustancia y con bordes de lesión anfractuosos, o queda material extraño o tejido desvitalizado entre los bordes. En estas lesiones el cierre por primera intención no es posible. Se deja abierta para que cierre de forma espontánea. Se mantiene la fase inflamatoria hasta que cierre completa. Principalmente, están involucrados los procesos de contracción y la epitelización. Cierre por segunda intención
  • 35. 36 Cierre terciario o por tercera intención La herida es cerrada días después del traumatismo. Se utiliza en heridas en que ha pasado el riesgo de infección por contaminación. Los procesos de cicatrización no se ven alterados, por lo tanto, la fuerza tensil de la cicatriz es la misma que con cierre por primera intención. Cierre por tercera intención Bibliografía 1. Mirastschijski U, Jokuszies A & Vogt PM. Skin wound healing. In PC Neligan editor. Plastic sur-gery. Seattle: Elsevier; 2013, pp. 267-296. 2. Pluvy I, Garrido I, Pauchot J, Saboye J, Chavoin JP, Tropet Y, et al. Smoking and plastic sur-gery, part I. Pathophysiological aspects: Update and proposed recommendations. Annales de Chirurgie Plastique Esthétique. 2015 Feb; 60(1):e3–13. 3. Andrades P,Sepúlveda S. Cicatrización normal. En Andrades P,Sepúlveda S. Cirugía Plástica Esencial. Santiago, Chile: Hospital Clínico de la Universidad de Chile, 2005, pp.19–30. 4. Guntner G. Wound Healing: Normal and abnormal. En Thorne C, editor en jefe. Grabb and Smiths’s Plastic Surgery séptima edición. Estados Unidos de America: Lippincott Williams & Wilkins; 2014, pp.127-170.
  • 36. 37 1.4 Heridas Quinteros JP, Arteaga MJ, Fontbona M. Definición Pérdidadecontinuidaddelostejidossuperficialesy/oprofundos, producto de un agente traumático externo o interno .1 Clasificación Según mecanismo de producción (Artigas)2 1. Abrasivas: lesiones erosivas por fricción de la piel sobre superficie dura e irregular. Tienen diversos grados de profundidad. 2. Netas: bordes regulares, simétricos con las del lado opuesto. Coinciden al afrontarse. 3. En bisel: herida de corte oblicuo con bordes de distinto espesor, que no coinciden. 4. Con pérdida de tejidos: se perdió una porción de tejido secundario a agente traumático. 5. A colgajo: compromete piel, aponeurosis y/o músculos. Piel queda plegada sobre sí misma en forma distal o adherida por pedículo estrecho. 6. Mutilantes: agente traumático destrozó todas las estructuras del segmento produciendo pérdida parcial o total de un miembro. Generalmente por maquinaria pesada. 7. Complejas: hay lesión de tendones, nervios, vasos sanguíneos importantes y huesos. 8. Por armas de fuego: por proyectiles de baja y alta velocidad. 1 Calderón W. Heridas y Suturas. W. Calderón y A. Yuri (ed). Cirugía Plástica. Santiago. Sociedad de Cirujanos de Chile 2001; 135-45. 2 Artigas R. Clasificación y manejo de las heridas. Parke Davis Chile, Santiago 1979.
  • 37. 38 Según grado de contaminación Tipodeherida Descripción Riesgo de infección Ejemplos: Clase I (limpia) Herida operatoria donde no se encuentra inflamación. Herida no traumática. No se ingresa a tractos respiratorio, gastrointestinal, genital ni urinario. Menor al 2%. En caso de uso de prótesis menor al 1%. Mastectomía, disección de nodo axilar,laparotomíaolaparoscopía exploradora, reparación de hernia, tiroidectomía, paratiroidectomía. Clase II (limpia- contaminada) Herida operatoria donde se ingresa a tractos respiratorio, gastrointestintestinal, genital o urinario en condiciones controladas. Herida no traumática.Sin infección. Quiebre mínimo de la técnica quirúrgica. 5-15% Colecistectomía con inflamación crónica, colectomía, bypass gástrico enYderoux,reseccióntransuretral prostática, pancreatoduodectomía (Whipple), histerectomía vaginal. Clase III (contaminada) Heridas traumáticas, con quiebre mayor de la técnica quirúrgica estéril o derrame de contenido gastrointestinal ogenitourinario.Operacióncon inflamación aguda nopurulenta. Mayor al 15%. Colecistectomíaoapendicetomía por inflamación aguda, derrame de bilis durante colecistectomía, masaje cardiaco abierto, resección intestinal por necrosis o infarto. Clase VI (sucia) Heridas traumáticas sucias, con tratamiento tardío, cont am inación f ecal, cuerpo extraño o con tejido desvitalizado retenido. Heridas con infección clínica o víscera perforada. Mayor al 30%. Drenaje de absceso perirrectal, reparación de perforación intestinal, peritoni tis, apendicetomía con perforación o pus, perforación de úlcera gástrica, fractura expuesta, extracción dental con absceso. Según tiempo de evolución: agudas (siguen en forma ordenada los procesos de cicatrización clásicos) y crónicas (no los siguen). Según compromiso de tejidos: simples (comprometen solo la piel) y complejas (comprometen piel y músculos, huesos, tendones, nervios, etc.). Enfrentamiento Clínico Al momento de enfrentarse a un paciente con una herida, el médico debe realizar una evaluación sistémica buscando antecedentes importantes del paciente y factores que pueden alterar el proceso de cicatrización.En la anamnesis es importante establecer: • Mecanismo de lesión. • Grado de contaminación de la herida. • Tiempo desde la lesión: las heridas con 6 o más horas de evolución se consideran contaminadas. En el examen físico se realizará la evaluación de la herida: • Describiendo sus dimensiones, localización y extensión (si está asociado o no a compromiso vascular,neurológico u óseo). • Identificando contaminación, presencia de exudado y cuerpos extraños. Es importante reforzar que el profesional de salud debe evaluar los factores que produje-ron la herida y aquellos que la perpetuán como, por ejemplo: la infección, presencia de
  • 38. 39 tejido necrótico e insuficiencia vascular porque pueden ser modificables. Una vez realizada la evaluación de la lesión se debe elegir la modalidaddecierre(vercapítulodecicatrización), incluyendo o no el uso de suturas y curaciones. La elección del apósito por utilizar estará determinada por el objetivo que se espera lograr con el manejo de la herida. Dentro de estos objetivos se encuentran: proteger el tejido de granulación,tratarlainfecciónsihubiese,desbridarocontrolar exudado. Según la evolución de la herida y cumplimiento de los objetivos, se definirá la frecuencia de la curación. Durante el seguimiento se pueden realizar modificaciones al manejo, según se estime conveniente: agregar o quitar antibióticos, espaciar o intensificar frecuencia de curaciones y cambio de apósitos. Profilaxis Antitetánica Elmanejodeheridasproducidasporuninstrumentopunzante, laceraciones contaminadas con tierra o deposiciones y quemaduras con extenso daño de tejidos, que pudieran contener esporas tetánicas requiere: 1. Anamnesis sobre antecedentes de esquema de vacunación completo: • Tres dosis de DPT en el menor de un año. • Dos refuerzos de vacunas, a los 18 meses y el segundo refuerzo a los 4 años. • Dosis de toxoide diftérico en el escolar (segundo básico). 2. Evaluación del estado de la herida. • Herida limpia: heridas con menos de seis horas de evolución, no penetrante, con un insignificante daño tisular. Son erosiones y quemaduras superficiales no contaminadas. • Heridas sucia: heridas cuya evolución es mayor a 6 horas, penetrantes, con compromiso extenso de tejidos, independientedel agentecausal,localización y tipo de herida. 3. Aseo local prolijo y desbridamiento quirúrgicoinmediato: • Remoción de cuerpos extraños, tejidosdesvitalizados o necróticos. 4. Uso de inmunoglobulina antitetánica 250 UI por una vez. • Enelcasodeheridas anfractuosas (sucias,penetrantes y condestruccióndetejido)oinfectadasconmásde24horas desde la producción de la herida, y en personas obesas, se recomienda administrar 500 UI de inmunoglobulina antitetánica por una vez.
  • 39. 40 5. Uso de toxoide diftérico tetánico, según esquema. Antecedente de vacunación con toxide o booster Herida limpia Herida sucia Desconocido o menos de 3 dosis. Toxoide diftérico tetánico Toxoide diftérico tetánico + inmunoglobulina antitétanica. 3 o más dosis de vacunación y booster < 5 años. No No 3 o más dosis de vacunación y booster 5- 10 años. No Toxoide diftérico tetánico 3 o más dosis de vacunación y booster > 10 años. Toxoide diftérico tetánico. Toxoide diftérico tetánico. 6. La vacunación se realiza en los adultos con 2 dosis de toxoide diftérico tetánico separadas por 4-6 semanas y, posteriormente, un refuerzo de toxoide diftérico tetánico a los 6-12 meses. Mordeduras Dentrodelasheridas,lasmordedurasmerecenunadescripción aparte por su complejidad y manejo. 1. Mordeduras de perro: • 80% de las heridas por mordeduras corresponden a caninos. • Víctimas son niños de entre 5 y 9 años. • Sitios más afectados son los miembros, seguidos por las lesiones maxilofaciales. • Son heridas complejas que además de las lesiones por laceración y avulsión y penetrantes, se asocian a atrición con pérdida de tejido. • Riesgo de infección: 4% al 25% de las heridas por mordeduras de perro se infectan. 2. Mordeduras de gato: • Más frecuentes en personas adultas. • El sitio más frecuentemente afectado son los miembros superiores (2/3). • 85% de las lesiones son penetrantes. Las heridas por punción tienen más riesgo de infección. • Riesgo de infección: 30% a 50% de las heridas por mordedura de gato se infectan. 3. Mordeduras por seres humanos: • Son la tercera causa más frecuente de mordedura por mamíferos. • Tienen las tasas más altas de infección y complicaciones. • Las mordeduras oclusivas se pueden encontrar en cualquierpartedelaanatomía,perolamayoríaseobserva en las manos y brazos en los hombres; en las mujeres tambiénpuedenversemordedurasenmamasygenitales.
  • 40. 41 Bacteriología Las lesiones por mordedura tienden a ser polimicrobianas. Es raro encontrar solo un agente en los cultivos. Se llega a una mediana de cinco gérmenes bacterianos aislados por herida. Aproximadamente, el 50% de las infecciones debido a mordeduras de perro y el 63% de las producidas por gatos comprenden bacterias aeróbicas y anaeróbicas. • Género Pasteurella (P. multocida y P. Canis): se encuentran en el 50% a 75% de las heridas provocadas por gatos yen el20%a50% delas producidas porperros. • Bacterias aeróbicas: estreptococos, estafilococos, Moraxella spp., Corynebacterium spp. y Neisseria spp. Staphylococcus aureus y Streptococcus mitis. • Bacterias anaerobias: presentes en el 56% de mordeduras de las lesiones causadas por perros y gatos; los más comúnmente encontrados son Fusobacterium, Bacteroides, Porphyromonas y Prevotella spp. Los patógenos comúnmente involucrados en las infecciones causadas por mordeduras de seres humanos son: Staphylococcus aureus, Streptococcus epidermidis, Streptococcus viridans, Eikenella corrodens, Haemophilus influenzae y bacterias anaeróbicas productoras de betalactamasas. Estas mordeduras pueden complicarse con celulitis, artritis séptica, osteomielitis y sepsis. Manejo 1. Historia clínica: similar al manejo general de heridas. 2. Examen físico: además de lo descrito inicialmente, es necesaria la cuidadosa exploración de la herida para excluirelcompromisodeestructurasanatómicasprofundas como las articulaciones. Es necesario complementar el examen físico con radiografías en caso de mordeduras en manos o cercanas a una articulación o hueso. 3. Irrigaciónabundanteconsoluciónsalinanormalosolución deRingerlactatobajoaltapresiónconunaagujadecalibre 18 o 19 o la punta de un catéter y una jeringa grande. El tejido desvitalizado o necrótico debe ser desbridado. 4. Cierre de la herida: como principio, las heridas por mordeduras se dejan a cierre por segunda intención una vez completada la irrigación y desbridamiento. Sin embargo, en cara es necesaria la sutura de las lesiones. 5. Terapiaantibiótica:ladecisióndecomenzareltratamiento antibióticoesclaraenaquelloscasosconmanifestaciones de infección. Sin embargo, hay controversias en cuanto a la administración de profilaxis antibiótica. En casos de heridas de perros cuando a la herida se asocia lesiones penetrantes o se intentara cierre (cara), el riesgo de infección es mayor y se debe dejar esquema antibiótico. Del mismo modo, todas las mordeduras por humanos deben recibir antibioticoterapia, tanto por los agentes como por el tiempo de retraso en consulta en estos casos, que aumenta el riesgo de infección. El agente más apropiado para el manejo es uno que cubra anaerobios y aerobios, por ejemplo, Amoxicilina + Ácido Clavulánico por al menos 7 días de tratamiento. 6. Vacunación antirrábica: cuando el animal que produjo la mordedura está vacunado, está indicada solo la observación de este. Si el animal no está vacunado o la mordedura fue en la región de cabeza o cuello, se debe vacunar. La vacuna se coloca vía subcutánea según calendario los días 0-3-7-14-28. Infecciones Cutáneas Asociadas Las infecciones de piel y partes blandas involucran a la piel, tejido subcutáneo y la fascia. Se presentan en un espectro amplio de cuadros clínicos que van desde la celulitis hasta la fascitis necrotizante. • Infeccionescutáneasnocomplicadas:seincluyelacelulitis, foliculitis, furunculosis, abscesos y heridas infectadas. El manejo consiste en aseo, drenaje y desbridación de tejido, según sea el caso y tratamiento antibiótico. • Infecciones cutáneas complicadas no necrotizantes: a diferencia de las infecciones no complicadas, estas son más profundas haciendo necesario siempre manejo quirúrgico. Ejemplos de estas lesiones son las quemaduras infectadas, úlceras infectadas, infecciones en pacientes diabéticos, abscesos complicados e infecciones profundas. • Fascitis necrotizante: es una respuesta inflamatoria a infecciónquesedesarrollademanerarápida yprogresiva en la fascia. Esta respuesta inflamatoria a nivel de la fascia genera trombosis de los vasos dérmicos, lo que causa necrosis del tejido subcutáneo que se encuentra sobre la infección. Se clasifican en 2 tipos según la bacteriologíadelosmismos.Lafasceitis necrotizantetipo I ocurre por infección polimicrobiana teniendo componente aeróbico yanaeróbicoenel 75% de loscasos. Las fascitis necrotizantes tipo II ocurren por infección por Strepto grupo A (en ocaciones asociado a S. Aureus). En el manejo lo principal es identificar los cuadros de fasceitis necrotizante.Ensegundolugar,realizarmanejoquirúrgico precoz,drenartodoslosabscesos ydesbridarlasúlceras. El desbridamiento puede ser mecánico, químico, autolítico (ver apósitos ycuración avanzada), junto con la remoción quirúrgica del tejido necrótico.
  • 41. 42 Bibliografía 1. Calderón W, Heridas y suturas. En: Calderón W. Libro de Cirugía plástica. Ed. Soc. Cír. de Chile, agosto 2001. 2. Artigas R. Clasificación y manejo de las heridas. Parke Davis Chile, Santiago 1979. 3. Vacunación Antirrábica en Humanos. Departamento de vacunas e inmunizaciones, Ministerio de Salud. Chile 2014. 4. Aziz H, Rhee P,Pandit V, Tang A, Gries L, Joseph B. The current concepts in management of animal (dog, cat, snake, scorpion) and human bite wounds: Journal of Trauma and Acute Care Surgery. 2015 Mar;78(3):641–8. 5. Tabaka ME, Quinn JV, Kohn MA, Polevoi SK. Predictors of infection from dog bite wounds: which patients may benefit from prophylactic antibiotics? Emerg med J 2015; 0: 1-4. 6. May AK. Skin and soft tissue infections. Surg Clin North Am. Apr 2009; 89(2):403-20, viii. 7. Napolitano LM. Severe soft tissue infections. Infect Dis Clin North Am. Sep 2009; 23(3):571-91. 8. Stevens DL, Bisno AL, Chambers HF, Everett ED, Dellinger P,Goldstein EJ. Practice guidelines for the diagnosis and management of skin and soft-tissue infections. Clin Infect Dis. Nov 15 2005;41(10):1373-406.
  • 42. 43 1.5 Curación de heridas y apósitos Quinteros JP, Arteaga MJ, Fontbona M. Introducción El manejo de las heridas requiere que el profesional de la salud conozca la fisiología y fisiopatología de la cicatrización de heridas que describimos previamente; de esta forma, se puede realizar un manejo con base científica. La curación se puede definir como el conjunto de técnicas que favorecen la aparición de cicatrización en una herida, hasta lograr su cierre. La curación puede tener como objetivo, utilizada sola o con otra modalidad de tratamiento, el cierre completo de la herida. En segunda instancia, las curaciones permiten la preparación de la herida para cirugía, teniendo un rol como terapia adyuvante. Tipos de Curaciones De acuerdo con el tipo de apósitos y el abordaje diagnóstico y terapéutico que se hace a las heridas, podemos identificar dos tipos de curaciones: tradicional y avanzada. La curación tradicional (CT) es aquella se realiza en ambiente seco,usamaterialesdebajacapacidaddeabsorciónyconalta capacidaddedesecación. Estosmateriales sonpasivos, enel sentido de que no interfieren con el proceso de cicatrización y, peor aún, lo lentifican y complican. Varios estudios han demostrado que estosmateriales disminuyen lacicatrización, aumentan los costos, aumentan la incidencia de infección y producen más dolor. Se caracterizan por ser de frecuencia diaria, usar tópicos (antisépticos, antimicrobianos) y ser dolorosas, ya que en cada evento de curación se produce remoción cruenta de tejido sano. La curación avanzada se basa en mantener un ambiente húmedo fisiológico, en lo posible no usan tópicos, utiliza apósitos de alta tecnología para estimular el microambiente de la herida y de esta forma favorecer la cicatrización. Su frecuencia va a depender de las condiciones locales de la herida. La curación avanzada de heridas, al ser más espaciada y utilizar apósitos de alta tecnología y fáciles de aplicar, ha demostradosermáscómodaparaelpacienteyelprestadorde salud.Constituyeunaformadetratamientoavaladaporbuena evidencia. Y adicionalmente, otros estudios han demostrado su mayorcosto-efectividadenrelaciónconlacuracióntradicional, por tanto, mayor capacidad de ahorro. Actualmente, la forma ideal de manejar heridas crónicas es por medio de la curación avanzada. En el manejo de heridas agudas, se intenta un cierre primario, ya sea con suturas u otros medios de afrontamiento (steri strip, histoacryl). En estos casos se utilizan apósitos tradicionales (parte de la CT) comoproteccióndelasuturaantelacontaminaciónambiental. Cuando las heridas no permiten cierre primario, por ejemplo, heridas abrasivas, actualmente se utilizan los principios de la curación avanzada para su manejo. Se utilizan apósitos tradicionales y activos avanzados de bajos costo, intentando dejar una interfaz que evite la adhesión del apósito tradicional a la herida.
  • 43. 44 Apósitos Son el conjunto de materiales de los que disponemos para favorecer el proceso de cicatrización. Existen varios tipos y clasificaciones, pero para fines prácticos los diferenciaremos según su localización y modo de acción. Segúnsulocalizaciónseclasificanenprimariosysecundarios. El apósito primario es aquel que está en contacto directo con la herida y el secundario, aquel que protege y sostiene al apósito primario. Según su modo de acción, los apósitos se clasifican en pasivos y activos. Apósitos pasivos Son aquellos apósitos que no interactúan con la herida, tienen poca capacidad de absorción y alta capacidad de desecación, y favorecen la infección de no ser cambiados de forma periódica. Son los utilizados en la CT, constituidos de materialdeorigennaturalquedestruyeeltejidodegranulación. El más representativo de este grupo es la gasa tejida o prensada. Dentro de los apósitos pasivos se encuentran: Gasa • Tejida: hecha de material natural (algodón) de alta adherencia,malaabsorciónyaltoenresiduos.Esútilpara rellenar cavidades. Su duración máxima es de 24 horas. • Prensada: conformada por material sintético (celulosa más poliéster), menor adherencia y mejor absorción que lagasatejida.Esútilparaprotegereltejidodegranulación. Su duración máxima es de 48 horas. Apósito tradicional Algodón envuelto en gasa (tejida o prensada). Posee alta adherenciayabsorciónheterogénea.Eselapósitosecundario por excelencia. Espumas Moltopren o poliuretano. Posee alta adherencia, es útil en lesiones exudativas abundantes, pero por un tiempo menor a 48 horas. Siempre requiere de un apósito secundario. Apósitos activos Son los utilizados en la curación avanzada y son activos porque interactúan con la herida favoreciendo su proceso de cicatrización. Dentro de este grupo encontramos los siguientes: Tull o mallas de contacto Son gasas tejidas o prensadas de malla ancha embebidas en petrolato. No se adhiere, protege el tejido de granulación y es adaptable. Se debe curar cada 48 horas si es de gasa tejida y cada 72 horas si es de gasa prensada, porque se evapora el petrolato y solo queda el efecto de la gasa. Ejemplos de este tipo de apósito son: Jelonet®, Parafinet® de gasa tejida y Adaptic® de gasa prensada. Apósitos transparentes Son apósitos poliméricos, transparentes, permeables al vapor de agua, al oxígeno y al dióxido de carbono, pero impermeable al agua y las bacterias. Los hay adhesivos y no adhesivos. Protegen el tejido de granulación y desbridan el tejido necrótico. Deben ser usados con extrema precaución en heridas infectadas y no deberían usarse en lesiones con exudado abundante, ya que son muy oclusivos. Por ser transparentes, permiten visualizar fácilmente la herida,pero no tienen capacidad de absorción. Ejemplosdeestetipodeapósitosson:Bioclusive®(Johnson& Johnson Medical, Arlington, TX), Op-Site® (Smith & Nephew, Largo, FL), Tegaderm® (3M, Healthcare, St. Paul, MN, New York, NY) y Mefilm® (Molnlycke Health Care, Gotenberg, Sweden). Espumas hidrofílicas Están compuestas por hojas de poliuretano polimerizadas, no adherentes y permeables a gases, con gran capacidad de absorción por lo que manejan bien el exudado moderado y abundante. Tienen la propiedad de expandirse y de acomodarse a la morfología de diferentes tipos de heridas, loquelashacemuydinámicas.Puedenserusadas enheridas infectadas . Como ejemplos están: Lyofoam® (Convatec, Princeton, NJ), Allevyn® (Smith & Nephew, Largo, FL), Curafoam® (Kendall Company, Mansfield, MA), Biopatch® (Johnson & Johnson Medical, Arlington, TX), Polymem® rosado y negro (Ferris Co.) y PermaFoam® (Hatmann-Uci Pharma). Hidrogeles Son polímeros de almidón, como el óxido de polietileno o los polímeros de carboximetilcelulosa, más 80% de agua. Están disponibles como gel o láminas; son útiles para desbridamiento autolítico, heridas infectadas ypara favorecer la epitelización. No absorben exudado. Se recomienda apósito transparente como apósito secundario y curar cada 48 horas, en caso de infección realizar curaciones cada 24 horas. Algunos ejemplos son: Vigilon® (Bard, Murria Hill, NJ), Nu- gel® (Johnson & Johnson Medical, Arlington, TX) y Tegagel® (3M, Healthcare, St. Paul, MN, New York, NY).
  • 44. 45 Hidrocoloides Están hechos de carboximetilcelulosa, gelatina y pectinas. Se encuentran disponibles como pastas, polvos o láminas adhesivas. Al contacto con la herida, el apósito se gelifica, lo que favorece el ambiente húmedo en la herida y permite la absorción del exudado; son impermeables al agua y a las bacterias, aunque permiten la salida del vapor de agua desde la herida al medio exterior. No deben ser usados en infección por ser muy oclusivos. Producen una interfase gelatinosa con la herida, que es de mal olor y no debe ser confundida con infección. Ejemplos de este tipo de apósitos son: Duoderm® (Convatec, Princeton, NJ), Nu Derm® (Johnson & Johnson Medical, Arlington, NJ), Comfeel® (Coloplast, Holtedam, Dinamarca) y Cutinova® (Smith & Nephew, Largo, FL), entre otros. Alginatos Están compuestos por fibras polisacáridas derivadas de las algas marinas cafés, con gran capacidad de absorción (hasta 20 veces su peso en agua). Están indicadas en heridas con exudado abundante, con o sin infección, y también poseen efecto hemostático por contener calcio. No deben ser usados en heridas con poco exudado debido al alto riesgo de desecarlas. Algunos ejemplos son: Algiderm (Bard, Murria Hill, NJ), Algosteril (Johnson & Johnson Medical, Arlington, TX), Nu Derm Alginato (Johnson & Johnson Medical, Arlington, NJ); Kaltostat (Convatec, Princeton, NJ) y Curasorb (Kendall Company, Mansfield, MA). Apósitos mixtos Los apósitos mixtos son coberturas con diferentes niveles de permeabilidad que combinan las características de distintos tipos de apósitos. En este grupo se describen los siguientes apósitos: Antimicrobianos Están diseñados para control de infección y carga bacteriana. Son apósitos quese presentancomotelasdecarbónactivado impregnadas en sales de plata, dentro de una funda de nailon poroso, como elActisorb Plus® (Johnson & Johnson Medical, Arlington, TX), o como películas no adherentes con plata, como Atrauman Ag® (Hartmann-UciPharma Col.), o como apósitos de carboximetilcelulosa con plata, comoAquacellAg ( Convatec, Princeton, NJ). Se utiliza la plata porque posee ciertas características especiales que la hacen muy útil en el manejo de heridas infectadas, algunas de estas son: acción bactericida de amplio espectro, viricida, fungicida, propiedades antiinflamatorias y neutraliza el mal olor. Hidropolímeros Son polímeros que poseen gran capacidad de absorción, están hechos de moléculas de poliuretano que se expanden al atrapar el exudado y de una cubierta impermeable de polivinilo, que forma una barrera protectora. Son ideales para el manejo ambulatorio de heridas grandes y muy exudativas. Ejemplos de estos apósitos son: Tiell® y Tiell Plus® (Johnson & Johnson Medical, Arlington, TX). Apósitos de control de metaloproteinasas Las metaloproteinasas son enzimas involucradas en muchos procesos patológicos. Estas enzimas se encuentran anormalmenteelevadasenlospacientesconheridascrónicas y estancan el proceso de cicatrización, manteniendo las heridas perpetuamente inflamadas. Existen apósitos para disminuir estas enzimas y estimular el proceso de cicatrización. Como ejemplo está el Promogram® (Johnson & Johnson Medical), compuesto de colágeno y celulosa oxidada que, al contacto con el exudado de la herida, se convierte en gel; las metaloproteinasas son inhibidas, se adhieren al apósito y permiten que los factores de crecimiento actúen. Terapias Complementarias Además de los apósitos descritos, actualmente se dispone de terapias que cumplen con un nivel de evidencia aceptable para recomendar su uso en la práctica clínica, dentro de las cuales encontramos terapia con uso de factores de crecimiento y curación a presión negativa, siendo esta última una de las más importantes en nuestro medio. Curación a Presión Negativa El primer artículo que describió el uso de dispositivo de presión negativa para el manejo de heridas en pacientes se publicó hace 13 años. Su mecanismo de acción se basa en el uso de presión negativa o subatmosférica para el manejo de heridas complejas, que estimula la aparición del tejido de granulación y controla el exudado. La presión negativa sobre las heridas produce aumento de la mitosis y angiogénesis, lo que permite la contracción de la herida y la aparición de tejido de granulación. El sistema VAC (Vacuum-assisted closure) consta de un conjunto de espumas de poliuretano con características especiales yun sistema dereservorio que va conectado a una máquina de succión que regula las presiones. Dentro de sus indicaciones destacan: heridas agudas, crónicas, traumáticas,
  • 45. 46 dehiscentes, quemaduras de espesor parcial (en general no), colgajos, úlceras e injertos. Su uso está contraindicado en: heridas con exposición de vasos sanguíneos, neoplasia expuesta, osteomielitis, sobre tejido necrótico y en fístulas no exploradas. Bibliografía 1. Andrade P,Sepúlveda S, González J. Curación avanzada de heridas. Revista Chilena de Cirugía. 2004; 56: 396-403 2. MINSAL: Programa de Salud del Adulto. Serie de Guías Clínicas. Manejo y tratamiento de las Heridas y Ulceras. Guía 4, 2000. 3. George Y,Herman U. Antibacterial properties of silver. Am J Infect Dis. 1998; 20; 195-200. 4. L. C. Argenta and M. J. Morykwas, “Vacuum-assisted closure: a new method for wound control and treatment: clinical experience,” Annals of Plastic Surgery, vol. 38, N.° 6, pp. 563–577, 1997. 5. Vranck M, Slama N, Preuss S. Wet wound healing. Plast Reconstruct Surg. 2002; 110: 1680. 6. Thorne C. Techniques and principles in plastic surgery. En Thorne C, editor en jefe. Grabb and Smiths’s Plastic Surgery séptima edición. Estados Unidos de America: Lippincott Williams & Wilkins; 2014, pp. 61-126.
  • 46. 47 1.6 Suturas Quinteros JP, Arteaga MJ, Fontbona M. Introducción Dentro de las alternativas que existen para facilitar el cierre de las heridas está la utilización de materiales de sutura. Podemos definir sutura como cualquier material que utilicemos para favorecer la cicatrización de una herida mediante la aproximación de los bordes de la misma, manteniéndolos unidos y disminuyendo la tensión entre estos. Es asíque del puntode vista teórico elmaterialidealdesutura debería contar con las siguientes características: • Estéril. • Elevada resistencia a la tracción. • Flexible. • Pequeño calibre y monofilamento. • Atraumático. • Inerte (no debe generar respuesta alérgica ni ser tóxico). • Mantener su fuerza tensil el tiempo suficiente para que el tejido cicatrice. • Absorbible por el organismo. • Seguridad en los nudos. • Que entregue resultados predecibles. La fuerza tensil consiste en la capacidad de la sutura para mantener los tejidos unidos, es una medida decreciente y se expresa en porcentaje de fuerza y en días. La absorción de una sutura consiste en el tiempo (días) en que desaparece completamente el material de sutura, este proceso se basa en dos fenómenos, hidrólisis o proteólisis. Las propiedades de cicatrización varían entre dos tejidos y es necesario conocerlas para estimar el tipo de sutura que debemos utilizar: Tejido Tiempo de cicatrización (días) Piel 5-7 Mucosa 5-7 Tejido subcutáneo 7-14 Peritoneo 7-14 Fascia 14-28
  • 47. 48 Factores que alteran la cicatrización: Factores del Paciente Factores de la cirugía Edad y peso Tipo de Tejido Estado nutricional Longitud y dirección de la incisión Deshidratación Técnica de disección Irrigación de tejidos Manipulación de tejidos y hemostasia Respuesta inmunológica del paciente Respuesta tisular del tejido Enfermedades crónicas Técnica de sutura Neoplasias Tensión de la herida Clasificación de materiales de sutura • Según su origen: naturales y sintéticos • Según su permanencia en los tejidos: absorbibles y no absorbibles. • Según la forma en que está constituida la sutura: monofilamento y multifilamento. Materiales de sutura naturales absorbibles: La principal fuente de estos materiales es la serosa intestinal de bovino. El nombre comercial más utilizado y el mejor exponente es el catgut.Al poseer proteínas exógenas genera gran respuesta inflamatoria. El catgut simple mantiene su fuerza tensil de 7-14 días y se reabsorbe en un periodo de 70 días. La adición de partículas de cromo prolonga la fuerza tensil (hasta 28 días), sin embargo, la respuesta inflamatoria del organismo tiende a generar tejido granulatorio en relación con la sutura. Materiales de sutura naturales no absorbibles: Entran en esta categoría el algodón, lino, seda y acero. Tanto el lino como el algodón ya no son utilizados y son parte de la historia, esto principalmente por la gran reacción inflamatoria y granulatoria que generaban en los tejidos. La seda es la única que aún permanece en uso, no genera tanta respuesta inflamatoria como el lino o algodón, pero también tiene el riesgo de desarrollar granulomas. Estas fibras vegetales se componen de suturas multifilamento, lo cual facilita que las bacterias se alojen entre los filamentos. El acero por origen también es natural, pero a diferencia de las fibras vegetales, este es inerte y posee inmensa fuerza tensil, su uso está limitado a la ortopedia y el cierre de esternotomías (es decir, en la manipulación de tejido óseo). Materiales de sutura sintéticos absorbibles: Dentro de los multifilamentos el ejemplo más común es el ácido poliglactínico (Vicryl®). Este tipo de sutura se acerca a las características de la sutura ideal, posee gran fuerza tensil (que se mantiene hasta por 30 días), no genera granulomas y tiene mínima reacción inflamatoria. Sin embargo, el hecho de ser multifilamento genera un efecto de “sierra” al momento del pasar por los tejidos. Tiene absorción completa de 90 a 120 días. Dentro de los monofilamentos existen diferentes productos como la polideoxanona (PDS®), el poligliconato (Maxon®) y la poliglecaprona (Monocryl). Estos materiales puedenmantenersuresistenciatensil cercanaa30%pasado los 30 días. Los monofilamentos tienen mayor suavidad en su paso por tejidos, pero son más complejos de manejar, pues el material presenta memoria (excepto elMonocryl®). Materiales de sutura sintéticos no absorbibles: Tienen una altísima resistencia tensil, suavidad en su manejo y mínima reacción inflamatoria tisular asociada. Los poliéster (Ethibond®) son multifilamentos por lo que tienen la desventaja de poseer capilaridad y ser colonizados. El polipropileno posee gran resistencia y mínima reacción tisular, incluso en presencia de infección. Por último, están las poliamidas (Nylon®), que poseen gran capacidad de memoria, pero son inertes y tienen mínima reacción tisular.
  • 48. 49 CARACTERÍSTICAS MULTIFILAMENTO MONOFILAMENTO Naturales absorbibles Catgut - Naturales no absorbibles Lino, algodón, seda Acero Sintéticos absorbibles Ac. poliglactinico, Ac. Poliglicólico. Polideoxanona, poligliconato, poliglecaprona. Sintéticos no absorbibles Poliester Polipropileno, poliamidas. Nomeclatura de medidas de sutura y agujas Los materiales de suturas tienen diferentes tamaños según el tejido o uso que se les quiera dar. El sistema de nomenclatura va desde el 7 hasta el 11-0, siendo el 7 el más grueso descendiendo hasta el 0, y luego los números van incrementando nuevamente, pero aso-ciados a un cero (mientrasmayorelnúmerodecerosmásdelgadaeslasutura). Como referencia un cabello humano tiene un diámetro de 0.1mm y equivale a una sutura 7-0. Agujas: en la actualidad las agujas vienen con la sutura incorporada, de esta forma sus partes son la cabeza (donde se une la sutura), el cuerpo y la punta. La punta, en líneas generales, se puede clasificar según su forma en el corte trasversal, pudiendo ser traumáticas o atraumáticas. Existen otras variedades que son subclasificaciones de esta separación. El cuerpo posee un radio, diámetro y longitud, haciendo el símil con partes de una circunferencia. De esta forma existen curvaturas de ¼, 3/8, ½, y 5/8 de un círculo. Uso del material de sutura Son múltiples los factores por considerar en la selección del material de sutura, tanto de la cirugía como del paciente. Hay dos factores que deben ser considerados dentro de la toma de decisión: Factor cirujano: siendo este el operador y el ejecutor de una sutura es importante que el cirujano tenga un conocimiento de los tiempos de cicatrización de los tejidos y de las pro- piedades de las suturas antes de tomar la decisión. De esta forma, se generan preferen-cias personales que van de la mano con la experiencia quirúrgica. Factor económico: distintos centros de salud tienen diferentes presupuestosyaccesoamaterialesdesutura,locualreducirá o ampliará la gama de opciones que el cirujano tenga a su disposición al momento de realizar una sutura. Es asícomo,porejemplo,paraunmismotipodeherida enpiel podemos considerar una sutura reabsorbible monofilamento, pero también podemos usar un material no reabsorbi-ble monofilamento, teniendo en consideración el retiro posterior delmaterial.Porestasra-zonesesquenoexistenindicaciones absolutas para una sutura y un tejido en particular. Lo que si existen son lineamientos generales que se pueden tener en consideración cuando se elija el material de sutura.
  • 49. 50 TEJIDO CARACTERÍSTICAS MATERIAL DE SUTURA Epidermis Delgada, densa, firme, depende del cierre de la dermis. Monofilamento absorbible o no absorbible. Dermis Vascularizada, tejido denso, lenta recuperación de fuerza tensil. Monofilamento absorbible o multifilamento absorbible incoloro Tejido subcutáneo Friable, pobremente irrigado. Cierre de fascia superficial (scarpa). Multifilamento absorbible. Fascia muscular Denso, fibroso conformando láminas de tejido. Fuerza tensil 40% (mes) 65%(3 meses) 80% (9 meses). Monofilamento absorbible grueso, multifilamento absorbible. Mo- nofilamento no absorbible. Puntos de Sutura Punto simple Con las pinzas de disección se eleva uno de los bordes de la herida, mientras que con el portaagujas se introduce la aguja desde el exterior hacia el interior (de dermis a hipoder-mis). Se tira del extremo del hilo con la aguja hasta dejar un cabo distal corto. En el otro borde se realiza la misma operación, pero pasando el hilo desde el interior al exterior. Los puntos deben ponerse a unos 4 o 5 milímetros del borde de la herida y se deben espaciar entre ellos unos 6 a 8 milímetros. Punto Simple
  • 50. 51 Punto intradérmico Se trata de unir la piel (dermis), sin sacar el hilo al exterior. Desde la profundidad de la herida, se introduce la aguja para que salga por la dermis, debajo de la superficie cutánea. Se vuelve a introducir por el otro labio de la herida, pero en esta ocasión desde arriba hacia abajo. Si utilizamos hilo reabsorbible, se anuda dejando los nudos por debajo de la hipodermis. Cuando utilizamos hilo no absorbible (monofilamento 2-0 o 3-0), los extremos que-dan por fuera de la piel. Cuando se vaya a retirar la sutura, se corta uno de los cabos a nivel de la piel y se saca tirando del otro extremo. Punto Intradérmico Punto Donati Se pasa la aguja por la herida, de un extremo al otro a unos 0,5 cm del borde. A otros 0,5 cm del punto de salida, se vuelve a introducir la aguja para pasar de nuevo a través de to-da la herida hasta el punto origen, pero de forma más profunda. Se mantiene la misma dirección en los cuatro puntos. Punto Donati
  • 51. 52 Sutura de esquina Se introduce la aguja a través de la dermis por el lado contrario al colgajo, a unos 0,5 cm de la esquina de la herida. La aguja se lleva a la punta del colgajo por la hipodermis y se atraviesa la herida hasta salir por la dermis del lado opuesto al punto de entrada. Así, los dos cabos salen al exterior de la herida por la zona opuesta al colgajo, y es aquí donde se realiza el nudo. En el resto de la herida se usan los puntos discontinuos habituales. Punto deEsquina
  • 52. 53 Nudo Quirúrgico Cuadrado Nudo quirúrgico simple con las manos Primera alternativa (anudando con mano derecha): 1. Se sostiene el hilo corto entre el pulgar y el dedo medio quedando el hilo sobre la cara lateral del índice (mano derecha). 2. Colocar el hilo largo (mano izquierda) en la cara medial del hilo que se sostiene con la mano derecha.
  • 53. 54 3. Flectar el índice derecho enganchando el hilo largo por palmar. Extensión parcial del índice derecho para que su cara medial encuentre el hilo corto. Extensión completa del índice derecho, liberando el hilo corto para sujetarlo entre el dedo índice y medio. 4. Ajustar el nudo traccionado los hilos y conduciendo el nudo con el índice.
  • 54. 55 Segunda alternativa (anudando con mano derecha): 1. Palma derecha hacia arriba, sosteniendo el hilo corto entre el índice y el pulgar. 2. Posicionar el hilo largo sobre la cara lateral del dedo medio derecho cruzando el hilo largo por sobre el corto a nivel de los dedos anular y meñique. Flexionar el dedo medio derecho para enganchar el hilo largo.
  • 55. 56 3. Continuar la flexión del dedo medio derecho para enganchar el hilo corto con el dorso del dedo. Extensión del dedo medio derecho asegurando el hilo corto entre el dedo medio y anular derecho. Se suelta el hilo corto desde el pulgar e índice. 4. Tracción de los hilos.
  • 56. 57 Nudo quirúrgico simple con portabisturí Al hacer un nudo con el porta, se pasa el punto dejando el cabo distal corto. Soltamos la aguja y cogemos el extremo del hilo con la aguja, con la mano izquierda (primera imagen). Colocamos el porta encima del hilo (extremo con aguja) y rodeamos el porta con el hilo dos veces. Se toma el cabo distal del hilo con la punta del porta y pasamos el extremo del hilo a través del lazo para hacer la primera lazada. Se aprieta la lazada cruzando las manos (segunda imagen). A continuación, se repite otra lazada (rodeando el porta con el hilo en dirección opuesta al nudo previo) con el porta sobre el mismo extremo, pero se aprieta sin cruzar las manos y así sucesivamente. Por lo general son 3 veces en total que se realiza la maniobra.
  • 57. 58 Bibliografía 1. Rappaport J. Materiales de sutura. En Burdiles P.Fundamentos del cuidado quirúrgico. Santiago, Chile: Mediterráneo; 2011, pp. 176-190. 2. Buck D. Wound Care. En Thorne C, editor en jefe. Grabb and Smiths’s Plastic Surgery. Séptima edicion. Estados Unidos de América: Lippincott Williams & Wilkins; 2014, pp. 171-222. 3. Trott A. Instruments and suture materials. En Trott A. Wounds and Lascerations Emergenct Care and Closure. Tercera edición Editrial Estados Unidos de América: Elservier Mosby; 2005, pp. 93-106. 4. Catálogo de suturas reabsorbibles de la empresa Ethicon de Johnson & Johnson disponible en: http://www.ecatalog.ethicon.com/ sutures-absorbable. 5. Catálogo de suturas no absorbibles de la empresa Ethicon de Johnson & Johnson disponible en: http://www.ecatalog.ethicon. com/sutures-non-absorbable. 6. Trott A. Basic laceration repair: Principles and Techniques. En Trott A. Wounds and Lascerations Emergenct Care and Closure. Tercera edición Editrial Estados Unidos de América: Elservier Mosby; 2005, pp. 119-134. 7. Giddings F. One-Handed Square Knot. En Giddings F. Surgical Knots and Suturing Techniques. Segunda edición. Fort Collins Colorado: Giddings Studio Publishing; 2002, pp. 7-12.
  • 58. 59 1.7 AbordajesQuirúrgicos Werner K, Arteaga MJ, Devaud N. La elección de la vía de abordaje en cualquier cirugía es fundamental para la adecuada exposición del campo quirúrgico que permita asegurar el control total del procedimiento realizado logrando el éxito de la cirugía y un posoperatorio favorable. Elabordajedebeconsiderarlapatología,latécnicaquirúrgica, la exposición y comodidad del cirujano. Abordajes Torácicos ANATOMÍA DE LA PARED TORÁCICA La pared torácica está formada por la parrilla costal, los músculos intercostales, fascias, tejido subcutáneo y piel. Posee una forma abovedada que proporciona rigidez y protección a los órganos intratorácicos. La caja torácica incluye 12 pares de costillas y cartílagos asociados, 12 vértebras torácicas y el esternón. Los espacios intercostales son aquellos que separan las costillas entre sí y se denominan según la costilla que forma el borde superior del espacio. Estos están ocupados por músculos y el paquete vasculonervioso dispuesto adyacente al borde inferior de las costillas. Losmúsculosdelaparedtorácicason:pectoralmayor,pectoral menor, serratos, elevadores de las costillas, intercostales, subcostales y transverso del tórax. En cuanto a la inervación, la pared torácica posee 12 nervios espinalestorácicosquesedividenenramosanterioryposterior. Los anteriores de T1-T11 forman los nervios intercostales y el ramo de T12 el nervio subcostal. Los ramos posteriores van al dorso. Porúltimo,lairrigaciónarterialdelaparedtorácicaprovienede laaortatorácicamediantelasarteriasintercostalesposteriores y subcostal, de la subclavia por medio de la torácica interna (mamaria interna) y de la arteria axilar a través de la torácica superior y lateral. TORACOTOMÍAS Las toracotomías son incisiones utilizadas para acceder a los órganos torácicos. Una incisión adecuada provee exposición satisfactoria, mientras que minimiza el daño de costillas, cartílago, músculos y nervios intercostales. Las toracotomías son procedimientos dolorosos, por lo que es necesario considerar analgesia perioperatoria 8,10,11. El dolor posoperatorio, además del acto quirúrgico asociadoa la toracotomía, produce un fenómeno restrictivo respiratorio, locualpuedeconduciracomplicacionesgravesycondicionar, por tanto, la recuperación del paciente. Es por ello que en la planificación de una cirugía a través de una toracotomía debe incluirse pruebas respiratorias funcionales como la espirometría.
  • 59. 60 • Incisión anterior: Provee acceso ilimitado para el hilio ipislateral (10). Se usa ocasionalmente para acceder al pericardio, biopsia pulmonar de lobos inferiores. El paciente se pone en posición supina con elevación en el lado que será intervenido. Se realiza una incisión inframamaria desde el borde del esternón hasta la línea axilar anterior para ingresar al tórax por el cuarto o quinto espacio intercostal. El pectoral mayor es dividido hacia superior de la incisión para prevenir solapamiento de las suturas. Es necesario tomar en cuenta la cercanía de la arteria mamaria interna con el esternón, para evitar sangrado. El pulmón ipsilateral debe ser desinflado antes de ingresar al tórax 9,10,11. • Incisión posterolateral: Es utilizada en cirugía de pulmón y mediastino, en el lado izquierdo es usada para procedimientos de aorta descendiente y en el lado derecho ofrece acceso a tráquea intratorácica y esófago alto y medio. La incisión es de gran tamaño, comenzando por posterior en el borde inferior de la escápula hasta el surco mamario por anterior. Es necesario movilizar el latissmus dorsi hacia inferior para una recuperación funcional máxima. La división intercostal es amplia desde anterior a posterior. Es posible dejar el serrato anterior intacto,alretraerlohaciaarribayadelante.Paraaumentar la exposición, es posible retraer un segmento corto de costilla. Complicaciones:ademásdeneumotórax,lascomplicacionesproducidasporlastoracotomíasincluyen:infección,hemorragia y falla respiratoria. El dolor posoperatorio es común y puede ser intenso, llegando a requerir opioides, y puede interferir con la recuperación de la función respiratoria9.
  • 60. 61 Abordajes Abdominales ANATOMÍA DE LA PARED ABDOMINAL Límites • Superior: proceso xifoides y reborde costal de la 7.a a 10.a costillas. • Inferior: borde superior de huesos pélvicos. Estructuras de la pared • Piel. • Tejido subcutáneo (fascia de Scarpa). • Músculos. • Aponeurosis. • Fascia transversa. • Tejido preperitoneal. • Peritoneo. Músculos • Recto abdominal. • Oblicuo externo. • Oblicuo interno. • Transverso abdominal. • Piramidal*.
  • 61. 62 Anatomía de la pared abdominal
  • 62. 63 Inervación: Tanto la piel como los músculos de la pared abdominal anterior están inervados por los nervios toracoabdominalesdeT7-T12yL1.DeT7aT11corresponden a nervios intercostales, T12 corresponde al nervio subcostal, y L1 se expresa mediante los nervios iliohipogástrico y nervio ilioinguinal. Irrigación: • Superficial: Arteria musculofrénica por superior; arteria epigástrica superficial y arteria circunfleja ilíaca superficial por inferior. • Profunda: Arteria epigástrica superior, arterias intercostales 10 y 11 por lateral, y arterias epigástrica inferior y circunfleja ilíaca profunda por inferior. Reparos por considerar: • Línea alba: Es la fusión medial de la vaina superficial y profunda del musculo recto abdominal. Esta vaina se compone de las aponeurosis de los músculos oblicuo externo, oblicuo interno y transverso abdominal. Va desde el proceso xifoides hasta la sínfisis púbica. • Línea semilunar: Límite músculo aponeurótico del músculo transverso. Posee una forma curva cóncava hacia adentro. Inervación: Tanto la piel como los músculos de la pared abdominal anterior están inervados por los nervios toracoabdominalesdeT7-T12yL1.DeT7aT11corresponden Es posible extender la incisión hasta el proceso xifoides y el pubis para aumentar la exposición de la cavidad abdominal. La correcta ubicación de esta incisión permite su uso para cualquier cirugía intraabdominal. Una de sus ventajas frente a la incisión de línea media es la menor incidencia de hernias o dehiscencia. Sus mayores desventajas son que requiere mayor tiempo para su realización y presenta mayor riesgo de daño de nervios y vasos sanguíneos. • Pararecto(incisióndeBattle):Serealizaunaincisiónen el borde lateral del recto, el cual es retraído lateralmente. Estaincisiónesdeusoinfrecuenteparaapendicectomíay drenajesdeabscesos pélvicos. Su usoes limitado porque causa denervación del recto, resultando en parálisis y, finalmente, en atrofia muscular. La extensión de esta incisiónnodebesermásdedosdermatomosparaprevenir debilidad de la pared abdominal. LAPAROTOMÍAS Verticales: • Línea media: Provee un acceso rápido y simple a la cavidad abdominal, incluido el retroperitoneo. En esta ubicación solo hay ramas terminales de vasos y nervios, por lo cual se minimiza el riesgo de hemorragia yde lesión nerviosa5. Se realiza una incisión en la línea media, que anatómicamente corresponde a la línea alba, a la altura requerida según el sitio que se quiera intervenir. Se debe atravesar piel, tejido subcutáneo, línea alba, grasa periperitoneal y peritoneo. A nivel supraumbilical da acceso a hiato esofágico, esófago abdominal, nervio vago, estómago, duodeno, vesícula biliar, páncreas y bazo. A nivel infraumbilical provee buena exposición para colon sigmoides, recto y órganos pélvicos. Una de sus mayores ventajas es que se puede extender tanto hacia arriba como hacia abajo para mayor exposición. • Paramediana: Es una incisión vertical a 2,5-4 cm de la línea media. Se debe atravesar piel, grasa subcutánea, lámina anterior de la vaina de los rectos, luego se divulsiona el recto lateral y, finalmente, se atraviesa la lámina posterior de la vaina de los rectos y el peritoneo. Laparotomías verticales
  • 63. 64 Transversas: Son incisiones en sentido transverso al abdomen y se clasifican según su ubicación respecto al ombligo: supra o infraumbilical. La incisión atraviesa piel, tejido subcutáneo, capa muscular (que es variable según el sitio operatorio), grasa periperitoneal y peritoneo. Su tamaño y ubicación dependendelprocedimientoporrealizar.Tienencomoventaja la posibilidad de extenderse o agregarse una incisión vertical para mejor exposición de la cavidad. • Pfannenstiel: Generalmente, se usa para procedimientos ginecológicos y en hombres para procedimientos urológicos. Se realiza una incisión transversa que comienza en las crestas interespinosas, con su centro a 5 cm de la sínfisis del pubis. Se atraviesa piel, tejido subcutáneo, lámina anterior de vaina de los rectos, se divulsiona el recto abdominal hacia lateral y el peritoneo es abierto verticalmente en la línea media, siempre res- petando la vejiga. La exposición es limitada a la pelvis, por lo que no debe usarse esta incisión cuando podría ser necesario un procedimiento fuera de ella. • Rockey-Davis: Usada principalmente para apendicectomías o cecostomías con un resultado más estético que la incisión de Mc. Burney. Se toma como referencia el punto de Mc Burney, unión entre 1/3 lateral y 2/3 mediales de una línea trazada entre el ombligo y la cresta ilíaca superior. Se escinde de forma transversa la piel, tejido subcutáneo y la aponeurosis del músculo oblicuoexterno.Losmúsculosoblicuointernoytransverso son separados en dirección de sus fibras. Finalmente, se abrelafasciatransversayelperitoneosegúnlaexposición necesaria para realizar el procedimiento. Laparotomías transversas
  • 64. 65 Oblicuas: • Mc Burney’s: Es una incisión oblicua localizada en el punto de Mc Burney. Se atraviesa piel, tejido subcutáneo, luego se separan las fibras de los músculos oblicuo externo,oblicuo interno ytransverso abdominal. Lafascia transversayelperitoneosonescindidosenformaparalela a la incisión. Este abordaje entrega excelente exposición del cuadrante inferior ipsilateral, por lo cual es ideal para apendicectomías. También es posible utilizarla para drenaje de abscesos pélvicos. Es discutido su resultado estético en comparación con la incisión de RockeyDavis. • Subcostal unilateral (Koscher): Su mayor uso es para cirugía vesicular, hepática y biliar en el lado derecho y para esplenectomías en el lado izquierdo. La incisión comienza 2,5-5 cm por debajo del proceso xifoideo y se extiende hacia lateral aproximadamente 2,5 cm bajo el reborde costal. La incisión no debe ser muy cerca del reborde costal para poder reparar hernias que podrían formarse. Se atraviesa la lámina anterior de la vaina de los rectos y se divide el recto abdominal. Los otros músculos son separados lateralmente. Se atraviesa la fascia transversa y, finalmente, el peritoneo. • Subcostal bilateral (Chevron): Permite excelente exposición del hemiabdomen superior, por lo que es práctica para gastrectomías totales, exposición de ambas glándulas adrenales, resecciones hepáticas mayores, cirugías pancreáticas y trasplante hepático. Laparotomías Oblicuas
  • 65. 66 Abordajes Laparoscópico El abordaje laparoscópico es un acceso mínimamente invasivo alacavidadabdominalqueutilizaunlaparoscopio ypequeñas incisiones. Sus principales beneficios son el menor tiempo de recuperación y, por lo tanto, menor estadía hospitalaria, menordolorposoperatorioymejoresresultadosestéticos.Por otra parte, sus limitaciones se fundamentan principalmente en el alto costo y disponibilidad de los equipos. Para su realización se necesitan equipos e instrumentos específicos y un adecuado entrenamiento del cirujano para que su uso sea óptimo, adecuado y eficaz. Pasos para cirugía laparoscópica • Preparación del paciente: ayuno preoperatorio, preparación intestinal de ser necesaria, vejiga vacía, tomando la precaución de que el paciente orine antes del pabellón o mediante una sonda Foley y una sonda nasogástrica para evitar la distensión gástrica. Por último, es fundamental un correcto posicionamiento del paciente y de los equipos para llevar a cabo la cirugía. • Distención del abdomen: el objetivo es crear una cavidad real en el espacio virtual del abdomen. Esto se logra mediante la insuflación controlada de la cavidad abdominal con anhídrido carbónico que separa la pared abdominal y colapsa el intestino. Para esto se utiliza un neumoinsuflador electrónico que inyecta CO2 a una presiónyflujopredeterminado,elcualmantienelapresión intraabdominal (PIA) constante compensando las fugas de CO2. Estos insufladores poseen sensores de PIA que detienen automáticamente el flujo cuando se alcanza la PIA establecida (PIA normal de 5 a 7 mm de Hg; Objetivo de insuflación con CO2 de 12 a 15 mm de Hg). Los principales riesgos de la insuflación de la cavidad abdominal son: aumento de la presión de vía aérea, disminución de la tensión arterial de oxígeno con aumentodelCO2arterial,disminución delretorno venoso (especialmente cuando se excede la presión de la vena cava inferior = 12 mm de Hg), arritmias por hipercapnia, embolia gaseosa y bradicardia por distensión del peritoneo. En cuanto a la elección del gas por inyectar, se prefiere el CO2 por sobre el O2 o N2O por ser 200 veces más difusible, poseer una rápida eliminación a través de los pulmones y no ser combustible. Generalmente, para la insuflación se utiliza la aguja de Veressqueconsisteenunaagujabiseladayfilosade2mm dediámetroqueposeeunsistemaretráctilqueretraelapunta al ejercer presión sobre la pared abdominal. Esto permite disminuir el riesgo de perforación incidental con la aguja. • Acceso a la cavidad abdominal: puede ser abierto o cerrado, este último corresponde a la insuflación de CO2 con aguja de Veress y luego introducir el trocar a ciegas. El acceso abierto consiste en la entrada directa del trocar a la cavidad sin crear neumoperitoneo.LatécnicamásutilizadaesladeHasson. • Visualizacióndelacavidad:serequieredeunafuenteluz (halógenaoxenón),unafibraópticaqueesunconductorde luzformadoporun hazdefibras de vidrio,un laparoscopio (variedad de ángulos: 0°, 30°, 45°), una cámara de video y un monitor. Todos estos elementos permiten transmitir la imagen al cirujano, el cual debe asegurarse de realizar un balance de blancos antes de comenzar la cirugía. • Procedimiento quirúrgico: existen diversos tipos de instrumental laparocópico dependiendo de la cirugía que se realiza. Los más utilizados son: pinzas (Maryland, de agarre etc.), tijeras, ganchos de disección o Hook, clipadoras, cánula de aspiración-irrigación, porta agujas.
  • 66. 67 Usos comunes de cirugía laparoscópica • Colecistectomía (técnica americana): El primer trocar, usualmente de 10 mm se coloca a través del ombligo, aunqueestopuedevariarenpacientesobesosmórbidoso con cirugías abdominales previas.Através de este trocar se inserta un laparoscopio de 10 mm. Se puede utilizar un laparoscopio con un ángulo de 30º para mejorar la visión de la vía biliar. El segundo trocar, de 10 mm, se inserta en el epigastrio sobre la línea media, angulado hacia la vesícula.Estetrocar debecaerenellímiteinferior del hígado. El tercer trocar, de 5 mm, generalmente es colocado2-3cmdebajodelrebordecostalenlalíneamedio clavicular. El cuarto trocar, de 5 mm, tiene una posición variable, pero generalmente es colocado en la línea axilar anterior centímetros por debajo del fondo de la vesícula. Colecistectomía LaparoscópicaAmericana • Colecistectomía (técnica francesa): Esta técnica tiene algunas características que la diferencian de la técnica americana.Laposicióndelpacienteesen“dobleacceso”, el paciente en decúbito dorsal, con las extremidades inferiores en abducción. Esto tiene como finalidad que la posicióndelcirujanoseaentrelasextremidadesinferiores del paciente. El primertrocar,10mm,seubicaenposición umbilical, por donde se introduce el laparoscopio. El segundo trocar, 5 mm, se ubica en flanco derecho, por fuera de la vaina de los rectos a nivel de la línea umbilical. El tercer trocar, 5 mm, se ubica en epigastrio a 1-2 cm del reborde costal, a la derecha de la línea media. El cuarto trocar, 10 mm, se ubica en flaco izquierdo, por fuera de la vaina de los rectos a nivel de la línea umbilical. Colecistectomía Laparoscópica Técnica Francesa
  • 67. 68 • Apendicectomía: Se inserta un trocar de 10 mm a nivel umbilical y luego otros 2 trocares de 5 mm, uno en la región suprapúbica y otro en fosa ilíaca izquierda lateral a la vaina de los rectos. La ubicación de estos últimos puedevariarsegúnlapreferenciadelcirujano.Laposición ideal del paciente es en Trendelenburg y lateralizado a la izquierda. Apendicectomía Laparoscópica
  • 68. 69 Bibliografía 1. Mizell JS. Incision for open abdominal surgery. [Internet]. Waltham, MA.: UpToDate; 2015 [cited 2015 Feb 06]. Available from: UpToDate. 2. Fischer JE, Jones DB, Pomposelli FB, Upchurch GR, Klimberg VS, Schwaitzberg SD, Bland KI. Mastery of Surgery, 6th ed. Philadelphia: Lippincott Williams & Wilkins; 2010. a. Abdominal Wall Incisions and Repair Including Release. Stephen R.T. Evans and Parag Bhanot 148-63. b. Introduction to laparoscopic operations. Shawn T. Tsuda. 847-53. c. Laparoscopic Cholecystectomy, Intraoperative Cholangiography, and Common Bil Duct Exploration. John G. Hunter, Thai H. Pham 1265-1277. d. Laparoscopic Appendectomy. Steve Eubanks and Scott Phillp. 1607-11. 3. Drake RL, Vogl AW, Mitchell AWM. Gray’s Anatomy for Students, 2nded. 4. Grey JE, Mizell JS. Anatomy of the abdominal wall. [Internet]. Waltham, MA.: UpToDate; 2015 [cited 2015 Feb 06]. Available from: UpToDate. 5. Meeks GR, Trenhaile TR. Management of Abdominal Incisions. Female Pelvic Medicine & Reconstructive Surgery. 2002;8(6):295– 300. 6. Brown SR, Tiernan J. Transverse verses midline incisions for abdominal surgery. In: The Cochrane Collaboration, editor. Cochrane Database of Systematic Reviews [Internet]. Chichester, UK: John Wiley & Sons, Ltd; 2005 [cited 2015 Feb 11]. Available from: http://doi.wiley.com/10.1002/14651858.CD005199.pub2 7. Meeks GR, Trenhaile T. Incision decisions: which ones for which procedures? OBG Management [Internet]. 2002 [cited 2015 Feb 9]; Available from: http://hosp.gcnpublishing.com/fileadmin/obg_archive/pdf/1403/1403OBGM_SurgTech.pdf 8. Sepúlveda A, Lizana C: Técnica francesa en colecistectomía laparoscópica. En: Sepúlveda A, Lizana C: Cirugía laparoscópica. 1.a ed. Chile 1993; 133-46. 9. Punjabi PP. Thoracotomy. Surgery (Oxford). 2005;23(11):414–6. 10. Campbell DB. Thoracic Incisions. Operative Techniques in General Surgery. 2008 Jun;10(2):77–86. 11. Barnard S. Thoracic incisions. Surgery - Oxford International Edition. 22(5):105–7. 12. Moore K, Dalley A, Agur A. Moore Anatomía Con orientación clínica. 7a edición. Barcelona, España: Editorial Wolters Kluwer; 2013.
  • 69. 70
  • 70. 71 1.8 Drenajes Quirúrgicos Marín D, Pizarro MJ, Court F. Introducción El drenaje es un dispositivo mediante el cual se busca dar salida y evitar el acúmulo de secreciones desde una cavidad natural o creada posterior a una intervención quirúrgica. Su finalidad es servir como testigo de una posible filtración o simplemente vaciar el contenido y evitar su acumulación y posible complicación como un hematoma, seroma, absce-so, bilioma, urinoma, etc. El uso de drenajes está aprobado en múltiples condiciones médicas y es controversial en otras. Nadie discute la real necesidaddedrenarun neumotórax,hemotóraxounempiema pleural, pero hoy en día dejar drenaje en una colecistectomía resulta muy controvertido, pese a haber sido durante muchos años un procedimiento habitual. El drenaje si bien puede evitar posibles infecciones, también puede ser la puerta de entrada a estas, de tal forma que resulta muy importante el criterio y la experiencia del cirujano en su uso. Una vez producida una infección, el drenaje es la mejor opción de manejo de una colección séptica. Así es como se ha desarrollado la radiología intervencionista, método que buscaevitarlareintervencióndeunpacienteconunacolección séptica mediante colocación de un drenaje guiado bajo visión de TAC, evitando así el daño de estructuras vecinas. Cuando el drenaje se realiza mediante cirugía tradicional existen altas probabilidades de daño no deseado de estructuras vecinas a la zona de lacolección, provocando filtración de anastomosis, sangramiento y fistulas por lesión de órganos en un terreno muy inflamado. Losdrenajesdebencumplir ciertascondicionesqueloshacen seguros: • Blando y de superficie suave, de forma que se deslice sin dificultad evitando el daño en estructuras vecinas al momento de ser retirado. • Buena permeabilidad, para que no se obstruyan. • Inerte, para que no irrite mientras esté presente dentro del cuerpo. • Idealmente radiopaco, para ser controlado mediante imágenes. Indicaciones de uso de Drenaje • Evacuar colecciones de líquidos, gas u otro material en el interior de una cavidad o espacio del cuerpo. • Prevenir la potencial acumulación de líquido o gas u otro material en una cavidad o espacio del cuerpo. • Actuar como testigo en la aparición de una posible fistula ygeneraruntrayectocontroladohaciaelexteriorevitando la acumulación de secreciones en la cavidad o espacio delcuerpodondeestaseproduce(anastomosis).Muchas veces, esto permite el manejo de la fístula y evita una reintervención quirúrgica.
  • 71. 72 Clasificación Se pueden clasificar de muchas formas, sin embargo, el que se usa con mayor frecuencia es el sistema de drenajes abiertos o cerrados. Lo anterior se refiere a si el circuito queda en caída libre a un sistema recolector simple o a un dispositivo cerrado generalmente a presión negativa. La importancia de esta clasificación está en la posibilidad que el drenaje no solo sirva como una puerta de salida, sino que se transforme en una puerta de entrada de infecciones vía ascendente retrógrada con gérmenes intrahospitalarios. Esto cobra especial importancia en cirugías limpias que han usado un sistema de drenaje (derrame pleural, cirugías plásticas, hernias, etc.). Existen muy variados tipos de drenajes y depende del uso, lugar y forma de instalar (percutánea o abierta), lo que finalmente va hacer elegir el drenaje que se va a usar. • Penrose:esuntubodelátexosilicona,blandodeparedes colapsables. Es muy utilizado. Su capacidad de drenar dependerá del área de superficie en contacto, adaptándose en función de la herida, ya que el principal mecanismo de drenaje es la capilaridad. Se usa generalmente en colecciones infectadas. Es un drenaje abierto que drena a la superficie sin un colector. De muy difícil manejo porque ensucia mucho y requiere de curaciones frecuentes cuando existe un volumen importante de secreciones. No recomendable en heridas limpias. • Tubular: tubo de diámetro variable, confeccionado de caucho, latex o silicona. Hoy casi se usa exclusivamente de silicona por la mayor frecuencia de alergia al látex. Es una estructura tubular semirrígida que permite atravesar planos profundos hasta peritoneo sin colapsar. Drena por caída libre y permite el uso de colector. Se debe fijar a la pielconsutura.UnavariedaddeesteeseldrenajeBlake®, tubo de silicona más flexible con varios canales que permiteeldrenajeporcapilaridad yconexióna unsistema de presión negativa, lo que lo transforma en un circuito cerrado. Se usa principalmente en cirugía abdominal. • Sonda T o de Kher: es un tubo de silicona o goma en forma de T. Se utiliza en cirugía de vías biliares. Sus dos extremos cortos se ubican en la vía biliar, mientras el extremo largo queda hacia el exterior. Actúa a caída libre a un colector, es un drenaje abierto. • Pig-Tail: drenaje tubular delgado, con sus dos extremos enroscados (de ahí proviene su nombre), con multiperforaciones que se ubican a nivel de la pelvis renal y el otro en vejiga, permitiendo drenar una vía urinaria obstruida por un cálculo, estenosis, tumor, compresión extrínseca o proteger una anastomosis reciente. Ambas puntas enroscadas también impiden su retiro accidental. Este drenaje queda dentro del cuerpo, no está conectado al exterior. • Drenaje percutáneo: muy semejante al anterior. Es un tubo de diámetro variable (se miden en French), pero con un solo extremo tipo “pigtail” que es el que queda hacia el interior. Lo colocan de manera percutánea los radiólogos intervencionistas bajo visión tomográfica. Se usan para drenaje de colecciones intracavitarias, evitando con ello recurrir a una intervención quirúrgica mayor. Drenan a un sistema colector a caída libre inicialmente cerrado, pero en forma habitual se debe permeabilizar para evitar su obstrucción, convirtiéndolo en un sistema abierto. Este tipo de drenaje hoy es muy utilizado y ha evitado muchas reintervenciones quirúrgicas disminuyendo la morbimortalidad asociada a esas cirugías. • Drenaje de Jackson-Pratt®: es drenaje plano, suave y con lumen multiperforado conectado a una silicona por donde se exterioriza a un bulbo colpsable que permite generar presión negativa de manera constante y actúa, a la vez, como sistema colector. • Redón: tubo de polietileno rígido, no colapsable, multiperforado y cobertura interna anticoagulable. Habitualmente conectado a un sistema colector que es, a la vez, su reservorio, de estructura colapsable, permitiendo un vacío con presión negativa permanente mediante un mecanismo de resorte (Hemovac®, Hemosuc®). Se utiliza en profilaxis de hematoma y seroma en cavidades amplias con gran disección. • Tubo pleural: drenaje tubular rígido, con un extremo multiperforado de diámetro variable, dependiendo si es un adulto o niño. Se utiliza en cualquier tipo de ocupación pleural o cirugía torácica. Se conecta a una trampa de agua y red central de aspiración ajustando presión de aspirado en cmH2O. El más usado actualmente es el Aquaseal®. • Irrigación/aspiración: variante de los drenajes anteriores que permiten infundir fluidos para lavar el sitio de la colección y, simultáneamente, aspirar el lavado. Utilizados principalmente cuando se requiere remover detritus o evitar obstrucción del drenaje. • Babcok, sistema de drenaje aspirativo que se construye usando dos drenajes tubulares de distinto diámetro. El menor va dentro del mayor, ambos con multiperforaciones en el extremo que queda dentro del paciente. Es principalmente aspirativo, pero también permite irrigar. Se usa para mantener la cavidad interna seca de las secreciones y evitar que estas hagan daño a las estructuras internas por su poder lítico (fístulas de líquido con contenido gástrico, pancreático o biliar).
  • 72. 73 Manejo de Drenajes Quirúrgicos • Su manejo es de responsabilidad del cirujano. • Las indicaciones variarán según el modelo utilizado. • Debe medirse el débito y evaluar las características del contenido que sale por el drenaje, especificando si ha existido algún cambio en este. • Evaluar la indemnidad de sitio de salida y del circuito. • Ver si hay dolor referido por paciente. • Cuando existe más de un drenaje debe existir una correcta identificación y numeración de estos, conociendo su ubicación precisa. • Cuando el volumen diario de un drenaje es elevado, es de vital importancia asegurar su reposición por vía oral o endovenosa según corresponda, evitando desbalances hidroelectrolíticos. • La permanencia de cada drenaje dependerá del tipo de cirugía, razón de instalación, características del líquido drenado y de la evolución del paciente. Solo al cirujano le corresponde tomar la decisión del retiro del drenaje. • Los criterios que toman en cuenta para decidir el momento de retiro del drenaje son: • A) Calidad del exudado: observar si es seroso, serohemático, hemático franco, bilioso, bilipus, purulento, fecaloídeo. • B) Débito: hay que considerar la cantidad de exudado que se drena, su descenso progresivo o aumento. • C) Ubicación: dependiendo de la cavidad en la quese encuentre. Estos criterios deben considerarse en conjunto, en general los drenajes se retiran cuando el exudado es seroso o serohemático y el débito es el mínimo fisiológico, sin embargo, todos estos factores varían dependiendo de la cavidad que está siendo drenada. Complicaciones y Riesgos de los Drenajes Se debe destacar que los drenajes no sustituyen una técnica quirúrgicaadecuada,tampococompensanlastransgresiones de los principios básicos (asepsia, hemostasia). Como todo procedimiento quirúrgico existen ciertos riesgos y complicaciones asociados, por lo que estos deben ser retirados al tiempo adecuado sin prolongar su uso innecesariamente, reevaluando a diario su utilidad. • Falla del drenaje: puede ocurrir por mala selección del drenaje,malposicionamientoomalmanejoposoperatorio de este. • Infección retrógrada: debido a que el drenaje constituye una comunicación entre una cavidad corporal ‘‘estéril’’ y el medio exterior. • Dolor: principalmente en drenajes rígidos y ubicaciones específicas. • Reacción a cuerpo extraño. • Compresión o lesión (perforación o erosión) de estructuras vecinas. • Sangrado de la incisión (puede ser hacia dentro o fuera de la cavidad). • Obstrucción del sistema de drenaje. • Desplazamiento por mala fijación. • Hernias o eventraciones por el orificio de salida. Habitualmentesecundario a incisiones muyampliaspara exteriorizar el drenaje. • Fístulas. • Necrosis cutánea local. Por isquemia o acción del contenido drenado. • Pérdida del drenaje dentro de la cavidad al momento del retiro (ruptura) o desplazamiento por mala fijación. • Trombosis venosa profunda o trombo embolismo pulmonar secundario a inmovilización y reposo prolongado que genera un drenaje complejo.
  • 73. 74 Bibliografía 1. Crovari, F. Capítulo 6 Ostomías, fístulas y drenajes. In: Crovari, F., Manzor, M. (eds.) Manual de Patología quirúrgica. Chile: Pontificia Universidad Católica de Chile; 2014, pp. 95-96. 2. Brunardi FC, Andersen DK, Billiar TR, Dunn DL, Hunter JG, Matthews JB, Pollock RE. Schwart’s Principles of Surgery. 9th ed. United States. McGraw-Hill Companies, Inc; 2010. 3. Durán H. Cirugía: Tratado de patología y clínica quirúrgicas. 2.a ed. Madrid, Interamericana McGraw-Hill Companies; 1992-1996. 2.°, Durán H., Compendio de cirugía, Madrid, Interamericana McGraw-Hill Companies; 2002. 4. Townsend, C, Beauchamp, R.D, Evers, B.M, Mattox, K. Sabiston Textbook of Sur-gery: The Biological Basis of Modern Surgical Practice. (19th ed.). United States: ELSEVIER; 2012. 5. Benguria P,Escudero E. Guía: Tipos y cuidados de drenajes. DuocUC; 2007. 6. Diaz, J.J. Eastern Association for the Surgery of Trauma: A Review of the Management of the Open Abdomen—Part 2 “Management of the Open Abdomen”. The Journal of TRAUMA ° Injury, Infection, and Critical Care. 2011; 71(2): 502-512.
  • 74. 75 1.9 Ostomías Vergara R, Bachelet C, Gellona J. Definición Una ostomía es la derivación quirúrgica de un órgano al exterior por un punto diferente al orificio natural, pudiendo comprometer el aparato digestivo, respiratorio y/o urinario, recibiendo distintos nombres según la porción comprometida (ileostomía, colostomía, nefrostomía, gastrostomía, etc.). Se suelen realizar con la finalidad de suplir las vías naturales de excreción o de alimentación cuando estas se ven interrumpidas por distintas razones y según el tiempo de permanencia de la ostomía serán clasificadas como temporales o definitivas. Gastrostomía Está indicada en pacientes que son incapaces de alimentarse por vía oral, ya sea por una pérdida de la capacidad de deglución o por un trastorno de esta. Se realiza una comunicación del lumen gástrico con el exterior a través de una sonda. Este procedimiento puede ser realizado de forma abierta, laparoscópica o endoscópica. Gastrostomía percutánea endoscópica • Se puede realizar bajo anestesia general, sedación o anestesia local. • En primer lugar, se realiza una endoscopía digestiva alta para asegurar que no existan obstáculos anatómicos al procedimiento. Con el endoscopio en el estómago se presiona la pared gástrica para quedar en contacto con la pared abdominal y mediante la transiluminación el ayudante localiza el sitio de la gastrostomía. • Una vez identificado el sitio de punción, se trabaja bajo técnica estéril. Se lava la zona y se inyecta Lidocaína en el plano superficial y profundo. Se realiza una pequeña incisión de 1 cm y se introduce un trocar por el cual se pasa una guía metálica que se toma con el endoscopio. • Luego,seretiraelendoscopioconlaguíayatravésdeesta se enhebra la sonda de gastrostomía, la que se desplaza al polo abdominal para luego atravesar hacia el exterior. • Finalmente,se infla el balón que actúacomoanillo interno y se instala un anillo de seguridad externo que se fija a la piel. Gastrostomía
  • 75. 76 Cuidados Los principales objetivos son: asegurar que el anillo externo esté bien instalado para evitar compresión del tejido entre el anillo interno y externo, mantener limpio el sitio de la gastrostomíaypermeabilizarlasondaparaevitarobstrucción. • Correcta instalación: el anillo externo debe quedar posicionado de tal forma que permita un movimiento de introducción/retiro de 1 o 2 cm. Si el tejido entre ambos anillos se comprime puede generar necrosis por compresión o rotura del tracto de la gastrostomía. • Cuidado de la herida: habitualmente, se realiza aseo de la herida con suero fisiológico y luego se cubre con gasaslimpias.Evitarmanipulaciónconstantedelaherida. • Obstrucción: generalmente, se produce secundario a medicamentos o nutrición que se pasan por la sonda. Todos los medicamentos deben ser administrados en su forma líquida o disueltos en agua y pasar 20 cc de agua luego de estos. Si se genera una obstrucción el primer paso es permeabilizar la sonda con una jeringa de 60 ml utilizando agua tibia. • La nutrición enteral se inicia al día siguiente, mientras que agua y medicamentos se pueden administrar luego de 4 horas del procedimiento. Ileostomía Ubicación ideal de las ostomías Eslaexteriorizacióndelaporcióndistaldelíleonhacialapared abdominal. Su principal dificultad radica en que el contenido intestinal es más irritante y rico en enzimas proteolíticas por lo que puede dañar la piel alrededor del ostoma. Por esta razón, la ileostomía fue viable cuando Brooke en los años 50 describió la técnica para lograr una ileostomía protruida, donde el contacto entre el contenido y la piel fuese mínimo. El sitio de elección suele ser el cuadrante inferior derecho del abdomen por debajo del ombligo a través del músculo recto abdominal, si trazamos una línea imaginaria entre laespina ilíaca y el ombligo, el sitio de elección es en la unión del tercio medial con los dos tercios laterales. En este punto se encuentra lejano al ombligo, cicatrices, estructuras óseas, línea del cinturón y a través del músculo que le otorga estabilidad y soporte. En obesos, este punto debe subirse en el plano vertical unos 2 cm. Indicaciones • Protección de anastomosis a distal. • Manejo de filtraciones de anastomosis. • Cáncer. • Perforación intestinal. • Obstrucción intestinal. • Enfermedad inflamatoria intestinal (colitis ulcerosa, enfermedad de Crohn). • Traumatismos. • Pos proctocolectomía.
  • 76. 77 Técnica y tipos de ileostomía • En toda ostomía, independiente de su técnica, se deben cumplir los siguientes principios: el asa debe llegar sin tensión ni rotación, la apertura de piel y aponeurosis deben ser concordantes para no generar un ángulo que pueda causar obstrucción, retracción o isquemia. En el caso de las ileostomías, el diámetro de la apertura de la aponeurosis debe permitir el paso de 2 dedos algo apretados. La sección del íleon dependerá del tipo de ostomía. Si realizaremos una ileostomía terminal lo ideal es que sea 2-3 cm proximal a la válvula íleocecal. Por otro lado, si pensamos en una ileostomía en asa la sección es generalmente 10-15 cm proximal a la válvula. En primer lugar, se abre la piel y la fascia anterior del recto abdominal con una incisión vertical o en cruz de unos 2-3 cm. Terminal • Se toma el extremo proximal del íleon a través de la incisión realizada y se exterioriza 6 cm aproximadamente. Es importante asegurar que el asa permanece sin tensión y con buena irrigación. • Luego,seseccionalalínea decorchetes osuturamanual, se colocan suturas a las 3, 6 ,9 y 12 horas del reloj y se evierte el intestino para asegurarlo a la pared abdominal. La ostomía debe quedar 2-3 cm protruida sobre el plano para evitar con-tacto del contenido con la piel. • Finalmente, se corrobora inspeccionando digitalmente el ostoma. Confección Ileostomía. Exterización de asa de intestino delgado Confección Ileostomíaterminal
  • 77. 78 En asa • Cumple con la función de derivar contenido intestinal para proteger anastomosis. • Enprimerlugar,sepasaunasondacomoguíaporelmeso delintestino yseexteriorizaelasamediantelaincisión.Se puedeutilizarunavarillaparamantenerelasaexteriorizada, la cual queda en forma de loop a través de la varilla. • Luego, se realiza una incisión circunferencial en la porción distal del asa y se evierte la mucosa. De esta forma, se queda una ostomía proximal y una distal no funcionante como se ve en la imagen. • Se asegura con puntos a la pared abdominal y se instala la bolsa recolectora. Confección ileostomía enasa
  • 78. 79 Colostomía Una colostomía consiste en la exteriorización de un tramo del colon a la piel de la pared abdominal, con el fin de suplir la vía normal de eliminación o descomprimir el intestino grueso. Indicaciones • Cáncer de colon/recto/ano. • Diverticulitis. • Perforación del colon. • Obstrucción del colon. • Enfermedad de Crohn. • Colitis ulcerosa. • Traumatismos del colon. • Defectos congénitos. Tipos de colostomía Es importante definir sobre la base de la patología de base el segmento anatómico y si la colostomía será permanente o temporal. Terminal • La creación del sitio de colostomía en la pared abdominal se realiza en forma similar al de la ileostomía terminal. • En general, se realizan en el cuadrante inferior izquierdo a través del músculo recto abdominal. En esta ubicación, las deposiciones no son irritantes por lo que no es estrictamente necesario evertir la mucosa, aunque algunos cirujanos lo consideran recomendable. • El asa colon debe ser liberada de su base por lo que al exteriorizar el colón, debemos asegurar que esté libre de tensión. • Luego, de exteriorizarla se sutura a la pared abdominal. Confección colostomía. Exteriorización de colon
  • 79. 80 En asa Tiene la característica de que no se interrumpe totalmente la continuidaddelintestinoysesuelehacercuandolacolostomía es temporal Se puede usar para manejo de obstrucción distal, proteger anastomosis difíciles de realizar, en traumatismos de recto para proteger su reparación, para desviar el tránsito intestinal en heridas perineales complejas o en infecciones graves. • Solo es posible realizarla en segmentos móviles del colon, es decir, en colon transverso y sigmoides. • La cirugía es prácticamente igual a la ileostomía en asa, se extrae un asa de colon a la superficie de la piel a través de una apertura en la pared abdominal. A diferencia de la ileostomía, esto puede ser en el lado izquierdo y una vez exteriorizado no es necesario evertir. • La exteriorización que se asegura con un vástago de vidrio o plástico en el mesocolon se mantiene por 7-10 días. De esta forma, se evita que la serosa del colon se adhiera a la pared abdominal. • Tiene la ventaja de que es de fácil cierre, requiriendo solo de cirugía local y no de una laparotomía como en el caso de la colostomía terminal. Complicaciones de las Ostomías Las complicaciones pueden deberse a diferentes factores, donde los más fáciles de prevenir son los relacionados con la técnicaquirúrgicapropiamentetal.Es porestarazónque para prevenir la mayoría de las complicaciones de las ostomías es muy importante utilizar una técnica quirúrgica correcta. Tempranas Se considera que las complicaciones son precoces cuando aparecen en los 30 días in-mediatamente posteriores a la cirugía. • Isquemia y necrosis: suele ocurrir por un deterioro de la perfusión de la ostomía, como consecuencia de la tensión en la que se encuentra el asa o por la sección arterial durante la disección del intestino o una sutura inadvertida de algún vaso al fijar el asa. Los pacientes obesos o cirugías de urgencia tienen mayor riesgo de presentarlo. Se identifica porque hay un cambio progresivo del color de la ostomía, pasando del rosa al gris verdoso o al negro y, además de esto, sus bordes no sangran. Si la isquemia no sobrepasa la fascia se puede observar, pero si la necrosis va más allá de la fascia hay que revisarporelriesgodeperforaciónyperitonitisfecaloidea. Confección colostomía terminal
  • 80. 81 Confección colostomía en asa Confección colostomía en asa • Hemorragia: es poco frecuente y aparece en las primeras horas dentro del posoperatorio. La mayoría de las veces esuncuadroautolimitadoquenorequieredetratamiento. • Dehiscencia o separación mucocutánea: es la falla en la unión del intestino y la piel, puede afectar a una pequeña parte o a toda la circunferencia de la ostomía. En general, se produce por una apertura muy amplia de la piel para el íleonexteriorizado,loquegeneramuchatensiónenlaunión. • Retracción: hundimiento del intestino hacia el interior del abdomen (estoma < 0.5 cm de la piel). Se puede producir como consecuencia de una tensión excesiva del intestino, por la necrosis isquémica de la ostomía o por el incremento del espesor de la pared abdominal en pacientes obesos. Tardías • Obstrucciónintestinodelgado:seproduceporadherencias, impactación fecal, recidiva de la enfermedad de Crohn o por una hernia interna. Los pacientes presentan dolor abdominal, náuseas y vómitos, y cese del débito. • Estenosis: cierre o disminución importante del diámetro de laostomíaproducidaporunareaccióncicatricial.Sueleser secundaria a isquemia, nuevos brotes de la enfermedad de base (como una recidiva de la enfermedad de Crohn), infecciones,etc.Clínicamente,lapodemosdetectarporque
  • 81. 82 hay una dificultad en la evacuación de las deposiciones. • Prolapso: protrusión de un asa intestinal sobre el plano cutáneo del abdomen a través del orificio de la ostomía. La mayoríade las veceshayqueconsiderarunareparación quirúrgica. Esta complicación es más frecuente en colostomías en asa y terminales, siendo más raro en ileostomías. • Hernia paraostómica: en la mayoría de los pacientes se observaalgúngradodeherniaparaostómicay,engeneral, tienen poca tendencia a complicarse, pero cuando son hernias grandes son molestas porque los pacientes no logran adecuar bien la bolsa de colostomía, razón por la que en algunos casos es necesario considerar una reparación quirúrgica. También, son más frecuentes en colostomías. Otras • Deshidratación: los pacientes con ostomías pueden sufrir de diarrea y posterior deshidratación, pero esto dependerá de diversos factores como el tipo de ostomía, la cantidad de intestino resecado y de si hay alguna Sistema de Bolsa Recolectora patologíadebase.Seobservageneralmenteenancianos. El tratamiento consiste en reponer fluidos y electrolitos. Esta complicación es casi exclusiva de las ileostomías. • Dermatitis o Química: se debe principalmente al contacto de la piel periostómica con el contenido intestinal y se manifiesta en forma inicial como un eritema. Siempre está asociada a mal posicionamiento y/o retracción del ostoma, y requiere de manejo local con agentes protectores, placas convexas o incluso la reparación quirúrgica. o Alérgica: ocurre tras el contacto con el dispositivo de la ostomía, cada vez es menos frecuente gracias a los avances en la composición de los aparatos. o Traumática: puede ocurrir al retirar la bolsa de forma brusca, cambiar muy seguido el dispositivo o por el roce o presión del dispositivo cuando está mal adaptado. Se manifiesta clínicamente por un eritema asociado a erosiones y úlceras. Un buen sistema recolector deberá: • Ser seguro y tener un buen sellado contra fugas. • A prueba de olores. • Proteger la piel alrededor del estoma. • Fácil de poner y quitar. Existen varios tipos de bolsas de ostomía, pero todas cuentan conunsistemaderecolecciónydrenadodedesechos,además de una parte adhesiva que protege la piel. Hay 2 sistemas disponibles: • De una pieza que se colocan en la piel. • De dos piezas que consisten en un adhesivo y una bolsa que se puede retirar y volver a colocar.
  • 82. 83 Bibliografía 1. Brunicardi FC, Andersen DK, Billiar TR, Dunn DL, Hunter JG, Matthews JB, Pollock RE. Schwartz’s Principles of Surgery. 9th ed. United States: The McGraw-Hill Companies, Inc; 2010. 2. United Ostomy Associations of America, Inc. Colostomy Guide. 2011. Accessed at www.ostomy.org/uploaded/files/ostomy_info/ ColostomyGuide.pdf?direct=1 on Novem-ber 10, 2014. 3. Edith Lenneberg, ET Alan Mendelssohn, MD Linda Gross, Guía de Colostomía 2004 United Ostomy Association, Inc. 1962-2005
  • 83. 84
  • 84. 85 1.10 Fiebre enel Posoperatorio Calcagno M, Díaz M, Valdés F. Definición La fiebre en el posoperatorio corresponde a la elevación de la temperatura normal de un paciente, sobre 38 °C o 100.4 °F posterior a un procedimiento quirúrgico1 . Epidemiología Corresponde a uno de los diagnósticos más comunes en el periodo posoperatorio, con una incidencia de 12-91%2 . Dentro de las primeras 24 horas luego de un procedimiento, 27-58% de los pacientes presentara fiebre. Con mayor frecuencia se da en personas sometidas a cirugía mayor (intratoráxica, intraabdominal, vascular), trauma, invasión con catéteres, ventilación mecánica, o bien, pacientes con comorbilidades como diabetes, inmunosupresión, etc. Según el tiempo de presentación se puede sospechar la etiología. Es así como la fiebre dentro de las primeras 48 horasposoperatorias,engeneral,serádeorigennoinfeccioso. Algunos plantean que en las primeras 24 horas existe un 80% de probabilidad que sea de causa no infecciosa3 . Posterior a 48 horas desde el acto quirúrgico, la mayoría de los cuadros febriles se producen por infección y desde el quinto día, en más del 90%, se confirma la causa infecciosa. De las fiebres de etiología infecciosa destacan la infección de herida operatoria, infección del tracto urinario (ITU), neumonía (intrahospitalaria o asociada a ventilación mecánica) y relacionada con catéter venoso central. Fisiopatología En todo proceso quirúrgico existen cambios inflamatorios secundarios a este, con la consecuente liberación de citoquinas pirógenas: IL-1, IL-6, INF-Y. También puede haber liberación de estas citoquinas en relación con factores exógenos como patógenos. Las citoquinas pirógenas actúan a nivel hipotalámico produciendo la liberación de prostaglandina E2 que media la respuesta febril, aumentando el set point del centrotermorreguladoryesto,finalmente,llevaalaproducción de calor para que el cuerpo alcance la nueva temperatura4 . La magnitud del acto quirúrgico influiría en la cantidad de IL-6 liberada, por tanto, mientras más traumática sea la cirugía, mayor liberación de IL-6 y mayor probabilidad de fiebre en el posoperatorio5 . Clasificación y Etiología Inmediata (0-48 horas) Es en un porcentaje mayoritario de etiología no infecciosa (80%)6 . Puede ser por el acto quirúrgico per se, comorbilidades, drogas, entre otros. Algunos autores mencionan las atelectasias como la causa más frecuente dentro de las no infecciosas. Es importante recordar que pese a que son más comunes en las primeras 48 horas, estas causas también pueden estar presentes con posterioridad a este límite de tiempo. Con respecto al procedimiento o cirugía, el trauma tisular producirá liberación de citoquinas y se dará origen a la fiebre. De estas, 8% se resuelve espontáneamente en las primeras 24 horas7 . Dentro de las comorbilidades que pueden dar cuenta de fiebre posoperatoria inmediata está el hipertiroidismo. Estos pacientes van a presentar síntomas de tirotoxicosis como fiebre40-42°C,agitación,sudoración,temblores,taquicardia, psicosis y en los casos graves arritmias y coma. Para diagnosticar esta condición es necesario pedir exámenes de pruebas tiroideas que mostrarán TSH suprimida, T4L y T3 elevadas.El tratamiento en estos pacientes es con betabloqueo, drogas antitiroideas como el propiltiouracilo (PTU), soluciones yodadas y corticoides endovenosos. También, los pacientes gotosos pueden presentar reagudización de sus cuadros con sintomatología como podagra en el 50% de los casos, sin embargo, puede verse afectada cualquier articulación. Se debe buscar de preferencia, además de la primera articulación metatarsofalángica, en el dorso del pie, rodilla, tobillo y hombro. Estas reagudizaciones característicamente se acompañan de fiebre y en los exámenes 1 Cohn SL. Perioperative medicine. Springer; 2011. 2 Cohn SL. Perioperative medicine. Springer; 2011. 3 Garibaldi RA, Brodine S, Matsumiya S, et al. Evidence for the non-infectious etiology of early postoperative fever. Infect Control 1985; 6: 273–7. 4 Garibaldi RA, Brodine S, Matsumiya S, et al. Evidence for the non-infectious etiology of early postoperative fever. Infect Control 1985; 6: 273–7. 5 Frank SM, Kluger MJ, Kunkel SL. Elevated thermostatic setpoint in postoperative patients. Anesthesiology 2000; 93: 1426– 31. 6 House J, Alexandraki I. Postoperative fever. BMJ Best Practice 2012. 7 Rudra A, Acharjee. Postoperative fever. Indian J Crit Care Med 2006; 10: 264-71.
  • 85. 86 de laboratorio se puede observar elevación de los niveles de ácido úrico, elevación discreta de parámetros inflamatorios y en casos que se tenga duda realizar análisis de líquido sinovial donde se podrán observar los cristales de ácido úrico. Otradelascausasdefiebreinmediataeslareacciónadversa a drogas. Estas se pueden producir por cinco mecanismos: acción farmacológica directa, reacción de hipersensibilidad, alteraciones de la termorregulación, relacionada con la administración per se (flebitis) o reacción idiosincrática. En el caso de reacción por hipersensibilidad, mecanismo más frecuente involucrado, la reacción se produce en el momento en que la droga es administrada. Por otro lado, entre los medicamentos que alteran la termoregulación, la hormona tiroidea exógena aumenta el metabolismo, los antihistamínicos y anticolinérgicos disminuyen la sudoración y la epinefrina, cocaína o anfetaminas aumentan la generación de calor. De lasreaccionesidiosincráticassedebenconsiderarelsíndrome neuroléptico maligno (hipertermia e hipertonía que se asocia con compromiso de conciencia o catatonía) producido en algunos pacientes ante la administración de neurolépticos y la hipertermia maligna. Esta última condición es de herencia autosómica dominante por lo que se debe sospechar en pacientes con antecedentes familiares.Tieneunamortalidadmenoral10%ysecaracteriza por hipercapnia, rigidez muscular, taquipnea, taquicardia, fiebre e hipercalemia luego de la inducción anestésica con halogenados o con administración de succinilcolina8 . Se debe suspender el desencadenante, limpiar la máquina de anestesia, hiperventilar con oxígeno al 100%, administrar dantroleno, bajar la temperatura, corregir la acidosis, hipercalemia, hipercalcemia, mioglobinuria y asegurar diuresis mayor a 2ml/kg/h. Lo más frecuente es que la cirugía se suspenda y no alcance a realizarse, ya que se produce inmediatamente después de la inducción anestésica. Las transfusiones también pueden producir fiebre, esta se puede presentar desde la administración o incluso horas después. En caso de que los pacientes hayan recibido hemoderivados con anterioridad, o bien, estén cursando un embarazo, puede presentarse de manera más tardía, puesto que ya estarían sensibilizados. Existe una causa infecciosa que se manifiesta generalmente antes de las 48 horas y que no puede dejar de diagnosticarse por su alta morbimortalidad. El síndrome de shock tóxico se produce en el contexto de una infección necrotizante de tejido blando (fasceitisnecrotizante o gangrena de Fournier cuando afecta periné, genitales o región perianal), más frecuentemente por Streptococo beta hemolítico grupo A (S. pyogenes) o Clostridium spp. Lo más común es que se produzca por inoculación directa y se presenta inicialmente como celulitis asociado a dolor desproporcionado, que evoluciona como una lesión violácea, bulas hemorrágicas, crépitos y, finalmente, necrosis. El manejo inicial es de soporte, asociado a antibioticoterapia de amplio espectro, descompresión (ya que se produce un síndrome compartimental) y desbridamiento quirúrgico amplio con toma de cultivos. Muchas veces es necesaria la reexploración y aseo quirúrgico. En pacientes con antecedente de abuso de alcohol, se ha descrito la presencia de fiebre a las 48 horas posterior al cese del consumo como manifestación de la abstinencia. Se puede asociar a temblor fino o incluso delirium tremens y su tratamiento es principalmente con benzodiazepinas. Finalmente, causas cardiovasculares como infarto agudo al miocardio (IAM) o embolismos, ya sea a pulmón como el tromboembolismo pulmonar (TEP) o a cerebro en el caso de los accidentes cerebrovasculares (ACV) pueden presentarse con fiebre. Aguda (48 horas-7días) Posterior a las 48 horas, las causas infecciosas superan las no infecciosas. La ITU generalmente se presenta entre el 3.er y 5.° día. Es la infección asociada a atención en salud más frecuente y el 80-90% de estas se presenta en pacientes con sonda foley. El riesgo de infección está relacionado directamente con la duración del cateterismo, aumentando significativamente después de los dos días con sonda. Asimismo, la ITU se da con mayor frecuencia en pacientes sometidos a cirugía genitourinaria, siendo el patógeno más frecuente la E. Coli y en paciente crítico se debe considerar la posibilidad de candiduria(10%) ylainfecciónporbacteriasmultirresistentes. Para el diagnóstico es necesaria la toma de orina completa y urocultivo, debiéndose tomar la muestra desde el puerto del catéter posterior a su limpieza con alcohol al 70-90%9 y debe ser enviada rápidamente al laboratorio; no se debe tomar de la bolsa recolectora. Además, la presencia de piuria no es un factor confiable para el diagnóstico en paciente de UTI o UCI con catéter. El manejo es con antibióticos. La neumonía también es causa frecuente de fiebre en el posoperatorio, principalmente por la exposición a ventilación mecánica en los casos de pacientes que están en UCI o incluso por el solo hecho de someterse a ventilación durante elactoquirúrgico. Porello,pacientesoperadosbajoanestesia general tienen mayor riesgo de presentar neumonía, al igual que aquellos ventilados por tiempo más prolongado. Un factor de riesgo importante por considerar es el dolor posoperatorio. Si hay mal manejo del dolor posoperatorio, el paciente limita su movilidad para evitarlo, tiene un esfuerzo inspiratorio disminuido y una tos poco efectiva por lo que aumenta el riesgo de neumonía. La neumonía asociada a ventilación puede dividirse en temprana, que es aquella 8 Larach MG et al. Clinical Presentation, treatment, and complications of malignant hyperthermia in North America from 1987 to 2006. Anesth Analg 2010. 9 Sabiston Textbook of Surgery. Surgical infections and antibiotic use. Chapter 12. 19th Edition.
  • 86. 87 que se presenta en los cinco primeros días posintubación y generalmente se produce por aspiración del contenido gástrico y es por organismo sensibles (S. aureus, S. pneumoniae, Haemophilus); y tardía, que se presenta después de los cinco días y se asocia a organismos multirresistentes (SAMR, P. Aeruginosa, acinetobacter spp.). Actualmenteparaeldiagnósticoesnecesarialaclínica,asociada a la identificación del agente causal, el cual puede obtenerse poruncultivodeexpectoración(técnicanoinvasiva,tomadopor aspiración endotraqueal, diagnóstico con 10^5UFC/ml) o por lavado broncoalveolar por fibrobroncoscopía (método invasivo, Gold standard, diagnóstico con 10^4UFC/ml). El tratamiento es con antibióticos, sin embargo, se pueden tomar algunas conductas para su prevención, como: minimizar el tiempo de intubación endotraqueal y ventilación o en caso de requerir ventilación mecánica que esta sea no invasiva con presión positiva, evitar aspiración manteniendo cuff endotraqueal con presión de más de 20cmH20, aspirar continuamente las secreciones, mantener posición semisentado y con alimentación enteral pospilórica disminuyendo el riesgo de reflujo y aspiración, usar inhibidores de la bomba de protones (IBP) o incluso, como des-criben algunos, descontaminar la cavidad orofaríngea con clorhexidina tópica. Lospacientesquesesometenacirugíapuedenrequerirvíaso catéteres para su cuidado. Sean estos periféricos o centrales, pueden generar una bacteremia o infección relacionada conelsitiodeinserción.Losmecanismosdecontaminación puedenser pormigración desdelapielen ellugar de inserción hacia el lumen, superficie o punta del caté-ter, especialmente si no se respeta la técnica aséptica, por contaminación directa por manos y/o fluidos contaminados y vía hematógena por infección desde otro foco. Se ha observado mayor riesgo de infecciónsielabordajeesvíafemoraladiferenciadelsubclavio y los microorgansimos más frecuentes son los stafilococos coagulasa negativo. Si existe alta sospecha de ser el foco y causa de fiebre, basta con retirarlo e iniciar antibioticoterapia, completando por lo menos diez días en casos de ser efectivamente el foco. Se debe sospechar en caso de hemocultivos positivos para stafilococos o cándida y si se trata de una bacteremia persistenteporstafilococoaureusofungemiasedeberealizar un ecocardiograma para descartar una endocarditis. Las infecciones del sitio quirúrgico se presentan entreel 5.° y 10.° día posoperatorio por lo general y se caracterizan por dolor, eritema de la zona y secreción purulenta. Estas infecciones pueden ser superficiales (piel, subcutáneo) o profundas (fascia, músculo) y se producen por inoculación directa del microorganismo durante la cirugía. Más del 50% son producto de cocáceas gram (+), siendo el S. aureus el más frecuente y cerca del 30% corresponden a gram (-) como la E.coli o Pseudomona aeruginosa. Es posible sospechar la bacteria involucrada según el tipo o región anatómica donde se ubica la herida. Por ejemplo, en las heridas limpias se identifica con mayor frecuencia el S. aureus, en las limpias contaminadas los gram (-) y anaerobios, y en la axila, periné o ingle se encuentran gram(-).Eltratamientoincluyeapertura,drenajeyexploración de la herida, aseo con suero fisiológico, colocación de gasa estéril con suero fisiológico y cierre por segunda intención, dependiendo si es superficial o profunda y antibióticos en casos de celulitis importante asociada o presencia de síntomas sistémicos. Lo más importante por considerar es la profilaxis antibiótica en caso de ser necesaria y demás cuidados perioperatorios, como el adecuado control glicémico, suspender tabaquismo, procurar una estadía hospitalaria el menor tiempo posible, baño preoperatorio, adecuada preparación de la piel y técnica aséptica, tratar infecciones preexistentes, etc. Según la cirugía a la cual es sometido el paciente, también es posiblesospecharlacausadelafiebre.Encirugíaabdominal, la fiebre puede ser producto de abscesos intraabdominales, filtración de anastomosis, abscesos o infecciones de la pared abdominal, pancreatitis, colecistitis aguda, entre otras, manifestándoseconalgunossíntomasasociadoscomodolor, singulto, omalgia, distensión abdominal, etc. El manejo puede ir desde la antibioticoterapia hasta la reoperación. En caso de cirugía urológica, considerar prostatitis o abscesos perinefríticos. En neurocirugía, meningitis. Endometritis, ITU, fasceitis necrotizante o tromboflebitis pélvica en cirugía gineco-obstétrica. La cirugía cardíaca implica gran trauma a tejidos por lo que la fiebre es esperable, sin embargo, si se prolonga se debe sospechar infección de esternotomía (1-5%) o neumonía (5%)10 . En cirugía vascular, especialmente si se utiliza algún injertooprótesis,estapuedeinfectarse,yaseaporinoculación directa o hematógena y presentar fiebre asociado a dolor y falta de cicatrización. En cuanto a la cirugía traumatológica, esta eleva las posibilidades de tener infección posoperatoria y fiebre cuando hay presencia de material protésico. Es importante destacar que en toda cirugía se sigue una técnica estéril, por tanto, cualquier disrupción de esta técnica eleva el riesgo de infección y fiebre. Una de las causas no infecciosas que produce fiebre aguda es la insuficiencia suprarrenal aguda. Esta implica morbimortalidad importante si no se diagnostica o trata precozmente. Por ello, debe sospecharse ante todo paciente usuario de corticoides que los suspende previo a la cirugía y que posterior a esta o frente a una sepsis empieza con síntomas inespecíficos y en el laboratorio presenta hipoglicemia, hiponatremia, hipercalemia, acidosis metabólica, linfocitosis y eosinofilia. El tratamiento se basa en el soporte agresivo (ABC), corrección de hipoglicemia y alteraciones hidroelectrolíticasasociadoahidrocortisonayfludrocortisona. En todo paciente que será sometido a un acto quirúrgico es necesariovalorarelriesgodeenfermedadtromboembólica, 10 Sabiston Textbook of Surgery. Surgical infections and antibiotic use. Chapter 12. 19th Edition.
  • 87. 88 ya que entre las causas no infecciosas de fiebre están la trombosisvenosaprofunda (TVP),cuya incidencia alcanza cifras de hasta 30-50% en posoperados sin profilaxis. Las TVP con mayor frecuencia se producen en extremidades inferiores y la tasa de embolización (tromboembolismo pulmonar–TEP)dependesiestassondistalesalatrifurcación poplítea (0%), iliofemorales (30-50%) o iliofemoro-poplíteas (90%). Lo más importante es sospecharlas, confirmar el diagnóstico con ecografía doppler color (sensibilidad de 90%)11 e iniciar el tratamiento anticoagulante con heparinas y, posteriormente, anticoagulantes orales para evitar el síndrome posflebítico yelTEP,considerado la principal causa de muerte prevenible en posoperados. Entre las medidas de tromboprofilaxis existen medidas generales como el trendelemburg ligero, deambulación precoz, corrección de hipovolemia y bajo débito, medidas mecánicas como el uso de medias elásticas, compresión neumática intermitente y finalmente, y más importantes, las medidas farmacológicas como las heparinas no fraccionadas (HNF) y de bajo peso molecular (HBPM). Subaguda (7-28 días) A la semana posterior al acto quirúrgico, además de las causas ya descritas, entre las infecciosas también se puede presentar la diarrea por Clostridium difficile. Esta en forma habitual se caracteriza por deposiciones líquidas muy abundantes generalmente en pacientes con antecedente de haber recibido antibioticoterapia (Clindamicina el más relacionado) y se adquiere por transmisión fecal oral de superficiescontaminadasy/omanosdelpersonaldesalud.De los pacientes hospitalizados, 20 a 50% están colonizados12 , sin embargo, no todos van a presentar fiebre y diarrea. Ante la sospecha, se debe solicitar una muestra para toxina de clostridium. En caso de salir negativa y persistir sospecha elevada, se puede solicitar una PCR para clostridium (Gold standard). Eltratamientoesconantibióticosysedefineelesquemasegún lagravedaddelcuadro. Encasoleve-moderado,metronidazol oralpor 10días;encasosevero,vancomicinaoralpor14 días; severo y complicado, metronidazol más vancomicina oral por 14 días. Las imágenes son de gran utilidad para evaluar la dilatación yeventualcompromisocolónico,considerando que el megacolon tóxico es la complicación más temida, ya que incluso puede llevar a la colectomía total. Otrascausasquesepresentanenesteperíodosoninfecciones por cuerpo extraño, abscesos, sinusitis por el uso prolongado de sondas nasoenterales y osteomielitis. Siempre considerar la posibilidad de TVP/TEP, especialmente si hubo reposo prolongado posterior a la cirugía. 11 Goodacre S. In the Clinic: Deep venous thrombosis. Ann Intern Med 2008; 149:5. 12 Meyer L y cols. Infección por Clostridium Difficile: epidemiología, diagnóstico y estrategias terapéuticas. Rev. Med. Clínica Las Condes 2014. Tardía (>28 días) La fiebre tardía es la menos frecuente. Es posible que se dé en presencia de infecciones virales en relación con productos sanguíneos (citomegalovirus, hepatitis, VIH), infecciones del sitio quirúrgico o endocarditis. Manejo Al enfrentarse a un paciente con fiebre en el posoperatorio, dentro de la anamnésis es fundamental evaluar tres puntos. En primer lugar, evaluar características de la fiebre como el momento de inicio y su comportamiento en el tiempo. Luego, considerar comorbilidades del paciente como inmunosupresión, malnutrición, cáncer, hipertiroidismo, uso de drogas o abuso de alcohol, gota, insuficiencia adrenal, diabetes y no olvidar tomar en cuenta si el paciente está invadido con drenajes, catéteres o sondas. En tercer lugar y no menos importante es considerar ciertos puntos con respecto a la cirugía. Evaluar qué procedimiento se realizó, si fue de urgencia o electiva, hallazgos intraoperatorios o complicaciones, duración o si fue necesario alguna transfusión. Junto con los antecedentes evaluados, es fundamental preguntar por los síntomas asociados para poder empezar a orientar la sospecha diagnóstica. Al examen físico siempre considerar signos vitales y estado general. Raramente, un paciente con fiebre y buen estado general tiene alguna causa de origen infeccioso. No hay exámenes específicos indicados en la evaluación del paciente con fiebre posoperatoria, pero ciertamente el hemograma, PCR y los cultivos (orina, expectoración, sangre,decatéter,líquidoeninfeccionesdeheridaoperatoria, colecciones, etc.) son de gran utilidad. Asimismo, las imágenes son un apoyo esencial en el proceso diagnóstico. En caso de sospechar foco pulmonar se puede solicitar una radiografía de tórax. El estudio con ultra-sonido es útil si se sospechan colecciones, hematomas o seromas, TVP o si se requiere evaluar la vesícula biliar. Si no hay un foco claro, o bien, sospechamos una patología que la radiografía o ecografía no pueden mostrar, se puede recurrir a la tomografía computarizada (TC), ya que no solo es capaz de mostrar abscesos o colecciones intraabdominales, sino que también permite evaluar la anatomía tanto toráxica, en busca de TEP, como abdominal y pélvica. Además, la TC permite la valoración de la técnica quirúrgica en cuanto a las anastomosis y los drenajes. Finalmente,elmanejodelafiebreenelposoperatoriodepende en gran parte de la causa que la esté produciendo. Como medidas generales, la fiebre inmediata suele no requerir de tratamiento agresivo, salvo en pacientes con inmunocompromiso conocido, infecciones comprobadas o eventos catastróficos. El uso de antipiréticos es aceptado, ya
  • 88. 89 que minimiza el estrés fisiológico y la demanda metabólica de la fiebre. Siempre se debe considerar el retiro de fármacos que puedan provocar cuadros febriles y evaluar la necesidad diaria de catéter, sonda o drenaje procurando que su utilización no sobrepase las 48 horas. El resto del manejo va a depender de la causa específica. El uso de antibióticos empíricos en los cuadros febriles posoperatorios no está indicado en todos los casos. Su uso se recomienda solo en pacientes con alta sospecha de infección, pacientes inmunocomprometidos, pacientes con falla orgánica, pacientes con inestabilidad hemodinámica y pacientes en unidades de cuidado intensivo. Idealmente, se debe tratar para cubrir los posibles agentes etiológicos y ajustar la terapia según el resultado de los cultivos. En resumen, la fiebre en el posoperatorio es una condición común. Su abordaje debe basarse en la temporalidad de la fiebre e individualizado según el contexto y condición del paciente. La fiebre no es sinónimo de infección por lo que el uso de antibióticos debe ser juicioso. Entre las condiciones que no se pueden dejar de diagnosticar, ya que implican elevada mortalidad están la hipertermia maligna, la TVP/TEP y las infecciones necrotizantes. Por último, la mnemoténica de las 5 “W”s permite recordar las causas más frecuentes de fiebre: Wind (neumonia), water (ITU, bacteremia), walk (TVP/ TEP),wound(infeccióndeheridaoperatoria),wonderfuldrugs (transfusiones, antibióticos, antiepilépticos, etc.).
