Los aztecas buscaban un lugar para establecer su ciudad después de vagar errantes y ser expulsados de otros territorios. El dios Huitzilopochtli les indicó que encontrarían un águila devorando una serpiente y que allí debían fundar su ciudad. Después de mucho tiempo buscando, unos hombres encontraron un águila sobre un nopal devorando una serpiente junto a un lago, por lo que fundaron la ciudad de Tenochtitlán. Los aztecas se convirtieron en grandes guerreros como había pronosticado el dios,