Un OLED está compuesto de dos capas orgánicas delgadas entre dos electrodos. Cuando se aplica un voltaje, los electrones fluyen de el cátodo a la capa de emisión y los huecos fluyen de el ánodo a la capa de conducción. Los electrones y huecos se recombinan en la capa de emisión, liberando fotones que emiten luz visible. La elección de materiales orgánicos determina las características de la luz emitida por el dispositivo.