Existen tres tipificaciones básicas de fibras ópticas: por su propagación, composición y aplicación. El tipo de fibra óptica apropiado para una instalación depende del modo de transmisión requerido, la velocidad, el lugar de instalación y factores como peso e instalación. Fibras como las multimodo son adecuadas para distancias cortas, mientras que las monomodo se usan para comunicaciones de larga distancia.