Mesopotamia se desarrolló entre los ríos Tigris y Éufrates en lo que hoy es Irak. Se dividía en las regiones de Asiria al norte y Babilonia al sur. Los primeros pueblos que habitaron la región fueron los sumerios, acadios y caldeos. El rey ejercía un poder absoluto como máxima autoridad política y religiosa, aunque no era considerado un dios.