  • 89. 90 Bibliografía 1. Schaffner A. Fever—useful or noxious symptom that should be treated?. Ther Umsch 2006;63(3):185–8 [inGerman]. 2. Courtney M, Townsend MD, et al. Sabiston Textbook of Surgery. Surgical infections and antibiotic use. Chapter 12. 19th Edition. 3. Nadene C. Postoperative fevers. Hosp Med Clin 2012; 1. 4. Narayan M et al. Fever in the postoperative patient. Emerg Med Clin N Am 2013; 31: 1045-58. 5. Lesperance R et al. Early postoperative Fever and the “Routine” Fever Work-up: Results of a prospective Study. Journal Of Surgical Research 2011; 171: 245-250. 6. Sikora C, Embil JM. Fever in the postoperative patient: a chilling problem, Canadian Journal of CME 2004. 7. Sabiston Textbook of Surgery. Surgical infections and antibiotic use. Chapter 12. 19th Edition. 8. Cohn SL. Perioperative medicine. Springer; 2011. 9. Garibaldi RA, Brodine S, Matsumiya S, et al. Evidence for the noninfectious etiology of early postoperative fever. Infect Control 1985; 6: 273–7. 10. Rudra A, Acharjee. Postoperative fever. Indian J Crit Care Med 2006; 10:264-71. 11. Frank SM, Kluger MJ, Kunkel SL. Elevated thermostatic setpoint in postoperative patients. Anesthesiology 2000; 93: 1426–31. 12. House J, Alexandraki I. Postoperative fever. BMJ Best Practice 2012. 13. Larach MG et al. Clinical Presentation, treatment, and complications of malignant hyperthermia in North America from 1987 to 2006. Anesth Analg 2010. 14. Weed H, Baddour LM. Postoperative fever. Up to date; 2011. 15. Goodacre S. In the Clinic: Deep venous thrombosis. Ann Intern Med 2008; 149:5. 16. Meyer L y cols. Infección por Clostridium Difficile: epidemiología, diagnóstico y estrategias terapéuticas. Rev. Med. Clínica Las Condes 2014.
  • 91. 92
  • 92. 93 2.1 AnatomíaAparatoRespiratorio Brain M, Montoya D, Mena P. Introducción En este capítulo hablaremos, brevemente a modo de recordatorio, acerca de la anatomía del aparato respiratorio, con especial énfasis en la anatomía pulmonar. El aparato respiratorio está formado por la vía aérea superior y la vía aérea inferior, incluidos los pulmones. Cada parte que compone el aparato respiratorio tiene una función importante para asegurar el intercambio de gases, que es el proceso mediante el cual el oxígeno entra al torrente circulatorio y se elimina el dióxido de carbono. Vía Aérea Superior Cavidad oral y cavidad nasal El aire entra por la cavidad nasal que lo calienta, humedece y filtra para eliminar las impurezas. Faringe Vadesdelaparteposteriordelpaladarblandohastaelextremo superior del esófago. La faringe está constituida por un tejido muscular con un revestimiento de mucosa. Se divide en tres partes: - Nasofaringe (porción superior). - Orofaringe (porción media). - Hipofaringe (región distal de la faringe). Laringe Continuación de la faringe hacia la tráquea. Contiene las cuerdas vocales y los músculos que las mueven envueltos por una cubierta cartilaginosa. Directamenteporencimadelalaringeseencuentralaepíglotis que es una estructura en forma de hoja. La epiglotis actúa como una puerta, dirigiendo el aire hacia la tráquea y los sólidos y líquidos hacia el esófago, rompiendo su paso al pulmón. Vía Aérea Inferior Constituida por la tráquea, los bronquios y los pulmones. Tráquea Órgano de estructura cartilaginosa y membranosa que va desde la laringe, para luego bifurcarse en dos bronquios. Bronquios Conductos tubulares fibrocartilaginosos y que entran en el parénquima pulmonar, conduciendo el aire desde latráquea a los bronquiolos y, finalmente, a los alvéolos. Al disminuir de diámetro pierden los cartílagos, adelgazando las capas muscular y elástica. Se dividen en dos, derecho e izquierdo, el derecho cuenta con tres ramas y el izquierdo con dos. Bronquiolos Sonlaspequeñasvíasaéreasenquesedividenlosbronquios, llegando a los alvéolos pulmonares. No poseen cartílagos, la pared es únicamente musculatura lisa. Alvéolos pulmonares Son los divertículos terminales del árbol bronquial, en ellos ocurre el intercambio gaseoso entre el aire inspirado y la sangre. Pulmones Los pulmones son los órganos en los cuales la sangre recibe oxígeno desde el aire y, a su vez, la sangre se desprende de dióxido de carbono. Los pulmones están situados dentro del tórax, protegidos por las costillas y a ambos lados del corazón. Están separados el uno del otro por el mediastino. Están cubiertos por una doble membrana lubricada (serosa) llamada pleura. La pleura es una membrana de tejido conjuntivo, elástica que evita que los pulmones rocen directamente con la pared interna de la caja torácica. Posee dos capas, la pleura parietal o externa que recubre y se adhiere al diafragma y a la parte interior de la caja torácica, y la pleura visceral que recubre el exterior de los pulmones, introduciéndose en sus lóbulos a través de las cisuras. Entre ambas capas existe una pequeña cantidad (unos 15 cm³) de líquido lubricante denominado líquido pleural.
  • 93. 94 El peso de los pulmones depende del sexo y del hemitórax que ocupen: el pulmón derecho pesa en promedio 600 g y el izquierdo alcanza en promedio 500 g. Estas cifras son un poco inferiores en el caso de la mujer (debido al menor tamaño de la caja torácica) y algo superiores en el varón. El pulmón derecho está dividido por dos cisuras (horizontal y oblicua) en 3 partes, llamadas lóbulos (superior, medio e inferior). El pulmón izquierdo tiene dos lóbulos (superior e inferior) separados por una cisura (oblicua). Se describen en ambos pulmones un vértice o ápex (correspondiente a su parte más superior, que sobrepasa la altura de las clavículas), y una base (inferior) que se apoya en el músculo diafragma. La cisura mayor de ambos pulmones va desde el 4.º espacio intercostal posterior hasta el tercio anterior del hemidiafragma correspondiente. En el pulmón derechoseparaloslóbulossuperior ymediodel lóbuloinferior, mientras que en el pulmón izquierdo separa los dos únicos lóbulos: superior e inferior. La cisura menor separa los lóbulos superior y medio del pulmón derecho y va desde la pared anterior del tórax hasta la cisura mayor. Puede estar ausente o incompleta en hasta un 25 % de las personas. En cada lóbulo se distinguen diferentes segmentos, bien diferenciados, correspondiéndole a cada uno un bronquio segmentario (3.ª generación bronquial). Existen varias clasificaciones para nombrar a los diferentes segmentos, siendo una de las más aceptadas la de Boyden. Los bronquios segmentarios se subdividen en bronquios propiamente dichos y bronquiolos (generaciones 12-16).Estos últimos carecendecartílago yse ramifican en bronquiolos terminales y bronquiolos respiratorios (generaciones 17 a 19) que desembocan en los alvéolos: las unidades funcionantes de intercambio gaseoso delpulmón. Las arterias pulmonares originadas en el tronco pulmonar llevansangredesoxigenadaalospulmonesdesdeelcorazóny unavezoxigenadaes transportadahacialaaurículaizquierda a través de las venas pulmonares. El sistema arterial que irriga a los pulmones (arterias pulmonares y sus ramificaciones) sigue un trayecto paralelo al de las vías respiratorias, mientras que el sistema venoso es más variable y puede disponerse en diferentes trayectos. En el pulmón derecho la vena pulmonar superior drena los lóbulos superior y medio, y la vena pulmonar inferior drena al lóbulo inferior. En el pulmón izquierdo cada vena pulmonar drena al lóbulo de su mismo nombre. La inervación de la pleura visceral y otras estructuras está dadaporfibrasaferentes yeferentesvisceralesquesevanpor el plexo pulmonar anterior y posterior, y que van en relación con la tráquea.
  • 96. 97 Árbol bronquial Bibliografía 1. Rouvière, H. y Delmas, A. Anatomía humana. Barcelona: Masson, 9.ª ed., 1996. 2. Latarjet. Ruiz Liard. Anatomía humana. Buenos Aires: Panamericana, 4.ª ed.,2008.
  • 97. 98 2.2 NóduloPulmonarSolitario Gajardo J, Mena P. Generalidades Diagnóstico Elnódulopulmonarsolitario(NPS)sedefineradiológicamente como una opacidad intraparenquimatosa esférica, menor o igual a 3 cm de diámetro y carente de características que permitan sospechar otra patología como derrame pleural, atelectasia o linfadenopatía. Generalmente es un hallazgo incidental observado en la tomografía computarizada o radiografía solicitadas durante el estudio de otra enfermedad12 . Las lesiones focales mayores de 3 cm de diámetro se denominan “masas” pulmonares y son consideradas carcinoma broncogénico hasta que se demuestre lo contrario. Las lesiones subcentimétricas, especialmente aquellas con diámetro menor o igual a 8 mm, presentan un riesgo significativamente menor de corresponder a una lesión maligna. Su prevalencia se estima en 1-2 casos por cada 1.000 radiografías en la población general y en 20 a 50% de los TC de Tórax en pacientes fumadores 3 . Los factores de riesgo de malignidad incluyen la mayor edad, tabaquismo, antecedente de cáncer previo, mayor tamaño, bordes irregulares/espiculados y su localización en un lóbulo superior. La importancia de su evaluación radica en que aproximadamente el 50% de los NPS son lesiones malignas (tumores primarios del pulmón o localizaciones secundarias).45 1 Patel VK, Naik SK, Naidich DP, Travis WD, Weingar- ten JA, Lazzaro R, et al. A practical algorithmic approach to the diagnosis and management of solitary pulmonary nodules. Part 1: Radiologic characteristics and imag-ing modalities. Chest. 2013;143:825–39. 2 Hansell DM, Bankier AA, MacMahon H, et al.Fleisch- ner Society: glossary of terms for thoracic imaging. Radiology 2008;246(3):697–722. 3 MacMahon H, Austin JH, Gamsu G, Herold CJ, JettJR, Naidich DP, et al. Guidelines for management of small pulmonary nodules detected on CT scans: a statement from the Fleischner Society. Radiology. 2005;237:395–400. 4 Midthun DE, Swensen SJ, Jett JR. Approach to the solitary pulmonary nodule. Mayo Clinic proceedings 1993; 68: 378-385. 5 McWilliams A, Tammemagi MC, Mayo JR, Roberts H,Liu G, Soghrati K, et al. Probability of cancer in pulmo-nary nodules detected on first screening CT. N Engl J Med. 2013; 369:910–9. El diagnóstico del NPS es habitualmente incidental durante el estudio radiológico por otra afección. Una vez identificado un NPS, el desafío está en determinar la naturaleza de la lesión y la necesidad de realizar estudios adicionales. Una evaluación apropiada comienza por la cuidadosa indagación delosantecedentesdelpaciente ylaidentificacióndefactores de riesgo. EDAD Elcáncer pulmonar es raro antes delos40 años,sin embargo, la probabilidad de malignidad aumenta proporcionalmente con la edad a partir de este punto, observándose un 63% de incidencia de lesiones malignas sobre los 50 años deedad. TABAQUISMO El tabaquismo ha sido ampliamente designado como el factor de riesgo más importante para el desarrollo de cáncer de pulmón. En este contexto, es importante determinar el nivel de consumo (mayor o menor de 15 cigarrillos al día), el estado de fumador actual y el tiempo de abandono. En relación con este último punto, ha sido ampliamente demostradoque elriesgo de malignidadcomienzaa disminuir a partir del quinto año de abandono del hábito tabáquico, alcanzando una reducción de hasta un 90% a los 15 años de suspensión. No obstante, el riesgo siempre será mayor que el de una persona que nunca ha fumado.6 EXPOSICIÓN AMBIENTAL La exposición al Radón es la segunda causa más importante de cáncer pulmonar en EE.UU. De forma similar, se han identificado otros factores de riesgo ambientales como la exposición al Asbesto y a sustratos de minería como Nickel, Cadmio y Silicio. ESTUDIOS IMAGENOLÓGICOS Radiografía de tórax Laradiografíadetóraxesineficientecomométododescreening para detectar cáncer de pulmón en etapas tempranas, sin embargo, tiene utilidad en la evaluación del crecimiento del 6 Toomes H, Delphendahl A, Manke HG, Vogt-Moykopf I. The coin lesion of the lung. A review of 955 resected coin lesions. Cáncer 1983; 51: 534-537.
  • 98. 99 nódulo pulmonar solitario. Si la apariencia de un nódulo a la radiografía no ha aumentado su tamaño en 2 años, la probabilidad de que se trate de un nódulo benigno es mayor al 90%. De esta forma, siempre se debe intentar conseguir radiografías antiguas si es que existen. Tomografía computada de tórax El advenimiento del TC ha significado un incremento en el número de nódulos detectados. Hasta un 83% de nódulos malignos en etapa I detectados por TC, no eran visibles en la radiografía 7 . CARACTERÍSTICAS RADIOLÓGICAS Sugerentes de lesión benigna • Márgenes lisos. • Calcificaciones tipo “popcorn”, concéntricas o difusas. • Cavitación con pared fina. Sugerentes de lesión maligna • Márgenes espiculados. • Signo de la corona radiada (trazos lineales finos quese extienden 4 – 5 mm de forma radial). • Calcificaciones reticulares o puntiformes. • Cavitación con pared gruesa. PET-CT En los casos en que los NPS son mayores de 8 mm y no es posible adquirir radiografías o TC previas para comparar, un PET puede proporcionar la información necesaria para decidir si observar la lesión o proceder a realizar un estudio anatomopatológico. Probabilidad Clínica de Cáncer de Pulmón Si bien las características clínicas y radiológicas no permiten distinguir de manera fiable entre una lesión benigna y una maligna,sonimportantesparadeterminarlaprobabilidadclínica demalignidadantesdesolicitarnuevosestudiosodeproceder a obtención de muestras para estudioanatomopatológico. El modelo más extensamente validado fue desarrollado por investigadores de la Clínica Mayo. En este estudio se determinaron los siguientes predictores independientes de malignidad89 . • Mayor edad (OR 1.04 por cada año). • Historia actual o previa de tabaquismo (OR 2.2). • Antecedente de cáncer extratorácico > 5 años previo a la detección del nódulo (OR 3.8). • Diámetro del nódulo (OR 1.14 por cada milímetro). • Espículas (OR 2.8). • Localización en lóbulo superior (OR 2.2). 7 Henschke CI, Naidich DP, Yankelevitz DF, et al. Early lung cancer action project: initial findings on repeatscreenings. Cancer 2001; 92:153-9 8 Herder GJ, et al. Clinical prediction model tocharacterize pulmonary nodules: validation and added value of PET-CT. Chest 2005; 128(4):2490-2496. 9 Swensen SJ, et al. The probability of malignancy in solitary pulmonary nodules. Application to small radiolo-gically indeterminate nodules. Arch Intern Med. 1997; 157(8):849-855.
  • 99. 100 Criterio Riesgo deMalignidad Bajo Intermedio Alto Tamaño < 1.5 cm 1.5 -2.2 cm > 2.2 cm Calcificación Patrón benigno Intermedio Sin calcificación o patrón maligno. Márgenes Regulares Patrón Mixto Irregulares y/o espiculados Tabaquismo Nunca fumador o abandono hace > 12 – 15 años Abandono hace 7 – 12 años. Fumador activo PET-FDG Baja actividad al PET-FDG Actividad baja a moderada. Nódulo intensamente hipermetabólico. Biopsia no quirúrgica (broncoscopía o TTNA) Diagnóstico benigno No diagnóstico Sospechoso de malignidad Vigilancia con TC Resolución completa o casi completa, disminución progresiva del tamaño o sin crecimiento en 2 años. No diagnóstico Evidencia de c recimiento
  • 100. 101 Manejo El manejo del nódulo pulmonar es de resorte del especialista (cirujano de tórax o bronco-pulmonar), por tanto, los pacientes deben ser derivados a estos servicios una vez hecho el diagnóstico. En general, el manejo es el siguiente: Según las características del nódulo se pueden dividir en sólidos y no sólidos/vidrio esmerilado, lo que ayudará a tomar conducta sobre su seguimiento. Nódulos sólidos - <6mm TAC con baja dosis de radiación (TACBD) anual por 2 años. - 6-8mm TACBD en 3 meses. • Nódulo estable: TACBD en 6 meses y luego anual por 2 años. • Nódulo crece de tamaño —> biopsia. - >8mm —> considerar realizar un PET/CT. • Bajo riesgo de cáncer: TACBD en 3 meses. • Nódulo estable repetir TACBD a los 6 meses y anual por 2 años. • Nódulo crece —> biopsia. • Alto riesgo de cáncer: biopsia o excisión quirúrgica. Nódulos no sólidos o en vidrio esmerilado • < 5mm TACBD en 12 meses. • Nódulo estable o involuciona —> TACBD anual por 2 años. • Nódulo crece o se convierte en nódulo sólido —> TACBD en 3-6 meses o excisión quirúrgica según riesgo. • >5-10mm TACBD en 6 meses. • Nódulo estable o involuciona —> TACBD anual por 2 años. • Nódulo crece o se convierte en nódulo sólido —> excisión quirúrgica. • >10mm TACBD en 3-6 meses. • Nódulo estable o involuciona —> evaluar riesgo: TACBD en 6-12 meses, biopsia o excisiónquirúrgica • Nódulo crece o se convierte en nódulo sólido —> excisión quirúrgica.
  • 101. 102 Bibliografía 1. Patel VK, Naik SK, Naidich DP, Travis WD, Weingarten JA, Lazzaro R, et al. A practical algorithmic approach to the diagnosis and management of solitary pulmonary nodules. Part 1: Radiologic characteristics and imaging modalities. Chest. 2013; 143: 825–39. 2. Hansell DM, Bankier AA, MacMahon H, et al. Fleischner Society: glossary of terms for thoracic imaging. Radiology 2008; 246(3):697–722. 3. MacMahon H, Austin JH, Gamsu G, Herold CJ, Jett JR, Naidich DP, et al. Guidelines for management of small pulmonary nodules detected on CT scans: a statement from the Fleischner Society. Radiology. 2005; 237: 395–400. 4. Midthun DE, Swensen SJ, Jett JR.Approach to the solitary pulmonary nodule. Mayo Clinic proceedings 1993; 68: 378-385. 5. McWilliams A, Tammemagi MC, Mayo JR, Roberts H, Liu G, Soghrati K, et al. Probability of cancer in pulmonary nodules detected on first screening CT. N Engl J Med. 2013;369:910–9. 6. Toomes H, Delphendahl A, Manke HG, Vogt-Moykopf I. The coin lesion of the lung. A review of 955 resected coin lesions. Cáncer 1983; 51: 534-537. 7. Henschke CI, Naidich DP, Yankelevitz DF, et al. Early lung cancer action project: initial findings on repeat screenings. Cancer 2001; 92:153-9. 8. Herder GJ, et al. Clinical prediction model to characterize pulmonary nodules: validation and added value of PET-CT. Chest 2005; 128(4):2490-2496. 9. Swensen SJ, et al. The probability of malignancy in solitary pulmonary nodules. Application to small radiologically indeterminate nodules. Arch Intern Med. 1997; 157(8):849-855. 10. National Comprehensive Cancer Network. Lung Cancer Screening. NCCN clinical practice guidelines in Oncology. 2016. Disponible en: https://www.nccn.org/professionals/physician_gls/pdf/lung_screening.pdf
  • 102. 103 2.3 Síndrome deOcupación Pleural Arellano P, Peralta M. Introducción El espacio pleural, comprendido entre la pleura parietal y visceral, está ocupado por una escasa cantidad de líquido pleural que facilita el deslizamiento de ambas capas. Existen diversas patologías que pueden llevar a la ocupación anormal de este espacio por líquidos y/o aire. Según la fisiopatología, se puede constituir un derrame pleural, neumotórax, hemotórax, empiema, quilotórax o combinaciones de estos. Fisiología del Espacio Pleural En condiciones normales existe un espacio cerrado, de 10-20 micras, en cuyo interior se encuentra 0,1-0,2 ml/kg de líquido pleural que lubrica y mantiene independientes ambas capas pleurales. Este se produce como ultrafiltrado capilar sistémico debido a una pequeña gradiente de presión y, a su vez, se reabsorbe a través de la pleura y estomas linfáticos presentes en pleura parietal y diafragma. Composición normal del líquido
  • 103. 104 ETIOLOGÍA Diferentes causas pueden dar origen a un derrame pleural y se categorizan en las siguientes: Infecciosas Bacterias, tuberculosis, parásitos, micosis, virus. Enfermedad cardiovascular ICC, TEP, pericarditis constrictiva, obstrucción vena cava superior, trombosis vena esplénica. Enfermedad neoplásica Carcinoma broncogénico, metástasis, mesotelioma, sarcomas, mieloma y síndrome linfoproliferativos. Disminución de la presión oncótica DHC, síndrome nefrótico, otras causas de hipoalbuminemia. Enfermedades inmunológicas Artritis reumatoide, LES, lupus inducido por drogas, espondilitis anquilosante,síndromeSjogren, vasculitis de Churg Strauss. Derrame Pleural El derrame pleural se produce cuando existe un desbalance entre los mecanismos de producción y los de reabsorción del líquido pleural. De esta manera pueden ocurrir los siguientes sucesos: • Incremento de la presión hidrostática capilar (Ej.: insuficiencia cardiaca). • Disminución de la presión oncótica capilar(Ej.: derrames en pacientes cirrósticos). • Disminución de la presión del espacio pleural (Ej.: atelectasias). • Incremento de la permeabilidad vascular (Ej.: exudados). • Compromiso del drenaje linfático. (Ej.: derrames tumorales) • Movimiento de fluidos del espacio peritoneal (Ej.: ascitis). • Trauma. Farmacológico Nitrofurantoina, Metrotexate, Ciclofosfamida, Fenitoína, Amiodarona, Carbamazepina, Dantroleno, Ergotamina, Propiltiuracilo. Patología Infradiafragmática Ruptura esofágica, hernia estrangulada, cirugía abdominal , peritonitis , EII, absceso hepático, patología pancreática, obstrucción de vía biliar, ascitis, trasplante hepático. Otros Uremia, mixedema, amiloidosis. MANIFESTACIONES CLÍNICAS Lasmanifestacionesclínicasdelderramepleuralsonvariadas y dependen principalmente de la condición del enfermo y la etiología del derrame. Es así, entonces, que es de vital importancia establecer la historia clínica, antecedentes médicos, reserva funcional y función pulmonar del paciente. Se estima que un 75% de los derrames son sintomáticos. Los síntomas con mayor frecuencia descritos por el paciente son: Volumen 0,1-0,2 mL/kg Proteínas totales 1-2 g/dL Albúmina 60-75% Globulinas 20-35% Proteínas totales /plasma 0,2 LDH pleura/plasma <0,5 Glucosa Similar a plasmática Células 1.400-4.500 células/ul
  • 104. 105 • Disnea. • Tos. • Dolor Torácico, tipo puntada de costado. • Fiebre según la etiología Examen físico El examen físico debe ser orientado a la búsqueda de: • Expansión asimétrica de la caja torácica. • Ausencia de vibraciones vocales. • Matidez a la percusión del hemitorax afectado. • Ausencia de murmullo pulmonar. • Soplo pleurítico. ESTUDIOS RADIOLÓGICOS COMPLEMENTARIOS El apoyo de la imagenología es de fundamental importancia para la confirmación del diagnóstico sindromático y en ocasiones etiológico. Radiografía de tórax Es una herramienta de bajo costo, ampliamente disponible a nivel nacional, debe ser la primera aproximación diagnóstica, frente a un cuadro clínico sugerente. Debe incluir las proyecciones posterior anterior (PA) y lateral, con lo que se evalúa mejor la extensión del derrame.
  • 105. 106 Imagen Nº1 Radiografía de tórax AP en paciente de sexo femenino. Ambos recesos costo frénicos se observan libres y no hay evidencia de derrame ni condensación. Imagen Nº2 Mismo paciente. Radiografía lateral. Receso costo frénico posterior libre. Radiografía dentro de límites normales.
  • 106. 107 La evidencia de derrame en la radiografía dependerá del volumen de este: • 50-150 ml Velamiento de receso costodiafragmático posterior (radiografía lateral). • >150-200 ml Velamiento de receso costo diafragmático lateral (radiografíaposterior-anterior). • >500 ml Velamiento de todo el receso costo diafragmático y formación de la curva deDamoisseau. Se considera derrame masivo al que ocupa al menos 2/3 del hemitorax en radiografía PA. Se debe tener especial consideración en determinar si el derrame es libre o loculado. Libre: sigue la curva de Damoiseau. Loculado: no sigue la curva, no es móvil, por tanto, no cambia en relación con los cambios de posición (presencia de tabiques), puede ser anterior, posterior, etc. Imagen Nº3 Radiografía de tórax AP: Se evidencia velamiento de ambos rece- sos costo frénicos, de predominio derecho, compatible con derrame bilateral. Imagen Nº4 Mismo paciente. Radiografía lateral. Esta velado el receso costodiafragmático posterior. Ecografía Es más sensible que la radiografía para detectar derrames pleurales pequeños (50-100 ml) y/o loculados. Además, se utiliza para guiar procedimientos diagnósticos/terapéuticos como la toracocentesis, disminuyendo los riesgos asociados a la punción. Tiene un beneficio aún mayor en el estudio de derrames en pacientes críticos, de difícil movilización, en quienes no podremos obtener radiografías de pie con las proyecciones adecuadas, solo portátiles. Tomografía axial computada TAC Tiene alta sensibilidad y especificidad (95%) para la confirmación de derrame pleural y sus características. Además, permite diagnosticar tumores en caso de derrames paraneoplásicos. Útil para caracterizar: - Loculaciones. - Colecciones. - Grosor pleural y masas. - Monitorización de drenaje.
  • 107. 108 TORACOCENTESIS Una vez establecido el diagnóstico clínico y comprobado este mediante algún examen radiológico, se debe complementar el estudio con una toracocentesis de manera de analizar el líquido pleural y poder orientar a su etiología. Todo derrame debe ser puncionado a excepción de los derrames secundarios a insuficiencia cardiaca descompensada. El procedimiento comienza con la preparación delmaterial: El procedimiento se realiza bajo técnica aséptica, se debe utilizargorro,mascarilla,delantal,guantesestérilesymedidas de protección biológica. Posteriormente, se debe reunir los materiales necesarios: antiséptico (Clohexidina), campo estéril de procedimiento, gasas y apósitos, jeringa de 10 ml, dos jeringas de 20ml, 1 aguja 25G (anestesia local subcutánea), 2 agujas 22G (anestesia intramuscular y punción), Lidocaína al 2%, tubos para muestra y cultivos. Posición: Se solicita al paciente que se siente en el borde de la cama y se apoye con los brazos cruzados sobre una mesa o con la asistencia de un auxiliar de enfermería. Monitorización: Siempre monitorizar al paciente durante el procedimiento, ya que puede presentar una reacción vagal, la que se expresara con bradicardia e hipotensión, pudiendo llegar en casos extremos al paro cardiorrespiratorio. Por tanto, controlar la presión arterial y frecuencia cardiaca. Además, el paciente debe tener una vía venosa permeable en la eventualidad de necesitar la infusión de fármacos de emergencia. En caso de presentar una reacción vagal se debe suspender el procedimiento, poner al paciente en decúbito supino y administrar0,5mgdeatropinaEV, seguidadebolode20mlde suerofisiológico.Sielpacientecaeenparocardiorrespiratorio, se deben iniciar maniobras de reanimación. Punción: Se identifica el sitio de punción que, por lo general, 5cm lateral a la columna y entre el 5.°-7.° espacio intercostal. La punción deber ser 2 espacios intercosales bajo el nivel del derrame observado en la radiografía y nunca debe ser bajo el 9.° espacio intercostal. Realizarasepsiadelsitiodepunción,instalarcamposestériles e infiltrar con anestesia local realizando una pápula en piel con la aguja 25G. Luego, reemplazar la aguja por la de 22G y puncionar en 90° en relación con el arco costal. Avanzar la aguja aspirando para descartar punción de vasos e infiltrando anestésico.Unavezcontactadalaagujaconlacostilla,rodear por borde superior; de esta forma, el clínico asegura evitar la punción del paquete vasculo-nervioso que se dispone por el borde inferior de la costilla. Continuar avanzando y aspirando hasta obtener líquido del derrame, en ese momento se retira y se aplica anestesia a la pleura parietal. Cambiar jeringa a una de 20ml o 60ml con aguja de 22G y puncionar nuevamente aspirando hasta obtener muestra del derrame. Enviar líquido a estudio. ESTUDIO DE LÍQUIDO PLEURAL Que se debe solicitar: 1. LDH. 2. Citoquímico: -Proteínas. -Glucosa. -Recuento diferencial de células (mononucleares-polimorfonucleares). 3. pH de líquido pleural. 4. ADA. 5. Colesterol. 6. Amilasa. 7. Gram. 8. Cultivo de Koch. 9. Cultivo corriente, anaerobios, hongos 10. Células neoplásicas. Aspecto macroscópico de líquido - Hemático: Pleurocrito/hematocrito > 0.5 = sugiere hemotórax sangrado activo. - Turbio: Quilotórax. - Pútrido: Empiema. - Viscoso: Mesotelioma. - Chocolate: Amebiasis.
  • 108. 109 ABORDAJE SINDROMÁTICO Al tener el resultado del estudio del líquido del derrame podremos dividirlos en transudados o exudados y sobre esta base enfocar el estudio. Paraesto,debemosutilizarloscriteriosdeLight,queestablecen un exudado si cumplen con las siguientes características, de no ser así se clasifica como transudado: - Concentración de proteínas pleurales /séricas mayor a 0,5. - LDH pleural / LDH sérica mayor a 0,6. - LDH pleural mayor a los 2/3 limite normal de LDH sérica. El hallazgodetransudado nos orienta aInsuficienciacardiaca congestiva, cirrosis hepática, síndrome nefrótico, diálisis peritoneal, TEP (dentro de las causas más frecuentes). El hallazgo de exudado nos orienta a causas infecciosas (empiema /TBC), neoplásicas, digestivas (pancreatitis), hemotorax, quilotorax, TEP. Las dos causas más frecuentes querequieren de intervención quirúrgica son derrames neoplásicos e infecciosos (empiema). EXUDADOS Al tener criterios de Light compatible con exudado, se debe intentar precisar la causa con el resto de los elementos de estudio del líquido. Células - Polimorfonuclear: • Infeccioso: o Neumonía. o Empiema. o Abscesos. o TBC en fase inicial. - Mononuclear: • TBC. • Neoplásico. • Reumatológico (AR y LES). - pH: • pH <7.0: Empiema, indicación de tubo pleural. • pH <7.20: Empiema, ruptura esofágica, AR, TB, neoplasias. Trasudado pleural Trasudado pleural
  • 109. 110 EMPIEMA El empiema pleural es una infección bacteriana del espacio pleural que se manifiesta como la salida de pus o por la presencia de bacterias en el cultivo o Gram. No es requisito un cultivo positivo para el diagnóstico de empiemapleural. La formación de un empiema pleural es un proceso continuo que comienza como un exudado simple, el cual evoluciona a Empiema pleural
  • 110. 111 una etapa fibrinopurulenta y culmina en un derrame organizado ytabicado. En este proceso sepueden reconocer tres etapas: 1. Fase exudativa: corresponde a la primera semana de formación donde ocurre una alteración de la permeabilidad delamembranapleural,lacualgeneraunexudadoclaroy fluido. Generalmente, se resuelve con tratamiento antibiótico. 2. Fasefibrinopurulenta:ocurreenlasegundasemanayse reconoce por la presencia de bacterias, desechos celulares y el líquido adquiere un aspecto turbio purulento.Existe formación de tabiques y loculaciones por las membranas fibrinopurulentas.Losparámetrosbioquímicossealteran. 3. Fase organizativa: se desarrolla en la tercera semana del derrame. Ocurre una proliferación y migración de fibroblastos junto con depósitos de colágeno, que forman un “peel” pleural, el cual atrapa el pulmón subyacente. El pulmón incarcerado se vuelve no funcional y requiere de cirugía para su reexpansión. Las manifestaciones clínicas varían según la etapa evolutiva del proceso pulmonar, del agente infeccioso y las condiciones inmunológicas del paciente e involucra un amplio espectro desde un cuadro febril hasta shock séptico. El tratamiento de los derrames paraneumónicos y de los empiemas se basa en terapia antibiótica adecuada ydrenaje. 1. Antibióticos: el tratamiento empírico debe ser de amplio espectro y debe cubrir aerobios y anaerobios. Los agentes más frecuentes son Streptococcus pneumoniae y Staphylococcusaureus.Untratamientoadecuadoconsisteen una cefalosporina de tercera generación, como Ceftriaxona asociado a un antianaeróbico como Clindamicina. Se debe partir el tratamiento endovenoso y, según evolución clínica, realizar eltraslapeaoral.En cuantoaladuracióndelaterapia, noexisteunesquemaespecífico,sinoquesedeterminasegún cada paciente. Por lo general, se utiliza entre 2 a 6 semanas 2. Pleurostomía: hay ciertos hallazgos que nos pueden sugerir la necesidad de drenaje, como: a. Fiebre y leucocitosis a pesar de tratamiento antibiótico adecuado. b. Características del líquido pleural (viscosidad). c. Infección por anaerobios o agentes virulentos. d. Derrame que ocupa más de un 40% del hemitórax. e. Comorbilidades del paciente. Lapleurostomíaesunprocedimientoquirúrgicoqueserealiza bajo técnica aséptica, en el cual se instala un tubo pleural de Imagen Nº5 TAC de tórax con contraste en fase arterial. Se observa derrame pleural izquierdo loculado. Con aumento de la captación de medio de contraste de la pared de la colección. Imagen Nº6 Mismo paciente, corte coronal.
  • 111. 112 28 a 36 Fr que comunica la cavidad pleural con el exterior. El tubo se conecta a una trampa de agua para evacuar el contenido. Se espera que a las 48 horas exista una mejoría clínica y radiológica del empiema, de lo contrario se debe reevaluar la sensibilidad bacteriana y ajustar los antibióticos y/o solicitar imágenes para evaluar lóculos no resueltos. 3. Firbrinolíticos: son agentes que, porun lado, disminuyen laviscosidaddellíquidopleuraly,porotro,frenanlaprogresión fibrinopurulenta que impide la reexpansión pulmonar. Están indicados en las fases tempranas del empiema. Los más usados son la estreptoquinasa o la uroquinasa. 4. Videotoracoscopía: es una técnica quirúrgica muy útil en las primeras etapas de los derrames paraneumónicos y empiema. Está especialmente indicada en la etapa fibrinopurulenta, ya que permite la destrucción de los lóculos y la evacuación del líquido denso que no se puede eliminar por pleurostomía. No está indicado en la fase organizativa. Se prefiere por sobre la toracotomía tradicional por el menor dolor posoperatorio y menor invasividad. 5. Decorticación por toracotomía: está indicado en los empiemas en fase fibrinopurulenta y de organización. Los objetivos de la decorticación son: eliminar el “peel” pleural, reexpansión del pulmón colapsado y liberación completa de la lámina fibrinosa que permite recuperar la función pulmonar basal. Esta técnica permite la re-solución del 90 – 95% de los empiemas. Neumotórax Se define como la presencia de aire en la cavidad pleural con el consiguiente colapso pulmonar. El aire puede provenir del: parénquima pulmonar, árbol traqueobronquial, esófago, órganos intraabdominales y del exterior a través de la pared torácica. El neumotórax desencadena un mecanismo fisiopatológico que comienza con una compresión del pulmón secundario a la presión positiva intrapleural, comprometiendo el intercambio gaseoso y desviando el mediastino hacia el lado contrario. Clínicamente se puede manifestar como una insuficiencia respiratoria y shock hemodinámico en casos severos. CLASIFICACIÓN Los neumotórax se clasifican según su mecanismo en: espontáneos, traumáticos o iatrogénicos. Neumotórax espontáneo: se clasifican en primarios y secundarios. • Neumotórax primario: son producidos por la ruptura de bulasoblebsdeunpulmónsinotrapatologíadebase.Los blebssonpequeñascolecciones deaire,menoresa2cm, queseubicanenlapleuravisceral.Porotrolado,lasbulas correspondenaespaciosdeaireproducidospordestrucción delparénquimapulmonar.Estetipodeneumotóraxocurre principalmente en pacientes jóvenes (25 – 40 años) de sexo masculino, altos y delgados. Se manifiestan generalmente en reposo y tienen una alta recurrencia. • Neumotórax secundario: ocurren en pacientes con enfermedad pulmonar de base como EPOC. Son más frecuentes en pacientes entre 60 – 65 años y sus manifestaciones clínicas son más severas, llevando a la insuficiencia respiratoria precozmente. Neumotórax Iatrogénico: secundario a procedimientos diagnósticos o terapéuticos como instalación de catéteres venosos centrales. Neumotóraxtraumático: ocurrecuandohayunasoluciónde continuidad en la pared torácica. Puede ser abierto, cerrado o iatrogénico. Situaciones especiales: • Neumotórax hipertensivo: se desarrolla cuando ocurre una pérdida de aire en un mecanismo de válvula unidireccional, ya sea desde el pulmón o a través de la pared torácica. La causa más frecuente es secundario a ventilación mecánica invasiva. Clínicamente, se manifiesta con una significativa inestabilidad hemodinámica, hipoxia y shock. Su manejo consiste en un drenaje de urgencia con un catéter a nivel del 2do espacio intercostal, linea media clavicular. • Neumotórax abierto: grandes defectos de la pared torácica(mayor a 2/3 deldiámetro dela tráquea) permiten la entrada de aire a la cavidad pleural desde elexterior. MANIFESTACIONES CLÍNICAS Los síntomas más frecuentes son el dolor torácico y la disnea. El dolor es habitualmente de comienzo brusco, aumenta con las maniobras de valsalva y se ubica en la región anterior o lateral del tórax. La disnea va a depender de la magnitud de la insuficiencia respiratoria. Otros síntomas son: tos seca o fiebre. Al examen físico se puede encontrar: • Disminución o ausencia de las vibraciones vocales. • Hipersonoridad o timpanismo. • Disminución o ausencia de murmullo pulmonar. • Asimetría torácica.
  • 112. 113 El neumotórax a tensión se manifiesta clínicamente con dolor torácico, disnea, palidez, sudoración, cianosis, taquicardia e hipotensión. En el cuello puede observarse ingurgitación yugular y desviación contralateral de la tráquea y laringe. El hemitórax afectado se observa hiperinsuflado. El diagnóstico es clínico y no requiere de confirmación radiológica para su manejo. ESTUDIOS RADIOLÓGICOS Radiografíadetórax:laradiografíasimpledepieessuficiente para realizar el diagnóstico. Los hallazgos imagenológicos son: hiperclaridad, ausencia de trama vascular y visualización del contorno pulmonar. Se clasifica según su cuantía en: • Mínimo < 10% • Leve < 20% • Moderado 20 – 40% • Severo > 40% Tomografía axial computada TAC: es más sensible que la radiografía para el diagnóstico de neumotórax. Su principal utilidad radica en evaluar las enfermedades pulmonares de base. TRATAMIENTO Eltratamientoeseldrenajepleuralconreexpansiónpulmonar. La técnica utilizada para conseguir este objetivo varía según la cuantía del neumotórax. Neumotórax mínimo o leve: observación por 24 horas, oxígeno suplementario según necesidad y control radiográfico. Losneumotóraxprimariossereabsorbenespontáneamentea una velocidad de 1.25 % al día, mientras que los secundarios no se reabsorben. Es por esto que requieren de un drenaje pleural y oxigenoterapia. Neumotórax > 20%: requiere de drenaje pleural conectado a una trampa de agua. Otras alternativas son: videotoracoscopía y toracotomía. • Indicacionesquirúrgicasdelosneumotóraxespontáneos: o Segundo episodio ipsilateral. o Primer episodio contralateral. o Neumotórax bilateral simultáneo. o Expansión incompleta. o Bulas visible en TAC. o Enfermedad pulmonar de base que requiere tratamiento quirúrgico. o Profesiones de riesgo: piloto de avión, buzo. Neumotórax a tensión: una vez diagnosticado requiere descomprensión inmediata, insertando una aguja gruesa en el segundo espacio intercostal, en la línea media clavicular del hemitórax afectado, de esta manera se descomprime el neumotórax y se convierte a uno simple. El tratamiento definitivo consiste en un tubo pleural. Neumotórax abierto: el tratamiento inicial se logra cerrando rápidamente el defecto con un apósito oclusivo estéril. El apósito debe cubrir la totalidad de la herida de la pared torácica y debe fijarse solo en tres bordes para permitir un mecanismo de escape unidireccional. Durante la espiración, el lado abierto del apósito permite la salida de aire desde el espacio pleural. Por último, se debe insertar un tubo pleural alejado del sitio de herida lo antes posible. 3. Hemotórax Se define como hemotórax la presencia de sangre en el espacio pleural. Se considera como hemotórax masivo a la presencia de más de 1500 cc o un tercio de la volemia en el espacio pleural. Las causas más comunes son las heridas penetrantes con lesión de vasos sistémicos o hiliares, luego los traumas cerrados. El diagnóstico es clínico y su mane-jo inicial consiste en la restitución de volumen sanguíneo y la descompresión torácica. Si se evacúan más de 1500 cc de sangre de forma inmediata o el drenaje pleural da un volumen continuo de sangre de 200 ml/h por 2 a 4 horas, puede requerir una toracotomía de urgencia. Otras indicaciones son la inestabilidad del paciente y requerimientos transfusionales altos.
  • 113. 114 Bibliografía 1. Diaz-Guzman E, Budev M. Accuracy of the physical examinationin evaluating pleural effusion. Cleveland Clinic Journal of Medicine; Volume 75, 4.. April 2008. p: 297-303. 2. Maskell NA, Butland RJ; Pleural Diseases Group, Standards of Care Committee, British Thoracic Society. BTS guidelines for the investigation of a unilateral pleural effusion in adults Thorax. 2003 May;58 Suppl 2:ii8-17. 3. Adrade R, Maddaus M. Pleural Effusion. In: Souba W, Fink M, Jurkovich J, Kaiser L, Pearce W, Pemberton J, Soper N. ACS Surgery: Principales and practice. 6th edition. Chicago: B C Decker; 2007. 4. Light R. Pleural Diseases. DM. May 1992.
  • 114. 115 2.4 Cáncer Pulmonar Brain M, Pizarro MJ, González J. Introducción El cáncer de pulmón es el cáncer más frecuente a nivel mundial. Durante el año 2012 hubo 1,8 millones de nuevos casos y fue responsable de 1,6 millones de muertes1 . Es la primera causa de muerte por cáncer en hombres a nivel mundial, y la segunda más frecuente en mujeres, después del cáncer de mama234 . Epidemiología El tabaquismo es el principal factor de riesgo del cáncer de pulmón2. La incidencia varía según el país, así como también del sexo y raza. Éste tipo de cáncer es 50% más frecuente en Afroamericanos5 y la tasa de incidencia es mayor en países más desarrollados como Europa y Norte América6 . Estas diferencias, son un reflejo de la prevalencia del tabaquismo7 .Actualmente, las muertes por cáncer de pulmón en hombres hanidodisminuyendo,mientrasqueenmujeressehanlogrado mantener estables debido a la disminución del tabaquismo8 . Elcáncerdepulmónseclasificaprincipalmenteendosgrandes grupos: carcinoma pulmonar de células pequeñas (CPCP) y carcinoma pulmonar de células no pequeñas (CPCNP). El CPCNP corresponde al 75 - 80% del cáncer de pulmón9 . Este tipo de cáncer se asocia a no fumadores y a mujeres. 1 Brambilla E, Travis WD. Lung cancer. In: World Cancer Report, Stewart BW, Wild CP (Eds), World Health Organization, Lyon 2014. 2 Brambilla E, Travis WD. Lung cancer. In: World Cancer Report, Stewart BW, Wild CP (Eds), World Health Organization, Lyon 2014. 3 Humphrey LL, Deffebach M, Pappas M, et al. Screening for lung cancer with low-dose computed tomography: a systematic review to update the US Preventive services task force recom- mendation. Ann Intern Med 2013; 159:411. 4 GLOBALCAN 2012: Estimated Cancer Incidence, Mor- tality and Prevalence Worldwide in 2012, IARC, WHO. 5 Ries, LAG, Miller, BA, Hankey, BF, et al. Cancer statis- tics review, 1973–1988. Bethesda. National Cancer Institute1991; 91-2789. 6 Parkin, DM, Pisani, P,Lopez AD, et al. At least one in seven cases of cancer is caused by smoking: global estimates for 1995. Int J Cancer, 1994;59,494-504. 7 Mannino DM, Stoller JK. Cigarette smoking and other risk factors for lung cancer. Up-ToDate. Jul. 2014. 8 Baldini EH, Barnes PJ. Women and lung cancer. UpTo- Date. Oct. 2014. 9 Diagnosis and Management of Lung Cancer, 3rd ed. American College of Chest Physi-cians Evidence-Based Clinical Practice Guidelines. May 2013. EladenocarcinomaeseltipomásfrecuentedeCPCNP,siendo casi un 50% del total de los casos de cáncer pulmonar10 . Otros tipos incluyen al cáncer de células escamosas (25- 30% del total de cáncer de pulmón)11 , el adenocarcinoma escamoso (0,4-4%)12 , los tumores carcinoides (1-2%)1314 , y el carcinoma sarcomatoide (<1%)15 . El cáncer de células grandes comprende un 10-12% de los CPCNP16 . Por otro lado, el cáncer de células pequeñas aparece casi exclusivamente en fumadores crónicos severos. La incidencia de cáncer de células pequeñas ha disminuido de un 17% en 1986 a un 13% en el 2002. Esta disminución se acompaña de un incremento en el porcentaje de nuevos casos en mujeres (28% en 1973 versus un 50% en 2002). Estos cambios epidemiológicos se podríandebera diferencias en los patrones tabáquicos y a variaciones que se han hecho en los criterios histopatológicos para el CPCP, lo que podría haber llevado en algunos casos, a que el tumor haya sido clasificado como Carcinoma Neuroendocrino de Células Grandes en vez de CPCP17 . 10 Janssen-Heijnen ML, Coebergh JW, Klinkhamer PJ, Schipper RM, Splinter TA, Mooi WJ. Is there a common etiology for the rising incidence of and decreasing survival with adeno- carcinoma of the lung? Epidemiology 2001. PubMed 2001; Mar 12(2):256. 11 Squamous cell lung carcinoma. College of American Pathologists. May 2013. 12 Travis WD, Brambilla E, Noguchi M, Nicholson AG, Geisinger KR, Yatabe Y,Beer DG. International association for the study of lung cancer/american thoracic society/european respi- ratory society international multidisciplinary classification of lung adenocarcinoma. J Thorac Oncol. 2011 Feb; 6(2):244-85. 13 Modlin IM, Lye KD, Kidd M. A 5-decade analysis of 13,715 carcinoid tumors. Cancer 2003. PubMed 2003; 97:934. 14 Hemminki K, Li X. Incidence trends and risk factors of carcinoid tumors: a nationwide epidemiologic study from Sweden. Cancer 2001. PubMed 2001; 92:2204. 15 Yendamuri S, Caty L, Pine M, Adem S, Bogner P,Miller A, Demmy TL, Groman A, Reid M. Outcomes of sarcomatoid carcinoma of the lung: a Surveillance, Epidemiology, and End Re- sults Database analysis. Surgery 2012. PubMed2012;152(3):397. 16 Popper HH. “Large cell carcinoma of the lung – a vani- shing entity?”. Memo - Magazine of European Medical Oncology. 2011; 4: 4–9. 17 Govindan R, Page N, Morgensztern D, Read W, Tierney R, Vlahiotis A, Spitznagel EL, Piccirillo J. Changing epidemiolo- gy of small-cell lung cancer in the United States over the last 30 years: analysis of the surveillance, epidemiologic, and endresults database. J Clin Oncol. 2006; 24(28):4539.
  • 115. 116 (periférico) Cáncer pulmonar tipo escamoso (central) Cáncer pulmonar tipo adenocarcinoma Cáncer pulmonar de células grandes con metástasis tempranas Cáncer pulmonar de células grandes con metástasis tempranas
  • 117. 118 Situación en Chile EnChilesonmuchosloscánceresasociadosalhábitotabáquico, destacando entre ellos los de pulmón, laringe, cavidad oral, esófago, páncreas y vejiga, entre otros. Su participación es tan importante que determina, en la mortalidad por cáncer pulmonar, un riesgo atribuible de 90% en los hombres y 79% en las mujeres. Respecto a la incidencia, el cáncer de pulmón tendría el quinto lugar en hombres y séptimo en mujeres18 . Latasademortalidadporcáncerdetráquea,bronquioypulmón ocupa el tercer lugar a nivel nacional siendo 21,3 por 100.000 habitantes18. Por otro lado, la tasa de mortalidad por cáncer de pulmón cambia de acuerdo al segmento etario que se analice, el año 2004 se vio que entre los 45 y 64 años murieron 645 personas, lo que da una tasa de 22,9 por 100.000 habitantes, siendo el 6% de las causas de mortalidad general; mientras que entre los 65 y 79 años murieron 1.098 personas con una tasa de 108,7 por 100.000 habitantes, lo que constituye el 8% de las causas de mortalidad en esegrupo19 . Es importante destacar que en el caso del cáncer de tráquea, bronquio y pulmón, Chile tiene una incidencia menor respecto a Europa y Sudamérica; pero mayor a Ecuador y Costa Rica18. Clínica Las manifestaciones clínicas pueden ser variadas, éstas dependerán de muchos factores, tales como el momento del diagnóstico, edad del paciente, estadio del tumor, tumor único o múltiple, entre otros19. Signos y síntomas La mayoría de los pacientes que presentan signos y síntomas clínicos debido a cáncer de pulmón, tienen una enfermedad avanzada20 . Las manifestaciones más comunes son21,22,23,24 : • Tos:50–70%.Elcáncerpulmonarpuedeiniciaruncuadrode tos,ocambiaruncuadrodetoscrónica.Latospuedeserseca o puede producir esputo, el cual puede contener sangre25 . 18 Ministerio de Salud de Chile. Unidad de Tabaco de la División de Regulación y Rectoría. Programa de Salud Cardiovas- cular: la cesación del consumo de tabaco. 2011. 19 Dr. Undurraga A. Cáncer Pulmonar. Departamento de Medicina, Unidad de Enfermedades Respiratorias. Clínica Las Condes. 2007. 20 Mountain CF. Revisions in the International System for Staging Lung Cancer. Chest 1997; 111:1710. • Hemoptisis: 25 – 50%. De todos los casos de hemoptisis, cerca de un 20% el responsable es el cáncer de pulmón26 . • Disnea: 25% • Dolor Torácico: 20%. Puede ser sordo, agudoo punzante23. Otros síntomas intratorácicos incluyen, sibilancias respiratorias, ronquera, compromiso pleural, síndrome de vena cava superior, síndrome de Pancoast. También se pueden encontrar manifestaciones extratorácicas, las cuales hacen pensar en metástasis a distancia o síndromes paraneoplásicos, por lo que habría que buscar signos y síntomas o anormalidades de laboratorio de algunos órganos como hígado, hueso, glándula suprarrenal y cerebro27 28 . Los fenómenos paraneoplásicos son un grupo heterogéneo de desórdenes asociados a cáncer con compromiso sistémico y causado por mecanismos como metástasis, déficitnutricionalesymetabólicos,infecciones,coagulopatías o efectos secundarios del tratamiento del cáncer29 . Dentro de éstos se incluyen hipercalcemia, SSIADH, desórdenes neurológicos, manifestaciones hematológicas, dermatomiositis y polimiositis, osteoartropatía hipertrófica y síndrome de Cushing 1 . El cáncer de pulmón siempre debe ser sospechado en un pacientefumadoroantiguofumadorquesepresentacontoso hemoptisis.Ambos,el cáncerde pulmóndecélulas pequeñas (CPCP) y el de células no pequeñas (CPCNP), se pueden presentar con síntomas similares, pocos y pequeños detalles clínicos los diferencian entre sí. Manifestaciones que guían a pensar en CPCP son síntomas rápidamente progresivos, la presencia de síndromes paraneoplásicos (ej. SSIADH), grandes metástasis mediastínicas multiestacionales, síndrome de vena cava superior y metástasis óseas y cerebrales. Por otro lado, el síndrome de Pancoast y la hipercalcemia son más frecuentes en pacientes con CPCNP2. 21 Feinstein AR, Wells CK. A clinical-severity staging sys- tem for patients with lung cancer. Medicine (Baltimore) 1990; 69:1. 22 Chute CG, Greenberg ER, Baron J, et al. Presenting conditions of 1539 population-based lung cancer patients bycell type and stage in New Hampshire and Vermont. Cancer 1985; 56:2107. 23 Hirshberg B, Biran I, Glazer M, Kramer MR. Hemoptysis: etiology, evaluation, and out-come in a tertiary referral hospital. Chest 1997; 112:440. 24 Kuo CW, Chen YM, Chao JY, et al. Non-small cell lung cancer in very young and very old patients. Chest 2000; 117:354. 25 Lepper PM, Ott SR, Hoppe H, et al. Superior vena cava syndrome in thoracic malig-nancies. Respir Care 2011; 56:653. 26 Silvestri RC. Patient information: Chronic cough inadults (Beyond the Basics). UpToDate. Mar 2014. 27 Thomas KW. Patient information: Lung cancer risks, symptoms, and diagnosis (Beyond the Basics). UpToDate. Aug 2013. 28 Midthun DE. Overview of the risk factors, pathology, and clinical manifestations of lung cancer. UpToDate. Jan 2014. 29 Thomas KW. Overview of the initial evaluation, diagno- sis, and staging of patients with suspected lung cancer. UpToDa- te. Aug. 2014.
  • 118. 119 Diagnóstico Es importante destacar que las manifestaciones clínicas son más bien tardías y cuando el cáncer ya se encuentra más avanzado. Una diferencia por ejemplo entre el carcinoma neuroendocrino de células grandes y el cáncer de células pequeñas es que, se pueden manifestar en estadios tempranos (I – II) en un 25 y un 5% respectivamente30 . Una vez que tenemos la sospecha de cáncer pulmonar, debemosiniciarelestudionecesarioparallegaraldiagnóstico y luego que éste sea demoestrado, se debe etapiificar la extensión de la enfermedad en cuanto al tamaño tumoral, compromiso de adenopatías y presencia de metástasis a distancia. Radiografía de tórax: con sus proyecciones postero-anterior y lateral. Se considera como el estudio inicial de cualquier pacientequeconsulteporsintomatologíarespiratoria.Anteun hallazgo patológico sugerente de neoplasia, se debe solicitar un estudio que permite caracterizar de mejor forma la lesión, como por ejemplo una tomografía computada de tórax (TAC). TAC de tórax: Es el estudio indicado luego de una imagen sospechosa en la radiografía o pacientes con alta sospecha de neoplasia. Por su mejor resolución, permite el estudio anatómico, diagnosticar masas pulmonares y sus relaciones con estructuras vecinas, demostrar adenopatías sospechosas de compromiso tumoral y hacer la etapificación del cáncer. Ademásdeeso,sepuedeasociaraunapuncióntranstorácica para la toma de biopsia de lesiones pulmonares. Imagen 2 Mismo paciente. TAC de tórax con ventana pulmonar, donde se evidencia la misma masa en relación al hilio pulmonar derecho. 30 Dalmau J, Rosenfeld MR. Paraneoplastic syndromes affecting peripheral nerve and muscle. UpToDate. Oct 2014. Imagen 1 Radiografía de tórax portátil donde se evidencia masa pulmonar derecha, compatible con cáncer de pulmón. Fibrobroncoscopía: Su utilidadradicaen elestudioanatómico del árbol bronquial para evaluar compromiso luminal bronquial. Además permite la toma de biopsias en tumores próximos a un bronquio. Mediastinoscopía: Corresponde a un método invasivo por el cual a través de una pequeña incisión supraesterna se identifican los linfonodos mediastínicos con el objetivo de tomar biopsias de ellos y lograr una etapificación de la enfermedad. EBUS:Correspondealestudiosonográficoendobronquialpor elcualesposibletomarmuestrashistológicas deadenopatías cuando se sospecha infiltración tumoral en ellas. Tomografía de emisión de positrones (PET): Estudio que determinalapresenciadeneoplasiasatravésdelmetabolismo activo de la masa tumoral, lo que se logra identificando sitios de captación de glucosa marcada con radiofármacos. Es especialmente útil para determinar enfermedad a distancia. En el caso de cancer pulmonar corresponde, hoy en día, en un estudio de primera línea. En conclusión, ante un paciente sintomático, el estudio se iniciará con una radiografía de tórax, ante la sospecha de neoplasia se completará el estudio con TAC de tórax y la obtención de una muestra histológica para confirmar el diagnóstico. Finalmente se procederá a etapificar la diseminación de la enfermedad con un PET más TAC de cerebro y cintigrama óseo. En el caso de no contar con PET, éste podrá ser reemplazado por unTACde abdomen y pelvis.
  • 119. 120 TNM Tx Tumor primario que no puede ser evaluado, o se demuestra en citología de esputo o lavado bronquial con imágenes y endoscopía negativas. TO Sin evidencia de tumor primario. Tis Carcinoma in situ. T1 Tumor < 3 cm en su díametro mayor, rodeado por tejido pulmonar o pleural visceral, sin evidencia de invasión proximal al bronquio principal en la fibrobroncoscopía. T1a Tumor <2 cm en su diámetro mayor. T1b Tumor >2 cm, pero <3 cm en su diámetro mayor. T2 Tumor > 3 cm, pero < 7 cm en su diámetro mayor, o tumor con cualquiera de las siguientes características: afecta al bronquio principal, se encuentra a 2 cm o más de la carina; invade la pleura visceral; está asociado con atelectasia o neumoitis obstructiva que se extiende hasta la región hiliar, pero no afecta al pulmón entero. T2a Tumor > 3 cm, pero < 5 cm en su diámetro mayor. T2b Tumor > 5 cm, pero < 7 cm en su diámetro mayor. T3 Tumor > 7 cm o de cualquier tamaño que invade directamente una de las siguientes estructuras: pared torácica (incluyendo los tumores del sulcus superior), diafragma, nervio frénico, pleura mediastínica, pericardio parietal; o tumor que se encuentre a menos de 2 cm de la carina, pero sin invadirla; o asociado a atelectasia o neumonitis obstructiva del pulmón entero; o existencia nódulo(s) en el mismo lóbulo. T4 Tumor de cualquier tamaño que invade cualquiera de las estructuras: mediastino, corazón,grandesvasos,tráquea,nerviorecurrentelaríngeo,esófago,cuerpovertebral, carina; o existencia de nódulo(s) en un lóbulo diferente del pulmón homolateral. Tabla 1. Estadificación del cáncer de pulmón, 7a edición del TNM (2010). Tumor Primario (T). (Tomado de Christian González. Actualización de la estadificación del cáncer de pulmón. Rev. argent. radiol. vol.76 no.4)
  • 120. 121 TNM Nx Ganglios linfáticos regionales no pueden ser evaluados. NO Sin ganglios linfáticos regionales comprometidos. N1 Metástasis ganglionares peribronquiales homolaterales y/o hiliares homolaterales, incluyendo la afectación por extensión directa de los ganglios intrapulmonares. N2 Metástasis ganglionares mediastínicas homolaterales y/o subcarinales. N3 Metástasis ganglionares mediastínicas contralaterales, hiliares contralaterales, escalénicas ipsilaterales y contralaterales o supraclaviculares. Tabla 2. Estadificación del cáncer de pulmón, 7a edición del TNM (2010). Ganglios linfáticos regionales (N). (Tomado de Christian González. Actualización de la estadificación del cáncer de pulmón. Rev. argent. radiol. vol.76 no.4) TNM Mx Las metástasis a distancia no pueden ser evaluadas. MO Ausencia de metástasis de distancia. M1 Existencia de metástasis a distancia. M1a Existencia de nódulo(s) en un lóbulo del pulmón contralateral; tumor con nódulos pleurales; o derrame pleural o pericárdico maligno. M1b Existencia de metástasis a distancia (extratorácicas). Tabla 3: Estadificación del cáncer de pulmón, 7a edición del TNM (2010). Metástasis a distancia (M). (Tomado de Christian González. Actualización de la estadificación del cáncer de pulmón. Rev. argent. radiol. vol.76 no.4)
  • 121. 122 Estadio y tasa de supervivencia a 5años T N M Carcinoma oculto Tx N0 M0 Estadio 0 Tis N0 M0 Estadio IA (50% a 73%) T1a,b N0 M0 Estadio IB (43% a 58%) T2a N0 M0 Estadio IIA (36% a 46%) T1a,b T2a T2b N1 N1 N0 M0 M0 M0 Estadio IIB (25% a 36%) T2b T3 N1 N0 M0 M0 Estadio IIIA (19% a 24%) T1, T2 T3 T4 N2 N1,N2 N0,N1 M0 M0 M0 Estadio IIIB (7% a 9%) T4 Cualquier T N2 N3 M0 M0 Estadio IV (2% a 13%) Cualquier T Cualquier N M1a,b Tabla 8: Estadificación del cáncer de pulmón, 7a edición (2010). Agrupación por estadios y su supervivencia a 5 años. (Tomado de Christian González. Actualización de la estadificación del cáncer de pulmón. Rev. argent. radiol. vol.76 no.4) Antesdeplantearuntratamientoquirúrgicoenunpacientecon cáncer de pulmón, se debe estudiar su capacidad pulmonar basal de manera de establecer si el paciente es operable, es decir si tolerará la resección pulmonar o tiene alto riesgo de insuficiencia respiratoria post operatoria. Para esto, a todo paciente candidato a cirugía, se le exige un estudio básico con espirometría y test de difusión de CO (DLCO). Espirometría: • VEF1 > 2 litros o >80% tolerará una neumonectomía • VEF1 > 1,5 litros tolerará una lobectomía DLCO: • >80% sin contraindicación de cirugía • 50-60% contraindicado la neumonectomía De modo general si la espirometría o el DLCO estan < 80% se debe complementar el estudio preoperatorio con un test cardiopulmonar y cintigrama V/Q, de manera de establecer mas precisamente cual es el volumen pulmonar mínimo que puede tolerar el paciente en caso de resección sin caer en insuficiencia respiratoria y la necesidad de uso de O2 domiciliario.
  • 122. 123 Cáncer de pulmón de células no pequeñas Etapa I La resección recomendada es la lobectomía asociado a linfadenectomía. La segmentectomía se reserva sólo para el tratamiento de los cánceres en etapa I menores a 2 cms. y para pacientes con comorbilidades en las que la extirpación dellóbulocompletotendríariesgodeinsuficienciarespiratoria. Etapa II Tiene indicación de lobectomía con linfadenectomía. En ocasiones, es necesario resecar el pulmón completamente (neumonectomía). La quimioterapia adyuvante está indicada luego de la cirugía. Etapa III Se debe ofrecer terapia neoadyuvante con quimio y radioterapia, luego se debe re evaluar la extensión de la enfermedad para decidir una conducta quirúrgica curativa. Etapa IV Laenfermedad estáfuera del alcanceterapéutico yelobjetivo debe ser otorgar la mejor calidad de vida posible al paciente: manejodeldolor,mejorarlamecánicaventilatoria,entreotros. Cáncer de células pequeñas Es un cáncer de muy mal pronóstico, incluso en etapas tempranas. Su tratamiento se basa en la utilización de quimioterapia, dejando a la cirugía en un segundo plano sólo para algunos casos específicos. Bibliografía 1. Brambilla E, Travis WD. Lung cancer. In: World Cancer Report, Stewart BW, Wild CP (Eds), World Health Organization, Lyon 2014. 2. Siegel R, Ma J, Zou Z, Jemal A. Cancer statistics, 2014. CA Cancer J Clin 2014;64:9. 3. Humphrey LL, Deffebach M, Pappas M, et al. Screening for lung cancer with low-dose computed tomography: a systematic review to update the US Preventive ser-vices task force recommendation. Ann Intern Med 2013; 159:411. 4. GLOBALCAN 2012: Estimated Cancer Incidence, Mortality and Prevalence World-wide in 2012, IARC, WHO. 5. Ries, LAG, Miller, BA, Hankey, BF, et al. Cancer statistics review, 1973–1988. Bethesda. National Cancer Institute 1991;91-2789. 6. Parkin, DM, Pisani, P, Lopez AD, et al. At least one in seven cases of cancer is caused by smoking: global estimates for 1995. Int J Cancer, 1994;59,494-504. 7. Mannino DM, Stoller JK. Cigarette smoking and other risk factors for lung cancer. UpToDate. Jul. 2014. 8. Baldini EH, Barnes PJ. Women and lung cancer. UpToDate. Oct. 2014. 9. Diagnosis and Management of Lung Cancer, 3rd ed. American College of Chest Physicians Evidence-Based Clinical Practice Guidelines. May 2013. 10. Janssen-Heijnen ML, Coebergh JW, Klinkhamer PJ, Schipper RM, Splinter TA, Mooi WJ. Is there a common etiology for the rising incidence of and decreasing survival with adenocarcinoma of the lung? Epidemiology 2001. PubMed 2001; Mar 12(2):256. 11. Squamous cell lung carcinoma. College of American Pathologists. May 2013. 12. Travis WD, Brambilla E, Noguchi M, Nicholson AG, Geisinger KR, Yatabe Y, Beer DG. International association for the study of lung cancer/american thoracic socie-ty/european respiratory society international multidisciplinary classification of lung adenocarcinoma. J Thorac Oncol. 2011 Feb; 6(2):244-85. 13. Modlin IM, Lye KD, Kidd M. A5-decade analysis of 13,715 carcinoid tumors. Can-cer 2003. PubMed 2003; 97:934. 14. Hemminki K, Li X. Incidence trends and risk factors of carcinoid tumors: a nation-wide epidemiologic study from Sweden. Cancer 2001. PubMed 2001; 92:2204. 15. Yendamuri S, Caty L, Pine M, Adem S, Bogner P, Miller A, Demmy TL, Groman A, Reid M. Outcomes of sarcomatoid carcinoma of the lung: a Surveillance, Epidemi-ology, and End Results Database analysis. Surgery 2012. PubMed2012;152(3):397.
  • 123. 124 16. Popper HH. “Large cell carcinoma of the lung – a vanishing entity?”. Memo - Mag-azine of European Medical Oncology. 2011; 4: 4–9. 17. Govindan R, Page N, Morgensztern D, Read W, Tierney R, Vlahiotis A, Spitznagel EL, Piccirillo J. Changing epidemiology of small- cell lung cancer in the United States over the last 30 years: analysis of the surveillance, epidemiologic, and end results database. J Clin Oncol. 2006; 24(28):4539. 18. Ministerio de Salud de Chile. Unidad de Tabaco de la División de Regulación y Rectoría. Programa de Salud Cardiovascular: la cesación del consumo de tabaco. 2011. 19. Dr. Undurraga A. Cáncer Pulmonar. Departamento de Medicina, Unidad de Enfer-medades Respiratorias. Clínica Las Condes. 2007. 20. Mountain CF. Revisions in the International System for Staging Lung Cancer. Chest 1997; 111:1710. 21. Feinstein AR, Wells CK. A clinical-severity staging system for patients with lung cancer. Medicine (Baltimore) 1990; 69:1. 22. Chute CG, Greenberg ER, Baron J, et al. Presenting conditions of 1539 population-based lung cancer patients by cell type and stage in New Hampshire and Vermont. Cancer 1985; 56:2107. 23. Hirshberg B, Biran I, Glazer M, Kramer MR. Hemoptysis: etiology, evaluation, and outcome in a tertiary referral hospital. Chest 1997; 112:440. 24. Kuo CW, Chen YM, Chao JY, et al. Non-small cell lung cancer in very young and very old patients. Chest 2000; 117:354. 25. Lepper PM, Ott SR, Hoppe H, et al. Superior vena cava syndrome in thoracic ma-lignancies. Respir Care 2011;56:653. 26. Silvestri RC. Patient information: Chronic cough in adults (Beyond the Basics). Up-ToDate. Mar 2014. 27. Thomas KW. Patient information: Lung cancer risks, symptoms, and diagnosis (Beyond the Basics). UpToDate. Aug 2013. 28. Midthun DE. Overview of the risk factors, pathology, and clinical manifestations of lung cancer. UpToDate. Jan 2014. 29. Thomas KW. Overview of the initial evaluation, diagnosis, and staging of patients with suspected lung cancer. UpToDate. Aug. 2014. 30. Dalmau J, Rosenfeld MR. Paraneoplastic syndromes affecting peripheral nerve and muscle. UpToDate. Oct 2014. 31. Zuleta R, Hurtado J, González F. Cirugía de Tórax, Manual del Residente. Hospital San José.
  • 125. 126
  • 126. 127 3.1 Anatomía delesófago Gajardo J, Sepúlveda A, Hernández C, Sepúlveda R. Introducción El esófago es un conducto muscular hueco, atraviesa el mediastino posterior para comunicar la hipofaringe con el estómago. Su función es transportar alimentos y líquidos. Anatomía Sitios de constricción esofágica (en 3 punto) El esófago es un conducto muscular, revestido por mucosa, que transcurre por el cuello, tórax y abdomen. Se localiza en el mediastino posterior. Se distinguen cuatro segmentos esofágicos: faríngeo, cervical, torácico y abdominal. El esófago comienza en la base de la faringe, en C6, y termina en el abdomen, en donde se une al cardias gástrico en T11. En un primer momento de sus 25-30 cm de recorrido, el esófago cervical es una estructura situada en la línea media que se desvía ligeramente a la izquierda de la tráquea a su paso por el cuello hacia el tórax. Sigue su recorrido y a la altura dela carina se desvía hacia la derecha para adaptarse alcayado aórtico. Después, serpentea por detrás del bronquio principal izquierdo y permanece ligeramente desviado a la izquierda al atravesar el diafragma por el hiato esofágico en la vértebra T11, anterior a la aorta. En el cuello y la parte superior del tórax, el esófago se localiza entre la columna vertebral, posteriormente, y la tráquea, anteriormente.Alaalturadelacarina,elcorazónyelpericardio se sitúan directamente por delante del esófago torácico. Inmediatamente antes de penetrar en el abdomen, la aorta torácicaempujaanteriormentealesófagoyambasestructuras atraviesan juntas el diafragma para acceder al abdomen, separadas entre sí por el ligamento arqueado medio. Constricción diafragmática
  • 127. 128 Irrigación deesófago Elesófagotienedoszonasdepresiónclaramentediferenciadas, que marcan su inicio y final: el esfínter esofágico superior (EES) y el esfínter esofágico inferior (EEI). Su irrigación, podemos dividirla en 3 segmentos: a nivel cervical dado por las arterias tiroideas inferiores y la arteria tiroidea superior. A nivel torácico emergen 4 a 6 ramas de la aorta y ramas de las arterias bronquiales. A nivel abdominal se irriga por la arteria gástrica izquierda y la arteria frénica izquierda.
  • 128. 129 El drenaje linfático es un sistema complejo constando de porción submucosa y muscular. A nivel cervical drena a linfonodos paratraqueales y cervicales profundos; en el tórax a linfonodos mediastínicos y ducto torácico; y en el abdominal hacia los nódulos gástricos izquierdos y celiácos. Su inervación es dado por fibras simpáticas (adrenérgicas) inhibitorias y fibras prasimpáticas (colinérgicas) excitatorias. El nervio laríngeo superior da la inervación motora de los músculos constrictor faríngeoinferior ycricotiroídeo. Elnervio laríngeo recurrente inerva al músculo estriado y forma los plexos deAuerbach ydeMeissner que permiten la peristalsis. Drenaje venoso del esófago
  • 129. 130 Capas histológicas del esófago Fisiología Laprincipalfuncióndelesófagoesladeglución.Lacontracción faríngea empuja al bolo alimenticio dentro del esófago y relaja el EES e inicia la peristalsis, generando una serie de contracciones musculares, coordinadas para hacer pasar los alimentos. Onda peristáltica primaria: la deglución voluntaria produce la relajación simultáneadel EES yEEI. Posteriormente,seinicia desde el EES en el esófago una onda peristáltica involuntaria a velocidad de 2 a 4 cm/s (más lenta en la mitad superior de la musculatura estriada y más rápida en la mitad inferior de musculatura lisa), que lleva el bolo alimentario hacia el estómago, en un período que dura de 6 a 9 segundos. Al alcanzar el EEI la onda primaria se enlentece. Estas ondas de contracción producen una presión más alta en el esófago distal que en el proximal. Onda peristáltica secundaria: onda peristáltica local generada por distensión en cualquier punto del esófago. Ayuda a limpiar el esófago de restos de alimento. Durante el ayuno su frecuencia es irregular. Onda terciaria: contracciones estacionarias no propulsivas. Sonondasnopatológicas ydeocurrenciacomúnenpersonas normales. Su origen es espontáneo, de baja amplitud y no son iniciadas por la deglución. Durante el ayuno su frecuencia es irregular. Bibliografía 1. Moore K, Dalley A, Agur A. Moore Anatomía Con orientación clínica. 7a edición. Barcelona, España: Editorial Wolters Kluwer; 2013. Capa muscular
  • 130. 131 3.2 Divertículos esofágicos Gajardo J, Sepúlveda A, Hernández C, Sepúlveda R. Introducción Son evaginaciones o salientes anormales de la pared del esófago de aspecto sacular, que comunican con la luz a través de una abertura de tamaño variable y que en algunas ocasiones pueden provocar dificultad para la deglución. Las tres zonas en las que aparecen con mayor frecuencia son la faringoesofágica (divertículo de Zenker), la parabronquial (mesoesofágica o divertículo de tracción) y la epifrénica (supradiafragmática). La mayoría de los divertículos se originan debido a una alteración motora primaria o a una anomalía del EES o del EEI. Los divertículos verdaderos abarcan todas las capas de la pared esofágica (mucosa, submucosa y muscularis). Generalmente ocurren por un proceso de tracción, producido por la adherencia de ganglios linfáticos mediastínicos inflamatorios extraesofágicos que al cicatrizar y contraerse traccionan al esófago durante este proceso. Con el paso del tiempo, la pared esofágica se hernia formando una evaginación, que da lugar a un divertículo. Divertículos esofágicos
  • 131. 132 Losdivertículosfalsosopseudodivertículosestánconstituidos únicamentepormucosaysubmucosa.Estossuelenocurrirpor pulsión, debido a una presión intraluminal elevada generada poralgún trastorno de lamotilidad.Estas fuerzas hacenquela mucosa yla submucosa se herniena través de lamusculatura esofágica. Los divertículos de Zenker y los epifrénicos por pulsión entran dentro de la categoría de los divertículos falsos por pulsión. Divertículo faringoesofágico/ zenker Es el tipo de divertículo más frecuente en la actualidad, con una prevalencia estimada de 0,1-0,11%1. Suele aparecer en pacientes mayores de 60 años, por lo que se ha postulado su relación con una disminución de la elasticidad y el tono muscular con el paso de los años. Se localiza en el llamado triángulo de Killian, entre las fibras oblicuas del músculo tirofaríngeoylasfibrashorizontalesdelmúsculocricofaringeo. Realmente es un pseudodivertículo formado por mucosa y submucosa que emerge de la porción posterior del músculo constrictor faríngeo. Cadavezquelapresiónintraesofágicaaumenta,comosucede al deglutir, el divertículo es sometido a distensión y puedeir creciendo. Paulatinamente, el saco va creciendo y puede llegar a tener grandes proporciones. Los grandes divertículos completamente desarrollados, tienen un orificio de entrada y un cuello estrecho; al llenarse de saliva o material deglutido penden del cuello comprimiendo el esófago desde fuera. La síntomas se inician una vez que el divertículo aumenta de tamaño. La clínica clásica considera la disfagia progresiva, regurgitación, tos crónica, halitosis y sensación de masa en la garganta. En personas mayores son especialmente frecuentes la halitosis, los cambios de voz, el dolor retroesternal y las infecciones respiratorias. Algunasdesuscomplicacionessonlaneumoníaporaspiración, malnutrición, úlcera péptica, hemorragia digestiva alta, parálisis de cuerdas vocales. Otra complicación menos frecuente es el desarrollo de malignidad debido a la inflamación e irritación crónica, con una incidencia de 0,5% y debe sospecharse ante un empeoramiento de los síntomas. El diagnóstico se confirma mediante una radiografía de esófago con estudio baritado, en la cual se puede visualizar el divertículo lleno de bario y reposando posteriormente junto al esófago. No es necesario recurrir a la manometría esofágica ni a la endoscopía, la cual está desaconsejada debido al alto riesgo de perforación. Eltratamientopuedeserendoscópicooquirúrgico.Enlatécnica endoscópicaseseccionaelseptoqueseparaeldivertículodel esófago con un instrumento con electrocoagulación o con la ayuda de una engrapadora mecánica. La técnica quirúrgica clásica se realiza a través de una cervicotomía izquierda, con unamiotomíaenlosmúsculostirofaríngeoycricofaríngeomás una resección del divertículo. En divertículos menores a 2 cm la miotomía es suficiente, mientras que en divertículos más grandes (> 5 cm) está indicada además la diverticulectomía. Independientedelatécnicautilizada,lospacientesresponden muy bien y los resultados son excelentes. Divertículo mesoesofágico Es un divertículo verdadero generado por tracción de estructuras del mediastino en el tercio medio del esófago. Puede ser congénito, debido a un trastorno primario de la motilidad, o adquirido. La tuberculosis solía ser la principal causa de divertículos mesoesofágicos al generar inflamación de los ganglios linfáticos mediastínicos infectados. Recientemente han aumentado los casos por la histoplasmosis y la consiguiente mediastinistis fibrosante. Lamayoríadeloscasossonasintomáticos.Sesuelendetectar de manera casual en estudios de alguna otra patología. En el caso de presentar síntomas, pueden producir disfagia, dolor torácico y regurgitación, síntomas que suelen ser indicativos de una dismotilidad primaria subyacente. En ocasiones, la hemoptisis puede ser uno de los primeros síntomas. Su presencia indica una erosión infecciosa de los ganglios linfáticos. Para el diagnóstico se recurre a la esofagografía con bario, que informa la existencia y localización del divertículo. El estudio con tomografia computada permite identificar una posible linfoadenopatía mediastínica.
  • 132. 133 Imagen 1 Esofagografía con bario con proyección póstero - anterior. Se eviden- cia medio de contraste dentro del divertículo esofágico. Imagen 2 Esofagografía con bario con proyección lateral. Resto de medio de contraste al interior del divertículo, mientras que el resto sigue su curso en el esófago.
  • 133. 134 Esimportanterealizarunaendoscopíaparadescartarposibles anomalías de la mucosa (comocáncer) que pueden ocultarse y pasar inadvertidas. Todos los pacientes, sintomáticos o no, deben someterse a un estudio manométrico para identificar un posible trastorno motor primario. El tratamiento dependerá de los resultados de la manometría. Para tratar un divertículo mesoesofágico es esencial determinarsuetiología.Pacientesasintomáticosconganglios mediastínicos inflamados por tuberculosis o histoplasmosis, deben ser tratados con antituberculina o antifúngicos. Si el divertículo mide menos de 2 cm, puede bastar con observación. Si el paciente progresa y desarrolla síntomas o si el divertículo mide más de 2 cm, está indicada la resección quirúrgica. Divertículos epifrénicos Esunpseudodivertículodeltercioinferiordelesófago,ubicado a menos de 10 cm de la unión gastroesofágica. Se deben en la mayoría de los casos a un aumento del grosor de la musculatura esofágica distal o de la presión intraluminal. Son divertículos por pulsión, o falsos, que se asocian a menudo a un trastorno de la motilidad esofágica, tales como espasmo esofágico difuso o acalasia. Suelen ser asintomáticos, pero también pueden presentar disfagia o dolor torácico, orientando una dismotilidad. Otros síntomas como la regurgitación, el dolor epigástrico, la anorexia, la pérdida de peso, tos crónica y la halitosis, son indicativos de una alteración avanzada de la motilidad que ha dado lugar a la formación de un divertículo epifrénico de tamaño considerable. Lamejorherramientaparaeldiagnósticoesunaesofagografía de bario, ya que permite determinar claramente el tamaño y la proximidad del divertículo al diafragma. Además, se puede complementar con manometría para evaluar la motilidad general del cuerpo esofágico y de endoscopía para evaluar posibles lesiones de la mucosa, como esofagitis, esófago de Barret y cáncer. El tratamiento es similar al del divertículo mesoesofágico. No es necesario resecar divertículos menores a 2 cm. Existe cuestionamiento respecto a si el tratamiento debe ser dado a pacientes asintomáticos, pero la mayoría se inclina por cirugía exclusivamente en los casos con síntomas severos o divertículos de gran tamaño.
  • 134. 135 Bibliografía 1. Siddiq MA, Sood S, Strachan D. Pharyngeal pouch (Zenker’s diverticulum) Postgrad Med J.2001; 77:506–511. 2. Ferreira LE, Simmons DT, Baron TH. Zenker’s diverticula: pathophysiology, clinical presentation, and flexible endoscopic management. Dis Esophagus. 2008; 21:1–8. 3. Overbeek JJ. Pathogenesis and methods of treatment of Zenker’s diverticulum. Ann Otol Rhinol Laryngol. 2003;112:583–593. 4. Bradley PJ, Kochaar A, Quraishi MS. Pharyngeal pouch carcinoma: real or imaginary risks?Ann Otol Rhinol Laryngol. 1999; 108:1027–1032. 5. Herbella FA, Patti MG. Modern pathophysiology and treatment of esophageal diverticula.Langenbecks Arch Surg. 2012; 397:29– 35. 6. ORRINGER M. Epiphrenic diverticula: Fact and Fable. Ann Thorac Surg 1993; 55: 1067-1068. 7. FASANO N, LEVINE M, RUBESIN S, et al. Epiphrenic diverticulum: clinical and radiographic findings in 27 patients. Dysphagia 2003; 18: 9-15. 8. BRAGHETTO M, Italo et al. Resultados del tratamiento quirúrgico de la patología esofágica benigna con cirugía mínimamente invasiva: Experiencia en 483 pacientes. Rev Chil Cir [online]. 2013, vol.65, N.° 2.
  • 135. 136
  • 136. 137 3.3 Trastornos motores del esófago Introducción Gajardo J, Sepúlveda A, Hernández C, Sepúlveda R. Podemos clasificar los trastornos motores del esófago en primarios ysecundarios.Dentrodelos trastornos primarios se encuentran la acalasia, el espasmo esofágico difuso, el esfínter esofágico inferior hipertensivo, el esófago en cascanueces y los trastornos inespecíficos. Los trastornos secundarios derivan habitualmente de una enfermedad sistémica que compromete además al esófago. En esta oportunidad, solo abordaremos los trastornos primarios. Acalasia Enfermedad de etiología desconocida, tiene una incidencia de 1-100.000 habitantes/año. La edad de presentación es entre los 25 a 60 años, sin diferencia entre sexos. Fisiopatológicamenteesgeneradaporlapérdidadelascélulas ganglionares del plexo mientérico (Auerbach) esofágico. Se observa una agangliosis virtual. Con compromiso tanto de células excitatorias como inhibitorias, estas últimas efectúan la relajación del esfínter esofágico inferior para la deglución, así como la propagación secuencial de la peristalsis. Su ausencia conduce a una falta de relajación del EEI para la deglución, así como falta de peristalsis esofágica. Acalasia
  • 137. 138 Ante la sospecha de acalasia deberían solicitar- se los siguientes exámenes: 1. Manometría esofágica: con el objetivo de evaluar el peristaltismo del esófago. Podemos observarla relajación incompleta o aumento del tono delEEI, aumento de la presión del cuerpo esofágico y falta de peristalsis durante la deglución. 2. Radiografia de esófago: se realiza mediante el uso de medio de contraste baritado por vía oral. Permite la evaluación anatómica y funcional del esófago, donde podremosencontrardistintosgradosdedilataciónanivel del cuerpo del esófago y una estrechezcerca de la unión gastroesofágica (signo pico de pájaro o cola de ratón). 3. Endoscopía digestiva alta: evidencia dilatación esofágica, restos alimentarios y dificultad para el paso por el EEI. Útil para descartar otras causasde estenosis a nivel del EEI (neoplasias). Imagen 1 Esofagograma donde se evidencia dilatación proximal del esófago y una estrechez a nivel del esfínter esofágico inferior compatible con acalasia.
  • 138. 139 Existe una serie de opciones terapeúticas. Todasellas buscan aliviarlasintomatologíacausadaporelEEIhipertónico,siendo tratamientos paliativos, ya que ninguna de ellas corrige la falta de motilidad del cuerpo esofágico. Dentro de ellas se encuentran: • Inyección de toxina botulínica: (Botox®) vía endoscópica al EEI. Solución transitoria (dura 6-8 meses aproximadamente) y su valor es elevado. Se inyecta endoscópicamente en el EEI por ubicación visual aproximada de 1 cm sobre la línea Z en los 4 cuadrantes. Tienebuenresultadosintomáticoacortoplazo.Conelpaso deltiemposuefectovadisminuyendoenpotenciayduración. • Cirugía: Esofagomiotomía de Heller. Procedimiento quirúrgico en que se debilita el EEI cortando sus fibras musculares exponiendo la mucosa. Tiene buen resultado a corto y a largo plazo • Dilatación endoscópica: Procedimiento en el que se infla un balón con la finalidad de romper las fibras musculares. Es un tratamiento diseñado para debilitar el EEI mediante el desgarro muscular. Dentro de sus complicaciones se encuentran la perforación esofágica y reflujo gastroesofágico. • POEM: Procedimiento endoscópico que consiste en una incisión de la mucosa del esófago para luego realizar una miotomíadelasfibras ciruculares. Dentro desus ventajas encomparaciónconlacirugía,esunprocedimientomenos invasivo y con menor riesgo de reflujo gastroesofágico. Espasmo esofágico difuso (EED) Es un trastorno de hipermotilidad severa, de causa desconocida, que afecta los dos tercios inferiores del esófago. Se aprecia una hipertrofia de la capa muscular y a la microscopia electrónica se detecta una degeneración de fibras vagales aferentes similar a la acalasia, pero sin afectar losplexosmientéricos.Estaalteraciónproducecontracciones repetitivas, simultáneas y de gran amplitud. Se caracteriza por presentarse clínicamente con: 1. Dolor retroesternal al comer o ante un cambio postural (pudiendo imitar al dolor anginoso). 2. Disfagia baja, intermitente, episódica, severa (ante líquidos y sólidos), que empeora con el estrés y con algunos alimentos (helados y bebidas calientes). 3. Regurgitación. El 50% de los casos se acompaña de hernia hiatal sintomática, con pirosis, reflujo e hipo. Es un diagnóstico diferencial con dolor de origen cardiaco. La radiografía es anormal en el 50% de los casos, con ondas persitálticas terciarias, tomando aspecto de “tirabuzón” o “esófago en rosario”. Hay pseudodiverticulosis en etapas tardías. Es frecuente la asociación con divertículo epifrénico, hernia hiatal y hernia diafragmática. La manometría es fundamental para el diagnóstico. En el estudio se puede apreciar ondas peristálticas primarias solo en la mitad proximal, contracciones espontáneas, simultáneas, de gran amplitud (>120mmHg) o de larga duración (>2.5 seg), peristalsis normal, ondas terciarias en el cuerpo del esófago no relacionadas con deglución y una presión de reposo del EEI habitualmente normal, con una relajación normal a la deglución. La endoscopía es útil para descartar un tumor, hernia hiatal o reflujo gastroesofágico. Tratamiento: 1. Médico:sintomático.Seaconsejaevaluaciónpsiquiátrica (para tratar condiciones estresantes, habitualmente presentes). Cuando hay RGE asociado, el manejo del reflujoproducealgúnaliviosintomático.Nitritosdeacción prolongada pueden ayudar (Nifedipino e Hidralazina). 2. Dilatación esofágica: efectividad hasta 70- 80% en disfagia severa. Su uso se prefiere en ancianos o pacientes debilitados. Cuando existe estenosis, dilatación de hasta 60 Fr. 3. Cirugía: es controversial. Está indicado ante falla a tratamiento médico o endoscópico, o presencia de un divertículo por pulsión en el esófago torácico. Consiste en una esofagomiotomía larga extendida (hasta el arco aórtico) por vía torácica izquierda, exponiendo la mucosa en un tercio de la circunferencia esofágica y una cardiomiotomía. En caso de hernia hiatal o RGE agregar Fundoplicatura Nissen corta (0,5 cm). Solo es exitosa en el 80% de los casos (menor que en acalasia). Esófago en cascanueces (nutcracker) Dado por contracciones peristálticas de alta amplitud o hipertensivas, con dolor torácico o disfagia. Su etiología es desconocida. Tiene un componente psicológico importante (psicosomático, ansiedad). Es un trastorno de hipermotilidad muyfrecuenteyelmásdoloroso.Hasidoreportadoquepuede evolucionar hacia espasmo difuso y/o acalasia. Se presenta como un dolor torácico similar a dolor anginoso, por lo tanto, primero debe descartarse esa posibilidad. Además, se asocia a disfagia. La manometría es el gold standard. Se diagnostica cuando la manometría esofágica distal muestra una presión peristáltica dos desviaciones estándar arriba de lo normal (180-400mmHg; siendo lo normal entre 50-120mmHg). Para su manejo se utilizan bloqueadores de calcio (Diltiazem y Nifedipino) y nitratos, que disminuyen la amplitud de la presión peristáltica y alivian el dolor torácico. Sin embargo,
  • 139. 140 los resultados son similares al uso de placebo. Una buena relación médico-paciente es el tratamiento más efectivo. Se recomienda evitar la cafeína y los alimentos fríos y calientes. La realización de dilatación esofágica no ha demostrado resultados significativos. Bibliografía 1. Longo DL, Fauci AS, Kasper DL, Hauser SL, Jameson JL, Loscalzo J, editores. Harrison. Principios de medicina interna. Vol. 2. 18.a ed. México: McGraw-Hill; 2012. 2. Sabiston, D. and Townsend, C. (2013). Sabiston Tratado de cirugía. Barcelona: Elsevier España. 3. Castell DO. Esophageal motility disorders. En: UpToDate, Post TW (Ed), UpToDate, Waltham, MA. (Consultado el 17 de enero de 2015). 4. Henríquez D Ana, Csendes J Attila, Rencoret P Guillermo, Braghetto M Ítalo. Prevalencia de los diferentes trastornos motores primarios del esófago: Estudio prospectivo de 5.440 casos. Rev. méd. Chile 1270-1275. 5. Mejía M Ricardo, León F Felipe, Donoso D Andrés, Pimentel M Fernando, Ibáñez A Luis, Sharp P Allan. Desarrollo de una nueva técnica endoscópica para el tratamiento de la acalasia: Poem (per-oral endoscopic myotomy). Rev. Chil. Cir. 2014 Abr; 66(2): 181-187.
  • 140. 141 3.4 Enfermedad por reflujo Gastroesofágico Sepúlveda A, Sepúlveda R Definición La Asociación Americana de Gastroenterología define a la enfermedad por reflujo gastroesofágico (ERGE) como la presencia de síntomas molestos para el paciente o complicaciones como resultado del paso del contenido gástrico al esófago1 . Epidemiología La enfermedad por reflujo se da en el 10-30% de la población occidental. Es menos prevalente en países asiáticos, donde su incidencia es aproximadamente un 5%2 . A nivel nacional se ha estimado una incidencia de 29,9% (mujeres 33.1%, hombres 26,5%)3 . Fisiopatología ElmecanismoprincipaleslarelajaciónanormaldelEEI,loque permiteelpasodelcontenidogástricoalesófago.Larelajación anormal del EEI se debe a distintas causas, como alimentos (grasa, chocolate, alcohol), fármacos (antocolinérgicos, benzodiacepinas, dopamina, bloqueadores de los canales de calcio), obesidad, embarazo y tabaco. También se ha asociado a la presencia de hernia hiatal. En relación con la gastrectomía en manga, debemos tener especial cuidado. Esta técnica de cirugía bariátrica puede ocasionar empeoramiento de los síntomas en personas portadoras de ERGE, es por eso que se debe ser cuidadoso y estricto con las indicaciones de cirugía bariátrica. Factores de riesgo Dentro de los factores de riesgo se encuentran el antecedente familiar de ERGE, edad avanzada, hernia hiatal y obesidad. Otros factores de riesgo menos importantes son el uso de fármacos que reducen el tono del EII (nitratos, bloqueadores de los canales de calcio, anticolinérgicos), estrés, tabaco, alcohol y dieta (chocolates, comidas grasas, leche, bebidas carbonatadas). Clínica Los síntomas principales son la pirosis y la regurgitación. Existen otros síntomas considerados como atípicos o de alarma, dentro de los cuales son el dolor torácico o abdominal, tos, difagia, baja de peso yronquera. Los síntomas principales son la pirosis y la regurgitación. Existen otros síntomas considerados como atípicos o de alarma, dentro de los cuales son el dolor torácico o abdominal, tos, difagia, baja de peso y ronquera. El Consenso de Montreal clasifica la ERGE en síndromes esofágicos y extraesogágicos: Síndromes Esofágicos Sintomáticos • Reflujo típico • Dolor torácico Lesión esofágica • Esofagitis • Estenosis • Esófago deBarrett • Adenocarcinoma deesófago 1 Philip O. Katz, Lauren B. Gerson and Marcelo F. Vela. Diagnosis and Management of Gastroesophageal Reflux Disease. Am J Gastroenterol 2013; 108:308–328. 2 Vakil N, van Zanten SV, Kahrilas P, et al. The Montreal definition and classification of gastroesophageal reflux disease: a global evidence-based consensus. Am J Gastroenterol. 2006; 101:1900-1920. 3 Encuesta nacional de salud, Chile 2003. Ministerio de salud de Chile 2004.
  • 141. 142 Síndromes Extraesofágicos Asociaciones establecidas • Tos • Laringitis • Asma • Erosión dental Asociaciones propuestas • Faringitis • Sinusitis • Fibrosis pulmonaridiopática • Otitis mediarecurrente Diagnóstico El diagnóstico de ERGE es clínico. Solo ante la presencia de síntomas atípicos se recomienda la realización de exámenes complementarios. Endoscopía: indicadafrenteasíntomas atípicos odealarma. Puede ser normal en ERGE. Algunos hallazgos pueden ser la presencia de esofagitis, esófago de Barrett y hernia hiatal. pH metría esofágica 24 horas: indicado en pacientes con persistenciadesíntomasapesardetratamientofarmacológico y endoscopía sin alteraciones. Registra pH < 4. Informa el númerototaldeepisodiosdereflujo,surelaciónconeldecúbito y de pie y la duración de la presencia del reflujo ácido. Su limitación es que no informa sobre el reflujo alcalino. Impedanciometría: Gold standard. Informa la presencia de reflujo ácido o alcalino. La asociación Americana de Gastroenterología recomienda la realización de este examen con la suspensión del tratamiento farmacológico 7 días previos, amenosqueseestébuscandolapresenciadereflujonoácido.
  • 142. 143 Complicaciones ERGE Esofagitis por ERGE: lesiones de la mucosa gástrica producidas por el contenido gástrico refluido. La clasificación de Los Ángeles la cataloga según el grado de compromiso de la mucosa: EstenosisporERGE:ocurrecomoresultadodelareparación de las lesiones del reflujo, con la producción de depósito de colágenoyfibrosisdelaparedesofágica.Ocurregeneralmente en el esófago distal. Se manifiesta por una disfagia lógica, primero a sólidos. Esofagitis: Clasificación de los Ángeles Grupo A Lesión de la mucosa, <5mm de longitud, que no se extiende entre las crestas de dos pliegues mucosos longitudinales. Grupo B Lesión de la mucosa, >5mm de longitud que no se extiende entre las cres- tas de dos pliegues mucosas longitudinales. Grupo C Lesión de la mucosa que se extiende entre las crestas de dos pliegues mucosas, < 75% de la circunferencia. Grupo D Lesión de la mucosa que afecta > 75% de la circunferencia. Esófago de Barrett: hay un cambio de la mucosa esofágica de epitelio escamoso a epitelio columnar con células caliciformes (metaplasia intestinal). Su incidencia ha ido en aumento y se ha relacionado con el adenocarcinoma de esófago.
  • 143. 144 Tratamiento Cambios de estilo de vida: baja de peso, elevación de la cabeza de la cama al dormir, evitar comidas nocturnas, evitar alimentos que aumenten los síntomas. Farmacológico: actualmente los más usados y estudiados que alivian los síntomas son los inhibidores de la bomba de protones (IBP, Omeprazol 20-40 mg/día), que han sido más eficaces que los bloqueadores H2 (ranitidina, famotidina). Logran alivio de los síntomas en el 70-80% de los pacientes. Duración inicial del tratamiento es de 8 semanas. Cirugía: la indicación de cirugía se considera para pacientes jóvenes con buena respuesta al tratamiento médico que no desean tratamiento farmacológico prolongado, alteración de su calidad de vida, asociado a hernia hiatal y en pacientes resistentes al tratamiento con IBP. Antes de la cirugía debe realizarse una manometría para descartar alteraciones de la motilidad esofágica, ya que si presentasen dicha enfermedad la cirugía estaría contraindicada, porque no proporcionaría alivio de la ERGE. La técnica más utilizada en la actualidad es la fundoplicatura de Nissen, en la cual se busca aumentar el tono del EEI rodeando el esófago abdominal con fondo gástrico, además del cierre del hiato esofágico del diafragma. Consigue una tasa de alivio de los síntomas entre un 80-90%. Paso de fondo gástrico Cierre de los pilares del diafragma Cierre fundoplicatura de Nissen
  • 144. 145 Bibliografía 1. Philip O. Katz, Lauren B. Gerson and Marcelo F. Vela. Diagnosis and Management of Gastroesophageal Reflux Disease. Am J Gastroenterol 2013; 108:308–328. 2. Vakil N, van Zanten SV, Kahrilas P,et al. The Montreal definition and classification of gastroesophageal reflux disease: a global evidence-based consensus. Am J Gastroenterol. 2006; 101:1900-1920. 3. Encuesta nacional de salud, Chile 2003. Ministerio de salud de Chile 2004.
  • 145. 146
  • 146. 147 3.5 Perforación esofágica Sepúlveda A,Hernández C, Sepúlveda R. Introducción Epidemiología La perforación esofágica es una patología poco prevalente que está asociada a una alta morbimortalidad, siendo los factores que influyen la etiología, la localización de la lesión y la alta sospecha diagnóstica con inicio de terapia en forma precoz.Unretrasoeneltratamientoaumentalacontaminación e inflamación, siendo la complicación más temida la sepsis pormediastinitis. Es una emergencia quirúrgica. Su detección y tratamiento antes de 24 horas resultan en 80-90% de sobrevida. Posterior a las 24 horas, la sobrevida baja a menos de un 50%. Dentro de su etiología podemos encontrar: instrumental, espontánea, quirúrgica, traumática y cuerpo extraño. Por instrumental se entiende procesos endoscópicos diagnósticos y terapeúticos(porejemplo,dilataciónendoscópica),eslacausa más frecuente. La perforación espontánea habitualmente tiene como causa vómitos profusos o forzados que producen una rotura del esófago a nivel de la unión gastroesofágica (síndrome de Boerhaave). Clínica Los síntomas dependen del nivel de la perforación: dolor cervical, subesternal o epigástrico. También, puede acompañarse de vómitos, hematemesis, disfagia y enfisema subcutáneo. Los signos de perforación cambian con el paso del tiempo. En un primer momento, el paciente puede manifestar taquipnea, taquicardia y fiebre sin otro signo claro de perforación. Al aumentar la contaminación mediastínica y pleural, lospacientes desarrollaninestabilidadhemodinámica y shock. Diagnóstico Lasimágenesapoyanlasospechadiagnóstica.Enlaradiografía de tórax puede observarse un hidroneumotórax. Además, se puede realizar esofagografía con contraste hidrosoluble (no bario) para demostrar la perforación. El TAC de tórax y abdomen con medio contraste IV y oral es útil para determinar la presencia o ausencia de perforación, si está contenida o no (loquedeterminaeltratamiento) ylapresenciadecolecciones a nivel cervical, abdominal o derrame pleural. Tratamiento Perforación esofágica Todo paciente con perforación esofágica debe recibir hidratación parenteral y antibióticos de amplio espectro. La cirugíanoestáindicadaentodoslospacientesconperforación esofágica y el tratamiento dependerá de diversas variables: tiempo de evolución de la perforación, etiología, estabilidad hemodinámica del paciente, presencia de colecciones, patología esofágica subyacente (como carcinoma) y localización de la perforación. En los pacientes clínicamente estables y sin signos de sepsis progresiva se puede adoptar una actitud conservadoraante unaperforacióncontenida.Sehanpropuestotrescriteriospara
  • 147. 148 optarpor unmanejoconservador:1)perforacióncontenidaen laesofagografía,2)síntomasleves y3)sepsisclínicamínima. En un paciente inestable con una perforación libre está indicada la intervención quirúrgica con desbridamiento del tejido desvitalizado, exclusión o resección del esófago, creación de una esofagostomía, drenaje amplio, colocación de una gastrostomía y yeyunostomía de alimentación. Lo más importante es el grado de inflamación alrededor de la perforación, esta se relaciona con el tiempo de evolución. En perforación de menos de 24 horas la inflamación es mínima y se recomienda la reparación quirúrgica primaria (sutura del esófago). Con el tiempo aumenta la inflamación y el tejido se vuelve friable dificultando la reparación. Enfermedadesesofágicasdebasequeafectaneltratamiento: 1) carcinoma resecable, 2) megaesófago por acalasia avanzada, 3) estenosis péptica grave y 4) ingestión caústica. No se recomienda la reparación primaria, ya que se asocian a estrechamiento distal y obstrucción. En estos casos, se recomiendareseccióndelesófagoyreconstruccióninmediata o diferida. En caso de una neoplasia irresecable se procede con un stent esofágico. Perforación posterior a fondoplicatura de Nissen: ocurregeneralmentealtercerocuartodíadelafundoplicatura. El paciente puede presentar dolor, fiebre, taquicardia y evidenciarse una perforación a los estudios imagenológicos. Las opciones del tratamiento son reoperar al paciente, desmantelar la fundoplicatura y suturar la perforación; o bien, instalación de stents endoscópicos temporales. Síndrome de Boerhaave: El profesor Hermann Boerhaave describió por primera vez este síndrome, en el cual la emesis recurrente altera el reflejo normal del vómito (que permite la relajación del esfínter), dandolugaraunaumentodelapresiónesofágicaintratorácica y a la perforación. La perforación ocurre en el esófago intraabdominal, produce una peritonitis y su tratamiento es siempre quirúrgico. Bibliografía 1. Cameron J., Cameron A., Current Surgical Therapy. 11th Ed Elsevier 2014. Chapter The Esophagus, Esophageal Perforation pg 64-68. 2. Braghetto M, I., Rodríguez N, A., Csendes J, A. and Korn B, O. (2005). Perforación esofágica: Experiencia clínica y actualización del tema. Rev. méd. Chile, 133(10).
  • 148. 149 3.6 Cáncer de esófago Brain M, Pizarro MJ, Sepulveda R. Introducción El cáncer de esófago (CE) se mantiene como un desafío para el cirujano. La tasa de mortalidad se mantiene elevada y el tratamiento quirúrgico, cuando es posible de realizar, posee aún alta morbimortalidad. Se incluye dentro del CE a todo aquel tumor que compromete este órgano desde su inicio en la hipofaringe hasta la unión gastroesofágica. Los tumores de la unión fueron clasificados por Siewert: el tipo I corresponde a tumores cuyo centro se ubica entre 1 a 5 centímetros delcardias; Siewert II son aquellos tumores que abarcan desde 1cm por sobre la unión hasta 2 cm bajo ella. Y los tipo III se ubican entre 2 a 5 cm bajo la región cardial. Siewert I y II son tratados como CE1 . Se distinguen dos tipos histológicos principales: escamoso y adenocarcinoma y existen marcadas diferencias geográficas en cuanto a la incidencia de cada variedad y a la prevalencia global del CE. En Asia se encuentran las mayores tasas, específicamente en un área denominada como “el cinturón Clasificación deSiewert 1. Weitz JC. Diagnóstico y tratamiento de las enfermedades di- gestivas. Sociedad chilena de gastroenterología. Santiago 2013.
