La metalurgia de polvos es un proceso de fabricación que transforma polvos metálicos en piezas mediante compactación y sinterización en atmósferas controladas. Este método es ideal para producir piezas pequeñas y precisas, aunque presenta desventajas como menor resistencia y tenacidad en comparación con la fundición. Se utilizan diferentes técnicas para obtener polvos metálicos, siendo las más comunes la atomización, reducción de óxidos y pulverización mecánica.