Este documento discute el cambio y la tradición en las escuelas argentinas. Señala que las escuelas han tenido que cambiar para adaptarse a las transformaciones en la sociedad argentina como la crisis económica, el aumento de la pobreza y los nuevos desafíos de los estudiantes. Sin embargo, también reconoce que algunos aspectos tradicionales de la escuela deben mantenerse. La escuela debe encontrar un equilibrio entre cambiar para mejorar y conservar las partes valiosas de la tradición.