  • 149. 150 asiático del cáncer esofágico” que abarca los países de Irán con una tasa de 240 enfermos cada 100.000 habitantes, Turkmenistán, Uzbekistán, Afganistán, Mongolia y China, luego en África también se describen países con mayor afección como Sudáfrica, Kenia y Zimbawe. Dentro de Europa, la zona de Normandía presenta la mayoría de casos. Dentro de los EE. UU. el estado de Carolina del Norte presenta la tasa más alta del país alcanzando los 15 por 100.000 habitantes. Clásicamente, el tipo histológico más frecuente era el carcinoma escamoso, sin embargo, esto se mantiene así solo en países orientales o con mayor pobreza. En occidente y países más industrializados la tendencia varió y el tipo adenocarcinoma ya alcanza al menos el 50% o más, esto se ha explicado por el aumento de diagnóstico de esófago de Barret, entre otros factores2 . La edad de presentación promedio es entre los 55 y 70 años. Loshombressonafectados conmayorfrecuenciaenrazónde 3:1, esta diferencia se acentúa en caso de adenocarcinoma2 . Existen múltiples factores de riesgo para el CE (Tabla 1), algunos predisponen para el tipo escamoso: consumo de tabaco,alcohol; yenfermedadescomoacalasia,mientrasque otros aumentan el riesgo de adenocarcinoma: principalmente el reflujo gastroesofágico (RGE) y el consecuente esófago de Barret. Cancer de esófago macroscópico En los últimos treinta años su incidencia ha crecido, principalmente por el mayor número de adenocarcinomas diagnosticados, variedad tumoral que se relaciona con el reflujo gastroesofágico (RGE), patología cada vez más frecuente. Globalmente, se ubica como el octavo cáncer más prevalente precedido por el cáncer pulmonar, mamario, colorrectal, de próstata, útero, estómago y orofaríngeo. En EE. UU. representa el 2% de todos los tumores y hasta el 7% de los tumores gastrointestinales2 . En Chile constituye el 5.° lugar de las neoplasias en el hombre y el 7.° en la mujer, con una tasa de mortalidad global de 3,8 por cada 100.000 habitantes, la cual descendió desde el año 2005 a la fecha. La zona más afectada es la IV Región 1 . Se distinguen dos tipos histológicos principales: escamoso y adenocarcinoma y existen marcadas diferencias geográficas en cuanto a la incidencia de cada variedad y a la prevalencia global del CE. En Asia se encuentran las mayores tasas, específicamente en un área denominada como “el cinturón 2. Seineldin S, Seineldin C. Cáncer de Esófago. Enciclopediaciru- gía digestiva. Sociedad Argentina de Cirugía Digestiva. 2009; I-184, pág. 1-19. El esófago de Barret corresponde a una metaplasia con reemplazo de epitelio esofágico normal por epitelio columnar concélulascaliciformesproductorasdemucina.Esunalesión premaligna que aumenta el riesgo de cáncer 50-100 veces siguiendo la transformación maligna desde displasia de bajo grado hasta cáncer invasor. El tratamiento de esta condición con inhibidores de la bomba de protones no regresa la metaplasia, solo mejora la sintomatología del RGE. La cirugía antirreflujo como la Fundoplicatura si mejora el Barret (50% de pacientes en segmentos cortos), pero no hademostrado disminuir incidencia de cáncer. En pacientes portadores de esta condición se debe realizar un control con endoscopía digestiva cada 2-3 años. En pacientes con Barret y cuya biopsia demuestre displasia de bajo grado, la endoscopía digestiva debe ser anual y en pacientes con displasia de alto gradosedebeofreceruntratamientoendoscópicooquirúrgico de la lesión para evitar el avance a adenocarcinoma. Luego, el control con endoscopía digestiva se debe realizar cada 3-6 meses. Laprevalenciadecánceren acalasiaes deaproximadamente 3-6%, este porcentaje aumenta cuanto mayor sea el tiempo de evolución de la enfermedad. Está descrito que un buen tratamiento de acalasia reduce el riesgo de CE, sin embargo, estospacientesdebenmantenerunseguimientoendoscópico seriado.
  • 150. 151 La terapia de elección es la resección mucosa endoscópica o mucosectomía. La ventaja de este procedimiento es la obtención de tejido para su estudio patológico. Alcanza una remisión local del 95%. La complicación más frecuente es el sangrado. Perforación esofágica ocurre en menos del 1%. El tratamiento Gold estándar es la esofagectomía. Dado la relación de la displasia de alto grado con cáncer, muchos especialistas larecomiendan.Enmanosdeexpertos,alcanza tasas de sobrevida a 5 años de 90%, sin embargo, se han descrito rangos de mortalidad intraoperatoria entre 3 a 12% y morbilidades hasta en la mitad de los operados. Clínica Tabla 1. Factores de riesgo del CE. Displasia de alto grado y Cáncer superficial Displasiadealtogradoescaracterizadaporcambioscelulares malignosconfinadosalepitelioyquenopenetranlamembrana basal. Etapa previa a cáncer. Puede coexistir con cáncer invasor, por lo que debería considerarse como precursor y marcador de cáncer. Al momento del diagnóstico 40-60% de pacientes ya tendrán un cáncer invasor. Progresión acáncer en 16-59%en5 a 8 años deseguimiento. El mejor método de detección es la EDA con biopsia por protocolo de Seattle (biopsias de 4 cuadrantes cada 1 cm). Lasopcionesincluyenunmanejoexpectanteconseguimiento endoscópicocada3-6meses,sinembargo,estaestrategiano ha demostrado disminución de mortalidad ni costo-efectividad. Otra alternativa es la ablación endoscópica por terapia fotodinámica o radiofrecuencia. La primera tiene un porcentaje de éxito entre 50-77% de los casos con reepitelización escamosa en la mitad de los pacientes. Su principal complicación es la estenosis que ocurre en un tercio de casos. La progresión a cáncer posterior a esta terapia es de 5a 13%.La ablación porradiofrecuencia reporta erradicación completa de la metaplasia en 70% de pacientes. No se evidenció estenosis residuales. La sintomatología del cáncer incipiente es inespecífica. Pacientes pueden referir molestia retroesternal o ser asintomáticos. La clínica habitual y sospechosa de neoplasia se constituye cuando el tumor es avanzado y habitualmente tiene compromiso transmural. Lo característico es la disfagia lógica y la baja de peso. Síntomas menos frecuentes son el dolor, anemia, tos, que indica compromiso de vía aérea o fístula; y disfonía por infiltración o compresión de nervios laríngeos recurrentes. Ladisfagiaacontececuandoalmenos2/3delacircunferencia esofágica se encuentra comprometida por tumor. Es permanenteylógica,esdecir,comienzaconalimentossólidos yprogresahastamanifestarsetambiénconalimentoslíquidos. Además, es de fácil localización por el paciente. La regurgitación se presenta cuando la disfagia es severa y es mayor cuanto más proximal sea la estenosis. Tos persistente y cuadros infecciosos respiratorios se deben a la retención de saliva y alimentos, los cuales pasan al árbol bronquialafectandoconmayorfrecuenciaalpulmónderecho. El desarrollo de una fístula traqueo-esofágica también se manifestará por patologías respiratorias. Alcontrariodelpacienteportadordecáncergástrico,elapetito se encuentra conservado, sin embargo, el paso de alimento hacia distal es difícil por lo que el paciente disminuye su ingesta con la consecuente disminución de peso. La parálisis del nervio laríngeo recurrente se expresará como una voz bitonal y su causa yace en la compresión nerviosa por adenopatías metastásicas o menos frecuente por el tumor primario. Factores de riesgo para cáncer de esófago Cáncer Escamoso • Tabaco • Alcohol • Nitrosaminas • Deficiencias vitamínicas(A.C) • Lesión porcáusticos • Lesión térmicas • Condiciones predisponentes Acalasia Tylosis Sd. Plummer Vinson Papiloma Humano Enfermedad celíaca • Adenocarcinoma Reflujo gastroesofágico Obesidad Edad sobre los años Sexo masculino Etnia caucásica
  • 151. 152 ESOFÁGICOS EXTRAESOFÁGICOS • Disfagia • Regurgitación • Dolor en la ingestión • Tos crónica • Hematemesis • Anorexia • Dolor permanente • Pérdida depeso • Parálisis recurrencial • Tos con la deglución • Hemoptisis Tabla 2. Clínica del CE. Diagnóstico El estudio se inicia con radiografía esófago-estómago-duodeno contrastada con bario. Este examen es de bajo valor y fácil de realizar. Entrega información anatómica y funcional con respectoalamotilidadesofágica,lapresenciadehernia hiatal o reflujo, y puede también evaluar el grado de obstrucción así como detectar anomalías esofágicas sospechosas de tumor manifestadas por zonas de estenosis o irregularidades de la mucosa. En la actualidad ha perdido terreno desplazado por la endoscopía y la tomografía computada. Su utilidad permanece vigente en el estudio de fístulas El diagnóstico se establece con biopsia por medio de endoscopía digestiva alta. Cánceres precoces se visualizan como placas superficiales, nódulos o úlceras, mientras que tumores avanzados toman la forma de masas ulceradas o estenosantes. Mientras más muestras se tomen, mayor es la sensibilidad para detectar carcinoma alcanzando el 98% con siete muestras. Otros estudios por realizar son: Endosonografía (EUS): es el mejor examen para el estudio local.Tieneunaprecisiónglobalde80-90%paralaprofundidad tumoral (T) y el estado nodal regional (N). Es muy importante para la decisión terapéutica, ya que si la endosonografía demuestra solo compromiso mucoso (T1a) bastaría con resecciónendoscópicadelalesión.Además,sepuederealizar biopsia por punción de linfonodos guiados con endosonografía mejorando la etapificación del paciente. Su desventaja es el aún elevado costo y baja disponibilidad en nuestro país. El CE escamoso frecuentemente presenta metástasis supradiafragmáticas, mientras que el adenocarcinoma en órganos abdominales; 25% en hígado, 20% páncreas, luego pulmón, huesos y cerebro. Tomografía computada axial (TAC): es el examen inicial de la etapificación, y junto con la EDA, es el más utilizado dada su disponibilidad,sinembargo,tienevalorlimitadoparaelestudio loco regional. Puede demostrar la presencia de grandes adenopatías, pero no siempre logra predecir con exactitud la profundidad tumoral (T). Es útil para descartar metástasis a distancia, sin embargo, su sensibilidad baja cuando estas son pequeñas como en carcinomatosis peritoneal. Tomografía de positrones (PET): junto con el TAC,tiene como objetivodescartarlapresenciademetástasisadistancia.Tiene gran sensibilidad y especificidad en metástasis, 88% y93% respectivamente, mayor que TAC, no obstante, no es buen examen para el estudio loco regional, probablemente por la grancaptacióndeltumorprimarioloquedificultalaevaluación nodal cercana. Su desventaja es el aún elevado costo y baja disponibilidad en nuestro país, por lo mismo se utiliza cuando existe alta sospecha de metástasis, las cuales no fueron demostradas por TAC. También, se usa para reetapificar pacientes que fueron sometidos a neoadyuvancia y ahora esperan por cirugía. Estudios revelan que el PET modifica conducta en hasta el 20% de los pacientes.
  • 152. 153 Etapificación El objetivo de la etapificación es identificar a los pacientes que se beneficiarán de los distintos tipos de tratamientos. Actualmente, se utiliza la 7.a versión del sistema TNM de la American Joint Comitee of Cancer, la cual incluye tumores de la unión gastroesofágica y aquellos tumores que comprometen los primeros 5 cm del estómago. Esta versión presenta un estadio distinto para los cánceres de tipo escamoso y los adenocarcinoma, atendiendo a su distinta naturaleza y comportamiento. En resumen, la etapificación del cáncer de esófago es imprecisa. No existe un solo examen ideal, sino que se deben utilizar los distintos recursos disponibles, anteriormente descritos, para obtener la mayor información y clasificar al paciente con el fin de ofrecer un tratamiento y plantear un pronóstico. A continuación, se presenta la última versión de la etapaficiación del CE según AJCC TX No se puede evaluar el tumor primario. T0 No hay prueba de tumor primario. Tis Displasia de grado alto. T1 El tumor invade la lámina propia, la mucosa muscularis o submucosa. T1a El tumor invade la lámina propia o la mucosa muscularis. T1b El tumor invade la submucosa. T2 El tumor invade la muscularis propia. T3 El tumos invade la adverticia. T4 El tumor invade las estructuras adyacentes. T4a Tumor resecable invade la pleura, pericardio o diafragma. T4b Tumor irresecable invade otras estructuras adyacentes, como la aorta, cuerpo vertebral, tráquea, etc.
  • 153. 154 NX No se pueden evaluar los ganglios linfáticos regionales. N0 No hay metástasis a ganglios linfáticos regionales. N1 Metástasis en 1-2 ganglios linfáticos regionales. N2 Metástasis en 3-6 ganglios linfáticos regionales. N3 Metástasis en > 7 ganglios linfáticos regionales. M0 No hay metástasis a distancia. M1 Hay metástasis a distancia. Tabla 3. Clasificación TNM del CE según 7.a versión de AJCC.
  • 154. 155 CARCINOMA DE CÉLULAS ESCAMOSAS ESTADIO T N M 0 Tis (HGD) N0 M0 IA T1 N0 M0 IB T1 N0 M0 T2-3 N0 M0 IIA T2-3 N0 M0 T2-3 N0 M0 IIB T2-3 N0 M0 T2-1 N1 M0 IIA T2-1 N2 M0 T3 N1 M0 T4a N0 M0 IIIB T3 N2 M0 IIIC T4a N1-2 M0 T4b Cualquiera M0 Cualquiera N3 M0 IV Cualquiera Cualquiera M1 Tabla 4. Estadios del CE escamoso según 7.a versión de AJCC.
  • 155. 156 ADENOCARCINOMA ESTADIO T N M 0 Tis (HGD) N0 M0 IA T1 N0 M0 IB T1 N0 M0 T2 N0 M0 IIA T2 N0 M0 T3 N0 M0 IIB T1-2 N1 M0 T1-2 N2 M0 IIA T3 N1 M0 T4a N0 M0 T3 N2 M0 IIIB T4a N1-2 M0 IIIC T4b Cualquiera M0 Cualquiera N3 M0 IV Cualquiera Cualquiera M1 Figura 5. Estadios del CE Adenocarcinoma según 7.a versión de AJCC.
  • 156. 157 Tratamiento Las opciones terapéuticas de un tumor resecable incluyen: quimiorradiación pre o pos operatoria y cirugía. Estudios y metaanálisis han demostrado el beneficio del tratamiento trimodal para aumentar la sobrevida, principalmente el estudio holandés CROSS. Este tratamiento incluye quimioterapia y radioterapia concurrente neoadyuvante y luego cirugía. No se ha demostrado beneficio en indicar solo quimiorradiación sin cirugía. La radioterapia por si sola tiene potencial curativo en cáncer escamoso,sinembargo,losensayosdemuestranqueagregar cirugíamejoraelcontrollocaldela enfermedaddisminuyendo la recidiva. La adyuvancia, (quimio o radio posoperatoria), debe ser consideradacuandoseinformanadenopatíascomprometidas en la pieza quirúrgica. Existe un estudio randomizado3 que comparó quimioterapia adyuvante versus cirugía sola en pacientes con cáncer escamoso, demostrando un aumento en la sobrevida y en el tiempo libre de enfermedad en el primer grupo 1. Otro estudio4 demostró beneficio de la quimiorradiación posoperatoria en pacientes portadores de adenocarcinoma delaunióngastroesofágica,porloqueestaalternativatambién es válida. Para definir el mejor tratamiento para cada paciente es importante aproximarse, a prori, al compromiso ganglionar que probablemente posee el paciente, con el fin de ofrecer un tratamiento óptimo, sin dejar enfermedad no tratada, la cual puede llevar a recidiva y disminución de la sobrevida. El cáncer que alcanza mucosa y submucosa (T1) presenta < 5% de linfonodos tumorales, por lo que se puede plantear en ellos resecciones endoscópicas. Pero en tumores más avanzados, esta opción terapéutica está descartada, ya que el compromiso ganglionar es mayor: en T2 el 25-50% de ganglios es positivos, en T3 el 75-80% y en T4 >80%. A continuación, se presentan las alternativas de tratamiento según etapa tumoral: Etapa I En esta etapa, el cáncer ha crecido hacia algunas de las capas más profundas de la pared del esófago (después de la capa más interna de células), pero no ha alcanzado los ganglios linfáticos ni otros órganos. Cánceres T1: algunos cánceres en etapas I muy iniciales que afectan solo un área pequeña de la mucosa y no han crecido hacia la submucosa (tumores T1a) se pueden tratar con resección mucosa endoscópica (EMR), usualmente seguida de algunos tipos de procedimientos endoscópicos para destruir cualquier área anormal remanente en el revestimiento del esófago. Sinembargo,lamayoríadelospacientesconcánceresT1que gozan de buena salud se someten a esofagectomía. Puede que se recomiende quimioterapia y radioterapia después de la cirugía según estado nodal. Cánceres T2: para pacientes con cánceres que han invadido la muscularis propia, el tratamiento se inicia con con quimiorradiación neoadyuvante y luego cirugía. Si elcáncer se encuentra en la unión gastroesofágica o en esófago distal, se puede administrar quimioterapia. Si el cáncer se encuentra en el esófago cervical se pudiera recomendar quimiorradiación como tratamiento principal único en lugar de cirugía. Las personas con cánceres en etapa I que no se pueden someter a cirugía debido a morbilidades, o que no quieren someterse a cirugía, podrían ser tratadas con resección mucosa endoscópica (EMR) y ablación endoscópica, quimioterapia, radioterapia, o ambas juntas(quimiorradiación). Etapas II y III La etapa II incluye cánceres que han crecido hacia la capa muscular principal del esófago o hacia el tejido conectivo en el exterior del esófago. Esta etapa también incluye algunos cánceres que se han propagado a 1 o 2 ganglios linfáticos cercanos. Los cánceres en etapa III incluyen algunos cánceres que han crecido a través de la pared del esófago hasta la capa exterior,asícomocánceres quehancrecidohacialosórganos o los tejidos adyacentes. También, incluye la mayoría de los cánceres que se han propagado a los ganglios linfáticos cercanos. Para las personas que están lo suficientemente saludables, el tratamiento para estos cánceres frecuentemente consiste enquimiorradiaciónseguidadeesofagectomía.Lospacientes con adenocarcinoma en la unión gastroesofágica pueden ser sometidos a neodayuvancia con quimioterapia, sin radiación, seguida de cirugía. En cáncer de esófago cervical, la quimiorradiación sin cirugía se mantiene con opción válida. Los pacientes que no se pueden someter a cirugía debido a que presentan otros problemas de salud graves usualmente pueden ser tratados con quimiorradiación. 3. Ando N, Iizuka T, Ide H, et al. Surgery plus chemotherapy compared with surgery alone for localized squamous cell carcinoma of the thoracic esophagus: aJapan Clinical OncologyGroup Study— JCOG9204. J Clin Oncol 2003;21(24):4592-6. 4. MacdonaldJS,SmalleySR,BenedettiJ,etal.Chemoradiotherapy after surgery compared with surgery alone for adenocarcinoma of the stomach or gastroesophageal junction. N Engl J Med 2001;345(10):725-30.
  • 157. 158 Etapa IV El cáncer de esófago en etapa IV se ha propagado a ganglios linfáticos distantes o a otros órganos distantes. En general, estos cánceres son muy difíciles de eliminar completamente. Por lo tanto, la cirugía para tratar de curar este cáncer, por lo general, no es una buena opción. El tratamiento se usa principalmente para ayudar a mantener el cáncer bajo control por el mayor tiempo posible y aliviar cualquier síntoma que esté causando. Se puede administrar quimioterapia (posiblemente junto con el medicamento dirigido trastuzumab si el cáncer es HER2 positivo) para tratar de ayudar a los pacientes a sentirse mejor y a vivir por más tiempo, aunque el beneficio de administrar quimio no está claro. La radioterapia u otros tratamientos se pueden usar para ayudar con el dolor o la dificultad al tragar. Para los cánceres que se originan en la unión gastroesofágica, el tratamiento con el medicamento dirigido ramucirumab (Cyramza) podría ser una opción si la quimioterapia regular no está surtiendo efecto. Algunas personas prefieren no someterse a tratamientos que pueden causar efectos secundarios graves y optan por solo recibir tratamientos que les ayudarán a estar más cómodas y a mejorar la calidad de sus vidas. Cirugía Tressonlostiposdecirugíasmásfrecuentementeutilizadosen el tratamiento del CE: la técnica de Ivor Lewis que considera una toracotomía derecha más laparotomía; la técnica de resección transhiatal que utiliza solo laparatomía con disección digital del esófago torácico; y, finalmente, la técnica del triple abordaje que incluye disecciones cervicales, torácicas y abdominales. Para elegir qué cirugía realizar se debe tener en cuenta la ubicación del tumor,el drenaje linfático y distintas consideraciones anatómicas. Esófago cervical: invasión local es frecuente. La cirugía muchas veces incluye resección de laringe, faringe y esófago junto con tiroides y disección cervical. Quimiorradiación presenta sobrevida equivalente con una potencial menor morbilidad que la cirugía. Tercio superior esófago torácico: presenta dificultad anatómica por relación con tráquea y grandes vasos. Vía de elección es por triple abordaje o esofagectomía transhiatal con anastomosis cervical para obtener márgenes adecuados. Tercio medio de esófago torácico: vías de elección son Ivor Lewis, triple abordaje o transhiatal con anastomosis torácica alta o cervical. Tercio inferior de esófago torácico: se puede realizar esofagectomía de Ivor Lewis, triple abordaje, transhiatal o por medio de toracotomía izquierda, no existe ventaja de una técnicasobreotra enestaárea.Seutilizaunconductogástrico para la construcción de anastomosis. Si las circunstancias lo requieren, se puede utilizar colgajo de colon o yeyuno para la reconstitución de tránsito. Unióngastroesofágica:tumorestipoSiewert1y2sontratados con esofagectomía. En cáncer tipo Siewert 3 se recomienda gastrectomía total con esófagoyeyuno anastomosis en y de Roux.
  • 158. 159 Diagnóstico La mayoría de los pacientes se presentará conenfermedad irresecable o inoperable debido a invasión local, metástasis o comorbilidades. Para ellos existen múltiples medidas que aumentarán su calidad de vida: quimiorradiación, cirugía y tratamiento endoluminal. El objetivo principal es mantener el paso adecuado de bolo alimenticio ysaliva así como controlar el dolor y sangrado del paciente. Mantener el lumen desobstruido se logra mediante prótesis esofágica o dilataciones endoscópicas. Las complicaciones son raras, pero incluyen perforación, formación de fístulas y sangrado. En caso de fístulas previamente existentes, la prótesis es el tratamiento de elección. Cirugía es otra opción para paliar la obstrucción tumoral y tratar fístulas traqueo- esofágicas.. El by-pass retroesternal consiste en excluir el esófago torácico y construir un conducto gástrico, el cual se une a esófago cervical por posterior al esternón. Aunque es una cirugía algo menor a la esofagectomía, también posee alta mortalidad (25%) y morbilidad (30-60%). El control del dolor se logra a través de analgésicos orales y radioterapia en caso de metástasis óseas; asimismo, la radiación es útil para el manejo de hemorragias. Quimioterapia es útil si existen metástasis a distancia y ha demostrado alivio de disfagia y en combinación con radioterapia puede prolongar la vida en algunospacientes. Posoperatorio Pacientes realizan su posoperatorio en unidad de paciente crítico en régimen cero por boca hasta el séptimo día cuando se realiza un esofagograma con contraste que descarte filtracióndeanastomosis.Luego,seiniciarégimenconlíquidos claros. Suplemento nutricional vía enteral por sonda se inicia de forma precoz una vez resuelto el íleo posoperatorio. Pronóstico Lamortalidaddelacirugíaa 30díasrondael5%,mientrasque su morbilidad es alta alcanzando entre 30 y60% en diferentes series ysecaracterizaporalteracionesrespiratorias,filtración de anastomosis y problemas cardíacos. Complicaciones tardíasincluyenlaestenosisdelasanastomosisen30-50%de los pacientes, reflujo sintomático y mal vaciamiento gástrico.
  • 159. 160 Mortalidad Filtración Neumonía Parálisis cordal Necrosi s gástrica Quilotórax Michigan ( n= 2007) VA (n=1777) Sloan-Kettering (n=510) Duke (n=379) HCO3 (meq/L) 3% 9,8% 4% 5,8% 4,5% 12% NE 4% 14% 12% 2% 21,4% 21% 16% 10% 4,5% NE 4% NE NE 2% NE NE NE 2% 1% 0,02% NE NE 3% La sobrevida global del cáncer de esófago a 5 años es entre 5-16%, este porcentaje ha aumentado progresivamente con los años, debido principalmente al desarrollo quirúrgico y al mejor cuidado posoperatorio en la unidad de cuidados intensivos, sin embargo, aún es baja por el diagnóstico tardío de la enfermedad y varía según la etapa de pesquisa del tumor. En estadios precoces I-IIA con linfonodos negativos la sobrevida a 5 años es de 34-62%, si existen adenopatías malignas, disminuye a 17-25%. El cáncer de esófago posee la tendencia a diseminarse por vía linfática submucosa por lo que se sugiere un margende sección de al menos 5 cm de borde libre de tumor, aun así a recurrencia locoregional varía entre 5 a 45%. El tratamiento en estos casos consiste en quimiorradiación. Los factores pronósticos asociados a sobrevida en cáncer esofágico son la resección completa del tumor (cirugía R0), el estado nodal y el número de ganglios infiltrados, complicaciones quirúrgicas y el volumen quirúrgico del centro hospitalario. Otros cánceres del esófago Existen otros tipos histológicos de cáncer esofágico que representanmenosdel10%,loscalessedetallanbrevemente a continuación. Tumor carcinoide Originado en células de la lámina basal. Con potencial metastásico frecuentemente a hígado. Se acompaña del síndrome carcinoide caracterizado por episodios de flushing y diarrea. Melanoma Se origina en melanoblastos ectópicos en la mucosa. Es importante el hallazgo de melanocitos en la pieza quirúrgica paraconfirmarquecorrespondeatumorprimario.Presentaun crecimiento amplio lateral y su profundidad es muchas veces subestimada. Tiene tendencia a metastizar en la submucosa gastrointestinal formando pólipos. Sarcoma Se presenta como una masa polipoide de lento crecimiento o como una úlcera con focos de hemorragia y necrosis.
  • 160. 161 Bibliografía 1. Seineldin S, Seineldin C. Cáncer de Esófago. Enciclopedia cirugía digestiva. Sociedad Argentina de Cirugía Digestiva. 2009; I-184, pág. 1-19. 2. Schuchert M, Luketich J, Landreneau R. Management of Esophageal Cancer. Curr Probl Surg 2010;47:845-946. 3. American Cancer Society. Cáncer de esófago. 2014. Disponible en: http://www.cancer.org/espanol/cancer/cancerdeesofago/guiadetallada/ cancer-de-esofago-treating-by-stage
  • 161. 162
  • 163. 164
  • 164. 165 4.1 Anatomía gástrica Gajardo J, Sepúlveda A, Hierard M, Sepúlveda R. Embriología El estómago se forma desde la quinta semana de gestación a partir de una dilatación del intestino anterior, para luego rotar, descender y, finalmente, dilatarse. Se divide en 3 regiones: fondo, cuerpo y antro. La región más proximal (fondo) limita conelcardias.Distalmenteseencuentra elpíloro,esfinterque lo conecta con el duodeno. El estómago se encuentra fijo de ambos extremos:unióngastroesofágica ypíloro,permitiendo alguna movilidad en su porción media.
  • 165. 166
  • 166. 167 Irrigación y drenaje venoso Dada principalmente por el tronco celíaco y sus ramas: arteria gástrica izquierda, arteria hepática común y arteria esplénica. La arteria gástrica izquierda es la de mayor calibre y la mayoría de las veces proviene directamente del tronco celíaco, aunque ocasionalmente se origina de una arteria hepática izquierda. La arteria hepática común da origen a la arteria gastroduodenal, la cual se ramifica en la arteria gástrica derecha (anastomosándose con la arteria gástrica izquierda) y la arteria gastroepiploica derecha que discurre por la curvatura mayor. La arteria esplénica origina las ramas gastroepiploica izquierda y gástricas cortas. En cuanto al drenaje venoso, las venas gástricas derecha e izquierda drenan a la vena porta; mientras que la vena gastroepiploica derecha drena a la vena mesentérica superior y la vena gastroepiploica izquierda drena a la vena esplénica. Irrigación delestómago
  • 167. 168 Drenaje venoso del estómago Venas gástricas cortas
  • 168. 169 Drenaje venoso del estómago- Formación vena porta
  • 169. 170 Drenaje linfático Diafragma Es de gran importancia por ser una de las principales vías de diseminación del cáncer gástrico. Los linfáticos se organizan en 16 grupos ganglionares que se ubican desde la raíz del mesenterio hasta el diafragma y transitan paralelo a la vasculatura del estómago. Con el fin de sistematizar su estudio, los linfáticos del estómago se clasifican en 3 grandes grupos o compartimentos: • Compartimento I: incluye los linfáticos cardiales derecho e izquierdo, curvatura menor y mayor, suprae infrapilóricos (grupos 1 al 6). • Compartimento II: linfáticos en relación con las arterias regionales (arteria gástrica izquierda, hepática común, tronco celíaco y arteria esplénica), hilio esplénico y ligamento hepatoduodenal (grupos 7 al 12). • Compartimento III: linfáticos retropancreáticos, arterias mesentérica superior y cólica media, y paraaórticos (grupos 13 al 16).
  • 170. 171 Inervación Compuesta por el sistema parasimpático (nervio vago) y simpático (plexo celíaco). A nivel de la unión gastroesofágica el nervio vago se divide en 2 troncos: n. vago izquierdo (anterior) y el n. vago derecho (posterior). El nervio vago izquierdo da una rama hepática y otra hacia la curvatura menor. El nervio vago derecho da una rama hacia el plexo celíaco. La mayoría de las fibras vagales son aferentes. La inervación simpática va desde D5-D10. Inervación gástrica
  • 171. 172 Histología La pared del estómago tiene cuatro capas: mucosa, submucosa, muscular propia y serosa. La mucosa es la capa interna, formada por células epiteliales de tipo columnar, láminapropiaymusculardelamucosa(importanteparadefinir cáncer gástrico invasivo de no invasivo). La submucosa se extiende desde la mucosa hasta la capa muscular externa y es rica en tejido colágeno, vasos y, además, contiene al plexo nervioso autonómico de Meissner. La muscular está formada por 3 capas de músculo liso y en la capa más externa se encuentra el plexo mientérico de Auerbach. La serosa está formada por el peritoneo que recubre el estómago.
  • 172. 173 Bibliografía 1. Moore KL, Dalley AF,Agur MR, 5th eds. Anatomía con orientación clínica. Editorial Panamericana. 2. David M. Mahvi, Seth B. Krantz. Capítulo 49 Estómago. En Townsend: Sabiston Tratado de Cirugía, 19.a ed. Townsed CM, Beauchamp RD, Evers BM, Mattox KL. Elsevier Saunders 2013. 3. Daniel T.Dempsey. Capítulo 26 Estómago. En Schwartz Principios de Cirugía 9.a ed. Brunicardi FC, Andersen DK, Billiar TR, Dunn DL, Hunter JG, Matthews JB, Pollock RE. McGrawHill. 4. Cameron JL, Cameron AM. Stomach. Current Surgical Therapy 11th ed. Elsevier Saunders. 5. Mahadevan V. Anatomy of the stomach. Surgery2014.
  • 173. 174
  • 174. 175 4.2 GIST Ramírez J, Devaud N. Introducción Los tumores del estroma gastrointestinales o GIST por sus siglas en inglés, son tumores poco frecuentes que afectan el tubo digestivo, dando cuenta solo del 0,2% de todos los tumores1 . Estas neoplasias son no epiteliales, su origen está en tejido mesenquimático. Se cree que provienen de las células de Cajal, del plexo mientérico, que actúan como marcapasos intestinal. Su característica principal es que > del 95%2 presentan CD117 positivo. Este antígeno es parte del receptor tirosine quinasa KIT transmembrana. Clasificación Los GIST pueden diferenciarse en 3 tipos por sus características a la inmunohistoquímica: • Epiteloides. • Neurogénicos. • Mixto. Según ubicación los GIST pueden ser: • Gástricos 60-70%. • Intestino delgado 20-30%. • Esófago, colon y recto 10%. Clínica LosGISTsepuedenclasificarentresformasdepresentación: 1. Hallazgo incidental: es la forma de presentación más habitual y comprende aquellas lesiones de bajo riesgo por su tamaño pequeño (<5cm) y bajo potencial de malignidad. Estas lesiones habitualmente se diagnostican durante un procedimiento endoscópico de rutina donde no hay una sospecha clínica previa. En aquellas lesiones < 2cm es planteable la sola observación de estas. sangrado del tumor. • Hemorragia digestiva. • Disfagia: habitualmente presente en GIST de ubicación esofágica. • Obstrucciónintestinal:enGISTintestinaldegrantamaño que puede condicionar una intususepción. La perforación de víscera hueca secundaria a la presencia de un GIST es inhabitual. 3. Enfermedad metastásica: esta forma de presentación traduce la forma más agresiva de esta enfermedad y los síntomasasociadosestádeterminadossegúnlalocalización de estas metástasis. La localización más frecuente de la enfermedad metastásica está en el hígado. Diagnóstico 1. La endoscopía digestiva permite visualizar la lesión que se presenta como un tumor submucoso que puede tener o no ulceración. La endoscopía permite la primera aproximación diagnóstica de este tumor, identificando su localización y permitiendo la realización de una biopsia. Sin embargo, dado su ubicación en la submucosa, el rendimiento de la biopsia endoscópcia es baja. En tumores pequeños, la endoscopía permite realizar diagnóstico mediante la resección total de la lesión mediante la disección submucosa. 2. Endosonografía: esta consiste en la visualizción por ultrasonido de la lesión, logrando definir el compromiso en profundidad del tumor respecto a las distintas capas del tracto digestivo. Es especialmente útil en lesiones ubicadas en el esófago. 3. El TAC con contraste de abdomen y pelvis es útil para caracterizar las lesiones sospechosas de GIST y su posible compromiso metastásico. La RNM, a su vez, puede ser utilizada en tumores de recto o para el estudio de metástasis hepáticas. 2. Enfermedad sintomática: esta forma de presentación comprende aquellas lesiones más agresivas, ya sea por su mayor tamaño y/o agresividad biológica. La presentación clínica será variable según su ubicaciónen eltractodigestivo. Entrelos síntomas losmásfrecuentes son: • Dolor abdominal: Traduce generalmente a necrosis o 1. Ford S, Gronchi A. Indications for surgery in advanced/metas- tatic GIST. European Journal of Cancer 63 (2016) 154e167. 2, Lasota J, Wozniak A, Sarlomo-Rikala M, et al: Mutations in exons 9 and 13 of KIT gene are rare events in gastrointestinal stromal tumors. A study of 200 cases. Am J Pathol 2000; 157: pp. 1091-1095.
  • 175. 176 Factores Pronóstico Existen ciertos factores que pueden ser tomados en cuenta para estimar si un GIST tendrá comportamiento maligno, es decir, si recurrirá o dará metástasis. - > 5 cm de tamaño. - > 5 mitosis por 50 campos de alto poder - Ubicación extragástrica Tratamiento El tratamiento para estos tumores contempla la cirugía con o sin tratamiento adyuvante dependiendo del potencial maligno del tumor. Los GIST > 2cm deben ser considerados de comportamiento maligno por lo que deben resecarse, mientras que los que miden entre 1-2cm debe discutirse caso a caso. El objetivo de la cirugía es la resección completa de la lesión con márgenes negativos. Una vez resecado el tumor, a los pacientes con alto riesgo de recurrencia se les puede indicar Imatinib (inhibidor de tirosin kinasa) como terapia adyuvante. Para esto se utilizan diferentes criterios de estratificación que consideran principalmente el tamaño, mitosis y ubicación del tumor. Pacientes con tumores muy grandes o con enfermedad metastásica resecable pueden recibir Imatinib como terpia neoadyuvante. En casos de enfermedad metastásica está indicado el uso de Imatinib por un período habitualmente de 6 meses, mientras que otros agentes de quimioterapia y la radioterapia no han presentado efectos favorables como para ser indicados en este contexto. Bibliografía 1. Demetri G, Benjamin R, Blanke C, Blay J, Casali P,Choi H et al.NCCN Task Force Report: Management of Patients with Gastrointestinal Stromal Tumor (GIST)—Update of the NCCN Clinical Practice Guidelines. Journal of the National Comprehensive Cancer Network. Volume 5. Supplement 2. July2007. 2. Raut C, Pawlik T.Gastrointestinal Stromal Tumors. In: Cameron J, Cameron A. Current Surgical Therapy. Philadelphia: Elsevier; 2014. p. 96-103. 3. Feldman M. Gastrointestinal Stromal Tumors (GISTs). In: Feldman M. Sleisenger and Fordtran’s Gastrointestinal and Liver Disease, Tenth Edition. Philadelphia: Elsevier; 2016. p. 487-500. 4. Nilsson B, Bumming P,Meis-Kindblom J, Oden A, Dortok A, Gustavsson B, et al. Gastrointestinal Stromal Tumors: The Incidence, Prevalence, Clinical Course, and Prognostication in the Preimatinib Mesylate Era APopulation-Based Study in Western Sweden. CANCER February 15, 2005 / Volume 103 / Number4.
  • 176. 177 4.3 Cáncer gástrico Gajardo J, Hierard MD, Devaud N Introducción Factores de Riesgo Desde que fuese descrito por primera vez en el año 3000 A.d.C., el cáncer gástrico ha sido reconocido como una de las enfermedades malignas más frecuentes ycon mayor impacto en nuestra sociedad. Fue considerada la primera causa de muerte por cáncer hasta que en 1980 fue superada por el cáncer de pulmón 1 . Con el paso de los años, su incidencia ha disminuido en parte gracias a la mejora en técnicas de conservación de los alimentos y al diagnóstico precoz de entidades precursoras como la infección por Helicobacter pylori y úlceras pépticas 2 . Epidemiología El cáncer gástrico es el quinto tipo de cáncer mas frecuente a nivel mundial, y ocupa la tercera causa de muerte por cáncer en ambos sexos3 . Es especialmente prevalente en Sudamérica y Asia, siendo Japón el principal exponente de este último. Chile forma parte de los países con más alta incidencia de estaenfermedadjuntoaJapón,Korea,CostaRicaySingapur. En nuestro país ocupa el primer lugar como causa de muerte por tumores malignos en la población masculina, con una tasa de mortalidad de 20/100.000 habitantes4 . Afecta preferentemente al sexo masculino en una relación de 2,6:1, siendo de mayor frecuencia entre la sexta y séptima década de vida. Solo un 10% se presenta en etapas precoces debido principalmente a la clínica inespecífica, lo que lleva a una consulta tardía. En países como Japón, en que se han instaurado programas de tamizaje, el diagnóstico de cáncer gástrico en etapas precoces puede alcanzar el 60%5 . 1. Parkin DM. Epidemiology of cáncer: global patterns and trends. Toxicol Lett 1998;102-103:227. 2. Pisani P.Estimates of the worldwide mortality from eighteen major cancers in 1985. Implications for prevention and projections of future burden. Int J Cancer. 1993;55(6):891. 3. GLOBOCAN 2012. 4. Guía GES Cáncer Gástrico 2010. 5. Noguchi Y. Is gastric carcinoma different between Japan and the United States?. Cancer 2000;89(11):2237. 6.Yang P.Overweight, obesity and gastric cáncer risk: resultas from a meta-analysis of cohort studies. Eur J Cancer. 2009;45(16):2867. 7. Ladeiras-Lopes R. Smoking and gastric cáncer: systematic review and meta-analysis of cohort studies. Factores de riesgo ambientales Helicobacter pylori (HP): La asociación entre la infección por HP y el desarrollo de cáncer gástrico ha sido ampliamente demostrada en la literatura. El mecanismo principal es la inflamacióncrónica,quellevaagastritis,metaplasiaintestinal, displasia y finalmente adenocarcinoma de tipo intestinal. La infección por esta bacteria es altamente prevalente en Chile, se estima que un 75% de la población es HP (+). Dieta: El consumo de alimentos ahumados y salados (particularmente aquellos que contienen elevados niveles de nitrato) y el bajo consumo de vegetales, se encuentran relacionados con un riesgo aumentado de desarrollo de cáncer gástrico. El mecanismo es la conversión de nitratos en compuestos N-nitroso carcinogénicos. Obesidad:Elexcesodepesoseasociaaunriesgoaumentado de desarrollar cáncer gástrico, y la fuerza de esta relación aumenta a medida que aumenta el índice de masa corporal. Tabaquismo: El riesgo en personas fumadoras es aproximadamente 1.5 veces mayor que aquellas no fumadoras. Este riesgo disminuye tras 10 años de suspender el hábito tabáquico7 . Nivel Socioecomómico: En poblaciones con bajo nivel socioeconómico se ha observado un riesgo 2 veces mayor de desarrollar cáncer gástrico distal. Factores de riesgo asociados al huesped. Grupo A Sanguíneo. Además de ser un factor de riesgo independientededesarrollarcáncergástrico,sehaobservado una mayor incidencia de anemia perniciosa en pacientes con Grupo A. Predisposición Familiar. El cáncer gástrico difuso hereditario es una forma heredada de esta enfermedad. Es el resultado de una mutación genética en la molécula de adhesión E- Cadherina. Las personas portadoras de esta mutación, tienen un riesgo de 80% de desarrollar cáncer gástrico8 . Anemia Perniciosa. Los pacientes con anemia perniciosa se caracterizan por presentar aclorhidria. Esta condición ocurre como consecuencia de la destrucción autoinmune de las células parietales gástricas. La mucosa se vuelve atrófica y
  • 177. 178 desarrolla metaplasia antral e intestinal. Pólipos Gástricos. Los pólipos adenomatosos conllevan riesgo de displasia hacia carcinoma, y este riesgo aumenta a medida que aumenta el tamaño del pólipo9 . Clasificación Histológica: Sobre el 90% de las neoplasias gástricas corresponden al tipo adenocarcinoma que es de origen epitelial. Los tumores carcinoides del estómago y los tumores no epiteliales del estómago comprenden menos del 10% restante. Durante los últimos 50 años, la clasificación histológica más utilizada ha sido la de Lauren, que reconoce el tipo Intestinal y el tipo Difuso para los adenocarcinomas, siendo el tipo intestinal el más frecuente. En Chile sin embargo, se ha observado un cambio en la epidemiología de esta enfermedad. Existe hoy progresivamente, una mayor incidencia del tipo difuso mal diferenciado, de localización proximal, en comparación al tipo intestinal (bien o moderadamente diferenciado) que era el tipo histológico prevalente hace sólo 15 años. Estos dos tipos presentan diferencias no solo histológicas sino que también clínicas, como se muestra en la Tabla 2. CáncerIncipiente:Cáncergástricoquecomprometehastala submucosa sin sobrepasarla, independiente de su compromiso ganglionar. EnestoscasosseutilizalaclasificaciónJaponesa que los divide en tipos del I al III según su patrón de invasión. Cáncer Avanzado: Cáncer Gástrico que compromete la muscular propia. Se utiliza la clasificación macroscópica de Bormann según sus características morfológicas a la endoscopía. En estos casos, el riesgo de metástasis ganglionar alcanza un 40%. Tabla 2 8. Van der Post RS. Hereditary diffuse gastric cáncer. J Med Genet 2015;52(6):361-374. 9. Sabiston Textbook of Surgery. Stomach. Gastric Cáncer. Risk Factors.. Intestinal Difuso Causa ambiental Causa familiar o genética Se desarrolla en el contexto de gastritis atrófica o metaplasia intestinal Se asocia a tipo sanguíneo A (+) Más común en hombres Incidencia similar entre hombre y mujeres Incidencia aumenta con la edad Presentación en edades más tempranas Tiende a formar glándulas Pobremente diferenciado Metástasis hematógena Metástasis linfática y transmural Pronóstico mas favorable Pronóstico menos favorable
  • 178. 179 Clasificación macroscópica del cáncer gástrico incipiente Tipo II: Aplanado o superficial
  • 180. 181 Aspecto macroscópico cáncer gástrico avanzado Linitis plástica Clínica Historia natural del cáncer gástrico Signos y síntomas. Son inespecíficos, por lo cual rara vez son motivo de consulta médica, contribuyendo al diagnóstico tardío de la enfermedad. • Dolor epigástrico (constante, no irradiado, no cede con la alimentación). • Saciedad precoz • Pérdida de peso • En etapas avanzadas también se puede encontrar síntomas de obstrucción o disfagia, anemia (por hemorragia digestiva con melena o hematemesis) y síndrome pilórico. Examen físico: Se debe centrar en la identificación de elementos que sugieran enfermedad avanzada. • Estado nutricional • Adenopatía de Virchow: adenopatía supraclavicular • Adenopatía de Hermana María José: adenopatía periumbilical • Masa abdominal • Derrame pleural y derrame pulmonar (metástasis pulmonares) • Ascitis (compromiso hepático) Ladiseminacióndelaenfermedadpuedeserlocal,invadiendo la serosa y órganos vecinos, o a distancia por vía linfática, sanguínea y peritoneal. Vía linfática: Existe una relación entre la profundidad de invasión y riesgo de compromiso ganglionar. En cáncer incipienteelriesgoessignificativamentemenorqueencáncer avanzado (5% y 40% respectivamente). La progresión ganglionar de la enfermedad puede ser local o perigástrica (definida como la primera barrera ganglionar, grupos I-VI); luego a los grupos ganglionares relacionados a las arterias que nacen del tronco celíaco (grupos VII, VIII, IX, X, XI y XII) conocidos como la segunda barrera ganglionar; y por último la diseminación ganglionar a distancia hasta llegar a la carcinomatosis peritoneal. Vía hematógena: El lugar más frecuente de metástasispor esta vía es el hígado (40%). Le siguen pulmón, glándulas suprarrenales y médula ósea. Vía peritoneal: Ocurre por el desprendimiento de células neoplásicas desde la serosa gástrica comprometida. Un ejemplo de esta vía de diseminación es el Tumor de Krukenberg, que corresponde a la metástasis al ovario.
  • 181. 182 Diagnóstico Exámenes generales: Carecen de especificidad y no son útiles para el diagnóstico de cáncer gástrico, pero permiten la evaluacióngeneraldelpaciente.Encáncergástricoavanzado es posible observar anemia ferropriva, hipoproteinemia, sangre oculta en deposiciones y melena e incluso alteraciones en la analítica hepática por metástasis. Endoscopía digestiva alta: Es el Gold standard. Permite la visión directa de la lesión y la toma de biopsias para confirmar o descartar el diagnóstico. Tiene una sensibilidad superior al 98% cuando se toman más de 7 muestras. La muestra para biopsia debe ser tomada del borde de la lesión, incluyendo tejidonormal.Sesugieretomarcomomínimo10-12muestras. Etapificación Actualmente se utiliza el método de etapificación AJCC TNM 7ª Ed, 2010 y tiene principalmente dos objetivos: determinar la extensión de la enfermedad y obtener información acerca del pronóstico de ésta. Los principales métodos de etapificación son la tomografía computarizada, PET/CT y laparoscopía diagnóstica. La endosonografía no es parte de la etapifiación rutinaria en el estudio de cáncer gástrico, pero sí se utiliza en algunos casos de enfermedad incipiente 1.Tomografía Computarizada: Es el Gold Standard para completar la etapificación del cáncer gástrico. Permite identificar invasión a órganos vecinos, la presencia de carcinomatosis peritoneal, el compromiso ganglionar y la presencia de metástasis a distancia. Es imprescindible para definir un correcto estadío TNM, sin embargo menos del 50% de la carcinomatosis peritoneal es visible al TAC. 2. Tomografía por Emisión de Positrones: No es rutinariamente utilizado ya que sólo el 50% de los tumores gástricos son visibles al PET. Su principal utilidad es la identificación de metástasis ganglionar a distancia y la evaluación de resultados post quimioterapaneoadyuvante. 3.Laparoscopía Diagnóstica: Se recomienda su utilización en enfermedad avanzada con sospecha de carcinomatosis peritoneal. 4.Endosonografía: En lesiones tempranas candidatas a un tratamiento endoscópico, es necesario precisar con exactitud la profundidad de la lesión. La endosonografía tiene una elevada sensibilidad (>90%) para distinguir entre T1 y T211 . 10. Graham DY. Prospective evaluation of biopsy number in the diagnosis of esophageal and gastric carcinoma. Gastroenterology 1982;82(2):228. 11. Yanai H. Delineation of the gastric muscularis mucosae and assessment of depth of invasión of early gastric cáncer. Gastrointest Endosc 1993;39(4):505.
  • 182. 183 Tumor primario Tx Tumor primario no puede ser identificado T0 No hay evidencia de tumor primario Tis Carcinoma in situ; tumor intraepitelial sin invasión de la lamina propia. T1 - T1a - T1b Tumor invade la lamina propia, muscular de la mucosa o submucosa - Tumor invade lamina propia o muscular de la mucosa - Tumor invade submucosa T2 Tumor invade muscular propia T3 Tumor penetra subserosa sin invasión de peritoneo visceral o estructuras adyacentes T4 - T4a - T4b Tumor invade la serosa (peritoneo visceral) o estructuras adyacentes - Tumor invade serosa (peritoneo visceral) - Tumor invade estructuras adyacentes Linfonodos regionales Nx Linfonodos regionales no pueden ser identificado N0 No hay metástasis a linfonodos regionales N1 Metástasis en 1-2 linfonodos regionales N2 Metástasis en 3-6 linfonodos regionales N3 - N3a - N3b Metástasis en 7 o mas linfonodos regionales - Metástasis en 7-15 linfonodos regionales - Metástasis en 16 o mas linfonodos regionales Metástasis a distancia M0 Sin metástasis a distancia M1 Presencia de metástasis a distancia
  • 183. 184 Estadio anatómico 0 Tis N0 M0 IA T1 N0 M0 IB T2 T1 N0 N1 N1 M0 M0 IIA T3 T2 T1 N0 N1 N2 M0 M0 M0 IIB T4a T3 T2 T1 N0 N1 N2 N3 M0 M0 M0 M0 IIIA T4a T3 T2 N1 N2 N3 M0 M0 M0 IIIB T4b T4b T4a T3 N0 N1 N2 N3 M0 M0 M0 M0 IIIC T4b T4b T4a N2 N3 N3 M0 M0 M0 IV Cualquier T Cualquier N M1
  • 184. 185 Clasificación TNM Cáncer gástrico Tratamiento CIRUGÍA La cirugía es el único tratamiento potencialmente curativo en cáncer gástrico. La resección completa con márgenes macrocópicos adecuados (mayor o igual a 4 cm) es ampliamente considerada como estándar. No obstante, el tipo de resección (subtotal versus total) y la extensión de la linfadenectomía continúa siendo un tema controversial. Reconstrucción gastrectomíasubtotal tipo BillrothI
  • 185. 186 Reconstrucción gastrectomía subtotal tipo Billroth II Reconstrucción gastrectomía total tipo Y de roux
  • 186. 187 PRINCIPIOS QUIRÚRGICOS Luego de un adecuado estudio de diseminación, el objetivo primordial de la cirugía es lograr una resección completa con márgenes negativos (resección R0). Para tumores T1b – T3, se prefiere una resección gástrica adecuada (subtotal o total) con márgenes microscópicos negativos (R0). Los tumores T4 requieren resección en bloc con las estructuras involucradas. Finalmente lo tumores incipientes(Tis,T1ayT1b),puedensercandidatosaresección endoscópica según criterios actualmente bien definidos. La esplenectomía profiláctica debe ser evitada, habiendo quedado demostrado que su realización de rutina se asocia a mayor morbimortalidad, sin diferencias significativas en la sobrevida12 . Los carcinomas gástricos son considerados irresecables si existe evidencia de compromiso peritoneal o metástasis a distancia LINFADENECTOMÍA La gastrectomía total con criterio oncológico debe incluir una linfadenectomía adecuada. La extensión de este procedimiento es aún controversial, pudiendo clasificarse como D0, D1, D2 y D3 según cuáles sean los grupos ganglionares removidos en la gastrectomía. La gastrectomía total con linfadenectomía D2, es el tratamiento estándar para el cáncer gástrico, debiéndose resecar al menos 15 ganglios para realizar una correcta etapificación. LosbeneficiosdelalinfadenectomíaD2hansidoampliamente respaldados en diversos estudios en términos de una mejor sobrevidaa5y10añosalsercomparadoconlalinfadenectomía D1,sindemostrarunamorbilidadsignificativamentemayor1314 . Disección ganglionarD1 12. Yu W. Randomized clinical trial of splenectomy versus splenic preservation in patients with proximal gastric cáncer. Br J Sur 2006;93:559-563. 13. Songun I. Surgical treatment of gastric cancer: 15-year follow- up results of the randomised nationwide Dutch D1D2 trial. Lancet Oncol 2010;11:439-449. 14. Jatzko GR. A 10-year experience with Japanese-type radical lymph node dissection for gastric cancer outside of Japan. Cancer 1995;76:1302-1312.
  • 187. 188 RESECCIONES ENDOSCOPICAS La resección endoscópica mucosa y la disección submucosa endoscópicahancobradoimportanciaenelmanejodelcáncer gástrico temprano, sobre todo en países con programas de tamizaje en que se diagnostican un mayor número de pacientes con cáncer gástrico en etapas tempranas. La selección acuciosa de pacientes candidatos a este tipo de tratamiento es de vital importancia ya que la probabilidad de metástasis ganglionar se encuentra influenciada por las características del tumor. De esta forma, la resección endoscópica se considera un tratamiento adecuado en pacientes con tumores incipientes con las siguientes características15 : 1. Lesión única 2. Bien o moderadamente diferenciado 3. No ulcerado 4. ≤ 2 cms TERAPIA ADYUVANTE Y NEOADYUVANTE la sobrevida a 5 años en el grupo sometido a quimioterapia perioperatoria. El radioquimioteapia post operatoria también ha demostrado beneficios en el control local y la progresión de la enfermedad como lo demostró el estudio INT 0116. Si bien este estudio fue discutido por la disección ganglionar subóptima de los pacientes incluidos, los resultados logrados permiten por lo menos sugerir un beneficio de esta terapia adyuvante en enfermedad avanzada cuando no se logra un tratamiento neoayuvante con quimioterapia. Por otro lado, en el año 2007, Sakuramoto et al17 publicó los resultados de un estudio Japonés que comparó la cirugía exclusiva versus la cirugía más quimioterapia adyuvante en cáncer gástrico avanzado. La sobrevida a 3 años fue superior en el grupo sometido a quimioterapia adyuvante. El cáncer gástrico es un cáncer biológicamente agresivo, con altas tasas de recurrencia. Luego de una Gastrectomía Total R0 se han descrito recurrencias de un 30% (principalmente dentro de los 2 primeros años)16 . En este contexto, la quimioterapia neoadyuvante y la quimioterapia adyuvante han cobrado interés desde que en 2006 se publicaran los resultados del estudio MAGIC. Este estudio comparó la cirugía exclusiva versus quimioterapia perioperatoria en cáncer gástrico estadios I y II. Seobservó una mejora significativa en el tiempo libre de enfermedad yen 15. Ono H. Endoscopic mucosal resection for treatment of early gastric cancer. Gut 2001;48:225-229. 16. Yoo CH. Recurrence following curative resection for gastric carcinoma. Br J Surg 2000;87:236-242. Disección D2
  • 188. 189 PRONÓSTICO En USA la tasa de mortalidad para cáncer gástrico es de 3.7/100.000 habitantes. La sobrevida general a 5 años es de un25%,siendounpocomasaltaenpacientesquesesometen a cirugía curativa. Alrededor de un 64% de los pacientes se presenta en etapa de irresecabilidad. Recurrencia:postgastrectomíavadesde40-80%,ocurriendo en su gran mayoría durante los primeros 3 años. Seguimiento: gran parte de las recurrencias ocurren durante los primeros tres años, por lo que se recomienda mantener controles cada 3-4 meses por un año y luego cada 6 meses. 17. Sakuramoto S. Adyuvant chemotherapy in gastric cancer with S-1, an oral fluoropyrimidine. NEJM 2007;357(18):1810-1820.
  • 189. 190 Bibliografía 1. M.P. Vela. Tratamiento ambulatorio de la trombosis venosa profunda de miembros inferiores con Heparina de bajo peso molecular. Gac Med Bilbao 2004; 101: 49 - 52[18]. 2. American College of Chest Physicians Guidelines2008. 3. Espinoza Ricardo. Complicaciones en cirugía general. 1.a edición 2011. Ed. Mediterráneo. 4. Crovari F., Manzor M. Manual de Patología quirúrgica. PUC. Capítulos 46-47, pp. 531 - 558. 5. Othieno R, Abu Affan M, Okpo E. La Biblioteca Cochrane PlusThe Cochrane Library. Tratamiento domiciliario versus hospitalario para la trombosis venosa profunda. 6. Watson L, Broderick C, Armon MP.Thrombolysis for treatment of acute deep vein thrombosis. La Biblioteca Cochrane PlusThe Cochrane Library. 7. Kearon C. Natural History of Venous Thromboembolism Circulation 2003; 107: I - 22 - I - 30. 8. Turpie AD et al. Venous thromboembolism: pathophysiology, clinical features, and prevention. BMJ 2002; 325: 887 - 90. 9. Goldhaber S. et al Prevention of Venous Thromboembolism Among Hospitalized Medical Patients. Circulation. 2005; 111: e1 - e3. 10. Goldhaber SZ, Morpurgo M. Diagnosis, treatment, and prevention of pulmonary embolism. Report of the WHO/International Society and Federation of Cardiology Task Force. JAMA. 1992; 268: 1727 - 1733.
  • 190. 191 4.4 Cirugíabariátrica Ramírez J, Sepúlveda R. Introducción La obesidad es un problema de salud pública a nivel nacional e internacional y las comorbilidades que conlleva disminuyen los años de vida saludable de los pacientes, además de aumentar la mortalidad. Definimos como obesidad a personas con un índice de masa corporal (IMC) > 30 kg/m2. Aún cuando no es el método mas preciso, su facilidad de calcular y su bajo costo, hacen que el IMC sea la herramienta mas utilizada para la evaluación del estado nutricional. La cirugía bariátrica emerge como un tratamiento efectivo para los pacientes obesos mórbidos, logrando muchas veces no solo la baja de peso, si no que además la mejoría de las patologías que son parte del síndrome metabólico. Estas técnicas han evolucionado constantemente, logrando disminuir los riesgos inherentes al acto quirúrgico, convirtiéndolas en la terapia estándar en aquellas personas con obesidad mórbida que no han logrado bajar de peso con métodos tradicionales. Obesidad El IMC se calcula a partir de la siguiente fórmula: IMC = Peso (kg) / Estatura2(m2) IMC Categoría <18,5-24,9 Normal 25-29,9 Sobrepeso 30-34,9 Obesidad I 35-39,9 Obesidad II 40-49,9 Obesidad III >50 Obesidad IV Dentro de las patologías que se asocian a la obesidad están: • Enfermedad coronaria • Diabetes Mellitus II • Cáncer • Hipertensión • Dislipidemia • NASH • SAHOS • infertilidad Existe una relación entre el aumento del IMC y el incremento en la mortalidad, observándose que pacientes con IMC >35kg/ m2 tienen una mortalidad 2,5 veces la normal y pacientes con IMC >40 kg/m2 , 10 veces mayor.
  • 191. 192 Cirugía Laindicacióndecirugíabariátricaselimitaapacientesobesos con: • IMC > 40 kg/m2 • IMCentre35-39,9kg/m2conenfermedadesrelacionadas a la obesidad como: enfermedades articulares, SAHOS severo y diabetes, entre otras. La cirugía bariatrica tiene como objetivos los siguientes: • Pérdida del exceso de peso y mantención de ésta perdida en el tiempo • Mejorar las comorbilidades • Mejorar la sobrevida • Mejorar la calidad de vida Clasificación de las técnicas quirúrgicas: • Restrictivas (banda gástrica ajustable y gastrectomía vertical en manga) • Malabsortivas (Derivación biliopancreática y By-pass yeyunoileal) • Mixtas (By-pass en Y de Roux y By-pass gástrico simplificado Banda gástrica ajustable laparoscópica: La banda gástrica ajustable se coloca por laparoscopía. Es una técnica restrictiva que crea un pouch gástrico de 20-30cc, provocando saciedad precoz en el usuario. Se puede ajustar la presión que ejerce la banda sobre el estómago a través de un reservorio subcutáneo al que se le inyecta suero fisiológico en forma progresiva. Gastrectomía vertical en manga (manga gástrica) Actualmente se realiza por laparoscopía. Es una técnica restrictiva efectiva, en la que se reseca una porción de la curvatura mayor,dejandoun reservorio gástricode60-120ml.
  • 193. 194 By-pass gástrico en Y de Roux. Es la técnica “gold estándar” en cirugía bariátrica, con los mejores resultados. Preferentemente se realiza por laparoscopía. Es una técnica mixta, en que se crea un pouch gástrico de 15-30ml (restrictivo) asociado a una gastroyeyuno anastomosis con una reconstrucción en Y de Roux (malabsortivo). Fisiología en la obesidad Existen numerosos péptidos que se liberan durante la digestión que están involucrados en el apetito y el control glicémico. Los niveles sanguíneos de estos se verían modificados con la cirugía bariátrica, lo que explica la mejoría en las comorbilidades relacionadas con la obesidad. Hormonas intestino anterior Grelina: Péptido liberado por la células oxínticas gástricas, tienen función orexígena. Los niveles sanguíneos son inversamente proporcionales al Hormonas intestino posterior Glucagon-like peptide-1 (GLP-1): Secretado por las células L del intestino. Su secreción es estimulada por la ingesta de peso, además aumentan en ayuno y disminuyen al comer. Porúltimo,estimulanlaliberacióndehormonadelcrecimiento e inhiben la secreción de insulina. Péptido inhibador gástrico (GIP): Liberado por células K en el duodeno y yeyuno proximal. Estimula su liberación la ingesta de hidratos de carbono o grasas. Regula el metabolismo de adipocitos, lipolisis, síntesis de ácidos grasos, tiene efecto incretina (insulina-símil) y estimula la proliferación de células B. Bypass gástrico
  • 194. 195 alimentos. Suprime secreción ácida gástrica, diminuye ingesta, inhibe vaciamiento gástrico, aumenta metabolismo y tiene acción incretina. El bypass gástrico aumenta susniveles. Péptido YY Secretado por células L en íleon terminal, colon y recto. Retrasa vaciamiento gástrico, disminuye ingesta. Todos los Bypass aumentan los niveles. Resultados Para evaluar el desempeño de las diferentes técnicas de cirugía bariátrica, se calcula el exceso de peso perdido expresado en porcentaje. Para su cálculo, se utiliza la siguiente fórmula: (Peso inicial peso actual/peso inicial peso ideal) x 100 Se considera como una cirugía bariátrica efectiva a aquella que logra una baja en el exceso de peso de >50%. Si bien todas las técnicas obtienen baja de peso, las mas efectivas son el bypass gástrico seguido de la gastrectomía en manga Resultado a corto plazo 1,2 Procedimiento Pérdida de exceso de peso en porcentaje By passgástrico 60 -85% Gastrectomía enmanga 55 -80% Banda gástricaajustable 45 -55% Resolución de comorbilidades en pacientes sometidos a cirugía bariátrica al plazo de 1 año:3 Procedimiento Pérdida de exceso de peso en porcentaje By passgástrico 60 -85% Gastrectomía enmanga 55 -80% Banda gástricaajustable 45 -55% 1. Buchwald H, Avidor Y, Braunwald E, et al. Bariatric surgery: a systematic review and meta-analysis. JAMA 2004;292:1724. 2. Ballantyne GH. Measuring outcomes following bariatric surgery: weight loss parameters, improvement in co-morbid conditions, change in quality of life and patient satisfaction. Obes Surg 2003; 13:954. 3. Zhang N, Maffei A, Cerabona T, Pahuja A, Omana J, Kaul A. Reduction in obesity-related comorbidities: is gastric bypass better than sleeve gastrectomy?. Surg Endosc (2013) 27:1273–1280.
  • 195. 196 Bibliografía 1. Fridman A, Moon R, Cozacov Y,Ampudia C, Lo Menzo E, Szomstein S, Rosenthal R. Procedure-Related Morbidity in Bariatric Surgery: A Retrospective Short- and Mid-Term Follow-Up of a Single Institution of the American College of Surgeons Bariatric Surgery Centers of Excellence. J Am Coll Surg Vol. 217, No. 4, October 2013. 2. Dumon K, Murayama K. Bariatric Surgery Outcomes. Surg Clin N Am 91 (2011) 1313–1338. 3. Yurcisin B, Gaddor M, DeMaria E. Obesity and Bariatric Surgery. Clin Chest Med 30 (2009) 539-553. Surgical Management of Morbid Obesity. Curr Probl Surg 2008; 45: 68-137. 4. Larrad A, Sánchez-Cabezudo C. Indicadores de calidad en cirugía bariátrica y criterios de éxito a largo plazo. Cirugía Española. Vol. 94. Núm. 05. Mayo 2016.
  • 196. 197 4.5 Hemorragia digestivaalta novariceal Ramírez J, Bawarshi V, Balbontín P Introducción La hemorragia digestiva se refiere a la pérdida de sangre originada en cualquier parte del tubo digestivo. Se clasifican segúnsu lugardeorigenen hemorragiadigestiva alta,aquella que ocurre proximal al ligamento de Treitz (transición de duodeno a yeyuno) o baja, la que ocurre distal a éste. A su vez la hemorragia digestiva alta (HDA) se puede clasificar según su etiología en dos grandes grupos: variceal (relacionada con hipertensión portal) y no variceal. Epidemiologia La HDA de origen no variceal da cuenta de un 80 % de los casos, de estas un 80%1 se detiene de forma espontánea y su mortalidad varía entre 1-14%. Por otro lado la hemorragia de origen variceal, que corresponden a un 20% de los casos, tienden a persistir y recidivar, y su mortalidad es de un 30%2 . Etiología Existe una amplia variedad de causas de HDA no variceal, las etiologías más frecuentes se muestran en la tabla 1. Otras etiologías menos frecuentes son hemobilia, hemosuccus pancreaticus y fistula aortoentérica. En un 8% de los casos no se encuentra el origen de la hemorragia3 . Tabla 1: Etiologías de HDA no variceal según frecuencias4 . 1. Courtney T, Beauchamp D, Evers M, Mattox K. Sabiston: tratado de cirugía.19 ed. España: Elservier; 2013 2. Weitz C, Berger Z, Sabah S, Silva H. Diagnóstico y Tratamiento de las Enfermedades digestivas. Chile: De iku; 2013. 3. David Q.-H. Wang; Nezam H. Afdhal, Sleisenger and Fordtran’s Gastrointestinal and Liver Disease, Ninth Edition (2010). 4. Enestvedt B, Gralnek I, Mattek n, Lieberman d, Eisen G. An evaluation of endoscopic indications and findings related to nonvariceal upper-GI hemorrhage in a large multicenter consortium. Gastrointestinal Endoscopy Volume 67, No. 3 : 2008 Ulcera péptica 32,7% Erosiones 18,8 % Mallory – Weiss 4% Malformaciones arteriovenosas 2,7% Tumores 1,2% Sin causa/EDA normal 17,2%
  • 197. 198 Descripción Úlcera péptica: Es una lesión crateriforme en la mucosa del tracto gastrointestinal (estómago y duodeno). Su patogenia tiene relación con un desequilibrio entre los factores protectoresyagresoresdelamucosa.Losprincipalesfactores agresores son la presencia de Helicobacter pylori y el uso de antiinflamatorios no esteroidales. La hemorragia se produce por la erosión del ácido en la mucosa. Las hemorragias importantes ocurren en contexto de afectación de la arteria gástrica izquierda o de la arteria gastroduodenal. Esofagitis: La inflamación del esófago puede producir hemorragia. La esofagitis puede ser causada por el contacto concontenidoácido,comoocurreenlaenfermedadporreflujo gastroesofágico; en este caso, el tratamiento consiste en suprimirlaacidezgástrica.Tambiénpuedehaberotrascausas deesofagitiscomoinfecciones,fármacosyradiaciones.Enlos pacientes con etiología infecciosa el tratamiento es dirigido al agente causal. Mallory – WWeiss: Es una hemorragia digestiva alta que se produce luego de una contracción abdominal mientras el cardias permanececontraído,comoenepisodios de vómitos, generando desgarros en la mucosa y submucosa cercanas a la unión gastroesofágica. En el 90% de los casos no es necesario tratamiento y la lesión cicatriza en menos de 72 horas. En los casos de hemorragia continua se puede realizar tratamiento endoscópico con inyección local o electro-coagulación LesióndeDieulafoy:Esunamalformaciónvascularprovocada por una protrusión de una arteria de gran calibre (1-3 mm) de la submucosa a la mucosa, produciendo hemorragia al erosionarse la mucosa y pudiendo generar, incluso hemorragia masiva. Se puede ubicar en cualquier lugar del aparato digestivo, pero generalmente se encuentra en la curvatura menor del estómago a 6 cm de la unióngastroesofágica. Se utiliza la endoscopía para ubicar la lesión, aunque puede ser difícil de identificar por la intermitencia de la hemorragia. También, se utiliza ultrasonido Doppler endoscópico para ubicar las lesiones que no se visualizan con endoscopio. Telangectasia hereditaria o enfermedad de Osler- Weber-Rendu: Enfermedad caracterizada por telangectasias en la piel y mucosas y malformaciones arteriovenosas viscerales. Cuando se afecta el tracto digestivo se observan lesiones en la boca y faringe. Gastritis por estrés: Son causadas por el ácido y la pepsina encasodeisquemiaporhipoperfusión.Seobservanerosiones superficiales en la mucosa de todo el estómago. Es habitual que sangren abundantemente y con frecuencia.Actualmente ha disminuido su frecuencia por los mejores tratamientos en shock y sepsis. Los factores de riesgo para la gastritis por estrés son las coagulopatías yel uso de ventilación mecánica por más 48 horas. En estos pacientes se recomienda el uso profiláctico de antiácidos. Hemosuccus pancreaticus: Corresponde a la hemorragia del conducto pancreático, causada generalmente por la erosión de un pseudoquiste hacia la arteria esplénica. La angiografía es diagnostica y se puede hacer una embolización.
  • 198. 199 Clínica Motivo de consulta La forma de presentación en un paciente con hemorragia digestiva es variable. Melena: es la forma de presentación más frecuente. Corresponde a deposiciones negras, oleosas y de mal olor por la degradación de la hemoglobina a hematina y la acción de la flora bacteriana entérica. Hematemesis: vómitos con presencia de sangre. Hematoquezia: es una deposición con sangre pura. Generalmente corresponde a hemorragias bajas, pero se debe considerar que el 15% de las hematoquezias son causadas por HDA (pacientes con tránsito acelerado). Otras manifestaciones menos frecuentes que hacen sospechar una hemorragia digestiva son anemia, sangre oculta en deposiciones y sincope. Anamnesis Obtener un historia detalla que incluya antecedentes médicos (enfermedad hepática, uso de anticoagulantes o antiplaquetarios) y las características de la hemorragia (color, duración, cuantía, número de episodios). Es importante conocer las principales causas de HDA ysus factoresderiesgoparadirigirlaanamnesis.Deestamanerase debe indagar sobre episodios de vómitos, hemorragias previas, baja de peso, uso de anti inflamatorios no esteroidasles, entre otros. Examen físico Los pacientes con hemorragia pueden haber perdido una gran cantidad de volumen previo a la consulta al servicio de urgencia, aún cuando ya en éste no presenten nuevos episodios. Es por esto que se debe buscar signos de hipovolemia.Sedebeobjetivar lossignos vitalesenbúsqueda de hipotensión y taquicardia y examinar al paciente por frialdad de extremidades, estado mental (agitado, confuso, letárgico,etc.), llene capilar y palidez de mucosas Como la hemorragia digestiva alta de origen varicial, es una causa importante, al examen físico se debe buscar estigmas de daño hepático crónico como hepatomegalia, ictericia, circulación colateral, eritema palma, telangectasia y parotidomegalia. La inspección de la zona anal y tacto rectal son importantes para evaluar y confirmar presencia de melena. Laboratorio Los exámenes de laboratorio que se deben solicitar son: • Hemograma Hematocrito: se debe tener presente que cuando la hemorragia es reciente se pierde plasma y elementos figurados en igual proporción, por tanto el hematocrito se mantiene normal. Es útil solicitarlo para tener un basal y evaluar respuesta a tratamiento. Hemoglobina: su disminución indica anemia. Evaluar el volumen corpuscular medio y la ferritina para determinar si es por déficit de hierro y la cronicidad. • Grupo sanguíneo ABO y factor Rh: en caso de ser necesaria una transfusión. • Pruebas de coagulación. Protrombina: Útil para cuantificar el grado de anticoagulación de pacientes usuarios de anticoagulantes orales o con daño hepático crónico. • Perfil hepático : Evaluar daño hepático crónico. • Perfil bioquímico. Creatinina yBUN: Pacientes que pierden grandes volúmenes pueden presentar una insuficiencia renal aguda por causa prerrenal. Tratamiento Aproximación al paciente El manejo de todo paciente que se presenta con hemorragia digestiva debe comenzar con el ABC (airway, breathing and circulation) del trauma: 1. Valoración inicial y estratificación de riesgo Primero se debe evaluar si la vía aérea se encuentra permeable o si el paciente tiene riesgo de aspiración por su estado mental y la presencia de hematemesis, en estos casos se debe intubar y asegurar la vía aéra. Posteriormenteseevalúaelestadohemodinámicoqueestará determinado por el volumen perdido. Se debe considerar la presión sistólica y diastólica, la frecuencia cardiaca, la frecuencia respiratoria yelestadomentaldelpaciente. Según esta evaluación se deben iniciar las medidas de resucitación necesariascomofluidosintravenosos,transfusióndeglóbulos rojos (cuyo objetivo es mantener la hemoglobina ≥ 7 g/dl). A continuación se debe realizar la estratificación de riesgo para determinar aquellos pacientes con alto o bajo riesgo de
  • 199. 200 mortalidad y según estas categorías tomar decisiones que incluyen en cuanto tiempo realizar la endoscopía, evaluar el alta y el nivel de cuidado necesario. Para la estratificación se utiliza el score pre endoscópico de Rockall y el score de Blatchford. El primero utiliza solo parámetros del paciente (edad y comorbilidades) y clínicos que se relacionan con la severidad de la hemorragia. Se utiliza para predecir el riesgo de mortalidad. En cambio el segundo, además de utilizar parámetros clínicos también incluye datos de laboratorio. Se utiliza para predecir la necesidad de intervención y la mortalidad. 2. Terapia medica pre endoscópica Procinéticos: una infusión intravenosa de eritromicina (250 mg 30 min antes de la endoscopía) se debe considerar para mejorar el rendimiento de la endoscopía. Inhibidores de la bomba de protones (bolo de 80 mg): se consideran para disminuir la proporción de pacientes con estigmas de alto riesgo de hemorragia en la endoscopía (hemorragia activa, vaso visible y coágulo adherente) y la necesidad de terapia endoscópica.Además enpacientes con ulcera péptica disminuyen las tasas de resangrado. 3. Endoscopia diagnóstica. Los pacientes con HDA deben realizarse endoscopía temprana (< 24 horas). En pacientes hemodinámicamente estables y sin comorbilidades, la endoscopía se debe realizar tempranamente para dar de alta precozmente. Enpacientesconaltoriesgosedebeconsiderarlaendoscopía antes de 12 horas para mejorar los resultados clínicos. 5. The American Journal of Gastroenterology. Management of patients with ulcer bleeding. Febrero 2012; 107:345–360.
  • 200. 201 Escala de Rockall VARIABLES PUNTOS 0 1 2 3 Edad < 60 años 60 – 79 años ≥ 80 años Shock Sin shock Presión sistólica ≥ 100 mmHg Pulso < 100 lpm Taquicardia Presión sistólica ≥ 100 mmHg Pulso > 100 lpm Hipotensión Presión sistólica < 100 mmHg Comorbilidad Sin comorbilidad Insuficiencia cardiaca, cardiopatía isquémica, otras Insuficiencia renal, insuficiencia hepática, neoplasia Diagnostico Mallory-Weiss Sin lesiones Sin signos de hemorragia reciente Todos los otros diagnósticos Neoplasia esofagogastroduodenal Signos de hemorragia reciente Sin estigmas Hematina Sangre fresca en estómago, vaso visible no sangrante, hemorragia activa, coagulo Tabla 2: Puntaje máximo pre endoscópico: 7. Puntaje máximo post endoscópico: 11. Categorías de riesgos: alto (≥ 5) intermedio (3-4), y bajo (0-2)6 . 6. Rockall TA, Logan RFA, Devlin HB et al. Risk assessment after acute upper gastrointestinal hemorrhage. Gut 1996; 38: 316 – 21.
  • 201. 202 Escala de Blatchford Parámetro Puntos Urea (mmol/l) ≥ 25 6 10 – 25 4 8 – 10 3 6,5 – 8 2 < 6,5 0 Hemoglobina (mg/l) < 10 en varones y mujeres 6 10 – 12 en varones 3 10 – 12 en mujeres 1 ≥ 12 en varones y mujeres 0 Presión arterial sistólica (mmHg) < 90 3 90 – 99 2 100 – 109 1 ≥ 110 0 Otros parámetros Insuficiencia cardiaca 2 Insuficiencia hepática 2 Presentación con sincope 2 Presentación con melena 1 Pulso ≥ 100 lat/min 1 Tabla 3: Puntuación total: Mínima: 0 Máxima: 23 El alta desde urgencia para estudio ambulatorio se debe considerar en pacientes con score de Blatchford 0 porque tiene < 1% de probabilidad de requerir alguna intervención.
  • 202. 203 Escala de Forrest para HDA por úlcera Esta escala permite estratificar a los pacientes según lo que se evidencia en la EDA y así estimar los riesgo que estos conllevan y la posibilidad de resangrado. Clasificación Hallazgo endoscópico Prevalencia Recidiva Cirugía Mortalidad Activa Ia Hemorragia en jet 12% 55% 35% 11% Ib Hemorragia en napa Reciente IIa Vaso visible no sangrante 8% 43% 34% 11% IIb Coagulo adherido 8% 22% 10% 7% IIc Restos de hematina 16% 10% 6% 3% No sangrado III Base de fibrina 55% 5% 0,5% 2% Tabla 3: clasificación de Forrest. Prevalencia en EEUU, probabilidad de recidiva, de necesidad de cirugía y mortalidad según la clasificación.5
  • 203. 204 4. Terapia endoscópica: La terapia endoscópica se debe utilizar en pacientes con hemorragia activa (clasificación Ia y Ib de Forrest) y con vaso visible no sangrante (IIa). En pacientes con coágulo adherido (IIb) se debe irrigar el coágulo, si este se desprende, se reevalúa y reclasifica, decidiendo que terapia le corresponde, si el coágulo es adherente y resiste la irrigación, se debe considerar administrar tratamiento. En casos con restos de hematina o base de fibrina no tienen indicación de terapia endoscópica. La terapia endoscópica incluye: • Inyección de un agente para provocarvasoconstricción, esclerosis y hemostasia localmente. Se utiliza epinefrina, alcohol, etanolamina, trombina, fribrina, entre otros. • Agentes térmicos: electrocoagulación mono o bipolar, coagulación con argón plasma y laser. • Medios mecánicos: hemoclips, sutura, ligadura de bandas o endoloop. Generalmente se utilizan 2 métodos combinados. En pacientes con hemorragia activa se recomienda terapia térmica o inyección de epinefrina más una segunda modalidad. 5. Terapia médica después de la endoscopía En pacientes que fueron tratados endoscópicamente por una ulcera activa, un vaso visible no sangrante o por un coágulo adherido se recomienda terapia con IBP intravenosos con un bolo de 80 mg seguido de infusión continua de 8mg/h por 72 horas. En pacientes con clasificación Forrest IIc y III se recomienda el uso estándar de terapia con IBP. 6. Repetición de endoscopía Se recomienda una segunda endoscopía en pacientes con evidencia clínica de recurrencia de hemorragia. Si recidiva nuevamente después de la segunda endoscopía se emplea cirugía o radiología intervencional con embolización arterial transcateter. 7. Hospitalización: Los pacientes con clasificación Forrest desde Ia a IIb se deberían hospitalizar por al menos 3 días. En pacientes con clasificación IIc y III pueden ser dado de alta luego de la endoscopía si están hemodinámicamente estable con dieta regular. Clasificación Ulcera péptica: Es una lesión crateriforme en la mucosa del tracto gastrointestinal (estómago y duodeno). Su patogenia tiene relación con un desequilibrio entre los factores protectoresyagresoresdelamucosa.Losprincipalesfactores agresores son la presencia de Helicobacter pylori y el uso de antiinflamatorios no esteroidales. La ulcera péptica es la causa más frecuente de hemorragia digestiva alta. Aproximadamente un 10-15% de las úlceras se complican con hemorragia. La hemorragia se produce por la erosión del ácido en la mucosa. Las hemorragias importantes ocurren en contexto de afectación de la arteria gástrica izquierda o de la arteria gastroduodenal. El manejo endoscópico logra controlar un 90% de las hemorragiasporúlcera.El10%restanterequerirátratamiento quirúrgico para una hemostasia eficaz. Las indicaciones para cirugía en una hemorragiadigestiva son: 5 • Inestabilidad hemodinámica a pesar de reanimación vigorosa (transfusión > 6 unidades) • Imposibilidad de detener la hemorragia con técnicas endoscópicas • Repetición de hemorragia con las técnicas endoscópicas • Shock asociado a hemorragias recurrentes • Hemorragia lenta y continua con necesidad de transfusión de más de 3 unidades/dia La prioridad en el tratamiento quirúrgico es el control de la hemorragia. El tratamiento médico consiste en la erradicación de Helicobacter pylori y el uso de IBP. Y en paciente usuarios de AINES o aspirina se debe interrumpir el tratamiento o reemplazarloporAINESselectivodelainhibicióndelaCOX-2. Mallory – Weiss: Es una hemorragia digestiva alta que se produce luego de una contracción abdominal mientras el cardias permanececontraído,comoenepisodios devómitos, generando desgarros en la mucosa y submucosa cercanos a la unión gastroesofágica. En el 90% de los casos no es necesario tratamiento y la lesión cicatriza en menos de 72 horas. En los casos de hemorragia continua se puede realizar tratamiento endoscópico con inyección local o electrocoagulación. Gastritis por estrés: son causadas por el ácido y la pepsina en caso de isquemia por hipoperfusión. Se observan erosiones superficiales en la mucosa de todo el estómago. Es habitual que sangren abundantemente y con frecuencia.Actualmente ha disminuido su frecuencia por los mejores tratamientos en shock y sepsis. Los factores de riesgo para la gastritis por
  • 204. 205 estrés son las coagulopatías yel uso de ventilación mecánica por más 48 hras, en estos pacientes se recomienda el uso profiláctico de antiácidos. Esofagitis: La inflamación del esófago puede producir hemorragia. La esofagitis puede ser causada por el contacto concontenidoacidocomoocurreenlaenfermedadporreflujo gastroesofágico, en este caso el tratamiento consiste en suprimirlaacidezgástrica.Tambiénpuedehaberotrascausas de esofagitis como infecciones, fármacos y radiaciones. En lospacientesconetiologíainfecciosaeltratamientoesdirigido al agente causal. Lesión de Dieulafoy: Es una malformación vascular producida por una protrusión de una arteria de gran calibre (1-3mm) de la submucosa a la mucosa, produciendo hemorragia al erosionarselamucosaypudiendogenerarinclusohemorragia masiva. Se pueden ubicar en cualquier lugar del aparato digestivo pero generalmente se encuentran en la curvatura menor del estómago a 6 cm de la unióngastroesofágica. Se utiliza la endoscopía para ubicar la lesión aunque puede ser difícil de identificar por la intermitencia de la hemorragia. También se utiliza ultrasonido Doppler endoscópico para ubicar las lesiones que no se visualizan con endoscopio. El tratamiento inicial de hemostasia es con técnica térmica o esclerosante con endoscopio, que logra el objetivo en el 90% de los casos. Si no es suficiente puede utilizarse la embolización angiográfica. En un 4- 16% de los casos se necesita cirugía que consiste en suturar la lesión luego de una previa señalización endoscópica. Telangectasia hereditaria o enfermedad de Osler-Weber- Rendu: enfermedad caracterizada por telangectasias en la piel y mucosas y malformaciones arteriovenosas viscerales. Cuando se afecta el tracto digestivo se observan lesiones en la boca y faringe. Hemosuccus pancreaticus: corresponde a la hemorragia del conducto pancreático, causada generalmente por la erosión de un pseudoquiste hacia la arteria esplénica. La angiografía es diagnostica y se puede hacer una embolización.
  • 205. 206 Bibliografía 1. David Q.-H. Wang; Nezam H. Afdhal, Sleisenger and Fordtran’s Gastrointestinal and Liver Disease, Ninth Edition (2010). . 2. Courtney T, Beauchamp D, Evers M, Mattox K. Sabiston: tratado de cirugía.19 ed. España: Elservier; 2013. 3. Weitz C, Berger Z, Sabah S, Silva H. Diagnóstico y Tratamiento de las Enfermedades digestivas. Chile: De iku; 2013. 4. Rockall TA, Logan RF, Devlin HB, Northfield TC. Incidence of and mortality from acute upper gastrointestinal haemorrhage in the United Kingdom. Steering Committee and members of the National Audit ofAcute Upper Gastrointestinal Haemorrhage. Br Med J 1995;311:222-6. 5. The American Journal of Gastroenterology. Management of patients with ulcer bleeding guideline. Febrero 2012; 107:345–360; 6. American society for gastrointestinal endoscopy. The role of endoscopy in the management of acute non-variceal upper GI bleeding guideline. Volume 75, No. 6 : 2012. 7. Marta Gallach, Xavier Calvet, Angel Lanas, Faust Feu, Julio Ponce, Javier p. Gisbert. Guía práctica para el manejo de la hemorragia digestiva alta no varicosa. Emergencias 2013; 25:472-481. 8. J. L. Martínez Porras, J. L. Calleja Panero. Hemorragia digestiva alta: etiología y procedimientos diagnósticos. Madrid. Emergencias 2005;17:S50-S54. 9. Galindo F; Hemorragia digestiva. Cirugía Digestiva, Argentina. 2009; I-126, pág. 1-19.
  • 207. 208
  • 208. 209 5.1 Anatomía del intestino delgado Ramírez J, Morelli C, Valdés F Introducción El intestino delgado, compuesto por duodeno, yeyuno e ileon, es el principal lugar para la absorción de nutrientes. Se extiende desde el píloro hasta la unión ileocólica, con una longitud aproximada de 6-8 metros. El calibre del intestino delgado disminuye de manera progresiva desde proximal a distal. Duodeno Su nombre proviene del latín duodenum digitorum, que significa 12 dedos de longitud. Es la primera porción del intestino delgado, mide 25 centímetros de largo y es el segmento más ancho y fijo de este. Su inicio es en el bulbo duodenal y se extiende hasta el ángulo duodenoyeyunal que por exterior se corresponde con la inserción del ligamento de Treitz. Esta dividido en 4 porciones: Primera porción (Superior): Mide aproximadamente 5 cms. Es la porción mas móvil y se conoce como bulbo duodenal. Segunda porción (Descendente): Mide 10 cms. Se encuentra por posterior al mesocolon transverso y anterior al riñón derecho. Se dirije hacia inferior y se curva alrededor de la cabeza del páncreas. La vía biliar y el conducto pancreático se unen a su cara postero-medial, formando la ampolla hepatoduodenal. En un 5-10% de las personas existe un conducto pancreático accesorio que se une 2cm proximal a la ampolla y recibe el nombre de conducto de pancreático accesorio o de Santorini. Esta porción es completamente retroperitoneal. Tercera porción (Horizontal o Inferior) : Mide 8 cms de longitud. Se ubica inferior al mesocolon transverso. Se dirige transversalmente hacia la izquierda, pasando por sobre la Vena Cava Inferior (VCI) yAorta. Superior a ella se encuentra la cabeza del páncreas y su proceso unciforme. Cuarta porción (Ascendente): Mide 5 cms, asciende hasta el borde superior de la vertebra L2. Termina en el ángulo duodenoyeyunal para continuarse posteriormente con el yeyuno. del colédoco y da lugar a una importante transición en la vascularización del tracto digestivo, siendo este punto la zona de unión entre el intestino anterior y medio durante la embriogénesis. El drenaje venoso del duodeno siguen el trayecto de las arterias y drenan en la Vena Porta, algunas directamente y otras através delasVenasMesentéricaSuperior yEsplénica. Los vasos linfáticos del duodeno siguen a las arterias. Los linfáticos anteriores drenan en los linfonodos pancreatoduodenales, localizados en el trayecto de las arterias pancreatoduodenales superior e inferior y en los linfonodos pilóricos que siguen el curso de la arteria gastroduodenal. Los vasos linfáticos posteriores pasan por posterior a la cabezadel páncreas ydrenanen los linfonodos mesentéricos superiores. Los vasos linfáticos eferentes de los linfonodos periduodenales, drenan en los infonodos celíacos. La inervación del duodeno proviene del nervio vago y de los nervios esplácnicos torácicos mayor y menor por vía de los plexos celíaco y mesentérico superior, desde los que son conducidos al duodeno siguiendo plexos periarteriales que se extienden hacia las arterias pancreatoduodenales. Irrigación, drenaje linfático e inervación del duodeno. La irrigación arterial del duodeno proviene de las arterias gástrica derecha, supraduodenal, gastroepiploica derecha y pancreatoduodenal superior e inferior. Las arterias pancreatoduodenales se sitúan en la curva entre el duodeno y la cabeza del páncreas para irrigar ambas estructuras. La anastomosis entre ellas tiene lugar a nivel de la entrada
  • 209. 210 Yeyuno e Ileon La segunda porción del intestino delgado recibe el nombre de yeyuno y comienza en el ángulo duodenoyeyunal, donde el tracto digestivo reanuda su trayecto intraperitoneal. El ileon, quecorrespondealaterceraporcióndelintestino,nopresenta una división precisa con el yeyuno y se extiende hasta la unión Ileocólica. En cuanto a las dimensiones, yeyuno e ileon miden 6 a 7 metros de longitud, la mayor parte del yeyuno se sitúa en el cuadrante superior izquierdo del compartimento inframesocólico,mientrasquelagranpartedelileonselocaliza en el cuadrante inferior derecho. El ileon terminal se apoya usualmente en la pelvis, desde la que asciende para finalizar en la cara medial del ciego. Pese a que no existe una clara frontera entre el yeyuno y el Íleon, poseen características diferenciales de importancia quirúrgica. El yeyuno es de mayor calibre, siendo aproximadamente de 2-4 centímetros, su pared es más gruesa, los vasos rectos que lo nutren son más largos y las arcadas son escasas y de gran tamaño. Mientras que el ileon posee un calibre de 2-3 centímetros, su pared es mas delgada los vasos rectos son cortos y las arcadas múltiples y cortas. El mesenterio une al yeyuno y al ileon a la pared abdominal posterior, se dispone de manera de abanico y es por donde transcurren los vasos arteriales que irrigan al intestino delgado. Laraízdelmesenteriosigueuntrayectooblicuodearribahacia abajo y de izquierda a derecha, midiendo aproximadamente 15cm. Diferencias topográficas e irrigación de yeyuno e ileon
  • 210. 211 Irrigación, drenaje linfático e inervación del yeyuno e íleon La arteria mesentérica superior (AMS) irriga yeyuno e ileon. Esta arteria habitualmente se origina en la aorta abdominal 1 cm por inferior del tronco celiaco y pasa sobre la 3era porción de duodeno. Discurreentre lasdos capas del mesenterio, emitiendoramas que forman a su vez asas que se anastomosan entre si; éstas son conocidas como las arcadas arteriales que emiten a su vez los vasos rectos que llegan hasta el intestino. Lavenamesentéricasuperior(VMS)eslaencargadadedrenar yeyuno e ileon. Se sitúa anterior y a la derecha de la AMS en la raíz del mesenterio. La VMS se une a la vena esplénica, posterior al cuello del páncreas, para formar la vena porta. Losvasoslinfáticosdrenandesdelasvellosidadesintestinales y cúmulos linfáticos submucosos a los linfonodos en el mesenterio y posteriormente a los periaorticos. Irrigación de yeyuno e ileon
  • 211. 212 Bibliografía 1. McMinn RMH: Last’s Anatomy: Regional and Applied, 9th ed. Singapore: Churchill Livingstone, 1994, p 337. 2. Bass L, Wershil B. Anatomy, Histology, Embryology, and Developmental Anomalies of the Small and Large Intestine. In: Feldman M. Sleisenger and Fordtran’s Gastrointestinal and Liver Disease, Tenth Edition. Philadelphia: Saunders; 2016. p. 1649-1678. 3. Mezoff E, Shroyer N. Anatomy and Physiology of the Small and Large Intestines. In: Robert W.Pediatric Gastrointestinal and Liver Disease, Fifth Edition. Philadelphia: Elsevier; 2016.p.345-359. Drenaje venoso de yeyuno e ileon
  • 212. 213 5.2 Divertículo de Meckel Rodríguez D, Jofré M, Court F. Introducción El divertículo de Meckel es la anomalía congénita más frecuente del intestino delgado, correspondiendo a una falla en la atrofia normal del conducto onfalomesentérico que ocurre en el desarrollo embriológico entre el quinto y noveno mesdegestación1 .Loshallazgosembriológicos yanatómicos fueron descritos por primera vez en 1809 por Johann Meckel, anatomista y embriólogo alemán. Se considera el único divertículo verdadero del intestino delgado, ya que contiene todas sus capas (mucosa, submucosa y muscular propia). La incidencia es del 1% y existe un riesgo entre 4-6% de presentarsíntomasalo largodelavida.EnChile,la incidencia es de un 0.8 a un 4%2 . En la literatura existe debate al de- terminar si hay o no diferencia de género, pero el sexo masculino presenta el doble de riesgo de presentar síntomas que su contraparte femenina3 . El riesgo de mortalidad en pacientes sintomáticos es de aproximadamente 6%, y aumenta enpacientesadultosmayoresquepresentancomplicaciones4 5 . Divertículo deMeckel 1 Yahchouchy EK, Marano AF, Etienne JC, et al: Meckel’s diverticulum. J Am Coll Surg 192:658, 2001. 2 Godoy J, Varela P, Latorre J, Henríquez A. Divertículo de Meckel. Rev. Chil. Pediatr. 68:7-10, 1997. 3 Park JJ, Wolff BG, Tollefson MK, et al: Meckel diverticulum: The Mayo Clinic experience with 1476 patients (1950-2002). Ann Surg 241: 529, 2005 4 Dumper J, Mackenzie S, Mitchell P, et al: Complications of Meckel’s diverticula in adults. Can J Surg 49:353, 2006. 5 Cullen JJ, Kelly KA, Moir CR, et al: Surgical management of Meckel’s diverticulum. An epidemiologic, population-based study. Ann Surg 220:564, 1994; discussion 568-569.
  • 213. 214 Patogenia Embriológicamente, el conducto onfalomesentérico aparece en la tercera semana de gestación y presenta una función nutricia al conectar el saco vitelino primitivo al intestino medio en el feto en desarrollo. Dicho conducto sufre una obliteración completa entre el quinto y noveno mes de gestación, para luego convertirse en una delgada banda fibrosa que se desintegra a la décima semana de gestación. Todas las anomalías del conducto onfalomesentérico fueron descritas por Johann Meckel. Estas anomalías incluyen la fístulaonfalomesentérica,quesepresentaclínicamentecon contenido intestinal emergiendo desde el ombligo, dado que el conducto permanece completamente intacto sin atrofia en ninguno de sus extremos, permitiendo el paso de contenido entérico al exterior; el quiste del conducto vitelino, que es un cordón congénito entre el íleon y el ombligo producto de una falla de atrofia del lado umbilical del conducto; las bandas fibrosas congénitas (o bridas congénitas) producto de la falta de desintegración de la banda fibrosa del conducto onfalomesentérico atrófico; y, finalmente, el divertículo de Meckel, donde existe una falla en la atrofia del lado ileal del conducto onfalomesentérico, la cual representa el 90% de las anomalías congénitas del intestino delga-do. Se asocia a veces con otras anomalías de carácter congénito, como malformaciones cardiovasculares, del sistema nervioso, paladar hendido, páncreas anular, malformaciones esofágicas y anorrectales.
  • 214. 215 El divertículo de Meckel casi siempre se ubica en el borde antimesentéricodelíleo,típicamentedentro delosprimeros 100 cm desde la válvula ileocecal. La distancia a la válvula ileocecal incrementa según aumenta el grupo etario. Dado que las células del divertículo de Meckel provienen de tejido embriológico, mantienen su pluripotencialidad y como resultado de esto, el 50 a 60% de los divertículos contienen tejido heterotópico en donde el 75% son células de mucosa gástricayel15%contienetejidopancreático.Delospacientes sintomáticos, un 75% tiene mucosa gástrica, lo que sugiere que este tejido es responsable de la mayoría de los síntomas de un divertículo de Meckel. Se han encontrado también otros tipos histológicos raros que incluyen mucosa colónica, lipomas, leiomiomas, neurofibromas, angioma y sus contrapartes malignas (adenocarcinoma de mucosa gástrica ectópica, carcinoide y sarcomas). Estos últimos son excepcionales, sin embargo, son de importancia oncológica porque pueden servir como punto de pivote para intususcepciones, por lo que son factores de riesgo para dicha patología56 . Formación de divertículo de Meckel (8 semanas)
  • 215. 216 Diagnóstico y Forma de Presentación Tanto el divertículo de Meckel como sus complicaciones pueden ser diagnósticos difíciles, particularmente en los pacientes adultos. Las formas de presentación que producen síntomas son; hemorragia digestiva, diverticulitis de Meckel, obstrucción intestinal (vólvulo o intususcepción), perforación y anomalías o tumores umbilicales6 7 . En pacientes con dolor en el cuadrante inferior derecho del abdomen que ingresan a pabellón con diagnóstico de apendicitis aguda y el hallazgo intraoperatorio revela un apéndice sano, se debiera considerar siempre y descartar una diverticulitis de Meckel revisando los últimos 100 cm del íleon distal. Divertículo de Meckel incidental durante una laparotomía exploradora por obstrucción intestinal secundaria a bridas. Imagen: Dr. Diego Rodríguez Verdugo. 6 Cameron JL: Diverticulosis of the Small Bowel. En Current surgical therapy, 9 ed, Phila-delphia, 2008, Elsevier Mosby. 7 Townsend CM: Diverticular disease. En Sabiston textbook of surgery: The biological basis of modern surgical practice, 18 ed, Philadelphia, 2008, Saunders/Elsevier. La diverticulitis de Meckel se encuentra entre un 10 a 25% de los casos sintomáticos, se observa en su mayoría en pacientes adultos mayores y no hay forma de diferenciarla clínicamente de una apendicitis aguda. Se describe en su etiopatogenialaformacióndeenterolitosdentrodeldivertículo, con la subsecuente obstrucción luminal que conlleva a necrosis y gangrena, similar al origen de la apendicitis aguda. Tal cual como en la apendicitis aguda, una diverticulitis de Meckel no tratada puede derivar en una perforación, lo que conlleva a la formación de abscesos y/o peritonitis. La incidencia de diverticulitis de Meckel perforada es de aproximadamente un 7%. La hemorragia digestiva baja en un 50% de los pacientes sintomáticos menores de edad se presenta con hematoquezia, en los adultos usualmente se presenta como melena. El sitio usual de sangrado se ha descrito en la anatomía patológica como una úlcera ileal adyacente o frente al divertículo de Meckelquecontienemucosagástricaheterotópicaproductora de ácido. La obstrucción intestinal secundaria a un Meckel es la forma de presentación más frecuente en los adultos (vólvulo intestinodeintestinodelgadoporbridacongénita) sedescribe en un 40% de los casos. La intususcepción resulta de la invaginación de un divertículo de base ancha, que actúa como un punto de pivote interiorizándose de forma progresiva en el lumen intestinal con cada movimiento peristáltico, resultando eventualmente en una obstrucción completa. Puede ser un compromiso íleoilealoíleocólico.Laintususcepciónsemanifiestacomouna obstrucciónagudaenadultos,convómitosprecoces,urgencia defecatoria. En niños se presenta como la clásica diarrea “en jalea de grosella” (“currantjelly stools”). La obstrucción también se asocia a incarceración de un divertículo en una hernia inguinal denominada “hernia de Littré” y a un divertículo de Meckel que contienen tumores en su histología. Los tumores ocurren entre un 0.5 a un 3.2% de los Meckel sintomáticos; de estos, el 33% son carcinoides1. Menos del 10% de los casos de divertículo de Meckel complicadosediagnosticaenelpreoperatorio.Laimagenología estándar, que incluye la ecografía abdominal y la tomografía axialcomputarizada(TAC)deabdomenypelvissondeescaso valor.Cuando se sospecha el diagnóstico en el preoperatorio, se utiliza un radiotrazador Tc-99m (tecnecio pertecnectato) que aumenta la sensibilidad del TAC, ya que se une a la mucosa gástrica, normal yectópica. Es útil solo cuando existe mucosa gástrica en el divertículo. Esbastanteprecisoenpacientespediátricoscuandoelmotivo de consulta fue hemorragia digestiva, permite localizar el sitio de sangrado en un 90% de los pacientes. En adultos, que son menos propensos a sufrir sangrado digestivo por
  • 216. 217 esta causa, la precisión disminuye a un 50%. La sensibilidad para la TAC con Tc-99m para el hallazgo de un divertículo de Meckel con mucosa gástrica en su histología es del 85%, con una especificidad del 95%. La precisión y sensibilidad puedenmejorarsealagregarestimulaciónconpentagas-trina o con cimetidina1 6. La TAC con contraste endovenoso es útil en complicaciones como la diverticulitis, obs-trucción intestinal, enterolitos o perforaciones. La enteroclisis tiene una precisión del 75% en adultos, pero requiere un alto índice de sospecha. Para este estudio, se inyecta gran cantidad de contraste a través de una sonda nasoyeyunal permitiendo opacificar el divertículo de Meckel, que se ve como un saco de fondo ciego o como un defecto de llenado. Cuando el divertículo representa un punto de pivote para una intususcepción, se observará un defecto de llenado pequeño y polipoideo, que generalmente se introduce dentro del lumen intestinal6. La arteriografía se puede utilizar en casos de hemorragia digestivacon unsangradoma-yora0.5ml/minuto. El hallazgo másútilendichoestudioesunaramadelaarteriame-sentérica superior en el cuadrante inferior derecho que contiene un pequeñoclusterdevasos tortuosos querepresentan laarteria onfalomesentérica anómala dando irrigación al lecho capilar del divertículo6 . A pesar de todos los métodos previamente descritos, la mayoría de los divertículos de Meckel complicados se identifican en el tiempo de la exploración abdominal en pabellón. Una laparoscopía diagnóstica puede reemplazar el estudio radiológico 1 . Manejo asegurarse de esto, la muestra resecada debiera ser abierta previo al cierre abdominal. Tal cual como cualquier cirugía intestinal, el grado de resección depende de la condición del tejido adyacente o del principio oncológico en caso que se sospechedepatologíatumoral.UndivertículodeMeckelcorto (diámetro < 1.6 cm) puede contener mucosa heterotópica en su base, por lo que una resección segmentaria debiera ser considerada por sobre una diverticulectomía simple9 , al igual que las perforaciones que pueden requerir,incluso una mayor extensión resectiva. Un Meckel ancho en niños debiera ser tratado con una resección extensa, por el riesgo aumentado de estenosis y constricciones. Una apendicectomía profiláctica debiera agregarse para evitar futuros dilemas del punto de vista diagnóstico, aunque es motivo de controversia actual7. La resección de un divertículo de Meckel incidental durante una laparotomía o laparoscopía es motivo de controversia, conmúltiples estudios en la literatura. Parte de la controversia es que en estudios y revisiones antiguas, retrospectivas, se describían altas tasas de morbilidad y mortalidad con la reseccióndiverticular10 11 ;estosestudioshansidorefutadosen lasrevisionescontemporáneas.Enlaactualidad,descartando cualquier contraindicación mayor, la resección de un divertículo de Meckel incidental se recomienda en la mayoría de los pacientes dado su riesgo de 6.4% de complicaciones durante la vida y la incidencia acumulada de morbilidad y mortalidad precoz de un 12% y tardía del 7% después de la resección de un Meckel sintomático versus el 2% de complicaciones posterior a una diverticulectomía incidental5. Deformaglobal,lascaracterísticasdeundivertículodeMeckel con mayor riesgo de complicaciones son pacientes menores a 50 años, de sexo masculino, un divertículo mayor a 2 cm de tamaño, y la presencia de tejido ectópico o características anormales alrededor de este. Estas características corresponden a las indicaciones establecidas de resección en Meckel asintomáticos3 12 . La resección quirúrgica de un divertículo de Meckel sintomático es el tratamiento estándar. Se recomienda que la técnica de la diverticulectomía se adecúe al motivo de consulta y a la morfología diverticular. La diverticulectomía o resección segmentaria por vía laparoscópica se puede realizar sin aumentar el riesgo de la cirugía con profesionales experimentados en la técnica8 . Una diverticulectomía simple, que incluye la resección del divertículo y sus bandas que lo adhierenalasparedesabdominalesoalmesenteriointestinal, es suficiente en casos de diverticulitis o de obstrucción. En los casos donde existen bridas congénitas asociadas, estas también deben ser resecadas. Un Meckel manifestándose como una hemorragia digestiva debe ser tratado con una resección segmentaria con anastomosis primaria para remover cualquier ulceración ileal adyacente que pudiera ser responsable del sangrado. Para 8 Rivas H, Cacchione RN, Allen JW: Laparoscopic Management of Meckel’s Diverticulum in Adults. Surg Endosc 17:620, 2003. 9 Varcoe RL, Wong SW, Taylor CF, et al: Diverticulectomy is inadequatetreatmentforshortMeckel’sdiverticulumwithheterotopic mucosa. Austr N Z J Surg 74:869, 2004. 10 Soltero MJ, Bill AH: The natural history of Meckel’s diverticulum and its relation to inci-dental removal. A study of 202 cases of diseased Meckel’s diverticulum found in King County, Washington, over a fifteen year period. Am J Surg 132:168, 1976. 11 Leijonmarck CE, Bonman-Sandelin K, Frisell J, et al. Meckel’s diverticulum in the adult. Br J Surg 73:146, 1986. 12 Groebli Y, Bertin D, Morel P: Meckel’s diverticulum in adults: Retrospective analysis of 119 cases and historical review. Eur J Surg 167:518, 2001.
  • 217. 218 Bibliografía 1. Yahchouchy EK, Marano AF, Etienne JC, et al: Meckel’s diverticulum. J Am Coll Surg 192:658, 2001. 2. Godoy J., Varela P., Latorre J., Henríquez A. Divertículo de Meckel. Rev. Chil. Pediatr. 68:7-10, 1997. 3. Park JJ, Wolff BG, Tollefson MK, et al: Meckel diverticulum: The Mayo Clinic experience with 1476 patients (1950-2002). Ann Surg 241:529, 2005. 4. Dumper J, Mackenzie S, Mitchell P,et al: Complications of Meckel’s diverticula in adults. Can J Surg 49:353, 2006. 5. Cullen JJ, Kelly KA, Moir CR, et al: Surgical management of Meckel’s diverticulum. An epidemiologic, population based study. Ann Surg 220:564, 1994; discussion 568-569. 6. Elsayes KM, Menias CO, Harvin HJ, et al. Imaging manifestations of Meckel’s di-verticulum. AJR Am J Roentgenol 189:81, 2007. 7. Cameron JL: Diverticulosis of the Small Bowel. En Current surgical therapy, 9 ed, Philadelphia, 2008, Elsevier Mosby. 8. Townsend CM: Diverticular disease. En Sabiston textbook of surgery: The biological basis of modern surgical practice, 18 ed, Philadelphia, 2008, Saun-ders/Elsevier. 9. Rivas H, Cacchione RN, Allen JW: Laparoscopic Management of Meckel’s Diver-ticulum in Adults. Surg Endosc 17:620, 2003. 10. Varcoe RL, Wong SW, Taylor CF, et al: Diverticulectomy is inadequate treatment for short Meckel’s diverticulum with heterotopic mucosa. Austr N Z J Surg 74:869, 2004. 11. Soltero MJ, Bill AH: The natural history of Meckel’s diverticulum and its relation to incidental removal. A study of 202 cases of diseased Meckel’s diverticulum found in King County, Washington, over a fifteen year period. Am J Surg 132:168, 1976. 12. Leijonmarck CE, Bonman-Sandelin K, Frisell J, et al. Meckel’s diverticulum in the adult. Br J Surg 73:146, 1986. 13. Groebli Y,Bertin D, Morel P: Meckel’s diverticulum in adults: Retrospective analy-sis of 119 cases and historical review. Eur J Surg 167:518, 2001.
