El salmo expresa el anhelo del autor por estar en la casa de Dios y alabarlo allí. Describe la casa de Dios como un lugar de bendición donde los que habitan en ella lo alabarán perpetuamente. El autor prefiere estar en la puerta de la casa de Dios que en lugares de maldad, ya que Jehová provee gracia, gloria y bienestar a los que confían en él.