Este documento analiza la trayectoria histórica de las familias lingüísticas quechua y aimara, enfocándose en su interacción y el proceso de convergencia lingüística a lo largo del tiempo. Se argumenta que la civilización huari fue crucial para la expansión inicial del quechua y del aimara en los Andes del sur de Perú, mientras que se discuten sus similitudes y las dificultades para establecer un parentesco genético convincente entre ellas. Además, se proponen teorías sobre el impacto de estas interacciones en la evolución de las lenguas andinas y su desarrollo posterior.