  • 218. 219 5.3 TumoresdeIntestinoDelgado Ramírez J, Court F. Introducción Los tumores de intestino delgado son muy infrecuentes y la clínica con la que se presentan es bastante variable haciendo difícil su diagnóstico. Tumores benignos Clasificación • Lesiones de glándulas de Brunner. • Pólipos: • Adenomas. • Hamartomas (síndrome de Peutz-Jeghers). Tumores malignos • Tumores carcinoides. • Adenocarcinoma. • Metástasis. Tumores linfoproliferativos • Linfomas de células B. • Linfomas de células T. Tumores estromales • GIST. • Lipomas/Liposarcomas. • Tumores de células neurales. • Leiomiomas/Leiomiosarcomas. • Tumores vasculares. Clínica Los síntomas y signos de un tumor de intestino delgado van a depender del tipo de tumor que lo afecte. Las formas más frecuentes de presentación son el dolor abdominal y la obstrucción intestinal. Tambiénse puede presentar como una masa palpable, anemia y perforación intestinal. La pérdida de peso, náuseas, vómitos e ictericia pueden ser síntomas aislados de presentación. Intusucepcion (visión exterior)
  • 219. 220 Estudio Al tener la sospecha diagnóstica, se debe complementar con algún estudio de imagen para confirmar la presencia del tumor. La enteroclisis, la tomografía computarizada (TC) y la endoscopía digestiva alta son exámenes que pueden demostrarlo, dependiendo del tamaño y la ubicación de este. Noobstanteloanterior,elestudioacabadodelintestinodelgado se logra con la cápsula endoscópica y/o la enteroscopía de doble balón. Tumores Neuroendocrinos Representan a los tumores malignos más frecuentes del intestino delgado, dando cuenta de aproximadamente un 37% de todos los tumores. La mayoría se ubica en el íleon distal.Serelacionanaotroscánceres yasíndromesfamiliares como la Neoplasia Endocrina Múltiple tipo I (NEM) y la neurofibromatosis tipo 1. Al momento del diagnóstico un 50% tiene enfermedad no localizada. El tamaño es importante y se relaciona con la probabilidad de presentar metástasis. Los tumores menores a 1 cm tienen muy baja probabilidad de presentar metástasis, mientras que los tumores mayores a 2 cm un 80% tienen metástasis. Los tumores neuroendocrinos tienen capacidad de producir y secretar sustancias del tipo polipéptidos, aminas y prostaglandinas. Cuando presentan síntomas atribuibles a la secreción hormonal se les denomina funcional, en cambio, a los que no lo hacen se les señala como no funcionales. Los que se ubican en yeyuno o íleon producen serotonina, mientras que los que se localizan en duodeno generalmente producen gastrina y somatostatina. Se clasifican en bien diferenciados y mal diferenciados. El principal exponente de los tumores neuroendocrinos de intestino corresponde al Carcinoide Intusucepcion (visióninterior)
  • 220. 221 Carcinoide Clínica El síntoma más frecuente es el dolor abdominal inespecífico, por tanto, pueden pasar años antes de hacer el diagnóstico. El síndrome carcinoide se presenta entre 18-35% de los pacientes con tumores carcinoides de intestino delgado y se caracteriza por dolor abdominal, diarrea, flushing, bronco constricción y enfermedad cardiaca por carcinoide. Clasificación Diagnóstico La medición de ácido 5 hidroxindolacético (5-HIAA) en orina de 24 horas y de cromogranina A en sangre son métodos de screening. Para localizar la lesión se usa el TAC de abdomen y pelvis, la RNMylacintigrafíadereceptoresdesomatostatina(octeotride scan). La endoscopía es capaz de identificar lesiones en duodeno y yeyuno proximal, mientras que la colonoscopía puede hacerlo en lesiones en íleon distal. Adencarcinoma Tumor Primario (T) Metástasis (M) Tx Tumor primario no puede ser caracterizado. M0 Sin evidencia de metástasis. T0 Sin evidencia de tumor primario. M1 Con metástasis a distancia. T1 Tumor invade lámina propia o submucosa o tamaño <1cm. Estadio T2 Tumor invade muscular propia o >1cm. Etapa 0Tis N0 MO T3 Tumor invade a través de la muscular propia a la subserosa sin penetrar la serosa o invade páncreas o retroperitoneo (en tumores periampulares). Etapa I T1 N0 M0 T4 Tumor invadeperitoneo visceral u otros órganos. Etapa IIa T2 N0 M0 Linfonodos regionales (N) Etapa IIb T3 N0 M0 Nx Linfonodos no pueden ser estudiados. EtapaIIIa T4 N0 M0 N0 Sin metástasis a linfonodos regionales. Etapa IIIb CualquierT N1 M0 N1 Metástasis a linfonodos regionales. Etapa IV Cualquier T CualquierN M1
  • 221. 222 Tratamiento La cirugía es el único tratamiento curativo. Lesiones menores a 1 cm se pueden resecar por vía endoscópica. Lesiones de 1-2 cm se pueden resecar quirúrgicamente en forma local. Lesiones mayores a 2 cm se deben resecar y asociar una lifadenectomía por el riesgo de compromiso linfático. Durante la cirugía se debe explorar el resto de la cavidadabdominal en búsqueda de posibles metástasis inadvertidas. El tratamiento farmacológico con preparados de somatostatina ayuda para el control de los síntomas, pero no ha demostrado acción antitumoral. La quimioterapia tiene un rol limitado en esta enfermedad. Adenocarcinoma Clínica Como en todos los tumores de intestino delgado, la clínica es inespecífica, lo que retra-sa el diagnóstico. Dentro de los síntomas se describe dolor abdominal, anemia, náuseas y vómitos, ictericia (tumores en duodeno) y hemorragia digestiva. Diagnóstico Según ubicación se dividen en duodenales y distales (yeyuno e íleon). Los tumores duodenales se diagnostican mediante endoscopía digestiva alta con biop-sia. Se puede asociar a endosonografía. Debe solicitarse una TAC de tórax, abdomen y pelvis con contraste para el estudio de metástasis. Para los tumores distales al ángulo de Treitz, el diagnóstico se puede alcanzar mediante el uso de la cápsula endoscópica y la enteroscopía con doble balón. El estudio de diseminación se hace igual que en los anteriores. Tiene una incidencia parecida a los carcinoides, entre 25-40%. El segmento más afectado es el duodeno y disminuye a lo largodelintestinodelgado.Seoriginadeadenomasolesiones displásicas. Es así como la Poliposis Adenomatosa Familiar (FAP sigla en inglés), es un factor de riesgo importante en el desarrollo de estos tumores. Adenocarcinoma de intestino delgado
  • 222. 223 Clasificación Adencarcinoma Tumor Primario (T) Metástasis (M) Tx Tumor primario no puede ser caracterizado. M0 Sin evidencia de metástasis. T0 Sin evidencia de tumor primario. M1 Con metástasis a distancia. Tis Carcinoma in situ Estadio T1a Tumor invade lámina propia. Etapa 0 Tis N0 MO T1b Tumor invade la submucosa. Etapa I T1 N0 M0 T2 Tumor invade la muscular propia. T2 N0 M0 T3 Tumor invade a través de la muscularpropiahastalasubserosa o mesenterio/retroperitoneo <2cm. Etapa IIa T3 N0 M0 T4 Tumor invade peritoneo visceral u otros órganos o mesenterio/retro- peritoneo >2cm. Etapa IIb T4 N0 M0
  • 223. 224 Linfonodos regionales (N) Etapa IIIa Cualquier T N1 M0 Nx Linfonodos no pueden ser estudiados. Etapa IIIb Cualquier T N2 M0 N0 Sin metástasis a linfonodos regionales. Etapa IV Cualquier T Cualquier N M1 N1 Metástasis a 1-3 linfonodos regionales. N2 Metástasis a > 4 linfonodos regionales. Tratamiento Para los tumores en la 1.a y 2.a porción del duodeno, la cirugía indicada es la pancrea-toduodenectomía (operación de Whipple). Paratumoresdeyeyunoeíleon,lareseccióndelsegmentocon márgenesnegativosdebeiracompañadadelinfadenectomía. El margen libre que se debe respetar es de 5 cm. En caso de que el tumor se ubique en el íleon distal puede ser necesario realizar una hemicolectomía derecha para alcanzar los márgenes libres. Linfomas Los linfomas extranodales más frecuentes son los gastrointestinales. En su mayoría son linfomas no Hodgkin y de células B (excepto el linfoma de células T asociado a enteropatía). El estómago es el principal órgano afectado, lo siguen el intestino delgado y, posteriormente, la región ileocecal. Clínica Síntomas inespecíficos, siendo los más frecuentes el dolor abdominal y la pérdida de peso. También se asocia a hemorragia digestiva, fatigabilidad y sudoración nocturna. Diagnóstico El diagnóstico de un linfoma primario de intestino delgado requiere: • Ausencia de linfoadenopatías periféricas o mediastínicas. • Recuento de glóbulos blancos normales. • Tumor afecte principalmente intestino delgado. • Sin evidencia de compromiso hepático ni esplénico. Se puede sospechar con estudios de imagen, como un TAC de abdomen y pelvis con contraste que muestre presencia de tumores a nivel de intestino, pero el diagnóstico siempre requiere de biopsia.
  • 224. 225 Linfoma de intestino delgado La endoscopía digestiva alta con biopsia es suficiente en los tumores proximales al ángulo de Treitz. Enpacientesquenoselograobtenerunabiopsiaendoscópica o que la sospecha a pesar de biopsias negativas sigue siendo importante, se puede recurrir a la laparotomía o laparoscopía con resección del segmento comprometido para enviar la pieza a ana-tomía patológica. Clasificación Tumores de células B • Linfoma de tejido linfoide asociado a mucosa (MALT). • Linfoma difuso de células B grandes. • Linfoma de células del manto. • Linfoma Burkitt o Burkittlike. Tumores de células T • Linfoma de células T asociado a enteropatía. Tratamiento En el caso de los linfomas MALT, el tratamiento contra el H. Pylori puede provocar la regresión de la enfermedad. Para los otros, en general, se requiere de combinación de quimioterapia más radioterapia.
  • 225. 226 Bibliografía 1. Bresalier r, Blechacz B. Tumors of the Small Intestine. In: Feldman M, Friedman L, Brandt L. Sleisenger and Fordtran’s Gastrointestinal and Liver Disease. Philadelphia: Elsevier; 2016, pp. 2196-2212. 2. Kunitake H, Hodin R. The Management of Small Bowel Tumors. In: Cameron J, Cameron A. Current Surgical Therapy. Philadelphia: Elsevier; 2014, pp. 122-128. 3. Tavakkolizadeh A, Whang E, Ashley S, and Zinner M. Small Intestine. In: Brunicardi F. Schwartz’s Principles of Surgery 9th Edition. New York: The McGraw-Hill Com-panies; 2010. 4. Hande K. Neuroendocrine Tumors and the Carcinoid Syndrome. In: Goldman-Cecil Medicine 25th Edition. Philadelphia: Elsevier; 2016.
  • 226. 227 5.4 ObstrucciónIntestinal Gajardo J, Ready J, González I, Court F. Introducción La detención del tránsito intestinal o íleo es una condición clínica frecuente en el quehacer médico y representa un 15% de las consultas a urgencia por dolor abdominal1 . Se debe aprender a determinar si la detención del tránsito es debido a un factor obstructivo que denominaremos “íleo mecánico” o a una detención del peristaltismo intestinal que llamaremos “íleo paralítico”. La importancia en esta distinción es que obedecen a causas muy distintas y su tratamiento difiere completamente. El íleo mecánico sigue siendo hoyen día un desafío en cuanto a diagnóstico y tratamiento, ya que se puede presentar como un cuadro agudo que obligue a una intervención quirúrgica de urgencia o como una condición menos dramática que permita una observación del paciente y un manejo inicial de tipo médico. Íleo Mecánico Llamaremos obstrucción intestinal alta cuando ocurre proximal a la válvula oleocecal y baja cuando es distal a este. Esta clasificación, que es más bien clínica, es muy útil porque nos orienta inmediatamente a posibles causas involucradas y forma de manejo del paciente. Una segunda forma de clasificar la obstrucción intestinal es de acuerdo con los hallazgos patológicos, es decir, qué fue lo que produjo la detención del tránsito intestinal. Se distinguen causas “intraluminales y extraluminales”, dependiendo si el factor obstructivo bloquea internamente el lumen del intestino o lo hace a través de una compresión externa. Etiología Íleo mecánico de causa extraluminal • Bridas y adherencias, importa mucho el antecedente de cirugías previas dentro de la historia del paciente. Representan la principal causa de obstrucción intestinal, dando cuenta de 58% de las obstrucciones intestinales altasenseriesnacionales2 .Sonbandasfibróticasformadas apartir deunareacción cicatricial del peritoneo, que unen 1 Jackson P.,Raiji M.Evaluationandmanagmentofintestinal obstruction. Am Fam Physi-cian. 2011 Jan 15;83(2):159-165. 2 Csendes A., Pereira P., Zamorano M., Arratia I., González J., Carrie F. Tratamiento mé-dico o quirúrgico de la obstrucción intestinal alta. Rev. Chil. Cir. 2016; 68(3): 227-232. superficies de tejido que normalmente están separadas dentro de la cavidad abdominal. Las asas intestinales se mueven y como están adheridas a un punto por la adherencia,estaactuarácomounejehaciendoqueelasa rote sobre él, produciéndose una obstrucción mecánica. Son más frecuentes tras cirugías de abdomen bajo y pélvicas. Se estima que hasta un 90% de los pacientes desarrollaránadherenciasluegodeunalaparotomía3 .Asu vez, el riesgo de una recurrencia tras una adherenciolisis es de 11- 21%, ya que esta implica manipulación de asas einflamación,generandomásadherenciasenelproceso. • Vólvulo,consisteenelgirosobresupropioejedeunasade intestino,causandoobstrucción yelcompromisovascular del segmento. Los sitios más frecuentes donde puede ocurrir un vólvulo son 4 5 , 60 - 70% colon sigmoides, 20 - 30% ciego, 3% colon transverso y 2% ángulo esplénico. 3 Menzies D, and Ellis H: Intestinal obstruction from adhesions—How big is the problem? Ann R Coll Surg Engl 1990; 72: pp. 60-63. 4 Mulas C., Bruna M., García-Armengol J., Roig J. Manejo del vólvulo de colon. Experiencia en 75 pacientes. Rev. esp. enferm. dig. vol.102 N.° 4, Madrid, abr. 2010. 5 Ballantyne GH, Brandner MD, Beart RW Jr, Ilstrup DM . Volvulus of the colon. Incidence and mortality. Ann Surg. 1985; 202 (1):83. Obstrucción intestinal por bridas
  • 229. 230 • Hernias, pueden ser de ubicación a nivel inguinal, umbilical, crural o en relación con una cicatriz de una cirugía previa, llamada hernia incisional. En este tipo de causas el examen físico debe ser realizado en forma muy completa y tener especial cuidado en pacientes obesos al examinar la región inguinal y crural, las cuales quedan muchas veces cubiertas por grandes pliegues de pared que pueden ocultar la presencia de una hernia y el paciente no referir dolor en la zona afectada, sino que en todo el abdomen. • Hernias internas, hoy más frecuentes por el aumento de pacientes sometidos a cirugía bariátrica de By Pass, quedando espacios en la brecha mesentérica una vez que el paciente baja de peso y que permiten el paso de intestino a través de ella. • Neoplasias extraintestinales, tumores peritoneales o retroperitoneales que comprimen y obstruyen el intestino. Por ejemplo, linfomas, sarcomas, etc. • Carcinomatosis peritoneal, la diseminación peritoneal de cualquier tumor puede provocar implantes que obstruyen el intestino a cualquier nivel o simultáneamente en varios puntos. • Procesos infecciosos intestinales: TBC yactinomicosis. • Isquemia, secuelas de procesos isquémicos anteriores pueden generar estenosis, por ejemplo, trombosis o embolias venosas y arteriales, hematomas por traumatismos, etc. • Secuelasderadioterapiayquimioterapiapuedenproducir estenosis llevando a una obstrucción completa en los distintos niveles del intestino. • Enfermedad de Crohn, la obstrucción intestinal es una de las principales indicaciones de cirugía en enfermedad de Crohn. En esta patología se genera una inflamación aguda con edema de la pared del intestino, íleon terminal en la mayoría de los casos, pudiendo darse en otros segmentos del intestino delgado y también grueso. Esta inflamación y edema pueden ocasionar una obstrucción que se puede manejar de manera conservadora, pero a veces requerir de cirugía. En pacientes con cuadros inflamatorios recurrentes, se puede generar estenosis que puede crear una obstrucción intestinal. Íleo mecánico de causas intraluminal • Neoplasias del lumen intestinal en sus distintos segmentos, proveniente de la mucosa o del estroma. Aproximadamente un 10 - 29% de los pacientes concáncer colorrectal se presentan con obstrucción intestinal6 ; de estos, la mayoría es distal al ángulo esplénico, ya que en este lugar el diámetro del colon es menor y las de-posiciones son más sólidas. • ÍIeo biliar, es la obstrucción intestinal secundaria a un cálculo proveniente de la vesícula. Es una complicación de la colelitiasis. Por lo general se ve en pacientes mayores y se debe a la presencia de una fístula biliodigestiva (colecistoduodenal) que permitió el paso del cálculo desde la vesícula al intestino. Se estima que el cálculo debe medir al menos 2,5 cm para provocar una obstrucción. Los sitios de obstrucción son: 70% en el íleon (válvula ileocecal), 25% en el yeyuno o íleon proximal y 5% en el duodeno (síndrome de Bouveret)7 . • Cuerpos extraños. • Bezoares. • Intususcepción. Fisiopatología Cuando ocurre una obstrucción mecánica del intestino, inicialmente se produce un aumento del peristaltismo intentando restablecer el tránsito. Al no ceder la obstrucción, el contenido intestinal se acumula hacia proximal provocando que las asas se fatiguen, disminuye el peristaltismo y se produce una dilatación y edema de la pared. Se crea así un tercer espacio que llevará a la deshidratación y pérdida de electrolitos que, sumado a los vómitos profusos, tiene consecuencias metabólicas que son la hipocloremia, hipokalemia e inicialmente una alcalosis metabólica. La acumulación de líquido y distensión intestinal hacen que aumente la presión ejercida sobre la pared del lumen del intestino, causando el colapso de vasos capilares que producen isquemia, hipoxia y acidosis. Si no se resuelve la obstrucción se llegará a la necrosis y perforación del asa comprometida. Clínica El cuadro clínico del íleo mecánico se manifiesta inicialmente por dolor abdominal agudo intenso de carácter cólico que no cede con medidas habituales, como es el uso de analgésicos y antiespasmódicos, obligando a consultar de urgencia. Habitualmente,seasociaavómitosenformaprecozyposterior compromiso del estado general por la deshidratación que genera la creación de un tercer espacio en el lumen intestinal por el líquido acumulado y las pérdidas por los vómitos. Lasnáuseasyvómitosenlasobstruccionesaltastiendenaser de alta frecuencia y de características variables según el nivel de obstrucción. En obstrucciones más distales, tienden a ser 6 Tuca A., Guell E., Martínez-Losada E., Codorniu N. Malignant bowel obstruction in ad-vanced cancer patients: epidemiology, management, and factors influencing spontane-ous resolution. Cancer Manag Res. 2012; 4: 159–169. 7 Rivoira G., Barotto M., Parodi M., Napolitano D., Viscido G., Doniquian M., Picón H., Pa-lencia R. Íleo biliar en paciente colecistectomizado. Caso clínico. Rev. Chilena de Cirugía. Vol. 60 - N.° 3, junio 2008; pp. 236 - 240.
  • 230. 231 Examen Físico Los hallazgos del examen físico del paciente con una obstrucción intestinal van variando de acuerdo con el momento en que consulta. También influyen la altura de la obstrucción intestinal, la causa que la produjo y la edad de lapersona. En el examen físico general es necesario darse cuenta del estado de hidratación, hay que examinar bien lasmucosas, piel y lengua. Esta última se presenta habitualmente secay blanquecina, lo que denominamos saburral. Entre más tardía es la consulta, mayor es la deshidratación. Es frecuente que exista taquicardia compensadora por el estado de deshidratación e hipovolemia. La hipotensión o shock es una condición tardía y de mal pronóstico. Lapresenciadefiebredebesiemprealertardelaexistenciade una complicación grave, perforación y peritonitis secundaria. más tardíos ycaracterísticamentederetenciónofecaloídeos. La incapacidad de eliminar gases y deposiciones, que es el síntoma cardinal de una obstrucción intestinal, no siempre es fácil de interpretar. La ausencia de deposiciones, incluso por varios días, puede ser “normal” en algunos pacientes. Además, en etapas iniciales puede presentar diarrea, pues elimina el contenido intestinal distal a la obstrucción. La falta de eliminación de gases puede resultar muy representativa del grado de obstrucción, cuando el paciente refiere categóricamente que no puede eliminar gases, estamos frente a una obstrucción intestinal completa. La distensión abdominal ocurre a medida que el intestino proximal a la obstrucción se dilata en forma progresiva. Por lo mismo, se observa un mayor nivel de dilatación en obstrucciones distales y puede ser menos evidente en obstrucciones intestinales altas. Los síntomas adjuntos como la sed, oliguria o anuria sugieren deshidratación que puede estar acompañada de variable grado de compromiso de conciencia que es manifestación de trastornos hidroelectrolíticos y ácido-base. El dolor abdominal persistente y de mayor intensidad, asociado o no a la presencia de fiebre, es sugerente que estamos frente a un sufrimiento isquémico de asas o perforación intestinal y peritonitis. Esto es muy importante determinar en la evaluación inicial, no se puede perder tiempo con un paciente en estas condiciones. También puede existir taquipnea compensatoria cuando la hipovolemiaesimportanteyhadadolugaraldesarrollodeuna acidosis metabólica producto de un metabolismo anaeróbico y producción de ácido láctico. Todo lo anterior va a influir en el estado de conciencia del paciente, por lo que en condiciones avanzadas y con gran deshidratación el paciente presentará grados variables de compromiso de conciencia. En el examen físico segmentario uno de los elementos importantes e iniciales por inspeccionar es la presencia de cicatrices o hernia en la pared abdominal. Derutinasedebeinspeccionarypalparlasregionesinguinales y crurales, aunque a simple vista no se aprecie la existencia de una hernia, puede que solo se detecte en la palpación, especialmente en pacientes con sobrepeso. La presencia de distensión abdominal es muy llamativa en las obstrucciones más distales. Cuando la obstrucción es proximal puede ser casi inaparente, especial-mente si el paciente es obeso. Las características de los ruidos intestinales o hidroaéreos varían de acuerdo con el momento de evolución de la obstrucción. En las etapas iniciales se auscultará un aumento de la frecuencia de los ruidos producto del peristaltismo exacerbado tratando de vencer la obstrucción. Posteriormente, los ruidos van adquiriendo un tono metálico producto de la distensión del asa y la presencia de gas en su interior. Finalmente en la etapa más avanzada y de agotamiento, los ruidos mantienen el tono timpánico, pero disminuye en forma considerable la frecuencia. La ausencia total de ruidos debe hacer sospechar la posibilidad de un íleo paralítico o de una complicación como una perforación con peritonitis, por este motivo es importante evaluar conjuntamente la resistencia de la pared abdominal y la presencia o no de signos de irritación Obstrucción intestinal con dilatación proximal
  • 231. 232 peritoneal, Blumberg. Unsignopropiodeuníleoeslapresenciade“bazuqueo”,ruido semejante al que produce mover un recipiente con agua en su interior y que se obtiene al auscultar al paciente mientras usted moviliza lateralmente el abdomen hacia ambos lados. Serecomiendasiemprerealizaruntactorectal,especialmente sisesospecha una obstrucción intestinalbaja.Estamaniobra puede entregar muchos antecedentes, como la detección de una masa tumoral o fecaloma y la presencia de sangre en el lumen. Estudio Clínico Laboratorio Los exámenes de laboratorio muchas veces van a expresar el nivel de deshidratación que tiene el paciente al momento de consultar, por esto es muy importante considerar este factor al momento de interpretarlos. FISIOPATOLOGÍA Y CLÍNICA Deshidratación ehipovolemia Trastornos electrolíticos Estrangulación, obstrucción en asa cerrada Aumento de la presión intraluminal Bazuqueo Distensión abdominal Vómitos Características según nivel de la obstrucción *Profusos y tempranos en obstrucciones altas *Fecaloídeos y tardíos en obstrucciones distales ACUMULACIÓN INTRALUMINAL DE LÍQUIDO Y ELECTROLITOS Dilatación prograsiva de asas Vólvulos, hernias, colon derecho Isquemia de la mucosa ---> Transmural Signos de irritación peritoneal Peritonitis Abolición de RHA Fiebres Dolor persistente, de mayor intensidad
  • 232. 233 Hemograma: el hematocrito suele estar elevado por hemoconcentración y no refleja el nivel real. El recuento de leucocitos puede tener el mismo efecto de hemoconcentración, pero hay que tener mucho cuidado en su interpretación, ya que una elevación puede estar expresando una complicación infecciosaproductodeunaperforaciónonecrosisdelintestino. Esnecesarioevaluarconjuntamenteconlafórmuladiferencial y ver si hay una desviación a izquierda y elevación de otro marcador como la PCR. Creatina / BUN: es mandatorio evaluar la función renal, ya que es frecuente que se vea comprometida secundaria a la hipovolemia por la deshidratación y exista una insuficiencia renal aguda prerrenal.Además, el uso de medio de contraste paraestudioconimágenesobligaaresguardarlafunciónrenal. Acido láctico en sangre: examen cada vez más usado para detectar presencia de una acidosis láctica frecuente de ver en cuadros infecciosos e inflamatorios abdominales. Electrolitos plasmáticos: los vómitos, el tercer espacio y la deshidratación provocan trastornos hidroelectrolíticos importantes por pérdida o movilización de estos hacia o desde el intracelular. Gases venosos:nos indican elestadoácidobasedelpaciente y complementan la información obtenida por los exámenes anteriores. PCR, procalcitonia, o cualquier otro marcador inflamatorio ayuda en el diagnóstico y seguimiento del proceso. Imágenes Generalmente confirman la sospecha diagnóstica y ayudan a definir el sitio de obstrucción pudiendo en ocasiones revelar la etiología. También permiten diferenciar entre una obstrucción parcial y una completa. Radiografía simple de abdomen: continúa siendo utilizada comolaprimeraaproximacióndiagnósticaenunaobstrucción intestinal. Presenta una sensibilidad del 60%, siendo la presencia de intestino delgado dilatado el mejor signo de la presencia de un íleo. La radiografía simple de pie va a mostrar niveles hidroaéreos, muchos piensan que es el signo claro de una obstrucción, pero se puede dar también en otras patologías, por lo que es un hallazgo poco específico. Lo más importante es la “dilatación de asa”, por eso se recomienda que la radiografía de abdomen simple se tome en decúbito supino. En obstrucciones parciales veremos aire presente en el colon y en las totales desaparece el aire del colon. Si la obstrucción es muy temprana pudiese encontrarse aire en colon o recto, aun cuando la obstrucción sea completa. Se insistequelomásimportanteenobstruccionescompletasson las asas intestinales dilatadas. En algunos casos una placa radiográfica puede revelar la causa de la obstrucción. En el Íleo biliar se podrá divisar en la radiografía neumobilia (aire en la vía biliar), un cálculo radio opaco en asas intestinales y signos de obstrucción intestinal. En el vólvulo se podrá observar el signo radiológico del “grano de café”, que no es más que el colon sigmoides distendido por una obstrucción en asa cerrada. TAC de abdomen - pelvis: muy sensible al momento de identificar una obstrucción completa y nos ayuda a identificar el sitio de obstrucción, segmento del intestino donde se nota unatransiciónentreasadilatadayasacolapsada,produciendo lo que se denomina zona con cambio de calibre. También es útil para detectar cambios isquémicos y necrosis irreversible, aparece pneumatosis intestinal y gas en vena porta. El uso de contraste oral cuando se puede utilizar tiene un valor diagnóstico y terapéutico, sobre todo en obstrucciones parciales. El contraste endovenoso debe ser realizado con protección renal y previa evaluación de su función. Los estudios conbariohoyprácticamente noseusan.Pueden demostrar con precisión el sitio de obstrucción, como también la etiología de esta. El mayor impedimento de su uso es que limitaposteriormentealTAC,elbariodentrodellumenprovoca mucha interferencia. Enteroclisis: TAC de abdomen con uso de abundante agua en muy breve tiempo en el lumen intestinal mediante administración por sonda o por vía oral. Estudio de elección en pacientes que el diagnóstico de obstrucción intestinal es clínicamente incierto, parcial o intermitentes y recurrentes. Ultrasonografía:puedetenerutilidadenpacientesembarazadas para evitar irradiación fetal. Es de difícil interpretación y operador dependiente. Tratamiento Existen dos fases del manejo del paciente con un íleo mecánico. En un primer momento lo más importante es el proceso de reanimación, es decir, recuperarlo del estado de deshidratación, compensar las pérdidas, corregir la hipovolemia y alteraciones electrolíticas. Esta reanimación se inicia en el mismo servicio de urgencia, con aporte generoso de soluciones cristaloides, inicialmente con suero fisiológico, teniendo mucho cuidado en la sobrehidratación. Esto exige monitorización permanente para ver los efectos de nuestro aporte, especialmente en pacientes mayores con daño vascular o renal. Lo ideal es poder tener dentro del monitoreo una medición de la diuresis, siendo necesario en muchas ocasiones tener que invadir al paciente colocando una sonda vesical. La diuresis es el mejor índice de reperfusión tisular y nos permite evaluar si el aporte ha sido suficiente. La utilización de monitoreo más invasivo con un catéter de presión Venoso Central o Swan Ganz se debe reservar para hacerlo en una unidad de Cuidados Intensivos o Intermedios, no se justifica realizarlo en Urgencia.
  • 233. 234 Durante la rehidratación es conveniente controlar función renal, electrolitos plasmáticos y gases venosos. Otro buen indicador de una perfusión adecuada es la corrección de una acidosisquehubieseestadopresentealmomentodelingreso. La persistencia de una acidosis es un indicador de reposición insuficiente de fluidos o de una complicación mayor derivada de la obstrucción (ej: Perforación, peritonitis, sepsis. El segundo momento del manejo de un íleo mecánico es decidir si el paciente será tratado inicialmente en forma conservadora o debe ir a pabellón. Cuando la causa de la obstrucción es una hernia que se encuentra complicada por unestrangulamiento,nohaydudaquelaindicaciónquirúrgica es inmediata y no se debe postergar. El buen examen físico y la historia nos van ayudar a tomar esta decisión. Un dolor permanente e intenso debe hacer sospechar compromiso isquémico del asa comprometida y no se debe postergar la cirugía. La presencia de signos de irritación peritoneal es indicación de cirugía inmediata. El problema comienza ocacionalmente, cuando existe una obstrucción intestinal completa no complicada y el paciente tiene antecedentes de cuadros similares previos que se resolvieronconmanejomédicoconservador. Estospacientes muchas veces se benefician con el reposo digestivo, régimen cero, hidratación parenteral y descompresión del intestino mediante uso de sonda nasogástrica. Estas simples medidas permiten que cedan los vómitos y las náuseas. También cede el dolor y disminuye el riesgo de aspiración. Cuandolaobstrucciónintestinalesincompleta,serecomienda ser prudente e intentar un manejo médico como el descrito recientemente. Obstrucción intestinal completa
  • 234. 235 También es importante poder conocer la causa de la obstrucción intestinal porque hay patologías que, aunque no se presenten con complicaciones, su resolución definitiva es la cirugía. Es así el caso de los tumores que comprometen el lumen intestinal, bezoares, hernias, cuerpos extraños, íleo biliar e intususcepción. Aunque hoy en día las técnicas endoscópicas han permitido el manejo de estas situaciones en forma transitoria como en la devolvulación endoscópica que resulta exitosa en un 75 - 95% de los casos8 . La tasa de recurrencia del vólvulo es elevada, por tanto, posterior a la urgencia se debe considerar la solución quirúrgica definitiva. Otro factor que siempre se debe considerar es la experiencia del equipo quirúrgico en el manejo definitivo de la causa del íleo. Por ejemplo, si la obstrucción es secundaria a un cáncer colorrectal, hoy se preconiza un manejo definitivo por médicos especialistas, evitando operaciones de Hartmann o colostomías donde nunca se reconstituye el tránsito intestinal empeorando la calidad de vida del paciente. Cuando el tumor es obstructivo, si técnicamente es posible, se puede instalar un stent metálico por colonoscopía; de esta manera, se soluciona la obstrucción, permite el estudio con colonoscopía delsegmentoproximalparadescartarlesionesconcomitantes y realizar el tratamiento definitivo en un mejor escenario. Son muchas las consideraciones que hay que tener presente cuando la cirugía no aparece como mandatoria de realizar por las evidencias clínicas, exámenes e imágenes, quedando la decisión a base de la experiencia y criterio del cirujano. Es importante considerar la edad, comorbilidades y el estado nutricional del paciente, ya que son elementos que permiten dar un pronóstico que puede influir en nuestra decisión de postergar la cirugía y realizar, en cambio, un manejo médico puede resultar lo más prudente y mejor para el paciente en ese momento. Una vez tomada la decisión de operar a un paciente, el cirujano se obliga a una reanimación intensiva y eficiente con compensación de comorbilidades lo mejor posible, para no someter al paciente a riesgos anestésicos y quirúrgicos injustificados por un mal manejo preoperatorio. Hay oportunidades en que pese a que la cirugía aparece como una solución al problema del paciente, es necesario considerar la etiología o enfermedad de base que hace que el cirujano prefiera ser conservador y tratar en forma médica, ya que en el largo plazo se pueden producir consecuencias tales como un síndrome de intestino corto con malabsorción, por las múltiples resecciones intestinales sucesivas, como ocurre en las estenosis porenfermedad de Crohno enteritis actínica. Si se ha decidido un manejo conservador, se requiere constante monitorización y vigilancia activa del paciente para asegurar que el curso clínico sea satisfactorio o pesquisar cambios negativos oportunamente. Elfracasodeunaconductaconservadoraimplicalaresolución 8 Hodin R. Sigmoid volvulus. Up to Date. Nov 2016. quirúrgica, por lo que es importante definir en forma prudente los tiempos para cambiar de conducta. Cerca del 50% de los pacientes con obstrucción intestinal puedensermanejadossincirugíaylamismaproporciónsufrirá nuevos episodios de obstrucción intestinal, independiente de si el tratamiento haya sido o no quirúrgico. Cuando se opta por la intervención quirúrgica es necesario considerar todos los escenarios posibles. Puede ser una intervención muy sencilla y rápida con muy bajo riesgo, como la liberación de una brida única, como también una extensa y dificultosa cirugía por hallazgo de un abdomen prácticamente sellado por adherencias y riesgo de múltiples enterotomías o de resecciones intestinales y anastomosis técnicamente complejas. Es clave para un buen resultado la experiencia del equipo quirúrgico y solicitar ayuda cuando se carezca de ella. Es fundamental contar con apoyo intraoperatorio del equipo anestésico, de enfermería, banco de sangre y laboratorio. Una vez terminada la cirugía el posoperatorio es igualmente importante, requiriendo muchas veces en los casos más complejos la disponibilidad de cupo en una UPC. El uso de analgesia debe ser racional. Con las medidas de descompresión del intestino con SNG, el dolor, vómitos y riesgo de aspiración debieran disminuir en forma considerable, pero generalmente se administra un analgésico de primera línea como el metamizol o paracetamol endovenoso. Se trata de evitar losAINES por daño renal y los opiáceos que afectan el peristaltismo y contribuyen al íleo. Lo importante es no abusar de la analgesia y esconder una posible complicación y retardar la cirugía. Íleo Paralítico El íleo paralítico o parálisis intestinal se debe a una detención del peristaltismo provocado por una serie de estímulos físicos (cirugía), farmacológicos (anticolinérgicos) y trastornos hidroelectrolíticos (hipokalemia). En este capítulo no se revisará este tema, solo se mencionará dentro del diagnóstico diferencial inicial con el propósito de identificar qué se debe descartar frente a un íleo mecánico.
  • 235. 236 Bibliografía 1. Mizell J., Turnage R. Intestinal Obstruction. In: Feldman M., Friedman L., Brandt L. Sleisenger and Fordtran’s Gastrointestinal and Liver Disease. Philadelphia: Saunders, 2016. Chapter 123, 2154 - 2170.e3. 2. Boniface K. Bowel Obstructions. In: Adams J. Emergency Medicine. Philadelphia: Saunders, 2013. 40, 331 - 335.e1. 3. Schein, M. Schein’s Common Sense Emergency Abdominal Surgery. Springer- Verlag Berlín Heidelberg 2000. 4. Townsend C., Beauchamp D., Evers M., Mattox. Sabiston Textbook of Surgery: the biological basis of modern surgical practice. 19th ed. Elsevier; 2012. 50, p. 1236 - 1244; 52, pp. 1317- 1319. 5. Cappell M., Batke M. Mecanical obstruction of the small bowell and colon. Med Clin North Am. 2008 May; 92(3): 575 - 97.
  • 237. 238
  • 238. 239 6.1 Anatomía normal dela vía biliar yvesícula biliar Rodríguez D, Jofré M, Valdés F. Vía Biliar Intrahepática La anatomía de la vía biliar se divide en varios segmentos; la vía biliar intrahepática, la extrahepática, la vesícula biliar, el conducto cístico, y el esfínter hepatopancreático o esfínter de Oddi. La anatomía de los conductos intrahepáticos se asocia de manera íntima con la anatomía hepática. La anatomía lobar y segmentaria del hígado son determinadas por las ramificaciones secuenciales de la vena porta, de la arteria hepática y del árbol biliar, mientras estas entran en el parénquima a través del puerta hepática. Las 3 estructuras siguen cursos paralelos y se bifurcan justo antes de entrar al hígado. Dicha bifurcación divide el hígado en lobos derecho e izquierdo. De acuerdo con la clasificación de Couinaud, el lobo caudado corresponde al segmento I, los segmentos II al IV van a la izquierda y los segmentos V al VIII van a la derecha (Figura 1). Segmentación hepática
  • 239. 240 El drenaje biliar del hígado derecho es a través del conducto hepático derecho y el del izquierdo a través del conducto hepáticoizquierdo.Elconductohepáticoderechodrenadesde el segmento V hasta el VIII; el izquierdo desde el II al IV. El drenaje biliar del lobo caudado (segmento I) es variable, pero en la mayoría de los casos es a través de ambos conductos hepáticos1 2 3 . Vía biliar extrahepática El colédoco contiene una mucosa columnar rodeada por tejido conectivo. La superficie es relativamente plana, con núcleos basales y pocos o ningún nucléolo. La lámina propia consiste de colágeno, fibras elásticas y vasos sanguíneos. Las fibras musculares son escasas y discontinuas, las cuales generalmentesonlongitudinales.Aniveldelcolédocodistalse desarrollaunacapamuscularmásprominente,especialmente en la porción intrapancreática, la cual se vuelve evidente a nivel del esfínter hepatopacreático4 . Ambos conductos hepáticos convergen en un conducto hepático común, inmediatamente distal a la puerta hepática. El conducto cístico se une a este 2 a 3 cm distal a esta unión, formando el conducto colédoco. El colédoco tiene una longitud de 8-9 cm; su diámetro normal varía entre 4 a 9 mm; se considera que está dilatado si su diámetroexcede los10 mm.Se divide en 3 porciones; el tercio superior (porción supraduodenal), el tercio medio (porción retroduodenal) y el tercio inferior (porción intrapancreática). La porción supraduodenal cursa hacia distal, en el borde libre del omento menor, anterior a la vena porta y a la derecha de la arteria hepática propia. La porción retroduodenal transcurre posterior a la primera porción del duodeno, lateral a la vena porta y anterior a la vena cava inferior. La porción intrapancreática cruza el aspecto posterior del páncreas para entrar en la 2.a porción del duodeno, donde se une generalmente al conducto pancreático. La porción intraduodenalointramuraldelcolédocopasadeformaoblicua através de la pared duodenal para entrar a este porlaampolla hepatopancreática o ampolla de Vater (Figura 2). El conducto colédoco y el conducto pancreático tienen distintas formas de relacionarse entre sí; (1) unión previo a la pared duodenal para formar un conducto común largo; (2) unión en la pared duodenal para formar un conducto común corto; o (3) sin relación entre ellos, entrando a la pared duodenal por orificios separados. La porción retropancreática del colédoco y la porción terminal del conducto pancreático son envueltas y reguladas por un esfínter complejo, el esfínter hepatopancreático. Anatomía región periampular 1 Moorman DA: The surgical significance of six anomalies of the biliary duct system. Surg Gynecol Obstet 131:665, 1970. 2 Healey JE, Schroy PC: Anatomy of the biliary ducts within the human liver:Analysis of the prevailing pattern of branch-ings and the major variations of the biliary ducts. Arch Surg 66:599, 1953. 3 Johnson EV, Anson BJ: Variations in the formation and vascular relationships of the bile ducts. Surg Gynecol Obstet 94:669, 1952. 4 Frierson H Jr: The gross anatomy and histology of the gallbladder, extrahepatic bile ducts, vaterian system, and minor papilla. Am J Surg Pathol 13:146, 1989.
  • 240. 241 Vesícula biliar y Conducto Cístico La vesícula es un órgano piriforme que se asienta sobre la superficie inferior hepática, en la unión de los lobos hepáticos izquierdo y derecho, entre los segmentos IV y V de Couinaud (Figura 3)4. Mide 7 a 10 cm de largo y 2.5 a 3.5 cm de ancho. El volumen varía considerablemente, siendo mayor durante el ayuno y menor después de comer. Una vesícula moderadamente distendida tiene una capacidad de 50-60 cc de bilis, pero puede ser mucho mayor en ciertos estados patológicos. Se divide en 3 áreas: el fondo, el cuerpo y el cuello. El cuello tiene una dirección cefálica y dorsal para unirse al conducto cístico. La vesícula biliar consiste de cuatro capas, de interno a externo: túnica mucosa (epitelio más lámina propia), túnica muscular (musculatura lisa discontinua), tela subserosa (tejido conectivo)ylatúnicaserosa.Lavesículanopresentamuscular de la mucosa o submucosa. La mayoría de las células de la mucosa son columnares y su principal función es la absorción, aunque también son capaces de secreción activa. Dichas células se alinean en una fila única, con un citoplasma ligeramente eosinofílico, vacuolas apicales y núcleos basales o centrales5 . Relaciones anatómicas de la vesícula 5 Swartz-Basile DA, Lu D, Basile DP, et al: Leptin regulates gallbladder genes related to absorption and secretion. Am J Physiol 293:84, 2007.
  • 241. 242 Laláminapropiacontienefibrasnerviosas,vasossanguíneos, linfáticos, fibras elásticas, tejido conectivo y ocasionalmente mastocitos y macrófagos. La capa muscular contiene fibras lisas circulares, longitudinales y oblicuas, pero esto no es constante en toda la extensión de la pared. Se pueden encontrar linfáticosentreloshacesmusculares.Lasubserosa se compone de fibroblastos, fibras elásticas y de colágeno, vasos sanguíneos, nervios, linfáticos y adipocitos. Los senos de Rokitansky-Aschoff son invaginaciones del epitelio dentro de la lámina propia, músculo y tejido conectivo subseroso. Están presentes en un 40% de las vesículas normales y en hasta el 95% de las vesículas inflamadas. Los conductos de Luschka son pequeños conductos biliares accesorios que se encuentran alrededor de la capa muscular delacara hepática de lavesícula,estos comunicanlavía biliar intrahepática directamente con la vesícula, saltándose la vía biliar. Se encuentran en un 10% de las vesículas normales, y no tienen relación con los senos de Rokitansky-Aschoff ni con los estados inflamatorios vesiculares. El conducto cístico está unido al cuello vesicular y se une al conducto hepático común para formar el colédoco (Figura 2). Su largo varía entre 2 a 4 cm. Usualmente, tiene un curso caudalenelligamentohepatoduodenalparaunirsealaporción supraduodenal del conducto hepático en un ángulo agudo1. Ocasionalmente,puedeunirseal conducto hepático derecho, o extenderse más hacia caudal, para unirse a la porción retroduodenal del conducto. El conducto cístico contiene un número variable de pliegues mucosos, denominados “válvulas de Heister” o pliegues espirales, que, a pesar de este nombre, no cumplen un rol valvular. En 1891, Calot describió una región anatómica triangular formadaporelconductohepáticocomúnamedial,elconducto cístico a lateral y la arteria cística por superior6 . El triángulo cístico(consideradopormuchoscomoel“verdadero”triángulo deCalot)presentalosmismoslímiteslaterales,peroelsuperior corresponde al margen inferior del lóbulo derecho hepático 7 8 (Figura 4). El triángulo de Calot debe ser correctamente visualizado durante una colecistectomía, dado que hay numerosas estructuras importantes que pasan a través de esta área. En la mayoría de los casos, la arteria cística surge como una rama de la arteria hepática derecha en el triángulo cístico.Conductoshepáticosaberrantesoaccesoriospueden pasar a través del triángulo cístico antes de unirse al conducto cístico o al conducto hepático común8. Esfínter Hepatopancreático (de Oddi) El sistema esfinteriano del conducto biliar distal y pancreático es referido tradicionalmente como el “esfínter de Oddi”. El término es impreciso, dado que este es subdividido en varias secciones y contiene tanto fibras circulares como longitudinales. El mecanismo esfinteriano funciona independiente de la musculatura duodenal que lo rodea y tiene musculaturas separadas para el conducto biliar distal, el pancreático y la ampolla. En más del 90% de la población, el conducto común (donde el conducto biliar y pancreático se unen) mide menos de 1 cm de longitud y transcurre dentro de la ampolla. Enla rara situación donde el conducto mide más de 1 cm, o cuando el conducto pancreático y biliar entran de forma separada al duodeno, existe mayor probabilidad de desarrollar patologías en dicha zona9 . Irrigación La irrigación del conducto hepático derecho, izquierdo y la porción superior del conducto hepático común deriva de la arteria cística y de la arteria hepática derecha e izquierda. El colédoco supraduodenal es irrigado por ramas de la hepática derecha,lacística,lapancreatoduodenalposterosuperiorylas arteriasretroduodenales.Elsoportearterialaxialdelconducto supraduodenal hasidoenfatizadoporTerblanceycols (Figura 5)10 . Las arterias más importantes transcurren en forma paralela al conducto, a las horas 3’ y 9’. Aproximadamente, el 60% de la irrigación a los conductos supraduodenales proviene inferiormente, a través de las arterias pancreatoduodenales y lasretroduodenales,mientrasqueel38%vienesuperiormente a través de la hepática derecha y la arteria cística. Cualquier dañoenestesoportevascularaxialpuederesultarenestenosis ductalesisquémicas. Solo un 2% de la irrigación es segmentaria (no axial).Estas pequeñas arterias segmentarias vienen directamente de la arteria hepática propia, mientras esta asciende por el ligamento hepatoduodenal, adyacente al colédoco. La irrigación del conducto hepático retroduodenal e intrapancreático viene de las arterias retroduodenales ypancreaticoduodenales. 6 Rock J, Swan KG, Diego J: Calot’s triangle revisited. Surg Gynecol Obstet 153:410, 1981. 7 Skandalakis JE, Gray SW, Rowe JS Jr: Biliary tract. In Skandalakis JE, Gray SW, editors: Anatomical complications in general surgery. New York, 1983, McGraw-Hill, p. 31. 8 Specht MJ: Calot’s triangle [letter]. JAMA 200:1186, 1967. 9 Boyden EA: The anatomy of the choledochoduodenal junction in man. Surg Gynecol Obstet 104:646, 1957. 10 Terblanche J, Allison HF, Northover JMA: An ischemic basis for biliary strictures. Surgery 94:52, 1983.
  • 242. 243 Triángulo deCalot La arteria cística usualmente es una rama única proveniente de la arteria hepática derecha, dentro del triángulo cístico (Figura 6) 11 12 . De forma infrecuente, dicha arteria puede provenir de la hepática izquierda, de la hepática común, de la gastroduodenal o incluso de la arteria mesentérica superior13 . Cuando la arteria cística proviene de la hepática derecha, generalmente sigue un curso paralelo, adyacente y medial al conducto cístico, sin embargo, pocas veces esta relación es constante.Silaarteriaderivadelahepáticaderechaproximal, o de la arteria hepática común, generalmente está cerca del conducto hepático, el cual puede lesionarse cuando la arteria es ligada durante una colecistectomía. 11 Benson E, Page RE:Apractical reappraisal of the anatomy of the extrahepatic bile ducts and arteries. Br J Surg 63:853,1976. 12 Michels NA:The hepatic, cystic, and retroduodenal arteries and their relations to the biliary ducts with samples of the entire celiacal blood supply. Ann Surg 133:503, 1951. 13 Michels NA:The hepatic, cystic, and retroduodenal arteries and their relations to the biliary ducts with samples of the entire celiacal blood supply. Ann Surg 133:503, 1951.
  • 244. 245 Variaciones anatómicas en la irrigación vesicular Variaciones anatómicas en la irrigaciónvesicular
  • 245. 246 Mientras cruza el triángulo de Calot, la arteria cística generalmenteproveedeirrigaciónalconductocísticoconuna omás ramas.Cercadela vesícula,estaarteria usualmentese divide en una rama superficial y una profunda. La superficial sigue un curso a través de la cara anterior de la vesícula, mientras que la profunda pasa entre la vesícula y el hígado en la fosa cística. La arteria hepática derecha pasa posterior al conducto hepático común mientras asciende hacia el hígado en un 85% de los individuos y anterior a este en el 15% restante. En aproximadamente un 15% de los individuos existe una arteria hepática derecha reemplazada o aberrante que se origina de la arteria mesentérica superior, que pasa a través del aspecto medial del triángulo cístico, posterior al conducto cístico. Eldrenajevenosodelosconductoshepáticosydelasuperficie hepática de la vesícula es por me-dio de pequeños vasos que vacían en ramas de las venas hepáticas a través del hígado. Un pequeño tronco venoso que asciende paralelo a la vena porta recibe el drenaje venoso de la vesícula y el colédoco antes de entrar al hígado, separado de la vena porta. El drenaje venoso de la porción inferior del colédoco es realizado directamente por la vena porta3. Lasfibrasaferentesvisceralesdelhígado,vesículayconducto biliar viajan con las fibras simpáticas aferentes a través de los nervios esplácnicos torácicos para entrar a las raíces dorsales desde el 5.° al 9.° segmentos torácicos. Las fibras sensitivas desde el nervio frénico derecho también inerva la vesícula. Esta inervación puede explicar la omalgia derecha referida en pacientes con patología de la vesículabiliar14. Drenaje Linfático Los vasos linfáticos de los conductos hepáticos y el colédoco proximal drenan en los linfonodos hepáticos, los cuales son una cadena de linfonodos que sigue el curso de la arteria hepática, los cuales drenan a los linfonodos celíacos. Los linfonodos del conducto hepático distal drenan tanto a los linfonodos hepáticos como a los pancreáticos superiores. Los vasos linfáticos de la vesícula y el conducto cístico drenan principalmente en los linfonodos hepáticos a través del linfonodo cístico; un linfonodo constante localizado en la unión del conducto cístico y el conducto hepático común. Los vasos linfáticos de la superficie hepática de la vesícula se pueden comunicar también con linfáticos intrahepáticos14 . Inervación Lavesículabiliar yelárbolbiliarrecibeninervaciónsimpática y parasimpática,derivadasdelplexocelíacoycursasiguiendola arteria hepática (Figura 6). El tronco vagal izquierdo (anterior) da ramas hepáticas y gástricas. La rama hepática, transcurre por el omento menor y provee fibras a la vesícula biliar, al conducto biliar y al hígado. Las fibras simpáticas originadas desde el 5.° al 9.° segmentos torácicos pasan a través de los nervios esplácnicos hacia los ganglios celíacos. Las fibras simpáticas posganglionares viajan junto a la arteria hepática para inervar la vesícula biliar, el conducto biliar y el hígado. 14 Couinaud C: The biliary tract and the anatomy of biliary exposure. In Blumgart LH, editor: Surgery of the liver and biliary tract. Edinburgh, 1988, Churchill Livingstone, p. 16.
  • 246. 247 Bibliografía 1. Frierson H Jr: The gross anatomy and histology of the gallbladder, extrahepatic bile ducts, vate-rian system, and minor papilla. Am J Surg Pathol 13:146, 1989. 2. Skandalakis JE, Gray SW, Rowe JS Jr: Biliary tract. In Skandalakis JE, Gray SW, editors: Anatomi-cal complications in general surgery. New York, 1983, McGraw-Hill, p. 31. 3. Couinaud C: The biliary tract and the anatomy of biliary exposure. In Blumgart LH, editor: Sur-gery of the liver and biliary tract. Edinburgh, 1988, Churchill Livingstone, p. 16.
  • 247. 248
  • 248. 249 6.2 Patología Biliar Benigna Ramírez J, Besser N, Bawarshi V, Court F. Lapatologíabiliarbenignaenglobaunaseriedeenfermedades en las que cálculos biliares juegan un rol central. Las enfermedades del tracto biliar representan un 4% de los egresos hospitalarios del país, siendo la primera causa no obstétrica de hospitalización en Chile1,2 . Fisiología de la secreción biliar Dentro de las múltiples tareas del hígado se encuentra la secreción de bilis que ejerce 2 funciones importantes: 1. Digestión y absorción de lípidos a través de la emulsificación de grasas, facilitando la absorción intestinal de los productos finales de la digestión de estos. 2. Servir como medio de excreción para el exceso de colesterol y de distintos desechos metabólicos como la bilirrubina, producto final de la degradación de hemoglobina. La bilis está compuesta por agua, electrolitos, sales biliares, colesterol, fosfolípidos (lecitina), pigmentos biliares (bilirrubina conjugada) y otras proteínas (como albúminas e inmunoglobulinas). La secreción diaria de bilis oscila entre los 600 y 1.000 ml/ día. Si bien su producción es un proceso continuo, esta no es liberada inmediatamente al tracto digestivo, ya que mientras el esfínter de Oddi esté cerrado, retornará a la vesícula biliar dondeseráalmacenadahastaqueseanecesitada.Lavesícula tiene una capacidad máxima de solo 30-60ml en condiciones normales, pero puede almacenar el equivalente a 12 horas de secreción biliar (450ml) mediante la concentración de bilis por medio de la absorción de agua y electrolitos a través de sus paredes. De esta forma, la bilis se concentra casi 5 veces, pudiendo llegar en ocasiones a concentraciones de 20 veces sus valores iniciales3. 1 Egresos hospitalarios de ambos sexos, según edad y causas. Chile, 2011. Departamento de Estadísti-ca e Información de Salud 2011. Disponible en: http://intradeis.minsal.cl/ egresoshospitalarios/menu_publica_nueva/menu_publica_nueva. htm 2 Pérez-Ayuso R, Hernández V, González B, Carvacho C, Navarrete C, Álvarez M et al . Historia natural de la colelitiasis: Incidencia de colecistectomía en un área urbana y una rural mapuche en la última dé-cada. Rev. méd. Chile v.130 n.7 Santiago jul. 2002. Elvaciamientodelavesículaseproduceprincipalmenteporel estímulo hormonal de la colecistocinina (CCK), liberada cuando los alimentos grasos entran al duodeno, aproximadamente 30 min después de la ingesta de estos. La CCK, aparte de estimular la secreción enzimática en el páncreas, produce la contracción de la vesícula biliar a la vez que relaja el esfínter de Oddi. En menor medida, las fibras colinérgicas, tanto vagales como del sistema nervioso entérico, estimulan el vaciamiento vesicular. La secretina, que estimula la secreción pancreática y de bicarbonato, estimula también la producción de bilis, pero no actuando sobre los hepatocitos, sino sobre las paredes ductales de las vías biliares. De esta forma, las células epiteliales de los conductillos y conductos biliares secretan una solución acuosa rica en bicarbonato, que puede llegar a duplicar la cantidad total de bilis que se une a la secreción pancreáticaparaneutralizaralácidoclorhídricodelestómago. Aproximadamente, un 95% de las sales biliares son reabsorbidas en el intestino delgado, especialmente en el íleon distal. Casi la totalidad de estas sales biliares son captadas por los hepatocitos durante el primer paso hepático y vueltas a excretarse a la bilis, en lo que se conoce como circulación enterohepática. Patología biliar litiásica La presencia de cálculos en la vesícula biliar, o colelitiasis, y sus complicaciones (colecistitis aguda, coledocolitiasis, colangitis y otras), son de altísimafrecuencia en nuestro país, especialmente en mujeres adultas y en la etnia mapuche. Chile es el país que presenta las tasas más altas de litiasis vesicularanivelmundial,solosuperadoporlaetniaamericana de los indios Pima. En nuestro país, la colelitiasis tiene una prevalenciade36,7%enmujeresy13,1%enhombres4 .Estas cifras aumentan con la edad llegando a 60% en mujeres y 50% en hombres a partir de los 50 años. Es una patología de gran importancia en nuestro país, no solo por su alta incidencia, sino también porque es el principal factor de riesgo para desarrollar cáncer de la vesícula biliar. 3 Funcionessecretorasdeltubodigestivo.En:HallJ.Tratado de Fisiología Médica Guyton y Hall. Barce-lona, España; Elsevier, 12.a edición, 2011, pp. 783-787. 4 Ministerio De Salud, Guía clínica colecistectomía preventiva en adultos de 35 a 49 años, 2010.
  • 249. 250 Mujer Hombre Laenfermedadlitiásicabiliar puedepermanecer asintomática o presentar complicaciones y hacerse sintomática en un 55%de los casos5,6 . 65.6 40 30 20 10 0 Wang D, Afdhal N. Gallstone Disease. En: Feldan M, Friedman L, Brandt L. Sleisenger and Fordtran’s Gastrointestinal and Liver Disease, Ninth Edition. Philadelphia Saunders 2010. Pag 1090. Factores de Riesgo La enfermedad litiásica es multifactorial. Los principales factores involucrados en su desarrollo son los siguientes: - Edad. - Sexo femenino. - Obesidad. - Uso de anticonceptivos orales. - Hipertrigliceridemia. - Baja de peso rápida. - Diabetes Mellitus. - Genética (antepasados amerindios). Fisiopatología de los cálculos biliares Existen 3 tipos de cálculos: de colesterol, pigmentarios y piedras raras.Aproximadamente,75%7 de los cálculos son de colesterol, pudiendo ser puros (la mayoría) o mixtos (10%). 5-25% son pigmentarios, compuestos principalmente por bilirrubinato de calcio, dividiéndose en cálculos pigmentarios negros (20%) y cafés (5%). Un 0,5% de los cálculos son de piedras raras, compuestos por carbonato de calcio y ácidos grasos con calcio. 5 Covarrubias F., Carmen; Del Pino M., Guido; Ferreiro P., Osvaldo; Nervi O., Flavio. Epidemiología e historia natural de la litiasis biliar: implicancias para el manejo clínico de la enfermedad. Rev. méd. Chi-le;120(4):432-8, abr.1992. 6 Csendes A., Csendes P., Burdiles P., Seguimiento alargo plazo de pacientes con colecistolitiasis asin-tomática y sintomática, no operados. Rev. méd. Chile 1996; 124: 1219 – 1224. 7 Wang D, Afdhal N. Gallstone Disease. En: Feldman M. Sleisenger and Fordtran’s Gastrointestinal and Liver Disease. Philadelphia, US; Elsevier, 9.a edición, 2010, pp. 1085-1099. Predominio %
  • 250. 251 Los cálculos intrahepáticos son predominantemente pigmentarios cafés, los vesiculares son en general de colesterol y en menor medida pigmentarios negros, y los cálculos en vía biliar tienden a ser cálculos de colesterol mixtos8 . i. Cálculos de colesterol En pocas palabras, la formación de cálculos de colesterol se debe a la sobresaturación de colesterol en la bilis, por exceso en su producción y/o por la falta de sales biliares en esta. Como el colesterol es hidrofóbico, es insoluble en la bilis por sí solo y requiere de la presencia de moléculas anfipáticas como las sales biliares y los fosfolípidos para mantenerse soluble. Al unirse el colesterol a estas moléculas, forma agregados macromoleculares de pequeño tamaño como las micelas o de mayor tamaño como las vesículas. Tanto las pequeñasmicelas,comolasvesículas,contienenfosfolípidos y colesterol en su estructura, pero las micelas, a diferencia de las vesículas, presentan también sales biliares. Estas vesículas, que en un inicio tienen un estructura unilamelar, pueden fusionarse entre sí, formando grandes vesículasmultilamelaresquetienencomocaracterísticaelser inestables, a partir de las cuales se puede iniciar la nucleación de cristales de colesterol. La bilis puede contener grandes concentraciones de colesterol, sin que este precipite, siempre y cuando haya suficiente cantidad de sales biliares que permitan la formación de micelas. Situaciones como, porejemplo, el ayuno disminuyen lasecrecióndesalesbiliares,portanto,favorecenlaformación de vesículas y, eventualmente, cálculos. Esdecir,lacausadelasobresaturacióndecolesterolquelleva a la formación de cálculos biliares es la pérdida del equilibrio entre las concentraciones de colesterol y sales biliares, que favorece la formación de vesículas (ricas en colesterol) por sobre micelas (ricas en sales biliares). Se ha propuesto también la inflamación crónica del epitelio de la mucosa vesicular como factor importante en la litogénesis, posiblemente relacionado con hallazgos de bilis colonizada por Helicobacter spp (no de la especie Helicobacter pylori), en pacientes con colelitiasis9 . El mecanismo postulado sería el de una alteración selectiva de la absorción de fosfolípidos y colesterol, donde se absorberíacomparativamente más agua y sales biliares. De esta forma, aumentaría la saturación de colesterol y se favorecería la nucleación de cristales. Ya formados los cristales de colesterol, son necesarios otros factores como la estasia vesicular, y la presencia de calcio y mucina en la bilis, para el crecimiento y agregación de estos cristales, que lleva finalmente a la formación de cálculos biliares. 8 Wang D, Afdhal N. Gallstone Disease. En: Feldman M. Sleisenger and Fordtran’s Gastrointestinal and Liver Disease. Philadelphia, US; Elsevier, 9.a edición, 2010, pp. 1085-1099. 9 Fox JG, Dewhirst FE, Shen Z, et al. Hepatic Helicobacter species identified in bile and gallbladder tissue from Chileans with chronic cholecystitis. Gastroenterology 1998; 114:755-63. La mucina es secretada como gel protector por las células epiteliales de la mucosa de la vesícula. Su rol en la formación de cálculos sería el de actuar como matriz de depósito de los cristales de colesterol para permitir su crecimiento a cálculos biliares maduros. ii. Cálculos pigmentarios La patogenia de los cálculos pigmentarios, muy infrecuentes, es muy diferente a la de los cálculos de colesterol, siendo la alteración en el metabolismo de la bilirrubina el proceso clave en su formación. La bilis productora de cálculos pigmentarios contiene exceso de pigmentos biliares, de bilirrubina no conjugada, que al ser menos soluble que la conjugada, precipita en forma de bilirrubinato de calcio, que en una matriz de mucina comienza la formación de cálculos. Los cálculos pigmentarios negros se forman, casi en su totalidad, por polímeros de bilirrubinato de calcio. No se asocia a vesículas infectadas ni a estasia biliar y se ha visto que ocurre en condiciones de hipersecreción de bilirrubina no conjugada como en anemia hemolítica crónica ycirrosis. Porotraparte,loscálculospigmentarioscafés,másfrecuentes en Asia, están formados principalmente por monómero de bilirrubinato de calcio que, por incorporar colesterol y otros lípidos a su estructura, adquieren un color más claro. La formación de estos cálculos requiere dos condiciones: 1) estasis biliar e 2) infección biliar, especialmente por Escherichiacolifavorecidaporlainfestación dela víabiliarpor parásitos. Estas enterobacterias contienen β-glucoronidasa, quees capazde desconjugarlabilirrubina y,portanto, hacerla precipitar. Cuadro clínico Lacolelitiasisesunapatologíaevolutivaquepuedepermanecer asintomática, hacerse sintomática, o presentar alguna complicación como colecistitis, coledocolitiasis o colangitis. Los principales síntomas en este abanico de entidades son el cólico biliar, fiebre e ictericia que, a pesar de poder estar presentes en cualquiera de los cuadros mencionados, son orientadores de distintas patologías, dependiendo de cómo se combinan.
  • 251. 252 Imagen 1 Ecografía abdominal. Vesícula biliar de paredes finas. Se obser- van dos imágenes hiperecogénicas con sombra acústica compati- ble con colelitiasis. i. Colelitiasis asintomática Es la presencia de cálculos dentro de la vesícula biliar, en ausencia de manifestación clínica. Son pacientes diagnosticados incidentalmente por imágenes. La mayoría de los pacientes con colelitiasis incidental permanecen asintomáticos, pero 20-30% de ellos desarrollan síntomas durante los próximos 20 años10 , yde 0,1 a 0,3% al año tendrán complicaciones agudas11 . Estudiosenotrospaísesnoaconsejanlacolecistectomíaante lamerapresenciadecálculosenlavesículabiliarsielpaciente se encuentra asintomático, pero en Chile la conversión de colelitiasis asintomática a sintomáticos o complicados es de un 5% anual. Esto sumado a la alta prevalencia de cáncer vesicular determina que en todo paciente portador de colelitiasis se realice colecistectomía profiláctica 4 . Imagen 1 Ecografía abdominal. Vesícula biliar de paredes finas. Se observan dos imágenes hiperecogénicas con sombra acústica compatible con colelitiasis. 10 Courtney T, Beauchamp D, Evers M, Mattox K. Sabiston: Tratado de cirugía.19.a ed. España: Elservier; 2013. 11 Weitz C, Berger Z, Sabah S, Silva H. Diagnóstico y tratamiento de las enfermedades digestivas. Chile: De iku;2013.
  • 252. 253 ii. Colelitiasis sintomática (cólico biliar simple): Ocurre por la obstrucción transitoria del cístico. El cólico biliar simple se describe como dolor en el epigastrio o hipocondrio derecho que puede irradiarse al dorso, que dura desde 30 min hasta 4 horas, de intensidad variable y puede asociarse a diaforesis, náuseas y vómitos. Puede aparecer 1 a 3 horas luego de comer y ocurrir en la noche. Cólico biliar
  • 253. 254 iii. Colelitiasis sintomática complicada (cólico biliarcomplicado) i. Colecistitis aguda Es la principal complicación de la enfermedad litiásica biliar. Corresponde a la inflamación de la vesícula biliar, generalmente por una obstrucción del tracto de salida a nivel del bacinete o conducto cístico, que genera inflamación y edema de las paredes, aumentando la presión en su interior. Este aumento de presión puede llevar a compresión de la vasculatura de la vesícula, provocando isquemia, necrosis y eventualmente perforación de la vesícula. Si bien es una patología primariamente inflamatoria por la obstrucción del cístico, en un 50% de los casos se produce infección secundaria por bacterias gram negativas (E. coli, Klebsiella, Enterobacter) y anaerobios. Colecistitis aguda Su principal síntoma es la persistencia o aumento del dolor en el hipocondrio derecho por más de 6 horas y que solo cede parcial y transitoriamente a la analgesia. En muchos casos hayhistoria de cólicos biliares simples previos, acompañados de náuseas y vómitos. Al examen físico, la presencia de fiebre moderada es común, pero no así de fiebre alta, a menos que se complique con gangrena o se perfore. Es posible ver ictericia, pero su presencia orienta más a una coledocolitiasis. Clásicamente se describe el llamado signo de Murphy, como el cese de la inspiración del paciente producto del dolor que se produce al palpar la vesícula inflamada en el hipocondrio derecho. Una variante de este signo de mayor especificidad, el “Murphy ecográfico”, corresponde al cese de la inspiración al ser comprimidala vesículaporeltransductor mientras seobserva bajoecografía.Estesignopuededarnegativoporlapresencia de ascitis, analgesia, incapacidad de respuesta al dolor o por necrosis de la pared de la vesícula. Los exámenes de laboratorio muestran aumento de los parámetros inflamatorios como la PCR, VHS y leucocitosis. También es posible encontrar pequeñas alteraciones del perfil hepático con niveles de bilirrubina de 2-4 mg/dl y leves alteraciones en las amilasas y lipasas, sin la presencia de pancreatitis. Colecistitis aguda
  • 255. 256 La confirmación diagnóstica se realiza mediante ecografía, por la presencia de colelitiasis con cálculo impactado en el bacinete, Murphy ecográfico, engrosamiento parietal mayor a 3mm y aumento del tamaño de la vesícula mayor a 10cm en el eje longitudinal y 5 cm en el eje transversal. También se puedeobservarlíquidoperivesicularen20%delascolecistitis, siendo marcador de una inflamación más avanzada. Es importante destacar que la colecistitis aguda aumenta el riesgo de presentar una coledocolitiasis concomitante, por tanto, es necesario sospecharla y descartarla. El manejo de la colecistitis parte por un correcto manejo hidroelectrolítico. El uso tratamiento antibiótico no se recomienda a menos que se presente alguna complicación como una colecistitis enfisematosa o perforación. El tratamiento definitivo consiste en una colecistectomía, de preferencia mediante vía laparosópica. Variantes Vesícula en porcelana Consiste en la calcificación intramural de la pared de la vesícula. Su etiología es desconocida, aunque algunos autores la consideran una manifestación de la colecistitis crónica. Se observa con mayor frecuencia en mujeres en la sexta década de vida. Se recomienda realizar colecistectomía profiláctica para prevenir el desarrollo de carcinoma que ocurre en más del 20% de los casos8. Vesícula escleroatrófica Vesículasconprocesosinflamatorioscrónicos.Sonpequeñas y de paredes fibrosas. ii. Coledocolitiasis Corresponde a la presencia de cálculos en el colédoco o conducto biliar común. Su prevalencia en pacientes con colelitiasis es de un 15%. Por otro lado, de los pacientes que tienen coledocolitiasis un 95 % tiene colelitiasis8. Los cálculos se clasifican según su origen en primario y secundario. Los de origen primario se forman de novo en el conducto biliar, son generalmente cálculos pigmentarios marrones, se asocian a estasis biliar e infección bacteriana del conducto y son más frecuentes en la poblaciónasiática. Los cálculos de origen secundario son los más frecuentes y corresponden a aquellos que migran de la vesícula biliar al colédoco y son de colesterol. La obstrucción del conducto biliar producida por el cálculo produce un aumento de presión, lo que provoca la dilatación del conducto que puede ser detectada por ecografía y TAC abdominalenel75%deloscasos.Enalgunoscasos noexiste dilatación del conducto en presencia de coledocolitiasis por que la obstrucción es intermitente o de bajo grado. Coledocolitiasis
  • 256. 257 La presentación clínica varía desde asintomático, cólico coledoceano (dolor epigástrico), ictericia hasta complicaciones conriesgovitalcomocolangitisopancreatitisbiliar.Lavelocidad de obstrucción del conducto y la contaminación bacteriana de la bilis son los factores principales que determinan los síntomas. Laobstrucciónagudacausadolorcólicoeictericia.Encambio, laobstruccióngradualsemanifiesta inicialmentecomoprurito o ictericia sola. El examen físico es generalmente normal si la obstrucción es intermitente. En las pruebas de laboratorio, el perfil hepático puede estar alterado presentando un patrón colestásico con aumento de la bilirrubina de predominio directa, fosfatasas alcalinas y GGT. El aumento de bilirrubina sérica es proporcional al tiempo de la obstrucción, siendo generalmente de 2-5 mg/dL. Elmétododiagnósticoqueseutilizayeltratamientosedeciden sobre la base de la probabilidad de presentar coledocolitiasis según distintos predictores resumidos en la tabla 112 y2. La ecografía y las pruebas de perfil hepático deben realizarse siempre como parte del diagnóstico. Muy fuerte Cálculo en el colédoco evidenciado por ecografía Colangitis Bilirrubina mayor 4 mg/dl Fuerte Dilatación del conducto biliar común mayor de 6 mm con la vesícula in situ y 10mm en pacientes colecistectomizados Nivel de bilirrubina 1,8-4 mg/dl Moderado Elevación de la fosfatasa alcalina y/o GGT sin alteración de la bilirrubina. Clínica de pancreatitis biliar Tabla 1: Predictores del riesgo de coledocolitiasis en pacientes sintomáticos. 12 Lizarazo Rodríguez J. Reflexiones acerca de las indicaciones de CPRE en pacientes con sospecha de coledocolitiasis. Rev. Col. Gastroenterol 2011; 26 (4): 239-242.
  • 257. 258 Riesgo Predictores Diagnóstico y tratamiento Riesgo alto Un factor predictor muy fuerte Ambos predictores fuertes Colecistectomía laparoscópica con ren- dez-vous. (Colecistectomía laparoscópi- ca con ERCP simultánea en el mismo acto quirúrgico) ERCP preoperatorio + colecistectomía laparoscópica Riesgo intermedio Factores moderados o uno fuerte Colangioresonancia o Colecistectomía laparoscópica con colangiografía intraoperatoria y eventual rendez-vous Riesgo bajo Ningún factor predictor Colecistectomía laparoscópica. Si los ha- llazgos intraoperatorio lo ameritan puede realizarse una colangiografía intraopera- toria. Tabla 2: Determinación del riesgo según predictores.
  • 261. 262 Imagen 2 Colangioresonancia con reconstrucción 3D. Se observa imagen hipointensa dentro del colédoco compatible con coledocolitiasis En caso de coledocolitiasis residual, es decir, una coledocolitiasis que se diagnostica dentro de los 2 primeros años luego de una colecistectomía, se puede realizar un ERCP con papilotomía y extracción del cálculo con canastillo de Dormia o una coledocostomía por cirugía abierta y sonda T. iii. Colangitis aguda Es una de las complicaciones más graves de la coledocolitiasis. Corresponde a la infección bacteriana de la vía biliar, a causa de una obstrucción de esta. La principal causa de esta obstrucción es la coledocolitiasis, pero también puede deberse a otras etiologías, como obstrucciones benignas de la vía biliar o una neoplasia. Los agentes bacterianos causales más frecuentes son la E. colli, Klebsiella, Enterobacter y Pseudomonas.
  • 263. 264 La presentación clásica de fiebre, ictericia y dolor en el cuadrante superior derecho del abdomen es conocida como latríadadeCharcot.Latríadacompletasepresentaenmenos del 50% de los casos en que la ictericia es la manifestación menos constante. En casos más graves se agregan shock y alteración del estado mental a los 3 componentes de la tríada de Charcot para conformar la pentada de Reynolds. En los exámenes de laboratorio se observan parámetros inflamatorioselevadosademásdealteracionesenlaspruebas hepáticas con patrón colestásico. El estudio diagnóstico es similar al de la coledocolitiasis, agregándose la tomografía computada y la resonancia magnética, si es que la etiología es neoplásica. El tratamiento tiene 2 objetivos principales; controlar la infección y solucionar la obstrucción de la vía biliar. Para lo primero, el control de la infección, es primordial el inicio precoz de terapia antibiótica dirigida a gram negativos y anaerobios,comolacombinacióndeunacefalosporina(como la ceftriaxona o la cefotaxima) junto a metronidazol. Ante el riesgo de shock, es importantísimo mantener también una buena hidratación, pudiendo requerirse el uso de drogas vasoactivas. Para lo segundo,la obstrucción de la vía biliar,se debe realizar drenaje precoz de la vía biliar, preferentemente por vía endoscópica. Si no es posible retirar el cálculo, se puede utilizar una prótesis biliar, que mantiene la vía biliar sin colapsar. De no ser posible la descompresión de la vía biliar mediante endoscopía o laparoscopía, se debe realizar la instalación de una sonda T por vía clásica para permitir el drenaje de la bilis. Debido a la labilidad de estos pacientes, el tratamiento quirúrgico definitivo se difiere hasta que el cuadro infecciosoestábajocontrolyelpacienteseencuentraestable, momento en que se realiza una colecistectomía en los casos en que la colangitis fue secundaria a coledocolitiasis para eliminar la fuente de los cálculos. En las colangitis secundarias a neoplasia, frecuentemente la obstrucción es en varios segmentos de la vía biliar, por lo que su drenaje puede ser más difícil. Además, en estos casos, muchas veces se asocian abscesos hepáticos que deben ser drenados de preferencia por vía percutánea guiado bajo ecografía. iv. Complicaciones poco comunes 1. Colecistitis enfisematosa Es un cuadro provocado por bacterias productoras de gas, en que la clínica es similar a la colecistitis aguda, pero que en imágenes por ecografía, tomografía o incluso radiografía se ve gas en las paredes o lumen de la vesícula biliar. Ante el riesgo inminente de perforación, la terapia precoz con antibióticos es mandatoria y la colecistectomía es de emergencia. En general, se observa en pacientes de sexo masculino, mayores de edad y diabéticos en que el desencadenante de la colecistitis no es la enfermedad litiásica, sino una isquemia provocada por ateroesclerosis de la arteria cística. 2. Colecistitis gangrenosa Cuadroenquedebidoalincrementodelapresiónintraluminal, se comprime la vasculatura de la vesícula, se produce isquemia de la pared y, finalmente, necrosis. Clínicamente se ve la desaparición del signo de Murphy en el 66% de los casos por denervación parietal y en la ecografía y tomografía computada es posible observar irregularidad de la pared, membranas intraluminales y abscesos. Al igual que en la colecistitis enfisematosa, el uso de antibióticos y colecistectomía precoz son mandatorios. Colecistitis agudanecrótica
  • 264. 265 3. Hidrops vesicular Es la distensión de la vesícula por acumulación de fluido mucosoensuinterior,sinpigmentosbiliares(sereabsorbenlos componentes habituales de la bilis), ocurre por la obstrucción del conducto cístico. Alexamenfísicoseevidenciaunamasaindoloraenelcuadrante superior derecho. Su tratamiento es la colecistectomía laparoscópica. 4. Empiema vesicular “Es una colecistitis supurativa con formación de abscesos intraluminales”, es decir, la presencia de pus en el lumen vesicular. Se desarrolla por una infección secundaria a obstruccióncontinuadelconductocístico.Aproximadamente, el 6% de la colecistitis no tratada evoluciona a empiema vesicular. El tratamiento consiste en antibióticos y colecistectomía. 5. Perforación vesicular. Ocurre en 5-10% de los casos y se asocia con una mortalidad de alrededor de un 20%. Generalmente al perforarse la pared, las estructuras vecinas, como el colon y el omento mayor, forman un plastrón que contienelabilis ypuscontenidaensuinterior.Deestaformaes posibleobservarunabscesoperivesicularsilogracontenerse el derrame del contenido vesicular, o peritonitis biliar si el contenidosederramaalacavidadperitoneal,provocandouna respuesta inflamatoria extensacon sintomatología peritoneal irritativa. 6. Síndrome de Mirizzi Corresponde a una obstrucción de la vía biliar intrahepática por un cálculo en la vesícula que se impacta en el conducto cístico y genera una compresión extrínseca del conducto hepático común. Enlasimágenesseveladilatacióndelavíabiliarintrahepática hasta un cálculo de gran tamaño en el cuello de la vesícula o en el cístico, con una vía biliar extrahepática normal por debajo de la obstrucción. Puede asociarse a fístulas colecistobiliares o colecistodigestivas y es relativamente frecuente que no sean detectadas previo a la cirugía, aumentando los riesgos de esta, por lo que se prefiere la vía abierta por sobre la laparoscópica o la endocopía.
  • 265. 266 7. Fístulas biliodigestivas Las fístulas biliodigestivas son causadas por la erosión producida por el cálculo en la pared de la vesícula con su consecuente ruptura y comunicación con una víscera adyacente12 . Se observan en el 0,3 a 0,5 % de los pacientes con colelitiasis . Fístula colecistoduodenal en formación Fístula colecistoduodenal 13 Rojas J. Cabané P.Hernández J. Síndrome de Bouveret: caso clínico y revisión de la literatura. Rev. Chilena de Cirugía. 2005; 57 (6): 508-510.
  • 266. 267 El sitio más común de fistulización es el duodeno (60%), seguido por el colon (17%), estómago (5%) y el yeyuno. En la mayoría de los casos el cálculo pasa a través del intestino sin ocasionar ningún síntoma. En el 6% de los casos se produce obstrucción intestinal. El íleo biliar es consecuencia de la obstrucción mecánica de un cálculo en el intestino delgado. Corresponde al 1 a 4 % de todas las obstrucciones mecánicas. El lugar más común de obstrucción es el área ileocecal. El diagnóstico se puede realizar por radiografía simple de abdomen, encontrándose la tríada de Rigler (obstrucción intestinal, aerobilia y cálculo biliar ectópico). Íleo biliar. Fístula colecistoentérica
  • 267. 268 Íleo biliar. Impactación en válvula Ileo-cecal
  • 268. 269 El síndrome de Bouveret se caracteriza por la obstrucción del vaciamiento gástrico por un cálculo de gran tamaño impactado en el duodeno. La manifestación principal es el síndrome de retención gástrica, caracterizado por vómitos biliosos y dolor abdominal. Sd. Bouveret Sd. Bouveret
  • 269. 270 Factores de Riesgo i. Ecografía El ultrasonido es la técnica de elección para la evaluación inicial de la vesícula y vía biliar. Su principal utilidad radica en la detección de cálculos en la vesícula (es el Gold Standard para la colelitiasis), engrosamiento de la pared vesicular en una colecistitis y en la dilatación de la vía biliar ante coledocolitiasis. El aspecto clásico de la colelitiasis es el de imágenes hiperecogénicas móviles con sombra acústica posterior. Ante una colecistitis, la inflamación y edema de las paredes de la vesícula se traduce como un engrosamiento de esta por sobre los 3mm. Además es posible observar un aumento de tamaño de la vesícula por sobre los 10cm de diámetro longitudinal y 5cm del transversal. El diámetro normal de la vía biliar extrahepática es de 4mm y se considera francamente dilatado a partir de los 6mm. Como la vía biliar se dilata con la edad y tras la extracción de la vesícula biliar, en pacientes colecistectomizados se tolera hasta 8-10mm antes de considerarlo como dilatación de la vía biliar. Imagen 3 Ecografía de abdomen. Vesicula biliar distendida, de paredes engrosadas (0,65cm). se evidencia ademas edema perivsicular compatible con colecistitis aguda.
  • 270. 271 ii. Tomografía computada Es el examen de elección para la etapificación de la patología neoplásica biliar. En la patología benigna, en cambio, su uso se reserva para el estudio de complicaciones de la colecistitis comolacolecistitisenfisematosa,gangrenosaylaperforación de esta. Aparte del aumento de tamaño de la vesícula y del engrosamiento de sus paredes, observados en la ecografía, es posible detectar aumento de la densidad de la grasa peri- vesicular como signo de inflamación. iii. Colangiopancreatografía por resonancia magnética (CPRM o colangioresonancia) Laobservaciónmedianteresonanciamagnéticaensecuencia T2, en que los líquidos estáticos se ven hiperintensos comparados con otras estructuras, tiene su principal utilidad en la detección decoledocolitiasis. Los cálculos en la vía biliar presentan la apariencia de vacíos de señal, rodeadas por la bilis de apariencia hiperintensa, que pueden ser confundidos con coágulos o pólipos. El rendimiento de esta técnica ha mostrado ser comparable al del ERCP, por lo que ante el riesgo que conlleva esta última, se prefiere el uso de la CPRM para el diagnóstico de cálculos en la vía biliar. Imagen 4 ColangioRNM se observa una imagen hipointensa endoluminal en el colédoco, asociado a una dilatación de este.
  • 271. 272 iv. Colangiopancreatografía retrógrada endoscópica (CPRE o ERCP) Consiste en la adquisición de una imagen radiográfica tras la inyección de método de contraste por vía retrógrada desde la papila duodenal mediante vía endoscópica. A pesar de su excelente sensibilidad y especificidad para la detección de coledocolitiasis presenta una tasa de complicaciones (como pancreatitis) de 1-7% y mortalidad de 0,2-1%, por lo que su uso se reserva para procedimientos terapéuticos al extraer los cálculos por vía endoscópica. Imágen 5 ERCP imagen radiopaca en colédoco distal compatible con coledocolitiasis.
  • 272. 273 v. Colangiografía posoperatoria Se utiliza en la cirugía por laparotomía en que tras insertar la sonda T en el colédoco y antes de dar por concluida la cirugía, se inyecta contraste por medio de la sonda para ver que efectivamente se eliminaron todos los cálculos de la vía biliar. Imágen 6 Se observa el paso de medio de contraste a través de la sonda T, contrastando la vía biliar.
  • 273. 274 Cuadro resumen Cuadro Fisiopatología Síntomas Signos Laboratorio Diagnóstico Cólico biliar simple Obstrucción intermitente Dolor en hipocondrio - Normal Ecografía (Colelitiasis) de la vesícula derecho de <6hrs de duración Colecistitis Impactación de Dolor en Fiebre Parámetros Ecografía cálculo en el cístico hipocondrio moderada inflamatorios con inflamación de derecho de >6hrs Signo de la vesícula de duración Murphy Pequeñas alteraciones del perfil hepático Coledocolitiasis Cálculo obstruyendo lavía - Ictericia Elevación dela bilirrubina de CPRM / ERCP biliar predominio directo Elevación de fosfatasas alcalinas Colangitis Infección bacteriana tras obstrucción dela Tríada de Charcot Péntada de Reynolds Ictericia Fiebre Parámetros inflamatorios CPRM / ERCP vía biliar Dolor asociado a Elevación de la escalofríos bilirrubina Elevación de transaminasas y fosfatasas alcalinas Patologia biliar no litiásica Colecistitis aguda alitiásica Corresponde a la inflamación de la vesícula biliar en ausencia de cálculos. Se caracteriza por ectasia e isquemia vesicular con respuesta inflamatoria de la pared. Los factores de riesgo para desarrollarla son edad avanzada, enfermedadescríticas,quemaduras,trauma,usoprolongado de nutrición parenteral, diabetes e inmunosupresión. El curso de la enfermedad es generalmente más fulminante queeldelacolecistitislitiásicaypuedeprogresarrápidamente a gangrena y perforación de la vesícula. La presentación clínica incluye fiebre, anorexia y dolor en el cuadrante superior derecho. En exámenes de laboratorio presenta hiperamilasemia y leucocitosis. Lamortalidadesdeun10-50%,principalmenteporqueocurre en pacientes críticos y la enfermedad progresa rápido, por lo que se debe tener una alta sospecha en estos pacientes. El diagnóstico se realiza con ecografía, TAC abdominal o cintigrama biliar. La ecografía muestra engrosamiento de la pared vesicular (> 4 mm) en ausencia de hipoalbuminemia o ascitis, signo de Murphy ecográfico y colecciones alrededor de los conductos cístico y colédoco. El TAC, además, puede mostrar edema subserosos, gas intramural y descartar otras patologías abdominales. El tratamiento médico incluye restauración de laestabilidad hemodinámica y uso de antibiótico con cobertura a gram negativos y anaerobios si se sospecha infección del tracto biliar. El tratamiento definitivo es la colecistectomía, ya sea
  • 274. 275 por vía laparoscópica o por laparotomía, dependiendo del riesgo quirúrgico del paciente y la experiencia del cirujano. Enlos pacientes quenopuedensertratados quirúrgicamente se realiza drenaje percutáneo de la vesícula. Colesterolosis La colesterolosis es una anomalía del epitelio de la vesícula que se caracteriza por la acumulación excesiva de ésteres de colesterol y triglicéridos en los macrófagos de la mucosa. Generalmente, se diagnostica en forma incidental pos colecistectomía. Afecta en especial a mujeres sobre 60 años de edad. El patrón de disposición de los lípidos en la vesícula es generalmente difuso (80%), también pueden encontrarse en forma polipoide o focos de colesterol. Los depósitos submucosos determinan un patrón reticular amarillo fino sobre una mucosa color rojizo por la inflamación, esta apariencia se conoce como vesícula de fresa. La colesterolosis generalmente es asintomática, en algunas ocasionessepresentacondolorvagoenelcuadrantesuperior derecho o en el epigastrio. Para el diagnóstico se utiliza la ecografía donde la forma difusa es difícilmente detectable, a diferencia del patrón polipoide en que se observa una imagen hiperecogénica sin sombra acústica. El tratamiento generalmente no es un problema porque se encuentran luego de la colecistectomía, en caso de diagnosticarse previamente se recomienda colecistectomía en presencia de cólico biliar o pancreatitis. Pólipos Se refiere a cualquier proyección de la mucosa hacia el lumen. Su prevalenciatantopatológicacomoradiológicaes de1a 4%. Se clasifican en neoplásico (95%) y no neoplásicos. Dentro de los pólipos no neoplásicos se encuentran los pólipos de colesterol, los adenomiomas y los pólipos inflamatorios. Y en losneoplásicossedistinguenlosadenomasylosmisceláneos. Los pólipos de colesterol son los más comunes de los pólipos benignos. Representan una variante de la colesterolosis. Pueden ser únicos o múltiples, son generalmente pequeños y están adheridos a la mucosa por un pedúnculo frágil. Se pueden desprender y producir complicaciones similares a las de un cálculo pequeño. La adenomiomatosis vesicular es una anormalidad de la pared de la vesícula que se caracteriza por excesiva proliferación del epitelio con invaginación hacia la capa muscular o más profunda. La adenomiomatosis puede ser difusa (localizarse en toda la vesícula), segmentaria o focal. Es una patología benigna. Pólipo vesicular Los pólipos inflamatorios son lesiones pequeñas y sésiles conformadas por tejidos de granulación y fibroso, infiltrado con linfocito y células plasmáticas. Puede ser solitario (50% de los casos) o múltiple. Los adenomas son masas pedunculadas de 5 a 20 mm de diámetro.Son generalmenteúnicos,peropuedenser múltiples en un tercio de los casos. Se clasifican histológicamente en papilares y no papilares. El riesgo de malignidad se relaciona con el tamaño. Los fibromas, leiomiomas y lipomas considerados dentro de los misceláneos son extremadamente raros. Lospóliposdela vesículasonlamayoríade lasveceshallazgos incidentales, detectándose luego de una colecistectomía por otra causa o en imágenes. Independiente de la etiología del pólipo, puede asociarse a cólicobiliar.Por otraparte,si el pólipose desprendede la pared puede producir colecistitis, ictericia obstructiva ypancreatitis. El riesgo de malignidad está directamente relacionado con el tamaño del pólipo. En los que miden más de 2cm son casi siempremalignos.Losquemidende1a2cmsonpotencialmente malignos. Por otro lado, la edad sobre 50-60 años también se asocia a mayor riesgo de malignidad del pólipo. Para el diagnostico se utiliza una combinación de variables de la ecografía, el TAC y la endosonografía que pueden otorgar información importante, pero ninguna técnica sirve para determinar con certeza el tipo de pólipo, la histología ni la presencia de cáncer. En Chile se tiene una conducta más agresiva que en otros países, se realiza seguimiento ecográfico hasta los 6mm y si aumentan en número o crecen se indica colecistectomía antes de alcanzar los 10mm, que es el punto de corte tradicional de colecistectomía profiláctica ante un pólipo vesicular.
  • 275. 276 Benignos Bibliografía 1. David Q.-H. Wang; Nezam H. Afdhal, Sleisenger and Fordtran’s Gastrointestinal and Liver Disease, Ninth Edition(2010). 2. MINISTERIO DE SALUD, Guía Clínica Colecistectomía Preventiva en Adultos de 35 a 49 años, 2010 3. Courtney T, Beauchamp D, Evers M, Mattox K. Sabiston: tratado de cirugía.19 ed. España: Elservier; 2013 Pólipos de la vesícula Adenoma 4% Misceláneo 1% No Neoplasícos Neoplásicos Misceláneo 20% Adenocarcinoma 80% Malignos Pólipo de colesterol 60% Adenomioma 25% Pólipo inflamatorio 10%
  • 276. 277 6.3 Cáncer de Vesícular Biliar Rodriguez D, Morelli C, Bachelet C, Court F. Introducción El cáncer de vesícula es relativamente poco frecuente, pero con muy mal pronóstico de sobrevida. La introducción de la laparoscopía ha incrementado su diagnóstico incidental en estadios tempranos, sin embargo, cuando se presentan síntomas como ictericia y dolor, el pronóstico continúa siendo reservado1,2,3,4 Incidencia y Epidemiología • Las neoplasias del tracto biliar incluyen el cáncerde vía biliar intrahepática, extrahepática y de vesícula biliar, siendo este último el más frecuente . • Se estima que alrededor de 10.310 nuevos casos de cáncer de vesícula y de vía biliar extrahepatica fueron diagnosticados el año 2013, posicionándose en el sexto lugar de las neoplasias gastrointestinales más frecuentes5 . • Existen variaciones regionales en cuanto a la incidencia de esta patología. El norte y centro de Europa, la India, Japón y nuestro país concentran la mayor incidencia de esta enfermedad. • La incidencia de cáncer de vesícula en Chile es de más de 25 por 100.000 mujeres y de 9 por 100.000 hombres, concentrándose las mayores tasas en la VIII, 5 IX y X región . • La tasa de mortalidad en Chile debido a cáncer de vesícula es de 11,3/100.000 habitantes5. 1 Shih SP, Schulick RD, Cameron JL, et al. Gallbladder Cancer: the role of laparoscopy and radical resection. Ann Surg 2007; 245:893-901. 2 Hueman MT, Vollmer CM, Pawlik TM. Evolving treatment strategies for gallbladder cancer. Ann SurgOncol 2009; 16:2101-15. 3 Pawlik TM, Gleisner AL, Vigano L, et al.Incidence of finding residual disease for incidental gallbladder carcinoma: Implications for re-resection. J Gastrointest Surg 2007; 11:1478-86. 4 Hawkins WG, DeMatteo RP, Jarnagin WR, et al. Jaundice predicts advanced disease and early mortality in patients with gallbladder cancer. Ann Surg Oncol 2004; 11:310-5. 5 Wernberg J, Lucarelli D. Gallbladder Cancer. Surg Clin N Am 94 (2014) 343-360. • Constituye la segunda causa de muerte por cáncer en la mujer con una tasa de mortalidad de 15/100.000 y la cuarta causa de muerte por cáncer en el hombre con una tasa de mortalidad de 7,4/100.0005. • Se han encontrado discrepancias raciales en la aparición de esta enfermedad: indios americanos, nativos deAlaska, raza negra e hispanos son los más afectados 5 . • Como la mayoría de las neoplasias, su frecuencia incrementaconlaedad,siendo65años la edadpromedio al diagnóstico.
  • 277. 278 Factores de Riesgo Lamayoríadelasneoplasiasdevesículasonadenocarcinomas derivados de su mucosa. Se cree que la inflamación crónica de la mucosa puede desencadenar la progresión de displasia a carcinoma en personas predispuestas. La mayoría de los factores de riesgo asociados a esta enfermedad tienen relación con procesos inflamatorios6 . 1. Colelitiasis • Algunos de los factores de riesgo para desarrollar cálculos biliares incluyen la edad, el sexo, la raza, la paridad y la rápida pérdida de peso. • Existe una clara asociación entre litiasis biliar ycáncer vesicular, siendo este el principal factor de riesgo. • La probabilidad de desarrollar cáncer de vesícula es proporcional al tamaño del cálculo. Aquellos que miden más de 3 cm se asocian a un riesgo 10 veces mayor en comparación con los menores de 1 cm. De todas formas, debemos tener en consideración que solo un 0.3-3% de los pacientes desarrollarán esta neoplasia. 2. Pólipos1, 2 • Lesiones vesiculares polipoides que midan > 10 mm o aquellas que presenten un rápido crecimiento, clásicamente se han asociado al desarrollo de cáncer de vesícula por lo que se recomienda su resección. 3. Infecciones9,10 • Las infecciones bacterianas inducen inflamación crónica, por lo que también han sido consideradas un factor de riesgo para esta enfermedad. Cánceres hepatobiliares se han relacionado con infecciones bacterianas específicas. La más frecuente: Salmonella typhi. 6 Albores Saavedra J, Alcantra Vazqahuez A, Cruz – Ortiz H, et al. The precursor lesions of invasive gallbladder carcinoma. Hyperplasia, atypical hiperplasia and carcinoma in situ. Cancer 1980; 45:919-27. 7 Everhart JE, Khare M, Hill M, et al. Prevalence and ethnic differences in gallbladder disease in theUnited States. Gastroenterology 1999; 117:632-9. 8. Hsing AW, Gao YT, Han TQ, et al. Gallstones and 10 4. Alteraciones anatómicas • La unión anómala del sistema ductal pancreático-biliar también ha sido implicada como un potencial factor de riesgoparaelcáncerdevesícula.Estaalteraciónpermitirá el reflujo de líquido pancreático hacia el conducto biliar común y viceversa. El reflujo crónico puede conducir a 8.6inflamaciónymetaplasia,resultandoenunmecanismo potencial para la patogénesis del adenocarcinoma. 5. Vesícula en porcelana 11 • Corresponde a la extensa calcificación de la pared de la vesícula con un riesgo 14 veces mayor de desarrollar cáncer. 6. Genética2 • Incluso sin el factor de riesgo litogénico típico (obesidad), grupos étnicos específicos, con linaje materno amerindio en la población chilena, tienen una mayor prevalencia de formación de cálculos biliares, que se cree que estaría asociado con polimorfismos de ADN mitocondrial. 7. Sexo12 • Mundialmente, la incidencia de cáncer de vesícula es el doble en mujeres que en hombres. En Chile la razón hombre: mujer es de 1:3. 8. Otros13 • Se ha demostrado la existencia de riesgos ambientales con ocupaciones específicas (refinerías de petróleo, fábricas de papel, industrias de zapatos, etc.). • Obesidad, alcohol, tabaco, drogas, ingesta de carbohidratos, exposición a químicos, posmenopausia y desórdenes autoinmunes. the risk of biliary tract cancer; a population-based studyin China. Br J Cancer 2007; 97:1577-82. 9. Pilgrim CH, Groeschl RT, Christians KK, et al. Modern perspectives on factors predisposing to the development of gallbladder cancer. HPB (Oxford)2013 15:839-44. 10. Pilgrim CH, Groeschl RT, Christians KK, et al. Modern perspectives on factors predisposing to the development of gallbladder cancer. HPB (Oxford)2013 15:839-44. 11 Stephen AE, Berger DL. Carcinoma in theporcelain gallbladder: a relationship revisited. Surgery 2001; 129:699-703. 12. Adsay NV. Neoplasic precursors of the gallbladder and extra-hepatic bilary system. Gastroenterol Clin North Am 2007; 36: 889-900 13. Malker HS, McLaughlin JK, Malker BK, et al. Biliary tract cancer and occupation in Sweden. Br J Ind Med 1986; 43:257-62. 4,1,8,9
  • 278. 279 Clínica Tipos Histológicos El90%deloscánceres de vesículabiliar se origina enel fondo o cuerpo, determinando que la mayoría de los pacientes en etapas tempranas sean asintomáticos. La ubicación del tumor 13 en el bacinete puede producir un cólico biliar o una colecistitis aguda, facilitando la presentación en estadios más precoces. Elsíntomamásfrecuenteesdolorenhipocondrioderecho,que se acompaña de anorexia, náuseas y vómitos. Sin embargo, dada la poca especificidad del cuadro, no suele sospecharse en el preoperatorio. Otros síntomas habituales son dolor epigástrico crónico,saciedadprecoz ysensación de plenitud. En estadios avanzados, suelen aparecer síntomas que nos orientan a malignidad, como el compromiso del estado general y la pérdida de peso. También, se puede presentar como ictericia obstructiva, donde nuestro índice de sospecha debe ser muy alto en presencia de un síndrome de Mirizzi. Raramente, se evidencia hepatomegalia, masa abdominal palpable, metástasis extraabdominales y ascitis. • Adenocarcinoma (80%): - Bien diferenciado. - Papilar. - Tipo intestinal. • Indiferenciado o escamoso (20%). Estadio Actualmente, The American Joint Committee On Cancer (AJCC) utiliza el sistema de etapificación TNM, donde T describe el crecimiento del tumor dentro de la vesícula u órganos adyacentes, N informa la diseminación linfática y M indica la presencia de metástasis. Diagnóstico La sospecha y el diagnóstico precoz son fundamentales. Actualmente, la pesquisa de tumores en estadios tempranos, asociados a un buen pronóstico, solo es posible mediante el estudio de la pieza quirúrgica en pacientes intervenidos por patología benigna. Desgraciadamente,lasimágenesnosondeltodoútiles,yaque suelen detectar el cáncer vesicular en estadios avanzados, donde los hallazgos imagenológicos revelan una lesión irregular en el espacio subhepático, una masa heterogénea en la luz de la vesícula y una pared engrosada en forma asimétrica. El TAC y la RNM son útiles en la etapificación y ayudan en la planificación del tratamiento del cáncer de vesícula, ya que permiten clasificar al paciente según su potencial resecabilidad. En aquellos que se presentan con ictericia, el estudio debe complementarse con una colangiorresonancia para localizar la obstrucción, evaluando la extensión tumoral a hígado y/o via biliar (en estos casos, solo un 7% será resecable). Resulta importante considerar que el tiempo entre displasia y cáncer avanzado es de aproximadamente 15 años, dependiendo de la raza y sexo del individuo. Capas histológicas de la vesícula
  • 279. 280 Cáncer devesícula Tumor Primario (T) Metástasis (M) Tx Tumorprimario no puede ser caracterizado. M0 Sin evidencia de metastasis. T0 Sin evidencia de tumor primario. M1 Con metástasis a distancia. Tis Tumor in situ Estadio T1 Tumorinvade lámina propia o capa muscular Etapa 0 Tis N0 MO T1a Tumor invade lámina propia Etapa I T1 N0 MO T1b Tumor invade capa muscular Etapa II T2 N0 MO T2 Tumor invadetejidoconectivo, sinextensiónaserosanihígado Etapa IIIa T3 N0 MO T3 Tumorinvadeserosa, hígadou órganos adyacentes (estómago, duodeno, colon, páncreas, omento, víabiliar) Etapa IIIb T1-T3 N1 MO T4 Tumor invade vena porta, arteriahepáticaodosórganos extrahepáticos Etapa IVa T4 N0-N1 MO Linfonodos regionales (N) Etapa IVb CualquierT CualquierT N2 Cualquier N M0 M1 Nx Linfonodos no pueden ser estudiados. N0 Sin metástasis a linfonodos regionales. N1 Metástasis a linfonodos a lo largo del conducto cístico, hepático común, arteria hepática y/o venaporta. N2 Metástasis a linfonodos periaórticos, peri cava, mesentéricos superiores y/o tronco celiaco
  • 280. 281 Diagnóstico Incidental del Cáncer Vesicular Se define como el cáncer de vesícula biliar que pasa inadvertido previo a la cirugía y es descubierto en el momento de la colecistectomía o en la recepción de la biopsia. La frecuencia de este evento oscila entre un 0,2% al 2,0% de las colecistectomías electivas. Eladvenimientodelalaparoscopíayelincrementodelnúmero de colecistectomías realizadas han producido un aumento en el número de carcinomas incidentales y aunque el pronóstico en este grupo de pacientes es muy variable y se basa en el estadio, ha mejorado su sobrevida en comparación con los que desarrollan neoplasias no incidentales. Tratamiento El tratamiento del cáncer de vesícula va a depender fundamentalmente del nivel de invasión de la pared. I. Invasióndelamucosa:norequierenotrotratamiento ademásdelacolecistectomía,asumiendoqueestaesrealizada con márgenes negativos y no necesita de una reintervención quirúrgica a diferencia de las otras. Si consideramos que la mayoría de estos pacientes fueron diagnosticados después del estudio histopatológico de la pieza quirúrgica, el tratamiento ya ha sido efectuado al momento del diagnóstico. Cáncer de vesícula T1 Cáncer de vesícula avanzado (vesícula abierta)
  • 281. 282 II. Invasión de la túnica muscular: aún no existe consenso respecto al manejo de estos pacientes, debido fundamentalmente a las diferencias en la sobrevida y los riesgos de recurrencia. En estos casos, hay estudios que plantean que bastaría con una colecistectomía simple, mientras que otros sugieren la colecistectomía ampliada o radical (colecistectomía + resección de los segmentos hepáticos IVb y V + linfadenectomía hasta el ligamento hepatoduodenal), siendo esta última la más aceptada. III. Invasión delatúnicasubserosa: enestesubgrupo, la resección del lecho hepático y la linfadenectomía del pedículo(encasos deestadioN0 yN1) contribuiríanaextirpar elposibletejidoresidualneoplásicoo,ensudefecto,ayudarían como medio de etapificación. La resección debe permitir una cirugía R0. IV. Compromiso del tejido adiposo vesicular: corresponde al espacio que se ubica entre el hígado y la vesícula, área que además posee vasos sanguíneos, posiblemente responsables del peor pronóstico de estos tumores. V. Invasión de la serosa: se asocian a un pobre pronóstico, ya que la mayoría posee compromiso de los ganglios linfáticos, incluso a distancia. Sin embargo, el compromiso seroso no impide que estos pacientes puedan ser sometidos a cirugía radical e incluso se ha planteado el uso de radioterapia posterior a la intervención. Esposibleencontrarseconenfermedadresidualometástasis en aquellos pacientes que se les ha detectado un cáncer vesicular de manera incidental y que se someten a una nuevaresecciónquirúrgica.Lalocalizacióndeltumorprimario se correlaciona con el riesgo de encontrar enfermedad residual, donde los pacientes con T1, T2 y T3 tienen un riesgo de 37.5%, 56.7% y 77.3%, respectivamente. Colecistectomía radical • Manejo del lecho hepático: el cáncer de vesícula tiene la potencialidad de diseminarse de manera directa hacia el hígado, aunque también puede diseminarse a través del peritoneo, sistema linfático o vía hematógena. La resección hepática tiene como objetivo lograr un R0 y se havistoquenohayunimpactoenlasobrevidaenaquellas personas que se someten a extensivas resecciones de varios segmentos en comparación con los que se someten a una resección en cuña, ya que finalmente la probabilidad de encontrar enfermedad metastásica en el hígado dependerá de la localización del tumor primario (0% en T1, 10.4% en T2 y 36.4% en T3). Resección en cuña de lecho vesicular
  • 282. 283 • Linfadenectomía:estárecomendadaenlosestadiosT1by enaquellostumoresquesonresecablesyquetienenunN0 oN1,yaqueaquellaspersonasconunN2sonconsideradas en etapa IVB y no tienen indicación de resección ganglionar. La probabilidad de encontrar metástasis en gangliosregionalessecorrelacionaconlalocalizacióndel tumorprimario(12.5%enT1,31.2%enT2y45.5%enT3). • Manejodelconductocísticoydelavíabiliarextrahepática: algunos cirujanos realizan la resección de la vía biliar extrahepática como parte de la colecistectomía radical, otros lo justifican como una manera de hacer más fácil la linfadenectomía (aunque hay estudios que muestran que no trae beneficios), mientras que otros solo la realizan cuando se ve comprometido el conducto cístico, ya que se ha visto que en estos casos hay más probabilidad de encontrar enfermedad residual en el resto de la vía biliar (4.3% vs 42.1%). Las guías NCCN no recomiendan de manera rutinaria la resección de la vía biliar cuando el margen del conducto cístico es negativo. OTRAS TERAPIAS 1. No existen recomendaciones que apoyen el usode terapias neoadyuvantes. 2. El uso de terapias adyuvantes, que por general consiste en la combinación de quimioterapia y radioterapia, suele ser recomendado, sin embargo, no existen estudios que prueben que tenga realmente beneficios. 3. Terapias paliativas: • Stent biliar: malla que se posiciona en la vía biliar para permeabilizar el conducto y con esto aliviar el prurito, muchas veces invalidante para el paciente. • Terapia del dolor: permite otorgar al paciente una mejor calidad de vida el tiempo restante. Pronóstico En 1978, Piehler y Crichlow reportan un 4,1% de sobrevida a 5 años para todos los pacientes y una sobrevida de 16,5% a 5 añosparaaquellossometidosaresecciónquirúrgicaagresiva. De esta forma, la sobrevida de los pacientes con cáncer de vesícula biliar dependerá del estadio de la enfermedad al momento de la presentación y de si se realiza o no resección quirúrgica. 1. T1a: excelente sobrevida, cercana al 92% a 5 años. 2. T1b: sobrevida a 5 años de un 89%. La resección completa de este tipo de lesiones con márgenes negativos otorga un pronóstico excelente. 3. T2: sobrevida a 5 años va de un 20% a un 60%, dependiendo del compromiso ganglionar y de si se realiza o no una resección radical. 4. T3: sobrevida a 5 años es inferior a un 20%. 5. T4: sobrevida media de 6 meses. 1
  • 283. 284 Bibliografía 1. Shih SP, Schulick RD, Cameron JL, et al. Gallbladder Cancer: the role of laparoscopy and radical resection. Ann Surg 2007; 245:893-901. 2. Hueman MT, Vollmer CM, Pawlik TM. Evolving treatment strategies for gallbladder cancer. Ann Surg Oncol 2009; 16:2101-15. 3. Pawlik TM, Gleisner AL, Vigano L, et al. Incidence of finding residual disease for incidental gallbladder carcinoma: Implications for re-resection. J Gastrointest Surg 2007; 11:1478-86. 4. Hawkins WG, DeMatteo RP, Jarnagin WR, et al. Jaundice predicts advanced disease and early mortality in patients with gallblad- der cancer. Ann Surg Oncol 2004; 11:310-5. 5. Siegel R, Naishadham D, Jemal A. Cancer statistics, 2013. CA Cancer J Clin 2013;63:11-30. 6. Randi G, Malvezzi M, Levi F et al. Epidemiology of biliary tract cancers: an update. Ann Oncol 2009; 20: 146-59. 7. Wernberg J, Lucarelli D. Gallbladder Cancer. Surg Clin N Am 94 (2014) 343-360. 8. Patrick G., Jackson, Steven R.T. Evans. Sistema biliar. En: Courtney M. Townsend, Jr., MD; R. Daniel Beauchamp, MD; B. Mark Evers, MD; Kenneth L. Mattox, MD. Sabiston tratado de cirugía. 19 ed. España. Elsevier; 2013. p. 1476 – 1514.
  • 284. 285 6.4 Colangiocarcinoma Rodríguez D, Diaz M, Bachelet C, Court F. Generalidades El colangiocarcinoma es un tumor maligno originado del epitelio de los conductos biliares tanto intra como extrahepáticos. Es una entidad patológica infrecuente, representando menos del 2% de todos los tumores malignos , sin embargo, es un tumor agresivo y al momento del diagnóstico suele tener mal pronóstico. Parasuevaluaciónytratamientoserequiriódividirelconducto biliar en tercios; de esta forma existen, de proximal a distal, los tumores intrahepáticos (15%), perihiliares (60%) y extrahepático distal (25%)1 . Los tumores perihiliares fueron descritos por Klatskin en 1965 y desde ese entonces se les conoce como “Tumor de Klatskin”. Porotro lado, este tipo detumores sehasubdividido en 4 en función de su extensión, siguiendo la clasificación de Bismuth-Corlette. Las zonas en blanco indican la extensión del tumor (modificado de Groen PC, Gores GJ, LaRusso NF, et al. N Engl J Med 1999;341:1368). 1 Burgos L. Colangiocarcinoma. Actualización,diagnóstico y terapia. Rev. Méd. Chile. 2008; 136: 240-8.
  • 285. 286 Clasificación de Bismuth-Corlette: Tipo I: tumores distales a la confluencia de los conductos hepáticos derecho e izquierdo. Tipo II: tumores que comprometen la confluencia. Tipo III: tumores que invaden la confluencia y el conducto hepático derecho (IIIa) o izquierdo (IIIb). Tipo IV: tumores multicéntricos o que comprometen ambos conductos hepáticos. Epidemiología La incidencia del colangiocarcinoma varía entre el 0,01 y 0,2%1 , siendo mayor en países del sudeste asiático, como Tailandia, debido a la alta prevalencia de parásitos en la vía biliar que presenta esta población. La edad de presentación más frecuente es entre los 50 y los 70 años, sin embargo, en personas con factores de riesgo se ha presentado hasta con 20 años de anticipación. Existe una leve preferencia por el sexo masculino sobre el femenino (1,3:1). Más de dos tercios de los colangiocarcinomas corresponden a tumores de Klatskin2 . Factores de riesgo La mayoría de los colangiocarcinomas corresponden a adenocarcinomas. Existen distintas entidades que generan inflamación crónica del árbol biliar y proliferación celular compensatoria que llevaría a la transformación maligna del epitelio biliar normal, entre ellas se encuentran: 1. Colangitis esclerosante primaria (CEP) Es una enfermedad inflamatoria fibrosante crónica de la vía biliar, con una incidencia anual de colangiocarcinoma en estos pacientes del 0,6 a 1,5%, la cual aumenta a un 30% en autopsias3 . Estas personas suelen desarrollar tumores de la vía biliar en edades más tempranas, alrededor de los 30 y 50 años, y el hecho de fumar y el consumo excesivo de alcohol parecen ser factores de riesgo adicional. Su causa es desconocida, pero la evidencia apunta a factores genéticos y autoinmunitarios. Tanto así, que existe una fuerte asociación con enfermedades inflamatorias intestinales, donde un 90% delospacientesconCEPpresentacolitisulcerosayenmenor 1 Manzanera M, Jiménez C, Moreno E, et al. Tratamiento del colangiocarcinoma hiliar. Cir Esp. 2001; 69: 159-168. 2 Patrick G., Jackson, Steven R.T. Evans. Sistema biliar. En: Courtney M. Townsend, Jr., MD; R. Daniel Beau-champ, MD; B. Mark Evers, MD; Kenneth L. Mattox, MD. Sabiston tratado de cantidad enfermedad de Crohn4 . 2. Quistes de la vía biliar La dilatación quística de la vía biliar es una anomalía poco frecuente, donde la mayoría se diagnostica en la primera década de la vida. Los pacientes con enfermedad de Caroli (dilataciones quísticas delavíabiliarintrahepática)tienenuna incidencia de colangiocarcinoma de un 7%, mientras que los pacientes con quistes coledocianos tienen una incidencia de entre 2,5 y 2,8%2. Se piensa que estas dilataciones ocurren tras una unión anómala de los ductos biliar y pancreático, tras lo cual habría un reflujo de secreción pancreática exocrina hacia el colédoco que predispondría la transformación maligna de este. Por otra parte, la presencia de los quistes favorecería la ectasia biliar en el mismo y la formación de litiasis en su interior, con consecuente inflamación crónica y sobreinfecciónbacteriana,factores quetambiénfavorecerían la transformación maligna del epitelio. 3. Infección parasitaria La infestación crónica con parásitos endémicos del sudeste asiático(Clonorquissinesis,Ophisthorchisviverrini)seasocia principalmente con el desarrollo de colangiocarcinoma de la víabiliarintrahepática.Lainfecciónsueleocurrirtraslaingesta de pescado crudo o mal cocinado, después de lo cual la forma adulta del parásito obstruye el flujo biliar y causa una serie de alteraciones entre las que se encuentran la hiperplasia adenomatosa, la fibrosis periductal, la displasia epitelial y el colangiocarcinoma. 4. Litiasis intrahepática (“hepatolitiasis” o “colangitis piógena recurrente”) La presencia de cálculos exclusivamente en la vía biliar intrahepáticaes extremadamenteraraenoccidente,mientras que en ciertas áreas del sudeste asiático se trata de una enfermedad endémica, asociándose a colangiocarcinoma en el 5% de los casos2. Su etiología no es bien conocida, pero se cree que podría estar relacionado con la presencia de lesiones congénitas de la vía biliar, con la dieta o con la inflamación crónica producida por bacterias o parásitos. 5. Enfermedad hepática crónica a) Enfermedad vírica crónica: se ha visto que existe una gran asociación entre el virus de la hepatitis C (VHC) y el colangiocarcinoma, sobre todo en aquellos pacientes infectados que han desarrollado cirrosis, aunque el riesgo sigue siendo mucho menor que para el carcinoma hepatocelular. Por otro lado, también se ha sugerido una relación con el virus de la hepatitis B (VHB), aunque los datos no son tan fuertes como para el VHC. cirugía. 19.a ed. España. Else-vier; 2013. p. 1508. 3 Bergquist A, Ekbom A, Olsson R, et al. Hepatic and extrahepatic malignancies in primary sclerosing cholangi-tis.J Hepatol 2002; 36:321. 4 Tung BY, Brentnall T, Kowdley KV, et al. Diagnosis and prevalence of ulcerative colitis in patients with prima-ry sclerosing cholangitis (abstract). Hepatology 1996; 24:169A.
  • 286. 287 Quiste decolédoco b) Cirrosis: la cirrosis de etiología no viral también se ha relacionado con un mayor riesgo de desarrollar un colangiocarcinoma de vía biliar intrahepático. 6. Desórdenes genéticos a) Síndrome de Lynch (cáncer colorrectal hereditario no asociado a pólipos): esta es una enfermedad autosómica dominante que se asocia con un gran riesgo de cáncer colorrec-tal y de otros tipos de cáncer extracolónicos, dentro de las cuales se encuentran las neoplasiashepatobiliares. b) Papilomatosis biliar: lesión rara de la vía biliar y debiese ser considerada una condición premaligna en vista de que en alrededor de un 83% de estas lesiones ocurre una trasnformación maligna5 , razón por la cual se debe llevar a cabo una resección de ellas en el momento que sesospechan. 7. Tóxicos de origen industrial como nitrosaminas y asbesto. 8. Exposición al agente de contraste radiológico Thorotrast Este medio de contraste fue retirado en la década de los ’60 cuando se evidenció que tenía propiedades cancerígenas, las cuales solían desarrollarse entre 30 y 35 años des-pués de llevada a cabo la exposición. 5 Taguchi J, Yasunaga M, Kojiro M, et al. Intrahepatic and extrahepatic biliary papillomatosis. Arch Pathol Lab Med 1993; 117:944. Diagnóstico Clínica La presentación del colangiocarcinoma dependerá de su localización, sin embargo, los síntomas más frecuentes derivan de la obstrucción biliar donde el signo más importante es la ictericia, estando presente en más del 90% de los casos1 y esta se caracteriza por ser silenciosa (asintomática). En el caso de los colangiocarcinomas hiliares y extrahepáticos, la ictericia suele aparecer en etapas más tempranas, lo que favorece su detección en etapas iniciales. Otros síntomas y signos que se pueden encontrar en estos pacientes son coluria, prurito, dolor abdominal inespecífico principalmente en la zona del epigastrio y cuadrante superior derecho, baja de peso y anorexia. La aparición de colangitis por sobreinfección de la bilis se evidencia en solo un tercio de los pacientes. El signo de Courvoisier Terrier se ve en las personas con colangiocarcinoma distal y se caracteriza por la presencia de ictericia y una vesícula distendida indolora a la palpación. A pesar de tener conocimiento de cuáles son los síntomas, estossoninespecíficosdecualquierobstruccióndelavíabiliar, por lo que es importante apoyarse con pruebas de laboratorio e imágenes con el fin de detectar el tumor en etapas precoces y obtener así un mejor pronóstico.
  • 288. 289 Laboratorio Las pruebas de función hepática muestran un patrón colestásico, con aumento de la bili-rrubina total (BT), de la fosfatasa alcalina (FA), de la gamma-glutamil-transpeptidasa (GGT)yenmenorcantidaddelastransaminasas.Enloscasos más avanzados puede existir disminución del hematocrito, alteraciones en el tiempo de protrombina y en el nivel de albúmina. No existe ningún marcador tumoral lo suficientemente sensible ni específico para la detección del colangiocarcinoma, ya que todos pueden elevarse en otras entidades malignas o benignas. La mayor utilidad de estos estaría en la evaluación de posibles recidivas. El CA 19-9 tiene una sensibilidad que va del 59 al 90% y una especificidad que varía entre el 54 y 98%, y está elevado en el 85% de los colangiocarcinomas. Asimismo, el marcador CEA está elevado solo en el 30%, y en niveles >5.2 ng/mL tiene una sensibilidad del 68% y una especificidad del 82%1 6 7 8 . No obstante, se ha observado que el uso combinado del CA 19-9conelCEAesútileneldiagnóstico decolangiocarcinoma en personas con CEP, donde valores sobre 400 en la siguiente fórmula han demostrado tener una alta sensibilidad y especificidad: CA 19-9 + [CEA x 40] Imagenología La primera aproximación imagenológica suele ser la ecografía, permitiendo ver si existe dilatación de la vía biliar. Se puede complementar con una ecodoppler para evaluar los flujos sanguíneos y visualizar si existe compromiso portal. Sin embargo, no suele ser muy relevante al momento de tomar decisiones frente a un paciente con colangiocarcinoma. La tomografía computarizada (TC), en cambio, es más eficaz en la determinación del tu-mor, ya que muestra la relación de este con estructuras vasculares y nos ayuda a evidenciar la presencia de metástasis. Con esta información es posible evaluar la resecabilidad del tumor. La colangiorresonancia es hoy en día la técnica no invasiva de elección para el estudio de la vía biliar, ya que proporciona información tanto de la anatomía biliar como de la extensión locorregional.Además,tienelaventajadequenorequiereuna 6 Kim HJ, Kim MH, Myung SJ, et al. A new strategy for the application of CA19-9 in the differentiation of pan-creaticobiliary cancer: analysis using a receiver operating characteristic curve. Am J Gastroenterol 1999; 94:1941. 7 Shen WF, Zhong W, Xu F, et al. Clinicopathological and prognostic analysis of 429 patients with intrahepatic cholangiocarcinoma. World J Gastroenterol 2009; 15:5976. 8 Malaguarnera G, Paladina I, Giordano M, et al. Serum markers of intrahepatic cholangiocarcinoma. Dis Markers 2013; 34:219 punción de la vía biliar ni la introducción de un endoscopio, con lo que disminuye el riesgo de una sepsis por colangitis, colecistitis, hemobilia y pancreatitis. Por otra parte, la vía biliar se puede estudiar por técnicas invasivas como la colangiografía transparietohepática (CTPH), donde se aborda la vía biliar mediante una punción hepática percutánea bajo control ecográfico y la endoscópica (CPRE), en la que se introduce un endoscopio de visión lateral, las cualestienenlaventajaquepermitenlaobtencióndemuestras para estudio. Por lo general, estos métodos se utilizan como instrumentos terapéuticos para desobstruir la vía biliar más que como diagnósticos. En Chile hay una gran incidencia de cáncer de vesícula y hay casos que este se encuentra avanzado y puede invadir la vía biliar, manifestándose como un tumor de Klatskin. Es-to es lo que se conoce como un “pseudo-Klatskin” o “Klatskin chileno”, por lo que es importante realizar un buen estudio imagenológico y siempre tenerlo en cuenta dentro de los diagnósticos diferenciales.
  • 289. 290 Estadio y Pronóstico Los tumores de la vía biliar se clasifican en estadios de acuerdo con la clasificación TNM de la Sociedad Americana Contra el Cáncer (AJCC). Con el objetivo de poder predecir en forma más exacta la resecabilidad y el pronóstico de cada tumor, se han creado tres subdivisiones de etapificación sobre la base de su ubicación en la vía biliar. Colangiocarcinoma Intrahepático Tumor Primario (T) Metástasis (M) Tx Tumorprimario no puede ser caracterizado. M0 Sin evidencia de metastasis. T0 Sin evidencia de tumor primario. M1 Con metástasis a distancia. Tis Tumor in situ (carcinoma intraductal). Estadio T1 Tumor solitario sin invasión vascular. Etapa 0 Tis N0 MO T2a Tumor solitario con invasión vascular. Etapa I T1 N0 MO T2b Tumores múltiples sin/con invasión vascular. Etapa II T2 N0 MO T3 Tumor perfora peritoneo visceral. Etapa III T3 N0 MO T4 Tumor con invasión periductal. Etapa IVa T4 CualquierT N0 N1 M0 M0 Linfonodos regionales (N) Etapa IVb CualquierT CualquierN M1 Nx Linfonodos no pueden ser estudiados. N0 Sin metástasis a linfonodos regionales. N1 Metástasis a linfonodos.
  • 290. 291 Colangiocarcinoma perihiliar Tumor Primario (T) Metástasis (M) Tx Tumorprimario no puede ser caracterizado. M0 Sin evidencia de metastasis. T0 Sin evidencia de tumor primario. M1 Con metástasis a distancia. Tis Tumor in situ. Estadio T1 Tumor confinado al conducto biliar con extensión a la capa muscular o tejido fibroso. Etapa 0 Tis N0 MO T2a Tumor invade pared del conducto biliar con extensión a tejido adiposo. Etapa I T1 N0 MO T2b Tumorinvade parénquima hepático adyacente Etapa II T2a-b N0 MO T3 Tumorinvade rama unilateral de vena porta o arteria hepática. Etapa IIIa T3 N0 MO T4 Tumor invade vena porta principal o sus ramas bilateralmente o la arteria hepática común o ramas biliares de segundo orden bilateral o rama de segundo orden unilateral con vena porta contralateral o arteria hepática Etapa IIIb T1-T3 N1 MO Linfonodos regionales (N) Etapa IVa T4 N0-N1 M0 Nx Linfonodos no pueden ser estudiados. Etapa IVb CualquierT CualquierT N2 Cualquier N M0 M1 N0 Sin metástasis a linfonodos. N1 Metástasis a linfonodos a lo largo del conducto cístico, hepático común, arteria hepática y/o vena porta. N2 Metástasis a linfonodos periaórticos, peri cava, mesentéricos superiores y/o tronco celiaco.
  • 291. 292 Colangiocarcinoma distal Tumor Primario (T) Metástasis (M) Tx Tumorprimario no puede ser caracterizado. M0 Sin evidencia de metastasis. T0 Sin evidencia de tumor primario. M1 Con metástasis a distancia. Tis Tumor in situ. Estadio T1 Tumor confinado al conducto biliar. Etapa 0 Tis N0 MO T2 Tumor atraviesa conducto biliar. Etapa Ia T1 N0 MO T3 Tumor invade vesícula, páncreas, duodeno u otro órgano adyacente sin involucrar el tronco celiaco o arteria mesentérica superior. Etapa Ib T2 N0 MO T4 Tumor invade tronco celiaco o arteria mesentérica superior. Etapa IIa T3 N0 MO Linfonodos regionales (N) Etapa IIb T1 T2 T3 N1 N1 N1 M0 M0 M0 Nx Linfonodos no pueden ser estudiados. Etapa III T4 Cualquier N M0 N0 Sin metástasis a linfonodos. Etapa IV Cualquier T Cualquier N M1 N1 Metástasis a linfonodos. En la medida en que aumenta el estadio del cáncer, el pronóstico empeora precipitadamente. Los dos factores que finalmente tienen mayor influencia sobre el pronóstico, luego de la resección del tumor, son la resección completa (RO) hasta obtener márgenes negativos y la ausencia de metástasis en ganglios linfáticos. La irresecabilidad quirúrgica es más frecuente en los tumores de Klatskin que en los tumores más distales, lo que empeora aún más el pronóstico.
  • 292. 293 Tratamiento El único tratamiento potencialmente curativo es la resección quirúrgica completa del tumor con márgenes negativos (R0), sin embargo, esto solo puede ser aplicado en la minoría de los pacientes, ya que por lo general el tumor es irresecable al momento del diagnóstico. Para evaluar quiénes pueden ser sometidos a cirugía existen cuatrocriteriosprequirúrgicosdeirresecabilidad:laafectación de los ganglios retroperitoneales o paracelíacos, la invasión de la arteria hepática principal o de la vena porta (a no ser que esta pueda ser resecada y reconstituida), la afectación de órganos vecinos y la diseminación a distancia de la enfermedad. Encasodequeexistalasospechaclínicadecolangiocarcinoma en una persona que no tenga contraindicaciones para la resección quirúrgica, es aconsejable proceder con una exploración. En estos casos, entre el 7 y el 13% de los pacientes sometidos a resección evidenciarán una enfermedad benigna, mientras que, por otro lado, más del 50% de los pacientessometidosalaexploraciónvanamostrarelementos 3 que impidan la resección de la neoplasia maligna . Colangiocarcinoma proximal El tratamiento de elección del colangiocarcinoma intrahepático es la resección hepática junto con la resección de ganglios regionales. Con estatécnica seha demostrado una sobrevida del 79% a 5 años en aquellas personas sin compromiso ganglionar y con 1 cm de margen de sección libre de cáncer1. En los colangiocarcinomas hiliares, la cirugía debe hacerse en función de la extensión del tumor con el fin de obtener un margen de resección libre de enfermedad: - Tipos I y II: resección de la vía biliar extrahepática, colecistectomía, linfadenectomía y anastomosis hepáticoyeyunal en Y de Roux. - Tipo III: resección de la vía biliar extrahepática, colecistectomía, linfadenectomía, lobectomía hepática derecha o izquierda y anastomosis hepáticoyeyunal en Y deRoux. - Tipo IV: resección de la vía biliar, vesícula biliar, linfadenectomía, lobectomía he-pática extendida y anastomosis hepáticoyeyunal en Y de Roux. En aquellos pacientes que no pueden ser sometidos a cirugía se puede instalar un stent biliar (por vía endoscópica como primera opción o por vía percutánea como alternativa) en el conducto hepático izquierdo y otro stent biliar en el hepático derecho, con el cual puede no bajar mucho la ictericia, pero si disminuye el prurito. Colangiocarcinoma distal El colangiocarcinoma distal se trata mediante una pancreatoduodenectomía, también conocida como procedimiento de Whipple, la cual debería realizarse en un centrodereferenciaparaminimizarlamorbilidadperioperatoria. Los tumores distales son los que tienen la mayor tasa de resectabilidad,mientrasqueloshiliaressonlosquepresentan menor posibilidad de llegar a cirugía. Otras terapias En vista de que el pronóstico de estos pacientes suele ser de tan solo meses, cobra importancia el manejo de los síntomas para la mejoría de la calidad de vida. El principal problema en estas personas es la obstrucción biliar y para evitar las complicaciones de esta se puede recurrir a la descompresiónbiliarendoscópicaconusodeprótesisbiliares (stents) o descompresión quirúrgica mediante una derivación biliodigestiva a través de la cual se deriva el flujo biliar. En este ámbito, no todos los pacientes que se someten a cirugía obtienen márgenes libres de tumor y en estos casos la recurrencia local posoperatoria es bastante frecuente, razón por la que algunos centros utilizan radio o quimioterapia adyuvante, sin embargo, estas no han mostrado una utilidad significativa en mejorar la expectativa y la calidad de vida. Trasplante hepático El trasplante hepático ha surgido como otra opción para tratar a los pacientes con colangiocarcinoma intrahepático e hiliar que son considerados irresecables, pero no disemina-dos, aunque aún no hay estudios suficientes que demuestren su eficacia.
  • 293. 294 Bibliografía 1.- Burgos L. Colangiocarcinoma. Actualización, diagnóstico y terapia. Rev Med Chile. 2008; 136: 240-8. 2.- Manzanera M, Jiménez C, Moreno E, et al. Tratamiento del colangiocarcinoma hiliar. Cir Esp 2001; 69: 159-168. 3.- Patrick G., Jackson, Steven R.T. Evans. Sistema biliar. En: Courtney M. Townsend, Jr., MD; R. Daniel Beauchamp, MD; B. Mark Evers, MD; Kenneth L. Mattox, MD. Sabiston tratado de cirugía. 19 ed. España. Elsevier; 2013. p. 1508. 4.- Bergquist A, Ekbom A, Olsson R, et al. Hepatic and extrahepatic malignancies in primary sclerosing cholangitis. J Hepatol 2002; 36:321. 5.- Tung BY, Brentnall T, Kowdley KV, et al. Diagnosis and prevalence of ulcerative colitis in patients with primary sclerosing cholan- gitis (abstract). Hepatology 1996; 24:169A. 6.- Taguchi J, Yasunaga M, Kojiro M, et al. Intrahepatic and extrahepatic biliary papillomatosis. Arch Pathol Lab Med 1993; 117:944. 7.- Kim HJ, Kim MH, Myung SJ, et al. A new strategy for the application of CA19-9 in the differentiation of pancreaticobiliary cancer: analysis using a receiver operating characteristic curve. Am J Gastroenterol 1999; 94:1941. 8.- Shen WF, Zhong W, Xu F, et al. Clinicopathological and prognostic analysis of 429 patients with intrahepatic cholangiocarcinoma. World J Gastroenterol 2009; 15:5976. 9.- Malaguarnera G, Paladina I, Giordano M, et al. Serum markers of intrahepatic cholangiocarcinoma. Dis Markers 2013; 34:219.
  • 294. 295 6.5 Nódulo Hepático Villalobos B, Humeres R. Generalidades Definición Denominaremosnódulohepáticoaaquellalesiónencualquier porción del parénquima hepático, evidenciada generalmente de manera incidental en un estudio imaginológicosolicitado por otra causa. Son en su mayoría asintomáticos yel principal desafío en su enfrentamiento es determinar cuál de ellos pudiera ser maligno. Epidemiología Los nódulos hepáticos son en su mayoría benignos y de prevalencia mayor en mujeres. Los nódulos malignos son más frecuentes en hombres. En general, la prevalencia se encuentra en aumento. Esto dado principalmente por la mejoría en técnicas de imaginología, que permiten evidenciar lesiones con mejor resolución. Actualmente, se estima que el 20%1 de la población general tiene un nódulo hepático. Clasificación Existen muchas formas de clasificar los nódulos hepáticos: benignos o malignos, primarios o secundarios, sólidos o quísticos, únicos o múltiples, según su origen histológico, etc. (TABLA 1) TABLA 1 Clasificación de las principales lesiones en hígado. BENIGNO MALIGNO SÓLIDO Hemangioma Hiperplasia nodular focal Adenoma hepático Hiperplasia nodular regenerativa Metástasis Hepatocarcinoma Colangiocarcinoma Carcinoma fibrolamelar QUÍSTICO Quiste simple Cistoadenoma hepático Quiste hidatídico Enfermedad deCaroli Cistoadenocarcinoma 1 Crovari F, Manzor M. Manual de patología quirúrgica. 1.a ed. Santiago, Chile: Ediciones UC, Facultad de Medicina Pontifi-cia Universidad Católica de Chile; 2014.
  • 295. 296 Algunos puntos clave: “La lesión hepática más frecuente es el quiste simple”. “Eltumorbenignomásfrecuenteeselhemangiomahepático”. “El tumor maligno más frecuente en el hígado son las metástasis”. “El tumor maligno primario más frecuente es el hepatocarcinoma”. Diagnóstico Clínica Como ya se mencionó, la mayoría de los nódulos hepáticos son asintomáticos. Sin embargo, pueden aparecer síntomas y signos dependiendo del tipo de lesión y de alguna eventual complicación de la misma. En caso de existir síntomas, el más frecuente es el dolor. Se puede presentar en el con-texto de efecto de masa en lesiones muy grandes, por distensión de la cápsula hepática en lesiones superficiales o por complicación intralesional (sangrado, ruptura o infarto de la lesión). Considerando el efecto de masa y eventual malignidad puedepresentarseademás:ictericia,coluria,acolia,náuseas, baja de peso, fatiga, signos y síntomas de daño hepático crónico, anemia crónica, etc. Si se presenta ruptura hacia la cavidad peritoneal, pueden existir, incluso signos de irritación peritoneal. Por todo lo anterior, es indispensable una historia clínica completa; una anamnesis detallada y un examen físico acucioso. Laboratorio El laboratorio de un paciente con un nódulo hepático puede ser normal, presentar mínimas alteraciones o demostrar francamente un paciente con signos de daño hepático, desnutrido o anémico crónico a causa de una lesión maligna. El estudio de laboratorio debe incluir hemograma, perfil bioquímico, función renal y pruebas de coagulación. Según los hallazgos imaginológicos y frente a la sospecha de una neoplasia maligna, nunca se debe olvidar solicitar marcadores tumorales (CA 19-9, AlfaFeto proteína y CEA) y estudio de virus hepatotropos. Imaginología Corresponde a la principal herramienta diagnóstica en el enfrentamiento de un pacienteconunnódulo hepático. Como veremos,existencaracterísticasimaginológicasquepermiten determinar en la mayoría de los casos a qué tipo de lesión nos estamos enfrentando. Por esto y por los riesgos inherentes al procedimiento, no se suele usar la biopsia por punción del nódulo hepático como herramienta diagnóstica, salvo en casos muy seleccionados. Para establecer el diagnóstico imaginológico del nódulo hepático, disponemos principalmente de 3 recursos: 1. Ecografía abdominal Es el primer examen de imagen por solicitar en unpaciente en que se sospecha un nódulo hepático. Es generalmente el examen donde se encuentra incidentalmente la lesión en pacientes en estudio por otra causa (por ejemplo, estudio de colelitiasis o dolor abdominal inespecífico). Es un examen de bajo costo, que no usa radiación y está ampliamente disponible. Permite diferenciar lesiones quísticas de sólidas y lograr caracterizarlas bien. Sin embargo, es operador dependiente y no permite determinar si lesiones sólidas son benignas o malignas. 2. Tomografía computada de abdomen y pelvis con contraste (trifásico) (TC A-P) Es el primer examen de imagen por solicitar cuando ya se tiene el diagnóstico de nódulo hepático hecho por ecografía y se necesita caracterizar la lesión. Es un examen de mayor costo que la ecografía, de menos disponibilidad (aunque cada vez está más disponible) y además usa radiación. Junto con permitir ver si la lesión es sólida o quística, tiene la importantísima ventaja de permitir diferenciar lesiones sólidas malignas de benignas, facilitando además caracterizar las diferentes lesiones benignas de acuerdo con su secuencia de captación del contraste en cada una de las fases. 3. Resonancia magnética de hígado (RM) Corresponde al mejor examen para caracterizar una lesión hepática. Permite diferenciar sólido de quístico, benigno de maligno y diferenciar los distintos tipos de lesiones. También usa contraste, logrando mejor resolución de imagen que con el TC A-P con contraste trifásico. No utiliza radiación, pero es de mucho mayor costo.
  • 296. 297 Diagnóstico Diferencial A continuación expondremos de manera breve las características, hallazgos imaginológicos y tratamiento de las lesiones más frecuentes de encontrar, tanto benignas como malignas: Lesiones benignas (TABLA 2) 1. Quísticas A. Quiste simple Corresponde a la lesión más frecuente encontrada en el parénquima hepático, con una prevalencia de 5%2 en pacientes adultos. Más frecuente en mujeres de 50-70 3 años, generalmente asintomáticos (porque la mayoría son pequeños). El diagnóstico se hace solo con la ecografía, encontrando una lesión hipoecogénica, de paredes delgadas y bien definidas (FIGURA 1) y no es necesario solicitar otro examen de imagen. Si se evidencia tabiques o componente sólidoquístico,sedebesospecharuncistoadenoma,teniendo laobligacióndeestudiarlocomotal.Elquistesimpleraramente se complica (ruptura, hemorragia, infección) y no malignizan. Elmanejoeslaobservación.Tienenindicaciónquirúrgicaen3 circunstancias: cuando son muysintomáticos (dolor); cuando secomplican: ruptura yhemorragia, absceso, efectode masa por gran tamaño; cuando se sospecha un cistoadenoma. B. Cistoadenoma hepático Neoplasia quística benigna de baja incidencia, sin embargo, es la más frecuente en el hígado. En general, asintomático, detamañoentre 10-204 cm ysinrelación conanticon-ceptivos orales. Su tendencia natural es a crecer en forma lenta, eventualmente un 15%5 evoluciona a neoplasia maligna (cistoadenocarcinoma). La ecografía evidencia una lesión quística hipoecogénica, multiloculada, con tabiques. Se debe caracterizar mejor con una TC o RM para la obtención de histología mediante punción. (Figura 2) Figura 1 Imagen ecográfica de un quiste simple hepático. 2 Cameron JL, Cameron AM. Current Surgical Therapy. 11th ed. Philadelphia, PA: Elsevier Saunders; 2013. 3 Shaked O, Reddy K. Aproach to a liver mass. Clinics in liver disease (2009) 13:193-210. 4 Towsend CM, Beauchamp RD, Evers BM, Mattox KL. Sabiston Textbook of Surgery, 19th ed. Philadelphia, PA Elsevier Saunders; 2012. 5 Di Bisceglie AM. Malignant neoplasms of the liver. In: Chiff’s Diseases of the Liver, 8th ed., Philadephia, PA: Lippincott- Raven; 1999.
  • 297. 298 El manejo es la resección quirúrgica, basándose en el 15% de malignización. Figura 2 A. Ecografía abdomen. Imagen ecográfica donde se observa lesión hipoecogénica, con múltiples tabiques, compatible con cistoadenoma (a). B.Resonancia de abdomen en T2. Imagen de RM de hígado, ponderada en T2, donde se evidencia lesión hiperintensa(b).
  • 298. 299 2. Sólidas A. Hemangioma Tumorbenignomásfrecuenteenelhígado.Correspondeauna malformación vascular hepática. Más frecuentes en mujeres, generalmente únicos, menores de 5 cm y asintomáticos. Los mayores de 5 cm se denominan hemangiomas gigantes6 . Hemangioma hepático 6 Towsend CM, Beauchamp RD, Evers BM, Mattox KL. Sabiston Textbook of Surgery, 19th ed. Philadelphia, PA Elsevier Saunders; 2012.
  • 299. 300 Los hemangiomas más grandes pueden presentar dolor, por efecto de masa y por trombosis intralesional. Está descrita además la coagulación intravascular diseminada a causa de un hemangioma de gran tamaño, llamada síndrome de Kassabach-Merrit. No malignizan, no suelen crecer ni tienen ruptura espontánea. La ecografía evidencia una lesión hipocogénica bien circunscrita. La TC presenta un patrón característico y único, captando contraste en fases tardías (“Realce de imagen en bola de algodón”), pasando de ser una imagen hipodensa a ser una imagen hiperdensa (captación centrípeta) (FIGURA 3). Norequiere estudiohistológico,dadoelaltoriesgoderuptura. TCdeabdomenconcontrastedondeseobservalaevolutividad en la captación de contraste en un hemangioma hepático en fase arterial (a), portal (b) y tardía (c). Elmanejodeloshemangiomaseslaobservaciónyseguimiento imagenológico.Puedentenerindicaciónquirúrgicasisonmuy sintomáticos, si presentan ruptura con hemoperitoneo o si se asocian a síndrome Kassabach Merrit. Figura 3 A .TAC abdomen y pelvis fase arterial. B. TAC abdomen y pelvis fase portal. C. TAC abdomen y pelvis tardía.
  • 300. 301 B. Hiperplasia nodular focal Segundo tumor benigno hepático más frecuente, luego del hemangioma. Su origen radica en una respuesta hiperplásica hepatocelular (contiene hepatocitos y canalículos biliares) debido a una anomalía arterial en el parénquima hepático que genera una hiperperfusión local. Es más prevalente en mujeres jóvenes (incluso más que el hemangioma) y es generalmente asintomático. Son generalmente únicos, menores de 5 cm7 ; no malignizan y raramente se complican (dolor, necrosis, sangrado). Su aparición se asocia al uso de anticonceptivos orales combinados (AOC). A. Ecografía abdominal. Imagen ecográfica de una HNF donde se observa una imagen bien delimitada, hipoecogénica. Hiperplasia nodularfocal A la ecografía se evidencia una lesión hipo o isoecogénica, bien delimitada. Su caracterización es mucho mejor con la TC,evidenciandounalesiónhipodensainicialmentequecapta contraste en fase arterial de manera homogénea (FIGURA 4), pero que “se lava” rápidamente, quedando isodensa en fases tardías. Destaca la presencia de una cicatriz central estrellada, la que en un 15% puede no estar8 . B. TAC abdomen y pelvis. TC de abdomen donde se evidencia lesión hiperdensa con cap- tación homogénea de contraste en fase arterial. Nótese la cicatriz central hipodensa en esta fase. Elmanejoeslaobservación.Puedetenerindicaciónquirúrgica si es sintomático, si presentan complicaciones o frente a la duda diagnóstica y sospecha de malignidad. 7 Towsend CM, Beauchamp RD, Evers BM, Mattox KL. Sabiston Textbook of Surgery, 19th ed. Philadelphia, PA Elsevier Saunders; 2012. 8 Towsend CM, Beauchamp RD, Evers BM, Mattox KL. Sabiston Textbook of Surgery, 19th ed. Philadelphia, PA Elsevier Saunders; 2012.
  • 301. 302 C Adenoma hepático Tercer tumor benigno más frecuente en hígado. Son frecuentes en mujeres jóvenes entre 20-40 años9 y son generalmente asintomáticos. Sonlesiones sólidas,enformahabitual únicas (12-30%sonmúltiples10 ),muyvascularizadasydecrecimiento rápido.Suapariciónycrecimientotieneestrechadependencia hormonal; existe una clara asociación al uso de AOC. El adenoma hepático presenta 2 inconvenientes, principalmente relacionados con el tamaño de la lesión: presenta entre un 20-40% de sangrado espontáneo y, además, entre un 5-11% de todos los adenomas hepáticos evoluciona a una neoplasia maligna11 , principalmente si son mayores de 5 cm12 . Debido a esto, no se utiliza como herramienta diagnóstica la biopsia para obtención de histología. A la ecografía se presentan como lesiones hiperecogénicas, bien delimitada.Ala TC se evidencia una lesión sólida, hipo o isodensa, con cápsula, bien vascularizada, que presenta un refuerzohomogéneoenfasearterial(FIGURA5)y,finalmente, se ve isodensa en fases tardías. Puede ser difícil diferenciarla de hepatocarcinomas. El manejo de estas lesiones puede ser la observación y control radiológico. Tienen indicación quirúrgica basándose en el riesgo de malignización a hepatocarcinoma(principal- mente en adenomas de más de 5 cm) y cuando presentan complicaciones (principalmente sangrado). Algunos autores plantean como indicación para resección quirúrgica las lesiones de cualquier tamaño presentes en hombres, dado que el riesgo de transformación a hepatocarcinoma podría alcanzar el 47%13 . 9 Towsend CM, Beauchamp RD, Evers BM, Mattox KL. Sabiston Textbook of Surgery, 19th ed. Philadelphia, PA Elsevier Saunders; 2012. 10 Towsend CM, Beauchamp RD, Evers BM, Mattox KL. Sabiston Textbook of Surgery, 19th ed. Philadelphia, PA Elsevier Saunders; 2012. 11 Crovari F, Manzor M. Manual de patología quirúrgica. 1.a ed. Santiago, Chile: Ediciones UC, Facultad de Medicina Ponti-ficia Universidad Católica de Chile; 2014. 12 Cameron JL, Cameron AM. Current Surgical Therapy. 11th ed. Philadelphia, PA: Elsevier Saunders; 2013. 13 Cameron JL, Cameron AM. Current Surgical Therapy. 11th ed. Philadelphia, PA: Elsevier Saunders; 2013. A. RNM abdomen con contraste en T1 fase arterial. RNM abdomen con contraste en T1 fase arterial se observa imagen hiperintensa en el parénquima hepático compatible con adenoma. B. RNM abdomen con contraste en T1 fase portal. Misma lesión en fase portal.
  • 302. 303 C. RNM abdomen en T2. RNM de abdomen en T2 .
  • 303. 304 Tabla 214 Principales características de lesiones benignas hepáticas más frecuentes. Hemangioma HNF Adenoma Quiste simple Cistoadenoma Edad aparición 30-50 años 20-40 años Todas las edades 50-70 años 40-60 años Sexo (M:H) 2-6:1 8:1 M>>>H 1,5-6:1 4:1 Dependencia estrogénica Posiblemente Posiblemente hiperecogénica Anecogénica Anecogénica con tabiques TC Hiperdenso, captación centrípeta Hiperdensa con cicatriz central Hiperdensa Isodenso al agua Isodenso al agua RM T1: hipointenso T2:hiperintenso T1: isointenso, hipointenso leve / T2: isointenso, hiperintenso leve Variable T1: hipointenso T2:hiperintenso T1: hipointenso T2: hiperintenso Lesiones malignas 1. Metástasis Las metástasis son la lesión maligna más frecuente de encontrar como nódulo hepático (50% aprox.)15 .Generalmente son múltiples. El origen del tumor primario más frecuente es el colon, siendo característicamente hipointensas al TC A-P con contraste. Otros sitios primarios incluyen el recto, mama y riñón. El tratamiento de las metástasis hepáticas es en general la resección, siempre y cuando exista una reserva funcional y anatómica del hígado que permita la cirugía resectiva. Actualmente, en el caso de las metástasis de colon, la tendencia es resecar las metástasis hepáticas primero y luego controlar el tumor primario en el colon mismo. Esto permitiría mejor pronóstico en pacientes con cáncer de colon 14 Adaptada de Shaked O, Reddy K. Aproach to a liver mass. Clinics in liver disease (2009) 13:193-210. 15 Crovari F, Manzor M. Manual de patología quirúrgica. 1.a ed. Santiago, Chile: Ediciones UC, Facultad de Medicina Ponti-ficia Universidad Católica de Chile; 2014. metastásico, llegando, incluso hasta el 40% de sobrevida a 5 años. 2. Lesiones primarias malignas Hepatocarcinoma y colangiocarcinoma intrahepático. Conclusión Elenfrentamientodeunnódulohepáticoesunatareadifícil.Se debe tener claro conocimiento del contexto clínico en el cual se presentan cada una de las lesiones, tanto benignas como malignas, a modo de lograr una pesquisa eficaz de aquellos pacientes con lesiones malignas potencialmente tratables, permitiendo el mejor manejo de las lesiones benignas, con menor morbilidad y complicaciones asociadas. Para esto, el médico general deberá derivar criteriosamente aun equipo de cirugía hepatobiliar lospacientes pesquisados con lesiones, tanto benignas como malignas, para permitir un seguimiento adecuado o manejo del paciente y su lesión por un equipo competente.
  • 305. 306 Bibliografía 1. Shaked O, Reddy K. Aproach to a liver mass. Clinics in liver disease (2009) 13:193-210. 2. Towsend CM, Beauchamp RD, Evers BM, Mattox KL. Sabiston Textbook of Surgery, 19th ed. Philadelphia, PA Elsevier Saunders; 2012. 3. Cameron JL, Cameron AM. Current Surgical Therapy. 11th ed. Philadelphia, PA: Elsevier Saunders; 2013. 4. Di Bisceglie AM. Malignant neoplasms of the liver. In: Chiff’s Diseases of the Liver, 8th ed., Philadephia, PA: Lippincott-Raven; 1999.
  • 306. 307 6.6 CarcinomaHepatocelular Calcagno M, Diaz M, Humeres R. Introducción El Carcinoma Hepatocelular (CHC) ó Hepatocarcinoma es el tumor maligno primario del hígado más frecuente y por lo general se presenta en un hígado con daño hepático crónico (DHC) ó cirrótico. Lo más frecuente es que se diagnostique tardíamente, teniendo una mediana de sobrevida entre 6 a 20 meses1 . A pesar de que la cirugía es el único tratamiento curativo, existen otras opciones para el manejo que se describirán en este capítulo. Lamentablemente la mayoría de los pacientes no son candidatos a cirugía y las opciones terapéuticas se determinarán finalmente en relación a la extensión de la enfermedad y severidad de la insuficiencia hepática subyacente. Epidemiología Dentrodelostumoreshepáticosmalignos,losmásfrecuentes son las metástasis (50%, principalmente por cáncer colorectal), el colangiocarcinoma intrahepático y el CHC. Éste último es la neoplasia maligna hepática primaria más frecuente (más del 90%), al igual que el tumor intraabdominal más diagnosticado. Es el sexto cáncer más prevalente a nivel mundial y corresponde a la tercera causa de mortalidad por cáncer2 . En el 2008 se diagnosticaron más de 700.000 CHC, con una incidencia de 16 casos por 100.000 habitantes. Este tumor es la principal causa de muerte en pacientes con cirrosis3 . Esta alta incidencia se explica por su asociación al DHC, hepatitis B y C, esteatohepatitis no alcohólica y el consumo de alcohol. El CHC es más frecuente en hombres que en mujeres y esta diferencia es más notoria en países de alta incidencia donde los hombres tienen de un 2.1 a un 5.7 más probabilidad de tener este cáncer4 . Factores de Riesgo El principal factor de riesgo para el CHC es la cirrosis hepática cualquiera sea su origen; un tercio de los pacientes cirróticos desarrollará este tumor. Otros factores de riesgo para el CHC son la infección crónica por virus hepatitis B (VHB), infeccióncrónicaporvirushepatitisC(VHC),hemocromatosis, esteatohepatitis no alcohólica, sexo masculino y edad avanzada. Globalmente la infección crónica por VHB causa más del 50% de los CHC y se ha visto que la carga viral y duración de la infecciónaumentansuincidencia. Algunosestudiosmuestran que el VHB puede ser causa de CHC incluso en ausencia de cirrosis. Por esta razón en presencia de VHB y VHC se recomienda hacer screening. En Norte América, Europa y Japón, el VHC y el abuso de alcohol son los factores de riesgo más importantes. El riesgo anual de presentar CHC en pacientes con DHC es 1-8% (2% en aquellos infectados por VHB y 3-8% por VHC)5 . La diabetes es un factor de riesgo independiente para CHC y las tasas de mortalidad por cáncer son cinco veces mayores en hombres con índice de masa corporal (IMC) mayor a40. El tabaco aumenta el riesgo y el café lo disminuiría. Finalmente, pacientes que presentan coinfección de hepatitis (VHC ó VHB) con VIH presentan mayor riesgo de desarrollar CHC y progresión más rápida a cirrosis. 1 A new prognostic system for hepatocellular carcinoma: a retrospective study of 435 patients: the Cancer of the Liver Italian Program (CLIP) investigators. Hepatology 1998; 28:751 2 Felay J, Shin HR, Bray F, Forman D, Mathers C, Parkin DM. Estimates worldwide burden of cancer in 2008: GLOBOCAN 2008. Int J Cancer 2010; 127:2893-917 3 Alazawi W, Cunningham M, Dearden J, Foster GR. Systematic review: outcome of compensated cirrhosis due to chronic hepatitis C infection. Aliment Pharmacol Ther 2010; 32: 344-55. 4 Davila JA, Morgan RO, Shaib Y, et al. Hepatitis C infection and the increasing incidence of hepatocellular carcinoma: a population-based study. Gastroenterology 2004; 127:1372. 5 Sherman M. Hepatocellular carcinoma:epidemiology, surveillance, and diagnosis. Semin Liver Dis 2010; 30:3-16 El-Serag HB, Davila JA, Petersen NJ, McGlynn KA. The conti- nuing increase in the incidence of hepatocellular carcinoma in the United States: an update. Ann Intern Med 2003; 139:817.
  • 309. 310 Clínica Imagenología El CHC no posee clínica patognomónica, sin embargo es importante sospecharlo en pacientes con DHC o cirrosis hepática que presenten una descompensación o trombosis venosa portal. Si un paciente con DHC compensado desarrolla ascitis, encefalopatía hepática,ictericia,osangrado variceal,sedebe descartar la presencia de CHC. Éstos síntomas se relacionan con la extensión del tumor a la vena hepática o a la porta o bienalaproduccióndeshuntsarteriovenososintrahepáticos6 . Algunos pacientes pueden presentar dolor abdominal leve o moderado específicamente en el hemiabdomen superior, pérdida de peso no intencional, saciedad precoz o una masa palpableenelhemiabdomensuperior.Estossíntomasindican enfermedad avanzada7 . Presentaciones poco comunes son ictericia obstructiva por invasióndelárbolbiliar,diarrea,dolor óseoodisneaproducida pormetástasis,hemoperitoneoproducidoporroturadeltumor, fiebre, síndrome paraneoplásico, o absceso hepático. Al momento del diagnóstico, las metástasis están presentes en 5-15% de los casos8 y son más comunes en pacientes con estadios avanzados (> 5cm, invasión vascular)9 . Toda lesión hepática en paciente con DHC o cirrosis, se considera un CHC hasta que se demuestre lo contrario. En la TC por lo general se identifican lesiones multifocales, con realce en la fase arterial ya que son hipervascularizados y lavado en la fase venosa. También es posible encontrar trombosis de la porta por invasión tumoral. Laboratorio Los antecedentes clínicos juegan el rol más importante en el proceso diagnóstico, sin embargo en cuanto al estudio de laboratorio existe la alfa feto proteína (AFP) que es un marcador tumoral que se eleva habitualmente en la presencia de CHC. Al igual que otros marcadores tumorales, ésta tiene limitada sensibilidad y especificidad puesto que también se eleva en cáncer gástrico, tumores gonadales, embarazo y DHC en ausencia de CHC. Vale destacar que que no todos los CHC son productores de AFP, en especial los tumores pequeños y la variedad fibrolamelar, por lo que siempre se debe contar con estudio imagenológico. 6 Sugano S, Miyoshi K, Suzuki T, et al. Intrahepatic arteriovenous shunting due to hepatocellular carcinoma and cirrhosis, and its change by transcatheter arterial embolization. Am J Gastroenterol 1994; 89:184. 7 Felay J, Shin HR, Bray F, Forman D, Mathers C, Parkin DM. Estimates worldwide burden of cancer in 2008: GLOBOCAN 2008. Int J Cancer 2010; 127:2893-917 8 Uka K, Aikata H, Takaki S, et al. Clinical features and prognosis of patients with extrahepatic metastases from hepatocellular carcinoma. World J Gastroenterol 2007; 13:414. 9 Yuki K, Hirohashi S, Sakamoto M, et al. Growth and spread of hepatocellular carcinoma. A review of 240 consecutive autopsy cases. Cancer 1990; 66:2174.
  • 310. 311 A izquierda: TAC en fase arterial muestra lesión con hipercaptaciónde contraste. A derecha: muestra lavado en fase venenosa. Si se quiere mejorar la sensibilidad diagnóstica, la resonancia magnética permite delimitar el tejido cirrótio del tumor. Hay un incremento significativo de la señal post-gadolinio (fase arterial) con rápido lavado, persistiendo un halo fino hiperintenso con aspeco de pseudocápsula. En T1 la lesión se ve hipointensa y en T2 hiperintensa. A izquierda: RNM en fase arterial muestra lesión con hipercaptación de contraste. A derecha: Muestra lavado en fase portal. La ecografía abdominal tendría un rol en el tamizaje y vigilancia, en lesiones pequeñas menores a 1cm. Ésta se recomienda cada seis meses yno cada tres puesto que aumentaría la detección de nódulos pequeños sin tener un efecto en la sobrevida. En caso de tener el diagnóstico de CHC hecho, el PET TC ha demostrado ser el estudio con mayor sensibilidad para la detección de metástasis distantes al tumor primario.
  • 311. 312 Diagnóstico Considerando los antecedentes, clínica, laboratorio e imágenes,se recomienda entonces hacer screening de masa hepática en pacientes con cirrosis ó en portadores de VHB sin cirrosiscomosemuestraenelsiguientealgoritmodiagnóstico. Algoritmo adaptado y modificado de “Hepatocellular carcinoma” Lancet 2012; 379. Clásicamente el diagnóstico de certeza lo realiza la histología obtenida con biopsia, sin embargo actualmente se puede prescindir de ella en pacientes con DHC ó cirrosis con imágenescompatiblesconCHC,independientedelosniveles deAFP. VaEl valor predictivo positivo en este contexto clínico con un estudio contrastado característico es mayor al 95%10 . La biopsia hepática no es un procedimiento exento de riesgo por lo que se debe reservar para casos en que exista duda diagnóstica y se trate de lesiones mayores a 1 cm. 10 Colli A, Fraquelli M, Casazza G, et al. Accuracy of ultrasonography, spiral CT, magnetic resonance, and alpha- fetoprotein in diagnosing hepatocellular carcinoma: a systematic review. Am J Gastroenterol 2006; 101:513. < 1cm Masa en ECO de Control enpaciente con cirrosis o VHB > 1cm ( + ) ( - ) Tratar comoCHC Biopsia Aumento de Tamaño Estable en 18-24 meses Repetir ECO en 3 meses Conducta según tamaño Seguimiento Hipervascularización arterialy lavado en fase venenosa. TAC multicorte/ RNM
  • 312. 313 Etapificación En el caso de CHC, la clasificación TNM no es muy útil puesto que requiere de cirugía para determinar exáctamente el T y además no incluye la función hepática. Por ello se utiliza la “Barcelona Clinic Liver Cancer (BCLC) Strategy”, sistema que estratifica el CHC según “outcome” y simultáneamente lo vincula con el tratamiento indicado. Carcinoma hepatocelular Etapamuytemprana (0) Lesión única <2 cm Child A, Performance status (PS) 0 Etapa temprana (A) Lesión única ó 3 lesiones < 3 cm Child A-B PS 0 Etapa intermedia (B) Lesión multinodular grande Child A-B PS 0 Etapaavanzada(C) Compromiso portal y/o extrahepático Child A-B PS 1-2 Etapa terminal (D) Child C Performance status (PS) 3-4 Candidato atrasplante hepático Única 3 lesiones < 3 cm No Si Presión portal bilirrubina Normal Elevada Enfermedad asociada No Si Resección Quimioembolización Sorafenib Soporte Algoritmo adaptado y modificado de “Hepatocellular carcinoma” Lancet 2012; 379. Ablación Ablació n Trasplant e
  • 313. 314 Agroso modo, si el paciente presenta un hígado sano o Child A, lesión única, sin hipertensión portal (HTP) ysin metástasis, éste es candidato a resección. Si presenta múltiples lesiones ó Child B/C, se prefiere el trasplante hepático. Si la opción recomendada por el sistema BCLC (ablación, resección, trasplante, quimioembolización, sorafenib) no es posible por algunacondicióndelpaciente,sedebeconsiderarlasiguiente opción en la escala de opciones terapéuticas. Tratamiento EltratamientodelCHCdebeserporunequipomultidisciplinario. La resección, trasplante y ablación ofrecen una alta tasa de respuesta y potencial cura. Por otro lado, el único tratamiento no curativo que mejora la sobrevida es la quimioembolización arterial y el sorafenib; la embolización arterial sin quimio- radioterapia y la radioembolización tienen actividad antitumoral pero no mejoran la sobrevida. RESECCIÓN: TRASPLANTE: Hepatectomía La resección es la opción terapéutica de elección en pacientes sin cirrosis, ni hipertensión portal (definida como gradiente de presión de vena hepática mayor a 10mmHg ó várices ó esplenomegalia con < 100 000 plaquetas), ni hiperbilirrubinemia. Estos pacientes son los mejores candidatos y tienen una sobrevida a 5 años de 70% versus 50%11 . El tamaño no es un factortanclarodecorte,apesardeconsiderarseenlamayoría de algoritmos de manejo, sin embargo el riesgo de invasión vascular y diseminación aumentan con el mayor tamaño. De hecho, la invasión microvascular, la mala diferenciación histológica, la multifocalidad y la presencia de lesiones satélites son predictores de recurrencia (promedio de 70% a 5 años)12 . 11 Ishizawa T, Hasegawa K, Aoki T, et al. Neither multiple tumors nor portal hypertension are surgical contraindications for hepatocellular carcinoma. Gastroenterology 2008; 134: 1908-16. 12 Llovet JM, Schwartz M, Mazzaferro V. Resection and liver transplantation for hepatocellular carcinoma. Semin Liver Dis 2005; 25: 181-200. Eltrasplantehepáticocuraeltumorylacirrosisysuefectividad no se ve afectada por la disfunción hepática. Existen algunos criterios para definir los mejores candidatos a esta opción terapéutica. Los criterios de Milán incluyen a pacientes con un solo tumor/lesión menor o igual a 5cm ó tres tumores menores o iguales a 3cm, sin compromiso extrahepático ni vascular. LoscirteriosdeSanFranciscoconsideranunalesión de hasta 6.5cm ó tres lesiones de hasta 4.5cm la mayor, cuya sumatoria no debe ser mayor a 8cm. En casos de que la espera para el trasplante sea mayor a seis meses, se pueden considerar algunos métodos para retrasar la progresión como la ablación o la quimioembolización, sin embargo no se ha demostrado efectividad significativa. ABLACIÓN: Laablaciónserecomienda enetapas tempranas. Ésta induce la necrosis del tumor al inyectar químicos (etanol, ácido acético) ó al modificar la temperatura (por radiofreciencia, microhondas, láserocrioablación)yensumayoríaserealizavíapercutánea. De primera línea se utiliza la ablación por radiofrecuencia ya que al igual que con etanol se ha visto que en tumores menoresde2cm alcanzan hastael 100%de necrosis tumoral. A pesar de ello, en tumores de dicha dimensión la resección y ablación han demostrado resultados smiliares. Por lo tanto lo que se recomienda es que si el trasplante no es una opción, se debe utilizar la ablación. En caso de que ésta esté contraindicada o sea fallida, se recomienda entonces la resección. Por otro lado, si el trasplante es una opción terapéutica, la resección debe ser la primera línea ya que el análisis del tumor resecado permitirá distinguir entre CHC con bajo riesgo de recurrencia que no tendría necesidad de trasplante versus un CHC con invasión vascular o lesiones satélites que tendría indicación de transplante. No se recomienda la ablación en tumores mayores de 5cm
  • 314. 315 y hay que tener precaución con aquellos subcapsulares, cercanos a grandes vasos ó al árbol biliar ó intestino. TRATAMIENTO TUMORAL TRANSCATÉTER (QUIMIOEMBOLIZACIÓN): Consiste en la entrega intravascular selectiva de drogas a vasos arteriales nutricios del tumor. La técnica combina la inyección de quimioterápicos y la obstrucción del flujo. Los mejores candidatos a esta ocpión terapéutica son los pacientes Child A con CHC multifocal asintomáticos o CHC grandesnocandidatosaresección. Lapresenciadetrombosis portal es predictor de mala tolerancia y mal resultado a la quimiembolización. SORAFENIB: El Sorafenib es un inhibidor multiquinasa que tiene un efecto antiproliferativoyantiangiogénico. Eselúnicoquehaprobado beneficio en la sobrevida de pacientes con CHC. Se puede administrar vía oral y disminuiría la progresión en 5.5meses en comparación a 2.8meses con placebo13 . Pronóstico Al momento del diagnóstico, sólo un 10-20% de los tumores son resecables. La sobrevida depende si reciben tratamiento o no. En el caso de CHC no tratados, la sobrevida global a 5 años es del 5%. En cambio en aquellos con resección exitosa tienen sobrevida de 75-85% a 5 años14 . La recurrencia (antes de los dos años desde la resección; después de los dos años se debe considerar un nuevo primario) a 5 años es de un 70% en pacientes sometidos a resección, y 25% en pacientes con trasplante15 . 13 Llovet J, Ricci S, Mazzaferro V, et al. Sorafenib in advanced hepatocellular carcinoma. N Engl J Med 2008; 359: 378- 90 14 Llovet JM, Schwartz M, Mazzaferro V. Resection and liver transplantation for hepatocellular carcinoma. Semin Liver Dis 2005; 25: 181-200. 15 Forner A, Llovet JM, Bruix J. Hepatocellular carcinoma. Lancet 2012; 379:1245-55
  • 315. 316 Bibliografía 1. El-Serag HB, Davila JA, Petersen NJ, McGlynn KA. The continuing increase in the incidence of hepatocellular carcinoma in the United States: an update. Ann Intern Med 2003; 139:817. 2. Davila JA, Morgan RO, Shaib Y,et al. Hepatitis C infection and the increasing incidence of hepatocellular carcinoma: a population- based study. Gastroenterology 2004; 127:1372. 3. Wong R, Corley DA. Racial and ethnic variations in hepatocellular carcinoma incidence within the United States. Am J Med 2008; 121:525. 4. Beasley RP. Hepatitis B virus. The major etiology of hepatocellular carcinoma. Cancer 1988; 61:1942. 5. Huang YT, Jen CL, Yang HI, et al. Lifetime risk and sex difference of hepatocellular carcinoma among patients with chronic hepatitis B and C. J Clin Oncol 2011; 29:3643. 6. Benvegnù L, Fattovich G, Noventa F, et al. Concurrent hepatitis B and C virus infection and risk of hepatocellular carcinoma in cirrhosis. A prospective study. Cancer 1994; 74:2442. 7. Sugano S, Miyoshi K, Suzuki T, et al. Intrahepatic arteriovenous shunting due to hepatocellular carcinoma and cirrhosis, and its change by transcatheter arterial embolization. Am J Gastroenterol 1994; 89:184. 8. Kew MC, Dos Santos HA, Sherlock S. Diagnosis of primary cancer of the liver. Br Med J 1971; 4:408. 9. Luo JC, Hwang SJ, Wu JC, et al. Clinical characteristics and prognosis of hepatocellular carcinoma patients with paraneoplastic syndromes. Hepatogastroenterology 2002; 49:1315. 10. Trevisani F, D’Intino PE, Morselli-Labate AM, et al. Serum alpha-fetoprotein for diagnosis of hepatocellular carcinoma in patients with chronic liver disease: influence of HBsAg and anti-HCV status. J Hepatol 2001; 34:570. 11. Colli A, Fraquelli M, Casazza G, et al. Accuracy of ultrasonography, spiral CT, magnetic resonance, and alpha-fetoprotein in diagnosing hepatocellular carcinoma: a systematic review. Am J Gastroenterol 2006; 101:513. 12. Szklaruk J, Silverman PM, Charnsangavej C. Imaging in the diagnosis, staging, treatment, and surveillance of hepatocellular carcinoma. AJR Am J Roentgenol 2003; 180:441. 13. Kim YK, Lee KW, Cho SY, et al. Usefulness 18F-FDG positron emission tomography/computed tomography for detecting recurrence of hepatocellular carcinoma in posttransplant patients. Liver Transpl 2010; 16:767. 14. Vauthey JN, Dixon E, Abdalla EK, et al. Pretreatment assessment of hepatocellular carcinoma: expert consensus statement. HPB (Oxford) 2010; 12:289. 15. Sugano S, Miyoshi K, Suzuki T, et al. Intrahepatic arteriovenous shunting due to hepatocellular carcinoma and cirrhosis, and its change by transcatheter arterial embolization. Am J Gastroenterol 1994; 89:184. 16. Kew MC, Dos Santos HA, Sherlock S. Diagnosis of primary cancer of the liver. Br Med J 1971; 4:408. 17. Felay J, Shin HR, Bray F, Forman D, Mathers C, Parkin DM. Estimates worldwide burden of cancer in 2008: GLOBOCAN 2008. Int J Cancer 2010; 127:2893-917 18. Alazawi W, Cunningham M, Dearden J, Foster GR. Systematic review: outcome of compensated cirrhosis due to chronic hepatitis C infection. Aliment Pharmacol Ther 2010; 32: 344-55. 19. Sherman M. Hepatocellular carcinoma: epidemiology, surveillance, and diagnosis. Semin Liver Dis 2010; 30:3-16 20. Uka K, Aikata H, Takaki S, et al. Clinical features and prognosis of patients with extrahepatic metastases from hepatocellular carcinoma. World J Gastroenterol 2007; 13:414.
  • 316. 317 21. Yuki K, Hirohashi S, Sakamoto M, et al. Growth and spread of hepatocellular carcinoma. A review of 240 consecutive autopsy cases. Cancer 1990; 66:2174. 22. Colli A, Fraquelli M, Casazza G, et al. Accuracy of ultrasonography, spiral CT, magnetic resonance, and alpha-fetoprotein in diagnosing hepatocellular carcinoma: a systematic review. Am J Gastroenterol 2006; 101:513. 23. Ishizawa T, Hasegawa K, Aoki T, et al. Neither multiple tumors nor portal hypertension are surgical contraindications for hepatocellular carcinoma. Gastroenterology 2008; 134: 1908-16.
  • 317. 318
  • 318. 319 6.7 Pancreatitis Aguda Ramírez J, Besser N, Fuenzalida F. Generalidades La pancreatitis aguda (PA) corresponde a una enfermedad caracterizada por la inflamación aguda del páncreas debido a la activación intrapancreática de enzimas secretadas normalmente por este, como la tripsina. En un 80% de los casos, la evolución de esta patología es leve y autolimitada, pudiendo ser tratada de forma médica, mientras que el 20% restanteesseveragenerandoaltastasasdemorbimortalidad1 . La incidencia de la PA en Chile no ha sido determinada aún con exactitud, pero a nivel internacional se habla de cifras de alrededor de 4,9 a 35 casos cada 100.000 habitantes2. Es probable que en Chile por tener una mayor prevalencia de litiasis biliar, la causa principal de pancreatitis aguda tenga una incidencia cercana al extremo superior del rango recién mencionado o incluso mayor. Si bien la mortalidad ha ido disminuyendo gracias a los avances en las herramientas diagnósticas y terapéuticas, en cuadros graves el pronóstico puede ser bastante sombrío. La mortalidad general por PAes de alrededor de un 5%, pero si el cuadroevolucionaconpancreatitisnecrotizante,lamortalidad se eleva a un 17% o incluso 30% si la necrosis seinfecta2 . Las causas de PA son muchas y muy variadas, como se observa en la Tabla N.º 1. Tabla N.º 1: etiología de la pancreatitis aguda. Etiología (%) Otras causas (3,1%) Posquirúrgica Litiasis biliar (44,5). Consumo de alcohol (16,4) Idiopática (15,6). Hipertrigliceridemia (14,1). ERCP (6,3). Fármaco Infecciosa Traumática Metabólica Obstructiva Vascular Autoinmune Genética 1 Frossard JL, Steer M, Pastor C. Acutepancreatitis. Lancet 2008; 371: 143–52. 2 Cavallini, G et al.Prospective multicentre survey on acute pancreatitis in Italy(ProInf-AISP):results on 1005 patients. Digestive and Liver Disease , Volume 36 , Issue 3 , 205 – 2011.
  • 319. 320 Fisiopatología Elpáncreasesunaglándulamixtaquecumpleconunafunción endocrina, secretando principalmente insulina y glucagón desde los islotes de Langerhans al torrente sanguíneo y otra exocrina. Como glándula exocrina, los acinos pancreáticos tienen a cargo la producción de jugo pancreático, rico en bicarbonato que se vierte al duodeno través del conducto pancreático para neutralizar el pH del quimo proveniente del estómago. También, contiene una gran variedad de enzimas proteolíticas junto con lipasa y amilasa. Las enzimas proteolíticas son secretadas en su forma inactiva y se activan una vez que llegan al lumen intestinal. La principal enzima proteolítica, el tripsinógeno, es activada por la enterocinasa, secretadaporlamucosaintestinal.Latripsina,(formaactivada del tripsinógeno), cataliza la activación de más tripsinógeno, además de activar a las demás enzimas proteolíticas. Páncreas Enterocitos Enteroquinasa delorganismoalaslesionespancreáticas,atravésdetodauna cascada de citoquinas que se manifiesta como un Síndrome de Respuesta Inflamatoria Sistémica (SIRS). El mayor riesgo en esta etapa es que este SIRS sea persistente, llevando a falla orgánica de uno o más sistemas. La fase tardía de la PA aparece por persistencia de signos inflamatorios sistémicos o la aparición de complicaciones locales, entonces, por definición corresponde a una etapa de una PA moderada o severa. Es decir, la severidad de la PAen los inicios de la enfermedad estádada,principalmente,porlaaparición decomplicaciones sistémicas y con posterioridad cobran más importancia el desarrollo de complicaciones locales (a pesar de que la falla orgánicasiguesiendoelprincipaldeterminantedeseveridad)5 . Diagnóstico Para el diagnóstico de pancreatitis aguda se necesita el cumplimiento de 2 de los siguientes 3 criterios6 : • Clínica: Dolor abdominal concordante con pancreatitis aguda. De inicio agudo, permanente, ubicado en epigastrio Tripsinógeno Tripsinógeno Tripsina Tripsina con irradiación frecuente hacia dorso. Quimotripsinógeno Proelastasa Procarboxipéptidas AB Profosfolipasa A2 Procolipasa Quimotripsina Carboxipéptidasa AB Fosfolipasa A2 Colipasa • Laboratorio: Elevación de la lipasa (o amilasa) por sobre 3 veces el valor normal del laboratorio. • Imagenología: Imagen concordante con pancreatitis en el TAC de abdomen y pelvis. Menos frecuente es el De lo anterior se desprende la importancia de mantener desactivadalatripsinaalinteriordelpáncreas,paraevitartoda lacascadadeactivacióndeenzimasproteolíticasquellevarán a la autodigestión del páncreas por su propia secreción. Para esto, junto con la secreción de las enzimas proteolíticas, se secreta la antitripsina, que impide la activación de la tripsina tanto al interior de las células acinares, como en los acinos y conductos pancreáticos3 . Sibiensiguesiendotemadediscusión,lateoríamásaceptada enlapatogeniadelaPAes laactivacióndelatripsinaalinterior de las células acinares. Esta activación intrapancreática de la tripsina lleva a la autodigestión del tejido pancreático con la consecuente cascada de inflamación local. Posteriormente, según la magnitud del daño acinar y del grado de inflamación alcanzado, pueden aparecer las complicaciones locales (ver tabla N.º 3) y las sistémicas por liberación de mediadores de la inflamación al torrente sanguíneo4 . En la historia natural de la enfermedad, se puede distinguir una fase temprana y otra tardía. La fase temprana, de hasta 2 semanas de duración, es aquella que resulta de la respuesta 3 Hall J. Tratado de fisiología médica Guyton y Hall. 12.a edición. Barcelona, España: Elsevier; 2011. 4 Frossard JL, Steer M, Pastor C. Acute pancreatitis. Lancet 2008; 371: 143–52. diagnóstico con imágenes de RNM o ecografía abdominal. El inicio del cuadro está definido por el comienzo del dolor y no por el ingreso al hospital, por lo que es importante dejarlo definido en la historia clínica. Otras manifestaciones al examen físico, asociadas con pancreatitis severas, incluyen los clásicos signos deCullen, Grey-Turner y Mayo-Robson. El signo de Cullen corresponde a la apari-ción de equímosis periumbilical por extensión de exudados pancreáticos hacia el ligamento falciforme. El signo de Grey-Turner es similar al anterior, pero la extensión del exudado es hacia el ligamento gastrohepático, por lo que la aparición de equímosis es en el flanco. 5 Banks P,Bollen T,Dervenis C, Gooszen H, Johnson C, Sarr M, Tsiotos G, Swaroop S. Classification of acute pancreatitis—2012: revision of theAtlanta classification and definitions by international consen-sus. Gut 2013;62:102–111. 6 Banks P,Bollen T,Dervenis C, Gooszen H, Johnson C, Sarr M, Tsiotos G, Swaroop S. Classification of acute pancreatitis—2012: revision of theAtlanta classification and definitions by international consen-sus. Gut 2013;62:102–111.
  • 320. 321 ElsignodeMayo-Robson,porotraparte,correspondealdolor a la palpación en el ángulo costolumbar izquierdo7 . Las imágenes como TAC de abdomen y pelvis deben ser reservadasparacuadrosdealtasospechaclínicaconenzimas pancreáticas normales o pacientes con pancreatitis aguda grave, luego de 48-72 horas de iniciado el cuadro8 . Clasificación Las principales formas de clasificación de la PA se muestran en la tabla N.º 2. Una correcta identificación y categorización de la PA son fundamentales para establecer el pronóstico y manejo del cuadro en curso. Etiología Tipo Severidad Litiásica Edematosa intersticial Necrotizante Necrótica infectada Leve Moderada Severa Alcohólica Secundaria a hipertrigli- ceridemia Pos-ERCP Idiopática Otros (ver tabla N.º 1) Tabla N.º 2: clasificación de la pancreatitis aguda. Tipos de pancreatitis aguda 1. Pancreatitis edematosa intersticial Correspondeaunaumentodetamañodifuso(uocasionalmente localizado)delpáncreasdebidoaedema.Ensugranmayoría, evoluciona como una pancreatitis leve, con resolución de los síntomas durante la primera semana. En la TC se ve un realce homogéneo del parénquima pancreático al contraste, con algunos cambios inflamatorios del tejido peripancreático, pudiendo haber también un poco de líquido a su alrededor. Pancreatitis difusa 7 Farouk M, Maja C. Cullen’s and Turner’s Signs. N Engl J Med 2005; 353:1386. September 29, 2005. 8 Tenner S, Baillie J, DeWitt J and Swaroop S. American College of Gastroenterology Guideline: Man-agement of Acute Pancreatitis. Am J Gastroenterol advance online publication, 30 July 2013.
  • 321. 322 2. Pancreatitis necrotizante Hay necrosis del parénquima pancreático o tejido peripancreático. Ocurre en 5-10% de los pacientes con PA y generalmente involucra tanto al parénquima como al tejido peripancreático, siendo menos comunes el compromiso de estos por separado. Al TC se observa como áreas hipocaptantes de contraste. Un TC demasiado precoz puede subestimar la extensión de la necrosis, ya que las alteraciones en la perfusión pancreática y los signos de necrosis evolucionan durante varios días, por lo que no se recomienda su realización signos de necrosis evolucionan durante varios días, por lo que no se recomienda su realización antes de 48-72 horas de iniciado elcuadro9 . 3. Pancreatitis necrótica infectada Ocurre infección del tejido necrótico, aumentando la morbilidad y mortalidad del cuadro10 . El tiempo de evolución se relaciona con el riesgo de infección, siendo más frecuentes las infecciones pasada la primera semana11 . La importancia del diagnóstico de necrosis infectada radica en la necesidad de administrar antibióticos y ocasionalmente de intervenir en forma activa. En la TC se puede sospechar infección ante la aparición de gas extraluminal en el tejido pancreático o peripancreático. También,se puede realizar una punción guiada por imágenes para realizar un Gram y cultivo a la muestra aspirada y así confirmar la sospecha de infección. Gravedad Una vez hecho el diagnóstico de pancreatitis aguda, se debe establecer la gravedad de esta para estimar el riesgo y la necesidad de hospitalización en unidades de cuidados avanzados. Para esto, se han establecido diversas clasificaciones, dentro de las más utilizadas seencuentran. APACHE II Utilizado ampliamente en nuestro medio, permite la evaluación diaria del paciente. Su complejidad radica en el número de exámenes que se deben realizar para poder calcularlo. Un puntaje >8 define a un pancreatitis aguda como grave. 9 J. L. del Cura, S. Pedraza, A. Gayete.Radiología esencial, 1.a edición (2010). 10 Petrov MS, Shanbhag S, Chakraborty M, et al. Organ failure and infection of pancreatic necrosis as determinants of mortality in patients with acute pancreatitis. Gastroenterology 2010;139:813–20. 11 Besselink MG, van Santvoort HC, Boermeester MA, et al. Timing and impact of infections in acute pan-creatitis. Br J Surg 2009;96:267–73.
  • 322. 323 Imagen 1: TAC abdomen y pelvis con contraste. (a) corte axial (b) corte coronal. Se observa un páncreas aumentado de tamaño con compromiso inflamatorio de la grasa peripancreática. El páncreas capta medio de contraste homogeneamente. Compatible con pancreatitis edematosa. Imagen 2: TAC abdomen y pelvis corte axial. Se observa páncreas aumentado de tamaño con áreas no captadoras de contraste, compatibles con necrosis pancreática.
  • 323. 324 Apache II APS 4 3 2 1 0 1 2 3 4 Tº rectal >40,9 39-40,9 38,5-38,9 36-38,4 34-35,9 32-33,9 30-31,9 <30 PAM >159 130-159 110-129 70-109 50-69 <50 Frecuencia cardiaca >179 140-179 110-129 70-109 55-69 40-54 <40 Frecuencia respiratoria >49 35-49 25-34 12-24 10-11 6-9 <6 Si FiO2 > 0,5 >499 350-499 200-349 <200 Si FiO2 < 0,5 >70 61-70 56-60 <56 pH arterial > 7,69 7,60-7,69 7,50-7,59 7,33-7,49 7,25-7,32 7,15-7,24 <7,15 Na plasm. (mmol/l) >179 160-179 155-159 150-154 130-149 120-129 111-119 <111
  • 324. 325 K plasm. (mmol/l) >6,9 6,0-6,9 5,5-5,9 3,5-5,4 3,0-3,4 2,5-2,9 <2,5 Creatinina (mg/dl) >3,4 2-3,4 1,5-1,9 0,6-1,4 <0,6 Hcto (%) >59,9 50-59,9 46-49,9 30-45,9 20-29,9 <20 Leucocitos (x1,000) >39,9 20-39,9 15-19,9 3-14,9 1-2,9 <1 SUMA DE PUNTOS APS Total APS 15- GCS Edad Puntuación < 44 0 45-54 2 55-64 3 Enfermedad Crónica Puntos APS Puntos GCS Puntos edad Puntos Enfermedad 65-74 5 Posoperatorio programado 2 > 75 6 Posoperatorio urgente o médico 5 Total Puntos
  • 325. 326 Score de Marshall Lafallaorgánicapersistente,es decir,aquellaquepermanece después de las 48 horas de iniciado elcuadro, es elfactor más importante para determinar la gravedad de un paciente. Para esto se utiliza el score de Marshall, en que con un puntaje > 2 define falla orgánica. Sistema Puntaje 0 1 2 3 4 Respiratorio (PaO2/FiO2) >400 301-400 201-300 101-200 <101 Renal (creatinina) <134 134-169 170-310 311-439 >439 Cardiovascular (presión sistólica) >90 <90 (responde a fluidos) <90 (no responde a fluidos) <90 conpH <7,3 <90 conpH <7,2 Puntaje > 2 en cualquier sistema se define como falla orgánica Severidaddelapancreatitisaguda(revisióndelaclasificación de Atlanta 2012)12 1. Pancreatitis aguda leve Es la forma más frecuente. No presenta falla orgánica ni complicaciones locales o sistémicas. Normalmente, se resuelve en la primera semana. 2. Pancreatitis aguda moderada Cursa con falla orgánica transitoria (<48 horas), complicaciones localesosistémicas(exacerbacióndeenfermedadpreexistente como enfermedad coronaria, pulmonar, etc.). 3. Pancreatitis aguda severa Se define por la presencia de falla orgánica persistente (>48 horas). 12 Banks P,BollenT,Dervenis C,Gooszen H,Johnson C,Sarr M, Tsiotos G, Swaroop S. Classification of acute pancreatitis—2012: revision of the Atlanta classification and definitions by international consensus. Gut 2013;62:102–111. Complicaciones locales de la pancreatitis aguda Deben sospecharse cuando el dolor abdominal persiste, si apareceunasegundaelevacióndelasenzimaspancreáticas, disfunción orgánica progresiva o la aparición de síntomas que orienten a sepsis (como fiebre y leucocitosis). Ante la sospecha de una complicación local, se debe evaluar con TC para determinar si es de localización pancreática o peripancreática, si corresponde a sólido, líquido o gas, de haber pared, el grosor de esta y la calidad de la perfusión del parénquima. Las complicaciones locales de la PA son lesiones evolutivas que, generalmente después de las 4 semanas, desarrollan pared.EnlaTablaN.º3semuestranlasdistintascomplicaciones locales de la PA. 1. < 4 semanas de evolución: colecciones sin pared ○ Colección líquida peripancreáticaaguda Es una o varias colecciones líquidas alrededor del páncreas (con indemnidad de este), de densidad homogénea, confinada a los planos normales de fascia que rodean al páncreas, que ocurre en el contexto de una PA edematosa intersticial. ○ Colección necrótica aguda La colección necrótica aguda, a diferencia de la líquida, es heterogénea con cantidades variables de líquido y necrosis que afectan al tejido pancreático o peripancreático. Aparece
  • 326. 327 en el contexto de una PAnecrotizante y en un principio puede verse como una colección homogénea si el TC se realiza antes de que los cambios necróticos se hayanestablecido. 2. > 4 semanas de evolución: colecciones con pared ○ Pseudoquiste Correspondeaunacolecciónlíquidahomogénea,conmínima necrosis(oausenciadeesta),queseencuentracompletamente encapsulada por una pared bien definida, normalmente fuera del páncreas. Se le conoce como pseudoquiste, puesto que esta pared no es epitelio (como en los quistes verdaderos), sino que es una pared de tejido reactivo inflamatorio. Son extremadamente poco frecuentes y se forman a partir de una colección líquida peripancreática aguda que persiste tras 4 semanas o cuando tras remover una colección necrótica persiste una filtración de jugo pancreático hacia la cavidad de la necrosectomía. Colección Sin pared (<4 semanas) Encapsulada (>4 semanas) Líquida Colección líquida pancreática aguda. Pseudoquiste Líquida y sólida (necrosis). Colección necróticaaguda. Necrosis encapsulada (WON; walled-off necrosis). Tabla N.º 3: complicaciones locales de la pancreatitis aguda.
  • 328. 329 Imagen 3 TAC abdomen y pelvis. Se evidencia colección pancreática con paredes bien definidas, compatibles con pseudoquiste pancreático. ○ Necrosis encapsulada Es una colección heterogénea de líquido y necrosis, con gradosdiversosdeloculaciones.Tieneunaparedquelorodea completamenteypuedesertantointracomoextrapancreático. Unanecrosis encapsuladapuedeser únicaomúltiple ypuede formarse, incluso en lugares alejados del páncreas. Al igual quelacolecciónnecróticaaguda,presentariesgodeinfección. Otrosnombresquesehanusadoparadescribirestacolección sonnecrosispancreáticaorganizada,pseudoquisteasociado a necrosis, secuestro pancreático, necroma o necrosis pancreática subaguda. 3. Necrosis infectada Su aparición es de gran importancia, ya que es la principal causa de mortalidad y morbilidad en la PA. El riesgo de infección de una colección necrótica está directamente relacionadoalaextensióndeesta,siendodeaproximadamente 20% si compromete menos de ⅓ del páncreas y llegando a casi 50% si afecta a más de ⅔ de este. El origen de es-ta infección es principalmente la traslocación bacteriana de la flora gastrointestinal, por lo que los gérmenes más comunes son los gram negativos (E. coli, Klebsiella y Pseudomonas) y Enterococcus. Otra vía descrita para la llegada de patógenos es la invasión del paciente (sondas, catéteres infectados, etc.), por lo que otros microorganismos (Staphilococcus y Streptococcus) también son posibles agentes causales. Clínicamente, se puede sospechar por fiebre prolongada, leucocitosisodeterioroclínicoprogresivo.EnTC,lapresencia de gas en la colección es patognomónica y confirma el diagnóstico. Como lo anterior es un hallazgo raro, ante la sospecha de infección de una colección necrótica se debe realizar una aspiración por aguja fina para aislar el germen causal. Tratamiento El tratamiento de la PAse puede dividir en 2 componentes: 1) elmanejodela pancreatitis propiamentetal y2) el tratamiento etiológico (principalmente para la pancreatitis litiásica). El mane-jodelapancreatitis es esencialmente médico,amenos que se presente alguna complicación. Ante la sospecha de PA, lo primero es siempre hospitalizar al paciente para un correcto monitoreo de su condición. En las formas leves de la enfermedad, el tratamiento es principalmente de soporte, consistiendo en aporte de fluidos, cese de la alimentación vía oral, manejo del dolor, oxigenoterapia y antieméticos. En casos moderados y severos, se deberá hospitalizar en una unidad de paciente crítico, así como también a aquellos pacientes con comorbilidades graves13 . Nutrición PacientesconPAleve,generalmentenonecesitanningúntipo de soporte nutricional y pueden mantenerse únicamente con hidratación endovenosa, ya que en general pueden retomar la vía oral de alimentación durante la primera semana. Las condiciones de realimentación en estos pacientes son la ausencia de íleo, náuseas, vómitos, dolor y la mejoría de los parámetros inflamatorios. Lo anterior ocurre generalmente a las24-48horasdeiniciadoelcuadro,traslocualserealimenta evitando comidas ricas en grasas o proteínas, para evitar la estimulación del páncreas14 . 13 Frossard JL, Steer M, Pastor C. Acute pancreatitis. Lancet 2008; 371: 143–52. 14 Working Group IAP/APA Acute Pancreatitis Guidelines. IAP/APA evidence-based guidelines for the management of acute pancreatitis. Pancreatology. 2013 Jul-Aug;13(4 Suppl 2):e1-15. doi: 10.1016/j.pan.2013.07.063.
  • 329. 330 En los casos moderados y severos, la realimentación vía oral no logra ser tolerada durante la primera semana, por lo que normalmente se requiere el uso de nutrición enteral o incluso parenteral. La vía de nutrición aún sigue siendo objeto de debate, dado que se ha visto que la nutrición parenteral se asocia a atrofia de la mucosa intestinal, aumento en la translocación bacteriana desde los intestinos y aumento en la respuesta proinflamatoria. Si bien el uso de nutrición enteral (nasoyeyunal) no ha demostrado reducir sustancialmente la mortalidad, si ha probado reducir el número de infecciones, intervenciones quirúrgicas y días de hospitalización15 . Si bien al parecer no habría diferencias significativas entre la nutrición nasogástrica y nasoyeyunal, aún se necesitan más estudios que evidencien la seguridad de la primera, por lo que la recomendación general es utilizar una sonda que se ubique posterior al ángulo de Treitz16 . Necrosis Ante la aparición de necrosis, no se recomienda la cirugía, ya que de ser una necrosis estéril, el desbridamiento o drenaje aumenta el riesgo de infección de los tejidos. En estos casos en que hay ausencia de infección, la mortalidad es baja y, por tanto, el enfoque debe ser conservador, pudiendo eso sí, llegar a ser necesaria una intervención quirúrgica para el manejo de complicaciones tardías. Profilaxis antibiótica El uso de profilaxis antibiótica en contexto necrosis pancreática ha sido tema de gran debate. En la revisión Cochrane 2014 “Antibiotic therapy for prophylaxis against infection of pancreatic necrosis in acute pancreatitis” de Villatorio E. se establece que no existe una diferencia estadísticamente significativa en el uso de profilaxis al comparar mortalidad, infección de necrosis ni necesidad de cirugía. Si existe una menor tasa de infecciones extrapancreáticas en pacientecon uso de profilaxis. En centros donde se utiliza profilaxis, esta seindicacuandolanecrosiscompromete>30%delpáncreas. Antibióticos con buena concentración plasmática: • Imipenem/Meropenem. • Cefalosporinas. • Metronidazol. • Clindamicina. • Fluoroquinolonas. Necrosis infectada Ante necrosis infectada se debe iniciar terapia ATB vía EV. Se recomienda el uso de carbapenémicos (imipenem o meropenem endovenoso por 14 días) por su cobertura y penetración al tejido pancreático. Otras alternativas son quinolonas, metronidazol, cefalosporinas de tercera generación y piperaciclina. Paraeltratamientodefinitivosecuentacondiversasopciones, desdeelenfoquetradicionalmediantenecrosectomíaabierta, hasta técnicas mínimamente invasivas como el drenaje percutáneo. La necrosectomía clásica es altamente invasiva y se hace mediante una incisión subcostal bilateral 2 a través de la cual se realiza el desbridamiento del tejido necrótico. Una necrosectomía abierta se asocia a altas tasas de complicaciones y una mortalidad de alrededor de un 30%, además de tener el riesgo de insuficiencia pancreática a largo plazo17 . Un enfoque mínimamente invasivo (drenaje percutáneo, drenaje endoscópico transgástrico y necrosectomía retroperitoneal mínimamente invasiva), ha demostrado reducir la tasa de complicaciones y mortalidad, así como tambiénlascomplicacionesalargoplazocomolainsuficiencia pancreática. Este enfoque mínimamente invasivo tiene como finalidad controlar elfocoinfeccioso,másquelacompletaremocióndel tejido necrótico, por lo que la primera conducta consiste en el drenaje percutáneo o endoscópico de la colección necrótica infectada para mitigar la sepsis y así posponer o incluso obviar la necrosectomía. Si tras el drenaje no se logra mejoría en el estado del paciente, se procede a la necrosectomía retroperitoneal mínimamente invasiva. Mediante esta estrategia se logra reducir el trauma quirúrgico que significa una laparotomía, disminuyendo el daño tisular, la respuesta sistémica proinflamatoria y las posteriores complicaciones, llevando a una mejor evolución del paciente18 . 15 Marik PE, Zaloga GP. Meta-analysis of parenteral nutrition versus enteral nutrition in patients with acute pancreatitis. BMJ 2004;328: 1407–12. 16 Singh N, Sharma B, Sharma M, Sachdev V, Bhardwaj P, Mani K, Joshi YK, Saraya A. Evaluation of early enteral feeding through nasogastric and nasojejunal tube in severe acute pancreatitis: a noninfe-riority randomized controlled trial. Pancreas. 2012 Jan;41(1):153-9. 17 Besselink MG, Verwer TJ, Schoenmaeckers EJ, et al: Timing of surgical intervention in necrotizing pancreatitis. Arch Surg 142:1194–1201, 2007. 18 Van Santvoort HC, Besselink MG, Bakker OJ, et al. A step-up approach or open necrosectomy for necrotizing pancreatitis (PANTER trial). N Engl J Med 2010;362:1491–502.
  • 330. 331 ERCP en pancreatitis aguda litiásica El uso de ERCP más papilotomía como método de descompresión de la vía biliar en contexto de pancreatitis aguda litiásica ha demostrado beneficios estadísticamente significativos solo en la disminución de la morbilidad en cuadros de pancreatitis agudas graves de <72 horas de evolución. No se ha demostrado beneficios sobre la mortalidad ni en pancreatitis aguda leve-moderada19 . 19 Ayub K, Slavin J, Imada R. Endoscopic Retrograde Cholangiopancreatography in Gallstone-Associated acute Pancreatitis. Cochrane Database of Systematic Reviews. Issue 11, 2014.
  • 331. 332 Bibliografía 1. Frossard JL, Steer M, Pastor C. Acute pancreatitis. Lancet 2008; 371: 143–52. 2. Hall J. Tratado de fisiología médica Guyton y Hall. 12.a edición. Elsevier, 2012. 3. Courtney T, Beauchamp D, Evers M, Mattox K. Sabiston: tratado de cirugía.19.a ed. Elservi-er; 2013. 4. Banks P,Bollen T, Dervenis C, Gooszen H, Johnson C, Sarr M, Tsiotos G, Swaroop S. Classification of acute pancreatitis—2012: revision of the Atlanta classification and defini-tions by international consensus. Gut 2013; 62:102–111. 5. Tenner S, Baillie J, DeWitt J and Swaroop S. American College of Gastroenterology Guide-line: Management of Acute Pancreatitis. Am J Gastroenterol advance online publication, 30 July 2013. 6. J. L. del Cura, S. Pedraza, A. Gayete. Radiología esencial, 1.a edición (2010).
  • 332. 333 6.8 TumorPeriampular Quinteros JP, Arteaga MJ, González J. Definición Lostumoresperiampularessontumoresqueestánenrelación con la ampolla de Vater. Estos pueden ser de: cabeza del páncreas, vía biliar distal, duodeno y ampolla de Vater. También existen otros tumores menos comunes: como tumores neuroendocrinos, cistoadenocarcinoma pancreático, carcinomas escamoso y acinar, tumores gastrointestinales estromales (GITS) sarcomas, linfomas y metástasis. Aun cuando su origen es diverso, estos se agrupan debido a su relación y cercanía anatómica, clínica común y tratamiento quirúrgico, que es la pancreatoduodenectomía cuando esta es posible. Su diagnóstico precoz es difícil debido a la escasa sintomatología que presentan hasta etapas avanzadas de la enfermedad.
  • 333. 334 Epidemiología Lostumoresperiampulares sondebajafrecuenciaennuestro país con una tasa de mortalidad entre 4-6/100.000 durante los últimos 10 años1 . En Estados Unidos, este tipo de cáncer ha ido en aumento y en la actualidad tiene una incidencia de aproximadamente 60.000 casos nuevos cada año. Representa el 2% de las neoplasias. Es discretamente más frecuente en hombres que en mujeres. En general, se presenta entre la sexta y séptima etapa de la vida2 . Su localización más frecuente es en la cabeza del páncreas (85%), lo que explica el mal pronóstico de esta neoplasia en la mayoría de los casos. 1 Norero E., Viñuela E., Báez S., Martínez C., Reyes J., Kusanovic R., et al. Resultados actuales de la pancreatoduodenectomía para el tratamiento de los tumores periampulares y análisis de factores pronósticos de sobrevida. Revista médica de Chile. 2011;139 (8):1015–24. 2 Deichler F., Fuentes M.,Cárcamo C., et al.Tumores periampulares:Hallazgos y resultados en 21 casos consecutivos resecados. Cuad.cir(Valdivia). 2006;20(1):21-7. Tumorperiampular
  • 334. 335 Clasificación Clínica Adenocarcinoma ductal de páncreas • Causa más frecuente de tumor periampular. • 4.a causa de muerte en EE.UU. y 8.a en el mundo por cáncer. • 9.a causa de muerte a nivel nacional. • Más frecuente en hombres que mujeres (3:1) • Sobrevida a 5 años de menos del 5%. • Factores de riesgo: tabaco, obesidad, pancreatitis crónica, DM , raza negra, síndromes genéticos asociados a neoplasias. Adenocarcinoma ductal biliar distal (Colangiocarcinoma) • Segunda causa más frecuente de tumor periampular. • Incidencia: 1-2/100.000 en EE.UU. • Peak de incidencia en la 7.a década. • Factores de riesgo: colangitis esclerosante, quistes coledocianos, litiasis intrahepática y fasciolasis hepática. • Sobrevida a 5 años 20-40% con tratamiento quirúrgico. Adenocarcinoma de la ampolla de Vater • Tercera causa más común de tumor periampular. • Incidencia: menos de 1/100.000 en EE.UU., con un peak en la 7.a década. • Se descubren cuando aún son pequeñas debido a que causan ictericia precoz. • Tiene menos agresividad biológica que el adenocarcinoma de páncreas y el colangiocarcinoma. • Sobrevida a 5 años 35-55% con tratamiento quirúrgico. Adenocarcinoma duodenal • Representa solo el 5% de los tumores periampulares. • Igual prevalencia en hombres y mujeres. • Peak incidencia en la 7.a década. • Tienen crecimiento intraluminal, lo que significa que pueden tener gran tamaño al momento deldiagnóstico. • Tienen el comportamiento biológico más favorable de los tumores periampulares, con una sobrevida a 5 años de 40-60% con tratamiento quirúrgico. La sospecha precoz es necesaria para realizar un diagnósticooportuno,porquelospacientespresentanescasa sintomatología hasta etapas avanzadas de la enfermedad. Debería sospecharse en: pacientes con diabetes de inicio atípico, o que se hagan insulinorrequirientes, o que requieran mayor dosis de insulina, en pacientes de difícil manejo metabólico; también en pacientes con pancreatitis de causa no precisada, en todos ellos se sugiere estudio con TAC o RMN. Síntomas: • Ictericia: es el síntoma cardinal de esta patología, con un patrón obstructivo, silente y progresivo. - Prurito: secundario al depósito de sales biliares en la piel. - Coluria. - Acolia. - Escleras ictéricas. • Síndrome consuntivo: o Anorexia. o Baja de peso. • Dolor: aunque no es común, varios pacientes refieren algún tipo de molestia. Es epigástrico, constante y generalmente se irradia al dorso. Puede haber dolor lumbar severo en caso de infiltración al plexo celíaco, lo que constituye un síntoma ominoso (mal pronóstico). • Insuficiencia pancreática: o Disconfort abdominal, dispepsia y esteatorrea. o Diabetes de comienzo reciente. • Hemorragia digestiva en pacientes con adenocarcinoma ampular o duodenal ulcerados. Signos • Signos de metástasis: -Ganglio de Virchow: supraclavicular izquierdo. -Nódulo de la hermana María José: periumbilical (carcinomatosis). -Ganglios pélvicos palpables.
  • 335. 336 • Manifestaciones de obstrucción biliar distal: -Hepatomegalia. -Signo de Courvoisier terrier: ictericia con vesícula (masa) palpable e indolora. • Ascitis: signo de diseminación peritoneal (ascitis carcinomatosa). Laboratorio Hemograma • Anemia. Pruebas hepáticas alteradas: patrón obstructivo. • Hiperbilirrubinemia de predominio directo. • Elevación de fosfatasas alcalinas sobre transaminasas. • Elevación de GGT. Tiempo de protrombina prolongado. Perfil bioquímico: • Hipoalbuminemia:esimportantetenerencuentaelestado nutricional del paciente previo a intervención quirúrgica (aumento de la morbimortalidad). Marcadores tumorales: • CA19-9: está elevado frecuentemente, pero tiene sensibilidad (79%) y especificidad (82%) limitada, sin embargo, sigue siendo el marcador más confiable para evaluaciónpre,posoperatoriayparaelseguimiento,pues su elevación puede significar recidiva tumoral: • CEA. • α feto proteína. Imágenes Son fundamentales en el estudio de los tumores periampulares para conocer la extensión de la enfermedad, etapificación (uTNM) y objetivar la posibilidad de resección del tumor (resecabilidad) . Ecotomografía abdominal (US): es la primera aproximación a un paciente con sospecha de cáncer periampular, dado que el síntoma cardinal es la ictericia. Esta técnica imagenológica permite descartar otras patologías que causan ictericia tal como la colelitiasis, sospechar coledocolitiasis por dilatación de la vía biliar. Tomografíacomputada (TC): tiene una sensibilidad del 91% y especificidadde85%,porloqueesunaexcelenteherramienta tantoparaeldiagnósticocomoparalaetapificacióndetumores periampulares. Permite conocer la relación del tumor con la arteria mesentérica superior (AMS), la confluencia de la vena mesentérica superior (VMS) con la vena porta, (eje esplenoportal) y tronco celíaco, así como mostrar metástasis extrapancreáticas. Se prefiere el uso del protocolo pancreático para la realización del examen. La TC permite clasificar a los pacientes en categorías para llevar a cabo el tratamiento: resecable, borderline, localmente avanzado ymetastásico. RNM: tiene una sensibilidad de 84% y una especificidad del 78%, por lo que su uso no es mejor que la TC. Se recomienda para pacientes con sensibilidad al contraste endovenoso o con problemas renales y también cuando en la TC hay dudas diagnósticas. Endosnografía: es un método operador dependiente, por lo que su sensibilidad puede variar entre 69-94%. Se ha reportado que tienen superioridad para lesiones de menos de 2 cm, por lo que es útil cuando hay sospecha de tumor periampular, pero no se observa lesión con otros métodos imagenológicos o hay duda. También se ha observado que tiene superioridad sobre la TC para detectar invasión venosa, peronoasíarterial.Otradesusventajas es quepermitetomar biopsia con aguja fina, lo que podría ser útil en pacientes con tumores noresecables al momento de planear quimioterapia. Es el mejor método para evaluar el T (tamaño e infiltración del tumor) y el N local, la desventaja es que en nuestro medio es caro y se realiza en pocos lugares. Tomografía con emisión de positrones (PET): técnica de imagenología funcional (PET) y anatómica (CT) que se basa en la acelerada captación de glucosa por parte de las células neoplásicas. Se utiliza un radioisótopo (18-flourodeoxiglucosa), que se acumula en las células tumorales. Permite evaluar el tumor y metástasis a distancia. Su uso es limitado aún debido a que pueden producirse posibles confusiones con procesos inflamatorios e infecciosos, además es costoso,por lo que se recomienda su uso cuando hay duda diagnóstica en imágenes habituales. Colangiopancreatografía endoscópica retrógrada (CPER): antiguamente era común su uso para el diagnóstico de los tumores periampulares, pero con el avance de las técnicas imagenológicas su uso actualmente no tiene respaldo. El uso de CPER queda reservado para procedimientos donde tiene utilidad terapéutica: colangitis, instalación de endoprótesis, hiperbilissobre25y/oalteraciónseveradelafunciónhepática.
  • 336. 337 Tratamiento El único tratamiento que ofrece potencial curativo para los tumores periampulares es la pancratoduodenectomía (operacióndeWhipple).Tieneunamortalidaddel2%encentro conaltoflujodepacientes,lacualaumentaencentrosdepoca experiencia. También es necesario tener en consideración su alta morbilidad, entre 30-50%. Por esto es necesario evaluar y etapificar correctamente a los pacientes, dado que la pancreatoduodenectomía solo se debería llevar a cabo en pacientes donde se tiene altas expectativas de remover por completo el tumor. Es necesario considerar que del total de pacientes diagnosticados con cáncer de páncreas, solo el 20-30% es candidato a tratamiento quirúrgico con una sobrevida global de 20% a 5 años. Criterios de irresecabilidad: • Compromiso de más de 180º de tronco celíaco, arteria hepática común o arteria mesentérica superior. • Aumentodetamaño de linfonodos fuera de losmárgenes de resección. • Ascitis. • Metástasis a distancia (recomedable con biopsia). Criterios de tumor Borderline: • Compromiso de menos de 180º de tronco celíaco, arteria hepática común o arteria mesentérica superior. • Segmento venoso corto comprometido. • Lesiones hepáticas de menos de1mm. • Pacientes con comorbilidades. Técnica quirúrgica: consiste en una resección en bloque de la cabeza del páncreas, parte distal del colédoco,duodeno, yeyuno y antro gástrico. La resección del antro gástrico no siempre es realizada, depende del grado de compromiso del tumor y la preferencia del cirujano. La reconstrucción incluye anastomosis pancreatogástrica o pancreatoyeyunal, anastomosis colédocoyeyunal (biliodigestiva) y anastomosis gatroyeyunal o duodenoyeyunal.
  • 337. 338 Hallazgos operatorios: HALLAZGOS QUE CONTRADICEN RESECCIÓN Metástasis hepáticas (cualquier tamaño) se sugiere biopsia. Compromiso de linfonodo celíaco. Implantes peritoneales. Compromiso de linfonodo hepático hiliar. HALLAZGOS QUE NO CONTRAINDICAN RESECCIÓN Invasión a duodeno o estómago distal. Compromiso de linfonodos peripancreaticos. Compromiso de linfonodos alrededor de la vena hepática resecables. Resultados: en los pacientes con tumor pancreático, la sobrevida con tratamiento quirúrgico es del 17% a 5 años y de 9% a 10 años. En los otros tumores, la sobrevida es mayor siendo el adenocarcinoma el tumor con la mejor sobrevida a 5 años. Aun así, se sabe que el 80% de los tumores recurre poscirugía, por lo que se debe plantear el tratamiento adyuvante. Terapia adyuvante: tomando en cuenta los estudios realizados, se ha demostrado los beneficios del uso de terapia adyuvante para mejorar la sobrevida del cáncer pancreático. Todavía existecontroversiasobreelrégimenmás adecuadodequimio o quimiorradioterapia. El régimen común de quimioterapia es gemcitabina con erlotinib. Al agregar radioterapia se usa capecitabina o 5-Fluoracino en infusión. Complicaciones Las complicaciones más frecuentes son: • Retencióngástrica(15-40%):sedefinecomolaincapacidad de volver a régimen normal al final de la primera semana posoperatoria. Se clasifica según la tolerancia asólidos durantelosdías7,14o21posoperatoriooelusodesonda nasogástrica posoperatoria. Es necesario diferenciar la retención gástrica de otras causas de obstrucción mecánica. • Fístula pancreática (10-20%): se define como presencia de amilasa en cantidades 3 veces superior a la sérica en los drenajes posoperatorios el tercer díaposoperatorio. • Absceso intraabdominal (8-10%). • Hemorragiaposoperatoria(1-8%):estaseclasificasegún inicio (antes o después de 24 horas posoperatorio), ubicación (intra o extraluminal), y severidad (alta o baja). Otras complicaciones: infección de la herida, hemoperitoneo, neumonía, sepsis CVC, evisceración, pancreatitis posoperatoria, fístula biliar, absceso hepático, fístula quilosa.
  • 338. 339 Bibliografía 1. Norero E., Viñuela E., Báez S., Martínez C., Reyes J., Kusanovic R., et al. Resultados actuales de la pancreatoduodenectomía para el tratamiento de los tumores periampulares y análisis de factores pronósticos de sobrevida. Revista Médica de Chile. 2011;139 (8):1015–24. 2. Deichler F., Fuentes M., Cárcamo C., et al. Tumores periampulares: hallazgos y resultados en 21 casos consecutivos resecados. Cuad. Cir. (Valdivia). 2006;20 (1):21–7. 3. Brunicardi FC, Andersen DK, Billiar TR, Dunn DL, Hunter JG, Matthews JB, Pollock RE. Schwartz’s Principles of Surgery, 10th ed. United States: McGraw-Hill; 2014. 4. Fischer JE, Jones DB, Pomposelli FB, Upchurch GR, Klimberg VS, Schwaitzberg SD, Bland KI. Mastery of Surgery, 6th ed. Philadelphia: Lippincott Williams & Wilkins; 2010. 5. Jarnagin WR, Blumgart LH. Blumgart’s Surgery of The Liver, Biliary Tract and Pancreas, 5th ed. Philadelphia: Saunders; 2012. 6. Cameron JL, Cameron AM. Current Surgical Therapy, 11th ed. Philadelphia: Saunders; 2014. 7. Townsend CM, Beauchamp RD, Evers BM, Mattox KL. Sabinston Texbook of Surgery, 19th ed. Philadelphia: Saunders; 2012. 8. 8. Klingensmith ME, Abdulhamed A, Bharat A, Fox AC, Porembka MR. Manual Washington de Cirugía, 6ta ed. Philadelphia: Lippincott Williams & Wilkins; 2012.
  • 339. 340
  • 341. 342
  • 342. 343 7.1 AnatomíaIntestinoGrueso Ramírez J, Valdés F. El intestino grueso está compuesto por el apéndice, ciego, colon,rectoyconductoanal.Essitiodeintercambiodelíquidos, electrolitos y ácidos grasos de cadena corta, determinando así la solidez de las deposiciones y sirviendo como lugar de almacenamiento de estas. Segmentos delColon
  • 343. 344 Apéndice Elapéndiceesundivertículoquenacedelacaraposterolareal del ciego, mide aproximadamente 6-10 cm y tiene un componentelinfoideporloqueactualmentesereconocecomo un órgano inmunológico secretor de IgA (principalmente). La hiperplasia de este último es uno de los factores que puede obstruir el lumen del apéndice y provocar una apendicitis aguda. Su irrigación proviene de la arteria apendicular, rama de la arteria ileocólica, que discurre a través del mesoapéndice. El drenaje venoso se realiza por la vena ileocólica, tributaria de la vena mesentérica inferior. El mesoapendicular, por su parte, nace del meso del íleon terminal. Ciego El ciego es la porción de intestino grueso que se relaciona con el íleon distal. Este último se abre al ciego por su cara medial posterior, formando una invaginación con forma de papila, llamada válvula ileocecal, cuya función es limitar el contenido intestinal que ingresa al colon y evitar el reflujo. En su cara posterolateral del extremo distal nace el apéndice vermiforme. Por lo general, el ciego puede movilizarse, pero no posee meso propio. Su irrigación proviene de la arteria ileocólica, rama terminal de la arteria mesentéricasuperior. arteria cólica izquierda y el colon sigmoides por la arteria sigmoidea, que son ramas de la arteria mesentérica inferior. Entre estas arterias existen anastomosis, con lo que se forma la arteria marginal que discurre paralela al colon. El drenaje venoso, por su parte, se realiza por las venas ileocólicas y la vena cólica derecha, ramas de la vena mesentérica inferior, para el colon ascendente. La vena intermedia drena el colon transverso y drena también a la vena mesentérica inferior. Por último, el drenaje venoso del colon descendente y sigmoides se realiza mediante la vena mesentérica inferior. Colon El colon se divide en colon ascendente, colon transverso, colondescendente ysigmoides,conuna longitudaproximada de 1 metro. El colon ascendente y descendente se encuentran retroperitoneales, mientras que el transverso y elsigmoides son órganos peritoneales, adheridos a la pared posterior por su meso. Existen dos flexuras: la flexura hepática, que separa colon ascendente de transverso y flexura esplénica, que separa colon transverso y descendente. El colon posee tenias, que corresponden a fibras musculares longitudinales engrosadas de 6 mm de ancho aproximadamente. Cada tenia posee un nombre respecto a sus relaciones, así la tenia mesocólica corresponde a la que se relaciona con el mesocolon, tenia omental la que lo hace con el omento mayor y la tenia libre, aquella que es fácilmente reconocible, puesto que no se relaciona con otras estructuras. Las tenias comienzan en la base del apéndice, dondelacapamuscularlongitudinalseseparaparaformarlas, hasta la unión rectosigmoidea donde las tenias se vuelven a fusionar y conforman la capa muscular longitudinal. La irrigación del colon proviene de la arteria cólica derecha, que irriga el colon ascendente y la arteria cólica media, el colon transverso, ambas son ramas de la arteria mesentérica superior. Mientras que el colon descendente se irriga por la
  • 345. 346 Drenaje venoso del colon Histología Colon
  • 346. 347 Recto Existen controversias sobre el inicio del recto, siendo considerado el punto de proyección del promontorio sacro y la convergencia de las tenias como este y su límite distal la línea dentada. La longitud del recto varía entre 12-15 cm, no tiene tenias ni apéndices epiploicos. La cara posterior del recto es considerada casi en su totalidad comoextraperitoneal,mientrasqueporanterior,el1/3proximal delrectoesperitonealhastaqueelperitoneosereflejadejando así a los 2/3 distales como órgano infraperitoneal. Elrectosiguelacurvaturadelsacroy,almomentodeatravesar el diafragma pelviano, cambia su ángulopostero-inferiormente paraformarelánguloanorrectal,queespartefundamentaldel mecanismo esfinteriano. El recto posee 3 pliegues transversos, uno superior y uno inferior al lado derecho y otro intermedio al lado izquierdo. Lairrigacióndelrectoes pormediodelaarteriarectalsuperior, rama terminal de la arteria mesentérica inferior, las arterias rectales medias que son ramas de las arterias iliacas internas y de las arterias rectales inferiores, ramas de las arterias pudendasinternas.Eldrenajevenosoesporlasvenasrectales superiores que drenan al sistema porta y las venas rectales medias e inferiores que drenan a la circulación sistémica. Anatomía recto
  • 347. 348 Conducto Anal El conducto anal comienza a continuación del recto y su límite es la línea dentada, donde ocurre un cambio de epitelio columnar a escamoso, aproximadamente 2-3 cm del vértice anal.Elepitelioescamosotieneinervaciónsensitivasomática, mientras que el columnar mucoso tiene inervación sensitiva visceral. Es en esta porción donde se encuentran el esfínter anal externo e interno del ano y los músculos del piso pélvico, cuya coordinación permite el control de la defecación. En la porción distal del ano, las fibras musculares circulares se engrosan y forman el esfínter anal interno, terminando justo cefálico al esfínter anal externo. El esfínter anal interno se encuentra con una contracción tónica sin control voluntario. Elesfínteranalexternoestácompuestoporfibrasmusculares estriadas que se encuentran contraídas con un tono basal y además pueden contraerse voluntariamente. Su inervación proviene de la rama rectal inferior del nervio pudendo y de la rama perineal del 4.o nervio sacro. Irrigación y drenaje venoso del recto
  • 348. 349 Bibliografía 1. Karram M. Anal Sphincter Repair With Perineal Reconstruction. In: Baggish M, Karram M. Atlas of Pelvic Anatomy and Gynecologic Surgery. Philadelphia: Elsevier, 2016, pp. 1133-1142. 2. Merchea A and Larson D. Anus. In: Townsend C, Beauchamp D, Evers M, Mattox K. Sabiston Textbook of Surgery, Twentieth Edition. Philadelphia: Elsevier, 2017, pp. 1394-1417. 3. Moore K, Dailey A, Agur A. Moore Anatomía con Orientación clínica. Philadelphia: Lippincott Williams & Wilkins, 2013.
  • 349. 350
  • 350. 351 7.2 Apendicitis Aguda Werner K, Muñoz F. Definición La apendicitis aguda es una inflamación del apéndice cecal secundaria a la obstrucción de su lumen. Este proceso inflamatorio puede culminar en graves complicaciones como perforación, absceso, peritonitis y sepsis. Gangrena apendicular Anatomía El apéndice cecal o vermiforme es una prolongación del ciego, en forma de divertículo, que contiene principalmente contenido linfático. Se encuentra normalmente ubicado en la convergencia de las 3 tenias del colon, a 2 cm de la válvula ileocecal. Mide entre 6 y 10 cm de largo y de 3 a 5 mm de diámetro.Estácompuestopormucosa,submucosa,unacapa muscular y una serosa, constituyendo un divertículo verdadero. Anatómicamente tiene una capa muscular circular y otra longitudinal al igual que el ciego, con abundantes folículos linfoidesqueseagrupanenlasubmucosa.Estossonalrededor de 200, los que disminuyen con la edad, encontrándose un máximo entre los 12 y 20 años y ausentes a los 60años. Posee un mesoapéndice independiente que se ubica posterior al ileon terminal. El mesoaéndice contiene la arteria apendicular, rama de la arteria ileocólica y las venas apendicularesquedrenanalasvenasileocólicaymesentérica superior respectivamente, además contiene vasos linfáticos y linfonodos. Se describe que su base se encuentra en la unión de las tenias en el ciego, en un punto anatómico llamado punto de Mc Burney, que consiste en la unión del 1/3 lateral con los 2/3 mediales de la línea que une la espina ilíaca anterosuperior con el ombligo. Por el contrario, su extremo distal tiene múltiples posiciones. Apendicitis aguda
  • 351. 352 Localizaciones del apéndice: (imagen N.° 1 con posiciones del apéndice) • Retrocecal (65.3%): descansa posterior al ciego y puede ser parcial o totalmente extra-peritoneal. • Pélvico (31%): el extremo distal del apéndice descansa hacia o en la pelvis. • Subcecal (2.3%): descansa inferior al ciego. • Preilieal(1%):poranterioralciego,sobreelileonterminal. • Paracólico (0.4%): se ubica en el espacio paracólico derecho, lateral al ciego. • Postileal (0.4%): se ubica posterior al ileon terminal. Epidemiología La apendicitis aguda es una enfermedad que se presenta habitualmente en la segunda y tercera década de vida. Es poco frecuente antes de los 5 y después de los 50 años de edad, a los 70 años el riesgo de apendicitis es < 1%. Su incidencia general es de 10 por cada 10.000 pacientes, la cual se ha mantenido estable en los últimos años. Es más frecuente en mujeres con una relación de 1.3:1, diferencia que aumenta en el período de pubertad. Existe una mayor incidencia de apendicitis en países industrializados debido al bajo consumo de fibra y exceso de azúcares refinados de las dietas occidentales. Posiciones delapéndice
  • 352. 353 Fisiopatología La apendicitis aguda ocurre por la obstrucción proximal del lumen apendicular. Los fecalitos son su principal causa, presentes en hasta un 50% de las apendicitis agudas y cercano al 90% de las apendicitis gangrenosas, otra causa frecuente de apendicitis es la hiperplasia linfoide, siendo esta más frecuente en niños. Otras causas menos frecuentes pueden ser tumores, impactación de bario por estudios contrastados, parásitos, cuerpos extraños, etc. Una vez obstruida la luz del lumen, se produce una acumulación de secreciones normales del apéndice y un sobrecrecimiento bacteriano con aumento de la presión intraluminal. Esta presión provoca distensión del apéndice, la que estimula las fibras viscerales aferentes provocando un dolor inespecífico difuso a nivel periumbilical que puede asociarse a náuseas y vómitos (dolor visceral). Cuando la presión intraluminal excede la presión venosa, ocurre una trombosisdelas venasapendiculares, obstruyendoelretorno venoso y produciendo congestión y aumento del volumen apendicular, con la congestión vascular la mucosa se vuelve hipóxica y ulcerada, favoreciendo la invasión bacteriana. El proceso inflamatorio al progresar invade la serosa y el peritoneo parietal, provocando el dolor específico en la fosa ilíaca derecha (dolor parietal). A medida que el proceso inflamatorio progresa, disminuye el flujo arterial culminando en infarto, necrosis y perforación del apéndice. Los microorganismos involucrados en la apendicitis aguda son: Escherichia coli, Bacteroides fragilis, Streptococcus viridans, Enterococcus sp, Pesudomonas sp. entre otros. Clínica Como en todas las patologías, la historia, cronología de los síntomas y la evaluación del paciente son los datos más importantes para el diagnóstico de esta enfermedad. Síntomas Dolor abdominal: es el síntoma cardinal de la apendicitis. Comienza como un dolor tipo visceral y de una intensidad moderada, de localización referida como epigástrica o periumbilical, que migra a fosa ilíaca derecha al cabo de 4 a 12 horas del inicio del cuadro. Esta cronología se encuentra aproximadamente en el 60% de los pacientes. Existencondicionesespecialesenqueeldolorsemanifiestaen otras localizaciones, como es el caso del apéndice retrocecal, el cual dará molestias en el dorso o flanco derecho. Si el apéndice se encuentra en posición pelviana, el dolor será hipogástrico y puede acompañarse de molestias urinarias o defecatorias. En las mujeres embarazadas, dependiendo de las semanas de gestación, el dolor se manifiesta en flanco e hipocondrio derecho por el desplazamiento del apéndice hacia superior por el útero grávido. Anorexia: presente en casi la totalidad de las apendicitis agudas y comienza posterior al inicio del dolor abdominal. Vómitos y nauseas: presentes en el 50-60% de los casos, pero son poco frecuentes y de escasa cuantía. Al igual que la anorexia se manifiestan después del inicio del dolor. Constipación y diarrea: ambos síntomas pueden estar presentes en una apendicitis aguda. Signos Fiebre moderada: entre un grado y un grado y medio por sobre su basal. Taquicardia: en relación con la hipertermia. Dolor a la palpación: según la localización del apéndice, generalmente presente al palpar el punto de Mc Burney. Se puede encontrar al examen físico signos indirectos de apendicitis comodolorenFIDdurantemaniobras de valsalva, defensa muscular y rigidez abdominal. Signo de Blumberg: dolor a la descompresión en fosa ilíaca derecha. Indica irritación peritoneal. SignodeRovsing:aparicióndedolorenelpuntodeMcBurney mientras se palpa o se percute la fosa ilíaca izquierda. Indica irritación peritoneal. Signo de Dunphy: dolor en la FID al hacer toser al paciente. Indica irritación peritoneal. Signo del Psoas: elevación de la extremidad inferior derecha contra resistencia. Es positivo cuando aparece o aumenta el dolor en FID eindicaque el apéndicese encuentra retrocecal. Signodelobturador:dolorenelhipogastrioalrotarinternamente el muslo derecho. Indica apéndice en posición pélvica. Cuando el apéndice se encuentra retrocecal, los signos son más leves, lo que puede dificultar el diagnósticotemprano. Existe una relación directa entre la intensidad de los síntomas y signos con el tiempo de evolución del cuadro.
  • 353. 354 Laboratorio La mayoría de los pacientes tiene una leucocitosis moderada condesviaciónizquierda,conrecuentosentre10.000y18.000 células por mm3, este hallazgo apoya el diagnóstico, pero no lo descarta si está ausente. Otro examen que ha demostrado utilidad es la elevación de la proteína C reactiva (PCR), la cual se altera precozmente (menos de 12 horas) en rangos moderados. Si se obtiene una PCR en rangos altos, se debe sospechar una apendicitis complicada con absceso, gangrena o peritonitis. Siempre se debe solicitar subunidad beta en mujeres en edad fértil con dolor abdominal para descartar embarazo y orina completa ante sospecha de infección urinaria o cólico renal. Imágenes El diagnóstico de apendicitis aguda es clínico, sin embargo, muchas veces es recomendable apoyarse con imágenes para definir la conducta por seguir, pero si se tiene la certeza diagnóstica, no se debe retrasar la apendicectomía con exámenes complementarios. De preferencia se deben estudiar con imágenes a pacientes de difícil evaluación,como mujeres en edad fértil y grupos etarios extremos, además se recomienda estudiar previamente con imágenes a aquellos pacientes cuyo cuadro tiene 5 o más días de evolución, esto es por la eventual presencia de complicaciones, tales como abscesos apendiculares, peritonitis o plastrón apendicular. Existen varias imágenes que permiten evaluar el apéndice cecal, sin embargo, las dos más útiles son la ecotomografía abdominal y la tomografía axial computarizada (TAC). Ecotomografía abdominal: en este examen el apéndice se describe como una estructura con un lumen anecogénico rodeado de una pared hiperecogénica adyacente el ciego. Tiene una sensibilidad del 76 – 96% y una especificidad de 47 -94%; este rango se explica por las diferentes técnicas de compresión e interpretación de las imágenes, siendo este examen operador dependiente. El beneficio de este examen es quenoutilizaradiaciónparaserrealizadoporloquepodríaser de elección en pacientes jóvenes, principalmente en mujeres en edad fértil. Los criterios diagnósticos de apendicitis por ecotomografía son: • Diámetro transverso del apéndice de 6 a 7 mm (S100%; E64%). • Apéndice no compresible. • Estructura con lumen anecogénico con pared gruesa hipercogénica. • Presencia de un apendicolito en extremo proximal y/o ausencia de gas en el lumen del apéndice. • Vascularización acentuada en la pared apendicular al doppler color. • Cambios inflamatorios en la grasa periapendicular. TAC: el TAC de abdomen y pelvis con contraste endovenoso tiene una sensibilidad alta que fluctúa entre 87 al 100% y una especificidad de 95 a 99%. La desventaja es la utilización de altas dosis de radiación para ser realizado por lo que debería evitarse en pacientes en edad fértil y en mujeres embarazadasº. Los hallazgos sugerentes de apendicitis son: • Apéndice alargado de > de 6 mm de diámetro (S93%; E92%). • Pared apendicular engrosada. • Cambios inflamatorios en la grasa periapendicular. • Hipercaptación de contraste en la pared a pendicular. • Presencia de gas extraluminal. • Presencia de uno o más apendicolitos.
  • 354. 355 Imagen 1 TAC abdomen y pelvis con contraste. Corte coronal. Se evidencia apéndice cecal aumentado de tamaño compatible con apendicitis aguda. Tratamiento El tratamiento de elección de la apendicitis aguda es la apendicectomía,conaseoquirúrgicoydrenajedecolecciones que puedan presentarse, la cual se puede realizar por técnica abierta o laparoscópica. El manejo preoperatorio incluye hidratación y antibioterapia que cubran a los microorganismos más frecuentes ya señalados con anterioridad. El esquema inicial generalmente es una Cefalosporina de tercera generación asociado a un antianaerobio (ejemplo: Ceftriaxona 2 gramos e.v. cada 24 horas asociado a Metronidazol 500 mg e.v. cada 8 horas). La duración de la antibioterapia dependerá de los hallazgos intraoperatorios, esta se puede extender desde una dosis única a un tratamiento por 7 - 10 días en caso de complicaciones, tales como abscesos, perforación apendicular o peritonitis localizada o difusa. Vías de Abordaje transverso hasta llegar a la fascia transversal, la cual se abre accediendo al peritoneo. La apertura del peritoneo debe ser cuidadosa, evitando lesionar algún asa intestinal adyacente. Una vez ingresado a la cavidad abdominal, se realiza una exploración visual o digital para identificar la posición del apéndice. Mediante disección roma se libera el apéndice de posibles adherencias. Posteriormente, se liga y secciona el mesoapéndice, lo que permite traccionar el apéndice para ligarlo y seccionarlo a nivel de su base. Por último, se realiza aseodelacavidadabdominalconabundantesuerofisiológico y se cierra la incisión mediante cierre por planos. Apendicectomía laparoscópica La apendicectomía laparoscópica se realiza con el paciente en decúbito dorsal. Se instalan 3 trócares, uno umbilical de 5 o 10 mm y otros 2 accesorios de 5 o 10 mm cuya posición puede variar según la preferencia del cirujano (ejemplo: suprapúbico, FII, FID, línea media, etc.) Posteriormente, se explora la cavidad abdominal identificando el apéndice y descartando cualquier otra patología. Se diseca y coagula el mesoapéndice. Luego, se realiza ligadura y sección de la base apendicular. Se extrae el apéndice en bolsa por el trócar de 10 mm y se realiza aseo de la cavidad peritoneal con suero fisiológico. Por último, se extraen los trócares bajo visión directa. Es importante destacar que la técnica laparoscópica se prefiere en pacientes obesos, pacientes con diagnóstico incierto de apendicitis y en peritonitis difusa, esto porque permiteelaseoylaexploracióndetodalacavidadabdominal. La elección de la técnica quirúrgica recae en el cirujano tratante, quien debe considerar su experiencia, los recursos de cada centro y las ventajas y desventajas de cada técnica. Habitualmente, la apendicectomía laparoscópica, comparándola con la técnica abierta, posee mayores costos económicos y mayor tiempo quirúrgico, además se ha asociado a mayor posibilidad de colecciones intraabdominales posoperatorios, su principal beneficio es el menor dolor posoperatorio, menor estadía hospitalaria y menor tasa de infecciones de herida operatoria, la cual es la complicación más frecuente de la apendicectomía. Además, la posibilidad deexplorar latotalidaddelacavidadabdominalpermitepoder realizar diagnósticos diferenciales en caso de apendicectomía en blanco. Apendicectomía abierta Existen múltiples tipos de incisiones para abordar el apéndice cecal, la más empleada es la incisión de Mc. Burney. Para realizar esta incisión se traza una línea imaginaria que une el ombligo con la espina ilíaca anterosuperior, esta línea se divide en 3 partes iguales y en la unión del tercio externo con los dos internos (punto de Mc. Burney), se traza una incisión oblicuaorientadahaciaelpubis.Luego,serealizaaperturapor planos y divulsión de los músculos oblicuos externo, interno y
  • 356. 357 Complicaciones Tumores Apendiculares Peritonitis: se origina por la perforación del apéndice gangrenoso secundario al proceso inflamatorio. La peritonitis puede ser localizada o difusa. Se maneja mediante apendicectomía asociada a aseo quirúrgico de la cavidad abdominal.Segúnloshallazgos,sedeterminalanecesidadde dejar un drenaje. Se debe mantener con cobertura antibiótica por un período variable de entre 7 a 10 días según respuesta clínica. Absceso apendicular: corresponde a una colección purulentacircunscrita ycontenida por el epiplón ylas vísceras adyacentes. Se manifiesta como una apendicitis asociada a una masa palpable en FID. El manejo primario es el drenaje del absceso, el que puede ser percutáneo bajo TAC o ecotomografía o abierto en caso de ser necesario. Debe estar asociado a tratamiento antibiótico por lo menos durante 21 días (ajustado según cultivos). Plastrón apendicular: se caracteriza por una masa sensible en fosa ilíaca derecha acompañado de fiebre y malestar general, se presenta en cuadros de apendicitis de varios días de evolución, habitualmente más de 5. Este proceso se produce por una inflamación del apéndice que es rodeado por epiplón y asas intestinales que lo cubren e impiden que la ruptura del apéndice termine en una peritonitis. Se maneja mediante tratamiento antibiótico prolongado, mínimo 21 días. La mayoría de los autores recomienda la apendicectomía diferida aproximadamente 3 meses posterior al cuadro, siempre con un TAC de abdomen y pelvis de control previo a la cirugía, esto porque < del 1% de las apendicitisagudas pueden ser secundarias a alguna obstrucción tumoral del apéndice y también a que se ha evidenciado que existe la posibilidad de volver a desarrollar nuevamente un cuadro apendicular en pacientes que han presentado episodios previos. Pileflebitis: corresponde a la trombosis séptica de la vena porta y sus ramas debido a un foco infeccioso en su área de drenaje que posteriormente puede evolucionar con abscesoshepáticos.Laapendicitisagudahasidoconsiderada clásicamente como su etiología más frecuente, pero actualmente se considera a la diverticulitis como la principal causa. Clínicamente, se manifiesta con ictericia, fiebre alta y calofríos. El tratamiento se basa en la antibioterapia de amplio espectro, tratamiento quirúrgico del foco infeccioso abdominal y terapia anticoagulante y trombolítica. Los tumores del apéndice son poco frecuentes y suelen descubrirse incidentalmente durante una apendicectomía. Los tipos de tumores apendiculares son: • Primarios: Benignos: mucocele y pólipos o Malignos: • Carcinoide • Adenocarcinoide o carcinoide mucoso • Cistoadenocarcinoma mucinos • Adenocarcinoma • Otros: estromales, mesenquimales, linfomas, etcétera • Secundarios: Implantes peritoneales de tumores de ovario, colon, melanoma. Mucocele o cistoadenoma mucinoso: Ocurren como resultado de la obstrucción del lumen apendicular con distensióndelapéndiceporacumulacióndematerialmucoide. Pueden ocurrir cambios histológicos que van desde epitelio benigno a adenocarcinoma mucinoso y el riesgo de cáncer depende del tamaño, es decir, a mayor tamaño del mucocele, mayor probabilidad de neoplasia maligna. El tratamiento va depender deltamaño,delcompromiso delabase apendicular y los ganglios del mesoapéndice. • Mucocele < 2 cm, sin afectación de su base: sólo requieren apendicectomía • Mucocele >2 cm, con base comprometida o ganglios sospechosos: Hemicolectomía derecha. Durante la cirugía se debe procurar no romper el mucocele, ya que aumentan las probabilidades de diseminación de células epiteliales del líquido mucoide por toda la cavidad abdominal. Este cuadro se conoce como pseudomixoma peritoneal o carcinomatosis mucinosa. Por lo general son neoplasiaspocoagresivas,debidoaquegeneralmentenodan metástasis ganglionares o hepáticas, sin embargo, si tienen recidiva locorregional. El tratamiento de este cuadro consiste en la apendicectomía inicial y luego, en un segundo tiempo, citorreducción y quimioterapia intraperitoneal hipertérmica. Carcinoide: Son tumores neuroendocrinos constituidos habitualmente por células enterocromafines. Se presentan en hombre entre 40-50 años y por lo general están localizados al diagnóstico. Su comportamiento es benigno en la mayoría de los casos. El tratamiento va depender del tamaño, del compromiso de la base apendicular e invasión del mesoapéndice.
  • 357. 358 • Carcinoides < 1 cm, localizados en el extremo del apéndice: apendicectomía • Carcinoides>1cm,concompromisodelabaseoinvasión de mesoapéndice: hemicolectomía derecha. Existe una variante de los carcinoides, denominada adenocarcinoide o carcinoide mucinoso, que comparte característicastantodelcarcinoidecomodeladenocarcinoma y presenta un comportamiento más agresivo. Su tratamiento consiste en una hemicolectomía derecha + ooforectomía (si es postmenopáusica) +/- quimioterapia adyuvante. Adenocarcinoma: Están presentes en menos del 1% de las apendicectomías. Es más frecuente el de tipo mucinoso. Su tratamiento consiste en la hemicolectomía derecha siempre que el tumor invada más allá de la mucosa. Bibliografía 1. Brunicardi FC, Andersen DK, Billiar TR, Dunn DL, Hunter JG, Matthews JB, Pollock RE. Schwartz´s Principles of Surgery. 10th Edition. United States. The McGraw-Hill Companies, Inc; 2014. 2. Moore K, Dalley A, Agur A. Clinically Oriented Anatomy. 5th Edition. United States. Lippincott Williams & Wilkins, 2006. 3. Wray C, Kao L, Millas S, Tsao K, Ko T.Acute Appendicitis: Controversies in Diagnosis and Management. Curr Probl Surg 50 (2013) 54-86. 4. Prystowsky J, Pugh C, Nagle A. Apendicitis. Curr Probl Surg 2005;42:694-742. 5. Lowry S, Hong J. Appendicitis and Appendiceal Abscess. In: Fischer J, Bland K. Mastery of surgery. Lippincott Williams & Wilkins. 2007.
  • 358. 359 7.3 HemorragiaDigestivaBaja Villalobos B, Zúñiga JM, Fernández M. Definición La hemorragia digestiva baja (HDB) corresponde al sangrado digestivo distal al ángulo de Treitz (unión duodeno-yeyunal), evidenciable como salida hemática por el ano o acompañada de deposiciones (rectorragia, hematoquecia). En este concepto amplioseincluyeelsangradoproducidoporpatologíaperianal (hemorroides, fisura, etc.), sin embargo, este capítulo se enfoca principalmente en las causas de origen intestinal (intestino delgado y colorrectal). Epidemiología Alrededor del 20% de las hemorragias digestivas (HD) corresponde a HDB y de ellas el 95%1 es de origen colónico. La HDB tiene una incidencia anual reportada en EE.UU. de 20,5 a 27 por 100.000 aproximadamente, siendo levemente mayor en hombres. En general, presenta una mortalidad menor quelashemorragiasdigestivasaltas(HDA),alcanzandocifras de 2-4%2 , sin diferencias por género. También es importante mencionar que en un 5-20% de los casos no será posible determinar la causa del sangrado. Factores de Riesgo Dentro de los principales factores de riesgo, que deben ser evaluados dentro de la anamnesis de todo paciente con HDB, se encuentran: fármacos (AINEs, Aspirina, tratamiento anticoagulante), historia previa de diverticulosis, historia personal o familiar de cáncer de colon, historia de irradiación pélvica por neoplasias, coagulopatías primarias y adquiridas (por ejemplo, en la cirrosis hepática), historia de enfermedad inflamatoriaintestinal(EII),procedimiento colorrectalreciente (por ejemplo, polipectomía colonoscópica). 1 Towsend CM, Beauchamp RD, Evers BM, Mattox KL. Sabiston Textbook of Surgery, 19th ed. Philadelphia, PA Elsevier Saunders; 2012. 2 Crovari F., Manzor M. Manual de Patología quirúrgica. 1.a ed. Santiago, Chile: Ediciones UC, Facultad de Medicina Pontificia Universidad Católica de Chile; 2014.
  • 359. 360 Etiología Es de gran utilidad clínica ordenar las causas de HDB de acuerdo con el grupo etario (tabla1). Tabla 1. CAUSAS HEMORRAGIA DIGESTIVA BAJA ADULTO JOVEN MENOR 60 AÑOS MAYOR 60 AÑOS Divertículo Meckel Divertículos Angiodisplasia Infecciosas Neoplasias Divertículos Enf. inflamatoria intestinal Enf. inflamatoria intestinal Neoplasia Intususcepción Angiodisplasia Colitis isquémica Causa proctológica Causa proctológica Causa proctológica En general, la causa más frecuente de HDB en pacientes de menos de 60 años es de origen hemorroidal o causa proctológica, sin embargo, rara vez producen un sangrado masivo que determina compromiso hemodinámico. La causa más frecuente de HDB en pacientes sobre los 60 años es de origen diverticular, la cual si puede llegar a un cuadro de shock hemodinámico dado el origen arterial del sangrado. Solo un 3-5% de los portadores de divertículos presentan sangrado y en el 80% de los casos el sangrado se detiene espontáneamente. En general, el sangrado se origina en divertículos del colon derecho. Consideración especial debe tener la angiodisplasia, la cual a veces es subdiagnosticada en las colonoscopias, sin embargo, en algunas series publicadas de pacientes mayores alcanza la primera causa de HDB3 . Estas se presentan generalmente en el grupo de mayores de 60 años como un sangrado intermitente o anemia crónica. Rara vez produce hemorragia digestiva masiva y se ubican habitualmente en el ciego y colon ascendente. La mayoría se detiene en forma espontánea. Finalmente,ynoporellomenosimportante,hayqueconsiderar a la colitis isquémica como probable causa de HDB en todo paciente añoso, con antecedentes de cardiopatía, diálisis o paciente grave hospitalizado en unidades de paciente crítico, ya que en todas estas condiciones se puede presentar bajo débito del territorio esplácnico, provocando isquemia de la mucosa del colon y luego sangrado. Generalmente, el sangrado no es mayor, responden a soporte médico y se debe estar atento a futuras estenosis de la zonaisquémica. Diagnóstico Clínica El enfrentamiento clásico de un paciente con HDB ocurrirá, la mayoría de las veces, en el servicio de urgencia. Se deberá seguir de manera ORDENADA Y SECUENCIAL una historia clínica lo más completa posible. Esta historia debe incluir: 1. Anamnesis remota: búsqueda de comorbilidades, de factores de riesgo descritos previamente y de episodios previos de HDB. 2. Anamnesis próxima: - Búsqueda de síntomas clásicos de HDB: hematoquecia (sangre fresca u oscura acompañada de deposiciones) y rectorragia (sangre fresca sin deposiciones). Tiempo desde su aparición, cuantía aproximada, asociación o no a fiebre, diarrea, dolor abdominal o dolor defecatorio. Considerar siempre: * Que un 15% de pacientes con hematoquecia pueden ser de origen digestivo alto4 . Interrogar por sintomatología digestiva alta (reflujo, acidez, endoscopias previas, tratamiento con omeprazol). * Que,sibienesraro,pacientesconHDBpuedenpresentarse como melena (sangrado de origen en intestino delgado). - Búsqueda de síntomas de síndrome anémico (es diferente 3 Liao Z, Gao R, Xu C, Li Z. Indications and detection, completion, and retention rates of small-bowel capsule endoscopy: a systematic review. Gastrointest Endosc. 2010; 71: 280-286. 4 Farrell JJ, Friedman LS. Review article: the management of lower gastrointestinal bleeding. Aliment Pharmacol Ther. 2005; 21:1281-98.
  • 360. 361 el enfrentamiento de un paciente con primer episodio de sangrado versus un paciente con sangrado de larga data): fatiga, decaimiento, compromiso del estado general. - Búsqueda de síntomas de cáncer colorrectal: fatiga, anorexia, baja de peso, cambio hábito intestinal. 3. Examen físico: Los hallazgos dependerán de la cuantía del sangrado. - Primero, siempre, ver los signos vitales: pueden estar normalesopuedetenersignosinicialesdeshock:taquicardia, hipotensión. Con solo los signos vitales, se puede estimar la cuantía del sangrado5 : * Taquicardia: pérdida del 15% de la volemia aprox. * Hipotensión ortostática: 15-40% de la volemia aprox. * Hipotensiónendecúbito:másdel40%delavolemiaperdida. - Aspecto del paciente: facie pálida, perfusión periférica, somnoliento, no responde con claridad las preguntas. - Examen secuencial de la cabeza a los pies: mucosas pálidas, yugulares planas, abdomen en busca de masa abdominal, frente a sangrado activo podemos encontrar ruidos hidroaéreos aumentados, extremidades frías, pulsos distales no palpables. - Nunca olvidar TACTO RECTAL para ir en busca dirigida de cáncer de recto e inspección anal buscando patología orificial (hemorroides sangrante, fisura anal, cáncer anal). En suma, tanto la anamnesis como el examen físico nos entregaran una estimación de la causa del sangrado (de acuerdo con grupo etario), magnitud del sangrado y del estado del paciente. Así, constantemente seguiremos evaluando signos vitales, estado de conciencia, diuresis y coloración de piel y mucosas para determinar si nuestro paciente va respondiendo al tratamiento inicial. Laboratorio Se deben solicitar con criterio y considerando la gravedad del paciente. 1. Hemograma: permite evaluar la repercusión del sangrado, anemia aguda o crónica, plaquetopenia. 5 Cappell MS, Friedel D. Initial management of acute upper gastrointestinalbleeding:frominitialevaluationuptogastrointestinal endoscopy. Med Clin North Am. 2008; 92:491. 2. Pruebas de coagulación (fundamental en paciente con tratamiento anticoagulante). 3. Grupo sanguíneo ABO y RH: solicitar siempre por eventual necesidad de transfusión. 4. Otros exámenes de acuerdo con comorbilidades o sospecha de alguna patología en particular. Estudio Unconceptofundamentalparaelcirujanoesenfocarsuestudio principalmente en determinar la ubicación del sangrado más que la causa del sangrado. Esto, dado que ante la necesidad de realizar un procedimiento o una cirugía de urgencia es vital conocer la ubicación yasí evitar una eventual colectomía total de urgencia dado su alta mortalidad. - Endoscópico -Endoscopia digestiva alta: siempre considerarla ante la sospecha de que el sangrado pudiera ser alto. - Colonoscopía: permite determinar el origen del sangrado y realizar un tratamiento a la vez. En general, de elección en paciente hemodinámicamente estable. Las opciones terapéuticas son: inyectoterapia, termocoagulación o el uso de clips. Imágenes - Angiografía: procedimiento de radiología intervencional diagnóstico y terapéutico. Utiliza medio de contraste y radiación. Permite captar flujos de sangrado desde 1ml/ min; permite embolizar el vaso sangrante mediante Coils o inyección de biopolímeros. Efectividad de un 70-90%6 . Es una buena opción en paciente con sangrado activo y hemodinámicamente inestable. Complicaciones asociadas al procedimiento: arritmias, isquemia intestinal. - AngioTAC de abdomen y pelvis: examen de imagen solo diagnóstico. Corresponde a un TAC de abdomen y pelvis con contraste, pero incluye dentro de la técnica de toma del examen una fase arterial. Permite contrastar el sistema vascular del abdomen, facilitando la evidencia de sangrado activo. Ampliamente disponible. Se debe mantener precaución con función renal y alergia a medio de contraste. - Cintigrafía de glóbulos rojos: examende mayor sensibilidad. Permite captar flujos de sangrado desde 0,1-0,5 cc/min, solo diagnóstico, no terapéutico. 6 Crovari F, Manzor M. Manual de Patología quirúrgica. 1.a ed. Santiago, Chile: Ediciones UC, Facultad de Medicina Pontificia Universidad Católica de Chile; 2014.
  • 361. 362 Tratamiento (Enfrentamiento práctico en contexto de atención en servicio de urgencia o paciente hospitalizado). El tratamiento de un paciente con HDB dependerá de si a su ingreso se encuentra estable o inestable hemodinámicamente. 1. En paciente hemodinámicamente estable, sin sangrado activo, con sangrado autolimitado de escasa cuantía: historia clínica ordenada y secuencial. Examen físico, exámenes de laboratorio básico. Si la caída de hematocrito es significativa, probablemente el mejor examen de estudio en este contexto seráunacolonoscopíadentrode24-48horasconpreparación de colon adecuada (sin urgencia, pero hospitalizado). En pacientes jóvenes, sin grandes comorbilidades, que no impresiona sangrado de gran cuantía y sin compromiso hemodinámico se puede plantear estudio ambulatorio. Importante tener claro que NO TODO PACIENTE CON HDB SE HOSPITALIZA. 2. Paciente con sangrado activo, taquicárdico, hemodinámicamente inestable: En este contexto, el orden secuencialdelahistoriaclínicadebepostergarse,dandopaso primero al manejo y reanimación inicial. En la práctica, esta decisión puede tomarse, incluso antes de saludar al paciente, solo con verlo entrar al box de atención (en caso de paciente con compromiso hemodinámico o cuantía importante del sangrado: pálido, somnoliento, taquicárdico). En el manejo de este tipo de pacientes cobra prioridad la reanimación: -Instalación de 2 VÍAS PERIFÉRICAS GRUESAS (al menos 16 G) y clasificar, hemograma. -Administración cuantiosa de cristaloides en bolo (suero fisiológico 1000 cc a pasar rápido, lo cual se puede volver a repetir). -Instalación SNG para descartar hemorragia digestiva alta. -Evaluación de necesidad de transfusión de unidades de glóbulos rojos, dependiendo de la cuantía de la anemia (recordar que 1 unidad de glóbulos rojos aumenta en 1 mg/ dl la hemoglobina y en 2 a 3 puntos el hematocrito). -Evaluar necesidad de Angiografía o AngioTAC de urgencia. -Enestecontexto,elpacientetieneindicacióndehospitalización en una Unidad de Paciente Crítico (UPC). Cirugía en paciente con HDB: En la gran mayoría de los casos (90%) se podrá controlar el sangrado con soporte básico y medidas mínimamente invasivas, sin embargo, existen algunas situaciones en que todos los recursos previamente expuestos no son suficientes y se requiere una cirugía de urgencia que permita detener el sangrado y salvar la vida del paciente. Indicaciones de cirugía de urgencia: 1. Lesión identificada con sangrado activo, que no cede utilizando otros métodos. 2. Hipotensiónpersistentepeseasoportemédico(transfusión de más de 5-6 unidades GR en 24 horas para mantener hemodinámicamente estable al paciente). 3. Último recurso en paciente con sangrado activo en donde no se logra identificar la lesión. El procedimiento por realizar corresponde a una COLECTOMÍA total o parcial. Esto dependerá de la causa del sangrado y de si se logra o no identificar el sitio del sangrado. Elhaberidentificadolalesiónenelpreoperatoriopermitiráuna cirugíamásconservadora(colectomíaparcial),disminuyendo asílatasaderesangrado ylamortalidadasociada alacirugía. De lo contrario, si no se identifica el sitio de sangrado en el estudio preoperatorio, se deberá hacer una colectomía total, la cual tiene una mortalidad de 40-50% y riesgo de resangrado de 10%. Conclusiones • LaHDBesuncuadrofrecuenteenlosserviciosdeurgencia con el cual el médico general debe estar familiarizado. • El diagnóstico y evaluación de su gravedad es principalmente clínico (anamnesis, examen físico y laboratorio básico). • Su manejo debe ser estructurado y de acuerdo con las herramientas diagnósticas y terapéuticas disponibles en cada centro. • La cirugía de urgencia en HDB es muy infrecuente, pero debe ser indicada oportunamente.
  • 362. 363 Bibliografía 1. Crovari F, Manzor M. Manual de Patología quirúrgica. 1.a ed. Santiago, Chile: Ediciones UC, Facultad de Medicina Pontificia Universidad Católica de Chile; 2014. 2. Towsend CM, Beauchamp RD, Evers BM, Mattox KL. Sabiston Textbook of Surgery, 19th ed. Philadelphia, PA Elsevier Saunders; 2012. 3. Cameron JL, Cameron AM. Current Surgical Therapy. 11th ed. Philadelphia, PA: Elsevier Saunders; 2013. 4. Cappell MS, Friedel D. Initial management of acute upper gastrointestinal bleeding: from initial evaluation up to gastrointestinal endoscopy. Med Clin North Am. 2008; 92:491. 5. Farrell JJ, Friedman LS. Review article: the management of lower gastrointestinal bleeding. Aliment Pharmacol Ther. 2005; 21:1281-98. 6. Strate LL. Lower GI bleeding: epidemiology and diagnosis. Gastroenterol Clin North Am. 2005;34:643. 7. Andrei G, Popa B, Gulie L, et al. Highlighted Steps of the Management Algorithm in Acute Lower Gastrointestinal Bleeding - Case Reports and Literature Review. Chirurgia. 2016; 111: 74-79. 8. Liao Z, Gao R, Xu C, Li Z. Indications and detection, completion, and retention rates of small-bowel capsule endoscopy: a systematic review. Gastrointest Endosc. 2010; 71: 280-286.
  • 363. 364
  • 364. 365 7.4 EnfermedadDiverticular Introducción Ramírez J, Ready J, Irarrázabal J. La presencia de divertículos en el colon es un patología común y aumenta en prevalencia en poblaciones de mayor edad. Es así como 50% de los pacientes de 50 años tienen divertículos, aumentando a un 67% en pacientes de 89 años. De éstos 3/4 permanecerán asintomáticos durante su vida, el resto presentará síntomas de diferente magnitud1 . Los divertículos en colon, en la mayoría de los casos, corresponden a pseudodivertículos o divertículos falsos ya que son producto de la herniación de la mucosa y submucosa a través de la capa muscular de la pared colónica. 1 Stollman N, Raskin JB. Diverticular disease of the colon. Lancet 2004;363:631-9. Anatomía divertículo
  • 365. 366 Su formación estaría determinada por un mecanismo de pulsión, es decir, aumento de presión intraluminal del colon. Se ubican entre las tenias, en áreas de debilidad de la pared intestinal,zonasporlascualeslosvasossanguíneospenetran la capa muscular (vasa recta). Los divertículos verdaderos, por otro lado, son aquellos que incluyen todas las capas del colon, son menos frecuentes y, por lo general, tienen un origen congénito. Para el estudio y manejo de esta patología es necesario tener claro los conceptos que se relacionan con ella, así nos referiremos entonces a: • Diverticulosis: Presencia de divertículosasintomáticos. • Diverticulitis: Presencia de divertículos sintomáticos, ya sea con manifestación aguda (infección, sangrado) y/o crónicas (estenosis, dolor crónico, fístulas). 1. Simple o no complicada: diverticulitis con inflamación de la pared, de la grasa pericolónica y/o flegmón asociado, pero sin complicaciones agregadas. Por lo general, responden a manejo médico ambulatorio con antibióticos. 2. Complicada: diverticulitis asociado a abscesos, fístulas, hemorragia, obstrucción y/o perforación. La clasificaciónde Hinchey se utiliza para clasificar la diverticulitiscomplicada. Fisiopatología de la diverticulosis El origen de la diverticulosis está asociado a un aumento de la presión intraluminal del intestino y a un debilitamiento de la pared. Además, existe una notoria hipertrofia de la capa muscular circular. Frente a una dieta alta en fibra, la presión que tiene que ejercer el colon para que el peristaltismo sea eficiente en eliminar las deposiciones almacenadas es baja (similar a la atmosférica), ya que habrá alto contenido de estas en su lumen. Por el contrario, frente a una dieta baja en fibras, la presión que tendrá que ejercer será considerablemente mayor, debido al menor contenido intestinal y la consistencia dura que tendrá por la ausencia de fibras. El colon sigmoides es el segmento con el menor diámetro del intestino grueso y, por consiguiente, donde se generala mayor presión. Es por esta razón que la diverticulosis afecta más a esta porción que al resto del colon, estando confinada en un 50% de los individuos. La siguiente área mayormente comprometida es el colon descendente, dando cuenta de 40% de los casos y en un 5 a 10% está comprometido todo el colon. Clínica La diverticulitis puede ser simple o complicada (Absceso, fístula o perforación libre), siendo la primera un 75% de los casos y la segunda el 25% restante, respectivamente2 . Generalmente, una diverticulitis simple se correlaciona con síntomas leves y una complicada, con síntomas moderados a severos y elevación de parámetros inflamatorios. Anamnesis La presentación clásica es el dolor en el cuadrante abdominal inferior izquierdo, descrito como tipo cólico, que puede irradiarse a hipogastrio, ingle izquierda y dorso. Se le ha descrito como “apendicitis del lado izquierdo”. Cambios en el hábito intestinal son frecuentes (generalmente constipación), tanto en diverticulitis simples como complicadas. Síntomasenunacuadroseverodediverticulitis(sospechamos de una diverticulitis complicada): • Dolor localizado/difuso severo en cuadrante inferior izquierdo. • Fiebre, escalofríos. • Anorexia, náuseas y vómitos. • Urgencia miccional (flemón vesical-irritación vesical 2 Dr. T. Murphy Prof. R.H. Hunt Prof. M. Fried Dr. J.H. Krabshuis. Diverticular disease. Practice Guideline .World Gastroenterology Organization. 2007
  • 366. 367 directa desde el proceso inflamatorio pericólico, por su cercanía con el sigmoides). Otros síntomas de irritación vesical pueden estar presentes, tales como disuria. • Neumaturia: signo inequívoco de fístulización entre un absceso y la vejiga. Examen físico Lo más común de encontrar al examen físico, es sensibilidad en el cuadrante abdominal inferior izquierdo. También se puede encontrar: • Defensa muscular voluntaria en musculatura abdominal izquierda. • Masa sensible la palpación de abdomen inferior izquierdo, esto puede representar un flegmón o absceso. • En casos de macro perforación (con derrame de contenido intestinal dentro del peritoneo),podemos encontrar dos escenarios: • Absceso pélvico o de abdomen inferior: dolorlocal y signos de irritación peritoneal localizados • Perforación libre: dolor abdominal y signos de irritación peritoneal generalizados.(Peritonitis) • Altactorectaly/ovaginalpuederevelarunamasasensible yfluctuante, típica de un absceso pélvico peridiverticular. Laboratorio Dentro de los exámenes de laboratorio se debe solicitar los parámetros inflamatorios. Al hemograma podrá observarse unaleucocitosis yelevacióndelaproteínaCreactiva.Además se debe complementar con exámenes básicos como función renal y pruebas de coagulación. Imagenología Un diagnóstico basado únicamente en criterio clínico, estará incorrecto en un 33% de los casos3 . Rx torácica/ abdominal: Generalmente no muestra hallazgos específicos para diverticulitis. Un neumoperitoneo puede verse en 11 % de los pacientes con diverticulitis aguda. Solo un 30 - 50% de las radiografías de abdomen realizadas en pacientes con diverticulitis mostrarán anormalidades. Los hallazgos más comúnmente encontrados son: • Dilatación del intestino delgado o grueso. • Obstrucción intestinal. • Densidades de tejido blando sugestivas de absceso.2 Tomografía computarizada (TC) de abdomen y pelvis Es el examen imagenológico de elección. Revela de manera fiable la ubicación del proceso inflamatorio, la extensión, la presencia de abscesos y la participación de otros órganos, revelando también complicaciones secundarias como obstrucción ureteral o fístula vesical. La diverticulitis es considerada como un proceso predominantemente extraluminal. La TC ofrece el beneficio de evaluar tanto el intestino como el mesenterio, con una sensibilidad del 69 - 98 % y una especificidad del 75 - 100 %. Los hallazgos principales son: • Engrosamiento de la pared intestinal. • Cambios inflamatorios peri-sigmoídeos: grasa mesentérica inflamada. • Absceso asociado. • Gas extraluminal. • Líquido libre. • Divertículos visibles. Procedimientos endoscópicos El uso de cualquier tipo de endoscopía en diverticulitis aguda estácontraindicado,yaqueseinsuflaelcolon,locualaumenta lapresiónintracolónicaypuedellevaraperforaciónintestinalo alaumentodelasalidadecontenidointestinalporeldivertículo ya perforado. 3 Young-Fadok TM, Roberts PL, Spencer MP, Wolff BG. Colonic diverticular disease. Curr Prob Surg 2000;37:457–514.
  • 367. 368 Clasificaciones de severidad La clasificación clínica de la gravedad de la diverticulitis complicada puede ayudar a guiar la toma de decisiones terapéuticas. La clasificación de Hinchey es la que se describe con mayor frecuencia. Grado deHinchey Descripción I nflamación pericólica (localizada)+absceso pericolónico II Absceso retroperitoneal o pélvico III Peritonitis purulenta difusa IV Peritonitis fecaloidea difusa
  • 369. 370 Tratamiento Manejo médico Pacientes con diverticulitis no complicada con dolor moderado, quenopresentensíntomassistémicos,puedensermanejados demaneraambulatoriaconesquemasantibióticos durante10 a 14 días, es importante cubrir Escherichia coli y Bacterioides Fragilis. El paciente debería presentar alivio del cuadro pasadas 48 horas desde el inicio de la terapia antibiótica. Si esto no ocurre, debe consultar nuevamente, ya que podría evolucionar a una diverticulitis complicada. Posterior almanejodelcuadrodiverticular, aproximadamente 4 a 6 semanas después de terminado el tratamiento, debe solicitarse una colonoscopía para evaluar la extensión dela enfermedad diverticular, posibles complicaciones (estenosis, deformidad) y diagnóstico diferencial de cáncer. Pacientes con diverticulitis aguda complicada o síntomas/ signos severos deben hospitalizarse. Estos pacientes deben ser manejados con reposo intestinal hasta el cese del dolor y disminución de parámetros inflamatorios, hidratación con fluidos y antibióticos vía endovenosa. Pronóstico: Del 15 al 30% de los pacientes admitidos para el manejo intrahospitalario de la diverticulitis requerirán de cirugía durante la hospitalización, con unriesgo demortalidad asociado de un 18%. Manejo quirurgico de la diverticulosis complicada Una intervención quirúrgica será necesaria frente a las siguientes complicaciónes: -Perforación libre con peritonitis genralizada (siendo poco común, pero asociada al mayor riesgo de mortalidad, 35%.) -Obstrucción - Absceso mayor a 4 cm de diámetro no accesible vía drenaje percutáneo. - Fístula (ocurre en 2% de los pacientes con diverticulitis aguda, siendo la más común la colo-vesical, 65%). -Deterioro clínico o falla del tratamiento conservador. La cirugía consiste en resecar el segmento colónico involucrado.Enformahabitualeselcolonsigmoides.Segúnel compromiso inflamatorio, se podrá realizar una sigmoidectomía con anastomosis primaria, o bien, un procedimiento de Hartmann,enelcualsecierraelrectoysedejaunacolostomía terminal, con una restauración de la continuidad intestinal en un segundo tiempo. Indicación de cirugía electiva - Dos o más episodios de diverticulitis suficientemente severa como para establecer una causa de hospitalización. Aproximadamente entre un 22% y un 30% los pacientes que han presentado un episodio de diverticulitis, presentarán un segundo episodio.dentro de los primeros 18 meses. - Todos los pacientes que presenten un primer episodio de diverticulitis aguda complicada. - Cualquier episodio de diverticulitis asociado a síntomas obstructivos. - Incapacidad de diferenciar entre diverticulitis y cáncer de colon. El objetivo de la cirugía electiva es resecar los segmentos de colon con divertículos en su superficie. Por lo general, es colon sigmoides, sumándose también, en algunos casos, el colon descendente y transverso, en este orden de frecuencia. La cirugía se puede llevar a cabo vía laparoscópica o abierta y se indica de 6 a 8 semanas desde el último episodio de diverticulitis aguda o inflamación. Tratamiento de un absceso - Abscesos pericólicos pequeños (menores a 4 cm), responderán en su mayoría (90%) a tratamiento antibiótico y manejo conservador. - El drenaje percutáneo está indicado en abscesos mayores a 4 cm y en aquellos con mala respuesta al tratamiento. Este se puede hacer con la ayuda de imágenes (TAC o ecografía). - Colecciones multiloculares, abscesos asociados a fístulas entéricas o que contengan material sólido - semisólido, OperacióndeHartmann
  • 370. 371 no deben drenarse con drenaje percutáneo y deben ser manejados quirúrgicamente. Otras complicaciones Fístulas Las fístulas por enfermedad diverticular se presentan generalmente en pacientes añosos y son usualmente colo- vesicales. La presencia de neumaturia debe hacernos sospechar de una fístula. El diagnóstico se establece vía imágenes, siendo comúnmente identificados por una TC abdominal. Se resuelven quirúrgicamente. Sangrado diverticular La enfermedad diverticular sigue siendo la causa más frecuente de hemorragia intestinal baja masiva (30 - 50% de loscasos). Sin embargo,elcáncercolorrectal es lacausa más común de sangrado intestinal bajo, descartando en este tema la patología proctológica (hemorroidal). Se estima que 15% de los pacientes con diverticulosis sangrará alguna vez en su vida. El sangrado es usualmente abrupto, no produce dolor y es de gran volumen, siendo un 33% masivo, requiriendo de transfusión de emergencia. Generalmente, el sangrado cesa en forma espontánea en un 85% de las ocasiones. El sangrado diverticular ocurre debido a que al formarse los divertículosenáreasendondepenetranlosvasossanguíneos de la pared colónica, estos quedan separados del lumen intestinal por una fina capa de mucosa. La mucosa puede ser dañada por contenido intestinal, interrumpiéndose su continuidad, produciéndose sangrado intraluminal. La localización del sangrado no es establecida hasta en un 30 - 40% de los casos. Métodos imagenológicos tales como angiografía selectiva o escaneo radioisotópico pueden detectar correctamente el sitio de sangrado en un 24 - 91% de los casos. Lacolonoscopíaserecomiendaparaestablecereldiagnóstico en sangramiento autolimitado, y en casos de sangramiento moderado que ha cesado, es seguro llevarla a cabo después de 12 – 24 horas transcurrido el episodio. Casos menos severo, la colonoscopía es razonable como procedimiento ambulatorio. ENFERMEDAD DIVERTICULAR DIVERTICULOSIS INFLAMACIÓN/INFECCIÓN (DIVERTICULITIS AGUDA) SANGRADO (HDB) - FISTULAS - DOLOR CRÓNICO - DEFORMIDAD - ESTENOSIS ABCESOS -< 4 CM ABCESOS - > 4 CM PERITONITIS -PURULENTA -FECALOIDEA MANIFESTACIONE S CRÓNICAS MANIFESTACIONE S AGUDAS DIVERTICULITIS AGUDA COMPLICADA DIVERTICULITIS AGUDA SIMPLE
  • 371. 372 Bibliografía 1. Assosiation of coloproctology of Great Britain and Ireland. Colonic diverticular disease. Commissioning guide. 2014 2. PatrickG.Jackson,Colonandrectum.En:StevenR.T.Evans.CourtneyM.Townsend,Jr.,MD;R.DanielBeauchamp,MD;B.MarkEvers,MD; KennethL.Mattox,MD.SabistonTextbookofSurgery:thebiologicalbasisofmodernsurgicalpractice.19thed. Elsevier;2012.52,p.1309-1314. 3. M. Shane McNevin, MD, FASCRS. Diverticulitis. American society of colon and rectal surgeons. Spokane, WA. 2009. 4. Dr. T. Murphy Prof. R.H. Hunt Prof. M. Fried Dr. J.H. Krabshuis. Diverticular disease. Practice Guideline .World Gastroenterology Organization. 2007. 5. Young-Fadok TM, Roberts PL, Spencer MP, Wolff BG. Colonic diverticular disease. Curr Prob Surg 2000;37:457–514. 6. Daniel Feingold, M.D., Scott R. Steele, M.D., Sang Lee, M.D., Andreas Kaiser, M.D. Robin Boushey, M.D., W. Donald Buie, M.D., Janice Frederick Rafferty, M.D. Practice Parameters for the Treatment of Sigmoid Diverticulitis. Diseases of the Colon & Rectum; Clinical Practice Guideline Task Force of the American Society of Colon and Rectal Surgeons. 2014; 57 (3).
  • 372. 373 7.5 PatologíaAnorectalBenigna Calcagno M, Zúñiga JM. Introducción Absceso y Fístula Anorrectal Un motivo de consulta habitual en el servicio de urgencia y consulta ambulatoria es el dolor anal, rectorragia, secreción anal y sensación de masa anal. A continuación, se describen las patologías que con mayor frecuencia producen estos síntomas, las que generalmente pueden ser diagnosticadas y resueltas con una buena historia clínica y examen físico sin requerir mayor estudio. Absceso anal: A nivel del canal anal, en el espacio interesfintérico, se encuentran las glándulas anales que drenan a través de ductos a nivel de la línea pectínea en las criptas anales. La obstrucción de estos ductos y glándulas facilitaría el sobrecrecimiento bacteriano y la formación de abscesos anales (teoría criptoglandular). La mayoría de los abscesos es de ubicación perianal, pero tambiénsepuedenencontrarotraslocalizacionesquepueden hacer más difícil el diagnóstico como la interesfinteriana y supraelevador
  • 373. 374 Los síntomas que motivan la consulta del paciente son habitualmente dolor anal, fiebre y puede haber secreción anal.Eldoloranal,engeneral,esconstanteypuedeempeorar con la defecación. Los abscesos anales son mucho más frecuentes en hombres y se han identificado como posibles factores de riesgo la diabetes e inmunosupresión. El paciente debe ser examinado en posición “fetal” decúbito lateral izquierda. Hallazgos frecuentes son aumento de volumen perianal, con eritema y sensibilidad. El tacto rectal puede ser muy doloroso y solo se recomienda en la medida que el paciente lo tolere. En los abscesos interesfintéricos no se encuentra aumento de volumen perianal, generalmente el paciente no tolera tacto rectal y el diagnóstico solo se consigue con una revisión bajo anestesia en pabellón o con resonancia magnética de pelvis. En pacientes con gran dolor, inflamación, mal olor y eritema extenso de la zona se debe considerar la posibilidad de estar frente a una “gangrena de Fournier”, lo que consiste enuna fasceitisnecrotizantedelperiné,conorigenenzonaanorrectal o vías urinarias, que tiene un comportamiento muy agresivo y puede llevar a sepsis grave. Ante el diagnóstico de absceso anal la conducta debe ser drenaje en pabellón bajo anestesia. Esto permite una exploración adecuada de la zona anorrectal, drenaje amplio del abscesoydescartarabscesosenherradura.Generalmente,el drenaje causa alivio del dolor inmediato y frente a un paciente que persiste con dolor anal y fiebre en el posoperatorio se debe considerar la posibilidad de que el absceso ha sido drenado en forma parcial. En cuanto al uso de antibióticos en el posoperatorio, este se reserva solo para pacientes diabéticos, inmunosuprimidos o con celulitis importante de la zona. Debe estar dirigido a cubrir gram negativos y anaerobios. Fistula anorrectal: Un 40-50% de los pacientes con absceso anal desarrollarán una fistula anorrectal “clínica” en el mediano-largo plazo. Una fístula consiste en una comunicación anormal entre dos superficies epitelizadas, en este caso piel perianal y mucosa canal anal. Esta se manifiesta con secreción anal (mancha ropa interior), generalmente no duele y en ocasiones puede abscedarse y dar origen a nuevo episodio de absceso anal. Así, se entiende al absceso y fistula anorrectal como las diferentes etapas de un proceso fisiopatológico común. El absceso representa el evento agudo y la fistula la etapa crónica. En el examen físico se puede encontrar un orificio fistuloso externo en la piel perianal que se identifica como un nódulo, en ocasiones con tejido granulatorio o salida de secreción turbia. Cuando el trayecto fistuloso es superficial este se logra palpar al tacto rectal. Lasfístulasanorrectalesseclasificansegúnlaclasificaciónde Parks, en interesfintéricas, transesfintéricas, supraesfintéricas y extraesfintéricas. Las interesfintericas y transesfintericas bajas se tratan generalmente con una esfinterotomía. Para las fistulas más complejas, es decir, que comprometen mayor porcentaje del esfínter externo, se describen múltiples técnicas (setón cortante, tapón de fibrina, colgajos, LIFT), sin embargo, ninguna técnica ha logrado demostrar clara superioridad. El principal riesgo en la cirugía de la fistula anorrectal es la incontinencia anal, por lo tanto, el tratamiento ideal de la esta fístula debe poder lograr controlar la infección y síntomas derivados del trayecto fistuloso sin comprometer la continencia anal. Enfermedad Pilonidal Esta consiste en una infección subcutánea en la zona sacrocoxigea, unos 5 cm cefálico al ano, la cual contiene vellos.Loquehabitualmenteseencuentraesunsenopilonidal en línea media interglutea o paramediana asociado a “fositas” pilonidales en línea interglutea (figura 3). Su presentación puede ser con infección aguda, con un seno pilonidal asintomático o con un seno crónico. Si bien no hay claridad si esta es una patología congénita o adquirida, se presenta con mayor frecuencia en pacientes hombres, adultos jóvenes, con abundante vello, pertenecientes
  • 376. 377 Quiste pilonidal granuloma sifilítico, osteomielitis del sacro y alteraciones de la columna (espina bífida, meningocele). Fisura Anal La fisura anal se define como la pérdida de sustancia o herida en el epitelio escamoso, distal a la línea pectínea en el canal anal. Epidemiología La verdadera incidencia de la fisura anal no es bien conocida, puestoquemuchospacientesnoconsultan,acudenadistintos especialistas o se autodiagnostican. A pesar de ello, es una de las consultas más frecuentes en coloproctología por dolor anorrectal(proctalgia)ysepresentaprincipalmenteenadultos jóvenes, sin diferencia entre hombres y mujeres. al ejército y conductores de vehículos, lo que hace sospechar principalmente etiología adquirida. En la presentación aguda los pacientes consultan por dolor en zona sacrocoxigea y secreción cuando hay drenaje espontáneo de pus. En la inspección se identifica eritema y aumento del volumen doloroso en zona sacrocoxigea. Es importante examinar la zona perianal para descartar absceso o fistula anal que sea foco primario. Frente al episodio agudo, estegeneralmenteseresuelvecondrenajeenboxdeurgencia y tratamiento antibiótico por 7 días. Es razonable dar un plazo de un mes, esperando que se resuelva la infección e inflamación de la zona para decidir si corresponde realizar una cirugía electiva para hacer resección completa del seno. Cuando hay un seno pilonidal asintomático generalmente la consulta es por la palpación de aumento de volumen en zona interglutea. Si el seno no muestra signos de infección, es pequeño y no produce mayor molestia, se puede recomendar la observación ysolo si aparecen síntomas se opta por cirugía electiva. Frente a pacientes con seno pilonidal crónico, con secreción recurrente, fístula asociada, dolor y episodios reiterados de infección aguda es recomendable una cirugía electiva. Encuantoaltratamientoelectivodelaenfermedadpilonidal,se describenmúltiplestécnicas quirúrgicasquebuscancontrolar la infección y evitar la recurrencia. Estas técnicas se pueden separar en técnicas abiertas y cerradas. Antes de programar una cirugía electiva es importante tener presentelosdiagnósticosdiferenciales quepuedendistraeral cirujano.Estosson:hidrasadenitis,absceso-fistulaanorrectal, Su ubicación más frecuente es en la línea media posterior (75%), y en segundo lugar en la línea media anterior (25%). En un 3% se presenta en ambas posiciones de manera simultánea. Con menor frecuencia se localizan en posiciones atípicas; en estos pacientes se debe descartar la enfermedad de Crohn, tuberculosis, sífilis VIH/SIDA, carcinoma anal o trauma. Fisiopatología Se considera que el trauma o lesión mecánica del anodermo por el paso de deposiciones, duras o blandas, es un factor predisponente para desarrollar fisura anal, pero no necesariamente causal. Solo un tercio de pacientes con constipación o diarrea va a desarrollar fisuras. Loquesisehademostradoenestospacienteseslahipertonía esfinteriana (presión de reposo del esfínter anal interno aumentada) y el menor flujo sanguíneo, principalmente a nivel de la línea media posterior. Ambas teorías, hipertónica e isquémica, se relacionan inversamente: al relajar o disminuir el tono del EAI aumenta el flujo sanguíneo y se corrige la fisura. Si bien lo anterior se da en la mayoría de las fisuras, no hay que olvidar que pueden desarrollarse también en pacientes contononormaldelesfíntero,inclusohipotónico. Estasfisuras son atípicas y, por lo general, no responden al tratamiento quirúrgico estándar. Clasificación Dependiendo del tiempo de evolución y los hallazgos al examen físico, la fisura anal puede clasificarse en: - Aguda: solución de continuidad o herida en anodermo, eritematosa, que comúnmente se resuelve en un plazo de 4 a 6 semanas.
  • 377. 378 - Crónica: los síntomas duran más de 8 a 12 semanas y al examen físico se evidencia edema, fibrosis, plicomas centinelas y una papila hipertrófica proximal a la fisura en el canal anal (los dos últimos como manifestación inflamatoria crónica). Por lo general, también se visualizan fibras del EAI en el fondo de la lesión. Clínica El síntoma característico es el dolor anal intenso durante y particularmente después de la defecación. Los pacientes describen el dolor como “paso de navajas o vidrio” por el ano. En la fisura aguda el dolor puede ser de corta duración, mientras que en la crónica puede durar horas o, incluso todo el día. Al dolor puede agregarse rectorragia escasa que el paciente percibe en el papel higiénico. Muchos espontáneamente refieren miedo a defecar. El trauma por las deposiciones produce la fisura, que lleva al espasmo reflejo del EAI, aumentando su presión de reposo, disminuyendo el flujo, perdurando la herida, dolor e isquemia, lo que produce un círculo vicioso. Para el examen físico basta con separar suavemente los glúteos y traccionar el margen anal con cuidado, ya que el paciente se encuentra con dolor. Si se visualiza la fisura no se debe realizar tacto rectal. Con una buena inspección se puede diferenciar una fisura aguda de una crónica. Diagnóstico El diagnóstico de la fisura anal es clínico, con la anamnesis y examen físico. Sin embargo, en paciente con dolor intenso y gran espasmo del esfínter, puede ser necesario una revisión bajo anestesia en pabellón para poder confirmar el diagnóstico. Tratamiento El tratamiento de la fisura tiene como objetivo aliviar el dolor, ablandando las heces con ingesta de fibra, laxantes (vaselina o lactulosa) y abundantes líquidos, baños de asiento tibios y analgésicos, asociados o no a tratamientos específicos dirigidos a disminuir la presión de reposo del EAI. Estas medidas generales deben aplicarse a todos los pacientes con fisuraanal,agudaocrónica,lograndocuraraproximadamente entre un 44 y 50% de los casos. Dentro de los medicamentos dirigidos a relajar el EAI y disminuir su presión de reposo existen: - Nitratos: La liberación de óxido nítrico produce relajo del EAI. La eficaciadeestosmedicamentosesmarginalmentesuperioral placebo y en forma muy clara inferior a la esfinterotomía. Se halimitadosuuso,yaquealcompararseconlosbloqueadores de canales de calcio o toxina botulínica presentan mayores efectos adversos, principalmente cefalea. - Bloqueadores de canales de calcio: Se ha descrito el uso de diltiazem y nifedipino oral y tópico. Este último en su presentación tópica al 0.2% es considerado actualmentecomoeldeprimeralínea,yaquelogralacuración de fisuras agudas en el 70 a 85% de los pacientes. - Toxina botulínica: Genera una parálisis muscular reversible que dura entre tres a Fisuraanal
  • 378. 379 seismeses.Latoxinaseinyectaenelespaciointeresfinteriano a cada lado de la línea media anterior. Presenta una tasa de curación entre un 60 a 80% por lo que es una excelente opción como manejo de segunda línea. - Otros: Existen otros tratamientos como los antagonistas adrenérgicos, agonistas colinérgicos (betanecol) o inhbidores de la fosfodiesterasa (Sildenafil). Sin embargo, faltan estudios de calidad sobre su utilización. El tratamiento médico es efectivo para la fisura anal aguda, mientras que el tratamiento quirúrgico está reservado para la fisura anal crónica y/o para aquella que no responde a tratamiento de primera o segunda línea. Frente a la no respuesta del tratamiento médico anterior, la esfinterotomía lateral interna (ELI) es la técnica quirúrgica de elección. La esfinterotomía puede ser abierta o cerrada,sin diferencia significativa entre una técnica y otra. La tasa de curación es de un 95 a 98% y la complicación más temida es principalmente la incontinencia (0-10%). Entre los factores de riesgo para incontinencia pos ELI, se deben considerar: sexo femenino, mayor a 50 años, más de dos partos, fisura en posparto inmediato, cirugía anorrectal previa, traumatismo, urgencia defecatoria e hipotonía esfinteriana. En presencia de estos factores de riesgo, se debe insistir en el tratamiento médico. Juegan un rol fundamental en el desarrollo de sintomatología hemorroidal todas aquellas condiciones que impiden el adecuado drenaje venoso (congestión venosa yconsiguiente hipertrofia hemorroidal) o que promueven el prolapso. Epidemiología Al igual que el resto de patología perianal, la prevalencia real de enfermedad hemorroidal es desconocida, aunque se estima entreun4 y5%.Noexistediferenciaentrehombres ymujeres, siendo una pequeña proporción los que requerirán cirugía. Fisiopatología La constipación (dieta baja en fibra), tos crónica (EPOC), embarazo, masa intraabdominal o pélvica, ascitis, pujo prolongado por malos hábitos defecatorios, la bipedestación (efecto gravitacional), etc., son condiciones que aumentan la presiónintraabdominaleimpidenelretornovenosoadecuado. Esto asociado a la debilidad de los tejidos de soporte de las hemorroides favorece, además, el prolapso hemorroidal, el cual perpetúa la congestión venosa, especialmente si sobrepasa el esfínter. Aunque puede parecer paradójico, la diarrea también puede agravar o desencadenar una crisis hemorroidal, pues si bien disminuyeelesfuerzodefecatorio,elaumentodelafrecuencia es condicionante. Enfermedad Hemorroidal La enfermedad hemorroidal se refiere a los síntomas producidos por las hemorroides. Estas últimas son almohadillas vasculares que forman parte de la anatomía normal de los humanos. Según su ubicación en relación con la línea pectínea pueden ser clasificadas como internas o externas. Las hemorroides internas son estructuras vasculoelásticas en el espacio submucoso que almohadillan el canal anal y se encuentran proximal a la línea pectínea. Están compuestas por vasossanguíneos,tejidoconectivo,músculoliso(músculode Trietz) y tejido elástico. Fisiológicamente existen tres plexos hemorroidales:lateralizquierdoyanterioryposteriorderecho, cubiertos por epitelio columnar con inervación visceral (no duelen). El complejo esfinteriano no logra cerrar completamente el canal anal, por lo tanto, la ingurgitación de las hemorroides contribuye alacontinencia finaalproporcionar estecierreque falta. Aportan, además, al 20% de la presión de reposo del esfínter anal y lo protegen del trauma por las deposiciones. Las hemorroides externas se encuentran distal a la línea
  • 379. 380
  • 380. 381 Hemorroides internos Clínica Enelcasodelas hemorroides internas,elsíntomamásfrecuente es la rectorragia y en segundo lugar el prolapso. Elsangradoes intermitente,rojofresco,indoloroy enrelacióncon ladefecación,generalmentealfinal,posterioralpasodelbolofecal. El prolapso puede ser interno y el paciente refiere sensación de plenitud rectal, evacuación incompleta o urgencia defecatoria; o externo, y aqueja sensación de masa o de estar sentado sobre algúncuerpoextraño,descargamucosaydificultadparamantener la higieneperianal. Algunos refieren prurito, ardor o sensación de incomodidad generalizada. En caso de existir prolapso, siempre preguntar si se logra reducir de manera espontánea o con ayuda manual. Esto, junto con el examen físico, permite clasificar las hemorroides internas, según Banow, de la siguientemanera: Grado I: protruyen dentro del canal anal sin prolapsar. Grado II: protruyen a través del ano con defecación, pero se reducen espontáneamente. GradoIII:protruyenatravésdelanoyrequierenreducciónmanual. Grado IV: prolapsan y no se reducen. Esta clasificación permite a su vez orientar el tratamiento. Por otro lado, en las hemorroides externas la rectorragia es poco frecuente. Por lo general, el paciente nota tejido perianalredundante,refiere prurito o dificultad paramantener higiene posdefecación. En caso de presentar dolor, se debe sospechar una trombosis hemorroidal. Es un dolor intenso, agudo, localizado, que aumenta con la defecación, asociado a aumento de volumen duro, sensible al tacto, violáceo o azulino, cubierto por piel edematosa.Aveces, pueden drenar espontáneamente y presentar sangrado. Al examen físico general se debe evaluar la presencia de signos que contribuyan a la fisiopatología de laenfermedad hemorroidal (EPOC, embarazo, obesidad, ascitis, etc.). Al examen físico específico, inspeccionar el anodermo, periné y región sacrococcigea. Será posible identificar hemorroides externas, plicomas, hemorroides internas prolapsadas, lesiones en piel, fisuras, fístulas, abscesos, etc. Siempre hay que pedir al paciente que puje para ver si con el esfuerzo se produce prolapso. La palpación digital de la zona permite evaluar sensibilidad, masas, trombos o induraciones. El tacto rectal, en caso de palpar alguna masa, obliga a descartar un tumor. Finalmente, como parte del examen físico, idealmente debe realizarse una anoscopía.
  • 381. 382 Diagnóstico Eldiagnósticodelaenfermedadhemorroidalesclínico.Sibien conunahistoriayexamenfísicocompatibleeldiagnósticoestá hecho, es necesario tener en cuenta algunos factores como edad, historia familiar o personal de cáncer, características delsangrado, bajadepeso, cambiodehábito intestinal. Estos síntomas ysignos deben hacer sospechar cáncer colorrectal, sobretodo en mayores de 50 años y solicitar colonoscopia, independientedequeelpacientetambiéntengahemorroides. Tratamiento En caso de producir síntomas, el objetivo del tratamiento es el control y/o eliminación de estos a través de un manejo médico, procedimientos menores o cirugía. El manejo médico va dirigido principalmente a ablandar las deposiciones y a aliviar los síntomas. Para ello, se modifican ladietayalgunoshábitos.Serecomiendaconsumirabundante fibra (20-35g/día) y líquidos (al menos 2 a 3 litros de agua al día). Además, se pueden utilizar laxantes como la lactulosa, vaselina, etc. Asimismo, evitar el pujo excesivo, valsalva, tiempo prolongado en el baño (más de 5 minutos) y el uso excesivo de papel higiénico. El alivio sintomático puede lograrse muchas veces con baños de asiento que consisten en sumergir la región perianal en agua tibia por 10 a 15 minutos (más que eso produce mayor edema). Igualmente, facilitan la reducción manual de las hemorroides prolapsadas. No existen medicamentos orales ni tópicos que se utilicen en la práctica clínica y que tengan un beneficio demostrado. Entre los procedimientos menores (aplicables en la consulta), la ligadura con banda elástica es el más usado. Está indicado en hemorroides grados I, II y algunos grado III. Consiste en ubicar a unos 2 cm proximales a la línea dentada una ligadura que va a producir una isquemia del tejido ligado y una consecuente fibrosis que va a disminuir el prolapso y sangrado. Una contraindicación relativa para este procedimiento es la anticoagulación, ya que al quinto o séptimo día del procedimiento, se desprende la ligadura. Entre las complicaciones se describe el dolor, sangrado, trombosis y retención de orina. Otros procedimientos menores también utilizados en hemorroides grado I y II, aunque rara vez en la práctica clínica debido a su mayor costo, son la coagulación infrarroja y la escleroterapia. La única ventaja de este último es que es una opción segura en pacientes anticoagulados o con coagulopatías. La complicación más grave a todos estos procedimientos es la sepsis perianal. Debe sospecharse en pacientes con fiebre y retención urinaria después del procedimiento. Lacirugíasereservaparalaenfermedadhemorroidalquenoha presentado respuesta a tratamiento médico o a procedimientos menores, para aquellos que no toleran procedimientos en la consulta, hemorroides internas y externas con prolapso significativo (grado II, III y IV), pacientes con otra patología anorrectalconcomitanteocoagulópatasenqueseanecesario cohibir el sangrado. De todos los pacientes con enfermedad hemorroidal, solo un 5 a 10% finalmente requerirá cirugía. El gold estándar es la hemorroidectomía clásica, existen dos técnicas: abierta (Milligan y Morgan, Reino Unido) y cerrada (Ferguson, EE.UU.). La hemorroidectomía consiste en la extirpación de los componentes internos y externos, ligando los pedículos y cerrando el defecto en la mucosa. En la técnica abierta, el defecto se espera que cierre por segunda intención en 4 a 8 semanas; en la cerrada, se sutura de manera primaria la piel. En ambas técnicas el dolor posoperatorio es el principal problema. La tasa de recidiva global es aproximadamente un 5% y no habría diferencias estadísticamente significativas entre una y otra. Las complicaciones son el sangrado (5%), retención de orina (0.2-36%), incontinencia fecal (2-12%), estenosis anal (0-6%), infección (0.2-6%) e impactación fecal (0.4%). Existe una técnica denominada hemorroidopexia grapada cuya principal ventaja teórica sobre la hemorroidectomía clásica es el menor dolor posoperatorio y la reinserción laboral más rápida. Esta técnica, también conocida como PPH (Procedure for Prolapse and Hemorroids), consiste en remover un rodete cilíndrico de mucosa y submucosa rectal, incluyendo tejido hemorroidal proximal a la línea dentada, creando una anastomosis circunferencial con stappler. La principal desventaja es su mayor recurrencia. En el caso de la trombosis hemorroidal externa, el tiempo de evolucióndesdeel iniciodel dolores fundamentalparadecidir el manejo. Si bien la mayoría resuelve espontáneamente con medidas médicas como el uso de AINES, baños de asiento, fibra y laxantes, en aquellos pacientes que consultan en las primeras 48 horas por dolor intenso, podría realizarse una trombectomía (anestesia local, incisión elíptica en relación con hemorroide trombosado y drenaje).
  • 383. 384 Bibliografía 1. Schwartz S, Shires G, Spencer F, et al. Principios de cirugía. 7.a edición. McGraww-Hill Interamericana; 2000. 2. Cameron JL. Current Surgical Therapy. 8.a edición. Elsevier;2004. 3. Beck D, Roberts P,Saclarides T, et al. The ASCRS textbook of colon and rectal Surgery. Springer 2011. 4. Sneider EB, Maykel JA. Diagnosis and management of symptomatic hemorrhoids. Surg Clin North Am. 2010; 90(1). 5. Rivadeneira D et al. Practice Parameters for the management of Hemorrhoids (Revised 2010). Dis Colon Rectum 2011;54. 6. Ortiz H. Guías clínicas de la Asociación Española de Cirujanos. Cirugía colorrectal. 2.a edición. 7. Altomare D, et al. The management of patients with primary chronic anal fissure: a position paper. Tech Coloproctol 2011; 15(2). 8. Ortiz H. Guías clínicas de la Asociación Española de Cirujanos. Cirugía colorrectal. 2.a edición.
  • 384. 385 7.6 CancerColorectal Ramírez J, Gajardo J, Hierard MD, Gellona J. Epidemiologìa El cáncer colorrectal es una enfermedad cada vez más frecuente en países desarrollados y en vías de desarrollo. Entre sus características destacan un mejor pronóstico que otros tumores digestivos, una secuencia carcinogénica conocida, un tratamiento efectivo y la posibilidad de realizar diagnóstico precoz y prevención. Esta enfermedad es especialmente prevalente en países desarrollados. En Chile ocupa el cuarto lugar como causa de muerte por tumores malignos y la tasa de mortalidad ha ido en aumento desde 1990, siendo en la actualidad de 8 por 100.000 habitantes para el cáncer de colon y de 2,5 por 100.00 habitantes para el cáncer de recto1 ,2 . A nivel mundial es el tercer cáncer más común en hombres y el segundo en mujeres. En Estados Unidos se ha observado unadisminuciónenlaincidenciaylamortalidadprincipalmente debido a políticas de detección precoz y mejora en los tratamientos. El cáncer de recto, específicamente, da cuenta de 25 - 30% de todos los cánceres colorrectales3 . La mayor incidencia se da en la quinta década de vida. Localización del cáncer colorectal 1 Tasa de mortalidad por tumores malignos según sexo, Chile 2000-2010. DEIS, Minsal 2010. 2 Donoso A., Villarroel L., Pinedo G. Aumento de la mortalidad por cáncer de colon en Chile, 1990 - 2003. Rev. Méd. Chile 2006; 134: 152 - 158. 3 Tjandra JJ, Kilkenny JW, Buie D, Hyman N, Simmang C, Anthony T et al. Practice parameters for the Management of Rectal Cancer. Dis Colon Rectum. 2005; 48: 411 - 23.
  • 385. 386 Fisiopatología El tipo histológico más habitual en el cáncer colorrectal es el adenocarcinoma, alcanzando un 98% de los casos. El resto, mucho menos frecuente, se divide en carcinoides, tumores del estroma gastrointestinal (GIST), linfomas, tumores neuroendocrinos e indiferenciados. Se ha observado que al menos un 95% de los cánceres de colon se desarrolla a partir de pólipos adenomatosos. Los principales factores que determinan el riesgo de malignidad de un pólipo son el tamaño, tipo histológico y forma. El tamaño del pólipo se relaciona con el riesgo de tener cáncer. En general, se sabe que pólipos de menos de 0,5 cm no tienen riesgo de tener cáncer invasor, sin embargo, al aumentar el tamaño del pólipo, aumenta fuertemente la probabilidaddeteneruncáncerinvasor,sobretodolospólipos mayores a 1 cm. Conrespectoalahistología,cuantomayorseaelcomponente velloso del pólipo mayor el riesgo de malignización, como se observa a continuación: • Tubulares: 5-6% • Túbulo vellosos: 10% • Vellosos: 20% Laformadelospólipospuedesersésiles(basedeigualancho que cabeza) o pediculados (base angosta, cabeza ancha). También se pueden considerar las lesiones de extensión lateral, las cuales se presentan como lesiones planas. En general, la recomendación frente al hallazgo de un pólipo es la extirpación mediante cualquiera de sus métodos, por el potencial riesgo de progresión a un cáncer invasor. Genética del cáncer de colon Existen diferentes vías genéticas mediante las cuales se puede desarrollar el cáncer de colon. Si bien, el fenotipo final se puede traslapar, la base genética es diferente. • Vía del APC (secuencia adenoma-carcinoma): comose mencionó, la mayoría de los cánceres provienen de pólipos ylamutaciónmásfrecuenteesladelAPC.Primariamente, se altera el gen APC que inicia el proceso carcinogénico. Luego,sevanagregandootrasmutacionesqueleconfieren elpotencialinvasoraladenoma,formándoseasíelcáncer. • Vía de inestabilidad microsatelital (MSI): Se entiende como microsatelites a áreas del DNA que no codifican para genes individuales. Los MMR (mismatch repair genes) tienen la función de detección y reparación del DNA. Al existir mutaciones del gen MMR se acumulan errores en la replicación microsatelital, lo que se conoce como inestabilidad microsatelital (MSI), siendo una causa para el desarrollo de células neoplásicas. Aproximadamente, 15% de los cánceres colorrectales son por MSI. Al compararse con cánceres por mutación del APC, los que son por MSI tienen mejor pronóstico, pero menor respuesta a quimioterapia. • Vía serrada: esta vía implica pólipos hiperplásicos (se les consideraba sin potencial maligno), mixtos, adenomas serrados clásicos y serrados sésiles. Las alteraciones que llevarían a cáncer por esta vía estarían relacionadas con el gen BRAF, entre otros que aún están en estudio.
  • 386. 387 APC K-RAS DCC p53 Otros Cambios Factores de Riesgo Factores de riesgo personales • Edad > 60 años. • Antecedentes de cáncer colorrectal previo. • Presencia de pólipos adenomatosos. • Enfermedad inflamatoria intestinal. • Obesidad. • Tabaquismo y consumo de alcohol. • Dieta: consumo de grasas y carnes rojas. • Radiación pelviana. Factores de riesgo hereditarios • Antecedentes familiares de cáncer colorrectal. • Poliposis adenomatosa familiar. • Cáncer colorrectal hereditario no poliposo. Cancer Colorrectal Esporádico Laformamásfrecuentedecáncercolorrectaleslaesporádica, es decir, sin un factor heredable familiar. Aproximadamente, un 85% de estos cánceres tiene una base en mutaciones en el gen APC, mientras que un 15% tiene inestabilidad microsatelital. Clínica • Los síntomas son inespecíficos y se debe tener un alto índice de sospecha para el diagnóstico precoz. Por lo general, la aparición de síntomas se relaciona con enfermedad avanzada. • Sintomatología general: de anemia ferropriva debería llevar a un estudio de hemorragia GI4 . • Obstrucción por masa abdominal. • Dolor. • Baja de peso. • Perforación. • Enfermedad metastásica. • Cáncer de colon derecho: en las últimas cuatro décadas ha habido un aumento de incidencia de cáncer de colon derecho. Generalmente, se manifiesta mediante anemia ferropriva por un sangrado oculto en las deposiciones. • Cáncer de colon izquierdo: a diferencia del lado derecho, presenta síntomas gastrointestinales como alteración del tránsito intestinal, dolor abdominal y sangrado rectal visible. • Importante: todo diagnóstico de colon irritable en pacientes mayores de 40 años debe ir de la mano con una colonoscopía que descarte la presencia de cáncer. • Cáncerderecto:enestadiosiniciales,elcáncerderectose puedepresentarcomorectorragiay/ocambiosenelhábito intestinal. Al examen físico, el tacto rectal podrá dejar en evidencia masas rectales bajas. En pacientes mayores de 50 años no se debe atribuir el sangrado a enfermedad hemorroidaluotrapatologíaproctológicasinantesrealizarla colonoscopia de rigor para descartar lesionesneoplásicas. • Se debe recalcar que la mayoría de los cánceres de colon son asintomáticos y que su detección precoz es la única manera de disminuir la mortalidad por esta enfermedad, porloqueesmuyimportante,dadalaconocidaprogresión de adenoma a carcinoma, el tamizaje en pacientes asintomáticos. • Cambios de hábitos intestinales. • Sangrado. • Anemia por déficit de fierro: cualquier diagnóstico 4 Courtney M. Townsend JR., Beauchamp D. Colon and Rectum. En Sabiston Textbook of Surgery, p. 1350. Canadá: Elsevier. 2012. Metástasis Carcinoma Adenoma tardío Adenoma intermedio Adenoma temprano Displasia Epitelio colónico normal
  • 387. 388 Tamizaje Diagnóstico Sesabequelapoblaciónobjetivodetamizajesonlosmayores de 50 años sin factores de riesgo conocidos,asintomáticos, en quienes se recomienda realizar una colonoscopía cada 10 años buscando adenomas de colon5 . Otras opciones de tamizaje son: test de hemorragia oculta en deposiciones (de ser positiva se indica colonoscopía), sigmoidoscopía flexible, enema de bario con doble contraste y colonografía con TAC. Manejo de pólipos No es infrecuente el diagnóstico de pólipos en colonoscopías de control o de tamizaje. Como se sabe, estos pólipos son las lesiones precursoras del cáncer colorrectal, por tanto, podemos dividir según la cantidad y tamaño de estos a los pacientes en diferentes estratos de riesgo que determinarán su seguimiento posterior. Bajo riesgo: 1 - 2 pólipos <1 cm de diámetro —> control con colonoscopía cada 3 a 5 años. Riesgo intermedio: 3 - 4 adenomas o 1 de >1 cm diámetro —> control con colonoscopía cada 3 años. Alto riesgo: >5 adenomas o 3 + 1 de esos >1 cm diámetro —> control con colonoscopía al año Los pólipos resecados con cáncer intramucoso, a veces denominadoporalgunospatólogoscomocarcinomainsitu,no tienen riesgo de metástasis linfática, por lo que se consideran tratados si los márgenes son negativos. Los que presentan cáncer que invade hasta la submucosa (pT1, en una polipectomía) resecados completamente y con histología favorable podrían observarse también, aceptando el riesgo que conlleva de compromiso linfonodal, que es de un 10% aproximadamente. La cirugía se recomienda para especímenes: • Histología desfavorable (grado 3 - 4, invasión angiolinfática). • No evaluables (fragmentados). • Márgenes positivos (<1mm del borde). • Pólipo nivel IV de Haggit. • Invasión de sm2 y sm3 o mayor a 1000 micras (la submucosa se puede dividir en tercios en sm1, sm2 y sm3). Una vez que se tiene la sospecha de un cáncer colorrectal por la clínica y examen físico del paciente es necesario complementar el estudio para confirmar el diagnóstico. La colonoscopía es el examen de elección para el diagnóstico de cáncer de colon, puesto que permite visualizar la lesión, ubicarsuposiciónenelcolon,descartarpresenciadelesiones tumorales sincrónicas (3 a 5% de los casos) u otros pólipos (25 a 30% de los casos), tomar biopsias y, eventualmente, marcarla si fuese necesario. Una vez que tenemos el diagnóstico histológico de cáncer colorrectal se debe realizar el estudio de etapificación para descartar diseminación de esta enfermedad. Para esto, se utiliza el TAC de tórax, abdomen y pelvis con contraste endovenoso. En el caso específico del cáncer de recto adicionamos, además, al estudio una resonancia de pelvis, de manera de determinar mejor la extensión local. También se puede asociar el estudio con una endosonografía rectal en lesiones tempranas. El antígeno Carcinoembrionario (CEA) es un marcador del cáncerdecolon,sinembargo,sedebeconsiderarquenotodos los cánceres lo producen, por lo tanto, no sirve como método de tamizaje en forma aislada, siempre debe acompañarse de algún otro examen. Su mayor utilidad es en posoperatorio, donde los niveles elevados pueden indicar enfermedad residual, o bien, de haberse normalizados sus valores y presentar una nueva alza, recidiva de la enfermedad. 5 Dr. Juan Carlos Weitz Vatture, Dr. Zoltán Berger Fleiszig. (2013). Cáncer de Colon y recto . En Diagnóstico y tratamiento de enfer-medades digestivas (p. 262). Las Condes, Santiago: Iku.
  • 388. 389 Clasificación de Haggitt para pólipos pediculados: Nivel 0 Carcinoma in situ (mucosa). Nivel 1 Invade la submucosa, limitado en la cabeza. Nivel 2 Invade la submucosa hasta el cuello del pólipo. Nivel 3 Invade submucosa hasta el tallo. Nivel 4 Invasión de la submucosa debajo del tallo, sin comprometer la muscular propia.
  • 389. 390 Cáncer de Colon Etapificación La clasificación más ampliamente utilizada es la desarrollada por la AJCC (American Joint Committee on Cancer) conocida como la TNM. En el cáncer de colon sería la siguiente6 : Tumor primario TX Tumor primario no puede ser establecido T0 Sin evidencia de tumor primario Tis Carcinoma in situ intraepitelial (o invasión de la lamina propia) T1 Tumor invade la submucosa T2 Tumor invade la muscular propia T3 Tumor invade tejidos pericolonicos T4 T4a T4b tumor penetra la superficie visceral del peritoneo Tumor invade directamente o se encuentra adherido a otras estructuras Ganglios linfáticos regionales NX Invasión no se puede determinar N0 Sin metástasis linfática N1 N1a N1b Metástasis en 1 a 3 ganglios linfáticos regionales metástasis en 1 ganglio linfático regional metástasis en 2-3 ganglios linfáticos regionales N2 N2a N2b Metástasis en 4 o mas ganglios linfáticos regionales metástasis en 4-6 ganglios linfáticos regionales metástasis en 7 o mas ganglios linfáticos regionales Metástasis distales M0 Sin metástasis distales M1 M1a M1b Con metástasis distales Metástasis confinada a un órgano o sitio Metástasis en mas de un órgano o sitio del peritoneo 6 American Joint Committee on Cáncer: Colon and Rectum. En AJCC Cáncer Staging Manual. 6th ed. New York, NY; Springer- Verlag, 2002, paginas 113 – 124.
  • 390. 391 Tratamiento Los pilares fundamentales del tratamiento del cáncer de colon son la cirugía y la quimioterapia. La cirugía es el tratamiento de elección en el cáncer de colon. Es la única terapia potencialmente curativa. La quimioterapia adyuvante está indicada en algunos tumores etapa II con ciertos factores de riesgo y en todos los etapa III y IV. Cáncer de colon, conceptos generales: • Resección en bloque del segmento comprometido. • Mantener un margen de 5 cm de tejido sano al menos, lo que puede llegar, incluso a 10 cm si la cirugía lo permite. • La resección debe incluir tanto la arteria nutrientecomo eldrenajelinfáticocorrespondiente alsegmentoextraído. Linfadenectomía: la resección debe incluir al menos 12 ganglios linfáticos. Drenaje linfático de colon y relación con arterias
  • 391. 392 Cirugía según localización del tumor: • Los cánceres localizados en ciego, colon ascendente y flexura hepática se someten a una hemicolectomía derecha. Para esto, se liga la arteria ileocólica y la cólica derecha, cuando existe. La sección del íleon es a 10 - 15 cm proximal de la válvula ileocecal, mientras que el colon transverso se secciona proximal a la rama derecha de la cólica media. Posteriormente, se realiza una ileotransverso anastomosis. Hemicolectomía derecha
  • 392. 393 • Tumoresubicadosencolontransversopuedensometerse aunahemicolectomíaderechaextendida,enque,además delosvasos ligados en lahemicolectomía,se liga la rama izquierda de la cólica media. Hemicolectomía derechaextendida
  • 393. 394 • Para las lesiones ubicadas en la flexura esplénica o colon descendente, el manejo quirúrgico puede ser una hemicolectomíaderechaextendidaounahemicolectomía izquierda. En esta última, se liga la arteria mesentérica inferior en su origen y se secciona el colon transverso a proximal y sigmoides distal/recto superior a distal. • Los tumores de sigmoides se pueden manejar con una sigmoidectomía, en que se liga la arteria mesentérica inferior en su origen. A proximal se secciona el colon descendente y a distal la sección a nivel del promontorio. Hemicolectomía izquierda
  • 394. 395 La cirugía laparoscópica en cáncer de colon ha demostrado los beneficios de menor dolor posoperatorio y reinserción laboral más rápida. Además dos estudios randomizados, el primero llamado COLOR un estudio europeo y su equivalente norteamericano llamado COST, concluyeron que la cirugía laparoscópica es una opción viable ycon resultados idénticos a los de una laparotomía, siempre y cuando sean realizados porcirujanosentrenadosenlatécnica.Portanto,sisecumplen estos criterios se debe optar por la técnica laparoscópica. Actualmente, no está en duda los beneficios de la cirugía laparoscópica en cáncer de colon y debe ser considerado el estándar. Casos especiales: • En casos en que exista elevado riesgo de dehiscencia de la anastomosis como, por ejemplo, obstrucción, perforación con peritonitis y/o desnutrición, se puede optar por una resección del segmento comprometido, dejando una ostomía para el segmento proximal. Este es el caso de la cirugía de Hartmann, en que pacientes que se presenten con un cáncer de sigmoides con factores de riesgo de dehiscencia, se realiza una sigmoidectomía, dejando ostomizado el colon descendente. El recto se cierra y queda dentro de la cavidad abdominal. Una vez corregidos los factores de riesgo, se puede someter a una nueva cirugía para reconstitución de tránsito. OperacióndeHartmann
  • 395. 396 Cancer de Recto Etapificación La clasificación TNM del cáncer de recto es la siguiente: Tumor primario (T) TX Tumor primario no identificado T0 Tumor no se puede evaluar Tis Carcinoma in situ: Intraepitelial o invasión de lámina propia T1 Invade la submucosa T2 Invade la muscular propia T3 Invade a través de la muscular propia al tejido pericolorectal T4a Penetra a la superficie del peritoneo visceral t4B Invade directamente o se adhiere a la superficie de otros órganos Linfonodos regionales (N) NX Linfonodos no pueden evaluar N0 Linfonodos sin metástasis N1 Metástasis en 1-3 LN N1a Metástasis en 1 LN N1b Metástasis en 1-3 LN N1c Tumor se deposita en subserosa, mesenterio o tejido no peritonizado pericólico o peri- rectal sin metástasis a LN N2 Metástasis en 4 o más LN N2a Metástasis en 4-6 LN N2b Metástasis en 7 o más LN Metástasis a distancia (M) M0 Sin metástasis a distancia M1 Metástasis a distancia M1a Metástasis a un órgano/sitio (Hígado, pulmón, ovario o LN no regional M1b Metástasis en más de 1 órgano/sitio o peritoneo
  • 396. 397 Estadio Estadio T N M Dukes MAC 0 Tis N0 M0 - - I T1 T2 N0 N0 M0 M0 A A A B1 IIA T3 N0 M0 B B2 IIB T4a N0 M0 B B2 IIC T4b N0 M0 B B3 IIIA T1-T2 T1 N1/N1c N2a M0 M0 C C C1 C1 IIIB T3-T4a T2-T3 T1-T2 N1/N1c N2a N2b M0 M0 M0 C C C C2 C1/C2 C1 IIIC T4a T3-T4a T4b N2a N2b N1-N2 M0 M0 M0 C C C C2 C2 C3 IVA Any T Any N M1a IVB Any T Any N M1b Tratamiento Los pilares fundamentales del tratamiento del cáncer de recto son la neoadyuvancia con radioterapia y quimioterapia, la cirugía y la quimioterapia adyuvante. Neoadyuvancia Elconceptodeneoadyuvanciatieneporobjetomejorarelcontrol local de la enfermedad en tumores de recto medio o inferior con etapificación preoperatoria T3 - T4 o con adenopatías (N+). Se utilizan dos esquemas, uno que utiliza una dosis de 50.4 Gy en cinco semanas con quimioterapia basada en 5-FUo capecitabinacomoagenteradiosensibilizador. Luego se esperan ocho a doce semanas y se realiza la cirugía. El otro esquema aprobado se realiza con 25 Gy en cinco días y posteriormente la cirugía a los siete días. Ambos esquemas tienenporobjetivodisminuirlarecidivalocal,estasedisminuye de un 25% a 5-10%. Cirugía Existen diversas técnicas quirúrgicas que se pueden utilizar para la resección de un cáncer de recto y para esto se debe elegir la más adecuada para cada paciente. Cirugía radical con preservación de esfínter Utilizada en pacientes con cáncer de recto invasivo con pronóstico de la función esfinteriana adecuado (tumor no compromete el esfínter y pacientes que tienen función esfinteriana previo a cirugía). • Resecciónanteriorbajaconescisiónmesorrectaltotal:es eltratamientoóptimoparacánceresderectomedioydistal sin compromiso de esfínter. Lo que se busca conseguir con esta cirugía es lograr resecar el tumor con margen
  • 397. 398 distal y circunferencial adecuado, incluir linfonodos para estatificar adecuadamente y preservar las estructuras nerviosas. Se reseca el colon sigmoides y recto hasta que el margen distal está libre de tumor y se realiza una anastomosis de colon descendente con el recto o ano, según cuan distal sea el cáncer. En general, como es una anastomosis baja y en tejido irradiado se deja una ileostomía de protección para evitar las consecuencias de la filtración. La ileostomía se cierra a los tres meses. Cirugía radical sin preservación de esfínter Está indicada cuando el tumor de recto invade el aparato esfinteriano o en casos en que la función previa no es adecuada. También se utiliza en casos de recurrencia poscirugía con preservación de esfínter. • Resección abdominoperineal u operación de MIles: Consiste en la resección de la región rectosigmoidea, el recto, el ano, el mesenterio y mesorrecto para posteriormente realizar una colostomía terminal. Resección transanal Utilizado para pacientes con T1N0, tumores de < 3 cm a < 8 cm del margen anal y bien diferenciados. • Técnica: en posición de litotomía o navaja sevillana, se infiltra con anestésico local el plano interesfinteriano. Se expone la lesión y se realiza la resección llegando hasta el plano de la grasa perirrectal para obtener un margen profundo de >3 mm. El problema de este método es la imposibilidad de estudio de los linfonodos y siendo posible las metástasis a estos en estadios tempranos la selección adecuada de los pacientes es imperativa. La recidiva local o linfonodal en estos casos es entre un 10 a 13% por lo que NO se debe considerar el estándar y está reservado para casos seleccionados. • Otras técnicas: resección transesfiteriana, transacra. Quimioterapia: Laquimioterapiatienelasmismasindicacionesqueencáncer de colon y se utilizan los mismos esquemas terapéuticos. Enfermedad Metastásica Aproximadamente entre un 50 - 60% de los pacientes diagnosticadosconcáncercolorrectaldesarrollanmetástasis. Elprincipalsitioafectadoeselhígado,losiguenlospulmones, huesos y cerebro. Lasobrevidaacincoañosdepacientessometidosaresección deltumorprimarioydelasmetástasishepáticasalcanzahasta un 38%. Este procedimiento se puede realizar en una etapa (evitando así una segunda laparotomía) o en dos. Los pacientes candidatos a estetratamientosonaquellos que tienenunbuenperformancestatus,tumoresresecables yque el volumen hepático residual posterior a la resección de las metástasis (sin importar el número de ellas) sea de >25%. Además deben recibir quimioterapia con esquema FOLFOX neoadyuvante y adyuvante. Seguimiento Se ha detectado que un 85% de las recurrencias ocurren dentro de los primeros dos años posresección quirúrgica, por lo tanto, el seguimiento debe ser especialmente acucioso durante este período. • La recomendación es realizar una colonoscopía al año de la cirugía y posteriormente según los hallazgos encontrados. La medición del CEA debe realizarse cada tres meses durante un período de dos años, luego cada seis meses hasta los cinco años. TAC de abdomen y pelvis bianual en búsqueda de metástasis. Pronostico La sobrevida del cáncer colorrectal por etapas es: Etapa I: 93% Etapa II: 72-85% Etapa III: 44-83% Etapa IV: 8- 40% Cancer Colorrectal Hereditario Nos referiremos brevemente al cáncer hereditario que, como ya se mencionó, constituye el 15% de todos los cánceres de colon. Sin embargo, solo un bajo porcentaje de estos se consideran “sindromáticos”, aproximadamente un 3 a 5 % de todos los cánceres corresponde a Síndrome de Lynch o cáncer colorrectal hereditario no polipósico (HNPCC) y un 1% corresponde a la poliposis adenomatosa familiar(FAP). Poliposis adenomatosa familiar de colon (FAP): enfermedad de herencia autosómica dominante. Presenta mutación germinal en el gen APC. Se relaciona con otros cánceres como tumores periampulares y tumores del sistema nervioso central. Los pacientes presentan desde cientos a miles de pólipos colorrectales y tienen un riesgo de malignidad de un 100%.Esporestarazónqueestáindicadalaproctocolectomía profiláctica.
  • 398. 399 HNPCC o síndrome de Lynch: enfermedad de herencia autosómicadominante.Elriesgodemalignizaciónalolargode la vida es de un 70 - 80% y se asocia a la aparición de cáncer endometrial en las mujeres en un 30 - 60% de los casos7 .La recomendación es iniciar colonoscopías anuales o cada tres años a partir de los 20 - 25 años. El análisis genético debe ir orientado a la búsqueda mutaciones germinales en los genes involucrados en la inestabilidad microsatelital. Bibliografía 1. National Comprehensive Cancer Network (NCCN). Rectal Cancer. NCCN Clinical Practice Guidelines in Oncology. Version.2106 2. National Comprehensive Cancer Network (NCCN). Colon Cancer. NCCN Clinical Practice Guidelines in Oncology. Version.2106 3. Robin K.S. Phillips, Sue Clark. Colorectal Surgery. 5th Edition. Elsevier. 2014 7 Courtney M. Townsend JR., Beauchamp D. Colon and Rectum . En Sabiston Textbook of Surgery, p.1346. Canadá: Elsevier.
  • 399. 400
  • 401. 402
  • 402. 403 8.1 Hernias de la Pared Abdominal Rodríguez D, Morelli C, Díaz M, Sepúlveda R. Introducción Corresponden a la protrusión anómala de vísceras o epiplón a través de un defecto congénito o adquirido localizado en la pared abdominal o en los orificios anatómicos existentes. Han acompañado al hombre desde sus inicios. Es, además, un defecto que se ve, se evidencia a la palpación, y se reconoce hoy tal y como se hizo en la antigüedad. En el siglo XXI continúa diagnosticándose mayoritariamente con las manos del cirujano. Toda hernia se compone de: • Anillo herniario: corresponde al defecto anatómico por el cual protruye la hernia. • Saco herniario: evaginación de peritoneo queemerge a través del anillo herniario. • Contenido: constituido por vísceras, epiplón o grasa. Componentes de una hernia
  • 403. 404 Clasificación Lasherniassepuedenclasificarsegúnlocalización,etiología, reductibilidad y compromiso vascular1 . 1. Según su localización en la pared abdominal en: a) Hernias de la región inguinal: hernia inguinal directa e indirecta, femoral o crural. b) Hernias de la región anteromedial (ventrales): hernia umbilical, línea blanca, línea semilunar de Spiegel. c) Herniasdelaregiónposterolateral(lumbares):herniasde Grynfelt (triángulo lumbar superior) y de Petit (triángulo lumbar inferior). d) Hernia incisional o eventración: se desarrollan en zonas de incisiones quirúrgicas. e) Hernias pélvicas: agujero obturador, periné, ciática. Hernias paredanterior 1 Acevedo A. Clasificación de las hernias de la región inguinal. En: Acevedo A, Hernias Inguinofemorales. Anatomía y técnica quirúrgica. Santiago, Chile: Ed. Mediterráneo 2012, pp. 109-115. Hernias posteriores
  • 404. 405 2. Según su etiología en: a) Congénitas:eldefectoestápresentedesdeelnacimiento. b) Adquiridas: el defecto se desarrolla por debilidad de las capas musculoaponeuróticas de la pared abdominal. 3. Según reductibilidad: a) Reductible: es posible reintroducir el saco herniario con su contenido al abdomen con maniobras de taxis. b) Irreductible: no es posible su reducción. 4. Según ubicación con respecto a la pared misma en: a) Externas: el saco protruye completamente a través de la pared del abdomen. b) Internas: están dentro de la cavidad abdominal (ejemplo: Hernia diafragmática, hiatal). Hernia extrangulada 5. Según estado vascular en: a) Atascada: cuando la hernia se hace irreductible en forma aguda, al principio el compromiso de la irrigación es venoso e incluso reversible. b) Estrangulada: si se mantiene el atascamiento, con el paso de las horas se compromete la irrigación arterial de la víscera protruida. Por otra parte, existen hernias con algunas características especiales: • Hernia de Richter: atascamiento delborde antimesentérico del intestino herniado. • Hernia de Littré: el contenido del saco herniario esun divertículo de Meckel. • Hernia deslizada: el saco herniario está formado por peritoneo fusionado con la pared de una víscera (intestino grueso o vejiga). • Hernia epigástrica: en línea media supraumbilical en los sitios de emergencia de los vasos perforantes dela pared abdominal. • Hernias pélvicas: obturatriz, ciático, periné. • Hernia paraostómica: se desarrollan adyacentes auna ostomía. • Hernia de Spiegel: se localiza en el tercio inferior de los rectos abdominales (línea de Spiegel). Epidemiología2 El 10% de la población general presenta una hernia de la pared abdominal durante su vida, constituyendo un problema relevante de salud pública. Corresponde a la segunda cirugía electiva más frecuente en nuestro país, donde se realizan aproximadamente 30.000 hernioplastías por año. Es la enfermedad quirúrgica más frecuenteenhombres.Encuanto a la incidencia, el 75% de las hernias corresponden a hernias inguinales (2/3 son del tipo inguinal indirecta y 1/3 directa). La hernia incisional representa el 15%, la femoral el 7%, umbilical 3%, epigastrica 2% y otras un 2%. La hernia inguinal indirecta es la hernia más común, independientemente del sexo y es más frecuente al lado derecho. La incidencia de hernia inguinal en el hombre es 25 veces mayor que en la mujer. 2 Ministerio de Salud, Chile. Guía Clínica Herniasde pared abdominal. Santiago: Minsal, 2008.
  • 405. 406 La hernia femoral es más frecuente en la mujer, con una relación es 10:1 mujer/hombre. La evolución natural de una hernia es siempre hacia su progresivo aumento de tamaño e irreductibilidad con el transcurso del tiempo, haciendo más difícil su reparación Clínica La presentación de las hernias de la pared abdominal varía en cuanto a su localización. Hernias pequeñas pueden ser asintomáticas, o bien, presentar molestias o dolor al protruir por el defecto en la pared. En general, presentan un aumento de volumen que el paciente nota sobre todo al realizar maniobras de Valsalva. En el caso de las hernias incisionales este aumento de volumen se encuentra en relación con la incisión de alguna cirugía. Las hernias abdominales que son grandes y provienen de defectosenlapareddegranvolumensehanasociadotambién a dorsalgia crónica, compromiso o dificultad respiratoria y problemas psicológicos por alteración de la imagen corporal. El examen físico de estos pacientes debe realizarse con el paciente de pie y acostado. En general, se podrá palpar la masa, evaluar su reductibilidad, y definir el defecto. De existir una hernia en el examen abdominal, deben descartarse hernias coexistentes con una exploración exhaustiva. Diagnóstico Para el diagnóstico de las hernias abdominales basta con el examen físico en la mayoría de los pacientes. Sin embargo, existen algunos casos de hernias pequeñas no palpables en las cuales son de utilidad el ultrasonido y/o la tomografía computarizada (TC). Las hernias epigástrica, de Spiegel, inguinal, femoral, incisional y umbilical se pueden observar con ultrasonido. En cambio, si estamos frente a la sospecha deunahernialumbar,obturatriz,perinealociáticaespreferible pedir una TC. La TC también es de gran utilidad en pacientes obesos en quienes el examen físico es difícil. La ventajade losmétodos de imágenes parael diagnóstico es quepermiten identificar hernias pequeñas y además el contenido del saco herniario. Hernias Inguinales Las hernias inguinales se clasifican en directas o indirectas, según su relación con los vasos epigastricos inferiores. El saco de la hernia directa se origina medial a estos vasos y la hernia indirecta surge lateral a ellos através del anillo inguinal profundo en dirección al anillo superficial y al escroto. Con en pantalón es cuando coexisten un componente directo e indirecto. Anatomía de la región inguinal3 Un adecuado conocimiento de la anatomía inguinal es fundamental para una correcta reparación herniaria por cirugía. Inmediatamente bajo la piel, encontramos el tejido subcutáneo, luego la Fascia de Camper y bajo ella, la Fascia de Scarpa, que se continúa con la fascia del muslo en la regiónfemoral,dondeadquiereelnombredeFasciadeColles. El músculo oblicuo externo (MOE) es el más superficial de la pared abdominal lateral y se origina en las últimas 7-8 costillas, dirigiendo sus haces hacia medial y caudal. Las fibras más cefálicas del músculo se insertan mediante su aponeurosis en la hoja anterior de la vaina del músculo recto, mientras que las fibras aponeuróticas más caudales lo hacen en el borde externo de la cresta ilíaca, en la espina ilíaca anterosuperior (EIAS) y en el tubérculo púbico, formando el ligamento inguinal. Las fibras aponeuróticas que se insertan en el tubérculo pubiano se separan al aproximarse a este, constituyendo el anillo inguinal superficial, por donde dejan el canal inguinal el cordón espermático en el hombre y el ligamento redondo en la mujer. A nivel del anillo inguinal, el MOE acompaña al cordón espermático en su descenso hacia el escroto, constituyendo su capa más externa, que lleva el nombre de fascia espermática externa. El músculo oblicuo interno (MOI) se origina en los dos tercios anteriores de la cresta ilíaca, en la EIAS y en el ligamento iliopectíneo. Sus haces musculares se orientan haciacefálico,anterior ymedial.Losmáscefálicosseinsertan en el borde libre de las costillas y sus cartílagos, mientras que la porción medial se hacen aponeuróticos, dividiéndose en dos láminas que rodean al músculo recto. Por encima de la línea semicircular, la lámina anterior se une con las fibras aponeuróticasdelMOEconlasqueconstituyenlahojaanterior de la vaina del músculo recto abdominal. La lámina posterior seuneconlaaponeurosisdeinsercióndelmúsculotransverso para formar la hoja posterior de dicha vaina. Bajolalínea semicircular,laaponeurosis del MOIseincorpora completamente a la aponeurosis del MOE y el músculo transverso (MT), pasando por anterior al músculo recto anterior. En su parte más caudal, el MOI es empujado por la formación del proceso vaginal y por el descenso del testículo hacia el escroto, dando origen al músculo cremáster. El músculo transverso del abdomen (MT) es el más profundo de los músculos del abdomen. Se origina en la cara interna de los últimos 6 cartílagos costales, que se interdigitanconla insercióndeldiafragma.En laregión medial sus fibras acompañan al MOI hasta insertarse en la vaina del recto. Las fibras más caudales, junto con el MOI, forman el progresivo aumento de volumen es difícil distinguir una hernia indirecta de otra directa, pero en términos prácticos esta distinción no tiene mayor importancia porque la técnica quirúrgica utilizada en su reparación es la misma. Una hernia 3 Acevedo A. Anatomía de la región inguinofemoral. En: Acevedo A. Clasificación de las hernias de la región inguinal. En: Acevedo A, Hernias Inguinofemorales Anatomía y técnica quirúrgica. Santiago, Chile: Ed. Mediterráneo 2012, pp. 25-51.
  • 406. 407 un tendón que fortalece la pared posterior del canal inguinal (arco aponeurótico del transverso). Se denomina fascia transversalis (FT) a la capa de tejido conectivo interior del abdomen (fascia endoluminal), que conecta músculos y aponeurosis de la pared abdominal y contribuye a conformar la pared posterior del canal inguinal. En la región inguinal, esta fascia posee zonas másgruesas que son el tracto iliopubiano, la vaina femoral ylos ligamentos de Henle y de Hesselbach. El ligamento pectíneo o de Cooper es un cordón de tejido conectivodensoquecubrelacrestapectíneaentreeltubérculo pubiano y la eminencia iliopectínea. Constituye el piso de la fosa oval y recibe este nombre porque es el sitio de origen del músculo pectíneo. El conducto o canal inguinal es una abertura o grieta sin paredes propias que traduce el complejo pasaje del cordón espermático a través de la pared abdominal para alcanzar el escroto. Tiene una longitud de 4 cm y se extiende entre el anillo inguinal profundo o interno y el superficial oexterno. Con fines didácticos se le describen 4 paredes, donde la pared anterior es la aponeurosis del MOE, mientras que la posteriorlaconstituyenlafasciatransversalisylaaponeurosis del MT. El techo o pared superior está formado por el tendón conjunto, fusión de las fibras más caudales del MOI Y MTA y el piso o pared inferior por el ligamento inguinal. El conducto inguinal contiene al cordón espermático en el hombre (compuesto por el conducto deferente, vasos gonadales, plexo pampiniforme, fascia espermática y cremastérica) cubierto por el músculo cremáster por lados ventral, media y lateral; y en mujeres al ligamento redondo. Además, contiene vasos linfáticos y los nervios ilioinguinal, iliohipogastrico y rama genital del genitofemoral. Anatomía conductoinguinal
  • 407. 408 Conducto inguinal El anillo inguinal profundo está ubicado en la pared posterior del conducto inguinal inmediatamente lateral a los vasos epigástricos inferiores, se localiza en el punto medio y superiormente al ligamento inguinal, y representa el lugar donde el cordón espermático abandona el abdomen para dirigirse a la bolsa escrotal. Por esta zona protruyen las hernias inguinales indirectas. El anillo inguinal superficial se forma hacia medial sobre el tubérculo pubiano, donde las fibras del MOE se separan para formar un surco de forma triangular que dará paso al cordón espermático hacia el escroto. El triángulo deHesselbach está delimitado lateralmentepor los vasos epigástricos inferiores, medialmente por el borde lateral del músculo recto del abdomen, inferiormente por el ligamento inguinal y corresponde al lugar por donde protuyen las hernias inguinales directas. El orificio o canal femoral es una prolongación de la FT que comunica la pelvis con el muslo y da paso a los vasos ilíacos, los que al cruzarlo pasan a llamarse vasos femorales, y a los linfáticos provenientes de la extremidad inferior. De forma triangular, su límite anterosuperior está formado por los ligamentos inguinal y lacunar, su límite posteroinferior por el ligamento pectíneo (ligamento de Cooper) y su límite lateral por la vena femoral. Etiopatogenia4 5 6 Lascausasporlasqueseproducenlasherniasinguinofemorales pueden atribuirse a factores congénitos u adquiridos, pero en la mayoría existe una debilidad musculoaponeurótica de la pared más una condición de mayor presiónintraabdominal. 1. Persistencia del conducto peritoneovaginal: la persistencia del conducto peritoneo vaginal, que permite en la vida intrauterina la bajada de los testículos desde el abdomen hacia la bolsa escrotal es la causa de la hernia inguinal en niños. 2. Anatomía de la región inguinal: la pared posterior del conductoinguinaleseláreamásdébildelaparedabdominal por menor resistencia de la musculatura de la zona. 3. Aumentodelapresiónintraabdominal:condicionescomo constipacióncrónica,prostatismo,toscrónica,embarazo, trabajo pesado de levantar cargas y obesidad producen undebilitamientodelamusculaturaporrelajacióncrónica. 4 Broggi M, Salva J. Fisiopatología de la región inguinal. En: Hernia inguinocrural. Barcelona: JIMS, 1982; 75-78. 5 Conner WT, Peacock EE. Some studies on the etiology of inguinal hernia. Am J Surg 1973; 126:732-35. 6 Bórquez P.Estudio inmunohistoquímico del colágeno tipo I y tipo III en piel de pacientes con hernia inguinal primaria. Rev Chil Cir 2005; 57(6): 489-94.
  • 408. 409 Anatomía región inguino-crural (visión por interior) 4. Mala síntesis de colágeno: pacientes con patología herniaria tienen una disminución de la relación entre las fibras de colágeno tipo I y III con un concomitante y significativo aumento del colágeno tipo III. El tabaco produce un efecto deletéreo sobre las fibras y células de los tejidos conectivos del organismo. Senilidad, desnutriciónysedentarismoproducendéficitenlasíntesis de colágeno. Además, existen diversas condiciones genéticas asociadas con la aparición de una hernia inguinal, tales como la enfermedad de Ehler Danlos, el riñón poliquístico (autosómico dominante) y el síndrome de hiperlaxitud ligamentosa, debido a síntesis y/o formación inadecuada de las fibras de colágeno, con tasas de incidencia de hernias entre 33 a 43%. Manifestaciones clínicas y diagnóstico Habitualmente, se presentan como un abultamiento o aumento de volumen reductible en la zona inguinal que protruye con Valsalva, que se reduce al cesar este o en forma espontánea, sin síntomas de relevancia o puede acompañarse de una molestia vaga o de parestesias por la compresión de los nervios inguinales por la hernia. Rara vez se presenta con dolor quecoincideconlosepisodiosdeprotrusión, yquecede rápidamente una vez reducido el contenido protruido. Si el pacienterefieredolorimportanteenlazonahayquesospechar atascamientooestrangulación;sinoexisteevidenciafísicade herniahayquesospecharotrascausasdedolor.Enocasiones son asintomáticas y descubiertas de manera incidental durante un examen físico de rutina, o bien, por el mismopaciente. La simple inspección de la zona es suficiente para sospechar el diagnóstico. La exploración visual y palpación de la zona inguinal debe realizarse de pie y en decúbito, observando abultamientos o masas. Las hernias inguinales se palpan comounaumentodevolumenporsobreelligamentoinguinal, mientras que las hernias crurales se palpan bajo el ligamento inguinal. Paraidentificar laherniaencasos dudosos (pacientes obesos o hernias pequeñas) es útil solicitar al paciente que efectúe una maniobra de Valsalva (toser, pujar) y que el examinador introduzca la yema de un dedo en el conducto inguinal, invaginando la piel del escroto, para sentir la protrusión del contenido, maniobra que además permite diferenciar entre hernia directa o indirecta. En la mayoría de los casos, la hernia inguinal se reconoce fácilmente y basta con una adecuada anamnesis y examen físico para llegar al diagnóstico. Cuando no se comprueba al examen físico el aumento de volumen inguinal descrito por el paciente, puede pedírsele que camine durante unos minutos y volver a examinarlo, repetir la exploración en otro control,
  • 409. 410 o bien, solicitar algún estudio imagenológico. La ecografía de partes blandas tiene varias ventajas como bajocosto,disponibilidad,rapidez,noirradia;peroesoperador dependiente. Una hernia se reconoce ecográficamente por el defecto fascial y por la protrusión anormal del contenido herniario con el esfuerzo y su posterior reducción con la compresión del transductor. Debe solicitarse solo cuando exista duda diagnóstica respecto de alguna masa localizada en la zona inguinal o en pacientes con hernias de difícil palpación. Cabe recalcar que el diagnóstico es netamente clínico, por lo que el diagnóstico ecográfico de pequeñas hernias no palpables no son indicación quirúrgica, por ser defectos clínicamente irrelevantes. En cuanto a la tomografía axialcomputada yresonancianuclearmagnética,suprincipal utilidad es en sospecha de hernias complicadas, dado que permite evaluar signos precoces de compromiso vascular visceral, obstrucción intestinal, perforaciones intestinales, etc. También sirve en el diagnóstico de hernias poco comunes como la de Spiegel o la obturatriz. Diagnóstico diferencial Hay que diferenciar las hernias inguinofemorales con cualquier tumoraciónquepudieraaparecerendicharegión,porejemplo, adenopatías de las enfermedades linfoideas (ejemplo, linfoma de Hodgkin), metástasis de tumores, infecciones en los miembros y enfermedades de transmisión sexual. Puede haber manifestaciones en forma de flegmón o abscesos de estas enfermedades, o de los músculos adyacentes, que pueden confundir el diagnóstico de hernia. Tambiénexistenlipomasquepuedencreceryhacersospechar hernias inexistentes. Para diferenciar una hernia de un hidrocele, se debe realizar la prueba de la transiluminación, aplicando un foco de luz directo sobre la tumoración que en un principio simulaba una hernia. Otros diagnósticos diferenciales son los varicoceles, aneurismas y pseudoaneurismas de la arteria femoral (especialmente si existe antecedente de acceso vascular por la arteria femoral para procedimientos endovasculares). Clasificación Existen muchas clasificaciones de las hernias inguinales, siendo la más utilizada la de Nyhus. Sin embargo, la mayoría de los cirujanos prefiere describir las hernias según tipo, localización y estado clínico. Complicaciones Las hernias presentan complicaciones primarias y secundarias. Entre las primeras se describen: • Irreductibiidad:noesposiblereintroducirelsacoherniario y su contenido a la cavidad abdominal. • Atascamientooincarceración:laherniasehaceirreductible en forma aguda y el paciente consulta por dolor. Puede llevar a obstrucción intestinal. Existe compromiso vascular delavísceraprotruidaconsistenteenedemaycongestión por dificultad del retorno venoso, que es aún reversible. • Estrangulación: con el paso del tiempo (6 a 8 horas) aparece intenso dolor por compromiso isquémico (arterial) de la víscera herniada, con traslocación bacteriana y posibilidad de infarto y perforación intestinal, peritonitis, sepsis y shock. • Pérdida del derecho a domicilio: no existe la suficiente capacitancia en la cavidad abdominal para permitir reintroducir el contenido herniado, por lo que unintento forzado de reducción produce un aumento brusco de la presión intraabominal y puede generar un síndrome compartimental. Soncomplicacionessecundariasdelasherniaslaobstrucción intestinal, perforación, peritonitis, sepsis, shock. Tratamiento de la hernia inguinal En general, toda hernia inguinal debe ser operada en cuanto se diagnostica debido a que su evolución natural es siempre hacia su progresivo aumento de tamaño e irreductibilidad con el transcurso del tiempo, lo que hace más difícil la reparación quirúrgica. Además, existe el riesgo de complicaciones potencialmenteletales,comolaestrangulación.Laexcepción son las hernias con anillo muy amplio en pacientes con alto riesgoquirúrgico,situaciónenqueantiguamenteseutilizaban los bragueros como tratamiento conservador, aunque en la actualidad su uso es excepcional. Cuando la hernia es pequeña y asintomática se puede observar durante un tiempo (“watchful waiting”), aunque el tratamiento definitivo siempre será la cirugía. En relación con el momento de la operación, cuando la hernia es fácilmente reductible al examen y sin signos de complicación debe realizarse una reparación quirúrgica electiva. Cuando la hernia está atascada, caracterizada porque el paciente refiere dolor e irreductibilidad súbitos y es muy sensible a la palpación, puede intentarse maniobras de taxis o reducción manual de la hernia, administrando analgesia i.v.,posicióndeTrendelemburg yaplicandopresión constante desde la parte más distal de ella. Si la reducción es exitosa, se aconseja operar en forma electiva lo antes posible. Debe desistirse de la reducción después de uno o dos intentos frustros y proceder a operar de urgencia para evitar la estrangulación. Cuando existe sospecha de estrangulación (hernia con más de 6 a 8 horas de atascamiento y/o sospecha de obstrucción intestinal o peritonitis), no se debe intentar reducirla, pues la reintroducción de un intestino isquémico o necrótico a la cavidad abdominalpuede producir unaperforaciónintestinal,
  • 410. 411 peritonitis y sepsis. En estas circunstancias se debe operar de urgencia. Tratamiento quirúrgico Existen distintas modalidades de reparación quirúrgica de la hernia inguinal, considerando la vía de abordaje utilizada (vías anterior o abierta o clásica, posterior, laparoscópica); y el uso o no de material protésico. El abordaje quirúrgico más común en la hernia inguinal es la reparación por vía anterior abierta con una malla protésica, existiendo varias técnicas. La utilización de una malla de material protésico (hernioplastía) permite una reparación libre de tensión, lo que disminuye la posibilidad de recidiva. La reparación herniaria sin protesis (herniorrafía), poco usada actualmente debido a su mayor porcentaje de recidiva, está indicada en casos con contaminación del sitio quirúrgico (hernia estrangulada, resección intestinal simultánea) en que está contraindicado la colocación de malla. Las técnicas de reparación herniaria más utilizadas son: 1. Herniorrafías inguinales clásicas por vía anterior (sin uso de prótesis). • Operación de Bassini: Eduardo Bassini (1884-1929) sentó las bases de la cirugía herniaria moderna por medio de la reparación de la pared posterior del conducto inguinal. Consiste en la sutura del arco del transverso y el tendón conjunto al ligamento inguinal. Presenta una tasa de recidiva alta (promedio a 5 años de un 5 a10%), debido a la tensión generada en los tejidos. • Operación de McVay o reparación del ligamento de Cooper: utilizada primero por Lotheissen (Austria, 1897), pero popularizada por Chester McVay (1924). Une la aponeurosis del músculo transverso al ligamento de Cooper yalligamentoinguinal.Produceunagrantensión, por lo que incluye una incisión de relajación en la vaina del recto anterior. • Operación de Shouldice: desarrollada por el Dr. Shouldice en 1950 en Toronto, Canadá. Se abre la fascia transversalis y repara la pared posterior del conducto inguinal con 4 planos de suturas continuas imbricando los planos profundos y superficiales que incluyen la fasciatransversalis ylosplanosaponeuróticos.LaClínica Shouldice reporta una baja tasa de recidiva con esta técnica (1 a 2%). 2. Herniorrafía inguinal clásica por vía posterior (sin uso de prótesis). • Operación de Nyhus: Lloyd Nyhus (1959) publicó su técnica basada en el acceso a la región inguinal por vía preperitoneal. Por esta vía se pueden tratar tanto hernias inguinales como crurales. 3. Hernioplastía inguinal por vía anterior con uso de prótesis. • Técnica de Lichtenstein: se utiliza una malla protésica que se sutura al ligamento inguinal y al tendón conjunto; cortando la malla en un borde lateral para permitir el paso del cordón inguinal y creando un nuevo anillo inguinal profundo. Sus ventajas son el menor dolor posoperatorio y baja recidiva (promedio menor al 2%). • Técnica de Gilbert: Arthur Gilbert en 1992 inventó un dispositivo de dos mallas unidas por un cilindro (Prolene Hernia System), donde uno de los extremos se introduce por el anillo inguinal profundo y el otro extremo cubre el conducto, lo que permite una reparación en 2 planos (preperitoneal y anterior). No requiere suturas, se fija gracias a la presión intraabdominal. Se reporta un bajo índice de recidiva (menor a 2%7 ), pero tiene mayor costo. • Técnica de Rutkow-Robbins: introduce un tapón cónico de malla en el anillo inguinal profundo que se sutura o no a los tejidos vecinos8 . 4. Hernioplastía inguinal por vía posterior con uso de prótesis. • Técnica de Stoppa-Rives: En 1969, Stoppa describió una reparación usando una malla protésica de gran tamaño colocada en el espacio preperitoneal. Denominó su técnica “reforzamiento protésico gigante del saco visceral”. Indicada en grandes hernias (inguinoescrotales), enherniasbilaterales yenrecidivadas.Noprecisasuturar la prótesis, que se mantiene en posición gracias a la presión intraabdominal. 5. Hernioplastía inguinal laparoscópica9 . Por vía laparoscópica se accede al espacio preperitoneal de la región inguinal, colocando una malla que refuerza la paredposteriordelconductoinguinal.Permitelavisualización y reparación simultánea de defectos herniarios bilaterales, tanto inguinales como crurales, por el mismo acceso. En la actualidad se utilizan 2 tipos de técnica laparoscópica: 7 Gilbert A. An anatomic and functional classification for the diagnosis and treatment of inguinal hernia. Am J Surg, 1989;157- 331. 8 Rutkow IM. Aspectos epidemiológicos, económicos y sociológicos de la cirugía de la hernia en Estados Unidos en el decenio de 1990. Clín Quir Nort (ed. española). Vol. 6/98; 889-899. 9 Takata MC, Duh QY. Laparoscopic inguinal hernia repair. Surg Clin North Am, 2008; 88: 157-178.
  • 411. 412 • Técnica transabdominal preperitoneal (TAPP): descrita por Schulz y Arregui en 1992. Se accede al interior de la cavidad abdominal con laparoscopía, se abre el peritoneo inguinal horizontalmente por encima del defecto herniario, reduciendo el saco herniario y, posteriormente, colocando una malla en el espacio preperitoneal reparando el defecto. Tiene buenos resultados, con índices de recidiva menores al 3%, pero el principal argumento en su contra es el riesgo potencial de lesiones intraabdominales vasculares o viscerales. • Técnica totalmente extraperitoneal (TEPP): se accede disecando el espacio preperitoneal infraumbilical con un dispositivo inflable introducido a través de la pared abdominal,perosinpenetraralinteriordelabdomen,loque evita el riesgo de lesiones viscerales intraabdominales. Presentamayordificultadtécnicaportenermenorespacio para la disección. Las ventajas de la técnica laparoscópica son menor dolor posoperatorio, recuperaciónmás rápida, menor dolor crónico posoperatorio, mejor visualización anatómica y permite la reparación simultánea por el mismo acceso de defectos herniarios bilaterales, tanto inguinales como crurales. Sus desventajas son requerir anestesia general, mayor tiempo operatorio, mayor costo y una tasa de recidiva ligeramente mayor a la vía anterior con malla. La hernioplastía laparoscópica debe ser considerada como alternativa útil en el tratamiento de hernias bilaterales o recidivadas, mientras que en una hernia inguinal primaria unilateral es preferible una técnica abierta con prótesis. Tratamiento quirúrgico de la hernia femoral La hernia femoral se produce a través del conducto femoral y produce un aumento de volumen bajo el ligamento inguinal. Representa el 10% de toda la cirugía herniaria y debido a su alta posibilidad de incarceración debe operarse siempre. El 50% de hombres con hernia femoral presentan una hernia inguinal directa concomitante, versus solo el 2% de las mujeres,loquedebeconsiderarseenlatécnicadereparación. Las alternativas son: 1. Reparación clásica sin prótesis. • Acceso femoral: cierre del orificio femoral con puntos entre el ligamento inguinal y el ligamento de Cooper. • Acceso inguinal: reparación con el ligamento de Cooper, se utiliza cuando coexisten una hernia crural con una inguinal (el 50% de hombres con hernia femoral presenta una hernia inguinal directa concomitante versus solo el 2% de las mujeres). • Acceso preperitoneal: en casos de estrangulaciónpermite examinar la viabilidad de las vísceras herniadas y su eventualreparación,ademásderepararelorificiofemoral. 2. Reparación con prótesis. • Colocaciónporvíafemoralopreperitoenaldeuntapónde malla enrollado en modo de cigarro, obliterando el canal femoral, suturado en los puntos cardinales. • Colocación de prótesis por vía inguinal (Lichtenstein). • Laparoscópica TAPP o TEP: técnica similar a la descrita en la reparación de la hernia inguinal. Complicaciones de la cirugía herniaria inguinal 10 Al igual que en cualquier procedimiento, la hernioplastía presenta riesgo de complicaciones. a) Infección: la infección de la herida operatoria se describe entre un 1 a 2% de la cirugía herniaria electiva. En caso de infección, estas pueden ser tratadas con pautas adecuadas de antibióticos. En caso de compromiso de la malla protésica, puede requerir su extirpación para el manejo definitivo. b) Complicaciones hemorrágicas: las equimosis y hematomas no son infrecuentes, describiéndose hasta en un 12% de los pacientes. Las causas más frecuentes de hematomas pequeños suelen ser vasos superficiales, con lesiones de la arteria epigástrica superficial o la circunfleja ilíaca. También se han descrito en lesiones de los vasos espermáticos externos. Las lesiones de los vasosfemoralesengeneral danhematomasimportantes, expansivos, que deben ser reparadas en pabellón. El tratamiento inicial debe ser expectante. En caso de progresar (hematomas expansivos), debe resolverse de manera quirúrgica. c) Atrofia testicular/orquitis isquémica/esterilidad: son las lesiones viscerales más frecuentes de la cirugía herniaria inguinal. Se describe en un 0.3%, subiendo hasta un 0.46% en hernias recidivadas. La causa fundamental de la orquitis isquémica es la trombosis de las venas testiculares del cordón espermático, por disección excesiva de este durante la cirugía. Se manifiesta como inflamación testicular, dolor y fiebre en el posoperatorio inmediato, con evolución lenta, precisando tratamiento con antiinflamatorios. En su evolución puede causar atrofia testicular, con eventual esterilidad en caso de ser orquitis bilaterales. d) Dolor posoperatorio: muy variable, se ha reportado entre un 0 al 10% en los centros especializados. De vital importancia, dado que muchos pacientes se presentan 10 Álvarez Caperochipi J, Porrero Carro JL, Dávila Dorta D. Guía clínica de la AEC: Cirugía de la pared abdominal. Madrid: Ed. Arán, 2002.
  • 412. 413 sindoloralmomentodeldiagnóstico.Segúntemporalidad se dividen en agudos y crónicos (3 meses el punto de corte). Se divide en dolor somático (daño en músculos o ligamentos), visceral (daño a las estructuras viscerales dentro del cordón), o neuropático (daño o atrapamiento de nervios) 11 . e) Lesionesintestinalesyvesicales:laslesionesintestinales son extraordinarias, principalmente se encuentran en las reparaciones laparoscópicas. Las lesiones vesicales pueden suceder por la presencia de hernias deslizadas, comotambiénporlareparaciónlaparoscópica.Estaúltima requiere reparación inmediata en dos planos, además de una sonda vesical posoperatoria. f) Lesióndelconductodeferente:susecciónes infrecuente. En caso de evidenciarse en el acto quirúrgico, se puede reparar con técnicas microquirúrgicas. Puede comprometer su función por fibrosis posquirúrgica, lo que puede causar diseyaculación. Se acompaña de dolor inguinal con la eyaculación, por distensión brusca del deferente. g) Desplazamiento, adherencias y rechazo: el rechazo a la prótesissueletenerrelaciónconcontaminaciónoinfección. El desplazamiento es excepcional y suele deberse a una mala técnica de fijación. Se han descrito adherencias viscerales que han cursado con obstrucción intestinal y fístulas intestinales a largo plazo. Su tratamiento exige el retiro de la prótesis, y reparar el defecto causado12 . Hernia Incisional Lasherniasincisionalescorrespondenalaprotrusiónanormal de vísceras o epiplón a través de un defecto adquirido, pos quirúrgico, de la pared abdominal. Representan el 15-20% de las hernias de la pared abdominal13 . Son dos veces más frecuentes en mujeres que hombres. Se estima que las hernias incisionales se desarrollarán en 10-15% de los pacientes que fueron sometidos a cirugía previa14 . Y en cuanto a los pacientes que desarrollaron una infeccióndeheridaoperatoriaestenúmeroaumentaal23%15 . 11 Bay Nielsen M, Perkins FM, Kehlet H. Pain and functional impairment 1 year after inguinal herniorrhaphy: a nationwide questionnaire study. Ann Surg, 2001; 1: 1-7. 12 Neumayer L. Is the presence of an inguinalhernia enough to justify repair? Ann Surg, 2006;244:174-175. 13 Carlson MA, Ludwig KA, and Condon RE: Ventral hernia and other complications of 1000 midline incisions. South Med J 1995; 88: pp. 450-453. 14 Mudge M, Hughes LE. Incisional hernia: a 10 year prospective study of incidence and attitudes. Br J Surg 1985; 72:70. 15 Bucknall TE, Cox PJ, Ellis H. Burst abdomen and incisional hernia: a prospective study of 1129 major laparotomies. Br Med J (Clin Res Ed) 1982; 284:931. Seconocencondicionesqueaumentanelriesgodedesarrollar una hernia incisional, puesto que toda condición que inhiba el proceso de cicatrización normal va a tener más riesgo herniario. Entre estas condiciones encontramos infecciones, obesidad, tabaquismo, uso de inmunosupresores, tensión excesiva sobre la herida, malnutrición, suturas dehiscentes, enfermedades del tejido conectivo. Las hernias incisionales han sido descritas en relación con incisiones paramedianas, subcostales, McBurney, Pfannenstiel,eincisionesenelflanco.Lasentradasencirugía laparoscópica también puedenser unsitio de herniación.Asu vez, hay estudios que comprueban que una incisión vertical tiene mayor riesgo de generar hernias incisionales versus una incisión transversal16 . La mayoría de las hernias incisionales se observan en el periodo posoperatorio temprano, sin embargo, se pueden presentar hasta 10 años pos cirugía o más. Clínica La presentación de las hernias incisionales es variable. Hernias pequeñas pueden ser asintomáticas, o bien, presentar dolor al protruir por el defecto en la pared. En general, hay aumento de volumen en relación con la cicatriz de alguna cirugía que el paciente nota aún más al realizar maniobras de Valsalva. Soloel10-15% de lashernias incisionales sepresentancomo hernia atascada causando obstrucción intestinal17 . El examen físico de estos pacientes debe realizarse con el paciente de pie y acostado. En general, se podrá palpar la masa, evaluar su reductibilidad y definir el defecto. De existir una hernia en el examen abdominal idealmente se procederá a realizar un examen abdominal y lumbar exhaustivo para identificar hernias coexistentes. Diagnóstico Para el diagnóstico de hernia incisional basta con el examen físico en la mayoría de los pacientes; sin embargo, existen algunos casos de pacientes con hernias pequeñas que no suelen ser palpables, en estas es de utilidad el ultrasonido y/o la tomografía computarizada. La TC también es de gran utilidad en los pacientes obesos en quienes el examen físico es muy dificultoso. La gran ventaja de los métodos de imágenes para el diagnóstico es que permiten identificar la hernia y, además, el contenido del saco herniario. 16 Fassiadis N, Roidl M, Hennig M, et al. Randomized clinical trial of vertical or transverse laparotomy for abdominal aortic aneurysm repair. Br J Surg 2005; 92:1208. 17 Courtney CA, Lee AC, Wilson C, O’Dwyer PJ. Ventral hernia repair: a study of current practice. Hernia 2003; 7:44.
  • 413. 414 Diagnóstico Diferencial En general, se pueden confundir más las hernias por otras patologías cuando estas se encuentran en el contexto de una complicación aguda, frente a esto se debe tener en cuenta como diagnóstico diferencial hematomas de la pared abdominal y el tumor desmoides u otro tipo de sarcomas. La diastasis de los rectos no se debe confundir con hernias de la pared abdominal. Esta es una condición adquirida donde la separación entre los rectos es mayor a 2 mm, pero no existe defecto de la fascia. Tratamiento El tratamiento de las hernias incisionales es en su mayoría quirúrgico. La reparación herniaria puede realizarse solo con suturas (rafia), o bien, con una malla protésica (plastía). Herniorrafia: se realiza la incisión por la cicatriz anterior, disecando el saco herniario hasta identificar la fascia que lo rodea. Se desbrida y los bordes de la fascia son suturados para invaginar el contenido. Es importante que al cerrar la fascia en lo posible se realice una sutura libre de tensión para no generar mayor recidiva y complicaciones como dolor crónico posoperatorio. Esta técnica está indicada en hernias de pequeño tamaño (menos de 2-3 cm de diámetro). Hernioplastía: la reparación herniaria con malla logra disminuir al mínimo la tensión sobre la pared abdominal y, en general,se prefiere sobre la herniorrafía, ya quetienen menor recidiva. La malla se puede poner sobre la fascia o bajo ella. La vía de abordaje puede ser abierta o laparoscópica. El uso de malla está especialmente indicado en hernias de mayor tamaño. La vía laparoscópica tiene menor riesgo de infección del sitio operatorio, hay menor dolor posoperatario y requiere menor tiempo de recuperación. Para los pacientes obesos la operación vía laparoscopía es la mejor opción disponible en este momento, ya que reduce significativamente la tasa de infección asociada a la cirugía de reparación. Otras Hernias de la Pared Abdominal Epigástrica Son defectos de la línea media abdominal situados entre el proceso xifoides y el ombligo. Hasta el 20% de este tipo de hernias es múltiple. Es raro que se compliquen con atascamientooestrangulación.Sucontenidoesenlamayoría omento y solo en muy pocos casos intestino delgado. Estas hernias se reparan en pacientes sintomáticos con cirugías pequeñas de preferencia por vía abierta. Se incinde la piel dondeestálaherniacon unaincisiónpequeña, loscontenidos de la hernia pueden ser reducidos o resecados y se cierra el defecto con puntos separados. La recurrencia de este tipo de hernias es infrecuente. Lumbar Son hernias que se desarrollan en la región lumbar (desde la 12.ª costilla hasta la cresta iliaca). En general, se dan en dos localizaciones: 1. Triángulo de Grynfelt: es el triángulo lumbar superior, espacio limitado por la 12.ª costilla y borde inferior del serrato posterior inferior, borde externo del músculo cuadrado lumbar y borde posterior del oblicuo interno. 2. Triángulo de Petit: es el triángulo lumbar inferior, tiene como límites por anterior el músculo oblicuo mayor,por posterior el músculo dorsal ancho y por inferior el borde de la cresta ilíaca. Estetipo de hernias pueden sercongénitas oadquiridas, pero en su mayoría son adquiridas con el antecedente de cirugía previa, especialmente nefrectomía. La reparación de este tipo de hernias puede ser por vía laparoscópica o vía abierta, sin importar cuál sea la vía es de suma importancia en la reparación usar malla, esta puede ser colocada en el plano profundo a la pared muscular si se realiza el procedimiento vía abierta, o bien, puesta adyacentealdefectosiserealizareparaciónlaparoscópica.La complicación más notoria del posoperatorio es dolor crónico, este se relaciona con la dificultad de la técnica de fijación de malla debido al margen costal. Obturatriz Son un tipo poco frecuente de hernias de la pared abdominal, en que el contenido herniario protruye por el agujero obturador. En general, son anteriores y mediales al paquete vasculonervioso obturatriz. Toda condición que aumente la presión intraabdominal aumenta el riesgo de generar estas hernias. Se observan comúnmente al lado derecho, pero pueden ser bilaterales y se ha observado mayor incidencia en mujeres que han pasado por grandes bajas de peso. Estas hernias se reparan vía abierta o laparoscópica con malla. Paraestomales Son hernias adyacentes a una ostomía, por lo que su localización puede ser diversa. Su corrección depende de la afección y si influye o no en la funcionalidad de la ostomía realizada. Perineales Protrusión herniaria a través del piso pélvico. En general, estas hernias ocurren pos cirugía y en mujeres mayores multíparas. Son clasificadas en anterior y posterior según su relación con el musculo perineal transverso.
  • 414. 415 Ciáticas Herniaciones por el foramen ciático mayor o por el foramen ciáticomenor.Sonherniasextremadamenterarasqueocurren en contexto de cirugía pélvica. En ellas, el contenido del saco herniario no solo puede tener intestino y omento, sino que también involucrar órganos reproductores y del sistema urinario. Se pueden presentar con obstrucción intestinal, sépsis urinaria o sépsis glútea. Estas hernias se reparan con la reducción del contenido y el cierre del defecto con o sin malla, ya sea por vía laparoscópica o vía transglútea. Spiegel Hernias de la línea semilunar. En general, se diagnostican como hallazgo de la TC o en una laparoscopia, esto se da porque la mayoría de estas hernias son interparietales. Este tipo de hernia se diagnostica muybien con ultrasonido. Hasta el 20% de estas hernias se presenta como hernia atascada, es por esto que se recomienda al diagnóstico la reparación de la hernia de manera electiva. La cirugía se realiza por vía abierta,realizándoseunaincisiónensentidotransversaljusto superior a la masa palpable, se deben reducir los contenidos del saco herniario y este se puede sacar o invertir. Umbilical En los adultos lo más común es que las hernias umbilicales estén dadas por aumento de la presión intraabdominal. Se dan con mayor frecuencia en hombres 3:1. En general, el contenido es omento. Al diagnóstico de una hernia umbilical no es necesaria la reparación inmediata, sino que pueden ser observadas, sin embargo, si estas son sintomáticas deben ser reparadas. Para la reparación vía abierta se accede por encima del defecto con una incisión vertical, se llega al saco herniario pudiendo invertirlo o resecarlo y se cierra la fascia si el defecto es pequeño solo con suturas, o bien, con una malla si el defecto es grande.
  • 415. 416 Bibliografía 1. Acevedo A, Hernias Inguinofemorales. Anatomía y técnica quirúrgica. Santiago, Chile: Ed. Mediterráneo 2012. 2. Ministerio de Salud, Chile. Guía Clínica Hernias de pared abdominal. Santiago: Minsal, 2008. 3. Towfigh S, Neumayer L. Inguinal Hernia. In: Cameron J, Cameron A. Current Surgical Therapy 11th Edition. Philadelphia: Elsevier; 2014. 4. Malangoni M, Rosen M. Hernias. In: Townsend C, Beauchamp D, Evers M, Mattox K. Sabiston Textbook of Surgery 20th Edition. Philadelphia: Elsevier; 2017. 5. Carbonell Tatay F. Hernia Inguinocrural. Valencia: Ed. Vimar, 2001.
  • 417. 418
  • 418. 419 9.1 Enfermedad Cerebrovascular Ramírez J, Wuth MF, Ubilla M. Introducción La ateroesclerosis, como proceso patológico sistémico, puede afectar a nivel de la arteria carótida común, bifurcación carotídea, carótida interna y/o arterias vertebrales generando una estenosis y, por tanto, alteración del flujo sanguíneo arterial hacia el cerebro. Esto es lo llamamos enfermedad carotídea, que posee tasas de incidencia no despreciables, en especial en poblaciones de adultos mayores. Estudios epidemiológicos han estimado prevalencias de estenosis carotídea en un 3.8% de los hombres y 2.7% de las mujeres, en pacientes de 25-84 años1 . La importancia de esta patología radica en que es la causa preveniblemásfrecuentedeaccidentescerebrovasculares2 y, por consiguiente, su intervención disminuye la morbimortalidad de estos pacientes. Etiología • Aterosclerosis (la más frecuente). • Displasia fibromuscular. • Disección carotídea. • Arteritis de Takayasu. • Aneurismas. • Necrosis posradiación. • Vasoespasmo. Enfermedad Carotídea Ateroesclerótica Patogenia La región más afectada de la carótida por enfermedad ateroesclerótica es la bifurcación, específicamente el bulbo carotídeo.Aquí, el diámetro del vaso es dos veces mayor que en la carótida interna distal al bulbo, produciendo fenómenos hemodinámicos que no se ven en otras arterias del cuerpo, favoreciendo la formación de placas de ateroma. El flujo en la carótida común es laminar, al dividirse en la bifurcación permanece laminar y de alta velocidad. Se ha observado en estudios de flujo con burbujas de hidrógeno que en la pared externa del bulbo existe un área de bajo flujo no laminar y estasis, lo que aumentaría el tiempo de interacción de partículas con la pared del vaso, explicando así la mayor prevalencia de placas iniciales a este nivel. Factores de Riesgo Son los factores de riesgo cardiovascular y ayudan a enfocar un examen físico y anamnesis dirigida en búsqueda de síntomas y signos de enfermedad carotídea. Se han descrito como factores independientes: • Edad • Tabaco • EAO • HTA • Enfermedad coronaria • DM • DLP • Aneurisma aórtico Diagnóstico Clínica El cuadro clínico de presentación es variable y depende del grado de estenosis y la posibilidad de generar émbolos que se crean a partir de la placa de ateroma. Los pacientes con enfermedad carotídea se dividen en dos grandes grupos, asintomáticos y sintomáticos, ya que existe mayor morbimortalidad en estos últimos, lo que influye en el tratamiento. Pacientes asintomáticos • Existe un grupo de pacientes que no presentarán síntomas, lo que no quiere decir que estén exentos de riesgo para presentar un accidente cerebrovascular. En casos en que la estenosis provoca una alteración al flujo significativa, definida como un lumen residual a nivel del origen de la arteria carótida interna <1.5mm3 , se puede pesquisar en el examen físico, como un soplo sistólico en la región carotídea. 1 Mathiesen EB, et al: Prevalence of and risk factors associated with carotid artery steno-sis: the Tromsø Study. Cerebrovasc Dis 2001; 12: pp. 44-51 2 Mathiesen EB, et al: Prevalence of and risk factors associated with carotid artery steno-sis: the Tromsø Study. Cerebrovasc Dis 2001; 12: pp. 44-51 3 Can U, Furie K, Suwanwela N, Southern J, Macdonald N, Ogilvy C et al. Transcranial Doppler Ultrasound Criteria for Hemodynamically Significant Internal Carotid Artery Ste-nosis Based on Residual Lumen Diameter Calculated From En Bloc Endarterectomy Specimens. Stroke. 1997;28:1966-1971
  • 419. 420 Pacientes sintomáticos • Accidente isquémico transitorio (TIA): pérdida de alguna función cerebral específica, de forma transitoria, con una duración de menos de 24 horas, generalmente entre 2 a 15 minutos. Sin déficit posterior al evento. Según su manifestación indicará la región del cerebro que dejó de ser perfundida, localizando el sitio de isquemia. • Amaurosisfugax:pérdidadelavisiónunilateraltransitoria. Es causada por un émbolo en la arteria oftálmica. El paciente puede presentar pérdida completa o parcial del campo visual. La duración es de minutos, sin embargo, puede haber secuelas. • Accidente cerebrovascular (ACV): déficit neurológico de más de 24 horas de duración. Este tema es muy amplio y debe estudiarse dirigidamente. Imágenes Ecografía Doppler carótido-vertebral: es el test más útil, permite medir la severidad de la estenosis según la velocidad de flujo. Así, a mayor grado de estenosis, mayor velocidad de flujo para mantener la perfusión a distal. AngioTAC/angioRNM: también pueden identificar el grado de la lesión. Estos estudios sirven además para evaluar otras lesiones en otras arterias, por ejemplo, Aorta o vasos intracraneales. Cuando el tratamiento sea quirúrgico, es necesario complementar con alguna de estas imágenes para confirmar los hallazgos en la ecografía Doppler. Arteriografía: es el gold standard, pero es un estudio invasivo no exento de complicaciones, por lo que se realiza en casos seleccionados. Por lo general, se utilizará cuando los hallazgos de los otros estudios sean discordantes con la clínica o para haceruntratamientoendovascularcuandosehadescartadola opción quirúrgica tradicional. Sirve para diagnosticar patología no ateroesclerótica, como una displasia fibromuscular. Clasificación La estenosis carotídea se puede clasificar según el grado de obstrucción al flujo en: • Severa: 70-99% • Moderada: 50-69% • Leve : menos de 50% Tratamiento Pacientes asintomáticos El riesgo anual de ACV en pacientes asintomáticos con estenosis de > 50% en estudios antiguos era de 2% aproximadamente, con el desarrollo de una mejor terapia médica, en la actualidad se estima de 0,35%4 . Manejo médico intensivo El manejo médico, como tratamiento único, está indicado en pacientes asintomáticos con estenosis <80% o aquellos que no cumplan criterios para revascularización. Consiste principalmente en el control de los factores de riesgo. Así, el manejo farmacológico con-siste en antiagregantes plaquetarios (AAS, clopidogrel), estatinas y el manejo de la hipertensión y diabetes. Además, se debe complementar con cambios de estilo de vida como la suspensión del tabaco. Manejo quirúrgico La revascularización carotídea con endarterectomía (más terapia médica intensiva) está indicada en los pacientes asintomáticos que reúnen las siguientes características: • Estenosis carotidea > 80% o > 70% en centros en que la morbimortalidad perioperatoria es <3%. • Estenosis moderada de alto riesgo: placas “blandas” o “hipoecogénicas” o ulceradas, evidencias de embolias silentes o infartos sin secuelas clínicas previos en el territorio de la arteria afectada y reserva cerebrovascular reducida (medida por Doppler transcranial). • Progresión de la estenosis. • Médicamente estables. • Expectativa de vida > a 5 años. Pacientes sintomáticos Manejo médico intensivo Consiste en el mismo manejo médico que para pacientes asintomáticos. Se debe iniciar en todos los pacientes y será utilizado como tratamiento único en aquellos casos en que no está indicada la cirugía. Manejo quirúrgico En pacientes con estenosis >70% sintomáticos se ha visto una incidencia de ACV de 26% en los sometidos a manejo médico y de 9% en los tratados con cirugía a los dos años de seguimiento5 . Es por esta razón que se recomienda la 4 Marquardt L, Geraghty OC, Mehta Z,Rothwell PM. Lowrisk of ipsilateral stroke in pa-tients with asymptomatic carotid stenosis on best medical treatment: a prospective, popu-lation-based study. Stroke. 2010;41(1):e11. 5 North American Symptomatic Carotid Endarterectomy
  • 420. 421 endarterectomía en pacientes sintomáticos con: • Estenosis > 70% • Expectativa de vida > 5 años • Comorbilidades compensadas que justifiquen el riesgo quirúrgico. • Lesión en lugar accesible por abordaje quirúrgico. • Centro con riesgo quirúrgico < 6% Tratamiento endovascular La instalación de stents carotídeos ha demostrado similares resultados que la endarterec-tomia, pero una mayor morbimortalidad. Las indicaciones para el uso de stents carotídeos son las siguientes: • Estenosis >70% • Lesiones no abordables por endarterectomía. • Endarterectomía ipsilateral previa. • Comorbilidades descompensadas que aumentan el riesgo anestésico. Enfermedad Carotídea No Ateroesclerótica Displasia Fibromuscular Enfermedadarterialsistémicanoateroescleróticadeetiología desconocida. Existe un aumento del colágeno y condroitín sulfato en la arteria que puede producir estenosis, oclusión, aneurisma o disección de estas. Se han propuesto distintos factores que podrían contribuir al desarrollo de displasia fibromuscular (DFM), entre los que destacan: isquemia, hormonal,deficienciade antitripsina, genéticos einfecciosos/ inmunológicos.Lasarteriasmásafectadassonlaarteriarenal, la carótida interna y las arterias vertebrales. Se observa una mayor prevalencia en mujeres adultas. Clasificación histológica • Fibrodisplasia medial: la más frecuente, encontrándose en un 80% de los pacientes. En la angiografía se observa una imagen en rosario característico debido a laszonasdeestenosisseguidasdezonasaneurismáticas consecutivas. • Fibrodisplasiaintimal:seproduceeldepósitodecolagéno en la capa íntima, generando estenosis focales en forma de anillo o estenosis tubulares. Afecta más a pacientes jóvenes. • Fibrodisplasia perimedial: depósito de colágeno entre media y adventicia. La imagenología es similar a la fibrodisplasia medial. • Fibrodisplasia adventicial: poco frecuente. Produce estenosis focales. La presentación clínica y el estudio son similares a la de la enfermedad carotídea ateroesclerótica, pudiendo ser desde asintomática (mayoría de los casos) a presentarse con un ACV. Siempre se debe sospechar en pacientes con DFM de las arterias renales. El tratamiento de los pacientes asintomáticos es médico y consiste principalmente en antiplaquetarios. Se deben seguir demaneranoinvasivacada seis meses, yaseacon ecografía Doppler,angioTACoRNM.Lospacientessintomáticospueden ser con dilatación rígida abierta, dilatación con balón con técnica abierta o percutánea. Disección Carotídea La disección arterial se produce cuando existe una lesión de la íntima, permitiendo así la entrada de sangre a la pared del vaso, resultando en un hematoma intramural, que puede extenderse hacia distal por la presión arterial. El lumen falso quese creapuedeaumentardetamaño ypresiónintraluminal hastallegaraobstruirellumenverdadero(pseudocoartación), ocluyendo el vaso y provocando síntomas, o bien, ser fuente de émbolos hacia el territorio cerebral. Si se estabiliza y no progresa, la lesión en el segmento afectado puede llevar a cambios aneurismáticos. La disección carotídea puede ser espontánea o traumática y son responsables del 2% de los ACV, sin embargo, en pacientes jóvenes se describe hasta el 20%6 . Las espontáneas pueden estar en contexto de DFM o ser criptogénicas. La mayoría de estas disecciones ocurre superior al bulbo carotídeo. En las lesiones por trauma se han descrito tres mecanismos principales por los que se puede producir una disección carotídea: (1) hiperextensión extrema y la rotación de cabeza y cuello, (2) un golpe directo en el vaso y (3) laceración por fracturas óseas adyacentes7 . Dentro de la clínica de este cuadro, se describe una triada clásica que se encuentra en un tercio de los pacientes, caracterizada por: dolor cervical o cefalea frontotemporal ipsilateral, síndrome de Horner (Ptosis ymiosis ipsilateral, no 6 Rabih A. Chaer and Peter A. Schneiderend ngIf: XocsCtrl. authors.length Rutherford’s Vascular Surgery, Chapter 102, 1568- 1582.e2. 2014. Trial Collaborators. TIBeneficial effect of carotid endarterectomy in symptomatic patients with high-grade carotid stenosis. N Engl J Med. 1991;325(7):445. 7 Crissey MM, et al: Delayed presentation of carotid intimal tear following blunt craniocervi-cal trauma. Surgery 1974; 75: pp. 543- 549.
  • 421. 422 incluye anhidrosis, ya que afecta solo las fibras parasimpáticas) e isquemia cerebral o retinal. Diagnóstico Ante la sospecha clínica, el paciente debe ser estudiado con una imagen. La ecografía Doppler carotídea es un examen útil para demostrar una alteración en el flujo, pero no entrega una información valiosa sobre el sitio de disección. Es por esta razón que siempre se debe disponer de una angioTAC o angioRNM. La angiografía se considera como gold standard, pero es un exameninvasivo.Laimagendedoblelumenespatognomónico de disección. Tratamiento médico Se basa principalmente en antiplaquetarios (aspirina y clopidogrel). No existe evidencia suficiente para recomendar la anticoagulación, pero debido a que se cree que los ACV ocurren derivados de émbolos provenientes del sitio de disección,lamayoríadelospacientessonanticoaguladoscon heparina seguido de anticoagulantes orales por 3 a 6 meses8 . Tratamiento Quirúrgico Está indicado en caso de síntomas neurológicos fluctuantes o que progresan a pesar del tratamiento médico, compromiso del flujo cerebral, aneurisma en expansión o contraindicación deanticoagulación(ejemplo:hematomasubdural).Serealiza reparación de la di-sección por técnica abierta. 8 Norris JW:Extracranial arterial dissection: anticoagulation is the treatment of choice. Stroke 2005; 36: pp. 2041-2042.
  • 422. 423 Bibliografía 1. Mackey W and Teso D.Carotid Artery Disease.In: Hallett J, Mills J, Earnshaw J, Ree-kers J and Rooke T. Comprehensive Vascular and Endovascular Surgery. Philadelphia: Mosby; 2009. pp 595-605. 2. Atkins M and Bush R. Carotid Artery. In: Cronenwett J and Johnston K.Rutherford’s Vascular Surgery 8th edition. Philadelphia: Elsevier; 2014. pp1583-1597. 3. Naylor R. Surgical Treatment of Carotid Disease. In: Hallett J, Mills J, Earnshaw J, Reekers J and Rooke T. Comprehensive Vascular and Endovascular Surgery. Phila-delphia: Mosby; 2009. pp 606-629. 4. Leal I, Orgaz A, Doblas M and Criado E. Selection of Patients for Carotid Endarterec-tomy versus Carotid Artery Stenting. In: Stanley J, Veith F and Wakefield T. Current Therapy in Vascular and Endovascular Surgery. Philadelphia: Elsevier; 2014. 5. Gary G. Ferguson, MD, FRCSC; Michael Eliasziw, PhD; Hugh W.K. Barr, MD, FRCSC-The North American Symptomatic Carotid Endarterectomy Trial. Surgical Results in 1415 Patients. 1999 American Heart Association.
  • 423. 424
  • 424. 425 9.2 Patología Aórtica Calcagno M, Schwartz E. Introducción La patología aórtica aguda es una situación clínica crítica, cuyo pronóstico depende de un diagnóstico certero y rápido, así como del inicio temprano de su tratamiento. La aorta es un conducto que transporta durante la vida de una persona una media de 200 millones de litros de sangre1 . Esta nace en el anillo valvular aórtico y termina a nivel abdominal con la bifurcación de las arterias ilíacas comunes. Sedivideporeldiafragmaenaortatorácicayaortaabdominal. A nivel torácico se reconoce la raíz aórtica, que incluye los senos de valsalva; la aorta ascendente, que va desde la unión sinotubular hasta el nacimiento del tronco braquiocefálico; el arco aórtico, que es la porción transversa de la cual emergen los troncos supraaórticos (braquiocefálico, carótida común izquierda y subclavia); y la aorta descendente, que inicia distal a la arteria subclavia izquierda hasta el diafragma. A nivel abdominal se puede dividir en aorta supra e infrarrenal. 1 Erbel R, et al. Guía ESC 2014 sobre diagnóstico y tratamiento de la patología de la aorta. Rev. Esp. Cardiol. 2015; 68 (3).
  • 425. 426 Histológicamente,la pared aórticasecomponede tres capas: una túnica íntima interna, delimitada por el endotelio; una túnica media gruesa, caracterizada por células musculares lisas y hojas concéntricas de fibras elásticas y de colágeno; y una túnica adventicia, que contiene colágeno, vasa vasorum y nervios perivasculares. La aorta, además de transportar sangre, tiene un rol fundamental en el control de la resistencia vascular sistémica y lafrecuencia cardíaca, mediante receptores que responden a la presión, que están localizados en la aorta ascendente y el arco aórtico. Aneurisma Aórtico Un aneurisma se define como una dilatación permanente, localizada, de una arteria (incluyendo las tres túnicas), teniendo al menos un aumento del 50% de su diámetro, comparado con el diámetro normal del vaso en cuestión2 . Un falso aneurisma o pseudoaneurisma se forma por la interrupción de la continuidad de la pared arterial, en donde está ausente una, dos o las tres capas. La sangre que escapa del vaso genera un hematoma presurizado, que posteriormente se organiza creando una pseudocápsula fibrosa, siendo más propensos a la rotura que los aneurismas. En un adulto sano, el diámetro de la aorta ascendente es de 33 +/- 5 mm en su origen. La aorta descendente mide 24 +/- 3 mm y la aorta abdominal infrarrenal mide 18.7 +/- 3 mm3 . Los diámetrosestáninfluidos variablementepordiversosfactores como la edad, sexo (mayores en hombres), tamaño corporal (estatura,peso,áreadesuperficie) ypresiónarterial. Elíndice de expansión aórtico está en torno a los 0.9 mm en hombres y 0.7 mm en mujeres por cada década4 . Dado entonces que para pacientes mayores de 50 años, el diámetro normal de la aorta infrarrenal se estima entre 10 y 20 mm, un diámetro de 3 o más centímetros se considera un aneurisma de la aorta abdominal (AAA). Los aneurismas aórticos pueden clasificarse de varias maneras. Según su morfología, en fusiformes (dilatación simétrica) o saculares (fig. 1). Según su etiología, en de- generativos (más frecuentes), inflamatorios, congénitos, infecciosos (aneurismas micóticos – por Salmonella sp., Staphylococcus, Streptococcus) o mecánicos/postraumáticos (generalmente pseudoaneurismas). Y según su localización, en aneurismas torácicos (más frecuente en la porción ascendente), tóracoabdominales y abdominales. Estos últimos son los más frecuentes (80%), precisamente los infrarrenales (95%). Epidemiología Laincidenciarealdelosaneurismasaórticosesdesconocida, ya que en el 70% de los casos son asintomáticos. En EE.UU. es la decimoquinta causa global de muerte y la décima en hombres mayores de 55 años. Más de 5.000 personas mueren por aneurisma aórtico roto cada año. La prevalencia de AAT es de 16 por 100.000 habitantes y de AAA de 117 por 100.000 habitantes. Su prevalencia es mayor en la población masculina con una relación hombre/mujer de 4:1 en AAT y 8:1 en AAA, y a medida que envejece la población, siendo de 1 - 5% en la población general, 5 - 9% en mayores de 65 años y mayor al 10% en mayores de 70 años5 . Fig. 1: Clasificación de aneurisma según su forma. Tipos deaneurismas 2 Takayama T, Yamanouchi D. Aneurysmal Disease. The abdominal aorta. Surg Clin N Am 2013; 93: 877-891. 3 Crovari F, Manzor M. Manual de Patología quirúrgica: enfermedad de la aorta. Ediciones Univer-sidad Católica de Chile. 2014: 483-502. 4 Erbel R, et al. Guía ESC 2014 sobre diagnóstico y tratamiento de la patología de la aorta. Rev. Esp. Cardiol. 2015; 68(3). 5 Ardila F y cols. Recomendaciones para el diagnóstico y tratamiento en angiología y cirugía vas-cular. Capítulo:Aneurismas de la aorta abdominal. Sociedad Andaluza de Angiología y Cirugía vascular.
  • 426. 427 En Chile, la frecuencia de AAA alcanza el 7,6% en hombres y 1% en mujeres mayores de 60 años. Aproximadamente un 19% presenta antecedentes familiares de AAA6 . La presentación simultánea en otros territorios es habitual, con afectación torácica (12%), ilíaca (25%) y periférica (3,5%). La afectación aneurismática femoropoplítea puede acompañarse de un AAA en un70%. Factores de Riesgo Los principales factores de riesgo asociados al desarrollo de aneurismas son el tabaquismo e hipertensión arterial (HTA) asociado a mayor edad. Otros factores de riesgo conocidos son el sexo masculino, raza blanca, enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), dislipidemia, cardiopatía coronaria, enfermedad arterial periférica y antecedentes familiares. Pacientes con diabetes mellitus presentan menos aneurismas. Historia Natural La tasa de expansión media de los aneurismas de la aorta torácica es de 0.1 cm/año y de la aorta abdominal de 0.4 cm/año. Todo aneurisma se romperá si el paciente vive lo suficiente. Dicho esto, en principio se intenta prevenir la mortalidaddebidoalaroturaaneurismática,lacualseproduce en función de varios factores, siendo el más importante el diámetro (no tamaño, el largo no afecta). De esta manera, cuando el aneurisma infrarrenal es menor a 4 cm, el riesgo de rotura anual es muy bajo; entre 4 y 5 cm, el riesgo es menor a 5% y sobre 5 cm, es de un 10%. Si en el momento del diagnóstico ya está por encima de los 5 cm, la media de crecimiento es superior a 5 mm al año, de manera que en los dos años siguientes, evoluciona hacia la rotura en el 20% de los pacientes7 . En el caso de los aneurismas de aorta torácica (AAT), si estos miden entre 4 y 5.9 cm tienen un riesgo de rotura de 16%, y si el diámetro es mayor de 6 cm, el riesgo es de 31%8 . Precisamente cuando el aneurisma es mayor a 6 cm en la aorta ascendente y mayor a 7 cm en la aorta descendente, el porcentaje de complicaciones aumenta considerablemente9 . 6 Crovari F, Manzor M. Manual de Patología quirúrgica: enfermedad de la aorta. Ediciones Univer-sidad Católica de Chile. 2014: 483-502. 7 Crovari F, Manzor M. Manual de Patología quirúrgica: enfermedad de la aorta. Ediciones Univer-sidad Católica de Chile. 2014: 483-502. 8 Hoel A. Aneurysmal Disease: Thoracic Aorta. Surg Clin N Am 2013; 93: 893-910. 9 Coady M, et al. What is the appropriate size criterion for resection of thoracic aortic aneurysms? J Thorac Cardiovasc Surg. 1997; 113: 476-91. Otros factores predisponentes para la rotura son el tabaquismo activo, el género femenino, hipertensión arterial, el ritmo de crecimiento (mayor a 0.5 cm/año), la morfología (sacular), patología del tejido conectivo (síndrome de Marfán, Ehlers- Danlos, Loeys-Dietz) y la historia familiar de rotura. Clínica La mayoría de los aneurismas aórticos, ya sean torácicos (AAT), tóraco-abdominales (AATAb) o abdominales (AAA), son diagnosticados de manera incidental en estudios solicitados por otros motivos o en el examen físico como hallazgo. Aneurisma De Aorta Torácica Y Tóracoabdominal En casos asintomáticos, el AAT puede sospecharse en la radiografía de tórax por ensanchamiento mediastínico, crecimiento del botón aórtico, desplazamiento de la tráquea o de la ventana aortopulmonar hacia la derecha. El diagnóstico se confirma con la tomografía axial computada (TAC). En casos sintomáticos, la principal manifestación de rotura o de que esta es inminente, es el dolor torácico agudo, lancinante,retroesternaloreferidoaregióninterescapular.La presencia de dolor abdominal concomitante, puede ser en el contexto de un AATAb. En aneurismas rotos no contenidos, hay inestabilidad hemodinámica y colapso circulatorio. La falla respiratoria aguda asociada se puede presentar con la rotura libre a hemitórax izquierdo. Raramente, la erosión hacia mediastino puede resultar en hemoptisis, por fístula aortobronquial,oenhematemesis,porfístulaaortoesofágica. Menos frecuentes son los AAT o AATAb que producen síntomas subagudos o crónicos (más de 14 días). Generalmente, se manifiestan por el efecto compresivo de la aorta sobre algunas estructuras, como el esófago (disfagia, baja de peso, odinofagia), duodeno (saciedad precoz), tráquea (disnea) y nervios laríngeos recurrentes (aspiración, disfonía). Cuando la región afectada es la raíz aórtica o la aorta ascendente, el paciente puede presentar un soplo de insuficiencia aórtica o signos de insuficiencia cardíaca. Aneurisma De Aorta Abdominal Loscasosasintomáticossesuelendiagnosticarenelcontexto de estudio de patología urológica o digestiva, ya sea con ecografía o TAC, o en el examen físico donde se palpa una masa abdominal pulsátil, sobre el ombligo, algo lateralizada a la izquierda. Los casos sintomáticos se pueden manifestar con dolor abdominal o lumbar por compresión de estructuras vecinas, incluso por erosión de los cuerpos vertebrales. Rara vez se produce ateroembolismo e isquemia aguda de miembros inferiores debido al desprendimiento de un trombo mural o de restos de colesterol (síndrome del dedo azul). Laroturaeslaprimeramanifestaciónenun20-25%delosAAA ysepresentanconlatríadaclásicadedolorintensoabdominal
  • 427. 428 o lumbar, masa abdominal pulsátil y shock hipovolémico. Lo más frecuente es que ocurra hacia retroperitoneo donde muchas veces se logra contener. Sin embargo, si la rotura es libre a cavidad abdominal, la supervivencia es casi nula. Otra posibilidad de rotura es a la vena ilíaca derecha o vena cava inferior, desarrollando una fístula arteriovenosa de alto flujo (3 - 4%), o rotura a duodeno desarrollando una fístula aortoduodenal primaria que se manifiesta con hemorragia digestiva alta, masa pulsátil y compromiso hemodinámico10 . Imagenología y Diagnóstico Los AAT se pueden sospechar en una radiografía de tórax, al encontrarensanchamientodelmediastinoodelbotónaórtico, desplazamiento de la tráquea u opacificación de la ventana aortopulmonar. A veces, se puede apreciar una fina línea calcificada en el reborde del AAA, que nos haga sospechar su existencia. El uso de ultrasonido juega un rol importante en patología aórtica. En los AAT el ecocardiograma transesofágico (ETE), si bien no está indicado como estudio diagnóstico en la evaluación preoperatoria, proporciona información valiosa de la morfología aórtica, lo que permite evaluar el arco aórtico y aorta descendente proximal, ver trombos, placas de ateroma complicadas e incluso disecciones no diagnosticadas previamente. En el intraoperatorio es fundamental, puesto que permite monitorizar la función cardíaca directamente, verificarlaposicióndelacánulavenosaenlaaurículaderecha y permite localizar el lumen verdadero de la aorta en casos de disección. En los AAA, la ecografía abdominal tiene una sensibilidady especificidad mayor al 90%. Esta ofrece información sobre el diámetro máximo y su longitud, aunque no acerca de su relaciónconarterias viscerales.Estálimitadaporlapresencia de gas, obesidad ypor la destreza del operador.Sin embargo, sigue siendo el examen más costo-efectivo en la pesquisa o sospecha inicial del AAA. Según el “American College Of Cardiology” (ACC) y la “American Heart Association” (AHA) del año 2005, se deben someter a tamizaje con examen físico y ecografía abdominal: 1) hombres mayores de 60 años que tienen familiares de primer grado con antecedente de AAA y 2) hombres entre 65 y 75 años que son tabáquicos. La TAC con medio de contraste endovenoso o AngioTAC es el gold standard para el diagnóstico y planificación terapéutica. Genera imágenes de alta resolución en cortes axiales y reconstrucciones en planos coronales, sagitales y tridimensionales de excelente calidad. Permite describir detalles de la lesión como su ubicación, longitud del cuello proximal ydistal,surelación anatómicaconramas viscerales, lapermeabilidaddearteriaslumbareseinclusodelaexistencia concomitante de aneurismas ilíacos, todas observaciones importantes a considerar al elegir la técnica de reparación. La 10 AssarA. Review. Ruptured abdominal aortic aneurysm: a surgical emergency with many clinical presentations. Postgraduate Medical Journal 2009; 85: 268-273. desventaja de la TACsigue siendo la exposición a radiación y lasposiblescomplicaciones porelmediodecontraste(alergia o anafilaxia y falla renal). Por último, la angiografía o aortografía considerada la prueba de referencia en el pasado, no ofrece ventajas sobre la TAC contemporánea. Si bien permite la obtención óptima de imágenes del lumen aórtico, la longitud de las lesiones, las colaterales o variantes anatómicas o aneurismas asociados, su utilidad se ve limitada, ya que no da información sobre la pared arterial y trombo mural ni calcificaciones. Además, implica una alta dosis de radiación, carga de contraste y es un procedimiento invasivo, no exento demorbilidad. Por lo tanto, solo se usa en el intraoperatorio del EVAR (Endovascular Aneurysm Repair). Tratamiento Médico Además de las características del aneurisma,sedebe valorar cada caso individualmente, considerando factores como la edadyexpectativadevidadelpaciente,patologíasasociadas, la experiencia del cirujano y la tecnología disponible. Si bien el tratamiento quirúrgico es el definitivo, el manejo médico permite retrasar la expansión de los aneurismas. Este manejo se puede considerar en casos asintomáticos o en que el diámetro no haya alcanzado el criterio para ser operado (se detallará más adelante). Se deben modificar los factores de riesgo y esto incluye el cese del tabaquismo, control estricto de la presión arterial y optimización del perfil lipídico. Las estatinas, con su efecto pleiotrópico disminuyen la inflamación y estabilizan la pared arterial. Los betabloqueadores disminuyen el estrés sobre la pared, controlando la frecuencia cardíaca y la presión arterial. El objetivo es lograr una frecuencia cardíaca menor a 60 latidos por minuto. En caso de estar contraindicados, se pueden utilizar los bloqueadores de canales de calcio. Si luego de controlada la frecuencia cardíaca, la presión arterial sistólica se mantiene sobre 120 mmHg, se debe agregar un inhibidor de la enzima convertidora de angiotensina (IECA) y/u otro vasodilatador. También se deben evitar maniobras que aumenten la presión intratorácica e intraabdominal, por lo que es necesario un control correcto del EPOC, evitar la constipación y no realizar esfuerzos físicos. El uso de aspirina disminuye el riesgo cardiovascular asociado. Existen algunos medicamentos como la Doxiciclina, que aún están en estudio y que disminuirían la expresión de metaloproteinasasenlaparedaórtica,inhibiendosuexpansión. Seguimiento:
  • 428. 429 LospacientesconAATsinindicacióndetratamientoquirúrgico o endovascular, deben controlarse de manera seriada con TAC, con el fin de evaluar el crecimiento. Si existe patología valvular asociada, es recomendado apoyar el estudio con ecocardiografía. Este control se realizará a los 6 meses de hecho el diagnóstico; si el diámetro no ha variado, puede controlarse cada 12 meses. En caso contrario, se sugiere control cada 3 o 6 meses. Si el crecimiento es mayor a 0.5 cm en 6 meses, debe intervenirse11 . Para los AAA, el seguimiento debe ser con TAC o ecografía cada6meses oanualmente,según el diámetro:<4cm control anual; entre 4 y 5 cm, semestral. Preoperatorio Los pacientes afectados por aneurismas son un grupo complejo, por lo general de edad avanzada y con múltiples comorbilidades asociadas, por lo que demandan mayor agudeza en la evaluación y selección preoperatoria si se quieren obtener buenos resultados quirúrgicos. Una vez analizadas en detalle las imágenes y establecida la indicación quirúrgica, se debe evaluar el estado funcional del paciente y determinar si es un candidato quirúrgico aceptable o no. La evaluación cardíaca incluye el estado funcional cardíaco y coronario. Todo paciente debe tener por lo menos un electrocardiograma de doce derivaciones en reposo y un ecocardiograma transtorácico. Este último proporciona información sobre la competencia valvular (para AAT o AATAb), morfología yfunción del ventrículo izquierdo. La incidenciade enfermedadcoronariaenpacientesconaneurismasestábien documentada en la literatura: aproximadamente solo un 6% tendría coronarias normales, un 30% cardiopatía coronaria severa corregible y un 5%, severa inoperable12 . Porellosejustificalarealizacióndecoronariografía,inclusive en pacientes asintomáticos cardíacos. Granproporcióndeestospacientessonohansidofumadores y,porlotanto,laasociaciónentreneumopatíacrónicaycirugía representaunaltoriesgodefallarespiratoriaycomplicaciones pulmonares. Esto corre principalmente para cirugía abierta, por lo que se debe evaluar la función pulmonar con espirometría, gases arteriales y eventualmente capacidad de difusión de Co2 (DLCO). Por último, la evaluación de la función renal también debe realizarse, ya que la insuficiencia renal posoperatoria es uno delosfactoresasociadosamayormortalidadenlospacientes intervenidos por aneurismas. 11 Hiratzka L, Bakris G, Beckman J et al. 2010. ACCF/ AHA/AATS/ACR/ASA/SCA/SCAI/SIR/STS/SVM guidelines for the diagnosis and manage-ment of patients with Thoracic Aortic Disease. Circulation 2010; 121: 266-369. Quirúrgico Aneurisma Torácico13 Las indicaciones de tratamiento quirúrgico para los AAT son: • diámetro ≥ 55 mm en aorta ascendente independiente de la etiología. • diámetro > 45 mm – 50 mm en aorta ascendente en pacientes con enfermedades del tejido conectivo o factoresderiesgocomoantecedentefamiliardedisección o válvula aórtica bicúspide. • diámetro ≥ 55 mm en arco aórtico. • diámetro ≥ 60 mm en aorta descendente. • crecimiento > 5 mm en 6 meses o 10 mm en 12 meses. • disección aórtica tipo A. • insuficiencia aórtica severa. • Sintomáticos. En los pacientes con aneurisma de aorta ascendente, se realiza cirugía convencional con el reemplazo aórtico por una prótesis de Dacrón. En el caso de pacientes con enfermedad del tejido conectivo o compromiso valvular, se realiza un reemplazo del segmento dilatado, de la válvula y reimplantación de las coronarias. Para los aneurismas del arco aórtico existen tres opciones terapéuticas:cirugíaconvencional,tratamientoendovascular (“thoracic endovascular aortic repair” o TEVAR) y procedimientos híbridos. En la cirugía abierta se reseca el segmento aneurismático, incluyendo el origen de los troncos supraaórticos y se reemplaza por una prótesis de Dacrón trifurcada, que se anastomosa a cada una de las ramas, bajo circulación extracorpórea hipotérmica. En la segunda, mediante un catéter, se accede a la aorta torácica a través de la arteria femoral donde se libera e implanta una endoprótesisfenestradayconramasaccesorias.Laterceraes una combinación de ambas técnicas donde se realiza un “by- pass” extraanatómico o derivación de los troncos supraaórticos a lo que posteriormente se agrega una endoprotesis. En el caso de los aneurismas de la aorta descendente, se recomienda el tratamiento endovascular bajo anestesia general para un mejor control de la hemodinamia. Complicaciones: La cirugía abierta es muy invasiva. Los centros de alto volumen y experiencia muestran las menores tasas de mortalidad (6.6%) y de isquemia medular (4%). En otras series, la mortalidad puede llegar hasta un 19%, la paraplegia hasta un 14%, eventos cardíacos incluyendo infarto agudo al miocardio (IAM) 20%, complicaciones pulmonares 20 a 12 Hertzer Nr, Beven E, Young J et al. Coronary artery disease in peripheral vascular patients. A classification of 1000 coronary angiograms and results of surgical management. Ann Surg 1984; 199-223. 13 Vega J, González D, Yankovic W y cols. Aneurismas de la aorta torácica. Historia natural, diag-nóstico y tratamiento. Rev. Chil. Cardiol. 2014; 33: 127-135.
  • 429. 430 50% y falla renal 13 a 20%14 . El riesgo de daño neurológico es mayor en la reparación del arco aórtico que de la porción ascendente (2 - 5%). El TEVAR tiene ventajas sobre la cirugía abierta al evitar grandesabordajestorácicos,menorpérdidadesangre,menor riesgodeisquemiamedular(yaqueseevitaelclampeoaórtico y la ligadura de las arterias intercostales), menor ventilación mecánica invasiva y recuperación más rápida. Aneurisma Tóracoabdominal LasindicacionesdetratamientoquirúrgidoparaAATAbson15 : • diámetro ≥ 60 mm • crecimiento > 5 mm en 6 meses o >1 cm en 1 año • sintomáticos • Clasificación de los aneurismas Los AATAb se categorizan a base de su extensión en 5 tipos, lo que tiene implicancias estratégicas para su reparación. La clasificación de Crawford, modificada por Safi, incluye: Tipo I: sobre el 6.° espacio intercostal, generalmente cerca de la arteria subclavia izquierda, y se extiende hasta tronco celíacoyarteriamesentéricasuperior.Sibienpuedeinvolucrar las arterias renales, no se extiende a la aortainfrarrenal. Tipo II: sobre el 6.° espacio intercostal, puede incluir la Ao ascendente, y se extiende hasta aorta infrarrenal, incluso hasta la bifurcación. Tipo III: bajo el 6.° espacio intercostal con extensión a aorta abdominal. Tipo IV: desde el diafragma hasta la bifurcación aórtica. TipoV:bajoel6.°espaciointercostalyseextiendeasegmento visceral de la aorta abdominal. En el caso de losAATAb,el punto de corte para la intervención es mayor (≥ 6 cm), dados los mayores riesgos perioperatorios involucrados, asociados a la mayor extensión del aneurisma. La cirugía convencional incluye una tóraco-freno-laparotomía, con reemplazo de la porción aneurismática con prótesis y reimplante de todas las ramas viscerales permeables y, eventualmente, de las arterias intercostales. El desarrollo de tecnología ha permitido que también puedan efectuarse tratamientos endovasculares, con menor morbimortalidad, o híbridos. 14 Hoel A. Aneurysmal Disease: Thoracic Aorta. Surg Clin N Am 2013; 93: 893 - 910. 15 Erbel R, et al. Guía ESC 2014 sobre diagnóstico y tratamiento de la patología de la aorta. Rev. Esp. Cardiol. 2015; 68 (3).
  • 430. 431 Complicaciones: Mientras más extenso es el trayecto aórtico por reemplazar, mayoreslaposibilidaddeisquemiamedular.Porello,estaesla complicaciónmástemidaenlareparacióndelosAATAb.Entre las medidas perioperatorias para disminuir esta complicación están el drenaje de líquido cerebro espinal (LCE), mediante la inserción de un catéter intratecal a nivel de L3-L4. Con esta medida se mantiene una presión intracraneana (PIC) baja permitiendo optimizar la perfusión de la médula. Otras alternativasdescritassonelusodebarbitúricos (ej.Tiopental) o antagonistas opiáceos (ej. Naloxona) que disminuirían el metabolismo cerebral y la PIC16 . La falla renal y la isquemia intestinal son también potenciales complicaciones. Aneurisma Aorta Abdominal Las indicaciones de tratamiento quirúrgido para AAA son17 : • diámetro ≥ 50 mm • crecimiento > 5 mm en 6 meses o > 1 cm en 1 año. • sintomáticos Los AAA pueden repararse por vía abierta o endovascular (EVAR). Al igual que en el segmento torácico, la cirugía convencional consiste en reemplazar el segmento aneurismático con una prótesis, en este caso a través de una laparotomía media o abordaje retroperitoneal. De los pacientes con AAA, el 70% es candidato para EVAR, pero deben cumplir con algunos criterios anatómicos específicos18 : • Diámetro del cuello aórtico: < 32 mm. Debe además tener forma cónica (menor diámetro proximal que distal). Si bien no es contraindicación, la aorta proximal no debe tener trombo ni estar calcificada. • Largo del cuello (distancia desde la arteria renal más inferior hasta el origen del aneurisma): 20 mm (solo existe un dispositivo diseñado para 15 mm). • Ángulo: < 60º • Diámetro mínimo de arteria ilíaca externa o común para permitir el paso del sistema de instalación. Reparación endovascular de los aneurismas 16 Khan S, Stansby G. Cerebrospinal fluid drainage for thoracic and thoracoabdominal aortic aneu-rysm surgery. Cochrane Database Syst Rev 2012. 17 Erbel R, et al. Guía ESC 2014 sobre diagnóstico y tratamiento de la patología de la aorta. Rev. Esp. Cardiol. 2015; 68 (3). 18 Chaer R. Endovascular repair of abdominal aortic aneurysm. UpToDate 2015.
  • 431. 432 Reparación abierta de los aneurismas En casos de cuellos cortos o anatomía compleja del aneurisma, se han desarrollado distintos tipos de prótesis, muchas de ellas aún en desarrollo: fenestradas/ramificadas (fig. a), chimenea (fig. b), EVAS (Endovascular Aneurysm Sealing System) (fig. c). Complicaciones Con los avances en tecnología y perfeccionamiento de la técnica abierta, se han podido disminuir las tasas de complicaciones. Estas son la falla renal aguda, embolización distal, infección de herida, isquemia intestinal, formación de falso aneurisma, fístula aorto-duodenal, infección de la prótesis o sangrado. Si bien el manejo endovascular tiene menor morbimortalidad perioperatoria, esta también puede presentar complicaciones. Se describen complicaciones sistémicas (IAM, nefropatía inducida por medio de contraste, isquemia intestinal) y relacionadas con la endoprótesis como lesión vascular (ej.: ilíaca, femoral), hematoma, pseudoaneurisma femoral, crecimiento del aneurisma (falla del tratamiento), trombosis intraprótesis, migración, fractura y “endoleaks”. Los “endoleaks” o flujo persistente fuera de la prótesis y dentro del saco aneurismático, se producen hasta en 20 - 25%19 . Estos se clasifican en 5 tipos. Los tipo 1 consisten en la fuga por el sello inadecuado en el cuello proximal o distal; los tipo 2 (más frecuentes 10 - 25%), se producen por flujo retrógrado por ramas viscerales permeables; los tipo 3, por separación de los componentes de la prótesis o defectos de fábrica; los tipo 4, la fuga se produce a través de los poros de 19 Chaer R. Endovascular repair of abdominal aortic aneu- rysm. UpToDate 2015. la prótesis; y los tipo 5, existe una expansión continua del saco aneurismático sin fuga demostrable por imágenes. Esta última es controvertida. Los “endoleaks” tipo 1 y 3 generalmente se diagnostican en el intraoperatorio y requieren de manejo inmediato. En caso de presentación tardía, son secundarios a migración de la prótesis. Los tipo 2 y 4 porlo que general se observan. Adiferencia con el tratamiento abierto, los pacientes tratados por EVAR se deben controlar de por vida. Al primer mes posoperado, se debe controlar con AngioTAC, luego a los 6 mesesyposteriormenteanual.SienelcontroldelañoelEVAR no demuestra alteraciones, se recomienda el seguimiento con ecografía doppler. Pronóstico Existen tres grandes estudios en materia de tratamiento endovascular. El EVAR1 compara la cirugía abierta versus el tratamiento endovascular en AAA > 5.5 cm demostrándose que la mortalidad a 30 días en el grupo EVAR es de 1.4% vs 4.2% en cirugía abierta. Sin embargo, a largo plazo no habría diferencia y,porelcontrario, elEVARpresentaríamayor costo y más complicaciones y reintervenciones. El estudio EVAR 2 compara el EVAR versus el tratamiento médico. La mortalidad relacionada a AAA fue mayor en el grupo médico, pero la mortalidad general fue similar. En conclusión,elEVARseasocióamenormortalidadrelacionada con el aneurisma. El estudio DREAM, similar al EVAR 1, compara la cirugía abierta con el EVAR en AAA > 5 cm. A 6 años plazo se
  • 432. 433 evidenció que la sobrevida es igual y durante este período de seguimiento el grupo sometido a EVAR requirió mayor número de reintervenciones. Además, a pesar de disminuir lamortalidadacortoplazo,nohabríadiferenciaallargoplazo. En resumen, la desventaja del EVAR es el control de por vida y las tasas de reintervención alrededor del 20 a 25%. No está claroelcosto ylasobrevidaamediano ylargoplazoessimilar. Síndrome Aórtico Agudo El síndrome aórtico agudo (SAA) se refiere a la presentación clínica común de diferentes condiciones que afectan la aorta torácica, caracterizadas por dolor torácico intenso y que pueden derivar en una emergencia quirúrgica. Estas condiciones incluyen: disección aórtica (DA), hematoma intramural (HIM) y úlcera penetrante ateroesclerótica (UPA). Disección Aórtica La disección aórtica (DA) aguda es la causa más frecuente (60%) de SAA y es la condición más grave que puede afectar a la aorta, con una incidencia mayor a la rotura de AAA. A pesar de los avances, tanto en el manejo médico como quirúrgico,lamortalidadglobalsegúnelInternationalRegistry ofAcuteAortic Disecction (IRAD) es muy alta, siendo esta sin tratamiento, de un 22.7% a las 6 horas, 50% a las 24 horas y 68% a la semana20 . En disecciones de aorta ascendente la mortalidad es secundariaacomplicacionesporlaroturaaórticaalpericardio, regurgitación aórtica aguda y por compromiso de los ostium coronarios. En disecciones de aorta descendente lamuerte se asocia al compromiso isquémico visceral. Lo más importante es realizar un diagnóstico y tratamiento tempranos, especialmente en el caso de las DA tipo A, ya que la mortalidad de aquellos pacientes que llegan con vida a la urgencia aumenta a razón de 1 - 2% por cada hora que pasa desde el inicio de la sintomatología. 20 Cronenwett J, Wayne K. Rutherford’s Vascular Surgery. Aortic Disecction. 8th Ed. Philadephia, PA: Saunders Elsevie; 2014 (22) 2169 - 2188. Epidemiología La incidencia estimada de DA es de 3 casos por 100.000 habitantesalaño,conunamayorprevalenciaenhombresque en mujeres con una proporción de 4:1. El 60% de disecciones son tipoAcon un peak entre los 50 y 60 años; las tipo B tienen peak entre los 60 y 70 años21 . Fisiopatología La DA consiste en la separación de las capas de la pared arterial secundario a una fisura o desgarro de la túnica íntima, que permite el paso de sangre desde el lumen aórtico a la túnica media, extendiéndose hacia distal creando un lumen paralelo (lumen falso). (fig. 1) Todo esto secundario a una pérdida de resistencia de la capa media (cambios degenerativos, necrosis quística de la media, etc.) y aumento de la tensión de la pared (HTA). El flap o desgarro intimal se origina en la aorta ascendente en un 65%, descendente en 25% y en el arco y aorta abdominal en 10%22 . 21 Januzzi JL, et al: Characterizing the young patient with aortic dissection: results from the International Registry of Aortic Dissection (IRAD). J Am Coll Cardiol 43:665–669,2004. 22 Hagan PG, et al: The International Registry of Acute Aortic Dissection (IRAD): new insights into an old disease. JAMA
  • 433. 434 Factores de Riesgo Entre los factores de riesgo más importantes para la DA están la hipertensión arterial y el tabaquismo. Otros factores de riesgo son la edad (con peak entre 60 a 65 años), sexo masculino, factores genéticos como el síndrome de Turner, hipoplasiadelarcoaórtico,síndromedeMarfán,Ehler-Danlos y condiciones anatómicas como aorta bicúspide con o sin dilatación de la raíz o coartación aórtica. Una condición que hay que tomar en cuenta son las mujeres que durante el embarazo desarrollan preeclampsia o eclampsia, ya que tienen mayor riesgo de desarrollar una DA en el perioperatorio. El consumo de cocaína también se asocia a mayor riesgo de DA. El mecanismo por el que se produce es por la liberación de catecolaminas que causan la triada de hipertensión, vasoconstricción y aumento importante del gasto cardíaco, lo que resulta en un aumento dramático y agudo de la fuerza de contracción sobre la pared aórtica. Por último, se ha demostrado una asociación entre la DA y el ritmo circadiano, en que la mayoría de estas se produce en las mañanas, lo que estaría relacionado con el ritmo circadiano de la presión arterial, que también presenta un aumento en las mañanas. Clasificación Las DApuedenclasificarsedeacuerdoconeltiempodesdeel iniciodelossíntomas (agudavs crónicasiendolas2semanas el punto de corte) o según el lugar donde se produce el desgarro intimal. Históricamente existe la clasificación DeBakey que se define a base de la ubicación del desgarro y la extensión de la disección: Tipo I: la disección se origina en la aorta ascendente y se extiende por el arco aórtico hasta la aorta descendente y/o aorta abdominal. Tipo II: la disección se origina en la aorta ascendente y está limitada a este territorio. Tipo IIIa: la disección se origina distal a la arteria subclavia y compromete solo la aorta descendente torácica. Tipo IIIb: compromete la aorta descendente torácica y abdominal. La clasificación de Stanford que es más funcional y la actualmente aceptada, se basa solo en el lugar de origen de la disección, de manera que las tipo A se originan en la aorta ascendente (y, por tanto, incluye DeBakey I y II), mientras que las Stanford B se originan en la aorta descendente distal al origen de la arteria subclavia izquierda (DeBakey tipo IIIa y IIIb). Clínica El síntoma cardinal es el dolor, de inicio agudo, alcanzando intensidad máxima, tóracico (disecciónAo ascendente) o con irradiación a región interescapular o dorso lumbar (disección Ao descendente), de tipo punzante o desgarrante. En pacientes con dolor abdominal intenso se debe sospechar compromiso vascular mesentérico y en casos de oligoanuria sospechar isquemiarenal.Enun5a10%,lospacientespuedenpresentar síncope, siendo por lo general un indicador de taponamiento cardíaco o compromiso de tronco braquiocefálico, por lo que es más frecuente en casos de disección tipo A (19 vs 3%, P < 0.001). También se pueden manifestar con síntomas neurológicos en un 2 a 10% de los casos, por isquemia espinalsecundariaalainterrupcióndelosvasos intercostales en disecciones tipo B23 . Rara vez se puede producir una compresión directa sobre algún nervio periférico resultando en voz ronca (laríngeo recurrente), síndrome de Horner (ganglio simpático). En el examen físico los hallazgos dependerán del tipo de disección aórtica. Por ejemplo en disección tipoA, el paciente puedepresentaralgúndéficitneurológicoosoplodiastólicode regurgitación aórtica o signos de taponamiento cardíaco. En caso de disección tipo B, se presenta con cifras tensionales elevadas secundario a la pseudocoartación de la aorta descendente u oclusión de arterias renales, claudicación o diferencia en la amplitud de pulso entre extremidades superiores e inferiores o incluso un abdomen agudo. Diagnóstico Si bien la sospecha diagnóstica se logra con una adecuada anamnesis, las imágenes son fundamentales, ya que permiten definir si se trata de una DA tipo A o B y de esta manera definir una conducta rápidamente. Dentro de los diagnósticosdiferencialesdedolortorácicosedebedescartar el infarto agudo al miocardio con un electrocardiograma y enzimas cardíacas. La radiografía de tórax está ampliamente disponible, es rápida y también puede ser útil para orientar el diagnóstico diferencial ante un dolor torácico. El gold standard es el angioTAC, método ampliamente disponible, rápido, no invasivo, con sensibilidad y especificidad que alcanza el 95% y 100%, respectivamente. Permite 23 Nallamothu BK, et al: Syncope in acute aortic dissection: diagnostic, prognostic, and clinical implications. Am J Med 113:468– 471, 2002.
  • 434. 435 identificarelflapdeíntimaqueseparaellumenfalsodellumen verdadero, sitios de reentrada, extensión de la disección y compromiso visceral. La desventaja es que la sensibilidad al evaluar la aorta ascendente disminuye bajo el 80%, sin embargo, el ecocardiograma transesofágico (ETE) permite complementar el estudio, teniendo mayor utilidad, incluso en el intraoperatorio de las DA tipoA. Tratamiento Todoslospacientescondisecciónaórticadebenmanejarseen el período agudo en una UCI o unidad coronaria y la primera medida terapéutica va dirigida a disminuir la presión arterial sistémica y la fuerza de eyección del ventrículo izquierdo (dP/dT) con el objetivo de estabilizar la extensión de la disección, reducir la movilidad del flap intimal y disminuir el riesgo de rotura. Para ello se utilizan beta bloqueadores endovenosos, salvo en pacientes hipotensos. En estos últimos sedebe descartar rápidamente la presencia detaponamiento cardíaco en quienes la pericardiocentésis evacuadora está contraindicada, ya que acelera el sangrado y shock por lo que deben someterse a cirugía a la brevedad. Por lo tanto, el manejo estándar es el uso de betabloqueo combinado con vasodilatadores para lograr una presión arterial sistólica que fluctúe entre los 100 y 120 mmHg y la frecuencia cardíaca entre 60 y 80 latidos por minuto. El betabloqueador recomendado es labetalol endovenoso. En pacientes con riesgo de broncoespasmo o EPOC se pueden utilizarbetabloqueadoresmáscardioselectivoscomoatenolol o metoprolol o incluso bloqueadores de canales de calcio como verapamilo o diltiazem. El vasodilatador utilizado es el nitroprusiato de sodio o la nitroglicerina y no se debe utilizar antes del betabloqueo para evitar taquicardia refleja. Además, dentro del manejo médico está el manejo del dolor con opioides. La morfina disminuye la descarga simpática de catecolaminas generada por el dolor, lo que perpetúa la hipertensión y la taquicardia. EnelcasodelasDAtipoAquesonunaemergenciaquirúrgica, los pacientes deben ser sometidos a tratamiento lo antes posible, con el objetivo de corregir la regurgitación aórtica, prevenir la rotura o aparición de derrame pericárdico con consiguiente taponamiento cardíaco ymuerte. El tratamiento consiste en resecar la aorta ascendente y el arco aórtico (este últimosoloencasodeestarcomprometido)yreemplazarlopor una prótesis aórtica, bajo circulación extracorpórea. Según el compromiso anatómico a veces, incluso es necesario reparar o reemplazar la válvula aórtica y reconstruir los ostium de las coronarias. Para las disecciones tipo B, el tratamiento quirúrgico está indicado solo en caso de complicaciones, considerándose el tratamiento médico como el gold standard, ya que el 14 a 67% de los pacientes que se operan fallece o sufre un daño medular irreversible24 . Las complicaciones pueden relacionarse con la amenaza de rotura o rotura franca que se manifiestan por dolor intratable persistente o recurrente, compromiso hemodinámico por hemorragiaoaparicióndederramepleuraldenso(hemotórax), dilatación o progresión de la disección; o pueden ser de tipo isquémico (mala perfusión). En estos casos la intervención consiste en el tratamiento endovascular desplegando una prótesis en el lumen verdadero para impedir la comunicación entre este y el falso lumen. Pronóstico La disección aórtica tipo A tiene una mortalidad espontánea de un 1 a 2% por hora durante el primer día y mayor al 50% durante el primer mes. La mortalidad intrahospitalaria luego de cirugía es de un 24 a 27% y la sobrevida a 3 años es de 90.5%. LadisecciónaórticatipoBnocomplicadatieneunamortalidad al mes de un 10%. Con el tratamiento endovascular, la mortalidad ha disminuido a menos del 10% y el riesgo de paraplejia a menos de 3%, con una sobrevida a 3 años de 76.2%25 . Seguimiento La dilatación aneurismática de la pared del falso lumen es la principal complicación tardía de la disección aórtica. Entre los factores predisponentes está el mal control de la presión arterial, diámetro aórtico máximo mayor o igual a 4 cm en la fase aguda y la persistencia del falso lumen. El estado de la aorta debe evaluarse con TAC al mes del diagnóstico, a los tres, seis y doce meses yluego anualmente para detectar principalmente el aumento del diámetro, aneurismas o complicaciones en relación con la prótesis o anastomosis. Asimismo, el paciente debe ser advertido y educado sobre su condición, debiendo mantener un adecuado manejo de la presiónarterialyevitarfactoresderiesgocomoeltabaquismo. El hematoma intramural (HIM) representa aproximadamente 24 Nienaber C, Zannetti S, Barbieri B et al. Investigation of stent grafts in patients with type B aortic dissection: design of the INSTEAD trial: a prospective multicenter, Eu-ropean randomized trial. Am Heart J 2005; 149: 592-9. 25 Vega J, Zamorano J, Pereira N, Galleguillos A. Síndrome aórtico agudo. Revisión de la literatura y actualización del tema. Rev. Med. Chile. 2014; 142: 344-352.
  • 435. 436 HematomaIntramuralyÚlceraPenetrante Ateroesclerótica el 15% de los SAA. Corresponde a la acumulación de sangre en la capa media, con ausencia de desgarro intimal y es secundaria a sangrado de los vasa vasorum (fig.).Estepuede generar un pseudoaneurisma, rotura y DA y, por lo general, afecta la aorta descendente. La úlcera penetrante ateroesclerótica (UPA) es la causadel 5% de los SAA. Resulta de la ulceración de una placa de ateroma en la aorta que se va profundizando hasta atravesar la lámina elástica interna y llegar a la túnica media (fig.). Se cree que puede evolucionar a un HIM o complicarse con una disección o rotura aórtica.Al igual que el HIM, la UPAtambién afecta con mayor frecuencia a la aorta descendente (>90%). Tanto el manejo del HIM como de la UPAdebe basarse en los mismos conceptos que la DA, según esté afectada la aorta ascendente o descendente (tipo A o tipoB).
  • 436. 437 Bibliografía 1. Erbel R, et al. Guía ESC 2014 sobre diagnóstico y tratamiento de la patología de la aorta. Rev Esp Cardiol 2015;68(3). 2. Takayama T, Yamanouchi D. Aneurysmal Disease. The abdominal aorta. Surg Clin N Am 2013; 93: 877-891. 3. Crovari F, Manzor M. Manual de Patología Quirúrgica: Enfermedad de la aorta. Edi-ciones Universidad Católica de Chile. 2014: 483-502. 4. Ardila F y cols. Recomendaciones para el diagnóstico y tratamiento en Angiología y Cirugía Vascular. Capítulo: Aneurismas de la aorta abdominal. Sociedad Andaluza de Angiología y Cirugía vascular. 5. Hoel A. Aneurysmal Disease: Thoracic Aorta. Surg Clin N Am 2013; 93: 893-910. 6. Coady M, et al. What is the appropriate size criterion for resection of thoracic aortic aneurysms?. J Thorac Cardiovasc Surg. 1997; 113: 476-91. 7. Assar A. Review. Ruptured abdominal aortic aneurysm: a surgical emergency with many clinical presentations. Postgraduate Medical Journal 2009; 85: 268-27. 8. Hiratzka L, Bakris G, Beckman J et al. 2010 ACCF/AHA/AATS/ACR/ASA/SCA/SCAI/SIR/STS/SVM guidelines for the diagnosis and management of patients with Thoracic Aortic Disease. Circulation 2010; 121:266-369. 9. Hertzer Nr, Beven E, Young J et al. Coronary artery disease in peripheral vascular patients. A classification of 1000 coronary angiograms and results of surgical mana-gement. Ann Surg 1984; 199-223. 10. Vega J, Gonzalez D, Yankovic W y cols. Aneurismas de la aorta torácica. Historia natural, diagnóstico y tratamiento. Rev Chil Cardiol 2014; 33: 127-135. 11. Khan S, Stansby G. Cerebrospinal fluid drainage for thoracic and thoracoabdominal aortic aneurysm surgery. Cochrane Database Syst Rev 2012. 12. Chaer R. Endovascular repair of abdominal aortic aneurysm. UpToDate 2015. 13. Cronenwett J, Wayne K. Rutherford’s Vascular Surgery. Aortic Disecction. 8th Ed. Philadephia, PA: Saunders Elsevie; 2014 (22) 2169 – 2188. 14. Januzzi JL, et al: Characterizing the young patient with aortic dissection: results from the International Registry of Aortic Dissection (IRAD). J Am Coll Cardiol 43:665–669, 2004. 15. Hagan PG, et al: The International Registry of Acute Aortic Dissection (IRAD): new insights into an old disease. JAMA 283:897– 903, 2000. 16. Nallamothu BK, et al: Syncope in acute aortic dissection: diagnostic, prognostic, and clinical implications. Am J Med 113:468–471, 2002. 17. Nienaber C, Zannetti S, Barbieri B et al. Investigation of stent grafts in patients with type B aortic dissection: design of the INSTEAD trial: a prospective multicenter, Euro-pean randomized trial. Am Heart J 2005; 149:592-9 18. Vega J, Zamorano J, Pereira N, Galleguillos A. Síndrome aórtico agudo. Revisión de la literatura y actualización del tema. Rev Med Chile 2014; 142: 344-352
  • 437. 438
  • 438. 439 9.3 IsquemiaMesentérica Quinteros JP, Schwartz E. La isquemia mesentérica se produce cuando el flujo sanguíneo esplácnico es insuficiente para suplir las demandas de las vísceras. Este flujo insuficiente se puede producir tanto de manera crónica como aguda. En los cuadros agudos la isquemia es inicialmente reversible, sin embargo, de persistir en el tiempo evoluciona a la necrosis de las vísceras. Esta entidad es de muy baja frecuencia, considerando que corresponde aproximadamente al 0.1% de los ingresos hospitalarios. La isquemia mesentérica es un cuadro que todomédicodebeconocer,puestieneunamortalidadentreun 50% a 90%. Es fundamental tener un alto nivel de sospecha para un diagnóstico y tratamiento precoz. Circulación Esplácnica Durante la cuarta semana de desarrollo se genera el plegamiento del embrión, quedando el saco vitelino incluido con revestimiento de endodermo, esto genera el intestino primitivo que dará origen a tres estructuras, el intestino anterior, medio y posterior. Cada uno de estos intestinos es invadidoporunejedemesodermoquegenerasuvasculatura, es así como encontramos tres troncos arteriales principales para la irrigación del intestino. El intestino anterior, comprendido entre el esófago distal hasta la ampolla de Vater, está irrigado por el tronco celíaco que permite la irrigación del hígado, estómago, parte del páncreas, el bazo y el duodeno. Esto lo hace mediante sus tres ramas principales, las arterias hepática común, gástrica izquierda y esplénica. El intestino medio comprende desde la ampolla de Vater hasta la flexura esplénica del colon, está irrigado por la arteria mesentéricasuperior.Estaarteria,ramadelaaortaabdominal, entrega ramas pancreatoduoenales anteriores y posteriores, arterias cólica derecha, ileocólicas y ramas yeyunoileales . El intestino posterior comprende desde el ángulo esplénico del colon hasta el recto y depende del tercer tronco arterial esplácnico que es la arteria mesentérica inferior. Colaterales fisiológicas • Entre el tronco celíaco y la arteria mesentérica superior a nivel de las arterias pancreatoduodenales. • Entre la arteria mesentérica superior e inferior a través de colaterales mesentéricas que conectan las ramas mesentéricas superiores con las ramas sigmoideas. • Colaterales de la circulación parietal de la cavidad abdominopélvica, dependiente de ramas de las arterias ilíacas internas y el sistema esplácnico a través de colaterales entre vasos rectales. Colaterales especiales Se ha descrito que existen vasos colaterales específicos que comunican los tres sistemas. (Figura 3) 1. Arco de Büler: remanente embriológico que conecta el tronco celíaco con la AMS. 2. Arteria marginal de Drummond: círculo arterial por borde mesentéricodelcolon.Conectalasarteriascólicaderechay mediaconlaarteriacólicaizquierdaylasarteriassigmoideas. 3. Arco anastomótico de Riolano: inconstante que conecta la arteria mesentérica superior con la arteria mesentérica inferior. La presentación más frecuente es la unión entre la arteria cólica media con la arteria cólica izquierda. Fisiología de la Circulación Esplácnica El flujo intestinal es variable según las necesidades fisiológicas del individuo. Es así como frente a estímulos como la alimentación se genera respuesta parasimpática aumentandoelflujoesplácnico,mientrasquefrentealejercicio se manifiesta una respuesta simpática que reduce el flujo esplácnico. Pero no son solo los estímulos fisiológicos los que alteran la circulación esplácnica, las noxas como la isquemia, hipovolemia, sepsis también generan impacto sobre la circulación esplácnica. A modo de ejemplo, frente a isquemia el flujo esplácnico puede reducirse hasta en un 75% por 12 horas. Estas variaciones son compensadas mediante la apertura y cierre de colaterales.
  • 439. 440 Isquemia Mesentérica Aguda (IMA) Etiología • Embolia arterial (50%) • Trombosis arterial (20%) • Patología no oclusiva (20%) • Trombosis venosa (10%) Embolia arterial La principal fuente es cardiaca: fibrilación auricular, los trombos ventriculares y las valvulopatías son los principales factores de riesgo. Los émbolos se enclavan en la circulación esplácnica principalmente en la arteria mesentérica superior. Los dos sitios en que con mayor frecuencia se alojan émbolos arteriales dentro de la arteria mesentérica superior son la raíz de la arteria mesentérica superior y distal a la emergencia de la arteria cólica media (se asocia a vaso espasmo distal). De forma concomitante se pueden presentar embolias simultáneas en otros territorios. Durante la exploración quirúrgica de isquemia mesentérica secundaria a embolia es característico ver que la primera asa de yeyuno no se ve comprometida. Los ateroembolismos (émbolos compuestos por cristales de colesterol) ocurren cuando se fragmenta la placa de ateroma y es liberado al torrente sanguíneo restos de la misma placa, son de baja frecuencia en relación con los tromboembolismos. Es importante que se descarte isquemia mesentérica secundaria a embolia en pacientes que han sufrido infarto agudo al miocardio (IAM) y posteriormente evolucionan con dolor abdominal. Trombosis arterial Cuando se presenta trombosis arterial las lesiones agudas se producen sobre una lesión ostial crónica (ateroesclerosis). Los desencadenantes de la lesión aguda son principalmente el infarto agudo al miocardio, cuadros virales y pacientes posquirúrgicos. El mecanismo consiste en una oclusión crónica la cual se ve descompensada de forma aguda por fenómenos que generan disminución de flujo, hipotensión y en caso que se produce accidente de placa. Patología no oclusiva Laisquemiamesentéricanooclusiva(IMNO)esresponsabledel 20 - 30% de los episodios de IMA y surge como consecuencia del vaso espasmo originado por sustancias vasoactivas liberadas en respuesta a una situación de bajo gasto (shock, arritmias, insuficiencia cardiaca). Es importante conocer que esta complicación puede no ser inmediata y aparecer horas o incluso días después de haber desaparecido el factor causal. Etiología de isquemia mesentérica no oclusiva (vasoconstricción prolongada): • Shock/FOM/fármacos(principalmentedrogasvasoactivas). • Insuficiencia cardiaca / shock cardiogénico. • Shock séptico. • Exposición prolongada a alfa agonistas. • Cocaína. • Intoxicación con ergotamínicos. • Intoxicación con digoxina. • Trombosis venosa mesentérica En los casos de trombosis venosa, el compromiso debe ser extenso en el eje porto esplénico para generar sufrimiento intestinal.Elinfartointestinalagudoesexcepcional,engeneral es un cuadro más de evolución subaguda/crónica. La evolución fisiopatológica de la trombosis consiste en una disminución del retorno venoso, el cual genera edema intestinal. El edema repercute en la microcirculación intestinal, esto se traduce en una distención de las asas inicial que en forma progresiva llevará al infarto intestinal. Son múltiples las causas de trombosis venosa y estas deben ser evaluadas en los antecedentes del paciente. • Posquirúrgico (ejemplo: cirugía bariátrica). • Neoplasias. • Hipercoagulabilidad. • Trauma abdominal. • Pancreatitis. • Deshidratación severa. • Policitemia Vera. • Infecciones (Pileflebitis). Clínica La presentación de la isquemia mesentérica depende del tiempo de instalación y la presencia o no de colaterales. Cuando las colaterales son insuficientes el cuadro es de dolor peri o supra umbilical de inicio brusco, asociado a sudoración, náuseas, vómitos e incluso diarrea sanguinolenta. Al examen físico general el aspecto general del paciente es de un paciente grave (tóxico). Al examen abdominal este está distendido, muy doloroso, se pueden pesquisar ruidos hidroaéreos aumentados en intensidad y si el sufrimiento intestinal es avanzado se pueden pesquisar signos de irritación peritoneal y ausencia de ruidos. Es clave en la sospecha clínica cuando el dolor abdominal que presenta el paciente es intenso y desproporcional a los hallazgos en el examen abdominal. Dentro del estudio de laboratorio, en fase inicial destaca la elevación de parámetros inflamatorios (leucocitosis y elevación de PCR). En fases tardías con necrosis instalada, se verá leucocitosis con desviación izquierda, coagulopatía, acidosis metabólica(conlactatoelevado),yalteracióndeperfilhepático debido a la lisis celular.
  • 440. 441 Diagnóstico Tomografía computada de abdomen y pelvis trifásica (Angio TC): • Debe tener fase angiográfica, visceral y portal. • Permiterealizareldiagnósticodiferencialdelasdiferentes etiologías de isquemia mesentérica. • Permite identificar signos radiológicos de sufrimiento e infartointestinal(neumatosisintestinalygasintravascular, peritonitis y ascitis). • Es posible identificar hasta el 80% de las oclusiones arteriales proximales (embólicas o trombóticas, sin embargo, no es tan útil en oclusiones distales. • En el caso de la trombosis venosa mesentérica es el examen de elección. • En casos de isquemia no oclusiva no permite ver el espasmo arterial, sin embargo, permite realizar el diagnóstico diferencial y descartar sufrimiento intestinal. Angiografía • Menos disponible en comparación al Angio TC. • Es invasivo, pero es el Gold estándar para identificar oclusiones arteriales y la isquemia no oclusiva. • Su principal ventaja es que tiene rol diagnóstico y terapéutico. Endoscopía • El estudio endoscópico alto y bajo es fundamental sobre todo ante sospecha de isquemia mesentérica en paciente crítico (y que no es posible realizar estudios imagenológicos). • Pese a que no abarca la totalidad del tracto gastrointestinal, signos de colitis isquémica o cambios isquémicos en mucosa gástrica son sugerentes de cuadros de isquemia mesentérica. Tratamiento El principal objetivo consiste en restablecer el flujo intestinal lo antes posible. En primer lugar, contamos con medidas de soporte para corregir la alteración de base y disminuir la injuria intestinal. Las medidas generales son las siguientes: 1. Reanimación: monitoreo hemodinámico, corrección de acidosis metabólica, apoyo con drogas vasoactivas (idealmentedobutamina,dopaminaendosisbajaomilrinona). 2. Anticoagulación. 3. Tratamiento antibiótico de amplio espectro. 4. Instalación de sonda nasogástrica. El tratamiento quirúrgico debe ser precoz en casos de sospechadeinfartooperforaciónintestinal(clínica,imágenes, laboratorio), consiste en la resección del segmento involucrado. El segundo pilar del tratamiento quirúrgico es lograr restablecer el flujo intestinal. Tratamiento específico según la etiología 1. Embolia arterial: el manejo quirúrgico comprende laparotomía exploradora para evaluar el intestino, resecar segmentos necróticos yrevascularización (embolectomíao bypass). 2. Trombosis arterial: el manejo no quirúrgico consiste en evaluación clínica estricta asociada a anticoagulación y terapiaantiagreganteplaquetaria,peroesnecesarioqueno existansignosdesufrimientointestinal.Elmanejoquirúrgico consiste en la revascularización mediante trombectomía (eventualmente requiriendo realización de bypass) y la resección de segmentos intestinales comprometidos. 3. Trombosisvenosa:aligualqueenotroscasosdetrombosis venosa el objetivo es iniciar tratamiento anticoagulante a base de heparina. La cirugía en este caso también tiene como objetivo solo resecar segmentos necróticos, luego iniciar la anticoagulación. Manejar estos casos únicamente con anticoagulación solo se puede cuando existe un buen flujo arterial, y no tenemos sospecha de sufrimiento intestinal (clínico o imagenológico). 4. Isquemia no oclusiva: el tratamiento gira en torno a eliminar el factor desencadenante optimizando la patología de base. En conjunto debe mantenerse soporte hemodinámico, incluyendo el uso de drogas vasoactivas que no tengan efecto vasoconstrictor. La cirugía solo se reserva para manejo de infarto intestinal. Isquemia Mesentérica Crónica La isquemia crónica está principalmente relacionada con enfermedad ateroesclerótica progresiva. Mas del 70% de los pacientes son de sexo femenino y uno de los principales factores de riesgo es el tabaquismo. Siendo la enfermedad ateroesclerótica una enfermedad sistémica es frecuente que los pacientes que presentan isquemia mesentérica crónica, de forma concomitante presenten compromiso vascular en otros territorios (vascular periférica, cerebrovascular, coronario y renovascular). Es importante recalcar que para que se manifieste la isquemia mesentérica debe existir un compromiso completo de al menos dos de los tres territorios vasculares esplácnicosyqueelremanentepresenteungradodeisquemia crítica. Cuadro clínico: Dolor abdominal, principalmente posprandial, asociadoanáuseas,vómitosypérdidadepeso.Eldolorocurre
  • 441. 442 alrededor de la primera ahora después de la alimentación y lospacientesrefierenquelamanejanrestringiendoalimentos. La baja de peso es fundamental en el cuadro clínico, los dolores posprandiales generan una “fobia” alimentaria por lo se asocian a baja de peso y desnutrición. Diagnósticos diferenciales: patología biliar benigna, enfermedad por úlcera péptica, enfermedad por reflujo gastroesofágico, gastroparesia y síndrome de intestino irritable. Siempre se debe tener las neoplasias (sobre todo del tracto gastrointesinal) como diagnótico diferencial. Exámenes de laboratorio: solo son de utilidad los marcadores de estado nutricional como la albumina. Estudioimagenológico:elestudiodeeleccióneslatomografía computada de abdomen y pelvis trifásico (fase angiográfica, visceral y portal). Tratamiento: manejo de factores de riesgo (suspensión de tabaco, antiagregación plaquetaria, uso de estatinas) y la revascularización (por vía endovascular o abierta).
  • 442. 443 Bibliografía 1. Acosta S.Surgical management of peritonitis secondary to acute superior mesenteric artery occlusion. World J Gastroenterol. 2014 Aug 7;20(29):9936-41. 2. Standring S. Gray’s Anatomy: The Anatomical Basis of Clinical Practice, Expert Consult - Online and Print,40e. 3. Sise MJ. Acute Mesenteric Ischemia. Surg Clin North Am. 2014 Feb; 94(1):165-81. 4. Acute mesenteric ischemia. Up to Date 2013. 5. Babaev A. Management of Mesenteric Ischemia, Interventional Cardiology Clinics. 2014 Oct; 3(4):493-500. 6. Huete A. Isquemia mesentérica aguda: evaluación con tomografía computada multidetector.Rev. chil. radiol. 2006, Vol.12, N.° 2 pp.79-91. 7. Bobadilla JL. Mesenteric Ischemia. Surg Clin North Am. 2013 Aug; 93(4):925-40. 8. Cameron J. Current Surgical Therapy. 11th edition.
  • 443. 444
  • 444. 445 9.4 Enfermedad Arterial Oclusiva de ExtremidadesInferiores Ramírez J, Wuth MF, Ubilla M. Introducción Diagnóstico La aterosclerosis es un proceso que tiene repercusiones a nivel sistémico. Esta patología corresponde a la oclusión o estenosis de los vasos arteriales secundario a la acumulación delípidosaniveldelsubendotelio.Cuandoesteprocesoocurre en lugares ajenos a las arterias coronarias, se denomina enfermedad arterial periférica. La enfermedad arterial periférica comprende un rango de síndromes arteriales no coronarios, en los que la disminución del flujo sanguíneo de las arterias que irrigan distintos órganos,generasíntomascaracterísticos.Así,elcompromiso de las carótidas se puede expresar como un accidente cerebrovascular, en las extremidades como claudicación intermitente o isquemia crítica y en el territorio mesentérico como angina/isquemia mesentérica. Epidemiología No existen cifras nacionales sobre la prevalencia de la enfermedad arterial oclusiva. A nivel mundial se estima una prevalencia general entre 3-10%, aumentando a 15-20% en poblaciones > 70 años 1 . Factores de Riesgo • Tabaquismo • Diabetes Mellitus • Dislipidemia • Hipertensión • Insuficiencia renal • Hiperhomocisteinemia Enfermedad Arterial Oclusiva de Extre- midades Inferiores 1 Norgren L, Hiatt WR, Dormandy JA, Nehler MR, Harris KA, Fowkes FG et al. Inter-Society Con-sensus for the Management of Peripheral Arterial Disease (TASC II). J Vasc Surg. 2007;45 Suppl S:S5. Clínica El cuadro clínico de la enfermedad oclusiva de extremidades inferiores (EAO EEII) es variable, pudiendo ser desde asintomático hasta la isquemia crítica. La principal molestia es la fatiga o dolor de la extremidad inferior afectada al caminar,la que se soluciona con el reposo, síntoma conocido como claudicación intermitente. Por lo general, estose va haciendo progresivo, presentándose cada vez a menor distancia recorrida. Según el nivel de la lesión, se afectará a distintos grupos musculares, así oclusiones a nivel de la aorta infrarrenal o las arterias ilíacas provocan dolor de los glúteos y muslos. En hombres, una oclusión a este nivel se puede presentar además con disfunción eréctil productodelaisquemia,constituyendoelsíndromedeLeriche que incluye disminución o ausencia de pulsos femorales, claudicación glútea y disfunción eréctil. Una oclusión a nivel de la arteria femoral superficial se presenta con dolor en las pantorrillas. Si la obstrucción del flujo es a nivel de la arteria poplitea o tibial posterior es probable que se presente como isquemia crítica, por falta de colaterales. Su forma de presentación más extrema es la isquemia crítica, en que la irrigación se ve comprometida a tal nivel que no es capaz de suplir los requerimientos metabólicos basales de la extremidad. Se define como la presencia de dolor isquémico en reposo, úlceras o gangrena atribuible a EAO de más de dos semanas de evolución. Examen físico A la inspección, es importante descartar la presencia de úlceras arteriales. Estas habitualmente se encuentran en la punta de los dedos de los pies, la zona interdigital, y la cara lateral del tobillo y se asocian a dolor. Otros aspectos importantes a la inspección es el aspecto de la piel, pacientes con EAO pueden presentar cambios tróficos de la piel y en casos extremos, gangrena. Los pulsos femorales, poplíteos, tibiales posteriores y pedios deben ser registrados según su intensidad: 0: No palpable 1: Pulso débil 2: Pulso débil no puede obliterarse 3: Pulso fácil de palpar 4: Pulso fuerte e intenso
  • 445. 446 Índice tobillo-brazo (ITB): se define como la relación entre la presiónsistólicadeltobillodivididoporlapresiónsistólicamás alta de los dos brazos. El valor normal es de 1,0 a 1,4. Un ITB <0.90 es sensible para EAO. Por otra parte, un ITB > 1,4 es indicativo de una arteria no compresible por calcificación y, por tanto, estos valores no son interpretables, aunque sí se asocia a mayor riesgo cardiovascular. Exámenes de laboratorio Pacientes que se presenten con EAO deben ser estudiados conexámenes de laboratoriobásico en búsquedadefactores deriesgoparaeldesarrollodeestaenfermedadycondiciones asociadas que pudieran empeorar la clínica del paciente. Hemograma: es importante descartar la presencia de anemia que podría hacer los síntomas más pronunciados. La elevación de las plaquetas podría aumentar el riesgo de trombosis. El recuento de leucocitos en contexto de úlceras podría ayudar al diagnóstico o descarte de infección concomitante. Creatinina/BUN:lospacientesconEAOporsuenfermedad,la edad en que generalmente se presenta y las comorbilidades con las que se relaciona están en riesgo de presentar enfermedad renal crónica, por consiguiente, la función renal debe ser evaluada. Glicemia: descartar diabetes o evaluar su manejo. Perfil lipídico: la dislipidemia es uno de los factores de riesgo para el desarrollo de EAO. Valores de colesterol total > 200 mg/dl, HDL < 40mg/dl en hombres y <50 mg/dl en mujeres y LDL >130mg/dl se relacionan con mayor incidencia de eventos cardiovasculares. Pruebas de coagulación: TTPK e INR. LospacientesconEAOtienenriesgodepresentarenfermedad cardiovascular y cerebrovascular, por tanto, es importante estratificar según el riesgo y complementar con los estudios necesarios previo a una eventual cirugía. Laboratorio vascular no invasivo - Medicióndeíndicetobillo-brazo:es unprocedimientosimple yreproducible.Correspondealamedicióndelapresiónarterial sistólica en las arterias braquiales y arteria tibial posterior, luego de que el paciente ha estado en reposo en posición supina por 10 minutos. Se calcula dividiendo la máxima presión de tobillo por la máxima presión braquial. - Presiónarterialsistólicasegmentaria:setomanmedicionesa nivel del muslo superior, muslo inferior, pierna, tobillo y pedio de ambas extremidades. Estos valores además se dividen por la presión sistólica más alta de ambos brazos. Así, la reducción > 20 mmHg entre dos segmentos consecutivos indica estenosis a ese nivel. Los valores normales del índice muslosuperior/brazoes>1,delocontrariosedebesospechar una estenosis a nivel de la aorta, arteria ilíaca, femoral común o femoral superficial proximal. Las presiones pueden verse falsamente elevadas ante la calcificación de las arterias. - Pletismografía: mide los cambios de volumen a lo largo de diferentes puntos de la extremidad. Cobra importancia en pacientes que secundario a procesos de calcinosis de las arterias, la medición de presión arterial se haceinexacta. - Velocidad de ondas de Doppler: es la medición de la velocidad del flujo arterial en distintos segmentos de las EE.II. Normalmente la onda es trifásica, haciéndose bifásica ante enfermedad oclusiva, llegando hasta monofásica en enfermedad avanzada Imágenes - Ecografía Doppler: corresponde a una ecografía en laque se objetiva la presencia de flujos en los vasos sanguíneos. Se miden velocidad de flujo y áreas, como el lumen arterial. Mediante fórmulas definidas se puede calcular el porcentaje de estenosis. Este método es operador dependiente, por lo que en manos entrenadas es un excelente examen diagnóstico. - AngioTAC: TAC de EE.II. con contraste que permite el estudio acabado de las arterias. Además, la reconstrucción 3D permite visualizar no solo el lumen, sino también las paredes de los vasos, calcificaciones, sitios de estenosis y relación con estructuras vecinas. No es invasivo, pero puede presentar las complicaciones propias del uso de medio de contraste y expone a radiación. - Resonancia magnética o angioresonancia: no utiliza radiación y también provee un estudio anatómico de los vasos sanguíneos. Utiliza gadolinio como medio de contraste y, por consiguiente, se debe tener cuidado en administrarlo a pacientes con una VFG <30ml/min/1,732, ya que en ellos se ha descrito un riesgo en desarrollar fibrosis nefrogénica sistémica. -Angiografía: es el gold standard. Consiste en la administración de medio de contraste arterial para el estudio anatómico del árbol vascular arterial de las EE.II. Permite evaluar la localización y extensión de la lesión. Es un método invasivo y conlleva ciertos riesgos que, aunque bajos en incidencia, son graves como,porejemplo:reacciónalérgicaalcontraste,falla renal,pseudoaneurismasyembolias,entreotros.Lasmejores imágenes se obtienen con la técnica de sustracción digital.
  • 446. 447 Clasificación Para estratificar la severidad de la oclusión arterial, se han diseñadodosmétodosdeclasificación:FontaineyRutherford. Etapas de Fontaine Etapa Clínica I Asintomático IIa Claudicación no invalidante IIIb Claudicación invalidante III Dolor enreposo IV Ulceración o gangrena Categoría Clínica 0 Asintomático 1 Claudicación leve 2 Claudicación moderada 3 Claudicación severa 4 Dolor enreposo 5 Pérdida menor de tejido 6 Ulceración o gangrena
  • 447. 448 Isquemia crítica La isquemia crítica se define como la presencia de dolor en reposo o la presencia de gangrena o úlceras isquémicas de más de 2 semanas de evolución en un paciente con enfermedad arterial oclusiva. El dolor en reposo representa riesgo de pérdida de la extremidad. Tasas históricas de amputación y mortalidad varían entre un 10 a 25 % de los casos, lo que hace indispensable un diagnóstico y tratamiento oportuno2 . Tratamiento Eltratamientodebesermultidisciplinario,incluyendomedidas de reducción de riesgo cardiovascular, control de síntomas, manejo de complicaciones y de aumento del flujo sanguíneo en la extremidad afectada. 1. Reducción de riesgo cardiovascular: es necesario controlar y disminuir los factores de riesgo asociados a aterosclerosis. Se deben tratar las comorbilidades como dislipidemia, hipertensión y Diabetes Mellitus. Es fundamental el cese de consumo de tabaco. Inicio de fármacos antiplaquetarios como aspirina y clopidrogel. 2. Ejercicio: la realización de actividad física favorece la revascularización mediante mecanismos de angiogénesis de la extremidad. Idealmente, el paciente debería someterse a un programa de ejercicio supervisado que consistiera en 3 sesiones semanales de 30 a 45 minutos, por un mínimo de 12 semanas. 3. Medidas farmacológicas (manejo de síntomas): en la actualidad existen dos fármacos con los que se ha demostrado un manejo eficaz de la claudicación intermitente. • Cilostazol: inhibidor de la fosfodiesterasa III, aumenta los niveles deAMP cíclico con lo que se genera dilatación del músculo liso y disminución de la agregación plaquetaria. Pacientes con claudicación que utilizan cilostazol aumentan su distancia caminada máxima. • Pentoxifilina: derivado de las metilxantinas. Aumenta la elasticidad de los glóbulos rojos con lo que mejoraría la perfusión. 4. Revascularización: la intervención quirúrgica, ya sea con cirugía abierta o procedimientos endovasculares, debe ser considerada en los casos de: • Ineficaciadetratamientomédicoencasosdeclaudicación invalidante. 2 Christopher J. Kwolek and Fahad Shuja Rutherford’s Vascular Surgery, Chapter 162, 2528- • Discapacidad severa o deterioro importante de la calidad de vida. • Ausencia de comorbilidades que limiten capacidad funcional del paciente a pesar de que se resuelva la claudicación como angina o EPOC. • Expectativa de vida aceptable. • Morfología de la lesión vascular susceptible de ser reparada. • Isquemia crítica. En el año 2007 se actualizó y se publicó la guía TASC II que clasificalaenfermedadoclusiva,separándolaenenfermedad aortoilíacayfemoropoplitea.Deestamanerasepuedeayudar a la selección del tratamiento por efectuar. Tipo de Lesión Tratamiento Tasc A Endovascular Tasc B Endovascular Tasc C Se prefiere la cirugía abierta. Tasc D Cirugía abierta. Lacirugíaabiertaincluyevariadastécnicas.Sepuederealizar endarterectomía o bypass mediante la colocación de injertos venosos autólogos (habitualmente vena safena mayor) o de prótesis sintéticas (Dacron o PTFE). Esto lo definirá el cirujano especialista. El manejo endovascular incluye la angioplastía con balón (simple o medicado) y la instalación de endoprótesis o stents. Isquemia Aguda La isquemia aguda de una extremidad se refiere a la disminuciónrápidaorepentinadelaperfusióndelaextremidad
  • 448. 449 que amenaza la viabilidad de esta hasta dos semanas de evolución3 . A pesar de avances en el manejo y tratamiento, se han reportado entre un 10 a 30% de amputaciones debidas a esta patología en los primeros 30 días desde su diagnóstico3. Etiología Las causas principales en orden de frecuencia son: • Trombosis: derivada del proceso de aterosclerosis, por lo que su incidencia se ha mantenido, al igual que todas las patologías derivadas de los factores de riesgo cardiovascular. • Embolia: principalmente de origen cardiaco, ya sea por enfermedades valvulares, arritmias como fibrilación auricular u otra. Esta etiología ha mostrado disminución con el tiempo, probablemente debido al control actual de la enfermedad reumática. • Lesión iatrogénica: posterior a reconstrucción, injerto o punción arterial (arteriografía). • Trauma: lesiones musculoesqueléticas o por armas. Diagnóstico La presentación clínica es variable, depende principalmente de la severidad de la isquemia y de su etiología. La embolia o traumavaaprovocarunarápidainstalacióndelossíntomas,en horas, a diferencia de la trombosis, donde existe enfermedad vascular periférica previa, dada por la placa de ateroma, por lo que deberían existir colaterales que compensen parcialmente la disminución del flujo, manifestándose el dolor progresivamente en días. Anamnesis: se debe especificar el dolor, forma de inicio, localización e intensidad. Además, se debe buscar la presencia de alteraciones motoras y/o sensitivas en la extremidad afectada. Siempre preguntar por factores de riesgo cardiovascular y enfermedad arterial previa, dolor previo, intervenciones quirúrgicas o procedimientos en la extremidad, también por patologías como FA, trombofilias, valvulopatías, etc. Al examen físico se describen las clásicas “6 Ps”. • Pain (dolor). • Palidez. • Pulso ausente o disminuido: idealmente evaluado con ecografía Doppler. • Parestesia: el adormecimiento de la extremidad se observa en el 50% de los casos. • Paresia: signo de mal pronóstico. • Poiquilotermia: la zona afectada se enfría. 3 Norgren L, Hiatt WR, Dormandy JA, Nehler MR, Harris KA, Fowkes FG, TASC II Working Group. Inter-Society Consensus for the Management of Peripheral Arterial Disease (TASC II). J Vasc Surg. 2007;45 Suppl S:S5. Estecuadroclínicoclásiconoseencuentraentodosloscasos, como se señaló anteriormente, depende de la velocidad de instalación de la obstrucción, formación de colaterales y de la etiología. El objetivo principal de la anamnesis y el examen físico es conocer la severidad de la obstrucción. Diagnóstico Lo principal en la isquemia aguda es definir la severidad, si la extremidad es viable o si se encuentra en riesgo vital. Se debe agregar dentro de la evaluación inicial en estos pacientes el uso de un ecógrafo Doppler para evaluar la presencia o ausencia de pulsos venosos y arteriales.
  • 449. 450 Clasificación Hallazgos Doppler Categorías Descripción Pérdida sensorial. Debilidad muscular Arterial Venoso I. Viable Sinamenaza inminente. No No Audible Audible II.Amenazada a. Marginal Salvable si es tratada prontamente. Mínima (dedos) o ausente. No Inaudible Audible b. Inmediata Salvable si es tratada inmediata- mente. Más que solo los dedos, dolor en reposo. Leve amoderada. Inaudible Audible III. Irreversible Pérdida de tejido o daño nervioso permanente. Extensa o con anestesia. Severa o parálisis. Inaudible Inaudible Categoría I: la extremidad es viable. Por lo que existe tiempo para planificar y realizar un tratamiento de menor morbimortalidad. Habitualmente hay tiempo para hacer estudios como la angiografía. CategoríaII: esimportantedistinguir entreIIa yIIb.Lamayoría de los pacientes se encuentra en esta categoría, se debe actuar rápido para evitar la mayor pérdida de tejido. Requiere intervención quirúrgica y reperfusión precoz. Categoría III: la extremidad presenta necrosis, con daño irreversible del tejido, por lo que la reperfusión puede traer complicaciones graves como el síndrome de reperfusión. El tratamiento principal es la amputación. El principal desafío consiste en definir el nivel de la amputación. Imágenes Luego de la clasificación, se define si hay tiempo para realizar un diagnóstico más específico sobre la localización de la obstrucción, lo que es ideal en el caso de que el paciente requiera intervención quirúrgica, lo cual se plantea principalmente en categorías I y IIa. Los estudios son los mismos que los para EAO. La ecografía Doppler es considerada casi de regla para la evaluación inicial. Luego, si existe tiempo disponible, la angiografía es el examen que permite el diagnóstico específico e incluso el tratamiento endovascular. La Angio-TC y la angiografía por RNM tienen alta sensibilidad y especificidad para describir anatómicamente la lesión, pero son menos precisas que la angiografía y, en general, no se utilizan en este contexto. Tratamiento Dentro de las primeras medidas generales, se debe poner al paciente en posición arterial (Fowler: decúbito supino con EE.II. bajo el nivel del tronco) y administrar analgesia. Anticoagulación: en todas las categorías debe ser el primer paso de tratamiento, el tiempo es crucial. El objetivo de esto será estabilizar la lesión y evitar la extensión del trombo, dando tiempo para que la fibrinólisis actúe disolviéndolo. Se indica heparina no fraccionada en bolo con dosis de 80 UI/ Kg y luego infusión continua 18 UI/kg/hr hasta doblar el TTPa (dosis anticoagulante). Trombolisis farmacológica: es un tratamiento menos invasivo y,por lo tanto, con menor riesgo. Es una opción cuando existe tiempo para permitir que el medicamento disuelva el trombo sin poner en riesgo la extremidad en casos seleccionados. Se considera un tratamiento seguro y eficaz en categorías I y IIa. Esta terapia se puede asociar posteriormente con trombectomía percutánea o cirugía, obteniendo mejores
  • 450. 451 resultados que los que no recibieron trombolisis. Su principal riesgo son las hemorragias, especialmente el accidente cerebrovascular hemorrágico, que es particularmente riesgoso enpacientesañososconhipertensiónarterialmalcontrolada. Trombectomía endovascular: es un manejo más rápido, necesario en pacientes con mayor severidad de isquemia. Puede ser por aspiración o mecánica, la técnica es definida por el especialista. Se considera principalmente en categoría IIa y IIb y en centros con Servicio de Cirugía Vascular. Se puede considerar una angiografía intraoperatoria previa. Cirugía:parapacientes encategoríaI,IIa yIIb,especialmente estos últimos que requieren inmediata reperfusión. Se realiza laextraccióndirectadelémbolootrombodelaarteria.Muchas veces se realiza una angiografía intraoperatoria para evaluar presencia de otras lesiones y tratarlas en el mismo pabellón. Amputación: en el caso de extremidades no viables donde la reperfusión podría provocar la muerte del paciente.
  • 451. 452 Biliografía 1. Chaikof E and Cambria R.Atlas of Vascular Surgery and Endovascular Therapy: Anatomy and Technique. Philadelphia: Saunders; 2014. 2. Cronenwett J and Johnston K. Rutherford’s Vascular Surgery. 8th edition. Philadelphia: Saunders; 2014. 3. Hallett J, Mills J, Earnshaw J, Reekers J and Rooke T. Comprehensive Vascular and Endovascular Surgery. 2nd edition. Philadelphia: Mosby; 2009. 4. Charlie C. Cheng, Faisal Cheema, Grant Fankhauser and Michael B. Silva. Sabiston Textbook of Surgery, Chapter 62, 1754-1807 2017? 5. Jonothan J. Earnshaw Rutherford’s Vascular Surgery, Chapter 161, 2518-2527.e1 2014. 6. Michael S. Conte MD, Society for Vascular Surgery practice guidelines for atherosclerotic occlusive disease of the lower extremities: Management of asymptomatic disease and claudication. Journal of Vascular Surgery, 2015-03-01, Volume 61, Issue 3, Pages 2S-41S.e1, Copyright © 2015 Society for Vascular Surgery. 7. Dawber T.R, Kannel W.B., Revetoskie N., Stokes J., Kagan A., and Gordon T. Some Factors Associated with Development of Coronary Heart Disease: Six Years Follow-up Experience in the Framingham Study. Am J Public Health Nations Health 1959; 49:pp. 1349-1356. 8. Inter-Society Consensus for the Management of Peripheral Arterial Disease (TASC II) L. Norgren,a W.R. Hiatt,b J.A. Dormandy, M.R. Nehler, K.A. Harris, and F.G.R. Fowkes on behalf of the TASC II Working Group, Örebro, Sweden and Denver, Colorado. 2007. 9. Jonothan J. Earnshaw. Rutherford’s Vascular Surgery, Chapter 161, 2518-2527.e1. 10. Management of acute lower limb ischaemia .Robert J. Hinchliffe and Johannes Lammer. Vascular and Endovascular Surgery: A Companion to Specialist Surgical Practice, 8, 122-139.
  • 452. 453 9.5 Pie Diabético Brain M, Paredes D, Montoya D, Court F. Introducción La diabetes mellitus corresponde a una patología de tipo metabólico que se caracteriza principalmente por la hiperglicemia crónica. Se habla de diabetes mellitus 1 cuando estahiperglicemiaessecundariaaladestruccióndelascélulas beta de los Islotes de Langerhans en el páncreas debido a una reacción autoinmune, resultando en una disminución progresiva de los niveles de hormona insulina sintetizados. En cambio, la diabetes mellitus tipo 2 es secundaria a un procesoderesistenciaalahormonainsulinaenlosreceptores periféricos. Es importante tener en cuenta que los elevados niveles de glicemia plasmática desencadenan alteraciones a nivelmicroangiopáticoymacroangiopático.Agrandesrasgos, las manifestaciones microangiopáticas son principalmente la retinopatía, la nefropatía y la neuropatía; mientras que a nivel macrovascular se asocia a enfermedad coronaria, enfermedad cerebrovascular y enfermedad vascular periférica. Definición “Se denomina pie diabético a la infección, ulceración o destrucción de tejidos profundos del pie asociado con neuropatía o enfermedad arterial periférica en las extremidades inferiores de personas diabéticas”1 . Epidemiología LaprevalenciadediabetesmellitusenChileseestimaentreun 4.2% y 7.5% según las encuestas realizadas a nivel nacional los años 2003 y 2006 por el Ministerio de Salud y la ADICH, respectivamente2 . Se estima que la prevalencia de esta patología va a elevarse con el transcurso de los años debido a los malos hábitos de vida actual. En Chile hay escasa información sobre las complicaciones de ladiabetes,porloquelaprevalenciaexactadelpiediabéticoes desconocida. Eso sí cabe destacar que la Encuesta Nacional de Salud 2009-2010 estableció que 6.7% de los diabéticos tuvo que consultar a un profesional de la salud durante el 1 Equipo de Cirugía Vascular y Endovascular, Servicio de Cirugía, Complejo Asistencial Barros Luco, Escuela de Posgrado, Universidad de Chile. ¿Por qué debemos preocuparnos del pie diabético? Importancia del pie diabético. Rev. Med. Chile 2013; 141: 1464-1469. 2 Ministerio de Salud. Guía Clínica diabetes mellitus tipo 2. Santiago: Minsal, 2010. año por pie diabético3 . Es un tema relevante en salud pública debido a que es la primera causa de amputaciones de origen no traumático. Factores de riesgo Se debe distinguir entre factores sistémicos y aquellos que son locales. 1. Factores sistémicos: • Mal control metabólico. • Duración de la diabetes. • Enfermedad vascular periférica. • Ceguera o pérdida de agudeza visual. • Enfermedad renal crónica. • Edad avanzada. 2. Factores locales: • Neuropatía periférica. • Deformidad estructural del pie. • Trauma. • Uso de calzado inadecuado. • Presencia de callosidades. • Historia de ulceración o amputación previa. • Presiones elevadas de forma prolongada. • Movilidad articular disminuida. Etiología Respecto al proceso fisiopatológico mediante el cual se produce el pie diabético, es importante considerar tres factores: neuropatía, isquemia y la respuesta inflamatoria. El compromiso nervioso involucra la inervación motora, sensitiva y autónoma. Desde el punto de vista motor, se produce atrofia muscular con el desarrollo de alteraciones anatómicas a nivel de la planta del pie. Esto lleva a un aumento sostenido de la presión en ciertos puntos de la planta, induciendo la formación de callos. Desde el punto de vistasensorial,seproduceunadisminucióndelasensibilidad, con la consiguiente disminución de mecanismos de protección. Asimismo, la inervación autonómica inadecuada lleva al desarrollo de anhidrosis y sequedad cutánea, aumentando el riesgodedesarrollodeúlceras.Elconjuntodeestoselementos lleva al desarrollo de la neuropatía de Charcot. 3 Minsal.EncuestaNacionaldeSaludENSChile2009-2010; 2011.
  • 453. 454 Desde el punto de vista vascular, se producen alteraciones tanto a nivel microscópico como macroscópico. Esto resulta enunadisminucióndelflujosanguíneoenloslechoscapilares. Por lo mismo, se genera una isquemia en la región del pie, lo cual ante una infección establece una pobre respuesta inmunológica. La respuesta inflamatoria en el paciente diabético es inadecuada, ya que se ven alteradas la función de fagocitosis y de respuesta inmune frente a microorganismos. El desarrollo de la úlcera en el pie diabético, asociado a los factores mencionados anteriormente, predispone al desarrollo de infecciones. Asimismo, la pobre respuesta inmunológica lleva a la perpetuación de la infección. Diagnóstico El diagnóstico en el pie diabético se realiza en función de la clínica, laboratorio y hallazgos radiológicos. Clínica Se debe indagar en la historia clínica el tiempo transcurrido desde el diagnóstico de la diabetes, historia de heridas o amputaciones previas, síntomas tanto isquémicos como neuropáticos y comorbilidades. Respecto a los síntomas neuropáticos estos dependen de las fibras nerviosas afectadas. Ante compromiso sensitivo se pueden presentar síntomas como dolor, parestesias y disminución de la sensibilidad. Asimismo, ante daño motor, se suelen producir calambres, disminución de fuerza en la extremidad y atrofia muscular. Por último, el compromiso autonómico produce trastornos a nivel de la inervación simpática, con disminución de la sudoración local. Por otro lado, la sintomatología secundaria a la isquemia esta dada principalmente por la claudicación intermitente y síntomas de enfermedad arterial oclusiva de extremidades inferiores. Examen Físico Manifestaciones dermatológicas: eritema, calor local, ulceraciones, cambios tróficos, hiperqueratosis. Musculoesquelético: inflamación, deformidad articular, alteraciones de movilidad articular, luxaciones. Neurológico: alteraciones en sensibilidad y fuerza motora. Es de vital importancia determinar el grado de neuropatía. Vascular: disminución de los pulsos, desaparición de pulsos y gangrena. Laboratorio Se debe realizar un estudio de laboratorio clínico básico con el fin de determinar el grado de control metabólico como posibles signos de infección. Se debe solicitar: - Hemograma con fórmula diferencial en búsqueda de infección como leucocitosis, desviación a izquierda. - Perfil bioquímico. - Glicemia. Imagenología Se debe solicitar la realización de radiografías simples, TACo RMN, dependiendo de la disponibilidad de recursos y grado de afectación de la extremidad. La RNM hoy aparece como el estudio de imagen que muestra más precozmente el compromiso óseo. Dentrodeloshallazgosradiológicosporanalizarseencuentran: alteraciones en densidad ósea, compromiso articular, signos de osteomielitis, deformidad, luxación, fracturas, edema de tejidos blandos. Clasificación 1. Clasificación fisiopatológica: Hay que tener presente si predominan manifestaciones isquémicas, neuropáticas o ambas. Lo más común es el pie diabético mixto, isquemia + neuropatía. 2. Clasificación de Wagner: Se realiza una estratificación en seis niveles de acuerdo con el grado de compromiso de la extremidad: Tipo 0: ausencia de lesiones Tipo I: lesión superficial Tipo II: lesión profunda que afecta músculos y tendones Tipo III: osteomielitis Tipo IV: necrosis focalizada Tipo V: necrosis generalizada 3. Clasificación de la Sociedad Chilena de Infectología: Nos permite establecer un cierto pronóstico.
  • 454. 455 Sin amenaza de amputación Con amenaza de amputación Con riesgo vital Úlcera superficial Úlcera profunda Celulitis de menos de 2 cm. Celulitis de más de 2 - 3 cm. Sin compromiso articular, óseo, fasceitis oabscesos. Compromiso de estructuras profundas. Sin isquemia significativa. Con isquemia o gangrena. Sin toxicidad sistémica. Toxicidad sistémica o descontrol metabólico. Sepsis o shock. Wagner I. Wagner 2, 3, 4, 5. Generalmente requiere ampu- tación. Tratamiento Los objetivos del tratamiento son: 1. Control metabólico: Se debe velar por normalizar los niveles de glicemia del paciente diabético, siendo importante la consulta a medicina interna o diabetología. 2. Manejo de la infección: La infección es una complicación frecuente en la evolución del pie diabético. De acuerdo con la gravedad de la lesión es la microbiología presente en la herida. A grandes rasgos, en lesiones superficiales suelen existir bacterias gram positivas (S. Aureus y Streptococos), mientras que en infecciones de mayor profundidad suele encontrarse bacterias gram negativas y anaerobios. La Sociedad Chilena de Infectología recomienda: - Infecciones leves sin amenaza de amputación ni riesgo vital: el manejo puede ser ambulatorio con antibióticos orales. Monoterapia con cefalosporinas de primera generación, clindamicina, ampicilinasulbactam, amoxicilina-ácido clavulánico o ciprofloxacino. - Infecciones con amenaza de amputación: el tratamiento antibacterianodebeserdeamplioespectroparacubrirmúltiples agentes etiológicos. Usualmente, requieren hospitalización, asociado a desbridamiento quirúrgico y en casos de riesgo vital, manejo en Unidad de Paciente Crítico. Los esquemas recomendados son clindamicina-cefalosporinas de tercera generación, clindamicina-quinolonas, imipenem-cilastatina. Laduracióndeltratamiento debemantenersepor10a 14días eninfecciones levesmoderadas,mientras queeninfecciones severas se recomiendan esquemas de 21 días. 3. Curaciones: el personal de enfermería debe ser un aliado en el manejo del pie diabético, recomendándose curaciones frecuentes asociada a observación estricta de las lesiones. Asimismo, el cirujano debe realizar la desbridación de todo el tejido necrótico. 4. Revascularización: en el caso del paciente con pie diabético isquémico se debe realizar una evaluación por cirujano vascular, con el fin de determinar la necesidad de
  • 455. 456 procedimientosderevascularización.Esteesunpuntocrucial, ya que permite en muchos casos salvar la extremidad. 5. Prevención: tiene un rol primordial en lo que es la atención primaria. Es fundamental que el equipo de salud identifique al paciente de riesgo y educarlo con el fin de evitar la aparición de lesiones. En general, se debe tener precauciones con los pies como secarlos bien luego del baño, mantenerlos limpiosynoandardescalzo.Asimismo,esrelevanteelmanejo podológico de las uñas, con el fin de evitar la aparición de heridas.Loscalcetinesporutilizardebenserdecoloresclaros, de algodón idealmente y deben ser cambiados a diario. Por último, los zapatos deben ser usados siempre con calcetines, escogiéndose modelos de horma ancha y redonda. Complicaciones La principal complicación del pie diabético es la amputación. En términos epidemiológicos, el pie diabético es la causa del 70% de las amputaciones realizadas actualmente. Esto lleva a una disminución abrupta en la calidad de vida junto con un aumento de la mortalidad del paciente diabético. Biliografía 1. Equipo de Cirugía Vascular y Endovascular, Servicio de Cirugía, Complejo Asistencial Barros Luco, Escuela de Posgrado, Universidad de Chile. ¿Por qué debemos preocuparnos del pie diabético? Importancia del pie diabético. Rev. Med. Chile 2013; 141: 1464-1469. 2. Ministerio de Salud. Guía Clínica diabetes mellitus tipo 2. Santiago: Minsal, 2010. 3. Beltrán C., Fernández A., Giglio S., Biagini L., Morales R., Pérez J., Aburto I. Tratamiento de la infección en el pie diabético. Rev. Chil. Infectol. V. 18, N.° 3, Santiago 2001.
  • 456. 457 9.6 PatologíaVenosa Brain M, Montoya D, Pizarro MJ, Court F. Este capítulo trata acerca de dos entidades patológicas originadas por el mal funcionamiento venoso: patología variceal y úlceras venosas. Várices Corresponden a la dilatación progresiva y permanente de las venas, ya sea aquellas subcutáneas o submucosas, las cuales se producen principalmente por un fenómeno cuyo principal elemento corresponde al aumento de la presión venosa, en conjunto con un daño en el mecanismo antirreflujo de las válvulas. Las várices en realidad representan la insuficiencia venosa crónica con la consiguiente hipertensión venosa. Esta conduce a un amplio espectro de manifestaciones clínicas, desde síntomas hasta hallazgos como venas varicosas, venas reticulares, telangiectasias, edema, cambios tróficos de la piel como hiperpigmentación y úlceras. Epidemiología Las consultas por várices de las extremidades inferiores son muy frecuentes tanto en la medicina pública como privada, dadas sus repercusiones estéticas como por los síntomas asociados y sus complicaciones1 ,2 . No hay estudios nacionales al respecto, pero en estudios internacionales las várices están presentes en un 10 - 30% de la población general, con aumento de las tasas en adultos mayores 3 ,4 . Esta diferencia de porcentaje se puede explicar por las variadas definiciones que existen para várice. Algunos estudios la consideran toda vena o vénula dilatada, lo cual incluye a las telangiectasias, aumentando así su frecuencia, mientras que otros solo consideran las várices tronculares. En la mayoría de las publicaciones sobre el tema se acepta la definición que considera como várice a toda vena dilatada, elongada, tortuosa y con insuficiencia valvular, sin considerar su tamaño. Las várices son más comunes en las mujeres que en los 1 Bases de la medicina clínica. Facultad de Medicina, Universidad de Chile. 2 Manual de Patología quirúrgica. Fernando Crovari Eulufi, Manuel Manzor Véliz. Pontificia Universidad Católica de Chile, 2014, capítulo 47: Enfermedades venosas; pp. 553 - 558. 3 Callam MJ. Epidemiology of varicose veins. Br J Surg 1994; pp. 81-167. hombres5 . La prevalencia aproximada es de 15% en los hombres y 25 - 30% en las mujeres en la población mayor de 18 años. Durante el embarazo es frecuente que las mujeres embarazadas padezcan várices debido a cambios hormonales y a la presión adicional que el feto ejerce sobre la región inferior del abdomen. Otro factor importante es que estas pueden ser causadas por un sobrepeso considerable o por permanecer de pie durante períodos prolongados2. Una de las implicancias de esta patología es el gran impacto socioeconómicodelascomplicaciones,yaqueconstituyeuno de los factores de ausentismo laboral más común2. Fisiopatología Su fisiopatología se puede explicar principalmente por la anatomía y trayecto del sistema venoso en las extremidades. Cabe recordar que la red venosa se compone de un sistema o red superficial que corresponde aproximadamente al 10% del retorno venoso que está compuesto por la venas safena interna y safena externa y sus tributarias, y una red profunda que drena el 90% restante y que está ubicada bajo la fascia, conformada por venas profundas que acompañan arterias que llevan el nombre de estas. También existe un sistema de comunicación, compuesto por venas que perforan la fascia, conformado por venas comunicantes y perforantes, donde el flujo va de lo más superficial a lo más profundo. El sistema superficial drena principalmente a la piel, mientras que el sistema profundo está encargado del drenaje muscular y de planos profundos. Estas venas presentan válvulas en su interior, las cuales están encargadas de prevenir el flujo sanguíneo retrógrado favoreciendo el retorno venoso. Cuando hay disfunción valvular, se puede desencadenar un reflujo llevando al aumento de presión hasta el nivel de la microcirculación dérmica, con extravasación de moléculas y eritrocitosqueactúanestimulandounarespuestainflamatoria, liberación de citoquinas y factores de crecimiento, produciendo posteriormenteloscambiosdérmicosenestadiosavanzados. La formación de várices afecta el sistema superficial que compromete el territorio de la vena safena interna y externa. Este se debe a varios elementos comunes como: 1) aumento presión hidrostática, dada por la posición de pie (esta presión puede verse disminuida durante el ejercicio donde el retorno venoso es facilitado por la contracción y compresión de los músculos actuando como una especie de bomba). 2) Aumento de volumen en territorio venoso. Esto puede verse acompañado a la falla de mecanismo antirreflujo dado por las válvulas, obstrucción o suma de ambos elementos. Estos 4 Evans CJ, Fowkes FG, Ruckley CV, Lee AJ. Prevalence of varicose veins and chronic venous insufficiency in men and women in the general population: Edinburgh Vein Study. J Epidemiol Community Health 1999; pp. 53 - 149. 5 Anwar MA, Georgiadis KA, Shalhoub J, et al. A reviewof familial, genetic, and congenital aspects of primary varicose vein disease. Circ Cardiovasc Genet 2012; pp. 5 - 460.
  • 457. 458 elementos llevan a una dilatación progresiva y aumento en la tensión. Cabe destacar que también puede haber enfermedades que afecten la pared venosa favoreciendo la dilatación de la pared. Existen múltiples factores de riesgo para el desarrollo de várices, entre ellos: • Sexo femenino: 4:1 • Genética: ambos padres con várices predisponen hasta un 90% el desarrollo de estas. • Raza: raza blanca. Poco común en asiáticos y negros. • Constipación. • Sobrepeso. • Edad: mayor frecuencia entre los 30 a 60 años. • Antecedente de trombosis venosa. • Actividad laboral: personas que trabajan de pie tiene más riesgo. • Embarazo: debido a cambios hormonales, aumento presión intraabdominal y volemia. Drenaje venosoprofundo
  • 458. 459 Clínica Los síntomas más frecuentes son: sensación de pesadez en las piernas, cansancio, calambres de predominio nocturno, prurito, calor local, edema, alteraciones tróficas (hiperpigmentación, eccema, dermatitis), ulceraciones (más frecuentemente en región medial de pierna), lipodermatoesclerosis, parestesias y dolor vespertino que alivia en trendelenburg. En muchos casos pueden ser asintomáticas. Otras manifestaciones son las trombosis, varicoflebitis, sangrado. Estudio Es importante realizar un examen físico buscando descartar enfermedades concomitantes, ya sea alteraciones arteriales, linfáticas o secuelas de cirugías previas. El principal método diagnóstico es mediante ecografía con doppler venoso decúbito y de pie, donde se observarán las característicasdelflujovenosoprofundo(velocidad,diámetro, válvulas, características de flujo, trombos, etc.). Pletismosgrafía venosa: permite observar los cambios de volumen posturales y los relacionados con función muscular. Escaso uso actual. Venografía por punción: reservada para procedimientos invasivos como angioplastía venosa. Existen algunas maniobras semiológicas que pueden ayudar en el diagnóstico como la prueba de Trendelemburg, prueba de Perthes, prueba de Shwartz y prueba de Pratt. Prueba de Trendelenburg: determina la función valvular. El paciente en decúbito supino, levanta la extremidad en ángulo recto;posteriormente,sedrenalasangrevenosapormediode unmasajeseguidodeunvendajecomoespeciedetorniquete. Se pone de pie al paciente y se observa la velocidad con que las venas se llenan de sangre. Prueba de Perthes: se observa el llenado de venas superficiales posterior a vendar la pantorrilla del paciente. Permite diagnosticar alteraciones en flujo sanguíneo en sistema venoso profundo. Maniobra de Schwartz: busca determinar la existencia de reflujo, percutiendo en la parte más alta de la safena y percibiendo el impulso de la onda transmitida más abajo. Si las válvulas son insuficientes, se trasmitirá el impulso hacia la periferia (signo de la oleada). Si las válvulas son continentes, el impulso de la onda refleja será frenado por las válvulas y la sensación de oleada será menor o estará ausente. Prueba de Pratt: busca determinar la presencia de venas comunicantes insuficientes a través de una doble ligadura, separadas 10 cm entre cada una. Se hace caminar al paciente y se observa si hay llene venoso. Esto se traduce en insuficiencia de venas comunicantes. Clasificación Primarias: (80%) corresponden a una falla del mecanismo del sistema venoso superficial dentro del cual tenemos las fallas valvulares del cayado safeno femoral afectando válvulas, la vena safena , colaterales y comunicantes. Secundarias: (20%) ocurren por sobrecarga del sistema superficial, ya sea debido a fallas valvulares, insuficiencia u obstrucción del sistema venoso profundo. Diagnóstico diferencial Es importante descartar otras causas de edema como insuficiencia cardiaca, hepática o renal. Fístulas arteriovenosas: existe una comunicación anormal llevando a un aumento de flujo venoso y, por consiguiente, a una insuficiencia valvular y formación de várices. Lesiones traumáticas: lesiones que afecten elementos arteriales y venosos. Otrascausasdelesionescutáneascomomixedemas,úlceras producto de vasculitis o tumores de piel, etc. Tratamiento Farmacológico Soporte elástico: medias de compresión graduada. Si bien estas no producen desaparición de las várices ni corrigen la dilatación, ayudan aprevenir la progresión yaliviansíntomas. Flebotónicos flavonoides: Diosmina micronizada, debosilato de calcio. Fármacos hemorreológicos: Pentoxifilina, aspirina. Escleroterapia: indicada en telangiectasias y paquetes varicosos de menor tamaño. Cirugía Indicado en: estética, sintomatología persistente a pesar de tratamiento médico. Patología venosa con trastornos tróficos o complicaciones derivadas como úlceras venosas,trombosis. Lacirugíatradicionalconsisteen la safenectomíadel territorio afectado, además de la extirpación de los paquetes varicosos colaterales.Hoyendíaesmuyfrecuenteobservarcirugíascon técnicasendovascularesablativasconláseroradiofrecuencia de la vena safena comprometida.
  • 459. 460 Complicaciones • Trombisis. • Sangrado. • Úlcera varicosa: tiende a ser indolora, borde neto, en región de maléolo medial. • Trombo embolismo pulmonar. Resultados Larecurrenciavaadependedelapresiónvenosa,compromiso deotrosterritoriosvenosos,malatécnicaquirúrgica,variantes anatómicas del territorio venoso, falla en tratamiento elástico posoperatorio,correccióndefactoresderiesgo,usodemedias elásticas en aquellos pacientes con factores de riesgo. Úlceras Venosas Las úlceras en extremidades inferiores son causa común de consulta médica. La gran mayoría de las úlceras vasculares son de carácter crónicas y recurrentes causando gran morbilidad al paciente, incluyendo incapacidad laboral. El mal cuidado de estas puede llevar a la amputación de la extremidad. Epidemiología Laprevalenciaesdesconocida,perosehavistounaasociación con el aumento de la obesidad debido a la asociación que existe entre sus comorbilidades. Algunas series internacionales estiman su prevalencia en el 1 % de la población. Fisiopatología Úlceras en extremidades inferiores pueden ser de carácter multifactorial, pudiendo coexistir enfermedad arterial y venosa. En el caso de las úlceras arteriales, la hipertensión y ateroesclerosis juegan un rol fundamental, mientras que las úlceras venosas se deben principalmente a la hipertensión venosasecundaria,a la insuficiencia venosacrónicacausada por disfunción válvula. La estasia venosa provoca liberación de factores de crecimiento, radicales libres y activación leucocitaria cuyo resultado final es hipoxia y daño endotelial, provocando cambios tróficos en la piel y úlceras. El diagnóstico diferencial incluye patologías como vasculitis o neoplasias como carcinomas escamosos, melanomas, keratoacatnomas, angiosarcomas, entre otras. Clínica Se presentan frecuentemente en maleólo interno y se acompañan de cambios tróficos de la piel y dermatitis. El dolor tiende a ser leve y este se alivia al elevar la extremidad (tabla 1). Estudio Elestudiotienecomoobjetivoconfirmarlainsuficienciavenosa con ecografía doppler. Tratamiento El pilar del tratamiento médico es la compresión mecánica con medias compresivas especializadas o con triple vendaje; además,elpaciente debeacudir acuraciones seriadas. Otras indicaciones incluyen: - Elevar la extremidad. - Aspirina. - Agentes hemorreológicos (pentoxifilina). Actualmente, no hay pruebas disponibles para apoyar el uso habitual de antibióticos sistémicos para promover la cicatrización de las úlceras venosas de la pierna. En cuanto a las preparaciones tópicas, existen algunas pruebas para apoyar el uso de yodo de cadexómero. Eltratamientoquirúrgicosereservaparaaquellasheridasque no responden a tratamiento médico, asociadas a infección o necrosis.
  • 460. 461 Característica Úlcera venosa Úlcera arterial Aspecto Bordesdelimitados.Excavada.Fondo granulomatoso. Bordeplano.Blanquecina Fondo atrófico. Ubicación Cara interna. Maleólo interno. Cara externa, en prominencias óseas. Clínica Dolor moderado que cede con elevación de extremidad. Dolor importanteque aumenta en decúbito. Pulsos Distales Presentes Disminuidos oAusentes Tabla 1. Características clínicas de úlceras vasculares.
  • 461. 462 Biliografía 1. Bases de la medicina clínica. Facultad de Medicina, Universidad de Chile. 2. Manual de Patología quirúrgica. Fernando Crovari Eulufi, Manuel Manzor Véliz. Pontificia Universidad Católica de Chile, 2014, capítulo 47: Enfermedades venosas; pp. 553 - 558. 3. Callam MJ. Epidemiology of varicose veins. Br J Surg 1994; pp. 81 - 167. 4. Evans CJ, Fowkes FG, Ruckley CV, Lee AJ. Prevalence of varicose veins and chronic venous insufficiency in men and women in the general population: Edinburgh Vein Study. J Epidemiol Community Health 1999; pp. 53 - 149. 5. Anwar MA, Georgiadis KA, Shalhoub J, et al. A review of familial, genetic, and congenital aspects of primary varicose vein disease. Circ Cardiovasc Genet 2012; 5:460. 6. Cesarone MR, Belcaro G, Nicolaides AN, et al. ‘Real’ epidemiology of varicose veins and chronic venous diseases: the San Valentino Vascular Screening Project. Angiology 2002; 53:119. 7. Carpentier PH, Maricq HR, Biro C, et al. Prevalence, risk factors, and clinical patterns of chronic venous disorders of lower limbs: a populationbased study in France. J Vasc Surg 2004; 40:650. 8. Tretbar LL. Deep veins. Dermatol Surg 1995; pp. 21:47. 9. Pathophysiology of chronic venous disease. 10. Overview and management of lower extremity chronic venous disease. 11. Ohura N, Yamamoto K, Ichioka S, et al. Global analysis of shear stressresponsive genes in vascular endothelial cells. J Atheroscler Thromb 2003; 10:304. 12. Stücker M, Schöbe MC, Hoffmann K, SchultzEhrenburg U. Cutaneous microcirculation in skin lesions associated with chronic venous insufficiency. Dermatol Surg 1995; 21:877. 13. Christopoulos DC, Belcaro G, Nicolaides AN. The hemodynamic effect of venous hypertension in the microcirculation of the lower limb. J Cardiovasc Surg (Torino) 1995; 36:403. 14. Patient information: Varicose veins and other vein disease in the legs (The Basics). 15. Patient information: Chronic venous disease (Beyond theBasics). 16. Clinical manifestations of lower extremity chronic venous disease. 17. O’Meara S, Al-Kurdi D, Ologun Y, Ovington LG, Martyn-St James M, Richardson R. Antibióticos y antisépticos para ayudar a la cicatrización de las úlceras venosas de la pierna. La Biblioteca Cochrane PlusThe Cochrane Library.
  • 462. 463 9.7 TrombosisVenosa Profunda Y Enfermedad Tromboembólica Brain M, Montoya D, Ubilla M. Introducción Trombosis venosa se refiere al cuadro caracterizado por la obstrucción del flujo venoso causado por la presencia de un trombo, cuyo origen reside en múltiples etiologías tanto congénitas como adquiridas. Se clasifica en superficial y profunda según los territorios afectados, siendo esta última la de mayor importancia clínica dada su potencial complicación: la embolia pulmonar. La enfermedad tromboembólica (ETE) es una entidad clínica que se puede manifestar de dos formas, como trombosis venosa profunda (TVP) o como embolismo pulmonar (TEP). La clínica es variable y poco específica, motivo por el cual se han creados escalas de puntaje, las que asociadas a modernas técnicas de imágenes han facilitado el correcto diagnóstico. El pilar del tratamiento es la anticoagulación y su duración dependerá de la localización del trombo y del tiempo de resolución. En este capítulo trataremos la TVP, sus causas,diagnóstico y tratamiento al igual que el estudio y manejo del TEP. Epidemiología La ETE supone el ingreso hospitalario de 300.000 a 600.000 pacientes al año en Estados Unidos y causa la muerte de al menos 50.000 de ellas1 . Estudios norteamericanos demuestran una incidencia anual de 122 en 100.000 personas; 56/100.000 para TVP y 66/100.000 para TEP, con un pequeño mayor riesgo en hombres. Representa la tercera enfermedad cardiovascular másfrecuentedespués delinfartoalmiocardio ydelaccidente vascular encefálico. Corresponde a la primera causa de muerte evitable intrahospitalaria, atribuyéndose el 10% de las muertes nosocomiales2 . Además, en cirugía es una complicación frecuente, se estima que puede ocurrir hasta en el 80% de pacientes quirúrgicos de alto riesgo, con una frecuencia variable de TEP que puede oscilar entre el 0,01% y el 5%3 . Fisiopatología La ETE se produce por una sumatoria de diferentes factores de riesgo4 , los cuales generan la aparición de al menos un componente de la tríada de Virchow (Fig. 1), la que explica los cambios necesarios para la formación de un trombo. Esta tríadaestácompuestapor:estasis venosa,dañodelendotelio vascular e hipercoagulabilidad. Recordemos que estas condiciones pueden ser tanto congénitas como adquiridas y estas últimas pueden ser transitorias o permanentes. Figura 1. Tríada de Virchow. 1 M.P. Vela. Tratamiento ambulatorio de la trombosis venosa profunda de miembros inferiores con Heparina de bajo peso molecular. Gac Med Bilbao 2004; 101: 49-52 [18]. 2 American College of Chest Physicians Guidelines 2008. 3 Espinoza Ricardo. Complicaciones en cirugía general. 1ª edición 2011. Ed. Mediterráneo. 4 Crovari F., Manzor M. Manual de Patología quirúrgica. PUC. Capítulos 46 - 47, pp. 531 - 558. Aumento de la Coagulación Daño Endotelial Estasis Venosa
  • 463. 464 A cada factor de riesgo se le ha atribuido una probabilidad de condicionar la aparición de ETE y, por lo tanto, deben ser estudiados en todos los sujetos que serán intervenidos quirúrgicamente para poder prevenir la complicación tromboembólica en ellos (tabla 1). Riesgo mayor OR >10 Fractura cadera/pierna Prótesis cadera/rodilla Cirugía mayor Traumatismo mayor Lesión medular Riesgo medio OR 2-9 Cirugía artroscópica de rodilla Catéter venoso central Quimioterapia Insuficiencia cardiaca congestiva Terapia de reemplazo hormonal Cáncer ACV con secuela neurológica (parálisis) TVP/TEP previo Trombofilia Riesgo menor OR < 2 Reposo en cama > 3 días Inmovilidad por estar sentado (viajes) Edad avanzada Obesidad Venasvaricosas Embarazo, puerperio Tabla 1. Factores de riesgo de TVP.5 Clínica Afecta en general a extremidades inferiores, siendo clínicamente importante diferenciar su ubicación entre supra o infrapoplítea, dado que hasta el 50% de las TVP que afectan a las venas ilíaca y femoral provocarán un TEP, mientras que el riesgo de TEP en la enfermedad distal es mucho menor, solo el 20% al 30% de las TVP bajo la rodilla avanzarán a territoriosproximales3. La TVP puede presentarse asintomática hasta en la mitad de los pacientes. La sintomatología es inespecífica e incluye: dolor en la extremidad, edema, eritema o cianosis. Existen dos formas graves de presentación: Flegmasia alba dolens y Flegmasia cerúlea dolens. En la primera ocurre una oclusión masiva del sistema venoso profundo proximal de las EEII y se manifestará con edema, dolor, frialdad, palidez y con disminución de pulso arterial. La flegmasía cerúlea ocurre tras una progresión de la oclusión venosa hacia el sistema venoso superficial, interfiriendo la perfusión arterial de la extremidad, provocando isquemia y gangrena distal. Los síntomas tienden a ser más severos mientras más proximal sea la oclusión venosa. En el examen físico siempre se deben comparar los hallazgos de una extremidad con la contralateral. Aquella región afectada por TVP se presentará con aumento de volumen, edematosa, con aumento de la temperatura local y con cambios en la coloración cutánea. Además, se podrá identificar el signo de Homans (dolor a la dorsiflexión del pie). Dada la clínica inespecífica, se han creado puntajes diagnósticos con el fin de mejorar el rendimiento de pruebas diagnósticas al seleccionar población con probabilidad pretest mayor, el más utilizado en la práctica clínica es el Score de Wells para TVP (tabla 2). 5 Anderson FA, Spencer FA. Risk Factors for Venous Thromboembolism. Circulation. 2003;107:I-9-I-16.
  • 464. 465 Score de Wells modificado para TVP Puntos Aumento de volumen de toda una extremidad +1 Extremidad sintomática >3cm de diámetro que la contralateral +1 Edema confinado a la extremidad sintomática +1 Inmovilización por parálisis, paresia o uso reciente de yeso en extremidades inferiores +1 Reposo en cama >3 días o cirugía mayor <12 semanas bajo anestesia general o regional +1 Cáncer activo (en tratamiento actual o dentro de 6 meses) +1 Dilatación de venas superficiales contralaterales no varicosas +1 Dolor a la palpación de las masas musculares (Signo de Homans) +1 Antecedentes de TVP previa +1 Diagnóstico alternativo tanto o más probable que TVP -2 < 0 Riesgo bajo (5% TVP) 1-2 Riesgo intermedio (17% TVP) >3 Riesgo alto (53% TVP) Tabla 2. Score de Wells para TVP.
  • 465. 466 La sospecha de TEP surge en un paciente con factores de riesgo para TVP asociados a sintomatología respiratoria inespecífica como disnea, dolor torácico, tos, ortopnea y hemoptisis. Al examen físico es habitual encontrar taquicardia, taquipnea e hipoxemia y en algunas ocasiones fiebre. Al igual que para el diagnóstico de la TVP, se han creado puntajes para determinar la probabilidad pretest de presentar la enfermedad y así guiar el estudio (tabla 3). Score de Wells modificado para TEP Puntos TEP o TVP previo +1.5 FC > 100 lpm +1.5 Cirugía reciente o inmovilización +1.5 Clínica de TVP +3 TEP es el diagnóstico más probable +3 Hemoptisis +1 Cáncer activo +1 < 2 Riesgo bajo (TEP 1.3%) 2-6 Riesgo intermedio(16.2%) >6 Riesgo alto(37.5%) Tabla 3. Score de Wells para TEP.
  • 466. 467 Tipos de TEP El TEP representa un espectro de síndromes clínicos con implicancias pronósticas muy distintas. En este sentido, podemos agrupar a los pacientes en 3 grupos: 1. TEP con presión arterial normal y funcionamiento correcto de corazón derecho. 2. TEP submasivo: pacientes normotenso, pero con disfunción ventricular derecha. 3. TEP masivo: definidos por la presencia decompromiso hemodinámico. Diagnóstico Dímero-D Útil para iniciar el estudio en casos donde la probabilidad de ETE es baja, ya que un resultado normal descarta la enfermedad.Correspondeaunproductodeladegradaciónde lafibrina,porloquesusnivelesséricosaumentanenpresencia de trombosis. La trombosis venosa superficial, la celulitis y el hematoma intramuscular también lo elevan, haciendo necesario ampliar los estudios. Se considera anormal con valores>500ng/mL.Notieneutilidadenpacientesquirúrgicos operados recientemente. Imagenología La ecografía Doppler color es el estudio de elección debido a su alta sensibilidad (100%), especificidad (62 a 83%) y reproducibilidad. En casos donde se sospecha TEP se debe solicitarAngioTAC pulmonar. En pacientes sin claros factores de riesgo para TVP y en enfermedades trombóticas extensas se recomienda estudio con TAC de abdomen y pelvis para descartar neoplasia. La angiografía convencional se reserva para casos de TEP masivos que son candidatos a trombolisis química o trombectomía. Tratamiento Cuando se diagnostica una trombosis venosa profunda, cualquiera que sea su localización, debe tratarse primero con heparina, ya sea no fraccionada o de bajo peso molecular y luegopuedeprolongarseestetratamiento,obien,administrarse anticoagulantes orales por un período variable. Hospitalización El tratamiento en el hogar del individuo es una opción de acuerdo con un metaanálisis publicado por la Colaboración Cochrane6 . Habitualmente, se prefiere hospitalizar las TVP en localización suprapoplítea. Anticoagulación El uso de anticoagulantes es el tratamiento rutinario de la trombosis venosa profunda y TEP no masivo. Por lo general, se inicia con un curso breve, menor de una semana, de heparina mientras se comienza al mismo tiempo un curso de 3 a 6 meses con anticoagulantes orales. Se prefiere el uso de una heparina de bajo peso molecular (HBPM), excepto en pacientes con contraindicación para la HBPM, por ejemplo, pacientes con insuficiencia renal o inminente necesidad de un procedimiento invasivo. En aquellos pacientes que han tenido TVP recurrentes (dos o más), la anticoagulación es, por lo general, una terapia indicada a lo largo de la vida y en aquellos que presentan TEP la anticoagulación debe ser prolongada. HBPM • Enoxaparina: 1mg/Kg cada 12 horas subcutánea. • Dalteparina: 100 UI/Kg cada 12 horas subcutánea. • No requieren control con laboratorio. HNF • Bolo inicial de 5.000 UI endovenosa. • Se continúa con BIC 10-18 UI/kg/hora con controles de TTPA cada 6 horas. o 25.000 UI en 250cc de SF • Objetivo: lograr duplicar o triplicar TTPA basal (hasta 80 segundos). Anticoagulantes orales • Antagonistas de la vitamina K: Acenocumarol, Warfarina • Inhibidor de factor Xa: Rivaroxaban, Apixaban • Inhibidor de la trombina: Dabigatrán Trombolisis La trombolisis es un procedimiento realizado por vía venosa periférica que está indicado en TEP submasivos o masivos. En la TVP generalmente se reserva para casos de trombosis extensa o flegmasia. Existen diferentes mecanismos de trombolisis. • Trombolisis sistémica: elección en TEP masivo. • Trombolisis in situ: en caso de falla de trombolisis sistémica. • Trombectomía percutánea o quirúrgica: en TEP masivo con contraindicación de trombolisis sistémica, cuando falla trombolisis. 6 Othieno R, Abu Affan M, Okpo ELa Biblioteca Cochrane PlusThe Cochrane Library. Tratamiento domiciliario versus hospitalario para la trombosis venosa profunda.
  • 467. 468 Medias de compresión elástica graduada. Se deben indicar desde el diagnóstico. Un metaanálisis de ensayos controlados aleatorios de la Colaboración Cochrane mostró menor incidencia de síndrome posflebítico en pacientes que usaban las medias de compresión. Filtro de la vena cava inferior Su objetivo es impedir la embolia pulmonar proveniente de un trombo de extremidades inferiores. Se indica en presencia de pacientes con una contraindicación absoluta al tratamiento anticoagulante, por ejemplo, pacientes con hemorragia intracraneal, traumatismo reciente, gran cirugía reciente. Prevención Todo paciente hospitalizado se debe categorizar en cuanto a su riesgo de sufrir ETE. Según el resultado de esta clasificación se ofrecerán distintas medidas para prevenir la complicación tromboembólica. Primero, se debe evitar la inmovilidad sostenida, luego se agregan medidas mecánicas como las medias de compresión y/o compresión neumática intermitente.Enpacientesconmayorriesgosedebeinstaurar la medida farmacológica, la cual consiste principalmente en heparina en dosis profiláctica.Serecomienda laprofilaxis con HBPM. Se puede utilizar enoxaparina o dalteparina.
  • 468. 469 Biliografía 1. M.P. Vela. Tratamiento ambulatorio de la trombosis venosa profunda de miembros inferiores con Heparina de bajo peso molecular. Gac Med Bilbao 2004; 101: 49 - 52 [18]. 2. American College of Chest Physicians Guidelines 2008. 3. Espinoza Ricardo. Complicaciones en cirugía general. 1.a edición 2011. Ed. Mediterráneo. 4. Crovari F., Manzor M. Manual de Patología quirúrgica. PUC. Capítulos 46-47, pp. 531 - 558. 5. Othieno R, Abu Affan M, Okpo E. La Biblioteca Cochrane PlusThe Cochrane Library. Tratamiento domiciliario versus hospitalario para la trombosis venosa profunda. 6. Watson L, Broderick C, Armon MP. Thrombolysis for treatment of acute deep vein thrombosis. La Biblioteca Cochrane PlusThe Cochrane Library. 7. Kearon C. Natural History of Venous Thromboembolism Circulation 2003; 107: I - 22 - I - 30. 8. Turpie AD et al. Venous thromboembolism: pathophysiology, clinical features, and prevention. BMJ 2002; 325: 887 -90. 9. Goldhaber S. et al Prevention of Venous Thromboembolism Among Hospitalized Medical Patients. Circulation. 2005; 111: e1 -e3. 10. Goldhaber SZ, Morpurgo M. Diagnosis, treatment, and prevention of pulmonary embolism. Report of the WHO/International Society and Federation of Cardiology Task Force. JAMA. 1992; 268: 1727 - 1733.
  • 469. 470
  • 471. 472
  • 472. 473 10.1 Quemaduras Ramírez J, Besser N, Fontbona M. Introducción Las quemaduras son lesiones producidas en los tejidos vivos debidoalaaccióndediversosagentesfísicos(llamas,líquidos u objetos calientes, radiación, corriente eléctrica o frío), químicos (cáusticos) y biológicos, que provocan alteraciones que van desde un simple eritema hasta la destrucción total de las estructuras1 . En Chile se hospitalizan anualmente más de 6.000 pacientes debidoaquemaduras,presentandounatasademortalidadde 4,5por100.000habitantes2 .Laprincipalcausadequemaduras en mayores de 5 años es, en primer lugar, por fuego y, en segundo, por líquidos calientes (escaldadura)3 . En pacientes menores de 5 años de edad, la quemadura por líquidos calientes es lo más frecuente. El manejo de estos pacientes, más aún en el contexto de gran quemado, es multidisciplinario, incluyendo cirujanos plásticos, intensivistas, enfermeras especializadas, kinesiólogos, nutricionistas y terapeutas ocupacionales. Todos estos recursos se reúnen en centros de derivación para quemados. Clasificación 1. Quemaduras térmicas Son las más frecuentes (90% de los casos) y se dividen, a su vez, en 3 subgrupos. a. Quemaduras por contacto: Más frecuentes en mujeres. Con un sólido caliente (limitadas, pero profundas) o con un líquido caliente (extensas, pero menos profundas). b. Quemaduras por llama: Másfrecuentesenhombres.Suextensiónesvariable,peroson casi siempre profundas y se asocian a lesiones pulmonares por aspiración de sustancias derivadas de la combustión. 1 Ministerio de Salud. Guía Clínica gran quemado.Minsal, 2007. 2 Albornoz C, Villegas J, Peña V. y Whittle S. Epidemiología del paciente gran quemado adulto en Chile: experiencia del Servicio de Quemados del Hospital de la Asistencia Pública de Santiago. Rev. méd. Chile [online]. 2013, vol.141, N.° 2. 3 American Burn Association: National Burn Repository: Report of data from 1999–2008,2009(http:// w w w . am er i b u r n. or g/ 2 0 0 9 N B RA n n u a l R e p o r t . pdf?PHPSESSID=12571a86a2cf103467eced2e6e290504). 7a-e c. Quemaduras por radiación: Quemaduras solares por exposición a radiación ultravioleta o quemaduras por exposición a radiación ionizante. 2. Quemaduras químicas a. Quemaduras por ácidos: Generalmente, limitadas y de profundidad media. b. Quemaduras por álcalis: Más profundas y evolutivas. 3. Quemaduras eléctricas a. Quemaduras por flash eléctrico: No hay paso de corriente a través del organismo y el daño ocurre por una elevación brusca de la temperatura, pero de muy corta duración, provocando una lesión superficial. Se puede asociar a quemaduras térmicas, si se produce la combustión de la vestimenta del individuo. b. Quemaduras con paso de corriente a través del cuerpo: Son lesiones muy profundas, pudiendo dañarse músculos, huesos, tendones, nervios y vasos. La extensión del compromiso cutáneo no se relaciona con la magnitud del daño interno, por lo que se consideran quemaduras muy graves por el curso imprevisible que pueden tener. Fisiopatología El fuego, las quemaduras por líquidos calientes y el contacto con superficies calientes o frías producen daño mediante la transferencia de energía, lo que provoca necrosis de coagulación. Las quemaduras por químicos y electricidad generan un daño directo sobre la célula causando necrosis de coagulación y de liquefacción. Una vez que ocurre el daño, se pueden identificar tres zonas: 1. Zona de necrosis: células que ya no se encuentran vitales. 2. Zona de estasis: existe un daño de los vasos sanguíneos, pero las células aún se encuentran vitales. Si reciben el manejo adecuado, estas células pueden sobrevivir, de no ser así sufrirán necrosis de coagulación.
  • 473. 474 3. Zona de hiperemia en respuesta a la inflamación. Una quemadura provoca aumento de la permeabilidad de la piel, que debido a los trastornos hidroelectrolíticos asociados, si no es tratada a tiempo, puede llevar a una falla orgánica múltiple, shock e incluso la muerte. Diagnóstico Al momento de evaluar un paciente quemado se debe considerar: 1. Profundidad. 2. Extensión. 3. Localización. 4. Tipo. 5. Edad. 6. Gravedad. Profundidad Existendosclasificacionesparaevaluarlaprofundidaddeuna quemadura.LaprimeraeslaclasificacióndeConverse-Smith, la más utilizada a nivel mundial. La segunda, la clasificación de Benaim, se usa a nivel regional (Hispanoamérica). Epidermis Zona de Coagulación Zona de Estasis Dermis Zona de Hiperemia
  • 474. 475 Converse-Smith Grado Compromiso Características Primer Epidermis Eritema,dolor, sin flictena. Segundo superficial Dermis superficial. Flictena, edema, dolor. Segundo profundo Dermis profunda. Flictena, edema, dolor. Tercer Todaslacapas de la piel. Escara, analgesia. Benaim Tipo Características Evolución A Eritematosa o flictenular. Curación 10-15 días, sin secuelas. AB-A (superficial) Compromiso plexo vascular superficial. Curación 3 semanas. AB-B (profunda) Requiere injerto. B Compromiso plexo vascular profundo. Requiere injerto o colgajo.
  • 475. 476 Las quemaduras de tercer grado presentan analgesia por destruccióndelasterminacionesnerviosas.Estaausenciade dolor no es absoluta, puesto que en la zona circundante a la lesión sigue habiendo dolor, pero a causa de la inflamación, no del daño directo por la quemadura, por lo que no es de tipo urente. Si el daño se limita a la epidermis, la piel reepitelizará, pero si hay compromiso de la membrana basal, la reparación del tejido será mediante cicatrización con fibrosis. Por lo anterior, si una quemadura presenta pelo firmemente insertado, significa que aún hay membrana basal en el bulbo del folículo piloso y, por tanto, que aún se puede regenerar la epidermis. Una buena prueba para determinar la profundidad de la lesión es traccionar el folículo piloso, el cual se desprende con facilidad en aquellas quemaduras que comprometen la dermis profunda. Imagen 1: Quemadura de 1er grado facial.
  • 476. 477 Imagen 2: a.- Quemadura en mano de 2do grado con áreas de quemadura superficial y otras profunda. b.- Quemadura en extremidad inferior de 2do grado. Imagen 3: Quemadura en 3er grado en tórax y extremidad superior derecha. Nótese la escara de coloración blanca nacarado
  • 477. 478 Menor de 1 año 1 año 5años 10 años 15 años y más Extensión Regla de los 9 (>15 años) Ampliamente utilizada, pero se debe tomar en cuenta que en pacientes pediátricos las proporciones cambian. Regla de la mano Se puede utilizar también la mano del paciente (no del examinador) para calcular la superficie corporal quemada. La mano del paciente, incluidos los dedos, equivale al 1% de la superficie corporal. Localización Existen regiones anatómicas que toman mayor importancia al estar involucradas en una quemadura. ● Cara. ● Cuello. ● Manos y pies. ● Pliegues articulares. ● Genitales y periné. ● Mamas. Tipos ● Fuego. ● Escaldadura (líquidos calientes). ● Contacto con superficies calientes o frías. ● Químicos. ● Electricidad. Edad Los extremos de la vida son los que están a mayor riesgo al momento de sufrir una quemadura: ● Pacientes < 2 años. ● Pacientes > 60 años. Gravedad El índice de gravedad por aplicar depende de la edad: 9 9 9 36 18 18 11 9 9 34 18 18 15 9 9 32 17 17 17 9 32 9 16 16 19 9 9 32 15 15
  • 478. 479 Edad Clasificación Descripción Adultos Garcés Edad +% Quemadura Tipo A x1 +% Quemadura Tipo AB x2 +% Quemadura Tipo B x3 2 a 20 años Garcés modificado por Artigas 40 - Edad +% Quemadura Tipo A x1 +% Quemadura Tipo AB x2 +% Quemadura Tipo B x3 < 2años Garcés modificado por Artigas y consensoMinsal 1999 40 - Edad +% Quemadura Tipo A x1 +% Quemadura Tipo AB x2 +% Quemadura Tipo B x3 +Constante 20 * Adaptado de Guía Clínica gran quemado. Minsal, 2007. Enlascategoríasgraves ysiguientes debeincluirse,además, a todos los pacientes con: • > 65 años con 10% o más de quemadura AB o B. • Quemadura respiratoria. • Quemadura de alta tensión. • Politraumatismo. • Quemados con patologías graves asociadas. • Con quemaduras intermedias o profundas complejas, de cabeza, manos, pies o región perineal. Síndrome de Inhalación En los últimos años se ha logrado disminuir el riesgo de muerteasociadoaunaquemadura,mientrasquelamortalidad derivada de las lesiones pulmonares provocadas por aspiración dehumoyotrassustancias encombustiónhaidoenaumento. Esta mortalidad se debe al desarrollo de infecciones más que a una insuficiencia respiratoria primaria. El cuadro puede cursar con compromiso de conciencia, daño de mucosas, edema pulmonar y SDRA. La causa de muerte varía dependiendo de la fase del cuadro. En una primera fase aguda es la intoxicación por monóxido de carbono la causa más frecuente, mientras que en fa-ses tardías del cuadro es una neumonía asociada la quemayor mortalidad produce. Índice Pronóstico 21 - 40 Leve: Sin riesgo vital 41 - 70 Moderado: Sin riesgo vital, salvo complicaciones 71 - 100 Grave: Mortalidad < 30% 101 - 150 Crítico: Mortalidad 30 -50% > 150 Sobrevida excepcional: Mortalidad >50%
  • 479. 480 Tratamiento Evaluación inicial: lo primero por considerar en el manejo de los pacientes quemados es que deben manejarse como pacientes de trauma, con la finalidad de mantener una perfusión adecuada y evitar el shock por pérdida de fluidos. De esta manera, la evaluación inicial consiste en: A: Vía aérea (Airway). B: Ventilación (Breathing). C: Circulación (Circulation). D: Déficit neurológico (Disability). E: Exposición (Exposure). Vía aérea Siempre sospechar compromiso de vía aérea si hay: • Quemadura con fuego o exposición a gases en espacios cerrados. • Humo en el lugar del accidente. • Compromiso de conciencia. • Quemadura de cara, cuello y tronco superior. • Vibrisas quemadas. • Esputo carbonáceo. • Estridor, taquipnea o disnea. • Broncorrea. En estos casos en que se sospecha compromiso de la vía aérea, se debe intubar inmediatamente para protegerla. Ventilación Siempre administrar oxígeno al 100% a todo paciente con sospecha de compromiso de vía aérea. Cuando el paciente haya resultado lesionado en áreas cerradas, sospechar intoxicación por monóxido de carbono CO.Enestossedebesolicitarlamedicióndenivelesdecarbo- xihemoglobina. Con niveles bajo 20%, rara vez presentan síntomas. Circulación Es difícil determinar la presión arterial en estos pacientes ysu déficit de volumen, es por esta razón que la monitorización de la diuresis es una herramienta muy útil y se debe instalar una sonda urinaria. La meta es un gasto urinario de0,5cc/Kg/h. Se debe obtener accesos venosos e iniciar infusión con cristaloides, de preferencia Ringer Lactato. Existen varias fórmulas para administrar el volumen. Una de las más utilizadas es la fórmula de Parkland: 2-4ml x Kg de peso x SCQ (quemaduras de 2.o y 3.er grado). Elvolumencalculadosedebeadministrardurantelasprimeras 24 horas (la mitad en las primeras 8 horas después de la quemadura,laotraenlassiguientes16horas).Estasfórmulas sonutilizadasparaeliniciodelaportedevolumenenpacientes quemados,perodebenserajustadasalgastourinarioobjetivo. Déficit neurológico Evaluar con escala de Glasgow. Si presenta compromiso de conciencia, sospechar intoxicación por monóxido de carbono y medir COHb. Exposición Exponer completamente al paciente. Examinar por delante y por atrás. Calcular la extensión de las quemaduras y la profundidad de estas. Criterios de ingreso a UPC (Guía Clínica gran quemado. Minsal, 2007): • Índice gravedad > 70 o quemaduras AB o B > 20%de SC. • Paciente > 65 años con 10% o más de quemaduras AB o B. • Paciente con injuria inhalatoria. • Quemaduras por electricidad de alta tensión. • Quemado politraumatizado o con traumatismo encéfalocraneano. • Falla en la reanimación. • Inestabilidad hemodinámica y/o respiratoria. • Patologías graves asociadas (por ejemplo, insuficiencia renal, patologías cardíacas y respiratorias, deficiencias inmunológicas, diabetes). Analgesia: Se debe manejar tanto el dolor de base, provocado por la quemadura, como el dolor aso-ciado a procedimientos. Para el dolor de base se utilizan esquemas combinados de paracetamol + opioide (morfina o fentanil). Durante la fase de resucitación sepuedeagregarbenzodiacepinas (midazolam) y una vez estabilizado se puede sumar un AINE para reducir las dosis y eventuales efectos adversos del opiáceo. El manejo del dolor asociado a procedimientos debe ser agresivo, utilizando al menos opioides endovenosos, pudiéndose llegar a requerir sedación o anestesia general 1 . Tromboprofilaxis: Pacientes quemados presentan un riesgo aumentado de complicaciones tromboembólicas, por lo que debe iniciarse profilaxis con heparinas de bajo peso molecular (enoxaparina). Sonda nasogástrica: Indicada en casos de vómitos o si las quemaduras comprometen sobre 20% de la superficie corporal en que
  • 480. 481 se asume íleo paralítico. Profilaxis antitetánica: Se recomienda el uso de profilaxis dependiendo de la herida y el estado de vacunación del paciente. Todo paciente con quemaduras de > 10% de la superficie corporal debería recibirla4 . Tratamiento local de la quemadura: 1. Limpieza y desbridamiento: Tras estabilizar al paciente se debe realizar aseo quirúrgico, con desbridación de tejido desvitalizado y eliminación de cuerpos extraños y otros contaminantes. Usar abundante suero fisiológico a presión. 2. Manejo de ampollas: Vaadependerdesilaampollaseencuentrarotaointacta.Una ampolla rota debe ser desbridada, mientras que el manejo de una ampolla intacta aún es tema de debate. En la práctica lo que se recomienda es dejar intactas las ampollas peque-ñas (<1cm) y desbridar las de mayor tamaño (flictenas). 3. Cobertura: Brinda una gran cantidad de beneficios; protege contra traumas e infecciones, alivia el dolor y promueve la regeneración del tejido. Hay diversas alternativas y se separan en transitorias y permanentes. Entre estas se encuentran los heteroinjertos, coberturas sintéticas, injertos, colgajos. Tratamiento de la escara: ● Escarotomía: las escaras en las quemaduras grado 3 asociado al edema de los tejidos pueden comprometer el drenaje venoso e incluso la irrigación arterial cuando se producen en forma de manguito (o circunferencial). En estos casos, es necesario realizar una escarotomía, que consiste en incidir la escara en toda su extensión. Debe realizarse dentro de las primeras 72 horas. Fasciotomía: • Si el aumento de presión es dentro de un compartimiento muscular,estopuedegenerarunsíndromecompartimental. 4 Jeschke M, Williams F, Gauglitz G, Herndon D. BURNS (in: English). Townsend C, Beauchamp D, Evers D, and Mattox K. Sabiston Textbook of Surgery 19th edition, Chapter 21, 521-547. Fasciotomía de la mano Fasciotomía de la mano
  • 481. 482 Enestoscasosesnecesariounafasciotomíaparareducir la presión y mejorar la perfusión del tejido muscular. Quemaduras por congelamiento Existen dos tipos de lesiones por congelamiento: A. Frostnip: congelación leve reversible. B. Frostbite: lacongelacióndelostejidos llevaaundaño microvascular y anoxia. Además, existe un daño agregado al momento de la reperfusión. Quemaduras eléctricas El tejido nervioso y vascular son los que menos resisten el daño eléctrico, mientras que el tejido óseo es el más resistente. Por lo anterior, al haber compromiso óseo por la quemadura en una extremidad se debe evaluar la necesidad de amputación. Resistencia de tejidos: Menor El objetivo es recalentar la región corporal afectada. Primero, se debe remover la ropa húmeda y cubrir al paciente en mantas. Si el paciente está consciente y puede ingerir, administrar líquidos calientes por vía oral. Una vez en el centro hospitalario y con analgesia adecuada recalentar al paciente, sumergiendo la zona afectada en agua a 40 ºC. Generalmente, a los 30 minutos se logra el recalentamiento observándose la piel eritematosa. No se recomienda el calor seco ni frotar las zonas afectadas. Mayor • Nervios • Vasos sanguíneos • Músculos • Piel • Tendones • Celular • Hueso Quemaduras químicas El manejo inicial de estas quemaduras consiste en eliminar rápido el agente causal. Si el químico es un polvo, debe cepillarse primero y, posteriormente, irrigar la zona afectada. Para el resto de los químicos, se realiza un aseo por arrastre con agua por lo menos por 30 minutos. En este tipo de quemaduras es de gran importancia optimizar la hidratación debido a que la rabdomiolisis, derivada de la destrucción de tejido muscular, puede provocar necrosis tubular generando una insuficiencia renal aguda. La delimitación en profundidad de las quemaduras eléctricas puede demorar hasta 21 días, por lo cual la reconstrucción se difiere hasta evidenciar esta delimitación. Biliografía 1. Courtney T, Beauchamp D, Evers M, Mattox K. Sabiston: tratado de cirugía.19.a ed. España: Elservier; 2013. 2. Ministerio de Salud. Guía Clínica gran quemado. Minsal, 2007. 3. Sciaraffia C, Andrades Py Wisnia P. Quemaduras. En: Cirugía plástica esencial. Santiago: Universidad de Chile; 2005, pp. 87-108.
  • 482. 483 10.2 ÚlcerasporPresión Ramírez J, Besser N, Fontbona M. Generalidades Definición Una úlcera por presión (UPP) es una lesión localizada en la piel y los tejidos subyacentes, que ocurre generalmente en relación con una prominencia ósea como resultado de presión e isquemia mantenida sobre esta, asociada o no a cizallamiento o fricción. Epidemiología Las UPP ocurren usualmente en pacientes con movilidad reducida, ya sea confinados a camas o sillas de ruedas. En Chile, la prevalencia de UPP en pacientes hospitalizados con factores de riesgo se estima en 28%1 . Dentro de las subpoblaciones de riesgo, los pacientes parapléjicos tienen una incidencia de 23% y pacientes con fracturas femorales hasta 66%2 . Factores de riesgo • Inmovilidad. • Malnutrición. • Perfusión reducida (hipovolemia, hipotensión, vasoconstricción periférica, enfermedad arterial periférica). • Déficit sensitivo. • Alteración cognitiva. • Incontinencia urinaria o fecal. • Otros(edadavanzada,razanegraohispánica,bajopeso, DM, edema). Fisiopatología El desarrollo de una UPP es de naturaleza multifactorial que requiere no solo la presión sobre la piel, sino también la interacción de esta con otros factores como el cizallamiento, la humedad, el roce y otros factores propios del paciente. El apoyo mantenido sobre un punto localizado puede elevar la presión del tejido por sobre la presión de perfusión capilar (32mmHg) y llevar a hipoxia (y, eventualmente, necrosis), acumulación de desechos metabólicos y generación de 1 Zuñiga G., Carlo; Lobos M., Adriana; Bustos V., Rodrigo; Pizarro C., Andrés; Sandoval R., Diego; Vásquez E., Nicolás. Incidencia de úlceras por presión en población hospitalizada con factores de riesgo. Bol. Hosp. Viña del Mar;62(1/2):2-7, ene. 2006. tab. 2 Prado A, Andrades P, Benítez S. Úlceras por presión. En: Cirugía plástica esencial. Santiago: Universidad de Chile; 2005, p. 112. radicales libres con daño por reperfusión. El tejido más susceptible al daño provocado por presión es el muscular, seguido por el subcutáneo y luego la dermis. Por lo anterior, es posible tener extensas zonas de tejido profundo dañado con ausencia o poca evidencia de daño en la superficie. El daño por cizallamiento ocurre cuando el paciente se encuentraubicadosobresuperficiesinclinadas,detalmanera quelostejidos profundosejercenunafuerzahaciaabajoporla gravedad, mientras que los superficiales (epidermis y dermis) se mantienen fijos por materiales externos (por ejemplo, la cama), de tal forma que los vasos se elongan y angulan, empeorando el daño causado por la presión mantenida. La humedad local (por deposiciones, orina, transpiración u otra causa), favorece la maceración de la piel y, por tanto, también la ulceración superficial de esta. Elroceesprovocadoalarrastraralpacienteporunasuperficie o viceversa, provocando daño por abrasión que, al igual que la humedad, favorece la ulceración superficial. Fisiopatología UPP
  • 483. 484 Diagnóstico Clasificación (National Pressure Advisory Panel, 1989) Profundidad de úlcera Clínica Estadio I No hayúlcera. Eritema no blanqueable a la compresión. Estadio II Epidermis ydermis. Úlcera superficial rodeada de eritema. Estadio III Hasta tejidosubcutáneo. Úlcera con forma de cráter y tejido adiposo visible. Estadio IV Músculo, tendón,hueso. Úlcera con forma de cráter y exposición de tejidos profundos afectados. No etapificable Desconocida. Úlcera con costra que impide evaluar profundidad. Sospechadedaño tisular profundo Desconocida. Equimosis con dolor, cambios en consistencia o temperatura local. Tabla 1. Clasificación de úlceras por presión. Clasificación UPP
  • 484. 485 Estadio I: Eritema no blanqueable Esuneritemaquenodesaparecealcomprimirlapielafectada. En personas de tez oscura, puede manifestarse como una zonadelevedecoloraciónquenoseblanqueaalcomprimirse. Ocurre en piel intacta y puede acompañarse de dolor y aumento de calor local. Representa a individuos en riesgo de lesiones mayores. Estadio II: Úlcera de espesor parcial Pérdida cutánea limitada a la epidermis o dermis, que se presenta como una úlcera superficial rodeada de eritema. Se puede manifestar también con indemnidad de la epidermis, como una ampolla rellena de líquido seroso. Estadio III: Pérdida total del grosor de la piel La úlcera adquiere forma de cráter y el daño se extiende más allá de la dermis, con compromiso de la grasa del tejido subcutáneo, pero sin exposición músculo, tendón ni hueso. El daño puede abarcar más allá de la lesión superficial a lo largo de túneles excavados a través de tejido profundo. Estadio IV: Pérdida total del espesor de los tejidos No solo hay daño de la dermis y tejido subcutáneo, sino tambiéndetejidomuscularytendíneopudiendohaber,incluso exposición de tejido óseo. Es probable que el fondo de la úlcera contenga tejido necrótico y, generalmente, el daño se extiende más allá de la lesión superficial.
  • 485. 486 No etapificable Debido a la descamación de tejido o a la presencia de una escara en la herida, no es posible evaluar la profundidad de esta y,por tanto, su estadio hasta que se remueva este tejido. Sospecha de daño tisular profundo Por las características clínicas de la superficie cutánea se sospecha que el daño abarca capas más profundas, pero que no son posibles de evaluar directamente. Esta sospecha se plantea ante equimosis localizada o decoloración en piel intacta. El área cutánea puede presentar dolor, consistencia firmeo reblandecidaoaumentoodisminucióndetemperatura.Puede evolucionar con una pequeña ampolla, ser cubierta por una escara o con exposición de las distintas capas comprometidas3 . Prevención La clave en el manejo de esta patología es la prevención. Para esto, debemos: 1. Identificar pacientes en riesgo de desarrollar UPP. 2. Evitar la presión excesiva. 3. Evitar lesionar la piel. 4. Optimizar el estado nutricional del paciente. 5. Deambulación precoz. 6. Eliminación de espasmos flexores. Elriesgodedesarrollarunaúlceraporpresióndepuededeterminar mediante diferentes índices oescalas, losmás utilizados son: Índice de Norton Estado General Estado Mental Actividad Movilidad Incontinencia 4. Bueno 4. Alerta 4. Caminando 4. Total 4. Ninguna 3. Débil 3. Apático 3. Con ayuda 3. Disminuida 3. Ocasional 2. Malo 2. Confuso 2. Sentado 2. Muy limitada 2. Urinaria 1. Muymalo 1. Estuporoso 1. Encama 1. Inmóvil 1. Doble incontinencia 1. Índice < 14 : riesgo evidente de formación de úlceras. Índice < 12 : muy alto riesgo. 3 National Pressure Ulcer Advisory Panel, European Pressure Ulcer Advisory Panel and Pan Pacific Pressure Injury Alliance. Prevention and Treatment of Pressure Ulcers: Quick Reference Guide. Emily Haesler (Ed.). Cambridge Media: Perth, Australia; 2014.
  • 486. 487 1 2 3 4 Percepción sensorial Limitado completamente Muy limitado Limitado levemente Sin impedimento Humedad de la piel Constantemente húmeda Muy húmeda Ocasionalmente húmeda Raramente húmeda Actividad Confinado a la cama. Confinado a silla. Ocasionalmente camina. Camina frecuentemente. Movilidad Completamente inmóvil. Muy limitada. Levemente limitada. Sinlimitaciones. Nutrición Completamente inadecuada. Probablemente inadecuada. Adecuada. Excelente. Fricción y roce Presente. Potencialmente presente. Ausente. Índice < 16 = alto riesgo. Tratamiento Manejo médico Previo al inicio de cualquier terapia, se debe mejorar el estado basal del paciente ycontrolar los factores sistémicos ylocales que afectan la curación de la úlcera: • Mantener una albúmina > 3 g/dl • Hemoglobina > 12 • Tratar cualquier infección concomitante. • Controlarlosespasmosmusculares.Requiereevaluación por neurología o neurocirugía. • Controlar la presión ejercida sobre la úlcera. • Descartar la presencia de osteomielitis y/o fístulas. Una vez que un paciente desarrolla una úlcera por presión, esta debe clasificarse según su profundidad. Por lo general, las úlceras grado I y II son de tratamiento médico, mientras que las III y IV requieren de una intervención quirúrgica. Se deben tomar cultivos de la úlcera. Si existe evidencia de infección local, está indicado el uso de antibióticos tópicos. El usodeantibióticosporvíaoraloendovenosaestánreservados para los casos en que existe una repercusión sistémica. Sedebehaceraseoporarrastredelaúlceraydesbridamiento, ya sea quirúrgico o a través de las mismas curaciones.
  • 487. 488 Manejo quirúrgico Indicaciones de cirugía: Absolutas Relativas Hemorragia Disminuir tiempo de mejoría. Sepsis Lesionado medular y secuela de deformidad esquelética. Osteomelitis Dolor crónico. Fístula articular Recurrentes. Fístulas entero vesicales Falla de tratamiento conservador. Malignización Ancianos. Al realizar un tratamiento quirúrgico de la úlcera por presión, se debe extirpar por completo la úlcera con su bursa, remover las prominencias óseas y el tejido óseo infectado y obliterar los espacios muertos. Para la cobertura de la herida remanente, se debe utilizar colgajos cuya elección va a depender de la ubicación de la úlcera. Úlceras isquiáticas: colgajo de elección: miocutáneo de glúteo máximo. Úlceras sacras Colgajo de elección: colgajo miocutáneo de glúteo máximo. Úlceras trocantéreas Colgajodeelección:rotacióndecolgajomiocutáneodetensor de la fascia lata. *Los colgajos no deben apoyarse por 21 días para evitar complicaciones. Complicaciones Agudas • Hematomas. • Infección: celulitis, artritis, osteomielitis, sepsis. • Dehiscencia. • Seroma. Crónicas • Recurrencia. • Osteomielitis crónica. • Carcinoma escamoso: úlcera de Marjolin, carcinoma de células escamosas, de comportamiento agresivo y ulceroso,queseproduceenzonasdeinflamacióncrónica.
  • 488. 489 Biliografía 1. Prado A, Andrades P., Benítez S. Úlceras por presión. En: Cirugía plástica esencial. Santiago: Universidad de Chile; 2005, p. 112- 125. 2. Mayo clinic. Bedsores (pressure sores). Artículo digital. Publicado 13 diciembre 2014. Citado 7 de junio 2015. Disponible en http:// www.mayoclinic.org/diseases-conditions/bedsores/basics/definition/con-20030848 3. National Pressure Ulcer Advisory Panel, European Pressure Ulcer Advisory Panel and Pan Pacific Pressure Injury Alliance. Prevention and Treatment of Pressure Ulcers: Quick Reference Guide. Emily Haesler (Ed.). Cambridge Media: Osborne Park, Western Australia; 2014. 4. Zuñiga G., Carlo; Lobos M., Adriana; Bustos V., Rodrigo; Pizarro C., Andrés; Sandoval R., Diego; Vásquez E., Nicolás. Incidencia de úlceras por presión en población hospitalizada con factores de riesgo / Incidence of pressure ulcers in admitted patients with risks factors. Bol. Hosp. Viña del Mar; 62(1/2):2-7, ene. 2006
  • 489. 491 10.3 InjertosyColgajos Ramírez J, Besser N, Fontbona M. Generalidades Tanto los injertos como los colgajos consisten en transferencias de tejido de un lugar a otro, generalmente con el objetivo de dar cobertura a heridas de gran extensión. Los injertos son segmentos de piel (epidermis y porciones variables de dermis), que pierden su relación con el sitio de origen quedando sin irrigación propia, la cual depende de la formación de nuevos vasos entre este y la zona receptora para, posteriormente, integrarse a los tejidos circundantes (concepto conocido como prendimiento). Los colgajos, en cambio, son transferencias de piel y tejidos subyacentes, incluyendo un pedículo vascular propio, por lo que no pierden su relación con el sitio de origen, manteniendo vasos unidos a esta, a excepción del colgajo libre, en el cual se deben unir los vasos del colgajo a los vasos de la zona donde este será colocado. Injertos Los injertos, tras contactar la zona receptora, se nutren en las primeras 24-48 horas mediante difusión, en que el primero absorbe el transudado de la segunda en un proceso conocido como imbibición plasmática. Posteriormente, los vasos del injerto se alinean con los de la zona receptora formando lo que se conoce como “kissing capillares” en la fase llamada inoculación. Por último, se encuentra la etapa de revascularización en que podrían estar involucrados 3 procesos: anastomosis de vasos preexistentes, formación de vasos de neoformación y combinación de vasos nuevos y antiguos. De lo anterior se desprende que para que un injerto tenga resultados exitosos, el lugar que recibirá al injerto debe tener un lecho vascular saludable. Dentro de los tejidos con un lecho vascular adecuado para la recepción de un injerto, se encuentran heridas con tejido de granulaciónvital,pericondrio,paratenon,periostioysuperficie ósea fenestrada (en la cual se haya logrado previamente crecimiento de tejido de granulación). Por otra parte, tejidos con un mal lecho vascular y, por tanto, inadecuados para recibir un injerto incluyen superficies expuestas de cartílago, tendón y hueso, además de zonas de fibrosis crónicas. También es importante que la herida se encuentre libre de infección (carga bacteriana <105 microorganismos/gramo de tejido) y cuerpos extraños, que podrían actuar como una barrera entre el injerto y su zona receptora. Tipos de injertos Origen Grosor de piel • Autoinjerto /Isoinjerto • Aloinjerto / Homoinjerto • Xenoinjerto / Heteroinjerto • Parcial • Total Tabla 1 Tipos de injertos cutáneos. Según su origen, si el injerto proviene del mismopaciente se denomina autoinjerto o isoinjerto. Si, en cambio, el injerto proviene de un donante cadáver, se denomina aloinjerto u homoinjerto. En el caso de que el donante sea un animal de otra especie, se denomina xenoinjerto o heteroinjerto. Según el grosor de la piel que compone al injerto se clasifican en totales y parciales: - Injertos de piel parcial (IPP). Los injertos de grosor parcial de piel están formados por epidermis y parte de la dermis, de tal forma que el injerto prende rápidamente y la zona donante se reepiteliza en menos tiempo. Su obtención se realiza mediante un dermátomo y en caso de ser necesario aumentar el área de cobertura, se puede hacer un injerto en malla, en que el segmento de piel extraído es expandido en hasta 6 veces su tamaño. Las zonas dadoras de IPP son: glúteos, muslos, cara interna de brazo, dorso, abdomen, cara anterior de tórax y cuero cabelludo. Siempre queda una alteración de la pigmentación en la zona dadora al epidermizar esta.
  • 490. 492 Las desventajas de los IPP incluyen retracción con el tiempo, pigmentación anormal y poca duración en caso de ser sometido a trauma. - Injertos de piel total (IPT). Losinjertosdegrosortotaldepielestánformadosporepidermis ytodoelgrosordeladermis,incluyendoglándulassudoríparas, glándulassebáceasyfolículospilosos.Seobtienenmedian-te bisturí y necesariamente son de extensiones limitadas para permitir el cierre del sitio do-nante. Para evitar extraer más tejido del necesario, es posible realizar una “plantilla” con la for-ma y tamaño de la herida para obtener un injerto con las características exactas que se necesi-tan. Las zonas dadoras de IPT son: retroauricular, párpados, supraclavicular, preauricular, pliegue de codo, muñeca, inguinal, hipotenar, subglúteo. Si bien tienen una mayor durabilidad y mejores efectos estéticos, los IPT tienen un prendimiento más dificultoso y lento, permiten coberturas más pequeñas dado que la zona dadora también es pequeña y debe suturarse para lograr su cierre. De modo general, se prefiere utilizar IPT en regiones en que la estética y la funcionalidad son importantes (cara, manos, zonas con mayor movilidad); en cambio, los injertos de grosor parcial se prefieren en aquellos casos en que la herida es de gran extensión. Evolución Tras 10-14 días, el injerto se encuentra adherido de forma segura, gracias al reemplazo de la fibrina (producida inicialmente) por fibroblastos. La reinervación comienza a las 4-5 semanas y finaliza, en general, a los 12-24 meses. Inicialmente se recupera la nociocepción, seguido de la sensibilidad superficial y la temperatura, sin embargo, en la mayoríadeloscasosquedanzonasdeanestesiaenelinjerto. Durante el prendimiento de un injerto ocurren dos procesos: - Contracción primaria: al momento de la toma del injerto, este se encoge. Esto es más pronunciado para los IPT que los IPP. - Contracciónsecundaria:unavezqueelinjertoprende en la zona receptora, la cicatrización produce una segunda contracción (conocida como retracción), que es mayor para los IPP que para los IPT. La primera curación luego de un injerto debe hacerse a los 5 días, ya que cualquier movimiento puede ocasionar una alteración en el proceso de prendimiento, lo que puede llevar a la pérdida de este. La causa más común de fracaso de un injerto es la formación dehematomasbajoeste,enquelasangreactúacomobarrera impidiendo una correcta neovascularización. Otras causas de fracaso son el desplazamiento del injerto, infección, mala calidad del lecho vascular o del injerto mismo, tensión excesiva.
  • 491. 493 Imagen 1: Trauma de extremidad inferior con pérdida extensa de piel y tejido subcutáneo. La herida se prepara y se objetiva a través de cultivos la ausencia de infección. Imagen 2: Imagen intraoperatoria del mismo paciente. Injerto de piel parcial mallado. Se logra cobertura total de la lesión.
  • 492. 494 Imagen 3: Injerto descubierto en el posoperatorio. Se observa prendimiento completo del injerto. Imagen 4: Injerto a 1 mes desde la cirugía
  • 493. 495 Colgajos Loscolgajossoneltransportedetejidodesdeunazonadadora a una receptora manteniendo la relación vascular con el sitio dador. La excepción a esta definición es el colgajo libre, en el cual el pedículo vascular se secciona para ser anastomosado a otro en el sitio receptor. Irrigación de la piel La sangre llega a los plexos dérmicos a través de arterias sementarais (SA), que son ramas de la aorta. Estas, a su vez, se dividen en arterias perforantes que llegan a planos superficiales, ya sea de forma directa (vasos cutáneos directos DC y vasos septocutáneos SC) o indirecta (vasos musculocutáneos). Angiosomas: son bloques de tejido tridimensional que se encuentran irrigados por una arteria segmentaria y drenados por la vena acompañante. Cada angiosoma estáconectado al adyacente a través de vasos anastomósticos. Los colgajos están indicados en las siguientes situaciones: • Cobertura de zonas mal vascularizadas. • Coberturadeestructurasvitalescomovasossanguíneos. • Reconstruccióndelespesortotaldeestructurasdelacara. • Relleno de cavidades. • Cubrir prominencias óseas y zonas apoyo. • Control de la infección (colgajo muscular). Los colgajos se clasifican sobre la base de 3 características básicas: composición, forma de movilización e irrigación sanguínea. Composición Se refiere a los tejidos que conforman el colgajo: • Colgajo cutáneo: piel • Colgajo fasciocutáneo: piel y fascia • Colgajo musculocutáneo: piel y músculo • Colgajo osteomiocutáneo: piel, músculo y hueso Forma de movilización - Locales: • Avance (YV, VY, mono o bipediculado). • Pivote (rotación, transposición, interpolación). - Distantes: • Directos. • Indirectos. • Libres. Irrigación En cuanto a la irrigación, esta puede ser aleatoria, en que la irrigación proviene de múltiples y pequeñas arterias del plexo subdérmico, o axial, en que el aporte sanguíneo proviene de una arteria o un grupo reconocible de estas. En el caso de las axiales, los territorios irrigados por arterias individuales se conocen como angiosomas, siendo fundamental el conocimiento de la anatomía regional para la correcta movilización de estos. Colgajos cutáneos Generalmente,soncolgajoslocalesenquelazonadadoraestá contigua al defecto. Se utilizan cuando la piel que rodea a la herida no tiene la suficiente elasticidad para cubrir el defecto. De-ben confeccionarse de tal forma que concuerden tanto en forma como en grosor con la herida por cubrir, evitando generar una distorsión de la anatomía local. Se clasifican en: Colgajos de avance: el colgajo se mueve sobre el defecto directamente. • VY • Zetoplastía/Plastía en Z • Monopediculado • Bipediculado Colgajos en pivote. • Rotación: semicirculares que se rotan alrededor de un punto fijo. • Transposición: rectangulares que se giran lateralmente para alcanzar el defecto. (Colgajo de Limberg y colgajo de Dufourmantel). • Interpolación: son colgajos que se movilizan por debajo de un puente cutáneo. Colgajos musculares y musculocutáneos Usar músculos como colgajos es una buena opción gracias a que presentan irrigación independiente a través del pedículo vascular y pueden ir acompañados de nervios. Comparado con los pedículos cutáneos, los pedículos musculares son más maleables y permiten cubrir mejor aquellas heridas de contornos irregulares y profundas. Segúnsuformadeirrigaciónprincipal,loscolgajosmusculares se según la clasificación de Mathes y Nahai en: • Tipo I: Pedículo único. Ejemplo: tensor de fascia lata, gastrocnemio, recto femoral. • Tipo II: Un pedículo dominante , 2 pedículos menores . Ejemplo: gracilis, bíceps femoral, semitendinoso. • Tipo III: Doble pedículo dominante. Ejemplo: recto abdominal, glúteo mayor. • Tipo IV: Pedículos segmentarios (con más de una fuente,
  • 494. 496 no relacionadas entre sí, que irrigan distintos segmentos del músculo). Ejemplo: extensor largo de los dedos, sartorio, tibial anterior. • Tipo V: Pedículo dominante, varios pedículossegmentarios secundarios. Ejemplo: latissimus dorsi, pectoral. En general, se prefiere el uso de colgajos con pedículo dominante reconocible (tipo I, III y V) por sobre aquellos con pedículos menores o segmentarios (tipo II y IV). Es importante tener en consideración la posible pérdida de función de la porción del aparato locomotor de la cual se extrae el músculo. Para prevenir lo anterior existen distintos métodos de preservación de función como la división del músculo en segmentos. Colgajos musculocutáneos Los colgajos musculocutáneos son colgajos musculares junto a la piel y tejido subcutáneo que los recubren. La piel sobre el músculo extraído recibe su irrigación de arterias perforantes que se originan de arterias en el músculo y que atraviesan la fascia. Este tipo de colgajos se utilizan en aquellos defectos de gran profundidad o extensión, como es el caso de las reconstrucciones mamarias, en que se utiliza el músculo recto del abdomen junto a la piel por debajo del ombligo para reconstruir la mama. Colgajos fasciocutáneos Los colgajos fasciocutáneos utilizan pedículos que se encuentran en las fascias que separan distintos músculos. Están compuestos por piel, tejido subcutáneo y la fascia subyacente. Su ventaja principal frente a los colgajos musculocutáneos es que son más delgados, por lo que es posible usarlos con mejores resultados estéticos en defectos de gran extensión y poca profundidad en que un colgajo cutáneo es insuficiente. Colgajos osteocutáneos Son colgajos con componente óseo, que se utilizan para reemplazar pérdidas de segmentos óseos en cráneo, cuello y huesos largos. Complicaciones Compromiso vascular: Es la causa más común de fracaso de un colgajo. Puede deberse a falla en el diseño del colgajo, en que el pedículo utilizado no es suficiente con los tejidos blandos movilizados o también a torsión del pedículo vascular, sobre todo al movilizar el colgajo, o bien, por trombosis de los vasos tras realizarse la anastomosis vascular. Puede requerirse una nueva intervención quirúrgica para intentar permeabilizar los vasos en el caso de un colgajo micro-quirúrgico o extirpar el tejido necrótico que se produzca por falla en lairrigación. - Otras: • Hematoma. • Seroma. • Dehiscencias. • Infección de herida operatoria. • Complicaciones derivadas del defecto dejado en el sitio donante (herniación, pérdida de función, etc.).
  • 495. 497 Biliografía 1. Sepúlveda S., Andrades P.Colgajos. En: Cirugía plástica esencial. Santiago: Universidad de Chile; 2005, pp. 61-82. 2. Andrades P., Sepúlveda S., Wisnia P.Injertos. En: Cirugía plástica esencial. Santiago: Uni-versidad de Chile; 2005, pp. 46-63. 3. Courtney T., Beauchamp D., Evers M., Mattox K. Sabiston: tratado de cirugía.19 ed. España: Elservier; 2013. 4. Morris S., Taylor G. Vascular territories. Gurtner G. Plastic Surgery Volumen 1: Principles. 3.a edición. EE.UU.: Elsevier, 2013, pp. 479-511.
  • 496. 498